MONITOR: Queridos hermanos y hermanas.

Nos reunimos como

comunidad de catequesis para celebrar la renovación bautismal de
estos niños que prontamente recibirán a Cristo Eucaristía. Aquel día
padres y padrinos renunciaron en su nombre a las obras de satanas y
prometieron que vivirían como hijo de Dios y seguidores de Jesucristo,
según la fe de la iglesia. Hoy van a renovar ellos su fe y sus promesas
del bautismo porque quieren ser cristianos de verdad. Afianzando así el
deseo de unirse a Él. Los invito a ponerse de pie y cantar junto al coro.

Canto: de entrada

Un padre/madre:

Nos alegramos y damos gracias a Dios al ver que nuestros hijos siguen
el camino de Jesucristo y quieren ser cristianos de verdad. Haremos
todo lo posible por nuestra parte, con la palabra y con el ejemplo de vida,
para que ellos vayan haciéndose cada día mejores cristianos y sean
constantes en venir a la catequesis.

Un catequista:

Nosotros, los catequistas, también queremos ayudar a estos niños a

vivir como corresponde a los que estamos bautizados y hemos
prometido seguir el camino de Jesucristo. La fe y las promesas del
bautismo que ellos van a renovar, también las renovaremos nosotros
para poderles guiar sin extravíos por el camino de la fe y de la vida
cristiana.
Un niño:

Estamos contentos de haber sido bautizados a los pocos días de nacer.

Vosotros, queridos padres y padrinos, y la comunidad cristiana hicisteis
entonces, en nuestro nombre, profesión de fe y renuncia al pecado para
que Jesucristo nos comunicara por el bautismo la vida nueva de los hijos
de Dios. Ahora nosotros mismos vamos a renovar las promesas de
nuestro bautismo para que todos sepáis que queremos seguir viviendo
como cristianos. ¡Jesús, estamos contigo!

MINISTRO

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo

Todos: AMÉN

MINISTRO: La gracia, la misericordia, la paz de parte de Dios Padre y

de Jesucristo, nuestro Salvador, estén con ustedes.

Todos: Y con tu espíritu.

MINISTRO: Queridos hermanos y hermanas, Dios nos reúne en este

momento para alabarle y agradecerle por el don de ser sus hijos. Este
día haremos especial memoria de este regalo, y renovaremos nuestro
bautismo que nos ha hecho hijos suyos.
ACTO PENITENCIAL

MINISTRO: Estamos seguro que los padres buscan lo mejor del mundo
para sus hijos por eso la iglesia admite en su comunidad niños pequeños
hoy recordamos aquel momento antes de que tomen su primera
comunión, pero antes de tomar este paso pido a todos que renunciemos
a todas las seducciones que nos incitan y arrastran al mal y prometan
buscar un mundo más honesto y limpio.

MINISTRO: Te pedimos perdón Señor por creer que somos mejores y

más importantes que nuestros semejantes. Señor Ten Piedad

Todos: Señor ten piedad

MINISTRO: Cristo amigo nuestro te pedimos perdón por abusar de los

más débiles y pequeños. Cristo ten Piedad

Todos: Cristo ten piedad

MINISTRO: Te pedimos perdón Jesús por no querer seguir siempre

caminos de dialogo y comprensión. Señor ten Piedad

Todos: Señor ten piedad

LITURGIA DE LA PALABRA

MONITOR: Nos preparamos para escuchar la Palabra de Dios. Que

nuestros oídos estén atentos a lo que el Señor nos quiere decir hoy y
nuestros corazones estén dispuestos a la conversión.

Coro: Aleluya

Evangelio: Lc 17,11-19

HOMILIA
 PROFESION DE FE

MONITOR: Invitamos a los niños junto a sus padres y padrinos a

acercarse al Cirio Pascual para que puedan encender sus velas, y luego
vuelven a sus lugares.

MINISTRO: Guiados por nuestra fe en Jesucristo y fortalecidos con la

fuerza de su Espíritu, vamos a renovar las promesas de nuestro
bautismo de manera que lleguen bien preparados a hacer
la Primera Comunión.

MINISTRO: ¿Renunciáis al pecado para vivir en la libertad de los hijos

de Dios?

Sólo los niños/as: Sí, renuncio.

MINISTRO: ¿Renunciáis a todas las seducciones del mal, para que no

domine en ustedes el pecado?

Sólo los niños/as: Sí, renuncio.

MINISTRO: ¿Renunciáis a Satanás, padre y príncipe del pecado?

Sólo los niños/as: Sí, renuncio.

MINISTRO: Queridos niños, padres y padrinos, profesemos con

convicción nuestra fe ….

Creo en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y la tierra.

Creo en Jesucristo, su único hijo, nuestro Señor,

Que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa
María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato fue crucificado,
muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucito de
entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios,
Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos.

Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la comunión de los

santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida
eterna. Amen.
MINISTRO: Y ahora, a unos meses de recibir la Primera Comunión.
¿Prometen seguir a Jesucristo cumpliendo sus mandamientos?

Sólo los niños/as: Sí, prometo.

MINISTRO: ¿Y ustedes, padres, padrinos y catequistas

prometen seguir educando en la fe a estos hijos suyos en un
clima de armonía y amistad con los hijos de otras familias de
nuestra comunidad cristiana?

TODOS: Sí, prometemos

MINISTRO:
Que el Espíritu Santo los ayude a mantenese siempre libres de pecado
y a vivir como Jesús nos enseña. Amén.

El celebrante toca el agua con la mano derecha y prosigue

Señor, te pedimos que por la gracia de tu Hijo descienda sobre el agua

de esta fuente el poder del Espíritu Santo, para que, por el Bautismo,
sepultados con Cristo en su muerte, resucitemos con El a la Vida. Que
vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los
siglos de los siglos.
 RITO DE DESPEDIDA

MINISTRO: Hermanos: Estos niños que han renacido por medio del
Bautismo, son hijos de Dios.

Ellos recibirán la plenitud del Espíritu Santo por medio de la

Confirmación, en su debido momento.

Invocándolo como Padre en medio de su Iglesia, se acercarán al altar

del Señor, para participar en la mesa de la Eucaristía.

Ahora, en su nombre, animados por el espíritu de hijos adoptivos que

todos hemos recibido, oremos como el Señor nos enseñó:

PADRE NUESTRO, QUE ESTAS EN EL CIELO….

(mientras se reza el Padre Nuestro, el ministro hace la aspersión con el

agua bendita a la asamblea reunida)

MINISTRO

Dios Todopoderoso, que por el nacimiento de tu Hijo llenaste la tierra de

alegría, bendice a estos niños, para que se identifiquen plenamente con
Cristo.

Todos: Amén

MINISTRO

Dios Todopoderoso, que das la vida humana y la vida divina, bendice a

los familiares y amigos de estos hijos tuyos para que, junto con ellos,
vivan siempre en acción de gracias.

Todos: Amén
MINISTRO

Dios Todopoderoso, que nos hiciste renacer a la vida divina por medio
del agua y del Espíritu Santo bendice a estos fieles, de manera que
siempre y en todas partes se comporten como miembro de tu pueblo, y
concede tu paz a todos los aquí presentes.

Todos: Amén

MINISTRO

Y la bendición de Dios todopoderoso……

Todos: Amén

MINISTRO

Pueden ir en la paz y alegría del Señor

Todos: Demos gracias a Dios

MONITOR: Para concluir nuestra celebración cantemos a nuestra

Madre, la Virgen María