Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
2.- Conforme al art. 94.4 CC., la regulación del régimen de visitas requiere tener
en cuenta los episodios de violencia de género o doméstica a fin de asegurar la
protección de la integridad física y moral de los hijos menores, sin olvidar la
protección de la madre víctima de violencia de género en la línea marcada por
los art.31 y 45 del Convenio de Estambul.
1
niño/a con su progenitor. las peticiones en esta materia del MF deberán
acomodarse a los principios de necesidad, proporcionalidad y adecuación.
5.- Como criterio general, la mera denuncia penal, sin otros elementos de juicio
no es suficiente para que las/los fiscales insten la suspensión del régimen de
visitas, siendo necesario comprobar la existencia de indicios fundados de la
comisión del delito derivados del auto de incoación de procedimiento abreviado,
orden de protección, escrito de acusación o cualquier medida cautelar.
2
prudencia y evalúen la situación, lo que con frecuencia requerirá informe de los
equipos psicosociales.
11.- Las numerosas reformas legales que en los últimos años han afectado a la
regulación del derecho de familia y las divergencias en los pronunciamientos
judiciales hace necesario la elaboración de una circular que proporcione a los
fiscales unos criterios doctrinales sistematizados en consonancia con la
jurisprudencia constitucional y del tribunal supremo que permita desarrollar con
unidad de criterio, la función que el legislador ha atribuido al MF en los procesos
de familia y en defensa del interés superior del menor.
1.- Cabe extraer un principio general sobre la necesidad de oír a las/los menores
con condiciones de madurez en todos los conflictos -sean o no de Derecho de
Familia- que les pudieran afectar directa o indirectamente.
2.- El incumplimiento del derecho de las/los menores a ser escuchado debe ser
denunciado por el Ministerio Fiscal mediante la interposición de los recursos en
cada caso procedentes, interesando, en su caso, la declaración de nulidad de la
sentencia y la retroacción del procedimiento a un momento procesal apto para
dar cumplimiento a este derecho y valorar su resultado antes de adoptar la
correspondiente decisión.
3.- En principio es obligado oír en los procesos que les afecten a las/los menores
cuando tengan suficiente juicio y siempre que sean mayores de 12 años. Cabe
acordar no oír a los menores, pero siempre dictando una resolución en la que se
motive y justifique tal decisión
3
4.- Se incurre en causa de nulidad si pese a existir diligencia exploración del hijo,
la sentencia prescinde de cualquier valoración sobre su resultado.
5.- Las/los menores tienen derecho a ser oídos y escuchados, pero no es una
obligación. Por tanto, debe respetarse la decisión de no ejercitarlo.
1.- Como pauta general, se evitará preguntar directamente a las/los menores con
qué progenitor desean convivir o qué régimen de visitas consideran más
conveniente. Son preferibles las preguntas indirectas que pongan de relieve con
cuál de los progenitores tienen una relación más intensa, cuál es el que ha
asumido la mayoría de las responsabilidades, y con cuál tiene mejor relación.
4
6.- Siempre que resulte posible, la exploración deberá ser señalada como
primera diligencia con el fin de evitar retrasos o demoras en la práctica de la
actuación.
7.- Es admisible la audiencia a través del Equipo Técnico que elabora el informe,
cuando por la edad de las/los menores no sea conveniente el examen directo
por el Juez. A contrario sensu, a partir de los doce años, debe entenderse que la
audiencia habrá de llevarse a cabo como regla general a presencia judicial.
1.- Las medidas previas a la demanda y las provisionales previstas en los arts.
771.1 y 773.1 LEC normalmente se prolongarán hasta ser sustituidas por las
medidas definitivas, por lo que aunque el precepto nada dice, debe ser
preceptiva la audiencia de las/los menores maduros.
5
La audiencia de las/los menores también debe ser respetada en estos
procedimientos, de conformidad con lo dispuesto en el apartado 2 del art. 18 de
la Ley 15/2015, de 2 de julio, de la Jurisdicción Voluntaria, en la redacción dada
por la Ley Orgánica de protección integral a la infancia y la adolescencia frente
a la violencia
4.- Para el cumplimiento de tal obligación de evaluación del interés social, será
imprescindible que el órgano judicial que conozca de la acción colectiva
comunique su iniciación al Ministerio Fiscal para que valore la posibilidad de su
personación. Para ello, se considera conveniente que los/as fiscales delegados
se recuerde a los respectivos Juzgados Decanos esa obligación legal prevista
en el art. 15.1 párr. 2º último inciso LEC.
6
propia, siempre evaluando la necesidad y las posibilidades de una acción
efectiva en beneficio de éstos, estando legitimado conforme al art. 11.5 LEC,
norma que autoriza la personación en la acción individual de un consumidor o
usuario iniciada por éste.
D) CONCLUSION GENERAL.-