Rafael Hernández (1014 - 1182)

Hidrología
5/4/2023
Evaporación y Transpiración

La evaporación en términos hidrológicos se refiere al proceso mediante el cual el agua

líquida se convierte en vapor de agua debido a la energía solar y la temperatura ambiente. Este
proceso ocurre principalmente en la superficie de cuerpos de agua como océanos, ríos y lagos,
así como en la superficie de suelos húmedos y plantas.

La evaporación se produce básicamente por el aumento de energía cinética que

experimentan las moléculas de agua cercanas a la superficie de un suelo húmedo o una masa
de agua, producido por la radiación solar, el viento y las diferencias de presión de vapor. Los
dos tipos principales de evaporación son:

 Evaporación meteorológica o potencial: se evapora toda lo que es capaz de

absorber la atmósfera
 Evaporación hidrológica o real: se evapora el agua disponible.

Por otro lado, existen diferentes tipos de factores meteorológicos que afectan la evaporación,
entre estos están:

1. Temperatura: la tasa de evaporación aumenta a medida que la temperatura aumenta,

ya que el calor proporciona la energía necesaria para convertir el agua líquida en vapor.
2. Humedad relativa: la tasa de evaporación disminuye a medida que la humedad relativa
del aire aumenta, ya que el aire húmedo tiene menos capacidad para absorber más
vapor de agua.
3. Velocidad del viento: la velocidad del viento aumenta la tasa de evaporación al retirar
el aire húmedo cerca de la superficie y reemplazarlo con aire más seco.
 4. Intensidad de la radiación solar: la radiación solar proporciona la energía necesaria
para la evaporación, por lo que una mayor intensidad de la radiación solar aumentará la
tasa de evaporación.
5. Presión atmosférica: la tasa de evaporación aumenta a medida que la presión
atmosférica disminuye, ya que esto disminuye la temperatura de ebullición del agua y
permite que se evapore más fácilmente.
6. Cobertura de nubes: la presencia de nubes puede reducir la tasa de evaporación al
bloquear la radiación solar y reducir la temperatura de la superficie.

La evaporación desde superficies líquidas es el proceso mediante el cual el agua

líquida se convierte en vapor de agua en la superficie de cuerpos de agua como océanos,
lagos, ríos, embalses y piscinas. Cuando se trata de conocer la evaporación desde superficies
líquidas existen factores que tienen mucha influencia como la extensión, la profundidad,
volumen de agua y hasta la salinidad, que disminuye la evaporación. El proceso de la
evaporación desde superficies liquidas empieza cuando la radiación solar calienta las capas
superiores de agua.

La evaporación desde el suelo es el proceso mediante el cual el agua del suelo se

convierte en vapor de agua y se libera a la atmósfera debido a la energía solar y la temperatura
ambiente. Esta evaporación ocurre en la capa superficial del suelo, donde las moléculas de
agua se calientan y se evaporan en la atmósfera. Por otro lado, la evaporación desde un
suelo saturado se refiere al proceso mediante el cual el agua líquida que se encuentra en la
superficie del suelo se convierte en vapor de agua y se libera a la atmósfera debido a la
energía solar y la temperatura ambiente. Un suelo se considera saturado cuando ha alcanzado
su capacidad máxima de retención de agua y el exceso de agua se acumula en la superficie del
suelo

Un evaporímetro es un instrumento utilizado para medir la tasa de evaporación de

agua desde una superficie de referencia. Consiste en un recipiente o tanque que se llena con
agua y se coloca en la superficie del suelo o en un lugar donde se desea medir la tasa de
evaporación. Además de registrarse en aparatos, la evaporación también se puede calcular o
estimar mediante fórmulas que tienen en cuenta los factores que influyen en la evaporación
como la temperatura y la precipitación, la humedad del aire y la velocidad del viento.
 Una de las formas de medir la evaporación es a través del método de balance
energético, que es una técnica utilizada para estimar la cantidad de energía que se utiliza en
un sistema o proceso. En este caso, se utiliza para determinar la cantidad de energía necesaria
para evaporar una cantidad determinada de agua. Este se basa en la ley de conservación de la
energía, que establece que la energía no se crea ni se destruye, sino que se transforma de una
forma a otra. Para aplicar este método, se deben medir y tener en cuenta todos los factores
que afectan la evaporación, como la temperatura, la humedad, la
velocidad del viento, la radiación solar, entre otros.

Otro de los métodos utilizados para medir la evaporación es a través del método
de Meyer, que es un método empírico utilizado para estimar la evaporación de una superficie
libre de agua, como un lago, un embalse o un río, a partir de la temperatura del aire y la
velocidad del viento. Este requiere la medición de la temperatura del aire y la velocidad del
viento, que son parámetros fácilmente medibles en estaciones meteorológicas convencionales.
La temperatura de rocío se puede calcular a partir de la temperatura y la humedad relativa del
aire. El valor de la constante empírica k depende de las condiciones locales y se determina
mediante la calibración con datos de
evaporación medidos en el lugar.

A pesar de su simplicidad, el método de Meyer tiene algunas limitaciones, ya que no

tiene en cuenta otros factores que influyen en la evaporación, como la radiación solar, la
humedad del aire y la turbulencia en la superficie del agua.

El método combinado aerodinámico y de balance de energía se utiliza en la

investigación científica y en la práctica para estimar la tasa de evaporación en diferentes
condiciones climáticas y ambientales. Este método proporciona una estimación más precisa de
la tasa de evaporación que los métodos empíricos simples, como el método de Meyer, ya que
tiene en cuenta varios factores que afectan la evaporación.
 Por otro lado, la transpiración es el proceso por el cual las plantas pierden agua en
forma de vapor a través de pequeñas estructuras llamadas estomas, que se encuentran
principalmente en las hojas. Es uno de los procesos más importantes que ocurren en las
plantas y es esencial para su supervivencia, ya que la transpiración ayuda a mantener la
temperatura de la planta, permite la absorción de nutrientes y ayuda a la fotosíntesis. La
transpiración también depende del poder evaporante de la atmósfera y, por tanto, de la
temperatura, de la humedad y de la velocidad del viento. Entre los factores que afectan la
transpiración están:

 Tipo de Planta
 Ciclo de Crecimiento de la Planta
 Tipo de Suelo y humedad de este
 Aspectos Meteorológicos (Insolación, viento, humedad de la atmosfera,etc)

Al estudiar el balance hídrico de una cuenca hidrográfica, es difícil, generalmente

separar la evaporación y la transpiración. Por esta razón ambos factores se tratan usualmente
en ingeniería como uno solo. La evapotranspiración es el proceso combinado de evaporación
y transpiración que ocurre en la superficie terrestre. La evapotranspiración representa la
cantidad total de agua que se pierde a la atmósfera por evaporación desde la superficie del
suelo y la transpiración de las plantas.

La medición de la evapotranspiración es importante para el monitoreo de los recursos

hídricos y la gestión del agua. Se utilizan varios métodos para medir la evapotranspiración,
como un lisímetro. Una estación lisimétrica es una zona de terreno natural de superficie del
orden de 4 m^2, en la que se realiza un cultivo en condiciones reales, pero con dispositivos de
medida del agua suministrada, percolada y sobrante. Por diferencia de estas medidas se
obtiene el agua evapotranspirada. También, se utiliza una sonda de neutrones, que se basa
en la absorción de neutrones por el agua, lo que permite evaluar el contenido de humedad y
por ultimo el balance hídrico, que consiste en seleccionar una cuenca natural pequeña y medir
en ella la precipitación, escorrentía y percolación; por diferencia se calcula la
evapotranspiración.