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La anorexia

El trastorno alimentario conocido como anorexia nerviosa es un problema que va más


allá de la alimentación. Según el Instituto Nacional de Salud Mental (NIMH), la anorexia
nerviosa es una condición en la que las personas evitan comer, restringen severamente
los alimentos o comen solo cantidades muy pequeñas de ciertos alimentos. Incluso
cuando tienen un peso peligrosamente bajo, estas personas aún pueden considerarse
con sobrepeso. La anorexia nerviosa puede provocar una serie de consecuencias
graves para la salud, que incluyen pérdida de masa ósea, insuficiencia orgánica
múltiple y otros problemas de salud.

La anorexia es un trastorno alimentario caracterizado por una obsesión por perder


peso, lo que hace que las personas restrinjan la ingesta de alimentos y tengan una
percepción falsa de su propio cuerpo. A continuación, se presentan algunos aspectos
relevantes de este trastorno, basados en las siguientes investigaciones:

 Según Turón Gil (1999), las personas con anorexia suelen presentar trastornos
de personalidad, dificultad para expresar emociones y sentimientos, alteración
del pensamiento mágico y mágico, falta de consenso y sensibilidad a la crítica
y al fracaso.
 Los trastornos alimentarios son un fenómeno multifactorial complejo, regido
por factores internos, familiares, físicos y ambientales (Turón Gil, 1999).

 La anorexia es un fenómeno característico de la adolescencia, desencadenado


por los cambios de la pubertad, cambios psicofisiológicos latentes durante la
edad adulta. En términos existenciales y adaptativos, representa un intento
extremo ya veces inexplicable de resolver una crisis de identidad (Turón Gil,
1999).

 En un estudio de Fi-Admin (2016), se analizó la importancia de la anorexia en


adolescentes con anorexia. Se ha descubierto que la anorexia es una forma de
tomar el control de la vida y del cuerpo, y puede estar relacionada con la
necesidad de aprobación y el miedo al rechazo.
 Las redes sociales pueden influir en la angustia y la recuperación de la anorexia
nerviosa en adolescentes, según una revisión sistemática de Pérez-Fuentes et
al. (2020). Los resultados sugieren que las redes sociales pueden ser una
fuente de información y apoyo para las personas con anorexia nerviosa, pero
también pueden contribuir a crear comparaciones sociales y perpetuar
estereotipos sobre la belleza.
 En un artículo teórico de Losada et al. (2021) analizaron la posible relación
entre el uso de redes sociales y el desarrollo de anorexia en adolescentes. Se
concluyó que el uso excesivo de las redes sociales puede contribuir a la
insatisfacción corporal y la comparación social, aumentando el riesgo de
trastornos alimentarios.

Los factores de riesgo para la anorexia incluyen estar preocupado o prestar más
atención al peso y la forma del cuerpo, tener un trastorno de ansiedad en la infancia,
tener una imagen negativa de sí mismo, tener problemas para comer durante la
infancia o la niñez, tener ciertas nociones culturales o sociales sobre la salud y la
belleza, y tratando de ser perfeccionista o demasiado obsesionado con las reglas. La
anorexia suele comenzar en la adolescencia o en la adultez temprana, o adultez
temprana, y es más común en mujeres, aunque también puede ocurrir en hombres.

En resumen, la anorexia es un trastorno complejo en el que pueden influir factores


internos, familiares, físicos, ambientales y sociales. Es importante abordar este
trastorno desde una perspectiva multidisciplinaria, que incluya el tratamiento
psicológico, médico y nutricional, así como la prevención y educación de los
estereotipos.

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