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RESPONSABILIDAD SEXOAFECTIVA-ESI

Por décadas las generaciones se educaron con una idea de cómo debe ser su papel en
una relación sexo afectiva, la mayoría basada en el “amor romántico”, esa creencia de que
existe un amor ideal.
Sin embargo, hoy en día las relaciones van mucho más allá de esa ideología, las personas
buscan algo más, desean consolidar una relación en torno al respeto, equilibrio emocional
y cuidado mutuo que refuercen los vínculos afectivos.
Las parejas del siglo XXI prefieren la responsabilidad afectiva, la cual propone generar
vínculos diferentes y más auténticos.
De acuerdo con especialistas, la responsabilidad afectiva no solo es un término utilizado en
las relaciones afectivas, también está relacionado a cualquier vínculo sentimental como
relaciones familiares, amistosas o laborales.
Esta forma de convivencia promueve la prudencia y la reflexión sobre cómo relacionamos
mejor de manera íntima con otras personas, haciéndonos cargo de nuestros actos y
sentimientos, así como del impacto de éstos en los demás.
La naturaleza de la responsabilidad afectiva, entonces, busca proteger al otro, no para
eludir continuamente el sufrimiento, sino para evitar un sufrimiento innecesario.
Desde el punto de vista de las relaciones sexo afectivas, es una propuesta que se ha
planteado desde diferentes movimientos y teorías que tienen que ver con el proceso
de transformación de la sociedad debido a la disconformidad con los cánones de los
vínculos afectivos tradicionales.
Esta postura plantea una alternativa/ruptura de los roles tradicionales de género, es decir,
rompe el estereotipo de la tradición patriarcal en la que se coloca la relación romántica de
pareja como el centro del amor romántico, para dar relevancia a la diversidad sexual, la
perspectiva de género y los nuevos tipos de relaciones entre los seres humanos.

¿Superar el amor romántico?


“El amor romántico es una serie de códigos aprendidos y reflejados en estereotipos en
todos los medios de comunicación, asumiendo que dichos códigos representan los afectos,
como el término caballerosidad. Éste da un sentido de sacrificio entre las partes de una
relación como muestra de amor, ya que es un rol aprendido y afianzado cultural,
social e históricamente, basado en la desigualdad, violencia, imposiciones y
represiones en función de los roles de género en una relación”.
La idea del amor romántico y del romanticismo nació en Occidente. Este
comportamiento ha predominado desde hace siglos a través de la literatura, la radio, la
televisión y todos los medios de comunicaciones.
“En el contexto en el que nos encontramos actualmente es de vital importancia poder
resignificar las palabras, ya que un término fácil de pronunciar como lo es “amor” se queda
corto en comparación con el amplio significado que tiene dependiendo del contexto en el
cual se enmarque”, concluyó Georgina Romero Gaeta, licenciada y maestra en Filosofía
por la UNAM.

La resignificación del amor


Los estereotipos que se han replicado han contribuido a la representación de la forma ideal
de una relación sexo afectiva.
Actualmente al resignificar el amor y los papeles que las personas involucradas tienen en
una relación, se crea un proceso en el cual la comunicación es lo más importante generando
un vínculo más genuino, cercano y fuerte que el que ofrece la idea de amor romántico.
Al promover esta nueva forma de relación, se contribuye a erradicar la violencia entre la
pareja, uno de los grandes problemas de las sociedades.
En caso contrario, si eres víctima de irresponsabilidad afectiva, los psicólogos
recomiendan trabajar la autocompasión y la autovaloración. Una mala relación prolonga el
maltrato y afectará tu salud mental y emocional.

Qué es responsabilidad afectiva


• Hablar sobre nuestros sentimientos y expectativas sobre la relación.
• Tener una buena comunicación. También (especialmente) cuando vamos a hablar
de lo que nos molesta.
• Poner límites de mutuo acuerdo con la intención de respetarse.
• Cuidarse mutuamente.
• Entender que nuestras acciones tienen consecuencias en el otro.
Qué no es responsabilidad afectiva
• Ocultar información importante sobre nuestros sentimientos a la otra persona.
• No validar sus emociones o no permitir que las exprese.
• No ser claro o incumplir los acuerdos previamente establecidos.
• Llevar a cabo comportamientos que puedan llevar a ilusionarse a la otra persona
cuando nosotros no queremos implicarnos.
• Pretender que el otro adivine lo que siento y/o necesito.
ACTIVIDAD

a) ELABORA EN GRUPO DOS O TRES SITUACIONES DE LA VIDA DIARIA DONDE


SE VISUALICEN PRÁCTICAS QUE NO SON AFECTIVAMENTE RESPONSABLES.
EJEMPLO: GHOSTING: O FANTASMEO.
¿Qué otras conocen?
b) Investiga en grupo ¿qué es el GASLIGHTING? ¿Y por qué es peligroso?

PRÁCTICAS RESPONSABLES
1) Construir una comunicación clara y honesta
2) Asimilar las consecuencias de nuestros actos.
3) Trazar límites
4) Cuidado mutuo
5) Validar al otro
6) No engañar

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