Está en la página 1de 10

Aprender a programar no es una tarea sencilla.

La mayoría de nosotros
no sabemos nada al respecto cuando empezamos, y eso lo hace todo
más complicado. Programar consiste en idear y planificar comandos para
que se ejecuten ciertas acciones. El objetivo parece simple, pero el
camino no lo es tanto. Cada lenguaje de programación es diferente,
distinta estructura, distinta semántica, pero la lógica es la misma para
todos ellos. Por eso es importante tener una buena base desde el
principio.

Siempre se suele decir que para programar tienes que cambiar tu


manera de pensar, o incluso a veces es la programación la que cambia la
manera en la que piensas. Sea como fuere, algo tiene que hacer “click”
para que programar no se te haga una tarea enrevesada e insoportable,
y en esa parte es donde entra la lógica. Una vez que la entiendes, todo
se hace más sencillo y comprensible.

Qué es la lógica de programación


La lógica de programación consiste en la organización y planificación
coherente de las instrucciones necesarias para ejecutar con éxito un
programa. Dentro de ello hay una serie de patrones que se repiten en
todos los lenguajes, como el uso de variables, métodos o funciones,
condicionales y bucles. Una vez que comprendas cómo funcionan estas
cositas, lo demás es pan comido (si no te dejas un punto y coma por ahí
perdido, claro está).

Hay que pensar en ella como una receta de cocina. Aunque cada plato
es diferente, en todos tienes que seguir unas reglas para que el plato sea
un éxito y sea, por lo menos, comestible. Aunque los ingredientes
cambien y en lugar de usar el horno, tengas que usar una sartén, sigues
teniendo que seguir los pasos de una receta. Pues con la programación
es igual.
Cómo aprender lógica de programación
Ya sabes lo que dicen, la práctica hace al maestro. Dar cera, pulir cera,
así es como se aprende. Trabajar mucho, hacer muchos ejercicios, leer,
investigar. Darse golpes contra el teclado no es muy buena idea, pero
tampoco se descarta en momentos de crisis. Venga, ya en serio. No
hagas eso. Es verdad que habrá momentos que te desesperes, porque
cambiar todo tu sistema de organización de ideas no es fácil, pero es
totalmente posible.

Si eres como yo, una persona un pelín desorganizada, supongo que esa
manera tan estricta de pensar en programación quizás te pueda costar
un poquito, pero para eso estamos.

¿Te acuerdas del ejemplo de la receta de cocina que te comentaba


antes? Pues bien, vamos a hacer un pequeño ejercicio con ella. Cada
vez que no sepas muy bien cómo empezar o que tienes que hacer a
continuación, quizás te saque este ejemplo del atolladero.

Vamos a aprender a hacer una tortilla de patatas, la cuál va a ser


nuestro programa.

Lo primero es pensar bien qué es lo que vamos a hacer. Ya hemos


decidido que queremos hacer una tortilla de patatas. Tienes que
enterarte bien de qué es, no vaya a ser que te confundas de tortilla y
acabes haciendo una francesa.

Ahora toca reunir todos los ingredientes (variables) en su cantidad


aproximada. No vaya a ser que te juntes con 2 huevos y 5 kilos de
patatas, ya que por un lado estás malgastando patatas y por el otro los
huevos serán insuficientes.

¡Empecemos! Separemos las tareas (en métodos y funciones); pelar las


patatas y freírlas, trocear y saltear la cebolla (qué tema más polémico) y
batir los huevos. Todas ellas son tareas separadas y diferenciadas. Batir
los huevos es una tarea repetitiva (bucles) e incluso hay que decidir
algunas cosas como ingredientes adicionales que le cambiarán todo el
sabor (condicionales).

Una vez que todas esas tareas, llega el momento de la ejecución: Hacer
la mezcla y ponerla en la sartén. A la hora de hacerlo debes de tener
cuidado, medir bien el aceite y que no esté muy caliente, elegir una
sartén adecuada…

Una vez que le has dado sus correspondientes vueltas, has comprobado
el tono y has tenido paciencia, ya estará lista para hincarle el diente.
Pues ya sabes cómo hacer una tortilla. También espero que hayas
cogido todas las mijitas de pan que te he dejado en el texto, para que la
próxima vez que no sepas cómo meterle mano a un programa, pienses
en cómo hacer una tortilla. Piensa en el objetivo final, en todos los pasos
a grosso modo y ahí tendrás tu receta.

Cómo mejorar la lógica de programación


Pues a ver, si lo de ser un cocinillas no te va mucho, también tenemos
otros truquitos para ti. El primero es que le eches un vistazo a nuestra
plataforma a ver qué es lo que te puede ofrecer, como este curso para
empezar a programar, dónde se le hace un repaso a los más básico de la
programación, lo cual siempre viene bien para reconectar con tu yo
programador y todo lo que tiene que ver con los principios de la lógica.

¿Te acuerdas del tostón insoportable que era la lógica en filosofía? Pues
mire usted por donde que servía para algo más que aburrir al alumnado.
Quizás no tengas que desempolvar tus libros de instituto para trabajar la
lógica. Jugar al ajedrez, hacer puzzles o hacer sudokus son cosas
divertidas y que puedes hacer en cualquier momento y lugar con las
nuevas tecnologías. Evidentemente jugar al ajedrez no te va a enseñar a
hacer bucles, pero sí que vas a poder aprender a hacer las cosas de una
manera menos impulsiva, a tener paciencia y empeño en lo que uno
hace y en disfrutar en el proceso.
Ya hemos mencionado anteriormente la importancia de practicar. Si al
principio no le coges el tranquillo, no te preocupes, no eres el único. La
programación requiere constancia y muuuuuuucha paciencia. No te
desanimes con la práctica si al principio no te va muy bien, con el tiempo
mejorará y por suerte no estamos en el 1985; ahora tienes todos los
recursos que internet ofrece, entre ellos OpenWebinars (guiño, guiño).

Aprender lógica de manera entretenida


Si lo de coger apuntes no te va y sentarte delante de un IDE en blanco
con el cursor parpadeante te pone de los nervios, te traemos algunas
plataformas y apps que pueden ayudar a aprender de una forma divertida
y entretenida.

Tenemos un artículo dedicado a Scratch, que, aunque el lenguaje está


orientado para enseñar a niños, es una maravillosa herramienta para
cualquiera que quiera aprender lógica, que es lo primero que se enseña.
Lo bueno de Scratch es que aprendes de manera interactiva y casi sin
darte cuenta. No tienes que invertir tiempo en aprender la sintaxis del
lenguaje, ya que te lo dan todo hecho en forma de bloques para que
puedas empezar de lleno a hacer tus propias creaciones.
Si eres usuario de iPhone o iPad, esto te va a encantar. Swift
Playgrounds es una app para aprender a programar en Swift, el
lenguaje con el que se desarrollan las apps de Apple. Aparte de aprender
un lenguaje, es fantástico para aprender lógica. Jugando con un
personaje dado, nos van enseñando las bases de la programación, así
como distintos cuadros informativos donde nos explican detalladamente
lo que estamos aprendiendo. Esta app es gratuita y también tiene una
versión de escritorio para iMac, aunque no funciona tan bien como sus
hermanas.
Lightbot : Code Hour. Esta app está disponible para iOS, Android y
navegadores compatibles con flash. Con una interfaz sencilla y unos
controles básicos, vamos a tener que resolver rompecabezas para poder
mover a nuestro personaje a través del tablero que nos presentan. Las
acciones de movimiento que te permite realizar son todas las acciones
lógicas que puedes utilizar mientras programas una aplicación real, por lo
que el entretenimiento y el aprendizaje están asegurados. Es gratuita y
tiene una versión de pago para los más pequeños de la casa.

También podría gustarte