Universidad José María Vargas

Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas

Escuela de Derecho
2er Año
Seminario I (Arrendamiento)
Fecha: Junio, 2022

GACETA OFICIAL DE REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

DECRETO N° 8.190 (ANÁLISIS)

Participante:

Guevara Rosaly

C.I.: 20.595.648

Profesor: Pedro Araujo

Período: Junio – Julio 100% Online

Decreto N° 8.190

El presente decreto con rango, valor y Fuerza de ley contra el desalojo y la

desocupación arbitraria de vivienda en la presente gaceta le hace énfasis en la exposición
de motivo al estado como ente garante de los derechos fundamentales a la vida humana,
como la alimentación, salud, educación, el derecho a una vivienda digna, seguridad social
y económica.

Señala que a pesar de los esfuerzos realizados existen un gran déficit de soluciones
habitacionales en el estado venezolano producto de irregularidades y distorsiones en el
mercado inmobiliario debido al alto costo de los materiales en el sector construcción.

Aunado a estos factores existen gran cantidad de familias que viven bajo el sistema de
arrendamiento a causa de su poca capacidad económica para obtener una vivienda digna
y confortable que le sirva de asentamiento de sus hijos. Ya que estas familias
permanecen allí hasta que puedan satisfacer las demandas de los arrendadores en los
precios del alquiler de acuerdo al mercado por la vía de especulación inmobiliaria, donde
colocan el alquiler a un costo no real inalcanzable para el arrendatario produciendo un
elevado incremento en el valor de arrendamiento del inmueble, trayendo consigo que el
arrendatario pierda el derecho a ocuparla.

Muchos de estas familias ante la imposibilidad de políticas habitacionales de obtener

una vivienda propia por el alto costo de la vida permanecen largos periodos en una
vivienda arrendada. una familia que se reside por un largo periodo de tiempo en el mismo
inmueble, adquiere el sentido de pertenencia y apego hacia la vivienda. Cuando la
persona es desocupada de la vivienda crea en el individuo problemas psicológicos,
consecuencias económicas y sociales que afectan directamente el entorno del grupo
familiar.

A pesar de que estas familias buscan de sobrevivir o estar en comodidad se ven

afectados por los propietarios por tomar medidas drásticas e ilegales de desalojo por
parte de los propietarios para realquilar estas viviendas y aumentar o acrecentar los
cánones de alquiler para elevar su margen de ganancia económica.

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 Es por ello que existen un gran número de familias que poseen una ocupación
condicionada al capricho de los propietarios debido a la falta de regulación y control
efectivo, que trae como consecuencia la perdida de sus lugares y no por falta de pago
como lo establece el art. 34 que establece la congelación de los alquileres para inmuebles
construidos antes de 1987. Señala que para burlar el congelamiento de estos inmuebles
los propietarios acuden a un tribunal y solicitan medidas de secuestro para obtener los
inmuebles arrendados, logrando evadir lo que establece el artículo anterior y proceden a
realquilarlo utilizando la práctica de traspaso a precios por encima del valor real del
inmueble.

Señala que se hace necesario la intervención directa del estado, debido a la

coyuntura que actualmente afronta el sector vivienda, debido al alto déficit que existe en
esta materia.

Igualmente se menciona el artículo 2 del pacto internacional de Derechos Económicos,

Sociales y Culturales de la Organización de las Naciones Unidas, suscrito y ratificado por
la República, donde le impone a los estados partes de obligación general para adoptar
medidas adecuadas y legislativas para garantizar el derecho humano a todas las
personas a una vivienda justa y adecuada.

Así mismo señala que la evidente crisis en el sector hábitat y vivienda que ha
generado el capitalismo y las políticas neoliberales de la otras repúblicas han
imposibilitado a los sectores de la sociedad acceder o adquirir una vivienda digna a las
personas de escasos recursos económicos, donde se ven en la obligación a requerir o
aceptar contratos de arrendamientos a altos costos fijados por el mercadeo especulativo
de vivienda y aceptar aumentos en los cánones exagerados, e ilegales donde se ven
obligados a ocupar edificios y terrenos como alternativas para construir sus viviendas, en
otra ocasiones aceptar políticas crediticias especulativas donde no logran cubrir los pagos
mensualmente, produciendo en las personas cansancio físico y mental, hostigamientos,
amenazas y ejecuciones de desalojos arbitrarios, donde se violan los derechos humanos,
tratados y convenios internacionales suscritos por nuestro país.

Todas estas razones fundamentan el presente decreto que busca consolidar y

garantizar a todas las personas o familias, el respeto y la protección del hogar, la familia,

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la seguridad personal, la salud física y mental, que implica el derecho a no ser desalojado
arbitrariamente, donde se logre establecer los procedimientos especiales para garantizar
los desalojos forzosos, donde se tenga el derecho a la defensa contemplado en el artículo
49 de la CRBV y las familias sean protegidas a tener una vivienda digna y adecuada ,
garantizando los medios para que éstas personas de escasos recursos puedan acceder a
políticas sociales que favorezcan una nueva alternativa para obtener su vivienda.

El objeto.

El objeto del presente decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley,es la protección de
las arrendatarias y arrendatarios, comodatarios y ocupantes o usufructuarios de un bien
inmueble destinado a una vivienda familiar o principal, subsanar el cumplimiento de
medidas administrativas o judiciales para no interrumpir o cesar la posesión legítima que
ejercieren.

Sujeto objeto de protección.

Son todas aquellas personas naturales y grupos de personas o familias que ocupan
inmuebles destinados a una vivienda principal en calidad de arrendatarios, comodatarios
o de manera legítima aquellas personas que ocupen un inmueble se le debe dar
protección.

Ámbito de aplicación.

Se debe aplicar en todo el territorio de la República Bolivariana de Venezuela, y

específicamente en cualquier medio, donde haya pérdida de la posesión o tenencia de un
inmueble destinado a vivienda principal o multifamiliar que incumpla con la actuación
administrativa o decisión judicial lo amerite.

Restricción de los desalojos y desocupación forzosa de vivienda.

De acuerdo con el artículo 4, no podrá procederse a la ejecución de desalojo forzoso o

a la desocupación de vivienda mediante coacción o constreñimiento, contra los sujetos de
protección (la familia), es decir, el que incurra en esta falta debería ser suspendido por la
respectiva autoridad.

Procedimiento previo a las demandas.

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 De acuerdo al artículo 5, toda acción judicial o administrativa, debe derivarse de una
decisión de perdida de posesión o tenencia de un inmueble destinada a una vivienda
principal, la cual deberá tramitarse a través de un tribunal del ministerio con competencia
en materia de hábitat y vivienda, tomando en consideración el artículo 6, que se refiere al
inicio del proceso, donde el interesado debe consignar la solicitud escrita debidamente
motivada y documentada ante el ministerio del poder popular con competencia en materia
de vivienda y hábitat.

El artículo 7, referente a la audiencia conciliatoria se refiere a las funciones que tiene el

funcionario competente a citar a la otra parte para que comparezca acompañada de un
abogado a exponer sus alegatos y defensa, en una audiencia conciliatoria en un lapso
que no podrá ser menor de 10 días hábiles ni mayor de 15 días hábiles, contados a partir
de su citación; Si no lograra comparecer en el plazo indicado el funcionario deberá
extender la correspondiente citación a la defensoría especializada y se suspenderá el
curso de su procedimiento, hasta la comparecencia del defensor, fijando una nueva fecha
conciliatoria, si en esta nueva fecha conciliatoria no comparece a la audiencia se declara
desierto el acto, debiéndose fijar una nueva oportunidad dentro de los 10 días hábiles
siguientes a este, si en esta nueva oportunidad no se presentan alguna de las partes, el
operador de justicia procederá a dictar su decisión., debido a que se considerara
desistimiento de su solicitud, produciendo así fin del procedimiento.

Culminación del procedimiento.

De acuerdo al artículo 8, el procedimiento o culminación de la audiencia conciliatoria,

todos los presentes deben suscribir en un acta todos los acuerdos o soluciones que las
partes adopten o la infructuosidad de las gestiones conciliatorias.

Resultado de la audiencia conciliatoria.

De acuerdo al artículo 9, cuando se celebra la audiencia, las partes deben llegar a un

consenso en forma clara y concisa de todo lo acordado. Si no hubiera acuerdo entre las
partes el funcionario debe motivar la decisión que corresponda, con base a los
argumentos y alegatos presentadas por estas; si la decisión es favorable a la parte contra
la cual obra la solicitud el funcionario debe dictar una resolución mediante el cual, dicha
parte quedara protegida contra el desalojo, habilitando la vía judicial para el solicitante; si
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por el contrario es favorable al solicitante, el funcionario indicara en la resolución el plazo
tras el cual podrá ejecutarse el desalojo por orden judicial.

Acceso a la vía judicial.

De acuerdo con el artículo 10, una vez cumplidos los procedimientos antes descritos,
las partes pueden acceder a los órganos jurisdiccionales competentes para hacer valer
sus pretensiones, teniendo en cuanta que si no se cumplen los procedimientos a los que
se hace mención, no podrán acceder a la solicitud de estos órganos.

Garantía del derecho a la defensa.

Según el artículo 11, indica que cuando una de las partes acude a algún órgano
jurisdiccional, el juez competente debe percatarse o asegurarse de que el sujeto objeto de
protección cuente con representación jurídica, durante todo el proceso, tal como lo
establece el artículo 49 de la constitución de la república bolivariana de Venezuela, el
debido proceso que es el derecho a la defensa.

Procedimiento previo a la ejecución de desalojo

De acuerdo como lo establece el artículo 12,los funcionarios judiciales están obligados

a suspender por un lapso no menor de noventa (90) días hábiles, ni mayor a ciento
ochenta (180) días hábiles, cualquier actuación o provisión judicial en fase de ejecución
que implique el cese sobre la posesión legitima del bien.

Condiciones para la ejecución del desalojo.

Este artículo se refiere al plazo indicado que el funcionario judicial debe verificar
donde el sujeto afectado por la medida del desalojo tenga la debida asistencia de un
abogado o defensor público, si esto no ocurre se de efectuar el procedimiento previo
establecido en los artículos 5, 6, 7 y 8 del presente decreto con rango valor y fuerza de
ley, sin cuyo cumplimiento no podrá procederse a la ejecución del desalojo, luego debe
remitir al ministerio competente en materia de vivienda y hábitat una solicitud motivada
donde señálela provisión de refugio temporal o solución habitacional definitiva para el
sujeto afectado y su núcleo familiar por el desalojo, en todo caso no procederá el
desalojo si estos no son reubicados en un ambiente seguro y cómodo.

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Ejecución material del desalojo.

Tal cual como lo establece el artículo 14, la ejecución material del desalojo, deben
cumplirse todas las previsiones del presente decreto, la ejecución no debe llevarse a cabo
por ningún motivo en un horario nocturno, de madrugada, ni los días viernes, sábado y
domingo, también indica que la fuerza pública solo se puede utilizar en circunstancias
violentas sin embargo estas deben realizarse respetando los derechos humanos de la
parte afectada y su núcleo familiar, las mismas deben ser presenciadas y avaladas por
un defensor público. El afectado debe ser notificado del desalojo con una antelación de
noventa (90) días máximo.

Garantía del derecho a la vivienda.

De acuerdo al artículo 15, indica la obligación de la reubicación del sujeto afectado, en

una vivienda segura, cómoda y digna, poniendo a su disposición y la del público en
general y los interesados directamente con las organizaciones sociales que están
establecidas para la defensa de los arrendatarios y ocupantes, dentro de un plazo de
noventa (90) días desde la ejecución del desalojo.

Prohibición de decretar secuestros cautelares.

Artículo 16, establece la prohibición de dictar medidas cautelares de secuestro sobre

viviendas que constituyan en hogar de una familia o grupo de familias, en las demandas
por incumplimientos, resolución de contrato o ejecución de hipoteca.

Adquiriente de vivienda.

El artículo 17, indica los procedimientos a seguir según el desalojo por incumplimiento
de pago de crédito inmobiliario como consecuencia o cesación de pago, los cuales deben
ser informados a los ocupantes, la superintendencia de bancos (SUDEBAN), Banco
nacional de vivienda y hábitat (BANAVIH).

Inhabitabilidad del inmueble.

El artículo 18 dice que cuando el desalojo es de manera urgente por ser inhabitable
ese inmueble, por solicitud de alguna entidad pública como los bomberos en la mayoría
de las cosas o por la demolición y restructuración de la infraestructura, se puede pasar
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por alto los procedimientos establecidos para realizar un desalojo según este decreto,
informando así al ministerio del poder popular con competencia de vivienda y hábitat,
creando así una solicitud de reubicación para el grupo familiar afectado, siendo en refugio
temporal o una solución definitiva, una vez restituidas las condiciones de habitabilidad
este grupo tiene derecho de regresar al inmueble.

Preeminencia del presente Decreto-Ley.

Este artículo se refiere a la competencia preferente de la legislación en materia de

arrendamiento inmobiliaria y la legislación procesal vigente, en relación a las condiciones
requisitos y procedimientos de ejecución de desalojo.

Creación de la defensoría pública especializada.

El artículo 20 señala que fue creada para designar defensores públicos con
competencia en materia de defensa y protección del derecho a la vivienda, dentro de los
noventa (90) días de la publicación de desalojo. Estos son se suma importancia para
darle continuidad al proceso debido a que si alguna afectada no cuenta con un defensor
público el juez determinara suspensión de la causa.

Vigencia.

Artículo 21, este se refiere al tiempo en que dicho decreto surte efecto legal, el cual
indica que es a partir de su publicación en gaceta oficial.