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EXPERIENCIAS EN EL MANEJO INTEGRADO DE LA PUDRICIÓN DEL COGOLLO (PC) DE

LA PALMA DE ACEITE, EN LA ZONA CENTRAL COLOMBIANA


Leidy C. Morales, G., Greicy A. Sarria, Gabriel A. Torres, Francia Varón y Gerardo Martínez-L

Programa de investigación de la Pudrición del cogollo. Corporación Centro de Investigación en Palma de Aceite (Cenipalma).
Calle 20A N° 45A - 30, piso 4°. A. A.: 252171, Bogotá, Colombia.
Correo electrónico de contacto: gerardom@cenipalma.org

RESUMEN SUMMARY

Se presentan los resultados de la experiencia de implementación de un There are presented the results with the experience in the implementa-
plan de manejo integrado de la Pudrición del cogollo de la Palma de tion of an integrated management plant for the control of the bud rot
aceite en la zona Central en Colombia, en una plantación comercial, disease in oil palm in the Central growing area in Colombia, in a
donde se incorporó en este plan el diagnóstico temprano usando una commercial plantation, where it was implemented a plan that included
escala de evaluación de la severidad de 1 a 5, que considera el porcen- the early diagnosis of the disease using the severity scale from 1 to 5,
taje de área afectada en la flecha más joven de más de 30 cm de largo. that considers the percentage of affected area in the younger spear leaf
Se identificaron 90 palmas en grados de severidad 1 y 2 y, 90 palmas with more than 30 cm in length. There were identified 90 palms in
en grados 3 y 4. Se adelantó un programa de aspersión con dos mez- severity grades 1 and 2, and 90 palms in grades 3 and 4. All the identi-
clas diferentes de productos para el control de Phytophthora sp., a fied palms were sprayed with two mixtures of products for the control
todas las palmas en evaluación a intervalos de una o dos semanas, of Phytophthora sp, every one or two weeks depending of the rain, and
según la precipitación prevalente y a la eliminación del tejido afectado the in the palms in severity grades 3 and 4 the affected tissue was
en los grados 3 y 4, antes del programa de aspersiones. Los resultados eliminated before the chemical treatments. The results indicate the
muestran la importancia de actuar en los estados más tempranos: en las importance to react in early stages of the disease: when the palms were
intervenciones en grados de severidad 1 y 2 se logró mayor recupera- treated in severity grades 1 and 2 there were better possibilities to
ción las palmas tratadas con Metalaxil compuesto + Kazugamicina, recover them when they were treated with Metalaxyl compound +
que a las palmas tratadas con Carbendazim + Kazugamicina y ambos Kazugaminicin than when they received the treatment with Carbenda-
tratamientos fueron mejores que las plantas control. En los grados 3 y zom + Kazugamycin and both treatments were better than the control
4 la tendencia fue similar pero la capacidad de recuperación de las palms. In severit grades 3 and 4 the control tendency was the same but
palmas fue mucho más bajas. La implementación de un plan de mane- the results were very poor. The implementation of an integrated dis-
jo integrado de la enfermedad es una opción viable, cuando se tienen ease management seems to be a viable option, especially when there
incidencias relativamente bajas y se actúa prontamente. are low incidences and there is an early reaction.

Palabras claves: Pudrición del cogollo (PC), Palma de aceite, manejo Key words: Bud rot (PC for its name in Spanish), oil palm, integrated
integrado management

INTRODUCCION taje de las palmas afectadas, con nuevas Estos avances en el diagnóstico oportuno
emisiones de hojas sanas y retorno a su vida de la PC, se complementaron con el trabajo
La Pudrición del cogollo de la Palma de productiva, como se observa en la zona de identificación del agente causal de las
Aceite (PC), fue registrada desde los años 60 Oriental Colombiana (Franqueville, 2001, lesiones iniciales, en el que se encontró al
como una de las enfermedades que afecta 2003; Munevar y Acosta, 2002). pseudo hongo Phytophthora palmivora
drásticamente los rendimientos en este culti- Inicialmente, algunos palmicultores llega- (Martínez et al., 2008; Sarria et al., 2009),
vo, convirtiéndose en un factor de importan- ron a considerar que la PC era una enferme- generándose una excelente oportunidad para
cia a tener en cuenta en todo proceso agroin- dad de palmas adultas, especialmente cuando avanzar en la búsqueda de alternativas quími-
dustrial (Nieto, 1996). En la actualidad esta se observa que se reconoce su presencia cas para su control.
enfermedad está presente en las cuatro zonas cuando las palmas están llegando al final de Phytophthora es un género muy particu-
palmeras de Colombia, pero con mayor im- su vida productiva, alrededor de los 25 años. lar de patógenos de plantas. Tiene caracterís-
pacto debido a su incidencia y severidad en la Una observación cuidadosa de la historia de ticas morfológicas, genéticas y fisiológicas
zona Occidental (Martínez, 2008; Torres et la PC muestra que realmente afecta a las muy especiales, con un. ciclo de vida, con
al., 2008) palmas en todos sus estados de desarrollo y formas muy diferentes, desde sus zoosporas
La PC ha sido letal en la zona Occidental se hace más frecuente en palmas jóvenes a móviles hasta las oosporas de paredes grue-
de Colombia, la Amazonía Ecuatoriana y medida que estas se encuentren en zonas con sas, que hacen que el control de estas enfer-
Brasilera y en Surinam, en situaciones en potenciales de inoculo más altos, como lo han medades sea un reto difícil de afrontar
donde una diversidad de factores han contri- observado en la epidemia en Tumaco, Martí- (Zentmyer, 1983).
buido a continuas reinfecciones y coloniza- nez y Torres (2007), Martínez (2008) y Para la implementación programas de
ción por otros microorganismos oportunistas Martínez y colaboradores (2008). manejo integrado de la PC en Colombia, se
e por insectos, promoviendo mayores daños El desarrollo de una escala de severidad han estado evaluando varias opciones. Una de
en la zona del cogollo (Franqueville, 2001, para el reconocimiento temprano de los ellas es la eliminación temprana del tejido
2003; Martínez, 2008; Martínez y Torres, síntomas en la flecha más joven de más de 30 enfermo (Torres et al., 2008). La cantidad de
2007; Martínez et al., 2008), mientras en cm de largo (Martínez y Torres, 2008), ha tejido que se necesita retirar en un proceso de
otros sitios ha sido menos agresiva y ha permitido iniciar su implementación en los cirugía es directamente proporcional al grado
permitido la recuperación de un alto porcen- programas de manejo y control de la PC. de severidad de la PC. Los trabajos de Ariza
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y colaboradores (2009), muestran como a estado de cráter, pues los resultados previos proceso normal de infección hasta llegar al
medida que se observan grados de severidad indicaron que en las condiciones ambientales estado de cráter. Sin embargo es notorio que
mayores, el avance de la pudrición en la zona de la zona no era posible lograr la iniciación hubo diferencias entre tratamientos y testigo
del cogollo es mayor, reduciendo las posibili- de emisión de nuevas hojas. Las palmas con y entre grados de severidad (Tabla 2). La
dades de recuperación de las palmas a medida grados de severidad 1 y 2 conformaron un mezcla Ridomil + Kasugamicina en grados de
que se hace más tarde la intervención para primer grupo y las que tenían grados de severidad 1 y 2 permitieron obtener el mayor
retirar el tejido afectado. severidad 3 y 4 conformaron un segundo número de palmas sanas y en los grados de
Además de tener en cuenta la severidad grupo. severidad más bajos y por consiguiente los
de la enfermedad en palmas individuales, los Se seleccionaron 30 palmas para cada uno más bajos en los grados más altos y en estado
trabajos recientes sobre la PC en Colombia de los tratamientos y otras 30 como testigos de cráter. Las aplicaciones.
indican que es necesario comenzar a interve- para hacer el seguimiento en ausencia de los En los tratamientos 1 y 2, a los 204 días
nir las zonas afectadas, cuando aún se tiene productos químicos, para un total de 180 se observó recuperación de plantas con emi-
un numero bajo de casos, no solo por las palmas en evaluación. Se procedió a retirar el sión de flechas y tejidos sanos. El porcentaje
implicaciones económicas de intervenir un tejido enfermo en la zona del cogollo con un de recuperación fue del 60% con Ridomil +
número grande de palmas, sino por el poten- proceso de cirugía que eliminaba completa- Kasugamicina y 56% con Carbendazim +
cial de inoculo que se va generando a medida mente la flecha o flechas que estaban comple- Kasugamicina. El resto de plantas en ambos
que aumenta la incidencia. Esta situación tando su proceso de maduración y diferencia- tratamientos presentaron diferentes grados de
también se ve influenciada por los otros ción y además el paquete de flechas inmadu- severidad (Figuras 1 y 2).
factores bióticos y abióticos que participan en ras que conforman el cogollo de la palma y Las palmas testigo de estos tratamientos,
el desarrollo de la enfermedad (Martínez, mostraban evidencias del proceso de pudri- presentaron una incidencia final del 73,3% en
2008; Martínez et al., 2008; Sarria et al., ción característico de la PC. los grados de severidad entre 5 y 6. Lo cual
2008; Torres et al., 2008). Para verificar la sanidad del tejido que muestra, el avance de la enfermedad a partir
La práctica de eliminación del tejido afec- quedaba en la palma tratada se utilizó una de grados 1 y 2 en palmas donde no se realiza
tado por una enfermedad es una de las herra- solución de hipoclorito de sodio al 2%, que la práctica de manejo con cirugía y tratamien-
mientas utilizadas en muchos cultivos, para el en estudios previos demostró ser muy útil tos. Estas palmas en su mayoría presentaron
manejo y control de enfermedades de plantas para evidencias estados muy tempranos de daño severo con pudrición acuosa, pudrición
(Agrios, 2005). En las diferentes zonas pal- infección, al permitir observar grados dife- en flechas y secamiento en hojas jóvenes el
meras en Colombia, especialmente en los renciales de oxidación entre el tejido sano y cual inicia con un secamiento de foliolos,
primeros estados de la enfermedad, se utilizó el tejido en proceso de alteración como resul- clorosis en hojas jóvenes que son muy mar-
ampliamente la práctica de eliminación de las tado del avance de la PC. Además se inspec- cados en palmas en grados avanzados (Figu-
flechas afectadas y la aplicación de fungici- cionaron los últimos cortes realizados, longi- ras 1, 2, 3, 4).
das e insecticidas. Esta práctica, aparente- tudinalmente, separando las capas de tejido, En las palmas testigo se obtuvo 73,3% de
mente limitó el desarrollo de la PC y los pues esta práctica permitió verificar también afección, en estados avanzados (Grado 5 y
trabajos de Nieto (1996) confirmaron que una si se observaba un avance del proceso de cráter) y 13,3% con recuperación espontánea
cirugía bien hecha permitía la emisión de pudrición. (Figura 3).
tejidos sanos, pero esta práctica no tuvo la El tejido expuesto se cubrió con una pasta En plantas afectadas por la PC en grados
acogida necesaria por parte de los técnicos y de Carbaryl, 3g por palma, para prevenir el 3 y 4, con tratamiento Ridomil + Kasugami-
productores, especialmente cuando la inci- daño causado por Rhynchophorus palmarum cina y Carbendazim + Kasugamicina, el
dencia comenzaba a ser muy alta y era muy y se trató cada dos semanas, en cada uno de porcentaje de plantas recuperadas fue bajo
costoso atender tantos casos. los casos, con los fungicidas y bactericidas (Figuras 5, 6 y 7). En ambos casos se en-
Estudios preliminares sobre el manejo in- que se estaban evaluando (Tabla, 1). contró un incremento en la severidad, alcan-
tegrado de la PC en las diferentes zonas Tabla 1. Tratamientos utilizados en la evaluación de la cirugía y la protección química para el control de
palmeras comienzan a mostrar resultados la PC en la plantación Palmas Monterrey
diferenciales, prometedores en algunas y no Grado de severidad
tanto en otras. Tratamiento No. Producto No de repeticiones
inicial
En este trabajo se evaluó un programa de 1 Ridomil + Kasugamicina 1-2 30
manejo integrado de la enfermedad, en la 2 Carbendazim + Kasugamicina 1-2 30
zona Central colombiana, incluyendo el
diagnóstico temprano, procedimientos para 3 Testigo 1-2 30
retirar el tejido enfermo y la protección del 4 Ridomil + Kasugamicina 3-4 30
tejido expuesto con diferentes moléculas 5 Carbendazim + Kasugamicina 3-4 30
químicas que mostraron ser promisorias tanto
en ensayos in vitro como en pruebas en el 6 Testigo 3-4 30
campo, con el fin de brindar alternativas Total de Unidades experimentales 180
viables de control.
Las aspersiones químicas se continuaron zando respectivamente un 53,3% y 60% de
MATERIALES Y MÉTODOS cada 15 días y en épocas muy lluviosas cada palmas en cráter sin emisión de flechas nue-
8 días, hasta los 204 días después de iniciado vas.
El trabajo de se desarrolló en la plantación el ensayo. En la mayoría de los casos se observó
Palmas Monterrey S.A., en el municipio de emisión de tejidos duros pero con poco desa-
Puerto Wilches, departamento de Santander y RESULTADOS Y DISCUSIÓN rrollo, acompañados de pudrición y mal olor.
en el Campo Experimental Palmar de la En el tratamiento cuatro, el 20% de las pal-
Vizcaína de Cenipalma, en Barrancabermeja, Plantación Palmas Monterrey mas en grado 6 presentaron necrosis pero no
Santander olor fuerte.
En Palmas Monterrey, se identificaron En las plantas afectadas con la PC en grados Con el tratamiento de Ridomil más Kasu-
palmas en grados de severidad del 1 al 4, en 1 y 2, se observó que a pesar de las aplicacio- gamicina en plantas afectadas en grados de
una siembra 2006, en el Lote 1H3, de mate- nes realizadas algunas de ellas siguieron el severidad 3 y 4 en el que se realizaron cirug-
rial Deli x Ghana. Se omitió el grado 5 y el ías se logró obtener recuperación en 13,3%;
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Figura 1. Evolución de la PC en plantas en grados 1 y 2 tratadas con Metalaxil Figura 2. Evolución de severidad de PC en palmas en grados 1 y 2, tratadas
+ Kasugamicina, Plantación Monterrey con Carbendazim + Kasugamicina, Plantación Monterrey.

a b
Figura 3. Evolución de la PC en plantas sin tratamiento en los grados 1 y 2,
Plantación Monterrey Figura 4. Respuesta de la aplicación de fungicidas. a. Lesión de PC en grado
2 antes de la aplicación. b. Tejido seco y desprendido después de la aplica-
ción.

Figura 5 Desarrollo de la PC en plantas en grados 3 y 4, tratadas con Metalaxil + Figura 6. Desarrollo de la PC en grados 3 y 4, tratadas con Carbendazim +
Kasugamicina, Plantación Monterrey. Kasugamicina, Plantación Monterrey.

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Tabla 2. Porcentaje de plantas en cada uno de los grados a los 204 días después de iniciado el ensayo. Plantación Palmas Monterrey
Tratamiento Sanas Grado 1 Grado 2 Grado 3 Grado 4 Grado 5 Cráter
Ridomil + Kasugamicina
60 13,3 6,7 6,7 3,3 3,3 6,7
Grados 1 y 2
Carbendazim + Kasuga-
56,7 6,7 0 16,7 3,3 3,3 13,3
micina Grados 1 y 2
Testigo Grado 1 y 2 13,3 0 0 10 3,3 33,3 40
Ridomil + Kasugamicina
13,3 3,3 3,3 10 6,7 10 53,3
Grados 3 y 4
Carbendazim + Kasuga-
micina Grados 3 y 4 10 3,3 6,7 3,3 6,7 10 60
Testigo 3 y 4 0 0 3,3 3,3 3,3 30 60

mientras que con Carbendazim más Kasuga- grados 1 y 2.


micina se obtuvo solo 10% de recuperación. CONCLUSIONES En palmas con cirugía y protección quí-
La aplicación de la mezcla de fungicidas mica en grados avanzados de PC sin recupe-
con bactericidas promovió el secamiento del Con base a estos resultados preliminares se ración, se logró en algunos casos detener la
proceso de pudrición que se estaba presen- puede concluir que tanto las cirugías como descomposición acuosa del tejido y olor
tando en las palmas con PC y permitió la los tratamientos con fungicidas utilizados fétido persistente en las plantas sin tratamien-
emisión de nuevas hojas aparentemente sa- para el control de la pudrición de cogollo, son to.
nas, situación que fue considerada como un efectivos siempre y cuando la enfermedad se Estos resultados son una oportunidad para
proceso de recuperación de la enfermedad encuentre en estados iniciales de desarrollo: entrar a considerar el diagnóstico temprano,
(Figura 7). la eliminación del tejido enfermo y la aplica-

a b
Figura 7. Respuesta a la aplicación de fungidas. a. Lesión de PC en grado 4. b. Figura 8. Desarrollo de la PC en plantas en grados 3 y 4 con cirugía y sin trata-
Emisión de tejido sano. miento químico, Plantación Monterrey
En el tratamiento testigo de los grados 3
y 4, se observó incremento de la severidad;
y el 90% de las palmas pasaron a grados 5 y
cráter. La mayoría presentó pudrición acuosa
con olor fétido y emisión de tejidos duros
infectados, se observó persistencia de la
enfermedad en la mayoría de cirugías. Al
final de la evaluación no se observó recupera-
ción en las plantas evaluadas y en su mayoría
presentaron daño a nivel de flecha y pérdida
del tercio superior, clorosis de hojas jóvenes,
hojas viejas y pudrición de racimos (Figura
8).
Aunque no se observó recuperación en
palmas en grados avanzados de severidad, en
las cuales se realizó cirugía y se protegieron
con aplicaciones químicas, se logró en algu-
nos casos detener la descomposición acuosa
del tejido y olor fétido que se detecto en las
palmas testigo. En ausencia de un tratamiento a b
con químicos, en las plantas en que se solo
retiró el tejido enfermo continuó el proceso
de pudrición (Figura 9). Figura 9. a. Palma afectada con la PC en grado 5. b. Con cirugía y sin tratamiento químico.

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ción de moléculas específicas, como unos de el responsable de la lesiones iniciales de Sarria, G. A.,Torres, G. A., Aya, H. A., Ari-
los integrantes de un programa de manejo la Pudrición del cogollo de la Palma de za, J. G., Rodríguez, J., Vélez, D. C.,
integrado de la enfermedad, que debe ser aceite en Colombia. En Memorias de la Varón, F.y Martínez, G. 2008 a. Microor-
complementado con otras prácticas agronó- VIII Reunión Técnica Nacional de Palma ganismos asociados a la Pudrición del co-
micas que han mostrado facilitar también el de aceite. Compensar, 22 - 24 de sep- gollo (PC) de la Palma de aceite y su ino-
proceso de recuperación de las palmas afec- tiembre, Bogotá. culación en palmas de vivero. Revista
tadas. Martínez, G., Varón, F., Sarria, G. A., Torres, Palmas, Colombia. 29 (3): 19-29.
G. A., Aya, H. A., Ariza, J. G., Salcedo, Sarria, G., Torres, G., Aya, H., Ariza, J.
AGRADECIMIENTOS S. y Morales, L. 2008 b. Opciones para el Rodríguez, J., Vélez, D., Varón, F. y
manejo de la Pudrición del cogollo de la Martínez, G. 2008 b. Phytophthora sp., es
Los autores agradecen a Palmas Monterrey, a Palma de aceite en áreas de baja inciden- el responsable de las lesiones iníciales de
sus técnicos, supervisores y operarios que cia de la enfermedad. En Memorias de la Pudrición del cogollo (PC) de la Palma de
facilitaron la realización de esta investigación VIII Reunión Técnica Nacional de Palma aceite en Colombia. Revista Palmas, Co-
y participaron activamente en todas las fases de aceite. Compensar, 22 - 24 de sep- lombia. 29 (3): 31-41.
de desarrollo de la misma y a Fedepalma, tiembre, Bogotá. Torres, G. A., Acosta, J. R., Ariza, J. G., Aya,
Cenipalma y el Fondo de Fomento Palmero Munevar, F. y Acosta, A. 2002. Recomenda- H. A., Roa, M. D., Vélez, D. C.y Martí-
por su apoyo en esta actividad. ciones de manejo del cultivo de Palma de nez, G. 2008 a. Papel de las palmas es-
aceite para minimizar el imoacto de la pontáneas como hospedero alterno de
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