Está en la página 1de 1

Jueves Santo

“Sabiendo Jesús que había llegado la hora de salir de este mundo para ir al Padre, como había
amado a los suyos que quedaban en el mundo, los amó hasta el extremo” Jn. 13,1

La noche en que iba a ser entregado, Jesús quiso tener un momento de intimidad con aquellos que
valientemente caminaron con él anunciando la buena nueva a todos. El Señor, en el sumun de
amor les quiso dar una lección más. Tomó el puesto de servidor y le lavó los pies a cada uno
demostrando una vez más que el mayor es el que sirve. Al observar esta lección pensemos en la
forma en que nos relacionamos con los demás: ¿es desde el amor-servicio como nos lo demostró
nuestro gran Maestro? Hoy de nuevo Jesús nos lava los pies y espera que también nosotros
repitamos el gesto con los demás. Paz y bien.

También podría gustarte