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La energía puede presentarse en formas muy variadas, como ya vimos, pero para
nuestro estudio la mas interesante e importante es aquella que se manifiesta a través de
los fenómenos eléctricos: la energía eléctrica. En esta oportunidad veremos de que
maneras se puede producir la energía eléctrica.
Producción de electricidad
Existen numerosas formas de producir electricidad, algunas mas útiles que otras.
Veámos cuales son_
Las baterías y pilas son muy útiles en aplicaciones como alimentación de equipos
portátiles, automóviles, almacenamiento de electricidad en caso de emergencia, etc.
Centrales eléctricas
La energía eléctrica que utilizamos en nuestros hogares o que es empleada en la
industria se genera en centrales eléctricas que, en la mayoría de los casos, es producida
por alternadores movidos por distintos métodos.
Las centrales que generan la mayor parte de la energía son las denominadas “de base” y
son del tipo termoeléctrica, hidroeléctrica y nucleoeléctrica. Además de estas, existen
otras centrales que emplean energías alternativas como las eólicas, solares,
geotérmicas, mareomotrices o biocombustibles.
Centrales termoeléctricas
Las centrales termoeléctricas o térmicas utilizan la energía contenida en el vapor de
agua a presión. Una analogía sencilla consiste en usar una pava para generar vapor y
luego mover una rueda de paletas enlazada a un generador. El chorro de vapor
procedente de la pava mueve las paletas y éstas a su vez al generador. Para producir
vapor las centrales térmicas queman distintos tipos de combustibles fósiles, como
gasoil, fueloil, carbón o gas.
Estas centrales son relativamente baratas de construir, pero tienen la gran desventaja de
quemar combustibles fósiles no renovables y generar dióxido de carbono que contribuye
al efecto invernadero.
Las ventajas de las centrales de este tipo son numerosas: No requieren combustible, sino
que usan una forma renovable de energía, son limpias, pues no contaminan ni el aire ni
el agua; a menudo pueden combinarse con otros beneficios, como riego, protección
contra las inundaciones, suministro de agua, etc; y tiene costos de mantenimiento y
explotación son bajos.
Sin embargo, como desventajas podemos mencionar que su construcción lleva largo
tiempo; la disponibilidad de energía puede fluctuar de estación en estación y de año en
año y también que pueden afectar el clima.
Energías renovables
Los combustibles fósiles que se queman en las centrales térmicas no son inagotables y
además deterioran el medio ambiente. Las centrales hidroeléctricas usan un recurso
renovable, pero también tienen su impacto ambiental. Las centrales nucleares usan un
combustible que es muy abundante, pero que en algún momento se agotará, además de
ser potencialmente peligrosas en caso de desastre y generar residuos de difícil
manipulación.
Generadores eólicos: También llamados aerogeneradores usan unas grandes aspas para
convertir la energía del viento en electricidad usando un alternador.
Geotérmica: Aprovechan el agua caliente o vapor que emerge naturalmente del suelo
en algunas regiones.
Las energías renovables aportan un 20% del total, si se incluye a las centrales
hidroeléctricas, que constituyen la mayor parte de la generación dentro de este rubro
(71,1%). Le siguen la generación eólica (17,5%) que es la que mas crece en la
actualidad, la generación solar y por biomasa (5,3%), la geotérmica (0,8%) y la
mareomotriz con un aporte insignificante. Es de esperar que estos porcentajes aumenten
en los próximos años.
Fig. 2.9. Distribución del uso de distintas fuentes de energía
Los primeros hombres que habitaron la Tierra sólo consumían la energía de los
alimentos, que se procuraban a partir de la recolección de productos vegetales, la caza y
la pesca.
A partir del descubrimiento del fuego, los grupos humanos empezaron además a usar la
energía de la madera para calentarse, iluminarse, cocinar los alimentos, ayudarse en la
fabricación de utensilios y dejar sus primeras marcas en las paredes de las cavernas. Al
desplazarse en búsqueda de alimentos, los seres humanos comenzaron a utilizar
animales de carga. A partir del desarrollo de tareas de cultivo, además de la energía de
los animales, usaron la energía del agua y del viento para mover molinos.
Es decir, a medida que el ser humano buscó un mayor bienestar material, fue necesaria
una creciente transformación de energías en su propio provecho. Poco a poco se fueron
empleando herramientas y máquinas de todo tipo que ayudaran a producir los diversos
productos que se fabricaban para la vida cotidiana; máquinas que consumían más y más
energía.
Esto quiere decir que para vivir con la calidad de vida actual se requiere conseguir
energía en grandes cantidades. Necesitamos energía para cocinar, para calentarnos en
invierno, para refrescarnos en verano, para subir y bajar en los edifi cios de muchos
pisos, para curar a los enfermos, para iluminarnos, para protegernos, para trasladarnos
de un lado a otro, para producir útiles y maquinarias, para producir alimentos y para
conservarlos, para comunicarnos, para divertirnos, para construir nuestras casas,
caminos, túneles, puentes, para construir máquinas que transformen energías, etc.
Si bien no se avizora que sea posible el reemplazo sustancial de los combustibles fósiles
en el corto plazo, ni en el mediano, existen hoy algunas líneas de acción que tienen el
consenso internacional y que están encaminadas en la dirección correcta. Estas pueden
agruparse en tres. A saber:
https://youtu.be/YWEXLSjaYf0
https://youtu.be/F5_JECSana4
https://youtu.be/V0e6kgJQVco
https://youtu.be/CHzcFFOXFLk