La fundación de la Iglesia católica tiene su origen con
Jesucristo, quien pasó su vida predicando en el siglo I, en la provincia romana de Judea. La Iglesia católica contemporánea afirma ser la continuación de la comunidad cristiana que dejó formada Jesús.
Sus obispos son los sucesores de los Apóstoles de Jesús, y el
obispo de Roma, al que se le conoce con la denominación de Papa, es el único sucesor de San Pedro. San Pedro fue escogido por el mismo Jesucristo para ser la cabeza visible de la iglesia en el Nuevo Testamento que ministró en Roma.
La tradición católica afirma que la fundación de la Iglesia
Católica, fue realizada por el mismo Jesucristo. En el Nuevo Testamento encontramos las actividades de Jesús y de las enseñanzas, el llamado de los doce apóstoles, y las recomendaciones dadas a ellos para la continuidad de su trabajo.
Para los católicos, San Pedro fue el primer obispo de Roma y
el consagrante de Linus como su obispo sucesor, dándose el inicio así, de la línea continua que llega hasta el actual pontífice, el Papa Francisco. Es decir, que la Iglesia Católica asevera que el Obispo de Roma, el Papa, es el sucesor de San Pedro. En el Evangelio de Mateo, específicamente el relato de la confesión de Pedro, Cristo designa a Pedro como la roca sobre la que se construirá la Iglesia de Cristo. La Iglesia católica desde su fundación se basa en la vida de Dios y el Salvador Jesús.
Jesucristo dio a su Iglesia, después de su fundación, la
misión de cumplir el plan global de Dios, por medio de la predicación del evangelio del reino de Dios, y formar discípulos en todo el mundo para transmitirles lo que Jesús enseñó mientras estaba en la tierra. (Ver artículo de Iglesia Católica Antigua)
La principal misión de la Iglesia fundada por Jesucristo, fue
mostrar la luz a las personas que estaban en tinieblas, para convertir la sombra en luz y quitarle el poder a Satanás, para que los que se arrepientan de corazón, puedan recibir la remisión de sus pecados.
La misión de la Iglesia católica se puede clasificar de la
siguiente manera:
Unir a los hombres del mundo con las enseñanzas
de Jesucristo. Vivir en el amor y la verdad de Cristo. Transformar la vida de los fieles hacia una vida llena de la espiritualidad de Dios. Hacer llegar los dones que Dios envía al mundo por medio del Espíritu Santo. Hacer que los seguidores de la iglesia se unan hacia la acción salvadora de Dios. Anunciar a Jesucristo. Anunciar el Evangelio. Formación de comunidades eclesiásticas.
Etapas desde la fundación de la Iglesia Católica
Un breve resumen del desarrollo de la Iglesia católica desde el nacimiento de Cristo y las etapas de la Historia de la Iglesia, se presentan a continuación:
Iglesia Apostólica: es la primera etapa que se
inició alrededor del año 30, y finalizó con la muerte del apóstol Juan en el año 100. Se cree que el último de los 12 apóstoles que murió fue Juan, y es lo que marca el fin de esta era. Iglesia Perseguida: es la segunda etapa que
comienza en el año 100, luego de la muerte de
Juan y termina en el año 313 con el Edicto de Constantino. Esta etapa a su vez, está dividida en tres partes, que empiezan con las persecuciones imperiales, luego por la formación del canon del Nuevo Testamento, con el desarrollo de la organización eclesiástica, y de la doctrina que terminan con la formación de las sectas y herejías.
Iglesia Imperial: la tercera etapa es la que inicia
en el año 313 con Constantino en el poder y su reconocimiento de la Iglesia y termina en el año 476 con la caída del imperio romano. (Ver artículo de Constantino y la Iglesia Católica). Iglesia Medieval: la cuarta etapa se lleva a cabo durante la llamada edad media que empieza en el año 476 con la caída del imperio romano y permanece hasta la caída de Constantinopla en el año 1453.