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Tratamientos Térmicos

Tipos:

Temple: Es un tratamiento térmico que se realiza calentando las piezas de acero hasta una temperatura comprendida
dentro de la región critica o arriba de esta (según eJ tipo de acero), se les mantiene a esta temperatura un determinado
tiempo (según el tamaño de las piezas, luego se les enfría rápidamente (según el tipo de acero).

Normalizado: Es un tratamiento térmico que se realiza calentando las piezas de acero hasta una temperatura de 28 -55
ºC por arriba de la línea crítica superior A3 o ACM, se mantiene a esa temperatura para uniformizar y posteriormente se
enfría a temperatura ambiente.

El procedimiento consiste en calentar la pieza entre 30 y 50 grados Celsius por encima de la temperatura crítica superior,
tanto para aceros hipereutectoides, como para aceros hipoeutectoides, y mantener esa temperatura el tiempo
suficiente para conseguir la transformación completa en austenita. A continuación se deja enfriar en aire tranquilo,
obteniéndose una estructura uniforme.

Recocido total o de regeneración: El objetivo principal del recocido es ablandar el acero endurecido de tal manera que
se facilite el trabajar a máquina (maquinar) o trabajar en frio. Se realiza calentando las piezas de acero hasta una
temperatura. Comprendida dentro de la región critica o arriba de esta (según sea el acero) se les mantiene a esta
temperatura un determinado tiempo. Luego se les enfría lentamente.

Tratamientos térmicos superficiales con o sin cambio de composición química:

Hay algunos casos de piezas que deben poder soportar un gran desgaste superficial, además de absorber otros esfuerzos
de flexión. Torsión, etcétera, como en el caso de ejes largos y cigüeñales. Si fueran totalmente endurecidos aguantarían
el desgaste pero no soportarían la flexión o la torsión y se romperían; en estos casos se hace un endurecimiento
superficial manteniendo el núcleo blando, y para ello hay varios procedimientos.
Cementación: Consiste en el endurecimiento de la superficie externa del acero al bajo carbono, quedando el núcleo
blando y dúctil. Como el carbono es el que genera la dureza en los aceros en el método de cementado se tiene la
posibilidad de aumentar la cantidad de carbono en los aceros de bajo contenido de carbono antes de ser endurecido. El
carbono se agrega al calentar al acero a su temperatura crítica mientras se encuentra en contacto con un material
carbonoso. Los tres métodos de cementación más comunes son: cajas para carburación, baño líquido y gas. La
cementación se aplica a piezas que deben de ser resistentes al desgaste y a los golpes. Dureza superficial y resistencia.
La temperatura usual de cementación es cercana a los 950°C y la profundidad de este tratamiento depende del tiempo y
de la dureza deseada. Una vez obtenida la capa exterior rica en C, se endurece por temple

Nitruración: Igual que la cementaron, aumenta la dureza superficial, aunque lo hace en mayor medida, incorporando
nitrógeno en la composición de la superficie de la pieza. Se logra calentando el acero a temperaturas comprendidas
entre 400 - 525° C, dentro de una corriente de gas amoníaco, más nitrógeno. Si en un recinto, un horno de tratamiento
térmico, se somete al amoníaco (NH3) a temperaras de 500º C, se descompone en nitrógeno e hidrógeno. El hidrógeno,
más ligero, se separa del nitrógeno por diferencia de densidad. El nitrógeno liberado por la descomposición del
amoníaco forma la atmósfera en el interior del horno que, en contacto con la superficie de hierro y a esa temperatura,
forma nitruro de hierro, un compuesto de gran dureza pero frágil. Si bien este tratamiento da gran dureza superficial a la
pieza, la velocidad de penetración es muy lenta, aproximadamente 1mm en 100 horas de tratamiento, pero no necesita
de temple posterior.

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