Está en la página 1de 5

PRINCIPIO DE LA

RELATIVIDAD DE LA
SENTENCIA
JOSÉ ALFREDO CANO VELÁZQUEZ

26 DE OCTUBRE DE 2022

PABLO GUILLERMO PADILLA BARRAGÁN


Contenido
¿Qué es relatividad?...........................................................................................................................1
¿Qué es una sentencia?.....................................................................................................................1
Antecedentes.....................................................................................................................................1
El principio de la relatividad de la sentencia......................................................................................3
Conclusión..........................................................................................................................................3
Argumentos........................................................................................................................................4
FUENTES CONSULTADAS....................................................................................................................4

¿Qué es relatividad?
“La relatividad alude a aquello que posee la cualidad de ser relativo, por oposición a lo que es
absoluto; o que es lo que es, en relación a una persona, cosa o circunstancia, por ejemplo:
considerar que algo es malo o bueno en sí mismo, en su esencia, es una postura absoluta,
mientras la relatividad del concepto toma en cuenta que algo bueno puede no ser tan bueno en
determinados momentos, como el caso de decir la verdad, que si ofende o lastima, debemos
expresarla con cuidado”. (DeConceptos, S.F)1

¿Qué es una sentencia?


“La sentencia es la resolución definitiva en la que se pone fin a un proceso judicial, y es dictada por
el juez o tribunal solucionando definitivamente el conflicto”. (Trujillo, 2020) 2

Antecedentes.
Con independencia del reconocimiento que debe dársele a don Manuel Crescencio Rejón, quien
instituyó el principio de relatividad de las sentencias de amparo a nivel local, en el Proyecto de
Constitución del Estado de Yucatán en 1840; el mencionado principio de la relatividad de las
sentencias de amparo es generalmente conocido a nivel federal como "Fórmula Otero", porque el
artículo 19 del Proyecto que formuló como voto particular don Mariano Otero Mestes al proyecto
de la mayoría de los que conformaban la Comisión de Constitución del Acta de Reformas de 1847,
dispuso sobre el particular, que la sentencia en que se decretara la inconstitucionalidad de un acto
de autoridad, solamente haría la declaratoria de mérito en el caso particular derivado del juicio,
sin que fuera posible hacer una declaración general sobre el acto de autoridad impugnado. Esa es
la base del principio en estudio y desde su implantación federal en 1847 se ha mantenido hasta
nuestros días en la dinámica del juicio constitucional, con las actuales posturas que manifiestan su
desencanto en el caso de las llamadas leyes inconstitucionales. Ese artículo 19. posteriormente,
iba a ser aprobado por la Comisión de Constitución del Congreso en el Acta de Reformas de 1847
bajo el numeral 25. (Oropeza, 2019)3

1
Don Mariano aún tenía el amargo recuerdo del Supremo Poder Conservador, creado en 1836 a
semejanza del Senado Conservador Francés. Aquel Supremo Poder tenía dentro de sus facultades
la de declarar la nulidad de las leyes o decretos. A ese poder se le consideró un superpoder con
facultades omnímodas. (Oropeza, 2019)3

EL factor antes señalado -rechazo al supremo poder conservador- fue el origen de la parte final del
artículo 25 del "Acta de Reformas de 1847”. (Oropeza, 2019) 3

Para saber qué le sucedió a la verdadera fórmula de Otero para controlar la constitucionalidad de
los actos de autoridad, es preciso que nos retornemos a lo sucedido en el Congreso Constituyente
de 1856. Al reunirse en 1856, el Congreso Constituyente (que dio a México en 1857 una nueva ley
fundamental) consideraba que la declaración de nulidad de las leyes federales y locales constituía
una “declaración de guerra de potencia a potencia” con nefastas consecuencias. (Oropeza, 2019) 3

La Comisión de Constitución, en la exposición de motivos que acompañó al proyecto


constitucional, manifestó que quien considere inconstitucional una ley deberá acudir a la Justicia
Federal:

No habrá pues, en adelante y siempre que se trate de actos inconstitucionales ya de la


Federación o ya de los estados, aquellas iniciativas ruidosas, aquellos discursos y
reclamaciones vehementes con que se ultrajaba la soberanía federal o la de los estados, con
mengua y descrédito de ambos y notables perjuicios de las instituciones, y aquellas
reclamaciones públicas y oficiales que muchas veces fueron el preámbulo de los
pronunciamientos, habrá, si, un juicio pacífico y tranquilo, y un procedimiento de formas
legales, que se ocupe de pormenores y que dando audiencia a los interesados, prepare una
sentencia, que si bien deje sin efecto en aquel caso la ley de que se apela, no ultraje ni
deprima al poder soberano de que ha nacido, sino que lo obligue por medios indirectos a
revocarla por el ejercicio de su propia autoridad. (Oropeza, 2019) 3

De esta forma, la mencionada Comisión y la asamblea constituyente de 1856, sin fundamento


lógico ni jurídico cercenaron el proyecto y la fórmula de Otero. La Comisión pretendía depurar el
federalismo teórico en el que hemos vivido desde que dicho sistema fue introducido como forma
de gobierno en nuestro país. Señala como contrario al sistema federal el procedimiento de nulidad
de la ley inconstitucional establecida en el Acta de Reformas, por provocar una declaración de
guerra de potencia a potencia. (Oropeza, 2019) 3

En 1994, con las reformas constitucionales y legales al sistema judicial mexicano, particularmente
en relación con el artículo 105 constitucional y a la ley reglamentaria de sus dos primeras
fracciones, se organizó nuevamente el sistema de control constitucional que en su momento
propuso Otero para el Acta de Reformas, aunque ahora en forma distinta. Sobre tales reformas
deben destacarse las controversias constitucionales y las acciones de inconstitucionalidad, que se
erigieron como mecanismos de control de la regularidad constitucional de las leyes mediante
resoluciones que pueden tener los deseados efectos generales; sin embargo, la circunstancia de
que sean procedimientos que no pueden iniciar los particulares produce un control parcial de la
supremacía constitucional, en la inteligencia de que la mayoría de las declaraciones de
inconstitucionalidad de leyes proviene de sentencias emitidas en juicios de amparo, y no en
controversias constitucionales o acciones de inconstitucionalidad. (Oropeza, 2019) 3

2
El principio de la relatividad de la sentencia
El artículo 107, fracción II, párrafo primero constitucional dispone que “la sentencia será siempre
tal, que sólo se ocupe de individuos particulares limitándose a ampararlos y protegerlos en el caso
especial sobre el que verse la queja, sin hacer una declaración general respecto de la ley o acto
que la motivare”. En esto consiste el carácter relativo de la sentencia de amparo, que también se
conoce como fórmula Otero. El artículo 76, párrafo primero, de la Ley de Amparo, establece que
las sentencias que se pronuncien en los juicios de amparo sólo se ocuparán de los individuos
particulares o de las personas morales que lo hubiesen solicitado, limitándose a ampararlos y
protegerlos si procediere, en el caso especial sobre el que verse la demanda, sin hacer una
declaración general respecto de la ley o acto que la motivare. El principio de relatividad limita el
efecto de la sentencia de amparo al quejoso, de manera que quien no haya promovido no puede
beneficiarse con la declaración de inconstitucionalidad del acto reclamado. Actualmente, se
reconoce que el principio de relatividad de la sentencia puede crear situaciones de inequidad o
desigualdad entre las personas; puesto que aquéllas, que, por no haber estado en posibilidad de
acudir al juicio de amparo, están obligadas a cumplir con leyes o actos de autoridad declarados
inconstitucionales. La propia Suprema Corte de Justicia ha resuelto que, por virtud del principio de
relatividad de la sentencia, el amparo no puede tener efectos erga omnes, ni para hacer una
declaratoria general de inconstitucionalidad ni para obligar al Estado a reparar sus omisiones
legislativas. (Oropeza, 2019)3

La razón que explicaba la existencia del principio de relatividad de la sentencia a saber, el respeto
a la investidura del Legislativo y que permitió, a juicio de algunos doctrinarios, que el amparo
sobreviviera durante el siglo diecinueve, ha perdido sentido en la actualidad. En efecto, a partir de
las reformas de 1994 a la Constitución, en particular a su artículo 105, las acciones de
inconstitucionalidad han hecho de la Suprema Corte de Justicia de la Nación un tribunal
constitucional con facultades para declarar, con efectos generales, la inconstitucionalidad de una
ley, lo que ha sucedido un sinnúmero de ocasiones, con absoluto respeto por parte de los órganos
legislativos del orden federal y local. La intervención judicial en los actos legislativos ya no es vista
con recelo, sino como un mecanismo democrático indispensable para el sano equilibrio de
poderes; por eso, el principio de relatividad de la sentencia de amparo ya no puede justificarse
más. La declaración de inconstitucionalidad, vía amparo, debe tener efectos generales. (Oropeza,
2019)3

El nuevo juicio de amparo, sin las limitaciones impuestas actualmente por el principio de
relatividad de la sentencia, se verá fortalecido con la declaración general de inconstitucionalidad,
la cual podría estar reservada sólo a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (como sucede con
las acciones de inconstitucionalidad) y la posibilidad de impugnar las omisiones legislativas, lo que
sin duda contribuirá a democratizar la impartición de justicia en México. (Oropeza, 2019)3

Conclusión.
El principio de relatividad ya no debe de existir, debe ser eliminado, y borrado, para no exhibir el
sistema tan desigual que hoy por hoy sigue con nosotros, desde mi muy particular e inexperto
punto de vista, pareciera que el Amparo solo se preocupa y protege a las personas que tienen los

3
recursos para poder pagar este costoso procedimiento, pues si a un particular le está afectando un
acto de la autoridad a todas luces inconstitucional, y este en vía de amparo logra protegerse de la
aplicación de dicha acto, a pesar de que se encontró que es inconstitucional, este seguirá su
aplicación para todos en general, lo cual resulta verdaderamente injusto, pues las personas que no
tienen el recurso de acudir al amparo, y a pesar de que es de saber general que el acto es
inconstitucional, esta seguirá en vigencia y aplicación, para todos los demás que caigan en el
supuesto de dicho acto de autoridad.

Argumentos.
1. Estoy en desacuerdo con el autor en seguir con la tendencia de llamar “formula Otero” al
fragmento que quedo vivo de esta, lo correcto sería decir “fragmento formula otero” ya
que como es bien sabido y como lo señalo el mismo autor: Manuel González Oropeza “la
asamblea constituyente de 1856, sin fundamento lógico ni jurídico cercenaron el proyecto
y la fórmula de Otero” en el punto de antecedentes de este trabajo, puesto que la formula
original no solo incluía la relatividad de la sentencia, si no que establecía un mecanismo
donde cualquier ciudadano en la observancia de la constitucionalidad de las leyes, y
aunque estas no le impactaran, este podía formular una petición a la cámara de
Senadores, para que si esta lo consideraba pertinente, se iniciara el trámite para anular
aquella ley.
2. Estoy de acuerdo con el autor, cuando dice que: “Actualmente, se reconoce que el
principio de relatividad de la sentencia puede crear situaciones de inequidad o
desigualdad entre las personas” puesto que los actos reclamados a pesar de ya haber sido
declarados inconstitucionales para los particulares que acudieron en vía de amparo,
siguen siendo de obligatoria aplicación para todos lo que no cuentan con el recurso
económico, el conocimiento o por cualquier otro motivo, pero resulta inconcebible que
esto siga pasando hoy en nuestros días.
3. Estoy de acuerdo con el autor, cuando señala que el juicio de amparo y la impartición de
justicia en México se verá fortalecido si exclusivamente la SCJN puede impugnar omisiones
legislativas, pues imaginar el gran cumulo de leyes que el poder legislativo debe de estar
sacando es inimaginable, por ello considero que, si hay otro filtro para que las
disposiciones no afecten a derechos de particulares, este se debe aplicar sin discusión que
valga.

FUENTES CONSULTADAS.
1. Concepto de relatividad - Definición en DeConceptos.com. (s. f.). Recuperado 24 de
octubre de 2022, de https://deconceptos.com/ciencias-naturales/relatividad
2. Trujillo, E. (2020, 3 junio). Sentencia. Economipedia.
https://economipedia.com/definiciones/sentencia.html
3. Oropeza, G. M. (2019, 16 febrero). El juicio de amparo. A 160 años de la primera sentencia,
tomo II. http://ru.juridicas.unam.mx/xmlui/handle/123456789/11972

También podría gustarte