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TEATRO

DE TÍTERES

"PARLANCHINA BLA BLA BLA"


Esta obra pueDe representarse con títeres o ser caracterizaDa por
los estuDiantes. PueDe hacerse en varias sesiones. Está marcaDo
con * en DonDe pueDe parar caDa sesión Del cuento.
MATERIALES
Teatrino

Títeres: uno correspondiente a cada personaje.

Juegos de mochila didáctica: mapa color, lentes investigadores, hojas


para manos y pies, paracaídas, hojas para doble sombra, tarjetitas
“No todo lo que brilla es oro”, cartel “Partes vulnerables.”

Ambiente:
El patio de una escuela, con árboles y un jardín con Gores.

Personajes:
Narrador: Un gato blanco con negro, muy elegante, que se llama Mici-
fuz.

Parlanchina: Una guacamaya.

Maestra Lucy: Una lechuza.

Fina-pina: la

serpiente. Zope-tope:

el zopilote. Chovi: el

chivo.

Galán: el gavilán.

Don Mercurio: el director: un león.

Lole y Lula: las ovejas gemelas. (Uno con corbata y la otra con moñita).

Maya: la mamá guacamaya.

Caty: la cotorrita.
Narrador: Buenos días respetable público yo soy el gato Micifuz y vengo
a

narrarles la historia de una linda guacamaya llamada Parlanchina Bla,


bla, bla.

Ella es una guacamaya muy alegre y juguetona. Le agrada ir a la


escuela y jugar con los otros animalitos. Es muy inteligente y saca
buenas calificaciones. Algunos de sus compañeros comenzaron a sentir
Parlanchina:
Me gusta volar, cantar, hablar y soñar. Soy una guacamaya feliz.
Voy a la escuela a estudiar, aprender jugar y compartir con mis
amigos.

Fina-Pina:
Sssssh... sssssh... sssssh... amiguitos, soy Fina-Pina, la serpiente mala consejera.
¡Esa Parlanchina tan colorida, cae mal! Es muy presumida. Por eso, la debemos
molestar. Vengan, vengan. Ya va a pasar.

Zope-tope:
Tralalá, tralalá, tralalá, lalá, lalá. Soy el zopilote juguetón y molestón. Me gusta
poner apodos, y por qué no.… reírme de los demás.

Chovi:
Soy el chivo travieso y saltarín. Me gusta estar con mis amigos y jugar y jugar.

Galán:
Aquí vengo yo, el gavilán más guapo y apuesto que ustedes pueden
conocer. Me gustan las chicas guapas y coloridas para lucirlas a mi par.
Fina-Pina:
Sssssh... sssssh... sssssh... vengan amigos que ya va a pasar.
¡Listos, a molestar!
Fina-Pina, Zope-Tope,
Chovi, Galán:
(Le dicen en tono de burla:) ¡Hola Parlanchina, china, china!
¡Presumida, presumida! (Uno la empuja, otro le jala las plumas, otro la corre y
el otro le roba un beso)
Narrador:
Y así, día tras día, la pobre Parlanchina era víctima de las burlas y ofensas de
algunos de sus compañeritos. Ella no se quejaba con su maestra, porque la
habían amenazado que, si contaba lo que sucedía, le iba a ir peor. Pero un
día ya no aguantó... y miren lo que sucedió:
Parlanchina:
¡Maestra! ¡Maestra! Le quiero contar algo.
(Con mucha pena, la guacamaya se acerca a la maestra y le cuenta, casi en
secreto). Desde hace varios días, unos compañeros me andan molestando.
Se burlan de mí, me quitan la comida que me prepara mamá, me corren y
me quieren besar a la fuerza.
Maestra Lucy:
(Abrazándola con un ala) Pero Parlanchina, me lo hubieras contado antes.
Nunca debes permitir este tipo de tratamiento.

(Levantando el ala con energía.) ¡Desde el primer momento, lo debes


denunciar! No te preocupes, yo hablaré con ellos y verás que todo va a
mejorar.
Narrador:
Al día siguiente a primera hora, la maestra Lucy les habló. Los animalitos
prometieron portarse bien. Pero en el fondo estaban muy enojados. Al salir
de la clase, juraron vengarse.

Ese día al salir de la escuela, los cuatro esperaron a Parlanchina, le jalaron


las plumas de la cola y se las botaron. Todos se burlaban de ella y le exigían
que los tuviera felices. Le quitaron la comida de su lonchera y el dinero que
llevaba para comprar en la tiendita escolar. Le escondieron sus cosas y le
hicieron prometer que sí quería que la dejaran en paz, les tenía que dar
copia de las respuestas en los exámenes y a partir de ahora, querían comida
y dinero todos los días.
Parlanchina:
(Llorando) Fue peor hablarle a la maestra. Ahora, mejor hago todo lo que
quieren para que me traten bien. (Se fue arrastrando los pies).
Narrador:
Los amigos de Parlanchina fueron a contarle a la Maestra Lucy.
Quién se enojó muchísimo. Y llamó a Don Mercurio, que era el director y a
Doña Maya que era la mamá de Parlanchina.
Hablaron con ella. Juntos le explicaron que ella era muy valiosa, que tenía
muchas cualidades y tenía derecho a defenderse.

La maestra y Don Mercurio, llamaron a los animalitos que molestaban a


Parlanchina. Les hicieron disculparse con ella y los suspendieron de la
escuela. Llamaron a sus padres y hablaron con ellos. También hablaron con
sus compañeros de clase.

Maestra Lucy: (La maestra Lechuza les enseñaba destrezas para


protegerse y cuidarse) Quiero contarles niños que el cuerpo, lo debemos
cuidar y proteger. No sólo alimentarnos, bañarnos y cambiarnos de ropa.
También es importante cuidar las caricias y los golpes que se reciben. Todas
las partes del cuerpo son importantes. Hay partes que son privadas, deben
cubrirse y no dejarse tocar. Sólo es permitido cuando estamos enfermos y
nos examina el médico o nuestros padres. (Pueden hacer aquí la actividad
del cartel de partes privadas).
Narrador: El director, la maestra y los niños decidieron hacer un
programa para ayudar a todos. Y fortalecer su seguridad y autoestima:
Hicieron un mapa de la escuela y en él marcaron con color verde las zonas
seguras y con color rojo las inseguras. Hicieron unos lentes de cartón y al
colocarlos sobre sus ojos, trataban de ver todo lo bueno que hay en las
personas y a evitar a los desconocidos. (En este espacio pueden hacer estas
dos actividades la del mapa y los lentes, que estarán en la mochila
pedagógica). *
Cotorrita: ¡Yo también quiero ayudar! Como soy tu amiga, te
acompañaré a la hora del recreo, para que no estés sola. Lo haremos por un
tiempo, hasta que sea necesario y te sientas más segura.
Lula y Lole:
(Al mismo tiempo dicen:) Nosotros los gemelos, seremos como tu
sombra. Estaremos pendientes de ti, pero sin acercarnos. Y si necesitas
ayuda, sólo tienes qué pedirla.

Don Mercurio: (Parándose al frente y con un gesto muy amable). Yo


como Director de la escuela apoyo las actividades de la maestra Lucy y
agradezco especialmente a los alumnos que quieren ayudar. También
haremos juegos, dinámicas y convivencias para que los estudiantes
aprendan a quererse y a respetarse.
Quiero decirles que todas nuestras acciones nos llevan a consecuencias. Los
actos buenos llevan a buenas consecuencias y las malas acciones nos
llevan a malas. Recuerden el dicho que dice: “Quién siembra el bien,
siempre cosechará el bien”.
Maya:
Mija linda, mi preciosa Parlanchina Bla, Bla, Bla. ¿Viste cómo te quieren?
Todos están dispuestos a ayudar.
Maestra Lucy:
(Señalando el salón de clases) En clase tendremos un lugar
especial para colocar las loncheras y pertenencias de cada uno.
También colocaré un cartel en el que escribiré los nombres de los mejores
alumnos de la semana por su comportamiento y ayuda a los demás.
Todos deberán cuidar muy bien el dinero que llevan para comprar en la
tienda.
¿Les enseñó a jugar “No todo lo que brilla es oro?”? (Pueden ordenar la clase
y hacer aquí el juego con los estudiantes) *
Narrador:
Cuando cumplieron su castigo, los animalitos que molestaban a
Parlanchina, ya no lo hicieron más. Los compañeros de clase, siempre
cuidaban de que todo estuviera bien. Al final del año todos estaban muy
felices.

Cotorrita: Durante el recreo podemos hacer juegos de grupo. (Aquí


pueden practicar el juego de “Todos para uno y uno para todos” y el
“Paracaídas”).
Narrador:
Compartieron juegos y actividades. Aprendieron a ser buenos compañeros.
*
Parlanchina:
(Abriendo las alas y volando con entusiasmo y alegría) ¡Qué alegría!... ¡Ahora
tengo muchos amigos(as)! Me siento más segura y sé que juntos podemos
trabajar en grupo. Todos cuidaremos unos de otros y haremos que la
Escuela sea un lugar más seguro.
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