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No todas las oraciones son enunciados; respecto de la oración «¿Qué hora es?»
carece de sentido decir tanto que es verdadera como que es falsa, en
consecuencia, ella es un ejemplo de oración que no es enunciado. Un ejemplo de
enunciado es el siguiente: «Hoy llueve en la ciudad de Tacuarembó». Otro ejemplo
es, naturalmente, «Hoy no llueve en la ciudad de Tacuarembó».
Las premisas aparecen así expresando cierta información inicial que permite
obtener la información expresada en la conclusión. La propiedad de ser premisa o
ser conclusión es, naturalmente, relativa al argumento. Un mismo enunciado puede
ser premisa en un argumento y ser conclusión en otro
Módelo 2
a. Si una ciudad está al norte del Río Negro, se ubica al norte de Montevideo.
La ciudad de Florida está al norte de Montevideo
La ciudad de Florida está al norte del Río Negro.
b. Los tacuaremboenses son uruguayos.
Los montevideanos no son tacuaremboenses
Los montevideanos son uruguayos
El caso (b) es más interesante: ¿puede decirse allí que no hay transmisión
de la verdad? Tanto las premisas como la conclusión son verdaderas —es decir, no
se está en el caso (a). Lo que falla es el requisito de necesariedad. Lo exigido
—desde el punto de vista lógico— no es meramente que de hecho la conclusión sea
verdadera o que al menos una de las premisas sea falsa; se exige que si las
premisas son verdaderas necesariamente la conclusión lo sea. O, dicho de otro
modo, que sea imposible la verdad de todas las premisas y la falsedad de la
conclusión. Luego tampoco en este caso estamos frente a un argumento
lógicamente correcto ya que la conclusión no es consecuencia lógica de sus
premisas. Ejemplos de tal transmisión necesaria de la verdad (es decir, de
corrección lógica) son el argumento (c) y el argumento del Ejemplo I. En síntesis, un
argumento es correcto —desde el punto de vista lógico— si, siempre que las
premisas son verdaderas, su conclusión lo es. O, dicho de otro modo, si es
imposible que las premisas sean verdaderas y la conclusión sea falsa. En este caso
se dice que la conclusión es consecuencia lógica de las premisas o que éstas
implican la conclusión. La argumentación que exhibe tal relación entre premisas y
conclusión se denomina deductivamente correcta.
El objeto de la lógica
Si se atiende a los desarrollos anteriores pueden ofrecerse una primera
caracterización del objeto de la lógica. La misma podría expresarse así: la lógica se
ocupa del estudio de la argumentación deductiva.