La Fotografía como medio de Organización Social

Desde que se patentó en París, Francia, por Louis Daguerre en 1839, la fotografía se ha
desarrollado como una de las artes más importantes del entramado social. A pesar de su
dinamismo artístico reciente, si se compara con la pintura, su impacto ha sido incluso, uno
de los más significativos, pues sus fines, además de artísticos, son históricos, porque ha
ayudado a retratar, desde entonces, la evolución de la sociedad.

Por consiguiente, ella siempre ha despertado un gran interés en las masas. Y actualmente,
en la época de la hiperconectividad, sigue siendo un fenómeno ascendente. Su avance
reside en el profundo alcance que tiene esta disciplina en la población a la hora de tomar
una foto y ser publicada en las RRSS, bien sea para informar y comunicar sobre una
realidad, desde una perspectiva estética o puramente de carácter documental.

Innumerables son los ejemplos en la historia reciente de Venezuela, que evidencian estos
hechos, pues han permitido el surgimiento de Nuevas Tribus, deviniendo estas en:
reproducir los parámetros que impone la gran Industria Cultural de Masas o atestiguar la
cotidianidad social y hechos que han marcado la vida del país.

Entre estas nuevas tribus, está el colectivo de UNEARTE, que pone al alcance de los
entusiastas de la fotografía la licenciatura de Artes Visuales, mención Fotografía, donde
se instruye sobre el lenguaje fotográfico para conseguir imágenes de calidad. Otra tribu, es
Ávila Tv, quien con su Escuela de Medios y Producción Audiovisual (EMPA), viene
impulsando el curso de Realizador Audiovisual para la creación de nuevos espacios
informativos y comunicacionales comunitarios.

Para la reportera gráfica, Leonor Básalo, estas tribus históricamente han estado
influenciadas por el eurocentrismo, evolucionando desde individualidades, grupos,
cooperativas, fundaciones, ONG, hasta colectivos. Muchas siguen signadas por los criterios
internacionales, status sociales, personales y territoriales a la hora de hacer fotografías.

De allí la necesidad de reivindicar nuestra postura política, con Activadores Fotográficos,

proyecto del Cenaf, que se mueve más allá de la valoración artística de la fotografía,
investigando los comportamientos sociales que determinan, cómo entendemos desde los
diversos imaginarios colectivos, el hecho fotográfico en los procesos de socialización,
comunicación visual y de creación e investigación de la imagen, no solo como un hecho
cultural de vanguardia, sino como un instrumento de transformación social comunitaria.

Texto: Luis Zulueta