Considerando las recomendaciones vertidas en la declaración de Caracas respecto a la

reestructuración de la atención psiquiátrica ligada a la Atención Primaria de Salud, ya que la

atención psiquiátrica convencional no permite alcanzar los objetivos compatibles con una
atención comunitaria, descentralizada, participativa, integral, continua y preventiva.

“Las personas con padecimiento mental tienen derechos a vivir en la comunidad cerca de sus
seres queridos, a decidir sobre su tratamiento, a un trabajo y a una vivienda digna, pero
fundamentalmente a no ser estigmatizados y excluidos de los sistemas de salud y de la
comunidad. En este sentido es importante reafirmar que ninguna persona debe estar condenada a
vivir en un hospital”.

Tomando en cuenta la problemática de las poblaciones indígenas y las consecuencias adversas

de la urbanización desorganizada de las grandes ciudades que se han incrementado
notablemente, los servicios de salud mental deben afrontar nuevos desafíos técnicos y culturales
que han hecho más evidentes en los últimos años la vulnerabilidad psicosocial y estado crítico en
que se encuentran los servicios de salud mental de nuestro país, que requieren un cambio radical
del modelo asistencial, basado en Hospital Psiquiátrico y su reemplazo por alternativas
comunitarias de atención centradas en Atención Primaria.

Existen experiencias exitosas en algunos países que sirven de referencia para la OMS en sus
acciones globales, tales como la reforma de la atención psiquiátrica en Brasil y la reforma en
Chile, cabe destacar la integración de salud mental en la Atención Primaria de Salud y el
desarrollo de servicios de salud mental infantojuveniles en Cuba; El modelo Nacional Miguel
Hidalgo de atención en salud mental en México; el desarrollo de servicios de salud mental
basado en el trabajo de enfermeras calificadas en Belice y Jamaica; la atención a grupos
vulnerables en el Salvador, Guatemala y Nicaragua; y el desarrollo de un sistema de salud mental
descentralizado en Panamá.

En consecuencia, con el fin de sumarnos a la reforma de la atención psiquiátrica y a la mejora de

los servicios de la atención de personas con enfermedades mentales se realizan las presentes
acciones que promueven la organización de servicios comunitarios de salud mental que
garanticen el cumplimiento de las recomendaciones vertidas por la Organización Mundial de la
Salud, como lo son; a) capacitar el recurso humano en Salud Mental y Psiquiatría apuntando a un
modelo cuyo eje pasa por el servicio de salud comunitaria, b)salvaguardar, invariablemente, la
dignidad personal y los derechos humanos y civiles, c) propender a la permanencia del enfermo
en su medio comunitario…etc.