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Artículo 2.

- Toda persona tiene derecho:


24. A la libertad y a la seguridad personales. En consecuencia. Nadie puede ser detenido sino
por mandamiento escrito y motivado del juez o por las autoridades policiales en caso de
flagrante delito. El detenido debe ser puesto a disposición del juzgado correspondiente, dentro
de las veinticuatro horas o en el término de la distancia.Estos plazos no se aplican a los casos
de terrorismo, espionaje y tráfico ilícito de drogas. En tales casos, las autoridades policiales
pueden efectuar la detención preventiva de los presuntos implicados por un término no mayor
de quince días naturales. Deben dar cuenta al Ministerio Público y al juez, quien puede asumir
jurisdicción antes de vencido dicho término.

1: Se establece la protección de la libertad física de la persona en su sentido más directo: no


ser detenido ni impedido de movilizarse libremente, salvo la hipótesis de mandato judicial o
flagrante delito.El primer párrafo establece dos formas de detención constitucionalmente
correctas:

2_ La primera es el mandamiento escrito y motivado del juez, que debe ser producido no
arbitrariamente, sino de acuerdo a procedimientos preestablecidos. Se exige mandamiento
escrito para que quede constancia y, además, para que el interesado pueda ser informado de
él al ser aprehendido. Mandamiento motivado porque la libertad no puede ser conculcada sin
motivo. El detenido se informará al leer la orden de las razones por las que ello ocurre. Esto,
dado el caso, le permitirá defenderse mejor.

3: La segunda es la detención directa por la autoridad policial en caso de flagrante delito, el


que no es sino el momento en el cual el agresor comete la acción criminal.Esto quiere decir
que, constitucionalmente, en el Perú sólo se puede detener a una persona si se ha cumplido
alguna de las dos exigencias. De lo contrario, esa detención es inconstitucional y quedaría
abierto el camino para interponer una acción de Hábeas Corpus.

Artículo 2. - Toda persona tiene derecho: 24


Artículo 2.- Toda persona tiene derecho: 24. A la libertad y seguridad personales. En
consecuencia: g. Nadie puede ser incomunicado sino en caso indispensable para el
esclarecimiento de un delito, y en la forma y por el tiempo previstos por la ley. La autoridad
está obligada bajo responsabilidad a señalar, sin dilación y por escrito, el lugar donde se halla
la persona detenida.

1:La incomunicación del detenido consiste en ponerlo en situación jurídica de imposibilidad de


tener relación de tipo alguno con terceras personas; es decir, que no puede hablar, ni
escuchar, ni ser visto por nadie. Los problemas más evidentes que pueden aparecer de la
incomunicación del detenido son:- Amenaza contra su salud o su vida ya que puede ser
vejado físicamente sin que los demás se enteren o puedan defenderlo.

2:Incapacidad de ejercitar su derecho de defensa, no sólo por sí mismo, sino inclusive por
abogado. - Forzamiento para que acepte responsabilidades que en condiciones normales no
hubiera aceptado. - Daño psicológico producido por la incomunicación, que constituye de por
sí un trauma para el detenido. Como se puede apreciar, la incomunicación es una situación
jurídica que significa amenazas sobre varios derechos constitucionales expresamente
reconocidos. Por ello, debe restringirse severamente su utilización.

3: La incomunicación no alcanza al abogado defensor, pues está establecido claramente que
siempre se tiene derecho a él aunque, desde luego, la forma en que se realice la entrevista
puede ser regulada por la ley para garantizar al mismo tiempo su reserva y la imposibilidad de
que se transmita información perjudicial para la investigación que se realiza.

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