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DECLARACIÓN DE FE

DE LAS
IGLESIAS QUE INTEGRAN LA
ASOCIACIÓN BAUTISTA
MISIONERA MEXICANA

ARTÍCULO DÉCIMO NOVENO


LA DOCTRINA DE
LA RESURRECCIÓN
MAESTRO

VERSÍCULO CLAVE:

“20 Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de


los que durmieron es hecho. 21 Porque por cuanto la muerte entró
por un hombre, también por un hombre la resurrección de los
muertos”
1ª Corintios 15:20-21.

OBJETIVO:

Que el alumno reconozca el hecho de la resurrección del Señor


Jesucristo. Que reconozca asimismo el hecho de la resurrección de
los justos y los impíos, su momento y propósito para cada una.
ARTÍCULO DÉCIMO NOVENO
Creemos que las Escrituras enseñan que Cristo resucitó de entre
los muertos y ascendió corporalmente al cielo (Hechos 1:9-11; 1ª a
los Corintios 15:4-8; 2ª a los Corintios 4:14); creemos, asimismo,
que todos los muertos, tanto los justos como también los injustos,
se levantarán de sus sepulcros (Daniel 12:2; Juan 5:28-29; Hechos
24:15), o de los lugares donde estén (Apocalipsis 20:13), en su
orden (1ª a los Corintios 15:20-24), efectuándose una reunión del
alma y el cuerpo (Lucas 24:15; Juan 14:3; 1ª a los Tesalonicenses
4:13-17); que la resurrección se efectuará por el poder de Dios
(Hechos 5:30; 26:8; Romanos 8:11); que la resurrección será
dividida en dos partes, la primera exclusivamente para los salvos
y la segunda para los perdidos (Salmos 1:5; Daniel 12:2; Juan 5:28-
29; 2ª a los Tesalonicenses 1:6-10); estas dos resurrecciones serán
separadas por un espacio de mil años (Apocalipsis 20:4-6; 12-15);
que los creyentes que vivieren hasta la segunda venida de Cristo
no tendrán que morir, sino que serán tomados y transformados,
hechos semejantes al cuerpo glorificado del Señor (Mateo 24:37-
42; 1ª a los Corintios 15:51-53; 1ª a los Tesalonicenses 4:15-17; 1ª de
Juan 3:1-2).

INTRODUCCIÓN

“Si se le pidiera que describiera el evento de la Resurrección de


Jesucristo sin usar palabras, usando sólo signos de puntuación,
¿qué signo de puntuación escogería para hacer esa descripción?
Tal vez para usted la Resurrección es una coma. Le hace
detenerse, hacer una pausa, escuchar, pero eso es todo. Tal vez
usaría un punto y aparte porque para usted, la Resurrección de
Jesucristo es un receso, un gran punto. Usted pensaba que se
entusiasmaría con ella, pero más bien le parece un ritual vacío.
Usted se siente como que no está dentro, sino fuera; como un
simple espectador.
Antes de la Resurrección de Jesús, para Sus discípulos la vida
parecía como un punto final. Jesucristo había muerto; había sido
sepultado. Era el fin de sus expectativas. Pero un momento

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después comenzaron a llegar las noticias acerca de una tumba
vacía; el punto ya no era un punto, ahora era un signo de
interrogación. Eso era peor que un punto. Ahora empezaban las
dudas. ¿Dónde está Él? Ellos estaban perplejos. Los guardias
habían desaparecido, la piedra había sido removida. Él ya no
estaba en la tumba, Y si Él ya no estaba allí, ¿en dónde estaba
ahora?

Y el ángel habló: “… ¿Por qué buscáis entre los muertos al que


vive? ¡No está aquí, sino que ha resucitado!”. Recuerden lo que
les dijo cuando todavía estaba con ustedes en Galilea: “Es
necesario que el Hijo del hombre sea entregado en manos de
hombres pecadores, y que sea crucificado, y resucite al tercer día.”
¡Por supuesto que los discípulos se acordaron! Ahora los puntos
han desaparecido. Se han quitado los signos de interrogación.
¡Ahora hay un enorme signo de exclamación!

De esto es de lo que se trata la Resurrección, de una exclamación


de gratitud y alabanza por la Resurrección de Jesucristo, por la
salvación que Su victoria nos trajo sobre la muerte y por la
esperanza de que nosotros también resucitaremos para vida
eterna”.
--Joe LoMussio, “Si yo muero, después viviré”.
MAS DE 1001 ILUSTRACIONES
Y OTRAS CITAS DE SWINDOLL.
Charles R. Swindoll. Ed. Grupo Nelson, 2007, pp. 464-465.

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I. CRISTO Y LA RESURRECCIÓN
El Cristianismo es el único que reclama ser aceptado apoyándose
en la resurrección de su fundador. Si alguna otra religión
reclamara para sí tal cosa, invitaría al fracaso. Haga la prueba de
ello con otras religiones. De antemano sabemos que será
imposible.

1. El texto de 1ª a los Corintios 15:14, dice: “Y si Cristo no


resucitó, vana es entonces nuestra predicación, vana es
también vuestra fe.” Medite en esas palabras por un momento,
y responda: ¿Cuál es la gran declaración hecha por el apóstol
Pablo en este pasaje, y cuál es la gran verdad que establece
acerca de la fe y la resurrección de Jesucristo?
RESPUESTA: Pablo establece claramente que la existencia del
cristianismo depende de la verdad literal de la resurrección de
Jesucristo. El que Jesucristo resucitase de entre los muertos y
emergiese de la tumba al tercer día constituyen hechos
fundamentales de la fe cristiana.

Para Pablo “Si Cristo no resucitó. . . aun estáis en vuestros


pecados. . . Entonces también los que durmieron en Cristo
perecieron” (1ª a los Corintios 15:17-18). Si se quita la resurrección
del mensaje de Pablo, su mensaje carece de sentido. La
resurrección de Jesucristo no es un apéndice del mensaje de la
Palabra de Dios, sino que es una parte esencial.

2. La importancia de la doctrina de la resurrección es evidente


por el papel prominente que juega en la predicación de los
apóstoles. ¿Qué escribieron los apóstoles Pedro y Pablo
respecto de la resurrección de Jesucristo?
A. El testimonio de Pedro:
a. Hechos 2:24. “… al cual (Jesucristo) Dios levantó, sueltos los
dolores de la muerte, por cuanto era imposible que fuese retenido
por ella.”
RESPUESTA: Que Dios lo resucitó, liberándolo de los dolores de
la muerte, porque la muerte no podía tenerlo dominado.

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b. Hechos 2:32. “A este Jesús resucitó Dios, de lo cual todos
nosotros somos testigos.”
RESPUESTA: Que Dios lo resucitó y de ello “todos somos
testigos”
c. 1ª de Pedro 1:21. “… y mediante el cual (Cristo) creéis en
Dios, quien le resucitó de los muertos y le ha dado gloria, para
que vuestra fe y esperanza sean en Dios.”
RESPUESTA: Que por medio de Cristo, resucitado y glorificado
por Dios, han venido los creyentes a poner su fe y esperanza
en Dios
B. El testimonio de Pablo:
a. Hechos 13:30-31. “30 Mas Dios le levantó de los muertos. 31 Y
él se apareció durante muchos días a los que habían subido
juntamente con él de Galilea a Jerusalén, los cuales ahora son
sus testigos ante el pueblo.”
RESPUESTA: Que Dios lo resucitó y se apareció a los suyos, que
ahora eran testigos.
b. 1ª a los Corintios 15:8. “Y al último de todos, como a un
abortivo1, me apareció a mí.”
RESPUESTA: Que Jesucristo resucitado se apareció a él que era
un niño en la fe, nacido anormalmente

1 ἐκτρώματι - ektrōmati. Pablo se describe a sí mismo con esta palabra para


indicar que así como no se consideraba „normal‟ a un bebé prematuro, así
tampoco podía él considerarse del mismo nivel que los otros apóstoles. En los
tiempos de Augusto César, la gente común en Roma llamaba “abortivos” a los
„senadores supernumerarios‟ que ingresaban al Senado a través de favores
políticos o porque, literalmente, sobornaban a las autoridades para conseguir el
puesto. Esos „senadores‟ eran muy poco valorados, por lo que eran llamados
„abortivos‟. Pablo se describe a sí mismo como “abortivo”, dando a entender
con ello que se consideraba un „apóstol supernumerario‟, uno que llegó
tardíamente y, por lo tanto, era poco digno de ser llamado apóstol, del mismo
nivel que los otros apóstoles.
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c. Filipenses 3:21. “El cual transformará el cuerpo de la
humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la
gloria suya, por el poder con el cual puede también sujetar a sí
mismo todas las cosas.”
RESPUESTA: Que el Señor Jesucristo cambiará nuestro cuerpo
para que sea como Su propio cuerpo resucitado y glorificado.

La creencia en los conceptos proclamados por este tipo de


predicación fue lo que llevó al fortalecimiento de la iglesia
cristiana. La creencia en la resurrección de nuestro Señor
Jesucristo fue la base de la fe de la iglesia en sus años posteriores a
su origen. “Y con gran poder los apóstoles daban testimonio de la
resurrección del Señor Jesús, y abundante gracia era sobre todos
ellos”. Hechos 4:33. El testimonio de este gran hecho de la fe
cristiana se dio insistentemente en medio de fiera oposición. No se
convirtió en un tema de controversia porque el sepulcro era bien
conocido y el hecho de que estaba vacío hubiera podido utilizarse
como evidencia incontrovertible. El cristianismo encontró una
base firme para su desarrollo histórico en este hecho de la
resurrección. No hubo simplemente “un mensaje de resurrección”,
sino también “una fe en la resurrección”.

II. LAS CLASES DE RESURRECCIÓN


Es fácil percibir que la doctrina de la resurrección es una doctrina
cardinal de la Palabra de Dios. En el ministerio de los apóstoles,
después de la resurrección de Cristo, el tema de Su resurrección
dominó casi totalmente su predicación, con la excepción de Su
muerte. En más de cuarenta pasajes que hablan de la resurrección
en el Nuevo Testamento, con la posible excepción de Lucas 2:34,
se hace referencia a una resurrección literal, nunca en un sentido
espiritual, o figurado, y ese evento tiene que ver con la
resurrección del cuerpo físico. Esto se da por sentado y no es lo
que se discute en este momento.

En las Sagradas Escrituras se predicen dos clases de resurrección


en el programa de Dios.
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3. ¿Qué diferentes nombres se le dan a la primera de estas dos
resurrecciones?
a. Lucas 14:13-14. “13 Mas cuando hagas banquete, llama a los
pobres, los mancos, los cojos y los ciegos; 14 y serás
bienaventurado; porque ellos no te pueden recompensar; pero
te será recompensado en la resurrección de los justos.”
RESPUESTA: La resurrección de los justos.

b. Juan 5:28-29. “28 No os maravilléis de esto; porque vendrá


hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz;
29 y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida,

mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación.”


RESPUESTA: La resurrección de vida.

c. Filipenses 3:10-11. “10 A fin de conocerle, y el poder de su


resurrección, y la participación de sus padecimientos, llegando
a ser semejante a él en su muerte, 11 si en alguna manera
llegase a la resurrección de entre los muertos.”
RESPUESTA: La resurrección de entre los muertos.

d. Hebreos 11:35. “35 Las mujeres recibieron sus muertos


mediante resurrección; mas otros fueron atormentados, no
aceptando el rescate, a fin de obtener mejor resurrección.”
RESPUESTA: Una mejor resurrección.

e. Apocalipsis 20:5-6. “5 Pero los otros muertos no volvieron a


vivir hasta que se cumplieron mil años. Ésta es la primera
resurrección. 6 Bienaventurado y santo el que tiene parte en la
primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad
sobre estos, sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y
reinarán con él mil años.”
RESPUESTA: La primera resurrección.

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Estas referencias muestran que hay una parte del programa de la
resurrección que tiene diferentes nombres. Estas frases sugieren
una separación; una resurrección de una parte de aquellos que
están muertos, resurrección que dejará a los no resucitados sin
cambio alguno mientras que los resucitados experimentarán una
transformación completa.

Esta resurrección, generalmente conocida como “la primera


resurrección”, pero que podría llamarse más claramente la
“resurrección de vida” (Juan 5:29), es esa parte del programa de
resurrección en que los individuos son levantados para vida
eterna.

4. La Escritura habla acerca de otra parte del programa de


resurrección que tiene que ver con la resurrección de los
perdidos, ¿con qué nombres se identifica?
a. Juan 5:24. “De cierto, de cierto os digo: El que oye mi
palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá
a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.”
RESPUESTA: La resurrección de condenación.

b. Apocalipsis 20:5. “Pero los otros muertos no volvieron a


vivir hasta que se cumplieron mil años. Ésta es la primera
resurrección.”
RESPUESTA: Los muertos que no volvieron a vivir.

c. Apocalipsis 20:11-12. “11 Y vi un gran trono blanco y al que


estaba sentado en él, de delante del cual huyeron la tierra y el
cielo, y ningún lugar se encontró para ellos. 12 Y vi a los
muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros
fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la
vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban
escritas en los libros, según sus obras.”
RESPUESTA: El juicio del “gran trono blanco”.

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Por cuanto la primera resurrección se efectuará antes que
comience el reinado de mil años (Apocalipsis 20:5), “los muertos”
a los que se refiere el pasaje de Apocalipsis 20:12 sólo pueden ser
aquellos que se quedaron atrás después de que tuvo lugar “la
resurrección de entre los muertos” (es decir, la primera
resurrección), e indudablemente son aquellos que serán
levantados para condenación eterna.
5. ¿Qué enseñan los siguientes pasajes respecto a la
resurrección?
a. Juan 5:28, 29. (Ya transcrito en la página 7).
Hechos 24:15. “… teniendo esperanza en Dios, la cual ellos
(los judíos fariseos) también abrigan, de que ha de haber
resurrección de los muertos, así de justos como de injustos.”
RESPUESTA: Que todos los muertos, tanto los justos como
también los injustos, se levantarán de sus sepulcros.

b. Apocalipsis 20:13. “Y el mar entregó los muertos que había


en él; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que
habían en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras.”
RESPUESTA: Que todos los muertos se levantarán del lugar de
donde estén.

c. Hechos 26:8. “¡Qué! ¿Se juzga entre vosotros cosa increíble


que Dios resucite a los muertos? Romanos 8:11. “Y si el
Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús, el que
levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también
vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en
vosotros.”
RESPUESTA: Que la resurrección se efectuará por el poder de
Dios.

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d. Juan 5:28-29. (Ya transcrito en la página 7).
Salmos 1:5. “Por tanto, no se levantarán los malos en el juicio,
ni los pecadores en la congregación de los justos.”
RESPUESTA: Que la resurrección será dividida en dos partes, la
primer exclusivamente para los salvos y la segunda para los
perdidos.

e. Apocalipsis 20:5-6. (Ya transcrito en la página 8).


Apocalipsis 20: 12-15. “12 Y vi a los muertos, grandes y
pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro
libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron
juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los
libros, según sus obras. 13 Y el mar entregó los muertos que
había en él; y los muertos y el Hades entregaron los muertos
que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus
obras. 14 Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de
fuego. Ésta es la muerte segunda. 15 Y el que no se halló
inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego.”
RESPUESTA: Que estas dos resurrecciones serán separadas por
un espacio de mil años.

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III. EL PROGRAMA DE DIOS
PARA LA RESURRECCIÓN.
6. Lea cuidadosamente el pasaje de 1ª a los Corintios 15:22-24.
“22 Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo
todos serán vivificados. 23 Pero cada uno en su debido orden2:
Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida,
24 Luego el fin, cuando entregue el reino al Dios y Padre,

cuando haya suprimido todo dominio, toda autoridad y


potencia.” ¿Cuál es la enseñanza precisa de Pablo respecto a
la resurrección en este pasaje?
RESPUESTA: Que los muertos se habrán de levantar en
diferentes grupos, mediando entre ellos un cierto intervalo.

7. ¿Cuál es el orden de la resurrección en el texto citado


anteriormente?
RESPUESTA: Primero: “Cristo, las primicias”. Segundo: “luego
los que son de Cristo en su venida”. Tercero: “luego el fin…”.

Nosotros ya sabemos que entre “Cristo, las primicias” y “luego,


los que son de Cristo en su venida” ya han transcurrido alrededor
de 2,000 años; y la Escritura nos informa que habrá un intervalo
de 1,000 años entre la resurrección de “los que son de Cristo, en su
venida” (también llamada „la primera resurrección‟) y la
resurrección de los que queden en sus tumbas después de esa
primera resurrección. Podemos deducir, entonces, que NO habrá
una resurrección simultánea de los justos y de los impíos.

2 La palabra “orden” es traducción del griego „τάγματι‟ („tágmati‟), y es una


expresión militar que se refiere a la manera ordenada en que un ejército está
organizado en „compañías‟, “batallones”, “brigadas” y “divisiones”. La
palabra habla de que algo “ha sido arreglado” o “ubicado en un orden
establecido”. Ésta es la única vez que la palabra es usada en el Nuevo
Testamento.
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8. ¿Con qué autoridad dividimos las Escrituras y
determinamos intervalos entre los eventos? Lucas 4:16-20a.
RESPUESTA: Tenemos la autoridad del mismo Señor Jesucristo.

9. En Lucas 4:16-20ª leemos que Él vino a la sinagoga en


Nazaret el sábado y se levantó a leer, como era la costumbre.
Se le dio el libro del profeta Isaías, y habiendo abierto el libro,
halló el lugar donde estaba escrito: “18 El Espíritu del Señor
está sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas
nuevas a los pobres, me ha enviado a sanar a los quebrantados
de corazón; a pregonar libertad a los cautivos, y vista a los
ciegos a poner en libertad a los oprimidos; 19 a predicar el año
agradable del Señor.

Este texto es una cita de Isaías 61:1-2, pero el pasaje de Isaías no


termina ahí. Si comparamos el texto de Isaías con la cita de Lucas
veremos que el Señor detuvo su lectura en una “coma”, y dejó sin
leer la frase siguiente, que dice “y el día de venganza del Dios
nuestro”.

¿Por qué detuvo el Señor su lectura en ese sitio? Porque aún no


había llegado el momento de declarar “el Día de la Venganza”.
Esa “coma” ha marcado una pausa de casi 2,000 años, y la seguirá
marcando hasta el día “cuando se manifieste el Señor Jesús desde
el cielo con los ángeles de su poder, en llama de fuego, para dar
retribución a los que no conocieron a Dios, ni obedecen el
evangelio de nuestro Señor Jesucristo” (2ª a los Tesalonicenses 1:7-
8).

10. ¿Qué objeción se ha hecho al texto bíblico que menciona un


intervalo entre la resurrección de los justos y la de los impíos?
Apocalipsis 20:4-5.
RESPUESTA: Que es el único pasaje en el que se menciona un
intervalo entre la resurrección de los justos y la de los impíos,
y que no es correcto basar tan importante hecho en un solo
pasaje que se encuentra en un libro lleno de simbolismos.

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Como respuesta decimos que, si bien es cierto que el libro de
Apocalipsis es un libro lleno de símbolos la mayor parte de ellos
está explicado en ese mismo libro; además, no debemos aceptar
que se trate de un libro misterioso pues es precisamente “La
revelación de Jesucristo”, y es el único libro de la Biblia que
promete bendición al que lo lee (Apocalipsis 1:1-3). Este libro
puede ser interpretado literalmente en su mayor parte.

Pero aun suponiendo que Apocalipsis 20:4-6 fuera el único lugar


en el que se menciona la existencia de un intervalo entre la
resurrección de los justos y la de los impíos, eso no sería suficiente
motivo para dudar de su veracidad. El hecho más maravilloso de
la vida de nuestro Señor Jesucristo, el anuncio de Su nacimiento
virginal, descansó sobre una sola profecía del Antiguo
Testamento, hasta que finalmente llegó el momento en que quedó
cumplido. El pasaje al que se hace referencia es Isaías 7:14, que
dice: “He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y
llamará su nombre Emmanuel.”

Pero no tenemos que depender sólo de Apocalipsis 20:4-6 para


demostrar que va a haber una resurrección “de entre los muertos”.
Hay una buena cantidad de pasajes que son totalmente
inexplicables, a no ser que se acepte la existencia de un espacio de
tiempo entre la resurrección de los justos (de entre los muertos) y
la de los impíos (de los muertos).

11. ¿Cuál fue la respuesta de Jesús a los Saduceos, quienes le


habían cuestionado de quién sería esposa la mujer que lo había
sido de siete hermanos, sucesivamente, en este mundo? Lucas
20:34-36.
RESPUESTA: Le respuesta de Jesús comenzó de esta manera: “34
Los hijos de este siglo se casan y se dan en casamiento…”

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La palabra “siglo” viene de “αἰῶνος - aiōnos”, que también puede
traducirse como “edad”. Al hablar de “los hijos de este siglo”,
Jesús se está refiriendo a las personas que están viviendo una vida
mortal e imperfecta, y que al morir dejan todo tras de sí. Está bien
que en esta edad se casen, y vivan una vida normal de personas
casadas y tengan descendencia para perpetuar la especie y que
cuando ellos mueran sus herederos disfruten lo que ellos les
dejen.

Pero Jesús continúa diciendo, “35 mas los que fueren tenidos por
dignos de alcanzar aquel siglo (refiriéndose a la vida eterna, al
mundo venidero), y la resurrección de entre los muertos (la
primera resurrección, la resurrección de vida, que sólo los
muertos en Cristo disfrutarán. Ver Pregunta No. 3), ni se casan ni
se dan en casamiento.” Ya no habrá necesidad de esa práctica, por
lo que dice en el siguiente versículo.

“36 Porque no pueden ya más morir (Y si no pueden morir, no


habrá necesidad de casarse para procrear hijos y perpetuar la
especie), pues son iguales a los ángeles (en espiritualidad, pureza
e inmortalidad), y son hijos de Dios (adoptados mediante la
gracia, aunque aún no se ha manifestado lo que llegarán a ser en
la eternidad), al ser hijos de la resurrección. Así como Cristo
Jesús fue declarado hijo de Dios por Su Resurrección, también lo
serán los „hijos de Dios‟ cuando sean levantados de entre los
muertos para comenzar a disfrutar la vida eterna.

12. ¿De qué resurrección habla el Señor Jesús en Lucas 14:14,


cuando dice “pero te será recompensado en la resurrección de
los justos”?
RESPUESTA: En este pasaje Jesús habla de una resurrección
especial a la que llama “la resurrección de los justos”. Ésta es
una resurrección „de entre los muertos, y es sólo para los
justos; debe referirse a la primera resurrección.

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13. ¿Cómo le llama el escritor de la Epístola a los Hebreos a
esta resurrección? Hebreos 11:35.
RESPUESTA: El escritor de la epístola menciona una “mejor
resurrección”, y es de notarse que los apóstoles predicaron la
“resurrección de entre los muertos”, a través de Cristo Jesús.

No hay duda alguna que Pablo creía en la resurrección de los


muertos, y que él esperaba volver a vivir en algún momento
futuro; sin embargo, en Filipenses 3:11 él dice “si en alguna
manera llegase a la resurrección de entre los muertos”. Esto nos
lleva a creer que Pablo tenía en mente una resurrección especial.

14. ¿Qué tenía en mente el apóstol Pablo al escribir el pasaje de


1 Tesalonicenses 4:15-17?
RESPUESTA: Aquí Pablo habla acerca de la resurrección de “los
muertos en Cristo”, quienes resucitarán primero; luego habla
acerca del “traslado” (o arrebatamiento, también conocido
como „rapto‟) de los que hayamos quedado (vivos), en el
momento en que se inicie el programa de la segunda venida de
Cristo.

15. ¿Qué explica ampliamente el apóstol Juan en Juan 5:28-29?


RESPUESTA: Este pasaje explica que la resurrección de los justos
y la de los impíos no sólo tendrán lugar en momentos
diferentes sino que también serán diferentes por lo que toca a
su carácter o destino.
También explica perfectamente bien que “los que hicieron lo
bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo
malo, a resurrección de condenación”. Y luego, leemos en
Apocalipsis 20:12-15 que los que sean levantados a “resurrección
de condenación” deberán aparecer ante el Juicio del Gran Trono
Blanco, que sus nombres “no serán hallados en el Libro de la
Vida”, y que serán arrojados al “Lago de Fuego”, que es la muerte
segunda.

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EL PROGRAMA DE DIOS PARA LA
RESURRECCIÓN

Que los muertos se habrán de levantar en diferentes grupos,


mediando entre ellos un cierto intervalo, es anunciado de una
manera precisa en 1ª a los Corintios 15:22-24. “Porque así como en
Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados.
Pero cada uno en su debido orden:”
La palabra traducida como “orden”, viene del griego τάγμα3 y es
una expresión militar cuyo significado primario es “aquello que
ha sido arreglado” o “una cosa ubicada en su orden”. En el texto
citado anteriormente, el apóstol Pablo procede a señalar el orden
de la resurrección, cuando dice,
1. Cristo, las primicias;
2. luego, los que son de Cristo en su venida.
3. Luego el fin”
Nosotros ya sabemos que entre “Cristo, las primicias” y “luego,
los que son de Cristo en su venida” ya han transcurrido cerca de
2,000 años; y la Escritura nos informa que habrá un intervalo de
1,000 años entre la resurrección de “los que son de Cristo, en su
venida” (también llamada „la primera resurrección‟) y la
resurrección de los que queden en sus tumbas después de esa
primera resurrección. Podemos establecer, entonces, que no habrá
una resurrección simultánea de los justos y de los impíos.
Pero alguien podría preguntar: “¿Con qué autoridad dividen
ustedes la Escritura y determinan intervalos entre los eventos?”
Tenemos la autoridad de Cristo mismo. En Lucas 4:16-20 leemos
que Él vino a la sinagoga en Nazaret el Sábado y se levantó a leer,

1 La palabra “orden” es traducción del griego „τάγματι‟ („tágmati‟), y es una


expresión militar que se refiere a la manera ordenada en que un ejército está
organizado en „compañías‟, “batallones”, “brigadas” y “divisiones”. La
palabra habla de que algo “ha sido arreglado” o “ubicado en un orden
establecido”. Ésta es la única vez que la palabra es usada en el Nuevo
Testamento.

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como era la costumbre. Se le dio el libro del profeta Isaías, y
habiendo abierto el libro, halló el lugar donde estaba escrito:
“18 El Espíritu del Señor está sobre mí, Por cuanto me ha ungido
para dar buenas nuevas a los pobres, Me ha enviado a sanar a los
quebrantados de corazón; a pregonar libertad a los cautivos, y
vista a los ciegos; A poner en libertad a los oprimidos; 19 a
predicar el año agradable del Señor.
Ahora bien, la cita de Isaías (61:1-2) no termina ahí. Si
comparamos el texto de Isaías con la cita de Lucas veremos que el
Señor detuvo su lectura en una “coma”, y dejó sin leer la frase
siguiente, que dice “y el día de venganza del Dios nuestro”.
¿Por qué detuvo el Señor su lectura en ese sitio”? Porque aún no
había llegado el momento de declarar “el Día de la Venganza”.
Esa “coma” ha marcado una pausa de casi 2,000 años, y la seguirá
marcando hasta el día “cuando se manifieste el Señor Jesús desde
el cielo con los ángeles de su poder, en llama de fuego, para dar
retribución a los que no conocieron a Dios, ni obedecen el
evangelio de nuestro Señor Jesucristo” (2ª a los Tesalonicenses 1:7-
8).
También se ha objetado que Apocalipsis 20:4-5 es el único pasaje
en el que se menciona un intervalo entre la resurrección de los
justos y la de los impíos, y que no es justo basar tan importante
hecho en un solo pasaje que se encuentra en un libro lleno de
simbolismos. Como respuesta decimos que si bien es cierto que el
libro de Apocalipsis es un libro lleno de símbolos, la mayor parte
de ellos está explicado en ese mismo libro; además, no debemos
aceptar que se trate de un libro misterioso pues es precisamente
“La revelación de Jesucristo”, y es el único libro de la Biblia que
promete bendición al que lo lee (Apocalipsis 1:1-3). Este libro
puede ser interpretado literalmente en su mayor parte.
Pero aun y suponiendo que Apocalipsis 20:4-6 fuera el único lugar
en el que se menciona la existencia de un intervalo entre la
resurrección de los justos y la de los impíos, eso no sería suficiente
motivo para dudar de su veracidad. El hecho más maravilloso de
la vida de nuestro Señor Jesucristo. Su nacimiento virginal, hasta

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el momento en que quedó cumplido descansó sobre una sola
profecía del Antiguo Testamento. “He aquí que la virgen
concebirá, y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emmanuel.”
(Isaías 7:14)
Pero no tenemos que depender sólo de Apocalipsis 20:4-6 para
demostrar que va a haber una resurrección “de entre los muertos”.
Hay una buena cantidad de pasajes que serían totalmente
inexplicables, excepto que se suponga, o se dé por sentada, la
existencia de un espacio de tiempo entre la resurrección de los
justos (de entre los muertos) y la de los impíos (de los muertos).
Por ejemplo, en la respuesta que dio Jesús a los Saduceos, quienes
le habían preguntado de quién sería esposa aquella que lo había
sido de siete hermanos, sucesivamente, en este mundo, les dijo: “35
mas los que fueren tenidos por dignos de alcanzar aquel siglo y la
resurrección de entre los muertos, ni se casan, ni se dan en
casamiento. 36 Porque no pueden ya más morir, pues son iguales a
los ángeles, y son hijos de Dios, al ser hijos de la resurrección”
(Lucas 20:35-36).
Ésta es una declaración muy importante. La palabra “siglo”,
usada en Lucas 20:35, viene de “αἰῶνος - aiōnos”4, demuestra que
Jesús está hablando de una cierta clase de muertos, que van a ser
levantados antes del Milenio, y que estos “no pueden ya más
morir”; es decir, para ellos ya no habrá segunda muerte. ¿Por qué?
Porque son iguales a los ángeles, y son hijos de Dios (por haber
nacido de nuevo), y son hijos de la resurrección (de entre los
muertos).
En Lucas 14:14, Jesús habla de una resurrección especial a la que
llama “la resurrección de los justos”. Ésta es una resurrección „de
entre los muertos, y es sólo para los justos; debe referirse a la
primera resurrección‟. En Hebreos 11:35 el escritor menciona una
“mejor resurrección”, y es de notarse que los apóstoles predicaron
la “resurrección de entre los muertos”, a través de Cristo Jesús.

4
αἰών, ῶνος, ὁ se refiere a una edad, un ciclo (de tiempo), con especial
referencia a la presente edad, en contraste con la futura edad, y una de la serie
de edades que se extienden hacia el infinito.
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No hay duda alguna que Pablo creía en la resurrección de los
muertos, y que él esperaba volver a vivir en algún momento
futuro; sin embargo, en Filipenses 3:11 él dice “si en alguna
manera llegase a la resurrección de entre los muertos”. Esto nos
lleva a creer que Pablo tenía en mente esa resurrección especial de
los justos, de los que murieron en el Señor.
Lo que Pablo tiene en mente nos queda claro al leer 1ª a los
Tesalonicenses 4:15-17, en donde él habla de la resurrección de
“los muertos en Cristo”, quienes resucitarán primero; luego habla
acerca del “traslado” (o arrebatamiento, también conocido como
„rapto‟) de los que hayamos quedado (vivos), en el momento en
que se inicie el programa de la segunda venida de Cristo. Y como
Cristo viene para introducir el Milenio, entonces este evento debe
preceder al Milenio, y debe ser una resurrección “de entre” los
muertos, pues el resto de los muertos no volverá a vivir sino
pasados los mil años.
Pero la resurrección de los justos y la de los impíos no sólo
tendrán lugar en momentos diferentes sino que también serán
diferentes por lo que toca a su carácter o destino. Juan 5:28 y 29
explican esto perfectamente bien al decir que “los que hicieron lo
bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo
malo, a resurrección de condenación”. Y leemos en Apocalipsis
20:12-15 que los que sean levantados a “resurrección de
condenación” deberán aparecer ante el Juicio del Gran trono
Blanco, y que sus nombres “no serán hallados en el “Libro de la
Vida”, y que serán arrojados al “Lago de Fuego”, que es la muerte
segunda.
P. S. Le invitamos a examinar cuidadosamente, a la luz de los
conceptos anteriormente presentados, la gráfica titulada
“PROGRAMA DE DIOS PARA LA RESURRECCIÓN” aparece en el libro:
VERDAD DISPENSACIONAL. EL PLAN Y PROPÓSITO DE DIOS A
TRAVÉS DE LAS EDADES. POR CLARENCE LARKIN. De venta en: Rev.
Clarence Larkin Est. P.O. Box 334, Glenside, Pa. 19038. U. S. A.
Derechos de autor registrados en 1918. Edición ampliada y
mejorada, registrada en 1920.

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