Habilidades Motrices Locomotoras: Estas habilidades implican el movimiento del
cuerpo a través del espacio. Son esenciales para el desplazamiento y la movilidad. Algunas de las habilidades locomotoras básicas incluyen: Caminar: Desplazarse a una velocidad constante utilizando una secuencia alterna de pasos. Correr: Moverse a mayor velocidad que al caminar, con un patrón de pasos alternados. Saltar: Despegar del suelo con uno o ambos pies y aterrizar de manera controlada. Girar: Rotar el cuerpo alrededor de un punto fijo. Trepar: Moverse verticalmente utilizando manos y pies para superar obstáculos. Reptar: Desplazarse sobre el suelo utilizando los brazos y las piernas. 2. Habilidades Motrices Manipulativas: Estas habilidades implican el control y la manipulación de objetos. Son cruciales para actividades que requieren precisión y coordinación mano-ojo. Algunas de las habilidades manipulativas básicas incluyen: Lanzar: Arrojar un objeto con fuerza y precisión hacia un objetivo específico. Atrapar: Capturar un objeto que se mueve en el aire. Patear: Golpear un objeto en movimiento con el pie. Golpear: Impactar un objeto con una parte del cuerpo (por ejemplo, golpear una pelota con la mano). Botear: Controlar un objeto (como una pelota) con las manos o los pies para mantenerlo en movimiento. 3. Habilidades Motrices Estabilizadoras: Estas habilidades se centran en el control del cuerpo y el equilibrio. Son fundamentales para mantener la postura y la estabilidad durante el movimiento y las actividades físicas. Algunas de las habilidades estabilizadoras básicas incluyen: Equilibrio: Mantener una postura estable en una o dos piernas. Marcha en el sitio: Realizar movimientos de caminar sin desplazarse, manteniendo el equilibrio. Flexión y extensión: Doblar y estirar diferentes partes del cuerpo, como las rodillas o los brazos. Rotación: Girar partes específicas del cuerpo mientras se mantiene el equilibrio. Inclinación: Inclinar el cuerpo hacia los lados sin perder el equilibrio.