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Trabajo de Fisica (Riesgos)
Trabajo de Fisica (Riesgos)
Materia
Física Aplicada
Trabajo con ruido
El ruido laboral se define como el sonido o grupo de sonidos de gran intensidad que puede
ocasionar dolencias o interferencias en la comunicación.
La legislación laboral actual (Real Decreto 286/2006) establece que, una vez identificado el
riesgo de exposición al ruido, el primer paso es la disminución o eliminación de este en su
origen o su reducción al nivel más bajo posible, para seguidamente analizarlo. La
evaluación exigirá, como norma general, la medición de los niveles de ruido, con objeto de
valorar la exposición al mismo.
El principal riesgo y daño que produce el ruido constante es una sordera. Esta sordera
inicialmente es temporal, pero con el tiempo se vuelve irreversible.
El segundo riesgo principal que provoca el ruido son un gran número de accidentes
laborales vinculados al ruido. Esto se debe a la perturba de la comunicación, al
enmascaramiento de las señales de alerta y a la desviación de la atención, entre otros.
Finalmente, debemos destacar que el ruido también perjudica la salud de las personas en
otros aspectos, ya que por ejemplo puede provocar más fatiga, estrés, irritabilidad y
nerviosismo; entre otros.
En primer lugar, el empleador puede pensar en cómo retirar la fuente de ruido por completo,
por ejemplo, desplazando una máquina ruidosa a un lugar donde los trabajadores no
puedan oírla. Si no es posible, puede estudiar la posibilidad de:
1. Combatir el riesgo desde el origen: esto relacionado con sustituir equipos mas
ruidosos por otros que generan un nivel de ruido inferior o realizar el mantenimiento
periódico de los equipos
2. Colocar Barreras que confinen el ruido y aumentar la distancia entre el trabajador y
la fuente
3. Utilización de protectores auditivos en el caso que pueda reducirse el nivel del ruido
con las medidas técnicas y se superen los 80Db en l puesto de trabajo
4. El reconocimiento medico de los trabajadores expuesto a ruidos deberán realizarse
audiometrías para detectar posibles alteraciones en la audición
La Ministra del Trabajo, en ejercicio de sus atribuciones legales, en especial las conferidas
por el numeral 10 del artículo 2° y el numeral 7 del artículo 6° del Decreto 4108 de 2011
La electricidad puede herir gravemente o matar, y causar daños materiales. Sin embargo,
el empleador puede adoptar precauciones sencillas cuando se trabaja con electricidad, o
cerca de instalaciones o equipos eléctricos, con objeto de reducir significativamente el
riesgo de lesión para él, sus trabajadores y otras personas. Esta sección proporciona un
resumen de estas precauciones
Las descargas eléctricas también pueden provocar otros tipos de lesiones, por ejemplo,
caídas desde escaleras o andamios.
Los cables, enchufes, cajas de enchufes y las conexiones deben ser suficientemente
resistentes y estar adecuadamente protegidos en función del medio ambiente de trabajo. El
empleador debe asegurar que la maquinaria tiene un interruptor, o aislador, accesible para
cortar la corriente con rapidez en caso de emergencia.
Cables subterráneos
En algunos procesos laborales en los que se produce mucho calor (trabajos con hornos,
fundiciones, etc.), donde se realiza un esfuerzo físico importante o es preciso llevar equipos
de protección individual, las condiciones de trabajo pueden provocar algo más serio que la
incomodidad por el excesivo calor, originando riesgos para la salud y la seguridad de los
trabajadores. En ocasiones especialmente graves puede llevar a la muerte.
En los trabajos al aire libre: el estrés térmico y sus consecuencias pueden ser
especialmente peligrosos en los trabajos al aire libre, como en la construcción o la
agricultura, ya que al tratarse de una situación peligrosa que fundamentalmente se da en
los días más calurosos de verano, no suele haber programas de prevención de riesgos
como en el caso de los trabajos donde el estrés por calor es un problema a lo largo de
todo el año.
. Informa a tus superiores de si estás aclimatado o no al calor; si has tenido alguna vez
problemas con el calor; de enfermedades crónicas que puedas padecer; o si estás tomando
alguna medicación.
2. Adapta el ritmo de trabajo a tu tolerancia al calor.
3. Descansa en lugares frescos cuando tengas mucho calor. Si te sientes mal, cesa la
actividad y descansa en lugar fresco hasta que te recuperes, pues continuar trabajando
puede ser muy peligroso. Evita conducir si no estás completamente recuperado.
4. Bebe agua con frecuencia durante el trabajo, aunque no tengas sed. También es preciso
seguir bebiendo agua cuando se está fuera del trabajo.
5. Evita comer mucho y comidas grasientas: come fruta, verduras, toma sal con las comidas.
6. No beber alcohol (cerveza, vino) ni tomar drogas. Evita las bebidas con cafeína (café o
refrescos de cola) y también las bebidas azucaradas.
7. Ve bien descansado al trabajo. Dúchate y refréscate al finalizar tu jornada.
8. Usa ropa de verano, suelta, de tejidos frescos (algodón y lino) y colores claros que
reflejen el calor. Protégete la cabeza del sol (mejor con sombreros de ala ancha).
Legislación laboral
Hay una serie de normas a cumplir para evitar que se produzcan accidentes laborales o
que los trabajadores desarrollen problemas de salud a causa de calor excesivo en su lugar
de trabajo:
• Por otra parte, también es obligatorio que haya agua fresca disponible para los
trabajadores en el lugar de trabajo, según establece el Real Decreto 486/1997 en
su Anexo V.
• En caso de que sea necesaria, habrá que proporcionar ropa de trabajo ligera,
transpirable y de colores claros.
• La empresa debe informar a sus empleados sobre los riesgos de la exposición al
calor y sobre las medidas preventivas, haciendo especial hincapié a aquellos
trabajadores que puedan correr mayores riesgos por razón de estado de salud o
edad.