DÍA DE CUNDINAMARCA

Cundinamarca, una región llena de belleza natural y riqueza cultural, ha desempeñado un papel fundamental en la
historia y el desarrollo de nuestro país. Desde tiempos ancestrales, estas tierras han sido habitadas por diversos grupos
indígenas, quienes dejaron un legado invaluable en nuestra identidad y tradiciones.

En el siglo XVI, los conquistadores españoles llegaron a estas tierras, y Cundinamarca se convirtió en parte del vasto
imperio colonial. A lo largo de los siglos, esta región fue testigo de luchas y desafíos, pero también de esperanza y
resiliencia.

El 15 de junio de 1857, Cundinamarca fue reconocido oficialmente como uno de los nueve estados soberanos que
conformaban la Granadina Confederación, precursora de lo que hoy conocemos como Colombia. Esta fecha marcó un
hito importante en el camino hacia nuestra independencia y soberanía.

El nombre de Cundinamarca nos conecta con nuestra historia ancestral. Proviene del antiguo reino de Cundinamarca, un
territorio que existió antes de la llegada de los españoles. Recordar y honrar este nombre es reconocer la diversidad y
riqueza de nuestras raíces, y la necesidad de preservar y valorar nuestra herencia cultural.

Hoy, Cundinamarca es una región próspera y dinámica que desempeña un papel crucial en el desarrollo económico,
social y cultural de Colombia. Sus paisajes cautivadores, como la majestuosidad de la Sierra Nevada de Santa Marta, las
tierras fértiles de la Sabana de Bogotá y las maravillas naturales de la región del Sumapaz, atraen a visitantes de todo el
mundo.

Pero más allá de su belleza física, lo que hace de Cundinamarca un lugar especial es su gente. Los cundinamarqueses,
con su laboriosidad, su espíritu emprendedor y su calidez humana, han contribuido enormemente al desarrollo y
progreso de nuestra nación.

En este día de Cundinamarca, debemos reflexionar sobre nuestra responsabilidad de preservar y proteger esta tierra
que nos ha dado tanto. Debemos cuidar de nuestros recursos naturales, promover la equidad y la justicia social, y
trabajar juntos para construir un futuro sostenible y próspero para todos.

Celebremos el Día de Cundinamarca con orgullo y gratitud. Reconozcamos el legado de nuestros antepasados y
honremos a aquellos que han contribuido al crecimiento y desarrollo de esta región. Aspiremos a construir una
Cundinamarca y una Colombia aún más fuertes, unidas y prósperas.

En nombre de todos los cundinamarqueses, les deseo un feliz Día de Cundinamarca. ¡Que el espíritu de esta tierra nos
inspire a seguir trabajando juntos por un futuro mejor!

¡Viva Cundinamarca! ¡Viva Colombia!

Muchas gracias.