Está en la página 1de 4

Instrucciones.

Realiza un ejercicio de composición de 3 páginas en el que uses


en el texto dos sinónimos de las siguientes palabras: casa, habitación, perro, pez,
agua, recámara, pasto, niño, drenaje, internet.

Actividad. Composición Dinámica

Título: Un Día en el Hogar, Aventuras Cotidianas.

El sol se alzó en el horizonte, tiñendo el cielo de tonos cálidos y dorados mientras


iluminaba una tranquila vivienda en las afueras de la ciudad, la residencia, con su
fachada de ladrillos rojizos y tejas oscuras, se erguía majestuosa ante la luz de la
mañana, un par de árboles frondosos se alzaban en el jardín, dotando de sombra
al terreno cubierto de un manto de hierba verde y exuberante, en el umbral de la
entrada, un niño de cabellos alborotados y ojos curiosos observaba con asombro
el inicio de un nuevo día.

La madre de la casa, con delantal y sonrisa amable, salió al jardín para darle los
buenos días a su hijo, juntos, recorrieron la vasta extensión de césped que
rodeaba su hogar, disfrutando del rocío matutino bajo sus pies, a medida que
avanzaban, se detuvieron junto a un pequeño estanque repleto de peces de
colores brillantes que nadaban juguetonamente en las aguas cristalinas, el niño,
con los ojos iluminados de emoción, exclamó: "¡Mira, mamá, los peces están
bailando!"

Tras un desayuno nutritivo en la acogedora cocina, el chiquillo se dirigió a su


recámara, un espacio lleno de juguetes y libros que reflejaban su creatividad y
pasiones, allí, pasó horas sumergido en historias de aventuras y mundos
fantásticos, dejando volar su imaginación mientras exploraba nuevos horizontes
desde la comodidad de su rincón personal.

Mientras tanto, el padre estaba ocupado en el patio trasero, realizando labores de


mantenimiento, uno de los compañeros más leales de la familia, un canino de raza
labrador llamado Max, lo seguía a todas partes, ansioso por ayudar de alguna
manera, Max correteaba alegremente, su cola moviéndose como un péndulo
mientras jugaba entre los arbustos y se refrescaba en el drenaje que conducía el
agua de lluvia lejos de la casa.

La jornada continuó con un momento de relajación en la terraza, donde la familia


disfrutó de la tranquilidad y la belleza de su entorno, el aroma de las flores y el
suave murmullo del agua en la fuente cercana creaban una atmósfera de
serenidad que invitaba a la reflexión, desde allí, se podía ver el sol sumergiéndose
lentamente en el horizonte, pintando el cielo con una paleta de colores vibrantes
antes de dar paso a la oscuridad de la noche.

A medida que la noche caía, la familia se reunió en la sala de estar, donde una
moderna televisión conectada a la web se encontraba en el centro de atención.
Juntos, exploraron las maravillas del mundo en línea, desde documentales
fascinantes sobre la vida marina hasta videos divertidos que arrancaban risas
contagiosas, el infante, con su curiosidad insaciable, planteó preguntas y buscó
respuestas en la vasta red de información que se extendía más allá de los muros
de su hogar.

Finalmente, la hora de dormir llegó y el chaval se acomodó en su cama, rodeado


de su colección de peluches y libros, mientras cerraba los ojos, se imaginó
explorando océanos profundos, corriendo por campos interminables y
descubriendo mundos digitales a través de la magia del ciberespacio, el suave
susurro del drenaje en el exterior y el suave crujido de las hojas en el jardín
cercano lo envolvieron en un reconfortante abrazo de tranquilidad.

En esta casa, en esta habitación llena de sueños, la vida se desenvolvía en una


danza continua entre la realidad y la virtualidad, entre el vínculo con la naturaleza
y la conexión con el vasto ciberespacio, cada día era una nueva aventura, una
oportunidad para explorar, aprender y crecer, tanto dentro de las paredes de la
casa como más allá de ellas.
Ya en los sueños del crío, con la sutileza de un suspiro, se vio a sí mismo en una
vasta llanura, corriendo sin fin sobre el suave manto de la hierba verde, las risas
resonaban en el aire, y el sol dorado parecía abrazar cada rincón de su ser, era
como si estuviera explorando los confines mismos de su mente, donde las
praderas interminables eran su refugio y el viento murmuraba secretos solo para
él.

La escena se transformó con la fluidez de un sueño, y ahora se encontraba


sumergido en un abismo azul profundo, los rocíos cristalinos del océano lo
rodeaban, y se dejó llevar por la corriente, rodeado de curiosas criaturas marinas
que danzaban a su alrededor, se sintió parte de un mundo que solo había soñado
antes, explorando la profundidad de los misterios subacuáticos en un éxtasis
silencioso.

Pero su aventura no se detuvo ahí, la magia de la red digital lo atrapó, llevándolo a


dimensiones que desafiaban toda lógica, se vio a sí mismo navegando por vastos
mundos virtuales, interactuando con seres pixelados y explorando paisajes
digitales que desafiaban la imaginación, cada clic era una puerta hacia lo
desconocido, y cada página web era un portal hacia una nueva experiencia.

Mientras su mente se sumergía en estas realidades alternas, un suave murmullo


llenó el aire, el alcantarillado en el exterior susurraba sus secretos líquidos,
recordándole que la conexión con la naturaleza también era parte fundamental de
su vida, aunque inmerso en mundos creados por el ingenio humano, no podía
olvidar la importancia del mundo real que lo rodeaba.

Cada día, al despertar, sabía que la casa le ofrecía más que simplemente un
techo sobre su cabeza; le brindaba un lienzo en blanco para pintar sus sueños y
convertirlos en recuerdos, la habitación era su espacio sagrado, donde la magia
brotaba de cada rincón y mientras continuaba su viaje en este mundo, nunca
olvidaría el abrazo sereno del desagüe y el suave crujido del jardín, recordándole
que, sin importar cuán lejos llegara en su imaginación, siempre podría encontrar
su lugar en la maravilla de la realidad que lo rodeaba.

También podría gustarte