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El sueño del pongo

Acto 1: llegada a la hacienda


Narrador: Un hombre de aspecto miserable, con ánimo débil, encamina a la hacienda de su patrón
para cumplir la labor de pongo, al patrón le causa gracia su aspecto decaído

Pongo: patroncito mío he llegado ya

Patrón: por fin llegaste bastardo

(voltea a verlo)

Patrón: ¡Ja! Qué clase de animal patético llego a mi hacienda, ¿qué porquería es esta?

(el pongo baja la cabeza y se arrodilla ante el patrón besando su mano)

Pongo: patroncito mío solo déjeme trabajar por favor

con la apariencia que tienes no puedes hacer mucho

Patrón: con la apariencia que tienes no es que puedas hacer mucho, por lo menos sabrás lavar
ollas ¡ponte a trabajar, mandón llévate a esta basura fuera de mi vista!

Mandón: claro señor mío

Acto 2: objetivo de burla


(el pongo limpia el piso y el patrón llega)

Patrón: eres igual a un perro, tonto y como un animal ,¡ladra, ladra! Que eres perro ponte en 4
patas y ponte de costado

(el pongo se siente humillado y trata de ladrar)

Patrón: (ríe estrepitosamente: en tono burlón) alza las orejas ahora, vizcacha vizcacha eres

(acaba la escena)

(de nuevo en escena el pongo se encuentra barriendo)

Cocinera: pobre hombre, huérfano de huérfanos; hijo del viento de la luna es el frio el de su
mirada, Pobre hombre triste es de ser él; que nuestro Dios tenga piedad de usted

(la cocinera deja su plato en la mesa y se persigna a rezar por el)

Narrador: incluso a la hora de rezar es humillado

(todos oran el ave maria y el pongo se arrodilla con ellos)

Patron: tu pequeño animal (lo agarra de la nuca y lo aparta ) quien le enseño a mi mascota a rezar
eres solo una vizacacha no mereces estar a mi lado
Acto 3: el sueño en si
Narrador: aquella mañana el pongo hablaría por fin para dirigirse al patrón

Pongo: patroncito mío, quiero hablar con usted patroncito

Patrón: ¿acaso tu hablaste?

Pongo: patroncito mío señor mío, pido permiso para contarle lo que me he soñado

Patrón: habla pues

Pongo: los dos éramos hombres muertos al mismo tiempo frente a nuestro gran padre San
Francisco

San Francisco: levántense hijos míos miren en donde están

Pongo: en ese momento nuestro padre nos miró de pies a cabeza durante un largo rato como
pesando nuestros corazones y entonces hablo

San francisco: Ahora reconozcan sus pecados que estos mismos los llevaran a la eternidad

Patrón: qué esperas sigue sigue

Pongo: después ordeno

San Francisco: que venga ante mí el ángel más bello y joven de todos

Ángel bello: en que le puedo servir señor mío es un placer estar ante usted

San Francisco: tráeme una copa de oro que esta contenga la miel más fina y transparente cubre a
este hombre con el

Ángel bello: Así será señor mío

Pongo: y el ángel te recubrió con la miel brillando como el oro

Patrón: así tenía que ser, ¡pero continua!

San Francisco: que venga el ángel mas ordinario, débil y viejo de todos

Ángel débil: en que te ayudo padre

San Francisco: tráeme una lata de gasolina y que esté llena de excremento humano y cubre a este
hombre rápido y como puedas

Ángel débil: así será señor mío

Pongo: entonces el ángel me cubrió desordenadamente con el excremento como barro en una
pared

Patrón: así tenía que ser …. ¡continua!

Pongo: nos volvimos a ver otra vez ante nuestro padre


San Francisco: Lo que los ángeles han hecho ya está hecho ahora lámanse entre ustedes por largo
rato como castigo y recompensa de sus acciones

(el ángel débil rejuvenece)

San Francisco: en cuanto a ti hijo mío encárgate de que mi labor se cumpla

Ángel débil: así será padre

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