Propuesta de esquema para episodio piloto de

LETRAS CAPITALES1
(nombre tentativo)

Tema: Reseña de Los detectives salvajes de Roberto Bolaño

APERTURA
[5 minutos aproximadamente]
Diana: Primeras palabras
Bienvenida a la audiencia, presentación del episodio y de los contertulios.

Fer: Comentario ¿de qué va esto?

Qué entendemos por literatura histórica; Qué puede esperar la audiencia del
podcast.

Oscar: Acercamiento a Los detectives salvajes.

Datos generales de la obra; ¿Por qué la elegimos para el primer episodio?
Importancia de la novela en la literatura en lengua española.

DESARROLLO
[aún pendiente el reparto de temas]

a. Boceto biográfico 
b. La estructura de la novela
c. Conceptos a desarrollar [Es importante aclarar que esperamos hablar de
varios puntos de la novela sin revelar nudos importantes, la idea es invitar a
su lectura].
1. Tópico: Viaje/fuga
2. Tópico: Amistad-olvido-encuentros
3. Tópico: Desamor o desapego
4. Tópico: Grupo-Sentido de pertenencia
5. Otros [en construcción]

3. Viaje-Fuga
Dentro de las ciento de historias que el libro alberga, destaca la del viaje que
emprenden Juan García Madero, Lupe, Arturo Belano y Ulises Lima hacia el norte
de México con el propósito de encontrar a la nunca célebre pero sí enorme poeta
Cesárea Tinajero. Ese viaje era una necesidad de identidad literaria (cosa que por

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Es importante aclarar que este no es un guión, sino la exposición de ideas que van a desarrollarse en el
episodio y que serán la base de nuestros comentarios.

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 alguna razón se torna cada vez más vital para los fundadores del realvisceralismo).
Belano y Lima se lo han traído entre manos desde hace tiempo, iniciaron pesquisas
sobre su paradero y se resolvieron a empezar la búsqueda en cuanto fuera posible.
El precipitado de los acontecimientos los arrolla y sin advertirlo se encuentran
cruzando tierrosos paisajes lunares del Norte en un Impala que les fue confiado de
forma casi fortuita.
El cierre del primer acto, a partir del cual, el esquema del libro se fragmenta en un
laberinto de testimonios de personajes diversos, anuncia al lector que ese viaje
representa el espinazo de la novela. Sin embargo, los mismos miembros de la
aventura en el Impala y otros personajes (más o menos relacionados con la trama
principal) emprenden otros viajes; buena parte de ellos como una huida hacia lo
desconocido, hacia respuestas esenciales para escritores en construcción; hacia
posibles esperanzas o, en su defecto, hacia hechos que constaten que la esperanza
no existe o, si existe, no vas a localizarla en ese lugar ni en algunos otros que
puedas visitar en futuros viajes, porque a veces no se encuentra lo que se busca
cuando uno trae puestos los lentes de la experiencia literaria. Por otra parte, esa
esperanza puede que llegue con el asiento de los años y nada tendrá que ver con la
pregunta inicial que motivó el interés en primera instancia.
Se persigue a su vez la aventura, eso se explica por sí solo y no entraremos en
comentarlo.

4. Amistad-olvido-encuentros
Una constante en los testimonios es el tema de los olvidos, alejamientos e incluso
rupturas entre los personajes, que quizá son más numerosos que los puntos de
encuentro. No es que la novela apele al resentimiento o rencor de gente que en
efecto se enfrenta conflicto con los personajes, es solo que el mundo previo a las
redes sociales condenaba a los grupos de amigos con oficios diversos a
desaparecer en cuanto cambiaban de residencia, en especial si salen del país o el
continente. Solo los más cercanos tienen la costumbre de telefonearse y mantener

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epistolario si se tenía la suerte de comunicar su último domicilio. Pensado de esa
forma el extravió de alguien es verdaderamente una cuestión de percepción;
¿quién puede asegurar que Lima “desapareció” en Nicaragua? Quizá no es que
haya desaparecido, quizá sólo no pensó que nadie verdaderamente notara
suficientemente su ausencia como para que comenzaran a inventar controvertidas
historias sobre su extraño secuestro y posterior pulverización. Lima estaba
extraviado, en efecto, pero un extravió de sí mismo. Volvió de Israel con el corazón
exprimido después de haberlo remojado por un periodo lo suficientemente largo
como para resentir mucho el efecto. Lo de siempre, la mujer que amaba andaba
con otro… Lo de siempre, dormía en su casa de Tel Aviv, con ellos haciendo el amor
en la habitación de a lado.
En tres décadas la gente cambia de ciudad, de país, incluso de continente, otros
abandonan la literatura y no les emociona regresar a la dinámica de sus veinte;
otros más mueren repentinamente,

3. Desamor o desapego
El amor no es un elemento definido en la novela, aparece marginalmente a través
de las relaciones que los personajes comparten al lector. Muchos no tienen reparo
alguno en compartir el desapego que expresaron o del que fueron víctimas. El sexo
puede abrir un nexo entre dos, o puede ser solo eso para uno, y ser el enganche
emocional para el otro. La edad es la que va a asentando los impulsos del espíritu
precoz, una obviedad que es tal en el caso de algunos, pero no en todos aquellos
cuyos testimonios se vierten de manera desordenada en la novela.
Hay más desamor que relaciones bien estables, pero muchos de ellos lo aceptan
con una mezcla de serenidad o resignación, porque el foco de la conversación casi
siempre se ubica en otro aspecto de la historia. No por eso deja de ser trágico,
pero son tragedias personales que en el fondo no habrán de preocupar a la
audiencia, en principio porque el mismo autor lo mira de reojo. Entonces, ¿por qué
mencionarlo? Porque está ahí y nos aproxima, de forma subrepticia, a los

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personajes, a sus razones por formar parte de esa empresa, por mantener
próximos al fenómeno realvisceralista mexicano.

4. Grupo-Sentido de pertenencia
¿Cuál es el objeto de inaugurar un movimiento poético? ¿basta con inaugurarlo
para decir que existió? ¿solo se puede decir que algo quedó verdaderamente
inaugurado cuando caminó? Caminar es un verbo que en los hechos puede
significar encadenar dos o tres pasos. En términos literarios ¿cuántos pasos dio
realmente el realvisceralimo? Quizá si se le preguntara a Lima, diría que dicho
movimiento no dio muchos pasos, pero sí que se arrastró, quién sabe si sobre el
lodo o superficies más ásperas, pero avanzó antes de fragmentarse. Solo se puede
fragmentar lo que está unido, o cuando menos pegado, o más o menos junto; esos
átomos, muchos víctimas de las consuetudinarias purgas de Belano, se
amalgamaron por un legitimo interés por explorar otra forma de entender la
poesía, así como por un sentimiento, no menos legítimo, de abyección a Octavio
Paz y a su séquito, pero sobre todo a lo que entendían como su caudillismo
cultural. Una discusión interesante, que podríamos abordar, pero que, en realidad,
no es lo que nos ocupa.
Lo que se asoma en la intención de formar una corriente, tiene que ver con la
intención de construir una carta de principios en el ámbito literario que tenga por
principio leer poesía, mucha poesía, y leerla bien, mamar de las fuentes más
enriquecedoras y vanguardistas para no repetir ni caer en el esquema fácil,
cómodo, predecible. Pero eso bien se puede cultivar más bien solo, en una reunión
de dos. Pero García Madero conoce a los realvisceralistas en la Facultad de
Filosofía y Letras de la UNAM, donde la gente concurre a un taller y donde conoce
gente con la que termina hablando de todo, hasta de la razón por la que
terminaron llegando al taller. El espíritu de grupo da identidad a espíritus que se
buscan a sí mismos, no solo a partir de la expresión artística sino del reflejo que de
ellos ven en los demás. Ese espíritu termina colapsando y está ausente en buena

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 parte de la novela, pero reaparece en brotes constante en los que se evocan los
aglutinantes que dieron sentido a los capítulos primeros y últimos de la novela (la
fractura de la línea temporal así lo permite).

CIERRE

a. ¿Qué hace diferente a Bolaño de otros autores de su generación?

b. Despedida.