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Comunicado a la comunidad universitaria

Como estudiantes de la Universidad del Tolima implicados/as en los hechos ocurridos en


los días 27 y 28 de abril, tanto de la modalidad presencial y distancia, quienes nos
disponíamos a asistir a la Feria Internacional del Libro de Bogotá (FILBO-2023), queremos
manifestar la inconformidad ante una serie de eventos irregulares respecto a la
convocatoria, logística, contratación del complejo automotor y además, los comunicados de
parte del Consejo Directivo del IDEAD y la Dirección Universitaria referentes a la salida
de campo mencionada.

Como primer aspecto a discutir, en la convocatoria del evento se presentaron algunas


irregularidades. Su difusión transcurrió inadecuadamente, debido a que los medios
utilizados para ello no tuvieron el mejor alcance para comunicar a toda la comunidad
universitaria en general, por lo que la publicidad pasó desapercibida. Si bien la universidad
comunicó la convocatoria a través de la página Sello Editorial Universidad del Tolima,
adscrito a la Vicerrectoría de Investigación - Creación, Innovación, Proyección Social y
Extensión, es evidente que dicha página no cuenta con una cantidad de seguidores
representativa respecto a la totalidad del estudiantado de la Universidad del Tolima. Por lo
cual sugerimos que las futuras convocatorias se realicen por los canales institucionales y los
correos estudiantiles. También cuestionamos los criterios de selección para participar en la
FILBO. La universidad tenía una disponibilidad de 240 cupos, sin embargo, recibió
alrededor de 500 solicitudes. Por lo que, para seleccionar los y las asistentes se implementó
un “filtro” y se tuvo en cuenta el orden de inscripción, según lo menciona el correo de
“Publicaciones UT” con asunto de INFORMACIÓN PARA ASISTIR A LA FILBO 2023.
Sin embargo, se encontró en los diferentes testimonios de los estudiantes, quienes se
inscribieron a fecha límite del evento, sí lograron ser beneficiados y quienes lo hicieron en
un lapso de tiempo prudente, no quedaron seleccionado/as. A su vez, también hubo
personas que aparecían dos veces en los listados y otras que no se inscribieron y aun así les
habilitaron un cupo.
Atendiendo esta irregularidad y poca transparencia por parte de la administración de la
universidad al momento de la organización, solicitamos que se esclarezcan bajo qué
criterios se hizo la selección. Dado que presuntamente pareciera ser una organización
interna que no contempla lo expuesto en el correo de “Publicaciones UT”.
Como segundo tema, la poca gestión-organización y la ineficacia del tercero contratado
para cubrir el transporte del evento, permitió:
1. El día 27 de abril sobraron alrededor de 5 cupos por bus y gracias a la desorganización
presentada se imposibilitó saber con exactitud quiénes habían desistido de su cupo sin
previo aviso y así poder ocupar sus lugares.
Sumado a esto, en el trayecto de vuelta Bogotá - Ibagué, el bus 3 que contrató la
universidad desafortunadamente sufre una avería a la 1 am del 28 de abril en plena variante
sobre la vía rápida bajo fuertes lluvias. Dentro del bus ocurrió aparentemente un problema
eléctrico que ocasionó que el vehículo expulsara humo en su interior, lo que llevó al
estudiantado a salir del vehículo en las condiciones climáticas difíciles que acontecían.
Algunos estudiantes testificaron que cuando llegó la grúa a auxiliar el automotor, el
conductor desconocía informaciones básicas del vehículo, lo que llevó a la comunidad
académica presente a cuestionarlo y por consiguiente, a la empresa misma contratada, pues
deja en entrevisto el poco profesionalismo de su personal. Esto les llevó a buscar
alternativas por cuenta propia para poder llegar a la universidad, por fortuna una profesora
presente contactó al conductor de uno de los otros buses para que este recogiese al grupo de
estudiantes que estaban en la variante para posteriormente dejarlos en la universidad.
2. El día 28 de abril, uno de los buses se presentó al lugar manifestando una falla que le
impidió salir, sin embargo, resaltamos que incluso si no se hubiese presentado tal falla, los
buses habilitados por la universidad no alcanzaban a cubrir los 120 cupos asignados para
ese día, dado que solamente habilitaron dos buses grandes con capacidad de 38 personas y
una Mini Vans con capacidad para 16 personas. Ante la falla presentada del bus, algunos/as
estudiantes decidimos realizar una vía de hecho con el fin de garantizar que todos/as
pudiéramos asistir a la FILBO. Los estudiantes de presencial en todo nuestro derecho a la
protesta, iniciamos una cadena humana impidiendo la salida de los buses, donde les
pedimos a quienes estaban dentro de estos, tanto de presencial y distancia, que se bajaran y
apoyaran la vía de hecho. Algunos estudiantes de la modalidad a distancia que estaban en el
bus 1 se acercaron a la cadena humana para solicitar de forma déspota y en un tono
ofensivo que les permitiéramos el paso del vehículo en el que estaban. Desde su perspectiva
es entendible la solicitud, sin embargo, la forma despectiva en la que se acercaron
imposibilitó un diálogo ameno, ya que señalamientos como "egoístas, niños inmaduros sin
obligaciones" eran sus argumentos de peso para considerar que los estudiantes de
modalidad presencial tenían la total disponibilidad de reprogramar la salida, sin tomar en
cuenta que al igual que ello/as los estudiantes ajustaron sus agendas y sus economías para
participar en la FILBO. Situación que permitió sulfurar aún más a los estudiantes que
estaban protestando.
Luego de cerrar la entrada a la universidad como medida de hecho más notoria, exigiendo
la presencia con solución oportuna de la administración para así asegurar la asistencia de
todas y todos los implicados, se propició una ardua conversación entre los participantes de
la vía de hecho con el contratista de los buses quien menciona como solución, que podía
llevar una parte de los cupos ese día y el 29 de abril a los faltantes, recalcando que era
necesario tomar los cupos porque no podría cubrir la totalidad de estos al día siguiente.
Acordamos tomar la propuesta del contratista y nos dispusimos a abordar el bus de 38 y la
vans de 16 puestos, no sin antes establecer comunicación con personas del IDEAD para que
también tomarán algunos cupos. Finalmente, asistimos 52 personas entre ambas
modalidades.

Con esta narrativa no buscamos señalar a ningún grupo de estudiantes (independientemente


de sus modalidades), pues todos tenían sus razones justificables y entendibles. Solo
resaltamos que a raíz de la serie de inconvenientes presentados tanto de un lado como del
otro, teníamos los ánimos caldeados. Más bien buscamos demostrarle a la administración
que gracias a su falta de organización se presentaron altercados, malentendidos y riesgos a
la integridad física que podrían haberse evitado si la gestión del encuentro se hubiese hecho
con las medidas correspondientes y la contratación responsable, acordes a una universidad
pública de alta calidad.
Por último, hacemos el llamado a la dirección universitaria para que atienda el presente
comunicado y cada una de sus consideraciones y también a la comunidad estudiantil les
llamamos a la unión sin distinción y estar atentos y atentas a situaciones como esta que se
presentan con irregularidades en la universidad.

Este comunicado surge de la indagación de los hechos y posterior reunión con las y los
afectados reales por la situación de parte del Representante de la Facultad de Educación y
la Representante de la Facultad de Ciencias Humanas y Artes, por lo cual, cuenta con el
respaldo ferreo de mencionadas representaciones estudiantiles, pensando siempre en la
estudiantina y el derecho a esclarecer los hechos y dar la versión de lo sucedido y además,
realizaR exigencias pertinentes.

Atentamente,

38 Estudiantes afectados/as del IDEAD y presencial.


Santiago Ortiz
Representante Estudiantil De La Facultad de Educación
Correo: dsortizs@ut.edu.co
Daniela Santana
Representante Estudiantil De La Facultad de Ciencias Humanas y Artes
Correo: dichilatras@ut.edu.co

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