Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
2016;63(2):91---100
FORMACIÓN CONTINUADA
a
Servicio de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor, Hospital Universitario Puerta del Mar, Cádiz, España
b
Servicio de Medicina Preventiva y Salud Pública, Hospital Universitario Puerta del Mar, Cádiz, España
PALABRAS CLAVE Resumen La anestesia neuroaxial pediátrica es una herramienta efectiva que puede ser usada
Revisión; como complemento o alternativa a la anestesia general. Sin embargo, siempre ha generado
Anestesia regional; dudas en cuanto a su utilidad y relación riesgo-beneficio. El propósito de esta revisión es des-
Bloqueo neuroaxial cribir el papel actual de los bloqueos centrales en la población pediátrica, actualizar aspectos
central; prácticos y de seguridad, así como repasar los últimos avances tecnológicos aplicados a este
Pediatría; procedimiento.
Ultrasonidos; © 2014 Sociedad Española de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor. Publicado
Complicaciones por Elsevier España, S.L.U. Todos los derechos reservados.
! Este artículo pertenece al Programa de Formación Médica Continuada en Anestesiología y Reanimación. La evaluación de las preguntas de
este artículo se podrá realizar a través de internet accediendo al apartado de formación de la siguiente página web: www.elsevier.es/redar
∗ Autor para correspondencia.
Hipotensión
La anestesia regional representa el 20-25% de los pro-
Clínica neurológica
cedimientos anestésicos pediátricos. Clínicamente,
aporta mayor seguridad (menor estrés quirúrgico, menor Depresión respiratoria
Hasta la fecha, hay publicados 3 grandes estudios epide- cia de complicaciones, con resolución precoz y sin presentar
miológicos sobre anestesia regional pediátrica: 2 por la secuelas4 .
French-Language Society of Paediatric Anaesthesiologists y La PRAN presentó en 2012 otro estudio multicéntrico en
otro por la Pediatric Regional Anesthesia Network (PRAN)4,5 . Estados Unidos, donde el 61% de los bloqueos fueron neuroa-
La French-Language Society of Paediatric Anaesthesiolo- xiales (9.156 niños) (fig. 1), diferenciando 2 grupos: punción
gists presentó en 2010 un estudio multicéntrico en Francia, única (68%) y catéteres (32%).
similar a otro realizado 12 años antes, en el que evaluó La incidencia de complicaciones fue del 8% (725 niños),
la incidencia de anestesia regional y sus complicaciones en relacionándose mayormente con colocación de catéteres,
niños, así como la evolución con respecto al estudio anterior. especialmente torácicos.
El 34% de los bloqueos fueron neuroaxiales (10.556 niños) Igualmente, la mayoría fueron fracasos de la técnica,
(fig. 1). La incidencia de complicaciones fue del 1% (112 salvo 78 casos (fig. 2). Destacamos 26 punciones durales,
niños), relacionándose principalmente con edades menores, de las que 4 presentaron CPPD que requirió parche hemá-
resolviéndose en un corto período de tiempo y sin dejar tico, y 6 depresiones respiratorias por opioides epidurales,
secuelas. que se trataron con su disminución o retirada.
La mayoría fueron fracasos de la técnica, salvo 13 casos La conclusión del estudio corroboró la seguridad de la
(fig. 2). Destacamos 10 punciones durales, sin cefalea pos- anestesia regional y su baja incidencia de complicaciones,
punción dural (CPPD), y 3 bloqueos espinales completos que resolviéndose precozmente y sin dejar secuelas5 .
requirieron soporte ventilatorio: 2 lactantes tras anestesia Existe una significativa diferencia entre la incidencia
espinal y elevación de miembros inferiores (MMII), y un niño de complicaciones de ambos estudios: 1% de la French-
de 11 años con colocación de catéter intradural inadvertido, Language Society of Paediatric Anaesthesiologists vs. 8% de
tras múltiples intentos de epidural lumbar. la PRAN. Al ser este último posterior, los autores justifican
En las conclusiones, con respecto al estudio anterior se esta diferencia por la menor diversidad de centros parti-
mantuvo el número de bloqueos regionales (disminuyendo cipantes que en el estudio francés, contando la mayoría
los centrales y aumentando los periféricos) y la baja inciden- con especialistas en formación (residentes o fellows), no
recogiéndose información sobre el nivel de experiencia del
80 equipo, y por la mayor rigurosidad en la auditoría para ase-
73
gurar el reporte de todos los bloqueos y sus complicaciones
(los estudios diseñados con reportes voluntarios de los cen-
tros tienen mayor riesgo de infraestimación)5 .
Excluyendo los fracasos de la técnica, la incidencia de
complicaciones sería del 0,12% en el estudio francés y del
18
11 8
0,85% en el estudio americano. Estos datos resultan más
3 1 4 tranquilizadores, especialmente en el estudio PRAN (la inci-
Caudal Lumbar Torácico Espinal
dencia disminuye del 8 al 0,85%), donde se informaron más
complicaciones de forma global y específica (ver tabla com-
PRAN ADARPEF parativa en figura 2), resultando llamativa la diferencia en
cuanto a punción dural no deseada e inflamación/infección
Figura 1 Distribución de los diferentes tipos de bloqueos neu- local. Esto parece deberse a la diferente exhaustividad
roaxiales (%) en los estudios realizados por la French-Language en la recogida de datos entre ambos estudios. En ninguno
Society of Paediatric Anaesthesiologists (ADARPEF, Francia) y de ellos se registraron complicaciones serias, como abs-
por la Pediatric Regional Anesthesia Network (PRAN, Estados ceso/hematoma epidural, déficit neurológico persistente o
Unidos). muerte.
Bloqueos centrales en Pediatría: una revisión de la literatura actual 93
Apófisis espinosa
Ligamento amarillo
Apófisis transversa
Duramadre Espacio
intratecal
Cuerpo vertebral
Lundblad et al. evaluaron mediante ultrasonidos la difu- proyectando el anestésico cranealmente. Así explicaron la
sión secundaria en el bloqueo caudal como consecuencia diferencia entre el nivel ecográfico de anestésico tras la
del mecanismo de rebote del LCR: el saco dural se com- inyección y el nivel sensitivo final mediante exploración de
prime tras la inyección de anestésico, y en un segundo dermatomas48 .
tiempo, se reexpande comprimiendo el espacio epidural y
Ligamento sacrococcígeo
Ligamento amarillo
Lámina
Lámina
Duramadre
Figura 5 Sonoanatomía del canal espinal lumbar con catéter epidural vía caudal (plano longitudinal paramedial).
24. Thomson ME, Aasheim H. Migrating thoracic epidural catheter 41. Crock C, Orsini F, Lee KJ, Phillips RJ. Headache after lumbar
in an infant. Paediatr Anaesth. 2012;22:285---7. puncture: Randomised crossover trial of 22-gauge versus 25-
25. Llewellyn N, Moriarty A. The national pediatric epidural audit. gauge needles. Arch Dis Child. 2014;99:203---7.
Paediatr Anaesth. 2007;17:520---33. 42. Frawley G, Smith KR, Ingelmo P. Relative potencies of bupi-
26. Moriarty A. Pediatric epidural analgesia (PEA). Paediatr vacaine, levobupivacaine, and ropivacaine for neonatal spinal
Anaesth. 2012;22:51---5. anaesthesia. Br J Anaesth. 2009;103:731---8.
27. López-García JC, Castejón J, Moreno M, Ramírez-Navarro A. 43. Westin BD, Walker SM, Deumens R, Grafe M, Yaksh TL. Valida-
Anestesia multimodal infantil: analgesia epidural. Rev Soc Esp tion of a preclinical spinal safety model: Effects of intrathecal
Dolor. 2004;11:420---9. morphine in the neonatal rat. Anesthesiology. 2010;113:183---99.
28. Cox RG. From the Journal archives: Epidural anesthesia in young 44. Walker SM, Grafe M, Yaksh TL. Intrathecal clonidine in the neo-
children: What have we learned in the past 60 years? Can J natal rat: Dose-dependent analgesia and evaluation of spinal
Anaesth. 2014;61:72---5. apoptosis and toxicity. Anesth Analg. 2012;115:450---60.
29. Taenzer AH, Walker BJ, Bösenberg AT, Martin L, Suresh S, Pola- 45. Westin BD, Walker SM, Deumens R, Grafe M, Yaksh TL. Effects
ner DM, et al. Asleep versus awake: Does it matter?: Pediatric of intrathecal ketamine in the neonatal rat: Evaluation of
regional block complications by patient state: A report from the apoptosis and longterm functional outcome. Anesthesiology.
Pediatric Regional Anesthesia Network. Reg Anesth Pain Med. 2010;113:147---59.
2014;39:279---83. 46. Hermanns H, Stevens MF, Werdehausen R. Sedation during spinal
30. Mosetti V, Ivani G. Controversial issues in pediatric regional anaesthesia in infants. Br J Anaesth. 2006;97:380---4.
anesthesia. Paediatr Anaesth. 2012;22:109---14. 47. Tsui BC, Suresh S. Ultrasound imaging for regional anesthesia
31. Osaka Y, Yamashita M. Intervertebral epidural anesthesia in 2050 in infants, children and adolescents: A review of current lite-
infants and children using the drip and tube method. Reg Anesth rature and its application in the practice of neuraxial blocks.
Pain Med. 2003;28:103---7. Anesthesiology. 2010;112:719---28.
32. Kokki H. Spinal blocks. Paediatr Anaesth. 2012;22:56---64. 48. Lundblad M, Eksborg S, Lönnqvist PA. Secondary spread of
33. Imbelloni LE, Vieira EM, Sperni F, Guizellini RH, Tolentino AP. caudal block assessed by ultrasonography. Br J Anaesth.
Spinal anesthesia in children with isobaric local anesthetics: 2012;108:675---81.
Report on 307 patients under 13 years of age. Paediatr Anaesth. 49. Ueda K, Shields BE, Brennan TJ. Transesophageal echocardio-
2006;16:43---8. graphy: A novel technique for guidance and placement of an
34. Sinner B, Becke K, Engelhard K. General anaesthetics and the epidural catheter in infants. Anesthesiology. 2013;118:219---22.
developing brain: An overview. Anaesthesia. 2014;69:1009---22. 50. Tsui B, Leipoldt C, Desai S. Color flow Doppler ultrasonography
35. Williams RK, Black IH, Howard DB, Adams DC, Mathews DM, can distinguish caudal epidural injection from intrathecal injec-
Friend AF, et al. Cognitive outcome after spinal anesthesia and tion. Anesth Analg. 2013;116:1376---9.
surgery during infancy. Anesth Analg. 2014;119:651---60. 51. Silva-Blas L, Páez-Serralde F, Uribe-Velázquez H, Marrón-Peña
36. Abajian JC, Mellish RW, Browne AF, Perkins FM, Lambert DH, M. Eventos adversos de los bloqueos neuroaxiales centrales y
Mazuzan JE Jr. Spinal anesthesia for surgery in the high-risk periféricos en niños. Rev Mex Anestesiol. 2008;31:S269---73.
infant. Anesth Analg. 1984;63:359---62. 52. Apiliogullari S, Duman A, Gok F, Akillioglu I. Spinal needle design
37. Craven PD, Badawi N, Henderson-Smart DJ, O’Brien M. Regional and size affect the incidence of postdural puncture headache
(spinal, epidural, caudal) versus general anaesthesia in pre- in children. Paediatr Anaesth. 2010;20:177---82.
term infants undergoing inguinal herniorraphy in early infancy. 53. Kokki M, Sjövall S, Kokki H. Epidural blood patches are effec-
Cochrane Database Syst Rev. 2003;3:CD003669. tive for postdural puncture headache in pediatrics–A 10-year
38. López T, Sánchez FJ, Garzón J.F C., Muriel C. Spinal anesthesia experience. Paediatr Anaesth. 2012;22:1205---10.
in pediatrics patients. Minerva Anestesiol. 2012;78:78---87. 54. Williams RK, Adams DC, Aladjem EV, Kreutz JM, Sartorelli KH,
39. Arthrus OJ, Murray M, Zubier M, Tooley J, Kelsall W. Ultrasono- Vane DW, et al. The safety and efficacy of spinal anesthesia for
graphic determination of neonatal spinal canal depth. Arch Dis surgery in infants: The Vermont Infant Spinal Registry. Anesth
Child Fetal Neonatal Ed. 2008;93:F451---4. Analg. 2006;102:67---71.
40. Haes J, Borges B, Armstrong D, Srinivasan I. Accuracy of manual 55. Tassone RF, Seefelder C, Sethna NF. Unilateral hemiparesis
palpation vs ultrasound for identifying the L3-L4 intervertebral with thoracic epidural in an adolescent. Case Rep Anesthesiol.
space level in children. Paediatr Anaesth. 2014;24:510---5. 2012;2012:732584.