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Ciencia y naturaleza

Sequía y cambio climático: ¿Qué riesgos generan para


las abejas?
La semana pasada un grupo de apicultores protestó frente al Palacio de La Moneda
debido a los efectos negativos que la sequía está teniendo sobre su actividad, y
reclamaron por la falta de financiamiento y políticas públicas sobre este tema. Al
respecto, Mariella Neira, académica de la Facultad de Ciencias Veterinarias y
Pecuarias (Favet) de la Universidad de Chile, explica los efectos negativos del
cambio climático y la sequía sobre estos insectos fundamentales en la vida de
nuestros ecosistemas.

La megasequía que afecta a nuestro país hace


más de una década tiene efectos nocivos para el
conjunto de los ecosistemas de nuestro territorio,
y -por supuesto- sobre las distintas especies que
lo habitan. Una de ellas son las abejas, insectos
que además son vitales en los ciclos de vida y
equilibrios ecosistémicos, especialmente a
través de la polinización.

Esta situación fue la que intentó relevar un grupo


de apicultores la semana pasada, quienes
realizaron una protesta con varios panales frente
al Palacio de Gobierno en Santiago. A través de
esta manifestación, los apicultores reclamaban
más apoyo a nivel de financiamiento y políticas
públicas que permitan proteger a las abejas en
Chile.

Mariella Neira, académica de la Facultad de


Ciencias Veterinarias y Pecuarias (Favet) de la
Universidad de Chile, explica que la falta de
agua significa que los árboles comienzan a
secarse, lo que combinado con las altas
temperaturas -que en diciembre alcanzaron
los 38 grados- terminará afectando su
floración. "Al no existir esta, vamos a tener
problemas con la alimentación de las abejas,
especialmente con su fuente de energía, que es
el néctar, y de proteínas, que es el polen",
advierte.
Otro problema que destaca la profesora Neira tiene relación con el debilitamiento de las
abejas, ya que "su sistema inmune se ve alterado por esta situación, y eso significa
que estarán más propensas a ser afectadas por depredadores, especialmente uno
que está atacando muy vorazmente a todas las abejas del mundo, el ácaro varroa
destructor, que está haciendo estragos, y las abejas estarán debilitadas como para
enfrentarlo".

La académica recordó, además, que existen otros depredadores que son más resistentes
al cambio climático y sus efectos, y que aprovechan esta situación para ocupar los
hábitats de las abejas, como -por ejemplo- la avispa asiática, que es muy resistente a
condiciones adversas del clima.

"Todo esto conlleva a que las abejas se ven amedrentadas y disminuidas en su cantidad,
siendo que ellas cumplen el principal rol polinizante. Cuando tenemos una disminución
de un agente principal polinizador, como las abejas, vamos a tener problemas con
la alimentación futura para las generaciones venideras", remarcó Neira.

Consultada por una posible solución a este fenómeno, la académica de la U. de Chile


aseguró que se necesitan políticas públicas que "protejan el agua para que sea
entregada de manera más equitativa para todos los seres que la necesitan, lo que
tendría que combinarse con una regulación que vaya disminuyendo los
monocultivos que utilizan de manera desmedida pesticidas que afectan
específicamente a las abejas". Estas medidas, apunta, permitirían proteger de mejor
forma la biodiversidad y los ecosistemas que necesitan las abejas.

Texto: Felipe Ramírez, Francisca de la Vega Lunes 10 de enero de


2022

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