Está en la página 1de 5

Ciclos Tectosedimentarios y Orogénicos

Con la finalidad de interpretar y ordenar las secuencias a través del tiempo geológico, se han
propuesto y definido grandes ciclos tectosedimentarios y orogénicos para el país y regiones vecinas.
Cuatro de ellas han sido establecidos para el proterozoico, y otros cuatro para la secuencia
fanerozoica.
Los ciclos proterozoicos: transamazónico y Brasiliano fueron definidos por Almeida et al. (1976), y
los ciclos San Ignacio y Sunsás por Litherland y Bloomfield (1981).
EON CICLO EDADES
FANEROZOICO| ANDINO Reciente Jurásico Inferior
SUBANDINO Triásico Superior
Carbonífero Superior
CORDILLERANO Carbonífero Inferior
Silúrico Inferior
TACSARIANO Ordovícico Superior
Cámbrico Superior
PROTEROZOICO BRASILIANO 900 – 540 Ma
SUNSAS 1280 – 900 Ma
SAN IGNACIO 1600 – 1280 Ma
TRANSAMAZONICO > 1600 Ma

Los ciclos fanerozoicos: Tacsariano, cordillerano y Subandino fueron establecidos por Suarez-
Soruco (1982, 1983), el ciclo Andino por Steinmann (1929). Posteriormente, ha sido propuesta por
Oller (1992) la subdivisión del Ciclo Andino con los numerales l y ll, división que será utilizada en
este trabajo.
La historia geológica del Gondwana Occidental, y del sector boliviano en particular, puede ser
dividida en dos grandes episodios: Pre-Andino y Andino. La separación entre ambos está dada por
la disgregación del Gondwana (ca 200 Ma).
El episodio Pre-Andino comprende como primera etapa a los ciclos proterozoicos, hasta la etapa de
apertura del océano Japetus y el cierre de los Océanos Adamastor y Mozambique, en el modelo de
Grunow, 1996, y la consiguiente formación de la triple fractura Boliviana que da origen al Rift
Contaya- Tacsaria a fines del Ciclo Brasiliano. La segunda etapa pre-andina se inicia en el
Tacsariano, es decir desde la apertura del rift hasta la separación del Godwana. El episodio Andino
se inicia hacia los 200 Ma, en el Jurásico temprano, y se extiende hasta el presente.
Episodio Pre-Andino
Durante el Arqueozoico y proterozoico, el primitivo escudo brasilero experimento una serie de
modificaciones consistentes en la acreción de nuevos terrenos (Terrenos Chuiquitanos), formación
de cuenca intracratónicas, y el desarrollo de importantes orógenos como los de San Ignacio, Sunsas,
Aguapei (Litherland et al., 1986. Meneley, 1991).
Los principales terrenos acrecionados durante el Arqueozoico y Proterozoico al Escudo Brasileño
Central (1600-2600 Ma), correspondiente a terrenos de aproximadamente 1000-1600 Ma como
Rondonia-Sunsas y Chaco-Paraná seguidos por otros terrenos más jóvenes, entre 570 y 1000 Ma,
como los de Cerro León y Chiquitos (Meneley, 1991).
Uno de los principales aspectos a definir en el futuro es el origen de la microplaca o Macizo de
Arequipa a la fecha se han propuesto dos hipótesis la primera que considera de un terreno alóctono,
posiblemente originado en el borde del Continente de Laurenfia durante la orogenia grenvillana
(Gorhrbant, 1992,Wasteneys et al., 1995), y la segunda, aceptada en el presente trabajo, así como
por Avila-Salmas (1996) y Erdtmann y Suarez-Soruco (1999), que considera que corresponde a un
terreno autóctono, dislocado del escudo Brasilero a fines del Proterozoico a partir de la “triple
fractura Boliviana”(Suarez-Soruco, 1989).
A parir del Ciclo Tacsariano, y durante la mayor parte del Paleozoico inferior, el desarrollo
extensional de los brazos N-S y NW-SE, así como la consiguiente separación de la “sub-placa
móvil” de Arequipa formo en territorio boliviano las cuencas intracratonicas de los ciclos
Brasiliano, Tacsariano y Cordillerano (Rift Contaya-Tacsaria).
Aceptando que en la placa de Arequipa corresponde a un disloque del Cratón Amazónico, en este
trabajo proponemos cambiar el nombre de Placa o Terreno de Arequipa-Belén-Antofalla,
establecido en sentido N-S tomando el nombre de esas localidades proterozoicas, por el de Macizo
de Arequipa-Huarina haciendo referencia a su extensión Oriental en territorio boliviano, por cuanto
este macizo incluir a la faja plegada de Huarina. En este sentido, el macizo de Arequipa-Huarina
estaría separado del actual Cratón de Guapore por el sistema de fallas Cordillera Real-Aiquile-
Tupiza de Sempere et al., (1988)
Durante el Ciclo Brasiliano la fractura permitió la extrusión de rocas básicas y ultrabásicas en el
centro y sur de la cuenca boliviana. Al inicio del Ciclo Tacsariano, la Cuenca fue inicialmente
pequeña de mayor desarrollo y profundidad en el sector Sur. Durante el cámbrico superior se rellena
con sedimentos clásticos marinos, gruesos y no fosilíferos. El tamaño del grano fue decreciendo
paulatinamente en el ordovícico inferior (facies flysh con graptolites). en esa época se desarrolla una
importante comunidad Marina de invertebrados con especies comunes a las de la costa este de
Laurentia (Newfounlad-Oaxana).a partir del Arenigiano se reinicia la actividad volcánica submarina
en el sur, dacíticos que continuó en el Llamvimiaco con sills doleríticos y flujos de basalto
submarinos relacionados e interestratificados con la formación Capinota, y finalmente en el
Caradociano, lavas almohadillas de andesitas basálticas y traquiadesitas espilitizadas relacionadas
con la formación Amutara, actividad que implica un rifting de la corteza continental (Avila-Salinas,
1996)
Hacia fines del ordovícico medio la placa de Arequipa-Huarina empezó un desplazamiento sinistral
que ensancho la cuenca en el sector central y norte produciendo el depósito de importantes
secuencias marinas llanvirniano-ashgillianas. El extremo meridional de la placa, debido a esta
rotación sinistral, colisiono con el Macizo Chac-Pampeano, produciendo la intrusión de granitoides,
y la formación de cuencas de trasarco en el noroeste argentino (fase Ocloyica).
Durante el ciclo cordillerano la Cuenca posiblemente corresponde a un rift de trasarco. En el silúrico
inferior hay mayor subsidencia, especialmente en el sector Suroccidental, a causa del levantamiento
producido por la intrusión de granitoides en territorio argentino. En esta época el borde de cuenca se
extendió y amplio considerablemente. Desde el Silúrico superior se hace más evidente la influencia
costera, aparecen las primeras plantas vasculares, y al final del ciclo, sobre estuarios o lagunas
costeras se desarrollan primitivos bosques de helechos y licofitas.
A fines del ciclo cordillerano se produjo la primera deformación tectónica importante que involucra
a la secuencia Tacsarianas y cordilleras, la fase chiriguana (sensu YPFB) o eohercinas, y que
conduce a la formación de un orógeno. Estos movimientos y la cordillera hercínica resultante,
fueron ampliamente discutidos por Megard et al. (1973) en una extensa serie de publicaciones. Los
movimientos compresivos, producidos a nivel continental, ocasionaron el plegamiento de las rocas
previas y la formación de un orógeno hercínico desde la costa pacífica de Sudamérica. La edad
próxima del metamorfismo de esta deformación en la cordillera oriental sur, fue medida por
Tawackli et al. (1996) entre 374 a 317 Ma.
La cuenca del Ciclo Subandino se desarrolló principalmente en el borde oriental de la cordillera
recién formada, inicialmente con cañones submarinos al este (grupos Machareti-Mandiyuti), y
posteriormente, en el oeste, con facies de plataformas marinas carbonadas (grupo Titicaca).
El episodio andino comienza con la disgregación del Gondwana (ca 200 Ma), que separa
Sudamérica de África. En este trabajo siguiendo la sugerencia de Oller-Veramendi se reconoce dos
ciclos Dentro de este episodio Andino I y Andino ll.
En esta época el continente de Gondwana experimento los efectos de grandes esfuerzos
extensionales e independientemente de la fractura entre américa y áfrica en extensiones sectores de
Bolivia, especialmente en la actual cordillera Oriental se formaron numerosas cuencas del rif por lo
que es Ciclo Andino I puede subdividirse en dos fases principales: de Synrift y Postrift. La fase
Synrift se extiende desde los 200 Ma a partir del Jurásico inferior con la efusión de coladas
basálticas, hasta mediados del Cretácico superior (ca 80 Ma)
Estos efectos magnéticos Fueron producidos por la reactivación de la antigua fractura de basamento,
entre el Cratón de Guapore y el Macizo de Arequipa-Huarina la posición de esa zona de cizalla
correspondería al lineamiento actual de la Cordillera real (CRFZ) a causa de la acción compresiva se
formó una zona de subducción verticalizada (Dorbath et al., 1993, Martínez et al., 1996, Dorbath et
al., en prensa) en la que el cratón subduce por debajo del macizo noraltiplánico. En tiempos
hercínicos actúo también como zona de desgarre compresional.
Con las primeras colisiones de las placas de Aluk y luego de Farallón, se produce la formación de
los primeros arcos volcánicos. A partir del jurásico la secuencia se continentalizan, se forman
cuencas de trasarco con llanuras aluviales, eólicas, fluviales y lagunares durante el mesozoico del
Arco volcánico provee lavas, cenizas y otros materiales que se intercalan en las secuencias clásticas.
Transgresiones marinas (formación Miraflores) interrumpen el depósito continental.
De forma coincidente, los últimos datos demuestran que la etapa más importante del plegamiento
Andino (Andino ll) se produjo alrededor de los 26 a 30 Ma (Oligoceno tardío-Mioceno temprano)
(Sempere et al., 1990 Hérail et al., 1994). Esta acción está ligada a la actividad de la placa pacífica.
La colisión y subducción de la placa de nazca produjo una deformación constante Que formó un
gran arco volcánico a lo largo de la costa pacífica de Sudamérica comprimiendo y plegando todas
las secuencias previas, así como ocasionando un importante acortamiento de los Andes formación
de cuencas de trasarco piggy back, y otras, del altiplano y sector oeste de la Cordillera Oriental esta
acción formó estructuras de vergencia este.
A su vez el macizo de Arequipa-Huarina fue sobre corrido sobre el Cratón de Guapore formando
estructuras de vergencia oeste por la acción de la “zona de falla de la Cordillera Real” (Dorbath et
al., 1993; Dorbanth, et al., en prensa), en la parte de la Cordillera Oriental, Subandino y Llanura.
Según Tawackoli et al. (1996), la primera de información importante de la Cordillera Oriental Sur se
produjo en el Oligoceno inferior, causado la erosión de la cobertura Cretácico – paleocena. La
cuenca neógena comenzó con un pulso tectónico mayor alrededor de los 22 a 24 Ma, y dentro de las
cuencas, la deformación compresiva tiene distintas edades. En Nazareno se registró desde 22 a 12
Ma, y en Tupiza-Estarca se activaron alrededor de los 17 Ma.

Provincias Geológicas
El territorio de Bolivia y coincidiendo aproximadamente con las regiones morfológicas se dividió en
las siguientes provincias: Cordillera Occidental, Altiplano, Cordillera Oriental, Sierras Subandinas,
Llanura Chaco Beniana y Escudo Brasileño.
En los capítulos siguientes no se seguirá estrictamente el ordenamiento tradicional por provincias
por el contrario, y con el objeto de no repetir descripciones estratigráficas ambientales y tectónicas
se consideran sólo 6 capítulos ordenados de la forma siguiente:
 Altiplano (incluye de faja volcánica o Cordillera Occidental)
 Cordillera Oriental (incluye el denominado Interandino)
 Sierras Subandinas (incluye la Llanura Chaqueña)
 Llanura Beniana (incluye la Llanura Madre de Dios)
 Llanura Chapare Boomerang.
 Cratón de Guapore

También podría gustarte