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Este poema celebra la belleza natural y la rica historia cultural de Arequipa, Perú. Describe los imponentes volcanes que rodean la "Ciudad Blanca" y destaca el Centro Histórico y su Plaza de Armas. También menciona los petroglifos en Sabandía que cuentan historias del pasado, y celebra a Arequipa como cuna del rocoto y su gente. Concluye expresando el profundo amor del autor por esta ciudad y sus paisajes que lo han acogido como su morada.
Este poema celebra la belleza natural y la rica historia cultural de Arequipa, Perú. Describe los imponentes volcanes que rodean la "Ciudad Blanca" y destaca el Centro Histórico y su Plaza de Armas. También menciona los petroglifos en Sabandía que cuentan historias del pasado, y celebra a Arequipa como cuna del rocoto y su gente. Concluye expresando el profundo amor del autor por esta ciudad y sus paisajes que lo han acogido como su morada.
Este poema celebra la belleza natural y la rica historia cultural de Arequipa, Perú. Describe los imponentes volcanes que rodean la "Ciudad Blanca" y destaca el Centro Histórico y su Plaza de Armas. También menciona los petroglifos en Sabandía que cuentan historias del pasado, y celebra a Arequipa como cuna del rocoto y su gente. Concluye expresando el profundo amor del autor por esta ciudad y sus paisajes que lo han acogido como su morada.