AJUSTE INFLACIONARIO El fenómeno inflacionario vivido en Venezuela, a partir de la década del 70; ha sido afectado por las políticas y medias económicas, las cuales, no han sido enfrentadas efectivamente por los gobernantes, quienes no han podido controlar debidamente ciertos factores de la economía nacional, agravándose el proceso inflacionario durante las últimas cinco décadas. El INPC se obtiene de la información recogida en las ciudades de Barquisimeto, Barcelona, Puerto La Cruz, Caracas, Ciudad Guayana, Maracaibo, Maracay, Maturín, Mérida, San Cristóbal y Valencia, además de una muestra representativa conformada por ciudades medianas, pequeñas y áreas rurales. Mensualmente las encuestadoras del Banco Central de Venezuela (BCV) y el Instituto Nacional de Estadística (INE) investigan 362 rubros, recopilan 300.000 precios, visitando unos 22.000 establecimientos ubicados en todo el país. Además, para la elaboración del INPC es necesario incluir la Encuestas de Presupuestos Familiares (EPF) que determina los ingresos, egresos del componente familiar, características de la vivienda que habitan, como otras variables económicas y sociales, y la Encuestas de Precios (EP) que identifican los productos específicos a investigar en cada uno de los establecimientos que conforman la muestra, incluyendo todo tipo de establecimiento, tanto formales como informales. Desde 2014 el Banco Central de Venezuela (BCV) ha presentado retraso en la publicación del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) lo que se ha agravado sustancialmente para el 2015, en el ocaso del tercer trimestre el BCV aún no ha publicado el INPC del mes de enero. La razón de esto se desconoce, todo lo que podamos decir al respecto entra en el terreno de la especulación. Lo que sí está claro es que esto genera varios inconvenientes a diferentes actores de la economía nacional. Por ejemplo, para los contadores, quienes necesitan este índice, por lo menos, para dos cosas: Una, preparar el ajuste por inflación fiscal según lo establece la Ley de Impuesto Sobre la Renta y dos, para realizar la re expresión de los estados financieros (EEFF) conforme a las normas contables. El SENIAT ha evacuado respuestas a diversas consultas de contribuyentes y recomienda que se use el último índice publicado por el BCV, para efecto el reajuste por inflación fiscal. Por otro lado la ausencia de los INPC ha despertado un debate entre los contadores de como re expresar los EEFF por efecto de la inflación. Y las propuestas van desde lo conservador a otras fuera de todo sentido común. Por su parte la Federación de Colegios de la República Bolivariana de Venezuela (FCCPRBV) a través de su Comité Permanente de Principios de Contabilidad, responde con una reforma al “BA VEN NIF-2: Criterios para el reconocimiento de la inflación en los estados financieros preparados de acuerdo con VEN-NIF” la cual permite estimar el INPC a través de dos procedimientos excluyentes: En el párrafo 18 establece el primero de ellos: “Cuando el INPC no esté disponible para uno o más meses y una entidad deba presentar información financiera ajustada por los efectos de la inflación en una fecha que incluye meses afectados por la referida ausencia de publicación, la entidad utilizará el o los INPC estimados, utilizando para su mejor estimación una metodología similar a la aplicada por el BCV y para ello deberá obtenerlos mediante estudios realizados por profesionales expertos en la materia, de forma que reflejen la evolución de los precios de una canasta de bienes y servicios representativa del consumo familiar. Algunas características para la fiabilidad de un INPC estimado por este método son: El estudio de la variación de los precios de un amplio rango de bienes y servicios; Considerar las mismas ciudades para las que el BCV emite el INPC desagregado; La metodología utilizada para su estimación debe ser igual en cada mes; El valor determinado debe estar libre de sesgo; Debe ser actualizado mensualmente” El segundo procedimiento: “Cuando la entidad, luego de evaluar la aplicabilidad del procedimiento descrito en el párrafo 17, concluya que es impracticable o generaría un costo o esfuerzo desproporcionado, procederá a estimar el o los INPC no emitidos por el BCV, a través del siguiente procedimiento simplificado: -Calcular el promedio simple de la variación porcentual correspondiente a los últimos tres (3) INPC, publicada por el BCV en su página Web. -Ajustar el INPC estimado según el literal “b”, por el promedio determinado conforme al literal «a». El valor así obtenido, será el INPC estimado para el segundo mes cuyo valor oficial no esté disponible. Este procedimiento se aplicará sucesivamente, hasta completar la estimación para todos los INPC para los meses que sean requeridos” La doctrina y la práctica contable han desarrollado tres métodos de ajuste para medir los efectos de la inflación: a) El Método del Nivel General de Precios o de Precios Constantes. Es la aplicación integral de un índice que permite la estimación de precios constantes en la economía. b) El Método de Costos Corrientes o del Nivel Específico de Precios. Es la revalorización de activos mediante índices específicos de precios, u otros criterios. Este método no es aplicable en Venezuela. c) El Método Mixto. Es una combinación de los dos métodos anteriores. Consiste en la aplicación integral de un índice general de precios a todas las partidas de los estados financieros (Método del Nivel General de Precios) y luego reemplazar los valores corrientes aplicables (Método de Costos Corrientes). Se entiende por inflación el deterioro del poder adquisitivo de un signo monetario empleado como patrón de medida en el intercambio de bienes o servicios, incrementando el valor monetario de los mismos con lo cual disminuye el poder de compra de esa moneda La adopción del ajuste por inflación por parte de la Ley de Impuestos Sobre la Renta no es más que un reconocimiento legal de la inflación y sus afecciones sobre los distintos elementos que conforman este impuesto, por ejemplo el hecho de que la reforma de 1994 se haya incluido la unidad tributaria tanto el COT como en la LISLR como parámetro de medición y actualización de multas, sanciones, escalas progresivas de ingreso, etc., y que entre otras leyes en la reforma de 1999 la Ley de Sucesiones, Donaciones y DRC y la Ley de Timbre Fiscal hayan adoptado la Unidad Tributaria solo quiere decir que el sistema tributario reconoce su vulnerabilidad ante el flagelo inflacionario. El Ajuste por Inflación no solo reconoce la revalorización de activos y pasivos no monetarios tal como lo dice la norma sino que también reconoce de manera no expresa, la pérdida de valor de los monetarios con el ajuste de patrimonio neto inicial, esto es, al sumar algebraicamente activos menos pasivos (sin discriminación entre monetario y no monetarios) incluye los valores monetarios que desde el inicio del ejercicio han estado expuestos a la inflación, ganado en el caso de los pasivos monetarios y perdiendo en el caso de los activos. Como es sabido, el efecto de ajustar el patrimonio neto inicial es una disminución de la renta gravable, lo que permite concluir que en la renta fiscal grabada está reconocida tanto la ganancia como la perdida de los valores monetarios activos y pasivos. El Boletín BA VEN NIF 2 en su última versión establece: “Cuando el INPC no esté disponible para uno o más meses y una entidad deba presentar información financiera ajustada por los efectos de la inflación en una fecha que incluye meses afectados por la referida ausencia de publicación, la entidad deberá estimar la inflación acumulada para tales meses, considerando para ello su mejor estimación de acuerdo con las variables que más adelante se señalan. Para esta estimación la entidad deberá basarse en las variables consideradas en la determinación del índice, el cual deberá ser realizado por un profesional experto en la materia». Algunas variables a considerar son: 1. El estudio de la variación de los precios de un amplio rango de bienes y servicios 2. La metodología utilizada para su estimación debe ser igual en cada mes 3. El valor determinado debe estar libre de sesgo 4. Debe ser actualizado mensualmente Cuando sea aplicado el procedimiento antes indicado, la entidad deberá revelar en las notas de los estados financieros un análisis de sensibilidad y la siguiente información que permita a los usuarios: a. Evaluar la naturaleza de la estimación contable. b. Entender la metodología empleada para su determinación. c. Evaluar los posibles efectos sobre los estados financieros, que se deriven de los cambios en dicha estimación contable. d. Evaluar la información de los profesionales expertos que elaboraron el estudio que determinó la inflación estimada. e. Obtener información en caso que el estudio utilizado haya sido preparado por algún organismo que agrupe a entidades de un mismo sector económico o geográfico. (Párrafo 17) Mientras no se encuentre disponible el INPC calculado por el BCV, la Federación de Colegios de Contadores Públicos de la República Bolivariana de Venezuela, solo a los efectos de preparación de información financiera de propósitos generales, indicará los estudios hechos por profesionales, firmas u organismos calificados, disponibles públicamente y que cumplan con las variables indicadas en el párrafo 17 de este Boletín. Cuando la entidad haya seleccionado un estudio, deberá considerar las revelaciones indicadas en dicho párrafo 17. Recientemente, a finales de mayo 2019, el Banco Central de Venezuela (BCV) publicó los Índices Nacionales de Precios al Consumidor (INPC) para los años 2016, 2017 y 2018, así como, los relativos a los cuatro primeros meses del 2019. En noviembre 2019, la Federación de Colegios de Contadores Públicos de Venezuela (FCCPV) aprobó la Versión 4 del Boletín de Aplicación de Normas de Información Financiera N°2 (BA VEN – NIF N°2) “Criterios para el reconocimiento de la inflación en los estados financieros preparados de acuerdo con VEN-NIF”. Veamos los aspectos más resaltantes, al día de hoy, de ambas publicaciones: Fecha de publicación de los estados financieros La publicación de los índices oficiales, Índices Nacionales de Precios al Consumidor, por parte del BCV, debe analizarse a la luz de lo contenido en la BA VEN NIF 4 “Determinación de la fecha de autorización de los estados financieros para su publicación en el marco de las regulaciones contenidas en el Código de Comercio Venezolano” que establece que la fecha de autorización para la publicación de los estados financieros puede ser: 1. La que esté determinada formalmente en los procedimientos internos de la entidad o en sus estatutos; o 2. La fecha en que los administradores u otro ente autorizado, entreguen los estados financieros a una unidad interna de control, supervisión o revisión; a un ente externo o al Comisario, lo que ocurra primero. Estados financieros al 31 de diciembre de 2018 Lo expresado en el punto 1 reviste especial importancia para las empresas venezolanas que estaban en proceso de preparación de sus estados financieros de cierre al 31 de diciembre 2.018, ya que si la publicación de los Índices Nacionales de Precios al Consumidor (INPC) es anterior a la emisión de los mismos, la publicación de los INPC por parte del BCV debe considerarse una modificación a las estimaciones de cierre y requiere el uso de los indicadores oficiales para reflejar la variación en los precios. Cambios en las estimaciones contables El registro de los cambios en las estimaciones contables se hace de manera “prospectiva”, es decir, incluyendo los efectos de las variaciones, en el resultado del período afectado por dicho cambio. El cálculo de la inflación: una estimación contable El cálculo de la inflación es una estimación contable y un cambio en sus cifras, no requeriría la reestructuración de los estados financieros de períodos previos, de acuerdo a lo establecido en la NIC 8. Inflación y normativa contable No existe normativa contable específica para regular variaciones en la estimación de la inflación o en la metodología para su determinación. Métodos para registrar los cambios en las estimaciones Según el BA VEN – NIF N°2 – Versión 4, existen dos métodos para registrar los cambios en las estimaciones de inflación: 1. Mantener las estimaciones de inflación previamente determinadas y utilizadas desde la ausencia de la publicación de los INPC por parte del BCV, y aplicar en el año 2018 las nuevas variaciones porcentuales de la inflación. 2. Reemplazar las estimaciones de inflación utilizadas desde la fecha de la ausencia de publicación de los INPC por parte del BCV, por las nuevas estimaciones de inflación determinadas siguiendo alguno de los párrafos vigentes en la versión 4 del BA VEN-NIF N°2 (párrafo 17 o párrafo 18 y, en última instancia, el párrafo 19). Sólo para fines comparativos, la información financiera del año 2017 será recalculada empleando las nuevas estimaciones de inflación. Impacto de los cambios en las estimaciones contables dentro de los estados financieros Debido al peso específico que estos cambios tienen en la preparación de los estados financieros, cada gerencia debe evaluar, cuidadosamente, el impacto que tendrá sobre sus cifras la utilización de los nuevos Índices Nacionales de Precios al Consumidor (INPC). Para ello, recomendamos evaluar los siguientes puntos: 1. Calcular la variación en los Resultados Monetarios de cada Ejercicio (REME) 2. Desglosar el impacto detallado en las partidas no monetarias tales como: cuentas por cobrar y pagar con cláusulas de reajustabilidad, inventario, propiedad planta y equipo y patrimonio. Revelaciones adicionales Se deben verificar los requerimientos de revelación adicional, ante un cambio de estimación contable, establecidos en la Norma Internacional de Contabilidad (NIC) 8 y la Sección 10 de las NIIF (Normas Internacionales de Información Financiera) para las Pequeñas y Medianas Empresas (PYMES). Así como, los requerimientos de información a revelar cuando se prepara información financiera es expresada por inflación (NIC 29 y Sección 31 de las NIIF para las PYMES).