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La Benignidad uno de los 12 Frutos

18 de abril de 2012 a las 21:36


BENIGNIDAD

El León y La Oveja

Isaías 11:6: Morará el lobo con el cordero, y el leopardo con el cabrito se acostará; el becerro
y el LEÓN y la bestia doméstica andarán juntos, y un niño los pastoreará.

(Χρητσόςς crestos, ‫ הדנע‬ainvah) benevolencia, clemencia, virtud, gentileza,


amabilidad, afable, agradable, atractivo, inmune, efectivo, capacidad, apto, suficiente, id
óneo, competente, preparado.
Romanos 2:
3 ¿Y piensas esto, oh hombre, tú que juzgas a los que tal hacen, y haces lo mismo, que tú
escaparás del juicio de Dios? 4 ¿O menosprecias las riquezas de su benignidad, paciencia y
longanimidad, ignorando que su benignidad te guía al arrepentimiento? 5 Pero por tu
dureza y por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la
revelación del justo juicio de Dios, 6 el cual pagará a cada uno conforme a sus obras: 7 vida
eterna a los que, perseverando en bien hacer, buscan gloria y honra e inmortalidad, 8 pero ira
y enojo a los que son contenciosos y no obedecen a la verdad, sino que obedecen a la
injusticia; 9 tribulación y angustia sobre todo ser humano que hace lo malo, el judío
primeramente y también el griego, 10 pero gloria y honra y paz a todo el que hace lo bueno, al
judío primeramente y también al griego; 11 porque no hay acepción de personas para con
Dios.
Colosenses 3 : 12 Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable
misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia; 13 soportándoos
unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera
que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros. 14 Y sobre todas estas cosas vestíos de
amor, que es el vínculo perfecto. 15 Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que
asimismo fuisteis llamados en un solo cuerpo; y sed agradecidos. 16 La palabra de Cristo
more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda
sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y
cánticos espirituales. 17 Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el
nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él.
1ª Corintios 13 : 4 El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es
jactancioso, no se envanece;
Efesios 4 : 32 Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a
otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.
Santiago 3 : 13 ¿Quién es sabio y entendido entre vosotros? Muestre por la buena conducta
sus obras en sabia mansedumbre. 14 Pero si tenéis celos amargos y contención en vuestro
corazón, no os jactéis, ni mintáis contra la verdad; 15 porque esta sabiduría no es la que
desciende de lo alto, sino terrenal, animal, diabólica. 16 Porque donde hay celos y contención,
allí hay perturbación y toda obra perversa. 17 Pero la sabiduría que es de lo alto es
primeramente pura, después pacífica, amable, benigna, llena de misericordia y de buenos
frutos, sin incertidumbre ni hipocresía. 18 Y el fruto de justicia se siembra en paz para aquellos
que hacen la paz.

Quizás el secreto más guardado de todos los esquemas y paradigmas de la vida


espiritual es el de poder vencer el mal que llevamos inherente, el secreto radica en r
econocer:

1º Que lo llevamos, como lo


comenta Pablo. Cosa que muchos religiosos no reconocen, sólo los más honest
os reconocen sus debilidades.

Romanos 7 : 18 Y yo sé que en mí, esto es, en mi carne, no mora el bien; porque el querer el
bien está en mí, pero no el hacerlo. 19 Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no
quiero, eso hago. 20 Y si hago lo que no quiero, ya no lo hago yo, sino el pecado que mora en
mí.

2º Para luego, entender que es con el bien que llevamos dentro con
el que podemos vencerlo.

Romanos 12 : 21 No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal.

Pero ¿Cuál es el bien que llevamos dentro?

La simiente del Padre.

1ª Juan 3 : 8 El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio.
Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo. 9 Todo aquel que es
nacido de Dios, no practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él; y
no puede pecar (la simiente es la que no peca), porque es nacido de Dios. 10 En esto
se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no hace justicia, y que
no ama a su hermano, no es de Dios.
Romanos 8 : 11 Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en
vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos
mortales por su Espíritu que mora en vosotros.
12 Así que, hermanos, deudores somos, no a la carne, para que vivamos conforme a la carne;
13 porque si vivís conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir las
obras de la carne, viviréis. 14 Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios,
éstos son hijos de Dios. 15 Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra
vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba,
Padre! 16 El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios.

En el mundo
sólo hay religiones basadas en esquemas humanos, en los cuales, ellos sólo definen
prácticas, rituales, hábitos, abstinencias, ayunos, oraciones, rezos, retiros, congregarse
a dogmas y métodos, con la intención de controlar los apetitos y deseos de la carne.
Pero eso ya lo hemos mencionado antes, que el observar una serie de esquemas m
orales y rituales, no les da a la gente,
el poder de dominar sus pasiones en un dado momento, eso pasó con la Ley de Mo
isés y los judíos Hechos 7: 53, Romanos 8:
3, y seguirá pasando con todos los esquemas definidos en la mente del hombre, tamb
ién lo hemos dicho; No es natural en
un León, acariciar a las crías de las cebras y dejarlas ir, cuando se le presenta la o
portunidad, lo mas lógico en su naturaleza es que se las coma.

La preocupación no es nueva, en la antigüedad, Orígenes 150 d.C. Justiniano 140-280


d.C. y otros como Montano, San Jerónimo y muchos más, habían disertado del
problema con sendas apologías escritas, muchos de ellos iniciaron prácticas totalmente
locas como el castrarse, pero de eso, los religiosos de hoy no nos dicen nada, ya q
ue quedaría, entre dicho, los fundamentos de sus doctrinas, las cuales fueron sustenta
das por una turba de hombres trastocados de la cabeza. Los nuevos
hombres religiosos de nuestros días creen que definen
cosas nuevas, en cuanto a dominar a los deseos de la carne, cuando en realidad, sól
o, repiten viejos escollos en los cuales la humanidad, se negó así misma, la oportuni
dad de agradar a Dios y tener una verdadera comunión con su creador. Desechan el
poder del Espíritu Santo para lograr total control
Gálatas 5: 16-21 Romanos 8: 13, 26.

La maravilla Espiritual, del Fruto genético de la benignidad en la vida de quien


es son Hijos, es que desde adentro, surge un poder que domina y convence a
la carne, para apartarse
de aquello, que le trae consecuencias desdichadas (a él o a los demás), surge
un afluente que desaprueba cosas y circunstancias, con tal impetuosidad y fuerz
a, que no le deja lugar a dudas a la mente reptil, que sujetarse por convenienci
a y admisión de rechazo espontáneo, le es favorable, claro, hay un aspecto muy s
abio
en el asunto y es que, es lógico que el León coma, solo que; en el orden establecid
o, con el mayor placer, la mejor holgura, hasta llenarse plenamente y no exageradam
ente, el deseo saludable de la carne puede llegar a ser satisfecho dentro de un mar
co sano y bueno en gran manera, es una locura tener
un León en el patio de tu casa, sin alimentarlo debidamente, los religiosos, quieren po
nerle grandes bardas de anime, al León que llevan en su carne,
rodeándolo de bocetos
morales y rituales, es posible que esté adormecido, es posible que ni se sienta, es po
sible que sientan que todo está bien, porque no oyen el rugido, es posible que confía
n en que sus ayunos y rezos hayan debilitado
al bicho, no han descansado en tan descabellada confianza cuando el rugiente en un

zarpazo, les ha robado su falsa paz, luego van al altar a admitir para si mismos, que

fallaron y vuelven a empezar con más ahínco, le imprimen más sacrificios, más penite
ncias, más ayunos, hasta el colmo de adquirir una úlcera en el estomago, más sentim
iento de culpabilidad con lo cual , rayan en la locura.

Para al final darse por vencidos, son esos hombres


y mujeres que pasan un tiempo en las comunas religiosas, tratando de hacer, como lo
s ciegos religiosos les
indican y guían hacia ninguna parte que no sea el foso del desaliento, a la final term
inan por abandonar todo aquello, que tenga que ver con Dios. Sus vidas postreras lle
gan a ser peores de cuando no iban a ninguna religión.

La maravilla Espiritual del Fruto genético de la benignidad en la vida de quien


es son Hijos, es que desde adentro, surge un poder que domina y convence a
la carne, para apartarse
de aquello que le trae consecuencias desdichadas (a él o a los demás), surge u
n afluente que desaprueba cosas y circunstancias, con tal impetuosidad y fuerza,
que no le deja lugar a dudas a la mente reptil, que sujetarse por conveniencia

y admisión de rechazo espontáneo, le es favorable, no piensen que nos equivocam


os al repetir, lo hacemos con la intención de que entienda a cabalidad, porque dice e
l Apóstol
Juan: que la simiente no peca o falla, es porque esa naturaleza espiritual cuando cre
ce y se multiplica, toma total control
y dominio de la mente reptil o carnal, eso se llama madurez espiritual, pero el factor
sabio radica en que la mente espiritual controla con sabiduría, con lógica, con pacienc
ia, hasta obtener la confianza de
no ocultar al León o tratar de dominarlo por cansancio, su sabiduría no se basa en el
temor de no tener el control, sino en la diplomacia amable del amor, ya que no hay

bestia que no sea vencida por el poder del amor, es la sabiduría quien nos dota de l
os recursos idóneos para atar y desatar,

¿Cuándo atamos?

Cuando como espirituales, no dejamos que la mente carnal intente


dominarse así misma, el León nos podrá decir que será fiel,
que no lo hará más nunca, que se arrepiente de cada vez que falla, vendrá llorando
y suplicará por otra oportunidad y entonces, dirá el mismo, que se debe ayunar más,
orar más, pedir más, leer mas la Biblia, será como aquellos pacientes temerosos
del tratamiento médico, que prefieren recetarse así mismos, pero la mente espiritual, h
ará la labor de sondear con la palabra hasta los tuétanos y discernirá las verdaderas
intenciones del corazón, analizará con justicia y verdadera imparcialidad,
en donde está el error, el origen detonante de tan distorsionantes actitudes,
que generan deseos desordenados. Vencerá al mal con el bien, ¿Cómo es esto? Se
ncillo, dándole al León las cosas buenas que necesita, si el León tiene hambre, lo ló
gico es que coma lo bueno y bueno en gran manera, que Dios el Padre ha dotado p
ara él desde el principio, un caballo desbocado es una bestia que no tiene dirección,
puede que tenga bridas y una buena silla, pero no jinete, es el jinete quien define ha
cia donde está la meta, el cerebro reptil, funciona en base a los instintos, al estimulo
y al reflejo, en eso es muy efectivo, pero solo la mente espiritual puede asumir cont
rol de él, cuando con sabiduría, logra que llegue a la meta en forma lógica y no por
desorden. Le llevara a suplir
necesidades en forma sana y lógica. El problema de los religiosos, como ya lo dijimo
s, es que han llamado malo a lo bueno que dejó el Padre, hacen listas de cosas que
según ellos son pecado y la verdad, eso lo hacen, para hacerle creer a la
gente inocente, que ellos saben más, en cuanto a lo que es bueno o malo, santo o p
ecado. Sus ruinosos conceptos, sólo le crean a las personas vacíos,
confusión, síntomas de locura e insufribles estados de culpabilidad. Es aquí donde
hay que dominar, en el cielo no hay nada que dominar.

El Fruto de la Benignidad, genera en nosotros toda la candidez, el poder, la es


pontaneidad, para decidir
con total normalidad y seguridad, cual es el paso más impositivo en contra de
aquello que lleva a otros a fallar. Saca de adentro de nosotros, espontáneamente
la necesidad de hacer lo que es bueno y bueno en gran manera, en elegir sin duda
r, cual es la variante más acertada, entonces, no hay temor en desatar

¿Desatar que? ¿Qué desatamos?


Al León libremente, ese
que el Padre nos dejó, para demostrar que podemos ser como él es (el Padre), ya q
ue
si no podemos dominar al siervo (ese león) que llevamos en nuestro ser, ¿cómo pod
remos Reinar al lado de Cristo? Sólo los Hijos pueden dominar como
el Padre domina. Ahora puedes entender el texto que dice: El heredero en tanto qu
e es niño, en nada difiere del siervo, aunque es señor de todo. Si tu siervo religioso
, te ha definido las pautas religiosas para dominarse a sí
mismo (a tu león) y esas pautas se basan en rituales, penitencias y hábitos de práctica
pseudo espiritual, lamento decirte que vives en la carne y no podrás agradar
al Padre Romanos 8: 3-17 / 12: 1-
2. La mente espiritual, convencerá al siervo de lo que ha de
hacer y tener. Por último, la mente reptil, terminará sumida más por conveniencia que
por hostigamiento, es más sabio, condicionar y entrenar a una bestia,
dominándola por sus necesidades, que enfrentarla, por y con violencia.
AP. Hegman Huggins

El León y La Oveja

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