Por: Luis Martin Seas Gonzales (Código de alumno postgrado: 231670987)
Fecha: 03 de junio de 2023. La huella de carbono representa el volumen total de gases de efecto invernadero (GEI) que producen las actividades económicas y cotidianas del ser humano. Conocer este dato es importante para tomar medidas y poner en marcha las iniciativas necesarias para reducirla al máximo, empezando por cada uno de nosotros en nuestro día a día. El rastro de gases de efecto invernadero (GEI) que dejan las actividades humanas se conoce como huella de carbono. Este indicador ambiental mide tanto las emisiones directas como indirectas de compuestos como el metano (CH4), el óxido de nitrógeno (N2O), los hidrofluorocarburos (HFCs), los perfluororcarburos (PFCs), el hexafluoruro de azufre (SF6) y, sobre todo, del más abundante y que más ha contribuido al calentamiento global desde 1990: el dióxido de carbono (CO2). La Organización Meteorológica Mundial (OMM) apunta que la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera alcanzó un nuevo récord en 2019 y que los niveles actuales de CO2 atmosférico son equiparables a los de hace más de tres millones de años, cuando el termómetro terrestre marcaba unos 3 °C más y el nivel del mar medía entre 10 y 20 metros más que hoy. Hasta ahora, la huella de carbono no ha parado de crecer —se ha multiplicado por 11 desde 1961— y ya supone el 60 % del impacto total del hombre en el medio ambiente, según estima la Global Footprint Network. Adicional a ello, en 2021, la concentración atmosférica de CO₂ (expresado en toneladas de CO2 emitidas) subió en 2,5 partes por millón (ppm) y se prevé que crezca lo mismo en 2022, hasta dejarla en las 417,2 ppm este año. Eso es un 51% por encima de los niveles preindustriales, antes de que el ser humano empezase a quemar a destajo los combustibles fósiles que han generado esta crisis. Asimismo, la huella de carbono personal es la que origina un solo individuo en su vida cotidiana al desplazarse, consumir, alimentarse y utilizar recursos como la energía. La ONG ambiental The Nature Conservancy estima que cada habitante del planeta genera una media de casi cuatro toneladas anuales de CO2, mientras que en países como Estados Unidos esta cantidad se cuadruplica por persona y año. Por otro lado, y de modo similar a la huella de carbono, la huella hídrica (HH) es un indicador medioambiental que mide el volumen de agua dulce (litros o metros cúbicos) utilizado a lo largo de toda la cadena de producción de un bien de consumo o servicio. Al respecto de ello, existen páginas web que calculan la huella de carbono y la huella hídrica, la cuales permiten hacer el cálculo por persona. Se realizó el cálculo de ambas huellas personalmente y éstos son los resultados a continuación. Al realizar el cálculo de huella ecológica en la página web de la Fundación Vida Sostenible los resultados me indicaron que “Si todo el mundo viviera como tú, necesitaríamos 2 planetas Tierra para vivir”. Esto debido a que, en dicha web, se realiza una encuesta referida a la edad, el tipo y tamaño de la casa, cuantas personas habitan en ella, el uso de sistemas de climatización, así como el uso de artefacto electrónicos y medios de transporte, la frecuencia del consumo de carne y compras en el mercado, la relación con las plantas, el uso de agua potable y por último la segregación de los residuos sólidos. Fuente: https://www.vidasostenible.org/proyectos/calculadora-de-huella-ecologica/ Para el cálculo de la huella hídrica, el portal web de la Autoridad Nacional del Agua presenta un cálculo personal del consumo del agua potable, a través de una encuesta como el tiempo estimado en bañarse, cepillarse los dientes, lavarse las manos, cerrar el caño cuando se enjabona, usar el baño, contar con una lavadora en casa, la frecuencia con la que se usa la lavadora y lavar el automóvil. El resultado fue 6968.6 litros de agua al mes. Lo que equivale a 232 botellas de agua al día. Esta cantidad es considerable y preocupante, tomar medidas en el consumo de agua es necesario. Fuente: https://snirh.ana.gob.pe/huellahidrica/#fakelink El cálculo de la huella de carbono, viene dado por la página web de la ONG GreenPeace, para obtener el resultado de ello, cuenta con una encuesta referida a la cantidad de artefactos electrónicos, el tipo de combustible usado en casa, la iluminación, el uso de medios de transporte, frecuencia y cantidad de consumos de carnes, y el tiempo de reemplazo de los aparatos electrónicos. Dando como resultado un consumo personal de 3267.6 kg C2, estas emisiones equivalen a cortar 66 árboles al año. Fuente: https://consumoresponsable.greenpeace.org.mx/calcula-tu-huella-de-carbono Por último, de los resultados obtenidos de la huella ecológica, huella hídrica y la huella de carbono, se puede concluir que realizo un consumo excesivo de aparatos electrónicos y consumo de agua. Esto va de la mano, con la era digital que nos tiene más conectados a una computadora y una red de internet, y que forma parte de un sistema que alienta al consumo. Es necesario el uso de éstas herramientas para ser más conscientes del consumo que llevamos, y tomar medidas de control, a fin de reducir el consumo de los recursos.
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