Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
ambiental
PID_00240769
José C. Balasch
Ramon J. Batalla
Con la colaboración de
Jordi Tuset
Ninguna parte de esta publicación, incluido el diseño general y la cubierta, puede ser copiada,
reproducida, almacenada o transmitida de ninguna forma, ni por ningún medio, sea éste eléctrico,
químico, mecánico, óptico, grabación, fotocopia, o cualquier otro, sin la previa autorización escrita
de los titulares del copyright.
© FUOC • PID_00240769 Hidroclimatología ambiental
Índice
Introducción............................................................................................... 5
1. Recursos hídricos............................................................................... 7
1.1. Recursos hídricos mundiales ....................................................... 7
1.2. Ciclo hidrológico, presiones y fuentes de incertidumbre ........... 8
1.2.1. Los factores de control del clima global y la
variabilidad hidrológica ................................................. 11
1.2.2. La vulnerabilidad del almacenamiento natural a
largo plazo ..................................................................... 11
1.3. La calidad del agua ..................................................................... 15
1.4. Demanda creciente de agua ........................................................ 16
1.5. La gestión sostenible de los recursos hídricos ............................ 17
1.6. El balance de los recursos hídricos en la península ibérica ......... 19
2. Riesgos hidrológicos.......................................................................... 22
2.1. Introducción ................................................................................ 22
2.2. Las inundaciones ......................................................................... 23
2.2.1. Definición ...................................................................... 23
2.2.2. Tipo de inundaciones .................................................... 23
2.2.3. Causas ............................................................................ 27
2.2.4. Las inundaciones en Cataluña ...................................... 32
2.2.5. Prevención y protección contra las inundaciones ......... 35
2.3. Las sequías ................................................................................... 37
2.3.1. Definición ...................................................................... 37
2.3.2. Caracterización de una sequía (factores) ....................... 37
2.3.3. Tipos de sequía .............................................................. 37
2.3.4. Indicadores de sequía .................................................... 40
2.3.5. Las sequías en Cataluña ................................................ 43
2.3.6. Consecuencias de la sequía ........................................... 44
2.3.7. Gestión y planificación de sequías ................................ 45
Bibliografía................................................................................................. 47
© FUOC • PID_00240769 5 Hidroclimatología ambiental
Introducción
1. Recursos hídricos
3
Se estima que en el mundo hay unos 1.400 millones de km de agua, de los Nota
cuales un 3 % son de agua dulce (figura 1).
El contenido de este subapar-
tado ha sido extraído de:
La gran cantidad de agua dulce de las capas polares, glaciares y acuíferos pro- FAO (2002). Agua y cultivos.
FAO.
fundos no es utilizable. El agua dulce que puede ser usada más directamente
procede sobre todo de la escorrentía superficial del agua de lluvia, generada
en el ciclo hidrológico. El agua se recicla continuamente por la evaporación
causada por la energía solar. El ciclo hidrológico consume diariamente más
energía que la utilizada en toda la historia de la humanidad.
3
La media anual de precipitación sobre la Tierra llega a los 119.000 km , de los
que alrededor de 74.000 km3 se evaporan a la atmósfera. Los 45.000 km3 res-
tantes fluyen hacia lagos, embalses y cursos de agua, o se infiltran en el suelo
alimentando los acuíferos. Este volumen de agua se denomina convencional-
mente recursos�hídricos. No todos estos recursos son utilizables, porque parte
del agua fluye hacia ríos remotos y parte durante inundaciones periódicas. Se
estima que entre 9.000 y 14.000 km3 son económicamente utilizables por el
hombre, una cifra muy baja en comparación con la cantidad total de agua en
la Tierra.
© FUOC • PID_00240769 8 Hidroclimatología ambiental
TARWR: The Average Total Annual Renewable Water Resources; media de los recursos renovables de agua anuales totales. Fuente:
Base de datos de la FAO AQUASTAT
Claramente, algunos países tienen más agua que otros. Sin embargo, esta me-
dida no es precisa, puesto que el tamaño de un país puede influir significativa-
mente en las diferencias entre los países. Por este motivo, es más útil conside-
© FUOC • PID_00240769 9 Hidroclimatología ambiental
rar el total de agua disponible por persona (figura 3), que puede proporcionar
un indicador más adecuado de la disponibilidad de agua para fines sociales
o económicos. Hay que señalar, sin embargo, que en los países tropicales de
Asia y África, donde el número de habitantes es muy alto, la disponibilidad
de agua dulce por persona es más reducida. Esto plantea un serio desafío para
el futuro de la gestión�y�conservación�de�los�recursos�hídricos, así como de
los ecosistemas acuáticos asociados.
Figura 3. Recursos de agua renovables anuales totales per cápita (TARWR) por país frente a
datos de población de 2009
los daños cuando hay un exceso de agua, y en las sequías, asegurando la dis-
ponibilidad de agua cuando sea necesario; y la segunda sirve para llevarla allí
donde se necesite. Otras intervenciones, como el cambio de los usos del suelo
(por ejemplo, asentamientos urbanos o la agricultura), alteran notablemente
el ciclo hidrológico a través de cambios en las tasas de infiltración, escorrentía
y evapotranspiración.
Figura 4. La intensidad de la extracción de agua subterránea para el año 2000 (en mm por
año), asignada a 0,5 × 0,5 celdas de la malla para el modelo de PCR-GLOBWB
Fuente: Wada y otros (2010), AGU; extraído de The United Nations World Water Development (informe 4, volumen 1), Unesco.
Figura 5. Evolución anual del nivel piezométrico de las aguas subterráneas de la llanura norte de
China y del hidrograma del río Fuyang que la cruza
A finales de los años setenta, la captación y extracción de recursos es tan alta que impacta en el caudal medio anual y el nivel
piezométrico del acuífero. Si se mantiene la intensidad de extracción se acabarán por agotar los recursos. Fuente: Konikow y
Kendy (2005); extraído de The United Nations World Water Development (informe 4, volumen 1), Unesco.
Las montañas reciben mucha más precipitación que las tierras bajas que las
rodean. Su contribución al suministro de agua es de particular importancia
cuando las tierras bajas son áridas (Viviroli y otros, 2003).
Figura 6. Distribución mundial de los glaciares y capas de hielo sin incluir la Antártida
Fuente: Armstrong y otros (2005). «National Snow and Ice Data Center»; extraído de The United Nations World Water
Development (informe 4, volumen 1), Unesco.
La fotografía de 1921 fue tomada por George Mallory, y la de 2009, por GRIP. Los resultados muestran que se ha perdido una
3
masa de hielo de 1 km . Fuente: Cooking Ideas.
© FUOC • PID_00240769 15 Hidroclimatología ambiental
La calidad del agua es un término relativo. La noción de calidad alta o baja del
agua (o de agua buena o mala) no está solo en función de su estado y de lo que
contiene, sino que también depende de para qué se utiliza. El agua «pura» no
existe en la naturaleza, solo en el laboratorio, y todas las sustancias�contami-
nantes lo son en función de su concentración en el agua. Esta es una de las
razones por las que los profesionales de la salud a menudo prefieren utilizar
el término agua «segura» en vez de agua «limpia». El suministro suficiente de
agua de calidad adecuada es un ingrediente clave en la salud y el bienestar de
los seres humanos y los ecosistemas, y para el desarrollo social y económico.
La calidad� del� agua se está convirtiendo en una preocupación mundial de
creciente importancia, ya que los riesgos de degradación se traducen directa-
mente en impactos económicos y sociales. A pesar de que se han verificado
algunos éxitos en la mejora de la calidad del agua a escala regional, no hay
datos que sugieran una mejora general de la calidad del agua a escala global.
La calidad del agua está indisolublemente unida a la cantidad de agua, puesto
que las dos son los principales factores determinantes de la oferta. La calidad
se puede ver afectada (figura 8):
c) Por la temperatura.
Figura 8. La calidad del agua se ve afectada por vertidos directos y puntuales (por ejemplo,
efluentes urbanos o industriales), así como por contaminación difusa procedente de la
agricultura o la ganadería
Fuente: http://blogecologista.com/fotos-de-contaminacion-de-agua.
Satisfacer una demanda de agua continua y cada vez mayor requiere esfuerzos
para compensar la variabilidad natural y mejorar tanto la calidad como au-
mentar la cantidad del agua disponible. Algunas estrategias que ya se utilizan
para hacerle frente son:
Es el embalse más importante de la región de Madrid, tiene una capacidad de 425 hm³ y representa el 46 % del volumen
embalsado de la región. Fue construido en 1972 y pertenece a la red del Canal de Isabel II. Fuente: Eadic.
En la actualidad, la política del agua todavía se rige sobre todo por inquietudes
políticas y económicas a corto plazo que a menudo tienen poco en cuenta la
ciencia, la experiencia y la buena gestión. Hacen falta soluciones tecnológicas
punteras y más financiación, así como más datos sobre los recursos hídricos,
sobre todo en los países en desarrollo. Para evaluar el estado de los recursos
hídricos, la sociedad tiene que ser consciente de las funciones de los diferentes
componentes del ciclo del agua, como la lluvia, el agua procedente del des-
hielo de los glaciares, etc. De lo contrario, será difícil desarrollar estrategias de
protección y mitigación adecuadas.
La mala calidad del agua y el uso insostenible de los recursos hídricos pueden
limitar el desarrollo económico de un país, afectar a la salud de su población
y repercutir en sus medios de subsistencia. Afortunadamente, se están empe-
zando a adoptar prácticas más sostenibles, aunque en combinación con otras
que no lo son tanto:
© FUOC • PID_00240769 19 Hidroclimatología ambiental
A grandes rasgos:
1)�Las�cuencas�del�Segura,�Júcar�y�las�mediterráneas�de�Andalucía presen-
tan situaciones de déficit: sus recursos son inferiores a los consumos. Si calcu-
lamos el potencial desarrollo demográfico, urbano y económico de estas zo-
nas, podemos incluir en este grupo a la cuenca atlántica de Andalucía, la del
Guadalquivir.
Las cuencas con superávit llevan suficiente caudal para abastecer la demanda.
La irregularidad en el reparto de las precipitaciones a lo largo del año o en el
mismo territorio se soluciona tradicionalmente con la construcción de embal-
ses y canalizaciones que regulan los caudales y reparten el agua por la cuenca.
En estas cuencas, las zonas litorales (con grandes ciudades) y las limítrofes a
los ríos (con importante desarrollo del regadío e importantes cascos urbanos)
es donde mayoritariamente se localiza la demanda. Las actividades industria-
les se localizan en las grandes vías de comunicación, en zonas próximas a las
grandes ciudades o bien comunicadas con ellas. Estas vías de comunicación
acostumbran a seguir el curso de los ríos. Un buen ejemplo de ello es la llanura
del Baix Llobregat, donde encontramos, en muy poco espacio, importantes
cascos urbanos, regadíos (en el delta y en la llanura aluvial del río Llobregat)
y grandes industrias junto a las grandes vías de comunicación.
© FUOC • PID_00240769 22 Hidroclimatología ambiental
2. Riesgos hidrológicos
2.1. Introducción
Figura 13. Evolución del porcentaje respecto al valor medio de la anomalía de la precipitación
(valor medido menos valor medio del periodo 1786/87-2006/07) de setiembre a agosto (año
hidrometeorológico) desde 1786 hasta 2007 en la ciudad de Barcelona
En esta figura se puede observar la gran variabilidad interanual (de un año a otro) que presenta la precipitación, característica
típica de los climas de latitudes medias y sobre todo del clima mediterráneo. Estos datos solo son representativos de la
costa central catalana, específicamente del área de Barcelona. Fuente: Altava Ortiz y otros; Grupo de Análisis de Situaciones
Meteorológicas Adversas.
© FUOC • PID_00240769 23 Hidroclimatología ambiental
Figura 14. Imagen de la crecida del río Garona del 19 de junio de 2013 en el Valle de Arán
La ocupación de las zonas inundables tiene un alto riesgo y este es fruto de una errónea planificación y ordenación del territorio
fluvial. Fuente: Bomberos de la Generalitat de Cataluña.
2.2.1. Definición
Figura 15. Paso subterráneo inundado por la acumulación de agua posterior a un episodio de
precipitación torrencial en la población de Castelldefels
La acumulación de vegetación y sedimentos va taponando la red de drenaje e impide su correcto funcionamiento. Fuente:
Postales desde Castelldefels.
Figura 16. Inundación por desbordamiento del río Segre a su paso por la población de Ponts, 7
de noviembre de 1982
Figura 17. El 5 de junio de 1976 la presa de Teton (Estados Unidos) se rompió y causó una
importante inundación
El impacto agua abajo provocó la muerte de catorce personas y un coste, entre las reconstrucciones y las indemnizaciones,
cercano a los mil millones de dólares. Fuente: US Department of the Interior, Bureau of Reclamation.
1)�Inundaciones�muy�rápidas,�producidas�por�lluvias�de�alta�intensidad
(por ejemplo, superiores a 180 mm/h) pero muy cortas (por ejemplo, menos
de una hora). La cantidad de lluvia totalizada no acostumbra a superar los 80
mm. Normalmente, producen inundaciones locales en las ciudades y pueblos
(inundaciones de plazas, garajes, sótanos, etc. debido a problemas de drenaje)
o en pequeñas cuencas con mucha pendiente, donde se producen las llama-
das inundaciones repentinas o flash-floods. Estas últimas son peligrosas para los
practicantes de deportes de riesgo (barranquismo), así como en los pueblos
costeros y zonas turísticas próximas a las montañas del litoral y de los Pirineos.
La predicción meteorológica a corto plazo de la cantidad, intensidad y lugar
afectado por las lluvias es prácticamente imposible. El radar meteorológico y
los modelos de mesoescala (media escala) podrán ser buenas herramientas para
su previsión a muy corto plazo. A pesar de esta posibilidad, la mejor previsión
ante estos episodios es la educación de la población. Este tipo de inundaciones
tiene lugar principalmente en verano y a principios del otoño.
2)�Las�inundaciones�producidas�por�lluvia�de�intensidad�fuerte�o�mode-
rada (superior a 60 mm/h) y duración inferior a 72 horas (alta cantidad de
precipitación). Estas inundaciones tienen lugar principalmente en otoño, a
pesar de que en algunos casos históricos se han producido durante la prima-
vera. Cuando estas lluvias afectan a ríos con mucha pendiente o con mucho
transporte sólido (sedimentos), las inundaciones pueden ser catastróficas. Se
pueden distinguir dos categorías:
Impacto
2.2.3. Causas
Las causas más frecuentes que ocasionan inundaciones en nuestro medio son
naturales, no naturales (antrópicas) o mixtas.
Naturales
Las grandes lluvias son la causa principal de las inundaciones de origen natu-
ral, pero además hay otras causas no relacionadas con la meteorología.
1)�Meteorológicas
a)�Fluvial
Figura 18. Rotura de un dique provocada por el huracán Katrina en Nueva Orleans, Luisiana,
Estados Unidos, en 2005
c)� Locales: inundaciones producidas por falta� de� drenaje� efectivo cuando
llueve en tierras bajas o endorreicas.
Figura 19. El lago desbordado inunda el paseo del Doctor Dalmau de Bañolas en 1932
Según algunas estimaciones de testigos presenciales, el agua del lago subió 75 centímetros por encima de la línea máxima de
contención. Fuente: Meteorologia de Banyoles.
2)�No�meteorológicas
Figura 20. En abril y mayo de 1991 dos desprendimientos de rocas consecutivos se produjeron
sobre el pueblo de Randa, Suiza
a) Las carreteras y el tren quedaron interrumpidos al quedar bajo los escombros. No hubo muertos, aunque desaparecieron
ganado, granjas y algunas casas. b) El desprendimiento taponó el río Mattervispa, lo que causó la inundación de la población
de Randa. Fuente: National Platform for Natural Hazards.
No naturales (antrópicas)
1)�Grandes
b)�Desviación�u�obturación�de�cursos�fluviales.
c)�Deforestación�y�prácticas�deficientes�de�cultivos.
Causas mixtas
Figura 22. Imagen del estado de la presa de Tous después de romperse en octubre de 1982
Fuente: ABC.
Figura 23. Evolución del cambio de los usos del suelo desde la ermita de La Cisa, Premià de Mar
(Barcelona)
b)�La�combinación�de�diferentes�situaciones�meteorológicas�adversas. Muy
a menudo puede pasar que graves inundaciones se acentúen por la dificultad
de desagüe ante importantes temporales marítimos que dificultan la salida al
mar de la escorrentía.
c)�Una�mala�gestión�de�las�infraestructuras�hidráulicas. Generalmente, el
control de avenidas no es la función principal para la que se construye una
presa, pero la mayoría de ellas reservan una parte de su capacidad a la reduc-
ción de los caudales elevados que pueden recibir durante las tormentas. El la-
minado de las crecidas es un aspecto muy relevante en la gestión de recursos
hídricos y planificación del territorio, pues, por un lado, permite un rápido
llenado del embalse (a pesar de que también captura los sedimentos arrastra-
dos por la riada) y, por otro, reduce el riesgo de inundación en los sectores
© FUOC • PID_00240769 32 Hidroclimatología ambiental
localizados aguas abajo de la presa. Una gestión incorrecta no solo puede in-
hibir la capacidad de laminado de la infraestructura, sino que también puede
obligar a incrementar la magnitud de la crecida.
d)� La� mala� ordenación� del� territorio� urbano dentro del sistema fluvial o
zonas inundables (figuras 24 y 25).
Figura 24. Ayuntamiento de La Pobla de Lillet construido sobre un puente que atraviesa el río
Llobregat
Fuente: Enfo.
Figura 25. Avenida del 7 de noviembre de 1982 en el río Llobregat a su paso por la población
de La Pobla de Lillet
A lo largo del siglo XX, en comparación con los siglos anteriores, el número
de víctimas por inundación en Cataluña no ha dejado de crecer, hecho que
todavía tiene más relieve si se considera que disponemos de constancia histó-
rica de inundaciones mucho más fuertes que las actuales.
© FUOC • PID_00240769 33 Hidroclimatología ambiental
permite constatar una serie de oscilaciones más o menos marcadas, con una
tendencia durante el siglo XX al aumento de las inundaciones extraordinarias,
consecuencia, principalmente, del cambio de los usos del suelo y la ocupación
de las zonas inundables y los cauces.
(1)
Durante el pasado siglo XX, hay que destacar las siguientes inundaciones ca- Informe extraordinari del Síndic de
1 Greuges (2000).
tastróficas en Cataluña :
• 1940, 17-20 de octubre, aiguat de Sant Lluc: se considera una de las inun-
daciones catastróficas más graves del siglo XX. Afectó tanto al norte co-
mo al sur de Cataluña. En Gerona, las aguas del Ter alcanzaron los siete
metros por encima del nivel ordinario; el Llobregat también se desbordó,
con un caudal en Martorell de 2.200 m3/s. En total, se produjeron más de
trescientos muertos y desaparecidos y cerca de ciento veinte millones de
pesetas en pérdidas en Cataluña.
La década de los noventa ha estado mucho más marcada por las inundaciones
repentinas y de poco alcance geográfico, principalmente torrentadas, con víc-
timas mortales y fuertes daños económicos, como fue el caso de la tormenta
del 3 de septiembre de 1996, que causó pérdidas por más de 2.000 millones
de pesetas en el Maresme.
El riesgo
El análisis de riesgo ha introducido tres conceptos que forman parte del ries-
go: peligro (peligrosidad), vulnerabilidad y exposición. Cada uno de ellos
se relaciona con los tres componentes del espacio geográfico: la naturaleza,
el hombre y el territorio. Por peligro se entiende el fenómeno o proceso de
carácter natural que puede originar daños en una comunidad, en sus activida-
des o en el propio medio ambiente. La vulnerabilidad es la pérdida esperable
de un determinado bien expuesto, puede tratarse de vulnerabilidad humana,
estructural, económica o ecológica, de acuerdo con el tipo de riesgo que hay
que evaluar. El bien vulnerable más apreciado es la vida humana, y por eso
el grado de riesgo es más elevado cuando puede correr peligro la vida de las
personas. Finalmente, la exposición es la disposición sobre el territorio de un
conjunto de bienes que hay que preservar y que pueden ser dañados por un
fenómeno natural.
El producto de estos tres factores que forman el riesgo se completa con la se-
veridad o grado de intensidad de un fenómeno natural de rango�extraordi-
nario (magnitud) y la frecuencia o intervalo de tiempo de desarrollo de un
episodio natural extremo (figura 26).
© FUOC • PID_00240769 36 Hidroclimatología ambiental
Sea como sea, lo cierto es que en la superficie terrestre hay territorios de riesgo
e incluso se puede hablar de paisajes de riesgo, es decir, espacios cuya carac-
terística geográfica principal es la inadecuada ocupación de un espacio que
soporta frecuentes acontecimientos naturales de rango extraordinario.
Las PEF constituyen uno de los proyectos más ambiciosos de la Agencia Cata-
lana del Agua para el análisis detallado de los ríos en Cataluña, teniendo en
cuenta todos los agentes sociales. Uno de sus objetivos es el diseño y el esta-
blecimiento de medidas de protección de las personas y sus bienes.
Las PEF ordenan espacialmente los cursos fluviales para consensuar el aprove-
chamiento sostenible de sus recursos, la recuperación y la conservación am-
biental y paisajística con los usos históricos y la valorización social y econó-
mica, teniendo en cuenta el fenómeno de la inundabilidad y el riesgo que
puede comportar con respecto a las personas, los bienes y el medio y los há-
bitats existentes.
© FUOC • PID_00240769 37 Hidroclimatología ambiental
2.3.1. Definición
La sequía es un fenómeno hidrológico extremo que puede definirse como una Nota
disminución coyuntural significativa de los recursos hídricos durante un pe-
El material sobre las sequías se
riodo bastante prolongado y que afecta a un área extensa con consecuencias ha extraído y modificado de
socioeconómicas adversas. Hispagua, Sistema Español de
Información sobre el Agua.
La península ibérica sufre con cierta regularidad e intensidad, según las regio-
nes, periodos de sequía. El carácter más o menos habitual de este fenómeno se
debe al hecho de que la Península pertenece al dominio climático mediterrá-
neo y al hecho de que se encuentra próxima al ámbito de subsidencia subtro-
pical del anticiclón de las Azores. Además, factores de naturaleza geográfica e
© FUOC • PID_00240769 38 Hidroclimatología ambiental
1)�La�sequía,�desde�el�punto�de�vista�de�la�meteorología, es la disminución
de precipitaciones en una región en relación con el valor normal en un plazo
de tiempo determinado (figura 27). Se trata de un fenómeno que se instala
gradualmente y puede llegar a durar años en los casos más extremos.
Figura 27. Mapa elaborado con datos de estaciones automáticas del Servicio Meteorológico de
Cataluña para el periodo comprendido entre el 1 de septiembre de 2004 y el 31 de agosto de
2005
El mapa se elaboró con disponibilidad superior al 90 % de la información, comparada con la media climática extraída del Atles
Climàtic Digital de Catalunya (Ninyerola y otros, 2000). Este método se denomina porcentaje de precipitación normal (PPN).
Fuente: Servicio Meteorológico de Cataluña.
Figura 28. Estado del embalse de Sau, en la cuenca del Ter, en marzo de 2008
Fuente: Viquipèdia.
Fuente: Viquipèdia.
Ejemplo
1)�Índice�de�la�severidad�de�la�sequía�de�Palmer�(PDSI)
2)�Porcentaje�de�precipitación�normal�(PPN)
Los valores porcentuales estimados para cada año indican el déficit (valores
negativos) y el excedente (valores positivos) en la precipitación anual. Por su
parte, valores porcentuales próximos a cero corresponden a valores cercanos
a la media histórica (tabla 1).
Tabla 1. Clasificación del grado de sequía de acuerdo con valores del PPN
Ejemplo
La precipitación media anual (o normal) del Observatorio Fabra entre 1981 y 2010 es
de 621 mm.
El PPN para el Observatorio Fabra de Barcelona para el año 2015 ha sido de -47 %. Según
la tabla 1, en 2015 Barcelona sufrió un episodio de sequía fuerte, pero en el umbral de
ser considerada aguda.
Hay que tener presente que el PPN no tiene en consideración las características climáticas
de cada región, donde la variabilidad pluviométrica interanual puede ser muy diferente
(por ejemplo, baja en la vertiente atlántica o más alta en la región mediterránea de la
península ibérica).
3)�Índice�de�precipitación�estandarizada�(IPE�o�ESPI)
Fue desarrollado por Edwards y McKee en 1997. Este índice normalizado per-
mite estudiar diferentes escalas de tiempo y se recomienda para registros de
largo plazo. También permite hacer una evaluación del déficit o exceso de
© FUOC • PID_00240769 42 Hidroclimatología ambiental
Figura 30. Mapas de IPE para Cataluña para un intervalo de seis meses (agosto de 2015 - enero
de 2016)
Tabla 2. Clasificación del grado de sequía de acuerdo con valores del ESPI
4)�Índice�de�riesgo�de�sequía�(IRS)
El IRS está formado por cuatro componentes: precipitación media anual co-
rregida en función de la temperatura media anual, estacionalidad pluviomé-
trica, variabilidad y persistencia de la sequía. Este índice se definió para poder
determinar la severidad y duración de la sequía y para predecir el inicio y el
final de este periodo.
Las sequías son uno de los fenómenos con más repercusión en nuestro terri- Nota
torio; sin embargo, no tenemos que olvidar que, incluso en condiciones de
El material sobre las sequías en
normalidad, el régimen pluviométrico de Cataluña se caracteriza por la irre- Cataluña se ha extraído mayo-
gularidad general y, en particular, por una variabilidad interanual elevada. ritariamente del portal web de
la Agencia Catalana del Agua y
del Observatorio de Proyectos
y Debates de Cataluña.
Las últimas sequías registradas en tierras catalanas son la primera en 2005 y la
segunda durante los años 2007-2008. La combinación de estas sequías llevó a
Cataluña a un estado de emergencia que motivó un cambio en la gestión de Lectura recomendada
estos fenómenos, tal y como veremos más adelante.
En el siguiente documento,
encontraréis una compila-
ción de los últimos episodios
En el año 2005 se vivió una situación de extrema sequía generada por una de sequía vividos en Catalu-
persistente carencia de precipitaciones en todas las cuencas de Cataluña. El ña hasta 2003:
Agència�Catalana�de�l'Aigua
déficit pluviométrico fue de entre el 35 % y el 40 % de la media respecto a un
(2007). Les sequeres a Catalun-
periodo seco ordinario. ya. Barcelona: Generalitat de
Catalunya, Agència Catalana
de l'Aigua.
El año 2008 estuvo marcado por la peor sequía ocurrida en Cataluña en los
últimos setenta años, un episodio que se inició en abril de 2007 y que no acabó
hasta la segunda quincena de enero de 2009. Algunos datos, entre muchos de
los generados durante aquellos meses, son indicativos de la excepcionalidad
de este periodo. Quince meses seguidos sin precipitaciones en las cabeceras
de los ríos, unas reservas de agua en los embalses del Ter y el Llobregat que
llegaron al 20 % de su capacidad y con los principales acuíferos catalanes con
mínimos históricos.
© FUOC • PID_00240769 44 Hidroclimatología ambiental
1)�Efectos�directos:
• Impactos económicos.
• Agricultura y ganadería.
• Gestión del agua y abastecimiento.
© FUOC • PID_00240769 45 Hidroclimatología ambiental
• Industria.
• Impactos medioambientales.
• Agua, tierra, el aire y los organismos (flora y fauna).
• Zonas naturales protegidas y parques naturales.
• Efectos medioambientales combinados: contaminación.
• Aumento de incendios forestales.
2)�Efectos�indirectos:
a) Economía:
b) Impactos sociales:
• Las medidas que hay que aplicar en relación con el uso�del�agua en cada
estado de sequía (restricciones).
© FUOC • PID_00240769 47 Hidroclimatología ambiental
Bibliografía
Altava, V.; Llasat, M.; Barrera, A. y otros (2007). «La sequía en Cataluña en el año
2007». Grupo de Análisis de Situaciones Meteorológicas. Barcelona: Universidad de Barcelona
[documento en línea]. [Fecha de consulta: 30 de septiembre de 2015.] <http://gama.am.ub.es/
documentos/sequia/2007/informe%20sequia%202007.pdf>
Armstrong, R.; Raup, B.; Khalsa, S. J. S. y otros (2005). GLIMS Glacier Database. Na-
tional Snow and Ice Data Center [documento en línea]. <http://nsidc.org/glims/> y <http://
nsidc.org/glims/glaciermelt/index.html>.
Fontserè, E.; Galceran, F. (1938). Les inundacions d’octubre de 1937 a l’Alt Pirineu. Barcelona:
Memòries del Servei Meteorològic de Catalunya.
Giordano, M.; Vilholth, K. (eds.) (2007). The Agricultural Groundwater Revolution. Wa-
llingford, Reino Unido: Centre for Agricultural Bioscience International (CABI).
Hewitt, K. (1982). Natural Dams and Outburst Floods of the Karakoram Himalaya. Proceedings
of the Symposium on Hydrological Aspects of Alpine and High Mountain Areas. Internatio-
nal Association of Hydrological Sciences (IAHS). Publicación núm. 138. Wallingford, Reino
Unido: IAHS Press.
Shiklomanov, I. (1993). «World Fresh Water». En: P. H. Gleick (ed.). Water in crisis: A guide
to the World’s Fresh Water Resources. Nueva York: Oxford University Press.
Viviroli, D.; Weingartner, R.; Messerli. B. (2003). «Assessing the hydrological signifi-
cance of the world’s mountains». Mountain Research and Development (vol. 23, núm. 1, págs.
32-40).
Wada, Y.; Van Beek, L. P. H.; Van Kempen, C. M. y otros (2010). «Global depletion of
groundwater resources». Geophysical Research Letters (vol. 37, L20402).