La Pelea Contra El Diablo.

René y yo nos encontrábamos en un bus rumbo a Panamá, de repente el bus se cae por un
barranco a muchísima velocidad y nos abre un portal, René y yo nos despertamos, pero no
estábamos heridos, nos damos cuenta de que todo ha cambiado y no es como en el tiempo
de nosotros
Decidimos hacernos un refugio en el primer lugar despejado que vimos. Por la noche René
me llamaba porque se escucharon pasos por ahí, yo le dije que no molestara, que no era
nada y se tranquilizó, de la nada salió una llama de fuego muy grande, de ahí sale el diablo,
estábamos asustados, no sabíamos que hacer, Rene y yo empezamos a gritar
desesperadamente, en ese momento llega un grupo indígena y entre esos estaba el cacique,
él saca un machete y de una cortada le vota la cola, cuando el diablo se le quería tirar
encima el cacique grito la palabra “ave maría” y el diablo se hizo humo y desapareció.
Los indígenas nos llevaron a su lugar junto con las maletas que llevábamos, nos
despertamos al día siguiente y ahí conocemos a la tribu zenú.
René por intentar hacer reír a los demás dice un chiste sobre su cultura: “¿Se llaman zenú?
cómo la salchicha ”.
Los indígenas no habían entendido el chiste, en ese momento llega el cacique, hablando en
nuestra misma lengua, ahí nos dice que nos salvó y nos curo de una maldición que nos tiró
el diablo, el caciquese retira y en su salida de las tierras zenú dice que nos cuiden y traten
como si fueramos familia.
Los indígenas nos sacan y nos empiezan a enseñar sus cultivos, y después nos ponen a
prueba a René y a mí a sembrar maíz y yuca para ver si aprendimos algo.

Los dos pasamos la prueba y nos vamos a dormir a una de las viviendas que nos dieron.
René y yo nos escapamos y volvemos a dónde estaba el bus, nos ponemos a revisar todas
las partes del bus y nos damos cuenta de que tenía una energía que nosotros no
conocíamos de nuestra época y tampoco en la que estábamos, en ese momento a René se
le ocurre de que puede ser una energía para viajar en el tiempo, yo le digo que podría ser,
pero si queremos hacer una máquina del tiempo no podríamos por los materiales.
René dice que si podemos, con las pocas partes que quedan del bus y con los cables del
motor.

Yo le digo a René que es una buena idea y que mañana por la tarde la miremos mejor.
Al día siguiente los indígenas nos enseñan el manejo de lanzas y arcos, nos ponen a prueba
cazando animales René y yo logramos cazar 4 animales y con eso nos hacen una comida, por
el atardecer les decimos a los indígenas que vamos a conseguir comida, ellos dicen que
bueno y nos dejan ir, pero era mentira René y yo nos vamos a dónde está el bus y
empezamos a hacer la máquina del tiempos, René encuentra un pedazo grande de metal
por el alrededor y con eso empezamos a hacer la base de la máquina, usamos la batería del
bus para dar corriente a la energía desconocida y con 2 asientos los usamos para ir más
seguros en el viaje.
Ya antes de anochecer nos devolvemos al lugar donde está la tribu y nos vamos a nuestra
vivienda.
Al siguiente día René y yo nos levantamos muy temprano, decimos ir muy rápido a donde
estaba una parte de la máquina del tiempo para acabarla.
Usamos más pedazos de metal grandes para las paredes y puertas ya todo estaba acabado
solo faltaba una antena, a René se le ocurre usar el tubo de escape para ponerla de antena,
René pone una manzana en uno de los asientos y al yo al darle la batería lleva mucha
energía a la energía sospechosa y la manzana desaparece, solo nos falta poner un reloj.
Al llegar por la tarde los indígenas nos piden que les enseñemos de nuestra cultura para
ellos aprender más, René le cuenta todo de nuestra cultura y ellos quedan sorprendidos.
Por la noche nos dan un banquete de despedida a René y a mí porque el cacique se enteró
de que nos íbamos, nosotros les agradecimos al acabar y ya nos íbamos a ir.
Al darle la espalda a la tribu ZENÚ aparece EL DIABLO y viene por venganza sin embargo
René y yo quisimos defender a la tribu y mochamos al DIABLO y de último le gritamos: “AVE
MARÍA”.
Ellos nos agradecen por defenderlos y nos vamos a dónde está la máquina del tiempo, al
llegar ahí René y yo nos damos cuenta de que falta el reloj, pero justo René se acuerda de
que tenía uno en la maleta y lo coloca en la máquina del tiempo.

Al poner el año día y hora de nuestra época somos teletransportado por el plano astral y
llegamos a nuestra época y estamos estamos en el lugar que habíamos caído, yo saco mi
celular y veo que tengo señal, entro a ver las noticias y veo que a René y a mi nos
consideraban cómo muertos, subimos a la carretera y justo vimos un bus que llevaba a
nuestra ciudad, al bus parar reconoció nuestras caras y pregunto si nosotros somos René y
Maicol Giovanni, nosotros respondemos que sí y el con mucho miedo dice que subamos
muy rápido nos deja en la ciudad, desde lejos nos ven en las noticias y reportan que
estamos vivos, nos piden contar dónde estábamos y al contar no nos creían a no ser que por
esos lados estaba el cacique de la tribu, que le había dado curiosidad por saber cómo era
nuestra línea del tiempo. Entonces el cacique había entrado en nuestra máquina del tiempo
sin que nos diéramos cuenta, el cacique de la tribu zenú le conto a los periodistas toda lo
que hicimos Rene y yo en otra línea del tiempo para que así nos crean. FIN