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“AÑO DE LA UNION, PAZ Y EL DESARROLLO”

NOMBRE: Miguel Angel


APELLIDO: Juarez Villalba
ASIGNATURA: Lenguaje y Comunicación
INSTRUCTOR: Catalina Sinfora Quispe Jimenes
SEMESTRE: 1er
GRUPO: PT - 15

TACNA – PERU
2023

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EL ALCOHOLISMO EN LA ADOLESCENCIA

La adolescencia representa la transición de la niñez a la edad adulta, es decir,


es un periodo de desarrollo donde la persona adquiere las capacidades físicas y
psíquicas que la identificarán como desarrollada, especialmente las sexuales,
que le permitirán reproducirse. Al ser una etapa de profundos cambios, está
marcada por la inestabilidad y, en la mayoría de las ocasiones, el desconcierto y
la confusión de los propios jóvenes ante sus cambios.

Durante esta fase de desarrollo, los jóvenes se muestran mucho más vulnerables
ante algunos riesgos saludables, como el consumo de alcohol y drogas.

En la etapa inicial y media de la adolescencia (desde los 11 a los 17 años), los jóvenes
desarrollan una imagen propia, un rol que buscan proyectar y potenciar ante los
demás. El desarrollo de la personalidad provoca en el adolescente la necesidad de
independencia frente al núcleo familiar y la búsqueda de integración en grupos
sociales. Esta necesidad de pertenecer a un grupo puede llevar a los jóvenes a
desarrollar comportamientos de riesgo, como el consumo de alcohol. Los hábitos
llevados a cabo dentro del entorno de familia y amigos son cruciales a la hora
de prevenir o fomentar el consumo de alcohol, en donde los padres deben de
saber que el licor produce unos síntomas durante la intoxicación y otros durante
el periodo de abstinencia.

Las señales de alarma que pueden alertarnos sobre un posible abuso de alcohol
en adolescentes son:

• Físicas: fatiga, múltiples quejas sobre la salud física, ojos enrojecidos y


con un brillo característico, vómitos.
• Emocionales: cambios en la personalidad, cambios bruscos de humor,
irritabilidad, comportamientos irresponsables y arriesgados, baja
autoestima, tristeza o depresión, desinterés general en actividades que
antes les gustaban.
• Familiares: riñas más frecuentes, desobediencia de las normas, mentiras
repetidas, estar retraído o no comunicarse con la familia, secretos
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excesivos (respecto a amigos, sitios donde van, no poder entrar en su
habitación, etc.)
• Escolares: disminución del interés por el colegio, actitud negativa, no
ocuparse de hacer los deberes, disminución de las calificaciones,
ausencias del colegio, problemas de disciplina.
• Sociales: amigos nuevos a los que no les interesan las actividades
habituales de la familia y el colegio, problemas con la ley, cambio hacia
un estilo diferente de vestir o de gustos musicales, tatuajes o piercings
excesivos.

Algunas de estas señales de aviso pueden indicar, asimismo, otros problemas.


Los padres deben reconocer que existe un cambio en el comportamiento, humor,
relaciones, rendimiento escolar y hábitos de su hijo o hija.

Se debe hablar con sinceridad y claridad con los hijos sobre nuestra
preocupación sobre su posible uso de alcohol. No nos debe tranquilizar una
respuesta negativa si no se encuentra una causa al cambio de comportamiento.

Una respuesta airada o frases como “no confías en mi” o “me estas
espiando” ante nuestras preguntas indican un excesivo recelo del adolescente,
y deben inducir sospechas. Una vez que se intuye abuso de alcohol, debe
realizarse una visita al médico de cabecera, que realizará una evaluación.

Existen también sistemas para la detección de alcohol en el aliento que se


pueden tener en casa para hacer por sorpresa. Si se confirma el abuso de
alcohol, deberán acudir a un especialista.

La Dirección de Salud Mental y Cultura de Paz del Minsa viene trabajando a nivel
preventivo con los niños, trabajando las habilidades sociales para que tengan
una mejor comunicación con el papá y la mamá; sepan decir no cuando hay
presión de otros amiguitos que los incitan a tomar alcohol; a saber, solucionar
problemas y responder lo adecuado para su edad.

También trabajamos con los padres, para que tengan una adecuada pauta de
crianza con los niños, sean modelos saludables y entiendan que no es necesario
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tomar alcohol para una fiesta, para una celebración o para bailar. No es
necesario consumir alcohol, enfatizó al señalar que este trabajo de prevención
debe ser complementado por otros sectores de la sociedad.

- Provoca muchas muertes:

El alcohol es un factor significativo en las muertes de personas menores de 21


años en Perú todos los años. Esto incluye las muertes por accidentes
automovilísticos, homicidios, sobredosis de alcohol, caídas, quemaduras,
ahogamientos y suicidios.

- Provoca muchas lesiones:

El consumo de alcohol puede hacer que los jóvenes tengan accidentes y se


lesionen. En 2011, aproximadamente 188,000 personas menores de 21 años
acudieron a salas de urgencias por lesiones relacionados con el alcohol.

- Afecta el juicio:

El consumo de alcohol puede conducir a malas decisiones sobre la toma de


riesgos, como el comportamiento sexual no seguro, conducir borracho y
conducta agresiva o violenta.

- Aumenta el riesgo de agresión física y sexual:

El consumo excesivo y peligroso de alcohol en menores se asocia a una mayor


probabilidad de ser víctima o autor de violencia interpersonal.

- Puede dar lugar a otros problemas:

El consumo de alcohol puede hacer que los jóvenes tengan problemas legales o
en la escuela. El consumo de alcohol también se asocia con el uso de otras
sustancias.

The National Institute on Alcohol Abuse and Alcoholism (Instituto Nacional sobre
el Abuso de Alcohol y Alcoholismo; NIAAA, por sus siglas en inglés) define al
consumo excesivo y peligroso de alcohol como un patrón de consumo de alcohol
que eleva la concentración de alcohol en la sangre (CAS) al 0.08% (o a 0.08
gramos de alcohol por decilitro) o más. Para un adulto típico, este patrón
corresponde al consumo de 4 bebidas o más (mujeres) o 5 bebidas o más

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(hombres), en unas 2 horas.17 Las investigaciones demuestran que menos
bebidas en el mismo plazo generan la misma CAS en los jóvenes; solo 3 bebidas
para las chicas, y de 3 a 5 bebidas para los chicos, según su edad y tamaño.

A nivel de intervenciones de carácter nacional para el consumo de alcohol, es


necesario analizar los efectos de dos políticas: la primera es el incremento de
precios/impuestos e incremento de la edad legal de consumo. Respecto a la
primera, existe un cuerpo de investigación importante que indica que el aumento
de precio e impuesto a las bebidas alcohólicas reduce el con sumo e impactos
negativos asociados. Si bien es cierto el Ministerio de Economía y Finanzas ha
realizado incrementos periódicos al impuesto selectivo al consumo para las
bebidas alcohólicas, no existe información sistemática sobre los efectos de estas
medidas en el consumo de alcohol en la población adulta y adolescente. Generar
información en esta materia es clave para ajustar o mejorar esta política.

BIBLIOGRAFIA VIRTUAL:
1. https://cuidateplus.marca.com/familia/adolescencia/diccionario/problemas-alcohol-
adolescencia.html
2. https://www.cun.es/enfermedades-tratamientos/enfermedades/alcohol-adolescentes
3. https://www.gob.pe/institucion/minsa/noticias/36857-consumo-de-alcohol-en-ninos-
y-adolescentes-puede-generar-enfermedades-intoxicaciones-y-dependencia
4. https://www.niaaa.nih.gov/publications/el-consumo-de-alcohol-entre-menores

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