El miedo como pulsión de vida: desde el Eternauta hasta la actualidad

El miedo es una sensación a-historica, primitiva y básica que interpela todos los seres
humanos. Asimismo esa emoción está presente desde un relato de ciencia ficción como
el Eternauta hasta la actualidad con el Covid-19. Pretendo desarrollar como el miedo
extremo nos paraliza y como el temor en su justa medida nos da el valor para salir
adelante.

Aristóteles menciona en su libro Ética Nicomáquea, que un exceso de miedo nos

convertiría en personas que “huyen de todo” y por lo tanto no soportaríamos nada. Sin
embargo en su caso contrario, si fuéramos demasiado “valientes” seríamos insensatos y
perderíamos la vida rápidamente.

Lo mencionado es pertinente relacionarlo con el Eternauta, primeramente cuando la

invasión extraterrestre llega, el miedo a lo desconocido los protege, Juan Salvo, su
familia y amigos, no salen de su hogar y se refugian. Pero el pobre personaje Polsky,
demuestra demasiada valentía y sale del hogar, demasiado pronto, sin medir
consecuencias y muere por la nevada toxica. Sin embargo, los personajes refugiados,
con el correr de las horas deben salir a enfrentar al enemigo para retomar, en algún
momento, la vida cotidiana.

Hoy en día, sucede algo parecido, existen personas que el miedo al virus, les ha
provocado patologías graves, no han salido de sus casas y han perdido el contacto con el
otro. La vida casi en su totalidad suscitada a lo virtual, ha provocado fobias e
incertidumbre. En el otro extremo, están los sujetos a los que el miedo, los ha hecho
actuar de forma poco compasivas y en algunos casos repudiables. Como olvidar al
inicio de la pandemia, los conflictos en los supermercados por los alimentos y más
reciente la venta ilegal de vacunas contra el virus.

Es importante observar el miedo desde el lado del escritor del Eternauta, Héctor
Oesterheld. El guionista perteneció a una organización política que estaba en contra de
la última dictadura militar en Argentina. En consecuencia, por medio de sus escritos
representaba sus ideas políticas. Mientras escribía el Eternauta, sus cuatro hijas fueron
desaparecidas y luego asesinadas, dos de ellas embarazadas. Finalmente en 1977 es
secuestrado y posteriormente asesinado. ¿Se podría decir que el autor tuvo miedo
durante todo su proceso de escritura? Absolutamente, sin embargo, ese temor lo hizo
fuerte para expresar sus ideas, y actuar en consecuencia contra un régimen político
despreciable.

Al igual que Oesterheld, hoy en día, ¿qué haremos con ese miedo que tenemos? El
miedo al asilamiento, miedo a la muerte y el miedo a convertirnos en “hombres-robots”.
Estamos ante un peligro real, una pandemia que en un principio, nos hizo pensar que
nos salvaríamos solo, pero luego al igual que en el Eternauta, comprendimos que “nadie
se salva solo”. Nuestro miedo debe encontrar el equilibrio: nos debe permitir salir a
trabajar y hacer nuestras prácticas sociales y a la vez tener la prudencia necesaria para
saber cuidarse y decir no a determinadas actividades.

Por último, no olvidar esa sensación de temor que nos otorga adrenalina y que nos hará
actuar, al igual que en el Eternauta, cuando se unieron todos en el “Combate de la
Avenida General Paz”. Un relato que sigue vigente y nos interpela. Usemos el miedo
como pulsión de vida y no de muerte, convivimos con él, en ciertas situaciones se
acrecienta, como hoy en día. Pero recordemos que siempre habrán “Ellos” con los que
debemos combatir.