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CORTEZA CEREBRAL

La corteza está dividida en áreas con funciones determinadas, que se encuadran


dentro de los lóbulos cerebrales. Cada una de estas áreas tiene distintas
funciones relacionadas con la información visual, el lenguaje, la sensibilidad de
nuestro organismo, los movimientos, la memoria, el pensamiento y un sinfín de
asociaciones entre toda la información que recibimos desde nuestro entorno y
desde el interior de nuestro cuerpo.

Esta región es de gran importancia para nuestro funcionamiento, ya que es el


lugar donde se percibe e interpreta toda la información, además del centro de
planificación y programación de nuestros movimientos.

Hemisferios

Los hemisferios son la región más amplia del encéfalo. Al observarlos podemos
distinguir dos hemisferios: derecho e izquierdo, que están separados por una
hendidura, pero en la profundidad siguen estando unidos por una gran cantidad de
fibras que comunican todas sus partes.

¿Qué funciones tienen las diferentes áreas de la corteza cerebral?

Como decíamos anteriormente, cada hemisferio se divide en cuatro lóbulos:


frontal, temporal, parietal y occipital. En cada uno de los lóbulos encontramos
grupos de neuronas especializadas en determinadas funciones.

A continuación, te contamos la función de algunas de las áreas de la corteza más


importantes para el ser humano.

Lóbulo Frontal

En el lóbulo frontal destacan las áreas motoras, que son las encargadas del
control de nuestro movimiento.

Esta zona de la corteza contiene una representación de la mitad opuesta de


nuestro cuerpo, donde cada segmento corporal se representa según el grado de
precisión de los movimientos que realiza. De esta forma, la mano tiene una
imagen mucho mayor que el antebrazo, por ejemplo.

Esta representación corporal es lo que llamamos el “homúnculo motor”.

En el hemisferio dominante, que generalmente es el izquierdo, también vamos a


encontrar el área motora del habla, que es la región encargada de la motricidad
necesaria para la expresión del lenguaje.

Y, por último, encontramos las áreas responsables de funciones cognitivas tan


importantes como las facultades intelectuales y la planificación de la conducta.

Lóbulo Parietal

El lóbulo parietal se sitúa detrás del frontal. En él se encuentra la corteza somato


sensitiva y de asociación, una región encargada de recibir e interpretar la
sensibilidad de nuestra piel, el dolor, la temperatura y la posición y movimiento de
nuestros músculos y articulaciones.

En esta parte de la corteza también está representada la mitad contraria de


nuestro cuerpo, pero en este caso la representación depende de la cantidad de
estímulos que recibe cada parte. Así, la lengua y la cara, por ejemplo, tiene una
representación mucho mayor que nuestro tronco. Esto es lo que llamamos el
“homúnculo sensitivo”.

Lóbulo Temporal

En esta región encontramos la corteza auditiva y de asociación auditiva, que


recibe la información acústica de ambos oídos, para procesarla e interpretar los
sonidos.

En el hemisferio dominante, esta región también se relaciona con el lenguaje


hablado y constituye una zona fundamental para la comprensión del lenguaje.
Esta zona se conoce como el área de Wernicke.

En esta parte de la corteza también se encuentran algunas fibras encargadas de


la percepción del olfato, que forman el llamado tracto olfatorio.
Lóbulo Occipital

En este lóbulo vamos a encontrar las zonas encargadas de la información visual,


son la corteza visual y la corteza de asociación visual. Entre sus funciones
encontramos la recepción de las imágenes, su interpretación y reconocimiento, la
percepción de la profundidad y la visión en color.

Entonces, nuestro ojo es el órgano que se encarga de recibir los cambios


luminosos de nuestro entorno, pero podríamos decir que en realidad quien ve es
nuestro cerebro, pues es el encargado de procesar las imágenes.

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