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En este artículo, exploraremos en detalle el uso del guion largo y las comillas, y te
proporcionaré las reglas esenciales para dominar su aplicación. Prepárate para potenciar tu
escritura y añadir un toque de estilo y precisión a tus textos.
Las comillas dobles se utilizan con mayor frecuencia en la escritura y se emplean para
encerrar citas textuales, diálogos en narraciones y para resaltar términos o palabras
específicas. Por otro lado, las comillas simples se utilizan para encerrar citas dentro de una
cita o para enfatizar un término dentro de las comillas dobles.
Es importante tener en cuenta que en diferentes idiomas y estilos de escritura pueden existir
variaciones en el uso de las comillas, por lo que es fundamental consultar las convenciones
específicas según el contexto en el que se escriba.
En conclusión, dominar el uso del guion largo y las comillas en la escritura es esencial para
transmitir de manera precisa y efectiva las ideas y diálogos en tus textos. Con estas
herramientas, podrás dar vida a tus personajes, resaltar citas y añadir estructura a tu
narrativa. ¡Potencia tu escritura y experimenta el impacto que estos recursos pueden tener
en tus textos literarios!
Si deseas explorar aún más recursos literarios y aprender cómo aprovecharlos al máximo en
tu escritura, te invito a leer mi artículo sobre ellos. Descubre cómo utilizar metáforas,
aliteraciones, hipérboles y más para darle un toque especial a tus textos. ¡No te lo pierdas!
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Por supuesto, está más que claro que construir buenos diálogos no es fácil, y hasta los
mejores escritores tienen dificultades para lograrlo. Por eso, en este artículo quiero
compartirte los elementos que necesitas considerar para construir un buen diálogo. ¡No
pares de leer!
Un diálogo narrativo es una forma de conflicto en la historia, una escena que debe tener un
inicio, desarrollo y final. El diálogo es importante tanto para establecer puntos clave de
la trama, como para avanzar y desarrollar el arco de los personajes y, por ende, la temática.
Nunca construyas un diálogo que solamente tiene como propósito hacer que dos o más
personajes interactúen, sino que piensa seriamente en cómo cada diálogo te ayuda a avanzar
la trama y expandir (aunque sea un poco) el crecimiento de los personajes.
¡Sigue leyendo!
Conflicto
Como lo mencioné antes, es erróneo considerar un diálogo como un simple intercambio de
información. Los diálogos son batallas y necesitan conflicto para poder tener relevancia y
peso en la historia.
Por supuesto, esto no significa que cada diálogo debe ser una discusión, ese no es el punto,
sino que en cada diálogo debe existir algún tipo de conflicto que da relevancia a la
conversación.
Por ejemplo, al final del Señor de los Anillos, cuando Aragorn da su famoso discurso a los
pies de la Puerta Negra de Mordor, no está teniendo una conversación con alguien más,
porque para que eso suceda alguien debe responderle, pero sí está teniendo un diálogo,
porque el silencio de los personajes también es una forma de diálogo.
Aquí, lo que Aragorn está haciendo como personaje es exponer el conflicto principal que
tienen todos los presentes: el miedo a enfrentarse a una muerte segura. La respuesta de ellos
vienen de acuerdo a sus reacciones, aunque no digan nada como respuesta.
Por todo lo que consideran amado en esta buena tierra, les pido
que se mantengan firmes. ¡Hombres del Oeste!
El personaje culmina la escena dando una conclusión al conflicto, que avanza la trama.
Ahora, la escena pasó orgánicamente de un conflicto a otro: del miedo de enfrentar la
muerte, a enfrentarla con la esperanza de ganar la guerra.
Esa conexión es la que permite que los diálogos sean una fuerza positiva para la trama.
El viaje de Aragorn, sobre todo en las películas, estuvo siempre relacionado con el destino
de la raza de los hombres, y a lo largo de su viaje tuvo que ganarse el respeto de todos.
Cuando empieza llamando hermanos a hombres de distintos países, hombres que no se
consideraban hermanos hasta entonces, está mostrando tanto su forma peculiar de ver el
mundo como la evolución que ha tenido a lo largo de la historia.
Eso último es lo que necesitas para que cada personaje tenga una voz propia y no se sienta
como un droide que nada más balbucea aquello que necesitas que diga.
Cada personaje debe tener una forma de ver el mundo, y de esa forma es que debe nacer su
forma de expresar lo que piensa y siente. ¡No lo olvides!
Veamos otro diálogo genial, esta vez de la película Good Will Hunting, una película donde
prácticamente todos los puntos de inflexión toman lugar gracias a los increíbles diálogos de
la historia.
En lugar de enfocarme en los más dramáticos (en parte porque no quiero spoilearla), voy a
enfocarme en uno muy sencillo que nos ayuda a entender el personaje de Will de manera
brillante, al mismo tiempo que nos ayuda a crear una conexión entre él y el interés
romántico.
Como contexto, esta escena toma lugar en un bar, donde uno de los amigos de Will,
Chuckie, intenta impresionar a unas chicas para salir con ellas. Chuckie, sabiendo que en
ese bar van muchos universitarios, intenta hacerse pasar por un estudiante de su clase. Las
muchachas se dan cuenta de inmediato, pero les divierte su intento y le siguen el juego por
un rato.
También se nos presenta un personaje que, aunque está defendiendo a su amigo, está
disfrutando utilizar su superioridad intelectual sobre alguien que se considera inteligente,
ilustrándonos de inmediato esa forma de pensar tan particular del personaje.
El conflicto es sencillo y no representa un gran avance para la trama, pero tiene suficientes
elementos que sugieren la temática y dan forma al arco del personaje, que aunque solo
avance la trama de maneras muy pequeñas, se siente especial y memorable.
Recontextualización de la historia
Si es cierto que un buen diálogo debe tener un inicio, un desarrollo y un final, eso significa
que la resolución del conflicto debe significar algún tipo de cambio para la historia, es
decir, una recontextualización de la trama y los símbolos que están en ella.
En el caso de Aragorn, la resolución del conflicto pone en perspectiva lo valientes que están
siendo los hombres que lo acompañan y él mismo, y hace que su batalla se sienta más
memorable y épica de lo que ya es.
Pasa de ser un suicidio militar, a una obra heroica en la que los involucrados son consientes
de que perderán, pero tienen razones de mayor peso para sacrificar sus vidas.
Pasa de ser una historia de un chico inteligente, a la de un completo genio con fallas claras
en su personalidad y la posibilidad de entablar una relación amorosa con alguien más.
Esa transformación es justo la que debes buscar en los diálogos. Si absolutamente nada
cambió, entonces la escena y el diálogo sobran, y están alentando la trama.
Como tip extra, quiero recordarte que el silencio también puede ser una forma de diálogo
narrativo y, a veces, es mejor dejar que los símbolos y las expresiones de los personajes
hablen por sí solas que soltar todo directamente.
También, si piensas incluir escenas de acción o de pelea, no olvides que las ataques son una
forma de diálogo también, y si estas no están relacionadas con la razón por la que los
personajes pelean, entonces la escena perderá peso.
Si te gustó este artículo, seguramente disfrutarás este otro sobre cómo crear escenas de
acción dinámicas y fluidas. ¡No te lo pierdas!