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Presentado por:
Lorena Lasteros Oscco
Liz Carbajal Saavedra
Los "10 mandamientos del abogado" han sido durante mucho tiempo un faro de los
principios éticos que los abogados deben seguir. Estos principios, como la lealtad al
cliente, la competencia, la confidencialidad y el respeto, tienen como objetivo
garantizar que la profesión legal se adhiera a altos estándares de integridad y servicio.
Sin embargo, en la era moderna, donde la globalización, la tecnología y los cambios
sociales están transformando la naturaleza del sistema legal, es crucial cuestionar si
estos principios tradicionales siguen siendo pertinentes.
Y a raíz de lo que vamos viendo y viviendo en nuestro día a día como futuros abogados
podríamos decir que el decálogo a pesar de ser una base fundamental en nuestro
actuar y pensar no siempre va de la mano con lo que buscamos, puesto que con la
nueva era en la que vivimos a veces es indispensable aplicar un criterio diferente y
diversos, acoplándonos a las necesidades que se nos presenten, siempre creando
valiéndonos de un precedente, es por tanto importante decir que nuestro criterio y
ética profesional debe ser la base fundamental y a ello complementar el decálogo,
puesto que muchas veces nos veremos envueltos en situaciones en las que tendremos
que buscar soluciones a problemas complejos.
Conclusión
Por lo tanto podemos concluir que en un mundo en constante evolución, la ética legal
debe evolucionar con él. Los 10 mandamientos del abogado, aunque anclados en
valores atemporales, deben considerarse a la luz de la complejidad legal actual. La
crítica constructiva de estos mandamientos no busca debilitar su importancia, sino
recalibrar su interpretación y aplicación. Adaptar estos principios a las realidades
modernas no solo preserva su relevancia, sino que también asegura que la profesión
legal continúe siendo un pilar de justicia en un mundo en constante cambio.