MAQUINARIA NAVAL AUXILIAR

CAPÍTULO VIII
PURIFICADORES CENTRÍFUGOS

8.1. GENERALIDADES

Los modernos fabricantes de maquinaria están positivamente seguros de

que pueden confiarse en los lubricantes para soportar casi cualquier carga
que pueda imponérseles de acuerdo con un criterio razonable. Actualmente
se incorpora en el diseño de la máquina los elementos que permitan la
aplicación eficiente de lubricantes en una medida amplia y dotada de las
características debidas.

En el caso de maquinaria relativamente pesada, esto acarrea el empleo de

sistemas lubricantes de presión, que usan el mismo lubricante una y otra vez,
exponiéndolo a la contaminación por suciedad, agua y otras impurezas que
en poco tiempo le hacen perder en parte, o completamente, su valor de
lubricación. En los métodos antiguos ya fuera por destilación o acción
manual, el reabastecimiento del lubricante a intervalos regulares constituía
la mayor preocupación del operador. Hoy, en cambio, el problema es
mantener la pureza del lubricante de modo que su valor de lubricación se
alargue lo más posible y pueda mantenerlo en servicio durante largo tiempo.

El aceite lubricante no se gasta en realidad, si no que más bien pierde sus

propiedades lubricantes a causa de sustancias extrañas. Es un hecho
generalmente aceptado que una vez que el lubricante demuestra ser el
debido para determinado trabajo, cualquier falla ulterior en su rendimiento
no es debido a cambio interno sino a contaminación con materias extrañas o
a formación de sedimento. Ningún ingeniero introduciría una mezcla de
aceite, agua, arena, partículas finas de metal, sedimento y ácido en el sistema
de lubricación a su cargo; sin embargo, ésta es exactamente la combinación
que contienen muchos cuando no se toman medidas preventivas. Es obvio
que se desperdiciarían las grandes sumas de dinero y tiempo empleados en
refinar los lubricantes para determinados propósitos y en la perfección de su
técnica de aplicación si se permitiera que la introducción de materias
extrañas destruyera la eficiencia del lubricante durante su servicio.

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La extracción del agua y materias extrañas del lubricante empleado en las

instalaciones marinas se realiza por medio de purificadores centrífugos. La
mayor causa de contaminación de los sistemas de lubricación es la entrada de
agua a los mismos. Se produce la emulsión cuando hay partículas menudas de
lubricantes y de agua que no se separan fácilmente; esto es advertible por la
presencia de una coloración material viscoso gris o negruzco que se vierte por la
salida de agua del purificador.

Los purificadores centrífugos se usan también para sacar agua y materias

extrañas del combustible. Los purificadores de combustible son de construcción
similar a los de lubricantes, consistiendo su única diferencia en el margen de
tolerancia debido a las diferencias de gravedad específica.

8.2PRINCIPIO DEL TANQUE DE SEDIMENTACIÓN DE COLUMNA

COMPENSADA

La figura 8-1 muestra un tanque de sedimentación que tiene la entrada y la

salida por el mismo extremo. Supóngase que se llene este tanque con agua y que
luego pase una mezcla de lubricante, agua y suciedad al mismo, desde el tanque
de suministro A, bajando por el pasaje de entrada D, bajo la división E, y dentro
del tanque principal F. El lubricante, siendo más ligero se elevará a la parte
superior del tanque mientras el agua y las impurezas permanecen cerca del
fondo. Como el tanque principal F está en libre comunicación con el pasaje H, al
acumularse el lubricante en F, desplaza el agua que fluye bajo la división G hacia
arriba a través del pasaje H y por encima del depósito I.

Cuando se llega a la condición ilustrada en la figura 8-1, la columna de

lubricante M K ha de ser necesariamente más larga que la columna de agua, N I,
porque el lubricante es más ligero que el agua (o sea, que su gravedad específica
es menor que la del agua). Así, si el lubricante pesa 0.85 más que el agua, la razón
entre las dos columnas sería 1.0÷0.85, esto es, 1.18 a 1, y la altura de M K tendría
que ser 1.18 veces mayor que la de N I para que las columnas se equilibraran
entre sí.

Dicho de otro modo, la altura M K es inversamente proporcional a la altura N

I, como la gravedad específica del lubricante es a la del agua. Un tanque
diseñado para operar de este modo puede llamarse tanque de sedimentación de
columna compensada.

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Para permitir que los últimos restos de agua y lodo se sedimenten y desprendan
del lubricante, las proporciones de este tanque se disponen de modo que se llene
casi completamente con el fluido más ligero, como en la figura 8-1. Entonces se
retiene el combustible en el tanque durante el mayor tiempo posible para su mejor
purificación.

Si el tanque está indebidamente proporcionado por tener el depósito muy alto

en I (como se muestra en la figura 8-2), entonces se llenará casi completamente con
agua en vez de lubricante, no pudiendo realizarse por ello la debida purificación o
limpieza del lubricante, ya que éste no permanecerá en el tanque un tiempo
suficiente que permita la sedimentación de todas las partículas de lodo y agua. Si el
anillo del depósito, o anillo de escape, se eleva demasiado, no se separarán el aceite
y el agua, pues ésta se derramaría por la salida del lubricante. Así se advierte que se

A A
B B

C C

I I
K K

M N

F F

J L J L
D E G H D E G H

TANQUE DE SEDIMENTACIÓN DE COLUMNA COMPENSADA

Figura 8-1 Tamaño correcto del depósito. Figura 8-2 Depósito de tamaño incorrecto.

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efectúe un cambio en la proporcionalidad del tanque al cambiar la altura del

depósito en I.
8.3. PRINCIPIO DEL PURIFICADOR CENTRÍFUGO

Si se deja una mezcla de lubricante sucio a sedimentar por gravedad

dentro de un recipiente, el agua y las impurezas más pesadas se separan
lentamente por dicho efecto de sedimentación.

La rapidez con que se sedimenten las partículas sólidas depende de:

1) La diferencia entre la gravedad específica de las partículas sólidas y la

del líquido o líquidos;
2) El tamaño y forma de las partículas sólidas;
3) La viscosidad del líquido;
4) La magnitud de la fuerza separante, que en este caso es la gravedad.

El lubricante se eleva al extremo superior mientras el agua desciende

dejando que el sedimento repose en el fondo. De modo igual, el lubricante
sometido a la acción centrífuga buscará una zona central y el agua una zona
adyacente exterior mientras el sedimento se depositará en las paredes del
recipiente. Esta actividad se ilustra en las figuras 8-3 y 8-4.

ACEITE SOLIDOS
AGUA AGUA
SOLIDOS ACEITE

DIRECCIÓN DIRECCIÓN DE LA
DE LA GRAVEDAD FUERZA CENTRÍFUGA

Figura 8-3 Tanque estacionario de sedimentación. Figura 8-4 Tanque de sedimentación rotativo.

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La función del purificador centrífugo de lubricante es acelerar la labor de

sedimentación. Puede lograrse una fuerza separadora varios miles de veces
mayor que la gravedad haciendo rotar a gran velocidad un recipiente de
forma debida. La fuerza centrífuga varía en razón directa al radio de la taza
centrífuga, y al cuadrado de la velocidad angular en radianes.

Antes de seguir adelante es preciso entender bien en qué consiste la fuerza

centrífuga, así como el modo mejor de producirla y controlarla en los equipos
de purificación de combustible. Todos sabemos que cuando se dobla una
esquina de ángulo pronunciado en un automóvil, hay una fuerza que tiende
a voltear aquel por un lado. Esta fuerza varía con la velocidad del carro y con
la medida del cambio de dirección. Esta fuerza impelente exterior es la fuerza
centrífuga. Puede definirse como la fuerza que se dirige hacia afuera cuando
un objeto en movimiento es impelido por fuerza externa a viajar en un
trayecto curvo.

Es el resultado de la falta de tendencia de un cuerpo en movimiento a

cambiar de dirección. Un peso pequeño, como una bala de fusil, rotando al
extremo de una cuerda puede generar suficiente fuerza centrífuga para
romperla debido a que existe un cambio de dirección. En la figura 8-5 se
ilustra el hecho de que un cuerpo a una velocidad lineal dada genera más
fuerza centrífuga cuando dobla una esquina pronunciada que cuando el
cambio de dirección es más gradual.

VELOCIDAD: 1000
PIES POR MINUTO

2 PIES DE LARGO

LA FUERZA CENTRÍFUGA GENERADA ES 4.3 VECES MAYOR QUE LA GRAVEDAD

VELOCIDAD: 1000
PIES POR MINUTO

1 PIE DE LARGO

LA FUERZA CENTRÍFUGA GENERADA ES 8.8 VECES MAYOR QUE LA GRAVEDAD

Figura 8-5. Efecto del régimen de cambio de dirección sobre la fuerza centrífuga.
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Si el tanque de sedimentación de columna compensada que se describe en

el Artículo 8.2 se tornara de un lado y se situara otro frente a él, alterando
algo ambos, se formaría una sedimentación transversal de una taza de un
purificador centrífugo rudimentario de lubricante. Entonces el depósito I
adquiriría la forma de un anillo plano. Al girarse la taza, se sustituiría la
sedimentación gravitacional por la fuerza centrífuga actuando del mismo
modo que la gravedad excepto en que tira del eje de rotación”.

Aquí el cambio de dirección es fijo y depende del diámetro de la taza. Cada

molécula del líquido en la taza trata de viajar en línea recta y está sufriendo
un cambio constante de dirección forzado por la fuerza estructural del
cilindro. El contenido líquido del cilindro obedece las mismas leyes que la
bala suspendida de la cuerda; esto es, que la fuerza centrífuga que actúa
sobre cada molécula "es proporcional a su velocidad y, para una velocidad
lineal dada, es inversamente proporcional a su distancia al eje de rotación.

8.4.PURIFICADOR CENTRÍFUGO DE TAZA TUBULAR

En la figura 8-6 se ilustra un purificador centrífugo de lubricante del tipo

de taza tubu1ar. Brevemente, consiste en un rotor hueco, llamado taza,
conectado por una tuerca de acoplamiento a un eje móvil suspendido de un
montaje de cojinetes de bola armado en el extremo de la armazón del
purificador. Montado conjuntamente con el cojinete hay una polea movida
por una correa procedente de un motor situado en el respaldo de la
armazón. La tensión de la correa es mantenida por otra polea de marcha
lenta a tensión de muelles (resorte). El extremo inferior de la taza se
extiende dentro de un buje de arrastre montado en un conjunto de tracción.
La función de este conjunto es restringir el movimiento del fondo de la taza,
aunque permitiendo lo suficiente para que cuando se opera el purificador, la
taza pueda centrarse en su propio centro de rotación, que puede no
coincidir con el centro geométrico de ella. El nombre de tracción procede de
la acción de tracción o restricción del conjunto. La figura 8-7 ilustra la taza
con el eje y cojinete de que está suspendida y el arrastre que guía su fondo.

El lubricante contaminado, bajo la presión de la bomba del purificador es

alimentado por una tubería estacionaria al interior de la tobera de
alimentación, montada en el conjunto de tracción, que lanza el lubricante en
forma de chorro dentro de la taza giratoria. En el interior de ésta hay un
dispositivo de tres planos consistente en placas de igual número de

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espaciamiento radial uniforme, que imparte el movimiento rotatorio de la taza al

lubricante contaminado. Este dispositivo triple se mantiene en una posición fija en
la parte superior de la taza por medio de muelles (resortes) montados en las
puntas de las aspas. Cuando trabaja con lubricante, el dispositivo tiene un cono en
el fondo contra el que golpea el chorro, siendo acelerado uniformemente para
alcanzar la velocidad de la taza sin formar emulsión.
DEFENSA

CORREA
POLEA DE MOTOR
HUSILLO
MOTOR
CAMISA A PRUEBA DE VAPOR
TUERCA DE ACOPLAMIENTO

CUBIERTA SUPERIOR
CUBIERTA INFERIOR

EMBUDO
CUERPO DEL EMBUDO

ESTRUCTURA
TAZA

BOMBAS

Figura 8-6. Purificador centrífugo tipo tubular

El combustible no tiende a emulsificarse, lo que hace innecesario el cono,

poniéndose en su lugar una placa triangular cerca del fondo interior de la taza.El
combustible que choca con la placa es dirigido inmediatamente a la salida de la taza.
El lubricante contaminado, forzado a rotar a gran velocidad por la taza es sometido
a la fuerza centrífuga que le separa la suciedad, o sedimento y el agua al pasar por
su interior.

En la periferia de la taza se forma una capa de materia sólida, luego se forma otra
capa intermedia de agua próxima al lodo y una tercera de lubricante limpio que
"flota" en la superficie interior del agua.

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La figura 8-8 muestra las lumbreras de escape que hay en la parte superior
de la taza, dispuestas de modo que pueda extraerse el lubricante limpio del
centro de ella y descargarse en una cubierta, y sacarse el agua de la periferia
de aquella para vaciarla en otra cubierta. La línea divisoria entre la capa de
agua y la de aceite se controla por el deflector interior y el depósito de anillo.

Los sólidos que se depositan contra las paredes de la taza, permanecen en

la misma para ser limpiados al final del ciclo.

COJINETE

HUSILLO

ACOPLAMIENTO

TAZA

ALETA TRIPLE

FONDO
DE LA TAZA NÚCLEO
DE LA TAZA
ARO DE
ANILLO DE
EMPAQUETADURA
COJINETE
TOBERA DE
ALIMENTACIÓN

Figura 8-7 Taza de purificador de modelo tubular

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Las tazas de tipo tubular rotan a 15,000 r.p.m., o más, dependiendo de su

diámetro. La aplicación del principio de sedimentación de la columna compensada
puede discernirse fácilmente mirando la figura 8-8 por un lado y observando la
parte de la misma que pasa a quedar debajo de la línea central de la taza. Obsérvese
que usando depósitos de anillo de varios diámetros interiores pueden purificarse
lubricantes de diferentes gravedades específicas.

LUBRICANTE LUBRICANTE

AGUA AGUA

PRESA DE ARO

TUERCA DE LA
PRESA DE ARO

EMPAQUETADURA DE
LA PRESA DE ARO

AIRE

DEFLECTOR INTERIOR

Figura 8.8 Detalles de la porción superior de un purificador del tipo de taza tubular

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8.5. PURIFICADOR CENTRÍFUGO DE DISCO

En la figura 8-9 se muestra un purificador centrífugo de lubricante de disco que

consiste en, dicho en forma suscinta, de una unidad en la que rota un eje vertical de
taza que lleva a ésta en su extremo superior. El peso del eje de la taza, unido a
cualquier fuerza de empuje debida a la propulsión, es tomado por un cojinete
radial de tope situado en el extremo inferior del mismo eje. El cojinete de la parte
superior del eje es de montaje móvil para permitir que la taza se centre sobre su
centro de rotación. El eje se rota por medio de un conjunto compuesto de rueda de
gusano y embrague de fricción, fijado en el eje de impulsión del motor.

Figura 8-9 Purificador centrífugo de disco, mostrando la disposición de la taza, husillo y mecanismo impulsor.

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En la figura 8-10 aparecen las características principales de construcción

de la taza y se ilustra también la acción purificadora de la máquina. El
lubricante sucio entra por la parte superior de la taza giratoria a través del
colador, bajando luego por el interior del eje tubular y saliendo por el fondo
del conjunto de discos. Al subir el lubricante sucio a través de los agujeros de
distribución de los discos, estos le imparten el movimiento rotativo de la taza.
Rotando a gran velocidad queda sujeto a la fuerza centrífuga, que hace que
la suciedad o lodo y el agua se muevan hacia afuera, moviéndose el
lubricante purificado hacia adentro en dirección al eje tubular. La velocidad
de rotación de la taza es de 7,200 r.p.m. Aproximadamente. Los discos

Colador

Cubierta Eje tubular

Cubierta Reboso
de reboso
Anillo de descarga
(de la prensa o deposito)
Aceite purificado
Cubierta central

Cubierta de fondo

Disco de extremo superior

Disco intermedio
Descarga de agua
Disco del fondo

Freno

Envuelta de la taza

Figura 8.10 Sección transversal mostrando la operación de una taza de purificador de disco.

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cónicos también sirven para dividir el lubricante contaminado en varias capas

delgadas de 0.5 de pulgada de grueso o menos en las que tiene lugar la separación, por
lo que las impurezas, al sedimentarse, viajan una distancia mínima y reducen así la
fuerza centrífuga necesaria para el buen funcionamiento. El líquido confinado dentro
del espacio entre los discos está forzado a fluir solamente por el pasaje. La mayor parte
de la suciedad y los residuos se acumulan en forma de capa más o menos uniforme en
la superficie vertical interior de la envuelta de la taza y permanecen dentro para ser
limpiados al final del ciclo de uso.

Próxima a la suciedad se forma una capa de agua, que se descarga en una cubierta.
La capa de lubricante limpio flota en la superficie interior del agua y es sacada hacia
otra cubierta. La línea divisoria entre la capa de agua y la de lubricante se rige por el
anillo de descarga y el disco extremo superior, que difiere de los otros en que no tiene
agujeros. Este disco también se prolonga hacia el exterior de la taza. El agujero de
drenaje del fondo de la taza permite la purga automática cuando ésta se detiene. Es
fácil discernir la aplicación del principio de sedimentación de la columna compensada
mirando la figura 8-10 desde la izquierda y observando la parte de dicha figura que
queda entonces debajo de la línea central de la taza. Empleando anillos de descarga
(depósitos) de distintos diámetros internos se pueden purificar lubricantes de
diferentes gravedades específicas.

8.6. ANILLOS DE DESCARGA

La línea divisoria entre las capas de lubricante y agua se determina en cualquier taza
de purificador por la situación y tamaño del anillo de descarga (presa o depósito de
anillo), como se explicó en el Artículo 8-2 para el caso del tanque de sedimentación de
columna compensada. Como la gravedad específica de los lubricantes varía según su
clase o tipo, cada purificador tiene un juego de anillos de descarga de varios tamaños;
o sea, anillos con el mismo diámetro exterior, pero distintos diámetros interiores.
Como la posición del anillo de descarga en un purificador dado es constante, la línea
divisoria de las capas de líquidos se determina por el tamaño del anillo usado. Ha
habido casos en que sólo uno de los varios anillos ha servido para aproximarse a los
resultados deseados. Aunque el anillo de descarga puede sacarse e insertarse otro de
distinto tamaño, es mejor dejarlo en posición mientras se usa el mismo tipo de
lubricante si se obtienen buenos resultados. Si el tamaño de anillo recomendado para
un tipo de lubricante no da buenos resultados, hay que determinar el tamaño correcto
por medio de pruebas.

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8.7. CARACTERÍSTICAS DE OPERACIÓN

Cuando se va a operar el purificador es esencial alimentar el agua a la taza antes

de abrir el flujo de lubricante, dicha agua sirve para sellar las pesadas lumbreras de
descarga y crear el equilibrio inicial de capas descrito en el Artículo 8-2. Si no se
"ceba" la taza con agua, el lubricante fluirá por las lumbreras de descarga de agua
desperdiciándose. Las tazas de los purificadores modernos se ceban abriendo la
válvula de la tubería de cebado entre la lumbrera de descarga de agua y el lado de
succión de la bomba de admisión. Entonces se vierte agua dulce caliente por la
lumbrera de observación de la descarga de agua hasta verla fluir a la descarga
desde las cubiertas. Se recomienda efectuar el cebado de este modo mejor que por
medio de una conexión permanente con el sistema de agua, ya que en este último
caso, de haber una válvula de ceba con filtraciones, permitiría la entrada de
lubricante a dicho sistema después de iniciado el flujo de lubricante. Como guía
general, los lubricantes de turbina deben centrifugarse a una temperatura entre
150° y 180°F. Permitir que la temperatura descienda debajo de estos puntos dará
por resultado una operación deficiente que sólo puede mejorarse con una brusca
reducción del flujo. Para el combustible que es más ligero, es suficiente una
temperatura de l00°F.

Los sólidos no se descargan, sino que se depositan contra las paredes de la taza.
El operador aprende pronto por experiencia el tiempo que puede usar el
purificador sin limpiar la taza, y si se prolonga más de lo deseado, los fabricantes
generalmente previenen que el líquido se rebose en la alimentación cuando los
sólidos se han acumulado al punto de obstruirla, lo que constituye una indicación
directa de que hay que proceder a una limpieza inmediata.

Como la limpieza de la taza es un requisito regular de rutina, hay que prepararse

para realizarla rápida y satisfactoriamente. Deben estudiarse las recomendaciones
del fabricante relativas al tipo de banco de limpieza conveniente, así como los
consejos para realizar mejor el trabajo.

Es importante que el banco de limpieza quede adyacente a la máquina para que

el operador no tenga que llevar una taza pesada sobre el piso de planchas
resbalosas. El banco debe estar también bien iluminado y disponerse de una luz
portátil que pueda introducirse dentro de la taza para comprobar que se hayan
extraído debidamente los sólidos. Hay que recordar que el buen funcionamiento
de una centrífuga depende de su permanencia en equilibrio. Una taza no bien

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limpia puede provocar desgaste en los cojinetes, y ocasionar una separación

indebida por causa de la cantidad de sólidos en una o más lumbreras de
descarga. Por eso, es preciso insistir que uno de los detalles más importantes
en el manejo de los purificadores es cuidar de verificar que las tazas estén
completamente limpias de sólidos.

En la taza tubular puede permitirse que los sólidos se formen hacia el

centro sin que afecten en forma real la limpieza. En el tipo de disco es preciso
hacer la limpieza antes de que los sólidos se acumulen en el interior de los
discos.

Es imposible evitar que algunos de los productos de la combustión se

filtren en el lubricante de un motor diesel, lo que trae por resultado que el
lado del agua de la taza desarrolle gradualmente signos de corrosión que
son, en algunos casos, extremadamente malos cuando hay contacto con
hierro o acero ordinarios. Cuando exista corrosión, el operador debe tener
presente el hecho de que, aunque el purificador tiene de construcción el
debido factor de seguridad, las picaduras pueden degenerar en una
condición peligrosa y que las tazas que presenten ese mal deben devolverse a
la fábrica para comprobación y pruebas de alta velocidad.
Todos los purificadores del tipo centrífugo son máquinas de alta velocidad,
de lo que se desprende la imperiosa necesidad de su debido cuidado y
operación.

Deben leerse atentamente los Manuales de Instrucción y las instrucciones

de los fabricantes sobre lubricación y mantenimiento y confeccionarse un
plan de mantenimiento que se adapte estrictamente a los requisitos que
establecen los mismos.

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