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Este poema describe la dispersión de las partes del cuerpo y del alma de la autora, Violeta Parra, en diferentes lugares de Chile mientras viajaba y sufría dificultades. Menciona cómo dejó partes de sí misma en varias ciudades y pueblos del sur de Chile, incluidos sus nervios, ojos, riñones, instrumentos musicales y extremidades. Finalmente, su corazón llora de pena en la ciudad de Temuco.
Este poema describe la dispersión de las partes del cuerpo y del alma de la autora, Violeta Parra, en diferentes lugares de Chile mientras viajaba y sufría dificultades. Menciona cómo dejó partes de sí misma en varias ciudades y pueblos del sur de Chile, incluidos sus nervios, ojos, riñones, instrumentos musicales y extremidades. Finalmente, su corazón llora de pena en la ciudad de Temuco.
Este poema describe la dispersión de las partes del cuerpo y del alma de la autora, Violeta Parra, en diferentes lugares de Chile mientras viajaba y sufría dificultades. Menciona cómo dejó partes de sí misma en varias ciudades y pueblos del sur de Chile, incluidos sus nervios, ojos, riñones, instrumentos musicales y extremidades. Finalmente, su corazón llora de pena en la ciudad de Temuco.
Un ojo dejé en los lagos Y en la ciudad de chillán Por un descuido casual La calma me bajó a cero El otro quedó en parral Mi riñonada en cabrero En un boliche de tragos Destruye una caminata Recuerdo que mucho Y en una calle de itata estrago Se me rompió el estrumento De niña vio el alma mía Y endilgo pa nacimiento Miserias y alevosías Una mañana de plata Anudan mis pensamientos Entre las aguas y el viento Desembarcando en riñihue Me pierdo en la lejanía Se vio a la violeta parra Sin cuerdas en la guitarra Mi brazo derecho en buín Sin hojas en el colihue Quedó, señores oyentes Una banda de chirigües El otro en san vicente Le vino a dar un concierto Quedó, no sé con qué fin Con su hermanito roberto Mi pecho en curacautín Y cochepe forman un trío Lo veo en un jardincillo Que cant'al orilla del río Mis manos en maitencillo Y en el vaivén de los puertos Saludan en pelequén Mi falda en perilauquén Recoge unos pececillos Se m'enredó en san rosendo Un pie el cruzar una esquina El otro en la quiriquina Se me hunde mares adentro Mi corazón descontento Latió con pena en temuco Y me ha llorado en calchuco De frío por una escarcha Voy y enderezo mi marcha A la cuesta 'e Chacabuco