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UNIVERSIDAD CATÓLICA SANTA ROSA

FACULTAD DE DERECHO
ESCUELA DE DERECHO – PUERTO CABELLO

PODCAST
LA RENUNCIA DE LA HERENCIA, SEPARACIÓN DE LOS
PATRIMONIOS DEL CUJUS Y DEL HEREDERO, LA COLACIÓN Y LA
IMPUTACIÓN, RELACIONES ENTRE EL HEREDERO Y LOS
TERCEROS, Y RELACIONES ENTRE COHEREDEROS

Nombre y Apellido: Carlos Javiel Griman Ramírez


Cedula de Identidad: V.- 8.612.791
Materia: Derecho de Familia y Sucesiones
Corte III. Actividad 2

https://drive.google.com/file/d/1IemXiThQLnUMcO4Q8BrzDwYsMrMHfxz9/vie
w?usp=share_link
PUERTO CABELLO, ENERO, 2023
RENUNCIA DE LA HERENCIA
El que renuncia a su herencia se convierte en un extraño y olvida su
herencia, pero si luego la quita, ya no es un extraño. La desheredación no implica
herencia y viceversa, por lo que la persona desheredada tiene derecho a reclamar
la herencia. En el caso de herencia testamentaria, la parte entregada se transfiere a
sus coherederos o herederos legales.
Las restricciones nunca aparecen en las herencias y testamentos. La
renuncia o desheredación se trata como si nunca hubiera sido llamado y no quita
el derecho del renunciante a reclamar la herencia a su favor. La desheredación
debe ser inequívoca y debe constar en documento público. Si el heredero renuncia
a la herencia, significa que su relación como heredero termina y aún no se ha
confirmado su desheredación voluntaria. Una de las características distintivas de
la renuncia o desheredación es que debe ser libre, completa e incondicional.

SEPARACION DEL PATRIMONIO DEL CAUSANTE DE LA


HERENCIA (CUJUS) Y DEL HEREDERO
Al dividir los bienes, también para evitar confusiones, los acreedores del
testador y los acreedores del legatario que buscan herederos no pueden oponerse a
los bienes del difunto. Los acreedores y legatarios también pueden reclamar la
separación incluso si los herederos han reclamado un interés en la propiedad.
Dado que el divorcio otorga a los acreedores y legatarios privilegios sobre los
acreedores que aún no han sido atendidos por el difunto, lo que significa que
pueden cobrar deudas o recibir bienes, las primeras personas tienen más
derechos).

COLACIÓN Y LA IMPUTACIÓN
Los descendientes de los coherederos del ascendiente común, con quienes
otros han convenido la herencia, quedan obligados por ciertas contribuciones
generosas recibidas por el difunto en vida, a los demás herederos en parte
proporcional. Cuando se trata de herederos, hay que pensar en al menos dos, los
que van a heredar, porque si hay uno solo, entonces el número no importa. La

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finalidad de la colación es lograr la igualdad de trato entre los coherederos hijos o
descendientes del causante de la herencia (cujus) a los fines de la partición de los
bienes hereditarios (artículo 1083 CCV).
La doctrina presenta dos puntos de vista de la imputación:
Imputación Propia: La persona jurídica que solicite la reducción de
legados y órdenes testamentarias realizadas por otros (coherederos o extraños) del
difunto está obligada a calcular cuánto ha recibido del difunto en forma de
donaciones o herencias, y a dividir su patrimonio legal. (Artículo 1.108 CCV).
Imputación Verdadera: Es un modo de colacionar, tal como se evidencia
en el Art. 1.097 CCV: “La colación se hace, sea presentando la cosa en especie,
sea que se impute su valor a la respectiva porción, a elección del que hace la
colación”.

RELACION ENTRE LOS HEREDEROS Y LOS TERCEROS


Los herederos están obligados a defender sus derechos frente a los terceros
de la herencia. Todas las personas o hechos reales correspondientes al difunto son
las consecuencias lógicas de la adquisición de tales derechos.

RELACIONES ENTRE LOS COHEREDEROS


Las comunidades de herencia se forman tanto en el caso de la sucesión
testamentaria como en el de los morosos, siempre que algunos sean invitados a
ellas. Una vez que una comunidad está así integrada, sus miembros pueden optar
por permanecer en ese estado legal o terminar la división. Los herederos están
sujetos al régimen de indivisibilidad hasta el final de la operación de división.
El estado de comunidad creado entre los coherederos que eran
copropietarios de la herencia en el momento de la muerte del difunto se extingue
por partición o partición de la comunidad. La práctica tradicional de la disolución
de la comunidad de herederos consiste en dividir la herencia indivisible, acabando
así con los complicados fenómenos sucesorios que comenzaron con la muerte del
causante de la herencia (cujus) y continúan reclamando y obteniendo derechos
sucesorios.

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