Está en la página 1de 25

1

Percepción de la población hondureña hacia la vacuna contra el COVID-19

Daniel Enrique Andrade Alfaro, Nadia Yulissa Varela Funes, Norlan Yoel

Maradiaga Lozano, Mayra Yesenia Vargas Alvarado, Rosana Sánchez Pérez, Perla

Judith Vásquez Ordoñez

Universidad Nacional Autónoma de Honduras

Resumen

Objetivos: Describir las actitudes de la población de mujeres y hombres hondureños

hacia la vacunación contra el COVID-19, tomando en cuenta varios factores que pueden

o no, influir en la población. Material y Métodos: Esta investigación posee un enfoque

cualitativo junto a un diseño narrativo. Se realizaron 12 entrevistas semiestructuradas,

donde se hicieron algunas preguntas de interés, estas fueron virtuales por medio de la

plataforma audiovisual Zoom, dirigido a participantes hondureños mayores de 18 años,

las cuales fueron grabadas y luego transcritas, con previo aviso, que posteriormente

fueron analizadas. Resultados: Las actitudes que presentaron los entrevistados según

su experiencia acerca de la vacuna contra el COVID-19 en Honduras, se dividieron en:

actitud hacia la vacuna, entre positivas como el alivio por la llegada de la vacuna y

negativa por la desconfianza que genera el rápido desarrollo de la vacuna, opiniones

negativas hacia la gestión del gobierno y las prioridades de la vacunación, el uso de las

medidas de bioseguridad y las preocupaciones existentes en torno a la vacuna.

Discusión: Podemos encontrar en el estudio que las actitudes de la población hacia la

vacuna contra el COVID-19 se presentaron de manera divida entre positivas y negativas,


2

del mismo modo los entrevistados mostraron preocupaciones respecto a la aplicación y

la efectividad de las vacunas.

Palabras clave: COVID-19; vacuna contra el COVID-19, actitud hacia las vacunas;

investigación cualitativa; Honduras.

Abstract

Objective: To describe the attitudes of the population of Honduran women and men

towards vaccination against COVID-19, taking into account several factors that may or

may not influence in the population. Material and Methods: This research has a

qualitative focusing with a narrative design. Twelve semi-structured interviews were

conducted, where some questions of interest were asked, these were virtual through the

Zoom audiovisual platform, directed to Honduran participants over 18 years of age, which

were recorded and then transcribed, with prior notice, which were later analyzed.

Results: The attitudes presented by the interviewees according to their experience with

the COVID-19 vaccine in Honduras were divided into: attitudes towards the vaccine,

between positive such as relief at the arrival of the vaccine and negative because of the

distrust gnerated by the rapid development of the vaccine, negative opinions towards

government management with and vaccination priorities, the use of biosecurity measures

and existing concerns about the vaccine. Discussion: We can find in the study that the

attitudes of the population towards the vaccine against COVID-19 were divided between

positive and negative, in the same way the interviewees showed concerns regarding the

application and effectiveness of the vaccines.


3

Key words: COVID-19; COVID-19 vaccine; attitude towards vaccines; qualitative

research; Honduras.

Introducción

Historia de la vacunación

Históricamente, desde Europa en el siglo XVIII y comienzos del siglo XIX la

inoculación primero y luego la vacunación llegan a Hispanoamérica como un servicio a

las colonias. La vacuna antivariólica fue descubierta por Edward Jenner el cual

demostró la protección conferida frente a la enfermedad por la administración en un

niño sano de un material proveniente de una persona con lesiones causadas por el

cowpox, virus de la viruela vacuna (Quezada, 2020). A mediados del siglo XVIII el

médico inglés Francis Homes realizó unos intentos de inmunización contra el

sarampión, y es finales del siglo XIX donde se registran importantes investigaciones en

el campo de la inmunología, ya que en 1855 el químico y biólogo francés Louis Pasteur

descubrió la vacuna antirrábica humana, ese mismo año el bacteriólogo Jaime Ferrán

descubrió la vacuna anticolérica (Corcho et al., 2000).

Las vacunas son uno de los logros más importantes para la salud pública,

puesto que disminuyen la tasa de muertes y enfermedades, se aplican por lo general a

personas sanas para prevenir las patologías. Lo cierto es que todas tienen sus riesgos,

pero a lo largo de la historia se han encontrado más beneficios, actualmente para su

elaboración se deben recoger una serie de rigurosos requisitos que permiten que el

riesgo o presencia de algún evento adverso sea reducido al mínimo posible. Entre uno

de los riesgos, los estudios demuestran que los niños no vacunados en sus primeros
4

años de vida (años considerados de mucha vulnerabilidad) tienen más riesgo de

contraer enfermedades como sarampión o tos ferina. A pesar de ello, la inmunización

siempre ha generado controversias y las poblaciones han perdido la confianza en ella

durante algunos eventos adversos que han ocurrido (Galindo Santana et al., 2011).

En Honduras desde 1994 se adopta el certificado internacional de vacunación,

en ese momento el problema radica en la fiebre amarilla. Hoy existe un esquema que

sirve para cuidar de las poblaciones, previniendo enfermedades que se pueden dar

desde el momento de nacer, hasta los 49 años y reduciendo la tasa de mortalidad

infantil en el territorio hondureño (Secretaría de Salud de Honduras, 2011).

Contexto en Honduras

En la actualidad, la pandemia por COVID-19 es una emergencia sanitaria

mundial y muchos países están siendo altamente afectados con miles de muertos,

infectados y con grandes repercusiones en diferentes áreas que afectan directamente

al ser humano, una de ellas es la psicológica, debido a todas las situaciones que

acontecen en los distintos países (Mejía et al., 2020). Con respecto a estadísticas

dirigidas al territorio hondureño, las cifras de casos han aumentado con el pasar del

tiempo, y ha sido una situación poco manejable para las autoridades de salud pública y

en cuanto a los organismos mayores del gobierno. Según los datos predispuestos en el

mes de marzo del año 2021, se presentan 164, 495 casos confirmados, 58,954 casos

activos, 3,992 muertes y 64,606 recuperados confirmados en el territorio de Honduras

(Universidad Nacional Autónoma de Honduras, 2021).


5

Encontramos que algunos factores psicológicos como el estrés, la depresión,

ansiedad y soledad pueden afectar la respuesta del sistema inmunitario hacia las

vacunas (Madison et al., 2021). Es un factor a tomar en cuenta porque como sabemos,

la actual pandemia causó emociones negativas en la población hondureña

acompañadas de incertidumbre hacia lo que pudiera ocurrir, pues esto se sumaba a

factores relacionados con el desempleo, la salud propia y de la familia, la alimentación,

la economía y las decisiones tomadas por el gobierno (Abate-Flores et al., 2020).

Actitudes hacia la vacunación contra el COVID-19

Lo cierto es que la llegada de una vacuna frente al COVID-19, puede calmar la

propagación de esta enfermedad, causante de muchas muertes en el mundo, pero con

la entrada de esta vacuna los países están en tensión respecto a la aplicación ética que

esto puede resultar en muchas interrogantes para la población en general tales como

saber sus riesgos y beneficios, la priorización y la obligatoriedad de la aplicación (Cruz

Piqueras et al., 2020). En respuesta a la priorización, si bien aún queda mucho por

descubrir al respecto, se han brindado recomendaciones generales para el proceso de

vacunación entre los cuales se menciona dar prioridad a las personas con mayor riesgo

de mortalidad por ejemplo adultos mayores, personas con enfermedades base,

personal de salud, mujeres embarazadas y niños menores de 5 años (Organización

Panamericana de la, 2020).

El riesgo percibido es un fenómeno psicosocial relacionado con las creencias de

salud que implica la evaluación subjetiva de que ocurra un evento o accidente y la

preocupación de las personas por las consecuencias. Involucra evaluar la probabilidad


6

de que ocurra y los efectos de obtener un resultado negativo, ya que, aunque todos

voluntariamente asumimos riesgos, también buscamos reducir la vulnerabilidad ante

estos (Cavazos-Arroyo & Pérez de Celis-Herrero, 2020). Para el año de 2015, un grupo

de la Organización Mundial de la Salud (OMS), habla sobre el término indecisión

vacunal, definiéndolo como un retraso en la decisión de ser vacunado o bien el rechazo

total de una persona a ser inmunizado, a pesar de tener disponibles los servicios que le

permitirán ser vacunados, que puede variar basándose en el momento, lugar y la

vacuna de la cual se trate.

La desinformación que es difundida por diversos medios y las dudas nacientes,

junto a la ansiedad que genera la rapidez en la que se desarrolló una vacuna; la falta

de la fomentación y formación de conocimientos para hacer que la población las

acepten. Estas son algunas de las razones por las que se realizó un estudio, en el que

se encuestó a miles de personas pertenecientes a varios países, buscando conocer la

aceptación que tienen hacia la vacuna COVID-19 en donde se encontró que existen

diferentes situaciones o ciertas características, que han determinado si la persona es

propensa a estar de acuerdo o en desacuerdo respecto a la vacuna del COVID-19,

tales variables o factores determinantes serían: la edad, pues a mayor edad hay más

probabilidad de estar a favor de ser vacunados; las personas con mayores ingresos, en

comparación con los de menor ingreso; la confianza del pueblo hacia el gobierno, que

actúa como una limitación a la hora de estar a favor o en contra de la vacunación

(Lazarus et al., 2020). En otro estudio se encontró que las personas que perciben las

vacunas como seguras, son más propensas a aceptarlas (Karlsson et al., 2021).
7

En el contexto global de la pandemia de COVID-19 se ha generado en la

población cierta incertidumbre y ansiedad debido a la situación, lo cual ha terminado

llegando a la generación de lo que se conoce como ideas conspirativas (Leibovitz et al.,

2021). Entre estas ideas formularon que la enfermedad fue creada por personajes

desconocidos, para algún fin que no va acorde a las normas éticas y morales; por otro

lado, algunas de las ideas conspirativas han surgido a base del temor de la población

ante la vacuna de COVID-19 y la falta de voluntad que tiene la población de ser

vacunada; tales creencias conspirativas llegaron a decir, por ejemplo, que la

enfermedad fue realmente exagerada, que algún gobierno era responsable de su

creación o incluso tener relación con grandes empresas de comunicación y demás,

esto afecta de manera significativa, la medida en que la población evalúa la posibilidad

o un posible riesgo de acceder a que se les dé la vacuna de COVID-19 (Romer &

Jamieson, 2020).

En vista de que hay poca información en el contexto hispanohablante,

específicamente en nuestro país, referente al impacto que ha tenido la llegada de las

vacunas, este estudio tiene el propósito de analizar información subjetiva valiosa, de la

percepción que se tiene hacia la vacuna en una muestra hondureña, dentro de ello

mencionando actitudes hacia las autoridades en el manejo de esta pandemia y las

principales preocupaciones que se tienen al respecto.


8

Materiales y métodos

Técnicas de recolección de información

El estudio realizado tiene un enfoque cualitativo y un diseño narrativo. Se

aplicaron entrevistas semiestructuradas abordando temáticas de interés con preguntas

base, por ejemplo: “¿Cómo lo hace sentir pensar que pueden llegar a vacunarlo?” y

“¿Qué opina sobre la gestión del gobierno en cuanto a la vacunación del COVID-19 en

nuestro país?”

Las entrevistas se realizaron de manera virtual, específicamente a través de

videollamadas en la plataforma audiovisual ZOOM en el mes de marzo del 2021, la

duración promedio fue entre quince minutos a una hora, fueron aplicadas y transcritas

por estudiantes que cursan la asignatura Metodología de la Investigación Psicológica

IV. La captación de los entrevistados no se limitó, ya que se necesitaba un amplio

campo de información acerca de la temática a evaluar.

Participantes

Los únicos requisitos que debían cumplir los participantes para entrar en el

estudio eran: Ser de nacionalidad hondureña y ser mayores de 18 años de edad,

llegando a obtener un total de 12 personas, de las cuales 7 son del sexo femenino y 5

del masculino entre 19 y 47 años de edad, y tan solo 1 de los 12 participantes fue

diagnosticado con COVID-19 durante la pandemia. Se integraron al estudio de manera

no probabilística, por conveniencia.


9

Consideraciones éticas

Antes de aplicar la entrevista se les informó a las personas a entrevistar,

mediante un consentimiento informado en el cual se describieron cuáles eran las

finalidades del estudio y se hizo énfasis en la participación voluntaria y el anonimato de

cada persona, dejando en claro que no recibirán compensación económica. También

se aclaró de manera prevista si el participante no estaba de acuerdo con alguna

pregunta, este tenía la libertad de omitir su respuesta o directamente no responder; se

facilitaron de igual manera los correos electrónicos del coordinador del estudio al igual

que el del entrevistador para aclarar cualquier interrogante del mismo.

Análisis de la información

Se utilizó una estrategia de análisis temático para organizar la información

recogida mediante las entrevistas, entre los principales temas podemos mencionar: a)

actitud hacia la vacuna contra el COVID-19, b) gestión del gobierno, c) continuidad en

el uso de medidas de bioseguridad, d) preocupaciones en torno a la vacuna, g) medios

de información, h) efectividad de la vacuna, i) descripción de la crisis sanitaria. Dentro

de los cuales también se encuentran subtemas, esto con el fin de ordenar los discursos

subjetivos de participantes, y exponerlo en nuestros resultados de estudio.

Resultados

Actitud hacia la Vacuna

Actitud Positiva
10

Para la mayoría de la población, la llegada de la vacuna es un alivio a la difícil

situación por la que ha atravesado el país durante más de un año desde que comenzó

la pandemia por el COVID-19, la cual trae consigo una esperanza de supervivencia

para aquellos a quienes les llegue a tiempo la aplicación, reduciendo con ello el gran

número de muertes provocadas por esta dura enfermedad. Además, que su llegada

crea la ilusión en la población en permitir reintegrarse a las actividades y con ello

recuperar la normalidad que durante bastante tiempo se ha esperado. Una entrevistada

comenta:

Me siento muy esperanzada y alegre por saber que seré vacunada y espero no

sea muy tarde cuando esa vacuna venga a nuestro país y que todos tengamos

acceso a ella, pero si da como esa actitud de positivismo, alegría saber que

nuestros familiares, nuestros abuelos y personas cercanas podrían ser

vacunadas y que eso ayudaría, olvidando si haya un efecto secundario, todos

los medicamentos lo tienen, pero esperando que sea muy funcional. - E. 1.

Mujer, 24 años, no diagnosticada con COVID-19.

El hecho de saber que la vacuna ya tiene su aprobación y ha sido aplicada en

distintos países del mundo genera una sensación de seguridad en caso de llegar a

aplicarla, y a su vez produce en los individuos un poco de tranquilidad, más para

aquellas personas que son el sustento del hogar y tienen que salir a sus trabajos,

también porque tiene familiares adultos con enfermedades base, y ven a la vacuna

como una salida a la crisis económica y sanitaria en que actualmente vive la familia

hondureña. Ante esto, un entrevistado indica:


11

La verdad me gustaría vacunarme porque no es como ser un piloto de prueba, la

vacuna ya es comprobada, me gustaría para dejar de preocuparme tanto por mi

familia, ya que uno se tiene que preocupar por no contagiarlos porque tenemos

personas con diabetes, hipertensión, personas ya adultas mayores entonces lo

veo como un beneficio la verdad. - E. 2. Hombre, 23 años, diagnosticado con

COVID-19.

Gran parte de la población mantiene una buena actitud al saber que por fin la

vacuna ha ingresado al país, hecho que les genera grandes expectativas de tener

acceso a dicha vacuna y con ello satisfacer su necesidad de protección del virus, pese

a que, de antemano saben que corren el riesgo de sufrir algunos efectos colaterales

por su aplicación, pero ello es compensado con la esperanza que tienen en poder

reducir el riesgo de contaminación. Un entrevistado dice lo siguiente al respecto:

La gente que tiene buena aceptación al hecho de vacunarse pues, creo que todo

mundo está y/o hablo por mí, estoy dispuesto a correr el riesgo verdad de

ponerme la vacuna, a pesar de los efectos adversos que pueda tener verdad,

confiando en que no va a pasar nada y que voy a seguir protegido. - E.10,

Hombre, 33 años, no diagnosticado con COVID-19.

Actitud Negativa

En contraparte, existe un sector de la población que opina que a pesar del gran

avance de la ciencia la vacuna se creó demasiado rápido para decir que será tan

eficaz, razón por la cual tienen sus reservas en cuanto a querer aplicársela, pues se ha

sabido que en muchos casos las personas vacunadas han tenido algunas

consecuencias negativas en su salud, razón por la cual alguna parte de la población


12

tiene una actitud no tan favorable frente a la misma. Esto es evidenciado en el siguiente

fragmento:

Si uno lee la historia mundial con las pandemias, si bien es cierto, nosotros

tenemos un avance tecnológico, mucho mayor a la antigüedad, eso no quiere

decir que una vacuna va a estar ya. Y han pasado, bueno ayer incluso estaba

cumpliendo 1 año ya la pandemia de haberse nombrado como pandemia y en

cuestión de un año es bien difícil asegurar que esa vacuna sea totalmente eficaz

o que va a poder controlar de cierta forma. Tengo mis reservas hacia la vacuna,

porque siento que es muy pronta la forma en la que las empezaron a sacar. -

E.9. Mujer, 19 años, no diagnosticada con COVID-19.

Es preciso mencionar que en otros casos la vacuna ha generado mucha

incertidumbre y temor, lejos de verla como una solución la ven como un problema, ya

que han escuchado que, tras su aplicación genera una serie de dificultades y que en

algunos pacientes relativamente sanos ha desencadenado algunos padecimientos. La

siguiente entrevistada indica:

Es bien difícil asegurar que esa vacuna sea totalmente eficaz o que va a poder

controlar de cierta forma, porque ha habido muchos casos de personas sanas

que nunca habían tenido COVID, pero que se les administró la vacuna y tuvieron

ataques epilépticos, empezaron a tener apoplejía y muchas enfermedades,

entonces por eso tengo mis reservas. - E.9. Mujer, 19 años, no diagnosticada

con COVID-19.
13

Gestión gubernamental

Opinión Negativa

Con la llegada de la pandemia a nuestro país, los entrevistados dejan en

evidencia que los altos niveles de corrupción de nuestros gobernantes, en donde sus

intereses personales han estado por encima de los de sus gobernados, dejando en

este caso una población desprotegida con uno de sus más grandes derechos

vulnerados, como es el de la salud. El siguiente fragmento es ejemplo de ello:

Siento que las autoridades se están quedando muy limitadas en este momento y

más que vienen lo de las elecciones, creo que será un método de manipulación

para la ciudadanía, para obtener un voto podría ser, nuestras autoridades

políticas no son del todo transparentes con lo que hacen, da como ese miedo

que en ningún momento ellos busquen la estrategia para obtener esas vacunas

porque si no se han preocupado por otras cosas, no creo que en este momento

sea la preocupación de nuestro presidente. - E.1. Mujer, 24 años, no

diagnosticada con COVID-19.

También dejaron en claro que existe una mala gestión del gobierno en cuanto a

la adquisición de las vacunas, comenzando por la mala administración del sistema de

salud que ha sido manejado por personas poco capacitadas. Así lo expresa una

entrevistada:

En todas esas personas debe de pensar el Gobierno, pero no ha habido, un

actuar correcto, ni inmediato, ni diligente, ni proactivo por parte del gobierno para

buscar las vacunas, la cantidad de vacunas que puedan beneficiar a un pueblo. -

E.9. Mujer, 19 años, no diagnosticada con COVID-19.


14

Prioridades en la vacunación

Existe concordancia entre la población que manifiesta que son el personal de

salud y de atención hospitalaria los que deben tener prioridad en el acceso a la vacuna,

por ser los que están más expuestos al contagio y que además han ofrendado su vida

en beneficio de la salud y el bienestar de la población. Así lo dicen los informantes:

Estoy muy de acuerdo que sean las personas de primera línea porque ellos se

encargan de nosotros, de la ciudadanía, entonces si es muy considerable que

ellos sean inyectados principalmente. - E.1. Mujer, 24 años, no diagnosticada

con COVID-19.

Además del personal de salud existe otra población que por su condición de

vulnerabilidad merece también que se le dé prioridad en el acceso a la vacuna pues en

el caso de adultos mayores, pacientes con patologías, mujeres embarazadas, tienen

más riesgo a que esta enfermedad les complique su estado de salud evitando con la

inmunización que el virus le cause la muerte. De esta manera lo indican los

participantes:

Estoy de acuerdo con que sean primero los doctores porque son quienes están

en mayor contacto con personas infectadas y las personas más vulnerables por

ejemplo mujeres embarazadas que pueden desarrollar hasta hemorragias y

personas de la tercera edad o personas que padezcan enfermedades

pulmonares o cardiopatías. - E.2. Hombre, 23 años, diagnosticado con COVID-

19.
15

Uso de medidas de bioseguridad

Uso actual de medidas de bioseguridad

Cabe mencionar que, ante la limitada capacidad de atención hospitalaria de

nuestro sistema sanitario, el papel que cada uno de nosotros asuma es vital en la

contención de la pandemia, pues es conocido por todos, las medidas de bioseguridad a

seguir para protegerse del virus y pese a la gran información existente, hay un número

de la población que se resiste a seguirlas, complicando con ello la situación y

colaborando a la expansión desproporcionada de la enfermedad. De acuerdo con las

declaraciones del entrevistado:

Yo salgo y parezco loco en la calle rociando spray por todos lados y ya es más

de un año o casi un año de que comenzó esto y ya se vuelve costumbre, al

menos de mi parte es costumbre y veo que de algunas muchas personas

también es igual, entonces es algo que no se va a quitar así por así, espero y sé

que estas medidas son para tratar de detener o de tratar de que esto no se siga

propagando, pero hay sectores de la sociedad y personas que tampoco lo toman

mucho en cuenta, hay personas que caminan por la calle sin mascarilla, ni usan

gel. - E.5. Hombre, 21 años, no diagnosticado con COVID-19.

Uso de medidas de bioseguridad post vacunación

Hay que destacar que pese a que se cuente con una vacuna y se vaya

inmunizando progresivamente a la población se deben seguir siempre las medidas de

bioseguridad, pues si bien es cierto que los pacientes vacunados tendrían una
16

protección eso no significa erradicación de la pandemia y por ende la población no

inmunizada es la que debe cuidarse al máximo. Sobre esto la entrevistada comenta:

Considero que debe seguirse manteniendo las medidas de seguridad, porque no

es cien por ciento comprobado, como ya había mencionado antes, los medios de

comunicación y los hospitales tampoco te afirman que a cien por ciento funcione.

- E.6. Mujer, 27 años, no diagnosticada con COVID-19.

Preocupaciones en torno a la vacuna

Proceso lento

Una de las grandes preocupaciones entre los posibles beneficiarios es la lentitud

con la que el país ha adoptado los procesos de adquisición que dicho sea de paso son

engorrosos y viciados, en donde impera la falta de transparencia que hace que muchos

pierdan la vida antes de su llegada y que gran parte de ciudadanos no tengan la

certeza de querer vacunarse. Así lo indica el siguiente fragmento:

No siento que me dé ansiedad pensar en la vacuna, pero sí un poco como de

temor, porque yo siento que están tomando a la población mundial como un

“conejito de indias”, ni más ni menos, así siento yo que la están tomando. - E.4.

Mujer, 30 años, no diagnosticada con COVID-19.

Efectos secundarios

Además de lo anterior, una de las causas más comunes de preocupación, es

que la vacuna adquirida no sea compatible con los sistemas inmunológicos de los

usuarios y que los efectos secundarios provocados por su aplicación sean muy fuertes
17

que les desencadene otras complicaciones en su salud y les haga padecer otras

enfermedades. De esta manera lo exponen en el siguiente fragmento:

Lo que más me preocupa serían los efectos secundarios porque no en todas las

personas resultará de la misma manera, como se sabe las vacunas son un

extracto del virus entonces puede desencadenar ciertas cosas que pueden

afectar a unas personas como a otras no. - E.2. Hombre, 23 años, diagnosticado

con COVID-19.

Discusión

Los entrevistados dieron a conocer sus diferentes puntos de vista ante la

aplicabilidad y efectividad de la vacuna contra el COVID-19; hablaron sobre la

ineficiencia del gobierno en el manejo de los fondos destinados para contrarrestar dicha

pandemia al igual que la negligencia impartida por cierta parte de la población ante el

uso incorrecto de las medidas de bioseguridad regidas por SINAGER y la Secretaría de

Salud de Honduras. Así mismo los entrevistados asociaron ciertos cuadros críticos de

salud física y psicológica con el confinamiento y aislamiento social, desprendiendo

diversos malestares sociales, culturales y económicos en la ciudadanía; al igual que su

estilo de vida cotidiano.

Los resultados de este estudio indican que existen personas con actitudes

divididas respecto hacia la vacuna, pero se abalanza más a tener opiniones positivas,

se torna esperanzador y una solución a la crisis actual que estamos viviendo, otros

temen a los efectos secundarios porque han escuchado que personas relativamente

sanas, tienen problemas y no quieren arriesgarse a ser de los primeros en vacunarse.


18

Esto es coherente con un estudio realizado en los Estados Unidos sobre la

aceptación de la vacuna que se aplicó mediante una encuesta virtual, en donde la

mayor parte de participantes manifestaron aceptar la vacuna si se daba una

recomendación previa, y haciendo un llamado a las autoridades a hacer campañas de

concientización (Malik et al., 2020).

Así mismo, los entrevistados mostraron su preocupación ante la aplicación y

efectividad de la vacuna contra la COVID- 19; uno de los principales puntos de

inconformidad son los efectos secundarios posteriores a la aplicabilidad de la vacuna,

seguidamente por la poca credibilidad que presentan las mismas, ya que no tienen un

tiempo de prueba avanzado que compruebe su efectividad total. Por su parte existe

una población que opina que, a pesar del gran avance de la ciencia, la vacuna se creó

demasiado rápido para decir que será tan eficaz, razón por la cual tienen sus reservas

en cuanto a querer aplicársela, pues es conocido que en muchos casos las personas

vacunadas han tenido algunas consecuencias negativas en su salud, por lo cual alguna

parte de la población tiene una actitud no tan favorable frente a la misma.

Algunos factores que influyen en la aceptación de vacuna son la seguridad y

eficacia de la misma, los resultados sanitarios adversos y la desinformación que se

pueda tener respecto a ella. En Asia, específicamente en Arabia Saudí, se realizó un

estudio transversal mediante una estrategia de muestreo bola de nieve, contando con

la participación de 992 personas y en el que el 64.7 % mostraron aceptación hacia la

vacuna, en donde los mayores de 45 años eran más propensos a aceptar la

vacunación (Al-Mohaithef.; Mohammed Bijaya Kumar Padhi, 2020).


19

Por otra parte, un estudio realizado en la India que tomaba en cuenta las

opiniones en las redes sociales, descubrió que solo el 35% de publicaciones en las

mismas hablaban positivamente, indicando que existe miedo hacia la vacuna, las

principales preocupaciones son las reacciones alérgicas y de salud que pueden

provocar las vacunas, pero a medida que los casos aumentan, los sentimientos

positivos hacia la vacuna también lo hacen (Praveen et al., 2021). Esto nos indica que

las preocupaciones con la muestra utilizada en nuestro estudio son similares, pero

teniendo una aceptación mucho más baja que la obtenida por nosotros.

En Italia se realizaron cuestionarios en tres fases diferentes: Primero previo al

cierre del país, durante la fase de cierre, y finalmente en las primeras semanas de la

fase de reapertura, arrojando resultados interesantes respecto a las dudas sobre la

vacuna, pues se encontró que los participantes tenían pocas dudas sobre las vacunas

antes del cierre, luego aumentaron durante, y paulatinamente disminuyeron en la

reapertura (Caserotti et al., 2021). Sería interesante haber tenido datos cuando se cerró

en nuestro país, lo cierto es que, pese a las preocupaciones, los resultados nos indican

que la mayor parte de personas aceptaban la vacuna.

Los hallazgos del presente estudio también coinciden con aspectos que dan un

porcentaje desfavorecido ante las irregularidades presentes en el país por culpa del

desfalco de los bienes del gobierno, los cuales están conformados por malversación de

fondos, falta de indumentaria médica para el tratamiento del virus, falta de ética al

postular autoridades que no están orientas educativamente a los cargos que las

promueven, el costo elevado del tratamiento contra el virus que han estado por encima
20

de los de sus gobernados dejando en este caso una población desprotegida,

vulnerando uno de sus más grandes derechos como es el de la salud.

Los países deben planificar diferentes estrategias de vacunación para llegar a

los grupos destinados. También será importante que los países evalúen sus

capacidades en cuanto a la cadena de frío y organicen su inventario de equipos y sus

necesidades de capacitación. Se pueden aprovechar las enseñanzas obtenidas en la

administración de la vacuna contra la gripe por H1N1 y la introducción de otras vacunas

nuevas (Organización Mundial de la Salud, 2021).

Refiriéndonos al uso de medidas de bioseguridad, gran parte de participantes

coincidieron en el papel importante que juegan no solo ahora, si no después de recibir

la vacunación y expresaron malestar hacia las personas que no consideran que sean

necesarias. Como sabemos, aún es necesario seguir implementando las medidas de

bioseguridad y respetando el distanciamiento social; y para las personas que sientan

malestares similares establecidos por la OMS recurran al centro asistencial más

cercano y sigan al pie de la letra todas las recomendaciones dictadas por los médicos.

Al momento de que toda la población sea vacunada se deben de seguir practicando las

medidas de bioseguridad hasta tener certeza de que la vacuna sea efectiva.

Entre las limitaciones encontradas tenemos el hecho de que las entrevistas sean

mediante llamadas, ya que no tienen el mismo impacto y dejamos de lado información

importante, como el lenguaje corporal del entrevistado al momento en que da las

respuestas. También podemos mencionar que, debido al muestreo no probabilístico,

teniendo personas de diferentes edades y ocupaciones, los hallazgos pueden no ser

representativos de la población.
21

Sería interesante tener estudios con enfoque cuantitativo para tener una

perspectiva más amplia del tema. Además, realizar investigaciones a futuro con diseño

fenomenológico acerca de las experiencias de personas que han aceptado la vacuna

contra el COVID-19 en Honduras para comparar los resultados obtenidos.

En conclusión, para muchos la vacuna significa esperanza y tienen una actitud

positiva ante ella, aunque otra parte de la población siente que es insegura debido al

poco tiempo que tiene de realizarse. Otra de las preocupaciones más comunes son los

efectos secundarios que pueda poseer, por lo cual es necesario probar su eficacia y

eficiencia para tener seguridad en ella.


22

Referencias

Abate-Flores, C., Urtecho-Osorto, Ó. R., & Agüero, M. (2020). Efectos psicológicos del

confinamiento social por COVID-19 en la población hondureña. Revista Ciencia y

Tecnología, 25, 21–33. https://doi.org/10.5377/rct.v13i25.10409

Al-Mohaithef.; Mohammed Bijaya Kumar Padhi. (2020). Determinants of covid-19

vaccine acceptance in saudi arabia: A web-based national survey. Journal of

Multidisciplinary Healthcare, 13, 1657–1663.

https://doi.org/10.2147/JMDH.S276771

Caserotti, M., Girardi, P., Rubaltelli, E., Tasso, A., Lotto, L., & Gavaruzzi, T. (2021).

Associations of COVID-19 risk perception with vaccine hesitancy over time for

Italian residents. Social Science & Medicine, 272, 113688.

https://doi.org/10.1016/j.socscimed.2021.113688

Cavazos-Arroyo, J., & Pérez de Celis-Herrero, C. (2020). Severidad, susceptibilidad y

normas sociales percibidas como antecedentes de la intención de vacunarse

contra COVID-19. Revista de Salud Pública, 22(2), 1–7.

https://doi.org/10.15446/rsap.v22n2.86877

Corcho, D. B., Martínez, G. C., & Larreinaga, C. L. S. (2000). La vacunación.

Antecedentes históricos en el mundo. Revista Cubana de Medicina General

Integral, 16(4), 375–378.

http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0864-

21252000000400012&lng=es&tlng=es.

Cruz Piqueras, M., Hortal Carmona, J., & Padilla Bernáldez, J. (2020). «Vísteme

despacio que tengo prisa». Un análisis ético de la vacuna contra la COVID-19:


23

fabricación, distribución y reticencia. Enrahonar. An International Journal of

Theoretical and Practical Reason, 65, 57.

https://doi.org/10.5565/rev/enrahonar.1307

Galindo Santana, B. M., Arroyo Rojas, L., & Concepción Díaz, D. (2011). Seguridad de

las vacunas y su repercusión en la población. Revista Cubana de Salud Pública,

37(1), 149–158. https://doi.org/10.1590/s0864-34662011000100013

Karlsson, L. C., Soveri, A., Lewandowsky, S., Karlsson, L., Karlsson, H., Nolvi, S.,

Karukivi, M., Lindfelt, M., & Antfolk, J. (2021). Fearing the disease or the vaccine:

The case of COVID-19. Personality and Individual Differences, 172, 110590.

https://doi.org/10.1016/j.paid.2020.110590

Lazarus, J. V., Ratzan, S. C., Palayew, A., Gostin, L. O., Larson, H. J., Rabin, K.,

Kimball, S., & El-Mohandes, A. (2020). A global survey of potential acceptance of a

COVID-19 vaccine. Nature Medicine, 27(February). https://doi.org/10.1038/s41591-

020-1124-9

Leibovitz, T., Shamblaw, A. L., Rumas, R., & Best, M. W. (2021). COVID-19 conspiracy

beliefs: Relations with anxiety, quality of life, and schemas. Personality and

Individual Differences, 175(December 2020), 110704.

https://doi.org/10.1016/j.paid.2021.110704

Madison, A. A., Shrout, M. R., Renna, M. E., & Kiecolt-Glaser, J. K. (2021).

Psychological and Behavioral Predictors of Vaccine Efficacy: Considerations for

COVID-19. Perspectives on Psychological Science.

https://doi.org/10.1177/1745691621989243

Malik, A. A., McFadden, S. A. M., Elharake, J., & Omer, S. B. (2020). Determinants of
24

COVID-19 vaccine acceptance in the US. EClinicalMedicine, 26, 100495.

https://doi.org/10.1016/j.eclinm.2020.100495

Mejia, C., Garay-Rios, L., Enriquez-Anco, M. de G., Moreno, A., Huaytán-Rojas, K.,

Huancahuari-Ñañacc Huari, N., Julca-Gonzales, A., Alvarez, C., Choque-Vargas,

J., & Curioso, W. (2020). Percepción de miedo o exageración que transmiten los

medios de comunicación en la población peruana durante la pandemia de la

COVID-19. Rev. Cuba. Invest. Bioméd, 39(2), 1–20.

http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0864-

03002020000200001&lng=es&tlng=es.

Organización Mundial de la Salud. (2021). Preguntas y respuestas.

https://www.who.int/es/news-room/q-a-detail

Organización Panamericana de la, S. (2020). El programa de inmunización en el

contexto de la pandemia de COVID-19, 26 de marzo de 2020. 16 De Abril, 2020,

1–7. https://iris.paho.org/handle/10665.2/51991

Praveen, S. V., Ittamalla, R., & Deepak, G. (2021). Analyzing the attitude of Indian

citizens towards COVID-19 vaccine – A text analytics study. Diabetes and

Metabolic Syndrome: Clinical Research and Reviews, 15(2), 595–599.

https://doi.org/10.1016/j.dsx.2021.02.031

Quezada, A. (2020). Los orígenes de la vacuna. Revista Médica Clínica Las Condes,

31(3), 367–373. https://doi.org/10.1016/j.rmclc.2020.07.002

Romer, D., & Jamieson, K. H. (2020). Conspiracy theories as barriers to controlling the

spread of COVID-19 in the U.S. Social Science and Medicine, 263, 113356.

https://doi.org/10.1016/j.socscimed.2020.113356
25

Secretaría de Salud de Honduras. (2011). Manual de Normas y Procedimientos del

Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) de Honduras.

http://www.bvs.hn/Honduras/salud/normas.y.procedimientos.del.programa.ampliad

o.de.inmunizaciones.%28pai%29.de.honduras.pdf

Universidad Nacional Autónoma de Honduras. (2021). Portal UNAH/ Observatorio

Demográfico Universitario. https://odu.unah.edu.hn/

También podría gustarte