A lo largo de la historia de nuestra humanidad hemos encontrado una gran

preocupación por los problemas que se han generado a través de las distintas
soluciones que se le ha dado al castigo como muestra de los actos
incorrectamente cometidos por una persona a la cual se le designa con el término
delincuente. Por ello se tuvo que buscar el medio en el cual ese grupo de
personas pudiera instalarse para de cierta forma pagar lo que había hecho, de ahí
es como surge la prisión, la cual definida desde mi punto de vista es entendida
como una institución de castigo que trata de rectificar del camino del mal a las
personas que llegan ahí.

Las cárceles como lo plantea Michel Foucault ,tiene sus inicios varios años atrás,
cuando surge la inquisición con el fin del castigo a las personas que actuaban
contra la soberanía y se rebelaban , de hecho cabe mencionar que en el siglo XVII
las torturas y el castigo eran entendidos como un acto teatral en donde la persona
era exhibida para que los demás vieran el castigo, el cual constaba de hacer
sufrir a los condenados por medio del dolor sin tomar en cuenta su condición
humana puesto que obedecían al deseo de lastimarlos y así como dice Foucault
1
“ es la propia condena la que se supone que marca al delincuente con el signo
negativo y unívoco …”

De hecho si nos remontamos al pasado no nos hemos alejado casi nada de lo que
se vivía siglos atrás puesto que 2“desde que la Edad Media construyó no sin
dificultad y con lentitud el gran procedimiento de la información judicial, juzgar era
establecer la verdad de un delito, era determinar su autor , era aplicarle una
sanción legal”

Acontece además que como todo con el tiempo va cambiando se ha definido a la

prisión como una medida de control social y desde mi opinión hasta nuestros días
eso sigue sucediendo puesto que es el espacio en donde las personas sin
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Foucault, Michel, 1926-1984 . Vigilar y castigar : Nacimiento de la prisión / México :

Siglo XXI, 2009
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Foucault, Michel, 1926-1984 . Vigilar y castigar : Nacimiento de la prisión / México :

Siglo XXI, 2009
importar si son hombres o mujeres son trasladados por el simple hecho de haber
trasgredido la norma penal o las leyes que nos son impuestas para tener un sano
esparcimiento, es decir, eso no se ha alejado en lo absoluto desde siglos pasados,
lo que se busca que exista una corrección que servirá como ayuda para hacer
mejores personas que logren arrepentirse de los actos que hicieron.

Pero con todo esto desde mi punto de vista el autor Julio Scherer tienen razón el
sentido de recalcar en repetidas ocasiones que a pesar de que el delincuente ha
sido juzgado y condenado, dentro de la cárcel también tiene derechos, ya que no
por ser presidiarios dejan de ser seres humanos y dentro de esta institución
merecen ser respetados, porque como se está marcando es una institución, en
donde debe de existir la promoción de la carencia de valores y del sentido de la
vida propia del ser humano.

Además de ello tal y como lo expresa Julio 3 “ el gobierno está obligado a velar por
la salud de los soldados y los reos en los cuarteles y en las cárceles. Son
personas.” Coincido en ese punto que dice Julio Scherer porque los reos deben de
estar protegidos por el Estado y deben ante cualquier circunstancia gozar de los
mismos derechos que están legalmente basados en nuestra Constitución Política
de México.

Al respecto conviene decir desde mi opinión y con los textos antes analizados que
las condiciones actuales por las que atraviesa la prisión es que la institución no
garantiza la seguridad tal como debería de ser, ya que únicamente contribuye a
que las personas reclusas se comporten de una manera vil y malvada en donde
sobrevive el que puede y con los recursos que logre poseer podrán tener aún una
mayor ventaja sobre otros.

Con el paso del tiempo las cárceles se han ido convirtiendo en espacios
degradados en donde predomina la corrupción aparecida en todas sus formas,
quiero agregar que opino que todo el sistema penitenciario se resume a un
sistema grande de corrupción, puesto que existe un gran mercado ilegal de
diversas cosas que se vuelven como parte indispensable de los reos, por
mencionar algunos son : drogas, alcohol, tráfico de armas, aparatos electrónicos ,

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Scherer García, Julio, Cárceles / México, D.F. : Alfaguara, c1998
inclusive hasta los propios alimentos forman parte de la venta dentro de los
penales.

Aquí conviene detenerse un momento a fin de mencionar que el poder tiene

mucha relevancia en todo lo que se suscita en la cárcel , ya que no solo es
entendido el poder para ejercer fuerza sobre otro u otros, el poder también puede
ser entendido por medio de 4 “ la siembra del miedo… , el miedo se pega. Es una
piel. El miedo es el arma de los narcos, de los matones , de los soplones, de los
pandilleros. El miedo se nota , se ve la sombra que cubre a los cobardes y a los
sujetos sin autoridad moral” es imposible que el miedo no sea un protagonista
dentro de ese lugar que desde mi punto de vista se pinta como un espacio
desolador , que no ofrece ningún tipo de esperanza puesto que todo se resume en
un 4x4 , una vida repugnante, miserias, infortunios y desde luego la pérdida de
una identidad propia, de saber qué es lo que se tiene designado para cada unos,
de saber qué pasa cuando dentro de su interior cuando cometieron tal o cual acto.

Cabe pensar, sin embargo que el miedo se apropia del ser y de eso nos hablaba
también Bauman en miedo líquido donde parte del miedo nace 5“ de una actual
crisis de confianza. La confianza está en un aprieto desde el momento en que nos
damos cuenta de que el mal puede ocultarse en cualquier parte….”

El miedo y el mal como bien lo entendí van acompañados porque sin uno el otro
no existiría y eso tristemente es algo que prolifera hasta nuestros días.

Opino básicamente con todo lo antes descrito que el miedo es algo que llega a
penetrar a todos porque todo el tiempo están vigilados y básicamente dejan de
ser dueños de tus propios actos, además pierden su intimidad porque las 24 horas
del día son vigilados con un monitoreo de guardias y de cámaras de vigilancia.

Scherer García, Julio, Cárceles / México, D.F. : Alfaguara, c1998

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Bauman, Zygmunt, 1925 Miedo líquido : la sociedad contemporánea y sus temores /
Barcelona : Paidos 2007
Es significativo, por otra parte, que se puede llegar a pensar que en este sentido,
el que ejecuta la sanción ( reos) , puede ser que por temor o por la carencia de
adiestramiento, también llega a experimentar una transformación al interior de la
prisión, sin embargo la autoridad ignora que algún día el preso abandonará la
cárcel, con el rencor acumulado , pero para ello están los psiquiátricos y los
médicos que ayudan a la superación de todo este tipo de casos. Puedo decir que
se llega a un estado de pérdida de percepción.

Lo que me interesa ahora es regresar al punto donde la corrupción es muy fuerte

en las cárceles porque se supone que ninguno debería de gozar de más o menos
derechos solo por tener lo que se conoce como “ palancas” en donde tienen la
libertad de salir y gastar como bien ponía un ejemplo Scherer de un reo que iba a
comer a los mejores restaurantes y posteriormente regresaba a la cárcel , gozan
de tener un espacio más grande y cómodo, tienen televisores y con ello existe un
desequilibrio en donde por no tener valen menos entendido en término de
desigualdad y no tienen nada de eso privilegios, y entonces qué sucede con ellos,
en mi opinión y retomando lo que dice Julio Scherer son los que sufren más dentro
de prisión.

Y con ello se pone de frente algo que es importante en donde 6“ su soledad y el

aislamiento lo han excluido de toda relación humana”.

Así entonces como antes defendía mi opinión apoyándome en lo que decían los
diversos autores antes citados quiero concluir diciendo que debería de ponerse un
orden y cambiar el sistema penal acusatorio para que todos los reclusos gocen de
los derechos que tienen, el sistema es demasiado corrupto y eso debería de
frenarse tan pronto como sea posible, ya que si se continua con la misma forma
que se ha venido manejando a través de los años estos espacios que buscan
prácticamente “lograr la reinserción del sentenciado a la sociedad” se verá
imposibilitado. La impunidad debe frenarse y contra restar esos hechos a manera
de brindar una mejora.
6

Scherer García, Julio, Cárceles / México, D.F. : Alfaguara, c1998

La cárcel no debe de desaparecer sino al contrario, tendrá que implementar
nuevas medidas para encontrar un punto medio para mejorarse