Está en la página 1de 1357

MENSAJE DEL CÓDIGO DE PROCEDIMIENTO CIVIL

CONCIUDADANOS DEL SENADO Y DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS:

Tengo la honra de someter a vuestra aprobación, oído el Consejo de


Estado, el Proyecto del Código de Enjuiciamiento Civil.

Hasta el presente, el trabajo de codificación se ha dirigido principalmente a


las leyes substantivas. Falta, sin embargo, dar a estas leyes un campo de
acción expedito y obtener de ellas todo el fruto que deben rendir, dotándolas
de procedimientos adecuados para el ejercicio y salvaguardia de los
derechos que con mayor interés procuran amparar. Esta es la necesidad que
se trata de llenar por medio del presente Código, uniformando las reglas de
tramitación diseminadas hoy en leyes numerosas y no pocas veces
contradictorias, y estableciendo procedimientos nuevos en armonía con las
necesidades creadas por los otros Códigos ya en vigencia.

En las leyes de procedimiento, se hace preciso conciliar el interés de los


litigantes, que exige una pronta solución de los pleitos, y el interés de la
justicia, que requiere una concienzuda y acertada apreciación del derecho
sobre que debe recaer el fallo. En obedecimiento a este doble propósito, se
ha creído necesario, por una parte, simplificar en lo posible la tramitación y
adoptar al mismo tiempo una serie de medidas encaminadas a hacer
ineficaces los expedientes dilatorios a que apela la mala fe para retardar la
solución de los pleitos; y, por otra parte, dar a los magistrados mayor latitud
en sus atribuciones a fin de que puedan hacer sentir en mayor grado que
hasta ahora su acción en la formación y marcha de los procesos. Confiados
éstos a la sola iniciativa de las partes, se desvían a menudo de su verdadera
marcha, resultando de allí que la acción de la justicia se hace más fatigosa y
menos eficaz.

Según el plan adoptado, este Código comprende cuatro libros,


destinándose el primero a fijar las reglas comunes a todo procedimiento; el
segundo, a la tramitación del juicio ordinario, que es regla general para los
casos no previstos; el tercero, a los juicios especiales, que por su naturaleza
requieren una tramitación sencilla y breve o que no se ajustarían bien a las
reglas del procedimiento ordinario, y el cuarto, finalmente, a los actos de
jurisdicción no contenciosa.

En la constitución de los poderes judiciales, la aplicación práctica del


artículo 395 de la ley de 15 de octubre de 1875, ha revelado inconvenientes
que se ha creído oportuno subsanar, agregando nuevos medios para
constituir esta clase de mandato, aplicables en especial a las personas que
residen fuera de la cabecera de los departamentos o que representan
intereses comunes. Se ha determinado también el alcance que debe tener el
mandato judicial y la manera de ponerle término durante el juicio sin que
perturbe la marcha de éste.

La acumulación de acciones en un mismo juicio puede originar dificultades


que se ha tratado de allanar. Se ha procurado igualmente regularizar la
comparecencia de diversas personas en una misma litis, sea como partes
directas, sea como terceros coadyuvantes u opositores. El proyecto establece
reglas para fijar las atribuciones de cada cual en estos casos, evitando que
se entorpezca la tramitación.

Se ha estimado necesario limitar los casos en que pueden sacarse de la


secretaría los procesos, tanto para la seguridad de éstos, cuanto para evitar
en lo posible un trámite que, a más de retardar la marcha de los juicios, causa
a las partes gastos inútiles. Con análogos propósitos se ha hecho más eficaz
el apercibimiento en los casos de apremio, haciéndolo recaer sobre los
verdaderos responsables.

Uno de los puntos más delicados del procedimiento es el relativo a la


práctica de las notificaciones. Menester es que se impidan las excusas y
evasivas maliciosas, pero al mismo tiempo deben adoptarse precauciones
para que las resoluciones judiciales lleguen con seguridad a conocimiento de
las partes. El sistema adoptado en el proyecto consiste en practicar una
primera notificación personal al demandado, rodeándola de todas las
seguridades necesarias para su regularidad, e imponer en seguida a las
partes la obligación de mantener vigilancia activa sobre la marcha del
proceso, autorizando para ello las notificaciones por cédula y aun por la
simple inscripción en los estados de las secretarías.

Ha parecido conveniente mantener y aun extender y simplificar las


notificaciones por medio de avisos, cuando el crecido número de los
interesados o la circunstancia de no ser ellos conocidos, hagan
excesivamente dispendiosa o dilatoria la práctica de la notificación personal.
La promoción de incidentes, con el solo fin de retardar la entrada en la litis
o de paralizar su prosecución, es arbitrio de que con frecuencia usan los
litigantes de mala fe. Para corregir este mal, se adoptan diversas
precauciones, facultando a los jueces para rechazar de oficio los incidentes
que aparecieren inconexos con el pleito, determinando el tiempo en que es
lícito promoverlos, estableciendo que su tramitación se haga en ramo
separado y no detenga la de la acción principal, salvo que sea ello
absolutamente indispensable, y fijando penas para los litigantes que
promovieren y perdieren más de tres incidentes dilatorios, pues hay en tal
caso presunción vehemente de mala fe.

La recusación de secretarios y peritos es también motivo de


entorpecimientos en los pleitos, y para atenuar sus efectos se ha establecido
la necesidad de expresar causa que la autorice.

La Ley de Organización de Tribunales ha dado a las implicancias el


carácter de verdaderas prohibiciones y ha parecido oportuno ampliar esta
medida a diversos casos que aquella ley no contempla sino como causales
de recusación, no obstante que suponen en el juez un interés que haría
delicada y sospechosa su intervención en el juicio.

Para facilitar a las partes su tarea y también a los magistrados los medios
de excusar su responsabilidad, se dispone que deberán éstos dar
conocimiento de las causales tanto de implicancia como de recusación que
les afecten; que podrán las últimas reclamarse ante los mismos jueces
recusados; que una sola reclamación bastará para diversos juicios entre las
mismas partes. Se establece, por fin, reglas para la marcha del proceso
mientras dura el incidente.

Para que la condenación de costas sea un correctivo eficaz, habrá de


imponerse en todo caso de pérdida, salvo que circunstancias muy calificadas
hagan necesaria una declaración expresa del tribunal en sentido contrario.
Pero en ningún caso podrán los tribunales eximir del pago de las que se
causen en los incidentes dilatorios a la parte que los pierde. Para la
estimación de las costas se tomará como base la avaluación de la parte que
las cobra, sujeta naturalmente a la apreciación del juez.

El desistimiento de la demanda y el abandono de la instancia han sido


objeto de especial reglamentación. Este último, sobre todo, que importa una
reforma substancial, tiende a corregir la situación anómala que crea entre los
litigantes la subsistencia de un juicio largo tiempo paralizado.
Los propósitos antes insinuados, de dar mayor latitud a la iniciativa e
intervención del juez en la marcha del proceso, justifican la concesión de más
amplias facultades para decretar de oficio medidas tendientes al
esclarecimiento de los hechos cuestionados. El tribunal que debe dar
sentencia dispondrá así de todos los medios necesarios para ilustrar su
criterio y formar una apreciación completa y exacta de los puntos litigados.

Las dispersiones de votos que con frecuencia ocurren en los acuerdos de


los tribunales colegiados, son causa de retardos perjudiciales. Se han
adoptado medidas tendientes a impedirlas y a simplificar la solución de estas
dificultades.

De acuerdo con lo establecido en otros Códigos extranjeros, se faculta a


los tribunales para fallar separadamente y a medida que se encuentren en
estado las diversas cuestiones que en un mismo juicio se ventilen. Se han
adoptado reglas encaminadas a impedir que la avaluación de los frutos o
perjuicios se haga por un nuevo juicio diverso de aquel en que se debate el
derecho a cobrarlos, evitándose la promoción de nuevos pleitos.

Estudiado el efecto de las sentencias, ha sido preciso aclarar diversos


puntos relativos al valor de la cosa juzgada, especialmente en cuanto los
juicios civiles se relacionan con los criminales o suponen reclamaciones que
a éstos corresponde hacer.

Las facultades de los jueces para enmendar o rectificar sus propias


sentencias, han dado lugar a dudas que conviene se eviten en lo sucesivo
estableciéndose reglas precisas sobre lo que es lícito hacer en esta materia.

En los trámites de la apelación se ha creído conveniente suprimir el


señalamiento de estrados, que no corresponde a ninguna necesidad de la
tramitación. Para que ésta continúe, bastará el certificado del respectivo
secretario que acredita la no comparecencia de las partes.

Sin motivo suficiente se abstienen los tribunales de alzada de pronunciarse


sobre las cuestiones subsidiarias debatidas en primera instancia, cuando no
ha recaído sobre ellas un pronunciamiento especial, que el juez a quo excusa
como incompatible con el fallo de la cuestión principal. El proyecto faculta a
aquéllos para resolver dichas cuestiones por sí solos, evitando las dilaciones
y aun el peligro de un prejuzgamiento, que se originan del procedimiento
actual. Por análogas razones corresponderá al tribunal de segunda instancia
fallar sin nuevos recursos los incidentes que ante él se promuevan.
La ejecución de las sentencias da lugar a dificultades que se ha tratado de
subsanar, especialmente en lo relativo a las que emanan de tribunales
extranjeros. Los tratados, la reciprocidad y, en último término, los principios
de natural equidad, son las bases sobre que descansan estas disposiciones.

Los procedimientos del juicio ordinario han recibido modificaciones de


trascendental importancia, fijándose además en muchos las reglas variables
o de incierta aplicación aceptadas por la jurisprudencia de nuestros
tribunales.

Convenía precisar los casos en que es admisible la ampliación o


rectificación de la demanda, como asimismo dar reglas para el procedimiento
de jactancia, sobre el cual nada determinado existe.

Enumera y reglamenta el proyecto las medidas prejudiciales que es lícito


solicitar para que sea posible la entrada en el juicio, y aun acepta que puedan
reclamarse con este carácter las medidas precautorias que la ley autoriza,
pero estableciendo al mismo tiempo restricciones que impidan todo abuso del
demandante y respondan de cualquier injusto perjuicio que pudiera
ocasionarse.

Por una equitativa compensación, se ha creído necesario otorgar derechos


análogos a los que fundadamente temen ser demandados, y se les autoriza
para reclamar como medidas prejudiciales aquéllas que sean indispensables
para preparar su defensa.

La reglamentación de las medidas precautorias, sobre lo cual nada fijo


existe en nuestro actual procedimiento, es punto delicado, pues se hace
preciso conciliar la seguridad del derecho del actor y el respeto a la propiedad
del demandado. Menester es limitar dichas medidas a lo estrictamente
indispensable para que no se burle la acción del demandante y evitar al
mismo tiempo que con ellas sufra menoscabo el derecho de terceros. Se ha
procurado alcanzar estos resultados en el proyecto, excusando molestias
innecesarias y exigiendo la inscripción en el Conservador de las prohibiciones
que se decreten sobre bienes raíces para que puedan afectar a personas
extrañas al juicio.

Nuestro Código Civil reconoce el derecho del comprador evicto para


reclamar la intervención del vendedor; pero para hacer eficaz este derecho
ha sido necesario establecer reglas que fijen la manera de reclamarlo,
reduciendo en lo posible las trabas que con ello se originan para la expedita
marcha del juicio.
La disposición de la Ley de Organización y Atribuciones de los Tribunales,
que determina cómo debe establecerse la competencia de los jueces en el
caso de reconvención, ofrece inconvenientes en la práctica, que se ha tratado
de salvar adoptando una regla diversa de la que aquella ley formula.

Los procedimientos de la prueba sufren un cambio radical en este proyecto.


Según él, corresponde en todo caso al juez determinar los puntos sobre que
debe recaer, en vista de las minutas de las partes; con lo cual se evitan
preguntas innecesarias o impertinentes que obscurecen en vez de aclarar las
cuestiones, y se reduce el debate a aquello que sea realmente útil para el
pronunciamiento de la sentencia.

La duración incierta del término probatorio; la facilidad de dilatarlo por


medio de prórrogas sucesivas; las cuestiones que nacen de las suspensiones
de dicho término y sobre la validez de las declaraciones recibidas durante
ellas, son causas de entorpecimientos graves para la pronta conclusión de
los juicios. Se procura remediarlas, estableciendo un término que habrá de
concederse íntegro desde luego y que, no obstante, las partes podrán reducir;
se prohíben las suspensiones, y se da lugar a términos especiales
complementarios que reemplacen los días en que haya habido impedimento
real para rendir prueba.

Las declaraciones de los testigos serán públicas, y se concederá a las


partes el derecho de interrogarlos para precisar el alcance de lo que se
asevere. Las tachas deberán oponerse antes del examen de cada testigo.
Estos procedimientos, que algunas leyes especiales tienen establecidos, no
han dado el fruto que debieran, por haberse autorizado su renuncia, de lo
cual aprovechan los litigantes o las personas que en su representación
gestionan por motivos de conveniencia personal, pero con perjuicio de la
regularidad del procedimiento. Ha habido, pues, necesidad de prohibir tales
renuncias.

Aun cuando aparezca excesiva la tarea de los jueces en la tramitación que


el proyecto acoge, debe tenerse presente que ella se simplifica
considerablemente con la reducción del número de testigos a sólo seis por
cada hecho, y del número de preguntas, que el mismo juez está encargado
de formular, limitándolas a lo necesario para el esclarecimiento de la cuestión.
El estudio de ésta, que el juez se ve obligado a hacer para el desempeño de
su tarea en la rendición de la prueba, habrá de facilitar, por otra parte, el
despacho de los juicios, permitiendo al magistrado apreciar desde luego el
alcance e importancia de cada solicitud; lo cual no es siempre fácil que
suceda cuando se reserva el estudio completo de los autos para el momento
en que debe pronunciarse la sentencia.
Con respecto a los otros medios particulares de prueba, se determina la
manera de establecer la autoridad de los documentos públicos otorgados
dentro o fuera de la República. En la confesión, no se impone al que la solicita
la obligación injustificada de hacer sólo preguntas asertivas, reconociendo
forzosamente la existencia de los hechos sobre los cuales necesita indagar
la opinión del contendor. La parte que exige la confesión podrá estar presente
en el acto de tomarla, y aun hacer preguntas para fijar su alcance; pero en
cambio se limita el número de veces que puede repetirse la confesión para
excusar exigencias caprichosas o maliciosas, y se permite al confesante
alegar y justificar que ha obrado por error, aun cuando no se trate de hechos
personales. Ha parecido necesario establecer el alcance de la confesión
calificada, sobre lo cual se han suscitado frecuentes dudas.

La apreciación de las varias pruebas y de su valor relativo es materia de


reglamentación especial, para que se facilite la tarea de los jueces en la
elección del fallo.

Reconocido el derecho de adherirse a la apelación deducida por una de las


partes, ha sido preciso determinar con claridad la manera de ejercerlo, para
evitar toda sorpresa al adversario.

Con este objeto, queda prohibida la adhesión verbal en estrados, aceptada


en nuestro actual procedimiento.

La materia de los juicios especiales es la que ha recibido mayores


modificaciones, porque corresponde en gran parte a las nuevas situaciones
creadas por los otros Códigos ya aprobados.

En el juicio ejecutivo se ha creído conveniente dar cabida a una reforma


reclamada tiempo ha, que exige la inscripción en el Conservador del embargo
de bienes raíces para que pueda afectar a terceros. Con ello se llenan los
propósitos que se tuvieron en vista al establecer el Registro de
Conservadores, reuniendo allí y haciendo públicos todos los gravámenes que
pesen sobre la propiedad raíz.

Ha sido materia de duda el valor de cosa juzgada que corresponda a las


sentencias de los juicios ejecutivos con relación a la acción ordinaria en que
se ventilen los mismos derechos, y ha parecido oportuno consignar reglas
precisas que resuelvan aquella duda.

Se da lugar en este proyecto a la tercería del que pretende concurrir con el


primer ejecutante en el pago de una obligación igualmente ejecutiva, siempre
que no haya bienes suficientes para satisfacer a ambos acreedores. De esta
manera se evitarán las dificultades que a menudo se ofrecen, adoptándose
una regla equitativa que ampare los derechos del tercerista.

Para llenar un vacío del procedimiento actual, se establecen reglas para el


caso de cesión de bienes a un solo acreedor, caso que el Código Civil
contempla en su artículo 1614.

La acción ejecutiva puede recaer no sólo sobre obligaciones de dar, sino


también sobre las de hacer, cuando el título en que se funda reúne las
condiciones necesarias para que aparezca claro y expedito el derecho del
acreedor. No hay razón para que el crédito en dinero merezca el amparo de
la ley, y no se haga extensivo este amparo al que reclama la ejecución de un
hecho cuya obligación conste de instrumento público vencido, ni sería
equitativo imponerle la carga de seguir un juicio ordinario para obtener el pago
de lo que se le adeuda en tales condiciones. En conformidad a lo que otros
Códigos establecen, se ha ampliado el procedimiento ejecutivo a estos casos,
dándose las reglas más apropiadas para facilitarlo.

Se ha procurado uniformar en lo posible la tramitación del concurso civil y


de la quiebra mercantil, con lo cual gana en sencillez el procedimiento. Se
reservan para la quiebra sólo aquellas disposiciones que, basadas en el
Código de Comercio, y de índole peculiar a las operaciones mercantiles, no
tengan cabida en el concurso civil.

Entre las reglas comunes a ambos procedimientos, conviene recordar las


que se refieren a la acumulación de expedientes, a la subsistencia de
embargos y medidas precautorias decretadas con anterioridad a la falencia,
a la designación del síndico definitivo por los acreedores en la primera junta
y a la determinación de su honorario. En cuanto a la duración de las funciones
del síndico, ha parecido conveniente limitarla sólo a dieciocho meses como
un estímulo para la pronta terminación de estos juicios, sin que sea permitido
ampliar este plazo, y sí sólo renovar el nombramiento a su expiración.

Son bien conocidas la frecuencia y facilidad con que se abusa de los


convenios en los concursos, y la dificultad que hay para establecer en muchos
casos la falsedad de los créditos con que llegan a formarse fraudulentamente
las mayorías. No es justo tampoco que la conveniencia de los más prive a los
que rechazan el convenio del derecho de recibir desde luego la cuota, grande
o pequeña, que habría de corresponderles en la liquidación. Un convenio
impuesto por la fuerza es un verdadero contrasentido, y una injusticia que la
ley no debe amparar. Para poner en práctica estas ideas, adopta el proyecto
diversas medidas que modifican radicalmente las disposiciones actuales
sobre esta materia. Se requiere, en primer lugar, unanimidad de los
acreedores concurrentes para toda rebaja de créditos que llegue al cincuenta
por ciento y para toda concesión de plazo que exceda de cuatro años.
Además, el convenio no impedirá a los acreedores que se hubieren opuesto
a él, exigir el pago de lo que les habría correspondido en la liquidación y
reparto de los haberes del concurso.

La cuestión, muchas veces debatida, sobre si en las acciones posesorias


debe darse conocimiento de la demanda al querellado, se resuelve en sentido
afirmativo, pues lo contrario da lugar a vejaciones injustas. Para que el
amparo del derecho del poseedor sea eficaz, basta adoptar un procedimiento
que impida todo retardo innecesario en el juicio.

Del contrato de arrendamiento nacen acciones que exigen una tramitación


brevísima, y que hoy se someten al procedimiento moroso de un juicio
ordinario. El proyecto contiene un título especial destinado a subsanar esta
falta.

Para llenar análogas necesidades, ha sido preciso reglamentar los


procedimientos sobre permiso para contraer matrimonio y sobre autorización
a la mujer casada para contratar.

A las disposiciones del juicio arbitral, se agrega un nuevo título sobre


partición de bienes, adoptando en gran parte y regularizando lo que la
práctica tiene ya establecido. Se ha procurado además aclarar algunas dudas
que ocasionan los preceptos del Código Civil sobre particiones.

La distribución de aguas comunes da lugar a frecuentes y molestas


dificultades, por falta de un procedimiento sencillo y breve que reglamente la
manera de hacer el reparto. Establecido este procedimiento para sólo efectos
pasajeros, se reserva al juicio ordinario la determinación definitiva del derecho
de los comuneros.

A una necesidad análoga se atiende con el procedimiento sumario en


aquellos casos en que la ley o la naturaleza del derecho discutido requieren
un pronto fallo.

La rendición de cuentas da lugar a cuestiones en caso de negligencia de


los obligados a presentarlas. Ha parecido conveniente establecer la
responsabilidad que esta negligencia impone y la manera de subsanarla.

Para facilitar la unificación de la justicia de menor y de mínima cuantía que


habrá de encomendarse a unos mismos funcionarios, se adopta un solo
procedimiento para los juicios de que conocen los jueces de subdelegación y
los de distrito.
Se ha ampliado este procedimiento, dando reglas para tramitar las
acciones ejecutivas que ante dichos jueces se promuevan y se ha tratado de
hacerlo estrictamente verbal, impidiéndose el abuso frecuente de formar
expedientes voluminosos en litigios de muy reducido interés.

Las disposiciones especiales del Código de Comercio sobre avería común


han hecho necesario un procedimiento apropiado para resolver las
cuestiones que en esta materia pueden suscitarse.

No obstante lo dispuesto en el Código de Minería, se ha juzgado preferible


equiparar los juicios de minas a los de comercio. El procedimiento adoptado
por aquel Código no se armoniza con los que quedan establecidos para los
juicios comunes, ni prevé los varios casos que pueden ocurrir en materia de
incidentes, tachas, etc. Sus resultados no serían tampoco más rápidos que
los que en materia comercial se obtienen. Para aquellos casos que requieren
una tramitación más breve, se ha adoptado el procedimiento sumario que
este mismo Código establece.

Las disposiciones que hoy rigen sobre matrimonio reclaman una forma
especial para los juicios en que se ventilen cuestiones de nulidad y de
divorcio, perpetuo o temporal, en armonía con la nueva situación creada por
dichas disposiciones.

Faltaba asimismo un procedimiento apropiado para hacer efectivo el


derecho de desposeimiento que el Código Civil concede al acreedor sobre el
tercer poseedor de la finca hipotecada o acensuada. Ha sido necesario
consignarlo.

Terminan los procedimientos especiales con el que debe servir para el


recurso de casación en la forma y en el fondo. No difiere el primero
esencialmente del actual recurso de nulidad; pero se ha procurado llenar los
vacíos y aclarar las dudas que en él se notan. Se determinan con tal objeto
los trámites cuya omisión da lugar al recurso, y se desconoce de un modo
expreso la acción ordinaria de nulidad para invalidar sentencias, no
admitiéndose otro camino que el de la casación para lograr este resultado; en
obsequio a la brevedad de los procedimientos y al tranquilo goce de los
derechos declarados en juicio.

La casación en el fondo introduce en nuestra legislación una novedad


reclamada por las necesidades de dar uniforme aplicación a las leyes. Se ha
limitado sólo a las sentencias de las Cortes de Alzada, como encargadas de
dar la norma para el correcto funcionamiento de los tribunales inferiores.
Aun cuando, para conservar a la casación su verdadero y elevado carácter,
aconsejan muchos jurisconsultos limitar las funciones del tribunal a sólo la
declaración que invalida el fallo reclamado, se ha creído preferible
encomendarle también la resolución del asunto en que la casación recae, con
el fin de evitar dilaciones y gastos a los litigantes, y una organización más
vasta del tribunal a quien se encarga esta misión.

La última parte del proyecto está consagrada a los actos de jurisdicción


voluntaria, determinándose allí las facultades de los jueces para proceder y
para dejar sin efecto sus resoluciones, una vez dictadas.

Los preceptos del Código Civil sobre legitimación, emancipación,


reconocimiento de hijos naturales, habilitación de edad, nombramiento de
tutores y curadores, han hecho necesario establecer reglas aplicables a cada
uno de estos casos, consultando el espíritu de aquel Código.

Las medidas que reclama la apertura de una sucesión y los trámites que le
son consiguientes, exigen un Título especial, que salven las frecuentes dudas
que en la práctica se ofrecen. Especialmente ocurre esto al tratarse de la
posesión de las herencias y de la manera como puede hacerse valer el título
de heredero. Se ha estimado conveniente dar cierta publicidad a estos actos,
para que los terceros interesados puedan hacer valer oportunamente sus
derechos.

Reglamentada la manera de rendir informaciones para perpetua memoria,


se determina el valor que debe atribuírseles.

Los trámites a que debe someterse la expropiación por causa de utilidad


pública, en los casos en que una ley la autorice, son materia de un nuevo
título que resume las disposiciones hoy en vigencia.

Santiago, 1º de febrero de 1893. JORGE MONTT. MÁXIMO DEL CAMPO.


MENSAJE CON QUE S. E. EL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA
ACOMPAÑÓ AL CONGRESO NACIONAL EL PROYECTO DE
LEY SOBRE MODIFICACIONES AL CÓDIGO DE
PROCEDIMIENTO CIVIL

CONCIUDADANOS DEL SENADO Y DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS:

El Presidente de la República solemnemente prometió al país una reforma


en la Administración de Justicia.

El 3 de abril de 1942 se dirigió a la ciudadanía diciéndole: "El Gobierno


resguardará celosamente las prerrogativas de los demás Poderes del Estado.

En cuanto le concierna, procurará facilitar y hacer más expedita la


administración de justicia por medio de reformas prolijamente estudiadas".

Con anterioridad a esta declaración había dicho: "que la función de


administrar justicia era la más delicada de todas las que puedan ejercitarse
en una democracia; que poner una buena justicia al alcance de todos era el
más alto ideal a que pudiera aspirar un gobernante; que la justicia, por
definición, tenía que ser expedita y rápida, porque de lo contrario degeneraba
en una mera función burocrática; que la justicia jugaba un rol importante como
auxiliar en la producción de la riqueza y en la paz social, y que el signo más
auténtico de evolución en una sociedad organizada era el que cada
ciudadano tuviera la conciencia íntima de que en cualquier momento podía
hallar amparo oportuno a sus derechos".

En camino hacia la realización de estas promesas es que el Ejecutivo envía


este proyecto a la consideración de la Honorable Cámara.

Sus líneas más salientes dicen relación con conceptos procesales que ya
el tiempo ha dejado de lado o con notorios vacíos que en forma adecuada se
llenan.

He aquí en síntesis las reformas más importantes que se proponen: se


reducen plazos; se eliminan muchos incidentes dilatorios y muchos trámites
inútiles; se hace del privilegio de pobreza una gestión fácil, sin las
complicaciones de la tramitación actual; se aprovecha la rapidez del juicio
sumario para hacerlo extensivo a campos de acción que hoy no son suyos;
se establece que los incidentes se fallarán en segunda instancia sin alegatos
de abogados, salvo que la unanimidad del tribunal estime lo contrario; se
ordena que todo juicio ordinario o sumario empiece por un intento de
conciliación entre las partes; se suprimen los alegatos de bien probado y la
expresión de agravios en el juicio ordinario; se estatuye que el recurso de
casación contra sentencia de primera instancia se vea y falle conjuntamente
con la apelación; se establece que el recurso de casación en la forma no
procederá contra sentencia de segunda instancia que confirme sin
modificación la de primera, salvo las causales de incompetencia y ultra petita;
se amplían las atribuciones de los magistrados, que en numerosos casos
hasta podrán proceder de oficio; a los jueces se les saca de su rol pasivo de
meros espectadores en la contienda judicial, para llevarlos al plano de
personeros activos de la justicia, premunidos de las facultades necesarias
para establecer, con pleno conocimiento de causa, la verdad jurídica que
permita, fundada y rápidamente, dar a cada uno lo que es suyo.

El Ejecutivo confía en que la Honorable Cámara, haciéndose intérprete de


una necesidad que el país todo reclama, quiera aprobar estas reformas en el
menor plazo posible; solicita su cooperación para una obra que, una vez
realizada tanto para la vida económica cuanto para la vida moral de la
República, será de inmensas y dilatadas proyecciones.

En la Comisión respectiva podrán los señores parlamentarios coadyuvar


con todas aquellas iniciativas que tiendan a perfeccionar este proyecto. Eso
sí, no distanciándose de las bases esquemáticas señaladas, porque
cualesquiera iniciativas que se traduzcan en querer darle a esta reforma un
exceso de amplitud, antes que facilitar su camino se lo obstaculizarán.

Dentro de lo dicho, se aceptarán cuantas indicaciones miren a hacer que


esta reforma sea una conquista para el bien general.

En concepto del Ejecutivo, el mayor mal que se le puede hacer a la


administración de justicia es substituir Códigos que estén en movimiento, que
estén rigiendo, por Códigos nuevos y teóricos, así hayan sido ellos
elaborados por las capacidades jurídicas que se quieran.

Un Código no es un hecho aislado, lo integran prácticas y jurisprudencias


que, en conjunto, constituyen esas innúmeras y pequeñas raíces que,
sumadas en un esfuerzo total, mantienen en pie el árbol de la justicia.
Un viejo país de Europa —la Inglaterra— da, a este respecto, un sabio
ejemplo que empieza en sus seculares instituciones parlamentarias y termina
en sus instituciones de derecho privado.

Además de la línea de conducta que se acaba de enunciar, todas las


modificaciones que se pretenda hacer a la legislación —codificada o no—
deberán inspirarse en las sabias palabras de un hombre que dejó huellas
perdurables en el campo del Derecho, que honró como ciudadano a este país,
y de cuyas ideas normativas no se puede prescindir.

Con una visión que victoriosa desafía al tiempo, desentrañaba la índole de


esta clase de trabajos y emitía conceptos que serán de permanente
actualidad. Decía don Andrés Bello:

"Yo no presumo ofreceros bajo estos respectos una obra perfecta; ninguna
tal ha salido hasta ahora de la mano del hombre, la práctica descubrirá, sin
duda, defectos en la ejecución de tan ardua empresa; pero la legislatura
podrá fácilmente corregirlos con conocimiento de causa.

Será lo que haga el Ejecutivo una vez que se haya barrido del camino el
inmenso obstáculo que implica eliminar un pasado caduco, con miras
ansiosas enderezadas a erigir un futuro mejor.

Por estas consideraciones, pidiéndoos la urgencia en cada uno de los


trámites constitucionales, someto a vuestro conocimiento, para que pueda ser
tratado en el actual período extraordinario de sesiones, el siguiente Proyecto
de Ley sobre modificaciones al Código de Procedimiento Civil.

Santiago, 24 de noviembre de 1942.

JUAN ANTONIO RÍOS M. Óscar Gajardo V.


DECRETO Nº 1.107
Santiago, 21 de marzo de 1944

Hoy se decretó lo que sigue:

Visto lo dispuesto en el artículo 3º transitorio de la Ley Nº 7.760, de 5 de


febrero del presente año,

Decreto:

1º Téngase la presente edición como el texto oficial del Código de


Procedimiento Civil; y

2º Dos ejemplares de dicho texto, autorizados por el Presidente de la


República y signados con el sello del Ministerio de Justicia, se depositarán en
las Secretarías de ambas Cámaras y otro en el Archivo de dicho Ministerio.

Dicho texto se tendrá por el auténtico del Código de Procedimiento Civil, y


a él deberán conformarse las demás ediciones y publicaciones que del
expresado Código se hagan.

Tómese razón, regístrese, comuníquese, publíquese e insértese en el


"Boletín de Leyes y Decretos del Gobierno".

J. A. RÍOS M. Óscar Gajardo V.


LEY Nº 1.5521
Por cuanto el Congreso Nacional ha dado su aprobación al siguiente

Proyecto de ley:

Artículo 1º. Apruébase el adjunto Código de Procedimiento Civil, que comenzará a regir
desde el 1º de marzo de 1903.

...................................................................................................

...................................................................................................

Y por cuanto, oído el Consejo de Estado, he tenido a bien aprobarlo y sancionarlo; por
tanto, promúlguese y llévese a efecto en todas sus partes como ley de la República.

Santiago, a veintiocho de agosto de mil novecientos dos. GERMÁN RIESCO. Rafael


Balmaceda.
LIBRO PRIMERO DISPOSICIONES COMUNES A TODO
PROCEDIMIENTO

TÍTULO I REGLAS GENERALES

ARTÍCULO 1º

Las disposiciones de este Código rigen el procedimiento de las contiendas


civiles entre partes y de los actos de jurisdicción no contenciosa, cuyo
conocimiento corresponda a los Tribunales de Justicia.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 5º, 43 y 489. Código Procesal Penal:
artículo 52. Código Orgánico de Tribunales: artículos 1º, 2º y 71. Código Tributario: artículo 148.
Código de Minería: artículo 233. Código Aeronáutico: artículo 19. Código del Trabajo:
artículos 415, 416, 432 y 474. Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de Familia: artículos 1º, 2º, 3º,
4º y 81. Ley Nº 19.947, sobre Matrimonio Civil: artículo 87. Ley Nº 20.022, crea Juzgados
Laborales y de Cobranza Laboral: artículos 1º y 8º. Ley Nº 18.287 sobre Procedimiento ante
Juzgados de Policía Local: artículo 1º.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Abandono del procedimiento. Aplicación supletoria de las normas del


Código de Procedimiento Civil en materia tributaria

De acuerdo a los artículos 1º y 3º del Código de Procedimiento Civil,


sus normas tienen aplicación supletoria para todo tipo de contiendas
civiles entre partes, como también a aquellas gestiones, trámites y
actuaciones que no estén sometidos a una regla especial diversa. Por
su parte, el artículo 2º del Código Tributario, en lo no previsto por sus
normas y demás leyes tributarias, hace aplicable las normas de derecho
común contenidas en leyes generales o especiales. De lo antedicho se
desprende que la institución del abandono del procedimiento es
plenamente procedente en este tipo de causas; ello explica la decisión
del legislador de excluir en forma expresa esta institución sólo en las
reclamaciones referidas al Título II del Libro Tercero del Código
Tributario, según se señala en su artículo 146 —vigente a la fecha de
inicio del proceso, pero hoy derogado por la Ley Nº 20.322—, y en el
caso que el contribuyente se haya acogido a facilidades de pago de los
impuestos adeudados, conforme a lo dispuesto en el artículo 192
inciso 5º del referido Código. En suma, resulta evidente la procedencia
del abandono del procedimiento, máxime si existe norma expresa según
el artículo 148 del Código Tributario (considerandos 2º y 3º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones). Los términos genéricos en que
el legislador ha regulado la institución del abandono del procedimiento,
en el Título XVI del Libro Primero del Código de Procedimiento Civil, sin
que el artículo 148 del Código Tributario los haya excluido, da cuenta
también de la procedencia de dicha sanción en este tipo de juicios. Así
las cosas, habiendo transcurrido en exceso el plazo de tres años
contado desde la última gestión útil efectuada en el procedimiento;
procede declarar el abandono en este caso (considerandos 5º y 6º de
la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Antofagasta, 25/10/21019, Rol Nº 1143-


2019,

Cita online: CL/JUR/6305/2019

2. Carácter Supletorio de las reglas del procedimiento ordinario

Atento a lo anterior, la jurisprudencia y la doctrina reiterada y


sobradamente conocida, sostienen el carácter de supletorio de las
reglas y normas del procedimiento ordinario, y el que tiene una
aplicación general en todos los casos que no exista una regla especial
diversa. De consiguiente, tiene aplicación en la especie el artículo 320
del Código de Procedimiento Civil, el que se encuentra dentro del Juicio
Ordinario, del Libro II del Código de Procedimiento Civil, y por lo tanto,
es procedente que pueda acompañarse una nómina de testigos, dentro
de los cinco días siguientes a la notificación que se pronuncie sobre la
solicitud de reposición, como ocurre en el caso de autos (considerandos
6º y 7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 25/07/1997, Rol Nº 3038-1997,

Cita online: CL/JUR/1683/1997

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 11/07/2001, Rol Nº 2302-2001,


Cita online: CL/JUR/3982/2001

— Corte Suprema, 22/07/1996, Rol Nº 32441,

Cita online: CL/JUR/563/1996

— Corte Suprema, 3/07/1991, Rol Nº 4827,

Cita online: CL/JUR/1224/1991

ARTÍCULO 2º

El procedimiento es ordinario o extraordinario. Es ordinario el que se


somete a la tramitación común ordenada por la ley, y extraordinario el que se
rige por las disposiciones especiales que para determinados casos ella
establece.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 3º, 253 y siguientes, 680, 681, 817 y
siguientes, Libros II y III. Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de Familia: artículo 27.

ARTÍCULO 3º

Se aplicará el procedimiento ordinario en todas las gestiones, trámites y


actuaciones que no estén sometidos a una regla especial diversa, cualquiera
que sea su naturaleza.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 1º al 434 y 823. Código Civil:


artículos 4º y 197.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Aplicación supletoria de las normas del Código de Procedimiento Civil


en materia tributaria

De acuerdo a los artículos 1º y 3º del Código de Procedimiento Civil,


sus normas tienen aplicación supletoria para todo tipo de contiendas
civiles entre partes, como también a aquellas gestiones, trámites y
actuaciones que no estén sometidos a una regla especial diversa. Por
su parte, el artículo 2º del Código Tributario, en lo no previsto por sus
normas y demás leyes tributarias, hace aplicable las normas de derecho
común contenidas en leyes generales o especiales. De lo antedicho se
desprende que la institución del abandono del procedimiento es
plenamente procedente en este tipo de causas; ello explica la decisión
del legislador de excluir en forma expresa esta institución sólo en las
reclamaciones referidas al Título II del Libro Tercero del Código
Tributario, según se señala en su artículo 146 —vigente a la fecha de
inicio del proceso, pero hoy derogado por la Ley Nº 20.322—, y en el
caso que el contribuyente se haya acogido a facilidades de pago de los
impuestos adeudados, conforme a lo dispuesto en el artículo 192
inciso 5º del referido Código. En suma, resulta evidente la procedencia
del abandono del procedimiento, máxime si existe norma expresa según
el artículo 148 del Código Tributario (considerandos 2º y 3º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones). Los términos genéricos en que
el legislador ha regulado la institución del abandono del procedimiento,
en el Título XVI del Libro Primero del Código de Procedimiento Civil, sin
que el artículo 148 del Código Tributario los haya excluido, da cuenta
también de la procedencia de dicha sanción en este tipo de juicios. Así
las cosas, habiendo transcurrido en exceso el plazo de tres años
contado desde la última gestión útil efectuada en el procedimiento;
procede declarar el abandono en este caso (considerandos 5º y 6º de
la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Antofagasta, 25/10/2019, Rol Nº 1143-2019,

Cita online: CL/JUR/6305/2019

2. Carácter Supletorio de las reglas del procedimiento ordinario

Atento a lo anterior, la jurisprudencia y la doctrina reiterada y


sobradamente conocida, sostienen el carácter de supletorio de las
reglas y normas del procedimiento ordinario, y el que tiene una
aplicación general en todos los casos que no exista una regla especial
diversa. De consiguiente, tiene aplicación en la especie el artículo 320
del Código de Procedimiento Civil, el que se encuentra dentro del Juicio
Ordinario, del Libro II del Código de Procedimiento Civil y, por lo tanto,
es procedente que pueda acompañarse una nómina de testigos, dentro
de los cinco días siguientes a la notificación que se pronuncie sobre la
solicitud de reposición, como ocurre en el caso de autos (considerandos
6º y 7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 25/07/1997, Rol Nº 3038-1997,


Cita online: CL/JUR/1683/1997

3. Aplicación de las normas comunes a todo procedimiento en la etapa


de cumplimiento de las sentencias dictadas en juicios de alimentos

Que no existiendo en la Ley de Familia Nº 19.968 una norma que


regule el procedimiento para ejecutar las resoluciones debemos irnos al
procedimiento de aplicación general establecido en el Título XIX del
Libro Primero del Código de Procedimiento Civil, ya que el artículo 3º
del mismo cuerpo legal dispone que "se aplicará el procedimiento
ordinario en todas las gestiones, trámites y actuaciones que no estén
sometidos a una regla diversa, cualquiera que sea su naturaleza". Que,
así las cosas, en la etapa de ejecución de las sentencias dictadas en
las causas sobre alimentos, además de las reglas especiales de
cumplimiento forzado que contiene la propia Ley Nº 14.908, reciben
aplicación las normas sobre ejecución de las resoluciones judiciales
previstas en los artículos 233 y siguientes del Código de Procedimiento
Civil, así como las establecidas en los artículos 187 y 241 del Código de
Procedimiento Civil, que señalan el plazo de cinco días para deducir
recurso de apelación (considerandos 3º y 5º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 17/03/2017, Rol Nº 21003-


2016,

Cita online: CL/JUR/1052/2017

4. Procedencia del abandono del procedimiento en el procedimiento de


cobro ejecutivo de obligaciones tributarias.

De conformidad a lo dispuesto en los artículos 2 y 168 y siguientes


del Código Tributario, resultan aplicables a los procedimientos
establecidos en dicho código, las normas de derecho común contenidas
en leyes generales y especiales, entre las que se encuentra la
institución del abandono del procedimiento, establecida en el Libro I del
Código de Procedimiento Civil, que contiene las disposiciones comunes
a todo procedimiento. En relación con lo anterior, no resulta un
impedimento para su aplicación el hecho que no exista parte en el juicio,
puesto que si bien el sustanciador forma parte del organismo
recaudador, es la Tesorería Regional respectiva el ejecutante en el
proceso, no siendo los argumentos de dicha entidad admitidos como
excusa para que un procedimiento de esta naturaleza se mantenga
vigente de manera ininterrumpida (considerandos 2º y 3º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 16/01/2019, Rol Nº 13980-2018,

Cita online: CL/JUR/292/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 30/11/2018, Rol Nº 6723-2018,

Cita online: CL/JUR/6666/2018

— Corte de Apelaciones de Concepción, 30/11/2018, Rol Nº 1002-


2018,

Cita online: CL/JUR/6677/2018

TÍTULO II DE LA COMPARECENCIA EN JUICIO

ARTÍCULO 4º (5º)

Toda persona que deba comparecer en juicio a su propio nombre o como


representante legal de otra, deberá hacerlo en la forma que determine la ley.2

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 6º, 7º, 303 Nº 2, 385, 464 Nº 2 y 829.
Código Civil: artículo 43. Código de Comercio: artículos 416, 907 y 922. Código Procesal Penal:
artículo 102. Código Orgánico de Tribunales: artículos 202, 398 y 520. Código de Minería:
artículo 36. Ley Nº 18.046, Ley de Sociedades Anónimas: artículo 49. Ley Nº 18.101, sobre
Arrendamiento de Predios Urbanos: artículo 8º. Ley Nº 18.120, sobre Comparecencia en Juicio.
Ley Nº 18.287 sobre Procedimiento ante Juzgados de Policía Local: artículo 7º. Ley Nº 19.496,
sobre Protección Derechos del Consumidor: artículo 51. Código del Trabajo: artículos 397 y
434. Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de Familia: artículos 18, 19 y 60.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Comparecencia en juicio de mandatario con administración de bienes


Que por su parte el artículo 4º del Código de Procedimiento Civil,
dispone que las personas que comparecen en juicio a nombre de otro,
deben hacerlo en la forma que determine la ley, norma complementada
por la Ley Nº 18.210, sobre comparecencia en juicio. En este orden,
para realizar actos de procedimiento o pedir en juicio, como en la
especie ocurre, debe tratarse de personas que reúnan las calidades
establecidas en el inciso primero del artículo 2º, de la citada ley, es
decir, con capacidad para postular o ius postulandi (abogado habilitado
para el ejercicio de la profesión, procurador del número, estudiante
actualmente inscrito en tercero, cuarto o quinto año de las Escuelas de
Derecho de las Facultades de Ciencias Jurídicas y Sociales de alguna
de las universidades autorizadas, o egresado de esas mismas escuelas
hasta tres años después de haber rendido los exámenes
correspondientes). Por su parte, el inciso séptimo del referido
artículo 2º, prescribe: "no obstante lo dispuesto en el inciso primero de
este artículo, en los mandatos con administración de bienes podrá
conferirse al mandatario facultad de comparecer en juicio, pero si éste
no fuere abogado habilitado para el ejercicio de la profesión o
procurador del número, deberá delegarlo, en caso necesario en persona
que posea alguna de estas calidades", de lo que se sigue, que el
mandato para comparecer en juicio, sólo puede ser conferido a un
abogado o a alguna de las personas a que alude el inciso primero, no
obstante lo cual, puede otorgarse, excepcionalmente, a quien no reúna
esas calidades, siempre que el poder otorgado forme parte de un
mandato con administración de bienes. Que al confesar en juicio, el
demandante (...) reconoció no tener la calidad de abogado, señalando
como profesión u oficio en su libelo, la de ejecutivo de ventas, por lo
que, tratándose en este caso, de un mandato sin administración de
bienes, no resulta procedente esa delegación, siendo en consecuencia
plenamente aplicable la regla del inciso primero del artículo 2º de la Ley
Nº 18.120, y no reuniendo el mandatario las condiciones exigidas por la
ley para comparecer en nombre de los otros demandantes, es ineficaz
el título que invocan con tal objeto, por lo que el mandatario, carece de
legitimación para actuar en nombre de los restantes actores, siendo
procedente acoger la excepción alegada por la demandada
(considerandos 7º a 8º de la sentencia del Juzgado de Letras del
Trabajo).

2º Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago, 29/03/2011, Rol Nº O-


3581-2010,
Cita online: CL/JUR/7270/2011

2. Personas habilitadas para comparecer en juicio

Conforme al artículo 4º del Código de Procedimiento Civil, para que


una persona pueda comparecer en juicio a su propio nombre o como
representante legal de otra, debe hacerlo en la forma que lo determina
la ley y, de acuerdo al artículo 2º de la Ley Nº 18.120, nadie, salvo los
casos de excepción, puede comparecer en juicio, sino representado por
las personas que señala la ley, y no revistiendo quien comparece a
nombre de los demandantes alguna de dichas calidades, los mandatos
judiciales otorgados a éste son nulos (considerando 3º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/04/1995, Rol Nº 5510, Cita online:


CL/JUR/1068/1995

ARTÍCULO 5º (6º)

Si durante el juicio fallece alguna de las partes que obre por sí misma,
quedará suspenso por este hecho el procedimiento, y se pondrá su estado
en noticia de los herederos para que comparezcan a hacer uso de su derecho
en un plazo igual al de emplazamiento para contestar demandas, que
conceden los artículos 258 y 259.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 10, 165 Nº 3 y 339 inciso 2º. Código
Orgánico de Tribunales: artículo 242. Código Civil: artículo 1377. Ley Nº 18.120, sobre
comparecencia en juicio.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. El artículo 5º del Código de Procedimiento Civil no es aplicable en


caso que litigante actúe patrocinado por un abogado y representado
por un mandatario judicial. Mandato judicial no expira por la muerte
del mandante

El artículo 5º del Código de Procedimiento Civil dispone: "Si durante


el juicio fallece alguna de las partes que obre por sí misma, quedará en
suspenso por este hecho el procedimiento, y se pondrá su estado en
noticia de los herederos para que comparezcan a hacer uso de su
derecho en un plazo igual al de emplazamiento para contestar
demandas, que conceden los artículos 258 y 259". Como se aprecia, la
finalidad de la disposición es amparar a los herederos del litigante
fallecido para que hagan valer sus derechos una vez que se les notifique
la existencia y estado del juicio, gestión que resulta necesaria en tanto
se trate de un interesado que litiga personalmente, esto es, que obre
por sí mismo, sin haber otorgado patrocinio y poder de representación
a un tercero. En efecto, la remisión del precepto a aquella parte que
obre por sí misma no puede entenderse referida al litigante que actúa
patrocinado por un abogado y representado por un mandatario judicial
—cuya es la situación de la especie—, circunstancia en la que
corresponde la aplicación del artículo 529 del Código Orgánico de
Tribunales, de acuerdo al cual el mandato judicial no expira por la
muerte del mandante, manteniéndose así resguardados los intereses
de sus herederos, al conservar el representante la responsabilidad
propia de su cargo, efecto éste, determinado por la ley, que tiene por
finalidad precisamente prevenir la indefensión de la parte respectiva
(considerandos 2º y 3º de la actuación de oficio de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 8/02/2018, Rol Nº 14553-2017, Cita online:


CL/JUR/611/2018

2. Improcedencia de exigir la notificación a los herederos, dado que al


momento de fallecer el ejecutado, éste litigaba mediante mandato
judicial

El artículo 5º del Código de Procedimiento Civil dispone que "Si


durante el juicio fallece alguna de las partes que obre por sí misma,
quedará en suspenso por este hecho el procedimiento, y se pondrá su
estado en noticia de los herederos para que comparezcan a hacer uso
de su derecho en un plazo igual al de emplazamiento para contestar
demandas, que conceden los artículos 258 y 259". Esta norma regula la
hipótesis de fallecimiento del litigante que obre por sí mismo; por ende,
su aplicación está sujeta al evento de morir aquella parte que actúe por
sí en el juicio. Y este punto es de extrema relevancia, porque esta regla
de comunicación del estado del juicio a los herederos no es exigible
tratándose de un litigante que obre con mandato judicial. En
consecuencia, establecido que al momento de fallecer el ejecutado, éste
litigaba mediante mandato judicial otorgado a abogado, se concluye que
la exigencia de notificación a los herederos resulta improcedente,
incurriendo en error de derecho los jueces del fondo al aplicar el
artículo 5º del Código de Procedimiento Civil en una situación fáctico-
procesal que no lo ameritaba. Dicha infracción de ley tiene influencia en
lo dispositivo del fallo desde que el precepto en cuestión se tuvo en
consideración como fundamento para declarar la nulidad de lo obrado y
retrotraer la causa al estado de notificar el estado del juicio a todos los
herederos del ejecutado (considerando 2º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 7/03/2017, Rol Nº 62086-2016, Cita online:


CL/JUR/744/2017

3. Nulidad procesal ante falta de notificación de los herederos del


ejecutado

Tratándose el artículo 5º del Código de Procedimiento Civil de una


norma procesal de orden público, que imperativamente suspende el
procedimiento en tanto no se ponga en conocimiento de los herederos
el estado del proceso para que comparezcan a hacer uso de su derecho
en el plazo que ella indica; y, constituyendo el derecho a la defensa o
de defensa uno de los pilares incuestionables de la bilateralidad de la
audiencia y por ende del debido proceso, el que del mérito de los
antecedentes, ciertamente los herederos del demandante no han
podido ejercer, porque que no se ha puesto en su conocimiento la
existencia, ni menos aún, el estado de este juicio, conduce
imperiosamente a concluir, que en este caso, se configuran
conjuntamente las causales de invalidación de la sentencia y el juicio en
el que fue pronunciada, contempladas en los artículos 477 y 478 letra d)
del Código del Trabajo, toda vez que en la tramitación del procedimiento
se ha infringido sustancialmente el derecho garantizado en el numeral
3 del artículo 19 de la Constitución Política de la República, esto es, el
derecho a defensa jurídica en la forma que la ley señala
(considerando 8º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 21/07/2011, Rol Nº 185-2011,

Cita online: CL/JUR/10410/2011

ARTÍCULO 6º (7º)
El que comparezca en juicio a nombre de otro, en desempeño de un
mandato o en ejercicio de un cargo que requiera especial nombramiento,
deberá exhibir el título que acredite su representación.

Para obrar como mandatario se considerará poder suficiente: 1º el


constituido por escritura pública otorgada ante notario o ante oficial del
Registro Civil a quien la ley confiera esta facultad; 2º el que conste de un acta
extendida ante un juez de letras o ante un juez árbitro, y subscrita por todos
los otorgantes; y 3º el que conste de una declaración escrita del mandante,
autorizada por el secretario del tribunal que esté conociendo de la causa.

Podrá, sin embargo, admitirse la comparecencia al juicio de una persona


que obre sin poder en beneficio de otra, con tal que ofrezca garantía de que
el interesado aprobará lo que se haya obrado en su nombre. El tribunal, para
aceptar la representación, calificará las circunstancias del caso y la garantía
ofrecida, y fijará un plazo para la ratificación del interesado.

Los agentes oficiosos deberán ser personas capacitadas para comparecer


ante el respectivo tribunal, en conformidad a la Ley Orgánica del Colegio de
Abogados, o, en caso contrario, deberán hacerse representar en la forma que
esa misma ley establece.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 4º, 7º, 13, 14, 19, 31, 67 y 73. Código
Civil: artículos 1699, 2116 y siguientes, 2123, 2286 y siguientes. Código Orgánico de Tribunales:
artículos 366, 379, 380 Nº 5, 394 a 396, 389G, 529, 596 y 597. Código de Minería: artículo 39.
Ley Nº 18.120, sobre comparecencia en juicio: artículos 2º y 4º. Ley Nº 18.092, sobre letras de
cambio y pagaré: artículos 29 y 107. Ley Nº 19.178, crea la Defensoría Penal Pública:
artículo 54. Ley Nº 19.477, deroga artículo 86 de la Ley Nº 4.808, D.O. 19.10.1996. Decreto Ley
Nº 3.621, que fijó normas sobre Colegios profesionales, D.O. 7 de febrero de 1981: artículo 1º.
Decreto con Fuerza de Ley Nº 1, 1993, fija texto ley orgánica del Consejo de Defensa del
Estado, Ministerio de Hacienda, D.O. 7.08.1993: artículo 62. Ley Nº 18.287 sobre Procedimiento
ante Juzgados de Policía Local: artículo 7º. Código Tributario: artículos 129 y 148.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Patrocinio y mandato judicial, concepto y formas de constitución

El patrocinio, en nuestra legislación, es un contrato de mandato


otorgado a un abogado habilitado para el ejercicio de la profesión por el
cual una persona encarga al letrado la defensa de sus intereses en un
juicio determinado. El abogado patrocinante es el profesional encargado
de diseñar la defensa, es el responsable intelectual de las actuaciones
procesales del litigante durante toda la secuela del juicio. La solemnidad
de su constitución consiste en un escrito que señale el nombre,
apellidos, domicilio y firma de la persona. En el caso sub lite, aparece
que el demandado cumplió con esta obligación legal de comparecencia
en juicio. El mandato judicial a su vez consiste en un contrato solemne
por el cual una persona encarga a cualquiera de las personas señaladas
en el artículo 2º de la Ley Nº 18.120, la representación en juicio, en
primer lugar de dicha nómina aparece "Abogado habilitado para el
ejercicio de la profesión". Y el mandato judicial se constituye en
cualquiera de las tres formas establecidas en el artículo 6º del Código
de Procedimiento Civil, siendo una de ellas escrito del mandante
autorizado por el secretario del tribunal. En el caso que nos ocupa, la
demandada trató de utilizar esta última formalidad, pero no cumplió con
solicitar expresamente al ministro de fe del tribunal que autorizara el
poder, se limitó a autorizar la firma del mandante en el escrito
correspondiente por un notario, pero obviamente no es la forma exigida
por el legislador (considerando 5º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Iquique, 2/03/2016, Rol Nº 1-2016,

Cita online: CL/JUR/2000/2016

2. Personas que pueden representar válidamente a otra en juicio

Sólo puede representar a una parte en juicio un abogado habilitado


para el ejercicio de la profesión, procurador del número, estudiante
actualmente inscrito en tercero, cuarto o quinto año de las Escuelas de
Derecho de las Facultades de Ciencias Jurídicas y Sociales de alguna
de la universidades autorizadas o por egresado de esas mismas
escuelas hasta tres años después de haber rendido los exámenes
correspondientes y, no estando revestido de alguna de esas calidades
al compareciente, el mandato judicial conferido a éste es nulo por
infracción de las normas que regulan la forma de comparecer en juicio
y al no entenderlo así los ministros recurridos han cometido falta que
debe ser enmendada por la presente vía.

Corte Suprema, 23/11/1993, Rol Nº 844, Cita online:


CL/JUR/1593/1993

3. Para que pueda admitirse la comparecencia de quien pretenda


representar a otro sin poder, se debe ofrecer y rendir el debido
aseguramiento. Deber del juez de calificar la garantía ofrecida
El juzgador respectivo sustentó la decisión que se cuestiona
aduciendo que "la parte reclamante debió haber obrado con algún
mayor grado de diligencia al precaver la circunstancia que sus
apoderados válidamente considerados para actuar en esta causa,
finalmente no podrían comparecer a la audiencia de juicio, ni tampoco
se acompañó en esta audiencia antecedente alguno que permita
justificar que la parte reclamante se encontraba imposibilitada de asistir
a la audiencia de juicio o a lo menos sus apoderados con poder para
actuar válidamente. Debe concederse a quien recurre que esas razones
impresionan más bien como un reproche al desempeño profesional del
abogado correspondiente, lo que no tiene exacto correlato con el
artículo 6º el Código de Procedimiento Civil, que regula el instituto de
que se trata. Sin embargo, pese a ello, la consideración de las
exigencias que contempla esa regla legal conduce al mismo resultado,
aunque sea por vías diferentes. En efecto, para que una persona obre
sin poder en beneficio de otra es indispensable que ofrezca garantía de
que el interesado aprobará lo que se haya obrado en su nombre. Por
ende, para que pueda admitirse esa forma de comparecencia quien
pretenda representar a otro sin poder, debe ofrecer y rendir el debido
aseguramiento. Tan cierto es lo que se dice que la misma ley obliga al
juez a calificar la garantía ofrecida (considerandos 3º y 4º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 26/01/2018, Rol Nº 1519-2017,

Cita online: CL/JUR/409/2018

4. Mandato judicial no puede ser conferido a persona jurídica

El mandato judicial es esencialmente solemne. La solemnidad


consiste en que la comparecencia a un juicio a nombre de otra persona,
debe justificarse siempre con el título de la representación y éste sólo
puede consistir en alguna de las formas contempladas en el artículo 6º
del Código de Procedimiento Civil. Que lo anterior debe
complementarse con lo dispuesto por el artículo 2º de la Ley Nº 18.120,
que dispone que ninguna persona (salvo los casos de excepción que la
misma ley señala), podrá comparecer en los asuntos y ante los
tribunales a que se refiere el inciso primero del artículo anterior, sino
representada por un abogado habilitado para el ejercicio de la profesión.
Que de este modo, si el contrato de mandato judicial es solemne
atendidas las formalidades que reviste, es doblemente solemne en
cuanto a la calidad que debe tener el mandatario. Éste sólo puede ser
un abogado habilitado para el ejercicio profesional o alguna de las otras
personas que puntual y excepcionalmente señala la ley. Ninguna de
ellas, por cierto, puede estar constituida por una persona jurídica, la que
sí puede actuar como mandataria en otros campos de la profesión de
abogado, que no sean los jurisdiccionales, pues este campo le resulta
vedado, dado lo perentorio de los términos legales que juegan en la
materia en análisis (considerandos 2º a 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte de Apelaciones de Santiago, 13/07/2000, Rol Nº 5481-1998,

Cita online: CL/JUR/1833/2000

Fallo en sentido contrario:

— Corte Suprema, 28/12/2000, Rol Nº 4754-2000,

Cita online: CL/JUR/1271/2000

5. Mandato judicial otorgado a dos abogados no implica que ambos


deban actuar en forma conjunta para realizar el encargo

Que en el caso específico, y de acuerdo a las alegaciones efectuadas


en el recurso de casación, la falta de personería se sustenta en no haber
obrado conjuntamente dos abogados al presentar la demanda
desatendiendo los términos en que les fue conferido el mandato judicial.
Sin embargo, los sentenciadores asentaron como hecho de la causa, y
así por lo demás se puede apreciar en la escritura pertinente, que el
referido mandato no dispone que los mencionados letrados deban
actuar en forma conjunta para realizar el encargo, de manera que al ser
presentada la demanda por uno de ellos, éste ha comparecido con
facultades suficientes para hacerlo (considerando 6º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 10/03/2016, Rol Nº 35346-2015, Cita online:


CL/JUR/1635/2016

6. Exhibición del título que acredite la representación


Que no está de más precisar que el artículo 6º del Código de
Procedimiento Civil exige exhibir el título que acredite su
representación. Exhibir el título es mostrar el documento de donde
emana la representación. La palabra exhibir implica mostrar algo
material, como es una escritura. Los fundamentos y razonamientos
acerca del origen de esa escritura no se exhiben; cuando mucho, se
manifiestan. De donde se desprende que la apoderada cumplió lo
dispuesto en el citado artículo 6º al mostrar, exhibir, poner a la vista, la
escritura pública de su representación (considerando 5º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Temuco, 30/01/2003, Rol Nº 939-2004,

Cita online: CL/JUR/1924/2003

7. Remuneración es un elemento de la naturaleza del mandato judicial

Que de conformidad al tenor de la norma contenida en el artículo 2117


del Código Civil, es un elemento de la naturaleza del mandato el ser
remunerado, así que tal circunstancia no requiere disposición expresa,
entendiéndose incorporada al contrato sin necesidad de una cláusula
especial. La remuneración, llamada honorario, puede estar determinada
por convención de las partes, antes o después del contrato, por la ley,
la costumbre o el juez. En el caso sub lite, el actor reconoció el hecho
de que no hubo pacto de las partes acerca de ese valor y por ello solicitó
al tribunal la estimación del monto de sus honorarios, señalando
algunos parámetros que, en su concepto, el juez debía considerar para
ello (considerando 13º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 5/05/2003, Rol Nº 3238-2002,


Cita online: CL/JUR/862/2003

8. Requisitos de la agencia oficiosa

En el caso de autos, el abogado solicitó al tribunal, comparecer en


representación de cinco demandantes, ausentes en la audiencia,
manifestando que lo haría con "fianza de rato", lo que no fue rechazado
por la jueza a quo. La ley procesal acepta la situación descrita, pero
exige el cumplimiento de ciertos requisitos, los que se contienen en el
artículo 6º del Código de Procedimiento Civil. En efecto, el que
comparece en juicio en beneficio de otro, sin poder, debe ofrecer
garantía de que su representado aprobará lo que se haya obrado en su
nombre y el tribunal por su parte debe calificar las circunstancias del
caso, la garantía ofrecida y fijar un plazo para la ratificación. Así en la
audiencia de rigor, el abogado se acogió a esta institución, así lo hizo
saber en la audiencia, solicitando expresamente la fijación de un plazo
para efectos de que su actuación, en representación de los
demandantes inasistentes, fuera ratificada. El tribunal se limitó a aceptar
la intervención en esos términos, pero no dio cumplimiento a las
exigencias procesales que el inciso tercero del artículo 6º del Código de
Procedimiento Civil, le imponía en orden a validar los actos del agente
oficioso (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/10/2007, Rol Nº 4174-2007,


Cita online: CL/JUR/6281/2007

9. Incumplimiento de los requisitos de procedencia de la agencia


oficiosa

Que de los fundamentos del recurso se colige que el reproche de


derecho que se formula contra la sentencia impugnada se centra en que
la personería del compareciente para representar judicialmente al
Banco debe existir al tiempo de la interposición de la demanda, de
conformidad con lo dispuesto en el artículo 6º del Código de
Procedimiento Civil, sin que resulte posible que tal exigencia se
entienda cumplida en base a un mandato judicial otorgado con
posterioridad a la presentación de la demanda ni a la ratificación del
mandante, respecto de los actos ejecutados en el tiempo intermedio.
Que de lo señalado precedentemente resulta indispensable que quien
comparece en juicio a nombre de otro cuente con un mandato para ello
al tiempo de la comparecencia, pues en caso que carezca de dicho
mandato sólo podrá obrar en beneficio de otro como agente oficioso,
para lo cual deberá ofrecer la garantía que refiere la norma en comento
y el interesado ratificar lo obrado en el plazo que fije el tribunal
(considerandos 4º y 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 16/01/2017, Rol Nº 47867-2016,


Cita online: CL/JUR/179/2017

ARTÍCULO 7º (8º)
El poder para litigar se entenderá conferido para todo el juicio en que se
presente, y aun cuando no exprese las facultades que se conceden,
autorizará al procurador para tomar parte, del mismo modo que podría
hacerlo el poderdante, en todos los trámites e incidentes del juicio y en todas
las cuestiones que por vía de reconvención se promuevan, hasta la ejecución
completa de la sentencia definitiva, salvo lo dispuesto en el artículo 4º o salvo
que la ley exija intervención personal de la parte misma. Las cláusulas en que
se nieguen o en que se limiten las facultades expresadas, son nulas. Podrá,
asimismo, el procurador delegar el poder obligando al mandante, a menos
que se le haya negado esta facultad.

Sin embargo, no se entenderán concedidas al procurador, sin expresa


mención, las facultades de desistirse en primera instancia de la acción
deducida, aceptar la demanda contraria, absolver posiciones, renunciar los
recursos o los términos legales, transigir, comprometer, otorgar a los árbitros
facultades de arbitradores, aprobar convenios y percibir.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 4º, 6º, 8º, 10, 11, 148, 385, 396, 443,
628 y 636. Código Civil: artículos 1576 y siguientes, 2116 y siguientes, 2132, 2135, 2446 y 2448.
Código Procesal Penal: artículos 104 y 354. Código Orgánico de Tribunales: artículos 223 y 394
a 398. Ley Nº 18.045, sobre Mercado de Valores: artículo 107. Ley Nº 18.046, Ley de
Sociedades Anónimas: artículo 49. Ley Nº 18.092, sobre letras de cambio y pagaré: artículos 29
y 107. Ley Nº 18.120, sobre Comparecencia en Juicio: artículo 2º inciso sexto. Ley Nº 18.840,
orgánica del Banco Central de Chile: artículo 24 Nº 4. Ley Nº 19.178, crea la Defensoría Penal
Pública: artículo 54. Ley Nº 19.253, sobre Protección, Fomento y Desarrollo de los Indígenas:
artículo 57, Código del Trabajo: artículo 426.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. El poder para litigar se entenderá conferido para todo el juicio

El poder para litigar se entenderá conferido para todo el juicio en que


se presente, por disponerlo así esta norma, como elemento esencial de
la misma. Tal representación es continua en el proceso y no puede el
representado carecer de ella, sino bajo sanción de proceder en su
rebeldía (considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 12/10/2004, Rol Nº 3859-2003, Cita online:


CL/JUR/2870/2004

2. Recurrente no impugna la comparecencia del abogado, en función de


no habérsele concedido expresamente la facultad de absolver
posiciones
Como puede advertirse de la lectura del recurso, en parte alguna de
éste se cuestiona la calidad de abogado del compareciente, ni que lo
hizo en virtud de un mandato judicial conforme al artículo 7º del Código
de Enjuiciamiento Civil, que le habilitaba "(...) para tomar parte, del
mismo modo que podría hacerlo el poderdante, en todos los trámites e
incidentes del juicio y en todas las cuestiones que por vía de
reconvención se promuevan, hasta la ejecución completa de la
sentencia definitiva (...)", y tampoco existe constancia que en el juicio
se haya impugnado su comparecencia por no habérsele concedido
expresamente la facultad de absolver posiciones por su poderdante.
Amén de lo anterior, y considerando que la nulidad laboral es de
derecho estricto, la vulneración denunciada ha de guardar congruencia
con el principio de la trascendencia, es decir, ser de cuantía o
envergadura tal que influya en lo dispositivo del fallo; y en la medida que
no exista infracción de ley, mal podría existir influencia sustancial en lo
dispositivo del fallo. Por lo demás, y aun en la hipótesis de ser cierta la
infracción de ley denunciada, no se ha cuestionado la aplicación del
artículo 7º del Código de Procedimiento Civil, que es el sustento jurídico
de la decisión judicial (considerando 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Antofagasta, 28/02/2012, Rol Nº 243-2011,

Cita online: CL/JUR/4431/2012

3. Indemnización de perjuicios por incumplimiento de obligación del


mandatario, que no ha continuado la tramitación hasta el
cumplimiento incidental de la sentencia

Al no haber continuado el demandado cumpliendo con el mandato del


artículo 7º del Código de Procedimiento Civil, el que se encontraba
vigente al momento de solicitarse por la contraria, el cumplimiento
incidental del fallo infraccional, éste ha incumplido con la obligación que
le imponía el mandato judicial otorgado, llegándose incluso a la subasta
de un inmueble de propiedad de la actora, la que aunque se dejara sin
efecto, necesariamente le ha ocasionado un perjuicio, reparable por
esta vía (considerando 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 3/03/2016, Rol Nº 10061-2015,

Cita online: CL/JUR/2421/2016


ARTÍCULO 8º (9º)

El gerente o administrador de sociedades civiles o comerciales, o el


presidente de las corporaciones o fundaciones con personalidad jurídica, se
entenderán autorizados para litigar a nombre de ellas con las facultades que
expresa el inciso 1º del artículo anterior, no obstante cualquiera limitación
establecida en los estatutos o actos constitutivos de la sociedad o
corporación.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 7º. Código Civil: artículo 551 y
siguientes, 2071 y siguientes. Código de Comercio: artículo 384 y siguientes, 395. Código del
Trabajo: artículo 4º. Código de Minería: artículo 193. Ley Nº 18.046, Ley de Sociedades
Anónimas: artículo 49. Ley Nº 18.287, sobre Procedimientos ante Juzgados de Policía Local:
artículo 28. Ley Nº 19.496, sobre Protección Derechos del Consumidor: artículo 51. Código
Tributario: artículo 14.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Comunidad no es persona jurídica, Código de Procedimiento Civil no


le da representación legal

Los jueces del fondo soslayaron la existencia de la comunidad que el


demandado hizo constar en la litis, entendiendo que de todos modos
éste tenía posesión exclusiva del retazo en disputa, y acogieron la
acción de reivindicación, en circunstancias que ésta debía ser
rechazada, ya que la demanda debió ser enderezada contra todos
aquellos que aparecen como coposeedores de la cosa común, desde
que uno de éstos no representa a los demás. En este mismo sentido, la
doctrina indica que no siendo la comunidad una persona jurídica, el
artículo 8º del Código de Procedimiento Civil no le da representante
legal para comparecer en juicio, y si se desea demandarla, es necesario
notificar a todos y cada uno de los comuneros (considerando 6º de la
sentencia de reemplazo de la sentencia de la Corte de Suprema).

Corte Suprema, 9/05/2011, Rol Nº 9518-2009,


Cita online: CL/JUR/9690/2011

2. Es suficiente para tener por emplazada a la sociedad demandada la


notificación practicada en la persona de uno de los representantes de
aquélla
Que siendo suficiente para tener por emplazada a la sociedad
demandada la notificación practicada en la persona de uno de los
representantes de aquélla, de acuerdo con lo preceptuado en el
artículo 8º del Código ya citado, en orden a entender autorizado para
litigar, cuando se trata de sociedades civiles o comerciales, al gerente o
a uno de los administradores de ella, resulta que no habiéndose opuesto
excepciones por la ejecutada y estando vencido el plazo legal, procede
que se certifique por el señor Secretario del Tribunal dichas
circunstancias para proseguir adelante con la ejecución. Que al no
entenderlo así los Ministros recurridos, han cometido falta que debe ser
enmendada por la presente vía (considerando único de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 17/11/1992, Rol Nº 6347,


Cita online: CL/JUR/481/1992

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 10/12/1991, Rol Nº 3024,

Cita online: CL/JUR/1421/1991

— Corte Suprema, 11/04/1988, Rol Nº 11768,

Cita online: CL/JUR/292/1988

ARTÍCULO 9º (10)

Si durante el curso del juicio termina por cualquiera causa el carácter con
que una persona representa por ministerio de la ley derechos ajenos,
continuará no obstante la representación y serán válidos los actos que
ejecute, hasta la comparecencia de la parte representada, o hasta que haya
testimonio en el proceso de haberse notificado a ésta la cesación de la
representación y el estado del juicio. El representante deberá gestionar para
que se practique esta diligencia dentro del plazo que el tribunal designe, bajo
pena de pagar una multa de un cuarto a un sueldo vital y de abonar los
perjuicios que resulten.3

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 5º, 10 y 252. Código Civil: artículo 43.
Código de Minería: artículo 193.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Deben anularse las actuaciones procesales, viciadas mediante la


intervención de falso abogado

El artículo 9º del Código de Procedimiento Civil, dispone que si


durante el curso del juicio termina por cualquier causa el carácter con
que una persona representa por ministerio de la ley derechos ajenos,
continuará no obstante la representación y serán válidos los actos que
ejecute, hasta la comparecencia de la parte representada, o hasta que
haya testimonio en el proceso de haberse notificado a ésta la cesación
de la representación y el estado del proceso. El representante deberá
gestionar para que se practique esta diligencia dentro del plazo que el
tribunal designe bajo pena de pagar una multa y de abonar los perjuicios
que resulten. Siguiendo con la misma idea el artículo 14 inciso final del
mismo Código, refiriéndose al procurador común dice que, sea que se
acuerde por las partes, o se decrete por el tribunal, la revocación no
comenzará a surtir sus efectos mientras no quede constituido el nuevo
procurador. Si bien en el caso que se estudia no se trata ni de la
representación por el ministerio de la ley, ni de un procurador común,
tales normas contienen los principios que se han venido indicando, en
orden a la continuidad del poder de representación y de la defensa en
un pleito, elementos de un debido proceso, y acerca de los cuales el
juez ha tenido el deber procesal de velar. Que en la situación en examen
al no haberse siquiera comunicado a los poderdantes que quedaban sin
representación ni defensa, falsa pero aparente y que se había aceptado,
han quedado éstos en absoluta indefensión y se ha incurrido en un vicio
procesal que, de acuerdo al artículo 84 del Código de Procedimiento
Civil debe enmendarse (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 12/10/2004, Rol Nº 3859-2003,


Cita online: CL/JUR/2870/2004

ARTÍCULO 10 (11)

Todo procurador legalmente constituido conservará su carácter de tal


mientras en el proceso no haya testimonio de la expiración de su mandato.
Si la causa de la expiración del mandato es la renuncia del procurador,
estará éste obligado a ponerla en conocimiento de su mandante, junto con el
estado del juicio, y se entenderá vigente el poder hasta que haya transcurrido
el término de emplazamiento desde la notificación de la renuncia al
mandante.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 7º, 9º, 14, 38 y siguientes, y 258.
Código Civil: artículos 2163 y 2167. Código Procesal Penal: artículos 106 y 107. Ley Nº 18.120,
sobre Comparecencia en Juicio.

ARTÍCULO 11 (12)

Cuando se ausente de la República alguna persona dejando procurador


autorizado para obrar en juicio o encargado con poder general de
administración, todo el que tenga interés en ello podrá exigir que tome la
representación del ausente dicho procurador, justificando que ha aceptado el
mandato expresamente o ha ejecutado una gestión cualquiera que importe
aceptación.

Este derecho comprende aun la facultad de hacer notificar las nuevas


demandas que se entablen contra el ausente, entendiéndose autorizado el
procurador para aceptar la notificación, a menos que se establezca lo
contrario de un modo expreso en el poder.

Si el poder para obrar en juicio se refiere a uno o más negocios


determinados, sólo podrá hacerse valer el derecho que menciona el inciso
precedente respecto del negocio o negocios para los cuales se ha conferido
el mandato.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 6º, 7º, 40, 284, 285, 844, 845 y 846.
Código Civil: artículos 473 y siguientes, 2117. Código Orgánico de Tribunales: artículos 152 y
367.

ARTÍCULO 12 (13)

En los casos de que trata el artículo 19, el procurador común será


nombrado por acuerdo de las partes a quienes haya de representar.

El nombramiento deberá hacerse dentro del término razonable que señale


el tribunal.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 19, 21 y 133. Código Procesal Penal:
artículo 105.

ARTÍCULO 13 (14)

Si por omisión de todas las partes o por falta de avenimiento entre ellas no
se hace el nombramiento dentro del término indicado en el artículo anterior,
lo hará el tribunal que conozca de la causa, debiendo, en este caso, recaer el
nombramiento en un procurador del número o en una de las partes que haya
concurrido.

Si la omisión es de alguna o algunas de las partes, el nombramiento hecho


por la otra u otras valdrá respecto de todas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 14, 16, 19 y 21.

ARTÍCULO 14 (15)

Una vez hecho por las partes o por el tribunal el nombramiento de


procurador común, podrá revocarse por acuerdo unánime de las mismas
partes, o por el tribunal a petición de alguna de ellas, si en este caso hay
motivos que justifiquen la revocación.

Los procedimientos a que dé lugar esta medida se seguirán en cuaderno


separado y no suspenderán el curso del juicio.

Sea que se acuerde por las partes o que se decrete por el tribunal, la
revocación no comenzará a producir sus efectos mientras no quede
constituido el nuevo procurador.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 10 y 87. Código Civil: artículos 2164
a 2166. Código Procesal Penal: artículo 105.

ARTÍCULO 15 (16)

El procurador común deberá ajustar, en lo posible, su procedimiento a las


instrucciones y a la voluntad de las partes que representa; y, en los casos en
que éstas no estén de acuerdo, podrá proceder por sí solo y como se lo
aconseje la prudencia, teniendo siempre en mira la más fiel y expedita
ejecución del mandato.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 7º, 16 y 19. Código Civil:
artículo 2131.

ARTÍCULO 16 (17)

Cualquiera de las partes representadas por el procurador común que no se


conforme con el procedimiento adoptado por él, podrá separadamente hacer
las alegaciones y rendir las pruebas que estime conducentes, pero sin
entorpecer la marcha regular del juicio y usando de los mismos plazos
concedidos al procurador común. Podrá, asimismo, solicitar dichos plazos o
su ampliación, o interponer los recursos a que haya lugar, tanto sobre las
resoluciones que recaigan en estas solicitudes, como sobre cualquiera
sentencia interlocutoria o definitiva.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 15, 22 y 23.

TÍTULO III DE LA PLURALIDAD DE ACCIONES O DE PARTES

ARTÍCULO 17 (18)

En un mismo juicio podrán entablarse dos o más acciones con tal que no
sean incompatibles.

Sin embargo, podrán proponerse en una misma demanda dos o más


acciones incompatibles para que sean resueltas una como subsidiaria de
otra.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 92, 170 Nº 6, 172, 254 Nº 5, 261, 303
Nº 6, 312, 314 y 652. Código Procesal Penal: artículo 59. Código Orgánico de Tribunales:
artículo 121. Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de Familia: artículo 17. Ley Nº 19.947, sobre
Matrimonio Civil: artículo 89.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Interposición de acciones incompatibles debe ejercerse de forma


subsidiaria. Vulneración del artículo 17 del Código de Procedimiento
Civil
Es claro que la proposición subsidiaria de acciones o pretensiones
soslaya cualquier incompatibilidad que pudiera existir entre ellas. La
norma cuya vulneración se denuncia autoriza el ejercicio de varios
derechos a un mismo tiempo, con la salvedad de que deben
interponerse en forma subsidiaria cuando son incompatibles entre sí,
como acontece en la especie en que se pide dejar sin efecto una multa
por no haber cometido la falta que se imputa y la disminución de la
misma por haber dado posterior cumplimiento al precepto que se dice
infringido. Si bien se tratan de acciones antagónicas, han podido ser
presentadas al tribunal en forma subsidiaria. Al haber estimado el
tribunal que con la petición subsidiaria la empresa estaba reconociendo
la infracción a la normativa laboral que se le achacaba y que por tanto,
su defensa principal —que negaba tal contravención— no podía ser
atendida, se transgrede lo instituido por el artículo 17 del Código de
Procedimiento Civil en cuanto permite que acciones incompatibles
pueden deducirse para que sean falladas una en subsidio de la otra.
Error que ha influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo pues se
ha descartado un reclamo de multa en atención a contener "peticiones
contradictorias", a pesar de haber sido deducidas éstas de manera
subsidiaria, de modo que corresponde acoger el recurso de nulidad
intentado (considerandos 3º y 4º de la sentencia de nulidad).

Corte de Apelaciones de Santiago, 5/10/2018, Rol Nº 950-2018,

Cita online CL/JUR/7194/2018

2. Improcedencia de atacar vía casación en el fondo la infracción al


artículo 17 del Código de Procedimiento Civil

Conforme se desprende de los argumentos relacionados


previamente, el yerro propuesto por el impugnante dice relación con el
raciocinio empleado por los juzgadores para desestimar la acción de
resolución de contrato e indemnización de perjuicios formulada
conjuntamente con la principal de cumplimiento. Y se funda, en lo
sustancial, en que, pese a haber dejado asentado como hecho de la
causa que el contrato que ligó a las partes era uno de trato sucesivo,
los sentenciadores recurren a una supuesta incompatibilidad entre la
pretensión resolutoria y la principal de cobro de pesos fundados en lo
dispuesto en el artículo 17 del Código de Procedimiento Civil para
rechazar la primera, en circunstancias que dicha disposición no
resultaba aplicable en la especie. En primer término, cabe señalar que
la infracción al mencionado artículo 17 del Código de Procedimiento
Civil no puede atacarse vía casación en el fondo, pues dicho
artículo tiene la naturaleza de una norma ordenatoria litis y no, como
afirma el impugnante, la de una norma decisoria litis, porque está
referido a la forma y oportunidad para el ejercicio de las acciones, esto
es, se trata de una norma adjetiva, cuya infracción no puede incidir
sustancialmente en lo dispositivo de la sentencia. En cualquier caso,
decidido y acogido el cumplimiento demandado, no cabía ya ejercer la
opción a través de la acción resolutoria del artículo 1489 del Código
Civil, norma que por tanto no resulta infringida (considerandos 14º a 16º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 1/04/2019, Rol N, 34474-2017,


Cita online CL/JUR/2090/2019

3. Casación en el fondo es recurso de derecho estricto. Improcedencia


de interponer casación sustancial denunciando errores de derecho de
carácter contradictorios

No debe perderse de vista que lo puntual y relevante a comprobar en


el contexto de la casación en el fondo, es si ha existido infracción de ley
en un determinado sentido o si no la hay. Es por esta razón que la
jurisprudencia constante de esta Corte ha establecido que, tratándose
de un recurso de derecho estricto, éste debe ser deducido en forma
categórica y precisa, estando fuera de lugar peticiones subsidiarias por
carecer de la certeza y determinación indispensables (Corte Suprema
Roles Nºs. 35199-2017, 37133-2017 y 12164-2017, entre otros). Así, es
imprescindible señalar que, si bien el artículo 17 del Código de
Procedimiento Civil permite la interposición de acciones incompatibles
de forma subsidiaria, lo cierto es que aquello no habilita a deducir un
recurso de casación denunciando errores de derecho que tengan tal
carácter, menos aún a erigir tal arbitrio sobre la base de
argumentaciones que tengan el carácter de contradictorias, razón por la
que esta Corte se encuentra impedida de revisar los errores de derecho
denunciados (considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 18/12/2019, Rol Nº 31504-2018,


Cita online CL/JUR/7225/2019
ARTÍCULO 18 (19)

En un mismo juicio podrán intervenir como demandantes o demandados


varias personas siempre que se deduzca la misma acción, o acciones que
emanen directa e inmediatamente de un mismo hecho, o que se proceda
conjuntamente por muchos o contra muchos en los casos que autoriza la ley.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 12, 19, 20, 23, 27, 28, 128, 260 y 261.
Código Orgánico de Tribunales: artículos 122 y 141.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Incumplimiento de requisitos de litis consorcio

(Voto disidente) En este caso, no se configuran los supuestos legales


de los casos del artículo 18 del Código de Procedimiento Civil, pues si
bien las acciones ejercidas por los demandados son en abstracto
jurídicamente las mismas —acciones de indemnización de perjuicios
por falta de servicio—, lo cierto es que los hechos de que ellas emanan
son distintos para cada uno de los sujetos contra quienes la demanda
ha sido dirigida, en tanto a cada uno de ellos se le atribuye haber
incurrido en omisiones negligentes derivadas de sucesos temporal y
espacialmente diferenciados y disímiles. La razón de ser del artículo 18,
que tiene una evidente vinculación con la institución de la acumulación
de autos, no es sólo una de naturaleza práctica de economía procesal,
sino, de manera principal, una de peso y entidad mayor, cual es evitar
la contingencia de fallos contradictorios. Uno de los objetos primordiales
del juicio es la prueba de los hechos y cuando una o varias acciones de
que son titulares una o varias personas emanan de unos mismos
hechos, la ley propende y procura que todas esas acciones y todas esas
personas litiguen en un mismo proceso, pues todas ellas, para una u
otra finalidad, deberán probar, en esencia, la existencia de unos mismos
hechos. En la situación del presente litigio ello no ocurre en lo absoluto,
pues la falta de servicio que se atribuye a la Superintendencia de
Valores y Seguros, a la Superintendencia de Bancos e Instituciones
Financieras, a la Unidad de Análisis Financiero y en último término a
todos los demandados, es enteramente disímil y no es posible concebir
sentencias contradictorias en el evento que se los demandara a cada
uno de ellos separadamente. Es por lo anterior que la excepción
dilatoria debió ser acogida, en tanto no se trata de uno de aquellos casos
en que según la ley pueden intervenir en un juicio varias personas,
cuestión que, por lo demás, es evidentemente de forma y no afecta el
fondo de la acción deducida —como se pretendió hacer creer por los
actores—, pues deja a salvo el derecho a demandar por separado
(considerando 3º de la disidencia de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 14/06/2018, Rol Nº 732-2018,

Cita online CL/JUR/2863/2018

2. Procedencia de demandar conjuntamente la nulidad y la


reivindicación

El acogimiento de la acción de nulidad habilita al actor para ejercer,


conjuntamente con ésta, la acción reivindicatoria, habida consideración
que, al dejarse sin vigor jurídico el contrato anulable, se produce el
efecto propio de toda nulidad judicialmente declarada, esto es, las cosas
se retrotraen al estado anterior a la celebración del acto nulo. Doctrina
y jurisprudencia coinciden en afirmar que tal es el sentido de los
artículos 17 y 18 del Código de Procedimiento Civil. En efecto, el
artículo 18 expresa que en el mismo juicio podrán intervenir como
demandantes o demandados varias personas, siempre que se deduzca
acción o acciones que emanen de un mismo hecho, o que se proceda
conjuntamente por muchos o contra muchos en los casos que autoriza
la ley. El artículo 17 permite que, en un mismo juicio, se entablen dos o
más acciones con tal que no sean incompatibles y, en este último
evento, también podrán deducirse al mismo tiempo para que sean
resueltas una como subsidiaria de la otra. (considerando 17º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones) La doctrina (Ducci Claro)
considera que la declaración de nulidad retrotrae las cosas al estado en
que se encontraban antes de realizarse el acto declarado nulo por lo
que la parte a quien aprovecha la declaración de nulidad de un acto que
importó una transferencia de dominio de una cosa tiene derecho a
reivindicarla si ha pasado a manos de terceros, por cuanto, en su
concepto, en la nulidad van envueltas dos acciones: una personal para
la anulación del contrato, dirigida en contra de los contratantes, y otra
real, contra el actual poseedor de la cosa. Ahondando en este aspecto,
se ha explicado (Corral Talciani) que, entre los terceros ajenos al
contrato que se encuentran legitimados para demandar la nulidad, se
cuentan los acreedores: es lo que sucede por ejemplo cuando se
enajenan cosas embargadas violando el impedimento del artículo 1464
Nº 3 del Código Civil, aun cuando no se trate del beneficiado por el
embargo; basta con que el interés patrimonial surja de constatarse que
con la nulidad de la enajenación se incrementará el patrimonio del
deudor, como sucede cuando la acción de nulidad le permite ejercer sus
derechos para entrar en posesión de la cosa vendida, cuya es la
situación de autos (considerando 18º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones). Cuando la cosa ha pasado a manos de un subadquirente,
no resulta suficiente que el tercero utilice los mecanismos que le
proporciona el efecto restitutorio de la nulidad, sino que debe interponer
la acción reivindicatoria en contra de dicho poseedor no dueño. El
tercero no contratante puede ejercer la acción por cuanto el texto del
artículo 1689 del Código Civil no dice que el dueño podrá reivindicar
sino que la nulidad da acción reivindicatoria esta redacción de la norma
permite sostener que en estos casos el tercero puede ejercer la acción
reivindicatoria como si fuera el dueño, puesto que se trata de un caso
de subrogación expresamente autorizada por la ley (Corral Talciani). De
esta forma, corresponde afirmar que la actora se encuentra, por el
ministerio de la ley, en la posición jurídica y fáctica del dueño no
poseedor, que la habilita para reivindicar el inmueble del tercero
subadquirente, toda vez que, una vez declarada la nulidad del contrato
se destruye la cadena de actos y transferencias ulteriores, debiendo
cancelarse, consecuentemente, la respectiva inscripción de dominio
(considerando 19º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 3/10/2019, Rol Nº 1077-2019,

Cita online CL/JUR/12021/2019

3. Hipótesis en que se presenta una misma acción por parte de los


demandantes

En primer lugar, aparece claro de lo expuesto que no se trata en el


presente caso del ejercicio de una misma acción, lo que se demuestra
porque cada fundamento de la demanda y de la pretensión
indemnizatoria es particular de un titular distinto, de manera que cada
una de ellas es separada e independiente de la otra. Esto se ilustra de
la siguiente manera: "Se presenta esta situación, por ejemplo, cuando
varios herederos ejercitan conjuntamente la acción de petición de
herencia, o cuando los comuneros de una misma cosa común hacen
valer la acción reivindicatoria respecto de esa misma cosa". (En la
obra: De las disposiciones comunes a todo procedimiento y de los
incidentes, página 13, Carlos Alberto Stoehrel Maes, Sexta Edición,
Editorial Jurídica de Chile) (considerando 7º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 13/03/2013, Rol Nº 9162-2012,


Cita online: CL/JUR/576/2013

4. Hipótesis de la pluralidad de partes

De acuerdo con el artículo 18 del Código de Procedimiento Civil, la


pluralidad de partes demandantes puede presentarse en tres casos:
a) cuando varias personas deducen una misma acción; b) cuando
varias personas deducen acciones emanadas todas de un mismo
hecho, y c) cuando la ley autoriza para proceder por muchos o contra
muchos. En el caso de marras, no concurren los supuestos para que
operara la institución del litisconsorcio activo. Efectivamente, no se trata
del ejercicio de una misma acción, toda vez que cada fundamento de la
demanda y de la pretensión indemnizatoria es particular de un titular
distinto, de modo que cada una de ellas es separada e independiente
de la otra; ni se trata de acciones que emanan directa e inmediatamente
de un mismo hecho, puesto que del propio tenor del libelo aparece que
las personas perjudicadas con el daño atribuido a responsabilidad por
falta de servicio presentan cada una su particular situación fáctica.
Menos se está en presencia de un caso en que la ley autoriza para
proceder por muchos o contra muchos (considerandos 6º a 9º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 13/03/2013, Rol Nº 9162-2012,


Cita online: CL/JUR/576/2013

ARTÍCULO 19 (20)

Si son dos o más las partes que entablan una demanda o gestión judicial y
deducen las mismas acciones, deberán obrar todas conjuntamente,
constituyendo un solo mandatario.

La misma regla se aplicará a los demandados cuando sean dos o más y


opongan idénticas excepciones o defensas.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 12, 13, 14, 27, 128 y 260. Código
Orgánico de Tribunales: artículos 122 y 141.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Litis consorcio pasiva

La litis consorcio pasiva prevista en el inciso segundo artículo 19 del


Código de Procedimiento Civil, es una norma de orden público procesal
que no es disponible para las partes, ni para el tribunal, de manera tal
que concurriendo los elementos que la hacen concurrir, esto es, dos o
más demandados e idénticas excepciones o defensas, los demandados
necesariamente habrán de actuar bajo procurador común. De lo
anterior, no cabe sino concluir que la defensa de fondo de las tres
demandadas, se sustenta en idénticas alegaciones, lo que permite tener
por acreditado la concurrencia del requisito de identidad que exige el
inciso segundo del artículo 19 del Código de Procedimiento Civil, para
tener por constituida una litis consorcio pasiva. Al tenor de lo que se ha
señalado y atendido el carácter forzoso de la norma procesal del inciso
segundo del artículo 19 del Código de Procedimiento Civil,
los demandados deben actuar bajo procurador común (considerandos
1º, 4º y 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 7/10/2016, Rol Nº 8248-2016,

Cita online: CL/JUR/6933/2016

2. Improcedencia de solicitar la designación de procurador común


cuando el juicio ha llegado a la etapa de término

Si bien es cierto, las excepciones opuestas por las partes que


representan ambos abogados son las mismas, pues, se reproduce la
contestación de la demanda para todos los demandados, cabe
reflexionar, en cuanto a que el artículo 19 del Código de Procedimiento
Civil contiene una regla cuyo carácter es ordenatoria litis, en cuanto
establece un procedimiento para el caso que intervengan muchas
personas en un juicio, siendo su objeto dar ciertas garantías, como
resguardar que la participación de éstas no provoquen retardos en el
proceso, razón por la que la disposición aludida ordena que dichas
gestiones las realicen conjuntamente constituyendo un mandatario
común. Circunstancia que también produce un claro efecto de economía
procesal, pues, no obstante, un mandatario común el juicio sigue
adelante sin alterar los intereses individuales en el pleito. Los
fundamentos del litis consorcio es la economía procesal y evitar
diversos procesos y, también, el decoro judicial en cuanto a impedir
sentencias contradictorias. La doctrina —Tavolari Riveros— señala
sobre el tema que "la solución del problema, empero, pasa por la
determinación de la naturaleza del litisconsorcio. Si se trata de uno
necesario, y entendemos por tal aquel que debe producirse so pena que
la sentencia que se dicte no pueda ejecutarse o resulte ineficaz, como
sucede cuando un tercero demanda la nulidad de un matrimonio y no
dirige su acción contra ambos cónyuges, es evidente que el proceso no
puede avanzar sin la presencia de todos los litis consorcios pasivos".
De este modo, como se ha dicho, encontrándose dictada la sentencia,
la solicitud de los demandantes ha perdido oportunidad, pues, el juicio
ha llegado a la etapa de término, de lo que fluye que ya no es necesario
procurador común (considerando 9º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 22/07/2016, Rol Nº 1608-2015,

Cita online: CL/JUR/5177/2016

ARTÍCULO 20 (21)

Si son distintas entre sí las acciones de los demandantes o las defensas


de los demandados, cada uno de ellos podrá obrar separadamente en el
juicio, salvo las excepciones legales.

Se concederá la facultad de gestionar por separado en los casos del


artículo anterior desde que aparezca haber incompatibilidad de intereses
entre las partes que litigan conjuntamente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 12, 15, 16, 128 y 225. Código
Procesal Penal: artículo 105.

ARTÍCULO 21 (22)

Si la acción ejercida por alguna persona corresponde también a otra u otras


personas determinadas, podrán los demandados pedir que se ponga la
demanda en conocimiento de las que no hayan ocurrido a entablarla, quienes
deberán expresar en el término de emplazamiento si se adhieren a ella.

Si las dichas personas se adhieren a la demanda, se aplicará lo dispuesto


en los artículos 12 y 13; si declaran su resolución de no adherirse, caducará
su derecho; y si nada dicen dentro del término legal, les afectará el resultado
del proceso, sin nueva citación. En este último caso podrán comparecer en
cualquier estado del juicio, pero respetando todo lo obrado con anterioridad.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 12, 13, 258, 259, 261, 269 y 312.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Voto disidente: Indeterminación respecto al número e identidad de los


sujetos procesales hace improcedente el abandono del procedimiento

El tribunal de primer grado acogió parcialmente un incidente de


litisconsorcio activo forzoso promovido por la demandada, ordenando
poner la demanda en conocimiento de dos terceros, en la especie
Martilleros Públicos, para que, dentro del término de emplazamiento y
de estimarlo conveniente, ejerzan la acción indemnizatoria respectiva,
so pena de perder tal derecho si no lo hicieren. No consta en autos que
tal notificación haya sido ejecutada. Luego, de conformidad al 21 del
Código de Procedimiento Civil, en estos antecedentes existe una
manifiesta indeterminación respecto al número e identidad de los
sujetos procesales, lo que obsta a la plena existencia de un
"procedimiento" susceptible de ser declarado en abandono
(considerandos A), B), C) y D) de la disidencia de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 18/04/2018, Rol Nº 40723-2017,


Cita online CL/JUR/1781/2018

2. Intervención provocada del artículo 21 del Código de Procedimiento


Civil lo es sólo a aquellos que puedan adherirse a la demanda en los
mismos términos en que está formulada

El artículo 21 inciso 1º del Código de Procedimiento Civil refiere que


"Si la acción ejercida por alguna persona corresponde también a otra u
otras personas determinadas, podrán los demandados pedir que se
ponga la demanda en conocimiento de las que no hayan ocurrido a
entablarla, quienes deberán expresar en el término de emplazamiento
si se adhieren a ella". Sobre el particular, el autor Alejandro Romero
Seguel refiere que "como hipótesis de intervención provocada, el
precepto es altamente deficiente, atendido que no clarifica en qué
consiste la adhesión a la demanda. Concretamente, no se explicita si el
tercero citado concurre al proceso ampliando subjetivamente la relación
procesal o, por el contrario, si al comparecer puede formular su propia
acción", agregando que "En nuestra opinión, la aplicación de este
precepto debería encauzar a los terceros que puedan intervenir en la
forma adhesiva litisconsorcial. En efecto, como ellos pueden reclamar
el mismo derecho que forma parte del objeto del proceso, a través de
esta citación se facilitaría que puedan asumir alguna de las actitudes
que admite la ley...", opinión esta última que la Corte hace suya.
Entonces, si el llamado a los terceros a que se refiere el artículo 21 del
Código de Procedimiento Civil lo es sólo a aquellos que puedan
adherirse a la demanda en los mismos términos en que esta está
formulada, o sea, como dice el autor citado, que puedan reclamar el
mismo derecho que el demandante, parece claro que, en la especie, los
terceros cuya notificación se pretende no podrían adherirse a la
demanda pues no están en situación de reclamar una idéntica posición
jurídica que la demandante (considerandos 1º a 3º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 26/04/2018, Rol Nº 9249-2017,

Cita online CL/JUR/1949/2018

3. Acción de simulación y nulidad absoluta debe ejercerse en contra de


todos los continuadores legales de las partes del contrato
presuntamente espurio

El fallo de primera instancia confirmado en alzada, determina que la


acción queda rechazada porque "las acciones invocadas por el
demandante han debido dirigirse en contra de todas las personas que
celebraron el contrato, por ser aquellas las que por el hecho de la
convención han contraído las obligaciones y adquirido los derechos que
van en ella envueltos y que se pretende anular y las directamente
interesadas en cuanto dice relación con la existencia o no de tal
contrato". En tal sentido, discurre el análisis, entregando como corolario
que "desde (luego) que no es posible declarar la simulación y nulidad
absoluta de un contrato respecto de uno de los intervinientes de su
celebración y que éste subsista respecto del otro que no fue llamado a
juicio a exponer lo conveniente a sus derechos.". Del análisis de la
fundamentación del recurso en estudio, en lo referido a este capítulo de
infracciones, es posible advertir que la apreciación y análisis que
efectúa el recurrente del fallo impugnado resulta errónea, de cuyo claro
tenor literal aparece que la acción deducida en autos se vio frustrada al
no haber dirigido el libelo en contra de todos los herederos, cuestión que
los sentenciadores del fondo advierten como un supuesto previo, que
no desconoce la calidad que invoca el demandante (considerando 9º de
la sentencia de la Corte Suprema) El recurso de casación acusa la
infracción a los artículos 951, 1097, 2081 y 2305 del Código Civil en
relación con el artículo 21 del Código de Procedimiento Civil al haberse
determinado que la acción de simulación y nulidad absoluta debió
ejercerse en contra de todos los continuadores legales de las partes del
contrato presuntamente espurio para que tuviera éxito, lo cual no
aconteció, toda vez que el libelo fue encaminado únicamente contra uno
de los herederos. Al respecto, los jueces del fondo indicaron que "esta
omisión impide acoger la demanda de autos y sus diversas peticiones,
desde que no es posible declarar la simulación y nulidad absoluta de un
contrato respecto de uno de los intervinientes de su celebración y que
éste subsista respecto del otro que no fue llamado a juicio a exponer lo
conveniente a sus derechos". El sentenciador de segunda instancia,
ratificando aquello, señaló que tal omisión no es solo un yerro en la
forma de plantear la demanda, sino también, un impedimento para
acogerla "ya que el contrato no puede anularse respecto de una parte y
dejarlo subsistente respecto de la otra". Del mérito de autos, se
desprende que los juzgadores del grado han dado recta aplicación a los
preceptos impugnados, toda vez que tales artículos tratan sobre la
continuación legal, ante el evento del fallecimiento de una persona, en
todos sus derechos y obligaciones transmisibles, respecto de la cual
cabe la calidad de parte de la difunta en el contrato de compraventa que
sustenta la acción. En tal escenario, correspondía a la parte
demandante entablar su demanda en contra de toda la sucesión sin que
a ello obste su calidad de integrante de la misma, toda vez que al
esgrimir un derecho e interés particular, se ha erigido como un tercero,
como bien recoge la sentencia de marras; y esto, "porque el heredero
representa al causante en todos sus derechos y obligaciones
transmisibles, o sea, se coloca en su lugar y le afectan, por tanto, todas
las consecuencias jurídicas que se deriven de los actos ejecutados por
el causante; en consecuencia, le afectará también la nulidad de tales
actos." —Arturo Alessandri Besa— (considerando 10º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 7/01/2020, Rol Nº 20544-2018,


Cita online CL/JUR/37346/2020

4. Designación de juez partidor. Comuneros. Aplicación del artículo 21


del Código de Procedimiento Civil

Que, atendida la naturaleza de la gestión de designación de juez


partidor y que conforme a lo dispuesto en el citado artículo 646 del
Código de Procedimiento Civil y en el artículo 1317 del Código Civil,
nadie está obligado a permanecer en la indivisión, de manera que
cualquiera de los comuneros puede pedir la partición, por lo que es
dable concluir que resulta plenamente aplicable al caso de autos lo
prevenido en el artículo 21 del Código de Procedimiento Civil, que
dispone: "Si la acción ejercida por alguna persona corresponde también
a otra u otras personas determinadas, podrán los demandados pedir
que se ponga la demanda en conocimiento de las que no hayan ocurrido
a entablarla, quienes deberán expresar en el término de emplazamiento
si se adhieren a ella. Si las dichas personas se adhieren a la demanda,
se aplicará lo dispuesto en los artículos 12 y 13; si declaran su
resolución de no adherirse, caducará su derecho; y si nada dicen dentro
del término legal, les afectará el resultado del proceso, sin nueva
citación. En este último caso podrán comparecer en cualquier estado
del juicio, pero respetando todo lo obrado con anterioridad". De esta
forma, el allanamiento efectuado por el comunero don Rubén Véliz
Meza a la solicitud de designación de juez partidor, a través de su
abogado don Jorge Yáber Abusleme, designado por mandato judicial,
se encuentra ajustada a derecho y dentro de las posibilidades que la
propia ley prevé. Que, la circunstancia de que don Rubén Véliz Meza
sea representado en estos autos por el mismo abogado del solicitante
no constituye un vicio del procedimiento que autorice a proceder de
oficio al tribunal, por cuanto dicho mandato judicial se encuadra en la
hipótesis del artículo 19 del Código de Procedimiento Civil, al disponer
que "Si son dos o más las partes que entablan una demanda o gestión
judicial y deducen las mismas acciones, deberán obrar todas
conjuntamente, constituyendo un solo mandatario" Conforme a ello, no
se estima configurado en la especie el tipo penal consagrado en el
artículo 232 del Código Penal. (Considerandos 3º y 4º de la sentencia
de Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Talca, 21/04/2020, Rol Nº 671-2019,

Cita online CL/JUR/23475/2020

ARTÍCULO 22 (23)

Si durante la secuela del juicio se presenta alguien reclamando sobre la


cosa litigada derechos incompatibles con los de las otras partes, admitirá el
tribunal sus gestiones en la forma establecida por el artículo 16 y se
entenderá que acepta todo lo obrado antes de su presentación, continuando
el juicio en el estado en que se encuentre.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 16, 23, 24, 177, 518 a 529 y 823.
Código de Procedimiento Penal: artículo 115.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procede nulidad de todo lo obrado por falta de emplazamiento del


tercero independiente afectado por el proceso

De conformidad a lo preceptuado en los artículos 23 y 22 del C.P.C.,


el tercero independiente no puede cuestionar lo actuado, por el contrario
se entiende que acepta todo lo obrado antes de su presentación. Sin
embargo, el fallo que en definitiva se dicte le resultaría inoponible por
falta de concurrencia. Ello lleva a esta Corte a estimar que la nulidad
procesal podrá ser declarada a petición de parte en los casos en que
exista un vicio que irrogue a alguna de las partes un perjuicio reparable
solo con la declaración de nulidad, tal como lo dispone el art. 83 del
C.P.C. Como lo ha sostenido la Excma. Corte Suprema, es
indispensable precisar en función de la materia sometida a la decisión
del tribunal, quiénes son los legítimos contradictores en un
procedimiento judicial que tiene el objeto que se cumpla la obligación
del Servicio de Evaluación Ambiental y del Fisco de Chile, ordenando
en definitiva que las entidades demandadas deberán exigir al titular de
la Resolución Ambiental (Aguas Andinas S.A.) del proyecto "100% de
Saneamiento de la Cuenca de Santiago", específicamente por la Planta
de Tratamiento de Aguas Mapocho la construcción, a su costa, de las
obras de conducción y entrega que permitan el transporte gravitacional
de las aguas hasta el o los puntos de cota más alta, de acuerdo a lo
técnicamente factible de manera de favorecer el máximo posible de
hectáreas de riego que son atendidas por los Canales demandantes. Lo
anterior en consideración a que la sentencia que se dicte afectará a
todos los concernidos con la demanda entablada. Tales premisas
básicas y preliminares parten del supuesto y de la necesidad de trabar
una relación procesal válida, toda vez que la vinculación jurídico
procesal, para ser eficiente, debe ser intentada por el titular del derecho
y en contra de quien o quienes se formule la pretensión o interés, esto
es, de quienes resulten ser los obligados a soportar los efectos de la
decisión (considerando 10º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 17/12/2019, Rol Nº 10665-2018,

Cita online CL/JUR/12355/2019

2. Tercero excluyente debe hacer valer su derecho durante la secuela


del juicio

La incidentista que se opuso al cumplimiento del fallo, de conformidad


con lo dispuesto en el artículo 22 del Código de Procedimiento Civil, es
un tercero independiente que debió hacer valer su derecho durante la
secuela del juicio, es decir, antes de la dictación de la sentencia y por
esa condición, debe aceptar todo lo obrado en el juicio con anterioridad
a su comparecencia, aun cuando se le reconoció el derecho para hacer
alegaciones y rendir prueba para acreditar la existencia de un contrato
de arrendamiento vigente con la demandante y ser ocupante del
inmueble, lo que no ocurrió (considerando 4º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 23/09/2016, Rol Nº 6945-2016,

Cita online: CL/JUR/6649/2016

ARTÍCULO 23 (24)

Los que, sin ser partes directas en el juicio, tengan interés actual en sus
resultados, podrán en cualquier estado de él intervenir como coadyuvantes,
y tendrán en tal caso los mismos derechos que concede el artículo 16 a cada
una de las partes representadas por un procurador común, continuando el
juicio en el estado en que se encuentre.

Se entenderá que hay interés actual siempre que exista comprometido un


derecho y no una mera expectativa, salvo que la ley autorice especialmente
la intervención fuera de estos casos.

Si el interés invocado por el tercero es independiente del que corresponde


en el juicio a las dos partes, se observará lo dispuesto en el artículo anterior.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 16, 24, 177, 433 y 529.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Concepto doctrinario de tercero coadyuvante. Concepto


jurisprudencial

1. Del —artículo 23 del Código de Procedimiento Civil—, fluyen como


requisitos para aceptar tal comparecencia: a) el tercero sea distinto a
los interesados directos; b) el juicio se encuentre en tramitación;
c) quien se apersone al pleito tenga interés actual; y d) tal interés sea
armónico con el de una de las partes en el juicio. En doctrina se los ha
definido de las siguientes formas: "Son terceros coadyuvantes las
personas que, sin ser partes directas en el juicio, intervienen en él, por
tener un interés actual en sus resultados, para la defensa del cual
sostienen pretensiones armónicas y concordantes con las de una de las
partes directas" (...) "La ley equipara al tercero coadyuvante con la parte
misma a quien coadyuva" (Sergio Rodríguez Garcés, "Tratado de las
Tercerías", Tercera Edición, Tomo I, p. 173, Editorial Vitacura Limitada).
El autor Eduardo Couture señala que el tercero coadyuvante puede
definirse como "aquel que tiene un interés jurídico propio en un conflicto
ajeno; pero en condiciones tales que la defensa del interés propio le
conduce al litigio a defender el interés ajeno". ("Estudios de derecho
procesal civil", Volumen III, "El Juez, las partes y el proceso", Editorial
PuntoLex S.A.) (considerando 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/01/2020, Rol Nº 23289-2019,


Cita online CL/JUR/9439/2020

2. El tercero coadyuvante participa en el proceso respaldando y


reforzando el interés de la parte principal, es decir, su posición se
encuentra subordinada a dicha pretensión y no puede subsistir de
manera autónoma. En ese mismo sentido este Tribunal ha resuelto:
"Desde este punto de vista se denomina coadyuvante a la persona que
interviene en el proceso velando por sus intereses legítimos pero en una
posición subordinada a una de las partes principales a la que ayuda de
forma instrumental, adhiriéndose a sus pretensiones y sin poder actuar
con autonomía respecto de ella. En el mismo sentido se puede señalar
que se denomina así al tercero que por ser titular de un derecho conexo
o dependiente con respecto a las pretensiones articuladas en el
proceso, participa en éste con el objeto de colaborar en la gestión
procesal de una de las partes. Se trata de una intervención adhesiva
simple de un tercero que no posee el carácter autónomo en el proceso,
pues su legitimación para tomar intervención en dicho proceso es de
naturaleza subordinada o dependiente respecto de la parte con la cual
coopera o colabora. De allí que su situación procesal se encuentre
determinada por la conducta del litigante principal, puesto que se halla
facultado para realizar toda clase de actos procesales siempre que sean
compatibles o no perjudiquen el interés de éste último". En
consecuencia, y por aparecer de lo antes expresado que el tercero
coadyuvante es aquel que interviene subordinado a los intereses de la
parte respecto de la cual adhieren su defensa es que surge con claridad
la improcedencia, en esta etapa procesal, de resolver el recurso
casación en el fondo deducido por Miguel Ángel Pérez Vera, toda vez
que carece de un interés actual que defender, por cuanto la parte a
quien adhería su actuación —el Servicio de Evaluación Ambiental— se
conformó con el fallo adoptado. Lo hasta aquí reflexionado, en todo
caso, no puede ser interpretado como un obstáculo a la tutela judicial
efectiva, toda vez que esta Corte no desconoce en modo alguno el
derecho que asiste a los directamente afectados por los actos de la
administración, en materia medioambiental, a impugnar y/o, a participar
en el contencioso administrativo, pero siempre que ello se verifique y
concrete en la forma y por las vías que el ordenamiento jurídico
establece (considerandos 9º y 10º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/01/2020, Rol Nº 23289-2019,


Cita online CL/JUR/9439/2020

2. Intervención de terceros en el proceso. Clasificación de los terceros.


Concepto de terceros coadyuvantes, independientes y excluyentes
La intervención de terceros en el proceso es reconocida en nuestro
ordenamiento jurídico, toda vez que el Código de Procedimiento Civil,
en el Libro Primero, que establece las normas comunes a todo
procedimiento, en el Título III, cuyo epígrafe reza "De la pluralidad de
acciones o de partes", regula su participación en un proceso en marcha.
En efecto, es a través de esta normativa que el legislador tutela los
intereses de terceros que pueden verse afectados por la decisión final,
razón por la que se les autoriza a intervenir sujetándose a las
limitaciones que se les imponen. La doctrina distingue entre los terceros
indiferentes e interesados, según si les afectarán o no los resultados de
juicio. Estos últimos, a su vez, se clasifican en terceros coadyuvantes,
independientes y excluyentes. Los terceros coadyuvantes son aquellos
que intervienen en el procedimiento por tener un interés en el resultado
del juicio, caracterizándose porque sus pretensiones son concordantes
con las de alguna de las partes principales. En doctrina se los ha
definido de las siguientes formas "Son terceros coadyuvantes las
personas que, sin ser partes directas en el juicio, intervienen en él, por
tener un interés actual en sus resultados, para la defensa del cual
sostienen pretensiones armónicas y concordantes con las de una de las
partes directas"(...) "La ley equipara al tercero coadyuvante con la parte
misma a quien coadyuva" —Sergio Rodríguez Garcés—. En tanto, los
terceros excluyentes son quienes concurren al juicio aduciendo
pretensiones contrarias a las partes principales. Sus intereses son
incompatibles con los de las partes. Finalmente, los terceros
independientes, son aquéllos que tienen un interés autónomo al de las
partes. Es decir, su pretensión no es accesoria a la de aquellas
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 17/12/2019, Rol Nº 24870-2018,


Cita online CL/JUR/7224/2019

3. Requisitos para aceptar comparecencia de tercero coadyuvante.


Tercero coadyuvante interviene subordinado a los intereses de la
parte respecto de la cual adhieren su defensa

En este caso, la calidad de tercero coadyuvante invocada por el


Comité de Defensa de los Pueblos del Elqui, está contemplada en el
artículo 23 del Código de Procedimiento Civil. De dicha norma fluyen
como requisitos para aceptar tal comparecencia que: a) el tercero sea
distinto a los interesados directos; b) el juicio se encuentre en
tramitación; c) quien se apersone al pleito tenga interés actual; y d) tal
interés sea armónico con el de una de las partes en el juicio
(considerandos 7º y 8º de la sentencia de la Corte Suprema). En
consecuencia, como el tercero coadyuvante es aquel que interviene
subordinado a los intereses de la parte respecto de la cual adhieren su
defensa es que surge con claridad la improcedencia, en esta etapa
procesal, de resolver el recurso casación en el fondo deducido por el
Comité Defensa de los Pueblos del Elqui, toda vez que carecen de un
interés actual que defender al haberse declarado inadmisible el arbitrio
deducido por las Municipalidades, que representaba el interés al que
adhirió como fundamento de su postura en el proceso. Por lo tanto, la
pretensión de este tercero perdió vigencia en el juicio lo cual impide a
esta Corte pronunciarse a su respecto por carecer, en estas
circunstancias, del interés que motivó su participación en estos autos
(considerando 10º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/10/2018, Rol Nº 8197-2018,


Cita online CL/JUR/5694/2018

4. Procede nulidad de todo lo obrado por falta de emplazamiento del


tercero independiente afectado por el proceso

De conformidad a lo preceptuado en los artículos 23 y 22 del C.P.C.,


el tercero independiente no puede cuestionar lo actuado, por el contrario
se entiende que acepta todo lo obrado antes de su presentación. Sin
embargo, el fallo que en definitiva se dicte le resultaría inoponible por
falta de concurrencia. Ello lleva a esta Corte a estimar que la nulidad
procesal podrá ser declarada a petición de parte en los casos en que
exista un vicio que irrogue a alguna de las partes un perjuicio reparable
solo con la declaración de nulidad, tal como lo dispone el art. 83 del
C.P.C. Como lo ha sostenido la Excma. Corte Suprema, es
indispensable precisar en función de la materia sometida a la decisión
del tribunal, quiénes son los legítimos contradictores en un
procedimiento judicial que tiene el objeto que se cumpla la obligación
del Servicio de Evaluación Ambiental y del Fisco de Chile, ordenando
en definitiva que las entidades demandadas deberán exigir al titular de
la Resolución Ambiental (Aguas Andinas S.A.) del proyecto "100% de
Saneamiento de la Cuenca de Santiago", específicamente por la Planta
de Tratamiento de Aguas Mapocho la construcción, a su costa, de las
obras de conducción y entrega que permitan el transporte gravitacional
de las aguas hasta el o los puntos de cota más alta, de acuerdo a lo
técnicamente factible de manera de favorecer el máximo posible de
hectáreas de riego que son atendidas por los Canales demandantes. Lo
anterior en consideración a que la sentencia que se dicte afectará a
todos los concernidos con la demanda entablada. Tales premisas
básicas y preliminares parten del supuesto y de la necesidad de trabar
una relación procesal válida, toda vez que la vinculación jurídico
procesal, para ser eficiente, debe ser intentada por el titular del derecho
y en contra de quien o quienes se formule la pretensión o interés, esto
es, de quienes resulten ser los obligados a soportar los efectos de la
decisión (considerando 10º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 17/12/2019, Rol Nº 10665-2018,

Cita online CL/JUR/12355/2019

5. Terceros en juicio. Apelación de tercero coadyuvante no resulta


procedente

Nuestro Código de Procedimiento Civil, prevé la posibilidad de que no


sólo las partes directas
(demandante/demandado;recurrente/recurrido;ejecutante/ejecutado;
reclamante/ reclamado) concurran al juicio, sino que, además, el
artículo 23 del referido texto legal contempla la actuación de terceros
coayuvantes e independientes, los que deben tener un interés actual en
los resultados del pleito, debiendo aceptar lo obrado por las partes
principales y continuar el juicio en el estado en que se encuentre
(considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema). Corresponde
enfatizar que la enmienda de la decisión de no admitir la comparecencia
del tercero coadyuvante no es una materia que pueda ser abordada a
través del recurso de hecho, razón por la que esta Corte para resolver,
con independencia de lo acertado de la decisión —que denegó la
concesión de la apelación interpuesta en contra de la sentencia
definitiva—, debe estar al estatus procesal de quien recurre, quien no
era parte del proceso (considerando 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 9/01/2018, Rol Nº 45321-2017,


Cita online CL/JUR/122/2018

Fallo en el mismo sentido:


— Corte Suprema, 26/07/2018, Rol Nº 16391-2018,

Cita online CL/JUR/4456/2018

6. Revocación de nombramiento de curador de herencia yacente. Aquel


que en principio fue designado curador de herencia yacente no puede
ser considerado tercero ni agraviado

El recurrente de casación fue designado curador de la herencia


yacente, por resolución de 21.11.2017, conforme lo dispone el
artículo 1240 del Código Civil, en relación con el artículo 885 del de
Procedimiento Civil, por lo tanto, corresponde determinar si tiene la
calidad de tercero, que es la que invoca, según lo prescribe el
artículo 23 del último código citado, luego, si tiene la de agraviado, en
los términos que exige el artículo 771 del mismo estatuto. Sobre el
particular, el artículo 23 inciso 1º del Código de Procedimiento Civil
señala qué debe entenderse por terceros en juicio, disponiendo que:
"los que, sin ser partes directas en el juicio, tengan interés actual en sus
resultados, podrán en cualquier estado de él intervenir como
coadyuvantes, y tendrán en tal caso los mismos derechos que concede
el artículo 16 a cada una de las partes representadas por un procurador
común, continuando el juicio en el estado en que se encuentre". Pues
bien, el recurrente no puede ser considerado tercero porque su discurso
solo está dirigido a impugnar la resolución que dejó sin efecto su
designación de curador de la herencia yacente, esto es, no refiere a una
materia de fondo que haya sido sometida a la decisión del tribunal,
debido precisamente a que el juicio destinado a resolver el conflicto
jurídico generado por el estado actual de la herencia quedada al
fallecimiento de dicha persona, aún no se ha incoado, por la misma
razón, no puede ser considerado agraviado, porque la decisión que
refuta atañe a una cuestión relativa a su nombramiento como tal, no a
una sustantiva. En tal circunstancia, procede declarar la inadmisibilidad
del recurso de casación deducido (considerando 4º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/06/2019, Rol Nº 25114-2018,


Cita online CL/JUR/3096/2019

ARTÍCULO 24 (25)
Las resoluciones que se dicten en los casos de los dos artículos anteriores
producirán respecto de las personas a quienes dichos artículos se refieren
los mismos efectos que respecto de las partes principales.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 21, 22, 23, 176 y 177.

TÍTULO IV DE LAS CARGAS PECUNIARIAS A QUE ESTÁN


SUJETOS LOS LITIGANTES

ARTÍCULO 25 (26)

Todo litigante está obligado a pagar a los oficiales de la administración de


justicia los derechos que los aranceles judiciales señalen para los servicios
prestados en el proceso.

Cada parte pagará los derechos correspondientes a las diligencias que


haya solicitado, y todas por cuotas iguales los de las diligencias comunes, sin
perjuicio del reembolso a que haya lugar cuando por la ley o por resolución
de los tribunales corresponda a otras personas hacer el pago.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 26, 27, 28, 144, 147, 197, 337, 347,
406 y 411. Código Civil: artículos 756, 1845, 1847, 2334, 2347 y 2426. Código Penal:
artículos 24, 47 y 241. Código Orgánico de Tribunales: artículos 492, 591, 592, 594, 595, 600,
601 y 602. Código del Trabajo: artículo 436. Decreto con Fuerza de Ley Nº 1, 1993, fija texto
Ley Orgánica del Consejo de Defensa del Estado, Min. Hacienda, D.O. 7.08.1993: artículo 54.

ARTÍCULO 26 (27)

Los derechos de cada diligencia se pagarán tan pronto como ésta se


evacue; pero la falta de pago no podrá entorpecer en ningún caso la marcha
del juicio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 129, 197, 406 y 779. Código Civil:
artículo 2472 Nº 1. Código de Comercio: artículos 844 y 861. Código Penal: artículo 48. Código
Procesal Penal: artículo 51.

ARTÍCULO 27 (28)
Cuando litiguen varias personas conjuntamente, cada una de ellas
responderá solidariamente del pago de los derechos que a todas afecten en
conformidad a los artículos anteriores, sin perjuicio de que las demás
reembolsen a la que haya pagado la cuota que les corresponda, a prorrata
de su interés en el juicio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 12, 18, 19, 25 y 337.

ARTÍCULO 28 (29)

Los procuradores judiciales responderán personalmente del pago de las


costas procesales generadas durante el ejercicio de sus funciones, que sean
de cargo de sus mandantes, sin perjuicio de la responsabilidad de éstos.4

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 12, 19, 25, 139 y 337. Código
Procesal Penal: artículo 50. Código Orgánico de Tribunales: artículo 600.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Regulación de las costas personales ante procurador negligente

De conformidad a lo dispuesto en los artículos 28 y 138 y siguientes,


todos del Código de Procedimiento Civil, la carga de las costas es de la
parte, siendo responsable el apoderado o procurador judicial sólo de las
costas procesales, de manera que en este caso, cualquier suma o
cantidad que se fije a favor de la demandada, por concepto de costas
personales, deberá asumirlas la parte demandante y no su negligente
procurador, de manera que repugna a los criterios de equidad y justicia
del caso particular, el que sea condenado a pagar aquel que
legítimamente demanda un desmedro de su patrimonio y que fue mal
representado, independientemente del hecho que dicho mandato sea
legal, pero que debe sujetarse, tal como se ha fallado, que la regulación
de las costas personales deberá efectuarse con moderación y
prudencia, y no puede soslayarse que los abogados que representan al
Fisco de Chile, demandado en estos autos, lo hacen por disposición
legal y habiendo sido contratados, precisamente, a estos efectos y
otros, quienes perciben una remuneración por sus servicios, de manera
que regular el monto que debiera corresponder, por concepto de costas
personales, en base a la cuantía de lo disputado, no aparece justo ni
equitativo para el demandado que fue, como se dijo, negligentemente
representado, con defensas de última hora que aparecieron como
evidentemente dilatorias, las que acarrean el motivo que ahora se
disputa (Considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Coihaique, 23/12/2011, Rol Nº 183-2011,

Cita online: CL/JUR/9059/2011

TÍTULO V DE LA FORMACIÓN DEL PROCESO, DE SU CUSTODIA


Y DE SU COMUNICACIÓN A LAS PARTES

ARTÍCULO 29

Se formará la carpeta electrónica con los escritos, documentos,


resoluciones, actas de audiencias y actuaciones de toda especie que se
presenten o verifiquen en el juicio. Estos antecedentes serán registrados y
conservados íntegramente en orden sucesivo conforme a su fecha de
presentación o verificación a través de cualquier medio que garantice la
fidelidad, preservación y reproducción de su contenido, lo que se regulará
mediante auto acordado de la Corte Suprema.

La carpeta electrónica estará disponible en el portal de internet del Poder


Judicial, salvo que la ley establezca lo contrario o habilite al tribunal para
restringir su publicidad, o la de alguna parte de ella.

Ninguna pieza de la carpeta electrónica podrá eliminarse sin que


previamente lo decrete el tribunal que conoce de la causa.5

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 34, 35 y 148. Código Procesal Penal:
artículos 39 a 43. Código del Trabajo: artículo 433. Código Tributario: artículo 130. Auto
Acordado para la aplicación de la Ley Nº 20.886, artículos 2º a 4º y 6º a 11.

ARTÍCULO 30

Los escritos y documentos se presentarán por vía electrónica conforme se


dispone en los artículos 5º y 6º, respectivamente, de la Ley General sobre
Tramitación Electrónica de los Procedimientos Judiciales.
Los escritos se encabezarán con una suma que indique su contenido o el
trámite de que se trata.6

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 32. Código Orgánico de Tribunales:


artículos 379 y 380. Auto Acordado para la aplicación de la Ley Nº 20.886, artículo 4º.

ARTÍCULO 31

Derogado.7

ARTÍCULO 32 (33)

Entregado un escrito al secretario, deberá éste en el mismo día estampar


en cada foja la fecha y su media firma, o un sello autorizado por la respectiva
Corte de Apelaciones y que designe la oficina y la fecha de la presentación.
Deberá, además, dar recibo de los documentos que se le entreguen, siempre
que lo exija la parte que los presenta, sin que pueda cobrar derecho alguno
por los servicios a que este artículo se refiere.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 30, 217 y 348. Código Orgánico de
Tribunales: artículo 379. Auto Acordado para la aplicación de la Ley Nº 20.886, artículo 4º.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. El deber de subrogación que el artículo 212 del Código Orgánico de


Tribunales impone a los secretarios de un Juzgado de Letras como el
de que aquí se trata, no inhibe, en caso alguno, la obligación que ese
funcionario tiene de recibir los escritos que las partes presenten

El deber de subrogación que el artículo 212 del Código Orgánico de


Tribunales impone a los secretarios de un Juzgado de Letras como el
de que aquí se trata, no inhibe, en caso alguno, la obligación que ese
funcionario tiene de recibir los escritos que las partes presenten,
contemplada en el artículo 32 del de Procedimiento Civil.
Consecuentemente, la presentación mediante la cual se interpuso el
recurso de apelación, recibida por la secretaria del tribunal en su
domicilio, es una gestión procesalmente válida. Al entender la juez
recurrida que dicha presentación no fue válida por haberse practicado
ante ella, que no oficiaba de secretaria sino de Juez subrogante, incurrió
en falta que esta Corte se ve en la obligación de reparar a fin de
salvaguardar la regla de la doble instancia, que de mantenerse el actual
estado de cosas se vería ilegítimamente desconocida (considerandos
1º y 2º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 13/11/1990, Rol Nº 16368,


Cita online: CL/JUR/505/1990

ARTÍCULO 33

Los secretarios letrados de los juzgados civiles podrán dictar por sí solos
las sentencias interlocutorias, autos y decretos, providencias o proveídos,
salvo cuando ello pudiere importar poner término al juicio o hacer imposible
su continuación. La reposición que sea procedente en contra de estas
resoluciones, en su caso, será resuelta por el juez.8

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 59 y 162. Código Orgánico de


Tribunales: artículos 60, 70, 379, 380 Nº 1, 381.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Improcedencia de que Secretario del tribunal falle reposición


deducida en contra de resolución dictada por Juez

El art. 33 del Código de Procedimiento Civil, es una norma que debe


interpretarse restrictivamente y es por tanto es de derecho estricto. En
efecto, la citada disposición establece de manera perentoria que las
resoluciones dictadas por el Secretario del tribunal de acuerdo a las
atribuciones previstas en la indicada norma, en lo que dice relación a
las Reposiciones de las mismas, éstas deberán ser resultas por el Juez
titular y no por la Sra. Secretaria. En efecto, al ser dicho precepto una
norma de derecho estricto, no puede ser objeto de exégesis, ósea, de
interpretación y menos en sentido amplio, como lo es el entender que
esta misma atribución la tiene el Secretario en el caso opuesto, es decir,
que el Secretario puede a contrario sensu fallar las reposiciones
deducidas en contra de las resoluciones dictadas por el Juez.
Interpretación que es del todo inexacta dada la naturaleza de derecho
restrictivo de la referida disposición. Es del caso, que dar una
interpretación amplia a la citada norma, es del todo erróneo e inexacto
y se transgrede con ello su carácter restrictivo y por ende el sentido,
espíritu y alcance que el legislador ha querido otorgarle a la citada
disposición. Además, ha de tenerse presente, que el principal cometido
que cumple el Juez es precisamente ejercer la función jurisdiccional que
le ha sido entregada por la Constitución y las leyes. Asimismo, la
principal función que cumple el Secretario del Tribunal, es ser ministro
de fe de todas las actuaciones y resoluciones realizadas en el Tribunal
y sólo de manera excepcional realizar actuaciones propias del ámbito
jurisdiccional, en los casos estrictamente previstos por la ley. Por los las
razones antes esgrimidas, estos sentenciadores estiman que el
Segundo Recurso de apelación deducido por la parte demandante ha
de ser acogido, en contra de la resolución dictada por la Secretaria
Titular del Tribunal a quo, que no dio lugar al incidente de nulidad
presentado por la demandante cuya finalidad fue anular la resolución de
fecha catorce de febrero de dos mil diecinueve y la condenó además en
costas (considerandos 11º a 13º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 10/07/2019, Rol Nº 513-2019,

Cita online CL/JUR/4076/2019

ARTÍCULO 34 (35)

Todas las piezas que deben formar la carpeta electrónica se irán


agregando sucesivamente según el orden de su presentación. El sistema de
tramitación electrónica del Poder Judicial numerará automáticamente cada
pieza de la carpeta electrónica en cifras y letras. Se exceptúan las piezas que,
por su naturaleza, no puedan agregarse o que por motivos fundados se
manden reservar fuera del proceso.9

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 29, 35. Código Penal: artículo 470.
Código Tributario: artículo 130. Auto Acordado para la aplicación de la Ley Nº 20.886,
artículo 6º.

ARTÍCULO 35

Derogado.10

ARTÍCULO 36
Las piezas que se presenten al tribunal se mantendrán bajo su custodia y
responsabilidad. Éstas no podrán retirarse sino por las personas y en los
casos expresamente contemplados en la ley. Corresponderá al tribunal velar
por el estricto cumplimiento de lo establecido en el artículo 393 del Código
Orgánico de Tribunales.11

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 37, 148, 469, 644 y 805. Código Civil:
artículo 197. Código Penal: artículo 241. Código Procedimiento Penal: artículo 61. Código
Procesal Penal: artículo 43. Código Orgánico de Tribunales: artículos 9º, 379, 380 Nºs. 3 y 4,
393, 532 Nºs. 2, 3 y 4. Auto Acordado para la aplicación de la Ley Nº 20.886, artículo 6º.

ARTÍCULO 37

Cuando los tribunales pidan o hayan de oír dictamen por escrito del
respectivo fiscal judicial o de los defensores públicos, les enviarán
comunicación de la carpeta electrónica a la que deben acceder
electrónicamente.

Si estos funcionarios retardan dicho dictamen, podrá el tribunal señalarles


un plazo razonable para que lo envíen o agreguen a la carpeta electrónica.

En aquellos casos en que otro tribunal requiera la remisión del expediente


original o de algún cuaderno o pieza del proceso, el trámite se cumplirá
enviando la correspondiente comunicación de la carpeta electrónica a la que
deben acceder a través del sistema de tramitación electrónica del Poder
Judicial. Lo mismo se aplicará cada vez que la ley ordene la remisión,
devolución o envío del proceso o de cualquiera de sus piezas a otro tribunal. 12

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 36, 159 Nº 6, 302, 683 y 825. Código
Orgánico de Tribunales: artículos 350, 354 a 359 y 374. Ley Nº 16.618, Ley Nº 18.695, Orgánica
de Municipalidades: artículo 82 g). Auto acordado de la Corte Suprema, establece instrucciones
respecto documentos y expedientes que las Cortes de Apelaciones ordenan traer a la vista y
diligencias para mejor resolver que decretan los tribunales, D.O. 12.08.1989. Auto Acordado
para la aplicación de la Ley Nº 20.886, artículo 6º.

TÍTULO VI DE LAS NOTIFICACIONES

ARTÍCULO 38 (41)
Las resoluciones judiciales sólo producen efecto en virtud de notificación
hecha con arreglo a la ley, salvo los casos expresamente exceptuados por
ella.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40, 43, 44, 48, 50, 53, 54, 55, 57, 65,
69, 148, 182, 201, 221, 302, 303 Nº 6, 486 inciso 2º, 566, 591, 595, 666 y 818. Código Procesal
Penal: artículos 24 a 33, 262 y 291. Código Aeronáutico: artículo 19. Ley Nº 19.620, sobre
Adopción de Menores: artículo 14. Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de Familia: artículo 23.
Código Tributario: artículos 63, 124.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Principio de legalidad de la notificación

Siendo que no existe testimonio o constancia alguna de parte del


receptor judicial en relación a la entrega de la cédula notificando la
sentencia de este proceso y dada la naturaleza y formalidades que
deben cumplirse al efectuar determinadas diligencias, éstos no son
posibles de reconstruir o subsanarse por medio de vías o medios
distintos a aquellos que el propio legislador contempló para la validez
de ellas. De aceptarse lo contrario, que la notificación de una sentencia
definitiva puede probarse por otros medios, ello significaría atentar
contra el principio de la legalidad de la notificación, ya que bastaría por
esta sola circunstancia, para que una de las partes estableciere la fecha
de la notificación en forma unilateral, quedando la contraparte impedida
de ejercer los recursos que procedan contra la sentencia
(considerandos 21 y 22 de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/08/2004, Rol Nº 23332-2003,


Cita online: CL/JUR/4905/2004

2. Resoluciones judiciales sólo producen efecto en virtud de notificación


hecha con arreglo a la ley. Incumplimiento de notificar personalmente
o por cédula la resolución que recibió a prueba la excepción de
prescripción. Causal de casación en la forma de omisión de un trámite
o diligencia esencial, acogido

La regla fundamental la prescribe el artículo 38 del Código de


Procedimiento Civil, en orden a que las resoluciones judiciales sólo
producen efecto en virtud de notificación hecha con arreglo a la ley,
salvo los casos exceptuados por ella. Por lo anterior, lo relevante, es
que la notificación cumplida en forma legal envuelve una presunción de
derecho en cuanto a que el destinatario de la misma sabe de la
existencia y contenido de la resolución notificada y, por eso, esta última
podrá ser eficaz. En el presente caso, no se llevó a efecto la notificación
personal o por cédula dispuesta por el tribunal para poner en
conocimiento de las partes la resolución que recibió a prueba la
excepción de prescripción formulada por las demandadas, por ello el
incumplimiento de esta exigencia de comunicación a las partes de la
referida resolución, deviene en nulidad por haber faltado los requisitos
formales de rigor, que no eran otros que los concernientes a la
notificación personal o por cédula, y al no haber sido así, todos los
trámites, actuaciones y estadios procesales posteriores son nulos,
porque el término probatorio de dicha excepción de prescripción, no
comenzó a regir. Así las cosas, no cabe sino concluir que existe
fundamento suficiente para tener por configurado el vicio de nulidad
adjetiva invocado, toda vez que resultó menoscabado el derecho de la
demandada a ejercer, oportunamente, la carga de probar que tenía
asignada en la contienda, como, asimismo, una debida defensa de sus
intereses ante las actuaciones procesales de la contraria y del tribunal.
En tales condiciones, ha quedado de manifiesto el perjuicio en los
derechos previstos para el litigante, pues no estuvo en posición de
ejercitarlos en la etapa probatoria del procedimiento, privándolo de todo
un estadio procesal y, por esa vía, menoscabada su defensa, perjuicio
que solo es reparable con la anulación del fallo (considerandos 8º y 9º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Puerto Montt, 15/06/2020, Rol Nº 337-2019,

Cita online CL/JUR/37464/2020

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 13/05/2019, Rol Nº 1543-2019,

Cita online CL/JUR/3178/2019

3. Requisitos del emplazamiento

El emplazamiento es un trámite judicial complejo que consta de dos


requisitos o elementos: la notificación en forma legal al demandado de
la demanda y su proveído y el plazo señalado en la misma ley para
contestarla. La resolución judicial produce todos los efectos legales que
le son propios, cuando ha sido notificada y esa notificación ha sido
practicada en conformidad a la ley (considerando 1º de la sentencia de
la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 24/09/1999, Rol Nº 354-1999,

Cita online: CL/JUR/1686/1999

4. Término probatorio es común e inicia cuando son notificadas todas


las partes de la resolución que recibe la causa a prueba

La notificación de la interlocutoria de prueba al demandante, no pudo


interrumpir el plazo de seis meses exigido para que opere el abandono
del procedimiento. El término probatorio es común, de manera que para
que éste se inicie es necesario que la aludida resolución se notifique a
todas las partes que intervienen en el juicio. En efecto, vencida la etapa
de discusión procedía avanzar hacia la fase de recepción de la prueba,
cuya apertura sólo se inicia con la notificación a las partes de la
resolución que recibe la causa a prueba, por lo que de conformidad con
lo dispuesto en el artículo 38 del Código de Procedimiento Civil, en
cuanto establece que las resoluciones judiciales producen efectos en
virtud de la notificación hecha con arreglo a la ley, el único acto que
manifiesta inequívocamente la voluntad de las partes de continuar el
juicio es la notificación de la mencionada resolución a todas ellas,
iniciando la etapa probatoria que dé curso progresivo a los autos. En
síntesis, la resolución que recibe la causa a prueba debe ser notificada
a todas las partes del proceso para que sus destinatarios puedan tomar
conocimiento de la apertura de la nueva fase procesal, con lo cual sus
derechos a defensa y audiencia legal queden asegurados
(considerandos 6º a 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/06/2018, Rol Nº 4589-2018,


Cita online CL/JUR/2606/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 24/02/2020, Rol Nº 18573-2019,

Cita online CL/JUR/11085/2020

— Corte Suprema, 20/05/2019, Rol Nº 29735-2018,


Cita online CL/JUR/2754/2019

— Corte de Apelaciones de Rancagua, 23/04/2019, Rol Nº 1589-


2018,

Cita online CL/JUR/2635/2019

— Corte Suprema, 23/10/2018, Rol Nº 12480-2018,

Cita online CL/JUR/6032/2018

— Corte Suprema, 23/01/2018, Rol Nº 12237-2017,

Cita online CL/JUR/355/2018

5. Falta de notificación acarrea nulidad de todo lo obrado

La falta de notificación trae como consecuencia que todo lo obrado a


partir de la resolución de fs. 8 inclusive de este cuaderno en adelante
es nulo, pues se ha incurrido en un vicio procesal de tal magnitud, que
anula el procedimiento. Y ello, por cuanto uno de los pilares en que
descansa el debido proceso, es que las partes tomen conocimiento
oportuno de las resoluciones que se dicten, para así hacer valer sus
derechos. Por ello el artículo 38 del Código de Procedimiento Civil
dispone que las resoluciones judiciales sólo producen efecto en virtud
de notificación hecha con arreglo a la ley (considerando 11º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 15/07/2011, Rol Nº 1055-2010,

Cita online: CL/JUR/10386/2011

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 1/09/1998, Rol Nº 3635-1997,

Cita online: CL/JUR/1012/1998

ARTÍCULO 39 (42)
Para la validez de la notificación no se requiere el consentimiento del
notificado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 44, 57 y 61.

ARTÍCULO 40 (43)

En toda gestión judicial, la primera notificación a las partes o personas a


quienes hayan de afectar sus resultados, deberá hacérseles personalmente,
entregándoseles copia íntegra de la resolución y de la solicitud en que haya
recaído, cuando sea escrita.

Esta notificación se hará al actor en la forma establecida en el artículo 50.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 11, 44, 47, 52, 54, 56, 80, 221, 302,
314, 443 Nº 1, 629, 689 y 860. Código Procesal Penal: artículo 29. Código Orgánico de
Tribunales: artículo 390. Código del Trabajo: artículos 430, 432, 459 y 460. Código Tributario:
artículos 11, 12 y 171. Código de Minería: artículo 83. Código de Justicia Militar: artículos 115
y 151. Código de Aguas: artículos 131 y 188. Ley Nº 17.322, sobre Cobranza Judicial de
Imposiciones, Aportes y Multas de las Instituciones de Previsión: artículo 6º. Ley Nº 18.287,
sobre Procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículo 8º. Decreto con Fuerza de Ley
Nº 707, 1982, fija texto Ley sobre Cuentas Corrientes Bancarias y Cheques, D.O. 7.10.1982:
artículo 41. Código del Trabajo: artículo 436. Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de Familia:
artículo 23.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Emplazamiento inválido pone en riesgo libertad personal del


amparado. Obligación de entregar copia íntegra de la solicitud de
audiencia de formalización y resolución judicial que la provee

(Voto disidente) Al haber ordenado el Juez de Garantía notificar a la


recurrente de manera personal de conformidad al artículo 40 del Código
de Procedimiento Civil o, según el artículo 44 del mismo texto, la
funcionaria policial a cargo de dicha actuación debió dar estricto
cumplimiento a lo mandatado por el órgano jurisdiccional y a lo
dispuesto en dichos preceptos, esto es, entregándole a la encartada
copia íntegra de la solicitud de audiencia de formalización presentada
por el Ministerio Público así como de la resolución judicial que la
proveyó y, al no haber obrado así, no se configura un emplazamiento
válido, lo que puso en riesgo la libertad personal de la amparada, pues,
como ocurrió en la especie, su inasistencia a la audiencia para la que
fue requerida conllevó que se despachara en su contra una orden de
detención (considerando único de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 22/05/2018, Rol Nº 8781-2018,


Cita online CL/JUR/2403/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 22/05/2018, Rol Nº 8783-2018,

Cita online CL/JUR/2401/2018

2. Nulidad de todo lo obrado por falta de notificación

Pese al estado procesal de la causa, consta del cuaderno incidental


en que se substanció la acción en cuestión, que el tribunal a quo había
dispuesto notificar la referida acción por cédula al demandado, pero
luego deja sin efecto tal forma de notificación y en su lugar la tiene por
notificada por estado diario, por no haber fijado —la demandada
incidental— domicilio dentro del radio urbano del tribunal. De lo anterior
se aprecian dos errores procesales substanciales: Por una parte, dado
que al plantearse la demanda de cobro de honorarios no existía un juicio
pendiente, la acción debía ser notificada al demandado personalmente,
o a lo menos por cédula como en su momento había sido dispuesto. El
segundo error se aprecia en haber entendido que el demandado
incidental debió previamente haber fijado domicilio en el radio urbano
del Tribunal, aun cuando no existía actuación ni emplazamiento alguno
efectuado respecto de dicha parte en lo que concierne a la presente
acción. En consecuencia la demanda de autos, promovida luego de
encontrarse extinto el juicio y también después de haberse agotado los
mandatos judiciales en los términos del artículo 7º inciso 1º del Código
de Procedimiento Civil, no fue notificada al demandado en la forma que
ordena la ley para la primera gestión de un juicio (considerandos 4º a 6º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Puerto Montt, 28/06/2019, Rol Nº 3-2019,

Cita online CL/JUR/3796/2019

Fallo en el mismo sentido:


— Corte de Apelaciones de Concepción, 1/08/2019, Rol Nº 415-2019,

Cita online CL/JUR/4500/2019

ARTÍCULO 41

En los lugares y recintos de libre acceso público, la notificación personal se


podrá efectuar en cualquier día y a cualquier hora, procurando causar la
menor molestia posible al notificado. En los juicios ejecutivos, no podrá
efectuarse el requerimiento de pago en público y, de haberse notificado la
demanda en un lugar o recinto de libre acceso público, se estará a lo
establecido en el Nº 1º del artículo 443.

Además, la notificación podrá hacerse en cualquier día, entre las seis y las
veintidós horas, en la morada o lugar donde pernocta el notificado o en el
lugar donde éste ordinariamente ejerce su industria, profesión o empleo, o en
cualquier recinto privado en que éste se encuentre y al cual se permita el
acceso del ministro de fe.

Si la notificación se realizare en día inhábil, los plazos comenzarán a correr


desde las cero horas del día hábil inmediatamente siguiente, y si se hubiere
practicado fuera de la comuna donde funciona el tribunal, los plazos se
aumentarán en la forma establecida en los artículos 258 y 259.

Igualmente, son lugares hábiles para practicar la notificación el oficio del


secretario, la casa que sirva para despacho del tribunal y la oficina o
despacho del ministro de fe que practique la notificación. Los jueces no
podrán, sin embargo, ser notificados en el local en que desempeñan sus
funciones.13

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 44, 57, 59 y 61. Código Orgánico de
Tribunales: artículos 380 Nº 2, 390. Código del Trabajo: artículo 430. Código Tributario:
artículo 171, Código del Trabajo: artículo 438.

ARTÍCULO 42 (45)

Podrá el tribunal ordenar que se haga la notificación en otros lugares que


los expresados en el artículo anterior, cuando la persona a quien se trate de
notificar no tenga habitación conocida en el lugar en que ha de ser notificada.
Esta circunstancia se acreditará por certificado de un ministro de fe que afirme
haber hecho las indagaciones posibles, de las cuales dejará testimonio
detallado en la respectiva diligencia.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 41, 44, 49, 54, 60, 61 y 427.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. No obsta a la validez de esa notificación, la circunstancia que se haya


practicado en un domicilio cuya numeración actual no corresponde a
la señalada en la demanda

Los ministros del tribunal de alzada recurridos han cometido falta o


abuso, que debe enmendarse por la vía disciplinaria, al acoger el
incidente de nulidad de la notificación de la demanda, bajo el
fundamento que ella adolecería de vicios que le privan de toda eficacia
procesal. En efecto, consta en autos que la demanda fue notificada
personalmente al demandado, como consta de los atestados
respectivos; por consiguiente, no obsta a la validez de esa notificación,
la circunstancia que se haya practicado en un domicilio cuya
numeración actual no corresponde a la señalada en la demanda, tanto
porque no está controvertido el hecho de que aquélla haya sido
efectuada, lo que bastaría para desestimar la incidencia promovida,
cuanto porque el ministro de fe expresamente dejó constancia que el
número actual de la casa habitación del demandado corresponde al que
con anterioridad tenía signado y que fue el que se indicó en la demanda
(considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 3/05/1988, Rol Nº 6990,


Cita online: CL/JUR/856/1988

ARTÍCULO 43 (46)

La notificación se hará constar en el proceso por diligencia que subscribirán


el notificado y el ministro de fe, y si el primero no puede o no quiere firmar, se
dejará testimonio de este hecho en la misma diligencia.

La certificación deberá, además, señalar la fecha, hora y lugar donde se


realizó la notificación y, de haber sido hecha en forma personal, precisar la
manera o el medio con que el ministro de fe comprobó la identidad del
notificado.14
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 39, 45, 59, 60 y 61. Código Penal:
artículo 241. Código Orgánico de Tribunales: artículo 393. Ley Nº 18.287 sobre Procedimiento
ante Juzgados de Policía Local: artículo 18.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Certificado de notificación mal extendido impide el correcto


emplazamiento

El receptor debe indicar en el estampado receptorial el nombre,


domicilio y cédula de identidad de la persona que intervienen en el
trámite o que proporciona la información; lo que en este caso, en forma
evidente, no se cumplió por el Ministro de Fe. Por lo tanto, las
declaraciones de los testigos en tanto indican que el ejecutado tiene un
domicilio diverso a aquel en que se practicó la notificación, llevan a
concluir que existe falta de emplazamiento a la demandada incidentista
toda vez que su único domicilio no es aquel en que se practicó la
notificación —situación avalada por la prueba testimonial y por prueba
documental—. En consecuencia, el demandado no ha sido
debidamente notificado y no ha podido ejercer sus derechos en relación
a la acción impetrada alterándose el principio de bilateralidad de la
audiencia. El perjuicio es evidente solo reparable con la declaración de
nulidad solicita (considerandos 2º a 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 2/02/2018, Rol Nº 10599-2017,

Cita online: CL/JUR/533/2018

ARTÍCULO 44

Si buscada en dos días distintos en su habitación, o en el lugar donde


habitualmente ejerce su industria, profesión o empleo, no es habida la
persona a quien debe notificarse, se acreditará que ella se encuentra en el
lugar del juicio y cuál es su morada o lugar donde ejerce su industria,
profesión o empleo, bastando para comprobar estas circunstancias la debida
certificación del ministro de fe.

Establecidos ambos hechos, el tribunal ordenará que la notificación se


haga entregando las copias a que se refiere el artículo 40 a cualquiera
persona adulta que se encuentre en la morada o en el lugar donde la persona
que se va a notificar ejerce su industria, profesión o empleo. Si nadie hay allí,
o si por cualquiera otra causa no es posible entregar dichas copias a las
personas que se encuentren en esos lugares, se fijará en la puerta un aviso
que dé noticia de la demanda, con especificación exacta de las partes,
materia de la causa, juez que conoce en ella y de las resoluciones que se
notifican.

En caso que la morada o el lugar donde pernocta o el lugar donde


habitualmente ejerce su industria, profesión o empleo, se encuentre en un
edificio o recinto al que no se permite libre acceso, el aviso y las copias se
entregarán al portero o encargado del edificio o recinto, dejándose testimonio
expreso de esta circunstancia.15

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 31, 39, 40, 41, 42, 45, 46, 48, 54, 80,
443, 553 y 818. Código Orgánico de Tribunales: artículos 380 Nº 2 y 390. Código del Trabajo:
artículo 431. Código Tributario: artículo 171. Código de Aguas: artículo 188. Ley Nº 18.287,
sobre Procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículo 8º. Decreto con Fuerza de Ley
Nº 707, 1982, fija texto Ley sobre Cuentas Corrientes Bancarias y Cheques, D.O. 7.10.1982:
artículo 41, Código del Trabajo: artículo 437.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Finalidades del requerimiento de pago. Notificación personal


subsidiaria

El requerimiento de pago, entonces, constituye una actuación de


carácter complejo, en el sentido que en ella se reúnen varias
actuaciones cuya ritualidad dependerá de la forma en que el mismo
tenga lugar o, dicho de otro modo, tendrá un inicio y una conclusión más
o menos definidos, en la medida que se efectúe en una sola actuación
o en un conjunto de ellas. Esta notificación que da punto de partida a la
gestión procesal del requerimiento se puede concretar mediante la
notificación personal de la demanda ejecutiva o la persona subsidiaria,
o incluso de acuerdo a lo prescrito en los artículos 48 a 53 del Código
de Procedimiento Civil, para culminar, seguidamente, con el
requerimiento en propiedad (considerandos 3º y 4º de la sentencia de
casación).

Por consiguiente, notificado el ejecutado de la demanda en su


domicilio ubicado en una comuna distinta de aquélla que sirve de
asiento al tribunal, pero dentro de su territorio jurisdiccional, conforme a
lo prevenido en el artículo 44 del Código de Procedimiento Civil,
dejándosele "cédula de espera" y citándolo para el día siguiente a la
oficina del receptor judicial, ubicada en la comuna que sirve de asiento
al tribunal, a fin de requerirlo de pago, actuación que se llevó a efecto
en la oportunidad fijada, pero en su rebeldía, resulta innegable que el
requerimiento se inició con la notificación de la demanda en el domicilio
del ejecutado y concluyó con el requerimiento de pago propiamente tal,
efectuado posteriormente en la oficina del receptor, lo que trae como
necesaria consecuencia que el demandado tenía, en virtud del
artículo 459 del Código de Procedimiento Civil, ocho días, y no cuatro,
para oponerse a la ejecución (considerando 7º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 20/03/2020, Rol Nº 22096-2019,


Cita online: CL/JUR/22235/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 28/06/2019, Rol Nº 12841-2018,

Cita online CL/JUR/3754/2019

— Corte Suprema, 16/01/2019, Rol Nº 15530-2018,

Cita online CL/JUR/234/2019

— Corte Suprema, 16/10/2018, Rol Nº 12499-2018,

Cita online CL/JUR/5848/2018

— Corte Suprema, 28/06/2018, Rol Nº 4592-2018,

Cita online CL/JUR/3257/2018

— Corte Suprema, 27/06/2018, Rol Nº 2721-2018,

Cita online CL/JUR/3154/2018

— Corte Suprema, 18/06/2018, Rol Nº 3356-2018,

Cita online CL/JUR/2869/2018

2. Domicilio donde se efectúo la notificación no es del demandando.


Incidente de nulidad de todo lo obrado por falta de emplazamiento
Se ha interpuesto incidente de nulidad de todo lo obrado fundado el
incidentista en que la notificación de la demanda ejecutiva de autos —
efectuada de acuerdo al procedimiento establecido en el artículo 44 del
Código de Procedimiento Civil y el requerimiento de pago mediante una
cédula de espera—, se efectuó en el domicilio de sus padres, el cual no
es el suyo, pues hace años que no vive con ellos. El incidentista acreditó
suficientemente que tanto a la fecha en que se realizaron las
búsquedas, como aquella en que se le notificó la demanda de autos,
tenía su domicilio en un lugar diverso. Luego, no cabe duda que la falta
de emplazamiento debido ha irrogado al incidentista un perjuicio que no
es posible de reparar de otra forma que no sea la nulidad, en especial
si se tiene en cuenta que la primera notificación que se realiza al
demandado en el juicio ejecutivo tiene por fin poner en su conocimiento
la demanda ejecutiva, de la resolución recaída en ella y del
mandamiento de ejecución y embargo, procediendo luego a embargarle
bienes suficientes, si aquél no paga en el acto del requerimiento, que
puede ser posterior. Por lo tanto, procede acoger el incidente de nulidad
de todo lo obrado opuesto por el ejecutado (considerandos 1º, 2º, 4º y
5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 24/12/2019, Rol Nº 11744-2019,

Cita online: CL/JUR/11078/2019

3. Demandas judiciales deben ser notificadas al representante legal si


están dirigidas contra una persona jurídica. Incumplimiento del deber
de efectuar notificación de conformidad al artículo 44 del Código de
Procedimiento Civil

La demandada es una persona jurídica, quien para actuar en la vida


jurídica debe necesaria e indispensablemente hacerlo a través de su
representante legal, por cierto una o más personas naturales, debiendo
ser éstas las que deban ser notificadas de las demandas judiciales
dirigidas en contra de ente jurídico y así producirse un válido
emplazamiento, de lo que consecuentemente se deriva que en este
caso resulta ser del todo necesario conocer quién es el representante
de la sociedad demandada, para ser éste avisado de la acción dirigida
en contra de su representada, lo que no se hizo tanto en la parte
administrativa como judicial, ya que ni siquiera se señaló quien era su
mandatario de la sociedad ejecutada, de lo que se tuvo conocimiento
sólo porque el representante de la demandada compareció al Juzgado
ad quo, señalando aquello, como además, acompañando la
correspondiente documentación justificatoria de su mandato. Si bien el
artículo 171 inciso 1º del Código Tributario, dispone que la notificación
del hecho de encontrarse en mora y el requerimiento de pago al deudor,
se efectuará personalmente por el recaudador fiscal, quien actuará
como ministro de fe, agregando aquella disposición que si el ejecutado
no fuere habido (por cierto persona natural), esto se acreditará con la
certificación del funcionario recaudador y se le notificará por cédula en
los términos prevenidos en el artículo 44 del Código de Procedimiento
Civil, no siendo necesario en este caso cumplir con los requisitos
señalados en el inciso primero de dicho artículo, esto es, que aquel se
encuentre en el lugar del juicio, como tampoco será necesaria algún
proveído del Tesorero, para la entrega de las copias. No resulta ser
menos efectivo que aquella notificación debe hacerse de conformidad
al artículo 44 antes indicado, que dispone que la noticia en cuestión
debe verificarse entregando copias a cualquiera persona adulta que se
encuentre en la morada o en el lugar pertinente y, si eso no es posible
se fijara en el puerta un aviso que de noticia de la demanda, con los
datos que en dicha norma se indican, actuaciones de las que no se dejó
constancia en la actuación reclamada, puesto que en esta el ministro de
fe se limitó a completar un formulario sin entregar mayores
antecedentes de sus actuaciones.

Corte de Apelaciones de San Miguel, 21/12/2018, Rol Nº 1497-2017,

Cita online: CL/JUR/7130/2018

ARTÍCULO 45 (48)

La diligencia de notificación, en el caso del artículo precedente, se


extenderá en la forma que determina el artículo 43, siendo obligada a
subscribirla la persona que reciba las copias, si puede hacerlo, dejándose
testimonio de su nombre, edad, profesión y domicilio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 43, 44 y 61.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Certificado de notificación mal extendido impide el correcto
emplazamiento

El receptor debe indicar en el estampado receptorial el nombre,


domicilio y cédula de identidad de la persona que intervienen en el
trámite o que proporciona la información; lo que en este caso, en forma
evidente, no se cumplió por el Ministro de Fe. Por lo tanto, las
declaraciones de los testigos en tanto indican que el ejecutado tiene un
domicilio diverso a aquel en que se practicó la notificación, llevan a
concluir que existe falta de emplazamiento a la demandada incidentista
toda vez que su único domicilio no es aquel en que se practicó la
notificación —situación avalada por la prueba testimonial y por prueba
documental—. En consecuencia, el demandado no ha sido
debidamente notificado y no ha podido ejercer sus derechos en relación
a la acción impetrada alterándose el principio de bilateralidad de la
audiencia. El perjuicio es evidente solo reparable con la declaración de
nulidad solicita (considerandos 2º a 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 2/02/2018, Rol Nº 10599-2017,

Cita online: CL/JUR/533/2018

ARTÍCULO 46 (49)

Cuando la notificación se efectúe en conformidad al artículo 44, el ministro


de fe deberá dar aviso de ella al notificado, dirigiéndole con tal objeto carta
certificada por correo, en el plazo de dos días contado desde la fecha de la
notificación o desde que se reabran las oficinas de correo, si la notificación
se hubiere efectuado en domingo o festivo. La carta podrá consistir en tarjeta
abierta que llevará impreso el nombre y domicilio del receptor y deberá indicar
el tribunal, el número de ingreso de la causa y el nombre de las partes. En el
testimonio de la notificación deberá expresarse, además, el hecho del envío,
la fecha, la oficina de correo donde se hizo y el número de comprobante
emitido por tal oficina. Este comprobante deberá ser agregado al expediente
a continuación del testimonio. La omisión en el envío de la carta no invalidará
la notificación, pero hará responsable al infractor de los daños y perjuicios
que se originen y el tribunal, previa audiencia del afectado, deberá imponerle
alguna de las medidas que se señalan en los números 2, 3 y 4 del artículo 532
del Código Orgánico de Tribunales.16
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 44, 50 y 61. Código Penal:
artículo 193. Código Orgánico de Tribunales: artículo 392. Código de Justicia Militar:
artículo 116.

ARTÍCULO 47 (50)

La forma de notificación de que tratan los artículos precedentes se


empleará siempre que la ley disponga que se notifique a alguna persona para
la validez de ciertos actos, o cuando los tribunales lo ordenen expresamente.

Podrá, además, usarse en todo caso.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40, 44, 48, 52 y 443. Código Civil:
artículo 1902.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Notificación de la cesión de créditos como requisito de validez

El requisito básico para que una cesión de crédito sea oponible al


deudor o, dicho en otras palabras, el momento en que el cesionario se
transforma en legítimo acreedor del deudor, que no es otro que la
notificación de dicha cesión al deudor. Para que dicha notificación sea
válida y, por tanto, oponible al deudor se deben cumplir con los
presupuestos que establece la ley; a saber: la notificación debe ser
realizada a iniciativa del cesionario, ya que el artículo 1902 del Código
Civil lo dispone expresamente; debe exhibirse el título al deudor, tal
como lo indica el artículo 1903 del Código Civil; y, por último, la
notificación debe ser realizada por un Ministro de Fe. Por lo demás, el
artículo 47 del Código de Procedimiento Civil señala que la notificación
personal se empleará siempre que la ley disponga que se notifique a
alguna persona para la validez de ciertos actos, por lo que resulta
indiscutible que la única forma en que podía entenderse que se lograba
acreditar el conocimiento de la cesión por parte del deudor es mediante
su notificación personal, por cuanto sólo desde ese momento el
cesionario se transforma en su legítimo acreedor (considerandos 4º y 5º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valdivia, 2/12/2011, Rol Nº 697-2011,

Cita online: CL/JUR/10198/2011


Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 2/07/2008, Rol Nº 1955-2007,

Cita online: CL/JUR/6788/2008

— Corte Suprema, 30/10/2007, Rol Nº 3183-2006,

Cita online: CL/JUR/6280/2007

2. Notificación de la primera resolución judicial, del oponente


administrativo en el procedimiento de regularización de la pequeña
propiedad raíz

La forma de notificar la primera resolución judicial a las partes y


terceros a quienes afecten sus resultados, no puede entenderse
dispensada por una redacción legal ambigua, por lo que no es admisible
en el presente caso que al oponente todavía administrativo se le
notifique sólo por cédula la primera resolución judicial de autos. Resalta
esta conclusión el artículo 47 del Código de Procedimiento Civil que al
referirse a la notificación personal directa y a la personal subsidiaria de
los artículos precedentes (40 a 46 del mismo Código) establece que ella
se empleará siempre que la ley ordene notificar a alguna persona para
la validez de ciertos actos, o cuando los tribunales lo ordenen
expresamente y en todo caso, pero no refiere a tal efecto la notificación
por cédula que está regulada en los artículos 48, 49, 52, o 56 de dicho
Código. Por último en su artículo 54, se contempla la normativa de la
notificación mediante avisos publicados en diarios, cuando se trate de
personas cuya individualidad o residencia sea difícil de determinar
(considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 29/12/2011, Rol Nº 1072-2011,

Cita online: CL/JUR/10411/2011

ARTÍCULO 48 (51)

Las sentencias definitivas, las resoluciones en que se reciba a prueba la


causa, o se ordene la comparecencia personal de las partes, se notificarán
por medio de cédulas que contengan la copia íntegra de la resolución y los
datos necesarios para su acertada inteligencia.

Estas cédulas se entregarán por un ministro de fe en el domicilio del


notificado, en la forma establecida en el inciso 2º del artículo 44.

Se pondrá en los autos testimonio de la notificación con expresión del día


y lugar, del nombre, edad, profesión y domicilio de la persona a quien se haga
la entrega. El procedimiento que establece este artículo podrá emplearse,
además, en todos los casos que el tribunal expresamente lo ordene.17

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 43, 44, 47, 49, 50, 53, 54, 61, 80, 158,
221, 443, 595, 629, 663 y 920. Código Orgánico de Tribunales: artículo 393. Código del Trabajo:
artículos 297, 434 y 443. Código Tributario: artículos 12, 131 bis. Código de Justicia Militar:
artículo 115. Artículo 12. Ley Nº 17.322, sobre Cobranza Judicial de Imposiciones, Aportes y
Multas de las Instituciones de Previsión: artículo 6º, Código del Trabajo: artículo 440. Ley
Nº 18.287 sobre Procedimiento ante Juzgados de Policía Local: artículos 17, 18.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Omisión de la notificación por cédula de la resolución que desecha la


pretensión contenida en la tercería de posesión

En la especie, el agravio contenido en la apelación del tercerista se


refiere a la causal de casación y a la omisión de la notificación por
cédula conforme al artículo 48 del Código de Procedimiento Civil de la
resolución que desechó la pretensión contenida en la tercería de
posesión. En lo esencial debe tenerse presente que la sentencia dictada
el día 25 de julio de 2018, que resolvió la tercería de posesión,
rechazándola, fue notificada por el estado diario el mismo día, quedando
el proceso en estado de fallo el día 18 de julio de 2018, como
consecuencia de una medida para mejor resolver. Además se concedió
un término especial de prueba que venció el 18 de junio del año recién
pasado, no obstante se citó a las partes para oír sentencia el 20 de junio
de ese año, decretándose la medida para mejor resolver el 25 de junio
de 2018. Conforme la reseña precedente, aparece evidente que no se
dio estricto cumplimiento a los artículos 91 y 432 del Código de
Procedimiento Civil, aumentándose innecesariamente la carga procesal
al incidentista en cuanto lo obligaba a estar permanentemente revisando
el estado diario, lo que afecta al debido proceso y causa un perjuicio
reparable solo con la nulidad, de manera que procede revocar la
sentencia, disponiendo la nulidad de la notificación y en virtud del
artículo 55 del Código referido, deberá entenderse notificado por el solo
ministerio de la ley el tercerista, a partir de la notificación del respectivo
cúmplase (considerandos 3º a 5º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Antofagasta, 27/06/2019, Rol Nº 140-2019,

Cita online: CL/JUR/5569/2019

2. Improcedencia de notificar citación a absolver posiciones mediante


estado diario

La parte demandante solicitó, en el término probatorio, se citara a


absolver posiciones a la contraria, fijando al efecto la audiencia de rigor
para lo cual dispuso que dicha resolución se notificara por cédula a su
apoderado a fin de que lo haga comparecer a la señalada audiencia.
Sin embargo, desconoce el Tribunal que el apoderado que representa
al demandado carece de domicilio en la causa, por cuanto el mismo
Tribunal hizo efectivo el apercibimiento previsto en el artículo 53 del
Código de Procedimiento Civil, disponiendo que las resoluciones
señaladas en el artículo 48 del señalado texto legal, deben ser
notificada por el estado diario. Mantener dicha situación importa dejar a
una de las partes en la indefensión y desconocer a su vez la regla del
artículo 388 del Código de Procedimiento Civil, en cuanto dispone que
el Tribunal "mandará a citar para día y hora determinados al litigante
que ha de prestar la declaración", lo que necesariamente debe
vincularse con la regla del artículo 48 inciso 1º del citado texto legal,
pues se trata de la comparecencia personal de la parte, diligencia que
no podría llevarse a efecto de insistir en notificar al absolvente a través
de su apoderado, que no registra domicilio conocido en el territorio
jurisdiccional del Tribunal. Por lo tanto, y a fin de evitar perjuicios a la
parte demandante, a quien le asiste el derecho de comparecer a una
diligencia de prueba sobre hechos personales, corresponde corregir de
oficio el procedimiento (considerandos 2º a 4º de la anulación de oficio).

Corte de Apelaciones de Santiago, 5/02/2019, Rol Nº 8217-2018,

Cita online: CL/JUR/622/2019

ARTÍCULO 49 (52)
Para los efectos del artículo anterior, todo litigante deberá, en su primera
gestión judicial, designar un domicilio conocido dentro de los límites urbanos
del lugar en que funcione el tribunal respectivo, y esta designación se
considerará subsistente mientras no haga otra la parte interesada, aun
cuando de hecho cambie su morada.

En los juicios seguidos ante los tribunales inferiores el domicilio deberá


fijarse en un lugar conocido dentro de la jurisdicción del tribunal
correspondiente, pero si el lugar designado se halla a considerable distancia
de aquel en que funciona el juzgado, podrá éste ordenar, sin más trámites y
sin ulterior recurso, que se designe otro dentro de límites más próximos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 41, 42, 44, 48, 50, 53, 254 inciso 2º,
309 y 443. Código Procesal Penal: artículos 26 y 27. Código Tributario: artículo 131 bis.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Obligación de todo litigante de designar un domicilio conocido dentro


del radio urbano del tribunal para facilitar la notificación por cédula

El tratadista Sergio Rodríguez Garcés razona en el sentido que la


finalidad de la exigencia contemplada en el artículo 49 del Código de
Procedimiento Civil, en cuanto ordena que todo litigante deberá
designar un domicilio conocido dentro del radio urbano del tribunal, es
precisamente para "facilitar la notificación por cédula, en consideración
a las distancias, dispendio de tiempo y gastos que ello irrogaría, la ley
impone a las partes la carga procesal de designar en autos, el domicilio
en que deberá practicársela" (Derecho Procesal Funcional. Proceso
Judicial y Disposiciones Comunes a todo Procedimiento. Tomo I, página
542). En igual sentido razona el autor Mario Casarino Viterbo, al afirmar
que "La práctica de la notificación por cédula, como hemos visto, supone
la entrega de una cédula en el domicilio del notificado. La ley vela, en
consecuencia, porque este domicilio se encuentre debidamente
indicado en autos y, además, porque se halle ubicado en un lugar que
facilite la diligencia" (Manual de Derecho Procesal Civil (Derecho
Procesal Civil) Tomo III Sexta edición, página 114, Editorial Jurídica de
Chile). Como puede apreciarse, la finalidad del legislador con el
establecimiento de los artículos 49 y 53 del Código de Procedimiento
Civil, fue obtener una expedita y rápida sustanciación de los juicios, lo
que sería burlado por un demandado que, a propósito o por olvido, no
designa domicilio procesal dentro de los límites urbanos del tribunal en
el cual se sigue el proceso, al cual entonces, por decisión judicial,
debería notificársele en forma personal aquellas resoluciones que, por
celeridad procesal, debieron notificársele por cédula (considerandos 5º
y 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 9/08/2019, Rol Nº 1463-2019,

Cita online CL/JUR/4584/2019

2. Notificación por el estado diario de la resolución que recibe la causa


a prueba por no haberse fijado domicilio dentro de los límites urbanos
del lugar en que funciona el tribunal

El ejecutado, recurrente de casación, justifica la invalidación formal en


que de los antecedentes del proceso se desprende que con fecha
29.05.2017 el juzgado de primera instancia ordenó que todas las
resoluciones fueran notificadas al ejecutado por el estado diario,
mientras no fijare un domicilio dentro de los límites urbanos del lugar en
que funciona el tribunal; que el auto de prueba fue dictado el 31 de mayo
del mismo año, y que recién el día 3 de junio, tal como reconoce el
recurrente en su arbitrio, fijó el domicilio exigido por el artículo 49 del
Código de Procedimiento Civil. De ello queda en evidencia que, al
momento de la dictación de la resolución que recibió la causa a prueba,
quien recurre no había cumplido con la carga procesal de designar un
domicilio útil para efecto de notificaciones, de modo que el supuesto
defecto denunciado no es tal, ni se condice con los vicios que el
legislador ha pretendido remediar al estatuir la causal de invalidación
que esgrime, más aún si se considera que el artículo 53 inciso 2º del
Código de Procedimiento Civil dispone que la notificación por el estado
diario en los supuestos mencionados en su inciso primero —situación
en que se encontraba el ejecutado— opera sin necesidad de petición
de parte y sin previa orden del tribunal. Por ende, el mérito de autos
demuestra que el ejecutado fue válidamente emplazado del auto de
prueba el mismo día en que éste fue pronunciado (considerando 3º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/01/2018, Rol Nº 45015-2017,


Cita online CL/JUR/483/2018

ARTÍCULO 50
Las resoluciones no comprendidas en los artículos precedentes se
entenderán notificadas a las partes desde que se incluyan en un estado que
deberá formarse electrónicamente, el que estará disponible diariamente en la
página web del Poder Judicial con las indicaciones que el inciso siguiente
expresa.

Se encabezará el estado con la fecha del día en que se forme y se


mencionarán por el número de orden que les corresponda en el rol general,
expresado en cifras y en letras y, además, por los apellidos del demandante
y del demandado o de los primeros que figuren con dicho carácter si son
varios, todas las causas en que se haya dictado resolución en aquel día y el
número de resoluciones dictadas en cada una de ellas.

Estos estados se mantendrán en la página web del Poder Judicial durante


al menos tres días en una forma que impida hacer alteraciones en ellos. De
las notificaciones realizadas en conformidad a este artículo se dejará
constancia en la carpeta electrónica el mismo día en que se publique el
estado.

La notificación efectuada conforme a este artículo será nula en caso que


no sea posible la visualización de la resolución referida en el estado diario por
problemas técnicos del sistema de tramitación electrónica del Poder Judicial,
lo que podrá declararse de oficio o a petición de parte.18

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40, 46, 49, 51, 52 y 61. Código
Procesal Penal: artículo 30. Código Orgánico de Tribunales: artículos 379 y 380 Nº 2. Código
del Trabajo: artículo 435, Código del Trabajo: artículo 441. Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de
Familia: artículo 23. Código Tributario: artículo 131 bis. Auto Acordado para la aplicación de la
Ley Nº 20.886, artículos 8º y 10.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Principio de publicidad. Notificación por estado diario. Resoluciones


judiciales sólo producen efecto en virtud de notificación hecha con
arreglo a la ley. Nulidad de la notificación por estado diario cuya
visualización no es posible

La quejosa argumenta que la notificación por el estado diario de la


sentencia definitiva no tuvo el efecto de emplazar válidamente a sus
representados, pues no era posible visualizar el texto de la
resolución en la página web del Poder Judicial al momento de su
inclusión en el estado diario del 12 de octubre de 2018, por lo que tal
notificación es nula, en virtud de lo dispuesto en el inciso final del
artículo 50 del Código de Procedimiento Civil y sólo se pudo tener por
noticiada a la parte ejecutada a partir del día 25 de octubre de 2018,
ocasión en que la compareciente se notificó personalmente del fallo y,
por consiguiente, estima que la apelación fue interpuesta dentro del
plazo previsto por la ley. Tales consideraciones fueron hechas valer
ante la Corte de Apelaciones al momento de hacerse parte en dicha
instancia y reiteradas al interponer la reposición, acompañando copias
de impresión de pantalla del portal de consulta de causas del Poder
Judicial en las que el texto de la sentencia definitiva no figura con su
archivo PDF, apareciendo en su lugar un ícono de invalidación. De
acuerdo a lo previsto en el artículo 38 del Código de Procedimiento Civil,
las resoluciones judiciales sólo producen efecto en virtud de notificación
hecha con arreglo a la ley; en palabras del autor Mario Casarino Viterbo,
para que una resolución produzca todos los efectos legales que le son
propios es necesario que la resolución judicial haya sido notificada, y
que tal notificación haya sido practicada conforme a la ley, requisitos
que son copulativos, por lo que basta que falte uno de ellos para que la
resolución judicial de que se trate no produzca los efectos legales
deseados. Por otra parte, el artículo 50 del referido compendio
normativo, al regular la notificación por el estado diario, establece en su
inciso final que "La notificación efectuada conforme a este artículo será
nula en caso que no sea posible la visualización de la resolución referida
en el estado diario por problemas técnicos del sistema de tramitación
electrónica del Poder Judicial, lo que podrá declararse de oficio o a
petición de parte." Del análisis de las normas antes citadas se advierte
que, para que la notificación por el estado diario produzca sus efectos,
la resolución que se comunica debe ser visible a través del sistema de
tramitación electrónica, lo que es plenamente concordante con el
principio de equivalencia funcional del soporte electrónico e implica una
concreción del principio de publicidad, que prescribe que los sistemas
informáticos de registro de los procedimientos judiciales deben
garantizar el pleno acceso a la carpeta electrónica. Tal como se ha
venido razonando, al no poder ser visualizado el texto de la sentencia
definitiva pronunciada en los autos Rol Nº 996-2018 del Primer Juzgado
de Letras de San Antonio, la notificación por el estado diario no ha
podido surtir los efectos que le son propios, al no haber sido practicada
en conformidad a la ley, y debe tenerse por válida la notificación
personal de la recurrente efectuada el 25 de octubre de 2018
(considerandos 6º a 8º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 13/05/2019, Rol Nº 1543-2019,
Cita online: CL/JUR/3178/2019

ARTÍCULO 51 (54)

Para los efectos del artículo precedente, a todo proceso que se inicie se
asignará un número de orden en la primera resolución que se dicte y con él
figurará en el rol del tribunal, hasta su terminación.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 50 y 163.

ARTÍCULO 52 (55)

Si transcurren seis meses sin que se dicte resolución alguna en el proceso,


no se considerarán como notificaciones válidas las anotaciones en el estado
diario mientras no se haga una nueva notificación personalmente o por
cédula.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40, 48, 50, 54, 152 y 221.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Notificación conforme al artículo 52 del CPC no altera la


sustanciación del juicio ni ordena algún trámite no contemplado en la
ley

El tribunal archivó los autos por haber transcurrido más de seis meses
sin movimiento, resolución que no fue impugnada en esa oportunidad,
por lo que si a ese período se adiciona el tiempo en que el expediente
permaneció archivado, se dan los supuestos para la procedencia del
artículo 52 del Código de Procedimiento Civil, que dispone que "Si
transcurren seis meses sin que se dicte resolución alguna en el proceso,
no se considerarán como notificaciones válidas las anotaciones en el
estado diario mientras no se haga una nueva notificación personalmente
o por cédula", y conforme a ello, la resolución que ordena notificar a la
parte contraria de acuerdo a ese artículo, no altera la sustanciación del
juicio ni ordena algún trámite no contemplado en la ley, por lo que tal
decreto, providencia o proveído es inapelable dada su naturaleza
jurídica y conforme lo prescribe el artículo 188 del Código de
Procedimiento Civil (considerando 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 26/01/2018, Rol Nº 11688-2017,

Cita online: CL/JUR/415/2018

ARTÍCULO 53 (56)

La forma de notificación de que trata el artículo 50 se hará extensiva a las


resoluciones comprendidas en el artículo 48, respecto de las partes que no
hayan hecho la designación a que se refiere el artículo 49 y mientras ésta no
se haga.

Esta notificación se hará sin necesidad de petición de parte y sin previa


orden del tribunal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 48, 49, 254, 309, 443 y 629. Código
Tributario: artículo 131 bis.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procedencia de aplicar sanción contemplada en el art. 53 del Código


de Procedimiento Civil al demandado rebelde que no ha designado
domicilio

La Corte de Apelaciones estima, que la sanción contemplada en el


artículo 53 del Código de Procedimiento Civil es procedente aplicarla al
demandado rebelde que no ha designado domicilio conocido en el
proceso dentro de los límites urbanos del tribunal que conoce de la
causa, aun cuando este litigante no haya hecho gestión judicial alguna
en la causa debido —precisamente— a que no ha comparecido al juicio
a defenderse. En efecto, al permanecer inactivo el demandado
subsidiario, ha permitido la continuación del pleito sin su presencia,
asumiendo los riesgos que conlleva su silencio, pues ha
desaprovechado la oportunidad procesal que la ley le otorga; ha
descuidado el cumplimiento de una carga que pesaba sobre él por el
sólo hecho de ser emplazado en el pleito, que lo hace pasible de la
sanción prevista en el artículo 53 del Código de Procedimiento Civil. Si
así no fuese, se estaría dejando al rebelde en mejor situación jurídica
que aquel que habiendo comparecido al juicio omite hacer la
designación prevista en el artículo 49, sea por negligencia u otra causa
cualquiera, lo que impondría una carga inaceptable para el demandante,
esto es, obligarle a notificar al rebelde, pese a su inactividad, todas las
resoluciones que menciona el artículo 48, igualmente, en forma
personal o por cédula y en un domicilio que éstos ni siquiera han
designado (considerando final de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 11/01/2019, Rol Nº 1918-2018,

Cita online: CL/JUR/223/2019

2. Resoluciones judiciales se notifican al litigante rebelde por el estado


diario

En la especie, no se comparte la decisión de la jueza del tribunal a


quo, en orden a que las resoluciones judiciales no se notifican al litigante
rebelde por el estado diario sino por cédula, pues conforme al claro
tenor del artículo 53 del Código de Procedimiento Civil, procede notificar
por el estado diario al rebelde, criterio interpretativo éste que no viola el
principio de contradicción, ya que éste no supone necesariamente la
presencia de las partes, sino tan sólo que se les haya brindado la
oportunidad de intervenir, lo cual queda satisfecho con el
emplazamiento practicado en esta causa al demandante y al
demandado (mencionado) según dan cuenta las certificaciones
respectivas del ministro de fe (considerando 3º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones.

Corte de Apelaciones de Concepción, 10/08/2018, Rol Nº 1190-2018,

Cita online: CL/JUR/4324/2018

ARTÍCULO 54 (57)

Cuando haya de notificarse personalmente o por cédula a personas cuya


individualidad o residencia sea difícil determinar, o que por su número
dificulten considerablemente la práctica de la diligencia, podrá hacerse la
notificación por medio de avisos publicados en los diarios o periódicos del
lugar donde se sigue la causa, o de la cabecera de la provincia o de la capital
de la región, si allí no los hay. Dichos avisos contendrán los mismos datos
que se exigen para la notificación personal; pero si la publicación en esta
forma es muy dispendiosa, atendida la cuantía del negocio, podrá disponer el
tribunal que se haga en extracto redactado por el secretario.19

Para autorizar esta forma de notificación, y para determinar los diarios en


que haya de hacerse la publicación y el número de veces que deba repetirse,
el cual no podrá bajar de tres, procederá el tribunal con conocimiento de
causa.20

Cuando la notificación hecha por este medio sea la primera de una gestión
judicial, será necesario, además, para su validez, que se inserte el aviso en
los números del "Diario Oficial" correspondientes a los días primero o quince
de cualquier mes, o al día siguiente, si no se ha publicado en las fechas
indicadas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40, 42, 48, 221, 689, 860, 903 y 919.
Código Aeronáutico: artículo 118, Código del Trabajo: artículo 439. Código Tributario:
artículo 15.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procede acoger solicitud de notificación personal por avisos. Tribunal


para ordenarla debe proceder con conocimiento de causa

La doctrina y jurisprudencia afianzada señala que para la procedencia


de la notificación por avisos a personas cuya individualización es difícil
de determinar "requiere una resolución judicial previa que la decrete"
(Mario Casarino, "Manual de Derecho procesal", Tomo III, página 204)
y el tribunal para ordenarla tendrá que proceder con conocimiento de
causa y, este conocimiento implica cerciorarse de que efectivamente
concurren los requisitos legales para acceder a la notificación por
avisos. La sola circunstancia de que la demanda sea deducida en contra
de personas indeterminadas o cuya residencia sea difícil de precisar, no
obliga al tribunal a ordenar la notificación por avisos, ya que si bien ésta
sustituye la notificación personal, no debe olvidarse que la notificación
es un "acto de conocimiento" como lo señala la doctrina española, y ese
conocimiento resulta particularmente frágil en la notificación por avisos.
De allí, que razonablemente se debe exigir una cierta certidumbre de su
procedencia y ello explica la exigencia del "conocimiento por parte del
tribunal" lo que en la especie se dio, ya que en autos existen
certificaciones de receptor judicial que acreditan las diferentes
búsquedas efectuadas, sin éxito y, sin perjuicio de ello, la jueza suplente
de la causa accedió parcialmente a la petición del actor en cuanto a
ordenar el envío de oficios a reparticiones públicas con el fin de obtener
el domicilio de la parte demandada y así tener el "conocimiento de
causa". En la especie, si bien una de las formas de obtener el
"conocimiento de causa" es a través de la información de sumaria de
testigos, que es la exigencia planteada por la jueza suplente de primer
grado, resulta ser esta una diligencia difícil de cumplir en la especie,
pues resulta evidente que el ejecutante no tiene contacto con la parte
ejecutada por lo que razonablemente puede entenderse que tampoco
tenga conocimiento de personas allegadas a esta última que puedan ir
a testificar, de manera que de insistirse en esta exigencia pudiera tornar
ilusorio el notificar a la demandada (considerandos 3º y 6º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 5/09/2019, Rol Nº 1716-2019,

Cita online: CL/JUR/5100/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Concepción, 5/09/2019, Rol Nº 1702-


2019,

Cita online CL/JUR/5101/2019

ARTÍCULO 55 (58)

Aunque no se haya verificado notificación alguna o se haya efectuado en


otra forma que la legal, se tendrá por notificada una resolución desde que la
parte a quien afecte haga en el juicio cualquiera gestión que suponga
conocimiento de dicha resolución, sin haber antes reclamado la falta o nulidad
de la notificación.

Asimismo, la parte que solicitó la nulidad de una notificación, por el solo


ministerio de la ley, se tendrá por notificada de la resolución cuya notificación
fue declarada nula, desde que se le notifique la sentencia que declara tal
nulidad. En caso que la nulidad de la notificación haya sido declarada por un
tribunal superior, esta notificación se tendrá por efectuada al notificársele el
"cúmplase" de dicha resolución.21

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 38, 65, 80, 84, 174 y 773.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Incumplimiento de los requisitos de procedencia de la notificación


tácita

La solicitud de giro de cheque por parte del expropiado da cuenta que


tomó conocimiento de la primera gestión que se realizó en el proceso,
así como de la resolución recaída en ella, esto es de la consignación
por parte de la expropiante, así como del hecho que instó por la toma
de posesión, puesto que ambas peticiones se efectúan conjuntamente,
de manera que resulta imposible conocer una y desconocer la otra. Por
otra parte, la autorización para la toma de posesión se solicitó y decretó
posteriormente, sin que la solicitud de giró de cheque de cuenta, ni
siquiera tangencialmente, del hecho de haber tenido conocimiento de
esta última resolución. Tal conocimiento tampoco se puede deducir del
hecho de haber sabido que se instó por la toma de posesión, pues
ambas pretensiones tienen objetos y producen efectos totalmente
diversos de conformidad al Decreto Ley Nº 2.186 de 1978. En
consecuencia, teniendo presente que del escrito en que se requiere el
giro del cheque, no se hace referencia alguna ya sea directa o indirecta
que pueda suponer el conocimiento de haberse dispuesto la
autorización para la toma de posesión, sólo cabe concluir que no se
cumplen los parámetros exigidos por el inciso primero del artículo 55 del
Código de Procedimiento Civil, no procede tener a la expropiada como
tácitamente notificada de la toma de posesión. Sin perjuicio de lo
anterior, en la especie, aún en el evento de entender que existe una
notificación tácita, con posterioridad a ella transcurrió en el proceso más
de seis meses de inactividad, de modo que la toma de posesión
tampoco habría podido llevarse a efecto sin previa notificación personal
o por cédula de expropiado que ya había sido considerado parte en el
proceso (considerandos 5º a 8º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 27/09/2019, Rol Nº 1176-2019,

Cita online: CL/JUR/5540/2019

2. Ejecutado al oponer excepciones genera la notificación tácita de la


demanda
En el presente caso, no consta el atestado receptorial que permita
asentar la fecha de la notificación de la demanda. Sin embargo, consta
que la ejecutada presentó por escrito su oposición interponiendo
excepciones. Justamente, la falta de certeza respecto de la fecha de la
notificación motiva a que el tribunal señale que "resolverá" a la solicitud
de oposición de excepciones una vez que consten los estampados
receptoriales, los que nunca fueron acompañados. Es así que, aun
cuando no se hubiere realizado la notificación conforme con el
artículo 44 del Código de Procedimiento Civil, resulta aplicable lo
establecido en el artículo 55 del referido código, que dispone la
notificación tácita: "Aunque no se haya verificado notificación alguna o
se haya efectuado en otra forma que la legal, se tendrá por notificada
una resolución desde que la parte a quien afecte haga en el juicio
cualquiera gestión que suponga conocimiento de dicha resolución, sin
haber antes reclamado la falta o nulidad de la notificación". En
consecuencia, más allá de que efectivamente el tribunal no proveyó el
traslado de las excepciones, lo cierto es que la Corte no puede
abstraerse de la circunstancia antes mencionada, esto es, que el
ejecutado las opuso, generándose la notificación de la demanda
(considerando 10º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 7/03/2018, Rol Nº 34602-2017,


Cita online: CL/JUR/1130/2018

3. Requerimiento de pago efectuado fictamente al notificar por estado


electrónico resolución que ordenó requerir de pago al ejecutado

El artículo 55 inciso 2º del Código dispone que la parte que solicitó la


nulidad de una notificación, se tendrá por notificada de la resolución
cuya nulidad solicitó, por el sólo ministerio de la ley, desde que se le
notifique la sentencia que declaró dicha nulidad, lo que, en este caso,
ocurrió el 28 de julio de 2016. Si bien es cierto que la resolución
anulatoria ordenó, además, que fuese requerido de pago
personalmente, ello solamente importó el cumplimiento de lo
establecido en el artículo 443 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil,
que ordena que el requerimiento de pago, se practique en forma
personal, establecido lo cual, debe tenerse en cuenta que según lo
dispuesto en el artículo 53 inciso 2º del mismo Código, la notificación
que se practique por el estado diario, respecto de las partes que no
hayan designado domicilio dentro del radio urbano del Tribunal, se hará
sin necesidad de petición de parte y sin previa orden del tribunal. En
otros términos, procede por el sólo ministerio de la ley. Por lo anterior,
la circunstancia que la resolución que proveyó el incidente de nulidad,
acogiéndolo, diera por notificado al ejecutado de la demanda ejecutiva
en ese acto y ordenara requerirlo de pago en forma personal, no
constituye un impedimento para tener a ese ejecutado, por requerido de
pago, una vez notificado por el estado diario electrónico dicha
resolución, porque, como se ha recordado, por el sólo ministerio de la
ley, operó en la especie, la sanción contemplada en el artículo 53 citado.
Habiéndose, por consiguiente, realizado el requerimiento de pago
respectivo, y no habiéndose opuesto excepciones a la ejecución,
corresponde dar aplicación a lo dispuesto en el artículo 472 del Código,
y resolver el punto conforme lo determina el artículo 153 del estatuto
citado, contándose, para declarar el abandono del procedimiento, el
plazo de tres años desde la fecha de la última gestión útil hecha en el
cuaderno de apremio, actividad que, habiéndose anulado todo lo
obrado, constituye precisamente el requerimiento de pago efectuado,
fictamente con motivo de la notificación, por el estado electrónico, por
el solo ministerio de la ley, de la resolución que ordenó requerir de pago
al ejecutado. Resultando evidente que entre la resolución que recayó
sobre la última gestión útil, el requerimiento practicado el 28 de julio de
2016 y la solicitud de abandono, de 31 de agosto de 2017, no transcurrió
el lapso de tres años exigido por la ley, corresponde que el incidente de
abandono del procedimiento formulado por la parte ejecutada sea
rechazado (considerandos 7º a 9º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones, 7/06/2018, Rol Nº 11653-2017,


Cita online: CL/JUR/2809/2018

4. Notificación tácita en aquellos casos en que se ha acogido un


incidente de nulidad de la notificación

El artículo 55 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil —que


constituye una expresión del principio de economía procesal— regula la
notificación tácita o presunta en aquellos casos en que se ha acogido
un incidente de nulidad de la notificación, supuesto acotado en el que el
promotor de la incidencia se entiende emplazado de la resolución cuya
notificación fue declarada nula desde que se le comunique la sentencia
que declara tal nulidad, que es precisamente lo que sucedió en la
especie. En consecuencia, razonan acertadamente los juzgadores al
declarar que no se opusieron excepciones a la ejecución, pues tal como
consta de los antecedentes del proceso, el incidente de nulidad procesal
fue acogido, se certificó la ejecutoria de tal resolución —a petición del
propio ejecutado— y a la fecha en que el demandante solicitó se
certificara el vencimiento del término para oponer excepciones, el
ejecutado no las había deducido encontrándose latamente vencido el
plazo para ello (considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 2/10/2018, Rol Nº 12651-2018,


Cita online: CL/JUR/5462/2018

ARTÍCULO 56 (59)

Las notificaciones que se hagan a terceros que no sean parte en el juicio,


o a quienes no afecten sus resultados, se harán personalmente o por cédula.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 21, 22, 23, 24, 40, 48 y 380.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Perito es ajeno al juicio, por lo tanto, debe ser notificado


personalmente o por cédula

Las partes reconocen que el apremio citado se notificó al perito


solamente por el estado diario, notificación que es inhábil para el efecto,
toda vez que el experto es un tercero al juicio y como tal debe ser
notificado personalmente o por cédula como lo prescribe el artículo 56
del Código de Procedimiento Civil, y como según el artículo 38 del
mismo Código las resoluciones judiciales sólo producen efecto en virtud
de la notificación hecha con arreglo a la ley, debe concluirse que la
resolución que disponía el apremio no produjo efecto, lo que determina
que las gestiones que la manifestante hizo sobre el particular no fueron
útiles y no tuvieron el mérito necesario para interrumpir el plazo de tres
meses a que se refiere el artículo 70 del Código de Minería
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/09/1992, Rol Nº 4757,


Cita online: CL/JUR/877/1992
ARTÍCULO 57

Las diligencias de notificación que se agreguen a la carpeta electrónica, no


contendrán declaración alguna del notificado, salvo que la resolución ordene
o, por su naturaleza, requiera esa declaración.22

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 39, 43, 61, 189, 417, 427, 447 y 448.
Código del Trabajo: artículo 442.

ARTÍCULO 58 (61)

Las funciones que en este título se encomiendan a los secretarios de


tribunales, podrán ser desempeñadas bajo la responsabilidad de éstos, por
el oficial primero de la secretaría.

En aquellos lugares en que no exista receptor judicial, la notificación podrá


ser hecha por el Notario Público u Oficial del Registro Civil que exista en la
localidad. En todo caso, el juez siempre podrá designar como ministro de fe
ad hoc a un empleado del tribunal, para el solo efecto de practicar la
notificación.23

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 70. Código Orgánico de Tribunales:


artículos 379, 380, 388, 389 y 399. Código del Trabajo: artículo 430. Código de Justicia Militar:
artículo 114. Ley Nº 17.322, sobre Cobranza Judicial de Imposiciones, Aportes y Multas de las
Instituciones de Previsión: artículo 6º. Ley Nº 18.287, sobre Procedimientos ante Juzgados de
Policía Local: artículo 8º. Ley Nº 19.253, sobre Protección, Fomento y Desarrollo de los
Indígenas: artículo 56.

TÍTULO VII DE LAS ACTUACIONES JUDICIALES

ARTÍCULO 59 (62)

Las actuaciones judiciales deben practicarse en días y horas hábiles.

Son días hábiles los no feriados. Son horas hábiles las que median entre
las ocho y las veinte horas.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 42, 44, 60, 66 y 189. Código Procesal
Penal: artículo 14. Código Orgánico de Tribunales: artículo 313. Código del Trabajo:
artículo 427. Código Tributario: artículos 10 y 131. Código de Justicia Militar: artículo 110. Ley
Nº 2.977, sobre Días Feriados. Ley Nº 18.287 sobre Procedimiento ante Juzgados de Policía
Local: artículo 27.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cobranza extrajudicial a través de llamados telefónicos practicada en


días y horas hábiles

En relación a la presunta ilegalidad se debe considerar que la


Ley 19.496, denominada "De Protección a los Derechos de los
Consumidores", se refiere en su artículo 37 a la cobranza extrajudicial
en los siguientes términos: "Las actuaciones de cobranza extrajudicial
no podrán considerar el envío al consumidor de documentos que
aparenten ser escritos judiciales; comunicaciones a terceros ajenos a la
obligación en las que se dé cuenta de la morosidad; visitas o llamados
telefónicos a la morada del deudor durante días y horas que no sean los
que declara hábiles el artículo 59 del Código de Procedimiento Civil, y,
en general, conductas que afecten la privacidad del hogar, la
convivencia normal de sus miembros ni la situación laboral del deudor."
A la luz de la norma transcrita se puede apreciar que la denominada
cobranza extrajudicial, es una gestión de cobro lícita a menos que el
acreedor que hace uso de ese sistema de cobro infrinja alguna de las
prohibiciones que la misma ley señal. De esta manera, si la regla
general es que la cobranza extrajudicial sea plenamente válida, quién
alegue su ilegalidad deberá demostrar que en el caso concreto, quien
está realizando dicha gestión, ha ejecutado conductas prohibidas por la
ley, lo que no ocurre en el caso de autos pues no existe prueba alguna
al respecto (considerandos 7º a 9º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 6/04/2018, Rol Nº 18085-2018,

Cita online: CL/JUR/6053/2018

2. Existencia de defectos procesales que afectan la correcta tramitación


del juicio

Los hechos del proceso revelan que en la causa se ha incurrido en


defectos procesales que afectan la correcta tramitación del juicio. En
cuanto a la oportunidad para efectuar el requerimiento de pago al
ejecutado cuando este ha sido previamente notificado conforme al
artículo 44 del código citado, tratándose de una diligencia judicial que
se practicó separadamente de la notificación, ha debido realizarse en
día hábil y no como ocurrió en la especie en que se hizo un domingo,
día que es inhábil, lo que transgrede el artículo 59 del Código de
Procedimiento Civil. Dichos defectos alteran la substanciación regular
del juicio y por lo mismo deben ser subsanados para la correcta
tramitación del proceso, razón por la cual la Corte hará uso de la facultad
oficiosa que a este efecto le otorga el inciso final del artículo 84 del
Código de Procedimiento Civil, invalidando todo lo obrado
(considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 25/11/2019, Rol Nº 1408-2019,

Cita online: CL/JUR/11906/2019

ARTÍCULO 60 (63)

Pueden los tribunales, a solicitud de parte, habilitar para la práctica de


actuaciones judiciales días u horas inhábiles, cuando haya causa urgente que
lo exija.

Se estimarán urgentes para este caso, las actuaciones cuya dilación pueda
causar grave perjuicio a los interesados, o a la buena administración de
justicia, o hacer ilusoria una providencia judicial.

El tribunal apreciará la urgencia de la causa y resolverá sin ulterior recurso.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 16, 42, 44, 59, 66 y 590. Código
Procesal Penal: artículos 207 y 208. Código Tributario: artículos 10 y 131.

ARTÍCULO 61 (64)

De toda actuación deberá dejarse testimonio fidedigno en la carpeta


electrónica, con expresión del lugar, día, mes y año en que se verifique, de
las formalidades con que se haya procedido, y de las demás indicaciones que
la ley o el tribunal dispongan.24
A continuación y previa lectura, firmarán todas las personas que hayan
intervenido; y si alguna no sabe o se niega a hacerlo, se expresará esta
circunstancia. El acta correspondiente se digitalizará e incorporará a la
carpeta electrónica inmediatamente.25

La autorización del funcionario a quien corresponda dar fe o certificado del


acto es esencial para la validez de la actuación en todos aquellos casos en
que una ley expresamente lo disponga.26

En los casos de contarse con los recursos técnicos necesarios, podrán


registrarse las audiencias en que participe el tribunal mediante audio digital,
video u otro soporte tecnológico equivalente, el que se agregará a la carpeta
electrónica inmediatamente.27

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 39, 42, 43, 45, 48, 50, 57, 427, 370,
560, 649, 859 y 888. Código Orgánico de Tribunales: artículo 390. Código Procesal Penal:
artículos 39 a 44 y 97. Código del Trabajo: artículo 425. Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de
Familia: artículo 10.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Requisitos de la sentencia definitiva

Resulta pertinente recordar que el legislador se ha preocupado de


establecer las formalidades a que deben sujetarse las sentencias
definitivas de primera o única instancia y las de segunda que modifiquen
o revoquen en su parte dispositiva las de otros tribunales, las que
además de satisfacer los requisitos exigibles a toda resolución judicial,
conforme a lo prescrito en los artículos 61 y 169 del Código de
Procedimiento Civil, deben contener las enunciaciones contempladas
en el artículo 170 del mismo cuerpo normativo, entre las que figuran en
su numeral 4º "Las consideraciones de hecho o de derecho que sirven
de fundamento a la sentencia" (considerando 5º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 19/06/2020, Rol Nº 31895-2019, Cita online:


CL/JUR/41961/2020

Fallos en el mismo sentido.

— Corte Suprema, 12/02/2020, Rol Nº 14162-2019,

Cita online CL/JUR/10108/2020


— Corte Suprema, 12/02/2020, Rol Nº 12990-2019,

Cita online CL/JUR/10109/2020

ARTÍCULO 62 (65)

Siempre que en una actuación haya de tomarse juramento a alguno de los


concurrentes, se le interrogará por el funcionario autorizante al tenor de la
siguiente fórmula: "¿Juráis por Dios decir verdad acerca de lo que se os va a
preguntar?", o bien, "¿Juráis por Dios desempeñar fielmente el cargo que se
os confía?", según sea la naturaleza de la actuación. El interrogado deberá
responder: "Sí juro".

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 57, 58, 363, 385, 390, 417 y 646.
Código Civil: artículo 188. Código Procesal Penal: artículo 98. Código de Minería: artículo 717.
Decreto Nº 172, 1977, Reglamento Consular, D.O. 29.07.1977: artículo 89. Ley Nº 19.968,
sobre Tribunales de Familia: artículo 38.

ARTÍCULO 63 (66)

Cuando sea necesaria la intervención de intérprete en una actuación


judicial, se recurrirá al intérprete oficial, si lo hay; y en caso contrario, al que
designe el tribunal.

Los intérpretes deberán tener las condiciones requeridas para ser peritos,
y se les atribuirá el carácter de ministros de fe.

Antes de practicarse la diligencia, deberá el intérprete prestar juramento


para el fiel desempeño de su cargo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 62, 70, 347, 382, 411, 412 y 427.
Código Procesal Penal: artículo 291. Código Orgánico de Tribunales: artículo 420. Código de
Derecho Internacional Privado: artículo 392. Ley Nº 19.253, sobre Protección, Fomento y
Desarrollo de los Indígenas: artículo 54.

ARTÍCULO 64

Los plazos que señala este Código son fatales cualquiera sea la forma en
que se exprese, salvo aquellos establecidos para la realización de
actuaciones propias del tribunal. En consecuencia, la posibilidad de ejercer
un derecho o la oportunidad para ejecutar el acto se extingue al vencimiento
del plazo. En estos casos el tribunal, de oficio o a petición de parte, proveerá
lo que convenga para la prosecución del juicio, sin necesidad de certificado
previo.

Las partes, en cualquier estado del juicio, podrán acordar la suspensión del
procedimiento hasta dos veces por instancia, sea o no por períodos iguales,
hasta un plazo máximo de noventa días en cada instancia, sin perjuicio de
poder acordarla, además, ante la Corte Suprema en caso que, ante dicho
tribunal, estuvieren pendientes recursos de casación o de queja en contra de
sentencia definitiva. Los plazos que estuvieren corriendo se suspenderán al
presentarse el escrito respectivo y continuarán corriendo vencido el plazo de
suspensión acordado. 28-29

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 65, 66, 67, 69, 78 y 463. Constitución
Política de la República: artículo 80. Código Civil: artículos 48, 49, 50 y 1494. Código Procesal
Penal: artículos 14 a 18, 237 a 240 y 245. Código del Trabajo: artículo 429. Código de Minería:
artículos 86 y 237, Código del Trabajo: artículo 435.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Clasificación de plazos procesales

Los plazos procesales admiten distinción entre aquellos legales,


judiciales o convencionales, según si han sido establecidos por la ley;
son fijados por el tribunal cuando la ley lo autoriza; o si han sido
acordados por las partes para cumplir o ejecutar determinados actos
jurídicos procesales. En efecto la distinción es relevante, por cuanto de
tal naturaleza se colige si aquellos son fatales o no, siendo fatales
conforme lo previsto en el artículo 64 del Código de Procedimiento Civil,
los establecidos en el mencionado Código (legales); y no fatales, según
prescribe el artículo 78 del cuerpo legal citado, aquellos establecidos
por el Tribunal (judiciales). Se debe tener claridad en orden a que los
plazos fatales son aquellos en que el derecho o facultad para ejecutar
un acto se extingue al vencimiento del plazo, y por el solo ministerio de
la ley; mientras que en los no fatales, el derecho o la facultad de ejecutar
un acto jurídico procesal no se extingue al vencimiento del plazo y por
el sólo ministerio de la ley, pues aquel requiere que se dicte una
resolución que tenga por evacuado el trámite no ejercido dentro del
margen de tiempo fijado, en rebeldía (considerando 3º de la sentencia
de casación).
Corte Suprema, 25/09/2018, Rol Nº 8226-2018,
Cita online: CL/JUR/6775/2018

2. Anulación de oficio: Suspensión del procedimiento por acuerdo de las


partes. Plazos que hayan empezado a correr se suspenderán con la
sola presentación del escrito de suspensión del procedimiento.
Procedencia de suspensión del procedimiento

El artículo 64 del Código de Procedimiento Civil dispone: "Las partes,


en cualquier estado del juicio, podrán acordar la suspensión del
procedimiento hasta dos veces por instancia, sea o no por períodos
iguales, hasta un plazo máximo de noventa días en cada instancia, sin
perjuicio de poder acordarla, además, ante la Corte Suprema en caso
que, ante dicho tribunal, estuvieren pendientes recursos de casación o
de queja en contra de sentencia definitiva. Los plazos que estuvieren
corriendo se suspenderán al presentarse el escrito respectivo y
continuarán corriendo vencido el plazo de suspensión acordado". Se
debe precisar que, de conformidad con la norma transcrita, son las
partes las que, si obran de común acuerdo, se encuentran facultadas
para suspender el procedimiento. Así, la labor del tribunal se
circunscribe a constatar que se cumplan las exigencias del artículo 64
antes transcrito. Lo anterior es relevante, toda vez que, si bien es cierto
la suspensión no puede solicitarse una vez que ha trascurrido el plazo,
tal examen debe realizarse a la fecha de presentación del escrito, razón
por la que es improcedente rechazar la solicitud fundado en la
circunstancia de haber transcurrido el plazo por el que requiere la
suspensión (considerandos 7º a 9º de la anulación de oficio).

Así, si se considera que el tenor del artículo 64 del Código de


Procedimiento Civil determina que los plazos que hayan empezado a
correr se suspenderán con la sola presentación del escrito de
suspensión del procedimiento, cuestión que, en el caso de autos,
justamente acaeció, en razón de la buena fe procesal que debe regir el
actuar de las partes, el día en que se presentó la solicitud debe
entenderse incluido en la misma. De lo razonado, fluye que lo resuelto
por la Corte de Apelaciones, en cuanto confirma la resolución que no
hace lugar a la suspensión del procedimiento, es errónea, toda vez que
debió accederse a tal solicitud. El yerro antes referido es trascendente,
toda vez que en virtud de tal decisión, los recursos de casación en la
forma y de apelación de la demandada, fueran declarados
extemporáneos, en circunstancias que, al estar suspendido el
procedimiento en el lapso antes determinado, lo fueron dentro de plazo.
Por lo expuesto, procediendo esta Corte de oficio, se deja sin efecto la
resolución impugnada, en su lugar, se dispone que se revoca la
resolución apelada, acogiéndose la solicitud de suspensión del
procedimiento (considerandos 9º y 10º de la anulación de oficio).

Corte Suprema, 26/11/2018, Rol Nº 16728-2018,


Cita online: CL/JUR/6757/2018

ARTÍCULO 65 (68)

Los términos comenzarán a correr para cada parte desde el día de la


notificación.

Los términos comunes se contarán desde la última notificación.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 24, 38, 260, 320, 327, 328, 339, 376,
461, 462, 467, 468, 469 y 683. Código Civil: artículo 48. Código Procesal Penal: artículo 15.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La regla general está constituida por los plazos individuales

La regla general en nuestro Derecho Procesal positivo es que los


plazos sean individuales; la excepción es que sean comunes, y siendo
excepción, tendrán que estar contemplados expresamente en la ley.
Ejemplo típico de un término común es el término probatorio, el cual,
según expresa disposición del artículo 327 del Código de Procedimiento
Civil, es común para las partes (Manual de Derecho Procesal, Tomo III,
Sexta Edición. Páginas 82 y 83). En igual sentido se ha pronunciado la
jurisprudencia, pudiendo citarse a vía de ejemplo lo sostenido por la
Iltma. Corte de Apelaciones de Talca en una situación similar, aunque
refiriéndose al plazo para oponer excepciones dilatorias. "Que, para
resolver la cuestión planteada se debe tener presente que el
artículo 260 del Código de Procedimiento Civil establece: 'Si los
demandados son varios, sea que obren separadamente o
conjuntamente, el término para contestar la demanda correrá para todos
a la vez, y se contará hasta que expire el último término parcial que
corresponda a los notificados'. Por su parte, el artículo 305 de este
mismo Código establece: 'Las excepciones dilatorias deben oponerse
todas en un mismo escrito y dentro del término de emplazamiento fijado
por los artículos 258 y 260'. En estas circunstancias, cualquiera de los
demandados está facultado desde su notificación para deducir las
excepciones dilatorias dentro del plazo para contestar la demanda,
aunque el plazo todavía no ha empezado a correr y, por ende, no ha
terminado por no haberse notificado la demanda a los demás
demandados. En esta situación se esperará el término de este último
plazo para dar por evacuado el trámite de la contestación" (Rol Nº 455-
2011 Iltma. Corte de Apelaciones de Talca (considerando 6º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción; 5/07/2012, Rol Nº 309-2012,

Cita online: CL/JUR/4305/2012

2. Los plazos se cuentan desde el día siguiente al de la notificación de


la resolución

Teniendo únicamente presente que los plazos se cuentan desde el


día siguiente al de la notificación, y el mérito de los antecedentes, se
revoca la resolución apelada de diecisiete de octubre último, escrita a
fs. 21, y se declara que no se hace lugar al incidente de nulidad de la
prueba testimonial, promovido por la demandada a fs. 14; con costas
del recurso (considerando único de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte Suprema, 27/07/1992, Rol Nº 6733,


Cita online: CL/JUR/854/1992

ARTÍCULO 66 (69)

Los términos de días que establece el presente Código, se entenderán


suspendidos durante los feriados, salvo que el tribunal, por motivos
justificados, haya dispuesto expresamente lo contrario.30

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 59, 60 y 339. Código de Comercio:


artículo 110. Código Procesal Penal: artículo 14.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Plazos judiciales son no fatales y de días continuos

En el caso de autos, la resolución cuya enmienda se pretende negó


lugar al incidente de nulidad promovido por la actora sobre la base de
errores e inexactitudes manifiestos, como cuando señala respecto de la
cuenta presentada que, "con fecha (...), se tuvo por aprobada, dándose
plazo de objeción de diez días hábiles", en circunstancias que ninguna
mención al carácter útil o hábil de ese término se contiene en esa
resolución ni en las otras dictadas en el juicio; o como cuando invoca el
artículo 66 del Código de Procedimiento Civil, para extraer de él como
principio formativo del procedimiento la distinción entre días hábiles e
inhábiles, concluyendo que "son válidos para su cómputo en juicio
únicamente los días hábiles", en circunstancias que la regla allí
establecida se aplica sólo a "los términos de días que establece el
presente Código", no a los que fija el tribunal, en silencio del Código o
de la convención de partes; o, finalmente, cuando sanciona al articulista
privándolo de su derecho a promover el incidente por haber originado el
vicio o concurrido a su materialización, en circunstancias que ninguna
de esas hipótesis podían serle atribuidas (considerando 3º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 4/10/2019, Rol Nº 13084-2018,

Cita online: CL/JUR/5442/2019

ARTÍCULO 67 (70)

Son prorrogables los términos señalados por el tribunal.

Para que pueda concederse la prórroga es necesario:

1º Que se pida antes del vencimiento del término; y

2º Que se alegue justa causa, la cual será apreciada por el tribunal


prudencialmente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 66, 78, 330, 331, 332 y 340.
Código Procesal Penal: artículos 16 y 17.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. El plazo judicial es de días corridos

Son abusivas las resoluciones dictadas por el juez a quo, cuando, por
una parte, se dio por aprobada la liquidación del crédito cuando la
contraparte estaba al mismo tiempo pidiendo se abriera un debate
respecto a ella, a través de su objeción; por lo tanto, ambas resoluciones
deberán dejarse sin efecto ordenándose se reciba a tramitación la
objeción señalada y por el contrario desestimándose la aprobación
inmediata de la liquidación hasta que se resuelva la incidencia de la
objeción. En efecto, el tribunal puso en conocimiento de las partes la
liquidación del crédito de autos, fijando un plazo de tres días para que
se tuviera por aprobada, salvo objeción en contrario. Pues bien, al día
siguiente del vencimiento del plazo, se presentaron dos escritos, uno de
la demandante solicitando se tuviera por aprobada la liquidación que se
le había notificado por tratarse de un plazo prudencial que no se
encuentra contemplado en el Código del Trabajo ni en el Código de
Procedimiento Civil por lo que se aplica la norma sustantiva general de
computación de plazos que establece el artículo 50 del Código Civil y,
el otro del demandado, objetando la liquidación de autos. Pues bien,
frente al plazo existente y a la decisión del Juez de tener por aprobada
la liquidación si no fuere objetada dentro de tercero día, es preciso
reconocer, como lo han hecho ambas partes en el juicio y en el recurso
de queja, que el plazo es judicial y se reglamenta por el artículo 50 del
Código Civil, pero a su vez, reglamentado por los artículos 67 y 78 del
Código de Procedimiento Civil. De ello se desprende que el plazo
judicial es de días corridos, pero no tiene el carácter de plazo fatal, no
se extingue por el solo transcurso del tiempo dado por el Tribunal y
puede ser prorrogado; a su vez, el plazo judicial no se extingue sino una
vez que ha sido declarada la correspondiente rebeldía o se hubiere ya
cumplido el trámite correspondiente. En consecuencia, al pedirse por
las partes la aprobación y la objeción de la liquidación ante la no
dictación de otra resolución anterior debe aceptarse a tramitación la
objeción por no haberse declarado rebeldía ni haberse consumado la
aprobación de la liquidación (considerandos 4º a 6º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 3/10/1994, Rol Nº 23153,


Cita online: CL/JUR/1189/1994

Fallo en el mismo sentido:


— Corte Suprema, 1/07/1991, Rol Nº 17241,

Cita online: CL/JUR/1220/1991

ARTÍCULO 68 (71)

En ningún caso podrá la prórroga ampliar el término más allá de los días
asignados por la ley.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 66, 67, 331, 333 y 339.

ARTÍCULO 69 (72)

Siempre que se ordene o autorice una diligencia con citación, se entenderá


que no puede llevarse a efecto sino pasados tres días después de la
notificación de la parte contraria, la cual tendrá el derecho de oponerse o
deducir observaciones dentro de dicho plazo, suspendiéndose en tal caso la
diligencia hasta que se resuelva el incidente.

Cuando se mande proceder con conocimiento o valiéndose de otras


expresiones análogas, se podrá llevar a efecto la diligencia desde que se
ponga en noticia del contendor lo resuelto.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 82, 123, 131, 248, 281, 286, 324, 336,
795, 845, 847, 876, 904 y 912. Código Procesal Penal: artículos 114, 156 y 202.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Autorización de una diligencia con citación

El artículo 69 inciso 1º del Código de Procedimiento Civil establece


que en el evento de ordenarse o autorizarse una diligencia "con
citación", se entenderá que ésta no puede llevarse a efecto sino
pasados tres días después de la notificación de la parte contraria, la cual
tendrá el derecho de oponerse o deducir observaciones dentro de dicho
plazo, suspendiéndose en tal caso, la diligencia hasta que se resuelva
el incidente. En el caso de autos, el juez a quo, resolviendo una solicitud
de la ejecutada, accedió a alzar los gravámenes indicados por este
litigante, con citación; posteriormente, dentro del plazo de tres días, el
ejecutante interpuso reposición con apelación subsidiaria, deduciendo
y oponiéndose al alzamiento impetrado por su contraparte, con
apelación subsidiaria, interponiendo, en subsidio, apelación derecha; y
finalmente el juez a quo denegó la reposición y apelación subsidiaria de
la misma, concediendo el recurso de apelación interpuesto
derechamente. Como se advierte, se ha cometido un error de
tramitación, en la medida que no se obró con observancia de lo
establecido en el citado artículo 69, dado que el consecuente procesal
respectivo obligaba al juez de primer grado a dar traslado de la
reposición presentada, entendiéndola como una oposición formulada
dentro del plazo de citación (considerandos 1º y 3º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 13/04/2017, Rol Nº 471-2017,

Cita online: CL/JUR/1718/2017

ARTÍCULO 70 (73)

Todas las actuaciones necesarias para la formación del proceso se


practicarán por el tribunal que conozca de la causa, salvo los casos en que
se encomienden expresamente por la ley a los secretarios u otros ministros
de fe, o en que se permita al tribunal delegar sus funciones, o en que las
actuaciones hayan de practicarse fuera del lugar en que se siga el juicio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 29, 58, 59, 61, 71, 75, 76, 161, 344,
353, 365, 388, 389 inciso final, 403, 405 y 872. Código Procesal Penal: artículo 35. Código
Orgánico de Tribunales: artículos 7º y 8º. Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de Familia:
artículo 12. Ley Nº 20.022, crea Juzgados Laborales y de Cobranza Laboral: artículo 7º.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Nulidad de audiencia, al ser acta firmada sólo por el secretario

De acuerdo al artículo 70 del Código de Procedimiento Civil, todas las


actuaciones necesarias para la formación del proceso se practicarán por
el tribunal que conozca de la causa, salvo los casos que se
encomienden expresamente por la ley a los secretarios u otros ministros
de fe, o en que se permita al tribunal delegar sus funciones, o en que
las actuaciones hayan de practicarse fuera del lugar en que se siga el
juicio. Que el acta de la audiencia de contestación y avenimiento
prevista en el artículo 56 Nº 2 de la Ley Indígena no haya sido firmada
por el juez de la causa, sino sólo por el secretario del tribunal, tiene
como necesaria consecuencia la falta de validez de las actuaciones
llevadas a cabo en el antedicho comparendo, dado que no aparece
como desarrollada ante el tribunal que conozca de la causa, como lo
manda el artículo 70 del Código de Procedimiento Civil, sino sólo ante
el secretario, no pudiendo colegirse tampoco que esta intervención del
ministro de fe constituya las situaciones de excepción contempladas en
la referida norma (considerandos 5º a 9º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 19/01/2011, Rol Nº 1398-2010,

Cita online: CL/JUR/6200/2011

ARTÍCULO 71 (74)

Todo tribunal es obligado a practicar o a dar orden para que se practiquen


en su territorio, las actuaciones que en él deban ejecutarse y que otro tribunal
le encomiende.

El tribunal que conozca de la causa dirigirá al del lugar donde haya de


practicarse la diligencia la correspondiente comunicación, insertando los
escritos, decretos y explicaciones necesarias.

El tribunal a quien se dirija la comunicación ordenará su cumplimiento en


la forma que ella indique, y no podrá decretar otras gestiones que las
necesarias a fin de darle curso y habilitar al juez de la causa para que resuelva
lo conveniente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 70, 72, 73, 74, 75, 76, 90, 247, 251,
329, 334, 336, 337, 371, 388 inciso 3º, 460, 528, 634, 862 y 868. Código Procesal Penal:
artículos 20 y 21. Código Orgánico de Tribunales: artículos 7º, 8º y 157. Código del Trabajo:
artículo 428. Código de Justicia Militar: artículos 118 y 192. Ley Nº 18.287 establece
procedimiento ante Juzgados de Policía Local: artículo 5º. Auto Acordado de la Corte de
Apelaciones de San Miguel D.O. 2.03.1998.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Delegación parcial de competencia. Improcedencia de decretar el


abandono del procedimiento. Actuaciones —que forman una
unidad— realizadas a fin de notificar la demanda ante el tribunal
exhortado constituyen manifestación inequívoca de voluntad en
proseguir el juicio

Es requisito sine qua non para que se produzca la delegación parcial


de competencia, que el tribunal delegante y delegado posean un distinto
territorio jurisdiccional, de manera que el tribunal delegado deberá
practicar o dar orden para que se realicen en su territorio las
actuaciones que en él deban ejecutarse, actuaciones que pasan a
formar parte del proceso como un todo. Del mérito de los antecedentes
se advierte que luego de la resolución dictada el 26 de octubre de 2015,
en virtud de la cual el 27º Juzgado Civil de Santiago tuvo por recibido el
exhorto, el actor procuró la notificación del demandado, diligencia que
se practicó el 2 de diciembre de 2015 según da cuenta el estampado
receptorial, el que debió ser posteriormente rectificado el 29 de enero
de 2016, solicitándose su devolución el 15 de abril de 2016. De este
modo, el 10 de agosto de 2016 el demandante acompañó el exhorto
tramitado ante el Juzgado de Letras de Cauquenes, no siendo posible
su inmediata resolución dado que los autos se habían archivado, motivo
por el cual se requirió en más de una oportunidad su desarchivo. En tal
contexto las actuaciones realizadas ante el tribunal exhortado lo fueron
en razón de la expresa delegación que hizo el Juzgado de Cauquenes
de su competencia, cuya finalidad fue encomendar la práctica de la
notificación de la demanda, por lo que tales gestiones forman parte del
proceso como una unidad, es decir, como un todo, sin que dicha
notificación y, asimismo, las diligencias que se relacionen con ella,
puedan ser separadas. No es posible hacer abstracción de la
notificación de la demanda, de la rectificación que el Ministro de Fe
efectuó de su estampado, ni de la solicitud de devolución del exhorto,
pues no obstante que éstas no se realizaron ante el tribunal que
sustanciaba la causa, ello obedeció a la expresa delegación que en su
oportunidad efectuó. En consecuencia, no cabe duda que la actividad
desplegada por el actor con ocasión del exhorto —según se dejó
anotado— constituye manifestación inequívoca de su voluntad e interés
en proseguir el juicio. Luego, si es de la esencia de esta sanción que
exista efectivamente un período de seis meses de inactividad procesal,
es decir, un lapso claramente definido durante el cual ninguna gestión
hayan realizado las partes para impulsar el procedimiento, resulta
evidente que tal requisito no concurre en este caso, en que la causa
permaneció en tramitación, como destaca el recurrente y lo demuestra
la relación de antecedentes contenida en el fundamento segundo de
este fallo. De la forma como se ha analizado, resulta que la resolución
recurrida al revocar aquella que rechazó el abandono del procedimiento
solicitado por la demandada, acogiéndolo, efectivamente ha cometido
error de derecho al conculcar el artículo 152 del Código de
Procedimiento Civil, defecto que por supuesto influye sustancialmente
en lo dispositivo de lo resuelto ya que en el presente caso solo cabía
rechazar el incidente de abandono promovido (considerandos 9º a 12º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 23/05/2019, Rol Nº 5400-2018,


Cita online: CL/JUR/2826/2019

ARTÍCULO 72 (75)

Las comunicaciones serán firmadas por el juez, en todo caso; y si el tribunal


es colegiado, por su presidente. A las mismas personas se dirigirán las
comunicaciones que emanen de otros tribunales o funcionarios.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 70, 71, 74, 75 y 76. Código Procesal
Penal: artículos 19 y 20.

ARTÍCULO 73 (76)

En las gestiones que sea necesario hacer ante el tribunal exhortado, podrá
intervenir el encargado de la parte que solicitó el exhorto, siempre que en éste
se exprese el nombre de dicho encargado o se indique que puede
diligenciarlo el que lo presente o cualquiera otra persona.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 6º, 75, 76, 77, 371 inciso 2. Código
de Derecho Internacional Privado: artículo 393.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Inexistencia de gestiones ante tribunal exhortado

Abandono del procedimiento El impulso procesal para la gestión de


los exhortos remitidos por el tribunal que conoce de la causa, queda
radicado en el del lugar donde debe practicarse la diligencia. Bajo esta
premisa, asume que la única actuación que estaba en su mano realizar
a fin de dar curso progresivo a los autos, era la de pedir cuentas de la
carta rogatoria dirigida a este último tribunal, solicitud que presentó ante
el tribunal de la causa el 27 de enero de 2009 (fojas 406). Pues bien, el
exhorto en cuestión, ordenado remitir con fecha 26 de agosto de 2008
(fojas 403), tenía por objeto notificar en su sede de Santiago al Director
General de Aguas, siendo incontrovertido que la ocurrente no realizó
ante el juez exhortado ninguna actividad tendiente a diligenciarlo,
quedando su objetivo frustrado. La inconducencia de la petición de
rendir cuenta de su tramitación, por consiguiente "declarada en el
motivo 7º del fallo de fojas 432, confirmado integralmente en alzada" es
manifiesta, toda vez que el impulso procesal de dar curso a la actuación
de marras, estaba radicado evidentemente en la parte que la solicitó
(considerando 3º de la sentencia del Juzgado de Letras del Trabajo).

Corte Suprema, 21/12/2011, Rol Nº 4340-2009,


Cita online: CL/JUR/10460/2011

ARTÍCULO 74 (77)

Podrá una misma comunicación dirigirse a diversos tribunales para que se


practiquen actuaciones en distintos puntos sucesivamente. Las primeras
diligencias practicadas, junto con la comunicación que las motive, se remitirán
por el tribunal que haya intervenido en ellas al que deba continuarlas en otro
territorio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículos 71, 75 y 76.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Competencia del tribunal exhortado

El referido funcionario, al proceder en la forma antes descrita, lo hizo


sin sujetarse a lo dispuesto en el mencionado exhorto, tal como se ha
señalado en el razonamiento tercero precedente, pues tanto de su texto
como de lo previsto en el artículo 74 del Código de Procedimiento
Civil se desprende claramente que él no pudo actuar en la forma
expuesta y sin contar previamente con una resolución del tribunal
exhortado tendiente a cumplir las gestiones encomendadas por dicho
exhorto, máxime cuando las especies prendadas no se encontraron en
la dirección señalada en el exhorto ni en poder del representante de la
demandada, por lo que era indispensable una orden judicial que
dispusiera si era o no procedente realizar el embargo y retiro de
especies que se encontrarían en poder de una persona diferente a la
demandada y en un lugar distinto a aquél, con o sin auxilio de la fuerza
pública, con o sin facultades de entregar las especies a una persona
distinta del depositario designado en autos y en las demás condiciones
que hubiere sido necesario decretar para el cabal cumplimiento de lo
mandado por el magistrado exhortante (considerando 6º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 15/03/1989, Rol Nº 13609,


Cita online: CL/JUR/808/1989

ARTÍCULO 75 (78)

Toda comunicación para practicar actuaciones fuera del lugar del juicio
será dirigida, sin intermedio alguno, al tribunal o funcionario a quien
corresponda ejecutarla, aunque no dependa del que reclama su intervención.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 71, 72, 73, 76 y 77. Código Procesal
Penal: artículos 19 a 21. Código de Derecho Internacional Privado: artículo 393.

ARTÍCULO 76 (79)

Cuando hayan de practicarse actuaciones en país extranjero, se dirigirá la


comunicación respectiva al funcionario que deba intervenir, por conducto de
la Corte Suprema, la cual la enviará al Ministerio de Relaciones Exteriores
para que éste a su vez le dé curso en la forma que esté determinada por los
tratados vigentes o por las reglas generales adoptadas por el Gobierno.

En la comunicación se expresará el nombre de la persona o personas a


quienes la parte interesada apodere para practicar las diligencias solicitadas,
o se indicará que puede hacerlo la persona que lo presente o cualquiera otra.

Por este mismo conducto y en la misma forma se recibirán las


comunicaciones de los tribunales extranjeros para practicar diligencias en
Chile.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 6º, 71, 73, 75, 242, 245, 247, 249 y
345. Código Orgánico de Tribunales: artículos 6º, 7º y 8º. Código de Derecho Internacional
Privado: artículos 388 y siguientes, 427. Convención sobre la obtención de alimentos en el
extranjero, Decreto Nº 23, D.O. 23.01.1961: artículo 7º. Convención interamericana sobre
recepción de pruebas en el extranjero, Decreto Supremo Nº 642, D.O. 9.10.1976. Convención
Interamericana sobre Exhortos o Cartas Rogatorias, Decreto Nº 644, D.O. 18.10.1976.
Protocolo adicional a la Convención Interamericana sobre Exhortos o Cartas Rogatorias,
Decreto Nº 858, D.O. 12.02.1990. Decreto Nº 172, 1977, Reglamento Consular, D.O.
29.07.1977: artículo 90.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Exhorto en territorio nacional

Limitaciones No es posible la tramitación de un exhorto en nuestro


país si las actuaciones a que éste se refiere implican cumplir en Chile
resoluciones dictadas por un tribunal extranjero, procedimiento reglado
en los artículos 242 a 251 del Código de Procedimiento Civil
(considerando único de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 11/07/1994, Rol Nº 23240-1994,


Cita online: CL/JUR/2287/1994

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 6/06/1995, Rol Nº 24-1995,

Cita online: CL/JUR/1353/1995

— Corte Suprema, 6/10/1994, Rol Nº 462-1994,

Cita online: CL/JUR/1597/1994

— Corte Suprema, 20/08/1994, Rol Nº 23473,

Cita online: CL/JUR/1557/1994

— Corte Suprema, 16/08/1994, Rol Nº 30710-1994,

Cita online: CL/JUR/2307/1994

— Corte Suprema, 11/07/1994, Rol Nº 3240-1994,

Cita online: CL/JUR/2287/1994

— Corte Suprema, 30/12/1991, Rol Nº 18133-1991,


Cita online: CL/JUR/909/1991

ARTÍCULO 77

Sin perjuicio de lo señalado en el artículo precedente, toda comunicación


dirigida por un tribunal a otro deberá ser conducida a su destino por vía del
sistema de tramitación electrónica del Poder Judicial, y no siendo posible lo
anterior, por el medio de comunicación idóneo más expedito.31

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 6º, 73, 75 y 76.

TÍTULO VIII DE LAS REBELDÍAS

ARTÍCULO 78

Vencido un plazo judicial para la realización de un acto procesal sin que


éste se haya practicado por la parte respectiva, el tribunal, de oficio o a
petición de parte, declarará evacuado dicho trámite en su rebeldía y proveerá
lo que convenga para la prosecución del juicio, sin certificado previo del
secretario.32

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 31, 67, 91, 99, 123, 202, 248, 256,
318, 380, 394, 398, 435 inciso 2º, 466, 487, 684 y 715. Código Civil: artículos 48, 49 y 50. Código
Procesal Penal: artículos 93, 99 a 101, 147, 252 y 283. Código Orgánico de Tribunales:
artículos 10 y 398. Código del Trabajo: artículos 297 y 426. Código de Derecho Internacional
Privado: artículo 322. Código de Justicia Militar: artículos 124 y 125.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Plazo para la contestación de la demanda

De acuerdo con el artículo 636 del Código de Procedimiento Civil, el


arbitrador no está obligado a guardar en sus procedimientos y en su
fallo otras reglas que las que las partes hayan expresado en el acto
constitutivo del compromiso y si ellas nada han dicho, se observarán las
reglas establecidas en los artículos que siguen. Y sobre el particular el
artículo 637 expresa que el arbitrador oirá a los interesados. El plazo
fijado en el comparendo celebrado en rebeldía de una de las partes,
permite establecer que el mismo no obedece al acuerdo de los litigantes
y no determinando la ley el término para la contestación de la demanda,
queda de manifiesto que aquél tiene la naturaleza de un plazo judicial,
plazo que en conformidad con el artículo 78 del Código antes referido
no es fatal y necesita de la declaración de la correspondiente rebeldía
para hacer cesar el derecho de la parte, lo que el tribunal puede hacer
incluso de oficio (considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte Suprema, 18/01/1995, Rol Nº 5774-1995,


Cita online: CL/JUR/2073/1995

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 3/10/1994, Rol Nº 23153-1994,

Cita online: CL/JUR/1189/1994

2. Efectos de la rebeldía en relación al asunto litigioso

Que el fallo que se revisa no contiene argumentaciones ni decisión


respecto de la prueba rendida por la demandada, ni consideración
alguna en cuanto al presunto extravío ni origen de aquella contestación
por escrito. Cabe advertir que, aun cuando dicho trámite haya sido
evacuado en rebeldía de la parte, corresponde estimar que el rebelde
no acepta las afirmaciones contenidas de la demandada, y ella tiene
derecho a rendir probanzas, máxime cuando, como en este caso, el
auto de prueba se extendió al punto ya antes señalado y que, en el
hecho se acompañaron legalmente al proceso medios probatorios. Que,
de esta forma, en la dictación de la sentencia se ha omitido hacer las
consideraciones de hecho y de derecho que le sirven de fundamento,
como también se ha omitido la decisión del asunto controvertido, todo
en relación a la demandada (considerandos 2º y 3º de la sentencia de
la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 29/09/2000, Rol Nº 1825-2000,

Cita online: CL/JUR/1897/2000

ARTÍCULO 79 (82)
Podrá un litigante pedir la rescisión de lo que se haya obrado en el juicio
en rebeldía suya, ofreciendo probar que ha estado impedido por fuerza
mayor.

Este derecho sólo podrá reclamarse dentro de tres días, contados desde
que cesó el impedimento y pudo hacerse valer ante el tribunal que conoce
del negocio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículos 64, 78, 80, 81, 182 y 201.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Recurso de queja; acogido

Tribunal debe tramitar incidente nulidad de todo lo obrado Han


incurrido en falta que debe corregirse por la vía del recurso de queja, y
de oficio, los ministros que negaron lugar a la nulidad de todo lo obrado
en gestión preparatoria de confesión de deuda, sin oír a la demandada
ni recibir el incidente a prueba, pese a que la peticionaria invocó como
causa de su inasistencia a la audiencia respectiva el hecho de haber
estado impedida por enfermedad, acompañando pruebas referentes a
ello. En efecto, los ministros recurridos debieron tramitar la solicitud de
nulidad de todo lo obrado como un incidente, con audiencia de
contraparte, como prescribe el artículo 85 del Código de Procedimiento
Civil, y abrir término de prueba, como manda el artículo 90 del mismo
cuerpo legal (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte Suprema, 21/07/1992, Rol Nº 6012-1992,


Cita online: CL/JUR/1079/1992

ARTÍCULO 80 (83)

Si al litigante rebelde no se le ha hecho saber en persona ninguna de las


providencias libradas en el juicio, podrá pedir la rescisión de lo obrado,
ofreciendo acreditar que, por un hecho que no le sea imputable, han dejado
de llegar a sus manos las copias a que se refieren los artículos 40 y 44, o que
ellas no son exactas en su parte substancial.
Este derecho no podrá reclamarse sino dentro de cinco días, contados
desde que aparezca o se acredite que el litigante tuvo conocimiento personal
del juicio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 31, 38, 40, 44, 55, 79, 81 y 182.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Nulidad de todo lo obrado por falta de emplazamiento. Requisitos

En síntesis la articulista ha planteado el incidente de nulidad de todo


lo obrado por falta de emplazamiento, el que conforme al artículo 80 del
Código de Procedimiento Civil, requiere: a) que el litigante que lo invoca
se halle rebelde, b) que no se le haya hecho saber en persona ninguna
de las providencias libradas en el juicio, c) que ofrezca probar que por
un hecho que no le es imputable han dejado de llegar a sus manos las
copias a que se refieren los artículos 40 y 44 o que ellas no sean exactas
en lo substancial y d) que se interponga en momento oportuno, esto es,
dentro de quinto día que aparezca o se acredite que el litigante tuco
conocimiento personal del juicio. Este incidente, además, se puede
hace valer aun después de dictado el fallo y notificado a alguna de las
partes (considerando 2º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 31/07/2019, Rol Nº 206-2019,

Cita online: CL/JUR/4494/2019

2. Incidente de nulidad de todo lo obrado por falta de emplazamiento

El artículo 80 inciso el Código de Procedimiento Civil establece que si


al litigante rebelde no se le ha hecho saber en persona ninguna de las
providencias libradas en el juicio, podrá pedir la rescisión de lo obrado,
ofreciendo acreditar que, por un hecho que no le sea imputable, han
dejado de llegar a sus manos las copias a que se refieren los
artículos 40 y 44, o que ellas no son exactas en su parte substancial.
Este derecho no podrá reclamarse sino dentro de cinco días, contados
desde que aparezca o se acredite que el litigante tuvo conocimiento
personal del juicio. En consonancia con lo dispuesto en el inciso 2º del
artículo recién transcrito, el juez a quo, al recibir la incidencia a prueba
fijó como uno de los hechos a probar, la época en que se tomó
conocimiento del juicio. La carga de la prueba quiere decir, en primer
término, en su sentido estrictamente procesal, conducta impuesta a uno
o ambos litigantes, para que acrediten la verdad de los hechos
enunciados por ellos. En segundo término, la ley crea al litigante la
situación embarazosa de no creer sus afirmaciones, en caso de no ser
probadas, circunstancia de la cual puede desprenderse, si demuestra la
verdad de aquellas. La carga de la prueba no supone ningún derecho
del adversario, sino un imperativo del propio interés de cada litigante;
es una circunstancia de riesgo que consiste en que quien no prueba los
hechos que ha de probar, pierde el pleito (considerandos 3º a 5º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 17/10/2018, Rol Nº 1356-2018,

Cita online: CL/JUR/5874/2018

3. Voto disidente: No es de cargo del articulista acreditar la oportunidad


en que tomó conocimiento del juicio

Improcedencia de rechazar —el incidente de nulidad de todo lo


obrado por falta de emplazamiento—, por extemporáneo, pues si bien
el inciso segundo del artículo 80 del Código de Procedimiento Civil
dispone que la incidencia de nulidad debe promoverse dentro del plazo
de cinco días, término que debe computarse "desde que aparezca o se
acredite que el litigante tuvo conocimiento del juicio", de su redacción
se desprende que no es de cargo del articulista acreditar la oportunidad
en que éste tomó conocimiento del juicio, pues la ley no le impone dicha
carga. Esto último ha sido reconocido por un sector de la doctrina,
señalándose al efecto: "Como puede apreciarse, se siguió el mismo
sistema del Código respecto de la nulidad de lo obrado por falta de
emplazamiento, que reglamenta el artículo 80. Al igual que en él,
corresponderá a la contraparte probar que el conocimiento aludido se
adquirió en una oportunidad diferente a la sostenida por el incidentista,
por estar éste protegido por la presunción legal de buena fe.".
("Oportunidad en que deben promoverse los incidentes. Situación
especial del de nulidad procesal en el juicio civil". Revista de Derecho,
Nº 188. Año LVIII, julio-diciembre 1990. Facultad de Ciencias Jurídicas
y Sociales. Universidad de Concepción, citado en el libro "Estudios de
Derecho Procesal". Julio Salas Vivaldi. Editorial LexisNexis, página
268). Este mismo autor señala en su obra "Los Incidentes y en Especial
el de Nulidad en el Proceso Civil, Penal y Laboral", séptima edición
actualizada, Editorial Jurídica de Chile, página 58, que: "A falta de otros
antecedentes inequívocos, el momento en que se constatan los hechos
será el indicado por quien formule el incidente y si la parte contraria
pretende que el conocimiento se produjo en una ocasión diversa,
corresponderá a ésta el peso de la prueba.". También se ha sostenido
que "Respecto de la carga de la prueba, ésta recae en la parte que
solicita la nulidad en cuanto a la existencia de los hechos que justifican
la nulidad y, de alegarse la preclusión del ejercicio del derecho a pedir
la nulidad, la carga de la prueba recae en quien alega la preclusión, todo
sin perjuicio de la existencia de hechos ya acreditados en el proceso"
(considerando disidente de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 17/10/2018, Rol Nº 1356-2018,

Cita online: CL/JUR/5874/2018

4. Voto disidente: Incidente de nulidad por falta de emplazamiento debe


ser acogido si demandado tenía un domicilio diverso respecto del cual
fue notificado

Acordada contra el voto del ministro (mencionado), quien fue de


opinión de revocar la resolución apelada y, en consecuencia, acoger el
incidente de nulidad por falta de emplazamiento, teniendo para ello en
consideración que el demandado tenía un domicilio diverso respecto del
cual fue notificado, de lo que se deduce que aquél no recibió copias de
la demanda ni de su proveído; y que además en cuanto a la
extemporaneidad del incidente, se estima que de acuerdo a la redacción
del inciso segundo del artículo 80 del Código de Procedimiento Civil, la
incidencia de nulidad debió promoverse dentro del plazo de cinco días
"desde que aparezca o se acredite que el litigante tuvo conocimiento del
juicio", de lo que se desprende que no es de cargo del articulista
acreditar la oportunidad en que éste tomó conocimiento del juicio, pues
la ley no le impone dicha carga (considerando disidente de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 2/02/2018, Rol Nº 1704-2017,

Cita online: CL/JUR/2245/2018

5. Cobro ejecutivo de obligaciones tributarias. Incidente de nulidad de


todo lo obrado por falta de emplazamiento
El apelante ha solicitado la revocación de la resolución que no dio
lugar al incidente de nulidad por falta de emplazamiento, fundado, en
síntesis, que se entregó la cédula en un sitio eriazo y que no se dio
cumplimiento a las formalidades legales señaladas en el artículo 44 del
Código de Procedimiento Civil, aplicable supletoriamente por así
disponerlo el artículo 171 del Código Tributario. Tratándose de una
nulidad de todo lo obrado por falta de emplazamiento, resulta
indispensable que el incidentista señale con precisión la fecha en que
tomó conocimiento de la existencia del juicio, ello por cuanto la ley exige
que invoque la nulidad tan pronto como llegue a su conocimiento la
existencia del juicio, fijándole para ello el plazo de cinco días conforme
al artículo 80 del Código de Procedimiento Civil. Como consta de su
incidente, el ejecutado no ha cumplido con dicha carga procesal, lo que
por sí solo autoriza el rechazo de la incidencia planteada
(considerandos 1º a 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 26/07/2019, Rol Nº 1103-2019,

Cita online: CL/JUR/4270/2019

ARTÍCULO 81 (84)

Los incidentes a que den lugar las disposiciones contenidas en los dos
artículos anteriores, no suspenderán el curso de la causa principal y se
substanciarán en cuaderno separado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 82 y 87.

TÍTULO IX DE LOS INCIDENTES

ARTÍCULO 82 (85)

Toda cuestión accesoria de un juicio que requiera pronunciamiento


especial con audiencia de las partes, se tramitará como incidente y se
sujetará a las reglas de este título, si no tiene señalada por la ley una
tramitación especial.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 7º, 69, 81, 84 a 90, 111, 119, 132,
142, 148, 151, 154, 167, 255, 271, 302, 305, 307, 310, 317, 322, 355, 424, 431, 458, 514, 519,
521, 544, 550, 570, 578, 603, 606, 614, 723, 792, 813, 822, 831, 832 y 924. Código Orgánico
de Tribunales: artículos 18 y 111. Código de Justicia Militar: art ículos 178 y 179. Ley Nº 5.087
sobre Prenda Industrial: artículo 40. Decreto Ley Nº 2.186, Aprueba Ley Orgánica de
Procedimientos de Expropiaciones, D.O. 9.06.1978: artículo 20, Código del Trabajo:
art ículo 443. Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de Familia: artículo 26.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Voto disidente: Solicitud de nulidad de lo obrado tiene naturaleza


jurídica de un incidente

La solicitud de nulidad de lo obrado tiene la naturaleza jurídica de un


incidente, pues conforme lo dispone el artículo 82 del Código de
Procedimiento Civil se trata de una cuestión accesoria de un juicio que
requiere pronunciamiento especial del tribunal, con audiencia de las
partes. Pues bien, con arreglo a lo previsto en el artículo 158 del mismo
Código Civil, un incidente únicamente puede terminar por dos tipos de
resoluciones judiciales: sentencia interlocutoria, si establece derechos
permanentes en favor de las partes, o auto, si no se genera este efecto.
La resolución que rechaza el incidente de nulidad no puede
considerarse sentencia interlocutoria, pues no establece derechos
permanentes en favor de las partes, en tanto al desestimar el incidente
mantiene las cosas en el mismo estado en que se encontraban antes
de que éste se promoviera. Tampoco es posible afirmar que "establezca
el derecho permanente del actor de continuar con el juicio", pues de ese
derecho goza desde el momento en que lo inicia y, en rigor, no se lo
concede u otorga la resolución que no hace lugar a la solicitud de
nulidad. Por consiguiente, sólo cabe concluir que el aludido
pronunciamiento tiene la naturaleza jurídica de un auto y que, al tenor
del artículo 188 del Código de Procedimiento, sólo es apelable cuando
altera la sustanciación regular del juicio o recae sobre trámites que no
están expresamente ordenados por la ley. En este contexto y teniendo
en consideración que la providencia que desestima el incidente de
nulidad de lo obrado promovido por la parte demandada no ha alterado
la tramitación regular del juicio ni ha recaído sobre un trámite que no
esté previsto por la ley en forma expresa, la conclusión que se impone
es la inadmisibilidad del recurso de apelación y, por consiguiente, que
el recurso de hecho deba ser acogido (considerandos 1º a 3º de la
disidencia de la sentencia de la Corte de Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Santiago, 8/03/2019, Rol Nº 1359-2019,

Cita online: CL/JUR/1315/2019

ARTÍCULO 83

La nulidad procesal podrá ser declarada, de oficio o a petición de parte, en


los casos que la ley expresamente lo disponga y en todos aquellos en que
exista un vicio que irrogue a alguna de las partes un perjuicio reparable sólo
con la declaración de nulidad.

La nulidad sólo podrá impetrarse dentro de cinco días, contados desde que
aparezca o se acredite que quien deba reclamar de la nulidad tuvo
conocimiento del vicio, a menos que se trate de la incompetencia absoluta
del tribunal. La parte que ha originado el vicio o concurrido a su
materialización o que ha convalidado tácita o expresamente el acto nulo, no
podrá demandar la nulidad.

La declaración de nulidad de un acto no importa la nulidad de todo lo


obrado. El tribunal, al declarar la nulidad, deberá establecer precisamente
cuáles actos quedan nulos en razón de su conexión con el acto anulado.33

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 85, 88, 823 inciso final. Código
Procesal Penal: 35, 103, 159 a 165, 283 y 344. Ley Nº 18.287 sobre Procedimientos ante
Juzgados de Policía Local: artículo 18, Código del Trabajo: artículo 427. Ley Nº 19.968, sobre
Tribunales de Familia: artículo 25. Ley Nº 19.947, sobre Matrimonio Civil: artículos 44 y ss.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Nulidad procesal, concepto y finalidad. Principio de trascendencia

La nulidad procesal ha sido definida como la sanción mediante la cual


se priva a un acto o actuación del proceso o a todo él de los efectos
normales previstos por la ley, cuando en su ejecución no se han
guardado las formas prescritas por aquélla —Alsina, Hugo—. Como
bien lo expresa el profesor don Julio Salas Vivaldi, la finalidad de la
nulidad procesal es, entonces, restarle valor a la actuación viciada,
destruirla, tenerla como no sucedida, ya que no constituye el medio
idóneo destinado a cumplir el fin para el que fue prevista por el
legislador. En fin, impedir que puedan atribuírsele los efectos que la ley
dispone para una correctamente ejecutada. La nulidad, como sanción
de ineficacia se encuentra gobernada por diversos principios que la
informan y dan contenido, dentro de los cuales, cobra especial
relevancia, el de la trascendencia, en virtud del cual, procede la nulidad
de un acto del proceso, cuando la irregularidad que le sirve de
antecedente corrompe su substancia y le impide cumplir el fin para el
que fue establecido en la ley. Este principio limita a la sanción en cuanto
a que la mera inobservancia de requisitos formales del acto no es
suficiente para su aplicación, salvo en la medida que el apartamiento de
la ley da lugar a una injusticia o causa agravios reparables sólo con la
nulidad del acto viciado (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 21/02/2020, Rol Nº 96-2019,

Cita online: CL/JUR/18709/2020

2. Finalidad Práctica de la nulidad: no procede la nulidad por la nulidad.


Incumplimiento de la ritualidad procesal del nombramiento y
operación del perito. Aceptación del cargo de perito se encuentra
viciada en su constitución al no constar de su juramento de
desempeño fiel

En el caso particular a tratar la ineficacia (art. 83 del Código del ramo)


que sigue de la nulidad, debe tener una finalidad práctica, como tantas
veces se ha sostenido tanto por la doctrina como por la jurisprudencia,
no procediendo la nulidad por la nulidad, cuyo, no es el caso; en efecto;
la omisión del juramento, afectará a los derechos esenciales de las
partes litigantes, como es el derecho a la prueba, lo que a su vez causa
indefensión. El artículo 83 del Código de Procedimiento Civil faculta a
esta Corte para invalidar aquellas actuaciones en que exista un vicio
que irrogue a algunas de las partes un perjuicio reparable sólo con la
declaración de nulidad, asunto que ha acontecido en el procedimiento
de aceptación del cargo de perito al no haber éste jurado ante Ministro
de fe, de desempeñar fielmente el cargo, lo que ha exigido el legislador
por motivo de transparencia. Al no haber prestado juramento ha
afectado una garantía del debido proceso como lo es el derecho a
prueba, ocasionando un perjuicio reparable sólo con la declaración de
nulidad (considerandos 7º y 9º de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 15/06/2018, Rol Nº 714-2018,

Cita online: CL/JUR/2881/2018


3. Perjuicio como el principal parámetro para determinar la validez de
las actuaciones judiciales. Exigencia de un perjuicio cierto e
irreparable para la procedencia de la nulidad procesal

La noción de perjuicio es el principal parámetro para determinar la


validez de las actuaciones judiciales en nuestro sistema procesal, pues
con ello se asegura el principio de conservación del acto, elementos que
se encuentran recogidos en el inciso 1º del artículo 83 del Código de
Procedimiento Civil, desde la reforma introducida por la Ley Nº 18.705,
el cual dispone que la nulidad procesal podrá ser declarada en los casos
que la ley expresamente lo disponga y "en todos aquellos en que exista
un vicio que irrogue a alguna de las partes un perjuicio reparable solo
con la declaración de nulidad". Abona lo anterior la doctrina
procesalista, al sostener que "las nulidades no tienen por finalidad
satisfacer pruritos formales, sino enmendar los perjuicios efectivos que
pudieran surgir de la desviación de los métodos de debate cada vez que
esta desviación suponga restricción de las garantías a que tienen
derecho los litigantes" (Couture, Eduardo; "Fundamentos del Derecho
Procesal Civil", 4 a edición, B de F, Montevideo, 2002, p. 316). La
exigencia de un perjuicio cierto e irreparable para la procedencia de la
nulidad procesal ha sido manifestada de de modo permanente por
nuestros tribunales superiores de justicia, al señalar que "la exigencia
de —perjuicio— o —interés afectado— es un presupuesto que
especialmente diluye la posibilidad de incurrir en nulidad por nulidad
misma. De lo anterior resulta que, constituyendo el real agravio una
exigencia de procedencia de la nulidad, corresponde determinar el
perjuicio que origina la resolución impugnada, la forma como éste se
concreta en el caso particular y las razones por la cuales se produce..."
(Excma. Corte Suprema, Rol Nº 3119-2011) (considerandos 6º a 8º de
la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 15/06/2018, Rol Nº 7067-2017,

Cita online: CL/JUR/2935/2018

4. Facultad del tribunal para declarar de oficio nulidad de determinadas


actuaciones

El artículo 83 del Código de Procedimiento Civil, establece la facultad


para cualquier Tribunal de declarar de oficio, la nulidad de determinadas
actuaciones. Por lo que el Tribunal, al detectar una doble notificación, y
actuando en consecuencia y en uso de las facultades oficiosas, ha
procedido a anular la notificación sobreviniente, por cuanto la misma
carece de sustento, al existir ya una notificación previa y valida, según
da cuenta el ministro de fe. Atendido lo anterior, la única notificación
valida de la resolución que desechó la excepción de no empecer el título
es la primera realizada, por lo que resulta improcedente el recurso de
hecho al ser extemporáneo el de apelación deducido (considerandos 4º
y 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 14/03/2019, Rol Nº 2662-2018,

Cita online: CL/JUR/1292/2019

5. Sanción de nulidad procesal. Parte que origina el vicio no puede


demandar la nulidad

Como es, sabido, la nulidad procesal, como sanción, debe cumplir con
ciertas exigencias dada la trascendencia de sus efectos y, en tal sentido,
es el artículo 83 del Código de Enjuiciamiento el que contempla una de
ellas, "la parte que ha originado el vicio concurrido a su materialización
o que ha convalidado tácita o expresamente el acto nulo, no podrá
demandada la nulidad". En tal sentido basta para rechazar la incidencia
el hecho de que el vicio que alega el recurrente no es tal, desde que el
sistema informático de seguimiento de causas que ha sido puesto a
disposición de las partes, resulta ser una herramienta de apoyo que
facilita las gestiones que pudieren realizar los abogados o procuradores
ante los tribunales, sin embargo, no se debe olvidar que de acuerdo al
artículo 69 del Código Orgánico de Tribunales, las tablas se forman el
último día hábil de cada semana, siendo fijadas materialmente en
dependencias de esta Corte, por ende no se advierte un vicio en la vista
de la causa que sea solamente reparable mediante la declaración de
nulidad de la misma, de modo que ha sido la propia articulista quien ha
contribuido a la materialización del supuesto vicio, al no cerciorarse
personalmente en el tribunal de la fijación de la causa en tabla
(considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 12/04/2019, Rol Nº 1161-2019,

Cita online: CL/JUR/2049/2019


6. Procede declarar de oficio nulidad procesal por error en la tramitación
del proceso

Habiéndose rechazado en primera instancia la excepción dilatoria de


incompetencia absoluta del tribunal y habiéndose concedido la
apelación respectiva, como se indicó, en el solo efecto devolutivo, de
conformidad a lo dispuesto en los artículos 698, regla séptima, en
relación al artículo 307, ambas disposiciones del Código de
Procedimiento Civil, en dicho proceso se procedió a contestar la
demanda, teniéndosela por contestada con fecha 26 de marzo del
presente año, continuándose con la tramitación regular del mismo hasta
la dictación de sentencia definitiva, la cual fue objeto de los recursos
indicados en el motivo primero. Atendido lo expresado
precedentemente, se estima, en definitiva, que no se encuentra
resuelto, a la fecha, el recurso de apelación deducido contra la
resolución de 16 de marzo del año 2018 y, en consecuencia, la
resolución dictada con fecha 22 de junio de dicho año no es válida, toda
vez que confirmó una resolución inexistente, por lo cual nos
encontramos en presencia de un caso en que el tribunal, en este caso
esta Corte, se encuentra facultado para proceder a anular de oficio lo
actuado, a fin de evitar vicios de procedimiento que ocasionen la nulidad
del proceso, conforme lo señalan los artículos 83 y 84 del Código de
Procedimiento Civil, por lo cual se resolverá en consecuencia
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 30/07/2019, Rol Nº 527-2019,

Cita online: CL/JUR/4493/2019

7. Tribunal a quo que ha emitido resoluciones disonantes y erráticas que


causan perjuicio al ejecutado. Vicio procesal solo reparable con la
declaración de nulidad de todo lo obrado

La indeterminación del inicio del término probatorio, en razón de una


resolución posterior que va en contra de lo ya resuelto por el mismo
tribunal, constituye un vicio procesal que irroga al ejecutado un perjuicio
reparable solo con la declaración de nulidad, conforme lo señala el
artículo 83 del Código de Procedimiento Civil. Al respecto, concluye el
autor Felipe Gorigoitía Abbott que: "5º: Siendo un concepto jurídico
indeterminado, precisar qué constituye un perjuicio suficiente para
producir nulidad es un tema que debe ser abordado a partir del caso
concreto y considerando la dinámica del proceso en cuestión. 6º: Con
todo, es unánimemente admitido que la afectación de garantías
procesales de rango constitucional cumple con el estándar. Esta noción
debe ser tomada ampliamente, incluyendo no solo la vulneración del
derecho de defensa, sino también de aquellas expresiones que caben
dentro de las nociones de tutela judicial efectiva y debido proceso, que
se pueden desprender del artículo 19 Nº 3 CPol., en especial de sus
incisos primero y sexto" (Gorigoitía Felipe, El perjuicio reparable solo
por la declaración de nulidad como estándar de invalidez de las
actuaciones procesales civiles/en/ Revista de Derecho de la Pontificia
Universidad Católica de Valparaíso, año 2013, número 40, p. 597).

Corte de Apelaciones de Concepción, 6/08/2019, Rol Nº 1266-2019,

Cita online: CL/JUR/4533/2019

8. Incidente de nulidad deducido extemporáneamente

Es del caso, que en la presente causa, el día 22.10.2018 no consta


que alguno de los apoderados de las partes haya plateado recusación
o implicancia alguna en contra de alguno de los integrantes de la Sala
que conoció de la apelación de la sentencia del a quo, no obstante que
el acta de instalación se publica diariamente a las 8 de la mañana; por
lo que las partes, entre ellas la demandante, no platearon reparos a la
integración de la sala en la oportunidad señalada y se conformaron con
la integración de la misma. Que no obstante lo anterior, si alguna de las
partes, y en el presente caso, la demandante, estimó que se había
incurrido en una causal de nulidad originada en alguna presunta
inhabilidad de alguno de los integrantes de la Sala, ella debió haber sido
impetrada, a más tardar, dentro del plazo de cinco días referido en el
artículo 83 del Código de Procedimiento Civil, esto es, contado desde el
22.10.2018; por lo que habida consideración que la presente incidencia
fue formulada recién el 13 de diciembre de dicho año, a todas luces se
encuentra fuera de plazo, debiendo por lo mismo acogerse la alegación
de extemporaneidad planteada por la demandada (considerando 8º de
la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 12/12/2019, Rol Nº 501-2018,

Cita online: CL/JUR/7215/2019


ARTÍCULO 84 (87)

Todo incidente que no tenga conexión alguna con el asunto que es materia
del juicio podrá ser rechazado de plano.34

Si el incidente nace de un hecho anterior al juicio o coexistente con su


principio, como defecto legal en el modo de proponer la demanda, deberá
promoverlo la parte antes de hacer cualquiera gestión principal en el pleito.

Si lo promueve después, será rechazado de oficio por el tribunal, salvo que


se trate de un vicio que anule el proceso, en cuyo caso se estará a lo que
establece el artículo 83, o que se trate de una circunstancia esencial para la
ritualidad o la marcha del juicio, evento en el cual el tribunal ordenará que se
practiquen las diligencias necesarias para que el proceso siga su curso
legal.35

El juez podrá corregir de oficio los errores que observe en la tramitación del
proceso. Podrá asimismo tomar las medidas que tiendan a evitar la nulidad
de los actos de procedimiento. No podrá, sin embargo, subsanar las
actuaciones viciadas en razón de haberse realizado éstas fuera del plazo fatal
indicado por la ley.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 55, 80, 114, 234, 305 y 433. Código
Orgánico de Tribunales: artículo 10. Código Procesal Penal: artículos 63 y 270. Ley Nº 10.336,
sobre Organización y Atribuciones de la Contraloría General de la República: artículo 112,
Código del Trabajo: artículo 429.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Anulación de oficio

De este modo, el proceder del tribunal al disponer diligencias


probatorias de oficio en una oportunidad no prevista por el legislador —
después de clausurado el debate— comporta una manifiesta
irregularidad procesal, que la Corte debe corregir en uso de las
facultades correctoras de procedimiento conferidas en el artículo 84
inciso final del Código de Procedimiento Civil, dado que, en caso
contrario, se estaría admitiendo una alteración grave de la ritualidad del
juicio, con afectación del derecho a un proceso con todas sus garantías
(considerandos 8º y 9º de la anulación de oficio).
Corte de Apelaciones de Concepción, 30/07/2019, Rol Nº 397-2019,

Cita online: CL/JUR/4360/2019

Fallo en el mismo sentido.

— Corte Suprema, 18/04/2018, Rol Nº 827-2018,

Cita online CL/JUR/1777/2018

2. Tribunal que acoge a tramitación incidencia de sustitución de


procedimiento e impugnación documentaria no continuando con el
procedimiento confirme a derecho

Tribunal no ha respetado el procedimiento que el Código de


Procedimiento Civil establece para la tramitación de los juicios
sumarios, puesto que conforme lo disponen los artículos 682, 683, 684,
685 y 690 del cuerpo legal citado, deducida la demanda el tribunal citará
a las partes a una audiencia del quinto día hábil después de la última
notificación a las partes y, en esa audiencia, la demandada contestará
la demanda y, con su mérito, el tribunal recibirá la causa a prueba o
citará las partes a oír sentencia. En el caso de autos, el tribunal ha
recibido la incidencia de sustitución de procedimiento e impugnación
documentaria deducidas por la demandada, pero, sin embargo, no ha
continuado con el procedimiento conforme a derecho, esto es,
suspendiendo la audiencia para retomarla y recibir a prueba la causa en
caso que fuera procedente, dejando las incidencias para su resolución
en la definitiva como expresamente lo ordena el artículo 690 del Código
de Procedimiento Civil. Atendido lo anterior, se ha incurrido en vicios de
procedimientos que esta Corte debe enmendar conforme lo permite el
artículo 84 del Código de Procedimiento Civil, por lo que actuando este
tribunal de oficio anulará todo lo obrado a partir de la audiencia, a fin de
que el juez no inhabilitado que corresponda proceda a fijar una nueva
fecha para realizar la audiencia, continuando con la tramitación de la
causa como en derecho corresponda. Por lo anterior, cabe omitir
pronunciamiento respecto del recurso de apelación deducido
(considerandos 6º a 8º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 4/05/2018, Rol Nº 738-2018,

Cita online: CL/JUR/2197/2018


3. Facultad del juez de corregir de oficio errores formales

Conforme con lo dispuesto en el artículo 13 inciso 2º de la


Ley Nº 19.968, el juez deberá dar curso progresivo al procedimiento,
salvando los errores formales y omisiones susceptibles de ser
subsanados, pudiendo también solicitar a las partes los antecedentes
necesarios para la debida tramitación y fallo de la causa. Por su parte,
el artículo 84 inciso final del Código de Procedimiento Civil prescribe
que el juez podrá corregir de oficio los errores que observe en la
tramitación del proceso y que podrá, asimismo, tomar las medidas que
tiendan a evitar la nulidad de los actos de procedimiento, pero que no
podrá, sin embargo, subsanar las actuaciones viciadas en razón de
haberse realizado éstas fuera del plazo fatal indicado por la ley. Así las
cosas, la ley faculta al tribunal para hacer de oficio es únicamente
aquello que diga relación con la corrección de aspectos o errores
formales en que haya incurrido, mas no para invalidar o dejar sin efecto
una resolución cuando, con posterioridad a su dictación, considera que
su contenido no se aviene con lo que la ley dispone. De esta forma, si
el tribunal decidió, bien o mal, conceder el recurso de apelación, no
puede con posterioridad, en otra providencia de más de diez días
después, alterar lo ya decidido invocando un supuesto vicio de
procedimiento que no es tal. En este escenario, habiéndose incurrido
ahora sí en un error en la tramitación del proceso, dejándose sin efecto
una resolución en circunstancias que ello resultaba legalmente
improcedente, esta Corte se encuentra en situación de ejercer la
facultad de obrar de oficio, corrigiendo el defecto advertido
(considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 1/08/2018, Rol Nº 2028-2018,

Cita online: CL/JUR/4365/20180

4. Concepto y limitaciones de nulidad procesal

El 19 de octubre de 2018, el juzgador a quo de oficio y en virtud de


las facultades que le otorga el art. 84 del Código de Procedimiento Civil,
declara la nulidad de la resolución y en su lugar dispone "no ha lugar".
Para resolver el asunto cabe tener presente que la nulidad procesal se
ha definido como "la sanción de ineficacia que permite invalidar actos
procesales viciados" (Colombo Campbell). Sin embargo dicha facultad
tiene limitaciones y una de éstas es que las partes dentro de un
procedimiento dispositivo si tienen la posibilidad de discutir la validez
del acto en su mérito, se prefiera dicha vía. Lo que ha ocurrido en la
especie. En efecto el liquidador de la causa ha impugnado la verificación
del actor y es en ese escenario en que debe discutirse el asunto. Atento
a lo expuesto se dejará sin efecto lo resuelto por el sr. Juez a quo y en
su lugar se dispondrá que el incidente de impugnación sea resuelto
como tal por Juez no inhabilitado (considerandos 5º a 9º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valdivia, 18/01/2019, Rol Nº 826-


2018, CL/JUR/339/2019

5. Efecto extensivo de la nulidad procesal

La nulidad procesal se ha definido por la doctrina como la sanción


mediante la cual se priva a un acto o actuación del proceso o a todo él
de los efectos normales previstos por la ley, cuando en su ejecución no
se han guardado las formas prescritas por aquélla. El último inciso del
artículo 84 del Código de Procedimiento Civil dispone: "El juez podrá
corregir de oficio los errores que observe en la tramitación del proceso.
Podrá asimismo tomar las medidas que tiendan a evitar la nulidad de
los actos de procedimiento. No podrá, sin embargo, subsanar las
actuaciones viciadas en razón de haberse realizado éstas fuera del
plazo fatal indicado por la ley". En mérito de lo reflexionado queda en
evidencia el desacierto de los sentenciadores al declarar inadmisible el
recurso de apelación, configurándose un vicio reparable solo con la
declaración de nulidad del acto por el cual así se decidió. A su vez, y de
manera consecuencial, procede disponer la invalidación de todos
aquellos que se realizaron con posterioridad, atendido el efecto
extensivo de la nulidad procesal. Ciertamente corresponde la anulación
con la amplitud indicada, por cuanto los actos procesales no se
constituyen como fenómenos aislados sino concatenados unos a otros,
siendo el siguiente resultado del anterior y, a su vez, el antecedente del
que viene a continuación, resultando una estrecha vinculación entre
unos a otros, de manera que la nulidad de un acto no siempre determina
exclusivamente su ineficacia, sino que puede arrastrar la invalidez de
una serie de gestiones e incluso de todo el proceso (considerandos 7º
a 9º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 6/05/2019, Rol Nº 7329-2018, Cita
online: CL/JUR/3055/2019

6. Nulidad por objeto ilícito no puede ser declarada de oficio

El vicio procesal que facultaría al juez para actuar de oficio —pues en


la especie ninguna de las partes ha pedido la nulidad de la subasta—,
no ha producido perjuicio y, por lo mismo, está impedida la judicatura
de emplear sus facultades correctoras establecidas en el artículo 84
inciso final del Código de Procedimiento Civil. En tales circunstancias,
la nulidad por objeto ilícito que advierte el tribunal a quo, que es una
nulidad regida por las reglas del derecho civil, no puede ser declarada
de oficio y es menester alegarla por quien crea tener interés en ello,
debiendo respetarse, entonces, la regla procesal artículo 83 inciso 1º y
artículo 84 inciso final, ambas disposiciones del Código de
Procedimiento Civil (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 26/07/2019, Rol Nº 13553-2018,

CL/JUR/4233/2019

7. Improcedencia de que Juzgado de Policía Local declare de oficio su


incompetencia si existe prorroga tácita de competencia

Por el contrario, al no haber cuestionado la denunciada y demandada


civil en momento alguno esa circunstancia, es del todo evidente que se
prorrogó tácitamente la competencia del Juzgado de Policía Local para
conocer de la denuncia y demanda civil interpuestas en la causa. Unido
a lo anterior, la aplicación del artículo 84 del Código de Procedimiento
Civil, en este caso, es del todo inoportuna, ya que, por un lado se hace
uso de esa facultad en el momento de encontrarse la causa en estado
de dictarse sentencia, infringiendo además esa norma, pues es claro
que mediante esa disposición legal el tribunal "no puede subsanar las
actuaciones viciadas en razón de haberse realizado éstas fuera del
plazo fatal indicado por la ley", lo que en la especie sucede, toda vez
que si la parte afectada no opuso esa excepción, no podía el tribunal de
base introducir ese elemento de juicio para resolver como lo hizo. Por
otra parte, la mentada resolución deja a la denunciante y demandante
civil sin la posibilidad de recurrir con el arbitrio idóneo para ese yerro
procesal, como es el recurso de casación en la forma, dado que se
evidencia en esa resolución un vicio de ultrapetita, el que no es
procedente respecto de sentencias definitivas o que pongan término al
procedimiento, que dicten los Juzgados de Policía Local
(considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 2/10/2019, Rol Nº 2001-


2018, CL/JUR/5467/2019

8. Obligación de informar derecho a compensación económica

Iniciada una acción por medio de un procedimiento contencioso por


divorcio unilateral, este se amplió adicionándose la petición de
compensación económica, y ordenándose la notificación al demandado
se determinó que no se puso en su conocimiento dicha adición a la
demanda principal. La omisión de la debida notificación al demandado
de la ampliación de la demanda de divorcio a la de compensación
económica, es evidentemente un vicio que es necesario corregir, desde
que el juicio se ha seguido de una manera que excede a los términos
en que se encuentra permitido en el marco regular y contencioso que
establece la ley. De forma tal, se ha transgredido el racional y justo
procedimiento que exige resguardar las formalidades procesales
elementales, con debida noticia al contendiente para el ejercicio de los
derechos que éste estime del caso ejercer. Y todo ello impone la
necesidad a la Corte de corregir de oficio el procedimiento, en
conformidad a lo dispuesto en los artículos 25 y 27 de la Ley 19.968, en
relación a lo dispuesto en los artículos 83 y 84 inciso final del Código de
Procedimiento Civil (considerandos 5º y 8º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 16/12/2019, Rol Nº 613-2019,

CL/JUR/7116/2019

ARTÍCULO 85 (88)

Todo incidente originado de un hecho que acontezca durante el juicio,


deberá promoverse tan pronto como el hecho llegue a conocimiento de la
parte respectiva.
Si en el proceso consta que el hecho ha llegado al conocimiento de la parte,
y si ésta ha practicado una gestión posterior a dicho conocimiento, el
incidente promovido después será rechazado de plano, salvo que se trate de
alguno de los vicios o circunstancias a que se refiere el inciso 3º del
artículo anterior.36

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 55, 80, 114 y 305.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Incidente de abandono del procedimiento puede deducirse en


cualquier tiempo si el ejecutado no ha realizado previamente otra
gestión útil

Determinación de la oportunidad que tenía el ejecutado para


promover la declaración de abandono del procedimiento. Sobre el
particular debe enfatizarse que el analizado corresponde a un incidente
de carácter especial. Como tal, sólo puede estar sujeto a la regla del
artículo 85 del Código de Procedimiento Civil en la medida que no exista
una norma particular que regule la materia. Y esa regla especial existe.
No es otra que la prevista en el artículo 155 del mismo texto legal. De
ella se colige que dicha incidencia puede plantearse en cualquier
tiempo, siempre y cuando el ejecutado no haya realizado previamente
alguna otra gestión que suponga renunciar su derecho a alegar el
abandono. Ése ha sido el caso, dado que la primera gestión efectuada
por el ejecutado, en su primera comparecencia, fue precisamente
formular la incidencia de que se trata. Lo que se viene sosteniendo
resulta coherente con la naturaleza de este instituto, en el sentido que
busca sancionar con la pérdida del procedimiento a quien no ha sido
diligente en la prosecución de sus derechos, en términos que no se
justifica mantener pendiente un proceso en forma indefinida. Por
semejante razón no parece razonable ni resulta acorde con esa entidad
sancionatoria, imponer al demandado más exigencias de plazo —de
tres años— u oportunidad que las contempladas por el legislador en los
artículos 153 y 155 del Código de Procedimiento Civil (considerandos 5º
y 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 11/02/2020, Rol Nº 4376-2019,

Cita online: CL/JUR/10082/2020


2. Si hay norma especial en cuanto a la oportunidad para promover un
incidente debe aplicarse ésta y no la general del artículo 85 Código
de Procedimiento Civil

Los argumentos del recurso de casación de fondo se elaboran sobre


la base de estimar extemporáneo el incidente planteado por el ejecutado
por aplicación del artículo 85 del Código de Procedimiento Civil,
alegaciones todas que se contraponen al texto del artículo 155 del
mismo texto legal, norma especial para este caso y que sólo obliga al
demandado a alegar el abandono en la primera gestión que realice una
vez renovado el procedimiento, situación que aconteció en autos
(considerando 2º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 18/04/2002, Rol Nº 3643-2001,


Cita online: CL/JUR/3261/2002

ARTÍCULO 86 (89)

Todos los incidentes cuyas causas existan simultáneamente deberán


promoverse a la vez. En caso contrario, se observará, respecto de los que se
promuevan después, lo dispuesto en el inciso 3º del artículo 84.37

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 84, 114, 305, 690, 768, 773, 795 y
800. Código Orgánico de Tribunales: artículo 148.

ARTÍCULO 87 (90)

Si el incidente es de aquellos sin cuya previa resolución no se puede seguir


substanciando la causa principal, se suspenderá el curso de ésta, y el
incidente se tramitará en la misma pieza de autos.

En el caso contrario, no se suspenderá el curso de la causa principal, y el


incidente se substanciará en ramo separado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 81, 88 y 112. Código Procesal Penal:
artículo 264.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Procedencia de la suspensión del procedimiento y de los apremios
en virtud de la interposición de un incidente de nulidad de todo lo
obrado por falta de emplazamiento

En la especie, resulta evidente que ha sido deducido un incidente de


aquellos sin cuya previa resolución no se puede seguir sustanciando la
causa principal —incidente de nulidad de todo lo obrado por falta de
emplazamiento—, puesto que los supuestos en que se apoya tal
tramitación están siendo cuestionados, por lo que a la luz del artículo 87
del Código de Procedimiento Civil correspondía suspender el curso de
ésta, en lo que atañe a los apremios dispuestos en contra del
alimentante y amparado, a la espera de que se dirima la controversia
suscitada en los términos precedentemente explicitados. Así las cosas,
al no haber obrado el juez de familia recurrido del modo anteriormente
referido, manteniendo vigentes las ordenes de apremio decretadas en
contra del alimentante, debe necesariamente concluirse que las mismas
no han permanecido dispuestas con cabal observancia de las
formalidades legales, sin que exista mérito que así lo justificara, motivos
por los cuales indefectiblemente corresponde acoger el presente
recurso de amparo, a objeto de restablecer inmediatamente el imperio
del derecho y otorgar tutela efectiva a las garantías de libertad personal
y seguridad individual del amparado (considerandos 6º y 7º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 19/05/2017, Rol Nº 1098-2017,

Cita online: CL/JUR/3161/2017

ARTÍCULO 88

La parte que haya promovido y perdido dos o más incidentes en un mismo


juicio, no podrá promover ningún otro sin que previamente deposite en la
cuenta corriente del tribunal la cantidad que éste fije. El tribunal de oficio y en
la resolución que deseche el segundo incidente determinará el monto del
depósito. Este depósito fluctuará entre una y diez unidades tributarias
mensuales y se aplicará como multa a beneficio fiscal, si fuere rechazado el
respectivo incidente.

El tribunal determinará el monto del depósito considerando la actuación


procesal de la parte y si observare mala fe en la interposición de los nuevos
incidentes podrá aumentar su cuantía hasta por el duplo. La parte que goce
de privilegio de pobreza en el juicio, no estará obligada a efectuar depósito
previo alguno.

El incidente que se formule sin haberse efectuado previamente el depósito


fijado, se tendrá por no interpuesto y se extinguirá el derecho a promoverlo
nuevamente.

En los casos que la parte no obligada a efectuar el depósito previo en razón


de privilegio de pobreza interponga nuevos incidentes y éstos le sean
rechazados; el juez, en la misma resolución que rechace el nuevo incidente,
podrá imponer personalmente al abogado o al mandatario judicial que lo
hubiere promovido, por vía de pena, una multa a beneficio fiscal de una a diez
unidades tributarias mensuales, si estimare que en su interposición ha
existido mala fe o el claro propósito de dilatar el proceso.

Todo incidente que requiera de depósito previo deberá tramitarse en


cuaderno separado, sin afectar el curso de la cuestión principal ni de ninguna
otra, sin perjuicio de lo que se pueda resolver en el fallo del respectivo
incidente.

Las resoluciones que se dicten en virtud de las disposiciones de este


artículo, en cuanto al monto de depósitos y multas se refiere, son
inapelables.38

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 147, 252 y 305. Código Orgánico de
Tribunales: artículos 549, 591 y 600.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Resolución de mero trámite no importa un incidente, y no da lugar a


aplicación de sanción de artículo 88 CPC

Para aplicar la sanción regulada en el artículo 88 del Código de


Procedimiento Civil, al litigante que ha perdido dos o más incidentes en
el mismo juicio, es necesario que se trate de peticiones que constituyan
incidencias del juicio. El artículo 82 del mismo Código considera como
incidente "toda cuestión accesoria de un juicio que requiera
pronunciamiento especial", de manera que para estos efectos no cabe
distinguir respecto de la naturaleza, origen o finalidad de estas
cuestiones accesorias, por lo que habrán de ser considerados tanto los
incidentes ordinarios como los especiales, los de previo y especial
pronunciamiento como los que deben tramitarse en cuaderno separado,
los que deben tramitarse como los que pueden ser resueltos de plano,
y aquellos que deben ser rechazados de plano. Lo importante es que la
petición requiera de un pronunciamiento especial, es decir, que no se
trate de una resolución de mero trámite, sino de una decisión que
requiere conocimiento de causa y que, de acuerdo al artículo 158,
tendrá la naturaleza de un auto o de una sentencia interlocutoria
(considerandos 4º y 5º de la sentencia de casación de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 20/01/2014, Rol Nº 6300-2013,


Cita online: CL/JUR/99/2014

ARTÍCULO 89 (92)

Si se promueve un incidente, se concederán tres días para responder y


vencido este plazo, haya o no contestado la parte contraria, resolverá el
tribunal la cuestión, si, a su juicio, no hay necesidad de prueba. No obstante,
el tribunal podrá resolver de plano aquellas peticiones cuyo fallo se pueda
fundar en hechos que consten del proceso, o sean de pública notoriedad, lo
que el tribunal consignará en su resolución.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 90, 234, 236 y 323. Código de
Comercio: 1113. Código Procesal Penal: artículos 63 y 290. Código del Trabajo: artículo 457.
Código de Justicia Militar: artículos 178 y 179. Ley Nº 18.415, Orgánica Constitucional de los
Estados de Excepción: artículo 19. Ley Nº 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos
Políticos: artículo 56.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Impulso procesal en la tramitación de los incidentes recae sobre el


tribunal

De acuerdo con los artículos 89 y 90 del Código de Procedimiento


Civil, el tribunal debe proseguir con la tramitación del incidente, se haya
evacuado o no el traslado de éste conferido a la contraria, circunstancia
demostrativa de la intención del legislador de que las cuestiones
accesorias no retardaran indebidamente la marcha del juicio principal
hasta llegar a la dictación de la sentencia de término, que es el objetivo
natural en todo litigio ante el órgano jurisdiccional. Por tanto, se
concluye que las normas aludidas dan cuenta que el impulso procesal
en materia de incidentes es, en efecto, del tribunal. Sin embargo, esto
no libera al demandante de su obligación de observar, durante todo el
curso del proceso, la debida diligencia orientada a la búsqueda de una
eficaz resolución a la pretensión que ha plasmado en su demanda,
cometido que se manifiesta en el hecho que, ante la evidencia de haber
omitido el tribunal durante varios meses llevar adelante la causa, el actor
—en resguardo de su propio interés— debió poner remedio oportuno a
dicha situación, solicitando aquello que en derecho correspondía para
la debida prosecución del juicio por él mismo iniciado. En este orden de
ideas, una actitud distinta, permite determinar su desinterés en obtener
la decisión del conflicto que justifica la sanción de abandono del
procedimiento, toda vez que su pasividad no puede verse justificada por
la falta de actuación del tribunal (considerandos 8º y 9º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 16/03/2016, Rol Nº 5148-2015,


Cita online: CL/JUR/1702/2016

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 5/05/2016, Rol Nº 11081-2015,

Cita online: CL/JUR/2957/2016

2. Improcedencia de declarar el abandono del procedimiento si el


impulso procesal se encuentra radicado en el juez

El abandono del procedimiento es una institución de naturaleza


procesal que sanciona la pasividad y desidia de las partes, y que tiene
por finalidad impedir que los juicios se mantengan vigentes por largo
tiempo, lo que, en definitiva, provoca en los litigantes un estado de
incertidumbre procesal y, con ello, un desgaste de orden personal y
material; y en virtud del cual se extingue el derecho de continuar con la
prosecución de un procedimiento ya incoado y de hacer valer sus
efectos, sin que, en todo caso, se extingan las pretensiones o
excepciones que se formularon en él. Por lo tanto, no tiene lugar si el
impulso procesal destinado a dar curso progresivo a los autos, conforme
al principio formativo del procedimiento del orden consecutivo legal, se
encuentra radicado en el juez (considerando 3º de la sentencia de
casación).Es del caso que existen dos incidentes promovidos por las
partes en estado de ser resueltos, lo que implica que el impulso
destinado a la prosecución del juicio estaba radicado en el tribunal, no
correspondía que se decretara que el procedimiento se encontraba
abandonado. Sin embargo, como la judicatura de instancia acogió el
incidente de abandono del procedimiento se debe concluir que conculcó
lo que dispone el artículo 152 del Código de Procedimiento Civil, por
aplicarlo a una situación fáctica que no regula, y, además, lo que
prescriben los artículos 89 y 91 del mismo cuerpo legal, por prescindir
de su aplicación no obstante le imponen la obligación de resolver las
incidencias promovidas sin que sea necesaria actividad alguna de las
partes (considerando 4º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 19/11/2019, Rol Nº 13227-2019,


Cita online: CL/JUR/6594/2019

3. La solicitud de abandono del procedimiento puede ser resuelta de


plano por el tribunal

El abandono del procedimiento se tramita como incidente, por lo que


le resultan aplicables las disposiciones que para tales
artículos consagra el Código de Procedimiento Civil, en particular el
artículo 89, el cual, si bien dispone que promovido un incidente se
concederán tres días para responder, faculta al tribunal para resolver de
plano aquellas peticiones cuyo fallo se pueda fundar en hechos que
consten del proceso. En consecuencia, resulta evidente que la solicitud
de abandono del procedimiento puede ser resuelta de plano por el
tribunal fundado, como en el caso de marras, en el estado en que se
encuentra la causa —con sentencia definitiva dictada y notificada a la
demandada— sin que ello importe incurrir en falta o abuso recurrible de
queja (considerandos 3º a 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 26/10/1994, Rol Nº 22413-1994,


Cita online: CL/JUR/2149/1994

ARTÍCULO 90 (93)

Si es necesaria la prueba, se abrirá un término de ocho días para que


dentro de él se rinda y se justifiquen también las tachas de los testigos, si hay
lugar a ellas.

Dentro de los dos primeros días deberá acompañar cada parte una nómina
de los testigos de que piensa valerse, con expresión del nombre y apellido,
domicilio y profesión u oficio. Sólo se examinarán testigos que figuren en
dicha nómina.

Cuando hayan de practicarse diligencias probatorias fuera del lugar en que


se sigue el juicio, podrá el tribunal, por motivos fundados, ampliar una sola
vez el término por el número de días que estime necesarios, no excediendo
en ningún caso del plazo total de treinta días, contados desde que se recibió
el incidente a prueba.

Las resoluciones que se pronuncien en los casos de este artículo son


inapelables.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 67, 89, 181, 318, 321, 323, 324, 327,
330, 335 y 372. Código Aeronáutico: artículo 19. Ley Nº 18.168, Ley General de
Telecomunicaciones: artículo 16 bis c). Ley Nº 19.253, sobre Protección, Fomento y Desarrollo
de los Indígenas: artículo 56. Código Tributario: artículo 132.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Se hace ineludible recibir el incidente a prueba, ante existencia de


hechos pertinentes, sustanciales y controvertidos

La existencia de hechos sustanciales, pertinentes controvertidos, que


hacen ineludible recibir a prueba la cuestión debatida, como única forma
de permitir a las partes demostrar sus respectivas afirmaciones, de
acuerdo a lo prevenido en el artículo 90 del Código de Procedimiento
Civil. Por lo que, el juez de la causa al no recibir el asunto a prueba,
omitió un trámite esencial, de conformidad con lo establecido en el Nº 3
del artículo 795 del Código de Enjuiciamiento Civil (considerando 3º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/08/2000, Rol Nº 4450-1999,


Cita online: CL/JUR/2082/2000

2. Tercería de posesión supone un derecho excluyente a las


pretensiones procesales de las partes. Tribunal que no recibe
incidente a prueba

La tercería de posesión es una alegación realizada por un tercero


ajeno al juicio que intenta hacer valer un derecho excluyente a las
pretensiones procesales de las partes, las que siendo puestas en
conocimiento del demandante y demandado, deben ser acreditadas
mediante los medios que el legislador ha dispuesto al efecto. En el caso
de autos, se advierte claramente que el tribunal omitió recibir la causa a
prueba, y aún cuando el artículo 90 del Código de Procedimiento Civil
establece la posibilidad de recibir la causa a prueba en un procedimiento
incidental, cuando esta sea necesaria, sin lugar a dudas que en una
tercería, en la cual se alega un hecho, cual es la posesión exclusiva y
excluyente de ciertos bienes, es una circunstancia que debe
acreditarse, aún cuando existan en autos antecedentes tales como
estampados receptoriales que den cuenta de actuaciones realizadas en
presencia del demandado, en el mismo domicilio referido por el
tercerista, pues éstos admiten prueba en contrario (considerandos 2º y
3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones.

Corte de Apelaciones de Santiago, 26/01/2018, Rol Nº 8094-2017,

Cita online: CL/JUR/420/2018

3. Excepción promovida en primera instancia se tramitará como


incidente. Incidente que no fue recibido a prueba

El artículo 90 del Código de Procedimiento Civil, refiriéndose a la


tramitación de los incidentes, establece, en lo que interesa a estos
efectos, que si es necesaria la prueba, se abrirá un término de ocho días
para que dentro de él se rinda y se justifiquen también las tachas de los
testigos, si hay lugar a ellas Por su parte, el artículo 310 del mencionado
texto legal dispone que la excepción de pago efectivo de la deuda,
cuando ésta se funde en un antecedente escrito, podrá oponerse en
cualquier estado del juicio, con las limitaciones que señala, agregando
que si se promueven en primera instancia, cuyo es el caso de autos, se
tramitarán como incidentes, que pueden recibirse a prueba, si el tribunal
lo estima necesario, y se reservará su resolución para definitiva.
Conforme las referidas reflexiones, en especial porque no se recibieron
a prueba las excepciones opuestas, principalmente la de pago, debe
enmendarse la resolución impugnada (considerandos 4º a 6º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 16/08/2018, Rol Nº 1027-2018,

Cita online: CL/JUR/4536/2018


ARTÍCULO 91 (94)

Vencido el término de prueba, háyanla o no rendido las partes, y aun


cuando éstas no lo pidan, fallará el tribunal inmediatamente o, a más tardar,
dentro de tercero día, la cuestión que haya dado origen al incidente.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Declaración de abandono del procedimiento por solicitud de la parte


demandada

Impulso procesal a cargo del tribunal. Improcedencia de la


declaración de abandono del procedimiento Si de acuerdo a los hechos
establecidos por los jueces del fondo, aparece que la substanciación de
la causa principal se encontraba suspendida a petición de la propia
parte demandada, por haber interpuesto un incidente de previo y
especial pronunciamiento, que quedó en estado de resolverse por el
tribunal, cabe señalar que conforme al artículo 152 del Código de
Procedimiento Civil, el procedimiento se entiende abandonado cuando
todas las partes que figuran en el juicio han cesado en su prosecución
durante seis meses, contados desde la fecha de la última resolución
recaída en alguna gestión útil para dar curso progresivo a los autos,
situación que no se da si el incidente se encontraba en estado de ser
resuelto y conforme al artículo 91 del Código precitado, debía el tribunal
haberlo fallado inmediatamente o dentro de tercero día, por lo que el
impulso procesal se encontraba a cargo del propio tribunal, no
correspondiéndole a la demandante gestión alguna para su prosecución
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 27/06/2007, Rol Nº 540-2006,


Cita online: CL/JUR/5942/2007

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 28/04/2009, Rol Nº 1476-2008,

Cita online: CL/JUR/8456/2009

— Corte Suprema, 20/08/1991, Rol Nº 4182,

Cita online: CL/JUR/1288/1991


TÍTULO X DE LA ACUMULACIÓN DE AUTOS

ARTÍCULO 92 (95)

La acumulación de autos tendrá lugar siempre que se tramiten


separadamente dos o más procesos que deban constituir un solo juicio y
terminar por una sola sentencia, para mantener la continencia, o unidad de la
causa. Habrá, por tanto, lugar a ella:

1º Cuando la acción o acciones entabladas en un juicio sean iguales a las


que se hayan deducido en otro, o cuando unas y otras emanen directa e
inmediatamente de unos mismos hechos;

2º Cuando las personas y el objeto o materia de los juicios sean idénticos,


aunque las acciones sean distintas; y

3º En general, siempre que la sentencia que haya de pronunciarse en un


juicio deba producir la excepción de cosa juzgada en otro.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 18, 78, 123, 162, 187, 303 Nº 3, 323,
330, 335 y 377. Código Orgánico de Tribunales: artículo 139. Código Tributario: artículo 134.
Código de Minería: artículo 64. Ley Nº 17.997, orgánica constitucional del Tribunal
Constitucional: artículo 28. Ley Nº 19.366 sanciona Tráfico Ilícito de Estupefacientes y
Sustancias Sicotrópicas: artículo 38. Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de Familia: artículo 17.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Condiciones para la acumulación de autos

El artículo 92 del Código de Procedimiento Civil estatuye que la


acumulación de autos tendrá lugar siempre que se tramiten
separadamente dos o más procesos que deban constituir un solo juicio
y terminar por una sola sentencia, para mantener la continencia, o la
unidad de la causa. Como causal de dicha acumulación se dice en el
Nº 1 de dicho precepto, que ha lugar a ella cuando la acción o acciones
entabladas en un juicio sean iguales a las que se hayan deducido en
otro, o cuando unas y otras emanen directa e inmediatamente de unos
mismos hechos. Y en general, se permite tal acumulación siempre que
la sentencia que haya de pronunciarse en un juicio deba producir la
excepción de cosa juzgada. En artículo 95 del mismo Código Procesal
se indican como requisitos de procedencia de esta reunión de
pretensiones, el que los procesos involucrados se encuentren
sometidos a una misma clase de procedimiento y que la substanciación
de todos ellos se halle en instancias análogas (considerando 9º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 3/05/2012, Rol Nº 4808-2009,


Cita online: CL/JUR/4449/2012

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones La Serena, 31/01/2002, Rol Nº 25817-2002,

Cita online: CL/JUR/3443/2002

2. Litis pendencia por conexidad

El Máximo Tribunal ha definido qué debe entenderse por litis


pendencia. "5º.- Que acerca de la litis pendencia, la jurisprudencia ha
señalado que ella tiene lugar cuando se promueve ante un tribunal el
mismo negocio ya ventilado ante él u otro y, por consiguiente, supone
que hay identidad de partes, de objeto y de causa de pedir entre la
primera y la segunda demanda; y su propósito es el de evitar que se
dicten fallos contradictorios o incompatibles en desmedro de la buena
administración de justicia, como el prevenir y resguardar la autoridad de
la cosa juzgada. Sus requisitos son, por consiguiente, la existencia de
dos pleitos en coetánea tramitación —aun cuando sus respectivos
estadios procesales no sean coincidentes— y, además, los mismos
presupuestos que nutren el instituto de la cosa juzgada: identidad legal
de partes, de objeto pedido y causa de pedir. Incluso, en doctrina se
suma a la anterior la denominada litis pendencia por conexidad,
asociada al caso en que, pese a no concurrir la referida triple identidad,
existe entre los juicios una relación tal que, siguiendo los términos
reglados en el artículo 92 Nº 3 del Código de Procedimiento Civil como
hipótesis normativa del incidente de acumulación de autos, el fallo que
se pronuncie en uno deba producir la excepción de cosa juzgada en
otro." (considerando 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 8/06/2018, Rol Nº 474-2018,


Cita online: CL/JUR/2733/2018

ARTÍCULO 93 (96)

Habrá también lugar a la acumulación de autos en los casos de


procedimiento concursal de liquidación.39

De esta acumulación se trata en la Ley de Reorganización y Liquidación de


Activos de Empresas y Personas.40

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Diferencia entre la acumulación de las causas ordinarias y la


acumulación de los juicios contra el fallido

Según la naturaleza jurídica de la quiebra, ésta no constituye un juicio


propiamente tal, sino un procedimiento destinado a realizar los bienes
de una persona, con el objeto de pagar sus deudas. De acuerdo a lo
señalado, existe una clara diferencia entre lo que debe entenderse por
acumulación en el sistema ordinario, que establece que los procesos
deben constituir un solo juicio y terminar en una sola sentencia y la
establecida en la Ley de Quiebras, consistente en la acumulación de los
juicios pendientes contra el fallido, ante otros tribunales, aquí la ley se
está refiriendo a una simple agregación de dichas causas a la Quiebra,
las que continuarán siendo independientes, tramitándose conforme a su
propio procedimiento, y fallándose en sentencia separada. El fallido en
defensa de sus derechos puede realizar peticiones y ejercer los demás
derechos, en especial ante la negligencia del Síndico, pudiendo
intervenir por sí mismo solicitando el abandono del procedimiento, en
las causas agregadas a la quiebra.

Corte Suprema, 27/08/1987, Rol Nº 10064,


Cita online: CL/JUR/798/1987

ARTÍCULO 94 (97)

La acumulación de autos se decretará a petición de parte, pero si los


procesos se encuentran en un mismo tribunal, podrá éste ordenarla de oficio.
Se considerará parte legítima para solicitarla todo el que haya sido admitido
como parte litigante en cualquiera de los juicios cuya acumulación se
pretende.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 18, 21, 22, 23, 95, 98 y 100.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Excepción de conexidad, requisitos y efectos. Improcedencia de


acumulación de autos. Deber de suspender el juicio mientras se
resuelven las materias conexas

A diferencia del instituto de la litis pendencia, la excepción de


conexidad, bastante más imprecisa, se presenta cuando ante dos
tribunales competentes se conocen litigios diferentes cuyas
pretensiones se encuentran unidas por lazos a tal punto estrechos que
resulta necesario, sino imprescindible, examinarlas conjuntamente o
aguardar la resolución de una de ellas dejando la otra en suspenso, a
fin de que, más allá de lograr una más eficiente administración de
justicia, se eviten decisiones inconciliables o contradictorias. Los grados
de conexidad pueden variar, llegando en algunos casos a derivar en una
verdadera suerte de indivisibilidad procesal (considerando 3º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones). En el caso de autos, la
conexidad se evidencia, con relación al objeto pedido que en las
demandas que conocen ambas jurisdicciones es el mismo, la
declaración de nulidad de determinados contratos de compraventa de
acciones, aunque las partes se encuentren situadas en posiciones
procesales distintas y la causa de pedir pueda presentar matices
diferentes. En ese orden de ideas, la posibilidad de que ambas
jurisdicciones competentes puedan tomar decisiones inconciliables o
contradictorias resulta evidente, lo que permite compartir la decisión en
alzada en lo que dice relación con el acogimiento de la excepción de
conexidad. Sin embargo, se yerra respecto de los efectos asociados al
acogimiento de la excepción de conexidad, pues la acumulación de los
autos ordenada, a más de exceder lo pedido por las partes, no le es
permitido aplicar por el legislador sino a petición de parte, según se
desprende del artículo 94 del Código de Procedimiento Civil,
precisamente porque la única posibilidad de haberlo así decretado no
se presentaba en este caso, es decir, cuando los procesos se
encontraban siendo conocidos por el mismo tribunal. Tampoco
correspondía, como lo pretende la demandada, dar por terminado el
juicio, ya que este no ha concluido ni ha perdido el tribunal, al acogerse
la excepción de conexidad, su competencia para conocer y resolver el
asunto sometido a su decisión. En consecuencia, lo que procedía, era
disponer la suspensión del juicio hasta mientras no se decidieran por el
otro Juzgado de las materias conexas a este juicio sometidas a su
decisión (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 5/10/2018, Rol Nº 14115-2017,

Cita online: CL/JUR/5572/2018

ARTÍCULO 95 (98)

Para que pueda tener lugar la acumulación, se requiere que los juicios se
encuentren sometidos a una misma clase de procedimiento y que la
substanciación de todos ellos se encuentre en instancias análogas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 2º, 3º, 92 y 98. Ley Nº 19.947, sobre
Matrimonio Civil: artículo 24.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Requisitos para la acumulación de autos

En artículo 95 del mismo Código Procesal se indican como requisitos


de procedencia de esta reunión de pretensiones, el que los procesos
involucrados se encuentren sometidos a una misma clase de
procedimiento y que la substanciación de todos ellos se halle en
instancias análogas (considerando 9º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 3/05/2012, Rol Nº 4808-2009,


Cita online: CL/JUR/4449/2012

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 17/10/1991, Rol Nº 4813,

Cita online: CL/JUR/856/1991


ARTÍCULO 96 (99)

Si los juicios están pendientes ante tribunales de igual jerarquía, el más


moderno se acumulará al más antiguo; pero en el caso contrario, la
acumulación se hará sobre aquel que esté sometido al tribunal superior.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 3º.

ARTÍCULO 97 (100)

Siempre que tenga lugar la acumulación, el curso de los juicios que estén
más avanzados se suspenderá hasta que todos lleguen a un mismo estado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 3º, 92 y 98. Código Orgánico de


Tribunales: artículo 109.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Suspensión del procedimiento de las causas más antiguas, no


alcanza a los plazos que afectan el conjunto de los juicios
acumulados. Abandono del procedimiento

El artículo 97 del Código de Procedimiento Civil, cuando dispone que


la suspensión del procedimiento que procede en relación a las causas
más antiguas se hace efectivo hasta que las acumuladas lleguen a un
mismo estado, ha de entenderse dentro de una interpretación
sistemática, en el sentido de que los trámites en aquellas pendientes
quedan detenidos hasta que la o las causas agregadas alcancen el
mismo estadio procesal; pero no así los plazos que afectan al conjunto
de los distintos juicios acumulados, toda vez que desde el momento en
que se dispone su tramitación en un solo todo, pasan a constituir un solo
juicio que debe terminar por una sola sentencia en la forma que
textualmente lo dispone el artículo 92 del Código de Procedimiento Civil.
En este evento, constituyendo un solo juicio el conjunto de acciones
acumuladas, rige en él la obligación del actor de activar ese juicio, bajo
la sanción procesal establecida en los artículos 152 y siguientes de la
misma codificación, esto es el abandono del procedimiento, si no realiza
en él su prosecución durante seis meses, tal como razona y concluye el
Juez del Segundo Juzgado Civil de Coyhaique en la resolución
compulsada (considerandos 1º y 2º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte Suprema, 27/07/1993, Rol Nº 976,


Cita online: CL/JUR/1120/1993

ARTÍCULO 98 (101)

La acumulación se podrá pedir en cualquier estado del juicio antes de la


sentencia de término; y si se trata de juicios ejecutivos, antes del pago de la
obligación. Deberá solicitarse ante el tribunal a quien corresponda continuar
conociendo en conformidad al artículo 96.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 92 y 95.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procedencia de solicitar la acumulación de autos en cualquier estado


del juicio antes de la dictación de sentencia de término

El juez recurrido sostuvo que rechazó el recurso de apelación


interpuesto contra la resolución que rechazó de plano la solicitud de
acumulación de autos, en virtud de lo previsto en el artículo 433 del
Código de Procedimiento Civil, puesto que, con antelación al incidente
de acumulación, ya se había citado a las partes para oír sentencia. Sin
embargo, el recurso de hecho de que se trata habrá de ser acogido sin
mayores dilaciones, teniendo presente para ello que artículo 98 del
Código precitado establece expresamente, en lo pertinente, que "la
acumulación se podrá pedir en cualquier estado del juicio antes de la
sentencia de término" (considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 15/07/2016, Rol Nº 9052-2016,

Cita online: CL/JUR/5493/2016

ARTÍCULO 99 (102)
Pedida la acumulación, se concederá un plazo de tres días a la otra parte
para que exponga lo conveniente sobre ella. Pasado este término, haya o no
respuesta, el tribunal resolverá, haciendo traer previamente a la vista todos
los procesos cuya acumulación se solicite, si todos están pendientes ante él.
En caso contrario, podrá pedir que se le remitan los que se sigan ante otros
tribunales.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 23, 78, 82, 94, 95 y 159.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Solicitud de acumulación de autos; instar por resolución de incidente.


Abandono del procedimiento

El hecho de encontrarse pendiente la resolución de la acumulación de


autos, y aun cuando se pida por este motivo la suspensión del
procedimiento principal, no exime a las partes de instar al tribunal para
resolver tal incidencia y dar curso progresivo a los autos.

Corte de Apelaciones de Puerto Montt, 19/10/1999, Rol Nº 8272-


1999,

Cita online: CL/JUR/2198/1998

ARTÍCULO 100 (103)

De las resoluciones que nieguen la acumulación o den lugar a ella sólo se


concederá apelación en el efecto devolutivo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 186, 188, 189, 192, 193, 194 y 197.

TÍTULO XI DE LAS CUESTIONES DE COMPETENCIA

ARTÍCULO 101 (104)

Podrán las partes promover cuestiones de competencia por inhibitoria o por


declinatoria.
Las que hayan optado por uno de estos medios, no podrán después
abandonarlo para recurrir al otro. Tampoco podrán emplearse los dos
simultánea ni sucesivamente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 17, 82, 87, 102, 111, 303 Nºs. 1 y 3.
Código Procesal Penal: artículos 72 a 74. Código Orgánico de Tribunales: artículos 108, 115 y
siguientes, 134 y siguientes. Código de Justicia Militar: artículos 17, 174 a 176.

ARTÍCULO 102 (105)

La inhibitoria se intentará ante el tribunal a quien se crea competente,


pidiéndole que se dirija al que esté conociendo del negocio para que se inhiba
y le remita los autos.

Si el recurrente pretende acreditar con documentos su derecho, deberá


acompañarlos a la solicitud de inhibitoria, o pedir en ella los testimonios
correspondientes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 101 y 111. Código Orgánico de


Tribunales: artículos 111 y 112.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Oportunidad para promover incidente de nulidad por incompetencia

Si se acoge la inhibitoria por el tribunal que se cree competente, el


tribunal que esté conociendo del asunto, una vez comunicado a éste
esta resolución, debe proceder a resolver dicho incidente y solicitar al
árbitro paralizar, entre tanto, el procedimiento. Se exige que las
solicitantes de nulidad hayan promovido el incidente antes de que se les
notificara válidamente la resolución que las citaba a un comparendo de
designación de árbitro partidor (considerando 10º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 8/06/2001, Rol Nº 512-2001,

Cita online: CL/JUR/5096/2001

ARTÍCULO 103 (106)


Con sólo el mérito de lo que exponga la parte y de los documentos que
presente o que el tribunal de oficio mande agregar, si lo juzga necesario, se
accederá a la solicitud o se negará lugar a ella.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 89, 104, 105, 107 y 108.

ARTÍCULO 104 (107)

Si el tribunal accede, dirigirá al que esté conociendo del negocio la


correspondiente comunicación, con inserción de la solicitud de la parte y de
los demás documentos que estime necesarios para fundar su competencia.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 77, 87, 103, 107 y 112.

ARTÍCULO 105 (108)

Recibida la comunicación, el tribunal requerido oirá a la parte que ante él


litigue, y con lo que ella exponga y el mérito que arrojen los documentos que
presente o que el tribunal mande agregar de oficio, accederá a la inhibición o
negará lugar a ella.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 74, 77, 102, 103, 107 y 112.

ARTÍCULO 106 (109)

Si el tribunal requerido accede a la inhibición y esta sentencia queda


ejecutoriada, remitirá los autos al requeriente.

Si la deniega, se pondrá lo resuelto en conocimiento del otro tribunal, y


cada uno, con citación de la parte que gestione ante él, remitirá los autos al
tribunal a quien corresponda resolver la contienda.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 69, 110, 158 y 174. Código Orgánico
de Tribunales: artículos 190 a 193. Código de Justicia Militar: artículo 60. Auto Acordado de la
Corte Suprema que modifica la distribución de las materias entre las salas de la Corte Suprema,
por especialidades, D.O. 16.04.1996.

ARTÍCULO 107 (112)


Son apelables solamente la resolución que niega lugar a la solicitud de
inhibición a que se refiere el artículo 102 y la que pronuncie el tribunal
requerido accediendo a la inhibición.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 102, 104, 105, 186, 189, 193 y 210.

ARTÍCULO 108 (113)

Las apelaciones de que trata el artículo anterior se llevarán ante el tribunal


a quien correspondería conocer de la contienda de competencia; pero cuando
los tribunales dependan de diversos superiores, iguales en jerarquía,
conocerá de la apelación el superior del tribunal que haya dictado la sentencia
apelada.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 107, 108, 198, 203 y 205. Código
Orgánico de Tribunales: artículos 190 a 192.

ARTÍCULO 109 (114)

El superior que conozca de la apelación o que resuelva la contienda de


competencia declarará cuál de los tribunales inferiores es competente o que
ninguno de ellos lo es.

Para pronunciar resolución, citará a uno y otro litigante, pudiendo pedir los
informes que estime necesarios, y aun recibir a prueba el incidente.

Si los tribunales de cuya competencia se trata ejercen jurisdicción de


diferente clase, se oirá también al fiscal judicial.41

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 159 y 207. Código Orgánico de


Tribunales: artículos 190, 191, 192, 193 y 357. Código de Justicia Militar: artículos 10, 70 A.

ARTÍCULO 110 (115)

Expedida la resolución, el mismo tribunal que la dictó remitirá los autos que
ante él obren al tribunal declarado competente, para que éste comience o
siga conociendo del negocio, y comunicará lo resuelto al otro tribunal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 77, 106 y 210. Código Procesal
Penal: artículo 73.
ARTÍCULO 111 (116)

La declinatoria se propondrá ante el tribunal a quien se cree incompetente


para conocer de un negocio que le esté sometido, indicándole cuál es el que
se estima competente y pidiéndole se abstenga de dicho conocimiento. Su
tramitación se sujetará a las reglas establecidas para los incidentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 82, 87, 101, 109, 110, 112, 303 Nº 1,
306, 307, 464 Nº 1, 690, 768 Nº 1. Código Orgánico de Tribunales: artículo 108. Código de
Derecho Internacional Privado: artículo 397.

ARTÍCULO 112 (117)

Mientras se halle pendiente el incidente de competencia, se suspenderá el


curso de la causa principal; pero el tribunal que esté conociendo de ella podrá
librar aquellas providencias que tengan el carácter de urgentes.

La apelación de la resolución que desecha la declinatoria de jurisdicción se


concederá sólo en el efecto devolutivo.

La tramitación de la causa, en el caso de inhibitoria, continuará después de


notificada la resolución denegatoria a que se refiere el inciso 2º del
artículo 106, sin perjuicio de que esas gestiones queden sin valor si el tribunal
correspondiente declara que el que está conociendo del juicio es
incompetente para ello.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 82, 87, 104, 106 inciso 2º, 191
inciso 2º y 192. Código Procesal Penal: artículos 71 a 74.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procede la suspensión del curso de la causa principal mientras se


halle pendiente el incidente de competencia

En la especie, si bien las partes mediante una cláusula arbitral


sometieron sus conflictos a un juez árbitro de la Cámara de Comercio
de Santiago, en la actualidad discuten la vigencia de dicha cláusula por
lo que en forma previa —la demandada— planteó una declinatoria de
competencia, la que fue desestimada por el juez de árbitro. Dentro de
esta perspectiva, es la jurisdicción arbitral la que aparece cuestionada,
por lo que en forma previa al arbitraje mismo debe dilucidarse dicha
disputa y por ende cobra aplicación la norma de aplicación general del
artículo 112 del Código de Procedimiento Civil. Así, conforme a lo
razonado, el recurso de hecho debe ser acogido (considerandos 3º y 4º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 1/10/2019, Rol Nº 8850-2019,

Cita online: CL/JUR/5388/2019

2. Aplicación supletoria de normas de procedimiento civil opera


únicamente si no se oponen a las disposiciones del Código Procesal
Penal

En relación a las resoluciones impugnables, el procedimiento penal


establece que la apelación sólo procede contra las resoluciones
dictadas por los jueces de garantía y sólo en los casos previstos por la
ley (art. 370 CPP). Son inapelables todas las resoluciones dictadas por
el tribunal de juicio oral en lo penal (art. 64 CPP). Es evidente que las
resolución a que alude la recurrente no es de aquellas que recoge la
hipótesis de la letra b) del artículo 370 del Código Procesal Penal, ya
que dicha referencia se refiere a normas procesales penales que
explícitamente reconozcan la apelación como medio de impugnación,
conclusión que se refuerza desde que el propio recurso de hecho utiliza
como fundamento, la norma de reenvío contenida en el artículo 52 del
Código Procesal Penal para justificar la aplicación del artículo 112,
inciso 2º del Código de Procedimiento Civil. Conviene precisar que el
artículo 52 del Código Procesal Penal establece perentoriamente que:
"Serán aplicables al procedimiento penal, en cuanto no se opusieren a
lo estatuido en este Código o en leyes especiales, las normas comunes
a todo procedimiento contempladas en el Libro I del Código de
Procedimiento Civil". En consecuencia, la aplicación supletoria opera,
únicamente, en la medida que no se opongan a las disposiciones del
Código Procesal Penal y, al encontrarse expresamente regulado el
régimen recursivo en materia penal, resulta improcedente acudir a las
normas comunes de todo procedimiento como fundamento de un
recurso improcedente y no reconocido en las leyes adjetivas penales,
cuestión que conlleva al rechazo del arbitrio intentado
(considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 18/11/2019, Rol Nº 5011-2019,


Cita online: CL/JUR/11759/2019

3. Procedencia del recurso de apelación contra la resolución deniegue


o rechace la cuestión de competencia por declinatoria

Corresponde discernir el marco jurídico que, en ausencia de norma


en el Código procesal Penal, gobierna el incidente especial de cuestión
de competencia por declinatoria. Luego, no corresponde sino aplicar el
artículo 52 del Código Procesal Penal que nos reconduce al Libro
Primero del Código de Procedimiento Civil en tanto cuanto dichas
normas no sean contrarias a las contenidas en su símil de carácter
penal. En este contexto, el artículo 112 inciso 2º del Código de
Procedimiento Civil señala expresamente que la resolución que
deniegue o rechace la cuestión de competencia por declinatoria es
apelable en el sólo efecto devolutivo, razón por la cual, el presente
arbitrio procesal debe ser, necesariamente, acogido declarando
admisible la apelación en contra de la resolución (considerandos 6º a 8º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Talca, 14/12/2018, Rol Nº 999-2018,

Cita online: CL/JUR/6950/2018

TÍTULO XII DE LAS IMPLICANCIAS Y RECUSACIONES

ARTÍCULO 113 (118)

Sólo podrá inhabilitarse a los jueces y a los auxiliares de la Administración


de Justicia para que intervengan en un negocio determinado, en los casos y
por las causas de implicancia o recusación que señala el Código Orgánico de
Tribunales.

Para inhabilitar a los peritos, la parte a quien pueda perjudicar su


intervención, deberá expresar y probar alguna de las causas de implicancia
o recusación determinadas para los jueces, en cuanto sean aplicables a
aquéllos.
Si la recusación afectare a un abogado integrante, el Presidente de la
respectiva Corte procederá de inmediato a formar sala, salvo que ello no fuera
posible por causa justificada.42

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 114, 115, 116, 117, 118, 124, 162
inciso 2º, 361, 413, 416, 632, 768 Nº 2. Código Civil: artículos 1323, 1324 y 1325. Código
Procesal Penal: artículos 76 y 374. Código Orgánico de Tribunales: artículos 194 al 205, 213,
214, 243, 317, 483, 488, 489 y 491. Código del Trabajo: artículo 360. Código de Justicia Militar:
artículos 17, 60, 70A, 107, 189 a 191. Código de Aguas: artículo 244.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Concepto de implicancias y recusaciones

La doctrina define las implicancias y recusaciones como causas


legales que, una vez constatadas y declaradas, hacen que un juez con
competencia suficiente para conocer de un determinado negocio judicial
deje de tenerla, en razón de carecer de la imparcialidad necesaria para
intervenir en él. Las implicancias son verdaderas prohibiciones que
impone el legislador al juez para intervenir en un determinado negocio
judicial, mientras que las recusaciones se han establecido en beneficio
de determinada parte litigante. En consecuencia, las implicancias, a
diferencia de las recusaciones, son irrenunciables y pueden y deben ser
declaradas de oficio o a petición de parte (considerando 8º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 17/02/2017, Rol Nº 747-2016,

Cita online: CL/JUR/561/2017

2. Causal de inhabilidad del artículo 195 Nº 8 no es aplicable a peritos

Tampoco esta Corte comparte lo expuesto por el recurrente sobre la


inhabilidad del perito designado por el reclamante, pues, en
conformidad con lo dispuesto en el artículo 113 inciso segundo del
Código de Procedimiento Civil no le resulta aplicable la causal de
implicancia contenida en el número 8 del artículo 195 del Código
Orgánico de Tribunales, consistente en "haber el juez manifestado su
dictamen sobre la cuestión pendiente con conocimiento de los
antecedentes necesarios para dictar sentencia", toda vez que no se ve
cómo pudiera estimarse que la referida causal, que se orienta al cuidado
de la independencia e imparcialidad de los jueces en el acto del
juzgamiento, sea asimilable a la labor encomendada al perito por el
actor que lo presenta en este tipo de procedimientos (considerando 2º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones, 2/02/2012, Rol Nº 230-2011,


Cita online: CL/JUR/555/2012

3. Requisitos para la aplicación de la causal de recusación del


artículo 196 Nº 17

La circunstancia de que la juez a quo tenga matriculado a su hijo en


un colegio de propiedad de la congregación demandante, no constituye
la causal de recusación prevista en el artículo 196 Nº 17 del Código
Orgánico de Tribunales, por cuanto por dádiva se entiende un servicio
prestado gratuitamente por la parte, lo que no ocurre en el presente
caso en que nos encontramos frente a servicios educacionales
remunerados, no pudiendo concluirse que el servicio remunerado
prestado por la demandante empeñe la gratitud del juez. La resolución
de un tribunal de alzada que rechaza la recusación formulada respecto
del juez a quo, no es recurrible de casación en la forma ni en el fondo,
por no tener el carácter de una sentencia definitiva ni de una
interlocutoria que ponga término al juicio o haga imposible su
continuación.

Corte Suprema, 24/12/2001, Rol Nº 4868-2001,


Cita online: CL/JUR/4870/2001

ARTÍCULO 114 (119)

La declaración de implicancia o de recusación cuando haya de fundarse en


causa legal, deberá pedirse antes de toda gestión que ataña al fondo del
negocio, o antes de que comience a actuar la persona contra quien se dirige,
siempre que la causa alegada exista ya y sea conocida de la parte.

Si la causa es posterior o no ha llegado a conocimiento de la parte, deberá


proponerla tan pronto como tenga noticia de ella. No justificándose esta última
circunstancia, será desechada la solicitud, a menos que se trate de una
implicancia. En este caso, podrá el tribunal imponer a la parte que
maliciosamente haya retardado el reclamo de la implicancia una multa que
no exceda de un sueldo vital.43
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 82, 84, 85, 113 y 166. Código
Procesal Penal: artículos 76 y 284. Código Orgánico de Tribunales: artículos 195, 196 y 200.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Oportunidad para hacer valer la implicancia que afecta al tribunal

Igualmente se rechaza el recurso de casación en la forma por la


causal del artículo 541 Nº 7 del Código de Procedimiento Civil, basada
en el hecho que se permitió conocer de la apelación a un Ministro quien
conoció del primer fallo dictado en autos y por el cual confirmaron la
absolución del otro conductor del mismo accidente que origina el
proceso actual, alegando que existiría una causal de implicancia
contemplada en el Nº 8 del artículo 195 del Código Orgánico de
Tribunales. Si dicha implicancia fue presentada ya iniciada la audiencia
de vista del recurso de apelación, vale decir, obrando conforme lo
dispone el artículo 114 del Código de Procedimiento Civil, aplicable en
materia penal en razón del artículo 43 del Código de Procedimiento
Penal, que exige que la declaración de implicancia, cuando haya de
fundarse en causa legal, como es el caso, debe pedirse antes de toda
gestión que ataña al fondo del negocio, o antes de que comience a
actuar la persona contra quien se dirige, siendo preexistente la causa
alegada y conocida de la parte desde que se dictó la resolución
reprochada (considerando 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte Suprema, 23/11/2003, Rol Nº 2588-2002,


Cita online: CL/JUR/1624/2003

2. Preparación del recurso de casación en la forma

El incidente de implicancia o recusación debe plantearse


formalmente, no pudiendo admitirse con posterioridad como causal de
casación en la forma (considerando 2º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 18/04/2001, Rol Nº 4822-2000,


Cita online: CL/JUR/2211/2001

ARTÍCULO 115 (120)


La implicancia de un juez que desempeñe tribunal unipersonal se hará valer
ante él mismo, expresando la causa legal en que se apoya y los hechos en
que se funda, acompañando u ofreciendo presentar las pruebas necesarias
y pidiéndole se inhiba del conocimiento del negocio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 114, 118, 119 y 120. Código Orgánico
de Tribunales: artículos 195, 202 y 203.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Causal de nulidad del artículo 478 a) del Código del Trabajo —


sentencia que se haya pronunciado por un juez legalmente
implicado— debe ser preparada. Recurrente no ha ofrecido prueba
para sustentar la implicancia

La causal invocada es la letra a) del artículo 478 del Estatuto Laboral


que señala, que, es causal de nulidad, cuando la sentencia se haya
pronunciado por un juez incompetente, legalmente implicado o cuya
recusación se encuentre pendiente o haya sido declarada por tribunal
competente. Como se desprende del texto antes transcrito, el legislador
en esta causal ha previsto tres hipótesis, una de las cuales ha sido la
alegada por el recurrente, esto es, que el juez a cargo de la audiencia
de juicio estaba legalmente implicado sustentándose en los dichos
expresados en ella. El legislador ha previsto el modo de interponer tanto
las causales de implicancia como las de recusación, si uno de los
litigantes estima que concurren tales presupuestos y el modo en que
deben hacerse valer. En la especie, el artículo 115 del Código
Enjuiciamiento Civil, se refiere expresamente a la implicancia que pueda
afectar a un juez de la República. La existencia de un juez imparcial es
uno de los presupuestos del debido proceso, garantía que es
reconocida en la Constitución Política de la República. 5º) Que, respecto
de esta causal, no consta que el recurrente haya dado cumplimiento al
procedimiento dispuesto en los artículos 113 y siguientes del Código de
Enjuiciamiento Civil, ni ofreció prueba al efecto, como tampoco que,
haya sido debidamente preparada pues era menester que, se haya
alegado ante el mismo juez la implicancia que estimó afectarle, lo que
debió acreditar, de acuerdo con el inciso tercero del artículo 481 del
Estatuto Laboral. No resulta suficiente, por tanto, para esta Corte la
transcripción de los supuestos dichos de la magistrada en la audiencia
de juicio. Por lo antes razonado, se rechazará el recurso por esta causal
(considerandos 3º a 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Santiago, 28/05/2020, Rol Nº 3095-2019,

Cita online: CL/JUR/34963/2020

ARTÍCULO 116 (121)

La recusación de los jueces a que se refiere el artículo anterior, y la


implicancia y recusación de los miembros de tribunales colegiados se harán
valer, en los términos que indica dicho artículo, ante el tribunal que, según la
ley, deba conocer de estos incidentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 24. Código Orgánico de Tribunales:


artículos 196, 197, 200 inciso 2º y 204. Código Procesal Penal: artículo 76.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Recusación. Jueza que no ha manifestado opinión sobre la cuestión


de fondo pendiente

Considerando la naturaleza de la acción intentada — precario— y la


resolución que rechaza el recurso de reposición, resulta evidente que la
juez que se pretende inhabilitar no ha manifestado opinión sobre la
cuestión de fondo pendiente, pues se ha limitado a decidir los hechos
sobre los cuales deberá versar la prueba que presentaran las partes, en
base a los alegaciones, excepciones y defensas que constan de los
escritos principales, sin adelantar, razonar o reflexionar sobre la acción
de precario pendiente. En efecto, yerra al incidentista al afirmar que el
sentenciador "pasa a pronunciarse de una cuestión pendiente de
resolución, que es la excepción perentoria de falta de legitimidad
activa", pues esa conclusión no es más que una apreciación de la parte,
carente de fundamento y que se aparta del mérito del proceso. La
recusación debe ser formalmente reclamada por la parte a quien, según
la presunción de la ley, puede perjudicar la falta de imparcialidad de la
juez y para tal efecto el Código de Procedimiento Civil, en sus
artículos 115 y 116, exige que en la solicitud respectiva se exprese la
causal legal en que se apoya y los hechos en que se funda. En la
especie los hechos indicados como fundamento de la causal no la
configuran, motivo por el cual las formalidades legales no se satisfacen
y no es posible salvar la omisión que se advierte con los antecedentes
allegados al proceso (considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 10/08/2018, Rol Nº 6990-2018,

Cita online: CL/JUR/4380/2018

2. Ante implicancia de ministros debe operar subrogación legal, no


contienda de competencia

Se declara improcedente contienda de competencia trabada entre la


Corte de Apelaciones de Temuco y la de Valdivia, donde los ministros a
quienes correspondía conocer como tribunal unipersonal en una causa,
se declararon inhabilitados por implicancia, conforme al artículo 195
Nº 1 del COT. Ante esta situación lo que debió operar, era la
subrogación de tribunales y en ningún caso debía trabarse una
contienda de competencia. Se devuelven los autos a la Corte de
Valdivia para que se proceda a nombrar al ministro que ha de conocer
el asunto.

Corte Suprema, 14/11/2006, Rol Nº 4750-2006,


Cita online: CL/JUR/7118/2006

ARTÍCULO 117 (122)

La implicancia y la recusación de los funcionarios subalternos se


reclamarán ante el tribunal que conozca del negocio en que aquéllos deban
intervenir, y se admitirán sin más trámite cuando no necesiten fundarse en
causa legal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 113, 118, 119 y 125. Código Orgánico
de Tribunales: artículos 195, 196, 483, 485, 487 y 488.

ARTÍCULO 118 (123)

Cuando deba expresarse causa, no se dará curso a la solicitud de


implicancia o de recusación de los funcionarios que a continuación se
mencionan, a menos que el ocurrente haya sido declarado pobre, si no se
acompaña testimonio de haber efectuado un depósito en la cuenta corriente
del tribunal que deba conocer de la implicancia o recusación, de las
cantidades que en seguida se expresan, para responder a la multa de que
habla el artículo 122.

En la implicancia o recusación del Presidente, Ministro o Fiscal de la Corte


Suprema, una unidad tributaria mensual. En la del Presidente, Ministros o
Fiscales de una Corte de Apelaciones, media unidad tributaria mensual. En
la de un juez letrado o de un subrogante legal, juez árbitro, defensor público,
relator, perito, secretario o receptor, un cuarto de unidad tributaria mensual.44

La consignación ordenada en este artículo se elevará al doble cuando se


trate de la segunda solicitud de inhabilitación deducida por la misma parte, al
triple en la tercera y así sucesivamente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 113, 122 y 252. Código Orgánico de
Tribunales: artículo 198.

ARTÍCULO 119 (124)

Si la causa alegada no es legal, o no la constituyen los hechos en que se


funda, o si éstos no se especifican debidamente, el tribunal desechará desde
luego la solicitud.

En el caso contrario, declarará bastante la causal, y si los hechos en que


se funda constan al tribunal o resultan de los antecedentes acompañados o
que el mismo tribunal de oficio mande agregar, se declarará, sin más trámites,
la implicancia o recusación.

Cuando no conste al tribunal o no aparezca de manifiesto la causa alegada,


se procederá en conformidad a las reglas generales, de los incidentes,
formándose pieza separada.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 82, 89, 90, 91, 118, 120 y 125. Código
Orgánico de Tribunales: artículos 195 y 196.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Triple obligación para el tribunal que ha de conocer el incidente

El artículo 119 del Código de Procedimiento Civil establece una triple


obligación para el tribunal que ha de conocer el incidente de recusación
planteado: a) analizar si la causal alegada es o no legal; b) examinar si
los hechos expuestos la constituyen; y c) establecer si éstos se
encuentra debidamente especificados, instancia en la cual ha de
realizar un pronunciamiento de mérito. En la especie, se ha alegado la
causal de recusación del art ículo 196 Nº 8 del Código Orgánico de
Tribunales, tener pendiente alguna de las partes pleito civil o criminal
con el juez o parientes que señala. Examinadas las actuaciones y los
antecedentes tenidos a la vista, dicho fundamento es a todas luces
insuficiente para dar por cumplidas las exigencias de la norma invocada,
pues no se vislumbra la manera en que se configuraría la causal
invocada, pues de los propios dichos del recurrente aparece que no
existe un proceso dirigido directamente contra la juez que se pretende
recusar, razón por la cual ha de desecharse el incidente de recusación
planteado (considerandos 2º a 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 27/11/2015, Rol Nº 12214-2015,

Cita online: CL/JUR/7447/2015

2. Improcedencia de recusación si los hechos que constituyen la causal


invocada no son debidamente especificados por el compareciente

El escrito de recusación carece de los antecedentes que permitan a


la Corte Suprema decidir si a la Juez recurrida le afecta la causal
esgrimida, toda vez que se invoca la existencia de un juicio de
expropiación seguido en contra del Fisco de Chile, en el que la Ministro,
cuya inhabilidad se persigue, tiene la calidad de reclamante y
reclamada. Sin embargo, consta en el sistema computacional que la
causa en la que incide la presente solicitud corresponde a un reclamo
de ilegalidad dirigido en contra de una decisión de amparo del Consejo
para la Transparencia que dispone la entrega de determinada
información, incoando la acción el Consejo de Defensa del Estado en
representación de la Dirección de Presupuesto del Gobierno de Chile.
Luego, no sólo no existe relación alguna entre las materias que son
sometidas a discusión en ambos juicios, sino que, además, tampoco
existe relación entre las partes. En consecuencia, la situación planteada
corresponde a la del artículo 119 inciso 1º del Código de Procedimiento
Civil, por cuanto los hechos que la constituyen no fueron debidamente
especificados por el compareciente, lo que determina que haya de
desecharse desde luego la petición de recusación (considerando 3º de
la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 26/07/2018, Rol Nº 16711-2018,
Cita online: CL/JUR/3994/2018

Fallo en el mismo sentido.

— Corte Suprema, 8/01/2019, Rol Nº 42663-2017,

Cita online CL/JUR/114/2019

3. Causal de recusación de haber el juez manifestado de cualquier


modo su dictamen sobre la cuestión pendiente, siempre que lo
hubiere hecho con conocimiento de ella, acogida

En la especie, efectivamente, los Ministros y Abogado Integrante de


la Corte de Apelaciones de Rancagua, emitieron opinión respecto de la
legalidad del Decreto Alcaldicio, al desechar la acción intentada en tal
sentido. Tal materia se relaciona con el reclamo de ilegalidad pendiente
de resolver, toda vez que en éste se impugna el referido Decreto
Alcaldicio. Si bien se trata de diversos funcionarios municipales, en
ambos reclamos se impugna la legalidad de la misma decisión, por lo
que se tiene por suficientemente acreditada la inhabilidad invocada en
los términos requeridos en el artículo 119 inciso 2º del Código de
Procedimiento Civil. Por otra parte, y considerando que la causal de
recusación invocada en la especie dice relación con el pronunciamiento
que el juez haya efectuado en torno al asunto litigioso, se accederá a la
recusación pedida en relación al Fiscal Judicial, pero sólo en cuanto
ejerza labores jurisdiccionales, esto es, en la medida que sea llamado a
resolver el conflicto de que se trata como miembro de la Corte de
Apelaciones de Rancagua (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/08/2018, Rol Nº 18968-2018,


Cita online: CL/JUR/4307/2018

Fallo en el mismo sentido

— Corte Suprema, 11/10/2019, Rol Nº 28904-2019,

Cita online CL/JUR/6044/2019


ARTÍCULO 120 (125)

Una vez aceptada como bastante la causal de inhabilitación, o declarada


ésta con arreglo al inciso 2º del artículo anterior, se pondrá dicha declaración
en conocimiento del funcionario cuya implicancia o recusación se haya
pedido, para que se abstenga de intervenir en el asunto de que se trata
mientras no se resuelva el incidente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 112, 121 y 126. Código Procesal
Penal: artículos 75 y 76.

ARTÍCULO 121 (126)

Si la inhabilitación se refiere a un juez de tribunal unipersonal, el que deba


subrogarlo conforme a la ley continuará conociendo en todos los trámites
anteriores a la citación para sentencia, y en este estado se suspenderá el
curso del juicio hasta que se declare si ha o no lugar a la inhabilitación.

Si ésta se pide para un juez de tribunal colegiado, continuará funcionando


el mismo tribunal, constituido legalmente, con exclusión del miembro o
miembros que se intente inhibir, y se suspenderá el juicio como en el caso
anterior.

Cuando se trate de otros funcionarios, serán reemplazados, mientras dure


el incidente, por los que deban subrogarlos según la ley; y si se rechaza la
inhibición, el que la haya solicitado pagará al funcionario subrogado los
derechos correspondientes a las actuaciones practicadas por el subrogante,
sin perjuicio de que éste también los perciba.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 112, 120, 166, 768 inciso 2º y 785.
Código de Procedimiento Penal: artículo 49. Código Procesal Penal: artículos 75 y 76.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procedencia de la causal de inhabilidad del artículo 196 Nº 8 del


Código Orgánico de Tribunales

Al haberse hecho parte el Fisco en unos autos sobre fraude, el juez


de la causa declaró que le afectaba la causal de inhabilidad del Nº 8 del
artículo 196 del Código Orgánico de Tribunales, por ser demandante en
causa civil en contra del Fisco. Así, siendo legal la causa de recusación
y habiéndose alegado dentro del plazo señalado por el artículo 125 del
Código de Procedimiento Civil, corresponde acoger la recusación
declarando la inhabilidad reclamada.

Corte Suprema, 13/03/1996, Rol Nº 33365-1995,


Cita online: CL/JUR/2517/1996

ARTÍCULO 122 (127)

Si la implicancia o la recusación es desechada, se condenará en las costas


al que la haya reclamado, y se le impondrá una multa que no baje de la mitad
ni exceda del doble de la suma consignada en conformidad al artículo 118.

Esta multa se elevará al doble cuando se trate de la segunda solicitud de


inhabilitación deducida por la misma parte, al triple en la tercera y así
sucesivamente.

El tribunal fijará la cuantía de la multa, tomando en cuenta la categoría del


funcionario contra quien se haya reclamado, la importancia del juicio, la
fortuna del litigante y la circunstancia de haberse procedido o no con malicia.

Sin perjuicio de lo dispuesto en los incisos precedentes, podrán los


tribunales, a petición de parte o de oficio, después de haberse rechazado en
la causa dos o más recusaciones interpuestas por un mismo litigante, fijar a
éste y compartes un plazo razonable para que dentro de él deduzcan todas
las que conceptúen procedentes a su derecho, bajo apercibimiento de no ser
oídos después respecto de aquellas causales que se funden en hechos o
circunstancias que hayan acaecido con anterioridad al decreto que fija dicho
plazo.

Las recusaciones que se interpongan por causas sobrevinientes a la fecha


de este decreto serán admitidas previa consignación de la multa, y, en caso
de ser desestimadas, pueden también las Cortes imponer al recurrente, a
más de la multa establecida, otra que no deberá exceder de un sueldo vital
por cada instancia de recusación.45

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 118, 144, 146, 147 y 252.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Improcedencia de costas en incidente de recusación


En ausencia del contradictor en la incidencia de recusación, no debió
imponerse costas al solicitante perdidoso, por lo que al proceder de otra
manera el juez incurrió en falta que esta Corte se ve obligada a
enmendar por esta vía.

Corte Suprema, 6/07/1993, Rol Nº 20556-1993,


Cita online: CL/JUR/633/1993

ARTÍCULO 123 (128)

Paralizado el incidente de implicancia o de recusación por más de diez


días, sin que la parte que lo haya promovido haga gestiones conducentes
para ponerlo en estado de que sea resuelto, el tribunal lo declarará de oficio
abandonado, con citación del recusante.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 69, 78, 91, 126, 156 y 160. Código
Orgánico de Tribunales: artículo 194.

ARTÍCULO 124 (129)

Antes de pedir la recusación de un juez al tribunal que deba conocer del


incidente, podrá el recusante ocurrir al mismo recusado, si funciona solo, o al
tribunal de que forme parte, exponiéndole la causa en que la recusación se
funda y pidiéndole la declare sin más trámite.

Rechazada esta solicitud, podrá deducirse la recusación ante el tribunal


correspondiente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 105, 117 y 768 inciso 2º. Código
Orgánico de Tribunales: artículos 195, 196, 197 y 199.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Modalidades a través de las cuales se puede hacer valer la


recusación

Que un juez se encuentre en una situación que configura una causal


de recusación no significa que actuará en forma parcial o impropia, pues
ellas miran a la necesidad de evitar cualquier incertidumbre al respecto
y, en tal sentido, permitir a la parte que pudiera sentirse afectada, que
reclame tal situación, evitando así la intervención del magistrado que se
considera inhábil. La parte a quien se confiere la posibilidad de recusar
decidirá voluntariamente si la hace valer o no, resultando que, de no
verificarla en la forma y plazo que las normas lo estatuyen, se entiende
renunciada (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte
Suprema). La ley otorga dos medios a la parte para hacer valer la
recusación: a) a través de la "recusación amistosa", prevista en el
artículo 124 del Código de Procedimiento Civil; y b) formulando una
incidencia especial ante el tribunal competente, cuya ritualidad señala
el Título XII del Libro Primero del Código mencionado (considerandos 4º
a 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 29/08/2013, Rol Nº 289-2013,


Cita online: CL/JUR/1934/2013

2. Situación de imparcialidad, que excede causales de inhabilidad, debe


encausarse por vía de recusación amistosa

(Voto disidente) Las causales de implicancia y de recusación han sido


establecidas taxativamente por el legislador en los artículos 195 y 196
del Código Orgánico de Tribunales. En efecto, el Máximo Tribunal
estableció que cada vez que un ministro, juez o funcionario auxiliar de
la administración de justicia se encuentre en una situación en que pueda
existir duda sobre su imparcialidad, deberá expresar, con el mayor
detalle y precisión los hechos que constituirían la causal de inhabilidad,
indicando claramente la norma legal que autorizaría su exclusión en el
caso. Agregó el Tribunal Supremo que todos los jueces, abogados
integrantes y relatores deberán dejar la debida constancia con igual
precisión y objetividad de las circunstancias que, a su juicio, puedan
configurar una causal de recusación amistosa a su respecto. En
consecuencia, las causales de inhabilidad son sólo de carácter legal y
no de tipo constitucional. Con todo, si existiera alguna situación en que
pueda estar en duda la imparcialidad del juzgador y que en principio no
se encuadre específicamente en alguna de las causales contempladas
en las disposiciones citadas del Código Orgánico de Tribunales, los
ministros o jueces deberán dejar constancia, con precisión y objetividad,
de toda circunstancia en que pueda estar en duda su imparcialidad, para
que los abogados la puedan hacer valer por la vía de la recusación
amistosa contemplada en el artículo 124 del Código de Procedimiento
Civil, poniéndose ésta en conocimiento de las partes para los efectos
de lo dispuesto en el artículo 125 del mismo texto legal y así resguardar
su imparcialidad. De esta forma, siendo las causales de inhabilidad de
origen legal y, por ende, de derecho estricto, no resulta procedente
aceptar la "inhabilidad" a que se refiere la constancia precedente, sobre
todo cuando el artículo 19 Nº 3 de la Constitución no contempló
expresamente como elemento del debido proceso la imparcialidad del
juzgador, pese a que ello fue tratado y debatido en las sesiones Nºs. 101
y 103 de la Comisión de Estudio de la Nueva Constitución, optándose
en aquella oportunidad por señalar sólo un concepto general en el
inciso 6º del referido numeral y disposición constitucional, de modo que
la inhabilidad constatada debe ser desestimada (considerandos 1º a 4º
de la disidencia de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 22/02/2018, Rol Nº 8088-2017,

Cita online: CL/JUR/924/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Concepción, 29/06/2018, Rol Nº 1020-


2017,

Cita online CL/JUR/3565/2018

— Corte de Apelaciones de Concepción, 29/03/2018, Rol Nº 1606-


2017,

Cita online CL/JUR/5607/2018

ARTÍCULO 125

Producida alguna de las situaciones previstas en el artículo 199 del Código


Orgánico de Tribunales respecto de las causales de recusación, la parte a
quien, según la presunción de la ley, pueda perjudicar la falta de imparcialidad
que se supone en el juez, deberá alegar la inhabilidad correspondiente dentro
del plazo de cinco días contados desde que se le notifique la declaración
respectiva. Si así no lo hiciere, se considerará renunciada la correspondiente
causal de recusación. Durante este plazo, el juez se considerará inhabilitado
para conocer de la causa y se estará a lo dispuesto en el artículo 121 de este
Código.46
Concordancias: Código Orgánico de Tribunales: artículos 194, 196 y 199.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Plazo para hacer valer recusación

Habiendo manifestado la juez (referida) que le afectaba una causal de


recusación, y al no encontrarse presente la parte a quien podría afectar
dicha inhabilidad, ésta contaba con el plazo de cinco días para ejercer
los derechos que le confiere la ley, lapso durante el cual la juez se
considera inhabilitada y por ende impedida de continuar la tramitación
del juicio, sin que pueda, en caso alguno, entenderse que por su
rebeldía e inasistencia a la audiencia única, la parte demandante
hubiera renunciado a la causal (considerando 3º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Iquique, 2/02/2012, Rol Nº 1-2012,

Cita online: CL/JUR/4269/2012

2. Plazo para hacer valer recusación no comienza a correr, si ejecutado


no ha sido notificado de la inhabilidad que afecta al juez

Que acorde a lo reseñado en el motivo tercero y no encontrándose


notificado personalmente el ejecutado (se trataba de la primera
notificación del proceso) de la declaración de inhabilidad del juez titular
de fojas 10, resulta claro que al momento de ser requerido de pago no
podía haber comenzado a correr el plazo de cinco días que la ley
confiere a dicha parte para alegar la inhabilidad a que se ha hecho
referencia, según lo establecido en el citado artículo 125 del Código de
Procedimiento Civil (considerando 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones de Concepción).

Corte de Apelaciones de Concepción, 6/03/2012, Rol Nº 1750-2011,

Cita online: CL/JUR/4299/2012

3. Competencia para conocer de la recusación

Se advierte que en la especie, fue el propio Abogado Integrante quien


puso en conocimiento de las partes la causal de recusación que le
afectaba, hecho que aconteció el día 19 de octubre de 2012, de suerte
que lo que procedía era que la parte, en cuyo favor se ha establecido
dicha causal de inhabilidad la demandada solicitara que aquella se
hiciera efectiva, en los términos a que alude el artículo 125 del Código
de Procedimiento Civil, es decir, alegándola dentro del término de cinco
días contados desde la notificación de la declaración respectiva, bajo
sanción de que si así no lo hiciere, se consideraría renunciada dicha
causal, no obstante que dentro del plazo indicado el abogado se
considera inhabilitado para conocer del asunto. Sin embargo, la
exigencia legal impone que tal causal debe hacerse valer ante el tribunal
llamado a conocer de la misma, esto es, la Corte Suprema, al tenor del
inciso segundo del artículo 204 del Código Orgánico de Tribunales,
único tribunal competente para conocer de ésta. En consecuencia, la
alegación formal a que se refiere el artículo 199 del Código citado, en el
caso en estudio, debía realizarse ante la Corte Suprema y no ante el
afectado o el tribunal que éste compone, como erróneamente lo
realizara el demandante. De suerte que la parte recurrente equivocó el
procedimiento utilizado y no puede pretender subsanarlo luego por la
presente vía (considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 29/08/2013, Rol Nº 289-2013,


Cita online: CL/JUR/1934/2013

ARTÍCULO 126 (131)

Las sentencias que se dicten en los incidentes sobre implicancia o


recusación serán inapelables, salvo la que pronuncie el juez de tribunal
unipersonal desechando la implicancia deducida ante él, aceptando la
recusación en el caso del artículo 124 o declarándose de oficio inhabilitado
por alguna causal de recusación.

Toda sentencia sobre implicancia o recusación será transcrita de oficio al


juez o tribunal a quien afecte.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 77, 115, 124 y 187. Código Orgánico
de Tribunales: artículos 199, 200 y 319.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Improcedencia de la apelación en contra de la resolución que rechaza


de plano un incidente de recusación
El presente recurso de hecho se ha deducido por haberse declarado
inadmisible el recurso de apelación interpuesto por la recurrente en
contra de la resolución que desestimó de plano un incidente de
recusación, aspecto respecto del cual, la Corte Suprema —conforme el
artículo 126 del Código de Procedimiento Civil— carece de
competencia de segunda instancia. Por lo tanto, el actuar de la Corte de
Apelaciones al no conceder el recurso de apelación intentado se ajustó
a derecho, resultando inadmisible el recurso de hecho en cuestión
(Considerandos 7º y 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/06/2016, Rol Nº 31184-2016,


Cita online: CL/JUR/3802/2016

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 9/06/2016, Rol Nº 27794-2016,

Cita online: CL/JUR/4112/2016

2. Recusación debe encontrarse pendiente al momento de dictarse


sentencia, para que se configure causal de casación en la forma

Que según aparece del mérito del proceso, al dictarse la sentencia


impugnada por esta vía, la recusación no se encontraba pendiente
pues, tal como se advierte de la resolución de fojas 149 vuelta, ésta fue
rechazada por extemporánea y, si el abogado recusante, que debió
permanecer en la Secretaría hasta que se fijara la hoja de anuncio,
constató que su causa no aparecía figurando como sin tribunal, debió,
frente a ello y ante la negativa de la recusación, impugnar esta última
resolución, lo que evidentemente no hizo. Es por ello que, no habiendo
existido recusación pendiente al momento de pronunciarse el fallo
recurrido, no se configura la causal invocada y, por ello, deberá
rechazarse el recurso de casación en la forma (considerando 3º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 5/03/1998, Rol Nº 2854-1996,


Cita online: CL/JUR/1458/1998

ARTÍCULO 127 (132)


La recusación y la implicancia que deban surtir efecto en diversos juicios
de las mismas partes, podrán hacerse valer en una sola gestión.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 74. Código Orgánico de Tribunales:


artículos 200 y 201.

ARTÍCULO 128 (133)

Cuando sean varios los demandantes o los demandados, la implicancia o


recusación deducida por alguno de ellos, no podrá renovarse por los otros, a
menos de fundarse en alguna causa personal del recusante.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 19, 20, 21, 22 y 24. Código Orgánico
de Tribunales: artículos 200 inciso 2 y 201.

TÍTULO XIII DEL PRIVILEGIO DE POBREZA

ARTÍCULO 129 (137)

En las gestiones para obtener privilegio de pobreza, los derechos que se


causen sólo podrán reclamarse en caso de que no se dé lugar a la solicitud.47

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 26 y 137. Código Orgánico de


Tribunales: artículos 591 a 602. Código de Derecho Internacional Privado: artículo 382, Código
del Trabajo: artículo 431.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. No se vulnera la igualdad ante la ley ni el debido proceso garantizado


en la Constitución Política de la República por establecer que gozarán
del privilegio de pobreza ciertos órganos del Estado

Servicios de Salud gozan de privilegio de pobreza y sus bienes son


inembargables Que respecto de la garantía consagrada en el número 3
del artículo 19 de la Carta Fundamental, que se estima conculcada por
los preceptos legales transcritos en el fundamento signado con el
número 3º, se debe tener presente que forma parte de la garantía
constitucional denominada de la igualdad ante la justicia, que es una
resultante de la igualdad ante la ley, puesto que implica juzgar por
idénticas normas y aplicar igual tratamiento en juicio, a todos aquellos
que se encuentran en igualdad de condiciones; las que son previstas
por la ley o por la norma aplicable al caso concreto y, por lo mismo, se
encuentra estrechamente relacionada con el derecho al debido proceso.
Dicha garantía comprende las siguientes prerrogativas fundamentales:
el derecho a la defensa jurídica; la ley no puede presumir de derecho la
responsabilidad penal, ningún delito se castigará con otra pena que la
que señale una ley promulgada con anterioridad a su perpetración;
ninguna ley puede establecer penas sin que la conducta que se
sanciona esté expresamente descrita en ella; nadie puede ser juzgado
por comisiones especiales, y, por último, que toda sentencia de un
órgano que ejerza jurisdicción, debe fundarse en un proceso previo
legalmente tramitado. Que por las normas tachadas de
inconstitucionales, en síntesis, se establece que son inembargables los
bienes de los Servicios de Salud destinados al funcionamiento de sus
servicios administrativos y médicos y, además, que dichos órganos del
Estado gozan del privilegio de pobreza en la tramitación de los juicios
en que figuren, esto es, regulan en determinados aspectos el derecho a
la defensa jurídica de los Servicios de Salud, que fueron creados por el
Decreto Ley Nº 2.763 de 1979, teniendo el legislador presente para ello
tanto la función social que desarrollan, como el hecho de que
constituyen el medio por el cual el Estado cumple con el mandato
contenido en el número 9 del artículo 19 de la Carta Fundamental. En
consecuencia, como mediante los preceptos legales ya indicados, no se
priva al recurrente de su derecho a la defensa jurídica, el que, ha
ejercido sin cortapisa, como se aprecia del examen de estos autos, se
debe necesariamente concluir que no se configura la violación que se
denuncia (considerandos 6º y 7º de la sentencia de inaplicabilidad de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 24/10/2001, Rol Nº 4865-2000,


Cita online: CL/JUR/4588/2001

ARTÍCULO 130 (138)

El privilegio de pobreza podrá solicitarse en cualquier estado del juicio y


aun antes de su iniciación, y deberá siempre pedirse al tribunal a quien
corresponda conocer en única o primera instancia del asunto en que haya de
tener efecto.

Podrá tramitarse en una sola gestión para varias causas determinadas y


entre las mismas partes, si el conocimiento de todas corresponde al mismo
tribunal en primera instancia.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 127 y 273. Código Orgánico de


Tribunales: artículos 591 a 602.

ARTÍCULO 131 (139)

El privilegio de pobreza se tramitará en cuaderno separado y se expresarán


al solicitarlo los motivos en que se funde. El tribunal ordenará que se rinda
información para acreditarlos, con sólo la citación de la parte contra quien
litigue o haya de litigar el que solicita el privilegio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 19, 69, 82, 89, 90, 91, 134 y 818.
Código Orgánico de Tribunales: artículos 591 a 602.

ARTÍCULO 132 (140)

Si la parte citada no se opone dentro de tercero día a la concesión del


privilegio, se rendirá la información y se resolverá con el mérito de ella y de
los demás antecedentes acompañados o que el tribunal mande agregar.

Si hay oposición, se tramitará el incidente en conformidad a las reglas


generales.

La apelación de la sentencia que acepte el privilegio de pobreza se


concederá sólo en el efecto devolutivo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 19, 69, 82, 89, 90, 91, 134 y 818.
Código Orgánico de Tribunales: artículos 591 a 602.

ARTÍCULO 133 (141)

En la gestión de privilegio de pobreza serán oídos los funcionarios


judiciales a quienes pueda afectar su concesión, si se presentan oponiéndose
antes de que el incidente se resuelva. Cuando sean varios los que deduzcan
la oposición, litigarán por una cuerda en los trámites posteriores a la
presentación.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 19, 69, 82, 89, 90, 91, 134, 818.
Código Orgánico de Tribunales: artículos 591 a 602.

ARTÍCULO 134 (142)

Serán materia de la información, o de la prueba en su caso, las


circunstancias invocadas por el que pide el privilegio, y además la fortuna del
solicitante, su profesión o industria, sus rentas, sus deudas, las cargas
personales o de familia que le graven, sus aptitudes intelectuales y físicas
para ganar la subsistencia, sus gastos necesarios o de lujo, las comodidades
de que goce, y cualesquiera otras que el tribunal juzgue conveniente
averiguar para formar juicio sobre los fundamentos del privilegio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 90 y 818. Código Orgánico de


Tribunales: artículos 591 a 602.

ARTÍCULO 135 (143)

Se estimará como presunción legal de pobreza la circunstancia de


encontrarse preso el que solicita el privilegio, sea por sentencia condenatoria,
sea durante la substanciación del juicio criminal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 426. Código Civil: artículo 141. Código
Orgánico de Tribunales: artículos 550, 593 y 600.

ARTÍCULO 136 (144)

Podrá dejarse sin efecto el privilegio después de otorgado, siempre que se


justifiquen circunstancias que habrían bastado para denegarlo.

Podrá también otorgarse el privilegio después de rechazado, si se prueba


un cambio de fortuna o de circunstancias que autoricen esta concesión.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 134, 175, 181, 182 y 821.

ARTÍCULO 137 (136)


Cuando el litigante declarado pobre no gestione personalmente ni tenga en
el proceso mandatario constituido en forma legal, entrará a representarlo el
procurador de pobres, sin que sea necesario mandato expreso.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 6º.

TÍTULO XIV DE LAS COSTAS

ARTÍCULO 138 (145)

Cuando una de las partes sea condenada a pagar las costas de la causa,
o de algún incidente o gestión particular, se procederá a tasarlas en
conformidad a las reglas siguientes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 25, 144 a 147, 337, 343, 347, 411,
471, 510, 513, 562 y 816. Código Aeronáutico: artículo 122, Código del Trabajo: artículo 445.
Código Tributario: artículo 148.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Regulación de costas personales. Resolución que dispone condena


en costas en juicio simplificado. Objeción de costas personales

Los artículos 138 y siguientes del Código de Procedimiento Civil, se


refieren a las costas definiéndolo como aquellos gastos en la formación
del proceso y en horarios de abogados y otros actores del juicio el
recurso. Tanto la regulación de costas personales, como la posterior
objeción de éstas, constituye una cuestión accesoria y distinta al juicio
penal propiamente tal. Así las cosas, la materia sobre la cual versa la
resolución apelada —que dispone la condena en costas, en el marco de
un juicio oral simplificado— se encuentra regulada en los artículos 138
y siguientes del Código de Procedimiento Civil, motivo por el cual, a su
respecto, tiene aplicación la norma del artículo 52 del Código Procesal
Penal, que se remite a las reglas comunes de todo procedimiento del
Código de Procedimiento Civil. En consecuencia, tratándose la decisión
apelada de una sentencia interlocutoria, conforme lo dispone el
artículo 158 del Código de Procedimiento Civil, por cuanto falla un
incidente del juicio —la objeción de las costas personales—
estableciendo derechos permanentes a favor de las partes, es del todo
procedente lo dispuesto en el artículo 187 del mismo cuerpo legal, el
que señala que este tipo de resoluciones son apelables, por lo que el
recurso impetrado en contra de la resolución que condena en costas ha
de concederse, motivo por el cual el presente recurso de hecho ha de
acogerse (considerandos 1º y 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte Suprema, 12/10/2018, Rol Nº 5253-2018,


Cita online: CL/JUR/5914/2018

ARTÍCULO 139 (146)

Las costas se dividen en procesales y personales.

Son procesales las causadas en la formación del proceso y que


correspondan a servicios estimados en los aranceles judiciales.

Son personales las provenientes de los honorarios de los abogados y


demás personas que hayan intervenido en el negocio, y de los defensores
públicos en el caso del artículo 367 del Código Orgánico de Tribunales.

Los honorarios de los abogados se regularán de acuerdo con el arancel


fijado por el respectivo Colegio Provincial de Abogados y a falta de éste, por
el del Consejo General del Colegio de Abogados.

El honorario que se regule en conformidad al inciso anterior, pertenecerá a


la parte a cuyo favor se decretó la condenación en costas; pero si el abogado
lo percibe por cualquier motivo, se imputará al que se haya estipulado o al
que deba corresponderle.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 140, 143 y 337. Código Civil:
artículo 2472. Código Procesal Penal: artículo 46. Código Orgánico de Tribunales: artículos 591
a 602. Código del Trabajo: artículo 427.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Determinación de la cuantía de las costas personales

Que las costas personales son las provenientes de los honorarios de


los abogados y demás personas que hayan intervenido en el negocio, y
de los defensores públicos en el caso del artículo 367 del Código
Orgánico de Tribunales. Los honorarios de los primeros se regularán de
acuerdo con el arancel fijado por el respectivo Colegio Provincial de
Abogados y, a falta de éste, por el del Consejo General del Colegio de
la Orden, tal cual lo expresa el artículo 139 del Código de Procedimiento
Civil (considerando 4º sentencia de la Corte de Apelaciones de
Concepción).

Corte de Apelaciones de Concepción, 24/09/2012, Rol Nº 442-2012,

Cita online: CL/JUR/2094/2012

2. Procedencia de tasar solo las costas procesales útiles

El inciso 2º del artículo 139 del Código de Procedimiento Civil dispone


que son procesales, las costas causadas en la formación del proceso y
que correspondan a servicios estimados en los aranceles judiciales.
Que, sin embargo, para ser consideradas como tales e imputárselas a
la parte que ha sido condenada a su pago, es necesario que amén de
ser estos gastos causados en la formación del proceso, deban ser útiles
al mismo, ya que por expresa disposición del artículo 140 del Código
recién citado sólo se tasarán las costas procesales útiles, eliminándose
las que correspondan a diligencias o actuaciones innecesarias. El fin,
en general, del proceso como mecanismo social destinado a asegurar
la paz civil al término de un procedimiento reglado donde un tercero
imparcial dice el derecho aplicable a los intereses divergentes de las
partes, es precisamente la decisión del conflicto, de manera que, en la
realización contenciosa de los derechos en pugna, lo determinante es
la sentencia, que se apoya en los medios que ofrecen y aportan las
partes para poder llegar a la decisión del asunto. Por ello, la utilidad o
inutilidad de las costas dice relación con la pertinencia o impertinencia
de las diligencias o actuaciones que las causaron, y la pertinencia de
ellas debe medirse en relación con su contribución a la elaboración de
la sentencia que decide el conflicto, lo que exige, en un procedimiento
reglado, que éstas se hayan producido, además, no sólo en la forma,
sino en la oportunidad que la ley establece. De los antecedentes de
autos, aparece claro que las tres pericias decretadas, necesarias en un
primer momento, de ahí que el juez las haya ordenado como medida
para mejor resolver, al no rendirse oportunamente por la demandante
no pudieron por ello contribuir a la decisión del asunto controvertido, lo
que determinó su inutilidad objetiva para la formación del proceso,
impidiendo que pudieran ser tasadas al momento de determinar las
costas procesales que eran de cargo de la parte vencida al ser
condenada al pago de ellas, por lo que corresponde excluirlas de la
liquidación del crédito (considerandos 5º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 7/06/2018, Rol Nº 7943-2017,

Cita online: CL/JUR/2810/2018

ARTÍCULO 140 (147)

Sólo se tasarán las costas procesales útiles, eliminándose las que


correspondan a diligencias o actuaciones innecesarias o no autorizadas por
la ley, y las de actuaciones o incidentes en que haya sido condenada la otra
parte.

El tribunal de la causa, en cada instancia, regulará el valor de las


personales, y avaluará también las procesales con arreglo a la ley de
aranceles. Esta función podrá delegarla en uno de sus miembros, si es
colegiado, y en su secretario respecto de las costas procesales.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 70, 139 y 143.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Tribunal competente para regular costas personales y procesales

Por otra parte, el artículo 140 inciso 2º del Código de Procedimiento


Civil señala que el tribunal de la causa, en cada instancia, regulará el
valor de las costas personales y avaluará también las costas procesales
con arreglo a la ley de aranceles. De este modo, ha sido precisamente
el legislador el que ha señalado expresamente el tribunal encargado de
conocer de la regulación de las costas, sin que válidamente pueda
someterse a otro, puesto que en tal caso éste es incompetente. Así
sucede en la especie, donde el actor demanda en juicio ordinario de
cobro de pesos la tasación de las costas procesales y la regulación de
las costas personales correspondientes a una causa seguida ante otro
tribunal, razón por la cual corresponde acoger la excepción dilatoria de
incompetencia opuesta por el demandado (considerando 7º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 10/01/2011, Rol Nº 9343-2010,


Cita online: CL/JUR/284/2011

2. Procedencia de tasar solo las costas procesales útiles

El inciso 2º del artículo 139 del Código de Procedimiento Civil dispone


que son procesales, las costas causadas en la formación del proceso y
que correspondan a servicios estimados en los aranceles judiciales.
Que, sin embargo, para ser consideradas como tales e imputárselas a
la parte que ha sido condenada a su pago, es necesario que amén de
ser estos gastos causados en la formación del proceso, deban ser útiles
al mismo, ya que por expresa disposición del artículo 140 del Código
recién citado sólo se tasarán las costas procesales útiles, eliminándose
las que correspondan a diligencias o actuaciones innecesarias. El fin,
en general, del proceso como mecanismo social destinado a asegurar
la paz civil al término de un procedimiento reglado donde un tercero
imparcial dice el derecho aplicable a los intereses divergentes de las
partes, es precisamente la decisión del conflicto, de manera que, en la
realización contenciosa de los derechos en pugna, lo determinante es
la sentencia, que se apoya en los medios que ofrecen y aportan las
partes para poder llegar a la decisión del asunto. Por ello, la utilidad o
inutilidad de las costas dice relación con la pertinencia o impertinencia
de las diligencias o actuaciones que las causaron, y la pertinencia de
ellas debe medirse en relación con su contribución a la elaboración de
la sentencia que decide el conflicto, lo que exige, en un procedimiento
reglado, que éstas se hayan producido, además, no sólo en la forma,
sino en la oportunidad que la ley establece. De los antecedentes de
autos, aparece claro que las tres pericias decretadas, necesarias en un
primer momento, de ahí que el juez las haya ordenado como medida
para mejor resolver, al no rendirse oportunamente por la demandante
no pudieron por ello contribuir a la decisión del asunto controvertido, lo
que determinó su inutilidad objetiva para la formación del proceso,
impidiendo que pudieran ser tasadas al momento de determinar las
costas procesales que eran de cargo de la parte vencida al ser
condenada al pago de ellas, por lo que corresponde excluirlas de la
liquidación del crédito (considerando 5º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Santiago, 7/06/2018, Rol Nº 7943-2017,

Cita online: CL/JUR/2810/2018

ARTÍCULO 141 (148)

Hecha la tasación de costas, en la forma prevenida por los artículos


anteriores, y puesta en conocimiento de las partes, se tendrá por aprobada si
ellas nada exponen dentro de tercero día.

ARTÍCULO 142 (149)

Si alguna de las partes formula objeciones, podrá el tribunal resolver de


plano sobre ellas, o darles la tramitación de un incidente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 69, 89, 90 y 91.

ARTÍCULO 143 (150)

La tasación de costas, hecha según las reglas precedentes, se entenderá


sin perjuicio del derecho de las personas cuyos honorarios se hayan tasado,
para exigir de quien corresponda el pago de sus servicios en conformidad a
la ley.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 140 y 697.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Derecho de las personas cuyos honorarios se hayan tasado, para


exigir de quien corresponda el pago de los servicios en conformidad
a la ley

Por otro lado, respecto de los honorarios que genera el peritaje, el


recurrente ha discutido la procedencia del pago de ellos aduciendo que
no fue condenado en costas. Sobre el particular, la sentencia se
pronunció resolviendo la alegación en virtud del artículo 143 del Código
de Procedimiento Civil que deja a salvo de la tasación de las costas, el
derecho de las personas cuyos honorarios se hayan tasado, para exigir
de quien corresponda el pago de los servicios en conformidad a la ley,
norma que el recurso en estudio no invoca como infringida
(considerando 11º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/10/2019, Rol Nº 22964-2019,


Cita online: CL/JUR/6290/2019

ARTÍCULO 144 (151)

La parte que sea vencida totalmente en un juicio o en un incidente, será


condenada al pago de las costas. Podrá con todo el tribunal eximirla de ellas,
cuando aparezca que ha tenido motivos plausibles para litigar, sobre lo cual
hará declaración expresa en la resolución.

Lo dispuesto en este artículo se entiende sin perjuicio de lo establecido en


otras disposiciones de este Código.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 25, 138, 337, 343, 347, 411, 471, 510,
513 y 816. Código Procesal Penal: artículos 47 a 50. Código Orgánico de Tribunales:
artículo 600. Ley Nº 18.045, Ley de Mercado de Valores: artículo 30. Ley Nº 17.997, Orgánica
Constitucional del Tribunal Constitucional: artículo 62.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Concepto de costas judiciales

Las costas judiciales son los gastos que se originan durante una
tramitación judicial y que son una consecuencia directa de ella, y
conforme al artículo 144 del Código de Procedimiento Civil, es la parte
que sea vencida totalmente en un juicio o en un incidente, quien deberá
ser condenada al pago de las costas, lo que debe relacionarse con el
artículo 138 del mismo cuerpo legal que señala cuándo debe
procederse a la tasación de las costas. Así entonces, el examen de los
autos que se conocen permite constatar que el Servicio de Tesorerías
invoca un privilegio o preferencia sobre las costas judiciales, que
establece el artículo 844 del Código de Comercio, en circunstancias de
que ellas no han sido resueltas ni tasadas en el juicio, y por tanto se
trata de un derecho futuro e incierto que de ninguna manera podría ser
calificado en los términos que dispone dicha disposición legal, o lo que
es igual, en ningún caso puede invocarse como crédito privilegiado
sobre la nave las costas judiciales que aún no han sido resueltas en la
litis y, por lo mismo, no tasadas (considerandos 6º y 7º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Coihaique, 5/05/2017, Rol Nº 54-2017,

Cita online: CL/JUR/2627/2017

2. Naturaleza jurídica de las costas procesales

Las costas corresponden a "los gastos que se originan durante una


tramitación judicial y que son una consecuencia directa de ella... están
formadas por los gastos que necesariamente ha debido efectuar el
vencedor para hacer triunfar su derecho" —Stoehrel Maes—. En otras
palabras las costas son los gastos inmediatos y directos que origina una
gestión judicial y que deben ser soportados por las partes. Son,
entonces, una sanción procesal que se impone mediante una resolución
judicial (sentencia definitiva, interlocutoria o auto) y que obliga al
litigante sancionado a pagar los gastos de la causa. La regla general en
esta materia se encuentra contenida en el artículo 144 del Código de
Procedimiento Civil que dispone que la parte vencida totalmente en
juicio o en un incidente será condenada al pago de las costas
(considerando 4º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 20/06/2019, Rol Nº 26149-2018,


Cita online: CL/JUR/3543/2019

3. Condena en costas

Alcance de las expresiones "vencida totalmente" y "motivos plausibles


para litigar". En materia de costas, el artículo 144 del Código de
Procedimiento Civil dispone que la parte que sea vencida totalmente en
un juicio o incidente, será condenada al pago de las costas, sin
embargo, podrá el tribunal eximirla de ellas, cuando aparezca que ha
tenido motivos plausibles para litigar. La expresión "vencida totalmente"
implica que el demandante obtuvo en la decisión del litigio, todo lo que
pidió en la demanda. En cambio, la jurisprudencia ha sostenido que, si
se ordena pagar al demandado una suma inferior a la solicitada en la
demanda, no puede considerársele totalmente vencido. En cuanto a la
expresión "motivos plausibles" importa que el juez en cada caso
particular deberá ponderar todos y cada uno de los hechos que
conforman el proceso, y si éstos los encuentra atendibles, admisibles o
recomendables procederá a eximir de las costas al vencido por
considerar que en el caso sub lite éste ha tenido motivos plausibles para
litigar, de manera que, tal determinación dependerá de la conducta
procesal de la parte vencida (considerando 3º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 9/12/2016, Rol Nº 1144-2016,

Cita online: CL/JUR/9079/2016

4. Improcedencia de incorporar la regulación de la condena en costas


en la sentencia definitiva

El artículo 144 del Código de Procedimiento Civil, ubicado en el


título XIV del Libro I relativo a las "Disposiciones Comunes a todo
Procedimiento", cuya aplicación no está excluida en el Auto Acordado
sobre recurso de protección, sólo autoriza la condena en costas como
concepto integrante de una sanción para la parte vencida totalmente en
un juicio o en un incidente, siendo la situación de autos asimilable al
evento de resultar vencido en un juicio, contexto este último en el que
cabe comprender el sentido del Nº 11 del Auto Acordado sobre recurso
de protección. Por tanto, no existe fundamento jurídico para incorporar
la regulación de las costas en la sentencia definitiva en tanto esa
cuantificación, de ser procedente, se encuadra en un procedimiento
especial reglado al efecto en que se otorga a las partes el derecho a ser
oídas y plantear las objeciones pertinentes, dando cabida, además, al
principio de bilateralidad de la audiencia (considerandos 1º y 2º de la
prevención de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/10/2018, Rol Nº 22508-2018,


Cita online: CL/JUR/5562/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 15/11/2018, Rol Nº 23975-2018,

Cita online: CL/JUR/6381/2018

— Corte Suprema, 28/03/2018, Rol Nº 40490-2017,

Cita online: CL/JUR/1889/2018


5. Improcedencia de impugnar la condena en costas mediante recurso
de casación en el fondo

El Máximo Tribunal ha resuelto reiteradamente que la decisión que


recae sobre la imposición de las costas no reviste el carácter de
sentencia definitiva pues se trata de una medida de carácter económico,
y la circunstancia de que ese pronunciamiento se contenga en una
sentencia interlocutoria que pone término al juicio, o incluso en la misma
sentencia definitiva, sólo responde a un imperativo legal sin que por tal
motivo participe de su naturaleza jurídica. Por consiguiente, el recurso
de casación en el fondo referido a este acápite, no puede ser admitido
a tramitación (considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 19/08/2019, Rol Nº 6305-2019,


Cita online: CL/JUR/4650/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 31/12/2018, Rol Nº 39383-2017,

Cita online: CL/JUR/7164/2018

— Corte Suprema, 26/06/2018, Rol Nº 4392-2018,

Cita online: CL/JUR/3149/2018

6. Improcedencia de condenar en costas al ejecutante que no fue


vencido totalmente en el juicio

Ante la carencia de regulación especial para el desistimiento de la


demanda con reserva de acciones, debe aplicarse la regla general en
materia de costas, esto es, la contemplada en el artículo 144 del Código
de Procedimiento Civil, que dispone que la condena en costas será
aplicable cuando la parte sea vencida totalmente en un juicio o
incidente. Establecido lo anterior, cabe precisar que en la especie el
ejecutante no fue vencido totalmente en el juicio, ya que el actor se
desistió de la demanda, es decir, no existe una sentencia definitiva que
decida absolver a la parte ejecutada de su obligación de pago. Por
último, tampoco cabe aplicar en la especie la existencia o no del motivo
plausible para litigar, pues esto se aplica cuando el litigante ha sido
vencido totalmente, circunstancia que, como se dijo, no ocurrió en la
especie. En consecuencia, encontrándose en la situación que se ha
planteado en autos, dentro de la hipótesis que contempla el artículo 467
del Código de Procedimiento Civil, que le da el derecho a desistirse de
la demanda ejecutiva sin que le sea aplicable por el contrario las normas
del 144 y 148 y siguientes del citado Código, el ejecutante debe ser
eximido del pago de las costas del mismo (considerandos 3º a 6º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 13/06/2019, Rol Nº 261-2019,

Cita online: CL/JUR/3592/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 15/03/2019, Rol Nº 227-2019,

Cita online: CL/JUR/1484/2019

7. Regulación especial de las costas en el Código del Trabajo

El artículo 144 del Código de Procedimiento Civil no es aplicable en


materia laboral, comoquiera que la regulación de costas se encuentra
expresamente normada en el artículo 459 Nº 7 del Código del Trabajo,
norma que impone al sentenciador, si resuelve absolver del pago de las
costas, independientemente si la parte ha sido vencida total o
parcialmente en el juicio, hacer declaración expresa de los motivos que
tuviese para ello. Además, para que pueda prosperar el recurso de
nulidad, la infracción de ley debe influir en lo dispositivo de la sentencia
cuestión que no resulta aplicable al pronunciamiento que realiza la
sentencia sobre las costas de la causa. En efecto, como ha reiterado
uniformemente la doctrina la condena en costas no comparte la
naturaleza de sentencia definitiva, pues se trata de una medida de orden
económico que no forma parte del asunto controvertido
(considerandos 11º y 12º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 21/12/2018, Rol Nº 1209-2018,

Cita online: CL/JUR/7015/2018

Fallo en el mismo sentido.


— Corte de Apelaciones de Santiago, 17/01/2019, Rol Nº 1775-2018,

Cita online: CL/JUR/300/2019

8. Resolución que recae sobre condena en costas no es susceptible de


recurso de casación en el fondo

En lo que concierne a la denuncia de vulneración del artículo 144 del


Código de Procedimiento Civil, cabe señalar que el artículo 767 del
Código de Procedimiento Civil admite el recurso de casación en el
fondo, en lo que interesa, contra sentencias definitivas inapelables y
contra sentencias interlocutorias cuando ponen término al juicio o hacen
imposible su continuación, dictadas por Cortes de Apelaciones, siempre
que se hayan pronunciado con infracción de ley y esta infracción haya
influido substancialmente en lo dispositivo de la sentencia. Dicho lo
anterior, es necesario recordar que esta Corte ha resuelto
reiteradamente que la decisión que recae sobre la imposición de las
costas no reviste el carácter de sentencia definitiva pues se trata de una
medida de carácter económico, y la circunstancia de que ese
pronunciamiento se contenga en una sentencia interlocutoria que pone
término al juicio, o incluso en la misma sentencia definitiva, sólo
responde a un imperativo legal sin que por tal motivo participe de su
naturaleza jurídica. Por consiguiente, la resolución impugnada por esta
vía no reviste la característica de aquellas aludidas en el motivo anterior
y el recurso de nulidad intentado no podrá ser admitido a tramitación
(considerandos 9º y 10 de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 11/06/2019, Rol Nº 2485-2019,


Cita online: CL/JUR/5264/2019

9. Improcedencia de condenar en costas al trabajador que acude a


tribunales única y exclusivamente en defensa de sus derechos

Procede acoger el recurso de nulidad en lo relativo a la infracción al


artículo 144 del Código de Procedimiento Civil, puesto que en el fallo
recurrido se aplicó erróneamente la norma contenida en dicho precepto
y que faculta al juez para absolver de costas a la parte que tuvo motivos
plausibles para litigar, porque en la especie, cómo fácil resulta
lógicamente inferir, es de toda evidencia que el actor tuvo en este caso
motivos plausibles para deducir la demanda de autos, por tratarse de
un trabajador —la parte más débil de la relación laboral— que acudió a
los tribunales única y exclusivamente en defensa de sus derechos. El
actor, entonces, no pudo ser condenado al pago de las costas de la
instancia si la jueza referida hubiera aplicado e interpretado
correctamente la disposición aludida. De este modo, procede anular el
fallo en cuanto al capítulo de las costas (considerando 7º de la sentencia
de nulidad).

Corte de Apelaciones de Concepción, 23/12/2019, Rol Nº 333-2019,

Cita online: CL/JUR/12226/2019

10. Acceder parcialmente a una demanda no obliga al sentenciador


laboral a eximir del pago de costas

Si bien la sentencia del grado comete un error en el cálculo del 50%


de recargo de la indemnización por años de servicio, otorgando más, tal
yerro para su enmienda no requiere la invalidación de la sentencia, pues
puede ser corregido de oficio por esta Corte conforme lo autoriza el
artículo 482 del Código del Trabajo, desde que se reduce a una
operación aritmética mal ejecutada. Asimismo, tampoco se puede
estimar vulnerado el artículo 144 del Código de Procedimiento Civil,
norma de aplicación supletoria en virtud del artículo 432 del Código del
Trabajo, puesto que se condenó a la recurrente al pago de las costas
de la causa a pesar de no haber sido totalmente vencida. Conforme al
artículo 459 Nº 6 del Código del Trabajo, la sentencia definitiva debe
contener: "El pronunciamiento sobre el pago de costas y, en su caso,
los motivos que tuviere el tribunal para absolver de su pago a la parte
vencida". Del tenor de esta disposición se desprende que la regla es la
condena en costas a la parte que ha sido vencida, por lo que si va a ser
liberada de su pago, se deben explicitar los motivos por lo que se
absuelve. Por consiguiente, acceder parcialmente a una demanda no
obliga a tener que eximir del pago de las costas. Más aún en este caso,
en que la única pretensión a la que no se dio lugar fue la relativa al pago
por días domingos trabajados, acogiéndose en todo lo demás esta
acción por despido injustificado. Así las cosas, la regla que instituye el
citado artículo 459 en su número 6 —norma a la que se debe acudir en
el juicio laboral— difiere de lo preceptuado por el artículo 144 del Código
de Procedimiento Civil, cuya vulneración es la que se acusa, razón que
impide que el recurso de nulidad pueda prosperar (considerandos 7º a
9º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Santiago, 26/01/2018, Rol Nº 1863-2017,

Cita online: CL/JUR/1589/2018

11. Condena en costas al Ministerio Público

El artículo 144 del Código de Procedimiento Civil señala: "La parte


que sea totalmente vencida en un juicio o en un incidente será
condenada al pago de las costas. Podrá con todo el tribunal eximirla de
ellas, cuando aparezca que ha tenido motivos plausibles para litigar,
sobre lo cual hará declaración expresa en la resolución. Lo dispuesto
en este artículo se entiende sin perjuicio de lo establecido en otras
disposiciones de este Código". La norma en comento contiene un
mandato imperativo respecto de la condena en costas vinculado a las
resultas del juicio y un mandato facultativo para eximir de su pago
cuando haya existido motivo plausible para litigar, calificación jurídica
que efectúa de manera privativa el sentenciador. De los antecedentes
expuestos en el recurso y en estrados esta Corte comparte lo expuesto
en la resolución recurrida pues como se puede observar de una atenta
lectura de la solicitud de entrada y registro, en esta se señala que
"Finalmente, habiéndose agotado las instancias investigativas antes
descritas y con la finalidad de asegurar la detención de este integrante,
de la señalada organización, por medio del presente Informe Policial, se
procede a solicitar la respectiva orden de entrada, registro e
incautaciones de todas las especies y medios tecnológicos que fuesen
utilizados u asociados en los delitos investigados u aquellos que se
encontrasen en el inmueble ya señalado", sin que se haya aportado
ningún antecedente relevante que avalaren las razones expuestas en la
solicitud en el sentido que el —imputado— fuera integrante de la
organización investigada. En este orden de ideas la solicitud de entrada
y registro debe contener antecedentes concretos que hagan presumir
que el imputado o medios de comprobación del hecho que se investiga
se encontraren en un determinado edificio o lugar cerrado pues la
medida constituye una excepción a la protección constitucional del
derecho fundamental a la inviolabilidad del domicilio, el que se verá
afectado con tan gravosa medida que no está obligado a soportar el
ciudadano afectado si no se cumple con el estándar que se ha señalado,
teniendo en consideración a este respecto que debe ser la única medida
posible para la obtención de la prueba y que no exista otra menos
gravosa para los fines del proceso (considerandos 6º y 7º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 5/02/2018, Rol Nº 176-2018,

Cita online: CL/JUR/7327/2018

ARTÍCULO 145 (152)

Podrá el tribunal de segunda instancia eximir de las costas causadas en


ella a la parte contra quien se dicte la sentencia, sea que mantenga o no las
que en primera instancia se hayan impuesto, expresándose en este caso los
motivos especiales que autoricen la exención.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 25, 138, 337, 343, 347, 411, 471, 510,
513, 562 y 816.

ARTÍCULO 146 (153)

No podrá condenarse al pago de costas cuando se hayan emitido, por los


jueces que concurran al fallo en un tribunal colegiado, uno o más votos
favorables a la parte que pierde la cuestión resuelta.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 25, 138, 337, 343, 347, 411, 471, 510,
513, 562 y 816.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Artículo 146 del Código de Procedimiento Civil, no tiene no tiene el


carácter de decisoria litis

Finalmente, respecto de la presunta infracción del artículo 146 del


Código de Procedimiento Civil, ésta se desechará pues la citada
disposición legal no tiene el carácter de decisoria litis sino que
constituye una regla de carácter económico o disciplinario y cuya
eventual infracción, por lo demás, tampoco tendría influencia sobre lo
dispositivo del fallo. Que por lo que se ha razonado, sólo cabe concluir
que los jueces de la instancia no han incurrido en los errores de derecho
denunciados, razón por la cual el recurso de nulidad de fondo en análisis
no puede prosperar y será desestimado (considerandos 7º y 8º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 17/01/2007, Rol Nº 3319-2005,


Cita online: CL/JUR/5689/2007

ARTÍCULO 147 (154)

Cuando la parte que promueve un incidente dilatorio no obtenga resolución


favorable, será precisamente condenada en las costas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 25, 138, 337, 343, 347, 411, 471, 510,
513, 562 y 816. Código Orgánico de Tribunales: artículos 504 y 529.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Costas fijadas son excesivas en relación a la actividad desplegada


en la tramitación del incidente

Han incurrido en falta susceptible de enmendarse por vía del recurso


de queja, los ministros que fijaron en la suma de un millón de pesos las
costas personales causadas en un incidente de abandono de la
instancia acogido en juicio y al cual no se opuso el demandante, toda
vez que atendida la naturaleza e importancia del incidente y la actividad
desplegada por la parte que en él obtuvo, el monto fijado por los jueces
recurridos por concepto de honorarios es excesivo (considerando 2º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 7/09/1989, Rol Nº 8877-1989,


Cita online: CL/JUR/863/1989

TÍTULO XV DEL DESISTIMIENTO DE LA DEMANDA

ARTÍCULO 148 (155)

Antes de notificada una demanda al demandado, podrá el actor retirarla sin


trámite alguno, y se considerará como no presentada. Después de notificada,
podrá en cualquier estado del juicio desistirse de ella ante el tribunal que
conozca del asunto, y esta petición se someterá a los trámites establecidos
para los incidentes.48

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 7º, 29, 40, 89, 91, 151, 175, 261, 312,
433 y 467. Código Civil: artículo 2503. Código Procesal Penal: artículos 64, 118, 119 y 401.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Desistimiento de la demanda ejecutiva con reserva del derecho para


entablar acción ordinaria sobre los mismos puntos que han sido
materia de aquélla

Es sabido que el procedimiento ejecutivo contempla la institución de


la reserva como una posibilidad de sustraerse del efecto de cosa
juzgada que dimane de la sentencia recaída en ese juicio, con relación
a un juicio ordinario posterior. Tratándose del ejecutante, la ley
contempla dos oportunidades para hacer efectivo ese derecho: a) La
contemplada en el artículo 467 del Código de Procedimiento Civil, esto
es, dentro del plazo que tiene para contestar las excepciones opuestas
a la ejecución; y b) La prevista en el artículo 478, vale decir, antes de
dictarse sentencia en el juicio ejecutivo. Desde luego, esta última
situación opera bajo el supuesto que, existiendo excepciones opuestas,
el proceso ha avanzado hasta quedar en estado de fallo. El
desistimiento y reserva de acciones presentado por —la demandante
reconvencional— en la causa (ejecutiva desistido, interpuesta en contra
de la demandada reconvencional), no se identifica con ninguna de las
hipótesis antedichas, dado que no se habían opuesto excepciones ni
había plazo pendiente para contestarlas y tampoco existía sentencia
definitiva que dictar. Al ser así, no se trató de un caso de desistimiento
especial sino del que está sujeto a las reglas generales establecidas en
los artículos 148 y siguientes del Código de Enjuiciamiento Civil. De ahí
que no resulte pertinente ni sea aplicable en la especie el plazo fatal de
15 días a que se refieren los artículos 474 y 478 de dicho cuerpo legal.
Consecuentemente, demostrada como ha sido la existencia de la
obligación de restituir la suma de dinero recibida en préstamo por —la
demandada reconvencional—, cabe disponer su condena al pago de los
dividendos devengados y vencidos, por caducidad de los plazos, en su
caso, entre los meses de octubre de 2010 y julio de 2023
(considerandos 8º a 10º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Santiago, 7/08/2019, Rol Nº 4977-2018,

Cita online: CL/JUR/4527/2019

ARTÍCULO 149 (156)

Si se hace oposición al desistimiento o sólo se acepta condicionalmente,


resolverá el tribunal si continúa o no el juicio, o la forma en que debe tenerse
por desistido al actor.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 29, 40, 80, 91, 151, 175, 261, 312 y
467.

ARTÍCULO 150 (157)

La sentencia que acepte el desistimiento, haya o no habido oposición,


extinguirá las acciones a que él se refiera, con relación a las partes litigantes
y a todas las personas a quienes habría afectado la sentencia del juicio a que
se pone fin.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículos 29, 40, 89, 91, 151, 175, 187, 261,
312, 467 y 766.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Desistimiento de demanda ejecutiva.

Sentencia que acepta el desistimiento extingue las acciones a que él


se refiere, con relación a las partes litigantes y a todas las personas a
quienes habría afectado la sentencia del juicio a que se pone fin.

De conformidad a los antecedentes del proceso, el cedente demandó


ejecutivamente el cobro de diversas facturas, quien posteriormente y
luego de opuestas excepciones a la ejecución, se desistió
expresamente de la demanda, incidencia a la que se hizo lugar. En
estas circunstancias, habiéndose formulado en estos autos excepción
de cosa juzgada, fundada precisamente en los efectos procesales de tal
desistimiento, resulta evidente que deberá acogerse tal defensa en lo
que respecta a dichos documentos, pues a la luz de lo dispuesto en el
artículo 150 del Código de Procedimiento Civil, la sentencia que acepta
el desistimiento extingue las acciones a que él se refiere —ejecutiva—
con relación a las partes litigantes y a todas las personas a quienes
habría afectado la sentencia del juicio a que se pone fin. No se trata ésta
de una excepción personal que hubiere podido oponerse únicamente al
cedente y, de contario, empece evidentemente al cesionario que sucede
a título singular a su antecesor en el dominio de las facturas en todas
sus acciones y derechos respecto de tales instrumentos mercantiles
(considerando 1º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 16/03/2018, Rol Nº 5043-2017,


Cita online: CL/JUR/1294/2018

2. Desistimiento de la demanda ejecutiva deja a salvo la acción ordinaria

El artículo 467 del Código de Procedimiento Civil dispone que "el


ejecutante podrá sólo dentro del plazo de cuatro días que concede el
inciso 1º del artículo anterior, desistir de la demanda ejecutiva, con
reserva de su derecho para entablar acción ordinaria sobre los mismos
puntos que han sido materia de aquélla". Este desistimiento especial
tiene por objeto obtener la reserva de derechos para el juicio ordinario
y el juez deberá acogerlo sin más trámite y acceder a la reserva pedida.
Los efectos de este desistimiento son que el ejecutante pierde su
derecho para deducir nueva acción ejecutiva, quedan sin valor el
embargo y demás resoluciones dictadas y el actor responderá de los
perjuicios causados con la ejecución, salvo lo que se resuelva en el
juicio ordinario. De este modo, para el acreedor la acción pierde su
carácter ejecutivo quien, además, no podrá retractarse o desistirse del
mismo. Por otra parte, respecto del ejecutado, no se posibilita su
oposición y puede ejercer todos los derechos que importe el término del
juicio desde ese momento. El desistimiento del artículo 467 del Código
de Procedimiento Civil deja a salvo la acción ordinaria, la que puede ser
deducida por el acreedor en un juicio ordinario posterior. Es por tal
motivo el Máximo Tribunal, en reiteradas oportunidades, le ha atribuido
a este precepto el efecto de la cosa juzgada formal. El efecto de cosa
juzgada formal que se le atribuye al desistimiento del artículo 467 del
citado código se circunscribe, únicamente, a la posibilidad que el
legislador le otorga al acreedor para deducir la acción ordinaria. Por
consiguiente, respecto de la acción ejecutiva, el desistimiento sí
produce el efecto natural que le otorga el artículo 150, esto es, su
extinción, quedando el demandante impedido para deducir una nueva
acción ejecutiva fundada en el mismo título" (considerandos 5º y 6º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 21/03/2018, Rol Nº 372-2018,


Cita online: CL/JUR/1394/2018

3. No existe norma que prohíba desistirse de la acción de nulidad de


derecho público

No obsta a lo anterior, la circunstancia de tratarse de una acción de


fuente constitucional, toda vez que ello no incide en el ejercicio de los
derechos procesales que se le reconocen a la parte, sin perjuicio de que
además, no existe norma constitucional o legal alguna que lo prohíba;
que por lo mismo, habiéndose deducido la acción por los vicios que se
estimaban presentes en las resoluciones administrativas atacadas,
nada impide que la parte ejerza el derecho a desistirse de la demanda,
pues, esa sola circunstancia la deja sin fundamento, sin que además,
pueda afectarse el derecho de uno de los demandantes, por el hecho
de que otro de ellos, no lo haga (considerando 12 de la sentencia de la
Corte de Apelaciones de Santiago).

Corte de Apelaciones de Santiago, 2/11/2010, Rol Nº 2944-2009,

Cita online: CL/JUR/8940/2010

ARTÍCULO 151 (158)

El desistimiento de las peticiones que se formulen por vía de reconvención


se entenderá aceptado, sin declaración expresa, por el hecho de proponerse;
salvo que la parte contraria deduzca oposición dentro de tercero día después
de notificada. En este caso se tramitará la oposición como incidente y podrá
su resolución reservarse para la sentencia definitiva.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículos 89, 91, 149, 150, 175 y 314.
TÍTULO XVI DEL ABANDONO DEL PROCEDIMIENTO49

ARTÍCULO 152

El procedimiento se entiende abandonado cuando todas las partes que


figuran en el juicio han cesado en su prosecución durante seis meses,
contados desde la fecha de la última resolución recaída en alguna gestión útil
para dar curso progresivo a los autos.50

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 38, 65, 66, 87, 123, 211, 302, 709,
760 inciso 2º y 891. Código Civil: artículo s 48, 50 y 2503 Nº 2. Código Procesal Penal: art ículo s
64, 120, 121 y 288. Código de Minería: art ículo 70. Código Tributario: 148, 151, 157, 161 Nº 9,
165 Nº 7. Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de Familia: art ículo 21.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Concepto de abandono del procedimiento

El abandono del procedimiento es una institución de carácter procesal


que tiene lugar cuando todas las partes que figuran en el juicio han
cesado en su prosecución durante el tiempo que la ley señala. Mirado
desde la óptica del litigante, el abandono del procedimiento constituye
una sanción correlativa a la negligencia, inercia o inactividad de aquél,
con la que ha dado pábulo al hecho objetivo que se detenga el curso
del pleito, impidiendo con su paralización que éste tenga la pronta y
eficaz resolución que le corresponde. Específicamente, una vez
declarado el abandono y por efecto del mismo, las partes pierden el
derecho de continuar el procedimiento y de hacerlo valer en un nuevo
juicio, aunque no se extinguen sus acciones y excepciones,
subsistiendo con todo su valor los actos y contratos de que resulten
derechos definitivamente constituidos; todo ello de conformidad con lo
dispuesto en el artículo 156 del Código de Procedimiento Civil. Del tenor
del artículo 152 del Código de Procedimiento Civil, se desprende que el
alcance relativo a "Cesación de las partes en la prosecución del juicio"
es indicativa de la inactividad de las partes y de su consiguiente
desinterés en la decisión del conflicto sometido al conocimiento
jurisdiccional, por lo que alude a una pasividad imputable a los litigantes
en propulsar el avance del proceso; exigencia esta última de acuerdo
con la cual las partes, enteradas del estado de la causa y gravitando
sobre ellas la carga —entendida como el ejercicio de un derecho en el
logro del propio interés— de instar por su progresión, nada hacen en tal
sentido (considerandos 4º y 5º de la sentencia de casación).

— Corte Suprema, 24/04/2020, Rol Nº 7764-2019,


Cita online: CL/JUR/25507/2020

Fallos en el mismo sentido.

— Corte Suprema, 5/04/2018, Rol Nº 7140-2017,

Cita online: CL/JUR/1612/2018

— Corte Suprema, 3/01/2018, Rol Nº 7132-2017,

Cita online: CL/JUR/645/2018

2. Principios vinculados al abandono del procedimiento

Uno de los principios formativos del proceso es el orden consecutivo


legal, indicativo de la formación, organización y concatenación de los
actos del procedimiento con arreglo a lo que manda la ley, a cuyo lado
aparece el principio de la impulsión procesal que, en síntesis, estriba en
la actividad mediante la cual se hace posible el desarrollo progresivo del
proceso, esto es, de etapa en etapa, ordenadas en una sucesión
racional, lógica y orgánica, hacia la consecución de la finalidad que le
es propia, cuyas modalidades básicas son: el impulso procesal de oficio,
que entrega al juez la responsabilidad exclusiva en la conducción de los
actos del proceso, relegando a las partes a un rol auxiliar en el escenario
procesal, y el impulso procesal a cargo de las partes que, a la inversa,
confía la tarea de realizar los actos que agilizan el desenvolvimiento del
proceso a los propios litigantes, en desmedro del juez, quien, durante la
tramitación del juicio, asume un rol fundamentalmente pasivo, viniendo
a adquirir protagonismo recién una vez afinado el procedimiento, en la
etapa de dictación del fallo. Se completa la tríada de principios a los que
se vincula el instituto del abandono del procedimiento con el de la
preclusión, cuya manifestación se aprecia en la pérdida, extinción o
caducidad de las facultades procesales; fenómeno que ocurre por
diversas circunstancias: por no haberse ejercido éstas dentro de los
plazos establecidos al efecto por la ley; por haberse ejercido efectiva,
válida y oportunamente tales facultades o, en fin, por haberse realizado
actos incompatibles con el ejercicio de las mismas (considerando 6º de
la sentencia de casación).

Corte Suprema, 26/03/2018, Rol Nº 45304-2017,


Cita online: CL/JUR/1409/2018

3. Finalidad del abandono del procedimiento

El Máximo Tribunal ha señalado que el fundamento del abandono del


procedimiento radica en que "tiende a impedir que el juicio se paralice
en forma indefinida, con el daño consiguiente a los intereses de las
partes y evita la inestabilidad de los derechos y en especial la
incertidumbre del derecho del demandado y la prolongación arbitraria
del litigio, como consecuencia de una conducta negligente. Representa,
por lo tanto una sanción procesal para los litigantes que cesan en la
prosecución del proceso omitiendo toda actividad y tiende a corregir la
situación anómala que crea entre las partes la subsistencia de un juicio
por largo tiempo paralizado". La connotación dinámica del proceso
exige entonces el avance inexorable de los actos del procedimiento
hacia la sentencia, sin que ello pueda verse afectado por retrocesos o
retardos injustificados (considerando 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 25/07/2018, Rol Nº 40147-2017,


Cita online: CL/JUR/3913/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 26/01/2018, Rol Nº 14241-


2017,

Cita online: CL/JUR/435/2018

4. Abandono del procedimiento constituye una sanción para la


inactividad de las partes

De conformidad al artículo 152 del Código de Procedimiento Civil, el


procedimiento se entiende abandonado cuando todas las partes que
figuran en el juicio han cesado en su prosecución durante seis meses,
plazo que se cuenta a partir de la fecha de la última resolución recaída
en alguna gestión útil para dar curso progresivo a los autos. Por su
parte, se ha entendido que tal noción corresponde a una institución de
naturaleza procesal que tiene por objeto sancionar la pasividad y desidia
de las partes, a fin de impedir que los juicios se mantengan vigentes por
largo tiempo, lo que, en definitiva, provoca en los litigantes un estado de
incertidumbre procesal y, con ello, un desgaste de orden personal y
material; y en virtud del cual se extingue el derecho de continuar con la
prosecución de un procedimiento ya incoado y de hacer valer sus
efectos, sin que, en todo caso, se extingan las pretensiones o
excepciones que se formularon en él. La doctrina asimila la expresión
cesación de las partes en la prosecución del juicio, al silencio en la
relación jurídica, a la inactividad de los litigantes, motivada por su
desinterés en obtener una decisión de los tribunales del conflicto
sometido a su conocimiento. Sin embargo, tal pasividad debe ser
culpable, esto es, advirtiendo y aceptando el interesado las
consecuencias perjudiciales que se derivarán de su desidia, no
obstante, nada hace por activar el procedimiento (considerando 5º de la
sentencia de casación).

Corte Suprema, 19/02/2020, Rol Nº 18629-2018,


Cita online: CL/JUR/11093/2020

Fallos en el mismo sentido.

— Corte Suprema, 30/06/2020, Rol Nº 13220-2019,

Cita online: CL/JUR/45725/2020

— Corte Suprema, 17/02/2020, Rol Nº 15502-2019,

Cita online: CL/JUR/11049/2020

— Corte Suprema, 3/09/2019, Rol Nº 134-2018,

Cita online: CL/JUR/4997/2019

— Corte Suprema, 23/07/2019, Rol Nº 7381-2018,

Cita online: CL/JUR/4172/2019

— Corte Suprema, 15/05/2019, Rol Nº 8865-2018,


Cita online: CL/JUR/3238/2019

— Corte Suprema, 26/07/2018, Rol Nº 6362-2018,

Cita online: CL/JUR/4413/2018

— Corte Suprema, 22/05/2018, Rol Nº 251-2017,

Cita online: CL/JUR/2461/2018

— Corte Suprema, 2/04/2018, Rol Nº 34285-2017,

Cita online: CL/JUR/1644/2018

— Corte Suprema, 29/01/2018, Rol Nº 36675-2017,

Cita online: CL/JUR/448/2018

— Corte Suprema, 23/01/2018, Rol Nº 12237-2017,

Cita online: CL/JUR/355/2018

— Corte Suprema, 18/01/2018, Rol Nº 37407-2017,

Cita online: CL/JUR/238/2018

5. Concepto de gestión útil

Conforme con lo que dispone el artículo 152 del Código de


Procedimiento Civil, el procedimiento se entiende abandonado cuando
todas las partes que figuran en el juicio han cesado en su prosecución
durante seis meses, plazo que se cuenta a partir de la fecha de la última
resolución recaída en alguna gestión útil para dar curso progresivo a los
autos; contexto que autoriza inferir que lo que importa es la aptitud de
la actividad que se ha desarrollado en el juicio en el sentido que permita
que efectivamente avance en su tramitación conforme al principio
formativo en el procedimiento del orden consecutivo legal, para que
llegue a estado de sentencia, por lo tanto, no debe ser inoficiosa, inocua,
irrelevante, resultando, por lo mismo, indiferente quien es su autor.
Como se ha sostenido reiteradamente por esta Corte, la institución del
abandono del procedimiento tiene por objeto sancionar al litigante poco
diligente que deja transcurrir un determinado lapso sin instar por la
prosecución del juicio, generando dilaciones innecesarias e
incertidumbre en la contraria y dicho período se interrumpe si los
litigantes realizan cualquiera gestión útil, es decir, cualquier diligencia
tendiente a llevar a efecto los trámites o actuaciones procesales
necesarias para la "prosecución" del pleito. La doctrina como la
jurisprudencia han entendido que una gestión útil es aquella que
interrumpe el plazo para el abandono del procedimiento y que la utilidad
tiene que ver con que el juicio continúe adelante, esto es, darle el
movimiento necesario para que, cumpliendo los hitos legales, el proceso
pueda otorgar el pronunciamiento requerido sobre la cuestión puesta en
conocimiento de los tribunales para su resolución (Corte Suprema Roles
Nºs. 18415-15, 70602-16, 34475-17 y 182-17) (considerandos 4º y 5º
de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 8/03/2018, Rol Nº 41374-2017,


Cita online: CL/JUR/4452/2018

Fallos en el mismo sentido.

— Corte Suprema, 20/05/2019, Rol Nº 12972-2018,

Cita online: CL/JUR/2841/2019

— Corte Suprema, 18/05/2020, Rol Nº 1813-2019,

Cita online: CL/JUR/30858/2020

— Corte Suprema, 31/01/2018, Rol Nº 1268-2018,

Cita online: CL/JUR/507/2018

6. Determinación de la utilidad de una gestión

La utilidad o no de una gestión en juicio dice relación con su capacidad


o disposición de progresivo impulso en su curso, esto es, darle el
movimiento necesario para que, cumpliendo los hitos legales, el proceso
pueda otorgar el pronunciamiento requerido sobre la cuestión puesta en
conocimiento de los tribunales para su resolución, otorgando la tutela
efectiva reclamada. En tal contexto, se debe tener presente que el
derecho al proceso implica no solamente la facultad de acceder ante un
tribunal en busca de amparo jurisdiccional, sino también involucra el
derecho de formular y contestar peticiones, solicitar cautelares, rendir
prueba, e impugnar lo actuado. Por lo demás, ese es el contenido
constitucional, que, conforme se desprende del artículo 76 de la Carta
Fundamental, le corresponde a la jurisdicción, en cuanto función
destinada a conocer, juzgar y hacer cumplir lo fallado en las causas
civiles y criminales puestas bajo el conocimiento de los tribunales de
justicia. De este modo, el "curso progresivo" que debe justificar las
gestiones de las partes en un pleito, para que no se entienda cesado,
debe estar destinado al ejercicio pleno de los fines de la jurisdicción, el
curso legal de los ritos necesarios para que el órgano pertinente
conozca y falle la cuestión o asunto que ha sido objeto del juicio, lo que
incluye el derecho a sustentar mediante las probanzas que se estimen
relevante, la procedencia fáctica de la pretensión formulada
(considerando 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 15/10/2019, Rol Nº 4078-2018,


Cita online: CL/JUR/6046/2019

7. Conceptos doctrinario y jurisprudencial de la expresión "cesación" de


las partes en la prosecución del juicio

En el análisis de la expresión "cesación" de las partes en la


prosecución del juicio —del artículo 152 del Código de Procedimiento
Civil—, la doctrina la asimila al silencio en la relación jurídica, inactividad
motivada por su desinterés por obtener una decisión de los tribunales
sobre el conflicto sometido a su conocimiento. Sin embargo, la
jurisprudencia ha señalado que "tal pasividad debe ser imputable", esto
es, advirtiendo y aceptando las consecuencias perjudiciales que
podrían derivarse de su desidia, no obstante lo cual nada hacen para
activar el procedimiento. En este caso el comportamiento es
voluntariamente omisivo, pudiendo los interesados, "los demandantes,
representarse o no el resultado perjudicial, confiando en que éste no se
produciría o aceptándolo. En este mismo sentido se exige que, en tales
circunstancias, la parte esté en situación de interrumpir efectivamente
esta suspensión en la tramitación del procedimiento o comprobar que
ya se ha realizado todo lo que la ley requiere para dejarlo en estado de
ser decidido por el órgano jurisdiccional. Así, debe instar por sacarlo de
la inactividad e impulsarlo a su término por medio de actuaciones útiles
a tal fin, de lo contrario no se observa necesidad que persevere en la
repetición de presentaciones que en nada conducirán a su término"
(C.S. autos Rol Nº 3439-05; Rol Nº 9016-10 y Rol Nº 957-10). De la
norma citada en el motivo que precede se desprende que la sanción al
litigante negligente sólo puede prosperar si aquél ha cesado en la
actividad que le corresponde, propia del impulso procesal que lo es
exigible, por un término que excede los seis meses, contado desde la
fecha de la última resolución recaída en alguna gestión útil para dar
curso progresivo a los autos (considerandos 5º y 6º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 13/04/2020, Rol Nº 22180-2019,


Cita online: CL/JUR/23003/2020

Fallo en el mismo sentido.

— Corte Suprema, 30/04/2020, Rol Nº 31809-2018,

Cita online: CL/JUR/28720/2020

8. Incidente especial de abandono del procedimiento. Interrumpe plazo


de inactividad lo actuado en cuaderno del pleito diferente del principal

La situación de derecho se encuentra circunscrita a lo que dispone el


legislador en el artículo 152 del Código de Enjuiciamiento Civil, norma
que se refiere al incidente especial de abandono del procedimiento, una
institución de carácter procesal que constituye una sanción para el
litigante que por su negligencia, inercia o inactividad, detiene el curso
del pleito, impidiendo con su paralización que éste tenga la pronta y
eficaz resolución que le corresponde, y que se configura cuando "todas
las partes que figuran en el juicio han cesado en su prosecución durante
seis meses". En su caso, debe considerarse, que la independencia de
algunos cuadernos del pleito, no puede hacer que se les tenga como
absolutamente desvinculados unos de otros, ya que integran un mismo
proceso y únicamente se forman para facilitar el ejercicio de la acción y
defensa relacionada con el cuaderno principal, de suerte que lo actuado
en uno de ellos produce variados efectos, uno de los cuales,
precisamente, es el de interrumpir los plazos de inactividad previstos en
la ley (Anabalón Sanderson, Tratado Práctico de Derecho Procesal Civil
Chileno, Volumen II, pág. 58; C.S. Gacetas Jurídicas Nº 94, pág. 19 y
Nº 112, pág. 13); A lo anterior debe agregarse que lo que cuida el
legislador con la institución del abandono, es la actividad normal del
juicio, del proceso, lo que importa comprometer un conjunto de actos
procesales considerados por la ley en los que intervienen
estrechamente vinculados las partes, el propio tribunal, y, a veces,
terceros; conforme a ello se ha argumentado que con el abandono lo
que se sanciona es la inactividad de las partes en todo el juicio, y éste
está compuesto por todas las acciones y excepciones que se han hecho
valer y que se tramitan en sus diversos cuadernos (considerandos 3º y
4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 12/02/2018, Rol Nº 2823-2017,


Cita online: CL/JUR/3387/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 8/04/2019, Rol Nº 8028-2018,

Cita online: CL/JUR/1909/2019

9. Solicitud de desarchivo del expediente constituye una gestión útil

La institución del abandono del procedimiento, tiene por objeto servir


de sanción a la inactividad de las partes en la prosecución del juicio.
Hay silencio e inactividad en la relación jurídica, de tal forma que no
tienen interés algún en obtener una decisión jurisdiccional para resolver
la contienda. Pero debe existir u desinterés culpable, que acepta las
consecuencias de la desidia, nada se hace para continuar el
procedimiento, no hay gestiones útiles tendientes a preparar los
elementos que permitan llegar al estado de sentencia. Al solicitar el
desarchivo de la causa, el abogado está manifestando una clara
voluntad de continuar con el procedimiento ya iniciado. Lo fundamental
de su conducta es salir del estado de inactividad que hasta ese
momento tiene el proceso, porque es la única forma de proceder con
posterioridad a notificar la resolución que recibe la causa a prueba. Por
ello, la solicitud de desarchivo, cuando aún no se han cumplido los seis
meses que hacen procedente la sanción, puede ser considerada como
útil para dar curso al procedimiento. No podía de otra forma pasar al
siguiente momento jurisdiccional, si no es precisamente a través de la
solicitud planteada (considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte Suprema, 28/02/2018, Rol Nº 1893-2016,


Cita online: CL/JUR/4302/2019
Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 29/05/2020, Rol Nº 6433-2018,

Cita online: CL/JUR/34904/2020

Fallos en sentido contrario.

— Corte Suprema, 13/04/2020, Rol Nº 22180-2019,

Cita online: CL/JUR/23003/2020

— Corte Suprema, 30/07/2019, Rol Nº 19296-2018,

Cita online: CL/JUR/1127/2019

— Corte Suprema, 5/03/2019, Rol Nº 29943-2018,

Cita online: CL/JUR/1127/2019

— Corte Suprema, 25/07/2018, Rol Nº 42337-2017,

Cita online: CL/JUR/3912/2018

— Corte Suprema, 6/03/2018, Rol Nº 37313-2017,

Cita online: CL/JUR/1077/2018

10. Notificación de la interlocutoria de prueba al demandante no


interrumpe por sí sola el plazo de seis meses para que opere el
abandono del procedimiento

Tal como ha venido sosteniendo reiteradamente la Excma. Corte


Suprema, la notificación de la interlocutoria de prueba al demandante,
no pudo por sí sola interrumpir el plazo de seis meses exigido para que
opere el abandono del procedimiento, toda vez que el término probatorio
es común, de manera que para que éste se inicie es necesario que la
aludida resolución se notifique a todas las partes que intervienen en el
juicio. Vencida la etapa de discusión procedía avanzar hacia la fase de
recepción de la prueba, cuya apertura sólo se inicia con la notificación
a todas las partes del juicio de la resolución que recibe la causa a
prueba. En efecto, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 38 del
Código de Procedimiento Civil, en cuanto dispone que las resoluciones
judiciales producen efectos en virtud de la notificación hecha con arreglo
a la ley, el único acto que manifiesta inequívocamente la voluntad de las
partes de continuar el juicio es la notificación de la mencionada
resolución a todas ellas, iniciando la etapa probatoria que es la forma
de dar curso progresivo a los autos. La sola notificación de la
interlocutoria de prueba al apoderado de la demandante, no constituye
una actuación útil en los términos del artículo 152 del Código de
Procedimiento Civil, pues era necesaria la notificación a la parte
demandada de dicha resolución, requisito indispensable para poner
término a la etapa de discusión y dar comienzo al término probatorio
(considerandos 6º y 7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 23/04/2019, Rol Nº 1589-2018,


Cita online: CL/JUR/2635/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 24/02/2020, Rol Nº 19070-2019,

Cita online: CL/JUR/11086/2020

— Corte Suprema, 8/03/2018, Rol Nº 41374-2017,

Cita online: CL/JUR/4452/2018

11. Cesación de las partes en la prosecución del juicio. Pasividad del


litigante tiene que ser culpable

El abandono del procedimiento es una institución de carácter procesal


que tiene lugar cuando todas las partes que figuran en el juicio han
cesado en su prosecución durante el tiempo que la ley señala.
Constituye una sanción correlativa a la negligencia, inercia o inactividad
del litigante que ha dado pábulo al hecho objetivo de que se detenga el
curso del pleito, impidiendo con su paralización que éste tenga la pronta
y eficaz resolución que le corresponde. Una vez declarado el abandono
y por efecto del mismo, las partes pierden el derecho de continuar el
procedimiento abandonado y de hacerlo valer en un nuevo juicio,
aunque no se extinguen sus acciones y excepciones. La expresión
"cesación de las partes en la prosecución del juicio" es asimilada por la
doctrina al silencio en la relación jurídica. Tal pasividad debe ser
culpable, esto es, advirtiendo y aceptando las consecuencias
perjudiciales que podrían derivarse de esa desidia. En el mismo sentido
se exige que, en tales circunstancias, el litigante esté en situación de
interrumpir efectivamente esta suspensión en la tramitación del
procedimiento o comprobar que ya se ha realizado todo lo que la ley
requiere para dejarlo en estado de ser decidido por el órgano
jurisdiccional (considerandos 4º y 5º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 26/03/2018, Rol Nº 45304-2017,


Cita online: CL/JUR/1409/2018

Fallos en el mismo sentido.

— Corte Suprema, 25/11/2019, Rol Nº 8201-2019,

Cita online: CL/JUR/6692/2019

— Corte Suprema, 16/01/2019, Rol Nº 16733-2018,

Cita online: CL/JUR/232/2019

— Corte Suprema, 12/07/2018, Rol Nº 5310-2018,

Cita online: CL/JUR/3573/2018

12. Sentido de la voz "prosecución"

Voto disidente. La sanción del abandono del procedimiento se basa


en la pasividad de las partes y pretende otorgar certeza jurídica
procesal, es decir, evitar la vigencia en el tiempo de un litigio,
desconociéndose indefinidamente su resolución, con el consecuente
desgaste para el Estado y los litigantes, especialmente para el sujeto
contra quien se dirige la acción. En este contexto, como ya lo ha
razonado anteriormente la Corte Suprema, la voz "prosecución" a la que
se refiere el artículo 152 del Código de Procedimiento Civil, no ha sido
definida por el legislador, por lo que debe entenderse en su sentido
natural y obvio, es decir, "acción de proseguir, esto es seguir, continuar,
llevar adelante lo que se tenía empezado", de manera que las
actuaciones que la ley requiere serán aquellas que revelen una
intención cierta de perseverar en el juicio (considerando 2º de la
disidencia de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 31/01/2018, Rol Nº 5052-2017,
Cita online: CL/JUR/525/2018

13. Acompañar prueba documental constituye gestión útil

La actividad probatoria destinada, justamente, a satisfacer los


presupuestos fácticos del derecho pretendido, debe entenderse
revestida de la utilidad que exige el artículo 152 del Código de
Procedimiento Civil. En consecuencia, la presentación formulada por el
actor, consistente en acompañar documentos en cuanto diligencias
probatorias, resulta útil para la prosecución del juicio y, por lo mismo, la
resolución del tribunal teniéndolos por acompañados tuvo la aptitud para
interrumpir el plazo de abandono del procedimiento (considerandos 7º
y 8º de la sentencia de casación y único de la sentencia de reemplazo).

Corte Suprema, 15/10/2019, Rol Nº 4078-2018,


Cita online: CL/JUR/6046/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 5/04/2018, Rol Nº 7140-2017,

Cita online: CL/JUR/1612/2018

Fallo en sentido contrario:

— Corte Suprema, 5/04/2018, Rol Nº 7140-2017,

Cita online: CL/JUR/1612/2018

14. Procedencia del recurso de apelación contra la resolución que


rechaza incidente de abandono del procedimiento

Para una acertada calificación de la naturaleza jurídica de la


resolución que se pronuncia sobre un abandono del procedimiento,
debe considerarse que ésta decide una pretensión procesal incidental y
será la naturaleza de tal pretensión la que determinará aquella
calificación, y no sus aspectos secundarios, como si se acoge o rechaza
lo pedido, efectos que el legislador no ha considerado para alterar la
naturaleza jurídica de las resoluciones judiciales. Luego, es dable
considerar que la resolución que falla una petición de abandono del
procedimiento tiene la calificación jurídica de sentencia interlocutoria,
estableciendo derechos permanentes para las partes, pues hace
imposible la prosecución del juicio si la acoge, o bien, ratifica la validez
y utilidad del procedimiento actuado, si la rechaza. En consecuencia, es
admisible el recurso de apelación interpuesto en contra de la resolución
desechó el incidente de abandono de procedimiento (considerandos 2º
y 3º de la actuación de oficio de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/04/2018, Rol Nº 7442-2018,


Cita online: CL/JUR/2054/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 7/05/2018, Rol Nº 8233-2018,

Cita online: CL/JUR/2070/2018

15. Improcedencia del abandono del procedimiento si impulso y


promoción de la actividad de la causa recae en el tribunal

En este caso, la controversia radica en determinar si puede


considerarse abandonado un procedimiento que se encuentra en
estado que el juez examine, por sí mismo, los antecedentes, y
determine, a partir de tal estudio, si procede recibir la causa a prueba,
por existir controversia acerca de hechos sustanciales y pertinentes,
considerando en particular, además, que, tal como lo sostiene la
defensa fiscal, el llamado a conciliación no constituye, en un juicio de
hacienda, un trámite necesario e insoslayable para el desarrollo del
proceso. Luego, con las modificaciones introducidas al Código de
Procedimiento Civil, especialmente de la Ley Nº 18.705 de 24.05.1988,
puede concluirse que actualmente el legislador ha hecho compatibles
los principios de pasividad y oficialidad, reglando el campo de acción de
las partes y de los jueces. Por lo tanto, el demandante se encontraba
eximido de la carga de dar impulso al proceso en esta etapa, puesto que
el Tribunal debía, de propia iniciativa, recibir la causa a prueba una vez
"concluidos los trámites" que la deben preceder, no obstante lo cual, fue
necesario que el actor solicitara que se citara a las partes a una
audiencia de conciliación para que efectivamente se observara un
avance en el proceso. Sin embargo y pese a que, ha mediado en autos
una indiscutible dejación tanto de parte del actor como del tribunal,
conforme a lo prescrito en el artículo 318 del Código de Procedimiento
Civil, debía este último, atendida la etapa procesal en que se hallaba la
causa y de propia iniciativa, recibir la causa a prueba una vez concluida
la etapa de discusión, de manera que, pese a su negligencia, el actor
se encontraba eximido de la carga de dar impulso al proceso en esta
etapa (considerandos 4º a 8º de la sentencia de casación).

Corte Suprema 18/06/2018, Rol Nº 38139-2017,


Cita online: CL/JUR/2878/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 20/04/2020, Rol Nº 24833-2018,

Cita online: CL/JUR/23046/2020

— Corte Suprema, 23/01/2020, Rol Nº 6307-2019,

Cita online: CL/JUR/8643/2020

— Corte Suprema, 19/11/2019, Rol Nº 13227-2019,

Cita online: CL/JUR/6594/2019

— Corte Suprema, 25/09/2019, Rol Nº 19061-2018,

Cita online: CL/JUR/5323/2019

— Corte Suprema, 31/05/2018, Rol Nº 42453-2017,

Cita online: CL/JUR/2556/2018

— Corte Suprema, 22/05/2018, Rol Nº 251-2017,

Cita online: CL/JUR/2461/2018

16. Inactividad procesal que justifica el abandono del procedimiento está


relacionada con la totalidad del litigio

Lo que sanciona el artículo 152 del Código de Procedimiento Civil es


la inactividad de las partes en todo el juicio, y éste está compuesto por
todas las acciones, excepciones, y recursos que se han hecho valer y
que se tramitan en sus diversos cuadernos. Así, la inactividad está
relacionada con la totalidad del litigio y no solamente referida a uno de
tales cuadernos, por lo que necesariamente debe ser considerado, en
lo que se estudia, lo obrado en el tribunal de alzada si hay una apelación
pendiente (considerando 5º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 13/06/2018, Rol Nº 1533-2018,


Cita online: CL/JUR/2835/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 20/04/2020, Rol Nº 10130-2019,

Cita online: CL/JUR/23051/2020

— Corte Suprema, 27/12/2019, Rol Nº 26226-2018,

Cita online: CL/JUR/11744/2019

— Corte Suprema, 21/08/2019, Rol Nº 8842-2018,

Cita online: CL/JUR/4757/2019

— Corte Suprema, 26/07/2018, Rol Nº 42696-2017,

Cita online: CL/JUR/3988/2018

17. No exime a la parte ejecutante de su deber de impulsar el proceso


el que se encuentre pendiente el proveer el escrito de excepciones
opuesta

La circunstancia de encontrarse pendiente el proveer el escrito de


excepciones opuesta, de conformidad al artículo 466 del Código de
Procedimiento Civil, no exime a la parte ejecutante de su deber de
impulsar el proceso, a diferencia de lo que, por ejemplo, ocurre cuando
las partes han sido citadas para oír sentencia. El impulso procesal debe
recaer en el ejecutante, atendido su evidente interés de hacer efectivo
el crédito que pretende y considerando que transcurrieron más de seis
meses sin que ninguna de las partes hubiese efectuado gestión útil,
inactividad que se observó también en el cuaderno de apremio, se
cumplen los supuestos establecidos en los artículos 152 y 153 del
Código de Procedimiento Civil para declarar abandonado el
procedimiento (considerandos 2º, y 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte Suprema, 22/06/2018, Rol Nº 1076-2018,


Cita online: CL/JUR/3108/2018

18. Incumplimiento del plazo para declarar abandonado el


procedimiento

De conformidad a los antecedentes del proceso, para computar el


plazo de seis meses, se debe contar a la fecha en la cual se dictó el
cúmplase por el tribunal, por lo que, en la especie no han transcurrido
los seis meses previstos en el artículo 152 del Código de Procedimiento
Civil, de lo anterior, no puede concluirse otra cosa que el procedimiento
no pudo entenderse abandonado por no haber concurrido la hipótesis
que la ley ha impuesto para la pérdida de todo lo obrado
(considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 6/07/2018, Rol Nº 877-2018,

Cita online: CL/JUR/3415/2018

19. Normas sobre el abandono del procedimiento deben ser


interpretadas restrictivamente

En este punto cabe resaltar que en atención a la esencia


sancionatoria del instituto en cuestión, cuyos efectos perjudiciales
recaen sobre el demandante que ha ejercido la acción que determina la
sustanciación del juicio; en cuanto sanción, las disposiciones que
regulan este incidente especial han de ser interpretadas y aplicadas
restrictivamente, lo que entre otros aspectos significa que no es
permitido al intérprete adicionar otros presupuestos de procedencia que
aquellos expresamente indicados en la ley (considerando 6º de la
sentencia de casación).

Corte Suprema, 6/07/2018, Rol Nº 39776-2017,


Cita online: CL/JUR/4410/2018

20. Improcedencia de computar plazo de abandono del procedimiento


mientras el expediente se encuentra extraviado
En este caso no se ha verificado la inercia del actor, sino que dicha
parte ha realizado gestiones tendientes a permitir el avance del proceso,
como lo es su presentación pidiendo al tribunal que se certificara el
extravío de la causa, cuestión a la que el tribunal accedió casi un mes
después. Luego, respecto a si el plazo del abandono puede computarse
mientras el expediente se encuentra extraviado, cabe considerar que se
encuentra establecido que el tribunal a quo accedió a la petición de
certificación de extravío, cuestión que sólo se explica por el hecho de
que el proceso judicial efectivamente no se encontraba a disposición de
las partes, pues de lo contrario no tenía razón de ser la certificación
ordenada. En este orden de ideas, y teniendo presente que el mismo
tribunal, de oficio, dejó sin efecto la orden anterior, fecha en la que se
constata por el juez actuante que el expediente se encuentra en
dependencias del tribunal, sólo cabe concluir que el plazo del abandono
del procedimiento estuvo interrumpido por un entorpecimiento ajeno a
la voluntad del demandante. En consecuencia, establecido que no se
ha producido la paralización del procedimiento, los jueces del fondo al
decretar su abandono en una situación no autorizada por la ley, han
incurrido en un error de derecho y vulnerado el artículo 152 del Código
de Procedimiento Civil (considerandos 10º a 12º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 13/08/2018, Rol Nº 44505-2017,


Cita online: CL/JUR/4346/2018

21. Procedencia del abandono del procedimiento en la etapa


administrativa del cobro ejecutivo de obligaciones tributarias

De conformidad a los artículos 2º, 148, 170 inciso 1º, 192, 193
inciso 1º y otras disposiciones del Código Tributario, en la etapa
procesal de cobro ejecutivo de las obligaciones tributarias de dinero que
se tramita ante el Tesorero del Servicio de Tesorerías, en su calidad de
Juez Sustanciador, está autorizada legalmente la aplicación supletoria
de los artículos 152 y siguientes del Código de Procedimiento Civil. En
la especie, del mérito de los antecedentes aparece que se ha
demostrado ante la Juez Substanciador, la concurrencia copulativa de
los supuestos o requisitos legales que hacen procedente la declaración
del abandono del procedimiento peticionada por la recurrente, a la luz
de las exigencias que prescriben los artículos 152 y siguientes del
Código de Procedimiento Civil, por cuanto, la última resolución útil
librada en el proceso, esto es, tendiente a dar curso progresivo a los
autos. Como sostiene la apelante es aquella mediante la cual se ordena
recabar antecedentes patrimoniales del ejecutado, librada en julio de
2013, en tanto que la última actuación procesal arribada al expediente
administrativo es de diciembre de 2013, data ésta de recepción del
exhorto con resultado negativo respecto de la traba del embargo,
habiendo transcurrido, por consiguiente, en exceso, tanto el plazo de
seis meses como el de tres años a los que aluden los artículos 152 y
153 del Código de Procedimiento Civil; por lo tanto, procede hacer lugar
al abandono del procedimiento (considerandos 4º y 6º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 11/02/2019, Rol Nº 1858-2018,


Cita online: CL/JUR/676/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 27/08/2019, Rol Nº 3717-2019,

Cita online: CL/JUR/4860/2019

— Corte Suprema, 12/04/2019, Rol Nº 324-2019,

Cita online: CL/JUR/2054/2019

22. Improcedencia del abandono del procedimiento si no se ha trabado


la litis

El abandono solo resulta procedente desde que se inicia el juicio, y


esto sucede "cuando la demanda se encuentra válidamente notificada
a la demandada, momento desde el cual se producen todos los efectos
de su interposición, entre otros, el necesario cumplimiento de dar
impulso al proceso, quedando también desde ese acto en la posibilidad
de ser sancionados, ya sea con rebeldías, prescripciones o abandonos"
—Corte de Apelaciones de Puerto Montt—. En la especie, el lapso
acusado por la incidentista no puede ser constitutivo del término previsto
en el artículo 152 del Código de Procedimiento Civil, pues se verificó
con anterioridad a su emplazamiento en el presente procedimiento. Por
lo mismo, al no haberse aun trabado la litis, tampoco puede
reconocérsele durante ese período la condición de parte demandada.
En consecuencia, resulta improcedente el incidente promovido
(considerandos 3º y 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 14/02/2019, Rol Nº 47947-2016,


Cita online: CL/JUR/676/2019

23. Solicitud de certificación de extravío constituye una gestión útil para


dar curso progresivo a los autos

En este caso, la solicitud de certificación de extravío, formulada antes


de que transcurrieran seis meses contados desde la resolución que cita
a las partes a audiencia de conciliación, debe considerarse un acto útil
para dar curso progresivo a los autos, desde que es la única que permite
que se verifique la siguiente actuación, cual es que se notifique la
referida resolución, permitiendo llevar a cabo la audiencia decretada,
satisfaciendo los parámetros del artículo 152 del Código de
Procedimiento Civil. En este aspecto, se debe precisar que la
importancia de lo anterior radica en la circunstancia que no se pueda
establecer un periodo de inactividad superior a seis meses que sea
imputable a la demandante y que, en consecuencia, pueda ser
sancionado con la aplicación del abandono del procedimiento, pues tal
presentación ha tenido la virtud de interrumpir el referido plazo, sin que
se verifique, en consecuencia, el cese de actividad procesal de todas
las partes del proceso. En consecuencia, no alcanzó a completarse el
término de seis meses que el legislador contempla para declarar
abandonado el procedimiento, vulnerando lo dispuesto en el
artículo 152 del Código de Procedimiento Civil (considerandos 7º y 8º
de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 26/03/2019, Rol Nº 3039-2018,


Cita online: CL/JUR/1646/2019

24. Principio de unidad del proceso. Demandado reconvencional puede


alegar abandono del procedimiento iniciado por contraparte.
Demandante reconvencional tiene derecho a solicitar abandono del
procedimiento de demanda dirigida en su contra.

En la especie, no resulta admisible alegar el abandono del


procedimiento pues se dedujo demanda reconvencional, no pudiendo,
en consecuencia tener una parte la calidad de demandante para
algunas gestiones y de demandado para otras, atendido el principio de
la unidad del proceso. Así, siguiendo el criterio que ha tenido esta Corte
(Rol Nº 4372007), no existe obstáculo para que quien ha demandado
reconvencionalmente pueda alegar el abandono del procedimiento
iniciado por su contraparte, puesto que tiene la calidad exigida en el
inciso primero del artículo 153 del Código de Procedimiento Civil, ya que
es sujeto pasivo en dicha relación procesal, pudiendo, entonces, ser
beneficiado por la inactividad del actor principal durante el pleito. Lo
anterior se ratifica al entender el carácter fraccionable que presenta todo
negocio en el cual se ventila una acción principal y una reconvencional,
perfectamente identificables una de la otra, sin que, por tanto, el
demandante reconvencional pierda su derecho a solicitar el abandono
del procedimiento en lo que dice relación con la demanda dirigida en su
contra (considerandos 3º y 4º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 29/04/2019, Rol Nº 38486-2017,


Cita online: CL/JUR/3043/2019

25. Impulso procesal corresponde al tribunal cuando la causa queda en


estado de citar a las partes a oír sentencia

En el estadio procesal en que se encontraba la causa, el tribunal


debió, de propia iniciativa, sin necesidad de petición de la parte
demandante o de alguna otra actuación, citar a oír sentencia,
encontrándose los litigantes eximidos de la carga de dar impulso al
proceso en dicha etapa. Por lo demás, resulta propicio recordar que el
Máximo Tribunal ha sostenido reiteradamente que no es procedente el
abandono del procedimiento en estadios procesales en que el impulso
y la promoción de la actividad de la causa se encuentran radicados en
el tribunal. Luego, los tribunales del fondo incurrieron en el error de
derecho denunciado al exigir a la parte demandante una actividad para
dar curso progresivo a los autos, no obstante que el procedimiento se
encontraba en una etapa procesal que se aparta de la hipótesis del
artículo 152 del Código de Procedimiento Civil, dado que, por mandato
legal —artículo 687 del mismo código—, el impulso de avance estaba
radicado en la judicatura (considerandos 7º y 8º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 30/03/2020, Rol Nº 15394-2018,


Cita online: CL/JUR/22270/2020
ARTÍCULO 153

El abandono podrá hacerse valer sólo por el demandado, durante todo el


juicio y hasta que se haya dictado sentencia ejecutoriada en la causa.

En los procedimientos ejecutivos el ejecutado podrá, además, solicitar el


abandono del procedimiento, después de ejecutoriada la sentencia definitiva
o en el caso del artículo 472. En estos casos, el plazo para declarar el
abandono del procedimiento será de tres años contados desde la fecha de la
última gestión útil, hecha en el procedimiento de apremio, destinado a obtener
el cumplimiento forzado de la obligación, luego de ejecutoriada la
sentencia definitiva o vencido el plazo para oponer excepciones, en su caso.
En el evento que la última diligencia útil sea de fecha anterior, el plazo se
contará desde la fecha en que quedó ejecutoriada la sentencia definitiva o
venció el plazo para oponer excepciones. En estos casos, si se declara el
abandono del procedimiento sin que medie oposición del ejecutante, éste no
será condenado en costas.51

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 144, 154, 155, 157, 174 y 472.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Plazo de tres años para el abandono del procedimiento en el juicio


ejecutivo.

Si bien la sanción de abandono del procedimiento es una norma


excepcional, en tanto encarna una sanción al litigante negligente, lo
cierto es que de su regulación se extrae que existe un término que
constituye la regla general, esto es, el plazo de seis meses previsto en
el artículo 152 del Código de Procedimiento Civil. En efecto, ante el
referido plazo emerge la norma de carácter excepcional contenida en el
artículo 153 del referido texto legal, que establece que en el juicio
ejecutivo se podrá aplicar tal sanción una vez ejecutoriada la sentencia
definitiva o en la hipótesis del artículo 472, norma esta última que
vincula con el caso en que no se oponen excepciones, razón por la que
el mandamiento de ejecución y embargo hace las veces de sentencia,
caso en el cual el plazo es de tres años. Como se observa, la ley es
clara en establecer este lapso de tiempo más amplio para sancionar
aquellas dilaciones relacionadas con la inactividad de las partes en el
proceso de ejecución de bienes del demandado, toda vez que, ambas
hipótesis contempladas en la disposición, dejan en evidencia que sólo
una vez que se resuelven las excepciones opuestas o se verifica la
imposibilidad de oponerlas, estando las partes debidamente
emplazadas, se cambia el plazo de seis meses por el de tres años
(considerando 11º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 7/03/2018, Rol Nº 34602-2017,


Cita online: CL/JUR/1130/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 17/08/2018, Rol Nº 237-2018,

Cita online: CL/JUR/4581/2018

2. Oportunidad para hacer valer el abandono del procedimiento

Respecto a la oportunidad de su interposición, el incidente tiene su


propia regulación, pues, al tenor de lo dispuesto en el artículo 153 del
Código de Procedimiento Civil, su primera regla determina que se
puede oponer tanto como defensa o acción, en cualquier momento del
juicio, reconociendo como único límite que no se haya dictado sentencia
ejecutoriada (considerando 2º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 14/02/2019, Rol Nº 47947-2016,


Cita online: CL/JUR/802/2019

3. Cumplimiento del plazo para declarar el abandono del procedimiento

El artículo 153 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil, aplicable


en la especie, contiene un principio absoluto e inequívoco en orden a
que el plazo para declarar el abandono del procedimiento será de tres
años contados desde la fecha de la última gestión útil, hecha en el
procedimiento de apremio, destinado a obtener el cumplimiento forzado
de la obligación, sin hacer distinciones ni excepciones al respecto, por
lo que, dentro del sentido natural y obvio de la disposición, no es dable
restringir su alcance como pretende el recurrente. Que lo anterior
armoniza perfectamente con todas las reglas procesales que tienden a
mantener la substanciación regular de un juicio. El desarrollo de las
diligencias constituye la marcha del procedimiento, de manera que, si
ellos no se evacuan o derechamente son abandonados a su suerte por
el ente encargado de su prosecución, por el plazo de tres años, permiten
al ejecutado solicitar el abandono del procedimiento, como aconteció en
la especie (considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 26/08/2019, Rol Nº 3933-2019,


Cita online: CL/JUR/4903/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 28/08/2019, Rol Nº 4100-2019,

Cita online CL/JUR/4881/2019

4. Procedencia del abandono del procedimiento en la etapa


administrativa del cobro ejecutivo de obligaciones tributarias.
Aplicación supletoria de las normas comunes a todo procedimiento

De acuerdo a la jurisprudencia de esta Corte de Apelaciones, el


instituto del abandono del procedimiento, al encontrarse establecido en
el Código de Procedimiento Civil, dentro de las reglas comunes a todo
procedimiento, aplicables a la especie por expreso mandato del
art ículo 2º del Código Tributario, no habiendo sido prohibida su
aplicación por el legislador en materias ejecutivas como la presente, y
constituyendo el expediente tramitado ante Tesorerías y ante el Juez
civil un solo todo homogéneo, destinado al cobro del impuesto territorial,
no cabe sino concluir que el abandono del procedimiento es una
institución aplicable al presente caso. Con base a lo recién señalado,
considerando asimismo que en la causa, la última resolución que recae
en alguna gestión útil es del 6 de noviembre de 2014, en la cual se
ordena trabar embargo, la que fue notificada el 21 de noviembre de ese
mismo año, y posteriormente solo figura una certificación de traba de
embargo de la misma fecha, sin que con posterioridad se realizara
gestión alguna hasta la interposición de la solicitud de abandono de
procedimiento de autos, el 2 de octubre de 2018, transcurriendo con
creces los plazos establecidos en el art ículo 153 del Código de
Procedimiento Civil para su procedencia (considerandos 3º y 4º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 12/04/2019, Rol Nº 324-2019,

Cita online: CL/JUR/2054/2019


Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 26/08/2019, Rol Nº 3933-2019,

Cita online: CL/JUR/4903/2019

— Corte de Apelaciones de Santiago, 11/02/2019, Rol Nº 1858-2018,

Cita online: CL/JUR/676/2019

— Corte de Apelaciones de Santiago, 16/01/2019, Rol Nº 13980-


2018,

Cita online: CL/JUR/292/2019

— Corte de Apelaciones de Concepción, 30/11/2018, Rol Nº 1002-


2018,

Cita online: CL/JUR/6677/2018

— Corte de Apelaciones de Concepción, 23/11/2018, Rol Nº 1004-


2018,

Cita online: CL/JUR/6548/2018

— Corte de Apelaciones de Santiago, 10/09/2018, Rol Nº 4750-2018,

Cita online: CL/JUR/5261/2018

5. Aplicación supletoria de las normas del Código de Procedimiento Civil


en materia tributaria

De acuerdo a los artículos 1º y 3º del Código de Procedimiento Civil,


sus normas tienen aplicación supletoria para todo tipo de contiendas
civiles entre partes, como también a aquellas gestiones, trámites y
actuaciones que no estén sometidos a una regla especial diversa. Por
su parte, el artículo 2º del Código Tributario, en lo no previsto por sus
normas y demás leyes tributarias, hace aplicable las normas de derecho
común contenidas en leyes generales o especiales. De lo antedicho se
desprende que la institución del abandono del procedimiento es
plenamente procedente en este tipo de causas; ello explica la decisión
del legislador de excluir en forma expresa esta institución sólo en las
reclamaciones referidas al Título II del Libro Tercero del Código
Tributario, según se señala en su artículo 146 —vigente a la fecha de
inicio del proceso, pero hoy derogado por la Ley Nº 20.322—, y en el
caso que el contribuyente se haya acogido a facilidades de pago de los
impuestos adeudados, conforme a lo dispuesto en el artículo 192
inciso 5º del referido Código. En suma, resulta evidente la procedencia
del abandono del procedimiento, máxime si existe norma expresa según
el artículo 148 del Código Tributario (considerandos 2º y 3º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Antofagasta, 25/10/2019, Rol Nº 1143-2019,

Cita online: CL/JUR/6305/2019

6. Plazo para deducir abandono del procedimiento es de tres años


desde la sentencia definitiva o de la certificación de no haberse
opuesto excepciones a la ejecución

La normativa aplicada al caso, está circunscrita, en principio, a lo que


dispone el legislador en el artículo 153 inciso 2º del Código de
Procedimiento Civil, cuando estatuye: "En los procedimientos ejecutivos
el ejecutado podrá, además, solicitar el abandono del procedimiento,
después de ejecutoriada la sentencia definitiva o en el caso del
artículo 472. En estos casos, el plazo para declarar el abandono del
procedimiento será de tres años contados desde la fecha de la última
gestión útil, hecha en el procedimiento de apremio, destinado a obtener
el cumplimiento forzado de la obligación, luego de ejecutoriada la
sentencia definitiva o vencido el plazo para oponer excepciones, en su
caso". La sanción de abandono del procedimiento para el ejecutante
negligente sólo puede prosperar si aquél ha cesado en la actividad que
le corresponde, propia del impulso procesal que le es exigible, por un
término que excede —en la hipótesis legal en análisis— a los tres años,
contado desde la fecha de la sentencia definitiva o de la certificación de
no haberse opuesto excepciones a la ejecución. Luego, en esta fase del
procedimiento —después de la certificación de que la demandada no
opuso excepciones—, para que el juicio siguiera el curso que
correspondía, sólo cabía al ejecutante instar, dentro del lapso del
abandono, por la realización de aquellas gestiones encaminadas al
cobro compulsivo de la obligación, de modo que las actuaciones
desarrolladas por el demandante durante el período posterior a la
certificación, consistentes en solicitudes de desarchivo del expediente,
notificaciones conforme al artículo 52 del Código de Procedimiento Civil
y una propuesta de liquidación del crédito, no han producido el efecto
de interrumpir el lapso para decretar el abandono, ya que no han tendido
a obtener la realización de bienes ni el pago de lo adeudado,
considerando, además, que tales presentaciones fueron largamente
espaciadas en el tiempo, denotando ello la pasividad del ejecutante;
inacción que permitió indefectiblemente, la paralización del curso del
pleito (considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/11/2018, Rol Nº 18827-2018,


Cita online: CL/JUR/6219/2018

7. Existencia de dos resoluciones emanadas del tribunal que son


contradictorias e impiden conocer el plazo en que se puede solicitar
el abandono del procedimiento

Resulta inconcuso, de acuerdo a los antecedentes del proceso, que


en la especie concurren cada uno de los requisitos que hacen
procedente la declaración de nulidad, puesto que existen dos
resoluciones emanadas del tribunal que son contradictorias e impiden
conocer el plazo en que se puede solicitar el abandono del
procedimiento. Para el ejecutante, al existir la certificación de no
haberse opuesto excepciones se aplicaría el plazo de 3 años
establecido en el artículo 153 inciso 2º, mientras que para el
demandado rige el artículo 152, ambos del Código de Procedimiento
Civil, ya que al notificarse con posterioridad de la demanda y ser
aceptada por el tribunal dicha notificación, la última gestión útil sería
aquella en que el ejecutante pide un nuevo día y hora para practicar el
requerimiento de pago y el plazo sería de 6 meses desde esa gestión.
Dicho irregular proceder configura un vicio que no puede ser
enmendado sino con la declaración de nulidad del procedimiento,
invalidando la certificación de fojas 202, y anulando desde la resolución
de fecha 5 de octubre en adelante (salvo aquellas que proveen las
solicitudes de desarchivo), dejando subsistentes todas las actuaciones
procesales que le preceden, ya que ellas no se han visto afectadas. A
su vez, y de manera consecuencial, procede disponer la invalidación de
todo lo obrado con posterioridad. Ciertamente, corresponde la anulación
con la amplitud indicada, por cuanto los actos procesales no se
constituyen como fenómenos aislados, sino concatenados unos a otros,
siendo el siguiente el resultado del anterior y, a su vez, el antecedente
del que viene a continuación, resultando una estrecha vinculación entre
unos a otros, de manera que la nulidad de un acto no siempre determina
exclusivamente su ineficacia, sino que puede arrastrar la invalidez de
una serie de gestiones e incluso de todo el proceso (considerandos 5º
y 6º de la anulación de oficio).

Corte Suprema, 17/12/2018, Rol Nº 8904-2018,


Cita online: CL/JUR/6960/2018

8. Cumplimiento de los requisitos de procedencia del abandono del


procedimiento

Desde la última gestión útil y hasta la petición de abandono ha


transcurrido el término al que alude el artículo 153 del Código de
Procedimiento Civil, pues debe entenderse por gestión útil para dar
curso progresivo a los autos aquella que permite la prosecución de la
controversia de que se trata para arribar a su resolución, en el caso sub
lite, la realización de los bienes del deudor para así solucionar su
acreencia. En consecuencia, se cumplen en la especie las exigencias
legales para decretar el abandono del procedimiento atendida la
inactividad procesal del Servicio de Tesorerías, porque la única
actuación que ésta debía propugnar era la notificación de las
actuaciones desplegadas para seguir adelante con la ejecución,
requisito esencial para proseguir el curso regular de la litis que
precisamente ella entabló (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 8/04/2019, Rol Nº 5841-2019,


Cita online: CL/JUR/1914/2019

9. Abandono supone sentencia ejecutoriada

La hipótesis de abandono de procedimiento prevista en el inciso


tercero del artículo 153 del Código de Procedimiento Civil, sólo tiene
aplicación después de ejecutoriada la sentencia definitiva o en el caso
que no se hayan opuesto excepciones por el ejecutado, siendo el plazo
de la inactividad exigido por la ley para que se configure el abandono
de procedimiento, el de tres años. De conformidad al artículo 174 del
Código de Procedimiento Civil una sentencia se entiende firme o
ejecutoriada desde que se notifique el decreto que la mande cumplir una
vez que terminen los recursos deducidos, cuando estos hayan sido
hechos valer por las partes y, si no procede recurso alguno en contra
de ella, desde que se haya notificado a las partes y en el caso de las
sentencias definitivas se entiende firme o ejecutoriada desde que el
momento en que se certifique por el secretario del tribunal la
circunstancia anterior (considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 5/07/2019, Rol Nº 13921-2018,

Cita online: CL/JUR/5253/2019

10. En la etapa de cumplimiento incidental del fallo procede aplicar la


norma de abandono del procedimiento del art. 153 del Código de
Procedimiento Civil.

Cabe señalar que la jurisprudencia y doctrina mayoritaria es de


opinión de que el artículo 152 del Código de Procedimiento Civil, prevé
el abandono del procedimiento para el caso de los juicios declarativos y
el artículo 153 del mismo texto legal, la establece para los juicios
ejecutivos, según su claro tenor literal en este último caso, normas que
se ubican en el Libro I, Título XVI, del Código de Procedimiento Civil.
Por otra parte, en el mismo Libro I del Código recién mencionado, en su
Título XIX se regula la ejecución de las resoluciones, otorgándose la
posibilidad de exigir el cumplimiento ante el mismo tribunal que dictó la
resolución o a través de la iniciación de un nuevo juicio. Por
consiguiente, coincidiendo con la jurisprudencia mayoritaria, debe
concluirse que la etapa de cumplimiento incidental del fallo corresponde
a un procedimiento ejecutivo y, por ende, es dable aplicar la norma
contenida en el artículo 153 del Código de Procedimiento Civil, que
establece: "El abandono podrá hacerse valer sólo por el demandado,
durante todo el juicio y hasta que se haya dictado sentencia ejecutoriada
en la causa.". "En los procedimientos ejecutivos el ejecutado podrá,
además, solicitar el abandono del procedimiento, después de
ejecutoriada la sentencia definitiva o en el caso del artículo 472. En
estos casos, el plazo para declarar el abandono del procedimiento será
de tres años contados desde la fecha de la última gestión útil, hecha en
el procedimiento de apremio, destinado a obtener el cumplimiento
forzado de la obligación, luego de ejecutoriada la sentencia definitiva o
vencido el plazo para oponer excepciones, en su caso. En el evento que
la última diligencia útil sea de fecha anterior, el plazo se contará desde
la fecha en que quedó ejecutoriada la sentencia definitiva o venció el
plazo para oponer excepciones. En estos casos, si se declara el
abandono del procedimiento sin que medie oposición del ejecutante,
éste no será condenado en costas" (considerandos 3º y 4º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 24/07/2019, Rol Nº 2253-2019,

Cita online: CL/JUR/4266/2019

11. Plazo de inactividad para decretar abandono del procedimiento en


juicio ejecutivo es de tres años

La doctrina y la jurisprudencia ha establecido lo siguiente: "El sentido


del artículo 153 del Código de Procedimiento Civil, claramente
manifestado en el tenor literal del mismo, es que en los procedimientos
ejecutivos —entendiendo comprendidos en esta expresión, no sólo los
que se desarrollen de conformidad a las disposiciones contenidas en
los Títulos I y II del Libro Tercero del Código de Procedimiento Civil, sino
también los que se tramitan de conformidad con lo dispuesto en el
Título XIX del mismo cuerpo normativo— el plazo durante el cual las
partes deben cesar en la prosecución del juicio es de tres años contados
no desde una resolución sino que desde cualquier clase de gestión de
que se deje constancia en el cuaderno de apremio del deudor ejecutado,
la cual debe tener, por sí sola o conjuntamente con otras gestiones
posteriores, la virtud de permitir al demandante alcanzar el cumplimiento
de la obligación que se ha declarado mediante la sentencia definitiva o
que consta indubitadamente en un título ejecutivo diferente (Corte
Suprema, Primera Sala, 22 de enero de 2015, Rol Nº 18914-2014)". "Es
necesario tener en consideración que el juicio ejecutivo ha sido
concebido como un procedimiento contencioso, de aplicación general o
especial, según el caso, por cuyo medio se persigue el cumplimiento
forzado de una obligación que consta en un título fehaciente o
indubitado. Entre otras de sus características cabe destacar que se trata
de un procedimiento compulsivo o de apremio, en razón que se inicia
por la inercia del deudor a cumplir voluntariamente la obligación que lo
vincula frente a un acreedor. Desde este punto de vista, se puede
afirmar que está inspirado en sentimientos de protección del acreedor y
de presunción en contra de los del deudor" (Casarino Viterbo Mario,
Manual de Derecho Procesal, Derecho Procesal Civil, Quinta Edición
Actualizada, Editorial Jurídica de Chile, Tomo V, págs. 71 y 72)
(considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 17/10/2019, Rol Nº 15843-2018,

Cita online: CL/JUR/6093/2019

12. Determinación de la oportunidad que tenía el ejecutado para


promover la declaración de abandono del procedimiento

Sobre el particular debe enfatizarse que el analizado corresponde a


un incidente de carácter especial. Como tal, sólo puede estar sujeto a
la regla del artículo 85 del Código de Procedimiento Civil en la medida
que no exista una norma particular que regule la materia. Y esa regla
especial existe. No es otra que la prevista en el artículo 155 del mismo
texto legal. De ella se colige que dicha incidencia puede plantearse en
cualquier tiempo, siempre y cuando el ejecutado no haya realizado
previamente alguna otra gestión que suponga renunciar su derecho a
alegar el abandono. Ése ha sido el caso, dado que la primera gestión
efectuada por el ejecutado, en su primera comparecencia, fue
precisamente formular la incidencia de que se trata. Lo que se viene
sosteniendo resulta coherente con la naturaleza de este instituto, en el
sentido que busca sancionar con la pérdida del procedimiento a quien
no ha sido diligente en la prosecución de sus derechos, en términos que
no se justifica mantener pendiente un proceso en forma indefinida. Por
semejante razón no parece razonable ni resulta acorde con esa entidad
sancionatoria, imponer al demandado más exigencias de plazo —de
tres años— u oportunidad que las contempladas por el legislador en los
artículos 153 y 155 del Código de Procedimiento Civil (considerandos 5º
y 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 11/02/2020, Rol Nº 4376-2019,

Cita online: CL/JUR/10082/2020

ARTÍCULO 154 (161)

Podrá alegarse el abandono por vía de acción o de excepción, y se


tramitará como incidente.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 89, 90 y 91.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La primera gestión hecha por el demandado después de que el actor


reanudó el procedimiento fue alegar el abandono por vía de excepción

No se configura extemporaneidad Por otra parte, en cuanto a la


extemporaneidad del incidente de abandono, alegada por la parte
demandante, cabe señalar que la primera gestión hecha por el
demandado después de que el actor reanudó el procedimiento fue
precisamente alegar el abandono por vía de excepción, por lo que su
proceder se ajustó cabalmente a la norma especial prevista en el
artículo 155 en relación con el artículo 154, ambas del Código de
Procedimiento Civil (considerando 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Rancagua, 16/6/2000, Rol Nº 15962,

Cita online: CL/JUR/3861/2000

2. La solicitud de abandono del procedimiento puede ser resuelta de


plano por el tribunal

El abandono del procedimiento se tramita como incidente, por lo que


le resultan aplicables las disposiciones que para tales
artículos consagra el Código de Procedimiento Civil, en particular el
artículo 89, el cual, si bien dispone que promovido un incidente se
concederán tres días para responder, faculta al tribunal para resolver de
plano aquellas peticiones cuyo fallo se pueda fundar en hechos que
consten del proceso. En consecuencia, resulta evidente que la solicitud
de abandono del procedimiento puede ser resuelta de plano por el
tribunal fundado, como en el caso de marras, en el estado en que se
encuentra la causa —con sentencia definitiva dictada y notificada a la
demandada— sin que ello importe incurrir en falta o abuso recurrible de
queja (considerandos 3º a 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 26/10/1994, Rol Nº 22413-1994,


Cita online: CL/JUR/2149/1994
3. La resolución que se pronuncia sobre una petición de abandono del
procedimiento tiene la calificación jurídica de sentencia interlocutoria

Esta Corte considera que la resolución que se pronuncia sobre una


petición de abandono del procedimiento tiene la calificación jurídica de
sentencia interlocutoria, pues falla un incidente del juicio estableciendo
derechos permanentes a favor de las partes. Que en este sentido se ha
pronunciado esta Corte Suprema (Revista de Derecho y Jurisprudencia,
Tomo 37, Segunda Parte, Sección Primera, página 346 y siguientes y
Tomo 56, Segunda Parte, Sección Primera, página 450 y siguientes),
como asimismo la doctrina de los autores, Carlos Anabalón Sanderson
quien expresa que en cuanto a la resolución recaída en la gestión sobre
abandono de la instancia está fuera de dudas que tal resolución es una
sentencia interlocutoria, ya que establece derechos permanentes en
favor de las partes; pero no es esto simplemente, sino que asume
todavía la particularidad de hacer imposible la prosecución del juicio si
es de índole afirmativa, manteniendo tal calificación, por cuanto no
reviste los caracteres de sus congéneres, como la sentencia de término,
la resolución que acepta el desistimiento de la demanda o aprueba la
transacción de las partes (Tratado Práctico de Derecho Procesal,
páginas 64 y 65), y Mario Casarino Viterbo, al señalar que si la
resolución es pronunciada en la primera instancia y niega lugar al
abandono, será susceptible de apelación desde el momento en que
estamos en presencia de una sentencia interlocutoria (artículo 187
Código de Procedimiento Civil) (Manual de Derecho Procesal, página
334, Tomo III); y Alma Wilson Gallardo quien afirma que no es dudoso
el pronunciamiento en el sentido de tratarse de una sentencia
interlocutoria —la que resuelve el incidente de abandono del
procedimiento— aparece fundado en la naturaleza de la cuestión
controvertida en el incidente y en el claro tenor literal del artículo 158 del
Código de Procedimiento Civil y la distinción que se hace entre la
sentencia que acoge o desecha el incidente de abandono del proceso
estriba en que la primera es una sentencia interlocutoria de aquellas que
hacen imposible la continuación del juicio; y, la segunda es una simple
sentencia interlocutoria (páginas 78 y 79. Del Abandono del Proceso)
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 11/10/1994, Rol Nº 4356-1994,


Cita online: CL/JUR/1609/1994
Fallo en sentido contrario:

— Corte Suprema, 13/03/2006, Rol Nº 16-2006,

Cita online: CL/JUR/5129/2006

ARTÍCULO 155 (162)

Si, renovado el procedimiento, hace el demandado cualquiera gestión que


no tenga por objeto alegar su abandono, se considerará renunciado este
derecho.52

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 85, 152, 153 y 211.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Abandono del procedimiento carece de plazo y puede hacerse valer


mientras exista el juicio

El artículo 155 del Código de Procedimiento Civil impone como única


carga procesal al demandado la de no ejecutar una actuación previa
que implique renuncia a promover la incidencia de abandono. No exige
plazo alguno para hacerlo, y la jurisprudencia del Máximo Tribunal ha
señalado que a diferencia de lo que acontece con los incidentes
generales, el instituto jurídico del abandono del procedimiento carece
de plazo y puede hacerse valer mientras exista el juicio, con una sola
limitación: si una vez reanudado el proceso el demandado hace
cualquier gestión que no tenga por objeto alegar su abandono, se
considera renunciado este derecho. Además, tal como lo ha resuelto
previamente la Corte Suprema, el incidente de abandono puede ser
alegado como acción o excepción, llevando con ello implícito la
inexistencia de un plazo determinado para hacerlo valer. De ello deriva
que la única causal de preclusión del referido incidente está constituida
por la realización de cualquier gestión útil formulada por el demandado
que no tenga por objeto alegar el abandono (considerandos 5º y 6º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 19/07/2018, Rol Nº 6241-2018,


Cita online: CL/JUR/3777/2018
Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 25/07/2018, Rol Nº 12562-2018,

Cita online: CL/JUR/4063/2018

2. Renovación del procedimiento que no se configura

En lo tocante a la alegación de renovación del procedimiento cabe


consignar que el artículo 155 del Código de Procedimiento Civil dispone
que "si, renovado el procedimiento, hace el demandado cualquiera
gestión que no tenga por objeto alegar su abandono, se considerará
renunciado este derecho." Este precepto impone como única carga
procesal al demandado la de no ejecutar una actuación previa que
implique renuncia a promover la incidencia de abandono, y al haberse
planteado el incidente como primera gestión, no se configura la
renovación del procedimiento en los términos que exige la ley. Lo
razonado lleva a concluir que el recurso no puede prosperar por
adolecer de manifiesta falta de fundamento (considerando 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 24/01/2018, Rol Nº 36201-2017,


Cita online: CL/JUR/1219/2018

3. Incidente de abandono del procedimiento puede deducirse en


cualquier tiempo si el ejecutado no ha realizado previamente otra
gestión útil

Sobre el particular debe enfatizarse que el analizado corresponde a


un incidente de carácter especial. Como tal, sólo puede estar sujeto a
la regla del artículo 85 del Código de Procedimiento Civil en la medida
que no exista una norma particular que regule la materia. Y esa regla
especial existe. No es otra que la prevista en el artículo 155 del mismo
texto legal. De ella se colige que dicha incidencia puede plantearse en
cualquier tiempo, siempre y cuando el ejecutado no haya realizado
previamente alguna otra gestión que suponga renunciar su derecho a
alegar el abandono. Ése ha sido el caso, dado que la primera gestión
efectuada por el ejecutado, en su primera comparecencia, fue
precisamente formular la incidencia de que se trata. Lo que se viene
sosteniendo resulta coherente con la naturaleza de este instituto, en el
sentido que busca sancionar con la pérdida del procedimiento a quien
no ha sido diligente en la prosecución de sus derechos, en términos que
no se justifica mantener pendiente un proceso en forma indefinida. Por
semejante razón no parece razonable ni resulta acorde con esa entidad
sancionatoria, imponer al demandado más exigencias de plazo —de
tres años— u oportunidad que las contempladas por el legislador en los
artículos 153 y 155 del Código de Procedimiento Civil (considerandos 5º
y 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 11/02/2020, Rol Nº 4376-2019,


Cita online: CL/JUR/10082/2020

ARTÍCULO 156 (163)

No se entenderán extinguidas por el abandono las acciones o excepciones


de las partes; pero éstas perderán el derecho de continuar el procedimiento
abandonado y de hacerlo valer en un nuevo juicio.

Subsistirán, sin embargo, con todo su valor los actos y contratos de que
resulten derechos definitivamente constituidos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 150, 152 y 158. Código Civil: artículos
1437 y 1545.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Efectos del abandono del procedimiento

El abandono del procedimiento es una institución de carácter procesal


que tiene lugar cuando todas las partes que figuran en el juicio han
cesado en su prosecución durante el tiempo que la ley señala. El
abandono del procedimiento constituye una sanción correlativa a la
negligencia, inercia o inactividad de aquél, con la que ha dado pábulo al
hecho objetivo que se detenga el curso del pleito, impidiendo con su
paralización que éste tenga la pronta y eficaz resolución que le
corresponde. Específicamente, una vez declarado el abandono y por
efecto del mismo, las partes pierden el derecho de continuar el
procedimiento y de hacerlo valer en un nuevo juicio, aunque no se
extinguen sus acciones y excepciones, subsistiendo con todo su valor
los actos y contratos de que resulten derechos definitivamente
constituidos; todo ello de conformidad con lo dispuesto en el artículo 156
del Código de Procedimiento Civil (considerando 5º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 29/01/2018, Rol Nº 36675-2017,


Cita online: CL/JUR/448/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 6/06/2019, Rol Nº 36805-2017,

Cita online: CL/JUR/3261/2019

— Corte Suprema, 20/11/2018, Rol Nº 35113-2017,

Cita online: CL/JUR/6442/2018

2. Declaración de abandono del procedimiento no extingue las acciones


o excepciones de las partes

De conformidad al artículo 156 del Código de Procedimiento Civil, la


declaración de abandono no extingue las acciones o excepciones de las
partes, en consecuencia, la actora puede ejercer sus acciones de cobro
y la demandada por su parte la excepción de prescripción. No obstante,
conforme al inciso 2º de la misma norma, pese a la declaración de
abandono, subsisten con todo valor los actos y contratos de que
resulten derechos definitivamente constituidos. Si bien por mandato de
los artículos 2518 y 2503 Nº 2 del Código Civil, no pudo entenderse
interrumpida la prescripción de la acción de cobro con la notificación de
la demanda declarada abandonada, tales preceptos no alcanzan al acto
concreto de haberse acelerado la deuda y su exigibilidad
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 2/02/2018, Rol Nº 7528-2017,

Cita online: CL/JUR/544/2018

3. Abandono del procedimiento en el juicio ejecutivo

El artículo 156 del Código de Procedimiento Civil asigna a la


declaración de abandono consecuencias en el orden civil y procesal. Lo
primero se refiere a "las acciones y excepciones de las partes" y a "los
actos y contratos de que resulten derechos definitivamente
constituidos", cuya vigencia expresamente reconoce y resguarda. En
cambio, en el ámbito adjetivo, se extingue la relación procesal, el
derecho de las partes para continuar el proceso abandonado y la
posibilidad "de hacerlo valer en un nuevo juicio". Conforme lo recién
dicho, siendo un hecho de la causa que con anterioridad la demandada
dedujo una demanda ejecutiva a fin de perseguir el pago de los
dividendos insolutos a contar del mes enero de 2010 y que en esa
oportunidad manifestó su intención de hacer efectiva la cláusula de
aceleración convenida entre las partes haciendo exigible el total de la
deuda que consta en título de marras, los sentenciadores determinan
con acierto que la prescripción de la acción ejecutiva y aun la ordinaria
para el cobro de la deuda se inició a contar de dicha manifestación, sin
que obste a esa conclusión el hecho de haberse declarado el abandono
del anterior juicio ejecutivo. En efecto, en el caso de autos resulta claro
que encontrándose en curso el plazo convenido para la obligación, la
recurrente expresamente decidió acelerar el servicio de la deuda al
deducir demanda ejecutiva. Por otro lado, tampoco puede estimarse
que hubiere operado interrupción de la prescripción por la existencia del
anterior proceso ejecutivo ya que el mismo concluyó por declaración de
abandono del procedimiento, debiendo estarse entonces a lo que
previene el inciso segundo del artículo 156 del Código de Procedimiento
Civil (considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/01/2020, Rol Nº 25259-2019,


Cita online: CL/JUR/9437/2020

ARTÍCULO 157 (164)

No podrá alegarse el abandono del procedimiento en los procedimientos


concursales de liquidación, ni en los de división o liquidación de herencias,
sociedades o comunidades.53

Concordancias: Código Tributario: artículo 201.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Hipótesis de excepción del abandono del procedimiento del


artículo 157 del Código de Procedimiento Civil son taxativas
Del examen del artículo 157 del Código de Procedimiento Civil se
desprende que la enumeración que contempla como hipótesis de
improcedencia o de excepción debe entenderse agotada a sus numerus
clausus y no extenderlos a otras no expresamente contempladas. Por
otra parte, cuando el legislador ha querido excluir el abandono del
procedimiento de determinados procedimientos, lo ha manifestado de
manera expresa. Sin embargo, tal exclusión no se contiene en
disposición alguna del DL Nº 2.695, de lo que sigue que resulta
procedente el abandono del procedimiento en los procedimientos
establecidos en el referido DL (considerando 4º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 1/06/2016, Rol Nº 16359-2016,


Cita online: CL/JUR/3632/2016

2. Improcedencia de alegar abandono del procedimiento en caso de la


acción revocatoria concursal

(Voto disidente) En estos autos sobre procedimiento de liquidación


forzosa se ha promovido incidente de abandono del procedimiento, cuyo
fundamento doctrinal se sustenta en la inactividad de la parte interesada
—en este caso el liquidador concursal— en proseguir en la gestión de
la acción revocatoria impetrada contemplada en el artículo 288 y
siguientes de la Ley Nº 20.720, sometida a las reglas del procedimiento
sumario seguido ante el mismo tribunal. Según se señala, la acción
revocatoria concursal de carácter subjetiva que se tramita en estos
autos, no estaría amparada por la excepción que contempla el
artículo 157 del Código de Procedimiento Civil que descarta la alegación
de abandono para estas acciones, al estatuirse que: "No podrá alegarse
el abandono del procedimiento en los procedimientos concursales de
liquidación, ni en los de división o liquidación de herencias, sociedades
o comunidades". Se argumenta en el fallo de mayoría que el de
conformidad al numeral veintiocho del artículo 2º de la Ley Nº 20.720,
bajo el epígrafe "Del procedimiento concursal de liquidación", estos
corresponden a los regulados en Capítulo IV de la misma Ley que no
contienen ni hacen mención las acciones revocatorias concursales.
Estas últimas están reglamentadas en el Capítulo VI de la Ley, a las que
se refiere expresamente el art. 348 Nº 2, en la parte que modificó el
art. 157 del Código de Procedimiento Civil en lo tocante al abandono de
procedimiento, limitando el alcance de la exclusión de su aplicación,
únicamente a "los procedimientos concursales de liquidación". Por
todas estas razones razón no se aplicaría esta sanción a las acciones
concursales de revocación (considerandos 1º a 3º de la disidencia de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 11/02/2020, Rol Nº 6740-2019,


Cita online: CL/JUR/10102/2020

TÍTULO XVII DE LAS RESOLUCIONES JUDICIALES

ARTÍCULO 158 (165)

Las resoluciones judiciales se denominarán sentencias definitivas,


sentencias interlocutorias, autos y decretos.

Es sentencia definitiva la que pone fin a la instancia, resolviendo la cuestión


o asunto que ha sido objeto del juicio.

Es sentencia interlocutoria la que falla un incidente del juicio, estableciendo


derechos permanentes a favor de las partes, o resuelve sobre algún trámite
que debe servir de base en el pronunciamiento de una sentencia definitiva o
interlocutoria.

Se llama auto la resolución que recae en un incidente no comprendido en


el inciso anterior.

Se llama decreto, providencia o proveído el que, sin fallar sobre incidentes


o sobre trámites que sirvan de base para el pronunciamiento de una
sentencia, tiene sólo por objeto determinar o arreglar la substanciación del
proceso.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 17, 61, 169 a 171, 175, 181, 182, 184,
186, 187, 188, 211, 231, 232, 434, 470, 472, 473, 561, 569, 572, 594, 610, 635, 640, 641, 663,
690, 751, 753, 766, 810 y 826. Constitución Política: artículo 73. Código Civil: artículo 3º. Código
Orgánico de Tribunales: artículo 70. Código Aeronáutico: artículo 21. Auto Acordado de la Corte
Suprema sobre la forma de las sentencias D.O. 30.09.1920.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Clasificación de las resoluciones judiciales


Para determinar la procedencia del recurso de apelación en estos
autos, ha de estarse a la clasificación de las resoluciones judiciales que
efectúa el artículo 158 del Código de Procedimiento Civil, en tal sentido
ha de descartarse de plano que nos encontremos ante una sentencia
definitiva desde que la resolución apelada no se pronunció sobre el
fondo del asunto; tampoco se trata de una sentencia interlocutoria que
ponga término al asunto, desde que aquel se encontraba ya concluido,
así tampoco falla una incidencia del asunto ni establece derechos
permanentes a favor del interesado, desde que como se indicó la
tramitación del asunto se encontraba terminada. Por último no se atisba
que la resolución en comento altere la sustanciación regular del juicio ni
establezca trámites no contemplados por la ley, puesto que no hace
más que remitirse a lo resuelto con tres años de antelación. Por lo
anterior, el recurso de apelación debe rechazarse de plano
(considerandos 2º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Copiapó, 28/03/2016, Rol Nº 69-2016,

Cita online: CL/JUR/4382/2016

2. Apelación interpuesta contra resolución que no tiene naturaleza


jurídica de sentencia definitiva en juicio sumario, sólo admite
apelación en sólo efecto devolutivo

El artículo 691 del Código de Procedimiento Civil establece que la


sentencia definitiva y la resolución que dé lugar al procedimiento
sumario en el caso del inciso 2º del art ículo 681, serán apelables en
ambos efectos, agregando que las demás resoluciones, sólo serán
apelables en el efecto devolutivo. Por otra parte, conforme al
artículo 158 del Código de Procedimiento Civil, la naturaleza jurídica de
la resolución recurrida de apelación, es la de un auto, por cuanto falla
un incidente, sin establecer derechos p ermanentes a favor de las
partes, ni resolver sobre un trámite que pueda servir de base en el
pronunciamiento de una sentencia definitiva ni interlocutoria. De esta
forma, la apelación subsidiaria interpuesta por la parte demandante,
debió ser concedida en el sólo efecto devolutivo, por tratarse de una
apelación interpuesta en contra de una resolución que no tiene la
naturaleza jurídica de una sentencia definitiva y en este tipo de
procedimiento solo es apelable en ambos efectos la sentencia definitiva,
mientras que las demás resoluciones se conceden en el solo efecto
devolutivo y asimismo, tratándose de un auto, la apelación debió
concederse en el solo efecto devolutivo, en aplicación del artículo 194
del Código de Procedimiento Civil (considerandos 6º a 8º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 4/05/2018, Rol Nº 3628-2018,

Cita online: CL/JUR/2239/2018

3. Naturaleza jurídica de resolución que falla tercería de prelación o de


pago es de sentencia definitiva

La naturaleza jurídica de la resolución que rechaza o acoge una


tercería de prelación o de pago es la de una sentencia definitiva, pues
independientemente de que el procedimiento que origina la acción
respectiva se inicia e incorpora de manera independiente a un proceso
ya iniciado y que la ley exprese que debe tramitarse como incidente, lo
cierto es que pone término a la instancia suscitada en tal tramitación,
resolviendo la cuestión o asunto que ha sido objeto de la controversia
promovida con ocasión de la aludida demanda y de las contestaciones,
satisfaciendo de este modo las exigencias de la definición legal de esta
clase de resoluciones judiciales entrega el inciso segundo del
artículo 158 del Código de Procedimiento Civil. (considerando 3º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 24/07/2018, Rol Nº 7121-2018,

Cita online: CL/JUR/4116/2018

4. Resolución que rechaza incidente de nulidad no es sentencia


interlocutoria, pues no establece derechos permanentes en favor de
las partes

(Voto disidente) La solicitud de nulidad de lo obrado tiene la


naturaleza jurídica de un incidente, pues conforme lo dispone el
artículo 82 del Código de Procedimiento Civil se trata de una cuestión
accesoria de un juicio que requiere pronunciamiento especial del
tribunal, con audiencia de las partes. Pues bien, con arreglo a lo
previst o en el artículo 158 del mismo Código Civil, un incidente
únicamente pueden terminar por dos tipos de resoluciones judiciales:
sentencia interlocutoria, si establece derechos permanentes en favor de
las partes, o auto, si no se genera este efecto. La resolución que
rechaza el incidente de nulidad no puede considerarse sentencia
interlocutoria, pues no esta blece derechos permanentes en favor de las
partes, en tanto al desestimar el incidente mantiene las cosas en el
mismo estado en que se encontraban antes de que éste se promoviera.
Tampoco es posible afirmar que "establezca el derecho permanente del
actor de continuar con el juicio", pues de ese derecho goza desde el
momento en que lo inicia y, en rigor, no se lo concede u otorga la
resolución que no hace lugar a la solicitud de nulidad. Por consiguiente,
sólo cabe concluir que el aludido pronunciamiento tiene la naturaleza
jurídica de un auto y que, al tenor del artículo 188 del Código de
Procedimiento, sólo es apelable cuando altera la sustanciación regular
del juicio o recae sobre trámites que no están expresamente ordenados
por la ley. En este contexto y teniendo en consideración que la
providencia que desestima el incidente de nulidad de lo obrado
promovido por la parte demandada no ha alterado la tramitación regular
del juicio ni ha recaído sobre un trámite que no esté previsto por la ley
en forma expresa, la conclusión que se impone es la inadmisibilidad del
recurso de apelación y, por consiguiente, que el recurso de hecho deba
ser acogido (considerandos 1º a 3º de la disidencia de la sentencia de
la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 8/03/2019, Rol Nº 1359-2019,

Cita online: CL/JUR/1315/2019

5. Resolución que falla tercería de posesión es una sentencia definitiva,


apelable dentro del plazo de 10 días contados desde su notificación

Las tercerías del procedimiento ejecutivo constituyen un juicio donde


se ventila una controversia independiente de la ejecución que las
motiva, por lo que, de acuerdo a lo que dispone el artículo 158 del
Código de Procedimiento Civil, la resolución que falla la demanda de
tercería, participa de la naturaleza jurídica de una sentencia definitiva,
toda vez que pone fin a la instancia, resolviendo la cuestión o asunto
que ha sido objeto del juicio. Refuerza lo anterior el hecho de establecer
el artículo 521 del Código de Procedimiento Civil, en lo pertinente, que
las tercerías de posesión, de prelación y de pago se tramitarán "como"
incidente, entendiéndose, que el procedimiento aplicable para la
sustanciación de una demanda de tercería es el incidental, sin que ello
afecte la naturaleza de la sentencia que, en definitiva, la resuelve. De lo
anteriormente dicho, se deduce que la resolución que falla una tercería
de posesión es una sentencia definitiva, y por tanto, apelable dentro del
plazo de 10 días contados desde su notificación, así lo dispone el
artículo 189 inciso segundo del Código antes citado. De esta forma, el
recurso de hecho debe ser acogido (considerandos 3º a 5º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 22/03/2019, Rol Nº 2661-2018,

Cita online: CL/JUR/1605/2019

6. Naturaleza jurídica de la resolución que niega lugar a petición de


reiterar oficios en la etapa de audiencia de juicio corresponde a un
auto

En la especie, de lo expuesto se desprende que la naturaleza jurídica


de la resolución que niega lugar a petición de la actora, en orden a
reiterar oficios en la etapa de audiencia de juicio, dentro de la
clasificación del artículo 158 del Código de Procedimiento Civil,
corresponde a un auto, toda vez que se pronuncia sobre un incidente,
sin establecer derechos permanentes en favor de las partes, y no
resuelve sobre un trámite que deba servir de base en el
pronunciamiento de una sentencia definitiva o interlocutoria. Así las
cosas, no cabe sino concluir que la resolución impugnada no es
susceptible del recurso de apelación, de conformidad a lo previsto en
los artículos 158 del Código de Procedimiento Civil y 67 Nº 2 de la
Ley Nº 19.968, toda vez que no se trata de una sentencia definitiva, ni
interlocutoria que ponga término al juicio ni haga imposible su
continuación ni se ha pronunciado sobre medidas cautelares
(considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Punta Arenas, 30/05/2019, Rol Nº 68-2019,

Cita online: CL/JUR/3133/2019

ARTÍCULO 159

Los tribunales, sólo dentro del plazo para dictar sentencia, podrán dictar de
oficio medidas para mejor resolver. Las que se dicten fuera de este plazo se
tendrán por no decretadas. Sin perjuicio de lo establecido en el inciso primero
del artículo 431, podrán dictar alguna o algunas de las siguientes medidas:54

1ª La agregación de cualquier documento que estimen necesario para


esclarecer el derecho de los litigantes;

2ª La confesión judicial de cualquiera de las partes sobre hechos que


consideren de influencia en la cuestión y que no resulten probados;

3ª La inspección personal del objeto de la cuestión;

4ª El informe de peritos;

5ª La comparecencia de testigos que hayan declarado en el juicio, para que


aclaren o expliquen sus dichos obscuros o contradictorios; y

6ª La presentación de cualesquiera otros autos que tengan relación con el


pleito. Esta medida se cumplirá de conformidad a lo establecido en el inciso 3º
del artículo 37.55

En este último caso y siempre que se hubiese remitido el expediente


original, éste quedará en poder del tribunal que decrete esta medida sólo por
el tiempo estrictamente necesario para su examen, no pudiendo exceder de
ocho días este término si se trata de autos pendientes.56

La resolución que se dicte deberá ser notificada por el estado diario a las
partes y se aplicará el artículo 433, salvo en lo estrictamente relacionado con
dichas medidas. Las medidas decretadas deberán cumplirse dentro del plazo
de veinte días, contados desde la fecha de la notificación de la resolución que
las decrete. Vencido este plazo, las medidas no cumplidas se tendrán por no
decretadas y el tribunal procederá a dictar sentencia, sin más trámite.

Si en la práctica de alguna de estas medidas aparece de manifiesto la


necesidad de esclarecer nuevos hechos indispensables para dictar
sentencia, podrá el tribunal abrir un término especial de prueba, no superior
a ocho días, que será improrrogable y limitado a los puntos que el mismo
tribunal designe. En este evento, se aplicará lo establecido en el inciso
segundo del artículo 90. Vencido el término de prueba, el tribunal dictará
sentencia sin más trámite.

Las providencias que se decreten en conformidad al presente


artículo serán inapelables, salvo las que dicte un tribunal de primera instancia
disponiendo informe de peritos o abriendo el término especial de prueba que
establece el inciso precedente. En estos casos procederá la apelación en el
solo efecto devolutivo.57

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 37, 50, 64, 69, 90, 109, 160, 187, 188,
192, 207, 227, 385, 394, 403, 412, 431, 433, 609, 714, 807, 820 y 922. Código Orgánico de
Tribunales: artículo 10. Auto acordado de la Corte Suprema, establece instrucciones respecto
de documentos y expedientes que las Cortes de Apelaciones ordenan traer a la vista y
diligencias para mejor resolver que decretan los tribunales D.O. 12.08.1963. Ley Nº 18.287
sobre Procedimiento ante Juzgados de Policía Local: artículo 16. Código Tributario:
artículos 132, 148.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Medidas para mejor resolver que no son cumplidas dentro del plazo
legal se entienden no decretadas

El artículo 159 del Código de Procedimiento Civil dispone que las


medidas decretadas deberán cumplirse en el plazo de veinte días
contados desde la fecha de la notificación que las decrete y que,
vencido ese plazo, si la medida no ha sido cumplida se tendrá por no
decretada. En la especie, a la fecha en que el perito hizo entrega del
informe caligráfico, ya había transcurrido el término legal previsto en el
referido artículo 159, sin que pueda entenderse que ese lapso admita
ser prorrogado en atención a lo estatuido en el artículo 411, en tanto no
constituye un nuevo plazo que suspenda el término consagrado en el
citado artículo 159. En consecuencia, la resolución por cuyo intermedio
el tribunal acogió el recurso de reposición de la demandada y dejó sin
efecto la medida decretada no adolece de error de derecho, debiendo
descartarse la configuración del vicio de casación en la forma del
artículo 768 Nº 9, la omisión de un trámite esencial (considerando 3º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 23/01/2017, Rol Nº 65287-2016,


Cita online: CL/JUR/225/2017

2. Improcedencia del recurso de apelación contra la resolución que dejó


sin efecto medida para mejor resolver, por el exceso de tiempo
transcurrido sin haberse realizado

De conformidad al artículo 159 del Código de Procedimiento Civil y,


habiéndose dejado sin efecto la medida para mejor resolver, dado el
exceso de tiempo transcurrido, tal como lo indica la norma y, no
encontrándose la resolución dictada en los supuestos de excepción que
autorizan la procedencia del recurso de apelación, es que la declaración
de inadmisibilidad del mismo que decretó la señora juez a quo, se ajusta
a la normativa legal aplicable, lo que lleva a desestimar el recurso de
hecho intentado por la demandante. A mayor abundamiento, con fecha
31.03.2020 se dictó sentencia definitiva, por lo que bajo ninguna
circunstancia se ha alterado la sustanciación regular del juicio
(considerando 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Talca, 5/05/2020, Rol Nº 510-2020,

Cita online: CL/JUR/26618/2020

3. Es inaplicable el plazo fatal del art. 159 del Código de Procedimiento


Civil en la búsqueda de la verdad real respecto de la paternidad

Si el legislador otorgó atribuciones al juez para decretar pruebas de


oficio en la búsqueda de la verdad real, sin limitaciones, como se
dispone el artículo 198 del Código Civil, ninguna lógica jurídica tendría
imponer a esas diligencias probatorias, decretadas como medida para
mejor resolver, el plazo fatal para su cumplimiento previsto en la norma
del artículo 159 del Código de Procedimiento Civil. La legislación dejaría
de ser coherente y lógica, si se admite que conocido el recargo de
trabajo del Instituto público especializado, el examen de ADN decretado
en esos términos, quede sin efecto sólo por la demora en su
cumplimiento (considerando 7º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 18/01/2012, Rol Nº 6314-2008,

Cita online: CL/JUR/135/2012

ARTÍCULO 160 (167)

Las sentencias se pronunciarán conforme al mérito del proceso, y no


podrán extenderse a puntos que no hayan sido expresamente sometidos a
juicio por las partes, salvo en cuanto las leyes manden o permitan a los
tribunales proceder de oficio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 84, 94, 103, 105, 119, 123, 125, 159,
170, 184, 209, 254, 256, 309, 318, 375, 412, 768, 776, 820, 842, 872 y 886. Constitución Política:
artículo 19 Nº 3. Código Penal: artículos 223 a 225. Código Procesal Penal: artículos 291, 341
y 360. Código Orgánico de Tribunales: artículos 10 y 13. Código Tributario: artículos 134, 148.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Principio de congruencia. Concepto

Procede consignar que entre los principios rectores del proceso


constituidos por ciertas ideas centrales referidas a la estructuración del
proceso y que deben tomarse en cuenta tanto por el juez al tramitar y
decidir las controversias sometidas a su conocimiento como por el
legislador al sancionar las leyes figura el de la congruencia, que
sustancialmente se refiere a la conformidad que ha de existir entre la
sentencia expedida por el órgano jurisdiccional y las pretensiones que
las partes han expuesto oportuna y formalmente en sus escritos
fundamentales agregados al proceso; se plasma en el brocardo ne eat
iudex ultra petita partium y guarda estrecha vinculación con otro
principio formativo del proceso: el dispositivo. "El principio dispositivo —
ha dicho Prieto Castro— impone la regla de que son las partes,
exclusivamente, quienes determinan el thema decidendum, pues el juez
debe limitar su pronunciamiento tan sólo a lo que ha sido pedido por
aquéllas. A las partes incumbe, en otras palabras, fijar el alcance y
contenido de la tutela jurídica, incurriendo en incongruencia el juez que,
al fallar, se aparta de las cuestiones incluidas en la pretensión del actor
y la oposición del demandado" (citado por Adolfo E. C. Borthwick.
Principios procesales. MAVE Editor. Corrientes. Argentina. Año 2003.
Página 42) (considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 1/12/2011, Rol Nº 336-2011,


Cita online: CL/JUR/8840/2011

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 24/06/2013, Rol Nº 5367-2012,

Cita online: CL/JUR/1377/2013

— Corte Suprema, 3/06/2013, Rol Nº 8477-2011,

Cita online: CL/JUR/1192/2013

— Corte Suprema, 6/07/2012, Rol Nº 12010-2011,


Cita online: CL/JUR/1280/2012

— Corte Suprema, 27/04/2011, Rol Nº 7020-2009,

Cita online: CL/JUR/9793/2011

2. Principio de congruencia busca vincular a las partes y al juez al


debate

En la especie, el juez a quo fundamenta su decisión apartándose del


ámbito de la controversia fijada por partes en la etapa de discusión,
incurriendo con ello en el vicio de casación en la forma del artículo 768
Nº 4 del Código de Procedimiento Civil, en su hipótesis de extra petita,
esto es, extendiéndola a puntos no sometidos a su decisión. Al respecto,
la jurisprudencia del Máximo Tribunal ha dicho que el artículo 768 Nº 4
estatuye la ultra petita como uno de los vicios formales que pueden
afectar a una sentencia y que puede traer aparejada la nulidad de ésta.
El citado defecto contempla dos formas de materialización: la primera
consiste en otorgar más de lo pedido, situación que constituye
propiamente ultra petita; mientras que la segunda se produce al
extenderse el fallo a puntos no sometidos a la decisión del tribunal,
hipótesis que se ha denominado extra petita. Lo anterior debe
necesariamente relacionarse con lo prescrito en el artículo 160 del
Código precitado, de acuerdo al cual las sentencias se pronunciarán
conforme al mérito del proceso y no podrán extenderse a puntos que no
hayan sido sometidos expresamente a juicio por las partes, salvo en
cuanto las leyes manden o permitan a los tribunales proceder de oficio.
Por consiguiente, el vicio formal en mención se verifica cuando la
sentencia excede las pretensiones de las partes expuestas en los
escritos de fondo —demanda, contestación, réplica y dúplica— por
medio de los cuales se fija la competencia del tribunal, o cuando se
emite pronunciamiento en relación a materias que no fueron sometidas
a su decisión, vulnerando de ese modo uno de los principios rectores
de la actividad procesal, cual es el de la congruencia. El referido
principio de la congruencia busca vincular a las partes y al juez al debate
y, por tanto, enlaza la pretensión, la oposición, la prueba, la sentencia y
los recursos, y al mismo tiempo cautela la conformidad que debe existir
entre todos los actos del procedimiento que componen el proceso. Cabe
señalar que si bien el órgano jurisdiccional no queda circunscrito a los
razonamientos jurídicos expresados por las partes, ello no aminora la
exigencia según la cual el derecho aplicable debe enlazarse a las
acciones y excepciones, como a las alegaciones y defensas que las
partes han sostenido en el pleito, evitando que se produzca un
desajuste entre el fallo judicial y los términos en que las partes
formularon sus pretensiones (considerando 5º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valdivia, 20/09/2016, Rol Nº 494-2016,

Cita online: CL/JUR/7433/2016

3. Tribunales de justicia deben ceñirse a los principios de pasividad y de


congruencia

La jurisprudencia de la Corte Suprema ha declarado que los tribunales


de justicia deben ceñirse al principio de pasividad que rige su actuar,
como al de congruencia determinado por los asuntos sometidos a su
decisión, principio que enlaza la pretensión, la oposición, la prueba, la
sentencia y los recursos, siendo la congruencia procesal en la sentencia
un imperativo para el magistrado al decidir la controversia. En íntima
conexión con lo anterior, resulta imprescindible traer a colación los
artículos 160 y 170 Nº 6º del Código de Procedimiento Civil. El precepto
preliminar de esta normativa — Considerada como expresión positiva
de uno de los principios formativos del proceso al que ya se ha hecho
alusión —el de la congruencia— estatuye que los fallos deben
extenderse de acuerdo al mérito del proceso, no pudiendo considerar
puntos o aspectos no sometidos expresamente a juicio por los
contradictores, salvo en cuanto las leyes autoricen o permitan proceder
de oficio. La segunda de las reglas antes señaladas, en armonía con la
recién transcrita, establece que el acápite resolutivo del veredicto debe
circunscribirse al asunto debatido, que abarca todas las acciones y
excepciones ventiladas en juicio (considerandos 6º y 7º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/01/2020, Rol Nº 3673-2019,


Cita online: CL/JUR/22941/2020

4. Concepto de ultra petita

La causal de nulidad en la forma postulada en el recurso, esto es, la


ultra petita, constituye un defecto que contempla dos formas de
materialización: la primera de las cuales consiste en otorgar más de lo
pedido, que es propiamente la ultra petita, mientras que la segunda, se
produce al extenderse el fallo a puntos no sometidos a la decisión del
tribunal, hipótesis que se ha denominado extra petita. Asimismo, según
ha determinado uniformemente esta Corte Suprema, el fallo incurre en
ultra petita cuando, apartándose de los términos en que las partes
situaron la controversia por medio de sus respectivas acciones o
excepciones, altera el contenido de éstas cambiando su objeto o
modificando su causa de pedir. La regla anterior debe necesariamente
relacionarse con lo prescrito en el artículo 160 del Código antes citado,
de acuerdo al cual las sentencias se pronunciarán conforme al mérito
del proceso y no podrán extenderse a puntos que no hayan sido
sometidos expresamente a juicio por las partes, salvo en cuanto las
leyes manden o permitan a los tribunales proceder de oficio. Por
consiguiente, el vicio formal en mención se verifica cuando la sentencia
otorga más de lo que las partes han solicitado en sus escritos de fondo
demanda, contestación, réplica y dúplica por medio de los cuales se fija
la competencia del tribunal o cuando se emite pronunciamiento en
relación a materias que no fueron sometidas a la decisión del mismo,
vulnerando, de ese modo, el principio de la congruencia, rector de la
actividad procesal. Que, asimismo, sobre el particular, la doctrina
comparada ve en la denominada ultra petita en el doble cariz antes
descrito, un vicio que conculca un principio rector de la actividad
procesal, cual es, el de la congruencia y que ese ataque se produce,
precisamente, con la "incongruencia" que pueda presentar una decisión
con respecto al asunto que ha sido planteado por los litigantes. El
principio de congruencia se basa en diversos fundamentos, ámbitos de
aplicación y objetivos. Primeramente, busca vincular a las partes y al
juez al debate y, por tanto, conspira en su contra la falta del necesario
encadenamiento de los actos que lo conforman, a los que pretende
dotar de eficacia. Por tanto, se trata de un principio que enlaza la
pretensión, la oposición, la prueba, la sentencia y los recursos, al mismo
tiempo que cautela la conformidad que debe existir entre todos los actos
del procedimiento que componen el proceso. Si bien, la doctrina enfatiza
los nexos que han de concurrir entre las pretensiones sostenidas por el
actor y la sentencia, la misma vinculación resulta de la misma alta
importancia tratándose de la oposición, la prueba y los recursos,
encontrando su mayor limitación en los hechos, pues aunque el órgano
jurisdiccional no queda circunscrito a los razonamientos jurídicos
expresados por las partes, ello no aminora la exigencia según la cual el
derecho aplicable debe enlazarse a las acciones y excepciones,
alegaciones y defensas que las partes han sostenido en el pleito. Que,
siempre discurriendo sobre la directriz de la congruencia, el Diccionario
de la Lengua Española define esa voz como: "Conformidad de
extensión, concepto y alcance entre el fallo y las pretensiones de las
partes formuladas en el juicio". En relación a ella, ya el derecho romano
la recogía y expresaba: "sententia debet esse conformis, libello; ne eat
judex, ultra, extra aut citra petita partium; tantum legatum quantum
judicatum; judex judicare debet secundum allegata et probatia parlium"
("la sentencia debe estar conforme con la reclamación escrita, para que
el juez no vaya más allá, fuera o más acá de las demandas de las partes;
tanto lo imputado como lo sentenciado; el juez debe juzgar de acuerdo
con las razones alegadas y probadas por las partes") (Hugo Botto
Oakley, La Congruencia Procesal, Editorial Libromar Ltda., pág. 151)
(considerandos 6º a 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 22/07/2010, Rol Nº 447-2010,


Cita online: CL/JUR/11898/2010

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 16/11/2016, Rol Nº 13796-2016,

Cita online: CL/JUR/7658/2016

— Corte Suprema, 12/07/2010, Rol Nº 7574-2008,

Cita online: CL/JUR/17085/2010

5. Sentencia incurre en vicio formal de ultra petita si se extiende a puntos


que no han sido sometidos expresamente a juicio por los litigantes

La jurisprudencia de la Corte Suprema ha resuelto reiteradamente


que, la sentencia incurre en este vicio formal —ultra petita— cuando se
aparta de los términos en que las partes situaron la controversia en sus
respectivas acciones y excepciones, ya sea alterando el contenido de
éstas, cambiando su objeto o modificando su causa de pedir. Este
defecto guarda relación con el artículo 160 del Código de Procedimiento
Civil, conforme al cual las sentencias se pronunciarán conforme al
mérito del proceso y no podrán extenderse a puntos que no hayan sido
sometidos expresamente a juicio por los litigantes, salvo en cuanto las
leyes manden o permitan a los tribunales proceder de oficio. Por ende,
esta irregularidad se verifica cuando la decisión otorga más de lo
solicitado en los escritos de fondo —demanda, contestación, réplica y
dúplica— que fijan la competencia del tribunal o cuando el
pronunciamiento se extiende a materias no sometidas a su
conocimiento, quebrantando el principio rector de la congruencia. El
referido principio procesal tiende a frenar cualquier eventual exceso de
la autoridad, y se conculca con la incongruencia, cuya faz objetiva se
presenta bajo las dos modalidades enunciadas precedentemente: ultra
petita, cuando se otorga más de lo pedido, y extra petita, cuando se
concede algo no impetrado, extendiéndose a pronunciamientos no
supeditados a la comprensión del tribunal (considerando 3º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/12/2019, Rol Nº 15295-2018,


Cita online: CL/JUR/12044/2019

6. Improcedencia del recurso de casación en el fondo respecto de la


infracción de normas ordenatorio litis

El artículo 160 del Código de Procedimiento Civil, sólo es una regla


general de procedimiento que los jueces deben tener presente al
expedir sus fallos y cuya inobservancia deben corregir los tribunales de
alzada. Su prescripción no es de las que sirven para decidir una
contienda judicial, ya que no consigna precepto alguno aplicable a las
cuestiones que son materia de una acción judicial. En consecuencia, el
quebrantamiento del artículo 160 del Código de Procedimiento Civil, por
ser meramente ordenatorio de la litis, no da base para deducir un
recurso de casación en el fondo (considerando 10º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/01/2018, Rol Nº 5029-2017,


Cita online: CL/JUR/182/2018

ARTÍCULO 161 (168)

En los tribunales unipersonales el juez examinará por sí mismo los autos


para dictar resolución.
Los tribunales colegiados tomarán conocimiento del proceso por medio del
relator o del secretario, sin perjuicio del examen que los miembros del tribunal
crean necesario hacer por sí mismos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 30, 33, 318, 365 y 388. Código
Procesal Penal: artículo 358. Código Orgánico de Tribunales: artículos 68, 82, 372, 374, 381 y
383.

ARTÍCULO 162 (169)

Las causas se fallarán en los tribunales unipersonales tan pronto como


estén en estado y por el orden de su conclusión. El mismo orden se observará
para designar las causas en los tribunales colegiados para su vista y decisión.

Exceptúanse las cuestiones sobre deserción de recursos, depósito de


personas, alimentos provisionales, competencia, acumulaciones,
recusaciones, desahucio, juicios sumarios y ejecutivos, denegación de
justicia o de prueba y demás negocios que por la ley, o por acuerdo del
tribunal fundado en circunstancias calificadas, deban tener preferencia, las
cuales se antepondrán a los otros asuntos desde que estén en estado.

La sentencia definitiva en el juicio ordinario deberá pronunciarse dentro del


término de sesenta días, contados desde que la causa quede en estado de
sentencia.

Si el juez no dicta sentencia dentro de este plazo, será amonestado por la


Corte de Apelaciones respectiva, y si a pesar de esta amonestación no expide
el fallo dentro del nuevo plazo que ella le designe, incurrirá en la pena de
suspensión de su empleo por el término de treinta días, que será decretado
por la misma Corte.

El tribunal dejará constancia en el estado diario electrónico a que se refiere


el artículo 50 y en la carpeta electrónica, del hecho de haberse dictado
sentencia definitiva, la que será notificada en la forma correspondiente.58

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 91, 163, 164, 470, 561, 610, 688, 805
y 806. Código Procesal Penal: artículos 38, 357, 358 y 384. Código Orgánico de Tribunales:
artículos 69, 82, 90 Nº 3, 10, 105 Nº 6, 308, 319 y 372. Código Tributario: artículos 132, 163 i),
165 Nº 5. Código de Minería: artículo 235 Nº 6. Código de Justicia Militar: artículo 39. Ley
Nº 10.336, sobre Organización y Atribuciones de la Contraloría General de la República:
artículo 113. Ley Nº 16.618, Ley Nº 17.997, Orgánica Constitucional del Tribunal Constitucional:
artículo 29. Ley Nº 18.287, sobre Procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículos 6º y
17. Ley Nº 18.410, crea la Superintendencia de Electricidad y Combustibles: artículo 19. Ley
Nº 18.556, Orgánica Constitucional de Sistema Inscripciones Electorales y Servicio Electoral de
Sistema Inscripciones Electorales y Servicio Electoral: artículo 52. Ley Nº 18.593, Ley de los
Tribunales Electorales Regionales: artículos 24 y 25. Ley Nº 18.695, Orgánica de
Municipalidades: artículo 82 g). Ley Nº 18.833, nuevo Estatuto para Cajas de Compensación de
Asignación Familiar: artículo 70. Ley Nº 18.840, Orgánica del Banco Central de Chile:
artículo 71. Ley Nº 18.933, crea la Superintendencia de Instituciones de Salud Previsional:
artículo 7º. Decreto Ley Nº 3.538, 1980, crea Superintendencia de Valores y Seguros, D.O.
23.12.1980: artículos 36 y 46. Auto Acordado de la Corte Suprema 24.06.1992 Nº 10, Código
del Trabajo: artículos 481, 482 y 484. Ley Nº 19.928, sobre Tribunales de Familia: artículo 65.

ARTÍCULO 163 (170)

En los tribunales colegiados se formará el día último hábil de cada semana


una tabla de los asuntos que verá el tribunal en la semana siguiente, con
expresión del nombre de las partes, en la forma en que aparezca en la
carátula del respectivo expediente, del día en que cada uno deba tratarse y
del número de orden que le corresponda.

Esta tabla se fijará en lugar visible, y antes de que comience a tratar cada
negocio, lo anunciará el tribunal, haciendo colocar al efecto en lugar
conveniente el respectivo número de orden, el cual se mantendrá fijo hasta
que se pase a otro asunto.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 164, 165, 223, 766 y 800. Código
Procesal Penal: artículo 357. Código Orgánico de Tribunales: artículos 69, 90, 105 y 373.
Código de Aguas: artículo 247. Ley Nº 12.927, Ley de Seguridad del Estado: artículo 27. Ley
Nº 18.593, Ley de los Tribunales Electorales Regionales: artículo 22.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Omisión de apellido paterno de la encausada, produce nulidad de la


sentencia

Considerando y teniendo únicamente presente que del certificado de


fojas 84 aparece que en el anuncio de la causa aparecida en el 4º lugar
de la Tabla Ordinaria del día 8 de agosto de 2000 de la Corte de
Apelaciones de San Miguel, seguida en contra de la encartada (...) se
omitió el apellido paterno (...) de la procesada, incurriéndose con ello en
infracción constitutiva de la causal 5ª de casación en la forma, del
artículo 541 del Código de Procedimiento Penal en relación con el
inciso 1º del artículo 163 del Código de Procedimiento Civil aplicable en
la especie en virtud de lo dispuesto en el artículo 43 del de
Procedimiento Penal, y teniendo presente además lo dispuesto por los
artículos 535 y 544 de este último Código se declara que se hace lugar
al recurso de casación en la forma deducido a fojas 85 de estos autos
por la defensa de (...) y se declara que la sentencia de 8 de agosto de
2000 escrita a fojas 79 dictada por la Corte de Apelaciones de San
Miguel es nula (considerando único de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 23/01/2001, Rol Nº 3600-2000, Cita online:


CL/JUR/1425/2001

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 24/03/1997, Rol Nº 4749-1996,

Cita online: CL/JUR/2413/1997

Fallos en sentido contrario:

— Corte Suprema, 16/03/1999, Rol Nº 430-1999,

Cita online: CL/JUR/1213/1999

— Corte Suprema, 12/11/1996, Rol Nº 3333-1996,

Cita online: CL/JUR/1403/1996

2. El que la causa sólo se agregó a la tabla, anteponiéndola a las de la


tabla ordinaria, no constituye incumplimiento del trámite de fijación de
la causa en tabla

La casación de forma se fundamenta en que se habría faltado a algún


trámite o diligencia esencial según la ritualidad impuesta por la ley, cual
sería la fijación de la causa en tabla en la forma establecida en el
artículo 163 del Código de Procedimiento Civil. Esto no se habría
cumplido, según el recurrente, porque la causa sólo se agregó a la tabla,
anteponiéndola a las de la tabla ordinaria. Que la situación descrita no
constituye incumplimiento del trámite de fijación de la causa en tabla,
porque el procedimiento seguido es el pertinente a las causas llamadas
radicadas, a las que se otorga preferencia para su figuración en tabla y
su vista y fallo, conforme al artículo 192 del Código citado; por lo que al
no configurarse la causal legal de casación, el recurso que la pretende
no puede prosperar. Que el motivo invocado para solicitar el actuar de
oficio de esta Corte, en la sede de casación, no es suficiente para ello,
porque la circunstancia del pago y los elementos que la prueben
corresponde que se esgriman en la etapa de ejecución del fallo
(considerando único de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/06/1990, Rol Nº 14619, Cita online:


CL/JUR/437/1990

ARTÍCULO 164 (171)

Las causas se verán en el día señalado. Si concluida la hora de audiencia,


queda pendiente alguna y no se acuerda prorrogar el acto, se continuará en
los días hábiles inmediatos hasta su terminación, sin necesidad de ponerla
nuevamente en tabla.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 59, 60, 163, 165, 166, 223 a 226 y
783.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Configuración de nulidad del artículo 69 del Código de Procedimiento


Penal

Suspensión de la vista de la causa Por su parte, el artículo 164 del


Código de Procedimiento Civil dispone, con el que concuerda el
artículo 556 del de Procedimiento Penal, que las causas se verán en el
día señalado, estableciendo el siguiente artículo 165 que "Sólo podrán
suspenderse en el día designado al efecto la vista de una causa, o
retardarse dentro del mismo día: 6º Por tener alguno de los abogados
otra vista o comparecencia a que asistir en el mismo día ante otro
tribunal", agregando en el inciso segundo del citado número que: "El
presidente respectivo podrá conceder la suspensión por una sola vez o
simplemente retardar la vista, atendidas las circunstancias
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 3/06/2004, Rol Nº 1358-2004, Cita online:


CL/JUR/650/2004

ARTÍCULO 165
Sólo podrá suspenderse en el día designado al efecto la vista de una causa,
o retardarse dentro del mismo día:

1º Por impedirlo el examen de las causas colocadas en lugar preferente, o


la continuación de la vista de otro pleito pendiente del día anterior;

2º Por falta de miembros del tribunal en número suficiente para pronunciar


sentencia;

3º Por muerte del abogado patrocinante, del procurador o del litigante que
gestione por sí en el pleito.

En estos casos, la vista de la causa se suspenderá por quince días


contados desde la notificación al patrocinado o mandante de la muerte del
abogado o del procurador, o desde la muerte del litigante que obraba por sí
mismo, en su caso;59

4º Por muerte del cónyuge o conviviente civil o de alguno de los


descendientes o ascendientes del abogado defensor, ocurrida dentro de los
ocho días anteriores al designado para la vista;60

5º Por solicitarlo alguna de las partes o pedirlo de común acuerdo los


procuradores o los abogados de ellas.

Cada parte podrá hacer uso de este derecho por una sola vez. En todo
caso, sólo podrá ejercitarse este derecho hasta por dos veces, cualquiera que
sea el número de partes litigantes, obren o no por una sola cuerda. La
suspensión de común acuerdo procederá por una sola vez.

La sola presentación del escrito extingue el derecho a la suspensión aun si


la causa no se ve por cualquier otro motivo. Este escrito pagará en la Corte
Suprema un impuesto especial de media unidad tributaria mensual y en las
Cortes de Apelaciones, de un cuarto de unidad tributaria mensual. Este pago
se hará electrónicamente a través de un sistema informático dispuesto al
efecto y se asociará a la causa respectiva mediante el comprobante de pago
o código de validación o, en caso que lo anterior no fuere posible por cualquier
motivo, a través de estampillas de impuesto fiscal que se pegarán en el
escrito respectivo que se presentará materialmente.61

Para los efectos del artículo 198 del Código Orgánico de Tribunales, el
pago de impuestos para la recusación de abogados integrantes se hará de la
misma forma dispuesta en el párrafo anterior.62

El derecho a suspender no procederá respecto del amparo;


6º Por tener alguno de los abogados otra vista o comparecencia a que
asistir en el mismo día ante otro tribunal.

El presidente respectivo podrá conceder la suspensión por una sola vez o


simplemente retardar la vista, atendidas las circunstancias. En caso que un
abogado tenga dos o más vistas en el mismo día y ante el mismo tribunal, en
salas distintas, preferirá el amparo, luego la protección y en seguida la causa
que se anuncie primero, retardándose o suspendiéndose las demás, según
las circunstancias; y

7º Por ordenarlo así el tribunal, por resolución fundada, al disponer la


práctica de algún trámite que sea estrictamente indispensable cumplir en
forma previa a la vista de la causa. La orden de traer algún expediente o
documento a la vista, no suspenderá la vista de la causa y la resolución se
cumplirá terminada ésta.

Las causas que salgan de tabla por cualquier motivo volverán a ella al lugar
que tenían.

Los errores, cambios de letras o alteraciones no substanciales de los


nombres o apellidos de las partes no impiden la vista de la causa.

Los relatores, en cada tabla, deberán dejar constancia de las suspensiones


ejercidas de conformidad a la causal del Nº 5 y de la circunstancia de haberse
agotado o no el ejercicio de tal derecho.63

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 5º, 163, 164 y 166. Código Procesal
Penal: artículos 356 y 357. Código Orgánico de Tribunales: artículos 9º, 68, 69, 90 Nº 3, 105
Nºs. 1 y 2, 198, 372, 373 y 549 c). Código de Aguas: artículo 247. Auto acordado de la Corte
Suprema 2.9.1994: Nº 1. Auto acordado de la Corte Suprema sobre recurso de protección,
24.06.1992: Nº 9. Auto acordado de la Corte Suprema 12.08.1963.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Suspensión de la vista de los asuntos penales. Requisitos suspensión


a petición del recurrente

El inciso primero del artículo 357 del Código Procesal Penal señala
efectivamente una regla general, excluyendo la suspensión de la vista
de los asuntos penales por dos causales que derivan de la gestión
propia del tribunal y otras dos que son de parte. Al efecto, en el inciso 2º
se regula la forma en que la Corte confeccionará las tablas para evitar
los conflictos que suponía el artículo 165 Nº 1 del Código de
Procedimiento Civil. Luego, en los incisos 3º y 4º regula la suspensión
por hechos diferentes, distinguiendo si hay o no privados de libertad en
la causa. En el primer caso rige el inciso tercero, con circunstancias muy
restringidas. En caso contrario, es decir, si no hay privados de libertad,
sólo se permite la suspensión a petición del recurrente o de todos los
intervinientes, actuando de común acuerdo, situaciones diversas a las
contempladas en los números 5 y 6 del artículo 165 del Código de
Procedimiento Civil. Entonces, de los casos no exceptuados por el
inciso 1º del artículo 357 del Código Procesal Penal, el del artículo 165
Nº 2 del Código de Procedimiento Civil está expresamente prohibido en
el artículo 356 del Código Procesal Penal; y, los casos contenidos en
los números 3 y 4 del artículo 165 antes citado, corresponden a los
reglados en el inciso tercero del artículo 357 ya mencionado
(considerando tercero sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 13/01/2014, Rol Nº 13969-2013,


Cita online: CL/JUR/70/2014

ARTÍCULO 166 (173)

Cuando haya de integrarse una sala con miembros que no pertenezcan a


su personal ordinario, antes de comenzar la vista, se pondrá por conducto del
relator o secretario en conocimiento de las partes o de sus abogados el
nombre de los integrantes, y se procederá a ver la causa inmediatamente, a
menos que en el acto se reclame, de palabra o por escrito, implicancia o
recusación contra alguno de ellos.

Formulada la reclamación, se suspenderá la vista y deberá formalizarse


aquélla por escrito dentro de tercero día, imponiéndose en caso contrario a la
parte reclamante, por este solo hecho, una multa que no baje de medio sueldo
vital ni exceda de dos sueldos vitales.64

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 124, 164, 252, 768 y 773. Código
Orgánico de Tribunales: artículos 198 y 372 Nº 2.

ARTÍCULO 167 (174)

Cuando la existencia de un delito haya de ser fundamento preciso de una


sentencia civil o tenga en ella influencia notoria, podrán los tribunales
suspender el pronunciamiento de ésta hasta la terminación del proceso
criminal, si en éste se ha deducido acusación o formulado requerimiento,
según el caso.65

Esta suspensión podrá decretarse en cualquier estado del juicio, una vez
que se haga constar la circunstancia mencionada en el inciso precedente.

Si en el caso de los dos incisos anteriores se forma incidente, se tramitará


en pieza separada sin paralizar la marcha del juicio.

Con todo, si en el mismo juicio se ventilan otras cuestiones que puedan


tramitarse y resolverse sin aguardar el fallo del proceso criminal, continuará
respecto de ellas el procedimiento sin interrupción.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 87, 89, 90, 91, 100, 178 a 180 y 768.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Suspensión del procedimiento civil cuando la existencia de un delito


haya de ser el fundamento preciso de la sentencia o tenga influencia
notoria

El artículo 167 del Código de Procedimiento Civil señala en sus


incisos 1º y 2º, "Cuando la existencia de un delito haya de ser
fundamento preciso de una sentencia civil o tenga en ella influencia
notoria, podrán los tribunales suspender el pronunciamiento de ésta
hasta la terminación del proceso criminal, si en éste se ha deducido
acusación o formulado requerimiento, según el caso. Esta suspensión
podrá decretarse en cualquier estado del juicio, una vez que se haga
constar la circunstancia mencionada en el inciso precedente". En la
especie, se pudo establecer que no existe formalización, acusación ni
requerimiento, por lo que cabe concluir que mal podría suspenderse el
presente procedimiento, teniendo en cuenta que la hipótesis normativa
no concurre (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 13/01/2017, Rol Nº 1870-2016,

Cita online: CL/JUR/1260/2017

2. Ámbito de lo decidido en sede penal difiere de lo resuelto en esta


sede civil
Respecto a las infracciones de los artículos 160, 178 en relación al
artículo 167 del Código de Procedimiento Civil, para que éstas se
configuren supone ya sea que una sentencia definitiva no sea dictada
conforme al mérito del proceso; que la existencia de un delito haya de
ser fundamento preciso de una sentencia civil o tenga en ella influencia
notoria; y que en el juicio civil puedan hacerse valer las sentencias
dictadas en un proceso criminal siempre que condenen al procesado.
En el caso sub lite no se configuran las infracciones precitadas, ya que,
en primer lugar, existe perfecta armonía entre los hechos establecidos
en la instancia y lo resuelto por los jueces de fondo. La mera
circunstancia que en el proceso penal se haya establecido la existencia
de un delito de usura no significa de modo alguno que se configure una
contradicción con lo resuelto en estos autos al rechazarse la demanda
principal y la demanda reconvencional deducidas, salvo esta última en
cuanto se declara pagado el préstamo de dinero establecido en una
sentencia dictada por un juzgado civil con anterioridad, toda vez que el
ámbito de lo decidido en el campo penal es distinto a lo resuelto en esta
sede civil, debiendo tenerse presente que, tal como lo ha señalado esta
Corte Suprema, el objeto de la norma del artículo 167 del Código de
Procedimiento Civil no es otro que el juez civil pueda contar, como
elemento para la decisión de su fallo, con una declaración firme sobre
la existencia del delito y no sobre la inexistencia del mismo. Sin
embargo, ello de modo alguno implica que el juez civil no deba ponderar
el cúmulo de todas las pruebas allegadas para resolver las acciones
incoadas en base al mérito del proceso civil (considerandos 6º y 7º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 20/02/2017, Rol Nº 55404-2016,


Cita online: CL/JUR/584/2017

3. Acción civil indemnizatoria puede interponerse antes del término del


juicio penal

En la especie, no se advierte que los jueces hayan incurrido en los


errores de derecho que se les atribuye, en tanto el lapso previsto en el
artículo 2332 debe ser computado desde la perpetración del acto, lo que
en el presente caso acaeció, de acuerdo a los hechos establecidos en
el fallo impugnado, durante los últimos meses del año 1999, por lo que
a la fecha en que fue noticiado el libelo a la demandada, en julio de
2013, había transcurrido con creces el plazo extintivo, circunstancia que
conduce a desestimar el reproche denunciado; teniendo en
consideración, además, que a diferencia de lo sostenido por el
recurrente, no era necesario esperar la terminación del juicio penal
deducido en su contra para entablar la acción indemnizatoria, puesto
que bien pudo ejercerla dentro del cuadrienio contemplado en el
artículo 2332 e instar luego por la suspensión del procedimiento civil
hasta la finalización del criminal, de acuerdo a lo expresamente
estatuido en el artículo 167 del Código de Procedimiento Civil
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/04/2018, Rol Nº 1251-2018,


Cita online: CL/JUR/1538/2018

ARTÍCULO 168 (176)

En los tribunales colegiados los decretos podrán dictarse por uno solo de
sus miembros. Los autos, las sentencias interlocutorias y las definitivas,
exigirán la concurrencia de tres de sus miembros a lo menos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 768. Código Orgánico de Tribunales:


artículos 70, 84, 86, 87, 89, 91 y 105.

ARTÍCULO 169

Toda resolución, de cualquiera clase que sea, deberá expresar en letras la


fecha y lugar en que se expida, y llevará al pie la firma electrónica avanzada
del juez o jueces que la dicten o intervengan en el acuerdo.66

Cuando después de acordada una resolución y siendo varios los jueces se


imposibilite alguno de ellos para firmarla, bastará que se exprese esta
circunstancia en el mismo fallo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 51, 61 y 170. Código Procesal Penal:
artículo 37. Código Orgánico de Tribunales: artículos 85, 89, 335, 336, 384 Nº 1. Auto Acordado
de la Corte Suprema sobre forma de las sentencias 30.09.1920. Auto Acordado de la Corte
Suprema 27.08.1982.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Formalidades de las sentencias


Que en vinculación con lo expresado con antelación, debe anotarse
que el legislador se ha preocupado de estatuir las formalidades a que
deben sujetarse las sentencias definitivas de primera o única instancia
y las de segunda que modifiquen o revoquen en su parte dispositiva las
de otros tribunales —categoría esta última a la que pertenece aquella
objeto de la impugnación en análisis— las que, además de satisfacer
los requisitos exigibles a toda resolución judicial, conforme a lo prescrito
en los artículos 61 y 169 del Código de Procedimiento Civil (esto es: la
expresión en letras de la fecha y el lugar en que se expiden; la firma del
juez o jueces que la pronuncien o intervengan en el acuerdo y la
autorización del secretario), deben contener las enunciaciones
contempladas en el artículo 170 del mismo cuerpo normativo, entre las
que figuran "en lo que atañe al presente recurso en su numeral 4, las
consideraciones de hecho o de derecho que sirven de fundamento a la
sentencia (considerando 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/07/2011, Rol Nº 3929-2010,

Cita online: CL/JUR/10339/2011

2. Concepto de fundamento del fallo

El Código de Procedimiento Civil, en los artículos 169, 170 y 171


reguló la forma de las sentencias y el artículo 5º transitorio de la Ley
Nº 3.390, de 15 de julio de 1918, dispuso: "La Corte Suprema
establecerá, por medio de un auto acordado, la forma en que deben ser
redactadas las sentencias definitivas para dar cumplimiento a lo
dispuesto en los artículos 170 y 785 del Código de Procedimiento Civil",
ante lo cual este Tribunal procedió a dictar el Auto Acordado, de fecha
30 de septiembre de 1920, expresando que las sentencias definitivas
de primera o única instancia y las que revoquen o modifiquen las de
otros tribunales, contendrán: "5º Las consideraciones de hecho que
sirvan de fundamento al fallo. Se establecerán con precisión los hechos
sobre los que versa la cuestión que deba fallarse, con distinción de los
que hayan sido aceptados o reconocidos por las partes y de aquellos
respecto de los cuales haya versado la discusión; 6º En seguida, si no
hubiere discusión acerca de la procedencia legal de la prueba, los
hechos que se encuentren justificados con arreglo a la ley y los
fundamentos que sirvan para estimarlos comprobados, haciéndose, en
caso necesario, la apreciación correspondiente de la prueba de autos
conforme a las reglas legales; 7º Si se suscitare cuestión acerca de la
procedencia de la prueba producida, la exposición de los fundamentos
que deben servir para aceptarla o rechazarla, sin perjuicio del
establecimiento de los hechos en la forma expuesta en los párrafos
precedentes para los fines consiguientes; 8º Establecidos los hechos,
las consideraciones de derecho aplicables al caso; 9º La enunciación
de las leyes o en su defecto de los principios de equidad con arreglo a
los cuales se pronuncia el fallo; 10º Tanto respecto de las
consideraciones de hecho como las de derecho, el tribunal observará al
consignarlas el orden lógico que el encadenamiento de las
proposiciones requiera, y, al efecto, se observará, en cuanto pueda ser
aplicable a tribunales unipersonales, lo dispuesto en el artículo 186 del
Código de Procedimiento Civil, actual 83 del Código Orgánico de
Tribunales" (considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 24/03/2010, Rol Nº 5698-2008,


Cita online: CL/JUR/5474/2010

3. Constituye requisito básico y esencial de las sentencias definitivas


que sea firmada por el juez que la dictó

Del artículo 169 del Código de Procedimiento Civil surgen los


requisitos básicos y esenciales de toda resolución judicial, entre las
cuales se encuentran incluidas las sentencias definitivas, esto es las
resoluciones judiciales llamadas a resolver la contienda planteada ante
el Tribunal, entre las que destacan en lo que aquí interesa, que la misma
sea firmada por el juez que la dictó. las facultades taxativas —del Juez
Presidente de Juzgados de Familia— tienen estricta relación con el
ámbito administrativo del tribunal, excluyendo cualquier facultad
jurisdiccional en calidad de Juez Presidente, resultando en
consecuencia evidente que éste se ha excedido en las mismas al
suscribir digitalmente un proyecto de sentencia de otro juez del mismo
tribunal, sin que su actuar pueda subsanar el hecho que el proyecto no
fuera firmado por la magistrada que estuvo presente y dirigió la
audiencia de juicio, requisito este último además esencial conforme el
principio de inmediación que rige e impera en los procedimientos
sustanciados conforme la Ley Nº 19.968. Por todo lo razonado, no
puede sino concluirse que en la especie falta un requisito esencial de la
sentencia, sin el cual ésta es nula, esto es que sea firmado por el juez
que dirigiera la audiencia de juicio y redactara el proyecto de sentencia,
incurriéndose en consecuencia, en el caso que nos convoca, en la
causal de casación del numeral 1º del artículo 768 del Código de
Procedimiento Civil, esto es haber sido la sentencia pronunciada por un
tribunal integrado en contravención a lo dispuesto por la ley
(considerandos 5º, 7º y 8º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 28/11/2019, Rol Nº 1083-2019,

Cita online: CL/JUR/12062/2019

ARTÍCULO 170 (193)

Las sentencias definitivas de primera o de única instancia y las de segunda


que modifiquen o revoquen en su parte dispositiva las de otros tribunales,
contendrán:

1º La designación precisa de las partes litigantes, su domicilio y profesión


u oficio;

2º La enunciación breve de las peticiones o acciones deducidas por el


demandante y de sus fundamentos;

3º Igual enunciación de las excepciones o defensas alegadas por el


demandado;67

4º Las consideraciones de hecho o de derecho que sirven de fundamento


a la sentencia;

5º La enunciación de las leyes, y en su defecto de los principios de equidad,


con arreglo a los cuales se pronuncia el fallo; y

6º La decisión del asunto controvertido. Esta decisión deberá comprender


todas las acciones y excepciones que se hayan hecho valer en el juicio; pero
podrá omitirse la resolución de aquellas que sean incompatibles con las
aceptadas.

En igual forma deberán dictarse las sentencias definitivas de segunda


instancia que confirmen sin modificación las de primera cuando éstas no
reúnen todos o algunos de los requisitos indicados en la enunciación
precedente.
Si la sentencia de primera instancia reúne estos requisitos, la de segunda
que modifique o revoque no necesita consignar la exposición de las
circunstancias mencionadas en los números 1º, 2º, 3º del presente artículo y
bastará referirse a ella.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 144, 159, 160, 169, 171, 208, 209,
254, 310, 312, 379, 640, 690, 692, 768 y 826. Código Civil: artículos 61 y 203. Código Penal:
artículo 70. Código Procesal Penal: artículos 36, 37, 45, 49, 342 a 349. Código Orgánico de
Tribunales: artículos 83 y 384. Código Aeronáutico: artículo 20. Código Sanitario: artículo 167.
Código de Minería: artículos 81, 84 y 87. Ley Nº 16.665, sobre reconstitución de inscripciones
en Registro de Conservadores de Bienes Raíces: artículo 10. Ley Nº 18.287, sobre
Procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículo 17. Ley Nº 10.336, sobre Organización
y Atribuciones de la Contraloría General de la República: artículo 114. Ley Nº 17.997, Orgánica
Constitucional del Tribunal Constitucional: artículo 31. Auto Acordado de la Excma. Corte
Suprema sobre forma de las sentencias 30.09.1920, Código del Trabajo: artículos 458, 459 y
495. Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de Familia: artículos 65, 66, 75, 101. Ley Nº 19.947, sobre
Matrimonio Civil: artículo 91. Código Tributario: artículos 132, 136, 144, 148.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Fundamentos constitucionales de la debida fundamentación de las


sentencias

La importancia de la parte considerativa de la sentencia, en cuanto


allí se asientan las bases que sirven de sustento previo y necesario de
la decisión mediante la cual ella dirime el litigio, resulta de tal
envergadura que algunas Constituciones —como la española, la italiana
y la peruana— consignan de manera expresa la obligación de los jueces
de fundamentar sus fallos. Semejante deber aparece también
contemplado de manera implícita dentro de nuestro ordenamiento
constitucional, según se desprende de lo dispuesto en el artículo 8º de
la Carta Política, donde se consagra el principio de publicidad de los
actos y resoluciones emanados de los órganos del Estado así como de
sus "fundamentos"; en el artículo 76 del mismo cuerpo normativo que
se refiere a la prohibición de los otros Poderes del Estado en orden a
revisar los "fundamentos" de las resoluciones de los tribunales de
justicia establecidos por la ley; a lo que debe sumarse, especialmente,
el arbitrio garantístico previsto en el artículo 19 Nº 3, inciso 5º de la
Carta, de acuerdo con el cual, toda sentencia de un órgano que ejerza
jurisdicción debe "fundarse" en un proceso previo y legalmente
tramitado, agregando que corresponde al legislador establecer las
garantías de un procedimiento y una investigación racionales y justas.
A satisfacer este imperativo, vinculado al debido proceso legal, tiende
el antes citado artículo 170 del Código de Procedimiento Civil en cuanto
ordena a los jueces expresar determinadamente las razones de índole
fáctica y jurídica en que se apoyen sus sentencias; resultando,
entonces, patente la raigambre constitucional de la mencionada
exigencia (considerando noveno sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 2/09/2013, Rol Nº 9197-2011,


Cita online: CL/JUR/3120/2013

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 30/12/2013, Rol Nº 9953-2011,

Cita online: CL/JUR/3017/2013

2. Principio de congruencia

La doctrina comparada ve en la denominada ultra petita —más allá de


lo pedido— un vicio que ataca un principio rector de la actividad
procesal, cual es el principio de la congruencia y ese ataque se produce,
precisamente, con la "incongruencia". La incongruencia, en su acepción
más simple y general, puede ser considerada como la falta de
adecuación entre las pretensiones de las partes formuladas
oportunamente y la parte dispositiva de la resolución judicial. A su vez,
en relación a las facultades de los jueces para analizar si las partes
tienen legitimación para obrar, la Corte Suprema ha sostenido
reiteradamente que ello no es algo ajeno a sus atribuciones; por el
contrario, la legitimación activa y pasiva, en tanto constituye uno de los
presupuestos de la acción, es una cuestión que todo juez está obligado
a revisar aun con independencia de la actividad de las partes y, en
consecuencia, puede ser analizada de oficio. De este modo cabe
concluir que no se advierte pronunciamiento alguno respecto de un
supuesto fáctico o jurídico que haya podido exceder el marco legal que
correspondía a los sentenciadores examinar conforme a la propia
acción objeto de la litis (considerando 2º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 29/01/2018, Rol Nº 30373-2017,


Cita online: CL/JUR/449/2018

3. Formalidades de las sentencias definitivas de primera o única


instancia y las de segunda que modifiquen o revoquen en su parte
dispositiva las de otros tribunales
El legislador se ha preocupado de establecer las formalidades a que
deben sujetarse las sentencias definitivas de primera o única instancia
y las de segunda que modifiquen o revoquen en su parte dispositiva las
de otros tribunales, las que, además de satisfacer los requisitos
exigibles a toda resolución judicial conforme a lo prescrito en los
artículos 61 y 169 del Código de Procedimiento Civil, deben contener
las enunciaciones contempladas en el artículo 170 del mismo cuerpo
normativo, entre las que figuran —en su numeral 4— las
consideraciones de hecho o de derecho que sirven de fundamento a la
sentencia. Esta Corte, dando cumplimiento a lo dispuesto por la
Ley Nº 3.390 de 1918, en su artículo 5º transitorio, dictó con fecha 30
de septiembre de 1920 un Auto Acordado en que regula pormenorizada
y minuciosamente los requisitos formales que, para las sentencias
definitivas a que se ha hecho mención, dispone el precitado artículo 170
del Código de Procedimiento Civil. Refiriéndose al enunciado exigido en
el Nº 4 de este precepto, el Auto Acordado establece que las sentencias
de que se trata deben expresar las consideraciones de hecho que les
sirven de fundamento, estableciendo con precisión aquéllos sobre que
versa la cuestión que haya de fallarse, con distinción entre los que han
sido aceptados o reconocidos por las partes y los que han sido objeto
de discusión. Agrega que si no hubiera discusión acerca de la
procedencia legal de la prueba, deben esas sentencias determinar los
hechos que se encuentran justificados con arreglo a la ley y los
fundamentos que sirven para estimarlos como comprobados,
haciéndose, en caso necesario, la apreciación correspondiente de la
prueba de autos conforme a las reglas legales. Si se suscitare cuestión
acerca de la procedencia de la prueba rendida —prosigue el Auto
Acordado— deben las sentencias contener los fundamentos que han de
servir para aceptarla o rechazarla, sin perjuicio del establecimiento de
los hechos en la forma expuesta anteriormente. Prescribe enseguida
que establecidos los hechos, se enunciarán las consideraciones de
derecho aplicables al caso y, luego, las leyes o en su defecto los
principios de equidad con arreglo a los cuales se pronuncia el fallo;
agregando que tanto respecto de las consideraciones de hecho como
las de derecho debe el tribunal observar, al consignarlos, el orden lógico
que el encadenamiento de las proposiciones requiera
(considerandos 4º y 5º de la anulación de oficio).

Corte Suprema, 19/04/2018, Rol Nº 34341-2017,


Cita online: CL/JUR/2094/2018
4. Causal de casación en la forma de ultra petita

El Máximo Tribunal ha establecido que el vicio de ultra petita concurre


cuando la sentencia se aparta de los términos en que las partes situaron
la controversia por medio de sus respectivas acciones o excepciones,
vulnerando el principio de la congruencia que constriñe la decisión del
órgano jurisdiccional. Dicho vicio formal se verifica cuando la sentencia
otorga más de lo que las partes han solicitado en sus escritos de fondo
—demanda, contestación, réplica y dúplica— por medio de los cuales
se fija la competencia del tribunal o cuando se emite pronunciamiento
en relación a materias que no fueron sometidas a la decisión del mismo,
vulnerando de ese modo el principio de la congruencia, rector de la
actividad procesal. Así la doctrina comparada ve, en el vicio de que se
trata, un ataque a un principio rector de la actividad procesal, cual es el
principio de la congruencia, lo cual se produce precisamente por la
incongruencia entre lo pedido y lo decidido. En este caso, la sentencia
recurrida no se ha apartado de lo pedido en autos en ninguna de las
formas que prevé el artículo 768 Nº 4 del Código de Procedimiento Civil
ni ha afectado, por ende, el principio de congruencia (considerandos 2º
y 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 28/11/2018, Rol Nº 68696-2016,


Cita online: CL/JUR/6628/2018

5. La resolución que ratifica sin modificaciones no le resulta exigible que


dé nuevamente cumplimiento a todos los requisitos enumerados en el
artículo 170 del Código de Procedimiento Civil

La impugnación formal en revisión no podrá prosperar, toda vez que


los hechos en base a los cuales se construye el argumento no
configuran la causal invocada. En efecto, el vicio denunciado aparece
cuando una resolución omite el cumplimiento de los requisitos
contemplados en el artículo 170 del Código de Procedimiento Civil para
la extensión de la sentencia, en la medida que tales requerimientos le
son exigibles, esto es, en lo que toca a las sentencias definitivas de
segunda instancia, cuando se trate de aquellas que modifican o revocan
en su parte dispositiva la de otro tribunal, o cuando, pese a confirmar
sin modificaciones, la de primer grado no cumpla a su vez con todas las
exigencias mencionadas en dicho precepto. Pues bien, analizados los
antecedentes se puede constatar que el fallo cuestionado reproduce el
de primera instancia, extendido en conformidad al artículo 170 del
Código de Procedimiento Civil y, en su parte dispositiva, pese a señalar
que confirma con declaración, lo ratifica sin modificaciones, por lo que
no resultaba exigible —como pretende el recurrente— que diera
nuevamente cumplimiento a todos los requisitos enumerados en el
tantas veces señalado artículo 170 del Código de Procedimiento Civil
(considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 18/03/2019, Rol Nº 31487-2018,


Cita online: CL/JUR/1429/2019

6. Cumplimiento de los requisitos de la sentencia de contener las


consideraciones de hecho y de derecho que le sirven de fundamento
y la enunciación de las leyes con arreglo a las cuales se pronuncia

En la especie, no se configura la causal del artículo 768 Nº 5 del


Código de Procedimiento Civil, en relación con el artículo 170 Nºs. 4, 5
y 6 del mismo cuerpo legal, por cuanto la sentencia impugnada señala
claramente las razones de hecho y derecho que llevaron a los jueces a
acoger la demanda, así como la decisión del asunto controvertido,
adoptada sobre la base de las probanzas que mencionan sus
razonamientos y las normas atinentes a la controversia, por lo que,
cumpliendo los sentenciadores con su obligación de fundamentar la
decisión, tanto desde el punto de vista de los hechos como del derecho,
no existe la omisión denunciada (considerando 5º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 18/03/2019, Rol Nº 31487-2018,


Cita online: CL/JUR/1429/2019

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 170 Nº 1)

1. Fallo de primera instancia no contiene en su parte expositiva la


designación precisa de las partes litigantes. Causal de casación en la
forma

El fallo de primera instancia no contiene en su parte expositiva la


designación precisa de las partes litigantes, como tampoco una
enunciación breve de las peticiones deducidas por la parte demandante
y de sus fundamentos y de la circunstancia de no haberse contestado
la demanda. Que lo anterior configura la causal de casación del
artículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil, en relación con el
artículo 170 números 1, 2 y 3 del cuerpo legal citado, esto es, haber
omitido en la dictación de la sentencia de primera instancia la
designación precisa de las partes litigantes, su domicilio, profesión y
oficio; la enunciación breve de las peticiones o acciones deducidas por
el demandante y de sus fundamentos e igual mención de las defensas
alegadas por el demandado, si las hubiere (considerandos 1º y 2º de la
sentencia de casación de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Rancagua, 28/05/2001, Rol Nº 267-2001,

Cita online: CL/JUR/2420/2001

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 170 Nº 4)

1. Finalidad de las consideraciones de hecho y de derecho que sirven


de fundamento a la sentencia

En el artículo 170 citado, que prevé el contenido de los fallos de


primera o de única instancia y los de segunda que modifiquen o
revoquen en su parte dispositiva los de otros tribunales, en su numeral
cuarto estatuye expresamente que debe hacerse alusión a "las
consideraciones de hecho o de derecho que sirven de fundamento a la
sentencia". La importancia de cumplir con tal disposición la ha
acentuado esta Corte Suprema en diversas oportunidades, para la
claridad, congruencia, armonía y lógica en los razonamientos que deben
observar los fallos. Se ha hecho hincapié en esta obligación de motivar
o fundamentar las sentencias, por cuanto tal exigencia no sólo dice
relación con un asunto exclusivamente procesal, referido a la posibilidad
de recurrir, que implica impugnar una resolución de manera de evitar
errores y arbitrariedades derecho consagrado en la Carta Fundamental,
que importa la idea del racional, justo y debido proceso que debe
alcanzarse en la sentencia sino porque, además el referido
requerimiento se relaciona con un tema externo a la procesabilidad
indicada. Esta última razón se enmarca en la necesidad de someter al
examen que puede hacer cualquier ciudadano de lo manifestado por el
juez y que hace posible, asimismo, el convencimiento de las partes en
el pleito, evitando la impresión de arbitrariedad al tomar éstas
conocimiento del porqué de una determinación (considerando 31º de la
anulación de oficio).
Corte Suprema, 21/08/2019, Rol Nº 44485-2017,
Cita online: CL/JUR/4755/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 17/10/2019, Rol Nº 19287-2018,

Cita online: CL/JUR/6099/2019

2. Formalidades a que deben sujetarse las sentencias definitivas

El legislador se ha preocupado de establecer las formalidades a que


deben sujetarse las sentencias definitivas de primera o única instancia
y las de segunda que modifiquen o revoquen en su parte dispositiva las
de otros tribunales, las que, además de satisfacer los requisitos
exigibles a toda resolución judicial, conforme a lo prescrito en los
artículos 61 y 169 del Código de Procedimiento Civil, deben contener
las enunciaciones contempladas en el artículo 170 del mismo cuerpo
normativo, entre las que figuran en lo que atañe al presente recurso en
su numeral 4, las consideraciones de hecho o de derecho que sirven de
fundamento a la sentencia. Esta Corte, dando cumplimiento a lo
dispuesto por la Ley Nº 3.390 de 1918, en su artículo 5º transitorio, dictó
con fecha 30 de septiembre de 1920 un Auto Acordado en que regula
pormenorizada y minuciosamente los requisitos formales que, para las
sentencias definitivas a que se ha hecho mención, dispone el precitado
artículo 170 del Código de Procedimiento Civil. Refiriéndose al
enunciado exigido en el Nº 4 de este precepto, el Auto Acordado
dispone que las sentencias de que se trata deben expresar las
consideraciones de hecho que les sirven de fundamento, estableciendo
con precisión aquellos sobre que versa la cuestión que haya de fallarse,
con distinción entre los que han sido aceptados o reconocidos por las
partes y los que han sido objeto de discusión. Agrega que si no hubiera
discusión acerca de la procedencia legal de la prueba, deben esas
sentencias determinar los hechos que se encuentran justificados con
arreglo a la ley y los fundamentos que sirven para estimarlos
comprobados, haciéndose, en caso necesario, la apreciación
correspondiente de la prueba de autos conforme a las reglas legales. Si
se suscitare cuestión acerca de la procedencia de la prueba rendida
prosigue el Auto Acordado deben las sentencias contener los
fundamentos que han de servir para aceptarla o rechazarla, sin perjuicio
del establecimiento de los hechos en la forma expuesta anteriormente.
Prescribe, enseguida que, establecidos los hechos, se enunciarán las
consideraciones de derecho aplicables al caso y, luego, las leyes o, en
su defecto, los principios de equidad con arreglo a los cuales se
pronuncia el fallo; agregando que, tanto respecto de las consideraciones
de hecho como las de derecho, debe el tribunal observar, al
consignarlos, el orden lógico que el encadenamiento de las
proposiciones requiera. La importancia de cumplir con tal disposición ha
sido acentuado por esta Corte Suprema por la claridad, congruencia,
armonía y lógica en los razonamientos que deben observar los fallos.
La exigencia de motivar o fundamentar las sentencias no sólo dice
relación con un asunto exclusivamente procesal referido a la posibilidad
de recurrir, sino que también se enmarca en la necesidad de someter al
examen que puede hacer cualquier ciudadano de lo manifestado por el
juez y hace posible, asimismo, el convencimiento de las partes en el
pleito, evitando la impresión de arbitrariedad al tomar éstas
conocimiento del porqué de una decisión judicial (considerandos 2º a 4º
de la anulación de oficio).

Corte Suprema, 8/11/2018, Rol Nº 871-2018,


Cita online: CL/JUR/6337/2018

3. Decisiones contradictorias. Causal de casación en la forma

En la especie, resulta inconcuso que los jueces de la segunda


instancia, en el caso sub iúdice, no han dado cumplimiento a los
requisitos legales indicados. En efecto, las únicas razones expuestas
en el fallo que se revisa tienen un carácter claramente contradictorio,
toda vez que por una parte señala que un medio probatorio carece de
valor por haberse detectado falencias en su emisión y, a reglón seguido,
entrega mérito probatorio al mismo medio acompañado por la
contraparte, a pesar que reconoce expresamente que tiene similares
falencias. En efecto, señala que el informe de perito designado por la
reclamada tiene el valor de desvirtuar aquello que es señalado por el
profesional designado por la reclamante, a pesar que ambos, a su juicio,
tienen un problema metodológico. La contradicción es evidente, pues si
se estima que el informe de la actora es deficiente y se niega valor,
reconocida la misma deficiencia en el informe de la reclamada,
igualmente éste no puede servir de elemento probatorio, máxime si
aquel incluso otorga un valor inferior al establecido por la Comisión de
Peritos. Como se sabe, la circunstancia de contener un fallo argumentos
contradictorios produce el natural efecto de anularse unos con otros,
dejando así la decisión que se expresa en lo resolutivo desprovista de
fundamentación que le de sustento, cuestión que sucede en la especie.
[...] En estas condiciones, la sentencia recurrida no se ha pronunciado
en forma legal, incurriendo en la causal de casación del artículo 768 Nº5
del Código de Procedimiento Civil en relación con el artículo 170
número 4 del mismo cuerpo de leyes, toda vez que no contiene las
consideraciones que permitan comprender la decisión de rebajar el
monto indemnizatorio fijado por el fallo de primera instancia,
respondiendo tal decisión a una declaración carente de contenido y de
análisis que permita su acertada inteligencia. Así las cosas, atendido
que esta Corte, al conocer de los recursos de casación en la forma o en
el fondo, puede invalidar de oficio las sentencias impugnadas cuando
los antecedentes dejen de manifiesto que ellas adolecen de vicios que
dan lugar a la nulidad por razones de forma, facultad que en la especie
corresponde ejercer por concurrir la ilegalidad ya destacada
(considerandos 9º a 11º de la anulación de oficio).

Corte Suprema, 19/04/2018, Rol Nº 34341-2017,


Cita online: CL/JUR/2094/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 25/05/2020, Rol Nº 2239-2019,

Cita online: CL/JUR/30904/2020

— Corte Suprema, 19/02/2020, Rol Nº 16528-2018,

Cita online: CL/JUR/11087/2020

— Corte Suprema, 29/10/2018, Rol Nº 40221-2017,

Cita online: CL/JUR/6146/2018

— Corte Suprema, 20/08/2018, Rol Nº 5973-2017,

Cita online: CL/JUR/4559/2018

— Corte Suprema, 14/05/2018, Rol Nº 31679-2017,


Cita online: CL/JUR/2216/2018

— Corte Suprema, 8/01/2018, Rol Nº 4835-2017,

Cita online: CL/JUR/102/2018

4. Contenido del concepto "considerar". Incumplimiento de los requisitos


de la sentencia de contener las consideraciones de hecho y de
derecho que le sirven de fundamento

Para dar estricto cumplimiento al mandato legal de fundamentación


de todo pronunciamiento jurisdiccional, los jueces han debido agotar el
examen de las argumentaciones que sustentan las alegaciones y
defensas de las partes, analizándolas conforme a las probanzas que a
ellas se refieren. Para ello, ha de recordarse que "considerar" implica la
idea de reflexionar detenidamente sobre algo determinado, es decir,
concreto. Y del contexto de justificación queda demostrada la falta a las
disposiciones y principios referidos en que incurrieron los jueces del
grado, lo que constituye el vicio de casación en la forma previsto en el
artículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil, en relación con el
artículo 170 Nº 4 del mismo texto legal, por la falta de consideraciones
de hecho que le sirven de fundamento al fallo. El artículo 775 del Código
de Procedimiento Civil dispone que los tribunales, conociendo, entre
otros recursos, por la vía de la casación, pueden invalidar de oficio las
sentencias, cuando los antecedentes manifiesten que ellas adolecen de
vicios que dan lugar a la casación en la forma. En consecuencia,
procede casar en la forma de oficio (considerandos 6º a 8º de la
anulación de oficio).

Corte Suprema, 7/01/2020, Rol Nº 22018-2018,


Cita online: CL/JUR/37345/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 24/02/2020, Rol Nº 31706-2018,

Cita online: CL/JUR/11071/2020

— Corte Suprema, 10/12/2018, Rol Nº 6268-2018,

Cita online: CL/JUR/6837/2018


— Corte Suprema, 8/11/2018, Rol Nº 871-2018,

Cita online: CL/JUR/6337/2018

5. Sentencia impugnada que contiene considerandos incongruentes

El análisis de los Considerandos Sexto a Décimo de la sentencia de


primer grado, en relación con la motivación Séptima del fallo recurrido,
permite establecer que efectivamente se dio por acreditado que el actor
E.M. no cumplía con el tiempo de prestación de servicios, veinte años,
exigidos por el citado artículo 188 del Decreto con Fuerza de Ley Nº 1
de 1968, hecho expresamente establecido que hacía improcedente el
encasillamiento que se reclama, sin perjuicio de habérsele concedido
una pensión de retiro y desahucio. Bajo tal supuesto no puede
asimilarse su situación con la de los otros dos demandantes respecto
de quienes sí procedía el encasillamiento, beneficio que, estando
amparado por la garantía de la imprescriptibilidad, justifica el rechazo
de la excepción. En consecuencia, de lo relacionado aparece manifiesta
la incongruencia que existe entre las motivaciones del fallo y la decisión
de rechazar la excepción de prescripción en relación al actor E.M.,
contradicción que significa falta de fundamentación de lo resuelto a ese
respecto y configura la omisión constitutiva del vicio previsto en el
numeral 5 del artículo 768 del Código de Procedimiento Civil, en
relación con el artículo 170 número 4 del mismo cuerpo legal, al no
contener consideraciones pertinentes o ser éstas contradictorias por lo
que no pueden servir de fundamento a la decisión (considerando 6º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 8/07/2019, Rol Nº 39430-2017,


Cita online: CL/JUR/5795/2019

6. Improcedencia del recurso de casación en la forma por la causal del


artículo 768 Nº 5 en relación con el artículo 170 Nº 4, ambos del
Código de Procedimiento Civil, en los juicios regidos por leyes
especiales

Si bien el artículo 766 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil


dispone que el recurso de casación en la forma procederá respecto de
las sentencias que se dicten en los juicios o reclamaciones regidos por
leyes especiales, lo cierto es que el artículo 768 inciso 2º del Código
precitado limita las causales de casación en la forma aplicables a esta
clase de juicios, disponiendo que sólo podrá fundarse en alguna de las
causales indicadas en los Nºs. 1, 2, 3, 4, 6, 7 y 8 de este artículo y
también en el Nº 5 cuando se haya omitido en la sentencia la decisión
del asunto controvertido. Por consiguiente, tratándose de un juicio
especial regido por el DL Nº 2.695, resulta improcedente el recurso de
casación en la forma por la causal del artículo 768 Nº 5, en relación con
el artículo 170 Nº 4, ambos del Código de Procedimiento Civil, por
cuanto el recurso denuncia la omisión del análisis de la prueba
incorporada en segunda instancia y no la falta de decisión
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 15/01/2018, Rol Nº 36118-2017,


Cita online: CL/JUR/218/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 28/05/2019, Rol Nº 31626-2018,

Cita online: CL/JUR/2944/2019

— Corte Suprema, 16/04/2019, Rol Nº 1537-2019,

Cita online: CL/JUR/2552/2019

— Corte Suprema, 19/11/2018, Rol Nº 7388-2018,

Cita online: CL/JUR/6475/2018

— Corte Suprema, 26/04/2018, Rol Nº 2840-2018,

Cita online: CL/JUR/1920/2018

7. Incumplimiento del requisito de la sentencia de contener las


consideraciones de hecho y de derecho que le sirven de fundamento

La sentencia impugnada carece del estándar de fundamentación


mínimo exigible en conformidad a lo establecido en el referido
artículo 170 Nº 4 del Código de Procedimiento Civil, en relación a las
razones conforme a las cuales decide desestimar la demanda intentada
en autos, desde que ha omitido el examen y debida ponderación de
todos los elementos de juicio aparejados al proceso. Dicha conclusión
aparece así desprovista de la adecuada fundamentación que debe
contener una sentencia, pues no encuentra su correlato en los
basamentos del fallo, de lo que se sigue que no ha existido, en la
especie, un cabal razonamiento respecto del asunto sometido al
conocimiento y resolución de los juzgadores del mérito, omitiéndose de
este modo las consideraciones de hecho y de derecho que debían
servirle de sustento, desentendiéndose así los magistrados de la
obligación de efectuar las reflexiones que permitan apoyar su
determinación, al prescindir del estudio que deben efectuar de la
totalidad de los medios probatorios rendidos por las partes, que en este
caso se encuentra ausente respecto de aspectos tan relevantes como
los identificados precedentemente. En consecuencia, los
sentenciadores incurrieron en el vicio de casación en la forma previsto
en el artículo 768 Nº 5 en relación con el artículo 170 Nº 4, ambos del
Código de Procedimiento Civil, por la falta de consideraciones que han
de servir de fundamento al fallo (considerandos 11º a 13º de la
sentencia de casación).

Corte Suprema, 8/06/2020, Rol Nº 2816-2019,


Cita online: CL/JUR/37309/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 18/05/2020, Rol Nº 29086-2018,

Cita online: CL/JUR/30834/2020

— Corte Suprema, 6/03/2020, Rol Nº 2570-2019,

Cita online: CL/JUR/18720/2020

— Corte Suprema, 12/02/2020, Rol Nº 4591-2019,

Cita online: CL/JUR/42095/2020

— Corte Suprema, 15/01/2020, Rol Nº 14383-2018,

Cita online: CL/JUR/8098/2020

— Corte Suprema, 27/08/2019, Rol Nº 31588-2018,


Cita online: CL/JUR/4852/2019

— Corte Suprema, 9/04/2019, Rol Nº 43144-2017,

Cita online: CL/JUR/1927/201918

— Corte Suprema, 26/12/2018, Rol Nº 1140-2018,

Cita online: CL/JUR/7068/2018

— Corte Suprema, 3/09/2018, Rol Nº 42998-2017,

Cita online: CL/JUR/4919/2018

— Corte Suprema, 30/05/2018, Rol Nº 61463-2016,

Cita online: CL/JUR/2600/2018

— Corte Suprema, 19/02/2018, Rol Nº 62199-2016,

Cita online: CL/JUR/773/2018

— Corte Suprema, 31/01/2018, Rol Nº 24959-2017,

Cita online: CL/JUR/505/2018

— Corte Suprema, 23/01/2018, Rol Nº 36286-2017,

Cita online: CL/JUR/336/2018

8. Sola afirmación de carecer una sentencia de fundamentos no es


bastante para sobrepasar el examen de admisibilidad de la casación
formal

El defecto —del artículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil


en relación con el artículo 170 Nº 4 del mismo cuerpo normativo—
aparece solo cuando la sentencia carece de las consideraciones de
hecho y de derecho que le sirven de fundamento, no así cuando
aquéllas no se ajustan a la tesis sustentada por el reclamante. Y una
atenta lectura de los antecedentes permite verificar que en los
considerandos vigésimo noveno y trigésimo quinto del fallo de primer
grado —reproducidos en la alzada— se contiene el análisis de las
probanzas rendidas y en sus motivos trigésimo segundo, trigésimo
tercero, trigésimo séptimo y trigésimo octavo, conjuntamente con la
motivación quinta de la sentencia impugnada, se consignan las
reflexiones que llevaron a los juzgadores a la decisión de rechazar la
demanda, al estimar que entre las partes solo existieron tratativas
preliminares en relación al proyecto de desarrollo de tres torres
habitacionales, sin que la negociación diera paso, en definitiva, a la
concreción de un contrato de construcción. En este sentido vale la pena
recalcar que la sola afirmación relativa a que una sentencia carece de
fundamentos no es bastante para sobrepasar el examen de
admisibilidad del recurso de casación en la forma, si en ella se constata
la existencia de aquellos, pero sobre la base de un razonamiento que,
como en el presente caso, conduce a un resultado desfavorable para el
impugnante (considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 7/03/2019, Rol Nº 24931-2018,


Cita online: CL/JUR/1152/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 1/04/2019, Rol Nº 23304-2018,

Cita online: CL/JUR/2093/2019

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 170 Nº 5)

1. Cumplimiento de los requisitos de la sentencia de contener la


enunciación de las leyes o principios de equidad con arreglo a las
cuales se pronuncia

La sentencia contiene la enunciación de las leyes, y en su defecto de


los principios de equidad, con arreglo a los cuales fue pronunciada, los
que se contienen tanto en la parte que se dio por reproducida de la de
primer grado como en los razonamientos incorporados por la
impugnada, que expresan los motivos de hecho y de derecho que
permitieron dar por acreditados cada uno de los presupuestos de la
demanda indemnizatoria deducida, cuyo monto fue determinado
prudencialmente por la judicatura del fondo conforme a los
antecedentes probatorios allegados por las partes. De manera que, no
obstante que la recurrente no comparta los razonamientos y
conclusiones expresados en el fallo, no existe la omisión denunciada,
motivo por el que el recurso de casación debe desestimarse
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/05/2019, Rol Nº 19294-2018,


Cita online: CL/JUR/2402/2019

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 170 Nº 6)

1. Sentencia debe comprender todas las acciones y excepciones que


se hayan hecho valer en el juicio

El artículo 254 Nº 5º del Código de Procedimiento Civil dispone que la


demanda contendrá la enunciación precisa y clara, consignada en la
conclusión de las peticiones que se sometan al fallo del tribunal; y el
artículo 309 Nº 4 del mismo estatuto legal, estatuye que la contestación
debe contener enunciación precisa y clara, consignada en la conclusión,
de las peticiones que se sometan al fallo del tribunal. De ese marco no
puede desentenderse el sentenciador, quien por mandato del
artículo 170 Nº 6º del Código de Procedimiento Civil debe resolver el
asunto controvertido, de manera que su decisión deberá comprender
todas las acciones y excepciones que se hayan hecho valer en el juicio.
Concuerda con lo reseñado el mandato del artículo 10 del Código
Orgánico de Tribunales, en cuya virtud los tribunales no podrán ejercer
su ministerio sino a petición de parte, salvo los casos en que la ley los
faculte para proceder de oficio (considerando 3º de la sentencia de
casación).

Corte de Apelaciones de Santiago, 26/01/2018, Rol Nº 6821-2017,

Cita online: CL/JUR/431/2018

2. Incumplimiento del requisito de la sentencia de contener la decisión


del asunto controvertido

Durante la tramitación del juicio, y antes de celebrarse la audiencia de


conciliación y prueba, la parte querellada de acuerdo a lo prescrito por
el artículo 310 del Código de Procedimiento Civil, opuso la excepción
de prescripción, a lo que el tribunal proveyó "provéase en su
oportunidad.", sin que se haya emitido resolución a su respecto. Por su
parte, el artículo 170 Nº 6 del Código de Procedimiento Civil, obliga al
tribunal en la sentencia definitiva a pronunciarse sobre el asunto
controvertido sometido a su decisión, lo que comprende el
pronunciamiento de todas las acciones y excepciones que se hayan
hecho valer en el juicio. Por lo tanto, la omisión referida importa una
infracción al debido proceso, desde que el tribunal no se pronunció
sobre una excepción de fondo, —de previo y especial
pronunciamiento—, deducida por la parte demandada, omisión que
permite retrotraer la causa al estado procesal de darle la tramitación
incidental que corresponde (considerandos 2º a 5º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 15/11/2019, Rol Nº 1804-2018,


Cita online: CL/JUR/6563/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 18/12/2019, Rol Nº 42699-2017,

Cita online: CL/JUR/12258/2019

— Corte Suprema, 16/01/2019, Rol Nº 3668-2018,

Cita online: CL/JUR/245/2019

— Corte Suprema, 2/04/2018, Rol Nº 8378-2017,

Cita online: CL/JUR/1557/2018

3. Tribunales de justicia deben ceñirse a los principios de pasividad y de


congruencia

La jurisprudencia de la Corte Suprema ha declarado que los tribunales


de justicia deben ceñirse al principio de pasividad que rige su actuar,
como al de congruencia determinado por los asuntos sometidos a su
decisión, principio que enlaza la pretensión, la oposición, la prueba, la
sentencia y los recursos, siendo la congruencia procesal en la sentencia
un imperativo para el magistrado al decidir la controversia. En íntima
conexión con lo anterior, resulta imprescindible traer a colación los
artículos 160 y 170 Nº 6º del Código de Procedimiento Civil. El precepto
preliminar de esta normativa —considerada como expresión positiva de
uno de los principios formativos del proceso al que ya se ha hecho
alusión —el de la congruencia— estatuye que los fallos deben
extenderse de acuerdo al mérito del proceso, no pudiendo considerar
puntos o aspectos no sometidos expresamente a juicio por los
contradictores, salvo en cuanto las leyes autoricen o permitan proceder
de oficio. La segunda de las reglas antes señaladas, en armonía con la
recién transcrita, establece que el acápite resolutivo del veredicto debe
circunscribirse al asunto debatido, que abarca todas las acciones y
excepciones ventiladas en juicio (considerandos 6º y 7º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/01/2020, Rol Nº 3673-2019,


Cita online: CL/JUR/22941/2020

ARTÍCULO 171 (194)

En las sentencias interlocutorias y en los autos se expresarán, en cuanto


la naturaleza del negocio lo permita, a más de la decisión del asunto
controvertido, las circunstancias mencionadas en los números 4º y 5º del
artículo precedente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 144, 160, 158, 169, 170, 766, 768
y 826. Código Orgánico de Tribunales: artículos 89 y 384.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Consideraciones de hecho o de derecho que sirven de fundamento


al fallo y la enunciación de las leyes o de los principios de equidad no
son de carácter esencial y, por lo tanto, su inadvertencia no se
encuentra expresamente sancionada con nulidad

Del artículo 171 del Código de Procedimiento Civil se desprende que


sólo la decisión del asunto controvertido corresponde a un requisito
esencial e ineludible para ese tipo de resoluciones, como quiera que las
menciones previstas en los numerales 4º y 5º del artículo 170 se exigen
únicamente para el caso que "la naturaleza del asunto lo permita".
Consecuentemente, de la norma legal transcrita es dable colegir que, la
eventual omisión de las consideraciones de hecho o de derecho que
sirven de fundamento al fallo y de la enunciación de las leyes o de los
principios de equidad con arreglo a los cuales se pronuncia, no puede
traer consigo la invalidación formal de las resoluciones de esa índole,
puesto que no obstante tratarse de sentencias interlocutorias que
admiten recurso de casación en su contra, deben redactarse conforme
a lo preceptuado en el artículo 171 en mención, de modo tal que, fuera
de la decisión del asunto controvertido, los demás requisitos no son de
carácter esencial y, por lo tanto, su inadvertencia no se encuentra
expresamente sancionada con nulidad (considerando 3º de la sentencia
de casación de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 11/06/2014, Rol Nº14859-2013,


Cita online: CL/JUR/3284/2014

2. Resolución que declara el abandono del procedimiento debe cumplir


con los requisitos formales del artículo 171 del Código de
Procedimiento Civil

La resolución que acoge la petición del demandado, de que se declare


que el procedimiento se encuentra abandonado, tiene la naturaleza
jurídica de interlocutoria y, conforme a lo que dispone el artículo 171 del
Código de Procedimiento Civil, debe reunir los requisitos de orden
formal que dicha norma señala (considerando 2º de la sentencia de
casación de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 16/03/1999, Rol Nº 2990-1998,


Cita online: CL/JUR/2100/1999

ARTÍCULO 172 (195)

Cuando en un mismo juicio se ventilen dos o más cuestiones que puedan


ser resueltas separada o parcialmente, sin que ello ofrezca dificultad para la
marcha del proceso, y alguna o algunas de dichas cuestiones o parte de ellas,
lleguen al estado de sentencia antes de que termine el procedimiento en las
restantes, podrá el tribunal fallar desde luego las primeras.

En este caso se formará cuaderno electrónico separado con las piezas


necesarias para dictar fallo y ejecutarlo.68

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 17, 92, 97, 162, 170, 194, 224, 231,
232, 242, 254, 316 y 652. Código Civil: artículo 1592.

ARTÍCULO 173 (196)


Cuando una de las partes haya de ser condenada a la devolución de frutos
o a la indemnización de perjuicios, y se ha litigado sobre su especie y monto,
la sentencia determinará la cantidad líquida que por esta causa deba
abonarse, o declarará sin lugar el pago, si no resultan probados la especie y
el monto de lo que se cobra, o, por lo menos, las bases que deban servir para
su liquidación al ejecutarse la sentencia.

En el caso de que no se haya litigado sobre la especie y el monto de los


frutos o perjuicios, el tribunal reservará a las partes el derecho de discutir esta
cuestión en la ejecución del fallo o en otro juicio diverso.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 170, 194, 231, 232, 242 y 254.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Derecho de reserva del artículo 173 inciso 2º del Código de


Procedimiento Civil permite dejar para instancias posteriores la
determinación de la especie y monto de los frutos o perjuicios

El artículo 173 inciso 1º del Código de Procedimiento Civil estatuye


que cuando una de las partes haya de ser condenada a la devolución
de frutos o a la indemnización de perjuicios, y se ha litigado sobre su
especie y monto, la sentencia determinará la cantidad líquida que por
esta causa debe abonarse, o declarará sin lugar el pago, si no resultan
probados la especie y el monto de lo que se cobra, o, por lo menos, las
bases que deban servir para su liquidación al ejecutarse la sentencia.
En su inciso 2º preceptúa que en el caso que no se haya litigado sobre
la especie y el monto de los frutos o perjuicios, el tribunal reservará a
las partes el derecho de discutir esta cuestión en la ejecución del fallo o
en otro juicio diverso. En la especie, es a la primera parte del inciso 2º
señalado que ha recurrido para el logro de su pretensión el actor, por lo
que tal parte de la disposición legal aludida debe relacionarse con lo
prevenido en los artículos 231 y siguientes del Código de Procedimiento
Civil. Entonces, el derecho de reserva que contempla la norma citada
dice relación con la posibilidad de dejar para instancias posteriores —
ejecución o juicio posterior— la determinación de la especie y monto de
los frutos o perjuicios a ser devueltos o pagados por una de las partes,
instituto que opera sobre la premisa o presupuesto esencial de que se
acredite la existencia de ellos. En relación con lo que se consigna, el
Máximo Tribunal ha resuelto que la reserva contemplada en el
artículo 173 del Código de Procedimiento Civil alcanza sólo a la especie
y monto de los frutos y perjuicios, de forma tal que aún en ese evento el
actor está obligado a demostrar, durante la substanciación del juicio, la
existencia o efectividad de unos y otros. Sobre lo indicado el autor don
René Abeliuk M. señala que "De acuerdo al artículo 173 del Código de
Procedimiento Civil la especie y monto de los perjuicios pueden ser
fijados en el mismo juicio en que se establezca la obligación de
indemnizarlos, pero puede también reservarse su discusión para la
ejecución del fallo o en juicio diverso, siempre que a lo menos estén
acreditadas las bases que deben servir para su liquidación. Sin
embargo, el demandante no produjo pruebas en el pleito para justificar
la existencia de los frutos y perjuicios que demanda, cuya especie y
monto pidió se le reservara para determinarlos en la ejecución del fallo,
y siempre y cuando en ese fallo se hubiera accedido a lo solicitado
acerca de ellos, lo que en la especie no aconteció (considerandos 5º y
6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 16/05/2018, Rol Nº 36818-2017,


Cita online: CL/JUR/2330/2018

2. Declaración de la existencia de la obligación no libera al actor de la


carga de la prueba de la especie y monto de los mismos

De conformidad al artículo 173 del Código de Procedimiento Civil, la


declaración de la existencia de la obligación no libera al actor de la carga
de la prueba de la especie y monto de los mismos, es decir el
demandante debe acreditar los hechos constitutivos de los perjuicios
que abstractamente le debería el condenado, para lo cual el
procedimiento de cumplimiento tiene un periodo de prueba y se pueden
presentar todos aquellos medios que logren probar los hechos en que
se sustente teoría del caso de una u otra parte. Ergo, es necesario
determinar y liquidar la obligación y, por consiguiente, precisar el monto
de dinero de la condena a que deberá ser sometido el vencido, no
siendo posible conminarlo a realizar una nueva prestación para
determinar esa cantidad de dinero, desde que la reserva de derechos
no permite que a través de ella se pueda derivar a otro trámite la fijación
del monto de la reparación de los daños, debido a que la condena
genérica discurre sobre un ilícito ya consumado en el tiempo, pero
cuyos efectos —en relación a la especie y el monto de los frutos y
perjuicios— quedan relegados para una discusión en la etapa de
cumplimiento incidental o en otro juicio posterior; procedimiento —
incidente o juicio autónomo— en que debe quedar definitivamente
determinada la naturaleza, especie y monto de los perjuicios, como se
ha dicho, mediante una cuantificación precisa y determinada, sin que
proceda efectuar una mera declaración o reserva para realizar
posteriormente esta operación, dado que el presente incidente
constituye la etapa de cumplimiento a la cual simplemente le seguirá la
ejecución de la suma determinada en el cuaderno de apremio sin que
pueda deducirse en él una nueva oposición, en los términos
establecidos en el artículo 234 del Código de Procedimiento Civil
(considerando 16º de la sentencia de reemplazo).

Corte Suprema, 26/06/2018, Rol Nº 36757-2017,


Cita online: CL/JUR/3217/2018

3. Reserva de derecho para discutir especie y monto de perjuicios


supone incoar acción de indemnización de perjuicios genérica en
juicio sumario de arriendo

En cuanto a la petición de reserva del derecho para discutir la especie


y monto de los perjuicios ocasionados, se debe partir señalando que,
independientemente de la cuestión acerca de si en un juicio sumarísimo
como el de arrendamiento en sede de Ley Nº 18.101 pueda caber este
instituto, el derecho de reserva que contempla el inciso 2º del
artículo 173 del Código de Procedimiento Civil dice relación con la
posibilidad de dejar para la ejecución del fallo o un juicio ordinario
posterior sólo y únicamente la determinación de la especie y monto de
los daños que se hayan causado a la actora, lo que supone, primero,
evidentemente, que se haya puesto en ejercicio la acción de
indemnización de perjuicios, conteniendo la demanda la enunciación
precisa y clara, consignada en la conclusión de la petición de obtener
del tribunal un pronunciamiento de condena a indemnizar perjuicios o
restituir los frutos de la demandada, excluyendo la cuantificación de su
especie y el monto; y, segundo, la obligación de probar los presupuestos
de la responsabilidad civil que se persigue, esto es, la existencia de los
perjuicios, los hechos que la constituyen, y la causalidad natural y
normativa entre el daño y el hecho atribuible a la demandada o sus
dependientes, todo lo cual ha debido quedar necesariamente acreditado
durante la secuela o sustanciación del juicio, pues estos dos
presupuestos ineludibles son los que configuran la condena genérica a
que se refiere el artículo señalado para que tenga lugar la reserva de
derechos. Se desprende de los autos y particularmente de la lectura del
libelo de demanda de la actora que ésta no incoó la acción de
indemnización de perjuicios que pretendía la condena genérica a
repararlos que justifica la reserva de derechos a que se ha hecho
referencia, sin que se contenga petición concreta que permita al tribunal
pronunciamiento alguno al respecto, de manera que, en esta parte, la
decisión del tribunal se ajusta a derecho (considerandos 5º y 6º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 1/03/2019, Rol Nº 5292-2018,


Cita online: CL/JUR/1332/2019

4. Daño como elemento común de ambos regímenes de


responsabilidad

El concepto de daño no justifica limitar la aplicación del artículo 173


del Código de Procedimiento Civil sólo para el campo contractual y
excluirlo, como pretende el recurrente, respecto del régimen de
responsabilidad extracontractual. La referida norma permite reservar la
determinación del daño para la etapa de cumplimiento del fallo, en los
términos que el precepto indica. Como se sabe el daño consiste en un
menoscabo que experimenta una persona, pudiendo tener su fuente en
un delito, cuasidelito o en el incumplimiento de un contrato. Se trata de
un elemento común a ambos tipos de responsabilidad y por lo mismo
su determinación puede ser reservada en los términos que lo ordena el
fallo recurrido. La reserva prevista en el artículo 173 inciso 2º del Código
de Procedimiento Civil no exime del deber de acreditar el daño como un
elemento de procedencia de la responsabilidad contractual o extra
contractual, en tanto ello constituye un elemento indispensable del
estatuto de responsabilidad que se invoca, en lo relativo al hecho ilícito
que se alega. Una interpretación restrictiva pugna con el principio de
reparación íntegra del daño, que tiene el propósito de pretender dejar a
la víctima —en la medida de lo posible— en la misma situación en la
que se encontraba de no haber acaecido el hecho ilícito. Así,
comprobado el daño, como es lo que ha sucedido en la especie, nada
obsta a que la dilucidación del detalle y cuantía de los perjuicios
ocasionados por la conducta antijurídica se precise en una discusión
posterior (considerandos 6º a 8º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Santiago, 19/04/2018, Rol Nº 2814-2017,

Cita online: CL/JUR/2082/2018

ARTÍCULO 174 (197)

Se entenderá firme o ejecutoriada una resolución desde que se haya


notificado a las partes, si no procede recurso alguno en contra de ella; y, en
caso contrario, desde que se notifique el decreto que la mande cumplir, una
vez que terminen los recursos deducidos, o desde que transcurran todos los
plazos que la ley concede para la interposición de dichos recursos, sin que
se hayan hecho valer por las partes. En este último caso, tratándose de
sentencias definitivas, certificará el hecho el secretario del tribunal a
continuación del fallo, el cual se considerará firme desde este momento,
sin más trámites.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 38, 181, 182, 187, 188, 189, 192, 231,
267, 434, 753 y 766, 770, 811, 814 y 822. Código Civil: artículo 227. Código de Justicia Militar:
artículo 101. Código de Minería: artículos 70 y 86. Ley Nº 16.271, Ley sobre Impuesto a las
Herencias, Asignaciones y Donaciones: artículo 15.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Condenados mediante sentencia firme al pago de las costas de la


causa, cuyo cobro ejecutivo pretende el actor, quedaba vedado a los
jueces del grado modificar, a través de una excepción de aquellas
previstas en el artículo 464 del Código de Procedimiento Civil, una
sentencia interlocutoria que se encontraba firme y produciendo todos
sus efectos jurídicos

El artículo 174 del citado estatuto jurídico permite distinguir el


momento en que se produce la firmeza de la resolución: 1.- Si contra la
resolución no procede recurso procesal alguno, queda firme desde su
notificación legal a las partes; 2.- Si proceden recurso y éstos se han
deducido o interpuesto, la resolución queda firme desde que concluidos
dichos recursos, se notifica el decreto que la manda cumplir; 3.- Si no
se han interpuesto recursos procesales, la resolución queda firme desde
que los plazos para deducirlos han transcurrido sin hacerse valer. En
este último caso, tratándose de sentencias definitivas, certificará el
hecho el secretario del tribunal y dicha sentencia se considerará firme
desde este momento, sin más trámite. La sentencia firme, bien definitiva
o interlocutoria constituye un título ejecutivo en los términos del
artículo 434 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil y ello porque de esa
manera se hace efectiva la acción de cosa juzgada, pero dicha
autoridad sólo le corresponde, según el artículo 176 del Código aludido,
a aquel en cuyo favor se ha declarado un derecho en el juicio, para el
cumplimiento de lo resuelto o para la ejecución del fallo en la forma
prevenida por el Título XIX del Libro I del mismo cuerpo de leyes, de lo
cual se sigue, que debe tratarse de una sentencia que haya declarado
un derecho que antes del juicio no estuviera reconocido o constituido.
Que es un hecho pacífico y por ende incontrovertido, que la causa
RIT 013-2007, en la que se condenó a los intervinientes (Ministerio
Público y Banco de Chile) al pago de las costas de la causa se
encuentra firme o ejecutoriada en los términos previstos en el
artículo 174 del Código de Procedimiento Civil. Asimismo, desde que el
fallo adquiere la calidad de firme es exigible el cumplimiento de la
obligación que en él se contiene. Luego, el concepto de firmeza de una
resolución judicial se vincula con su irrevisibilidad por medio de recursos
judiciales y puede definirse como "La situación jurídica en que ella se
encuentra por el agotamiento de los recursos procesales procedentes
en su contra, la que la hace estable o inmodificable como acto procesal"
(La cosa juzgada en el proceso civil, Hugo Pereira Anabalón, Editorial
Jurídica ConoSur, pág. 61). Que el artículo 176 del Código de
Procedimiento Civil expresa: "Corresponde la acción de cosa juzgada a
aquel a cuyo favor se ha declarado un derecho en el juicio, para el
cumplimiento de lo resuelto o para la ejecución del fallo en la forma
prevenida en el Título XIX de este Libro". Dicha acción es la que
precisamente ha intentado el actor a través de la demanda ejecutiva.
Que de acuerdo con los reflexiones vertidas en los razonamientos que
precede, aparece de manera patente que les estaba vedado a los
jueces del grado modificar, a través de una excepción de aquellas
previstas en los numerales que establece el artículo 464 del Código de
Procedimiento Civil, una sentencia interlocutoria que se encontraba
firme y produciendo todos sus efectos jurídicos, de la cual emanan los
efectos propios de una resolución ejecutoriada entre otros su
inmutabilidad e irrevisibilidad, incurriendo de ese modo en infracción a
los artículos 174, 175 y 176 del Código de Procedimiento Civil, por
errónea interpretación y aplicación de dichas disposiciones legales,
transgresiones que influyeron sustancialmente en lo dispositivo del fallo
al acogerse una excepción que debió ser rechazada, debiendo
continuarse, subsiguientemente, la ejecución seguida en contra del
Banco (...) (considerandos 10º a 14º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 14/01/2010, Rol Nº 7663-2008,


Cita online: CL/JUR/435/2010

ARTÍCULO 175 (198)

Las sentencias definitivas o interlocutorias firmes producen la acción o la


excepción de cosa juzgada.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 22, 23, 24, 150, 158, 174, 178, 179,
181, 304, 434, 753, 766, 770, 811, 814 y 822. Código Civil: artículos 3º y 9º. Código de Derecho
Internacional Privado: artículos 174 y 417.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cosa juzgada, concepto y efectos

La excepción de cosa juzgada es el efecto que producen


determinadas resoluciones judiciales en virtud del cual no puede volver
a discutirse ni pretenderse la dictación de un nuevo fallo entre las
mismas partes y sobre la misma materia que fue objeto del fallo anterior.
Debe puntualizarse, desde luego, que el sentido y efecto de cosa
juzgada tiende a producir la certeza de los derechos, quedando
prohibido todo nuevo pronunciamiento sobre lo que fue juzgado;
constituyendo fundamento para la calificación de dicha excepción la
coexistencia de decisiones incompatibles, es decir, que pugnen una con
la otra. La cosa juzgada impide que sobrevenga otra decisión sobre una
determinada materia que ya fue debatida y sentenciada por fallo firme
entre sujetos determinados, de donde surgen los límites de dicho
instituto, como el subjetivo que apunta a los sujetos que legalmente
fueron parte en el juicio y el objetivo que se refiere a la materia
sentenciada determinada por el objeto y la causa a pedir
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 29/05/2018, Rol Nº 34430-2017,


Cita online: CL/JUR/2498/2018

Fallos en el mismo sentido:


— Corte Suprema, 7/03/2019, Rol Nº 44260-2017,

Cita online: CL/JUR/1117/2019

— Corte Suprema, 26/09/2018, Rol Nº 21889-2017,

Cita online: CL/JUR/5276/2018

2. Sentido y efecto de la cosa juzgada

El artículo 175 del Código de Procedimiento Civil dispone: "Las


sentencias definitivas e interlocutorias firmes producen acción o
excepción de cosa juzgada"; la primera se condice con la facultad para
solicitar el cumplimiento, incluso forzado, de la pretensión consolidada
en el fallo que participe de alguna de dichas categorías y la excepción,
en cambio, se identifica literalmente con las voces latinas "res" "iudicata"
y a la antigua máxima "res iudicata pro veritate habetur", esto es, que la
cosa juzgada en la sentencia ha de tenerse por verdad. La excepción
de cosa juzgada es el efecto que generan las sentencias definitivas o
interlocutorias firmes, conforme al cual no se puede volver a discutir ni
intentar que se emita una nueva decisión entre las mismas partes y
respecto de igual materia que fue objeto de la sentencia anterior; y para
que prospere es menester que concurra la triple identidad de persona,
de objeto y de causa de pedir entre la nueva demanda y la anteriormente
resuelta, según lo señala el artículo 177 del Código de Procedimiento
Civil. La finalidad de la institución de que se trata, en cuanto atributo de
ciertas resoluciones judiciales, es conferir certeza a los derechos que
han sido adjudicados por el órgano jurisdiccional y, así, permitir su
ejecución, por ende, su fundamento se vincula a la idea de impedir que
se adopte una decisión acerca de un asunto que ya fue resuelto,
debiendo enfatizar que el análisis comparativo se debe efectuar entre lo
que se resolvió en una sentencia anterior y lo reclamado en el posterior,
"en rigor, no es una identidad entre demandas, sino entre una sentencia
anterior — que ya juzgó el tema— y una nueva acción, deducida en una
demanda que pretende plantear el mismo objeto procesal" —Alejandro
Romero— (considerandos 6º y 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 12/08/2019, Rol Nº 16322-2019,


Cita online: CL/JUR/4623/2019
3. Requisitos de procedencia de la excepción de cosa juzgada.
Incumplimiento del requisito de la identidad legal de la cosa pedida

La excepción de cosa juzgada, de acuerdo a las normas


contempladas en los artículos 175 y siguientes del Código de
Procedimiento Civil, requiere que entre los procesos en pugna concurra
la denominada triple identidad, esto es, igualdad de partes, de la cosa
pedida y de la causa de pedir, siendo definida esta última expresamente
por la ley como "el fundamento inmediato del derecho deducido en
juicio". En el artículo 177 del código citado se precisa que la excepción
de cosa juzgada sólo puede ser alegada por el litigante que haya
obtenido en el juicio y por todos aquellos a quienes según la ley
aprovecha el fallo, lo que ha sido interpretado en el sentido de que el
único legitimado para deducirla es la parte que logre el reconocimiento
de un derecho sustantivo. De modo que no toda resolución ni todo
pronunciamiento jurisdiccional genera el efecto excluyente de la cosa
juzgada, pues para ello es preciso que resuelva la controversia. En la
especie, la falta de singularización de la cuota reivindicada de que
adolece la demanda de reivindicación presentada en el juicio anterior y
que constituye el fundamento del rechazo de tal acción no permite tener
por configurado el requisito de la identidad legal de la cosa pedida,
puesto que la indeterminación antes mencionada impide establecerla
(considerandos 6º y 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 29/05/2018, Rol Nº 34430-2017,


Cita online: CL/JUR/2498/2018

4. Finalidad de la cosa juzgada. Improcedencia de cosa juzgada


respecto de un mismo procedimiento

La cosa juzgada se concibe como un estado jurídico producto de la


solución de un conflicto mediante la intervención de un tribunal y apunta
al efecto que producen algunas resoluciones judiciales que han entrado
a resolver sobre el fondo del objeto del proceso, en el sentido que lo
decidido en éstas resulta inmutable y obligatorio, y tiene por finalidad
que no vuelva a debatirse entre los interesados el asunto que ya ha sido
objeto de una decisión. Es así como debe tenerse presente que, el
sentido y efecto de cosa juzgada, importa producir la certeza de los
derechos, lo que impide un nuevo pronunciamiento sobre lo que fue
juzgado o, como ya lo ha asentado esta Corte en anteriores decisiones
sobre la materia, trae como consecuencia "el efecto de verdad jurídica
indiscutible e inamovible que producen las sentencias firmes o
ejecutoriadas". Tal efecto, de acuerdo al artículo 175 del Código de
Procedimiento Civil, es propio de las sentencias definitivas o
interlocutorias firmes, que producen la acción y la excepción de cosa
juzgada. A diferencia de lo pretendido por las recurrentes, que no cabe
concebir la institución que se analiza como configurada en el marco de
un mismo procedimiento, tanto porque el citado artículo 177 supone la
existencia de dos demandas, cuanto porque —de ser admisible la cosa
juzgada en un mismo juicio— resultaría innecesario exigir la triple
identidad a que alude la señalada norma, elemento que siempre y a
todo evento concurre entre dos resoluciones dictadas en un mismo
juicio, en la medida que afecte a los mismos intervinientes en el proceso.
De lo anterior se concluye que la excepción de cosa juzgada exige
entonces pluralidad de juicios, identidad de partes, causa de pedir y
objeto pedido (considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 26/11/2018, Rol Nº 8479-2018,


Cita online: CL/JUR/6557/2018

5. Sentencia definitiva firme recaída en el juicio ejecutivo produce la


acción y excepción de cosa juzgada

Por aplicación del artículo 175 del Código de Procedimiento Civil, la


sentencia definitiva firme recaída en el juicio ejecutivo produce la acción
y excepción de cosa juzgada. Esto significa que las situaciones jurídicas
discutidas en ese juicio no pueden ventilarse en otro, sea ordinario o
ejecutivo. Esta regla es repetida por el artículo 478 inciso 1º del mismo
Código, que indica: "La sentencia recaída en el juicio ejecutivo produce
cosa juzgada en el juicio ordinario, tanto respecto del ejecutante como
del ejecutado". Sin embargo, tal regla general contempla una excepción,
que consiste en que se permite tanto al ejecutante como al ejecutado
hacer reserva de sus acciones y excepciones en los casos y
oportunidades regulados en el mismo procedimiento ejecutivo. A este
respecto, ha de recordarse que la reserva es la institución que tiene
como fin evitar que la sentencia ejecutiva produzca cosa juzgada
respecto de determinadas acciones y excepciones, las que pueden
discutirse en un juicio declarativo (considerandos 10º y 11º de la
sentencia de casación).
Corte Suprema, 26/09/2018, Rol Nº 21889-2017,
Cita online: CL/JUR/5276/2018

6. Pronunciamiento invocado para fundar la cosa juzgada no es idóneo


y la resolución que lo plasma tampoco tiene la naturaleza jurídica para
producir tal efecto

Existen dos motivos para desestimar la alegación de cosa juzgada en


que se funda el recurso de casación en la forma. El primero, dice
relación con la naturaleza jurídica de la resolución que se invoca, esto
es, aquella que se pronunció sobre el recurso de reposición deducida
por la demandada tendiente a la declaración de inadmisibilidad de la
demanda, el que fue desestimado por no concurrir los presupuestos de
carácter exclusivamente formal que la ley contempla al respecto.
Pudiéndose considerarse una interlocutoria, en ningún caso se trata de
aquellas a que se refiere el artículo 175 del Código de Procedimiento
Civil, pues no declaró derecho alguno en favor de la actora, que esta
pudiera hacer valer en los términos que señala el artículo 176 del mismo
texto legal. La segunda de las razones para el rechazo dice relación con
lo que la juez a quo dejó establecido, que lo decidido respecto de la
admisibilidad no guarda relación con alegación que sustentó la
demandada relativa a la comparecencia de quien lo hace por Sernac
careciendo de su representación judicial, materia que no guarda
relación con los presupuestos a que se refiere el artículo 52 de la
Ley Nº 19.496, por lo que a este respecto no hizo pronunciamiento
alguno. En consecuencia, el pronunciamiento que se invoca para fundar
la cosa juzgada no es idóneo y la resolución que lo plasma tampoco
tiene la naturaleza jurídica para producir tal efecto, razón por la que el
sentenciador pudo emitir juicio sobre esta defensa de la demandada
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 8/03/2019, Rol Nº 2458-2018,


Cita online: CL/JUR/1166/2019

7. Procedencia de la cosa juzgada material en los juicios de precario

Debe desestimarse la alegación relativa a que en los juicios de


precario no tiene cabida la cosa juzgada material, por el carácter
concentrado del procedimiento sumario que no permitiría una acabada
discusión y prueba de la cuestión controvertida, desde que si bien en el
respectivo juicio se podrá debatir la concurrencia de los presupuestos
de la referida excepción, en principio, y salvo los casos en que existe
norma especial que hace procedente la cosa juzgada formal, en el juicio
sumario común las sentencias cobran eficacia de cosa juzgada material,
a lo que cabe agregar que en opinión de alguna doctrina, precisamente,
para paliar los riesgos que podría ocasionar un procedimiento de estas
características, la ley previó la posibilidad de la sustitución del
procedimiento, si existe motivo fundado para ello, lo que no se verificó
en la especie. Por otra parte, resulta claro que habiéndose fallado el
fondo de una controversia, sea por una cuestión de prueba, o por otra
razón jurídica, no puede renovarse la acción buscando allegar nuevos
argumentos, cambiar la interpretación jurídica o mejorar los elementos
de convicción, pues ello no altera la causa de pedir, y una tesis contraria
pugna con la finalidad de la cosa juzgada, cual es evitar que vuelva a
debatirse entre los interesados el asunto que ya ha sido objeto de una
decisión, privilegiando la certeza jurídica. Cosa distinta es que el órgano
jurisdiccional no hubiera entrado a resolver sobre el fondo del asunto,
por faltar algún presupuesto procesal, hipótesis en que efectivamente
no se produce el efecto de la cosa juzgada, cuyo no es el caso de autos
(considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 13/05/2019, Rol Nº 31875-2018,


Cita online: CL/JUR/2561/2019

ARTÍCULO 176 (199)

Corresponde la acción de cosa juzgada a aquel a cuyo favor se ha


declarado un derecho en el juicio, para el cumplimiento de lo resuelto o para
la ejecución del fallo en la forma prevenida por el Título XIX de este Libro.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 22, 23, 24, 158, 174, 178, 179, 181,
231 a 251, 267, 434, 478, 563, 576, 595, 615, 752 y 821. Constitución Política: artículo 73.
Código Civil: artículo 2460. Código Orgánico de Tribunales: artículos 1º, 11, 113 y 114.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Condenados mediante sentencia firme al pago de las costas de la


causa, cuyo cobro ejecutivo pretende el actor, quedaba vedado a los
jueces del grado modificar, a través de una excepción de aquellas
previstas en el artículo 464 del Código de Procedimiento Civil, una
sentencia interlocutoria que se encontraba firme y produciendo todos
sus efectos jurídicos

El artículo 174 del citado estatuto jurídico permite distinguir el


momento en que se produce la firmeza de la resolución: 1.- Si contra la
resolución no procede recurso procesal alguno, queda firme desde su
notificación legal a las partes; 2.- Si proceden recursos y éstos se han
deducido o interpuesto, la resolución queda firme desde que concluidos
dichos recursos, se notifica el decreto que la manda cumplir; 3.- Si no
se han interpuesto recursos procesales, la resolución queda firme desde
que los plazos para deducirlos han transcurrido sin hacerse valer. En
este último caso, tratándose de sentencias definitivas, certificará el
hecho el secretario del tribunal y dicha sentencia se considerará firme
desde este momento, sin más trámite. La sentencia firme, bien definitiva
o interlocutoria constituye un título ejecutivo en los términos del
artículo 434 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil y ello porque de esa
manera se hace efectiva la acción de cosa juzgada, pero dicha
autoridad sólo le corresponde, según el artículo 176 del Código aludido,
a aquel en cuyo favor se ha declarado un derecho en el juicio, para el
cumplimiento de lo resuelto o para la ejecución del fallo en la forma
prevenida por el Título XIX del Libro I del mismo cuerpo de leyes, de lo
cual se sigue, que debe tratarse de una sentencia que haya declarado
un derecho que antes del juicio no estuviera reconocido o constituido.
Que es un hecho pacífico y por ende incontrovertido, que la causa
RIT 013-2007, en la que se condenó a los intervinientes (Ministerio
Público y Banco de Chile) al pago de las costas de la causa se
encuentra firme o ejecutoriada en los términos previstos en el
artículo 174 del Código de Procedimiento Civil. Asimismo, desde que el
fallo adquiere la calidad de firme es exigible el cumplimiento de la
obligación que en él se contiene. Luego, el concepto de firmeza de una
resolución judicial se vincula con su irrevisibilidad por medio de recursos
judiciales y puede definirse como "La situación jurídica en que ella se
encuentra por el agotamiento de los recursos procesales procedentes
en su contra, la que la hace estable o inmodificable como acto procesal"
(La cosa juzgada en el proceso civil. Hugo Pereira Anabalón, Editorial
Jurídica ConoSur, pág. 61). Que el artículo 176 del Código de
Procedimiento Civil expresa: "Corresponde la acción de cosa juzgada a
aquel a cuyo favor se ha declarado un derecho en el juicio, para el
cumplimiento de lo resuelto o para la ejecución del fallo en la forma
prevenida en el Título XIX de este Libro". Dicha acción es la que
precisamente ha intentado el actor a través de la demanda ejecutiva.
Que de acuerdo con los reflexiones vertidas en los razonamientos que
precede, aparece de manera patente que les estaba vedado a los
jueces del grado modificar, a través de una excepción de aquellas
previstas en los numerales que establece el artículo 464 del Código de
Procedimiento Civil, una sentencia interlocutoria que se encontraba
firme y produciendo todos sus efectos jurídicos, de la cual emanan los
efectos propios de una resolución ejecutoriada entre otros su
inmutabilidad e irrevisibilidad, incurriendo de ese modo en infracción a
los artículos 174, 175 y 176 del Código de Procedimiento Civil, por
errónea interpretación y aplicación de dichas disposiciones legales,
transgresiones que influyeron sustancialmente en lo dispositivo del fallo
al acogerse una excepción que debió ser rechazada, debiendo
continuarse, subsiguientemente, la ejecución seguida en contra del
Banco (...) (considerandos 10º a 14º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 14/01/2010, Rol Nº 7663-2008,


Cita online: CL/JUR/435/2010

2. Elementos de la cosa juzgada

La institución de la cosa juzgada se encuentra prevista en los


artículos 175 y siguientes del Código ya indicado. Esa norma dispone
que "Las sentencias definitivas o interlocutorias firmes producen la
acción o la excepción de cosa juzgada". El artículo 176 se ocupa de la
acción de cosa juzgada y, el artículo 177, a la misma institución, ahora
como excepción. Establece que ella puede alegarse "por el litigante que
haya obtenido en el juicio y por todos aquellos a quienes según la ley
aproveche el fallo, siempre que entre la nueva demanda y la
anteriormente resuelta haya: 1º Identidad legal de personas; 2º
Identidad de la cosa pedida; y 3º Identidad de la causa de pedir. El
inciso final aclara que se entiende por causa de pedir el fundamento
inmediato del derecho deducido en juicio (considerando 3º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 29/04/2004, Rol Nº 360-2003,


Cita online: CL/JUR/680/2004
ARTÍCULO 177 (200)

La excepción de cosa juzgada puede alegarse por el litigante que haya


obtenido en el juicio y por todos aquellos a quienes según la ley aprovecha el
fallo, siempre que entre la nueva demanda y la anteriormente resuelta haya:

1º Identidad legal de personas;

2º Identidad de la cosa pedida; y

3º Identidad de la causa de pedir.

Se entiende por causa de pedir el fundamento inmediato del derecho


deducido en juicio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 22, 23, 24, 158, 174, 178, 179, 181,
304, 309, 310, 478, 563, 564, 576, 615, 768 y 821. Ley Nº 10.336, sobre Organización y
Atribuciones de Contraloría General de la República: artículo 127.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Excepción de cosa juzgada, concepto y elementos

La excepción perentoria de cosa juzgada se establece por la ley como


defensa de los litigantes, a fin de no ser llevados a un nuevo juicio en
que se ha discutido entre las mismas personas una idéntica cuestión
jurídica, sobre supuestos fácticos similares, y es precisamente un efecto
de las sentencias ejecutoriadas destinado a evitar la repetición de
iguales controversias y también a otorgarle un carácter inmutable a las
decisiones jurisdiccionales, para lograr una efectiva seguridad jurídica
que permitirá en definitiva un grado de certeza que asegure, en un
Estado de Derecho, la tranquilidad social. Para que este enunciado
opere es necesario que se cumplan, en el caso alegado, los requisitos
que establece el artículo 177 del Código de Procedimiento Civil, en
cuanto estatuye que este instituto podrá alegarse por el litigante que
haya obtenido en el juicio, siempre que entre la nueva demanda y la
anteriormente resuelta haya: "l.- Identidad de personas; 2.- Identidad de
cosa pedida; y 3.- Identidad de causa de pedir." La identidad legal de
personas significa que en ambos pleitos, el pretérito y el actual, deben
figurar las mismas partes; la cosa pedida está referida al beneficio
inmediato que se reclama y al cual se pretende tener derecho; a su vez,
la causa de pedir se define por la propia ley como el fundamento
inmediato del derecho deducido en el juicio.

Corte Suprema, 2/10/2019, Rol Nº 2/10/2019,


Cita online: CL/JUR/5376/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 24/10/2018, Rol Nº 39834-2017,

Cita online: CL/JUR/6077/2018

— Corte Suprema, 6/09/2018, Rol Nº 2582-2018,

Cita online: CL/JUR/5397/2018

— Corte Suprema, 19/03/2018, Rol Nº 30224-2017,

Cita online: CL/JUR/1315/2018

2. Cosa juzgada, concepto y finalidad

El Máximo Tribunal ha señalado que la excepción de cosa juzgada es


el efecto que originan las sentencias definitivas o interlocutorias firmes,
conforme al cual no es posible volver a discutir ni intentar que se adopte
una nueva decisión entre las mismas partes y respecto de igual materia
que fue objeto de la sentencia anterior; y para que se configure debe
concurrir la triple identidad de persona, de objeto y de causa de pedir
entre la nueva demanda y la anteriormente resuelta, según lo señala el
artículo 177 del Código de Procedimiento Civil. La finalidad de la
institución de que se trata, en cuanto atributo de ciertas resoluciones
judiciales, es conferir certeza a los derechos que han sido adjudicados
por el órgano jurisdiccional y, así, permitir su ejecución, por ende, su
fundamento se vincula a la idea de impedir que se adopte una decisión
acerca de un asunto que ya fue resuelto. En razón de lo anterior, se
instauró el criterio de la triple identidad con la finalidad de determinar,
precisamente, a través del cotejo de las sentencias que se afirma que
son contradictorias, si concurre en la más reciente, en cuyo caso, se
debe concluir que vulneró la cosa juzgada. Tratándose del límite
objetivo de la cosa juzgada dado por la identidad de la cosa pedida y de
la causa de pedir, opera cuando el segundo proceso tiene un objeto
idéntico al primero, y se produce normalmente en la parte resolutiva de
la sentencia que lo decidió y, conforme ese aspecto, se debe enfatizar
que el análisis comparativo se debe efectuar entre lo que se resolvió en
una sentencia anterior y lo reclamado en el posterior, "en rigor, no es
una identidad entre demandas, sino entre una sentencia anterior —que
ya juzgó el tema— y una nueva acción, deducida en una demanda que
pretende plantear el mismo objeto procesal" —Alejandro Romero—. En
consecuencia, el alcance de la cosa juzgada que se produce por medio
de una sentencia definitiva, no puede ser el misma que se produce
cuando el juicio termina por una salida alternativa al proceso, como lo
es el desistimiento de la demanda (considerandos 6º a 8º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 27/05/2019, Rol Nº 33793-2017,


Cita online: CL/JUR/3351/2019

3. Triple Identidad

El artículo 177 del Código Civil señala "La excepción de cosa juzgada
puede alegarse por el litigante que haya obtenido en el juicio y por todos
aquellos a quienes según la ley aprovecha el fallo, siempre que entre la
nueva demanda y la anteriormente resuelta haya: 1º Identidad legal de
personas; 2º Identidad de la cosa pedida; y 3º Identidad de la causa de
pedir". Siguiendo a la doctrina especializada, para determinar cuándo
una resolución tiene el mérito de impedir la renovación del debate sobre
un tema en el que ya existe cosa juzgada, nuestro Código siguió la
doctrina de las tres identidades, por influencia de la doctrina francesa,
lo que implica que ésta se configurará sólo cuando coincidan todos sus
componentes, esto es, los mismos sujetos, causa de pedir y cosa
pedida, ya que como ha dicho el Máximo Tribunal, basta la ausencia de
uno solo de ellos para que la excepción de cosa juzgada carezca de
fuerza legal —Alejandro— (considerandos 4º y 5º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 30/05/2018, Rol Nº 99942-2016,


Cita online: CL/JUR/2552/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 19/06/2020, Rol Nº 15533-2018,


Cita online: CL/JUR/41976/2020

— Corte Suprema, 30/11/2018, Rol Nº 43646-2017,

Cita online: CL/JUR/6679/2018

— Corte Suprema, 27/09/2018, Rol Nº 35796-2017,

Cita online: CL/JUR/5326/2018

4. El principio ne bis in idem

Conforme lo previene el artículo 177 del Código de Procedimiento


Civil, la excepción de cosa juzgada puede alegarse por el litigante que
haya obtenido en el juicio, siempre que entre la nueva demanda y la
anteriormente resuelta haya identidad legal de persona, identidad de la
cosa pedida e identidad de la causa de pedir, lo que en doctrina se
denomina la "triple identidad de la cosa juzgada". La jurisprudencia, ha
señalado que "la cosa juzgada como institución jurídica se vincula a la
idea de evitar un pronunciamiento sobre un asunto ya resuelto (ne bis
in ídem), y para decidir si se ha infringido, será menester hacer una
confrontación o comparación entre dos sentencias, de suerte de
determinar si la más nueva se adecúa en la triple identidad que la ley
exige con la antigua: si hay tal adecuación, sin duda el segundo fallo ha
vulnerado la res iudicata que emana de la primera resolución"
(considerando 3º del recurso de casación en la forma la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 19/03/2018, Rol Nº 30224-2017, Cita online:


CL/JUR/1315/2018

5. Distinción doctrinaria entre cosa juzgada material y cosa juzgada


formal

En la especie, se distingue doctrinariamente entre los conceptos de


cosa juzgada "material" y cosa juzgada "formal". La primera autoriza a
cumplir lo que se resuelva en una resolución judicial e impide renovar la
discusión sobre la cuestión resuelta, en el mismo proceso o en un juicio
posterior. La segunda, en tanto, autoriza cumplir lo resuelto de manera
provisional e impide renovar la discusión sobre la misma materia ya
resuelta en el mismo proceso, pero permite discutir el asunto en un
nuevo juicio. La regla general es que las resoluciones judiciales
producen cosa juzgada material, pero excepcionalmente, algunas sólo
producen cosa juzgada formal. En el caso sub iúdice, la decisión acerca
de la legalidad de la Resolución Exenta, dictada por la I. Municipalidad,
en sede de reclamación municipal produce efecto de cosa juzgada en
la causa en estudio, en que se ataca el mismo acto. En consecuencia,
se cumplen los requisitos de la triple identidad, muy especialmente en
relación con los vicios de legalidad que se esgrimen en una y otra
acción. Así las cosas, produciendo efecto de cosa juzgada sustancial,
con un efecto vinculante para los futuros jueces, la sentencia de esta
Corte de 22.08.2016 —fallo que se ha hecho indiscutible e inmutable—
, no es posible, por vía de protección, discutir nuevamente aquello que
ya ha sido resuelto (considerandos 11º a 13º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 22/06/2018, Rol Nº 1001-2017,

Cita online: CL/JUR/3112/2018

6. Causa de pedir

La causa de pedir que, con fidelidad a la regla interpretativa del


artículo 20 del Código Civil, ha de ser asimilada como el fundamento
inmediato del derecho deducido del artículo 177 inciso final del código
adjetivo viene siendo la razón de ser del ejercicio de la acción
jurisdiccional, aquel trasunto del interés que hizo que la inquietud de que
se rodeaba el conflicto emergente, se trocara en el animus de pretender
jurisdiccionalmente, ora la reparación ora el saneamiento ora la
declaración ora la constitución ora la condena, según la naturaleza del
asunto.

Corte Suprema, 28/02/2018, Rol Nº 25142-2017,


Cita online: CL/JUR/957/2018

7. Cosa juzgada puede ser invocada por el litigante que obtuvo en el


juicio y por aquellos terceros a quienes aprovecha la sentencia

El artículo 177 del Código de Procedimiento Civil, prescribe que la


excepción de cosa juzgada puede ser invocada por el litigante que
obtuvo en el juicio y por aquellos terceros a quienes según la ley
aprovecha la sentencia. La sentencia que se impugna dejó establecido
que la demanda del juicio anterior, fue acogida sólo parcialmente, por
tanto, no es efectivo, como sostiene el recurrente, que el demandado
nada haya obtenido en dicho proceso. Ahora bien, resulta pertinente,
reiterar que el quid de la excepción de cosa juzgada, es impedir un
nuevo pronunciamiento sobre materias respecto de las cuales ha
recaído ya una decisión, de allí que pueda ser alegada, no sólo por la
parte que ganó en el juicio anterior, sino también, por la que perdió, pues
a ella aprovechara la decisión, en la medida que no sea juzgada y
condenada, nuevamente, por los mismos hechos puesto que aquello
afectaría el debido proceso en su más amplia concepción y los
principios de certeza jurídica y economía procesal (considerando 9º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 12/08/2019, Rol Nº 16322-2019,


Cita online: CL/JUR/4623/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 20/04/2020, Rol Nº 20346-2018,

Cita online: CL/JUR/23047/2020

8. Procedencia de cosa juzgada en casos de litis pendencia por


conexidad

El fallo recurrido decidió acoger la excepción de litis pendencia, al


concluir que concurren los requisitos exigidos para su procedencia, a
saber: a) que exista juicio pendiente; b) identidad legal de personas;
c) identidad de objeto pedido; d) identidad de causa de pedir. En este
último requisito los jueces refieren que de la lectura de la demanda
reconvencional y la demanda interpuesta, se obtiene que los
fundamentos de hecho de ambas son los mismos, fundados en los
supuestos incumplimientos por parte de la Municipalidad respecto del
contrato. Acerca de la litis pendencia, la jurisprudencia ha señalado que
ella "tiene lugar cuando se promueve ante un tribunal el mismo negocio
ya ventilado ante él u otro y, por consiguiente, supone que hay identidad
de partes, de objeto y de causa de pedir entre la primera y la segunda
demanda; y su propósito es el de evitar que se dicten fallos
contradictorios o incompatibles en desmedro de la buena administración
de justicia, como el prevenir y resguardar la autoridad de la cosa
juzgada" (R.D.J., T. 78, sec. 2a, pág. 184.). Sus requisitos son, por
consiguiente, la existencia de dos pleitos en coetánea tramitación —aun
cuando sus respectivos estadios procesales no sean coincidentes— y,
además, los mismos presupuestos que nutren el instituto de la cosa
juzgada: identidad legal de partes, de objeto pedido y causa de pedir.
Incluso, en doctrina se suma a la anterior la denominada litis pendencia
por conexidad, asociada al caso en que, pese a no concurrir la referida
triple identidad, existe entre los juicios una relación tal que, siguiendo
los términos reglados en el número 3 del artículo 92 del Código de
Procedimiento Civil como hipótesis normativa del incidente de
acumulación de autos, el fallo que se pronuncie en uno deba producir la
excepción de cosa juzgada en otro (considerandos 3º y 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 13/03/2018, Rol Nº 39765-2017,


Cita online: CL/JUR/1447/2018

9. Inexistencia de triple identidad

La institución de la cosa juzgada se concibe como un estado jurídico


producto de la solución de un conflicto mediante la intervención de un
tribunal y apunta al efecto que producen algunas resoluciones judiciales
que han entrado a resolver sobre el fondo del objeto del proceso, en el
sentido que lo decidido en éstas resulta inmutable y obligatorio, teniendo
por finalidad que no vuelva a debatirse entre los interesados el asunto
que ya ha sido objeto de una decisión. La propia naturaleza de la cosa
juzgada pasa por una oposición entre una situación jurídica ya definida
por una sentencia judicial firme y la expectativa que en una instancia
jurisdiccional ulterior pueda zanjarse idéntica situación en sentido
contrario. Pues bien, en este caso no existe la triple identidad requerida
por la doctrina. Efectivamente, no se configura la identidad legal de
causa de pedir, ya que en la tercería de prelación y pago lo ejercido son
dos acciones diferentes por las que, por una parte, se invoca una
relación jurídica anterior de la que emana un derecho de crédito y, por
la otra, la existencia de una norma que otorga preferencia al tercerista
para ser pagado con antelación al ejecutante y a otros acreedores no
privilegiados o, en la de pago, a prorrata con el primero. Por el contrario,
la presente acción encuentra su causa petendi exclusivamente en el
derecho personal del acreedor para exigir del deudor el pago de su
acreencia. Surge, entonces, que no concurre uno de los requisitos
basales de la cosa juzgada, como lo es la identidad de causa de pedir,
entendida como el fundamento inmediato del derecho deducido en juicio
(considerando 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/04/2018, Rol Nº 2694-2018,


Cita online: CL/JUR/1535/2018

10. Desistimiento de la acción ejecutiva aceptado por el tribunal de la


causa, produce el efecto de cosa juzgada material

Cabe expresar que el desistimiento de la acción ejecutiva —


contrariamente a lo sostenido por la apelante—, aceptado por el tribunal
de la causa, produce el efecto de cosa juzgada material o substancial,
tanto en un juicio ejecutivo como declarativo posteriores. En efecto, la
única forma que tiene el ejecutante de impedir que se produzca tal
efecto, propio de las sentencias judiciales firmes, es que haga reserva
de acciones conforme a los arts. 467 y 478 del Código de Procedimiento
Civil, siempre que se reúnan los presupuestos que dichas disposiciones
consagran. Sin embargo, en el caso que nos ocupa la reserva de
acciones se hizo en términos generales, esto es, con arreglo al art. 148
del citado código, como lo entendió el tribunal a quo al declararlo, y lo
dijo expresamente este Tribunal de Alzada, quien confirmó la resolución
anterior, con declaración que no procede la reserva de acciones
formulada por el ejecutante. En consecuencia, no cabe sino concluir que
—tal como se razonó por el sentenciador de primer grado— en el
presente caso concurre la triple identidad del art. 177 del Código
Procesal del Ramo entre la demanda interpuesta en el referido juicio
ejecutivo y la deducida en esta causa; de tal modo que la sentencia
interlocutoria que tuvo por desistido al ejecutante (y actual demandante)
de la demanda ejecutiva, en los términos del art. 148 antes citado, y sin
hacerse reserva alguna conforme a las disposiciones ya citadas del
procedimiento ejecutivo, al encontrarse firme o ejecutoriada, produjo el
efecto que prevé del art. 175 del mencionado estatuto procesal, esto es,
la excepción de cosa juzgada, que fue alegada por el demandado
oportunamente en el juicio (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 5/06/2019, Rol Nº 1032-2018,

Cita online: CL/JUR/3595/2019

11. Cosa pedida


Por su parte la cosa pedida estriba en el beneficio jurídico que se
reclama en el juicio. Al respecto se ha dicho que: "existe identidad de la
cosa pedida, cuando el beneficio jurídico que se reclama en el nuevo
juicio es el mismo que se demandó en el juicio anterior". —Carlos
Alberto Stoehrel Maes—. (considerando 3º).

Corte Suprema, 24/10/2018, Rol Nº 39834-2017,


Cita online: CL/JUR/6077/2018

12. Identidad legal de la persona se cumple cuando existe la misma


calidad jurídica entre los sujetos que intervienen en ambos procesos

En lo que respecta a la identidad legal de persona, ésta se cumple


cuando existe la misma calidad jurídica entre los sujetos que intervienen
en ambos procesos, aun cuando cambien de rol; la exigencia es de
identidad jurídica, no física. Tradicionalmente se ha entendido que
tienen la calidad de parte, los sujetos de la relación jurídico-procesal,
esto es, demandante y demandado, y también aquellos que intervienen
voluntariamente en un proceso; cabe agregar, sin embargo, que se ha
aceptado que también pueden alegar esta identidad jurídica quienes, si
bien técnicamente no son partes, tienen algún grado de vinculación con
el que sí lo fue (considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 19/06/2020, Rol Nº 15533-2018,


Cita online: CL/JUR/41976/2020

13. Límite objetivo de la cosa juzgada

El límite objetivo de la cosa juzgada, a su turno, está dado por la


identidad de la cosa pedida y de la causa de pedir exigida por —el
artículo 177 del Código de Procedimiento Civil—, y significa que opera
cuando el segundo proceso tiene un objeto idéntico al primero. Debe
tenerse presente que la identidad objetiva se produce normalmente en
la parte resolutiva de la sentencia, es decir, en aquella que decide el
objeto del proceso y, desde esa perspectiva, interesa destacar que el
análisis comparativo se debe realizar entre lo resuelto en una sentencia
anterior y la nueva acción deducida en un proceso posterior; "en rigor,
no es una identidad entre demandas, sino entre una sentencia anterior
—que ya juzgó el tema— y una nueva acción, deducida en una
demanda que pretende plantear el mismo objeto procesal"
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 19/06/2020, Rol Nº 15533-2018,
Cita online: CL/JUR/41976/2020

ARTÍCULO 178 (201)

En los juicios civiles podrán hacerse valer las sentencias dictadas en un


proceso criminal siempre que condenen al procesado.69

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 167.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Por regla general las sentencias penales absolutorias no producen


efecto de cosa juzgada en materia civil

Sobre el efecto de las sentencias criminales en materia civil, nuestro


Código de Procedimiento Civil efectúa claramente dos distinciones, ya
que, por una parte, el artículo 178 del citado texto legal dispone que las
sentencias condenatorias en materia criminal producirán efecto de cosa
juzgada en los juicios civiles, lo que es natural por cuanto no puede el
juez en un proceso de tal carácter señalar que determinada conducta
no es ilícita si se ha declarado que ella constituye un delito penal; en
consecuencia, en este caso, la actividad estará encaminada a
determinar en el juicio civil si concurre el resto de los elementos de la
responsabilidad extracontractual, especialmente el relacionado con la
prueba del daño, puesto que no se puede olvidar que desde la
perspectiva penal no se necesita su existencia para configurar la
conducta típica. De otro lado, la norma dada por el legislador para
determinar el efecto de las sentencias criminales absolutorias en
materia civil es diametralmente distinta, puesto que según se desprende
del artículo 179 del mismo cuerpo normativo, la regla general es que las
sentencias penales absolutorias no producirán efecto de cosa juzgada
en materia civil y sólo por excepción tendrán el mencionado efecto
cuando se esté en presencia de las circunstancias específicas que la
norma contempla, la que por su carácter excepcional debe ser
interpretada restrictivamente (considerando 4º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 29/01/2018, Rol Nº 19182-2017,


Cita online: CL/JUR/457/2018
2. Efecto de cosa juzgada de la sentencia condenatoria penal en materia
civil

El fallo fue explícito en cuanto a sostener su conclusión reparatoria en


los antecedentes reunidos en el juicio penal donde fue condenado el
demandado, conforme a lo dispuesto en el artículo 178 del Código de
Procedimiento Civil, decisión que produce plenos efectos en materia
civil, destacándose el carácter lesivo de la acción reprochada y las
consecuencias sufridas por el afectado, como asimismo, su autoría, la
relación de causalidad y antijuridicidad, en particular, la pérdida y
movilidad de piezas dentales, reparación ósea y afección personal
sobreviniente tras ser víctima de un delito violento; resultando coherente
el fallo impugnado con lo dispuesto en la norma citada, en cuanto a que
la existencia material del hecho que motivó la condena y que sirve de
fundamento a la pretensión civil, constituye una circunstancia de juicio
que no puede ponerse en duda, deviniendo obligatorio respetar lo
resuelto en sede penal, tanto en sus aspectos de hecho como de
derecho. Lo opuesto, implicaría desconocer los efectos de la cosa
juzgada de una sentencia criminal ejecutoriada en materia civil. Por lo
anterior, no se advierte vulneración alguna a las normas reguladoras de
la prueba que sostiene el demandado, que aparece más bien, como
expresión de disconformidad con el resultado del proceso de
ponderación y determinación de la cuantía del lucro cesante y del daño
moral al que fue condenado, que encuentra sustento en la sentencia
dictada en un juicio penal, ya ejecutoriada, aspecto que no es
susceptible de ser controlado por medio del recurso de casación en el
fondo (considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/06/2019, Rol Nº 5227-2017,


Cita online: CL/JUR/3097/2019

ARTÍCULO 179 (202)

Las sentencias que absuelvan de la acusación o que ordenen el


sobreseimiento definitivo, sólo producirán cosa juzgada en materia civil,
cuando se funden en alguna de las circunstancias siguientes:

1ª La no existencia del delito o cuasidelito que ha sido materia del proceso.


No se entenderán comprendidos en este número los casos en que la
absolución o sobreseimiento provengan de la existencia de circunstancias
que eximan de responsabilidad criminal;

2ª No existir relación alguna entre el hecho que se persigue y la persona


acusada, sin perjuicio de la responsabilidad civil que pueda afectarle por
actos de terceros, o por daños que resulten de accidentes, en conformidad a
lo establecido en el Título XXXV, Libro IV, del Código Civil; y

3ª No existir en autos indicio alguno en contra del acusado, no pudiendo en


tal caso alegarse la cosa juzgada sino respecto de las personas que hayan
intervenido en el proceso criminal.70

Las sentencias absolutorias o de sobreseimiento en materia criminal


relativas a los tutores, curadores, albaceas, síndicos, depositarios, tesoreros
y demás personas que hayan recibido valores u objetos muebles por un título
de que nazca obligación de devolverlos, no producirán en ningún caso cosa
juzgada en materia civil.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículo s 167, 177 y 180. Código Procesal
Penal: art ículo 67.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Por regla general las sentencias penales absolutorias no producen


efecto de cosa juzgada en materia civil

Sobre el efecto de las sentencias criminales en materia civil,


nuestro Código de Procedimiento Civil efectúa claramente dos
distinciones, ya que, por una parte, el artículo 178 del citado texto legal
dispone que las sentencias condenatorias en materia criminal
producirán efecto de cosa juzgada en los juicios civiles, lo que es natural
por cuanto no puede el juez en un proceso de tal carácter señalar que
determinada conducta no es ilícita si se ha declarado que ella constituye
un delito penal; en consecuencia, en este caso, la actividad estará
encaminada a determinar en el juicio civil si concurre el resto de los
elementos de la responsabilidad extracontractual, especialmente el
relacionado con la prueba del daño, puesto que no se puede olvidar que
desde la perspectiva penal no se necesita su existencia para configurar
la conducta típica. De otro lado, la norma dada por el legislador para
determinar el efecto de las sentencias criminales absolutorias en
materia civil es diametralmente distinta, puesto que según se desprende
del artículo 179 del mismo cuerpo normativo, la regla general es que las
sentencias penales absolutorias no producirán efecto de cosa juzgada
en materia civil y sólo por excepción tendrán el mencionado efecto
cuando se esté en presencia de las circunstancias específicas que la
norma contempla, la que por su carácter excepcional debe ser
interpretada restrictivamente (considerando 4º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 29/01/2018, Rol Nº 19182-2017,


Cita online: CL/JUR/457/2018

2. Interpretaciones del artículo 179 Nº 1 del Código de Procedimiento


Civil

Existen dos formas de entender el numerando primero del


artículo 179 del Código de Procedimiento Civil. La primera consiste en
entender que habrá efecto de cosa juzgada en el evento que el juez
penal haya sobreseído la causa por no haberse verificado los hechos
que se pretende constituyen un delito. Esto quiere decir que la situación
fáctica que se pretende calificar como un ilícito penal no existió o lo que
es lo mismo no se verificó en la realidad. En cambio, la segunda
interpretación, se conforma con que los hechos que se esgrimen en la
querella no son constitutivos de delito, sin que haya un descarte de los
hechos, sino que el sobreseimiento o sentencia absolutoria sólo se
afinca en la ausencia del tipo penal aplicable a los hechos. Resulta que
la primera interpretación es la adecuada, pues satisface la función ya
planteada que permite evitar sentencias contradictorias, al impedir que
el juez civil pueda conocer de un litigio que se base en hechos que para
el juez penal no existieron; en cambio, la segunda interpretación no
logra este objetivo, en razón que bien puede ocurrir que un juez penal
descarte la existencia del delito y, sin embargo, los hechos en que se
basó la querella sí originen responsabilidad de índole civil u otras
consecuencias en el ámbito del derecho privado (considerando 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 8/03/2016, Rol Nº 787-2016,


Cita online: CL/JUR/1525/2016

3. Sobreseimiento definitivo produce cosa juzgada en materia civil


cuando se funda en la no existencia del delito o cuasidelito que ha
sido materia del proceso
Respecto de la conculcación al artículo 179 Nº 1 del Código de
Procedimiento Civil, cabe tener presente que dispone que el
sobreseimiento definitivo produce cosa juzgada en materia civil cuando
se funde, en "La no existencia del delito o cuasidelito que ha sido
materia del proceso", destacando los jueces al rechazar la excepción
que, en el caso, la resolución dictada en sede penal no da cuenta que
se haya establecido fehacientemente que los hechos investigados no
existieran, por lo que no se configuraba el presupuesto exigido por la
legislación. En efecto, el acta de audiencia respectiva refleja que la
decisión tuvo en consideración la calidad de poseedores inscritos tanto
de la víctima como de la imputada, circunstancia que excluiría el dolo
de apoderarse de un bien raíz, pero, en caso alguno descarta la
ocurrencia de la situación denunciada, lo que permite concluir la
correcta aplicación de la norma cuya infracción acusó la recurrente
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/07/2018, Rol Nº 44576-2017,


Cita online: CL/JUR/4042/2018

4. Sentencias que sobreseen definitivamente en materia penal sólo


producen cosa juzgada en materia civil en casos calificados y
excepcionales

En cuanto a la excepción de cosa juzgada, el apelante ha alegado


que se configuraría el supuesto del artículo 179 Nº 1 del Código de
Procedimiento Civil —"la no existencia del delito o cuasidelito que ha
sido materia del proceso"—, ya que la investigación criminal por los
hechos objeto de la presente acción terminó por la dictación de un
sobreseimiento definitivo por la causal del artículo 250 letra a) del
Código Procesal Penal, esto es, cuando el hecho investigado no fuere
constitutivo de delito. Pues bien, conforme a los términos de la demanda
del actor, aparece que lo reprochado al demandado no es la
responsabilidad civil originada por la comisión de un delito penal, sino
que el incumplimiento de su obligación como arrendador de mantener
la cosa arrendada en estado de servir, aspecto no cubierto por la
resolución que decretó el sobreseimiento definitivo. Por lo demás, bien
sabemos que la exclusión de responsabilidad penal no implica
automática y directamente la desestimación de la responsabilidad civil,
máxime si el delito investigado en sede criminal no constituye la
imputación directa ni la causa de pedir del presente juicio. Así las cosas,
se comparte la decisión de la juez a quo de rechazarla, ya que, conforme
al artículo 179 del Código de Procedimiento Civil, las sentencias que
sobreseen definitivamente en materia penal sólo producen cosa
juzgada en materia civil en casos calificados y excepcionales, que no se
vislumbran en la especie (considerando 5º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 4/02/2020, Rol Nº 1446-2019,

Cita online: CL/JUR/10019/2020

ARTÍCULO 180 (203)

Siempre que la sentencia criminal produzca cosa juzgada en juicio civil, no


será lícito en éste tomar en consideración pruebas o alegaciones
incompatibles con lo resuelto en dicha sentencia o con los hechos que le
sirvan de necesario fundamento.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 167, 177, 178 y 179.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cosa juzgada penal en juicios civiles

El carácter de instrumento público de la sentencia penal, según lo


prevenido en el artículo 342 Nºs. 2 y 3 del Código de Procedimiento
Civil, y lo dispuesto en los artículos 178 y 180 del mismo cuerpo legal,
en cuanto a la cosa juzgada penal en juicios civiles, permite dar por
suficientemente acreditada la veracidad de los hechos que han servido
de fundamento a la condena impuesta al funcionario de la Municipalidad
de Talcahuano, y por tanto es inadmisible en este proceso prueba o
alegaciones incompatibles con lo resuelto en tal sentencia y con los
hechos que le sirven de fundamento. Si bien el actuar del agente se
encuadra dentro de lo que se denomina falta personal, la Corte de
Apelaciones siguiendo la jurisprudencia de la Excma. Corte Suprema y
atendido el contexto en que se ha realizado, entiende que este actuar
compromete la responsabilidad del órgano estatal puesto que la falta no
se encuentra desvinculada de la función al ejecutarse en el ejercicio del
cargo público o con ocasión del mismo (considerandos 6º y 7º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).
Corte Suprema, 7/12/2018, Rol Nº 213-2018,
Cita online: CL/JUR/6882/2018

2. Efectos de la sentencia penal que produce cosa juzgada en materia


civil

De la correlación armoniosa de los artículos 178 y 180 del Código de


Procedimiento Civil aparece que las sentencias condenatorias firmes en
materia penal producen cosa juzgada en materia civil, de manera que
siempre que una persona sea condenada en el juicio criminal, puede
invocarse esa sentencia en el juicio civil, sin que sea necesario acreditar
la existencia del hecho constitutivo del delito ni la culpabilidad del
condenado. Por su parte la doctrina ha expresado que no es lícito al
juez en lo civil tomar en consideración pruebas o alegaciones tendientes
a acreditar la no existencia del delito o la inculpabilidad del condenado
(Carlos Alberto Stoehrel M., De las Disposiciones Comunes a todo
Procedimiento. Editorial Jurídica de Chile. Página 136). Tampoco podrá
cuestionar la existencia del hecho típico ni la culpabilidad del condenado
el tercero civilmente responsable que no intervino en el proceso penal
(considerandos 6º y 8º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Chillán, 10/06/2016, Rol Nº 289-2015,

Cita online: CL/JUR/3889/2016

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 4/01/2012, Rol Nº 5666-2009,

Cita online: CL/JUR/4145/2012

— Corte Suprema, 29/12/2011, Rol Nº 6514-2009,

Cita online: CL/JUR/10354/2011

— Corte de Apelaciones de Concepción, 15/04/2011, Rol Nº 1495-


2010,

Cita online: CL/JUR/3279/2011

— Corte Suprema, 3/10/2007, Rol Nº 5009-2007,


Cita online: CL/JUR/5198/2007

ARTÍCULO 181 (204)

Los autos y decretos firmes se ejecutarán y mantendrán desde que


adquieran este carácter, sin perjuicio de la facultad del tribunal que los haya
pronunciado para modificarlos o dejarlos sin efecto, si se hacen valer nuevos
antecedentes que así lo exijan.

Aun sin estos antecedentes, podrá pedirse, ante el tribunal que dictó el auto
o decreto, su reposición, dentro de cinco días fatales después de notificado.
El tribunal se pronunciará de plano y la resolución que niegue lugar a esta
solicitud será inapelable; sin perjuicio de la apelación del fallo reclamado, si
es procedente el recurso.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 79, 158, 174, 190, 201 inciso 3º, 212,
319, 778 y 821. Código Procesal Penal: artículos 362 y 363. Ley Nº 18.287, sobre
Procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículo 21, Código del Trabajo: artículo 475.
Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de Familia: artículo 67. Código Tributario: artículos 133, 139.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Improcedencia de una reposición extraordinaria en contra de la


resolución que resuelve un recurso de reposición

En el caso de autos, la solicitante obtuvo, mediante la interposición de


un recurso de reposición extraordinario, la enmienda de lo que el
tribunal había resuelto en relación a su solicitud de declaración de
liquidación voluntaria, logrando el acogimiento de la reposición ordinaria
que había intentado con anterioridad. Tal proceder es cuestionable tanto
por la naturaleza de las resoluciones impugnadas, ya que se permitió la
interposición de un recurso de reposición en contra de la resolución que
había fallado uno anterior, como porque se funda en la existencia de
nuevos antecedentes que no son tales. En efecto, la exigencia de
nuevos antecedentes ha sido entendida por la jurisprudencia del
Máximo Tribunal como "algún hecho que produce consecuencias
jurídicas, existente pero desconocido por el tribunal cuando se dicta la
respectiva decisión", definición que excluye la comprensión como nuevo
antecedente de la correcta individualización del juicio pendiente que
invocó como fundamento de su petición de liquidación, error que por lo
demás no subsanó oportunamente durante la tramitación de la causa
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 14/10/2019, Rol Nº 32650-2018,


Cita online: CL/JUR/5942/2019

ARTÍCULO 182 (205)

Notificada una sentencia definitiva o interlocutoria a alguna de las partes,


no podrá el tribunal que la dictó alterarla o modificarla en manera alguna.
Podrá, sin embargo, a solicitud de parte, aclarar los puntos obscuros o
dudosos, salvar las omisiones y rectificar los errores de copia, de referencia
o de cálculos numéricos que aparezcan de manifiesto en la misma sentencia.

Lo dispuesto en este artículo no obsta para que el rebelde haga uso del
derecho que le confiere el artículo 80.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 80, 158, 182 a 185, 190, 201, 212,
234, 319 y 781. Código Orgánico de Tribunales: artículo 97. Ley Nº 16.665, sobre reconstitución
de inscripciones en Registro de Conservadores de Bienes Raíces: artículo 11. Código
Tributario: artículos 138, 148.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Principio de desasimiento del tribunal

Sabido es que con el pronunciamiento y la notificación de la sentencia


definitiva —aquella que resuelve el asunto que fue sometido a la
decisión del tribunal— emerge el efecto del desasimiento del juzgador,
en cuya virtud éste no puede reemplazar o modificar lo que ha decidido,
toda vez que habrá concluido el ejercicio de su labor jurisdiccional sobre
la cuestión materia de la causa. Sobre el particular, se ha dicho: "El
desasimiento importa una verdadera preclusión (por consumación)
respecto del juez: pronunciada y notificada su sentencia a alguna de las
partes, ha cumplido con su deber esencial de administrar justicia,
concluye su actividad jurisdiccional respecto del objeto de la litis y ya no
puede sustituir o modificar su decisión, de la cual queda enteramente
desligado (Mario Mosquera R. y Cristián Maturana M., Los Recursos
Procesales, Ed. Jurídica de Chile, pág. 88) (considerando 4º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).
Corte de Apelaciones de San Miguel, 13/11/2019, Rol Nº 818-2019,

Cita online: CL/JUR/6541/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 24/09/2018, Rol Nº 37237-2017,

Cita online: CL/JUR/5162/2018

2. Desasimiento del tribunal. Existencia de error de transcripción

La causal de casación prevista por el artículo 768 Nº 1 del Código de


Procedimiento Civil debe ser desestimada toda vez que en la forma que
ha sido planteada no se configura. En efecto, si bien el artículo 182
consagra el principio de desasimiento del tribunal como regla general,
tal como en el texto se consigna, cabe observar que la propia norma
establece la situación de excepción para eventualidades como la que
se analiza, es decir, cuando en la sentencia definitiva o interlocutoria se
hayan incurrido en errores de copia, referencia, o de transcripción, cuyo
es el caso previsto por los jueces para proceder a la rectificación pedida.
El recurso no cuestiona el hecho de tratarse de un error de transcripción,
se limita a hacer valer la regla general que el texto mencionado
contiene, y desde esa perspectiva no es posible aceptar que el fallo
rectificatorio haya sido expedido por tribunal incompetente
(considerando 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 29/01/2019, Rol Nº 40711-2017,


Cita online: CL/JUR/484/2019

3. Recurso de aclaración, rectificación y enmienda constituye una


excepción al principio de desasimiento del tribunal

Una excepción al principio del desasimiento se encuentra en la


denominada rectificación, aclaración o enmienda contemplada en la
segunda parte del inciso primero del artículo 182 del Código de
Procedimiento Civil, en cuyo mérito, aunque la sentencia haya sido
notificada a alguna de las partes, podrá el juez aclarar sus puntos
oscuros o dudosos, salvar las omisiones y rectificar los errores de copia,
de referencia o de cálculos numéricos que aparezcan de manifiesto en
el fallo. Se trata de un arbitrio procesal fundado en la idea de economía
procesal y tendiente a posibilitar la adecuada inteligencia de lo
sentenciado, lo mismo que su cumplimiento. Es más, conforme al
artículo 184 del Código de Procedimiento Civil, para lo único que se
encuentran facultados los jueces, dentro del término de cinco días
siguientes a la primera notificación de la sentencia, es para "rectificar
los errores de copia, de referencia o de cálculos numéricos que
aparezcan de manifiesto en la misma". Los litigantes, por su lado,
podrán solicitarlo en cualquier tiempo, lo que obedece, precisamente
porque por esta vía no se intentará ni conseguirá hacer variar lo
dispositivo del fallo (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 13/11/2019, Rol Nº 818-2019,

Cita online: CL/JUR/6541/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 18/11/2019, Rol Nº 2263-2019,

Cita online: CL/JUR/11752/2019

— Corte Suprema, 29/01/2019, Rol Nº 40711-2017,

Cita online: CL/JUR/484/2019

4. Improcedencia de que el tribunal cambie sus decisiones firmes


mediante un recurso de aclaración, rectificación o enmienda

El juez a quo excedió los límites que el artículo 182 del Código de
Procedimiento Civil dispone para un recurso como el que se dedujo en
contra de resoluciones que se encontraban firmes, el que sólo le
permitía al sentenciador aclarar los puntos oscuros o dudosos, salvar
las omisiones y rectificar los errores de copia, de referencia o de
cálculos numéricos que aparezcan de manifiesto en la misma sentencia,
no pudiendo, por consiguiente, por esta vía, cambiar sus decisiones
firmes por haber operado el desasimiento del tribunal, principio por el
cual tiene vedado el órgano jurisdiccional, una vez dictadas y
ejecutoriadas sus resoluciones, alterarlas o modificarlas de manera
alguna (considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Santiago, 4/10/2019, Rol Nº 13084-2018,

Cita online: CL/JUR/5442/2019

ARTÍCULO 183 (206)

Hecha la reclamación, podrá el tribunal pronunciarse sobre ella sin más


trámite o después de oír a la otra parte; y mientras tanto suspenderá o no los
trámites del juicio o la ejecución de la sentencia, según la naturaleza de la
reclamación.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 158, 185 y 190.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Recurso de aclaración, rectificación y enmienda constituye una


excepción al principio de desasimiento del tribunal

Como lo ha resuelto la Excelentísima Corte Suprema, la facultad


prevista en el artículo 182 del Código de Procedimiento Civil, constituye
una excepción al principio de desasimiento del tribunal respecto de su
sentencia, mediante la notificación de la misma, ya que después de ella
le queda prohibido alterarla de alguna forma. Por lo mismo, si bien la ley
no fija plazo a las partes para interponer el recurso de rectificación o
enmienda, ni limita la jurisdicción del tribunal que conoce de él, tal
potestad debe encuadrarse, lógicamente, dentro de sus objetivos
procesales, como por ejemplo, aclarar, salvar una omisión, rectificar un
error de copia o de cálculo numérico. (Corte Suprema, Rol Nº 238-05)
(considerando 2º de la sentencia de apelación de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 7/12/2010, Rol Nº 7160-2010,

Cita online: CL/JUR/17150/2010

Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 7/12/2010, Rol Nº 7160-2009,

Cita online: CL/JUR/17151/2010


— Corte Suprema, 31/10/2005, Rol Nº 3048-2005,

Cita online: CL/JUR/3091/2005

ARTÍCULO 184 (207)

Los tribunales, en el caso del artículo 182, podrán también de oficio


rectificar, dentro de los cinco días siguientes a la primera notificación de la
sentencia, los errores indicados en dicho artículo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 158, 182 y 190. Código Tributario:
artículo 138.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Rectificación de oficio

Una excepción al principio del desasimiento se encuentra en la


denominada rectificación, aclaración o enmienda contemplada en la
segunda parte del inciso primero del artículo 182 del Código de
Procedimiento Civil, en cuyo mérito, aunque la sentencia haya sido
notificada a alguna de las partes, podrá el juez aclarar sus puntos
oscuros o dudosos, salvar las omisiones y rectificar los errores de copia,
de referencia o de cálculos numéricos que aparezcan de manifiesto en
el fallo. [...] Es más, conforme al artículo 184 del Código de
Procedimiento Civil, para lo único que se encuentran facultados los
jueces, dentro del término de cinco días siguientes a la primera
notificación de la sentencia, es para "rectificar los errores de copia, de
referencia o de cálculos numéricos que aparezcan de manifiesto en la
misma". Los litigantes, por su lado, podrán solicitarlo en cualquier
tiempo, lo que obedece, precisamente porque por esta vía no se
intentará ni conseguirá hacer variar lo dispositivo del fallo
(considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 13/11/2019, Rol Nº 818-2019,

Cita online: CL/JUR/6541/2019

Fallo en el mismo sentido:


— Corte de Apelaciones de Valparaíso, 18/11/2019, Rol Nº 2263-
2019,

Cita online: CL/JUR/11752/2019

ARTÍCULO 185 (208)

Las aclaraciones, agregaciones o rectificaciones mencionadas en los tres


artículos precedentes, podrán hacerse no obstante la interposición de
recursos sobre la sentencia a que aquéllas se refieren.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 158, 182, 184 y 190. Código
Tributario: artículo 139.

TÍTULO XVIII DE LA APELACIÓN

ARTÍCULO 186 (209)

El recurso de apelación tiene por objeto obtener del tribunal superior


respectivo que enmiende, con arreglo a derecho, la resolución del inferior.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 158, 189, 203, 214, 216 y 822.
Código del Trabajo: artículos 463, 466, 468 y 469. Código Orgánico de Tribunales: artículos 13
y 110. Código Tributario: artículo 140.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Conceptos de recurso de apelación y agravio

El recurso de apelación ha sido definido por la doctrina como aquel


"concedido a un litigante que ha sufrido agravio por la sentencia del juez
inferior, para reclamar de ella y obtener su revocación por el juez
superior" —Eduardo Couture—. A su vez, el agravio se ha
conceptualizado como "la injusticia, la ofensa, el perjuicio material o
moral. El litigante a quien la sentencia perjudica afirma que esta le
infiere agravio y acude a mayor juez a expresar agravios" —Jorge
Correa— (considerando 6º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 12/06/2018, Rol Nº 38591-2017,
Cita online: CL/JUR/2792/2018

2. La apelación como recurso procesal por excelencia

La apelación es el recurso ordinario por preeminencia y se concibe


como un derecho otorgado por el ordenamiento jurídico procesal cuya
pretensión primaria es garantizar el derecho a la tutela judicial efectiva
mediante la doble revisión de los antecedentes y fundamentos de la
decisión. Es la consecuencia de la doble instancia; el medio que permite
a los litigantes, sin causal específica, llevar ante el tribunal de segundo
grado una resolución estimada injusta o improcedente, para que la
modifique o revoque con arreglo a derecho, según sea el caso; en otras
palabras "la apelación es el recurso procesal por excelencia, pues
ningún otro reúne los caracteres de tal en calidad y medidas suyas"
(Tratado Práctico de Derecho Procesal Civil Chileno, Carlos Anabalón
Sanderson, 2a edición, volumen 3º, pág. 17 año 1966) (considerando 5º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/10/2019, Rol Nº 29378-2019,


Cita online: CL/JUR/6277/2019

3. Finalidad del recurso de apelación

Al tenor del artículo 186 del Código de Procedimiento Civil, el recurso


de apelación es aquel conferido al litigante que afirma haber sufrido
algún agravio por la sentencia o resolución del inferior, para reclamar
de ella y obtener su revocación por el superior. Entre las características
de este arbitrio se destaca que es uno ordinario, toda vez que procede
en general en contra de las resoluciones judiciales sin determinación de
causales específicas por las cuales proceda, bastando, también en
general, que la resolución cause agravio a la parte que lo entabla, a
menos que la propia ley lo limite respecto de determinadas
resoluciones. No obstante lo anterior, tratándose de materias reguladas
por la Ley Nº 20.720, el legislador ha acotado este arbitrio sólo a los
casos en que expresamente se consagre tal derecho, estando permitida
su interposición cuando se decida sobre la impugnación de créditos
(considerando 6º de la anulación de oficio).

Corte Suprema, 20/08/2019, Rol Nº 32721-2018,


Cita online: CL/JUR/5783/2019
4. Finalidad de la exigencia de contener la apelación peticiones
concretas

La doctrina nacional y extranjera, al igual que la jurisprudencia,


coinciden en que la exigencia de contener la apelación peticiones
concretas obedece a dos claras finalidades que no pueden dejar de
cumplirse; a saber: a) fijar de manera perfectamente delimitada la
extensión de la competencia del tribunal de alzada, puesto que no podrá
extender su fallo sino a aquellos puntos respecto de los cuales se han
formulado por el apelante las correspondientes peticiones; y b) asegurar
en segunda instancia la efectiva vigencia del principio de la bilateralidad
de la audiencia, esto es, permitir que cada parte conozca
oportunamente las pretensiones de la contraria y sus fundamentos. Sólo
así el proceso será, en esencia, un método de debate. Por esto se dice
que la formulación de la apelación es, en lo atinente a la segunda
instancia, lo que la demanda en lo tocante a la primera. El autor Cristián
Maturana Miquel, citando al profesor Mario Mosquera Ruiz, hace
presente que "lo importante en esta materia de las peticiones concretas
es que no basta la simple solicitud de revocación, sino que siempre hay
que agregar la consecuencia que para mí, apelante, debe deducirse de
esa revocación. Tengo que decir siempre, concreta, específicamente,
sin vaguedades de ninguna especie, en qué sentido debe modificarse
la resolución que me agravia, en virtud de cuyo agravio yo he apelado.
Eso es fundamental. No cabe aquí las vaguedades, y sin embargo, cabe
la brevedad. Difícil cuestión la mayor parte de las veces" (Cristián
Maturana Miquel, Los Recursos, Escuela de Derecho de la Universidad
de Chile, marzo de 2008, página 109). Y añade: "...las peticiones
concretas revisten gran trascendencia, puesto que ellas fijan o
determinan la competencia del tribunal de segunda instancia en el fallo
del recurso. A través de las peticiones concretas se materializa el
principio latino: Tantum devolutum quantum apellatum, en cuanto a que
el tribunal de alzada solo puede conocer de los puntos que se
encuentren comprendidos en las peticiones concretas formuladas en el
recurso de apelación, pero no respecto de los consentidos o no
comprendidos dentro de las peticiones concretas" (ob. cit., página 110).
Los conceptos antes expuestos dan cuenta con incuestionable claridad
la trascendencia que presenta el petitorio en el recurso de apelación, en
tanto expresión del ejercicio del derecho a la segunda instancia. Por
ello, nada puede reprocharse a los jueces que en el ejercicio de su
función revisora se remiten a ese elemento para los efectos de definir
su competencia y lo pretendido por los apelantes (considerandos 5º y
6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/06/2020, Rol Nº 23276-2018,


Cita online: CL/JUR/45716/2020

5. Hipótesis en que los autos o decretos serán apelables

Por regla general, son apelables, en los negocios contenciosos y no


contenciosos en materia civil y dentro del procedimiento ordinario y
ejecutivo, la sentencia definitiva de primera instancia, esto es, la que
pone término a la instancia resolviendo la cuestión o asunto
controvertido que ha sido objeto del juicio; las interlocutorias de primera
instancia, que fallan un incidente en juicio estableciendo derechos
permanentes a favor de las partes o resuelve sobre algún trámite que
debe servir de base en el pronunciamiento. De manera excepcional
procede también el recurso de apelación en contra de autos y decretos,
siempre que alteren la sustanciación regular del juicio o recaigan en
trámites que no se encuentran ordenados expresamente por la ley, en
cuyo caso el recurso de apelación sólo puede interponerse
subsidiariamente al de reposición. A contrario sensu, la regla general en
materia recursiva, respecto de resoluciones cuya naturaleza jurídica sea
auto o decreto, será la improcedencia del recurso de apelación, cuando
ordenan trámites necesarios para substanciación del proceso o bien
recaen en trámites expresamente ordenados por la ley, o cuando ésta
expresamente disponga que son inapelables. En consecuencia, la
resolución de primer grado, que desestimó el incidente de nulidad por
falta de emplazamiento, tiene la naturaleza de sentencia interlocutoria
pues ha establecido derechos permanentes a favor de una parte, de
modo que es susceptible de ser recurrida por la vía del recurso de
apelación, arbitrio que, en consecuencia, la Sala de Cuenta de la Corte
de Apelaciones debió admitir a tramitación (considerandos 2º y 3º de la
actuación de oficio de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 20/06/2018, Rol Nº 7440-2018,


Cita online: CL/JUR/3040/2018

6. Recurso de apelación puede ser desestimado si ha perdido


oportunidad
El recurso de apelación puede ser desestimado si ha perdido
oportunidad, esto es, cuando se ha producido una pérdida o extinción
del poder procesal involucrado. Esta Corte ha entendido la preclusión
"como la pérdida, extinción o caducidad de una facultad procesal..."
(Sentencia de casación de 4 de mayo de 1990, Rol Nº 12684, Gaceta
Jurídica (anexo), Nº 119, pág. 7). En un ensayo sobre esta materia, el
profesor Eduardo Gandulfo citando a G. Chivenda, señala que "con la
preclusión el fin del legislador es dar mayor precisión y rapidez al
desarrollo de los actos del proceso, a través de un cierto orden en el
desarrollo del mismo. Agrega, que mediante esta figura, la ley pone
límites al ejercicio de determinadas facultades procesales, con la
consecuencia siguiente: fuera de esos límites esas facultades no
pueden ejercitarse" (Revista Ius et Praxis, año 15, Nº 1, págs. 121 189,
"Sobre Preclusiones Procesales en el Derecho Chileno en tiempos de
Reformas") (considerando 7º de la anulación de oficio).

Corte Suprema, 20/08/2019, Rol Nº 32721-2018,


Cita online: CL/JUR/5783/2019

ARTÍCULO 187 (210)

Son apelables todas las sentencias definitivas y las interlocutorias de


primera instancia, salvo en los casos en que la ley deniegue expresamente
este recurso.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 49, 90, 126, 158, 159, 210, 326, 379,
481, 776, 778 inciso 4º y 822. Código Procesal Penal: artículos 364 y 370. Ley Nº 18.287, sobre
Procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículos 32 y 33, Código del Trabajo:
artículos 476 y 477. Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de Familia: artículos 67 y 102 K.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Sentencias interlocutorias son apelables derechamente

Las resoluciones dictadas por los tribunales pueden ser autos o


sentencias interlocutorias. Los autos son aquellas resoluciones en las
que se falla un incidente sin establecer derechos permanentes a favor
de las partes. La sentencia interlocutoria, es aquella que falla un
incidente, estableciendo derechos permanentes a favor de las partes o
resuelve sobre algún trámite que sirve de base para el pronunciamiento
de una sentencia definitiva o interlocutoria. Conforme al artículo 188 del
Código de Procedimiento Civil, los autos sólo son apelables cuando
alteran la sustanciación regular del juicio o recaen sobre trámites que
no están expresamente ordenados por la ley, y esta apelación sólo
podrá interponerse con el carácter de subsidiaria de la solicitud de
reposición y para el caso que ésta no sea acogida. Las sentencias
interlocutorias, en cambio —de acuerdo al artículo 187—, son
apelables, salvo en los casos en que la ley deniegue expresamente este
recurso, por lo que son apelables derechamente (considerandos 4º y 5º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 25/10/2016, Rol Nº 16924-


2016,

Cita online: CL/JUR/7900/2016

2. Recurso de apelación tiene el carácter de un recurso ordinario que


procede en general contra todas las resoluciones

Uno de los principios que regula casi sin contrapeso nuestro sistema
procesal es el de que toda resolución es susceptible de ser corregida o
enmendada por un tribunal de mayor jerarquía, valiéndose del recurso
de apelación. Todo el ordenamiento de la estructura del poder judicial
chileno está condicionado sobre la base de dos instancias. Es por eso
que el recurso de apelación tiene el carácter de un recurso ordinario que
procede en general contra todas las resoluciones, según los cánones
amplios de los artículos 187 y 188 del Código de Procedimiento Civil;
siendo de advertir que la ley, a su respecto, no ha señalado
específicamente las causales que lo justifican, sino que basta alegar
que la decisión del juez ha causado un agravio a la parte que se dice
afectada. El recurso de apelación no tiene causales específicas y su
único objeto es obtener del tribunal superior respectivo que enmiende,
con arreglo a derecho, la resolución del inferior (considerando 2º de la
actuación de oficio de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 27/03/2018, Rol Nº 45844-2017,


Cita online: CL/JUR/1418/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 27/03/2018, Rol Nº 45842-2017,


Cita online: CL/JUR/1420/2018

3. Aplicación supletoria de las normas comunes a todo procedimiento

De tal forma, y como ha resuelto reiteradamente la Excma. Corte


Suprema —por ejemplo, en causa Rol Nº 6960-2013— en el
procedimiento en estudio, las disposiciones comunes establecidas en el
libro I del Código de Procedimiento Civil deben ser aplicadas en forma
supletoria, encontrándose entre ellas, precisamente, el Título XVIII que
reglamenta el recurso de apelación. Esta afirmación emana, asimismo,
de lo dispuesto en el artículo 2º del Código Tributario en cuanto dispone
que "en lo no previsto por este Código y demás leyes tributarias, se
aplican las normas de derecho común contenidas en leyes generales y
especiales" y en el artículo 148 que señala que "en todas aquellas
materias no sujetas a disposiciones especiales del presente Libro, se
aplicarán, en cuanto fueren compatibles con la naturaleza de las
reclamaciones, las normas establecidas en el Libro Primero del Código
de Procedimiento Civil". En este sentido, el Código Tributario no regula
el recurso de apelación de una manera orgánica, lo que permite afirmar
—de conformidad con lo señalado en los artículos 2º y 148 antes
reproducidos— que deben aplicarse en la especie, las normas que lo
regulen en el Código de Procedimiento Civil. El legislador tributario, en
los artículos 170 inciso segundo y 192 inciso quinto, razona sobre esta
base. En cuanto a la naturaleza de la resolución impugnada a través de
la apelación cuya denegación se denuncia —abandono del
procedimiento—, no cabe sino concluir que se trata de una sentencia
interlocutoria, en la medida que resuelve un incidente que fija derechos
permanentes en el juicio en cuanto a su necesaria prosecución, al tenor
de lo dispuesto en el inciso 3º del artículo 158 del Código de
Procedimiento Civil. En este contexto, el artículo 187 del mismo Código
establece que son apelables "todas las sentencias definitivas y las
interlocutorias de primera instancia, salvo en los casos en que la ley
expresamente deniegue este recurso", lo que no acontece en el
artículo 190 del Código Tributario invocado, motivos todos por los
cuales el presente recurso será acogido, según se dirá
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 23/10/2019, Rol Nº 83-2019,

Cita online: CL/JUR/6169/2019


Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Punta Arenas, 15/06/2018, Rol Nº 73-


2018,

Cita online: CL/JUR/2908/2018

— Corte de Apelaciones de Concepción, 18/05/2018, Rol Nº 819-


2018,

Cita online: CL/JUR/3297/2018

— Corte de Apelaciones de Valparaíso, 23/02/2018, Rol Nº 36-2018,

Cita online: CL/JUR/872/2018

4. Reglas de procedencia del Recurso de Apelación

Nuestro legislador procesal ha regulado la procedencia del recurso de


apelación, resguardando la protección de la doble instancia. En efecto,
los artículo s 187 y 188 del Código de Procedimiento Civil señalan los
principios fundamentales en la materia. Dice la primera de las
disposiciones citadas: "Son apelables todas las sentencias definitivas y
las interlocutorias de primera instancia, salvo en los casos en que el
legislador deniegue expresamente este recurso". Agrega el segundo:
"Los autos y decretos no son apelables cuando ordenen trámites
necesarios para substanciación regular del juicio; pero son apelables
cuando alteran dicha substanciación o recaen sobre trámites que no
están expresamente ordenados por la ley. Esta apelación sólo podrá
interponerse con el carácter de subsidiaria de la solicitud de reposición
y para el caso que ésta no sea acogida". Por consiguiente son
apelables, por regla general, en los negocios contenciosos y no
contenciosos en materia civil y dentro del procedimiento ordinario, la
sentencia definitiva de primera instancia, esto es, la que pone término a
la instancia resolviendo la cuestión o asunto controvertido que ha sido
objeto del juicio; las interlocutorias de primera instancia, que falla un
incidente en juicio estableciendo derechos permanentes a favor de las
partes o resuelve sobre algún trámite que debe servir de base en el
pronunciamiento de una sentencia definitiva o interlocutoria. De manera
excepcional procede también el recurso de apelación en contra de autos
y decretos, siempre que alteren la sustanciación regular del juicio o
recaigan en trámites que no se encuentran ordenados expresamente
por la ley, en cuyo caso el recurso de apelación sólo puede interponerse
subsidiariamente al de reposición. A contrario sensu, la regla general en
materia recursiva, respecto de resoluciones cuya naturaleza jurídica sea
auto o decreto, será la improcedencia del recurso de apelación, cuando
ordenan trámites necesarios para substanciación del proceso o bien
recaen en trámites expresamente ordenados por la ley, o cuando ésta
expresamente disponga que son inapelables (considerando 3º de la
actuación de oficio de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 27/03/2018, Rol Nº 45844-2017, Cita online:


CL/JUR/1418/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 4/06/2018, Rol Nº 6055-2018,

Cita online: CL/JUR/2787/2018

5. Procedencia de la apelación respecto de la resolución que rechaza la


objeción de costas

La resolución impugnada por la vía de la apelación por parte del


Servicio de Impuestos Internos es aquella que rechazó la objeción de
costas, las que fueron fijadas una vez que la sentencia dictada en el
reclamo tributario se encontraba firme y ejecutoriada. De esta forma,
atendida la etapa procesal en que se encuentra el reclamo tributario,
procede aplicar respecto a este incidente especial de costas, la norma
remisora que establece el artículo 148 del Código Tributario que hacen
aplicables los preceptos del Libro Primero del Código de Procedimiento
Civil. De acuerdo a las normas comunes, la resolución que rechazó la
objeción de costas recae sobre un incidente que fija derechos
permanentes para las partes, por lo que en virtud del artículo 187 del
mismo cuerpo legal, resulta apelable atendida su naturaleza jurídica
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 2/02/2018, Rol Nº 287-2017,

Cita online: CL/JUR/541/2018


6. Procedencia de la apelación en contra de la resolución que rechaza
incidente de nulidad de todo lo obrado y nulidad por falta de
emplazamiento

El Tesorero Regional en la primera fase del procedimiento de


obligaciones tributarias actúa como juez sustanciador en sede
administrativa y por ende, ejerce actividad jurisdiccional. Y luego, dado
el carácter jurisdiccional de la actuación impugnada, resultan aplicables
a su respecto las normas del libro I del Código de Procedimiento Civil,
de acuerdo al artículo 2º del Código Tributario, que dispone la aplicación
supletoria de las normas de derecho común contenidas en leyes
generales o especiales. La resolución que rechazó del incidente de
nulidad de todo lo obrado y en subsidio, el incidente de nulidad por falta
de emplazamiento regulado en el artículo 80 del Código de
Procedimiento Civil, recae sobre un incidente que fija derechos
permanentes para las partes, por lo que en virtud del artículo 187 del
mismo cuerpo legal, resulta apelable atendida su naturaleza jurídica
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 7/02/2018, Rol Nº 9646-2017,

Cita online: CL/JUR/3230/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 16/02/2018, Rol Nº 9645-2017,

Cita online: CL/JUR/759/2018

7. Resolución que rechaza incidente de corrección del procedimiento


tiene naturaleza de sentencia interlocutoria

La naturaleza jurídica de la resolución apelada —que rechazó el


incidente de corrección del procedimiento— se corresponde con la de
una sentencia interlocutoria, de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 158
del Código de Procedimiento Civil, de modo que, conforme al precepto
del artículo 187 del mismo texto legal, es apelable, ya que falla un
incidente, estableciendo derechos permanentes para las partes, al
impedir a la demandante perseverar en la acción de rendición de
cuentas deducida (considerando 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Santiago, 22/02/2018, Rol Nº 14942-2017,

Cita online: CL/JUR/914/2018

8. Recurso de apelación interpuesto de forma subsidiaria a un recurso


de reposición, procede tanto si la reposición es rechazada por
improcedente, o es rechazada en cuanto el fondo

La resolución que rechaza la concesión de las medidas precautorias


solicitadas, efectivamente es una sentencia interlocutoria de primer
grado ya que resuelve sobre un incidente estableciendo derechos
permanentes para las partes, por lo que el recurso de apelación es
procedente, según el artículo 187 del Código de Procedimiento Civil.
Asimismo, el legislador no limitó la interposición del recurso de
apelación a una determinada forma, esto es, que sea por vía principal o
que sea por vía subsidiaria de otra petición por lo que no cabe
rechazarlo por esta razón. Por lo demás, en caso de ser interpuesto de
forma subsidiaria a un recurso de reposición, tal recurso de apelación
procede tanto si la reposición es rechazada por improcedente, o es
rechazada en cuanto el fondo. De acuerdo a ello, en el caso sub lite, el
juez debió haber rechazado el recurso de reposición por improcedente,
toda vez que no cabe recurso de reposición contra sentencias
interlocutorias, y en cambio, haber tenido por interpuesto recurso de
apelación, y acogerlo a tramitación, por todo lo cual se acogerá el
recurso de hecho interpuesto (considerandos 3º y 4º de la sentencia de
la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 26/02/2018, Rol Nº 13680-2017,

Cita online: CL/JUR/896/2018

9. Procedencia del recurso de apelación contra la resolución que


decreta la rebeldía del demandado respecto del trámite de la dúplica
citando a las partes a audiencia de conciliación

De conformidad al artículo 187 del Código de Procedimiento Civil


resultan apelables todas las sentencias definitivas e interlocutorias de
primera instancia, salvo en aquellos casos en que la ley limita
expresamente el recurso. A su vez el artículo 188 del mismo cuerpo
legal establece que los autos y decretos son apelables cuando alteran
la normal substanciación del juicio o recaen sobre trámites no
expresamente contemplados en la ley. En este caso, la resolución en
que incide el recurso de hecho es aquella que declaró la rebeldía de la
parte demandada en relación al trámite de la dúplica, citando a las
partes a la audiencia de conciliación correspondiente de conformidad al
artículo 262 del Código de Procedimiento Civil. En tal entendido, la
citada resolución debe ser catalogada como un decreto, providencia o
proveído, desde que tiene por objeto determinar la substanciación del
juicio, permitiendo que este avance desde la etapa procesal de
discusión a la fase siguiente. En consecuencia, se ha alterado la normal
substanciación del procedimiento desde que se ha prescindido del
trámite de la dúplica, cuya presentación corresponde al demandado,
declarando a su vez en rebeldía a dicha parte, de lo que se sigue que
se verifica una hipótesis en que la impugnación por la vía de la apelación
resulta procedente (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 26/01/2018, Rol Nº 175-2017,

Cita online: CL/JUR/411/2018

10. Procedencia del recurso de apelación contra la resolución que


rechaza incidente de abandono del procedimiento

Dado el carácter jurisdiccional de la actuación administrativa


desplegada por el Tesorero Provincial, en su calidad de Juez
Sustanciador, le son aplicables a su respecto las normas contenidas en
el Título I del Libro III del Código de Procedimiento Civil, por sujeción de
las normativas de reenvío contenidas en los artículos 2º y 190 del
Código Tributario. Por su parte, las reglas contenidas en el Juicio
Ejecutivo del Libro III del Código de Procedimiento Civil son revisables
conforme las reglas generales del Libro I del referido cuerpo normativo,
por cuanto constituyen normas comunes a todo procedimiento, motivo
por el cual, la apelación es el mecanismo idóneo para la revisión de lo
fallado y, al revestir la resolución que rechazó el incidente de abandono
del procedimiento el carácter de sentencia interlocutoria de primera
instancia, toda vez que falló un incidente estableciendo derechos
permanentes para las partes, en virtud del artículo 187 del Código de
Procedimiento Civil resulta impugnable por dicha vía (considerando 5º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 30/09/2019, Rol Nº 7-2018,


Cita online: CL/JUR/5307/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Temuco, 11/06/2020, Rol Nº 1630-2019,

Cita online: CL/JUR/37461/2020

— Corte de Apelaciones de Concepción, 1/03/2019, Rol Nº 2548-


2018,

Cita online: CL/JUR/1084/2019

— Corte de Apelaciones de Santiago, 28/09/2018, Rol Nº 386-2018,

Cita online: CL/JUR/5341/2018

— Corte de Apelaciones de Santiago, 4/05/2018, Rol Nº 2711-2018,

Cita online: CL/JUR/2031/2018

11. Procedencia del recurso de apelación contra la resolución que


rechaza recurso de rectificación, aclaración o enmienda interpuesto
contra sentencia complementaria

El recurso de aclaración, rectificación o enmienda se dedujo respecto


de sentencia complementaria y no respecto de la resolución que
resolvió en relación a la liquidación, ni respecto de esta última. La
resolución recurrida por la vía de la aclaración, rectificación o enmienda
es susceptible de ser impugnada vía recurso de apelación, toda vez que
se trata de una sentencia complementaria de la sentencia definitiva y
que, de conformidad al artículo 190 inciso 2º del Código del
Procedimiento Civil, la resolución que se pronuncia respecto de un
recurso de aclaración, rectificación y enmienda es apelable en tanto la
sentencia respecto de la cual se haya interpuesto también lo sea, cuyo
es el caso en la especie. Por lo tanto, resulta que el recurso de
rectificación, aclaración o enmienda se ha enderezado respecto de la
sentencia definitiva dictada en estos autos, en su parte complementaria,
por lo que la resolución que lo rechaza resulta apelable
(considerandos 6º a 8º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).
Corte Suprema, 13/04/2018, Rol Nº 8671-2017,
Cita online: CL/JUR/1771/2018

12. Apelación subsidiaria contra sentencia interlocutoria que resulta


admisible

Conforme lo dispuesto en el artículo 27 de la Ley de Bases sobre


Contratos Administrativos de Suministro y Prestación de Servicios —
Ley Nº 19.886—, aparece que las disposiciones comunes a todo
procedimiento establecidos en el Libro I del Código de Procedimiento
Civil y las del juicio ordinario civil de mayor cuantía que resulten
conformes a la naturaleza breve y sumaria de este procedimiento,
reciben aplicación supletoria, de modo que, tratándose la resolución
impugnada de una sentencia interlocutoria es susceptible de ser
impugnada a través del recurso de apelación, de conformidad a lo
dispuesto en el artículo 187 del Código de Procedimiento Civil. Así las
cosas, la apelación subsidiaria deducida ha debido ser concedida, razón
por la cual el presente recurso de hecho debe ser acogido
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 14/08/2018, Rol Nº 8105-2018,

Cita online: CL/JUR/4553/2018

13. Voto disidente: Legislador no ha regulado expresamente la


apelación en la etapa de cumplimiento en el proceso de familia

Procedencia de acoger el recurso de hecho por estimar que el


legislador no ha regulado expresamente la apelación en la etapa de
cumplimiento en el proceso de familia, por lo que, de conformidad a lo
que dispone el artículo 27 de la Ley Nº 19.968, cobran aplicación las
reglas generales de los artículos 241 y 186 y siguientes del Código de
Procedimiento Civil y que en este contexto, la resolución apelada es una
sentencia interlocutoria que estableció derechos permanentes a favor
de las partes, la cual, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 187
del ya citado Código Adjetivo, es apelable, razón por la cual esta
disidente fue del parecer de conceder el referido recurso (disidencia de
la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 11/02/2019, Rol Nº 114-2019,


Cita online: CL/JUR/701/2019

14. Recurso de apelación interpuesto en subsidio de la reposición debe


ser analizado en su mérito

No es discutido que la resolución que falla acogiendo el incidente de


nulidad de todo lo obrado es una sentencia interlocutoria susceptible de
ser apelada, de conformidad con lo establecido por el artículo 187 del
Código de Procedimiento Civil. Ahora bien, no obstante no haberse
interpuesto el recurso de apelación en forma directa, se estima que el
recurso es admisible dado que fue interpuesto para el caso que el
recurso de reposición no fuere acogido. En la especie, el recurso de
reposición fue desestimado por improcedente, razón por la cual el
recurso de apelación interpuesto en subsidio de aquel, debe ser
examinado en su mérito, pues la ley no impide dicha forma de
interposición. Por otro lado, las normas que permiten la declaración de
inadmisibilidad de un recurso se deben interpretar en forma restrictiva,
sin poder aplicarse a casos que no están expresamente autorizados.
Debe tenerse presente además, lo señalado por la Excma. Corte
Suprema en autos Rol Nº 45844-2017, haciendo hincapié en la
importancia que tiene la apelación como mecanismo de revisión de las
resoluciones judiciales en nuestro ordenamiento jurídico, señalando
que: "La apelación es el recurso ordinario por preeminencia, y se
concibe como un derecho otorgado por el ordenamiento jurídico
procesal cuya pretensión primaria es la de garantizar el derecho a la
tutela judicial efectiva mediante la doble revisión de los antecedentes y
fundamentos de la decisión. Es la consecuencia de la doble instancia,
el medio que permite a los litigantes llevar ante el tribunal de segundo
grado una resolución estimada injusta o improcedente, para que la
modifique o revoque, según sea el caso" (considerandos 4º y 5º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Puerto Montt, 24/06/2019, Rol Nº 50-2019,

Cita online: CL/JUR/3712/2019

ARTÍCULO 188 (211)


Los autos y decretos no son apelables cuando ordenen trámites necesarios
para la substanciación regular del juicio; pero son apelables cuando alteran
dicha substanciación o recaen sobre trámites que no están expresamente
ordenados por la ley. Esta apelación sólo podrá interponerse con el carácter
de subsidiaria de la solicitud de reposición y para el caso que ésta no sea
acogida.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 49, 60, 90, 107, 158, 159, 181, 210,
284, 326, 379, 381, 394, 487, 494, 523 y 882. Ley Nº 18.287 sobre Procedimiento ante Juzgados
de Policía Local: artículo 33.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Hipótesis en que los autos o decretos serán apelables

Por regla general, son apelables, en los negocios contenciosos y no


contenciosos en materia civil y dentro del procedimiento ordinario y
ejecutivo, la sentencia definitiva de primera instancia, esto es, la que
pone término a la instancia resolviendo la cuestión o asunto
controvertido que ha sido objeto del juicio; las interlocutorias de primera
instancia, que fallan un incidente en juicio estableciendo derechos
permanentes a favor de las partes o resuelve sobre algún trámite que
debe servir de base en el pronunciamiento. De manera excepcional
procede también el recurso de apelación en contra de autos y decretos,
siempre que alteren la sustanciación regular del juicio o recaigan en
trámites que no se encuentran ordenados expresamente por la ley, en
cuyo caso el recurso de apelación sólo puede interponerse
subsidiariamente al de reposición. A contrario sensu, la regla general en
materia recursiva, respecto de resoluciones cuya naturaleza jurídica sea
auto o decreto, será la improcedencia del recurso de apelación, cuando
ordenan trámites necesarios para substanciación del proceso o bien
recaen en trámites expresamente ordenados por la ley, o cuando ésta
expresamente disponga que son inapelables. En consecuencia, la
resolución de primer grado, que desestimó el incidente de nulidad por
falta de emplazamiento, tiene la naturaleza de sentencia interlocutoria
pues ha establecido derechos permanentes a favor de una parte, de
modo que es susceptible de ser recurrida por la vía del recurso de
apelación, arbitrio que, en consecuencia, la Sala de Cuenta de la Corte
de Apelaciones debió admitir a tramitación (considerandos 2º y 3º de la
actuación de oficio de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 20/06/2018, Rol Nº 7440-2018,
Cita online: CL/JUR/3040/2018

2. Resolución que altera sustanciación regular del juicio

Conforme con lo dispuesto en el artículo 188 del Código de


Procedimiento Civil, los autos y decretos serán apelables cuando
ordenan tramites que alteran la substanciación regular del juicio o
cuando recaen sobre trámites que no están expresamente ordenados
por la ley. En la especie, consta que estando bajo la competencia de
esta Corte, la parte adjudicataria ante el tribunal a quo, solicitó que se
declarara la prescripción de los recursos de casación en la forma y de
apelación deducidos por la tercerista y, en este estadio procesal, el juez
a quo, dio tramitación a dicha solicitud ordenando elevar los
antecedentes ante esta Corte para emitir pronunciamiento de dicha
solicitud de prescripción de los recursos ya referidos. Que de esta
manera, se observa una alteración en la substanciación del juicio desde
el momento que se admitió a tramitación en primera instancia, la
prescripción de los recursos de casación y apelación que son de
conocimiento exclusivo de esta Corte, haciendo por ello procedente el
recurso de apelación y, en consecuencia, corresponde acoger el
recurso de hecho intentado (considerando 3º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte de Apelaciones de Santiago, 6/07/2018, Rol Nº 1829-2018,

Cita online: CL/JUR/3802/2018

3. Procede apelación si lo resuelto por el Tribunal altera la sustanciación


regular del juicio

Si bien las sentencias judiciales, en principio, producen fuerza


obligatoria respecto de las causas en que actualmente se pronunciaren,
no es menos cierto que en el caso de autos, el actor se encuentra
litigando contra la Tesorería Provincial de Las Condes y por ello, la
prueba acompañada pretendía justificar los presupuestos de su acción
declarativa de prescripción, atendido a que dichos procesos se han
sustanciado respecto de las mismas partes, provocando efectos
jurídicos relevantes en el actual proceso. En tal escenario, la infracción
denunciada altera la sustanciación regular del juicio al tenor de lo
dispuesto en el artículo 188 del Código de Procedimiento Civil y, en
consecuencia, es procedente el arbitrio de apelación intentado
(considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 5/08/2019, Rol Nº 6665-2019,

Cita online: CL/JUR/4450/2019

4. Procedencia del recurso de apelación contra la resolución que no da


curso a cumplimiento incidental de avenimiento

La resolución que no dio curso a la solicitud de cumplimiento


incidental del avenimiento es apelable, sea que como lo plantea el
recurrente se trate de un decreto, caso en el cual altere la sustanciación
regular del juicio, sea porque la negativa a tramitar el cumplimiento
incidental del avenimiento establece derechos permanentes para la
contraria a no poder ser demandada la contraria en este procedimiento
(considerando 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 12/04/2018, Rol Nº 693-2018,

Cita online: CL/JUR/1710/2018

5. Procedencia del recurso de apelación contra la resolución que da


traslado del reclamo

El artículo 124 del Código Tributario, establece expresamente cuales


son las actuaciones respecto de los cuales es susceptible de aplicarse
el procedimiento general de reclamos, siendo precisamente el objeto de
la apelación el determinar si el acto reclamado es susceptible de ser
impugnado por esta vía, o si por el contrario, no es reclamable de
conformidad al artículo 126 del mismo cuerpo legal. Por esta razón, y
concordando con el servicio de impuestos internos, la resolución
apelada es previa al inicio del procedimiento y es susceptible de ser
impugnada por el recurso de apelación, toda vez que la resolución que
da traslado del reclamo, es un auto o decreto que altera la sustanciación
regular del juicio, por lo que resulta apelable de conformidad al
artículo 188 del Código de Procedimiento Civil (considerando 3º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 7/09/2018, Rol Nº 195-2018,


Cita online: CL/JUR/4970/2018

6. Resolución que rechaza incidente de nulidad no es sentencia


interlocutoria, pues no establece derechos permanentes en favor de
las partes

(Voto disidente) La solicitud de nulidad de lo obrado tiene la


naturaleza jurídica de un incidente, pues conforme lo dispone el
artículo 82 del Código de Procedimiento Civil se trata de una cuestión
accesoria de un juicio que requiere pronunciamiento especial del
tribunal, con audiencia de las partes. Pues bien, con arreglo a lo previsto
en el artículo 158 del mismo Código Civil, un incidente únicamente
pueden terminar por dos tipos de resoluciones judiciales: sentencia
interlocutoria, si establece derechos permanentes en favor de las
partes, o auto, si no se genera este efecto. La resolución que rechaza
el incidente de nulidad no puede considerarse sentencia interlocutoria,
pues no establece derechos permanentes en favor de las partes, en
tanto al desestimar el incidente mantiene las cosas en el mismo estado
en que se encontraban antes de que éste se promoviera. Tampoco es
posible afirmar que "establezca el derecho permanente del actor de
continuar con el juicio", pues de ese derecho goza desde el momento
en que lo inicia y, en rigor, no se lo concede u otorga la resolución que
no hace lugar a la solicitud de nulidad. Por consiguiente, sólo cabe
concluir que el aludido pronunciamiento tiene la naturaleza jurídica de
un auto y que, al tenor del artículo 188 del Código de Procedimiento,
sólo es apelable cuando altera la sustanciación regular del juicio o recae
sobre trámites que no están expresamente ordenados por la ley. En este
contexto y teniendo en consideración que la providencia que desestima
el incidente de nulidad de lo obrado promovido por la parte demandada
no ha alterado la tramitación regular del juicio ni ha recaído sobre un
trámite que no esté previsto por la ley en forma expresa, la conclusión
que se impone es la inadmisibilidad del recurso de apelación y, por
consiguiente, que el recurso de hecho deba ser acogido
(considerandos 1º a 3º de la disidencia de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 8/03/2019, Rol Nº 1359-2019,

Cita online: CL/JUR/1315/2019


7. Improcedencia del recurso de apelación contra la resolución que no
da lugar al incidente de nulidad deducido, no obstante lo cual rectifica
la fecha la resolución cuya nulidad se pretendía

La resolución que no da lugar al incidente de nulidad deducido, no


obstante lo cual rectifica la resolución cuya nulidad se pretendía,
corrigiendo la fecha de ésta por estimar que adolecía de un error, posee
la naturaleza jurídica de un auto, puesto que falla un incidente del juicio,
sin establecer derechos permanentes en favor de las partes, ni resolver
un trámite que deba servir de base en el pronunciamiento de una
sentencia definitiva e interlocutoria. Tampoco posee la aludida
resolución judicial la naturaleza de un auto que altere la substanciación
regular del juicio, ni recae sobre un trámite no expresamente ordenado
por la ley. En consecuencia, conforme estatuyen los artículos 187 y 188
del Código de Procedimiento Civil, la resolución impugnada, no es
apelable (considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 6/08/2019, Rol Nº 5728-2019,

Cita online: CL/JUR/5677/2019

8. Resolución apelada no posee la naturaleza jurídica de aquellas en


contra de las que procede apelación

El artículo 187 del Código de Procedimiento Civil dispone: "Son


apelables todas las sentencias definitivas y las interlocutorias de
primera instancia, salvo en los casos en que la ley deniegue
expresamente este recurso", norma que debe analizarse en
concordancia al artículo 188 del mismo cuerpo legal, que indica: "Los
autos y decretos no son apelables cuando ordenen trámites necesarios
para la substanciación regular del juicio; pero son apelables cuando
alteran dicha substanciación o recaen sobre trámites que no están
expresamente ordenados por la ley. Esta apelación sólo podrá
interponerse con el carácter de subsidiaria de la solicitud de reposición
y para el caso que ésta no sea acogida.". De tal modo, resulta necesario
atender a la naturaleza jurídica de la resolución que rechaza la petición
de corrección del procedimiento planteada, y ordena estar a lo resuelto
en relación a la petición de tener presente lista de testigos; y, conforme
la clasificación que realiza el artículo 158 del Código de Procedimiento
Civil, esta no cumple con los requisitos que la norma citada exige para
estimarla una sentencia definitiva, o una interlocutoria que establezca
derechos permanentes en favor de las partes o resuelva sobre un
trámite que debe servir de base en el pronunciamiento de una sentencia
definitiva o interlocutoria, tratándose en consecuencia de un auto, el que
por expresa disposición del artículo 188 del Código de Procedimiento
Civil no es apelable, máxime por cuanto no se encuentra en ninguna de
las dos hipótesis de excepción que consagra la disposición indicada
(considerando 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 10/09/2019, Rol Nº 1881-2019,

Cita online: CL/JUR/5876/2019

9. Procede recurso de apelación en contra de un auto o decreto que


altera la substanciación regular del juicio

Explica el recurrente que en la fecha citada, el tribunal arbitral acogió


un recurso de reposición de su contraparte, dejando su efecto la
resolución que citaba a absolver posiciones personalmente y sobre
hechos propios al Gerente Médico de la empresa demandada, solicitada
en tiempo y forma por su parte. En contra de dicha resolución, su parte
recurrió de apelación el día 13 de agosto de 2019, estimando que la
resolución recurrida tiene el carácter de ser una sentencia interlocutoria
al resolver un trámite que ha de servir de base en el pronunciamiento
de la sentencia definitiva o interlocutoria. Sin perjuicio de ello, el juez
árbitro rechazó la interposición del recurso, por improcedente. Del
mérito de los antecedentes, aparece que la resolución recurrida tiene la
naturaleza jurídica de un auto o decreto que al alterar la substanciación
regular del juicio, se enmarca dentro del supuesto del artículo 188 del
Código de Procedimiento Civil y es, en consecuencia, apelable, por lo
que se acogerá el presente recurso (considerandos 1º y 3º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 25/02/2020, Rol Nº 11022-2019,

Cita online: CL/JUR/15582/2020

ARTÍCULO 189
La apelación deberá interponerse en el término fatal de cinco días,
contados desde la notificación de la parte que entabla el recurso, deberá
contener los fundamentos de hecho y de derecho en que se apoya y las
peticiones concretas que se formulan.

Este plazo se aumentará a diez días tratándose de sentencias definitivas.

En aquellos casos en que la apelación se interponga con el carácter de


subsidiaria de la solicitud de reposición, no será necesario fundamentarla ni
formular peticiones concretas, siempre que el recurso de reposición cumpla
con ambas exigencias. En los procedimientos o actuaciones para las cuales
la ley establezca la oralidad, se podrá apelar en forma verbal siempre que
someramente se señalen los fundamentos de hecho y de derecho del recurso
y se formulen peticiones concretas, de todo lo cual deberá dejarse constancia
en el acta respectiva.

Las normas de los incisos anteriores no se aplicarán en aquellos


procedimientos en que las partes, sin tener la calidad de letrados, litiguen
personalmente y la ley faculte la interposición verbal del recurso de apelación.
En estos casos el plazo para apelar será de cinco días fatales, salvo
disposición especial en contrario.71

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 64, 65, 66, 181, 184, 185, 188,
201, 213, 216, 217, 319, 664, 665, 666, 682, 704 y 770. Código Procesal Penal: artículos 353,
362, 366 y 367. Ley Nº 18.287 sobre Procedimientos ante Juzgados de Policía Local:
artículo 32. Ley Nº 18.120 sobre Comparecencia en Juicio D.O. 18.05.1982: artículo 2º. Ley
Nº 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos: artículo 59, Código del Trabajo:
artículo 478. Código Tributario: artículos 139, 148.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Requisito de la apelación de contener peticiones concretas

En efecto, el artículo 189 dispone, de manera expresa, que el escrito


de apelación debe contener las peticiones concretas que se formulan y
la omisión de tal exigencia se encuentra a su vez sancionada en el
artículo 201 del Código de Procedimiento Civil, al prescribir que si la
apelación carece de aquéllas, el tribunal deberá declararla inadmisible
de oficio. Pues bien, las peticiones concretas se refieren a las
modificaciones que se solicitan respecto de la sentencia impugnada, y
deben reunir copulativamente dos menciones esenciales: a.- La
solicitud de revocación, modificación o enmienda de la sentencia
apelada o de alguna parte de ella; y b.- La indicación de cuál es la, o las
declaraciones, que se pretende reemplacen a las contenidas en la
resolución impugnada y cuya revocación o enmienda se pide (Julio
Salas Vivaldi, "La Formulación de Peticiones Concretas como requisito
de la Admisibilidad de la Apelación", Revista de Derecho de la
Universidad de Concepción, Nº 185, páginas 55 y siguientes). Tales
exigencias obedecen a la necesidad de delimitar la extensión de la
competencia del tribunal de alzada, reduciéndola al conocimiento de los
puntos que se encuentren comprendidos en las peticiones concretas
formuladas por el apelante y resguardan en la segunda instancia la
efectiva vigencia del principio de bilateralidad de la audiencia, es decir,
permiten que cada parte conozca oportunamente las pretensiones de la
contraria y sus fundamentos, ya que sólo así el proceso puede ser, en
esencia, un método de debate.

Corte Suprema, 7/02/2019, Rol Nº 29356-2018,


Cita online: CL/JUR/1021/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 6/09/2018, Rol Nº 12963-2018,

Cita online: CL/JUR/4979/2018

— Corte Suprema, 6/07/2018, Rol Nº 6241-2018,

Cita online: CL/JUR/3702/2018

2. Ingreso del recurso de apelación en cuaderno virtual distinto de aquel


que correspondía, no determina la admisibilidad del recurso

El escrito de apelación que debe ser tomado en cuenta para los fines
de examinar su admisibilidad es aquel que fuera presentado por la parte
demandada con la fecha mencionada. Ahora bien, la circunstancia de
que dicho recurso haya sido ingresado en un cuaderno virtual distinto
de aquel que correspondía, esto es, en el cuaderno principal en lugar
del cuaderno de excepciones dilatorias, no puede determinar la
admisibilidad o inadmisibilidad del recurso, porque ésa no es una
condición prevista en la ley para su procedencia. En tales condiciones,
revisado el escrito al que se alude, se advierte que el recurso satisface
los supuestos legales pertinentes, vale decir, fue presentado dentro de
plazo y contiene fundamentos y peticiones concretas, motivo por el cual
debió concederse (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 23/10/2018, Rol Nº 11523-2018,

Cita online: CL/JUR/7209/2018

3. Cómputo del plazo para apelar

De conformidad al artículo 189 del Código de Procedimiento Civil, el


termino para apelar constituye un plazo individual, que comienza a
correr para cada parte a contar de la fecha de su notificación, que en la
especie se materializó al momento de la presentación por las partes de
los escritos en que se dan por notificados del fallo en cuestión, todo lo
cual lleva a los sentenciadores a compartir las razones esgrimidas por
la Juez a quo en la resolución que declaró extemporáneo el recurso
deducido (considerando 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de La Serena, 15/03/2019, Rol Nº 189-2019,

Cita online: CL/JUR/1369/2019

4. Resolución que pone término a una tercería, tiene la naturaleza


jurídica de una sentencia definitiva, por lo tanto, el plazo de
interposición de recurso de apelación es de diez días hábiles

La naturaleza jurídica de la resolución que pone término a una tercería


es de sentencia definitiva pues pone fin a la instancia resolviendo la
cuestión o asunto que ha sido objeto del proceso. En ese sentido, que
se reserve una tramitación incidental a este tipo de juicios accesorios,
no tiene el efecto de transmutar la naturaleza jurídica de la decisión
jurisdiccional que la resuelve. En consecuencia, el plazo para interponer
el recurso de apelación es de diez días, conforme al artículo 189 del
Código de Procedimiento Civil, encontrándose dentro de plazo el
deducido y que motiva la presente causa (considerandos 3º y 4º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 8/07/2019, Rol Nº 7170-2019,

Cita online: CL/JUR/3969/2019


5. Recurso de apelación debe contener las peticiones concretas y
cumple los requisitos exigidos por la Ley

En la especie, del examen del recurso de apelación planteado por el


Servicio de Impuestos Internos, se puede concluir que éste contiene las
peticiones concretas que se exigen en los artículos 189 y 201 del
Código de Procedimiento Civil, ya señalados, puesto que se puede
advertir del mismo que, tanto en el cuerpo del libelo de apelación, como
en lo petitorio del mismo, existen como peticiones determinadas y
concretas, la solicitud en orden a que se revoque la sentencia definitiva
que se impugna, señalándose con claridad y certeza que lo que se
persigue y pretende con el recurso de apelación intentado es
precisamente la revocación de dicha sentencia, por causarle ésta
agravio a su parte, solo reparable por la vía del recurso de apelación
que interpone y que decidió acoger el reclamo interpuesto por el
contribuyente, fijando la competencia de este Tribunal de Alzada para
pronunciarse sobre ello, sin perjuicio que, en todo caso, es este Tribunal
de segunda instancia el que, entrando a conocer el fondo del asunto
debatido, determine en la sentencia respectiva, en su oportunidad, los
alcances de lo pretendido por el apelante (considerandos 10º y 11º de
la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Coyhaique, 26/07/2019, Rol Nº 3-2019,

Cita online: CL/JUR/4365/2019

6. Determinación de la existencia o no de agravio constituye una


consideración de fondo que debe realizar la Sala de la Corte de
Apelaciones que conozca el recurso

El artículo 189 primera parte del Código de Procedimiento Civil señala


que "La apelación deberá interponerse en el término fatal de cinco días,
contados desde la notificación de la parte que entabla el recurso, deberá
contener los fundamentos de hecho y de derecho en que se apoya y las
peticiones concretas que se formulan", mientras que el artículo 213
inciso 1º del Código de Procedimiento Civil establece que "Elevado un
proceso en apelación, el tribunal superior examinará en cuenta si el
recurso es admisible y si ha sido interpuesto dentro del término legal".
Del ejercicio hermenéutico de ambas disposiciones se advierte que el
control de admisibilidad es más bien una revisión de carácter formal y
no un pronunciamiento de fondo, desde que la determinación de la
existencia o no de agravio es una consideración de fondo que debe
realizar la Sala que conozca del arbitrio intentado y no puede ser
declarado, ex ante, en un examen previo, sin respeto a la bilateralidad
de la audiencia (considerando 2º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 21/10/2019, Rol Nº 13015-2019,

Cita online: CL/JUR/6112/2019

7. Interposición de reposición inútil no vicia lo útil de apelación


interpuesta de acuerdo al art. 189 del Código de Procedimiento Civil

En la especie, respecto de las decisiones de rechazo de las


diligencias de exhibición de documentos y de inspección personal del
tribunal y del incidente de entorpecimiento, el recurrente de hecho no
alega que por su naturaleza estas resoluciones no sean susceptibles de
recurso de apelación atendida su naturaleza jurídica, sino que este
recurso debió haberse deducido directamente contra el
pronunciamiento agraviante y no en subsidio de un recurso de
reposición. En relación a este punto cabe señalar que aún en el evento
de estimarse que las decisiones anteriores constituyen jurídicamente
sentencias interlocutorias y que resulte improcedente respecto de ellas
deducir recurso de reposición, no cabe sino concluir que la apelación
interpuesta dentro de quinto día y conteniendo fundamentos de hecho
y de derecho cumple las exigencias del artículo 189 del Código de
Procedimiento Civil, y que lo inútil que pudo resultar la interposición de
la reposición no puede viciar lo útil o determinar la inadmisibilidad de
una forma de impugnación formalmente ejercida con arreglo a la ley
(considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 11/06/2020, Rol Nº 3646-2020,

Cita online: CL/JUR/37441/2020

ARTÍCULO 190 (213)

El término para apelar no se suspende por la solicitud de reposición a que


se refiere el artículo 181.
Tampoco se suspende por la solicitud de aclaración, agregación o
rectificación de la sentencia definitiva o interlocutoria. El fallo que resuelva
acerca de dicha solicitud o en que de oficio se hagan rectificaciones conforme
al artículo 184, será apelable en todos los casos en que lo sería la sentencia
a que se refiera, con tal que la cuantía de la cosa declarada, agregada o
rectificada admita el recurso.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 57, 64, 65, 66, 181, 184, 185, 664,
665, 666 y 770.

ARTÍCULO 191 (214)

Cuando la apelación comprenda los efectos suspensivo y devolutivo a la


vez, se suspenderá la jurisdicción del tribunal inferior para seguir conociendo
de la causa.

Podrá, sin embargo, entender en todos los asuntos en que por disposición
expresa de la ley conserve jurisdicción, especialmente en las gestiones a que
dé origen la interposición del recurso hasta que se eleven los autos al
superior, y en las que se hagan para declarar desierta o prescrita la apelación
antes de la remisión del expediente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 87, 112, 187, 188, 194 a 197, 211,
339, 458, 652, 691 y 755. Código Procesal Penal: artículo 355. Ley Nº 19.253, sobre Protección,
Fomento y Desarrollo de los Indígenas: artículo 56.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Apelación concedida en ambos efectos, no impide que juez de


primera instancia se pronuncie sobre incidentes deducidos

Si bien es efectivo, que el antedicho artículo 191 señala que se


suspenderá la jurisdicción del tribunal inferior una vez concedido un
recurso de apelación que comprenda los efectos suspensivo y
devolutivo, dicha suspensión debe entenderse referida únicamente al
negocio principal en el cual se dictó la sentencia que es materia de la
apelación. De tal modo que el Juez de primer grado, sigue con
jurisdicción para conocer o seguir conociendo de incidentes que se
promuevan con relación a la causa principal, afirmación que se colige
de lo prevenido en el artículo 87 del Código de Procedimiento Civil,
norma que establece la destinación (sic) entre incidentes que
suspenden o no el curso de la causa principal siendo precisamente el
caso de las medidas precautorias uno de aquellos incidentes que no
suspenden el curso de la cuestión principal, como lo previene el
artículo 302, al señalar que el incidente a que dé lugar estas medidas
se tramitarán en conformidad a las reglas generales y por cuenta
separada. Que, por último, esta afirmación está en consonancia con lo
dispuesto en el artículo 290 del Código de Procedimiento Civil que
autoriza al demandante para asegurar el resultado de la acción en
cualquier estado del juicio, aun cuando no esté contestada la demanda
pedir las medidas que dicha disposición previene, norma que no puede
ser restringida por el hecho de existir sentencia en el pleito con
apelación pendiente, sobre todo, si se considera, que en el presente
caso ha sido el fallo favorable al actor lo que hace aún más plausible el
ejercicio de este derecho (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 16/11/1988, Rol Nº 13152-1998,


Cita online: CL/JUR/388/1988

ARTÍCULO 192 (215)

Cuando la apelación proceda sólo en el efecto devolutivo, seguirá el


tribunal inferior conociendo de la causa hasta su terminación, inclusa la
ejecución de la sentencia definitiva.

No obstante, el tribunal de alzada a petición del apelante y mediante


resolución fundada, podrá dictar orden de no innovar. La orden de no innovar
suspende los efectos de la resolución recurrida o paraliza su cumplimiento,
según sea el caso. El tribunal podrá restringir estos efectos por resolución
fundada. Los fundamentos de las resoluciones que se dicten de conformidad
a este inciso no constituyen causal de inhabilidad.72

Las peticiones de orden de no innovar serán distribuidas por el Presidente


de la Corte, mediante sorteo, entre las salas en que esté dividida y se
resolverán en cuenta. Decretada una orden de no innovar, quedará radicado
el conocimiento de la apelación respectiva en la sala que la concedió y el
recurso gozará de preferencia para figurar en tabla y en su vista y fallo.73

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 87, 112, 187, 188, 194, 195, 196, 197,
211, 339, 458, 652, 755 y 774. Código Procesal Penal: artículos 355 y 368. Código Orgánico de
Tribunales: artículos 99, 551 y 558. Ley Nº 18.302, Ley de Seguridad Nuclear: artículo 37. Ley
Nº 18.933, crea la Superintendencia de Instituciones de Salud Previsional: artículo 7 Auto
Acordado de la Corte Suprema 6.11.1972.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Tribunal de primer grado no pierde su competencia y la causa


continúa su sustanciación cuando se concede un recurso en el solo
efecto devolutivo

Concedido un recurso en el solo efecto devolutivo el tribunal de primer


grado no pierde su competencia y la causa continúa su sustanciación
como si no se hubiese deducido arbitrio alguno, pudiendo incluso
dictarse sentencia definitiva. Por ende, la circunstancia de haber sido
impugnada la resolución que negó lugar al incidente de nulidad, no
implicó, como parece entender el recurrente, que sus efectos quedaran
en suspenso, sino que, por el contrario, rechazada en primera instancia
la incidencia de nulidad de lo obrado, el juicio ejecutivo prosiguió su
curso. Por tanto, resultan extemporáneas las excepciones opuestas a
la ejecución, pues el incidente de nulidad procesal fue desestimado y
las excepciones fueron opuestas habiendo transcurrido más de tres
meses desde aquello. En cuanto a la alegación relativa a que el
requerimiento no habría sido efectuado conforme a derecho, dicho
postulado fue descartado por los jueces de la instancia al momento de
rechazar la incidencia de nulidad, decisión que se encuentra firme y
ejecutoriada (considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 28/05/2018, Rol Nº 6166-2018,


Cita online: CL/JUR/2477/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 8/05/2018, Rol Nº 3410-2018,

Cita online: CL/JUR/4617/2018

2. Posibilidad que las partes puedan seguir actuando ante el tribunal


inferior cuando una apelación se concede únicamente en lo devolutivo
es de carácter facultativa y condicional

Respecto al recurso de apelación pendiente y la posibilidad concedida


por la ley para que las partes puedan seguir actuando ante el tribunal
inferior cuando una apelación se concede únicamente en lo devolutivo,
presenta dos características: es facultativa y es condicional. Facultativa,
en el sentido que queda entregado a la voluntad de la parte apelada
instar o no por la prosecución del juicio, puesto que los tribunales sólo
actúan, por regla general, a requerimiento de la parte interesada.
Condicional, en el sentido que todo lo obrado ante el juez inferior queda
entregado a lo que, en definitiva, resuelva el superior; si la resolución es
confirmada, lo obrado con posterioridad adquirirá el carácter de
definitivo y, a la inversa, si dicha resolución es revocada, lo obrado con
posterioridad quedará sin efecto ni valor alguno. Por ende, no teniendo
obligación el apelado de llevar adelante la tramitación del cuaderno
principal en la situación descrita, y no estando posibilitado tampoco, en
su condición de tal, de pedir una orden de no innovar, no puede
declararse en su perjuicio el abandono de procedimiento
(considerando 5º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 13/06/2018, Rol Nº 1533-2018,


Cita online: CL/JUR/2835/2018

ARTÍCULO 193 (216)

Cuando se otorga simplemente apelación, sin limitar sus efectos, se


entenderá que comprende el devolutivo y el suspensivo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 187, 188, 191, 195, 196 y 776.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Recurso de apelación que debe ser concedido en ambos efectos

En la materia de que se trata, el recurso de apelación se encuentra


regulado en los artículos 139 y siguientes del Código Tributario y dichas
normas legales no limitan los efectos en que debe otorgarse el recurso
de apelación deducido en contra de la sentencia definitiva que falla un
reclamo y, atendida la remisión efectuada por el artículo 148 del mismo
cuerpo legal a las normas del Código de Procedimiento Civil en cuanto
no fueren incompatibles con la naturaleza de las reclamaciones y, en
especial lo señalado en el artículo 193 de este último cuerpo adjetivo,
en cuanto a que de otorgarse simplemente apelación, sin limitar sus
efectos, se entenderá que comprende el devolutivo y el suspensivo,
debe concluirse que la apelación cuyos efectos otorgados se reclama,
debió ser concedida en ambos efectos (considerando 3º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).
Corte de Apelaciones de San Miguel, 17/02/2015, Rol Nº 4-2015,

Cita online: CL/JUR/942/2015

2. Apelación sobre resolución que se pronuncia sobre una tercería de


posesión, debe concederse en ambos efectos, pues constituye una
sentencia definitiva

Por lo razonado, puede deducirse que la sentencia que decidió la


tercería de posesión interpuesta por el recurrente, puso fin a la instancia
de un procedimiento especial, resolviendo la cuestión o asunto que
había sido objeto de la acción interpuesta por su parte, de modo que la
resolución impugnada, tiene la naturaleza de una sentencia definitiva.
En tal circunstancia, el plazo para interponer la apelación, según lo
dispuesto en el artículo 189 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil
es de diez días. Que se ha escrito que "Aun cuando la sustantividad del
pronunciamiento jurisdiccional en uno u otro caso (se refiere a los
distintos tipos de tercerías) es de suyo diferente, la sentencia que falla
cualquiera de estas tercerías tiene el mismo carácter, es sentencia
definitiva; y, consecuencialmente, ambas deben reunir los requisitos del
artículo 170 del Código de Procedimiento Civil y producirán los mismos
efectos procesales. Ambos terceristas estarán legitimados para recurrir
respecto de ella cuando lesione sus intereses, haciendo uso de la vía
impugnativa correspondiente, procediendo ( ) los recursos ordinarios y
extraordinarios en conformidad a las reglas generales" (Sergio
Rodríguez Garcés, Tratado de las Tercerías, tercera edición, Ediciones
Vitacura Ltda., tomo II, página 633). Que teniendo la resolución que falla
una tercería de posesión, la naturaleza jurídica de sentencia definitiva,
de conformidad con lo dispuesto en el artículo 193 del Código de
Procedimiento Civil, la apelación debe concederse en ambos efectos
(considerandos 10º y 11º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 10/10/2008, Rol Nº 364-2008,

Cita online: CL/JUR/6187/2008

ARTÍCULO 194 (217)

Sin perjuicio de las excepciones expresamente establecidas en la ley, se


concederá apelación sólo en el efecto devolutivo:
1º De las resoluciones dictadas contra el demandado en los juicios
ejecutivos y sumarios;

2º De los autos, decretos y sentencias interlocutorias;74

3º De las resoluciones pronunciadas en el incidente sobre ejecución de una


sentencia firme, definitiva o interlocutoria;

4º De las resoluciones que ordenen alzar medidas precautorias; y

5º De todas las demás resoluciones que por disposición de la ley sólo


admitan apelación en el efecto devolutivo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 100, 112, 187, 188, 191 a 194, 196,
197, 307, 366, 375, 414, 523, 550, 606, 614, 691, 773 y 921. Ley Nº 19.620, sobre Adopción de
Menores: artículo 17. Ley Nº 19.968, sobre Tribunales de Familia: artículo 67.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 194 Nº 1)

1. Procedencia de la apelación en contra de la sentencia definitiva que


da lugar a la terminación del arrendamiento dictada en juicio sumario
en el solo efecto devolutivo

Si bien la resolución impugnada, que acoge la demanda de


terminación de contrato de arrendamiento, reviste la naturaleza jurídica
de una sentencia definitiva, ésta fue dictada conforme a las normas del
procedimiento sumario, cuya materia es el término de un contrato de
arrendamiento, de modo que, conforme lo disponen los artículos 194
Nº 1 y 614 del Código de Procedimiento Civil, el recurso de
apelación debió concederse en el solo efecto devolutivo
(considerando 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 11/05/2017, Rol Nº 296-2017,

Cita online: CL/JUR/2907/2017

2. Sentencia definitiva que da lugar a la terminación del contrato de


arrendamiento es apelable en el solo efecto devolutivo

La naturaleza jurídica de la resolución impugnada es la de una


sentencia definitiva, dictada en un procedimiento sumario y conforme al
artículo 194 del Código de Procedimiento Civil es apelable en el solo
efecto devolutivo y por su parte, el artículo 614 del Código de
Procedimiento Civil, aplicable en la especie, establece que cuando las
sentencias dictadas en los caso de que trata el presente párrafo dieren
lugar a la terminación del contrato de arrendamiento, sólo serán
apelables en el efecto devolutivo, razones por las cuales se acogerá el
presente recurso de hecho (considerando 6º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 11/06/2018, Rol Nº 6145-2018,

Cita online: CL/JUR/2820/2018

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 194 Nº 2)

1. Resolución que rechaza los incidentes de abandono del


procedimiento y de nulidad de autos es una sentencia interlocutoria,
por lo que procede conceder recurso de apelación en el solo efecto
devolutivo

Al momento de analizar lo expuesto por la parte recurrente, ha de


señalarse que la resolución impugnada, esto es, aquella que rechaza
los incidentes de abandono del procedimiento y de nulidad de autos,
corresponde, a la luz del artículo 158 del Código de Procedimiento Civil,
a una sentencia interlocutoria de primer grado, y en consecuencia el
tribunal a quo ha obrado conforme a derecho, al momento de conceder
el recurso en el solo efecto devolutivo deducido en forma subsidiaria,
pues el artículo 194 Nº 2 del Código de Procedimiento Civil dispone que
"Sin perjuicio de las excepciones expresamente establecidas en la ley,
se concederá apelación sólo en el efecto devolutivo: ...2º De los autos,
decretos y sentencias interlocutorias" (considerando 3º sentencia Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 2/02/2015, Rol Nº 10103-2014,

Cita online: CL/JUR/522/2015

2. Resolución que posee la naturaleza jurídica de una sentencia


interlocutoria de segundo grado, es susceptible de recurso de
apelación en el solo efecto devolutivo

La resolución impugnada, esto es, aquella que desestimó la petición


del acreedor hipotecario de concurrir al remate sin caución y de pagarse
su acreencia con cargo al crédito, participa de la naturaleza jurídica de
una sentencia interlocutoria de segundo grado, por lo que de
conformidad con lo dispuesto en el numeral 2º del artículo 194 y 187,
ambos del Código de Procedimiento Civil, por lo que procede a su
respecto el recurso de apelación. En las condiciones anotadas
corresponde acoger el recurso de hecho (Considerando 3º de la
sentencia de Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 12/04/2019, Rol Nº 372-2019,

Cita online: CL/JUR/3517/2019

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 194 Nº 4)

1. No es aplicable este artículo a la resolución decreta una medida


precautoria

Conforme a lo antes razonado, cabe concluir que la resolución que


decreta medida precautoria tiene el carácter de auto, que no se
encuadra en la hipótesis fáctica de excepción del artículo 188 del
Código de Procedimiento Civil, que autoriza para deducir una apelación
en forma subsidiaria de una solicitud de reposición, cuando altera la
sustanciación regular del juicio o recae sobre trámites que no están
expresamente ordenados por la ley, cuyo no es el caso. Tampoco se
trata de la hipótesis de excepción consagrada en el artículo 194 Nº 4 del
Código de Procedimiento Civil, que autoriza el recurso de apelación en
el sólo efecto devolutivo respecto de la resolución que ordena alzar una
medida precautoria, por lo que solo excepciona ese caso y no aquel que
rechaza el alzamiento, siguiendo el principio que una excepción se
restringe al caso expresamente comprendido en ella. De esta forma,
corresponde el rechazo del recurso de hecho intentado
(considerando 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Talca, 23/02/2018, Rol Nº 6-2018,

Cita online: CL/JUR/876/2018

2. Procede recurso de apelación respecto de la resolución que no hace


lugar al alzamiento medidas precautorias
En la especie, cabe tener presente que sin perjuicio de cuál sea la
naturaleza jurídica de la resolución recurrida, el artículo 194 Nº 4 del
Código de Procedimiento Civil dispone que procede el recurso de
apelación, en el solo efecto devolutivo, respecto de la resolución que
ordena alzar medidas precautorias, por lo que no se vislumbra ningún
argumento para que no fuere también apelable la resolución que no
hace lugar al alzamiento, desde que la norma antes citada solo limita el
efecto en que dicho recurso debe concederse, mas no el derecho a
interponerlo (considerando 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 22/03/2019, Rol Nº 345-2019,

Cita online: CL/JUR/1595/2019

ARTÍCULO 195 (218)

Fuera de los casos determinados en el artículo precedente, la apelación


deberá otorgarse en ambos efectos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 187, 188, 191, 193, 194, 196, 691,
776 y 921.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Resolución que resuelve demanda de tercería de dominio tiene


carácter de sentencia definitiva y es apelable en ambos efectos

Arguye que conforme a lo dispuesto en el artículo 158 del Código de


Procedimiento Civil, en armonía con lo prescrito en el artículo 521 del
mismo cuerpo legal, la resolución impugnada es una sentencia definitiva
que pone fin a la instancia y resuelve el asunto que ha sido objeto del
juicio, de lo que colige que ha de aplicarse la regla general establecida
en el artículo 195 del mismo código, y en consecuencia otorgar la
apelación en ambos efectos.

Corte de Apelaciones de Santiago, 17/08/2018, Rol Nº 9235-2018,

Cita online: CL/JUR/4580/2018


2. Resolución que resuelve demanda de cobro incidental de honorarios
tiene naturaleza de sentencia definitiva, por lo que la apelación en su
contra debe otorgarse en ambos efectos

En consecuencia, siendo la resolución impugnada una sentencia


definitiva, el plazo para deducir recurso de apelación era de diez días y
debe concederse, además, en ambos efectos, aplicación al artículo 195
del Código de Procedimiento Civil, ya que la apelación de una
resolución que no se encuadra dentro de la regulación del artículo 194,
del mismo cuerpo legal, debe ser concedida de esa forma
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 27/02/2019, Rol Nº 309-2019,

Cita online: CL/JUR/1328/2019

3. La sentencia definitiva en juicio de cobro de honorarios es apelable


en ambos efectos

La causa en que incide el presente recurso de hecho, es un


procedimiento incidental de cobro de honorarios, y se está en presencia
de la resolución que resuelve tal incidencia, la que reviste la naturaleza
jurídica de una sentencia definitiva, y por ende, debe darse estricta
aplicación al artículo 195 del Código de Procedimiento Civil, en orden a
que la apelación de una resolución que no se encuadra dentro de las
excepciones del art ículo 194 del mismo Código, debe ser concedida en
ambos efectos, situación que se aplica en la especie (considerando 3º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 14/07/2016, Rol Nº 76-2016,

Cita online: CL/JUR/4985/2016

Fallo en el mismo sentido.

— Corte de Apelaciones de Santiago, 3/03/1999, Rol Nº 6163-1998,

Cita online: CL/JUR/1800/1999.

ARTÍCULO 196 (219)


Si el tribunal inferior otorga apelación en el efecto devolutivo, debiendo
concederla también en el suspensivo, la parte agraviada, dentro del plazo de
cinco días contado desde la fecha de la certificación a que se refiere el
artículo 200, podrá pedir al superior que desde luego declare admitida la
apelación en ambos efectos; sin perjuicio de que pueda solicitarse igual
declaración, por vía de reposición, del tribunal que concedió el recurso.75

Lo mismo se observará cuando se conceda apelación en ambos efectos,


debiendo otorgarse únicamente en el devolutivo, y cuando la apelación
concedida sea improcedente. En este último caso podrá también de oficio el
tribunal superior declarar sin lugar el recurso.

Las declaraciones que haga el superior en conformidad a los dos incisos


anteriores, se comunicarán al inferior para que se abstenga, o siga
conociendo del negocio, según los casos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 191, 203, 204, 205, 206 y 213.
Código Tributario: artículo 148.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Consagración del verdadero y falso recurso de hecho

El recurso de hecho supone que el agravio se ha cometido por el


tribunal ante el cual se dedujo la apelación, esto es, el que dictó la
resolución recurrida, y se interpone directamente ante el tribunal
llamado a conocer de este último. Así se desprende del artículo 203 del
Código de Procedimiento Civil, que consagra el denominado verdadero
recurso de hecho y del artículo 196 del mismo cuerpo legal, que regula
los casos del llamado falso recurso de hecho. Ambas disposiciones
hablan de ocurrir ante el tribunal superior respectivo, mas no
refiriéndose al superior del que emite el pronunciamiento de
admisibilidad o inadmisibilidad —que también corresponde al tribunal
ad quem— sino al del tribunal que dictó la resolución que ha sido objeto
de la apelación. De este modo, las resoluciones que una Corte de
Apelaciones dicte al efectuar el control de admisibilidad de un recurso,
en tanto tribunal de segunda instancia, no son susceptibles de ser
impugnadas por la vía del recurso de hecho, el que la ley solo ha
previsto para ser interpuesto y conocido por el tribunal llamado a
conocer de la apelación, cuando el agravio se ha cometido por el a quo
(considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 3/01/2018, Rol Nº 45479-2017,
Cita online: CL/JUR/24/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 24/07/2018, Rol Nº 16573-2018,

Cita online: CL/JUR/3911/2018

— Corte Suprema, 20/02/2018, Rol Nº 2838-2018,

Cita online: CL/JUR/782/2018

ARTÍCULO 197

La resolución que conceda una apelación se entenderá notificada a las


partes conforme al artículo 50. El tribunal remitirá electrónicamente al tribunal
de alzada copia fiel de la resolución apelada, del recurso y de todos los
antecedentes que fueren pertinentes para un acabado pronunciamiento sobre
éste.

Recibidos los antecedentes referidos en el inciso anterior, la Corte de


Apelaciones procederá a la asignación de un número de ingreso. Acto
seguido, formará un cuaderno electrónico separado para el conocimiento y
fallo del recurso cuando él haya sido concedido en el solo efecto devolutivo.
En el caso que la apelación fuere concedida en ambos efectos, el tribunal de
alzada continuará la tramitación en la carpeta electrónica, la que estará
disponible en el sistema de tramitación electrónica del tribunal de alzada
correspondiente.76

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 37, 191, 192, 776 y 777. Código
Procesal Penal: artículo 371. Decreto con Fuerza de Ley Nº 1, 1993, fija texto Ley Orgánica del
Consejo de Defensa del Estado, Min. Hacienda, D.O. 7.08.1993: artículo 53. Código del Trabajo,
artículo 479.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Ley de Tramitación Electrónica eliminó la obligación de compulsar el


expediente

La Ley de Tramitación Electrónica eliminó, por completo, la obligación


de compulsar el expediente, cuestión que no se aviene con la existencia
de una carpeta electrónica y con la remisión, vía interconexión de los
recursos. El artículo primero transitorio de la Ley Nº 20.886 estableció
una fecha definida para la entrada en vigencia, a contar de la fecha de
su publicación. En concreto, para las causas que se tramitan ante los
tribunales que ejerzan jurisdicción en los territorios jurisdiccionales de
la Corte de Apelaciones de Santiago, el plazo era de 1 año a contar de
la publicación, realizada el 18.12.2015. Luego, a la fecha del
pronunciamiento de la resolución que tiene por desistido a la actora del
recurso de casación intentado, se encontraba vigente la Ley de
Tramitación Electrónica, que eliminó la carga procesal prevista en el
artículo 197 del Código de Procedimiento Civil, relativa a la obligación
de depositar el dinero para compulsar, razón por la que no resultaba
procedente que el tribunal de alzada exigiera su cumplimiento y aplicara
la sanción prevista en el inciso final de su antiguo texto, esto es, tenerlo
por desistido del arbitrio. En consecuencia, la sentencia impugnada
incurre en los errores de derecho acusados en el libelo de casación, en
tanto, realiza una errada interpretación del artículo 1º y 2º transitorio de
la Ley Nº 20.886, contraviniendo, además, el artículo 24 de la Ley sobre
Efecto Retroactivo de las leyes, al desconocer el carácter de ley
procesal del artículo 197 del Código de Procedimiento Civil, normas
modificadas por el primer cuerpo normativo citado, reformas que rigen
desde la época específica establecida en el artículo primero transitorio,
razón por la que resultaba improcedente exigir el depósito del dinero
necesario para compulsar el expediente dentro del plazo de cinco días
en la Secretaría respectiva, toda vez que la legislación vigente no prevé
tal requerimiento (considerandos 6º, 8º y 10º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 11/11/2019, Rol Nº 4435-2019,


Cita online: CL/JUR/6517/2019

2. Interpretación de los artículos 776 y 197 del Código de Procedimiento


Civil en relación a la Ley Nº 20.886

La Corte de Apelaciones primeramente concede el recurso de


casación en el fondo y condiciona el envío de los antecedentes al
Tribunal de Casación al cumplimiento de la obligación prevista en el
artículo 197 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil.
Posteriormente, a la luz de las modificaciones introducidas por la
Ley Nº 20.886 al artículo 776 del Código de Procedimiento Civil, exime
al demandante de tal carga y decreta la remisión vía interconexión. Sin
embargo, luego vuelve a imponérsela y fija un plazo para que el
recurrente consigne fondos suficientes que permitan cubrir el valor de
las respectivas compulsas dentro de sexto día, apercibiéndolo con la
sanción de tener por no presentado el recurso para todos los efectos
legales. La obligación aparece satisfecha por el actor dentro del lapso
que se le otorgó y, no obstante, el tribunal de alzada anula de oficio lo
resuelto, en el entendido que las resoluciones dictadas los días veinte y
veinticinco de septiembre de dos mil dieciocho hicieron revivir un plazo
que ya había expirado, declarando, a la postre, el desistimiento del
recurso por no haber cumplido el recurrente lo ordenado en la primitiva
resolución de cinco de septiembre del año en curso. Las diferentes y
discordantes interpretaciones que los ministros de la Corte de
Apelaciones han efectuado respecto a los artículos 776 y 197 del
Código de Procedimiento Civil en relación a la Ley Nº 20.886, sin duda
agravian al demandante, pues alteran las formas y modalidades que
han de observarse para consagrar la indefectibilidad de las resoluciones
que se dicten en el procedimiento, afectando de este modo los derechos
que de ellas emanan para las partes del juicio. El órgano jurisdiccional
tiene el deber de velar por la debida tramitación del proceso y para ello
puede disponer de las herramientas que el ordenamiento jurídico le
entrega para corregir los defectos que puedan afectar la validez de una
relación procesal o los errores en que se incurra en la substanciación
del juicio. Sin embargo, el ejercicio de tal atribución no puede afectar los
derechos que se generan para las partes con ocasión de los
pronunciamientos del tribunal, como acontece en la situación que se
revisa, no solo porque las resoluciones dictadas los días veinte y
veinticinco de septiembre del año en curso no fueron impugnadas por
las partes, sino porque al invalidarlas de oficio se sanciona al recurrente
de casación con el desistimiento de su recurso pese a que a ese
entonces dicha parte había cumplido lo mandatado por los jueces y
procedió a efectuar la consignación dentro del plazo que esa misma
Corte le otorgó, actuación que realizó con la precisa finalidad de evitar
que se hiciera efectivo el apercibimiento de aplicar esa medida
(considerandos 2º y 3º de la anulación de oficio).

Corte Suprema, 4/12/2018, Rol Nº 26702-2018,


Cita online: CL/JUR/6886/2018
3. Improcedencia de declarar desiertos recursos de casación por falta
de pago de las compulsas si al interponerlos se encontraba vigente la
Ley de Tramitación Electrónica

En la especie, a la fecha del pronunciamiento de la resolución que


declara desistidos los recursos de casación de la recurrente —en
realidad, la sanción aplicada es la deserción— se encontraba vigente la
Ley de Tramitación Electrónica, que eliminó la carga procesal de
obtener compulsas de determinadas piezas del expediente, a fin de
continuar con su tramitación en primera instancia, razón por la cual no
resultaba procedente que el tribunal de alzada exigiera su cumplimiento
y aplicara la sanción prevista en el antiguo texto del artículo 197 inciso
final del Código de Procedimiento Civil. Como puede observarse de las
normas transcritas, luego del examen de admisibilidad del recurso de
casación en el fondo ante el tribunal de segunda instancia, en caso de
existir materias que requieran cumplimiento ante el juez de primer
grado, se disponía la obtención de compulsas, existiendo remisión
expresa al inciso segundo del artículo 197 del Código de Procedimiento
Civil, en cuanto éste refiere la tramitación que se observará con
posterioridad a la concesión del recurso. Sin embargo, la sanción
procesal de deserción se encontraba en el inciso tercero de la misma
disposición. Lo anterior resulta gravitante si se considera que,
constituyendo la deserción del recurso de casación una sanción
procesal que trae como consecuencia natural la ejecutoria de la
sentencia definitiva, su aplicación solamente puede obedecer a una
norma expresa que la contemple para el caso concreto, sin que sea
posible su imposición por analogía. Por tanto, ella debe entenderse
aplicable exclusivamente a la apelación que se conceda en el solo
efecto devolutivo contra la sentencia de primera instancia y no a los
recursos que procedan para impugnar el fallo de segundo grado, por
cuanto la regulación específica de la casación que debe ser conocida
por esta Corte Suprema, si bien imponía la obligación de compulsar, no
contenía apercibimiento, como tampoco sanción alguna para su
incumplimiento. conforme a todo lo razonado precedentemente, al
declarar desiertos los recursos de casación en la forma y en el fondo
interpuestos, en razón de la falta de pago de las compulsas ordenadas,
en aplicación del apercibimiento contemplado en el artículo 197 del
Código de Procedimiento Civil, la Corte de Apelaciones de Santiago
incurrió en un vicio de nulidad que alteró gravemente la ritualidad del
procedimiento, generando a la parte un perjuicio que sólo es reparable
con la invalidación de tal resolución (considerandos 3º, 6º y 8º de la
actuación de oficio de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 29/11/2019, Rol Nº 17410-2019,


Cita online: CL/JUR/12082/2019

4. Obligación de consignar fondos para las compulsas dentro del plazo


legal alcanza al recurso de casación en el fondo

Esta Corte ha señalado que la remisión del artículo 776 del Código de
Procedimiento Civil a los incisos primero y segundo del artículo 197 es
un error formal que configura una expresión oscura de la ley, de manera
que para dilucidar su sentido y alcance es necesario acudir a la
intención o espíritu manifestado en la historia fidedigna de dicha
normativa. Siguiendo esta línea de razonamiento resulta pertinente
consignar que el citado artículo 197 tenía solo dos incisos en su
redacción primitiva —anterior a la modificación de la ley Nº 18.705—,
siendo el acápite final del segundo de ellos idéntico al actual inciso
tercero, sin que exista antecedente alguno que induzca a pensar que la
intención del legislador haya sido la de innovar en la sanción aplicable
al caso. Por consiguiente, una recta inteligencia de los artículos 776 y
197 del Código de Procedimiento Civil no puede ser aquella que postula
el recurrente, pues ello dejaría sin aplicación la sanción impuesta al
litigante que no satisface la carga procesal de financiar sus compulsas
y la regla del artículo 776 inciso 2º se tornaría inútil y desarmónica con
el entorno en que se inserta. En consecuencia, forzoso es concluir que
el legislador incurrió en un error formal al referir su remisión al
artículo 197 inciso 2º, sin reparar en que su texto luego de la
modificación incorporada por la ley Nº 18.705 había desplazado la
sanción de desistimiento del recurso al inciso tercero (considerandos 4º
y 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/01/2018, Rol Nº 36811-2017,


Cita online: CL/JUR/112/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 18/01/2018, Rol Nº 36711-2017,

Cita online: CL/JUR/240/2018


ARTÍCULO 198

Derogado.77

ARTÍCULO 199 (222)

La apelación de toda resolución que no sea sentencia definitiva se verá en


cuenta, a menos que cualquiera de las partes, dentro del plazo de cinco días
contado desde la certificación a que se refiere el artículo 200, solicite
alegatos.78

Vencido este plazo, el tribunal de alzada ordenará traer los autos en


relación, si se hubieren solicitado oportunamente alegatos. De lo contrario, el
Presidente de la Corte ordenará dar cuenta y procederá a distribuir, mediante
sorteo, la causa entre las distintas salas en que funcione el tribunal.

Las Cortes deberán establecer horas de funcionamiento adicional para el


conocimiento y fallo de las apelaciones que se vean en cuenta.79

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 161, 200, 223 a 226. Código
Orgánico de Tribunales: artículos 68, 71, 99, 104, 372 y 378. Ley Nº 19.253, sobre Protección,
Fomento y Desarrollo de los Indígenas: artículo 56. Código Tributario: artículo 143.

ARTÍCULO 200

El tribunal de alzada deberá certificar en la carpeta electrónica la recepción


de la comunicación a que se refiere el artículo 197 y su fecha.80

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 65, 66, 199, 201, 202, 203, 211,
217, 779, 780, 782, 800 y 813. Constitución Política: artículo 21. Código Procesal Penal:
artículo 358. Código Orgánico de Tribunales: artículo 398. Código del Trabajo: artículo 467.
Código Tributario: artículos 143 y 165 Nº 5. Código de Aguas: artículo 247. Ley Nº 18.287, sobre
procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículo 32. Ley Nº 18.556, orgánica
constitucional sobre sistema de inscripciones y servicio electoral: artículo 52. Ley Nº 18.603,
Orgánica Constitucional de Partidos Políticos: artículo 59, Código del Trabajo: artículo 479.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Eliminación de carga procesal de hacerse parte en segunda instancia
solo es aplicable a las causas iniciadas con posterioridad a la entrada
en vigencia de la Ley de Tramitación Electrónica

Si bien la Ley Nº 20.886 sustituyó el artículo 200 del Código de


Procedimiento Civil, prescindiendo de la obligación de hacerse parte en
segunda instancia, y eliminó en el artículo 201 la sanción de deserción
del recurso, dicha modificación legal solo resulta aplicable a las causas
iniciadas con posterioridad a la entrada en vigencia de la denominada
Ley de Tramitación Electrónica. Y para determinar esa fecha, su
articulado segundo transitorio dispuso que deberá estarse a la
presentación de la demanda o medida prejudicial, según corresponda.
En este caso la causa se inició en el mes de octubre del año 2011, esto
es, con anterioridad a la entrada en vigencia de la Ley Nº 20.886, por lo
tanto, los sentenciadores han efectuado una correcta aplicación de la
normativa pertinente al caso de que se trata, al declarar desierto el
recurso de apelación interpuesto contra la sentencia de primer grado.
En efecto y conforme al artículo segundo transitorio, el recurrente debió
cumplir con la carga procesal de hacerse parte en segunda instancia
dentro del plazo legal, ello por cuanto el articulado transitorio de la Ley
de Tramitación Electrónica, conforme a lo razonado prevalece sobre las
disposiciones de la Ley sobre Efecto Retroactivo de las Leyes
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 13/11/2019, Rol Nº 27518-2019,


Cita online: CL/JUR/7009/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 29/01/2020, Rol Nº 36179-2019,

Cita online: CL/JUR/9389/2020

— Corte Suprema, 8/11/2019, Rol Nº 29529-2018,

Cita online: CL/JUR/6476/2019

— Corte Suprema, 15/10/2019, Rol Nº 12673-2019,

Cita online: CL/JUR/6027/2019


— Corte Suprema, 3/06/2019, Rol Nº 31266-2018,

Cita online: CL/JUR/3066/2019

— Corte de Apelaciones de Valparaíso, 18/01/2019, Rol Nº 23-2019,

Cita online: CL/JUR/330/2019

2. Alcance del artículo 2º transitorio de la Ley Nº 20.886

No es óbice para concluir así el artículo 2º transitorio de la


Ley Nº 20.886, toda vez que el sentido y alcance de esta disposición es
limitado, referido únicamente al respaldo material constituido por el
expediente físico que ahora pasó a ser electrónico. En efecto, la
tramitación electrónica que constituyó el eje de la reforma, involucró un
cambio esencial relacionado con la materialidad del expediente, el que
se elimina. Es en razón de aquello que, para realizar la transición, se
decidió que las causas anteriores a la vigencia de la ley, que ya
contaban con un expediente material, podrían seguir tramitándose de
aquel modo. Este es el único objeto que tuvo el artículo 2º transitorio,
que constituye una norma excepcionalísima, que debe ser interpretada
en armonía con la naturaleza de la ley procesal y con la expresa
disposición de vigencia consagrada en el artículo primero transitorio
antes referido (considerando 7º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 4/11/2019, Rol Nº 28507-2018,


Cita online: CL/JUR/6731/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 25/10/2019, Rol Nº 5004-2019,

Cita online: CL/JUR/6375/2019

3. Eliminación de la carga procesal de hacerse parte ante el tribunal


superior a seguir el recurso interpuesto

La Ley Nº 20.886 (Ley de Tramitación Electrónica) modificó el texto


del artículo 200 del Código de Procedimiento Civil, que establecía la
carga procesal que pesaba sobre el apelante de comparecer ante el
tribunal superior, haciéndose parte del recurso dentro del plazo de cinco
días contado desde que se reciban los autos en la Secretaría. En efecto,
el actual texto del artículo antes referido únicamente señala: "El tribunal
de alzada deberá certificar en la carpeta electrónica la recepción de la
comunicación a que se refiere el artículo 197 y su fecha", eliminando la
carga procesal antes indicada. El artículo 1º transitorio estableció una
fecha definida para la entrada en vigencia, a contar de la fecha de su
publicación. En concreto, para las causas que se tramitan ante los
tribunales que ejerzan jurisdicción en los territorios jurisdiccionales de
la Corte de Apelaciones de Valparaíso, el plazo era de un año a contar
de la publicación, realizada el 18.12.2015. Por tanto, a la fecha del
pronunciamiento de la resolución que declara desierta la apelación de
la reclamante, se encontraba vigente la Ley de Tramitación Electrónica,
que eliminó la carga procesal de hacerse parte en segunda instancia
dentro del plazo de cinco días desde el ingreso de los autos a la
Secretaría, razón por la que no resultaba procedente que el tribunal de
alzada exigiera su cumplimiento y aplicara la sanción prevista en el
antiguo texto del artículo 200 del Código de Procedimiento Civil. En
consecuencia, actuando de oficio, se dejará sin efecto lo obrado desde
la dictación de la resolución que decidió declarar desierto el recurso de
apelación (considerandos 4º, 6º y 8º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 25/02/2020, Rol Nº 33971-2019,


Cita online: CL/JUR/12797/2020

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 27/02/2020, Rol Nº 20991-2020,

Cita online: CL/JUR/42091/2020

4. Tribunales arbitrales continúan con la tramitación en expedientes


materiales

De acuerdo al artículo 3º transitorio de la Ley Nº 20.886, "las


modificaciones introducidas en el Código de Procedimiento Civil y en el
Código Orgánico de Tribunales mediante los artículos 12 y 13,
respectivamente, no se aplicaran a las causas tramitadas en tribunales
distintos de los comprendidos en el artículo 1º". A su vez, el referido
artículo 1º del cuerpo legal en estudio dispone, en cuanto al ámbito de
aplicación de la ley, que "se aplicará todas las causas que conozcan los
tribunales indicados en los incisos segundo y tercero del artículo 5º del
Código Orgánico de Tribunales, con excepción de las causas que
conozcan los tribunales militares en tiempo de paz". Pues bien, la
sustitución del artículo 200 del Código de Procedimiento Civil que
conlleva la supresión de la obligación de hacerse parte en segunda
instancia y la eliminación en el artículo 201 del mismo cuerpo legal de
la sanción de deserción del recurso por incomparecencia del apelante
se encuentran contempladas, respectivamente, en el artículo 12 Nºs. 21
y 22 de la Ley de Tramitación Electrónica, precepto que, por expresa
disposición legal, no resulta aplicable a las causas tramitadas ante
tribunales arbitrales, dado que éstos no se encuentran contemplados en
el artículo 5º inciso 2º del Código Orgánico de Tribunales ni forman
parte del Poder Judicial. Tal limitación —pese a haber sido consagrada
en el articulado transitorio de la Ley Nº 20.886— no es una de carácter
temporal como pretende el recurrente, sino que dice relación con una
condición material, como es la capacidad de digitalización y manejo de
un soporte electrónico idóneo, además de la necesaria interoperabilidad
o interconexión entre los sistemas informáticos de los distintos
tribunales del país que es lo que permite, en la práctica, la remisión
electrónica de las comunicaciones. Pues bien, los tribunales arbitrales
continúan, a la fecha, la tramitación en expedientes materiales como el
de la especie, lo que justifica la ultractividad de las antiguas
disposiciones del Código de Procedimiento Civil, entre las que se
encuentran las que establecen la obligación del apelante de comparecer
en segunda instancia y sancionan la ausencia con la deserción del
recurso. Dicho lo anterior, cabe concluir que razonan acertadamente los
juzgadores al declarar desierto el recurso de apelación interpuesto
contra el fallo de primer grado, pues se trata de una causa tramitada
ante un tribunal arbitral y, conforme a lo dispuesto en el artículo tercero
transitorio tantas veces mencionado, la misma continúa gobernada por
la legislación pretérita; circunstancia que obligaba al recurrente a
cumplir con la carga procesal de hacerse parte en segunda instancia
dentro del plazo legal (considerando 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 23/10/2018, Rol Nº 14803-2018,


Cita online: CL/JUR/6010/2018

ARTÍCULO 201
Si la apelación se ha interpuesto fuera de plazo o respecto de resolución
inapelable o no es fundada o no contiene peticiones concretas, el tribunal
correspondiente deberá declararla inadmisible de oficio. La parte apelada, en
todo caso, podrá solicitar la declaración pertinente, verbalmente o por
escrito.81

Del fallo que, en estas materias, dicte el tribunal de alzada podrá pedirse
reposición dentro de tercero día. 82-83

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 79, 199, 200, 214 y 221. Código
Procesal Penal: artículo 358. Ley Nº 18.287, sobre Procedimientos ante Juzgados de Policía
Local: artículo 32.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Peticiones concretas. Requisitos para la admisibilidad de la apelación

Tanto la doctrina como la jurisprudencia han entendido


coincidentemente que la exigencia de contener la apelación peticiones
concretas obedece a dos claras finalidades que no pueden dejar de
cumplirse, siendo ellas: 1º. La de fijar de manera perfectamente
delimitada la extensión de la competencia del tribunal de alzada,
puesto que aquél no podrá extender su fallo sino a aquellos puntos
respecto de los cuales se han formulado por el apelante las
correspondientes peticiones; y, 2º. La de asegurar en la segunda
instancia la efectiva vigencia del principio de bilateralidad de la
audiencia, es decir, permitir que cada parte conozca oportunamente las
pretensiones de la contraria y sus fundamentos, ya que sólo así el
proceso será, en esencia, un método de debate. Por eso se dice que la
formulación de la apelación es, en lo atinente a la segunda instancia, lo
que la demanda en lo atinente a la primera. Cabe advertir, en primer
lugar, que el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española
prescribe que algo es concreto "cuando está considerado en sí mismo,
con exclusión de cuanto puede serle extraño o accesorio", lo que
demuestra la claridad y precisión que deben emplearse cuando se
realizan peticiones que tienen que reunir esa característica, las que
deben entenderse por sí solas y no mediante interpretaciones o
deducciones. Aplicando lo anotado a la situación que nos ocupa, debe
concluirse que respecto del recurso de apelación las peticiones son
concretas si reúnen copulativamente dos menciones esenciales: a. La
solicitud de revocación, modificación o enmienda de la sentencia
apelada o de alguna parte de ella; y b. La indicación de cuál es la o las
declaraciones que se pretende reemplacen a las contenidas en la
resolución impugnada y cuya revocación o enmienda se pide (Julio
Salas Vivaldi, "La Formulación de Peticiones Concretas como requisito
de la Admisibilidad de la Apelación", Revista de Derecho de la
Universidad de Concepción, Nº 185, página 55 y siguientes). El
planteamiento del recurso que dé satisfacción a los presupuestos
señalados cumplirá con los objetivos de enmarcar la competencia del
tribunal de segunda instancia y de hacer saber a la parte contraria sus
aspiraciones de reforma. Que concordando con lo dicho, los
procesalistas Mario Mosquera y Cristián Maturana Miquel, hacen
presente que "lo importante en esta materia de las peticiones concretas
es que no basta la simple solicitud de revocación, sino que siempre hay
que agregar la consecuencia que para quien apela tiene la revocación
que pide. Hay que señalar siempre, de manera concreta y específica,
sin vaguedades de ninguna especie, en qué sentido debe modificarse
la resolución que me agravia, en virtud de cuyo agravio se ha apelado".
Continúan señalando que "las peticiones concretas revisten gran
trascendencia, puesto que ellas fijan o determinan la competencia del
tribunal de segunda instancia en el fallo del recurso. A través de las
peticiones concretas se materializa el principio latino: tantum devolutum
quantum apellatum, en cuanto a que el tribunal de alzada sólo puede
conocer de los puntos que se encuentren comprendidos en las
peticiones concretas formuladas en el recurso de apelación, pero no
respecto de los consentidos o no comprendidos dentro de las peticiones
concretas". (Mario Mosquera Ruiz y Cristián Maturana Miquel, Los
Recursos Procesales, Editorial Jurídica, año 2010, página 145)
(considerandos 8º a 10º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 19/11/2015, Rol Nº 6734-2015,


Cita online: CL/JUR/7204/2015

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 25/10/2010, Rol Nº 4999-2009,

Cita online: CL/JUR/17305/2010

2. Peticiones concretas pueden contenerse tanto en el petitorio como


en el texto y desarrollo del recurso de apelación
La facultad que la ley otorga al tribunal que debe revisar los requisitos
que hacen admisible un recurso de apelación comprende, entre otras,
la determinación de la existencia o inexistencia de peticiones concretas,
las que pueden contenerse no sólo en el petitorio, sino en el texto y en
el desarrollo del recurso, pues no consta de las mismas normas que
entre las condiciones exigidas por el legislador aparezca que tales
peticiones deben contenerse, de manera única y exclusiva, en su parte
conclusiva, de manera que corresponde al tribunal ad quem hacer un
análisis integral del arbitrio. En la especie, al tenor del artículo 186
inciso 1º del Código de Procedimiento Civil, la petición concreta debe
estar referida a obtener del tribunal superior respectivo que enmiende,
con arreglo a derecho, la resolución del inferior (considerando 5º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 27/07/2016, Rol Nº 14318-2016,


Cita online: CL/JUR/5268/2016

3. Improcedencia que el tribunal agregue nuevas causales de


inadmisibilidad del recurso de apelación

En cuanto a la aplicación de la norma contemplada en el artículo 201


del Código de Procedimiento Civil, cabe precisar que la aplicación
analógica hecha por los jueces recurridos es errada, por cuanto resulta
a lo menos discutible que una norma propia de una institución, como es
el recurso de apelación, pueda ser plenamente aplicable para un arbitrio
de naturaleza distinta, inherente al ámbito de lo contencioso
administrativo, como es la reclamación en estudio. Pero además, aún
de estimarse que tal disposición pudiese proceder respecto del medio
impugnatorio contemplado en el artículo 85 de la Ley Nº 20.589, lo
cierto es que el artículo 201 del Código de Procedimiento Civil establece
causales de inadmisibilidad en numerus clausus esto es, que el recurso
haya sido interpuesto fuera de plazo, respecto de resolución inapelable,
carezca de fundamentos o no contenga peticiones fundadas por lo que
resulta del todo improcedente que el intérprete judicial, valiéndose de
un argumento todavía analógico, incluya nuevas causales de
inadmisibilidad, restringiendo el acceso a la tutela judicial efectiva. Que
las normas procesales son de orden público y, por lo tanto, de
cumplimiento obligatorio. Por ende, la actividad jurisdiccional debe
adecuarse en todo momento a la ritualidad establecida en la ley y
ajustarse al mérito del proceso. En estas condiciones, efectivamente los
jurisdiscentes cometieron falta o abuso grave cuando impusieron una
sanción procedimental no contemplada en el código adjetivo y a
continuación homologaron tal sanción a una declaración de
inadmisibilidad, decisiones que incidieron, específicamente, en que no
se diera tramitación a la reclamación interpuesta por el quejoso en el
marco de un procedimiento administrativo sancionatorio
(considerandos 10º y 11º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 5/12/2016, Rol Nº 47550-2016,


Cita online: CL/JUR/8904/2016

4. Facultad de la Corte de Apelaciones para determinar de oficio si el


recurso ha sido interpuesto dentro de plazo

La revisión de admisibilidad efectuada por la Corte de Apelaciones


respectiva es una facultad que le ha sido legalmente otorgada. Así, del
artículo 201 del Código de Procedimiento Civil se desprende que dicha
magistratura es competente para determinar si el recurso ha sido
interpuesto dentro de plazo legal. Por lo tanto, se torna relevante la
actuación de oficio que le ha sido encomendada a los tribunales en
orden a declarar la inadmisibilidad de los arbitrios presentados fuera de
plazo, de manera que no es posible sostener que dicho examen se debe
efectuar únicamente a petición del recurrido (considerando 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 15/03/2017, Rol Nº 6023-2017,


Cita online: CL/JUR/1018/2017

ARTÍCULO 202

Derogado.84

ARTÍCULO 203 (226)

Si el tribunal inferior deniega un recurso de apelación que ha debido


concederse, la parte agraviada podrá ocurrir al superior respectivo, dentro del
plazo de cinco días contado desde la notificación de la negativa, para que
declare admisible dicho recurso.85
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 196, 204, 205, 206 y 213. Código
Procesal Penal: artículo 369. Código Tributario: artículo 148.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Verdadero recurso de hecho: Concepto

El "verdadero" recurso de hecho es la vía procesal contemplada por


el legislador para que la parte agraviada por la resolución que
erróneamente deniega la concesión del recurso de apelación, sea
enmendada por el superior jerárquico, obteniendo de este modo la
corrección de la providencia erradamente librada. Señala el artículo 203
del Código de Procedimiento Civil: "Si el tribunal inferior deniega un
recurso de apelación que ha debido concederse, la parte agraviada
podrá ocurrir al superior respectivo, dentro del plazo de cinco días
contado desde la notificación de la negativa, para que declare admisible
dicho recurso". Como se observa, el recurso de hecho ha sido
contemplado como una herramienta procesal otorgada a las partes. En
este aspecto conviene destacar que quien pretende y frente a quien se
pretende, o, más ampliamente, quien reclama y frente a quien se
reclama la satisfacción de una pretensión. Lo importante es que es un
concepto estrictamente procesal. Nuestro Código de Procedimiento
Civil, prevé la posibilidad de que no sólo las partes directas
(demandante/demandado;recurrente/recurrido;ejecutante/ejecutado;
reclamante/ reclamado) concurran al juicio, sino que, además, el
artículo 23 del referido texto legal contempla la actuación de terceros
coayuvantes e independientes, los que deben tener un interés actual en
los resultados del pleito, debiendo aceptar lo obrado por las partes
principales y continuar el juicio en el estado en que se encuentre
(considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 26/07/2018, Rol Nº 16391-2018,


Cita online: CL/JUR/4456/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 18/10/2018, Rol Nº 23151-2018,

Cita online: CL/JUR/5938/2018

— Corte Suprema, 9/01/2018, Rol Nº 45321-2017,


Cita online: CL/JUR/122/2018

2. Improcedencia del recurso de hecho en contra de las resoluciones


dictadas por la Corte de Apelaciones al efectuar el control de
admisibilidad de un recurso

El recurso de hecho supone que el agravio se ha cometido por el


tribunal ante el cual se dedujo la apelación, esto es, el que dictó la
resolución recurrida, y se interpone directamente ante el tribunal
llamado a conocer de este último. Así se desprende del artículo 203 del
Código de Procedimiento Civil, que consagra el denominado verdadero
recurso de hecho, y del artículo 196 del mismo cuerpo legal, que regula
los casos del llamado falso recurso de hecho. Ambas situaciones hablan
de ocurrir ante el tribunal superior respectivo, mas no refiriéndose al
superior del que emite el pronunciamiento de admisibilidad o
inadmisibilidad —que también corresponde al tribunal ad quem— sino
al del tribunal que dictó la resolución objeto de la apelación. De este
modo, las resoluciones que una Corte de Apelaciones dicte al efectuar
el control de admisibilidad de un recurso de apelación, en tanto tribunal
de segunda instancia, no son susceptibles de ser impugnadas por la vía
del recurso de hecho, el que la ley sólo ha previsto para ser interpuesto
y conocido por el tribunal llamado a conocer de la apelación, cuando el
agravio se ha cometido por el a quo (considerandos 2º y 3º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 24/07/2018, Rol Nº 16573-2018,


Cita online: CL/JUR/3911/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 12/02/2018, Rol Nº 2350-2018,

Cita online: CL/JUR/673/2018

— Corte Suprema, 3/01/2018, Rol Nº 45479-2017,

Cita online: CL/JUR/24/2018

3. Corte Suprema es incompetente para conocer recurso de hecho


De conformidad al artículo 205 inciso 2º del Código de Procedimiento
Civil, el recurso de hecho está prevista para que lo conozca y decida el
tribunal de la apelación, ya que alude a que si el recurso de hecho es
declarado admisible, el tribunal que está conociendo del mismo y tiene
materialmente el proceso, deberá retenerlo en su poder y dar la
tramitación que corresponda al recurso de apelación, esto es,
dispondrá, por ejemplo, traer de inmediato los autos en relación y
proseguir la sustanciación de segunda instancia. En el mismo sentido,
en orden a que deberá darse la tramitación que corresponda al recurso
de apelación por el mismo tribunal que conoce del recurso de hecho y
lo ha declarado admisible, se registra la opinión de los profesores Mario
Mosquera Ruiz y Cristián Maturana Miquel; sustanciación que,
evidentemente no corresponde a la Corte Suprema que, en la especie,
no tiene la calidad de tribunal ad quem. Por lo tanto, la Corte Suprema
carece de competencia para conocer del recurso de hecho intentado
contra la resolución dictada por la Corte de Apelaciones, por la cual se
declaró inadmisible el recurso de apelación interpuesto en contra de la
resolución que desechó el incidente de abandono de procedimiento
intentado por la defensa fiscal (considerandos 5º y 6º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 7/05/2018, Rol Nº 8233-2018,


Cita online: CL/JUR/2070/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 5/03/2018, Rol Nº 3327-2018,

Cita online: CL/JUR/4011/2018

4. Recurso de hecho procede contra resolución del tribunal que conoce


en primera instancia y se deduce ante el tribunal superior llamado a
conocer de la apelación

El artículo 203 del Código de Procedimiento Civil dispone: "Si el


tribunal inferior deniega un recurso de apelación que ha debido
concederse, la parte agraviada podrá ocurrir al superior respectivo,
dentro del plazo de cinco días contado desde la notificación de la
negativa, para que declare admisible dicho recurso". El recurso de
hecho, con arreglo a lo prescrito por los artículos 203 y siguientes del
Código de Procedimiento Civil, está concebido para ser conocido y
resuelto por el tribunal superior jerárquico que está llamado por la ley a
conocer del recurso de apelación y que a su vez haya sido interpuesto
por la parte que se estima agraviada con lo resuelto por el tribunal de
primera instancia. De esta forma, se concluye que es recurrible de
hecho la resolución que declara la inadmisibilidad, siempre que aquella
haya sido pronunciada por el tribunal que conoce el asunto en primera
instancia —desde que el artículo 203 se refiere al "tribunal inferior"— al
pronunciarse sobre la concesión del recurso, interponiéndolo
directamente ante el tribunal superior, que es aquel llamado a conocer
de la apelación, hipótesis que no se verifica en este caso desde que la
Corte Suprema no es el tribunal que revisará la resolución impugnada,
como tampoco se está ante un recurso de apelación que no hubiere sido
concedido por el tribunal a quo (considerandos 2º a 4º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 5/03/2018, Rol Nº 3327-2018,


Cita online: CL/JUR/4011/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 4/04/2018, Rol Nº 5373-2018,

Cita online: CL/JUR/4011/2018

5. Corte Suprema sólo excepcionalmente tiene competencia para


conocer recursos de apelación

Desde otra perspectiva, como reiteradamente ha sido dicho (V.G.


SCS Rol Nº 3592-2018, entre otras), la Corte Suprema es, en general,
un tribunal de casación y sólo por excepción constituye un tribunal de
segundo grado, únicamente en aquellos casos en que la ley
expresamente así lo ha dispuesto, criterio restrictivo que debe orientar
la interpretación y aplicación de la reglamentación sobre la materia
(considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 1/04/2019, Rol Nº 5466-2019,


Cita online: CL/JUR/2415/2019

6. Improcedencia del recurso de hecho en procedimiento de cobro de


obligaciones tributarias en sede administrativa
En la especie se trata en la especie de un procedimiento de cobro de
obligaciones tributarias en sede administrativa, para el cual no se
contempla la existencia de un recurso de apelación, de acuerdo con lo
dispuesto en el artículo 190 del Código Tributario, esto es; "las
cuestiones que se susciten entre los deudores morosos de impuestos y
el Fisco, que no tengan señalado un procedimiento especial, se
tramitarán incidentalmente y sin forma de juicio ante el propio Tesorero
Comunal con informe del Abogado Provincial que será obligatorio para
aquél. En lo que fuere compatible con el carácter administrativo de este
procedimiento se aplicarán las normas contempladas en el Título I del
Libro Tercero del Código de Procedimiento Civil". De lo anterior fluye
que, careciendo de norma procesal que contemple el arbitrio procesal
del que se trata, el presente recurso de hecho no puede prosperar
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones, 18/12/2019, Rol Nº 13-2019,


Cita online: CL/JUR/12386/2019

ARTÍCULO 204 (227)

El tribunal superior pedirá al inferior informe sobre el asunto en que haya


recaído la negativa, y con el mérito de lo informado resolverá si es o no
admisible el recurso.

Podrá el tribunal superior ordenar al inferior poner a su disposición la


carpeta electrónica correspondiente, siempre que, a su juicio, ello sea
necesario para dictar una resolución acertada.86

Podrá, asimismo, ordenar que no se innove cuando haya antecedentes que


justifiquen esta medida.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículo s 196, 203, 205, 206 y 213. Código
Procesal Penal: art ículo s 369 y 371. Código Tributario: art ículo 148.

ARTÍCULO 205 (228)

Si el tribunal superior declara inadmisible el recurso, lo comunicará al


inferior.87
Si el recurso es declarado admisible, el tribunal superior le dará al proceso
la tramitación que corresponda y lo comunicará al inferior según proceda.88

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 196, 203, 204 y 780.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Corte Suprema es incompetente para conocer recurso de hecho

La regulación del recurso de hecho está prevista para que lo conozca


y decida el tribunal de la apelación, con lo que preceptúa el artículo 205
inciso 2º del Código de Procedimiento Civil, cuando alude a que si el
recurso de hecho es declarado admisible, el tribunal que está
conociendo del mismo y tiene materialmente el proceso, deberá
retenerlo en su poder y dar la tramitación que corresponda al recurso
de apelación, esto es, dispondrá, por ejemplo, traer de inmediato los
autos en relación y proseguir la sustanciación de segunda instancia. En
el mismo sentido, en orden a que deberá darse la tramitación que
corresponda al recurso de apelación por el mismo tribunal que conoce
del recurso de hecho y lo ha declarado admisible, se registra la opinión
de los profesores Mario Mosquera Ruiz y Cristián Maturana Miquel, al
señalar que, en el caso propuesto el tribunal indicado "le dará la
tramitación que corresponda a la apelación"; sustanciación que,
evidentemente no corresponde a esta Corte que, en la especie, no tiene
la calidad de tribunal ad quem. En consecuencia, la Corte Suprema
carece de competencia para conocer del recurso de hecho intentado
contra la resolución que declaró inadmisible el recurso de apelación
interpuesto en contra de la resolución que desechó el incidente de
abandono de procedimiento (considerandos 5º y 6º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 12/04/2018, Rol Nº 6196-2018,


Cita online: CL/JUR/1723/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 7/05/2018, Rol Nº 8233-2018,

Cita online: CL/JUR/2070/2018

— Corte Suprema, 5/03/2018, Rol Nº 3327-2018,


Cita online: CL/JUR/4011/2018

ARTÍCULO 206 (229)

En el caso del 2º inciso del artículo precedente, quedarán sin efecto las
gestiones posteriores a la negativa del recurso y que sean una consecuencia
inmediata y directa del fallo apelado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 193, 203, 204, 205 y 780.

ARTÍCULO 207

En segunda instancia, salvo lo dispuesto en el inciso final del artículo 310


y en los artículos 348 y 385, no se admitirá prueba alguna.

No obstante y sin perjuicio de las demás facultades concedidas por el


artículo 159, el tribunal podrá, como medida para mejor resolver, disponer la
recepción de prueba testimonial sobre hechos que no figuren en la prueba
rendida en autos, siempre que la testimonial no se haya podido rendir en
primera instancia y que tales hechos sean considerados por el tribunal como
estrictamente necesarios para la acertada resolución del juicio. En este caso,
el tribunal deberá señalar determinadamente los hechos sobre que deba
recaer y abrir un término especial de prueba por el número de días que fije
prudencialmente y que no podrá exceder de ocho días. La lista de testigos
deberá presentarse dentro de segundo día de notificada por el estado la
resolución respectiva.89

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 109, 159, 255, 309, 310, 348, 385,
412, 227, 799, 800 y 807. Código Procesal Penal: artículo 359. Código Orgánico de Tribunales:
artículo 390. Código Tributario: artículos 138, 143, 148. Ley Nº 18.287, sobre Procedimientos
ante Juzgados de Policía Local: artículo 34. Ley Nº 18.410, crea la Superintendencia de
Electricidad y Combustibles: artículo 19, Código del Trabajo: artículo 480.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Admisibilidad de prueba en segunda instancia

El artículo 207 del Código de Procedimiento Civil por regla general no


admite prueba alguna en segunda instancia consagrando como únicas
excepciones los casos contemplados en los artículos 310, 348 y 385,
del mismo Código, refiriéndose el segundo de ellos a la posibilidad de
presentar instrumentos hasta antes de la vista de la causa. La aplicación
supletoria de la normativa del Libro I del Código de Procedimiento Civil
no es automática, sino que sólo en lo posible en cuanto sean
compatibles con la naturaleza de las reclamaciones tributarias, las que
presuponen en su primera fase la existencia de un procedimiento
administrativo que se sigue ante el Servicio de Impuestos Internos,
organismo que tiene el carácter eminentemente técnico, cuya función
exclusiva y excluyente es la aplicación y fiscalización de todos los
impuestos internos fiscales o de otro carácter en que tenga interés el
Fisco y cuyo control no esté especialmente encomendado por la ley a
una autoridad diferente, ello dadas las particularidades contables,
financieras e impositivas de la materia descrita (considerandos 6º y 7º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 25/07/2019, Rol Nº 266-2018,

Cita online: CL/JUR/4295/2019

2. Las excepciones contenidas en el inciso segundo del artículo 207 del


Código de Procedimiento Civil, relativa a la admisión de medios
probatorios en segunda instancia, debe ser interpretada
restrictivamente

El artículo 207 inciso primero del Código de Procedimiento Civil es


categórico al establecer que en segunda instancia no se admitirá prueba
alguna. Es cierto que en su inciso segundo ese precepto contempla tres
excepciones, entre las cuales las relativas, a las pruebas instrumental y
confesional. Empero, como excepciones que son, debe asumírselas
restrictivamente, evitando que una tolerancia extrema llegue a
desfigurar el proporcionado juego de las instancias, por la vía de la
suplantación de la primera por la de segunda, como realmente ocurriría
si lo que se estuvo en situación de probar en primer grado, se reservara,
de hecho, para el segundo. Como se ve, se trata de una limitante que
impone el sentido común y la sana experiencia, pues no se compadece
con la razonabilidad procesal la existencia de una segunda instancia en
la que prácticamente se reitere la litigiosidad de la primera. De lo
contrario, ninguna razón podría esgrimirse para descartar el extremo
consistente en que la prueba se produzca exclusivamente en segundo
grado, cuando sólo instrumental y confesional (considerando 3º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Santiago, 12/06/2001, Rol Nº 5030-1998,

Cita online: CL/JUR/1217/2001

ARTÍCULO 208 (231)

Podrá el tribunal de alzada fallar las cuestiones ventiladas en primera


instancia y sobre las cuales no se haya pronunciado la sentencia apelada por
ser incompatibles con lo resuelto en ella, sin que se requiera nuevo
pronunciamiento del tribunal inferior.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 160, 170, 214, 216, 254, 305, 306,
310, 692, 768 y 776. Ley Nº 18.287, sobre Procedimientos ante Juzgados de Policía Local:
artículo 35. Código Tributario: artículo 140.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Artículo 208 tiene el carácter de ordenatoria litis, por lo tanto, no


puede influir sustancialmente en lo dispositivo del fallo

Las normas que el recurrente invoca como infringidas en su primer


capítulo de impugnación tienen una función ordenatoria litis, porque
están dirigidas a fijar la competencia específica de los jueces de la
instancia, como son las contenidas en los artículos 160, 208 y 209 del
Código de Procedimiento Civil, de modo que carecen de una naturaleza
decisoria litis, esto es, no sirven de fundamento sustantivo a las
pretensiones de las partes; y siendo precisamente estas últimas normas
las que pueden dar lugar al recurso de casación en el fondo, según
disponen los artículos 767 y 772 del Código de Procedimiento Civil, se
debe concluir que éste no puede prosperar por la infracción de aquellas
normas adjetivas, que por su naturaleza no pueden incidir
sustancialmente en la resolución del asunto (considerando 8º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 14/12/2005, Rol Nº 3557-2003,


Cita online: CL/JUR/3245/2005

2. Tanto la excepción de cosa juzgada como la prescripción pretenden


enervar la acción, y por tanto, son congruentes y no incompatibles,
habiendo debido el tribunal a quo considerarlas todas en la sentencia
Que aun cuando el artículo 17 del Código de Procedimiento Civil dice
de las acciones que pueden entablarse en un mismo juicio siempre que
no sean incompatibles y que en una misma demanda pueden
proponerse dos o más acciones compatibles; luego, el artículo 20 trata
de la incompatibilidad de intereses y, por último, el artículo 208 faculta
al tribunal de alzada para fallar las cuestiones ventiladas en primera
instancia y sobre las cuales no se haya pronunciado la sentencia
apelada por ser incompatibles con lo resuelto en ella, sin que se
requiera nuevo pronunciamiento del tribunal inferior. Por no estar
definido expresamente el vocablo "incompatible", acudiendo al sentido
natural y obvio que le atribuye al término el Diccionario de la Lengua
debe tenerse por incompatibilidad la repugnancia que tiene una cosa
para unirse a otra. Así las cosas debe examinarse si las dos
excepciones opuestas por el demandado reúnen estos caracteres de
repugnancia mutua o contradicción entre sí. Tanto la cosa juzgada como
la prescripción pretenden enervar la acción, es decir, son congruentes,
pues conducen al mismo beneficio procesal sosteniendo, bien que
existió la triple identidad entre el juicio ejecutivo anteriormente resuelto
y la actual demanda; o bien, que al notificarse esta última demanda la
acción estaba prescrita. No hay, pues, entre ellas esa repugnancia o
esa imposibilidad de subsistencia coetánea. Este análisis conduce
necesariamente a la conclusión que no se trata de excepciones
incompatibles entre sí, no obstante la proposición subsidiaria que de
una de ellas hizo la parte proponente (considerando 6º de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 20/07/2001, Rol Nº 6186-1997,

Cita online: CL/JUR/5116/2001

ARTÍCULO 209 (232)

Del mismo modo podrá el tribunal de segunda instancia, previa audiencia


del fiscal judicial, hacer de oficio en su sentencia las declaraciones que por la
ley son obligatorias a los jueces, aun cuando el fallo apelado no las
contenga.90

Si en virtud de estas declaraciones se establece la incompetencia del


tribunal para entender en la cuestión sometida a su conocimiento, podrá
apelarse de la resolución para ante el tribunal superior que corresponda,
salvo que la declaración sea hecha por la Corte Suprema.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 160, 170, 254, 214, 216, 305, 306,
310, 692, 768 y 776.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Artículo 209 tiene el carácter de ordenatoria litis, por lo tanto, no


puede influir sustancialmente en lo dispositivo del fallo

Las normas que el recurrente invoca como infringidas en su primer


capítulo de impugnación tienen una función ordenatoria litis, porque
están dirigidas a fijar la competencia específica de los jueces de la
instancia, como son las contenidas en los artículos 160, 208 y 209 del
Código de Procedimiento Civil, de modo que carecen de una naturaleza
decisoria litis, esto es, no sirven de fundamento sustantivo a las
pretensiones de las partes; y siendo precisamente estas últimas normas
las que pueden dar lugar al recurso de casación en el fondo, según
disponen los artículos 767 y 772 del Código de Procedimiento Civil, se
debe concluir que éste no puede prosperar por la infracción de aquellas
normas adjetivas, que por su naturaleza no pueden incidir
sustancialmente en la resolución del asunto (considerando 8º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 14/12/2005, Rol Nº 3557-2003,


Cita online: CL/JUR/3245/2005

ARTÍCULO 210 (233)

Las resoluciones que recaigan en los incidentes que se promuevan en


segunda instancia, se dictarán sólo por el tribunal de alzada y no serán
apelables.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 82, 89, 90, 91, 187, 220 y 305.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Improcedencia del recurso de apelación contra resolución que recae


en incidente promovido en segunda instancia
En el presente caso, la apelación deducida fue contra la resolución
dictada por la Corte de Apelaciones que rechazó la nulidad de aquella
que dejo sin efecto el auto de procesamiento dictado en contra del
recurrente, no dando lugar a la concesión del arbitrio impetrado por
aplicación del artículo 43 del Código de Procedimiento Penal en relación
al artículo 210 del Código de Procedimiento Civil. El artículo 54 bis del
Código de Procedimiento Penal establece las resoluciones que son
apelables, dentro de las que no se menciona la que fue motivo del
recurso de hecho. Al no contemplar el texto procesal una norma
específica que solucione la problemática planteada, sólo resta atender
—para finiquitar la tarea interpretativa— a lo dispuesto en el artículo 210
del Código de Procedimiento Civil, aplicable en la especie. El
artículo 210 del Código de Procedimiento Civil dispone que las
resoluciones que recaigan en los incidentes que se promuevan en
segunda instancia, se dictarán sólo por el tribunal de alzada y no serán
apelables. Por tanto, se ha deducido un recurso de apelación al margen
de los casos expresamente señalados por la ley y contra la decisión de
un tribunal de alzada, lo que obsta a cualquier pronunciamiento de
fondo, dado que el arbitrio se ha interpuesto en contra de un dictamen
que no es posible impugnar a través de esa vía (considerandos 3º a 6º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 21/01/2019, Rol Nº 32948-2018,


Cita online: CL/JUR/369/2019

2. Resolución que resuelve incidente de nulidad procesal en segunda


instancia es inapelable

Lo expuesto deja en evidencia la inviabilidad del arbitrio en estudio,


toda vez que aquella resolución que resuelve un incidente de nulidad
procesal en segunda instancia, cualquiera sea el fundamento esgrimido
por el articulista, es inapelable conforme lo ordena expresamente el
artículo 210 del Código de Procedimiento Civil (considerandos 3º y 4º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 26/07/2018, Rol Nº 16391-2018,


Cita online: CL/JUR/4456/2018

ARTÍCULO 211
Derogado.91

ARTÍCULO 212

Derogado.92

ARTÍCULO 213 (438)

Elevado un proceso en apelación, el tribunal superior examinará en cuenta


si el recurso es admisible y si ha sido interpuesto dentro del término legal.

Si encuentra mérito el tribunal para considerar inadmisible o extemporáneo


el recurso, lo declarará sin lugar desde luego o mandará traer los autos en
relación sobre este punto.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 186, 189, 201, 214, 222, 781 y 797.
Auto Acordado de la Corte Suprema 10.01.2001.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Control de admisibilidad del recurso de apelación es una cuestión


formal y no un pronunciamiento de fondo

El artículo 189 primera parte del Código de Procedimiento Civil señala


que "La apelación deberá interponerse en el término fatal de cinco días,
contados desde la notificación de la parte que entabla el recurso, deberá
contener los fundamentos de hecho y de derecho en que se apoya y las
peticiones concretas que se formulan", mientras que el artículo 213
inciso 1º del Código de Procedimiento Civil establece que "Elevado un
proceso en apelación, el tribunal superior examinará en cuenta si el
recurso es admisible y si ha sido interpuesto dentro del término legal".
Del ejercicio hermenéutico de ambas disposiciones se advierte que el
control de admisibilidad es más bien una revisión de carácter formal y
no un pronunciamiento de fondo, desde que la determinación de la
existencia o no de agravio es una consideración de fondo que debe
realizar la Sala que conozca del arbitrio intentado y no puede ser
declarado, ex ante, en un examen previo, sin respeto a la bilateralidad
de la audiencia (considerando 2º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Santiago, 21/10/2019, Rol Nº 13015-2019,

Cita online: CL/JUR/6112/2019

2. Declaración de inadmisibilidad del recurso de apelación por carecer


de peticiones concretas

Queda en evidencia que el recurso de apelación en comento no


contiene ninguna de las menciones expuestas en la reflexión
precedente, esto es, no se pide por quien apela la revocación,
modificación o enmienda del fallo recurrido y, tampoco, la declaración
que se pretende reemplace las que él contiene. Lo consignado cobra
más trascendencia, si se tiene en cuenta que tal fallo contiene diversas
decisiones que agravian al recurrente (...) Que de lo que se viene
narrando aparece que los sentenciadores, al resolver como lo hicieron,
declarando inadmisible la apelación en referencia por carecer de
peticiones concretas, no vulneraron ninguna de las disposiciones
legales que indica como conculcadas quien recurre. Sin perjuicio de lo
que se dice, no está demás acotar que salvo las normas de los
artículos 189 y 213 del Código de Procedimiento Civil, las restantes
están relacionadas con aspectos atinentes al fondo de la causa que son
ajenos al asunto procesal que motivó la resolución del recurso de
casación en estudio (considerandos 8º a 10º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 15/12/2010, Rol Nº 8533-2010,


Cita online: CL/JUR/12013/2010

ARTÍCULO 214

Si el tribunal superior declara no haber lugar al recurso, pondrá el proceso


a disposición del inferior para el cumplimiento del fallo. En caso contrario
mandará que se traigan los autos en relación.93

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 36, 201, 208, 209, 211 y 476.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Resolución que declara admisible un recurso de apelación, constituye


una sentencia interlocutoria y, por lo tanto, produce excepción de cosa
juzgada. Resolución posterior que declara inadmisible el recurso,
atenta contra la autoridad de cosa juzgada

La resolución a que se refieren los artículos 213 y 214 del Código de


Procedimiento Civil, por medio de la cual la Corte de Apelaciones
declara admisible un recurso de apelación y ordena traer los autos en
relación, reviste a la luz de lo prescrito en el artículo 158 del mismo texto
legal la naturaleza jurídica de sentencia interlocutoria, ello porque
resuelve acerca de un trámite que sirve de base en el pronunciamiento
de una sentencia definitiva posterior (la que decide la controversia
planteada en el recurso, previo desarrollo de los trámites relativos a la
vista de la causa). Que la referida sentencia interlocutoria, acorde con
lo dispuesto en el artículo 175 del Código de Procedimiento Civil,
produce excepción de cosa juzgada. Por consiguiente, al declarar la
sentencia posterior la inadmisibilidad del referido recurso, concurriendo
los requisitos sobre identidad legal de personas, de cosa pedida y de
causa de pedir contemplados en el artículo 177 del Código de
Procedimiento Civil, ha menoscabado el principio de la autoridad de
cosa juzgada inherente a la resolución que con antelación se había
pronunciado en sentido contrario, incurriendo en el vicio de nulidad
previsto en el artículo 768 Nº 6 de dicho Código (considerandos 4º y 5º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/10/2010, Rol Nº 6287-2008,


Cita online: CL/JUR/17312/2010

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 16/09/2008, Rol Nº 4048-2008,

Cita online: CL/JUR/3530/2008

ARTÍCULO 215

Derogado.94

ARTÍCULO 216 (441)


Puede el apelado adherirse a la apelación en la forma y oportunidad que
se expresa en el artículo siguiente.95

Adherirse a la apelación es pedir la reforma de la sentencia apelada en la


parte en que la estime gravosa el apelado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 32, 36, 89, 214 y 800.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Adhesión a la apelación

Cabe tener en consideración que conforme lo dispone el inciso


segundo del artículo 216 del citado Código, adherirse a la apelación es
pedir la reforma de la sentencia apelada en la parte que la estima
gravosa el apelado. Ahora bien, la apelación adhesiva tiene cabida
únicamente en tanto la resolución que se pide reformar es la misma que
ha sido objeto del recurso de apelación y lo anterior ha de entenderse
referido no a la circunstancia de que en una misma providencia se
resuelvan dos cuestiones diversas, como ha acontecido en la especie,
sino que la misma decisión causa agravio a los dos litigantes, de manera
que ambos se encuentran legitimados activamente para impugnarla. En
el caso de autos, como se insinuó, la decisión impugnada por el
ejecutado es aquella que acogió sólo parcialmente la impugnación del
crédito y la adhesión del ejecutado no se ha referido a este
pronunciamiento, en la parte que le es desfavorable, sino a otro distinto,
aunque contenido en la misma pieza, relativo al rechazo a la objeción a
la regulación de las costas personales. En razón de lo anterior, la
adhesión resulta legalmente improcedente (considerando 4º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 1/07/2016, Rol Nº 2592-2016,

Cita online: CL/JUR/4704/2016

2. Adhesión a la apelación constituye un recurso propio, individual e


independiente de la apelación

El recurso de apelación tiene como finalidad obtener la revisión por el


tribunal superior de una resolución que causa agravio y cuya enmienda
se solicita. En este contexto, el artículo 216 del Código de
Procedimiento Civil faculta a la parte que no ha deducido el recurso para
adherirse a la apelación y solicitar la modificación de la resolución en
aquello que le causa perjuicio. En este orden de cosas, la adhesión al
recurso de apelación constituye un medio de impugnación con vida
independiente; así, una vez materializada en el proceso, como fue el
caso, al tenérsele por adherida e incluso concedida la orden de no
innovar, si la apelación termina por cualquier causal, como fue la
resolución que la declara desierta en forma posterior, no se afectará su
existencia. En efecto, la doctrina al respecto señala "la adhesión a la
apelación es un recurso propio, individual e independiente de la
apelación. Señala que su fundamento es un agravio que la resolución
recurrida causa al adherente, agravio que debe ser reparado por el
tribunal superior y que no se corrige con el abandono, renuncia o
deserción del apelante quien por lo menos podría usar este mecanismo
para evitar que la corte aumente su agravio al tener que conocer y fallar
la adhesión" —Muñoz Torres— (considerandos 2º y 3º de la anulación
de oficio).

Corte Suprema, 9/01/2017, Rol Nº 92799-2016,


Cita online: CL/JUR/106/2017

ARTÍCULO 217

La adhesión a la apelación puede efectuarse en segunda instancia dentro


del plazo de cinco días desde la fecha de la certificación a la que se refiere el
artículo 200. El escrito de adhesión a la apelación deberá cumplir con los
requisitos que establece el artículo 189. Se aplicará a la adhesión a la
apelación lo dispuesto en el artículo 201.96

No será, sin embargo, admisible desde el momento en que el apelante haya


presentado escrito para desistirse de la apelación.

La hora de presentación de las solicitudes de adhesión y de desistimiento


se registrará por el sistema de tramitación electrónica del Poder Judicial, o
por el tribunal a través del timbre disponible ante el buzón dispuesto al efecto
o mediante la anotación del correspondiente ministro de fe en los casos
excepcionales en que se permite la presentación de los escritos en soporte
papel.97

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 32, 36, 189, 214 y 800. Código
Procesal Penal: artículo 354.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Adhesión a la apelación debe contener fundamentos de hecho, de


derecho y peticiones concretas

Conforme a lo establecido en el artículo 216 del Código de


Procedimiento Civil, adherirse a la apelación es pedir la reforma de la
sentencia apelada en la parte que la estime gravosa el apelado, por lo
que debe al tenor del artículo 217 de ese cuerpo legal, cumplir con los
requisitos que establece el artículo 189 del mismo, esto es, los
fundamentos de hecho y de derecho en que se apoya y las peticiones
concretas que se fundan. Que de conformidad a lo señalado
precedentemente y de lo dispuesto en el artículo 201 del Código de
Procedimiento Civil, se declarará la inadmisibilidad de la adhesión a la
apelación de fojas 205 y siguientes, en razón de que ésta no contiene
peticiones concretas (considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte de Apelaciones de Santiago, 17/01/2007, Rol Nº 2925-2006,

Cita online: CL/JUR/6683/2007

2. Procedencia de la adhesión a la apelación en el procedimiento


regulado por la Ley Nº 18.287

La aplicación supletoria del Código de Procedimiento Civil se funda


únicamente en la constatación de aspectos procesales no regulados
expresamente por la Ley Nº 18.287, cuyo es el caso, pues la citada ley,
en cuanto a la adhesión a la apelación, no la descarta expresamente,
como sí ocurre, por ejemplo, en el caso del recurso de casación. Así las
cosas, es posible colegir que al no haber sido limitada la apelación
adhesiva por la Ley Nº 18.287, la cual solo establece ciertas reglas
especiales que deben ser observadas durante su tramitación, se
concluye que el apelado puede adherirse al recurso cumpliendo con los
requisitos establecidos en el artículo 217 del Código de Procedimiento
Civil y, por tanto, la adhesión al recurso, respecto de la sentencia sobre
infracción a la Ley de Tránsito, no debió declararse improcedente
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 14/02/2019, Rol Nº 31390-2018,


Cita online: CL/JUR/849/2019
3. Procedencia de la adhesión a la apelación en el procedimiento de
reclamo de ilegalidad del artículo 19 de la Ley Nº 18.410

Las normas contenidas en el Libro Primero del Código de


Procedimiento Civil rigen, en general, para todo proceso en la medida
que no tenga asignados preceptos especiales que lo rijan. En este caso,
al contemplar la Ley Nº 18.410 expresamente la procedencia del
recurso de apelación, debe recibir aplicación supletoria el mencionado
Libro Primero que regula en detalle la institución y cuyos artículos 216
y 217 permiten la adhesión ante el tribunal de primera instancia, en tanto
se cumpla con los requisitos generales del recurso, la apelación no se
encuentre desistida y se interponga la oportunidad ordenada. Al
respecto, cabe destacar que no existe ninguna norma que restrinja para
el procedimiento previsto en la Ley Nº 18.410 la adhesión a la
apelación. Es así como la limitación surge solamente de una
interpretación, actividad que, teniendo presente el elemento sistemático
de hermenéutica legal pro recurso, no debe tener como efecto la
restricción los derechos que asisten a las partes del proceso. De lo
anterior corresponde concluir que la adhesión a la apelación resulta
procedente en el procedimiento de reclamo de ilegalidad regulado por
el artículo 19 de la Ley Nº 18.410 (considerando 6º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 17/11/2016, Rol Nº 67493-2016,


Cita online: CL/JUR/7686/2016

ARTÍCULO 218 (443)

Derogado.98

ARTÍCULO 219 (444)

Derogado.99

ARTÍCULO 220 (445)

Las cuestiones accesorias que se susciten en el curso de la apelación, se


fallarán de plano por el tribunal, o se tramitarán como incidentes. En este
último caso, podrá también el tribunal fallarlas en cuenta u ordenar que se
traigan en relación los autos para resolver.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 89, 90, 91, 207 y 210. Código
Orgánico de Tribunales: artículo 111.

ARTÍCULO 221

La notificación de las resoluciones que se dicten por el tribunal de alzada


se practicará en la forma que establece el artículo 50, con excepción de la
primera, que debe ser personal.100

Podrá, sin embargo, el tribunal ordenar que se haga por otro de los medios
establecidos en la ley, cuando lo estime conveniente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40, 41, 47, 48, 50, 52, 200, 201 y 202.
Ley Nº 18.287, sobre Procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículo 36.

ARTÍCULO 222 (447)

En cumplimiento de las obligaciones impuestas por el artículo 373 del


Código Orgánico de Tribunales, los relatores darán cuenta de los vicios y
omisiones que hayan notado en las causas del día a fin de que el tribunal
resuelva si ha de llenarse previamente algún trámite.

Las causas que se ordene tramitar, las suspendidas y las que por cualquier
motivo no hayan de verse, serán anunciadas en la tabla antes de comenzar
la relación de las demás. Asimismo, en esa oportunidad deberán señalarse
aquellas causas que no se verán durante la audiencia, por falta de tiempo. La
audiencia se prorrogará, si fuere necesario, hasta ver la última de las causas
que resten en la tabla.101

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 163, 165 y 213. Código Orgánico de
Tribunales: artículos 69 y 373. Auto Acordado de la Corte Suprema 12.08.1963: Nº 3. Auto
Acordado de la Corte Suprema 2.09.1994: Nº 3.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Si después del anuncio, se integra la sala con otro Abogado


Integrante, sin poner este hecho en conocimiento de los abogados de
las partes, la vista de la causa adolece de un vicio de nulidad que
incide en la citación para oír sentencia, trámite esencial en segunda
instancia

En segunda instancia, la vista de la causa constituye un conjunto de


actuaciones ordenadas por la ley para habilitar al tribunal ad quem para
conocer del asunto sometido a su decisión y fallarlo, trámites que son
esenciales y que constituyen la citación para sentencia de la segunda
instancia. Por su parte, como es sabido, la vista de la causa
propiamente tal, consta de dos partes: la relación y los alegatos, pero
para hacer lo primero, el relator debe cumplir las prescripciones que le
señala el artículo 373 del Código Orgánico de Tribunales, o sea, antes
de la relación debe anunciar si el proceso está en condiciones de
hacerse, obligación que la ley mediante el anuncio previo le obliga a
comunicar a las partes, y una vez colocado el anuncio en la Tabla, no
pueden hacerse variaciones de ninguna especie a esa situación
procesal. En el presente caso, el relator como quedó demostrado, avisó
antes del inicio de la audiencia que la presente causa no se vería, por
estar sin tribunal, sin embargo, se integró para la vista de ella por un
Abogado Integrante que no estaba instalado ordinariamente para esa
audiencia, sino que se hizo con posterioridad, y sin que en el proceso
se dejara constancia del referido cambio y que además esa sustitución
se haya puesto en conocimiento de los abogados de las partes, para
que éstos quedaran habilitados para ejercer el derecho que establece
el artículo 166 del Código de Procedimiento Civil en su inciso primero
(considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 27/07/1988, Rol Nº 10934,


Cita online: CL/JUR/890/1988

ARTÍCULO 223

La vista de la causa se iniciará con la relación, la que se efectuará en


presencia de los abogados de las partes que hayan asistido y se hubieren
anunciado para alegar. No se permitirá el ingreso a la sala de los abogados
una vez comenzada la relación. Los ministros podrán, durante la relación,
formular preguntas o hacer observaciones al relator, las que en caso alguno
podrán ser consideradas como causales de inhabilidad.

Concluida la relación, se procederá a escuchar, en audiencia pública, los


alegatos de los abogados que se hubieren anunciado. Alegará primero el
abogado del apelante y en seguida el del apelado. Si son varios los apelantes,
hablarán los abogados en el orden en que se hayan interpuesto las
apelaciones. Si son varios los apelados, los abogados intervendrán por el
orden alfabético de aquéllos.

Los abogados tendrán derecho a rectificar los errores de hecho que


observaren en el alegato de la contraria, al término de éste, sin que les sea
permitido replicar en lo concerniente a puntos de derecho.

La duración de los alegatos de cada abogado se limitará a media hora. El


tribunal, a petición del interesado, podrá prorrogar el plazo por el tiempo que
estime conveniente.

Durante los alegatos, el Presidente de la sala podrá invitar a los abogados


a que extiendan sus consideraciones a cualquier punto de hecho o de
derecho comprendido en el proceso, pero esta invitación no obstará a la
libertad del defensor para el desarrollo de su exposición. Una vez finalizados
los alegatos, y antes de levantar la audiencia, podrá también pedirles que
precisen determinados puntos de hecho o de derecho que considere
importantes.

Al término de la audiencia, los abogados podrán dejar a disposición del


tribunal una minuta de sus alegatos.

El relator dará cuenta a la sala de los abogados que hubiesen solicitado


alegatos o se hubiesen anunciado para alegar y no concurrieren a la
audiencia respectiva para oír la relación ni hacer el alegato. El Presidente de
la sala oirá al interesado, y, si encontrare mérito para sancionarlo, le aplicará
una multa no inferior a una ni superior a cinco unidades tributarias mensuales,
la que se duplicará en caso de reiteración de la falta dentro de un mismo año
calendario. El sancionado no podrá alegar ante esa misma Corte mientras no
certifique el secretario de ella, en el correspondiente expediente, que se ha
pagado la multa impuesta.102

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 164, 165, 224, 225 y 226. Código
Procesal Penal: artículos 358 y 361. Código Orgánico de Tribunales: artículos 87, 90, 92, 372
Nº 5, 373, 520 y 527. Ley Nº 18.593, Ley de los Tribunales Electorales Regionales: artículo 22.
Auto Acordado de la Corte Suprema 2.09.1994. Auto Acordado de la Corte Suprema 2.09.1994.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Alcance de la expresión "vista de la causa"


La vista de la causa se inicia con la relación que hace el relator a la
Sala Del análisis e interpretación de los artículos 223 y 310 del Código
de Procedimiento Civil, no cabe duda que la expresión "vista de la
causa" a que se refiere la última de las normas citadas a propósito del
plazo para la interposición de las excepciones anómalas, constituye la
audiencia en la que la causa se da a conocer al tribunal de alzada, lo
que se inicia con la relación que hace el relator a la sala. De lo expuesto,
es posible concluir que la excepción de prescripción en autos se ha
opuesto dentro del plazo legal que establece el artículo 310 del Código
de Procedimiento Civil, a pesar de ser posterior a la dictación del
decreto "autos en relación" (considerando 4º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 28/07/2016, Rol Nº 1832-2016,

Cita online: CL/JUR/5341/2016

2. Vista de la causa principia con el decreto que ordena traer los autos
en relación

El Máximo Tribunal reiteradamente ha señalado que la vista de la


causa es un trámite complejo por medio del cual un tribunal colegiado
toma conocimiento del asunto sometido a su decisión y que de acuerdo
con lo dispuesto en el artículo 223 del Código de Procedimiento Civil se
inicia con la relación y culmina con los alegatos de los abogados de las
partes. Asimismo, doctrinariamente se han incorporado a este trámite
un conjunto de actos relacionados con la vista, como son la notificación
del decreto autos en relación, la colocación de la causa en tabla, el
anuncio de la misma y después de la relación y los alegatos de los
abogados, el acuerdo que se adopta por el tribunal, pudiendo incluso
sostenerse que la vista propiamente tal se encuentra referida
exclusivamente a la relación, alegatos y decisión. De este modo, si bien
la vista de la causa en un sentido amplio principia con el decreto que
ordena traer los autos en relación, lo cierto es que el artículo 348
permite a las partes acompañar prueba documental hasta la vista de la
causa, lo que demuestra que, en este caso, aquellos presentados por
la ejecutante fueron aportados al pleito dentro de la oportunidad que la
ley contempla para estos efectos, de manera que era perentorio
extender el pronunciamiento a ellos (considerando 5º de la sentencia de
anulación de oficio).
Corte Suprema, 27/09/2018, Rol Nº 40726-2017,
Cita online: CL/JUR/5330/2018

3. Incumplimiento del deber de escuchar en audiencia pública a los


abogados que se hubieren anunciado

En la especie, el incidentista se anunció para alegar, por escrito, antes


de la vista de la causa. También se encuentra acreditado, que en el
escrito de anuncio, el letrado se anunció "revocando". Esta última
circunstancia, también se encuentra corroborada con el certificado
suscrito por la ministro de fe. En tales condiciones, se dictó la sentencia
de segunda instancia, sin haber oído al apelante, no obstante lo cual,
no revocó la sentencia apelada, sino que acogió parcialmente el recurso
respecto de la excepción de pago parcial, rechazando en lo demás, las
pretensiones del apelante y dispuso continuar adelante con la ejecución.
El artículo 19 Nº 3 de la Constitución asegura a todas las personas, —
entre otros— "el derecho a defensa jurídica en la forma que la ley señale
y ninguna autoridad o individuo podrá impedir, restringir o perturbar la
debida intervención del letrado si hubiere sido requerida" (inciso
segundo); igualmente la citada norma dispone: "Toda sentencia de un
órgano que ejerza jurisdicción debe fundarse en un proceso previo
legalmente tramitado." (Inciso quinto). Así las cosas, con lo relacionado
precedentemente queda en evidencia que en la vista del recurso de
apelación de que se trata, se omitió el derecho a la defensa del
ejecutado y además, se transgredió el artículo 223 del Código de
Procedimiento Civil que obliga a escuchar en audiencia pública a los
abogados que se hubieren anunciado, vulnerándose en consecuencia,
la garantía constitucional del debido proceso (considerandos 4º a 6º de
la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 12/02/2018, Rol Nº 38-2017,


Cita online: CL/JUR/718/2018

ARTÍCULO 224 (449)

Si la apelación comprende dos o más puntos independientes entre sí y


susceptibles de resolución aislada, podrá el tribunal alterar la regla del
artículo precedente haciendo que los abogados aleguen separada y
sucesivamente sobre cada punto.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 170 Nº 6.

ARTÍCULO 225 (450)

En la vista de la causa sólo podrá alegar un abogado por cada parte, y no


podrán hacerlo la parte y su abogado.

Concordancias: Código Orgánico de Tribunales: artículos 520 y 527. Auto acordado de la


Corte Suprema 2.09.1994: Nºs. 5, 6.

ARTÍCULO 226 (451)

Se prohíbe presentar en la vista de la causa defensas escritas.

Se prohíbe igualmente leer en dicho acto tales defensas.

Concordancias: Código Orgánico de Tribunales: artículo 520.

ARTÍCULO 227 (452)

Vista la causa, queda cerrado el debate y el juicio en estado de dictarse


resolución.

Si, vista la causa, se decreta para mejor resolver, alguna de las diligencias
mencionadas en el artículo 159, no por esto dejarán de intervenir en la
decisión del asunto los mismos miembros del tribunal que asistieron a la vista
en que se ordenó la diligencia.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 432 y 433. Ley Nº 18.287, sobre
procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículo 36. Ley Nº 18.593, Ley de los
Tribunales Electorales Regionales: artículo 23. Auto acordado de la Corte Suprema 12.08.1963.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Si las partes no lo piden, el tribunal está impedido de exigir pruebas


como se hizo en el caso de autos

El Código Tributario se ocupa de la apelación en este tipo de


reclamaciones en sus artículos 139 y siguientes, y el artículo 143
establece a la letra que "El recurso de apelación se tramitará sin otra
formalidad que la fijación de día para la vista de la causa, sin perjuicio
de las pruebas que las partes puedan rendir, de acuerdo con las normas
del Código de Procedimiento Civil, o de las medidas para mejor resolver
que ordene el tribunal. En estas apelaciones no procederá la deserción
del recurso". Más adelante, el artículo 148 efectúa una remisión a este
último texto legal, disponiendo que: "En todas aquellas materias no
sujetas a disposiciones especiales del presente libro, se aplicará, en
cuanto fueren compatibles con la naturaleza de las reclamaciones, las
normas establecidas en el Libro Primero del Código de Procedimiento
Civil". Acorde a las reflexiones que se han estampado, dos conclusiones
importantes se pueden extraer de lo expuesto. En primer lugar, que las
partes pueden rendir prueba en segunda instancia y, en segundo
término, que el tribunal sólo puede ordenar medidas para mejor
resolver. Lo anterior significa que si las partes no lo piden, el tribunal
está impedido de exigir pruebas como se hizo en el caso de autos,
fijando término para ello, utilizando el expediente de ampliar un término
probatorio que se dictó en una etapa inicial del proceso, del modo como
se hizo, esto es, fijando nuevos hechos sustanciales controvertidos.
Que en armonía con lo sostenido, se puede ya desprender la
circunstancia de que la resolución que se ha recurrido por la presente
vía, carece por completo de justificación, desde que se basa en otra que
es del todo improcedente, como lo es la que se lee a fs. 150
(considerandos 8º y 9º de la sentencia de la casación de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 2/04/2003, Rol Nº 1469-2002,


Cita online: CL/JUR/4211/2003

ARTÍCULO 228 (453)

Los tribunales podrán mandar, a petición de parte, informar en derecho.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 29, 31, 66, 226 y 805.

ARTÍCULO 229 (454)

El término para informar en derecho será el que señale el tribunal y no


podrá exceder de sesenta días, salvo acuerdo de las partes.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 29, 31, 66, 226 y 805. Código del
Trabajo: artículo 482.

ARTÍCULO 230

Los informes en derecho, con las firmas del abogado y de la parte o de su


procurador, y el certificado a que se refiere el número 6 del artículo 372 del
Código Orgánico de Tribunales se agregarán a la carpeta electrónica para
conocimiento de los ministros.103

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 29, 31, 66, 67, 226 y 805. Código
Orgánico de Tribunales: artículo 372.

TÍTULO XIX DE LA EJECUCIÓN DE LAS RESOLUCIONES

§ 1. De las resoluciones pronunciadas por tribunales chilenos

ARTÍCULO 231 (236)

La ejecución de las resoluciones corresponde a los tribunales que las


hayan pronunciado en primera o en única instancia. Se procederá a ella una
vez que las resoluciones queden ejecutoriadas o causen ejecutoria en
conformidad a la ley.

No obstante, los tribunales que conozcan de los recursos de apelación,


casación o revisión, ejecutarán los fallos que dicten para la substanciación de
dichos recursos. Podrán también decretar el pago de las costas adeudadas
a los funcionarios que hayan intervenido en ellos, reservando el de las demás
costas para que sea decretado por el tribunal de primera instancia.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 26, 174, 181, 232, 434 Nº 1, 596, 605,
635 y 814. Código Procesal Penal: artículo 243. Código de Justicia Militar: artículo 17. Ley
Nº 16.618, Ley Nº 18.287, sobre procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículos 17 y
25. Ley Nº 10.336, sobre organización y atribuciones de la Contraloría General de la República:
artículos 127 y 128. Ley Nº 18.101, sobre arrendamiento de predios urbanos: artículo 13. Ley
Nº 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos: artículo 62, Código del Trabajo:
artículos 421 y 462 y ss.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Regla general de la competencia de la ejecución. Aplicación


supletoria del Código de Procedimiento Civil en el proceso penal

La regla general de competencia de la ejecución, prevista en el inciso


primero del artículo 113 del Código Orgánico de Tribunales, dispone
que la ejecución de las resoluciones corresponde a los tribunales que
las hubieren pronunciado en primera o en única instancia. Esta norma
es repetida en idénticos términos en el inciso primero del artículo 231
del Código de Procedimiento Civil, ubicado en el Libro I denominado
Disposiciones Comunes a todo Procedimiento, y el artículo 52 del
Código Procesal Penal prescribe que serán aplicables al procedimiento
penal, en cuanto no se opusieren a lo estatuido en este Código o en
leyes especiales, precisamente, las normas comunes a todo
procedimiento contempladas en el Libro I del Código de Procedimiento
Civil. Sobre la base de este marco normativo y a falta de regla especial
en el Código Procesal Penal, lo cierto es que no existe razón con
sustento legal que permita afirmar que el cumplimiento de una
resolución librada por un tribunal con competencia en lo criminal, en lo
que se refiere al pago de las costas que imponga a alguno de los
intervinientes, haya de ser cumplida por un tribunal que ejerza
jurisdicción en materia civil (considerandos 1º y 2º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 14/07/2016, Rol Nº 2176-2016,

Cita online: CL/JUR/5036/2016

2. Existencia en el ordenamiento jurídico de un procedimiento para


obtener el cumplimiento de resoluciones judiciales

Del mérito de los antecedentes, es posible concluir que la controversia


que se ventila en estos autos se circunscribe al cumplimiento de la
sentencia dictada por la Corte de Apelaciones en causa sobre Reclamo
de Ilegalidad, materia que se encuentra expresamente regulada en el
Título XIX del Libro I del Código de Procedimiento Civil, bajo el epígrafe
"De la ejecución de las resoluciones judiciales", artículos 231 y
siguientes. Conforme lo expuesto, existiendo en el ordenamiento
jurídico nacional un procedimiento para obtener el cumplimiento de las
resoluciones judiciales, corresponde recurrir a este procedimiento, a
través del cual deben ventilarse todas las controversias que se susciten
con motivo de su ejecución, resultando en consecuencia que ésta no es
una materia que corresponda ser resuelta por medio de la presente
acción cautelar, puesto que no constituye una instancia de declaración
de derechos sino que de protección de aquellos que, siendo
preexistentes e indubitados, se encuentren afectados por alguna acción
u omisión ilegal o arbitraria y, por lo consiguiente, en situación de ser
amparados por esta tutela (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 28/03/2018, Rol Nº 44596-2017,


Cita online: CL/JUR/5639/2018

3. Procedimiento para obtener el cumplimiento de las resoluciones


judiciales en materia de familia

La controversia que se ventila en los autos se circunscribe al


cumplimiento de la sentencia dictada por el Juzgado de Familia, materia
que se encuentra expresamente regulada en el Título XIX del Libro I del
Código de Procedimiento Civil, bajo el epígrafe "De la ejecución de las
resoluciones judiciales", artículos 231 y siguientes, aplicable por
expresa remisión del artículo 27 de la Ley Nº 19.968. Por lo tanto,
existiendo en el ordenamiento jurídico nacional un procedimiento para
obtener el cumplimiento de las resoluciones judiciales, es en aquel
donde deben ventilarse todas las controversias que se susciten con
motivo de su ejecución, resultando evidente que ésta no es una materia
que corresponda ser resuelta por medio de la presente acción cautelar,
puesto que no constituye una instancia de declaración de derechos sino
que de protección de aquellos que, siendo preexistentes e indubitados,
se encuentren afectados por alguna acción u omisión ilegal o arbitraria
y, por ende, en situación de ser amparados. A mayor abundamiento, el
asunto ya se encuentra radicado ante Tribunal competente, en cuya
sede debe ser debatido el cumplimiento de lo ordenado por la sentencia
definitiva (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 27/06/2019, Rol Nº 12291-2019,


Cita online: CL/JUR/3739/2019

ARTÍCULO 232 (238)


Siempre que la ejecución de una sentencia definitiva haga necesaria la
iniciación de un nuevo juicio, podrá éste deducirse ante el tribunal que
menciona el inciso 1º del artículo 231, o ante el que sea competente en
conformidad a los principios generales establecidos por la ley, a elección de
la parte que haya obtenido en el pleito.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 231 y 697.

ARTÍCULO 233

Cuando se solicite la ejecución de una sentencia ante el tribunal que la


dictó, dentro del plazo de un año contado desde que la ejecución se hizo
exigible, si la ley no ha dispuesto otra forma especial de cumplirla, se
ordenará su cumplimiento con citación de la persona en contra de quien se
pide.

Esta resolución se notificará por cédula al apoderado de la parte. El ministro


de fe que practique la notificación deberá enviar la carta certificada que
establece el artículo 46 tanto al apoderado como a la parte. A esta última, la
carta deberá remitírsele al domicilio en que se le haya notificado la demanda.
En caso que el cumplimiento del fallo se pida contra un tercero, éste deberá
ser notificado personalmente.104

El plazo de un año se contará, en las sentencias que ordenen prestaciones


periódicas, desde que se haga exigible cada prestación o la última de las que
se cobren.105

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 69, 158, 231, 232, 234, 235, 237, 240,
245, 434 Nº 1, 438 y siguientes, 530 y siguientes, 544 y 635. Código de Comercio: artículo 1212.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Naturaleza del procedimiento que deviene al cumplimiento de la


sentencia ejecutoriada. Juicio ejecutivo especial

Corresponde determinar cuál es la naturaleza del procedimiento que


deviene al cumplimiento de la sentencia ejecutoriada, determinándose
que si bien el artículo 234 del Código de Procedimiento Civil dispone
que la oposición formulada a la solicitud de cumplimiento del fallo se
tramitará en forma incidental, la naturaleza procesal del procedimiento
previsto por el legislador para obtener el cumplimiento de una sentencia
definitiva en la hipótesis que se viene analizando, es decir, ante el
tribunal que la dictó dentro del término que considera el artículo 233 del
Código de Procedimiento Civil, corresponde a un juicio diverso al que
dio origen a la decisión que se intenta cumplir y, como tal, corresponde
a un juicio ejecutivo especial. Así lo reconoce la doctrina, aclarando que
"es juicio, porque hay controversia, o, por lo menos, posibilidad de
controversia, al permitir la ley que el vencido oponga excepciones. Es
juicio ejecutivo, porque tiende precisamente al cumplimiento forzado de
una prestación impuesta en la sentencia. Es juicio ejecutivo especial,
porque en su estructura se aleja ostensiblemente del juicio ejecutivo
general. No es incidente, porque aun cuando la estructura o tramitación
del juicio sea incidental, la verdad es que aquí no hay ninguna cuestión
accesoria a una principal; revistiendo, en cambio, este último carácter
el cumplimiento de la sentencia, que es también el único contenido u
objeto del juicio en referencia". —Mario Casarino Viterbo—. En
consecuencia, no obstante su tramitación incidental, es claro que el
procedimiento regulado en los artículos 233 y siguientes del Código de
Procedimiento Civil, en cuanto interesa analizar, constituye un juicio en
sí mismo, distinto e independiente al que le antecede y que ha concluido
con el pronunciamiento cuyo cumplimiento se persigue
(considerando 6º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 8/01/2020, Rol Nº 16930-2018,


Cita online: CL/JUR/4664/2020

ARTÍCULO 234

En el caso del artículo anterior la parte vencida sólo podrá oponerse


alegando algunas de las siguientes excepciones: pago de la deuda, remisión
de la misma, concesión de esperas o prórrogas del plazo, novación,
compensación, transacción, la de haber perdido su carácter de ejecutoria,
sea absolutamente o con relación a lo dispuesto en el artículo anterior, la
sentencia que se trate de cumplir, la del artículo 464 número 15 y la del
artículo 534, siempre que ellas, salvo las dos últimas, se funden en
antecedentes escritos, pero todos en hechos acaecidos con posterioridad a
la sentencia de cuyo cumplimiento se trata. También podrá alegarse la falta
de oportunidad en la ejecución. Esta excepción y las del artículo 464
número 15 y del artículo 534 necesitarán, además, para ser admitidas a
tramitación, que aparezcan revestidas de fundamento plausible. La oposición
sólo podrá deducirse dentro de la citación a que se refiere el
artículo precedente.
El tercero en contra de quien se pida el cumplimiento del fallo podrá
deducir, además, la excepción de no empecerle la sentencia y deberá
formular su oposición dentro del plazo de diez días.

La oposición se tramitará en forma incidental, pero si las excepciones no


reúnen los requisitos exigidos por el inciso 1º, se rechazará de plano.

Lo dispuesto en este artículo es sin perjuicio de lo prevenido en el


artículo 80.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 23, 24 64, 69, 80, 82 y siguientes,
233, 464, 534 y 535. Código Civil: artículos 1568, 1652, 1628, 1655 y 2466. Ley Nº 10.336,
sobre Organización y Atribuciones de Contraloría General de la República: artículo 127.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Oposición debe fundarse en hechos acaecidos con posterioridad a la


sentencia

La resolución impugnada rechazó las excepciones opuestas a la


solicitud de ejecución incidental por estimar que ninguna de ellas se
funda en hechos acaecidos con posterioridad a la sentencia cuyo
cumplimiento se pretende. En efecto, de los antecedentes se puede
constatar que las excepciones deducidas en esta etapa de cumplimiento
incidental aluden a circunstancias acontecidas con anterioridad al
pronunciamiento de la sentencia definitiva, encontrando fundamento en
alegaciones que ya fueron latamente discutidas durante el juicio.
Entonces, resulta palmario que la oposición no cumple con la exigencia
estatuida en el artículo 234 inciso 1º del Código de Procedimiento Civil,
que autoriza al litigante vencido a deducir excepciones únicamente si se
fundan en hechos acaecidos con posterioridad a la sentencia de cuyo
cumplimiento se trata (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 25/04/2018, Rol Nº 2869-2018,


Cita online: CL/JUR/1858/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 25/02/2019, Rol Nº 26103-2018,

Cita online: CL/JUR/983/2019


— Corte Suprema, 26/12/2018, Rol Nº 1084-2018,

Cita online: CL/JUR/7069/2018

ARTÍCULO 235

Si no ha habido oposición al cumplimiento de la sentencia solicitado


conforme al artículo 233 o ella ha sido desestimada por sentencia de primera
o segunda instancia, se procederá a cumplirla, siempre que la ley no haya
dispuesto otra forma especial, de acuerdo con las reglas siguientes:

1ª Si la sentencia ordena entregar una especie o cuerpo cierto, sea mueble


o inmueble, se llevará a efecto la entrega, haciéndose uso de la fuerza pública
si es necesario;

2ª Si la especie o cuerpo cierto mueble no es habido, se procederá a tasarlo


con arreglo al Título XII del Libro IV y se observarán en seguida las reglas del
número siguiente;

3ª Si la sentencia manda pagar una suma de dinero se ordenará, sin más


trámite, hacer pago al acreedor con los fondos retenidos, hecha la liquidación
del crédito y de las costas causadas o se dispondrá previamente la realización
de los bienes que estén garantizando el resultado de la acción de
conformidad al Título V del Libro II.

Si no hay bienes que aseguren el resultado de la acción se procederá a


embargar y a enajenar bienes suficientes de la parte vencida de acuerdo con
las reglas del procedimiento de apremio, sin necesidad de requerimiento y
deberá notificarse por cédula el embargo mismo y la resolución que lo ordena;

4ª Si la sentencia obliga a pagar una cantidad de un género determinado,


se procederá de conformidad a las reglas del número anterior; pero si es
necesario, se practicará previamente su avaluación por un perito con arreglo
al Título XII del Libro IV;

5ª Si la sentencia ordena la ejecución o destrucción de una obra material,


la subscripción de un instrumento o la constitución de un derecho real o de
una obligación, se procederá de acuerdo con el procedimiento de apremio en
las obligaciones de hacer; pero se aplicará lo prescrito en el número 3º de
este artículo cuando sea necesario embargar y realizar bienes; y
6ª Si la sentencia ha condenado a la devolución de frutos o a la
indemnización de perjuicios y, de conformidad a lo establecido en el inciso
segundo del artículo 173, se ha reservado al demandante el derecho de
discutir esta cuestión en la ejecución del fallo, el actor deberá formular la
demanda respectiva en el mismo escrito en que pida el cumplimiento del fallo.
Esta demanda se tramitará como incidente y, de existir oposición al
cumplimiento del fallo, ambos incidentes se substanciarán conjuntamente y
se resolverán en una misma y única sentencia.106

En todo lo que no esté previsto en este artículo se aplicarán las reglas que
se establecen en el juicio ejecutivo para el embargo y el procedimiento de
apremio; pero la sentencia se cumplirá hasta hacer entero pago a la parte
vencedora sin necesidad de fianza de resultas, salvo lo dispuesto en el
artículo 774 y en otras disposiciones especiales.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 438, 443, 444, 445 y siguientes, 459,
462, 463, 464, 465, 466, 467, 471 y siguientes, 530 y siguientes, 774. Código Civil: artículos 907,
1556 a 1559, 2314 y siguientes. Código Procesal Penal: artículo 34. Ley Nº 18.961, Orgánica
Constitucional de Carabineros de Chile: artículo 4º.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Artículo 235 no recibe aplicación ante regla especial diversa sobre


cumplimiento incidental

La alegación del recurrente en orden a que el demandante debió


recurrir a la norma del artículo 235 del Código de Procedimiento Civil,
para obtener el cumplimiento del pago, resulta impertinente pues, la
misma norma establece que ella es aplicable para el caso que la ley no
haya dispuesto otra forma especial de cumplirla que es precisamente la
situación que acontece en autos con la norma del artículo 32 de la Ley
Orgánica Constitucional de Municipalidades y, en todo caso, de acuerdo
al Nº 3 de la misma, el embargo resulta procedente en la medida que
no existan bienes para asegurar el resultado de la acción, cuyo no es el
caso de la causa en que incide este recurso en la que, como se dijo, los
fondos están disponibles para ello, lo que también permite desechar la
argumentación del recurrente en orden a que se habría vulnerado el
numeral 7 del artículo 7 del Pacto de San José de Costa Rica, en cuanto
existiría amenaza de una prisión por deudas (considerando 5º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Copiapó, 6/09/2006, Rol Nº 73-2006,


Cita online: CL/JUR/5591/2006

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 235 CIRC. 3ª)

1. Voto Disidente: Participación de terceros en procedimiento ejecutivo.


Pago se efectúa con la realización de los bienes que garantizan el
resultado de la acción

En el derecho procesal chileno la incorporación de terceros en un


procedimiento vigente, se encuentra regulada, de manera general, en
el Título III del Libro Primero del citado estatuto y de manera especial,
en determinados procedimientos, en lo que interesa, el ejecutivo. La
participación de terceros se atiene, en una perspectiva general, a los
artículos 22 y 23 de la legislación en referencia, que los clasifica en
independientes, coadyuvantes y excluyentes. En cambio, en el
procedimiento ejecutivo se describe y define, de manera específica, los
modos que puede asumir tal intrusión, de acuerdo con lo que preceptúa
el artículo 518 de la recopilación en comento. Una de esas injerencias,
es la de su apartado Nº 3º, relativa al derecho que invoca el extraño, a
ser pagado preferentemente. Según el artículo 235 Nº 3º de la misma
compilación, el cumplimiento de la sentencia firme que recayó en esta
causa —que ordenó pagar una suma de dinero— debe sujetarse a esa
modalidad, de acuerdo con la cual el tribunal la hará pagar con la
realización de los bienes que garantizan el resultado de la acción. Dicha
realización debe efectuarse, por expresa remisión del artículo 235 Nº 3º,
de conformidad con el Título V del Libro Segundo, que es ajeno a las
tercerías del procedimiento ejecutivo (considerandos 2º a 4º de la
disidencia de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/03/2017, Rol Nº 17708-2016,


Cita online: CL/JUR/866/2017

2. Orden de arresto sólo resulta aplicable en el caso de resoluciones


que no dispongan la entrega o devolución de una suma de dinero

Encontrándose plenamente vigente el procedimiento de ejecución de


una sentencia laboral, no puede utilizarse para la consecución de su
cumplimiento el mecanismo de apremio mediante una orden de arresto,
que solamente resulta aplicable en el caso de resoluciones que no
dispongan la entrega o devolución de una suma de dinero
(considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones de Arica).
Corte Suprema, 10/04/2006, Rol Nº 1315-2006,
Cita online: CL/JUR/7467/2006

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 14/05/2001, Rol Nº 1599-2001,

Cita online: CL/JUR/7467/2006

Fallos en sentido contrario:

— Corte Suprema, 7/09/1992, Rol Nº 29303-1992,

Cita online: CL/JUR/1111/1992

— Corte Suprema, 28/02/1990, Rol Nº 7752-1990,

Cita online: CL/JUR/833/1990

3. Embargo y enajenación de bienes requiere que no existan bienes que


aseguren el resultado de la acción

No se da la situación prevista en el artículo 235 Nº 3º del Código de


Procedimiento Civil para decretar el embargo y posterior enajenación
de bienes suficientes de la parte vencida, por cuanto dicha regla
requiere que no existan bienes que aseguren el resultado de la acción,
lo que en el caso de autos no sucede, desde que los fondos necesarios
están consignados en el proceso correspondiente; siendo de advertir
que la medida cautelar aludida sólo obedece al ejercicio de un derecho
que cualquier tercero pudiera legítimamente haber llevado a cabo para
resguardo de sus intereses, sin que con ello se afecte el destino de la
consignación (considerando 2º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 17/04/1990, Rol Nº 14800-1990,


Cita online: CL/JUR/422/1990

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 235 CIRC. 5ª)

1. Omisión reiterada de dictación de decreto municipal

Procedencia de orden de arresto Procede rechazar el recurso de


amparo interpuesto por el alcalde recurrente en contra de la orden de
arresto librada a su respecto durante el incidente de cumplimiento de
una sentencia judicial firme, por el hecho de omitir reiteradamente la
dictación de un decreto municipal de pago de las asignaciones docentes
adeudadas, toda vez que la medida de apremio en comento encuentra
su sustento tanto en la facultad privativa e irrenunciable que el
artículo 73 de la Constitución Política y 1º del Código Orgánico de
Tribunales confieren a éstos para hacer ejecutar lo juzgado; como en la
norma establecida en el artículo 235 Nº 5 del Código de Procedimiento
Civil, relativa al procedimiento de apremio en las obligaciones de hacer,
aplicable conforme al artículo 28 inciso segundo de la Ley Orgánica
Constitucional de Municipalidades, que dispone que toda obligación que
una sentencia ordena cumplir se transforma, por el solo ministerio de la
ley, en la dictación del decreto alcaldicio correspondiente, y en virtud de
la cual resultan aplicables en la especie las disposiciones de los
artículos 532 y 533 del Código de Procedimiento Civil que permiten, en
caso de incumplimiento y sin perjuicio de otros derechos, apremiar al
deudor, pudiendo el tribunal imponerle arresto hasta por quince días y
repetir estas medidas para obtener el cumplimiento de la obligación. Por
otra parte, el arresto decretado tampoco constituye una prisión por
deudas, sino una medida de apremio por el no cumplimiento de una
obligación judicial por una persona que reiteradamente se ha negado a
hacer lo que el tribunal le ha exigido, decretada de acuerdo a las
facultades que la Constitución Política de la República, Código Orgánico
de Tribunales y Ley Orgánica de Municipalidades le otorgan a los
tribunales de justicia.

Corte Suprema, 25/08/1999, Rol Nº 2890-1999,


Cita online: CL/JUR/1548/1999

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 235 CIRC. 6ª)

1. Si la demanda de determinación de la especie y monto de los frutos


y perjuicios fue deducida con posterioridad a la solicitud del
lanzamiento del demandado de la propiedad reivindicada, el derecho
del demandante había precluido

La regla 6ª del artículo 235 ya citado, sigue el fallo, considera la forma


de proceder para la situación de haber efectuado el demandante
reserva en cuanto a la determinación de los perjuicios que habrán de
ser indemnizados y los frutos que deberán ser restituidos, señalándose
perentoriamente que la demanda por medio de la cual se plantee esta
discusión debe presentarse en el mismo escrito en que se pide el
cumplimiento del fallo. El artículo 64 del Código de Procedimiento Civil,
termina la sentencia impugnada, establece el principio de preclusión en
materia de ejercicio de los derechos que asisten a las partes en el
proceso, indicando al efecto que la posibilidad de ejercerlos se extingue
al vencimiento del plazo señalado para cada caso. Atendido lo
expuesto, agrega, la oportunidad para proceder a la ejecución incidental
de la sentencia firme ha precluido, toda vez que se solicitó el
lanzamiento de la demandada del inmueble sub lite, siendo ésta la
forma en que se ha procedido a obtener el cumplimiento de lo decidido,
tal como lo dispone la regla 1ª del aludido artículo 235. Asimismo,
finalizan los sentenciadores, la oportunidad para demandar
incidentalmente la determinación de los frutos y perjuicios también ha
precluido por cuanto, tal como exige la regla 6ª de la misma norma, no
se ha formulado la demanda respectiva conjuntamente con el
cumplimiento incidental (considerando 2º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 3/12/2008, Rol Nº 4179-2007,


Cita online: CL/JUR/7771/2008

ARTÍCULO 236

Si la sentencia ordena el pago de prestaciones periódicas y el deudor


retarda el pago de dos o más, podrá el juez compelerlo a prestar seguridades
para el pago, tal como la de convertir las prestaciones en los intereses de un
capital que se consigna al efecto, en un Banco, Caja de Ahorros u otros
establecimientos análogos. Este capital se restituirá al deudor tan pronto
como cese la obligación.

Esta petición se tramitará en forma incidental.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 82 y siguientes, 231 y 237.

ARTÍCULO 237
Las sentencias que ordenen prestaciones de dar, hacer o no hacer, y cuyo
cumplimiento se solicite después de vencido el plazo de un año, concedido
en el artículo 233, se sujetarán a los trámites del juicio ejecutivo.107

Se aplicará también este procedimiento cuando se solicite el cumplimiento


del fallo ante otro tribunal distinto del indicado en el artículo 233.

En los juicios a que dé lugar la ejecución de las resoluciones a que se


refiere este artículo, no se admitirá ninguna excepción que haya podido
oponerse en el juicio anterior.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 231, 233, 434 y siguientes, 464.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Apremio personal no se encuentra contemplado en el contexto del


cumplimiento incidental de una obligación de dar

La obligación de reintegrar la señalada suma por la Corporación


señalada se encuadra, como se ha dicho, dentro de un procedimiento
incidental de cumplimiento de una sentencia, el cual se rige por las
normas previstas en los artículos 231 y siguiente del Código de
Procedimiento Civil y, tratándose en la especie de una prestación de
dar, le es aplicable el artículo 237 del mismo Código en relación con lo
dispuesto en la norma pertinente del juicio ejecutivo en este tipo de
obligaciones, entre las cuales no se encuentra la medida de apremio
personal decretada en los citados autos (considerando 3º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 6/07/2001, Rol Nº 43768-2001,

Cita online: CL/JUR/2585/2001

ARTÍCULO 238

Cuando se trate del cumplimiento de resoluciones no comprendidas en los


artículos anteriores, corresponderá al juez de la causa dictar las medidas
conducentes a dicho cumplimiento, pudiendo al efecto imponer multas que
no excedan de una unidad tributaria mensual o arresto hasta de dos meses,
determinados prudencialmente por el tribunal, sin perjuicio de repetir el
apremio.108
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 231 y 240.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procedencia de medidas de apremio conducentes al cumplimiento de


resoluciones judiciales

El artículo 238 del Código de Procedimiento Civil, establece que


"Cuando se trate del cumplimiento de resoluciones no comprendidas en
los artículos anteriores, corresponderá al juez de la causa dictar las
medidas conducentes a dicho cumplimiento, pudiendo al efecto imponer
multas que no excedan de una unidad tributaria mensual o arresto hasta
de dos meses, determinados prudencialmente por el tribunal, sin
perjuicio de repetir el apremio". Concordante resulta el artículo 11 del
Código Orgánico de Tribunales, en cuanto dispone que se puede
requerir el auxilio de la fuerza pública y hacer efectivos los otros medios
de acción de que dispusieren los tribunales para hacer ejecutar sus
sentencias, practicar y hacer practicar las actuaciones que ordenaren.
En este sentido, las medidas contempladas, a manera enunciativa en la
norma citada primeramente, son medidas coercitivas conducentes al
cumplimiento de las resoluciones judiciales, insertas en el Título XIX del
Libro I del Código de Procedimiento Civil, de modo que, verificándose
el cumplimiento, ellas pierden oportunidad y deben quedar
necesariamente sin efecto, desde que se ha cumplido el fin para el que
han sido decretadas. En consecuencia, habiéndose cumplido en la
especie la obligación impuesta al amparado de dar cuenta final de su
gestión como síndico en la quiebra, respecto de la cual se decretó el
apercibimiento de arresto por 15 días, la medida impuesta pierde
fundamento, por lo que necesariamente debe quedar sin efecto
(considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 28/02/2018, Rol Nº 255-2018,

Cita online: CL/JUR/1051/2018

2. Orden de arresto dictada por autoridad competente y en un caso


previsto por la ley

El apremio decretado respecto del amparado lo fue en los términos


que dispone el artículo 238 del Código de Procedimiento Civil, en la
etapa de cumplimiento de una sentencia que se encuentra firme y con
el objeto preciso de proseguir con la ejecución del referido fallo, la que
se ha visto entrampada debido a la negativa de la autoridad municipal
de dictar el correspondiente acto administrativo de pago, de lo que se
colige que la orden de arresto que se pretende dejar sin efecto, ha sido
pronunciada por el órgano competente, actuando el juez recurrido
dentro del ámbito de sus atribuciones y expresando los fundamentos de
su resolución, lo que permite descartar la existencia de una acción ilegal
o arbitrario que haga procedente el recurso de amparo intentado
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 27/06/2019, Rol Nº 17375-2019,


Cita online: CL/JUR/3737/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 24/12/2019, Rol Nº 40931-2019,

Cita online: CL/JUR/11713/2019

3. Voto disidente: Limitación del arresto como medida de apremio por


deudas de Municipalidad

El espíritu del legislador ha sido limitar los efectos del arresto como
medida de apremio, en relación a deudas del respectivo municipio o de
las corporaciones municipales, exclusivamente respecto de aquellos
alcaldes en cuyo período se contrajo la deuda que dio origen al juicio, y
que en el presente caso, se inició por la acción de cobro de facturas, la
que fue dirigida en contra de la Municipalidad de la comuna de San
Rafael, como consecuencia de la existencia de dos facturas impagas
por parte de dicha entidad, data en la que no desempeñaba el cargo de
Alcalde de la citada comuna el amparado. En consecuencia, la orden
de arresto decretada carece de sustento tanto fáctico como jurídico,
toda vez que aparece decretada para un caso no previsto por la ley
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 3/07/2019, Rol Nº 18153-2019,


Cita online: CL/JUR/3842/2019

4. Improcedencia de dictar orden de arresto en causa sobre cobranza


previsional
No resulta aplicable lo dispuesto en el artículo 238 del Código de
Procedimiento Civil —no obstante la remisión del artículo 465 del
Código del Trabajo— para la dictación de medidas de apremio
conducentes al cumplimiento de resoluciones judiciales. Asimismo, y de
conformidad con lo dispuesto en el artículo 7º Nº 7 de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos "Nadie será detenido por deudas.
Este principio no limita los mandatos de autoridad judicial competente
dictados por incumplimiento de los deberes alimentarios". No obstante,
la obligación de pago de cotizaciones no puede equipararse a los
"deberes alimentarios", toda vez que éstos suponen el estado de
necesidad del alimentario demostrado en el juicio respectivo, lo que
ciertamente no sucede en la especie, tal como lo ha resuelto la Excma.
Corte Suprema, en causa Rol Nº 8.973-2018, por lo que resulta
procedente acoger el recurso de amparo (considerandos 3º y 4º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 29/08/2019, Rol Nº 606-2019,

Cita online: CL/JUR/4867/2019

ARTÍCULO 239

Las reclamaciones que el obligado a restituir una cosa raíz o mueble tenga
derecho a deducir en razón de prestaciones a que esté obligado el vencedor
y que no haya hecho valer en el juicio en que se dictó la sentencia que se
trata de cumplir, se tramitarán en forma incidental con audiencia de las partes,
sin entorpecer el cumplimiento de la sentencia, salvo las excepciones legales.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 82 y siguientes, 234, 464 Nº 13.

ARTÍCULO 240

Cumplida una resolución, el tribunal tendrá facultad para decretar las


medidas tendientes a dejar sin efecto todo lo que se haga en contravención
a lo ejecutado.

El que quebrante lo ordenado cumplir será sancionado con reclusión menor


en su grado medio a máximo.109
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 231 y 234. Código Penal:
artículos 261 y 262. Código de Procedimiento Penal: artículo 189. Código Procesal Penal:
artículo 34.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Presupuestos para configurar el delito de desacato

Para que se configure el delito de desacato, se requiere establecer


como presupuestos básicos, que la resolución judicial que se reclama
como quebrantada estaba vigente a la fecha del supuesto
incumplimiento y que tanto la prohibición como su vigencia era conocida
por su destinatario, pues sólo en estas condiciones es posible hacer
exigible su cumplimiento. Por lo tanto, en el delito de desacato, el tipo
penal necesariamente se debe integrar con el contenido de la resolución
judicial que se reclama infringida, de lo cual se sigue que la conducta
prohibida no es sólo el quebrantamiento de lo ordenado por un tribunal
sino que incumplir lo específicamente ordenado en términos de tiempo,
lugar y modalidades, lo que exige, considerando la función de garantía
que cumple la tipicidad, que la descripción del obrar prohibido sea lo
más completa y detallada posible, lo anterior con la finalidad de tener
plena claridad y certeza sobre cuál es la conducta que configura el
delito, para evitar con ello caer en la arbitrariedad judicial en la labor de
determinar las acciones que son delito (considerandos 3º y 4º de la
sentencia de nulidad de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Rancagua, 8/02/2019, Rol Nº 12-2019,

Cita online: CL/JUR/708/2019

2. Incumplimiento de los elementos del delito de desacato

Los elementos fácticos indispensables para poder tener por


configurado y acreditado en juicio el delito de desacato previsto y
sancionado el artículo 240 del Código de Procedimiento Civil, son la
existencia copulativa de los siguientes requisitos: a. Una resolución
judicial firme o ejecutoriada, o que cause ejecutoria, que aparece
infringida, dictada por un órgano jurisdiccional y en cuya virtud se haya
decretado una obligación, en este caso, una medida accesoria; b.
Encontrarse el hechor, legalmente notificado; c. Además, se requiere
que esta resolución judicial esté vigente, esto es, que produzca efectos
jurídicos al momento de los hechos. [....] En efecto, la resolución en
cuestión omitió la duración y vigencia de las medidas cautelares
contempladas en el artículo 9 letras a) y b) de la Ley Nº 20.066 que se
le impusieron al condenado como pena accesoria, y al no determinarse
la vigencia, dicha resolución prescinde de un requisito esencial como lo
es el plazo, pues este tipo de medidas son temporales y provisionales.
Siendo efectiva la omisión en comento, ello impidió al sentenciado
conocer de manera cierta cuál era el plazo durante el cual debería
someterse perentoriamente a esta medida, la que limitaba y restringía
sus garantías fundamentales, y, por ende, no se ha ordenado algo
concreto que puede dejar de cumplirse (considerandos 3º a 5º de la
sentencia de nulidad).

Corte de Apelaciones de Concepción, 22/11/2019, Rol Nº 874-2019,

Cita online: CL/JUR/6687/2019

3. Sanción del desacato

Los profesores Matus y Ramírez en su manual de derecho penal


chileno, parte especial, afirman que el artículo 240 del Código de
Enjuiciamiento Civil, "castiga la ejecución de un hecho que altera
fácticamente el statu quo creado por una resolución judicial que causa
ejecutoria", lo que obviamente es independiente de la seguridad o
riesgo de la víctima (considerandos 6º y 7º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Talca, 4/04/2019, Rol Nº 88-2019,

Cita online: CL/JUR/1840/2019

4. Requisitos de procedencia del delito de desacato

Para estar en presencia del delito de desacato, previsto y sancionado


en el artículo 240 inciso segundo del Código de Procedimiento Civil, en
relación con el artículo 10 de la Ley 20.066 sobre Violencia Intrafamiliar
es necesario que concurran tres supuestos para su configuración, en
relación con el incumplimiento de la medida de protección de
alejamiento dispuesta en resguardo de la víctima, cónyuge del
condenada; en efecto, se requiere: a) que exista una resolución judicial
que imponga la medida cautelar o accesoria al denunciado, imputado o
condenado; b) que esa resolución se encuentre vigente y haya sido
debidamente puesta conocimiento de la persona a quien se le imputa la
realización del tipo penal, y c) que el imputado realice una conducta
destinada a infringir la orden judicial; esto es, que intencionalmente
ejecute la acción que la resolución le prohíbe (considerando 3º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 14/02/2020, Rol Nº 183-2020,

Cita online: CL/JUR/11022/2020

5. Incumplimiento de medida cautelar de prohibición de acercamiento


no configura un delito de desacato

El artículo 15 de la Ley Nº 20.066, señala: "Medidas cautelares. En


cualquier etapa de la investigación o del procedimiento sobre delitos
constitutivos de violencia intrafamiliar, y aun antes de la formalización,
el tribunal con competencia en lo penal podrá decretar las medidas
cautelares que sean necesarias para proteger a la víctima de manera
eficaz y oportuna, tales como las que establece el art ículo 92 de la Ley
Nº 19.968 y las aludidas en el art ículo 7º de esta ley.". Una correcta
interpretación del artículo transcrito, en armonía con el artículo 240
del Código de Procedimiento Civil, nos lleva a concluir que el
incumplimiento de una medida cautelar, per se, no constituye desacato
puesto que será el ente persecutor quien, primeramente, deberá
sopesar las circunstancias del caso con la finalidad de definir si dicho
incumplimiento podría llegar a constituir un delito de desacato y, de
adoptar una conducta positiva al respecto, serán los tribunales quienes,
realizando el análisis de la prueba rendida, llegarán a la convicción —o
no— de encontrarse en presencia de supuestos que pueden
enmarcarse en el art ículo 240 del Código de Procedimiento Civil. Por
tanto, el incumplimiento de marras no alcanza el estándar mínimo para
entender que en la especie se ha cometido un delito de desacato. En
primer término, porque si bien se acreditó que hubo aproximación a la
víctima, respecto de quien existía una medida cautelar de prohibición
de acercamiento, sin embargo, tal desobediencia de las cautelares
impuestas en materia penal, no tienen el efecto de configurar un delito
de desacato sino que, para esas situaciones, se ha previsto imponer
otras de mayor intensidad no advirtiéndose, en este caso, la gravedad
ni reiteración que harían posible aplicar lo dispuesto por el art ículo 240
del Código de Procedimiento Civil (considerandos 9º y 10º de la
sentencia de nulidad).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 28/09/2018, Rol Nº 1810-2018,

Cita online: CL/JUR/5375/2018

6. Necesidad de antijuridicidad y resultado, dañoso

El desacato como figura penal no es solo constatar si objetivamente


se ha cumplido o no lo resuelto por un Tribunal y es por ello, que el
artículo 240 del Código de Procedimiento Civil utiliza la voz "quebrante".
Se requiere entonces, más que un mero incumplimiento de una
resolución judicial. Es necesario que con su actitud refractaria de lo
resuelto por el Tribunal, el sujeto al cual va dirigida la orden del ente
jurisdiccional, ponga en riesgo o peligro el objetivo perseguido por el
Tribunal al pronunciar su resolución, sea esta la seguridad de personas
o de bienes jurídicos que se pretende proteger. No se trata por
consiguiente, solo de una cuestión propiamente de tipicidad de la
acción, sino también de la antijuridicidad de la misma y del resultado,
dañoso o no, que ella puede causar (considerando 3º de la sentencia
de nulidad).

Corte de Apelaciones de Concepción, 23/11/2018, Rol Nº 892-2018,

Cita online: CL/JUR/6541/2018

7. No es exacto ni preciso decir que la infracción de resoluciones que


tienen el carácter de provisionales sólo pueda acarrear
consecuencias procesales y no penales

En cuanto a lo sostenido por la defensora respecto de la supuesta


falta de tipicidad de la conducta de infracción a la medida cautelar de
prohibición de acercamiento infringida por el sentenciado, la calidad de
típico del hecho ilícito se obtiene de la sola comparación de lo obrado
por el agente, con el texto del tipo del artículo 240 del Código de
Procedimiento Civil, que en parte alguna limita su aplicación según su
tenor a las resoluciones judiciales que tengan el carácter de
permanentes. En efecto, no es exacto ni preciso decir que la infracción
de resoluciones que tienen el carácter de provisionales sólo pueda
acarrear consecuencias procesales y no penales. Es así que el
artículo 240 del Código de Procedimiento Civil, se ubica en el título
relativo al cumplimiento de las resoluciones judiciales, en general, sin
hacer la distinción de si tienen o no el carácter de permanente o
provisorias. Así, no será la naturaleza permanente o transitoria, sino el
específico tenor de la resolución de que se trate y la particular manera
en que se actúe al respecto por el sujeto imperado, lo que nos dirá si la
conducta es o no típica. En el caso sub lite la prohibición de
acercamiento impone un deber de omisión, en resguardo de la
seguridad de la víctima, y no puede, entonces, sostenerse que nada se
haya infringido porque nada se había cumplido. Ante todo, el tipo penal
sanciona al que quebrante "lo ordenado cumplir"; no sólo lo cumplido.
Es decir, incluye al que impide el debido cumplimiento. Y, enseguida, lo
ordenado cumplir, en el caso en revisión, era una omisión, esto es la
prohibición de acercarse a la víctima. Luego, estaba cumplido lo
ordenado, en tanto no mediara la acción contraria que, si posteriormente
se ejecutó, se convirtió necesariamente en una acción típica
(considerando 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 9/12/2019, Rol Nº 2271-2019,

Cita online: CL/JUR/7011/2019

ARTÍCULO 241

Las apelaciones que se deduzcan contra las resoluciones que se dicten en


conformidad a lo dispuesto en los artículos precedentes de este título, se
concederán sólo en el efecto devolutivo. Tratándose de juicios de hacienda,
estas apelaciones se colocarán de inmediato en tabla y gozarán de
preferencia para su vista y fallo.110

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 186, 189, 192, 197, 200, 201 y 748 y
siguientes.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procedencia de la apelación en contra de las resoluciones dictadas


en la etapa de cumplimiento de alimentos

Ni la Ley de Tribunales de Familia —Nº 19.968— ni la Ley sobre


Pagos de Pensiones Alimenticias se pronuncian sobre la procedencia
del recurso de apelación en contra de las resoluciones dictadas en
etapa de cumplimiento. Al no existir norma expresa, el artículo 67
inciso 1º de la primera Ley mencionada prescribe que las resoluciones
serán impugnables a través de los recursos y en las formas que
establece el Código de Procedimiento Civil, siempre que ello no resulte
incompatible con los principios del procedimiento que establece la
Ley Nº 19.968. Por tanto, habrá de recurrirse a las normas del Título XIX
del Libro Primero del Código mencionado, relativo a la ejecución de las
resoluciones pronunciadas por tribunales chilenos, cuyo artículo 241
autoriza el recurso de apelación en el solo efecto devolutivo. En suma,
corresponde conceder la apelación en contra de la resolución que
rechaza la fórmula de pago propuesta por el demandante de rebaja de
alimentos (considerando 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 4/01/2016, Rol Nº 967-2015,

Cita online: CL/JUR/44/2016

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 11/07/2016, Rol Nº 1141-2016,

Cita online: CL/JUR/4983/2016

§ 2. De las resoluciones pronunciadas por tribunales extranjeros

ARTÍCULO 242 (239)

Las resoluciones pronunciadas en país extranjero tendrán en Chile la


fuerza que les concedan los tratados respectivos; y para su ejecución se
seguirán los procedimientos que establezca la ley chilena, en cuanto no
aparezcan modificados por dichos tratados.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 76 y 331. Código de Procedimiento


Penal: artículos 644 y 645. Código Procesal Penal: artículo 13. Código Orgánico de Tribunales:
artículo 5. Código de Derecho Internacional Privado: artículos 174, 423 y siguientes.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Concepto de exequátur

El exequátur ha sido definido como el acto que recayendo sobre la


propia sentencia extranjera, inviste a ésta, tal como ha sido dictada, de
los mismos efectos que tienen las sentencias de los jueces nacionales
sin necesidad de entrar a la revisión del juicio. Al respecto esta Corte ha
expresado que en nuestro país consiste en la decisión de la Corte
Suprema por la cual, luego de sustanciar el procedimiento contradictorio
respectivo y revisar las exigencias legales, otorga autorización o
pronunciamiento favorable a la sentencia extranjera con el objeto de
reconocerle la fuerza ejecutiva de la que carece y los mismos efectos
que los fallos expedidos por jueces nacionales, lo que permitirá se
pueda cumplir mediante el procedimiento y ante el tribunal competente
(sentencia de once de mayo de 2009, rol 5478-07, Considerando
tercero). En el mismo sentido, se ha dicho que el exequátur es, por
consiguiente, un procedimiento autónomo, independiente del juez
anterior, en que se revisa solamente si la sentencia extranjera cumple o
no con determinados requisitos y sin alterar su contenido sustancial. En
épocas en las que las soberanías nacionales han sido celosamente
protegidas, ha sido adoptado el principio de que en el Estado no deben
tener efecto las resoluciones judiciales dictadas por tribunales
extranjeros. Fue también la posición predominante entre nosotros,
hasta fines del siglo XIX. Pero la solidaridad, la interdependencia de los
países, el tráfico y el comercio internacional, aconsejan una actitud
distinta. En el Derecho chileno el cambio se produjo con la dictación del
Código de Procedimiento Civil, en que el procedimiento de exequátur
fue regulado en los artículos 242 a 251 del referido Código
(considerandos 1º y 2º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/07/2018, Rol Nº 34666-2017,


Cita online: CL/JUR/4408/2018

2. Requisitos para que la sentencia dictada en el extranjero tenga fuerza


en el país

Tratándose de la solicitud de exequátur de una sentencia dictada en


un país que suscribió, al igual que Chile, el Código de Derecho
Internacional Privado, corresponde dar aplicación al artículo 242 del
Código de Procedimiento Civil. A su vez, el artículo 423 del Código de
Derecho Internacional Privado dispone que toda sentencia civil o
contenciosa administrativa dictada en uno de los Estados contratantes,
tendrá fuerza y podrá ejecutarse en los demás si reúne estos requisitos:
a) que tenga competencia para conocer del asunto y juzgarlo de
acuerdo con las reglas de este Código, el juez o el tribunal que la haya
dictado; b) que las partes hayan sido citadas personalmente o por su
representante legal, para el juicio; c) que el fallo no contravenga el orden
público o el derecho público del país en que quiere ejecutarse; d) que
sea ejecutorio en el Estado en que se dicte; e) que se traduzca
autorizadamente por un funcionario o intérprete oficial del Estado en que
ha de ejecutarse si allí fuere distinto el idioma empleado; y f) que el
documento en que conste reúna los requisitos necesarios para ser
considerado como auténtico en el Estado de que proceda y los que
requiera para que haga fe la legislación del Estado en que se aspira
cumplir la sentencia (considerandos 1º y 2º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 26/02/2019, Rol Nº 38765-2017,


Cita online: CL/JUR/996/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 4/06/2018, Rol Nº 24974-2017,

Cita online: CL/JUR/2615/2018

— Corte Suprema, 5/03/2018, Rol Nº 27980-2017,

Cita online: CL/JUR/999/2018

— Corte Suprema, 22/02/2018, Rol Nº 41425-2017,

Cita online: CL/JUR/806/2018

3. Ejecución de la sentencia de divorcio pronunciada en el extranjero.


Procedencia

En relación con la materia, es útil anotar que el inciso segundo del


aludido artículo 83 de la Ley Nº19.947 dispone que "las sentencias de
divorcio y nulidad de matrimonio dictadas por tribunales extranjeros
serán reconocidas en Chile conforme a las reglas generales que
establece el Código de Procedimiento Civil", de suerte, pues, que como
en la especie concurren cada una de las circunstancias exigidas en el
artículo 423 del Código de Bustamante, reseñadas en el fundamento
segundo de esta sentencia, en relación, con lo dispuesto por el
artículo 242 del Código de Enjuiciamiento Civil, corresponde acoger la
solicitud en estudio (considerando 7º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 26/02/2014, Rol Nº 10251-2013, Cita online:


CL/JUR/326/2014

ARTÍCULO 243 (240)

Si no existen tratados relativos a esta materia con la nación de que


procedan las resoluciones, se les dará la misma fuerza que en ella se dé a
los fallos pronunciados en Chile.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 76 y 331. Código de Derecho


Internacional Privado: artículos 423 y siguientes.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. En ausencia de tratado sobre cumplimiento de resoluciones


judiciales, y de precedente de reciprocidad, debe aplicarse regla de
artículo 245 de Código de Procedimiento Civil

Entre Chile y la República de México no existe tratado sobre


cumplimiento de resoluciones judiciales pronunciadas en los
respectivos países ni hay constancia de una posible situación de
reciprocidad. Por consiguiente, no corresponde dar aplicación a las
normas de los artículos 242, 243 y 244 del Código de Procedimiento
Civil, sino que a la regla del artículo 245 del mismo cuerpo legal, que fija
los trámites judiciales que han de cumplirse en Chile para que las
resoluciones pronunciadas por tribunales extranjeros puedan tener
fuerza, ejecutarse o cumplirse en nuestro país. Que el aludido precepto
confiere a las resoluciones dictadas por tribunales extranjeros la misma
fuerza que si se hubieren dictado por tribunales chilenos, con tal que:
1º) no contengan nada contrario a las leyes de la República; 2º) no se
opongan a la jurisdicción nacional; 3º) que la parte en contra de la cual
se invoca la sentencia haya sido debidamente notificada de la acción, y
4º) que estén ejecutoriadas en conformidad a las leyes del país en que
se hayan sido pronunciadas (considerandos 1º y 2º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 11/02/2013, Rol Nº 6552-2012,


Cita online: CL/JUR/303/2013

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 19/04/2000, Rol Nº 773-2000,

Cita online: CL/JUR/2794/2000

— Corte Suprema, 10/11/1999, Rol Nº 1411-1999,

Cita online: CL/JUR/1012/1999

— Corte Suprema, 3/11/1999, Rol Nº 268-1997,

Cita online: CL/JUR/1011/1999

— Corte Suprema, 14/05/1999, Rol Nº 690-1999,

Cita online: CL/JUR/2211/1999

— Corte Suprema, 31/03/1999, Rol Nº 873-1998,

Cita online: CL/JUR/2814/1999

— Corte Suprema, 4/03/1999, Rol Nº 3833-1998,

Cita online: CL/JUR/2759/1999

— Corte Suprema, 3/04/1997, Rol Nº 23003-1994,

Cita online: CL/JUR/91/1997

— Corte Suprema, 20/06/1996, Rol: No se consigna,

Cita online: CL/JUR/1129/1996

— Corte Suprema, 14/05/1995, Rol Nº 1376-1995,

Cita online: CL/JUR/1337/1995


— Corte Suprema, 10/10/1994, Rol Nº 2971-1994,

Cita online: CL/JUR/1600/1994

ARTÍCULO 244 (241)

Si la resolución procede de un país en que no se da cumplimiento a los


fallos de los tribunales chilenos, no tendrá fuerza en Chile.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 76 y 331. Código Procesal Penal:


artículo 13. Código Orgánico de Tribunales: artículo 5º. Código de Derecho Internacional
Privado: artículos 174, 423 y siguientes.

ARTÍCULO 245 (242)

En los casos en que no pueda aplicarse ninguno de los tres artículos


precedentes, las resoluciones de tribunales extranjeros tendrán en Chile la
misma fuerza que si se hubieran dictado por tribunales chilenos, con tal que
reúnan las circunstancias siguientes:

1ª Que no contengan nada contrario a las leyes de la República. Pero no


se tomarán en consideración las leyes de procedimiento a que haya debido
sujetarse en Chile la substanciación del juicio;

2ª Que tampoco se opongan a la jurisdicción nacional;

3ª Que la parte en contra de la cual se invoca la sentencia haya sido


debidamente notificada de la acción. Con todo, podrá ella probar que, por
otros motivos, estuvo impedida de hacer valer sus medios de defensa;111

4ª Que estén ejecutoriadas en conformidad a las leyes del país en que


hayan sido pronunciadas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 76, 242, 244 y 345. Código de
Derecho Internacional Privado: artículos 423 y siguientes.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. En ausencia de tratado sobre cumplimiento de resoluciones


judiciales, y de precedente de reciprocidad, debe aplicarse regla de
artículo 245 de Código de Procedimiento Civil
Cuando entre Chile y el país en el cual se dictó la sentencia de
divorcio cuyo exequátur se solicita no existe tratado sobre cumplimiento
de resoluciones pronunciadas en los respectivos Estados, ni hay
constancia sobre una posible situación de reciprocidad, se concluye que
no corresponde dar aplicación a los artículos 242 a 244 del Código de
Procedimiento Civil, sino al artículo 245 del mismo texto legal, que
regula los trámites judiciales que han de cumplirse en Chile para que
las resoluciones pronunciadas por tribunales extranjeros puedan tener
fuerza, ejecutarse o cumplirse en nuestro país. El referido artículo 245
confiere a las resoluciones dictadas por tribunales extranjeros la misma
fuerza que si se hubieren dictado por tribunales chilenos, con tal que:
a) no contengan nada contrario a las leyes de la República; b) no se
opongan a la jurisdicción nacional; c) que la parte contra la cual se
invoca la sentencia haya sido notificada de la acción; y d) que estén
ejecutoriadas en conformidad a las leyes del país en que hayan sido
pronunciadas (considerandos 1º y 2º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 7/02/2017, Rol Nº 60695-2016,


Cita online: CL/JUR/433/2017

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 17/04/2017, Rol Nº 97886-2016,

Cita online: CL/JUR/1799/2017

— Corte Suprema, 12/09/2016, Rol Nº 13155-2015,

Cita online: CL/JUR/6270/2016

— Corte Suprema, 11/07/2016, Rol Nº 22909-2015,

Cita online: CL/JUR/5022/2016

— Corte Suprema, 9/05/2016, Rol Nº 23733-2014,

Cita online: CL/JUR/3006/2016

— Corte Suprema, 25/02/2016, Rol Nº 5123-2016,


Cita online: CL/JUR/1316/2016

— Corte Suprema, 21/12/2015, Rol Nº 11092-2015,

Cita online: CL/JUR/8047/2015

— Corte Suprema, 25/10/2010, Rol Nº 5827-2009,

Cita online: CL/JUR/8707/2010

2. Requisitos para la ejecución de sentencias extranjeras en Chile


cuando no existe tratado

Cuando entre Chile y el país en el cual se dictó la sentencia cuyo


exequátur se solicita no existe tratado sobre cumplimiento de
resoluciones pronunciadas en los respectivos Estados, ni hay
constancia sobre una posible situación de reciprocidad, se concluye que
no corresponde dar aplicación a los artículos 242 a 244 del Código de
Procedimiento Civil, sino al artículo 245 del mismo texto legal, que
regula los trámites judiciales que han de cumplirse en Chile para que
las resoluciones pronunciadas por tribunales extranjeros puedan tener
fuerza, ejecutarse o cumplirse en nuestro país. El referido artículo 245
confiere a las resoluciones dictadas por tribunales extranjeros la misma
fuerza que si se hubieren dictado por tribunales chilenos, con tal que:
a) no contengan nada contrario a las leyes de la República; b) no se
opongan a la jurisdicción nacional; c) que la parte contra la cual se
invoca la sentencia haya sido notificada de la acción; y d) que estén
ejecutoriadas en conformidad a las leyes del país en que hayan sido
pronunciadas (considerandos 1º y 2º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 16/03/2020, Rol Nº 26701-2018,


Cita online: CL/JUR/20342/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 3/12/2019, Rol Nº 5874-2019,

Cita online: CL/JUR/6851/2019

— Corte Suprema, 25/03/2019, Rol Nº 41446-2017,


Cita online: CL/JUR/1626/2019

— Corte Suprema, 12/02/2019, Rol Nº 42661-2017,

Cita online: CL/JUR/749/2019

— Corte Suprema, 6/07/2018, Rol Nº 34666-2017,

Cita online: CL/JUR/4408/2018

— Corte Suprema, 18/06/2018, Rol Nº 101787-2016,

Cita online: CL/JUR/2891/2018

— Corte Suprema, 5/03/2018, Rol Nº 19086-2017,

Cita online: CL/JUR/4014/2018

— Corte Suprema, 15/01/2018, Rol Nº 28068-2017,

Cita online: CL/JUR/279/2018

3. Existencia de tratado con reserva

Las Repúblicas de Chile y del Perú suscribieron la Convención de


Derecho Internacional Privado, en cuya virtud pueden cumplirse en
Chile las sentencias dictadas en dicho país, aplicándose en la especie
lo dispuesto en el artículo 242 del Código del Procedimiento Civil. Chile
aprobó, ratificó y promulgó la mencionada Convención, con la reserva
que "ante el derecho chileno y con relación a los conflictos que se
produzcan entre la legislación chilena y alguna extranjera, los preceptos
de la legislación actual o futura de Chile, prevalecerán sobre dicho
Código, en caso de desacuerdo entre unos y otros". De manera que las
reglas previstas en los artículos 242 y siguientes del Código de
Procedimiento Civil, deben prevalecer sobre las contenidas en los
artículos 423 y siguientes del Código Bustamante, sin prejuicio de
resultar sustancialmente coincidentes con las nacionales
(considerando 1º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 18/03/2019, Rol Nº 2651-2019,


Cita online: CL/JUR/1440/2019
4. Causal de divorcio homologable con alguna de las previstas por el
ordenamiento jurídico nacional

La sentencia de divorcio cuyo exequátur se pide se funda en una


causal homologable con la referida en nuestro ordenamiento jurídico de
cese de la convivencia conyugal por uno o tres años, en el caso que se
solicite el divorcio de común acuerdo por los cónyuges o uno de ellos
de manera unilateral, puesto que dicha causal comprende dos
elementos que si bien son substantivos, sólo uno es de la esencia de la
institución para los efectos del cumplimiento en Chile de sentencias
extranjeras en la materia, ya que el plazo, siendo igualmente
substantivo y no procesal, puede perfectamente prescindirse si se tiene
en cuenta que no es una norma de orden público, que es lo que en rigor,
exige del artículo 245 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil. Se trata,
por consiguiente, de no contrariar las instituciones, derechos, principios
e intereses básicos de la República, y en este caso la sentencia que se
trata de ejecutar en Chile declara el divorcio entre los cónyuges por el
cese de convivencia, es decir, la situación del denominado divorcio-
remedio, que es la consagrada en el artículo 55 de nuestra Ley de
Matrimonio Civil. La acción de divorcio se interpuso en Venezuela, lugar
de domicilio de las partes al momento del juicio por lo que no se
encontraba entregada al conocimiento de los tribunales nacionales; y,
la sentencia se encuentra ejecutoriada. En consecuencia, concurren las
exigencias del artículo 245 del Código de Procedimiento Civil y
corresponde otorgar el exequátur solicitado (considerandos 4º a 6º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/06/2020, Rol Nº 33461-2020,


Cita online: CL/JUR/37313/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 7/01/2020, Rol Nº 385-2019,

Cita online: CL/JUR/2182/2020

— Corte Suprema, 3/12/2019, Rol Nº 5874-2019,

Cita online: CL/JUR/6851/2019

— Corte Suprema, 27/08/2019, Rol Nº 35798-2017,


Cita online: CL/JUR/4862/2019

— Corte Suprema, 17/06/2019, Rol Nº 33580-2018,

Cita online: CL/JUR/3478/2019

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 245 CIRC. 2ª)

1. Sentencia extranjera que no contraviene las leyes de la República ni


se opone a la jurisdicción nacional

Si la sentencia cuyo exequátur se pide no contraviene las leyes de la


República ni tampoco se opone a la jurisdicción nacional, en la medida
que significa la disolución del vínculo por una causa prevista por el
ordenamiento jurídico nacional, según la normativa actualmente
vigente, concurren las exigencias del artículo 245 del Código de
Procedimiento Civil y corresponde otorgar el exequátur. Así acontece
en el caso de autos, donde la causal invocada para obtener el divorcio
en el extranjero dice relación con haber cesado las partes en la
convivencia conyugal por cinco años, situación similar a la causal
establecida en el artículo 55 inciso 3º de la Ley de Matrimonio Civil.
Además, de los antecedentes no aparece que ambos cónyuges
hubieren tenido domicilio en Chile en los años anteriores al
pronunciamiento de la sentencia, de modo que no cabe entender que
hayan actuado en fraude a la ley chilena (considerandos 6º a 9º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/04/2018, Rol Nº 43058-2017,


Cita online: CL/JUR/2056/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 15/04/2019, Rol Nº 19036-2018,

Cita online: CL/JUR/2062/2019

— Corte Suprema, 1/03/2018, Rol Nº 36583-2017,

Cita online: CL/JUR/1012/2018

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 245 CIRC. 3ª)


1. Condiciones en que debe verificarse el requisito de la debida
notificación

El concepto "debidamente notificado" debe entenderse en su


acepción más clara y evidente, cual es haber sido real y efectivamente
emplazado a la causa. "Es un decirle a la persona: usted queda
enterada de la demanda y comparezca dentro del plazo que la ley le
establece para defenderse, bajo apercibimiento de que si no lo hace, el
juicio seguirá sin su comparecencia y sin escucharla". (Couture,
Eduardo, Procedimiento, Editorial Medina, Tomo I, Montevideo, pág.
45). El sistema de regularidad internacional de los fallos se fundamenta
en primer lugar, en el respeto a la garantía constitucional del debido
proceso, que se sustenta, a su vez, en el emplazamiento del
demandado, esto es, en el hecho "cierto" de haber tomado conocimiento
de la acción deducida en su contra, experiencia real y efectiva que no
puede satisfacerse con la sola notificación ficta de la demanda
(considerando 9º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 8/11/2011, Rol Nº 853-2011,


Cita online: CL/JUR/10342/2011

2. Improcedencia de conceder exequátur si la parte en contra la cual se


invoca la sentencia no ha sido debidamente notificada de la acción

Para reconocer en Chile las resoluciones dictadas por tribunales


extranjeros, conforme a lo dispuesto en los artículos 242 a 251 del
Código de Procedimiento Civil, es necesario, entre otros requisitos, que
la parte en contra de la cual se invoca la sentencia haya sido
debidamente notificada de la acción. Al efecto, conforme a los
antecedentes acompañados y tal como da cuenta la señora Fiscal en
su informe, la exigencia consignada en el Nº 3 del precepto
mencionado, de la notificación de la acción a la parte en contra de la
cual se invoca la sentencia, no aparece cumplida. En consecuencia, los
requeridos no fueron parte del juicio en que se dictó la sentencia que se
pretende cumplir, circunstancia que impide acoger la solicitud planteada
(considerando 2º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 17/07/2019, Rol Nº 20610-2018,


Cita online: CL/JUR/4115/2019
ARTÍCULO 246 (243)

Las reglas de los artículos precedentes son aplicables a las resoluciones


expedidas por jueces árbitros. En este caso se hará constar su autenticidad
y eficacia por el visto bueno u otro signo de aprobación emanado de un
tribunal superior ordinario del país donde se haya dictado el fallo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 76, 242, 244 y 345. Código de
Derecho Internacional Privado: artículo 246.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Requisitos para acoger el requerimiento de cumplimiento en Chile de


una sentencia dictada en el extranjero

Que el artículo 4º de la Convención sobre Reconocimiento y


Ejecución de las Sentencias Arbitrales Extranjeras de 1958,
denominada "Convención de Nueva York", a la cual Chile adhirió el 4
de septiembre de 1975 al depositar el documento pertinente en la
Secretaría General de las Naciones Unidas, previa ratificación de fecha
31 de julio de 1975 y aprobación del texto por Decreto Supremo Nº 664
del Ministerio de Relaciones Exteriores de 2 de octubre y publicado en
el Diario Oficial el 30 del mismo mes, ambas fechas del año 1975; e
igualmente suscrito por la República Argentina el 20 de agosto de 1958
y ratificado el 14 de marzo de 1989, el cual establece normas y
exigencias específicas sobre reconocimiento y ejecución de las
sentencias arbitrales extranjeras, debiendo la parte que solicita dicho
trámite presentar junto con la demanda o requerimiento. 1º. El original
debidamente autenticado de la sentencia o una copia de ese original
que reúna las condiciones requeridas para su autenticidad. 2º. El
original del acuerdo por el que las partes se obligan a someter a arbitraje
todas las diferencias o ciertas diferencias que hayan surgido o puedan
surgir entre ellas respecto a una determinada relación jurídica,
contractual o no contractual, concerniente a un asunto que pueda ser
resuelto por arbitraje; o una copia de ese original que reúna las
condiciones requeridas para su autenticidad.

Corte Suprema, 11/01/2007, Rol Nº 6600-2005, Cita online:


CL/JUR/5682/2007
ARTÍCULO 247 (244)

En todos los casos a que se refieren los artículos precedentes, la resolución


que se trate de ejecutar se presentará a la Corte Suprema en copia legalizada
o apostillada.112

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 90, 251, 258, 259, 817 y 824.

ARTÍCULO 248 (245)

En los casos de jurisdicción contenciosa, se dará conocimiento de la


solicitud a la parte contra quien se pide la ejecución, la cual tendrá para
exponer lo que estime conveniente un término igual al de emplazamiento para
contestar demandas.

Con la contestación de la parte o en su rebeldía, y con previa audiencia del


fiscal judicial, el tribunal declarará si debe o no darse cumplimiento a la
resolución.113

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 90, 251, 258, 259, 817 y 824. Código
de Derecho Internacional Privado: artículos 425, 426 y 428.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procedencia del abandono del procedimiento en el procedimiento de


exequátur

La institución del abandono del procedimiento resulta aplicable al


trámite del exequátur, en cuanto éste constituye un procedimiento de
naturaleza autónoma e independiente que puede derivar en
contencioso en la medida que la ley posibilita que la parte contra la cual
se pretende hacer valer la sentencia extranjera se oponga a a
autorización de ejecución —artículo 248 del Código de Procedimiento
Civil—. No obstante, el abandono del procedimiento sólo puede
prosperar si es que el litigante interesado en la resolución del pleito ha
sido negligente, cesando en el acometimiento de la actividad que le
corresponde de acuerdo al impulso procesal que le es exigible, por un
período superior a seis meses, contados desde la última resolución
recaída en una gestión útil para dar curso progresivo a los autos
(considerando 1º de la sentencia de la Corte Suprema). En el caso de
autos, la actuación del requirente en orden a solicitar una aclaración
respecto de cuáles documentos debía acompañar para cumplir lo
pedido por la Fiscalía Judicial, constituye una gestión útil, pues su
finalidad no era otra que la de dejar el procedimiento en condiciones de
que el Fiscal Judicial diera su opinión sobre la petición de exequátur,
trámite que el artículo 248 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil
exige como previo e indispensable para que la Corte declare si debe
darse cumplimiento a la resolución extranjera. Si bien la Corte Suprema
no dio lugar a la aclaración solicitada, lo cierto es que ello no le resta el
carácter de útil a tal presentación, pues no por ello ha de entenderse
que haya perdido su finalidad, ni menos puede estimarse que el
solicitante hubiese incurrido en una negligencia tal en la sustanciación
del exequátur que amerite la pérdida del procedimiento. En estas
condiciones, corresponde rechazar el incidente de abandono del
procedimiento (considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 31/03/2016, Rol Nº 22425-2014,


Cita online: CL/JUR/2125/2016

ARTÍCULO 249 (246)

En los asuntos de jurisdicción no contenciosa, el tribunal resolverá con sólo


la audiencia del fiscal judicial.114

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 90, 251, 258, 259, 817 y 824. Código
Civil: artículo 928. Código de Derecho Internacional Privado: artículos 434 y 435.

ARTÍCULO 250 (247)

Si el tribunal lo estima necesario, podrá abrir un término de prueba antes


de resolver, en la forma y por el tiempo que este Código establece para los
incidentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 90, 251, 258, 259, 817 y 824.

ARTÍCULO 251 (248)


Mandada cumplir una resolución pronunciada en país extranjero, se pedirá
su ejecución al tribunal a quien habría correspondido conocer del negocio en
primera o en única instancia, si el juicio se hubiera promovido en Chile.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 231. Código de Derecho Internacional


Privado: artículos 424 y 430.

TÍTULO XX DE LAS MULTAS

ARTÍCULO 252 (249)

Todas las multas que este Código establece o autoriza, se impondrán a


beneficio fiscal enterándose en la cuenta corriente del tribunal respectivo y se
entregarán anualmente a los respectivos Consejos del Colegio de Abogados,
para que con ellas atiendan de preferencia a los fines que señalan la letra m)
del artículo 12 y las letras j) y k) del artículo 13 de la Ley Nº 4.409, de 11 de
septiembre de 1928.115

Las multas deberán pagarse dentro de los quince días siguientes a la fecha
de notificación de la respectiva resolución. El incumplimiento se comunicará
a la Tesorería General de la República y a la Contraloría General de la
República para los efectos de su cobranza y de su inclusión en la lista de
deudores fiscales.116

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 9º, 31, 46, 88, 114, 118, 122, 166,
274, 276, 279, 282, 283, 338, 359, 394, 397, 420, 543, 770 y 917. Decreto con Fuerza de Ley
Nº 1 Min. Hacienda, D.O. 26.10.1994: artículo 2º. Ley Nº 10.336, sobre Organización y
Atribuciones de la Contraloría General de la República: artículos 7º y 22.
LIBRO SEGUNDO DEL JUICIO ORDINARIO

TÍTULO I DE LA DEMANDA

ARTÍCULO 253 (250)

Todo juicio ordinario comenzará por demanda del actor, sin perjuicio de lo
dispuesto en el Título IV de este Libro.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 2º, 3º, 17, 21, 51, 170, 269, 273, 280,
435, 441, 474, 521, 531, 545, 551, 571, 584, 588, 607, 611, 683, 693, 694, 748, 753, 758, 759,
768 y 823. Código Civil: artículo 331. Código Orgánico de Tribunales: artículos 134, 176 y 178.
Código Procesal Penal: artículo 171. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia: artículos 56,
61 Nº 1 y 82.

ARTÍCULO 254 (251)

La demanda debe contener:

1º La designación del tribunal ante quien se entabla;

2º El nombre, domicilio y profesión u oficio del demandante y de las


personas que lo representen, y la naturaleza de la representación;

3º El nombre, domicilio y profesión u oficio del demandado;

4º La exposición clara de los hechos y fundamentos de derecho en que se


apoya; y

5º La enunciación precisa y clara, consignada en la conclusión de las


peticiones que se sometan al fallo del tribunal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 4º, 6º, 17, 18, 19, 20, 30 a 32, 49, 53,
160, 170, 255, 256, 303, 309, 314, 704 y 768 Nº 4. Código Civil: artículos 196 y 1502. Código
Orgánico de Tribunales: artículos 10 y 187 Nº 1. Código Procesal Penal: artículos 60, 61 y 113.
Código del Trabajo: artículo 439. Ley Nº 18.120, sobre Comparecencia en Juicio: artículos 1º y
2º. Ley Nº 19.496, sobre protección derechos del consumidor: artículo 51. Auto Acordado Iltma.
Corte de Apelaciones de Santiago D.O. 21.01.1989 modificado auto acordado 29.10.1993 D.O.
3.11.1993. Auto acordado Iltma. Corte de Apelaciones de Concepción de 1.10.1997 D.O.
10.10.1997. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia: artículos 57 y 86. Código Tributario:
artículo 125.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Excepción de ineptitud del libelo debe estar justificada por hechos


graves o importantes, que la tornen ininteligible o vaga

Del tenor de lo dispuesto en los artículos 464 Nº 4 y 254 Nº 2 del


Código de Procedimiento Civil, para que proceda la excepción de
ineptitud del libelo es necesario que el requisito legal ausente en la
demanda ejecutiva sea de aquellos que la hagan inepta, o sea, mal
formulada, ininteligible o vaga respecto de las personas o de la causa
de pedir o de la cosa pedida. Así, cuando la sentencia dictada por el
juez de la instancia expresa que la demanda ejecutiva contiene una
exposición suficientemente clara de los hechos en que ella se apoya y
que las omisiones que el demandado reclama no hacen ininteligible ni
vaga la exposición de los hechos, se está calificando la acción de
acuerdo con los hechos que las partes exponen, materia que
corresponde al juez del fondo. De esta manera, siendo un hecho
establecido por los jueces del mérito, en uso de las facultades que les
son exclusivas, que la demanda resulta clara y precisa, no se configuran
los supuestos fácticos y jurídicos que harían procedente la excepción
de ineptitud del libelo (considerandos 4º a 6º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 17/10/2019, Rol Nº 16693-2019,


Cita online: CL/JUR/6074/2019

2. Excepción de ineptitud del libelo acogida. Demanda debe efectuar


una exposición clara de los hechos y fundamentos de derecho en que
se apoya

El artículo 254 del Código de Procedimiento Civil dispone que: "la


demanda debe contener: 4º La exposición clara de los hechos y
fundamentos de derecho en que se apoya": a partir de esta disposición
se desprende que en la demanda debe efectuarse una relación de los
hechos que motivan la interposición de la acción y las normas jurídicas
aplicables a ellos, así en el caso de ser varios los demandados lo lógico
es que la demanda contenga una exposición de los hechos que permita
entender cuáles son los fundamentos de la acción respecto de cada uno
de ellos, requisito que la demanda de autos no cumple desde que no
contiene hecho alguno respecto de la situación de la demandada, lo que
ciertamente dificulta el ejercicio de su derecho a defensa, no siendo
posible sustentar aquel en una mera elucubración. Por lo demás
respecto a la excepción en comento, la Excma. Corte Suprema ha
señalado "que respecto de la excepción de ineptitud del libelo, es
pertinente señalar que invariablemente se ha resuelto que sólo es
procedente acogerla si se está en presencia de deficiencias o defectos
tales que hagan ininteligible, vaga y mal formulada la demanda, sin que
sea posible comprenderla y llevar a cabo una adecuada defensa."
(Sentencia dictada el 7 de abril de 2014, en autos Rol: 469-2014). De
esta forma, corresponde en este caso, acoger la aludida excepción
(considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 12/01/2018, Rol Nº 711-2017,

Cita online: CL/JUR/281/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 4/12/2019, Rol Nº 7058-2017,

Cita online: CL/JUR/6881/2019

— Corte Suprema, 9/07/2018, Rol Nº 6527-2018,

Cita online: CL/JUR/3764/2018

3. Causal de casación en la forma de ultra petita

En la especie, resulta efectivo el reproche formulado por la recurrente,


pues sin que mediara petición de la defensa del ejecutado, el tribunal
de primer grado declaró la prescripción total de la deuda, en
circunstancias que tal declaración sólo cabía respecto de algunas de las
cuotas. Así, el Máximo Tribunal ha sostenido que constituye un
imperativo legal que las sentencias se pronuncien conforme al mérito
del proceso y resuelvan los puntos expresamente sometidos a juicio por
las partes. Se extralimita, en consecuencia, e incurre en la causal de
nulidad formal prevista en el artículo 768 Nº 4 del Código de
Procedimiento Civil, el sentenciador que se extralimita de sus facultades
actúa fuera del ámbito de las atribuciones que le son propias y se
extiende a puntos no sometidos a su decisión (considerandos 5º y 6º de
la sentencia de casación).

Corte de Apelaciones de Santiago, 26/01/2018, Rol Nº 6821-2017,

Cita online: CL/JUR/431/2018

ARTÍCULO 255

Los documentos acompañados a la demanda deberán impugnarse dentro


del término de emplazamiento, cualquiera sea su naturaleza.117

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 89, 258, 259, 273, 277, 309, 342 Nº 3,
346 Nº 3, 348, 433, 698, 795 Nº 3 y 800 Nº 2. Código Civil: artículo 196. Código del Trabajo:
artículo 446.

ARTÍCULO 256 (253)

Puede el juez de oficio no dar curso a la demanda que no contenga las


indicaciones ordenadas en los tres primeros números del artículo 254,
expresando el defecto de que adolece.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 254, 261, 308 y 782. Ley Nº 18.010,
sobre operaciones de crédito y otras obligaciones de dinero que indica: artículos 20 y 21. Código
Procesal Penal: artículos 114 a 117.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Improcedencia de supeditar el ejercicio del derecho de acción a un


aspecto meramente formal, como es la tramitación electrónica en los
tribunales con competencia civil

En el ejercicio de las atribuciones que la ley ha entregado a los jueces


no resulta atendible que, en consideración a fundamentos meramente
formales y a interpretaciones excesivamente rigurosas, se pongan en
entredicho el derecho de acción, en el marco de un debido proceso.
Resulta indispensable el derecho a un debido proceso, en el que se
debe entender incluido el derecho de las partes de accionar, y conforme
a los mecanismos establecidos al efecto por la ley. En la especie, de la
interpretación del texto constitucional, y considerando en especial el
contenido y carácter del derecho a un debido proceso, aparece con
claridad que si bien puede el juez de oficio no dar curso a la demanda
que no contenga las indicaciones ordenadas en los tres primeros
números del artículo 254 del Código de Procedimiento Civil, expresando
el defecto que concurre, lo cierto es que la resolución impugnada no es
el resultado del ejercicio de la atribución que la ley ha entregado a los
jueces del fondo, sino que, por el contrario, al resolver se limitan a
impedir la tramitación del reclamo porque en su concepto la omisión que
echan en falta, vale decir, la individualización del representante legal de
la concesionaria reclamante, torna ineficaz el sistema informático de
tramitación que los tribunales con competencia en materia civil se ven
compelidos a implementar de manera correcta. Al decidirlo así y
determinar que la acción no podía ser admitida a tramitación, conduce
a estimar que la resolución en análisis se ha tornado ilegal, pues al
adoptarla los sentenciadores quebrantaron lo prevenido en los
artículos 254 y 256 del Código de Procedimiento Civil, al supeditar el
ejercicio del derecho de acción a un aspecto meramente formal, como
es la tramitación electrónica en los tribunales con competencia civil. Por
lo tanto, actuando de oficio, procede dejar sin efecto lo obrado desde la
dictación de la resolución que decidió no dar curso al reclamo intentado
(considerandos 8º a 10º de la anulación de oficio).

Corte Suprema, 10/04/2018, Rol Nº 44224-2017,


Cita online: CL/JUR/1662/2018

ARTÍCULO 257 (254)

Admitida la demanda, se conferirá traslado de ella al demandado para que


la conteste.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40, 44, 78, 148, 258 a 261. Código
Procesal Penal: artículo 169. Código del Trabajo: artículo 440. Ley Nº 19.968, crea los
Tribunales de Familia: artículos 59 y 95.

ARTÍCULO 258

El término de emplazamiento para contestar la demanda será de quince


días si el demandado es notificado en la comuna donde funciona el tribunal.
Se aumentará este término en tres días más si el demandado se encuentra
en el mismo territorio jurisdiccional pero fuera de los límites de la comuna que
sirva de asiento al tribunal.118

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 5º, 49, 64, 65, 66, 200, 255, 259, 260,
261, 308, 329, 459, 460, 461, 462, 492, 586, 683, 698 Nº 2, 779, 795 y 800. Código Civil:
artículos 1870 y 2428. Código Orgánico de Tribunales: artículos 390, 393 y 595. Código del
Trabajo: artículo 440. Acuerdo Pleno Excma. Corte Suprema D.O. 21.04.1999.

ARTÍCULO 259 (256)

Si el demandado se encuentra en un territorio jurisdiccional diverso o fuera


del territorio de la República, el término para contestar la demanda será de
dieciocho días, y a más el aumento que corresponda al lugar en que se
encuentre. Este aumento será determinado en conformidad a una tabla que
cada cinco años formará la Corte Suprema con tal objeto, tomando en
consideración las distancias y las facilidades o dificultades que existan para
las comunicaciones.119

Esta tabla se formará en el mes de Noviembre del año que preceda al del
vencimiento de los cinco años indicados, para que se ponga en vigor en toda
la República desde el 1 de marzo siguiente; se publicará en el "Diario Oficial",
y se fijará a lo menos, dos meses antes de su vigencia, en el portal de internet
del Poder Judicial y, en los oficios de todos los secretarios de Cortes y
Juzgados de Letras.120

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 49, 64, 66, 200, 255, 258, 260, 261,
308, 329, 459, 460, 461, 462, 492, 586, 683, 779, 795 y 800. Código Civil: artículo 1870. Código
Procesal Penal: artículo 353. Código Orgánico de Tribunales: artículo 548. Código del Trabajo:
artículos 412, 430 y 440.

ARTÍCULO 260 (257)

Si los demandados son varios, sea que obren separada o conjuntamente,


el término para contestar la demanda correrá para todos a la vez, y se contará
hasta que expire el último término parcial que corresponda a los notificados.

En los casos en que proceda la pluralidad de demandantes de acuerdo al


artículo 18, el plazo para contestar la demanda, determinado según lo
dispuesto en los dos artículos anteriores, se aumentará en un día por cada
tres demandantes sobre diez que existan en el proceso. Con todo, este plazo
adicional no podrá exceder de treinta días.121
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 18, 19, 20, 65 a 68, 258 y 259.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Existencia de pluralidad de demandados. Relación procesal se


entiende trabada desde la fecha de notificación de la demanda a todos
los demandados

El incidente de abandono del procedimiento fue promovido por uno de


los tres demandados, cuando aún pendía notificar la demanda y su
ampliación a dos de los demandados. Luego, atento a lo previsto en el
artículo 260 del Código de Procedimiento Civil, aún no comenzaba a
correr el término para contestar la demanda, desde que siendo tres los
demandados, el plazo para contestar corre para todos a la vez, y se
computa hasta que expire el último término parcial que corresponda a
los notificados. En los presentes autos inicialmente la acción fue
deducida sólo en contra de un demandado, Servicio de Salud de Viña
del Mar-Quillota, el que debidamente emplazado, opuso excepciones
dilatorias, sin contestar la demanda, por lo que el actor, de conformidad
a lo previsto en el artículo 261 del Código de Procedimiento Civil, amplió
la demanda, deduciendo la originalmente presentada, acto procesal que
impuso al actor el deber de notificar nuevamente la demanda al
primigenio demandado, y a los dos demandados recientemente
incorporados con la ampliación de su acción. Luego, al momento de
alegarse el abandono del procedimiento, aun no se había realizado la
notificación de la demanda ampliada a los demandados, conforme lo
establecido en el artículo 260 del Código de Procedimiento Civil, razón
por la que solo es dable concluir que en la especie no se podía computar
el plazo de inactividad para decretar el abandono del procedimiento.
Además, el abandono del procedimiento, como su nombre lo indica y lo
preceptuado en el artículo 152 del Código de Procedimiento Civil, es
una institución que no puede aplicarse parcialmente respecto de uno de
los demandados emplazados, puesto que el procedimiento es uno solo
y para estos efectos el legislador no ha considerado que pueda adquirir
autonomía en relación a ellos, todo lo contrario, para vincular con la
acción a varios pretendidos se requiere estar ante aquellos casos que
el mismo legislador lo autoriza, como es que su posible responsabilidad
emane de un mismo hecho, atento a lo normado en el artículo 18 del
Código citado (considerandos 5º, 9º y 10º de la anulación de oficio).

Corte Suprema, 27/12/2019, Rol Nº 29554-2019,


Cita online: CL/JUR/11773/2019

2. Los artículos 11 y 260 del Código de Procedimiento Civil son normas


para la regulación del proceso y no para la decisión de la materia
controvertida, por lo que no pueden servir de fundamento a un recurso
de casación en el fondo

Funda las infracciones en análogas argumentaciones a las esgrimidas


en la casación en la forma, esto es, en haberse notificado a la
mandataria de Ronald Jeffrey en circunstancias que su poder estaba
limitado en cuanto a contestar nuevas demandas y que, por tanto, no
pudo correr el plazo que es común para las partes; infracción de los
artículos 11 y 260 del Código de Procedimiento Civil; la violación del
artículo 776 del mismo cuerpo legal se hace consistir en la dejación por
parte del Tribunal de su facultad de obrar de oficio en aquellos casos de
vicios graves que importan la nulidad de todo lo obrado y la infracción a
la Carta Fundamental la hace consistir en que no se habría dado lugar
al debido proceso al no haberse notificado legalmente a uno de los
demandados y no haber podido correr el plazo para contestar. Que en
cuanto a la infracción de los artículos 11 y 260 del Código de
Procedimiento Civil cabe tener presente que son normas para la
regulación del proceso y no para la decisión de la materia controvertida
por lo que no pueden servir de fundamento a un recurso de casación en
el fondo (considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/08/1992, Rol: No se consigna,


Cita online: CL/JUR/1093/1992

ARTÍCULO 261 (258)

Notificada la demanda a cualquiera de los demandados y antes de la


contestación, podrá el demandante hacer en ella las ampliaciones o
rectificaciones que estime convenientes.

Estas modificaciones se considerarán como una demanda nueva para los


efectos de su notificación, y sólo desde la fecha en que esta diligencia se
practique correrá el término para contestar la primitiva demanda.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 21, 40, 44, 148, 312 y 314.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Modificación sustancial de la demanda es permitida hasta antes que


haya sido contestada

La correcta exégesis del artículo 261 del Código de Procedimiento


Civil revela que el objeto litigioso se concreta con las peticiones y la
oposición manifestadas por las partes en los escritos fundamentales del
período de discusión. Luego, la circunstancia que el legislador indique
que "estas modificaciones se considerarán como una ¿demanda
nueva?" no es óbice a lo anterior en tanto la demanda de un juicio es
una sola, aunque sus peticiones estén contenidas en dos o más escritos
en que se amplíe el primitivo libelo y la precitada frase empleada por el
legislador lo ha sido "para los efectos de su notificación", nada más que
a ello. En otras palabras, la modificación sustancial de la demanda es
permitida hasta antes que haya sido contestada toda vez que, una vez
que el demandado ha opuesto su resistencia, no cabe efectuar ningún
tipo de reforma. De esta forma, la notificación de la demanda no
constituye un presupuesto procesal para hacer uso de la facultad que
consagra la norma en análisis sino que, por el contrario, se erige como
el límite temporal a la potestad que le asiste al actor para variarla a su
antojo en la medida que —por esta vía— no altere la parte petitoria del
libelo primitivo. Tampoco es condición necesaria para el ejercicio del
derecho de que se trata que su uso provenga de quien ha deducido la
demanda pues, la norma permite incluir o excluir demandantes o
demandados, como también peticiones y hechos. De esta manera, en
la medida que se mantenga inalterable la acción que es el objeto
principal del pleito, el orden del procedimiento no se verá perturbado.
En consecuencia, no existe inconveniente ni impedimento legal alguno
para admitir, como modificación de la demanda, la incorporación de
nuevos actores a la acción ya deducida, máxime si, como ocurre en la
especie, al momento de formularse ésta ninguno de los demandados
había sido notificado de la demanda primitiva, quedando a buen
recaudo su derecho a defensa (considerandos 11º a 13º de la actuación
de oficio de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 1/08/2018, Rol Nº 42975-2017,


Cita online: CL/JUR/4067/2018
2. Ampliación de demanda respecto de quien no había sido
originalmente demandado constituye una nueva demanda

El artículo 261 del Código de Procedimiento Civil rige los efectos del
instituto procesal de la ampliación de la demanda, que se verifica
cuando no se ha evacuado la oposición del demandado mediante el
trámite de la contestación. Agrega el artículo, por su inciso 2º, que
únicamente para los efectos de su notificación, se entiende a la
ampliación como una nueva demanda. La demanda entonces es una
sola, aunque se halle contenida en escritos distintos que modifiquen
sustancialmente o no las peticiones que se hacen al tribunal contra el
demandado antes que éste conteste la demanda, pero otra cosa
diferente es que lo que se pretenda mediante el expediente de una
ampliación sea dirigir la acción contra quien no ha sido originalmente
demandado, pues en este caso, lo que hay, como consignó a buen
derecho el tribunal del grado, es una nueva demanda contra quien no lo
había sido originalmente. Así las cosas, la sola circunstancia, entonces,
de encontrarse trabada la litis entre el actor y los demandados, quienes
ya se encontraban debidamente emplazados y habían evacuado el
trámite de las contestaciones respectivas, bastaba para desestimar toda
posibilidad de ampliar la demanda, y más todavía, si esta "ampliación"
no se dirigía contra los demandados de autos sino que tenía como fin
dirigir las primitivas acciones y pretensiones contra un tercero, de
manera que se ajusta a Derecho la calificación que hace la sentencia
de que "la ampliación de demanda" respecto de quien no había sido
originalmente demandado, constituye una nueva demanda y fue
incoada fuera de los plazos que disponen los artículos 168 y 510 del
Código del Trabajo (considerando 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte Suprema, 7/11/2019, Rol Nº 1949-2019,


Cita online: CL/JUR/6450/2019

TÍTULO II DE LA CONCILIACIÓN

ARTÍCULO 262
En todo juicio civil en que legalmente sea admisible la transacción, con
excepción de los juicios o procedimientos especiales de que tratan los
Títulos I, II, III, V y XVI del Libro III, una vez agotados los trámites de discusión
y siempre que no se trate de los casos mencionados en el artículo 313, el
juez llamará a las partes a conciliación y les propondrá personalmente bases
de arreglo.

Para tal efecto, las citará a una audiencia para un día no anterior al quinto
ni posterior al decimoquinto contado desde la fecha de notificación de la
resolución. Con todo, en los procedimientos que contemplan una audiencia
para recibir la contestación de la demanda, se efectuará también en ella la
diligencia de conciliación, evacuado que sea dicho trámite.

El precedente llamado a conciliación no obsta a que el juez pueda, en


cualquier estado de la causa, efectuar la misma convocatoria, una vez
evacuado el trámite de contestación de la demanda.122

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 48, 263, 264, 267, 433, 698 Nº 3, 768
Nº 9, 789 y 795 Nº 2. Código Civil: artículos 2446 y 2449 a 2455. Código Procesal Penal:
artículos 273, 404 y 574. Código del Trabajo: artículos 442 y 459. Ley Nº 18.287, sobre
procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículo 11. Ley Nº 19.253, sobre Protección,
Fomento y Desarrollo de los Indígenas: artículo 56. Ley Nº 18.101, sobre arrendamiento de
predios urbanos: artículo 48 bis. Decreto con Fuerza de Ley Nº 850, 1998, fija texto Ley de
concesiones de obras públicas, Ministerio de Obras Públicas, D.O. 25.02.1998: artículo 36.
Decreto Ley Nº 2.186, 1978, procedimiento de expropiaciones, D.O. 9.06.1978: artículo 27. Ley
Nº 19.947, Ley de Matrimonio Civil: artículos 64, 67, 68 y 90. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales
de Familia: artículos 10, 59 y 61 Nº 5.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Concepto de Conciliación

La conciliación judicial es una forma alternativa de resolución de


conflictos que, para los efectos legales, posee el valor de una sentencia
firme y ejecutoriada, conforme lo dispone el artículo 262 del Código de
Procedimiento Civil, y tiene mérito ejecutivo de acuerdo con el
artículo 464 del Código del Trabajo en relación con el artículo 267 del
Código de Procedimiento Civil. Se trata, en definitiva, de una
convención que, legalmente celebrada, establece derechos
permanentes para las partes que la celebran. En efecto, la define
Eduardo Couture como "el acuerdo o avenencia de las partes, que
mediante renuncia, allanamiento o transacción, hacen innecesario el
litigio pendiente o evitan el litigio eventual". Por su parte, Juan Colombo
Campbell señala que es "un acto jurídico procesal bilateral en virtud del
cual las partes, a iniciativa de un juez que conoce de un proceso, logran
durante su desarrollo ponerle fin por mutuo acuerdo". Así las cosas, no
es posible desconocer el carácter convencional que la conciliación
posee, sin perjuicio de revestir, además, el carácter de equivalente
jurisdiccional, en cuanto acto jurídico procesal equivalente a la
sentencia definitiva (considerandos 11º y 12º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 26/04/2019, Rol Nº 156-2019,

Cita online: CL/JUR/2245/2019

2. Conciliación tiene el efecto de sentencia ejecutoriada

Por tanto, se configura el incumplimiento a lo convenido por la vía de


la conciliación y con ello se incurre en un desconocimiento de lo
estatuido en los artículos 1545 y 1546 del Código Civil, en tanto el
artículo 267 del Código de Procedimiento Civil le atribuye a la
conciliación el efecto de sentencia ejecutoriada para todos los efectos
legales, constituyéndola como un equivalente jurisdiccional que
remarca su alcance inamovible en la causa en que recayó su
celebración (considerando 6º).

Corte Suprema, 4/07/2018, Rol Nº 42002-2017,


Cita online: CL/JUR/3368/2018

3. Efectos del desasimiento no elimina ni obstaculiza derecho de las


partes de acordar un avenimiento u otra forma de conciliación

El segundo motivo aducido por el Tribunal a quo se refiere a la


oportunidad en que las partes arribaron al avenimiento, sosteniendo que
el mismo sería extemporáneo por cuanto en este caso "ha operado el
deshacimiento del tribunal en lo que al asunto controvertido se refería".
Al respecto, esta Corte estima que el avenimiento presentado por las
partes litigantes no es extemporáneo, pues conforme a lo dispuesto en
el artículo 262 del Código de Procedimiento Civil, la conciliación puede
producirse en cualquier estado del juicio. En el mismo sentido, los
artículos 2446 y 2455 del Código Civil establecen que la transacción
mediante la cual se pone término a un juicio es válida mientras el mismo
se encuentre pendiente, es decir, mientras no haya recaído en él una
sentencia ejecutoriada, situación esta última que no es el caso de la
presente causa. Cabe agregar a lo anterior que el efecto del
"desasimiento" a que se refiere el artículo 182 del citado Código,
consiste en que el Tribunal que ha dictado una sentencia definitiva o
interlocutoria no puede, una vez que ella ha sido notificada a alguna de
las partes, alterarla o modificarla en forma alguna; pero dicho efecto no
elimina ni obstaculiza en forma alguna el derecho de las partes puedan
acordar un avenimiento u otra forma de conciliación mediante la cual
pongan término inmediato al juicio, mientras éste se encuentre
pendiente (considerando 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Talca, 6/06/2019, Rol Nº 1465-2018,

Cita online: CL/JUR/4575/2019

ARTÍCULO 263

El juez obrará como amigable componedor. Tratará de obtener un


avenimiento total o parcial en el litigio. Las opiniones que emita no lo
inhabilitan para seguir conociendo de la causa.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 113, 267 y 636. Código Orgánico de
Tribunales: artículo 196. Ley Nº 19.947, Ley de Matrimonio Civil: artículo 69. Ley Nº 18.287
sobre Procedimiento ante Juzgados de Policía Local: artículo 11.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. El acuerdo es alcanzado y sus términos y estipulaciones son


acordados únicamente por los litigantes

Ahora bien, la conciliación es una forma de poner término al juicio a


la que arriban las partes sobre la base de las proposiciones que, al
efecto, plantea el tribunal, pero el acuerdo es alcanzado y sus términos
y estipulaciones son acordados únicamente por los litigantes, de
manera tal que no resultan pertinentes las aclaraciones o
complementaciones que efectúe el tribunal si éstas no han sido también
consentidas por quienes pactaron finalizar el pleito de este modo. Dicho
de otra forma, el juez de la causa sólo aclara o complementa las
resoluciones judiciales que dicta durante la sustanciación de la causa,
pero no puede hacer lo mismo con los acuerdos que, dentro de la
autonomía que durante el desarrollo del juicio la ley les permite,
alcanzan el demandante y el demandado (considerando 7º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/11/2007, Rol Nº 1114-2007,


Cita online: CL/JUR/6303/2007

ARTÍCULO 264

A los comparendos de conciliación deberán concurrir las partes por sí o por


apoderado. No obstante, el juez podrá exigir la comparecencia personal de
las partes, sin perjuicio de la asistencia de sus abogados.

En los procesos en que hubiere pluralidad de partes, la audiencia se llevará


a efecto aunque no asistan todas. La conciliación operará entre aquellas que
la acuerden y continuará el juicio con las que no hubieren concurrido o no
hubieren aceptado la conciliación.123

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 4º, 6º, 7º, 18, 265 y 267. Código del
Trabajo: artículo 444. Ley Nº 18.120, sobre Comparecencia en Juicio: artículo 2. Ley Nº 19.947,
Ley de Matrimonio Civil: artículo 68. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia: artículo 60.

ARTÍCULO 265

Si los interesados lo piden, la audiencia se suspenderá hasta por media


hora para deliberar. Si el tribunal lo estima necesario postergará la audiencia
para dentro de tercero día, salvo que las partes acuerden un plazo mayor, y
se dejará de ello constancia. A la nueva audiencia éstas concurrirán sin nueva
notificación.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 38, 61 y 64. Ley Nº 19.968, crea los
Tribunales de Familia: artículo 20.

ARTÍCULO 266

El juez de oficio ordenará agregar aquellos antecedentes y medios


probatorios que estime pertinentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 159, 207, 341 y siguientes.


ARTÍCULO 267

De la conciliación total o parcial se levantará acta, que consignará sólo las


especificaciones del arreglo; la cual subscribirán el juez, las partes que lo
deseen y el secretario, y se estimará como sentencia ejecutoriada para todos
los efectos legales.124

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 175 y 434 Nº 3. Código Orgánico
de Tribunales: artículos 380 y 500. Código del Trabajo: artículo 444. Ley Nº 18.287 sobre
Procedimiento ante Juzgados de Policía Local: artículo 11.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La conciliación, sólo ha de poder surtir efecto entre las partes que han
concurrido a ella, sin que sea capaz de afectar derechos y garantías
constituidos a favor de terceros

Si bien en el caso sub lite la demanda se dirigió inicialmente en contra


del empleador directo y de la empresa principal, posteriormente el actor
puso fin al juicio respecto del primero, mediante un equivalente
jurisdiccional, cual es la conciliación, acuerdo en el que no tuvo
participación la recurrente, continuando el juicio sólo en contra de ésta,
a pesar de que ambas litis debían ser decididas conjuntamente, habida
cuenta del consorcio obligatorio existente entre ellas. Por lo demás, la
conciliación judicial es una forma alternativa de resolución de conflictos
que, para los efectos legales, posee el valor de una sentencia firme y
ejecutoriada, conforme lo dispone el artículo 262 del Código de
Procedimiento Civil, y tiene mérito ejecutivo de acuerdo con el
artículo 464 del Código del Trabajo en relación con el artículo 267 del
Código de Procedimiento Civil. Se trata, en definitiva, de una
convención que, legalmente celebrada, establece derechos
permanentes para las partes que la celebran. [...] Por consiguiente,
yerra el sentenciador del fondo al extender los efectos de la conciliación
a quien no ha sido parte en ella, considerando el efecto relativo que las
convenciones procesales generan, cuyo es el caso de la conciliación, y
del efecto de cosa juzgada que ésta produce, el cual sólo afectará a
aquellas personas que hubieren sido parte en el juicio en que se
celebró, según dispone el artículo 176 del Código de Procedimiento Civil
(considerandos 10º a 12º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 26/04/2019, Rol Nº 156-2019,


Cita online: CL/JUR/2245/2019

2. Conciliación tiene el efecto de sentencia ejecutoriada.

Por lo demás, la conciliación judicial es una forma alternativa de


resolución de conflictos que, para los efectos legales, posee el valor de
una sentencia firme y ejecutoriada, conforme lo dispone el artículo 262
del Código de Procedimiento Civil, y tiene mérito ejecutivo de acuerdo
con el artículo 464 del Código del Trabajo en relación con el artículo 267
del Código de Procedimiento Civil. Se trata, en definitiva, de una
convención que, legalmente celebrada, establece derechos
permanentes para las partes que la celebran. [...] Así las cosas, no es
posible desconocer el carácter convencional que la conciliación posee,
sin perjuicio de revestir, además, el carácter de equivalente
jurisdiccional, en cuanto acto jurídico procesal equivalente a la
sentencia definitiva (considerando 10º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 26/04/2019, Rol Nº 156-2019,

Cita online: CL/JUR/2245/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 4/07/2018, Rol Nº 42002-2017,

Cita online: CL/JUR/3368/2018

ARTÍCULO 268

Si se rechaza la conciliación, o no se efectúa el comparendo, el secretario


certificará este hecho de inmediato, y quedará la carpeta electrónica a
disposición de juez para que éste, examinándolos por sí mismo, proceda
enseguida a dar cumplimiento a lo señalado en el artículo 318.125

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61 inciso final, 262, 263, 265 y 318.
Código Orgánico de Tribunales: artículos 379 y 388. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de
Familia: artículo 62. Auto Acordado para la aplicación de la Ley Nº 20.886, artículo 6º.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Una vez notificada la resolución que citaba a una audiencia de
conciliación, no se encontraba eximido el actor de la carga de dar
impulso al proceso

En esas circunstancias y al no haberse verificado la audiencia de


conciliación, que fuere notificada el 27 de diciembre de 2004, sólo le
cabía al actor solicitar se certificara la circunstancia a que se refiere el
citado artículo 268 del Código de Procedimiento Civil, puesto que de
dicho precepto se desprende que sea que se realice o no el
comparendo, la diligencia estaba cumplida, faltando solo se certificara
dicho hecho, por lo que la segunda notificación de la resolución que citó
a la audiencia de conciliación, el 2 de junio de 2004 no tuvo la aptitud
de interrumpir el plazo a que se refiere el artículo 152 del Código
Adjetivo por no estar revestida de utilidad en orden a la marcha o
prosecución del juicio. "En buenas cuentas —ha expresado el
procesalista Guillermo Piedrabuena Richard— después de la Ley
Nº 8.705, los litigantes tienen que estar permanentemente preocupados
de activar los pleitos e incluso nos atrevemos a afirmar, deben estar
dispuestos a requerir a los tribunales, por todos los medios que estén
disponibles, jurisdiccionales o disciplinarios, para que éstos cumplan
con las obligaciones que el Código establece como imperativas". (Fallos
del Mes, Documento Nº 9, página 30-3). Es evidente que las peticiones
de los litigantes deberán ser eficaces para dar curso progresivo al
procedimiento, siendo insuficientes para tal efecto las presentaciones
que no reúnan tal calidad, esto es, que no conduzcan efectivamente al
desarrollo o avance del litigio (considerando 6º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 18/11/2008, Rol Nº 6321-2007,


Cita online: CL/JUR/4109/2008

TÍTULO III DE LA JACTANCIA

ARTÍCULO 269 (259)

Cuando alguna persona manifieste corresponderle un derecho de que no


esté gozando, todo aquél a quien su jactancia pueda afectar, podrá pedir que
se la obligue a deducir demanda dentro del plazo de diez días, bajo
apercibimiento, si no lo hace, de no ser oída después sobre aquel derecho.
Este plazo podrá ampliarse por el tribunal hasta treinta días, habiendo motivo
fundado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 21, 31, 64, 68 y 254.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procedencia de acción de jactancia

Para que proceda la acción de jactancia, es menester que el


jactancioso haya hecho alarde injusto y público de un derecho que le
correspondería, pero del que no está gozando, que tal manifestación
sea por escrito o se haya hecho a viva voz, a lo menos delante de dos
personas hábiles para dar testimonio en juicio civil, que la demanda de
jactancia sea interpuesta por aquél a quien pudiere afectar la conducta
jactanciosa y que la atribución o alarde se formule con antelación a
reclamarse judicialmente los derechos que invoca (Considerando 5º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 19/07/2018, Rol Nº 6241-2018,


Cita online: CL/JUR/3777/2018

2. Interpretación de la expresión "manifestar"

Esta Corte, en causa rol Nº 28238-15, ha señalado que "La forma


verbal "manifestar" tiene como primera acepción en el Diccionario de la
Real Academia de la Lengua Española la de "Declarar, dar a conocer"
y como segunda acepción la de "Descubrir, poner a la vista". Por otra
parte, a la voz "jactarse" esa misma fuente la significa como "alabarse
excesiva y presuntuosamente". Conjugando ambas expresiones,
parece propio sostener que jactarse viene significando "vanagloriarse",
"dárselas de", "atribuirse", "hacer ostentación de", "presumir de",
"alardear". Si no fuese arbitrario traer este enfoque semántico a lo que
en este instante convoca, el "manifestar" del artículo 269 del estatuto
procesal vendría siendo una declaración con el preciso y exclusivo
objetivo de hacer valer el desencanto derivado de la privación, de
hecho, del goce de un derecho que el manifestante dice pertenecerle;
una suerte de queja; la explicitación de un menoscabo; la expresión de
una disconformidad causada en lo que se juzga subjetivamente como
un despojo; un resentimiento, un pesar, una muestra de aflicción, una
contrariedad (considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 19/07/2018, Rol Nº 6241-2018,


Cita online: CL/JUR/3777/2018

ARTÍCULO 270 (260)

Se entenderá haber jactancia siempre que la manifestación del jactancioso


conste por escrito, o se haya hecho de viva voz, a lo menos, delante de dos
personas hábiles para dar testimonio en juicio civil.

Habrá también lugar a deducir demanda de jactancia contra el que haya


gestionado como parte en un proceso criminal de que puedan emanar
acciones civiles contra el acusado, para el ejercicio de estas acciones.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 342, 346, 356, 357 y 358. Código de
Procedimiento Penal: artículo 12. Código Procesal Penal: artículo 60.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Acción de Jactancia

La jactancia es una acción que puede ejercitarla toda persona a quien


pueda afectarle la manifestación de otro, por escrito o a viva voz,
expresando corresponderle un derecho del que no está gozando, a fin
de que se obligue a esta persona a deducir la demanda dentro de cierto
plazo, bajo apercibimiento de no ser oído sobre sus derechos. Para que
la acción proceda, es menester que el jactancioso haya hecho alarde
injusto y público de un derecho que le correspondería, pero del que no
está gozando, que tal manifestación sea por escrito o se haya hecho a
viva voz, a lo menos delante de dos personas hábiles para dar
testimonio en juicio civil, que la demanda de jactancia sea interpuesta
por aquél a quien pudiere afectar la conducta jactanciosa y que la
atribución o alarde se formule con antelación a reclamarse judicialmente
los derechos que invoca (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/05/2020, Rol Nº 1271-2018,


Cita online: CL/JUR/28721/2020
ARTÍCULO 271 (261)

La demanda de jactancia se someterá a los trámites establecidos para


el juicio sumario.

Si se da lugar a ella, y vence el plazo concedido al jactancioso para deducir


su acción sin que cumpla lo ordenado, deberá la parte interesada solicitar que
se declare por el tribunal el apercibimiento a que se refiere el artículo 269.
Esta solicitud se tramitará como incidente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 89, 90, 681 y siguientes.

ARTÍCULO 272 (262)

La acción de jactancia prescribe en seis meses, contados desde que


tuvieron lugar los hechos en que pueda fundarse.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 269 a 271.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Prescripción de la acción de jactancia

En relación a estar prescrita la acción de jactancia ya que los hechos


han ocurrido desde el año 2009, fecha en que el demandante adquirió
su predio, es necesario destacar que el artículo 272 del Código de
Procedimiento Civil señala que los seis meses deben contarse desde
que tuvieron lugar los hechos en que se funda, y si bien es cierto que el
comportamiento conflictivo del demandado se extiende por más de ocho
años y que existe un recurso de protección en que obtuvo sentencia
favorable en cuanto se obligó al demandante a retirar los candados y no
embarazar el paso del mismo hacia su propiedad, lo que éste alega
como jactancioso es lo declarado ante la Policía de Investigaciones, en
cuanto que existe un camino de servidumbre que se encuentra en
disputa. La declaración ante la Policía de Investigaciones se realizó el
27 de mayo de 2016 y la notificación de la demanda se practicó el 16
de noviembre de mismo año, por lo cual entre el hecho y la notificación
no han transcurrido más de seis meses, por lo cual no habría error en
la aplicación del artículo 272 del Código de Procedimiento Civil
(considerando 1º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/05/2020, Rol Nº 1271-2018,


Cita online: CL/JUR/28721/2020

2. No existe norma que exceptúe del instituto de la jactancia a los


órganos público

Que, corresponde asimismo anotar, que no se advierte el distingo que


coloca en su discurso la impugnante, entre una deuda de dinero de
carácter civil frente a una previsional, desde que no existe norma que
exceptúe al demandado de la aplicación del instituto de la jactancia por
tratarse de un órgano público, máxime si la inseguridad que quiere evitar
el legislador se verifica en igual medida y con prescindencia de quien
sea el jactancioso (considerando 12º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 3/09/2013, Rol Nº 2151-2013,


Cita online: CL/JUR/1960/2013

TÍTULO IV DE LAS MEDIDAS PREJUDICIALES

ARTÍCULO 273 (263)

El juicio ordinario podrá prepararse, exigiendo el que pretende demandar


de aquel contra quien se propone dirigir la demanda:

1º Declaración jurada acerca de algún hecho relativo a su capacidad para


parecer en juicio, o a su personería o al nombre y domicilio de sus
representantes;

2º La exhibición de la cosa que haya de ser objeto de la acción que se trata


de entablar;

3º La exhibición de sentencias, testamentos, inventarios, tasaciones, títulos


de propiedad u otros instrumentos públicos o privados que por su naturaleza
puedan interesar a diversas personas;
4º Exhibición de los libros de contabilidad relativos a negocios en que tenga
parte el solicitante, sin perjuicio de lo dispuesto en los artículos 42 y 43 del
Código de Comercio; y

5º El reconocimiento jurado de firma, puesta en instrumento privado.

La diligencia expresada en el número 5º se decretará en todo caso; las de


los otros cuatro sólo cuando, a juicio del tribunal, sean necesarias para que
el demandante pueda entrar en el juicio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 130, 253, 255, 274, 275, 276, 279,
281, 282, 286, 287, 288, 289, 348, 385 y 435. Código Civil: artículo 1699. Código de Comercio:
artículo 33. Código de Minería: artículo 141. Ley Nº 18.092: artículo 100. Ley Nº 19.968, crea
los Tribunales de Familia: artículo 22.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Preparación del juicio laboral mediante la solicitud de medida


prejudicial de exhibición de documentos

Lo dispuesto en el artículo 273 del Código de Procedimiento Civil, que


regula la interposición de medidas prejudiciales, es claramente aplicable
en la especie, desde que el artículo 432 del Código del Trabajo reenvía
en lo preceptuado en dicho cuerpo legal, al estatuto procedimental
común, de modo que en el ámbito procesal analizado es posible
preparar el juicio mediante la solicitud de medidas prejudiciales, como
la de exhibición de documentos. Aclarada la procedencia de la
interposición de medidas prejudiciales preparatorias, se debe tener
presente que se constató, en la especie, que los demandantes cuyas
acciones se declararon caducas, dedujeron tal gestión, y que antes de
su culminación, esto es, mientras estaba pendiente, se dedujo la
demanda reclamando por el despido indebido y prestaciones
pertinentes. También que la exhibición de documentos solicitada en la
primera gestión mencionada, tenía por fin obtener los datos necesarios
para calcular las indemnizaciones que se harían efectivas a través de la
posterior demanda, que efectivamente se concretó (considerandos 10º
y 11º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 29/04/2019, Rol Nº 5277-2019,


Cita online: CL/JUR/2274/2019
ARTÍCULO 274 (264)

Si, decretada la diligencia a que se refiere el número 1º del artículo anterior,


se rehúsa prestar la declaración ordenada o ésta no es categórica, en
conformidad a lo mandado, podrán imponerse al desobediente multas que no
excedan de dos sueldos vitales, o arrestos hasta de dos meses, determinados
prudencialmente por el tribunal; sin perjuicio de repetir la orden y el
apercibimiento.126

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 252, 273 Nº 1, 276, 282, 349, 380 y
394. Código Procesal Penal: artículo 5º.

ARTÍCULO 275 (265)

La exhibición, en el caso del número 2º del artículo 273, se hará mostrando


el objeto que deba exhibirse, o autorizando al interesado para que lo
reconozca y dándole facilidades para ello, siempre que el objeto se encuentre
en poder de la persona a quien se ordene la exhibición.

Si el objeto se halla en poder de terceros, cumplirá la persona a quien se


ordene la exhibición, expresando el nombre y residencia de dichos terceros,
o el lugar donde el objeto se encuentre.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 273 Nº 2, 276, 282 y 349.

ARTÍCULO 276 (266)

Si se rehúsa hacer la exhibición en los términos que indica el


artículo precedente, podrá apremiarse al desobediente con multa o arresto
en la forma establecida por el artículo 274, y aun decretarse allanamiento del
local donde se halle el objeto cuya exhibición se pide.

Iguales apremios podrán decretarse contra los terceros que, siendo meros
tenedores del objeto, se nieguen a exhibirlo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 252, 274, 282 y 349. Código Procesal
Penal: artículo 5º.

ARTÍCULO 277
Siempre que se dé lugar a las medidas mencionadas en los números 3º y
4º del artículo 273, y la persona a quien incumba su cumplimiento
desobedezca, existiendo en su poder los instrumentos o libros a que las
medidas se refieren, perderá el derecho de hacerlos valer después, salvo que
la otra parte los haga también valer en apoyo de su defensa, o si se justifica
o aparece de manifiesto que no los pudo exhibir antes, o si se refieren a
hechos distintos de aquellos que motivaron la solicitud de exhibición. Lo cual
se entiende sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo precedente y en el
párrafo 2, Título II, del Libro I del Código de Comercio.127

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 273 Nºs. 3 y 4, 309 y 349. Código de
Comercio: artículos 33, 42 y 43.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La sanción contemplada en el artículo 277 del Código de


Procedimiento Civil, es sin perjuicio de la facultad de poder también
apremiar al desobediente con multa o arresto

Para que pueda tener lugar la sanción contemplada en el artículo 277


del Código de Procedimiento Civil es necesario que concurran los
siguientes presupuestos: a) que se haya dado lugar a la exhibición de
los documentos mencionados en los Nºs. 3 y 4 del artículo 273 del
Código mencionado; b) que la persona a quien incumba la exhibición
desobedezca su cumplimiento, y c) que existan en su poder los
documentos a que la medida se refiere. Que del estudio armónico de
los artículos 277 y 276 del Código de Procedimiento Civil surge que si
el futuro demandado desobedece la medida prejudicial decretada,
incurre en la sanción de perder el derecho de hacerlos valer después,
salvo que el demandante los haga también valer en apoyo de su
defensa. La sanción anterior, es sin perjuicio de la facultad de poder
también apremiar al desobediente con multa o arresto en la forma
establecida en el artículo 274 del Código de Enjuiciamiento Civil
(considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 26/09/2012, Rol Nº 955-2012,

Cita online: CL/JUR/2118/2012

ARTÍCULO 278 (268)


Si se rehúsa el reconocimiento de firma decretado en el caso del número 5º
del artículo 273, se procederá en conformidad a las reglas establecidas para
el reconocimiento judicial de documentos en el juicio ejecutivo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 435, 436 y 441.

ARTÍCULO 279 (269)

Podrán solicitarse como medidas prejudiciales las precautorias de que trata


el Título V de este Libro, existiendo para ello motivos graves y calificados, y
concurriendo las circunstancias siguientes:

1ª Que se determine el monto de los bienes sobre que deben recaer las
medidas precautorias; y

2ª Que se rinda fianza u otra garantía suficiente, a juicio del tribunal, para
responder por los perjuicios que se originen y multas que se impongan.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 280, 287, 290, 298, 299, 301 y 302.
Ley Nº 18.287, sobre procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículo 30.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Requisitos de procedencia de las medidas prejudiciales precautorias

Las medidas precautorias se piden por lo general en el juicio y por


excepción, pueden solicitarse como prejudiciales y tendrán que reunir
los requisitos generales de las medidas prejudiciales y precautorias.
Conforme lo dispone el artículo 279 del Código de Procedimiento Civil,
se pueden solicitar como prejudiciales las precautorias ordinarias de los
artículos 290 a 302, siempre que concurran las circunstancias
siguientes: 1.- Que existan motivos graves y calificados; 2) Que se
determine el monto de los bienes sobre los que deben recaer las
medidas precautorias y; 3) Que se rinda fianza suficiente, a juicio del
tribunal, para responder por los perjuicios que se originen y multas que
se impongan (considerando 8º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 7/02/2018, Rol Nº 5098-2017,

Cita online: CL/JUR/3236/2018


2. No basta con meras alegaciones, motivos graves y calificados deben
ser probados en el proceso

De conformidad al artículo 279 del Código de Procedimiento Civil,


para que una medida prejudicial precautoria pueda ser decretada, en
este caso la prohibición de celebrar actos o contratos respecto de
pólizas de seguro para el fiel cumplimiento del contrato de obra pública
y de responsabilidad civil frente a terceros, se requiere que existan
motivos graves y calificados que demuestren que es indispensable para
asegurar el resultado de la acción que se entablará. Junto a ello, de
acuerdo a la regla general sobre medidas precautorias del artículo 298
del mismo Código, deben acompañarse comprobantes que constituyan
a lo menos presunción grave del derecho que se reclama, antecedentes
que deben servir de fundamento a la acción que se intentará
(considerando 1º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 9/02/2018, Rol Nº 10265-2015,

Cita online: CL/JUR/688/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 23/03/2018, Rol Nº 10276-


2017,

Cita online: CL/JUR/5588/2018

3. Medidas prejudiciales precautorias, no pueden ser dispuestas por los


jueces árbitros

En la especie, no existe tribunal arbitral que deba conocer de la


medida prejudicial probatoria solicitada por el recurrente, por lo que es
la justicia ordinaria la que debe pronunciarse sobre el particular, sin que
ello signifique renunciar a la competencia que las partes confirieron a
los tribunales arbitrales, toda vez que las medidas prejudiciales no
constituyen un juicio y se terminan con la resolución del juez que las
rechaza o las decreta. La Excma. Corte Suprema ha establecido "De
acuerdo con lo dispuesto en los artículos 279, 290 y 298 del CPC, las
medidas cautelares contempladas por el legislador, cuando se piden en
forma prejudicial, siempre son de conocimiento, resolución y ejecución
por la justicia ordinaria, cualquiera sea la convención de las partes
respecto del tribunal que debe fallar el litigio de fondo. Por lo mismo, las
medidas prejudiciales precautorias, no pueden ser dispuestas por los
jueces árbitros, pues necesariamente presuponen la falta de
constitución del juicio arbitral." (considerandos 3º y 4º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 11/02/2019, Rol Nº 2112-2018,

Cita online: CL/JUR/721/2019

4. Finalidad de las medidas cautelares

El fundamento de las medidas cautelares se encuentra en el


denominado "periculum in mora", esto es la demora que conlleva la
tramitación de todo proceso antes de llegar a la sentencia, lapso durante
el cual el demandado puede ejecutar diversas actividades que pueden
ocasionar un perjuicio al demandante y sus legítimas expectativas en
los resultados del juicio. Son providencias del tribunal, dictadas a
petición del sujeto activo del proceso, que tienen por finalidad asegurar
el resultado de la pretensión hecha valer, cuando se ha demostrado
durante el curso del procedimiento la apariencia de la existencia de la
pretensión cuya satisfacción se pretende y existe el peligro que ella
pueda ser burlada antes de la dictación de la sentencia definitiva
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 5/09/2018, Rol Nº 326-2018,

Cita online: CL/JUR/4962/2018

ARTÍCULO 280 (270)

Aceptada la solicitud a que se refiere el artículo anterior, deberá el


solicitante presentar su demanda en el término de diez días y pedir que se
mantengan las medidas decretadas. Este plazo podrá ampliarse hasta treinta
días por motivos fundados.

Si no se deduce demanda oportunamente, o no se pide en ella que


continúen en vigor las medidas precautorias decretadas, o al resolver sobre
esta petición el tribunal no mantiene dichas medidas, por este solo hecho
quedará responsable el que las haya solicitado de los perjuicios causados,
considerándose doloso su procedimiento.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 66, 67, 254, 287,290, 473 y 474.
Código Civil: artículo 2317.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Caducidad de las medidas prejudiciales precautorias

Si se acepta la medida prejudicial, el solicitante debe presentar su


demanda en el término de 10 días y pedir que se mantengan las
medidas decretadas. El plazo puede ampliarse por motivos fundados,
hasta 30 días. Ahora bien, la medida decretada caduca: a) al no
interponerse demanda oportunamente en el plazo de 10 días o en el
que se ha ampliado; b) si se deduce demanda, pero no se pide en ella
que se mantengan las precautorias decretadas; o c) si al resolverse
sobre esta petición, el tribunal no mantiene las medidas. El plazo que
establece el artículo 280 del Código de Enjuiciamiento Civil, es fatal,
pero es prorrogable. Si no se endereza demanda o no se pide la
mantención de las medidas, se entienden caducar de facto, las
medidas, y la presunción de dolo se origina por las tres circunstancias
imputables al interesado, que señala el indicado precepto
(considerando 8º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 7/02/2018, Rol Nº 5098-2017,

Cita online: CL/JUR/3236/2018

2. Mantención de las medidas precautorias debe solicitarse en el escrito


de la demanda

El artículo 280 inciso 1º del Código de Procedimiento Civil dispone


que aceptada la solicitud de disponer como prejudicial una medida
precautoria de aquellas de que trata el Título V del Libro II, que tal
ocurre en la especie, deberá el peticionario presentar su demanda
dentro del término de diez días en este caso, treinta por la ampliación
otorgada y pedir que se mantengan las medidas decretadas. Que el
inciso 2º de la disposición anteriormente señalada, precisa que tal
solicitud no sólo debe hacerse dentro de tal término, sino que, además,
debe estar contenida en el escrito mismo de la demanda. En efecto, la
norma dice textualmente: si no se deduce demanda oportunamente, o
no se pide en ella que continúen en vigor las medidas precautorias
decretadas (...), se producen las consecuencias que allí se consignan.
Que, según se ha advertido, en el libelo de la demanda, no se formuló
petición alguna, tendiente a la conservación de la prohibición de gravar
y enajenar dispuesta por el Tribunal, de manera que se ha producido
ipso facto, la caducidad de la medida, por la sola circunstancia de no
haberse recabado su renovación (considerandos 3º a 5º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 21/07/1989, Rol Nº 20777,

Cita online: CL/JUR/262/1989

Fallo en sentido contrario:

— Corte de Apelaciones de Rancagua, 6/11/2000, Rol Nº 16456-


2000,

Cita online: CL/JUR/5270/2000

ARTÍCULO 281 (271)

Puede pedirse prejudicialmente la inspección personal del tribunal, informe


de peritos nombrados por el mismo tribunal, o certificado del ministro de fe,
cuando exista peligro inminente de un daño o perjuicio, o se trate de hechos
que puedan fácilmente desaparecer.

Para la ejecución de estas medidas se dará previamente conocimiento a la


persona a quien se trata de demandar, si se encuentra en el lugar del asiento
del tribunal que las decreta, o donde deban ejecutarse. En los demás casos
se procederá con intervención del defensor de ausentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 69, 273, 287, 288, 289, 342, 403 y
siguientes y 427. Código Orgánico de Tribunales: artículo 367.

ARTÍCULO 282 (272)

Si aquel a quien se intenta demandar expone ser simple tenedor de la cosa


de que procede la acción o que es objeto de ella, podrá también ser obligado:
1º A declarar bajo juramento el nombre y residencia de la persona en cuyo
nombre la tiene; y

2º A exhibir el título de su tenencia; y si expresa no tener título escrito, a


declarar bajo juramento que carece de él.

En caso de negativa para practicar cualquiera de las diligencias


mencionadas en este artículo, se le podrá apremiar con multa o arresto en la
forma dispuesta por el artículo 274.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 59, 61, 62, 252, 273, 274, 275 y 349.
Código Civil: artículo 896. Código Procesal Penal: artículo 5.

ARTÍCULO 283 (273)

Siempre que el actor lo exija, se dejará en el proceso copia de las piezas


que se presenten, o de su parte conducente, y una razón de la clase y estado
actual de los objetos exhibidos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 29, 275, 282 y 349.

ARTÍCULO 284 (274)

Si hay motivo fundado para temer que una persona se ausente en breve
tiempo del país, podrá exigírsele como medida prejudicial que absuelva
posiciones sobre hechos calificados previamente de conducentes por el
tribunal, el que, sin ulterior recurso, señalará día y hora para la práctica de la
diligencia.

Si se ausenta dicha persona dentro de los treinta días subsiguientes al de


la notificación sin absolver las posiciones, o sin dejar apoderado con
autorización e instrucciones bastantes para hacerlo durante la secuela del
juicio, se le dará por confesa en el curso de éste, salvo que aparezca
suficientemente justificada la ausencia sin haber cumplido la orden del
tribunal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 7º, 11, 59, 285, 287, 288, 385, 387,
394, 844, 845 y 846. Código Orgánico de Tribunales: artículo 367.

ARTÍCULO 285 (275)


En el caso del inciso 1º del artículo anterior, podrá también pedirse que
aquel cuya ausencia se teme, constituya en el lugar donde va a entablarse el
juicio apoderado que le represente y que responda por las costas y multas en
que sea condenado, bajo apercibimiento de nombrársele un curador de
bienes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 7º, 11, 287, 844, 845 y 846. Código
Civil: artículos 473 a 491. Ley Nº 18.120, sobre comparecencia en juicio.

ARTÍCULO 286 (276)

Se podrá, asimismo, solicitar antes de la demanda el examen de aquellos


testigos cuyas declaraciones, por razón de impedimentos graves, haya
fundado temor de que no puedan recibirse oportunamente. Las declaraciones
versarán sobre los puntos que indique el actor, calificados de conducentes
por el tribunal.

Para practicar esta diligencia, se dará previamente conocimiento a la


persona a quien se trata de demandar, sólo cuando se halle en el lugar donde
se expidió la orden o donde deba tomarse la declaración; y en los demás
casos se procederá con intervención del defensor de ausentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 56, 69, 287, 288, 356, 359, 363, 365,
369, 368, 370 y 371. Código Procesal Penal: artículos 191 y 192.

ARTÍCULO 287 (277)

Para decretar las medidas de que trata este Título, deberá el que las solicite
expresar la acción que se propone deducir y someramente sus fundamentos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 254 y 289.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Futuro demandante debe explicar someramente las acciones legales


que pretende entablar

Las medidas de esta especie son esencialmente temporales y pueden


ser revocadas en cualquier estadio procesal si los antecedentes y la
lógica así lo indican. En el asunto bajo examen, las medidas
precautorias dispuestas resultan ser gravosas en la actualidad y pueden
en el tiempo venidero llegar a comprometer la marcha económica y
financiera de la sociedad anónima que se ha visto afectada con ellas,
sin que el futuro demandante haya anunciado someramente en su
petición, las acciones legales que pretende enderezar en contra de
"Industria de Tubos y Perfiles de Acero S.A." (considerando 4º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 10/08/2012, Rol Nº 725-2012,

Cita online: CL/JUR/1694/2012

ARTÍCULO 288 (278)

Toda persona que fundadamente tema ser demandada podrá solicitar las
medidas que mencionan el número 5º del artículo 273 y los artículos 281, 284
y 286, para preparar su defensa.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 269, 273, 281, 284, 286 y 289.

ARTÍCULO 289 (279)

Las diligencias expresadas en este Título pueden decretarse sin audiencia


de la persona contra quien se piden, salvo los casos en que expresamente
se exige su intervención.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 281, 286 y 302.

TÍTULO V DE LAS MEDIDAS PRECAUTORIAS

ARTÍCULO 290 (280)

Para asegurar el resultado de la acción, puede el demandante en cualquier


estado del juicio, aun cuando no esté contestada la demanda, pedir una o
más de las siguientes medidas:

1ª El secuestro de la cosa que es objeto de la demanda;


2ª El nombramiento de uno o más interventores;

3ª La retención de bienes determinados; y

4ª La prohibición de celebrar actos o contratos sobre bienes determinados.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 87, 279, 298, 299, 300, 301, 302, 433,
545, 653, 654 y 774. Código de Aguas: artículo 195. Ley Nº 14.908, sobre Abandono de Familia
y Pago de Pensiones Alimenticias: artículo 6º. Ley Nº 18.287, establece Procedimientos ante
los Juzgados de Policía Local: artículo 30. Ley Nº 18.876 establece Marco Legal para la
Constitución y Operación de Entidades Privadas de Depósito y Custodia de Valores:
artículos 5º, 6º y 17. Ley Nº 19.039, establece Normas Aplicables a los Privilegios Industriales y
Protección de los Derechos de Propiedad Industrial: artículos 29 y 52. Ley Nº 19.325 establece
Normas sobre Procedimiento y Sanciones Relativos a los Actos de Violencia Intrafamiliar:
artículos 4º y 5º. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia: artículos 22 y 61 Nº 3.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Finalidad de las medidas cautelares

El fundamento de las medidas cautelares se encuentra en el


denominado "periculum in mora", esto es la demora que conlleva la
tramitación de todo proceso antes de llegar a la sentencia, lapso durante
el cual el demandado puede ejecutar diversas actividades que pueden
ocasionar un perjuicio al demandante y sus legítimas expectativas en
los resultados del juicio. Son providencias del tribunal, dictadas a
petición del sujeto activo del proceso, que tienen por finalidad asegurar
el resultado de la pretensión hecha valer, cuando se ha demostrado
durante el curso del procedimiento la apariencia de la existencia de la
pretensión cuya satisfacción se pretende y existe el peligro que ella
pueda ser burlada antes de la dictación de la sentencia definitiva
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 5/09/2018, Rol Nº 326-2018,

Cita online: CL/JUR/4962/2018

2. Admisibilidad de solicitud de medidas precautorias una vez citadas


las partes a oír sentencia

El artículo 433 del Código de Procedimiento Civil, en lo que interesa


para la resolución del asunto, dispone: "Citadas las partes para oír
sentencia, no se admitirán escritos ni pruebas de ningún género". Luego
de lo cual en el inciso 2º señala: "Lo cual se entiende sin perjuicio de lo
dispuesto por los artículos 83, 84, 159 y 290...". Como puede
apreciarse, el inciso 2º transcrito precedentemente consagra una serie
de excepciones a lo dispuesto imperativamente por el inciso 1º de la
norma en estudio, permitiendo a las partes, pese al estado de
tramitación del juicio, solicitar la concesión de las medidas precautorias
contempladas en el artículo 290 del Código de Procedimiento Civil, cuyo
es el caso precisamente de autos. Así las cosas, la jueza de primer
grado debió admitir a tramitación y pronunciarse en su mérito acerca de
la precautoria solicitada por el patrocinante del actor y, como no la hizo,
esta Corte debe enmendar la resolución recurrida, debiendo acoger a
tramitación la petición de medida precautoria efectuada por el
apoderado del actor y proveerla en su mérito y conforme a derecho
(considerandos 4º a 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 12/01/2018, Rol Nº 1998-2017,

Cita online: CL/JUR/286/2018

3. Concepto de medidas cautelares

Las providencias cautelares son aquellas resoluciones que se dictan


durante el curso de un proceso y que tienen por objeto otorgar al actor
la anticipación provisoria de ciertos efectos de la providencia definitiva,
para prevenir el daño jurídico que podría derivar del retardo de la misma
—Piero Calamandrei—. Las medidas cautelares o precautorias (última
denominación a la que se refiere nuestro Código de Procedimiento
Civil), tienen un carácter esencialmente provisorio en cuanto a sus
efectos, pues estos están destinados a durar a lo más sólo el tiempo
intermedio entre la fecha en que es dictada y la fecha en que se
encuentra ejecutoriada la resolución que pone término al juicio. Estas
medidas no constituyen un fin en sí mismas, sino que están
ineludiblemente orientadas a salvaguardar una ulterior providencia
definitiva, cuyo resultado práctico aseguran preventivamente y en
defecto de la cual está destinada a desaparecer (considerando 2º de la
actuación de oficio de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 27/06/2019, Rol Nº 33607-2018,


Cita online: CL/JUR/3715/2019

4. Medidas cautelares reales. Remisión al Código de Procedimiento


Civil
Al tenor del artículo 157 del Código Procesal Penal, las medidas
cautelares reales son aquellas que tienen por objeto privar, limitar o
disponer de los derechos patrimoniales durante el curso del proceso
penal para asegurar la pretensión civil que puede hacerse valer en el
proceso penal y que puede ser reconocida al momento de dictarse la
sentencia definitiva en el proceso penal. El estatuto procesal penal no
contempla la existencia de medidas cautelares especiales, sino que
dispone que se pueden decretar una o más de las medidas precautorias
autorizadas en el Título V del Libro Segundo del Código de
Procedimiento Civil. En consecuencia, al remitirse al Título V del Código
de Procedimiento Civil, el legislador procesal penal permite aplicar en el
proceso penal todas aquellas reguladas en dicho capítulo, esto es, las
enumeradas en el artículo 290 de ese cuerpo legal, es decir, el
secuestro, el nombramiento de uno o más interventores, la retención y
prohibición de celebrar actos y contratos, y también las restantes
medidas no expresamente autorizadas por la ley conforme a lo
establecido en el artículo 298 de dicho Código (considerando 2º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 11/10/2019, Rol Nº 826-2019,

Cita online: CL/JUR/6011/2019

ARTÍCULO 291 (281)

Habrá lugar al secuestro judicial en el caso del artículo 901 del Código Civil,
o cuando se entablen otras acciones con relación a cosa mueble determinada
y haya motivo de temer que se pierda o deteriore en manos de la persona
que, sin ser poseedora de dicha cosa, la tenga en su poder.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 290, 479 y siguientes. Código Civil:
artículo 2250.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Incurre en falta o abuso el juez que habiendo concedido la medida


prejudicial precautoria de prohibición de celebrar actos y contratos
respecto de un vehículo, no dio lugar al secuestro del mismo solicitado
posteriormente
Que como antes se dijo el actor ha solicitado en los autos ordinarios
tenidos a la vista la restitución del vehículo en referencia fundado en
que es de temer se pierda o deteriore la especie en manos del poseedor,
por lo que en consecuencia, para asegurar el resultado de su acción, y
siendo aplicable en la especie la situación prevista en el artículo 291 del
Código de Procedimiento Civil en relación al ya indicado artículo 901 del
Código Civil, ha sido procedente acceder a la medida precautoria de
secuestro del aludido vehículo por lo que el juez recurrido, al no decidirlo
así ha cometido falta que la Corte de Apelaciones respectiva debió
corregir por la vía disciplinaria (considerando 6º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 13/06/1988, Rol Nº 12224-1988,


Cita online: CL/JUR/320/1988

ARTÍCULO 292 (282)

Son aplicables al secuestro las disposiciones que el párrafo 2º del Título I


del Libro III establece respecto del depositario de los bienes embargados.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 290, 479 y siguientes. Código Civil:
artículo 2250.

ARTÍCULO 293 (283)

Hay lugar al nombramiento de interventor:

1º En el caso del inciso 2º del artículo 902 del Código Civil;

2º En el del que reclama una herencia ocupada por otro, si hay el justo
motivo de temor que el citado inciso expresa;

3º En el del comunero o socio que demanda la cosa común, o que pide


cuentas al comunero o socio que administra;

4º Siempre que haya justo motivo de temer que se destruya o deteriore la


cosa sobre que versa el juicio, o que los derechos del demandante puedan
quedar burlados; y

5º En los demás casos expresamente señalados por las leyes.


Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 290, 294, 444 y 454. Código Civil:
artículo 902.

ARTÍCULO 294 (284)

Las facultades del interventor judicial se limitarán a llevar cuenta de las


entradas y gastos de los bienes sujetos a intervención, pudiendo para el
desempeño de este cargo imponerse de los libros, papeles y operaciones del
demandado.

Estará, además, el interventor obligado a dar al interesado o al tribunal


noticia de toda malversación o abuso que note en la administración de dichos
bienes; y podrá en este caso decretarse el depósito y retención de los
productos líquidos en un establecimiento de crédito o en poder de la persona
que el tribunal designe, sin perjuicio de las otras medidas más rigurosas que
el tribunal estime necesario adoptar.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 290, 291, 444 y 454. Código Orgánico
de Tribunales: artículo 507.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Juez incurre en falta o abuso al acceder a petición que importa un


nuevo embargo

Que, con lo dicho, queda en evidencia que el juez requerido


efectivamente incurrió en falta o abuso al dictar la resolución de que se
trata y la que la complementa, ya individualizada, por cuanto accedió a
una petición requerida por el interventor, determinando una medida que
importa un nuevo embargo, esta vez referido a ingresos, en
circunstancias que el artículo 444 del Código de Procedimiento Civil se
refiere al embargo de utilidades, lo que ya se había decretado en la
resolución de fs. 176, por cuyo cumplimiento es por lo que el juez debe
velar, salvo petición expresa de las partes, lo que no ha acontecido en
la especie. Que a mayor abundamiento, el embargo primitivamente
decretado por el juez a fs. 176 recae sobre parte de las utilidades de la
ejecutada en la explotación del Hotel Tupahue, que resulte suficiente
para cubrir el crédito de autos, sus respectivos intereses y costas de
ejecución, lo que constituye un concepto mucho más restringido que la
noción de ingreso, que evidentemente involucra costos que lo forman y
que obviamente no es todo utilidad. Que por lo tanto el juez recurrido,
como antes se expresó, al resolver en los términos impugnados
cometió, a juicio de esta Corte, falta que debe ser enmendada por esta
vía (considerandos 5º a 6º Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 16/03/1989, Rol Nº 13156-1989,


Cita online: CL/JUR/809/1989

ARTÍCULO 295 (285)

La retención de dineros o cosas muebles podrá hacerse en poder del


mismo demandante, del demandado o de un tercero, con relación a los bienes
que son materia del juicio, y también respecto de otros bienes determinados
del demandado, cuando sus facultades no ofrezcan suficiente garantía, o
haya motivo racional para creer que procurará ocultar sus bienes, y en los
demás casos determinados por la ley.

Podrá el tribunal ordenar que los valores retenidos se trasladen a un


establecimiento de crédito o de la persona que el tribunal designe cuando lo
estime conveniente para la seguridad de dichos valores.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 270, 453, 545 y 546. Código Orgánico
de Tribunales: artículo 507.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Finalidad de la medida de retención de bienes determinados, de


dineros o de cosas muebles

El artículo 290 Nº 3 del Código de Procedimiento Civil contempla la


medida precautoria de retención de bienes determinados, que se
especifica en el artículo en comento. [.. La medida de retención de
bienes determinados, de dineros o de cosas muebles, tiene por objeto
impedir que el demandado disponga de ellos y que así pueda eludir las
resultas del juicio (considerando 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 22/02/2019, Rol Nº 421-2018,

Cita online: CL/JUR/979/2019


2. Requisitos de procedencia de la medida precautoria de retención de
bienes determinados cuando éstos no son materia del juicio

En el caso que, la medida precautoria recae sobre bienes que no son


materia del juicio, para que se decrete la medida precautoria de
retención de bienes determinados es necesario la concurrencia de los
siguientes requisitos: a) Que la providencia se refiera a bienes
determinados del demandado. b) Que tales bienes sean muebles o
inmuebles determinados; y c) Que se acredite por el actor que las
facultades del demandado no ofrecen suficiente garantía o que hay
motivo racional para creer que procurará ocultar sus bienes —Mario
Rojas Rodríguez— (considerando 6º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 22/02/2019, Rol Nº 421-2018,

Cita online: CL/JUR/979/2019

ARTÍCULO 296 (286)

La prohibición de celebrar actos o contratos podrá decretarse con relación


a los bienes que son materia del juicio, y también respecto de otros bienes
determinados del demandado, cuando sus facultades no ofrezcan suficiente
garantía para asegurar el resultado del juicio.

Para que los objetos que son materia del juicio se consideren
comprendidos en el número 4º del artículo 1464 del Código Civil, será
necesario que el tribunal decrete prohibición respecto de ellos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 270, 453, 545 y 546. Código Civil:
artículo 1464 Nº 4. Código Tributario: artículo 137.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procedencia de medida precautoria de prohibición de celebrar actos


o contratos

Respecto a sus requisitos, conforme al artículo 296 del Código de


Procedimiento Civil, la medida precautoria sólo la puede pedir el
demandante; tiene que concurrir el "periculum in mora", esto es, el
peligro de daño jurídico por el eventual retardo de la sentencia, y desde
luego, la situación o actitud del demandado en cuanto pueda frustrar o
menoscabar los derechos del actor que el fallo le reconozca, como sería
su insolvencia, o la mala fe para ocultar o destruir la cosa; y por último,
debe el actor acompañar comprobante que constituyan, a lo menos,
presunción grave del derecho que se reclama. La doctrina entiende que
"comprobante" es cualquier medio de prueba y no solo documentos; y
que constituyan "presunción grave" significa que tales comprobantes
hagan deducir la apariencia o verosimilitud del derecho que fundamenta
esa pretensión (considerando 5º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte Suprema, 7/06/2019, Rol Nº 147-2019,


Cita online: CL/JUR/4482/2019

2. Para la procedencia de la medida precautoria en su carácter de


prejudicial, debe acreditarse circunstancia establecida en el
artículo 296 del Código de Procedimiento Civil

Si bien la formalización del imputado pudiera estimarse constitutiva


de la exigencia de "motivos graves y calificados", es inequívoco que
para la procedencia de la medida precautoria específica solicitada, esto
es, la prohibición de celebrar actos y contratos, es menester además, la
concurrencia de las exigencias particulares que para ella se indican en
el precitado artículo 296 del Código de Procedimiento Civil, vale decir,
que las facultades del demandado no ofrezcan suficiente garantía para
asegurar los resultados del juicio (considerando 7º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 23/01/2012, Rol Nº 1663-2011,

Cita online: CL/JUR/174/2012

ARTÍCULO 297 (287)

Cuando la prohibición recaiga sobre bienes raíces se inscribirá en el


registro del Conservador respectivo, y sin este requisito no producirá efecto
respecto de terceros.

Cuando verse sobre cosas muebles, sólo producirá efecto respecto de los
terceros que tengan conocimiento de ella al tiempo del contrato; pero el
demandado será en todo caso responsable de fraude, si ha procedido a
sabiendas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 270, 453, 545 y 546. Código Civil:
artículos 1464 y 2236. Reglamento del Registro del Conservatorio de Bienes Raíces:
artículos 31 Nº 3, 32 y 53 Nº 3.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La ausencia de inscripción de la prohibición de celebrar actos o


contratos sobre el inmueble, no hace presumir la buena fe de los
demandados sin admisión de prueba en contrario

En efecto, el art. 290 del Código de Procedimiento Civil faculta al


demandante para pedir una o más de las medidas cautelares que ese
precepto señala, entre ellas la prohibición de celebrar actos o contratos
sobre bienes determinados. Tal medida, según lo prescribe el art. 296
del mismo Código puede decretarse con relación a bienes que son
materia del juicio y también respecto de otros bienes determinados del
demandado; y conforme al art. 297, cuando la prohibición recaiga sobre
bienes raíces, debe inscribirse en el Registro del Conservador
respectivo, requisito sin el cual no produce efecto respecto de terceros.
que esas disposiciones, en manera alguna obligan a solicitar dicha
medida cautelar; ni es dable concluir, como lo hace la sentencia
recurrida, que la norma del art. 297 tenga el carácter de presunción de
derecho de la cual deba inferirse que la ausencia de inscripción de la
prohibición de celebrar actos o contratos sobre el inmueble, hace
presumir la buena fe de los demandados sin admisión de prueba en
contrario. Al atribuirse a la referida norma un alcance o sentido muy
distinto del que ella señale, el fallo transgrede aquella norma; infracción
que implica, también, la del inciso final del art. 47 del Código Civil y
art. 706 del mismo Código, al darse por establecida una presunción de
derecho sin que exista expresión de la ley en tal sentido, como lo
requiere aquel precepto. Que, por lo mismo, la mala fe de los
demandados ha podido establecerse por los medios de prueba legales
(considerandos 7º a 9º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 28/01/1991, Rol Nº 15817-1991,


Cita online: CL/JUR/455/1991
ARTÍCULO 298 (288)

Las medidas de que trata este Título se limitarán a los bienes necesarios
para responder a los resultados del juicio; y para decretarlas deberá el
demandante acompañar comprobantes que constituyan a lo menos
presunción grave del derecho que se reclama. Podrá también el tribunal,
cuando lo estime necesario y no tratándose de medidas expresamente
autorizadas por la ley, exigir caución al actor para responder de los perjuicios
que se originen.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 112, 279, 280, 302, 426 y 548.
Código Civil: artículo 2336. Ley Nº 18.287 sobre Procedimiento ante Juzgados de Policía Local:
artículo 30. Código Tributario: artículo 137.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Solicitud de medida precautoria, acogida. Medida precautoria de


prohibición de celebrar actos o contratos. Exigencia de periculum in
mora

Conforme al legislador civil, las medidas precautorias son aquellas


que tienen por objeto asegurar los resultados de la acción deducida, y
su finalidad es evitar el daño de que el demandado pueda enajenar los
bienes objeto del litigio, siendo su principal fundamento el "periculum in
mora", es decir, el peligro de la mora, en el retardo; el posible daño
jurídico y económico que pueda derivarse del retardo de una
providencia jurisdiccional definitiva. Respecto a sus requisitos,
conforme al artículo 296 del Código de Procedimiento Civil, la medida
precautoria sólo la puede pedir el demandante; tiene que concurrir el
"periculum in mora", esto es, el peligro de daño jurídico por el eventual
retardo de la sentencia, y desde luego, la situación o actitud del
demandado en cuanto pueda frustrar o menoscabar los derechos del
actor que el fallo le reconozca, como sería su insolvencia, o la mala fe
para ocultar o destruir la cosa; y por último, debe el actor acompañar
comprobante que constituyan, a lo menos, presunción grave del
derecho que se reclama. La doctrina entiende que "comprobante" es
cualquier medio de prueba y no solo documentos; y que constituyan
"presunción grave" significa que tales comprobantes hagan deducir la
apariencia o verosimilitud del derecho que fundamenta esa pretensión
(considerando 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 7/06/2019, Rol Nº 147-2019,


Cita online: CL/JUR/4482/2019

2. Improcedencia de aplicar como medidas cautelares reales en el


proceso penal las medidas no expresamente autorizadas por la ley

No obstante, en relación con la posibilidad de otorgamiento de las


medidas no expresamente autorizadas por la ley conforme al
artículo 298 del Código de Procedimiento Civil, la doctrina enseña —
Marín González— que el asunto es discutible, ya que no hay duda de
que estas medidas también se encuentran autorizadas en el
mencionado Título V, pero la naturaleza del proceso penal parece solo
conformarse con medidas expresamente previstas por el legislador y no
con aquellas que quedan abiertas a la imaginación de las partes y a la
discrecionalidad judicial (considerando 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 11/10/2019, Rol Nº 826-2019,

Cita online: CL/JUR/6011/2019

ARTÍCULO 299 (289)

En casos graves y urgentes podrán los tribunales conceder las medidas


precautorias de que trata este Título, aun cuando falten los comprobantes
requeridos, por un término que no exceda de diez días, mientras se presentan
dichos comprobantes, exigiendo caución para responder por los perjuicios
que resulten. Las medidas así decretadas quedarán de hecho canceladas si
no se renuevan en conformidad al artículo 280.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 112, 279, 280, 302, 426, 545 Nº 2 y
548. Código Civil: artículo 2336.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Facultad del tribunal de la instancia de decretar medida

En consecuencia, en la especie se cumplen todos los requisitos o


exigencias para otorgar la medida precautoria objeto del recurso, más
aún, si conforme al artículo 299 del Código de Procedimiento Civil, es
una facultad del tribunal de la instancia decretar tal medida, incluso
aunque falten los comprobantes exigidos por el artículo 298 del mismo
texto legal, cuando se trata de un caso grave y urgente (considerando 6º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 7/06/2019, Rol Nº 147-2019,

Cita online: CL/JUR/4482/2019

ARTÍCULO 300 (290)

Estas providencias no excluyen las demás que autorizan las leyes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 290, 545, 598, 654 y 662.

ARTÍCULO 301 (291)

Todas estas medidas son esencialmente provisionales. En consecuencia,


deberán hacerse cesar siempre que desaparezca el peligro que se ha
procurado evitar o se otorguen cauciones suficientes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 158, 176 y 774. Código Tributario:
artículo 137.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Medidas precautorias son provisionales

El artículo 301 del Código de Procedimiento Civil dispone que las


medidas precautorias deberán hacerse cesar siempre que desparezca
el peligro que se ha procurado evitar. Las medidas precautorias tienen
por objeto asegurar el resultado del juicio, de manera que, no pueden
subsistir una vez fallada la causa. En doctrina se ha dicho que las
medidas precautorias "son aquellas providencias de naturaleza cautelar
que, sirviendo para facilitar el cumplimiento práctico de la sentencia,
pueden solicitarse por el demandante para asegurar el resultado de su
acción" —Mario Rojas Rodríguez—. Ello importa, que concluido el juicio
y habiéndose rechazado toda pretensión del actor, ningún resultado
pueden asegurar, por lo que carece de todo sentido su mantención. En
la especie ha concluido el juicio que sustentaba las medidas
precautorias concedidas por el tribunal a quo, y que han sido
rechazadas en todas sus partes las pretensiones del actor, de modo
que, en la actualidad carece de todo fundamento el mantenimiento de
la medida cuyo alzamiento ha impetrado la parte demandada
(considerandos 4º, 5º y 7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 22/02/2019, Rol Nº 394-2018,

Cita online: CL/JUR/981/2019

2. Medidas cautelares no constituyen un fin en sí mismas

Las providencias cautelares son aquellas resoluciones que se dictan


durante el curso de un proceso y que tienen por objeto otorgar al actor
la anticipación provisoria de ciertos efectos de la providencia definitiva,
para prevenir el daño jurídico que podría derivar del retardo de la misma
—Piero Calamandrei—. Las medidas cautelares o precautorias (última
denominación a la que se refiere nuestro Código de Procedimiento
Civil), tienen un carácter esencialmente provisorio en cuanto a sus
efectos, pues estos están destinados a durar a lo más sólo el tiempo
intermedio entre la fecha en que es dictada y la fecha en que se
encuentra ejecutoriada la resolución que pone término al juicio. Estas
medidas no constituyen un fin en sí mismas, sino que están
ineludiblemente orientadas a salvaguardar una ulterior providencia
definitiva, cuyo resultado práctico aseguran preventivamente y en
defecto de la cual está destinada a desaparecer (considerando 2º de la
actuación de oficio de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 27/06/2019, Rol Nº 33607-2018,


Cita online: CL/JUR/3715/2019

ARTÍCULO 302 (292)

El incidente a que den lugar las medidas de que trata este Título se
tramitará en conformidad a las reglas generales y por cuerda separada.

Podrán, sin embargo, llevarse a efecto dichas medidas antes de notificarse


a la persona contra quien se dictan, siempre que existan razones graves para
ello y el tribunal así lo ordene. Transcurridos cinco días sin que la notificación
se efectúe, quedarán sin valor las diligencias practicadas. El tribunal podrá
ampliar este plazo por motivos fundados.
La notificación a que se refiere este artículo podrá hacerse por cédula, si el
tribunal así lo ordena.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 38, 48, 67, 87, 89, 90, 91, 279, 280,
299, 301, 545 Nº 2 y 598. Código Orgánico de Tribunales: artículo 390. Código Tributario:
artículo 137.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La notificación de la medida precautoria, concedida en los términos


del inciso segundo de este artículo, debe hacerse por regla general
personalmente

Que, además, el inciso final del artículo 302 del Código de


Enjuiciamiento Civil al señalar que la notificación en referencia puede
hacerse por cédula cuando el tribunal así lo ordena, no está indicando
que la forma de notificación procedente es la personal, no pudiéndose
estimar que lo es la por el estado diario, como lo sostiene la parte
demandante, por cuanto el hecho que las medidas cautelares puedan
llevarse a efecto sin previa notificación del demandado y que pueda
ampliarse el plazo de cinco días que la ley establece para esa
notificación, excluyen la notificación por el estado diario, la que
constituye la regla general en materia de notificaciones en nuestro
ordenamiento procesal y cuya práctica no requiere de solicitud alguna
de parte, sino que opera de oficio desde que la respectiva resolución se
incluye en el estado que diariamente debe confeccionar el secretario del
tribunal respectivo en los términos señalados por el artículo 50 del
citado cuerpo legal. Abona la conclusión anterior la circunstancia que la
notificación por el estado diario ni siquiera cuando es aplicada como
sanción, conforme a lo preceptuado en el artículo 53 del Código
Procesal Civil, precisa de solicitud de parte y previa orden del tribunal.
Que en materia laboral, el Código del ramo no contiene normas
especiales que regulen la institución de las medidas precautorias, por lo
que supletoriamente, de acuerdo a lo preceptuado en su artículo 426
reciben aplicación las contenidas en los libros I y II del de Procedimiento
Civil, e incluso la propia parte demandante invocó las de este último libro
citado para fundar sus solicitudes contenidas en el primer, segundo y
tercer otrosíes del mencionado escrito de fs. 1. Que, en consecuencia,
al no haber sido notificado legalmente el demandado de la medida
precautoria indicada en el término fijado por el tribunal de primer grado,
no cabe sino concluir que se ha producido el efecto previsto en el
inciso segundo del artículo 302 del Código de Procedimiento Civil, esto
es, que ha quedado sin efecto (considerandos 6º y 7º de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Talca, 21/11/2000, Rol: No se consigna,

Cita online: CL/JUR/1384/2000

2. La medida solicitada como prejudicial después de presentada la


demanda, pero antes de su notificación, subsiste como precautoria y
rige respecto de ella el artículo 302

Que, por consiguiente, y armonizando las disposiciones pertinentes,


cabe concluir que si bien es verdad que si la demanda ya fue
presentada, pero aún no es notificada, se puede solicitar una prejudicial
precautoria, el efecto que se produce al concederse la medida en ese
caso es el mismo que los autores admiten que se produce en los casos
habituales cuando tras la prejudicial se presenta la demanda y en ella
se pide y obtiene que se mantenga la medida; esto es, a partir de ese
momento la medida subsiste como precautoria simple. Corte de
Temuco, fallo de 8 de mayo de 1985, comentado por don José Quezada
en su obra Las Medidas Prejudiciales y Precautorias, Editorial Ediar
ConoSur Ltda., edición 1987, página 193). Que, entonces, si la de autos
se solicitó como prejudicial, lo cierto es que en el mismo momento en
que se concedió pasó a investir la calidad de precautoria ordinaria, por
lo mismo que al ser la solicitud posterior a la demanda lleva en sí el
cumplimiento del requisito de presentar ésta y requerir su mantención.
Así, desde que la medida se concedió, pasó a ser obligatorio para la
parte demandante notificarla en el plazo de cinco días que señala el
artículo 302, o bien solicitar la ampliación de ese plazo; y como no hizo
ni lo uno ni lo otro, con su omisión caducó la medida cautelar que se le
concediera (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Rancagua, 6/11/2000, Rol Nº 16456-2000,

Cita online: CL/JUR/5270/2000


TÍTULO VI DE LAS EXCEPCIONES DILATORIAS

ARTÍCULO 303 (293)

Sólo son admisibles como excepciones dilatorias:

1ª La incompetencia del tribunal ante quien se haya presentado la


demanda;

2ª La falta de capacidad del demandante, o de personería o representación


legal del que comparece en su nombre;

3ª La litis pendencia;

4ª La ineptitud del libelo por razón de falta de algún requisito legal en el


modo de proponer la demanda;

5ª El beneficio de excusión; y

6ª En general las que se refieran a la corrección del procedimiento sin


afectar al fondo de la acción deducida.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 6º, 8º, 9º, 83, 84, 85, 86, 101, 111,
112, 254, 256, 304, 305, 310 y 464. Código Civil: artículos 2357 y 2358. Código Procesal Penal:
artículos 263, 264 y 271. Código Orgánico de Tribunales: artículos 14, 18, 45, 50, 51, 52, 53,
63, 96, 98, 108, 134 y siguientes y 181 y siguientes. Código del Trabajo: artículo 441. Ley
Nº 18.046, Ley de Sociedades Anónimas: artículo 49.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La falta de legitimación pasiva no es constitutiva de ninguna de las


excepciones dilatorias del artículo 303, por cuanto éstas apuntan
simplemente a la validez de la relación jurídica procesal

Precisado lo anterior, ha de añadirse que la excepción de "falta de


legitimación pasiva" no es constitutiva de ninguna de las excepciones
dilatorias que prevé el artículo 303 del Código de Procedimiento Civil
desde que no se refiere a la mera corrección del procedimiento, sino
que atañe al fondo de la acción deducida. Tampoco se cuenta entre
aquellas que, conforme a su artículo 304, pueden oponerse y tramitarse
del mismo modo que las dilatorias. Que, en tales circunstancias, es de
toda evidencia que una excepción de esa índole, indudablemente de
fondo, sólo puede ser resuelta una vez agotados todos los trámites
propios y pertinentes al procedimiento ordinario de mayor cuantía. En la
especie, sin embargo, los jueces de primera y de segunda instancia se
pronunciaron sobre la señalada excepción, de falta de legitimación
pasiva, omitiendo trámites o diligencias esenciales a la sustanciación
del juicio ordinario de mayor cuantía, como lo son —verbi gratia— la
recepción de la causa a prueba, y con ello su consiguiente producción
y la citación a oír sentencia (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 11/06/2002, Rol Nº 3279-2001, Cita online:


CL/JUR/321/2002

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 303, 1ª)

1. Extemporaneidad de la excepción de incompetencia

El Código de Procedimiento Civil consagra dos vías para promover


las cuestiones de competencia: la inhibitoria y la declinatoria. Cuando
se plantea por declinatoria se propone ante el tribunal a quien se cree
incompetente para conocer de un asunto que le esté sometido,
indicándole cuál es el que se estima competente, solicitándole se
abstenga de seguir conociendo del mismo. Cuando las cuestiones de
competencia se deducen en razón del territorio tienen el carácter de una
excepción dilatoria. Es así como notificado legalmente el demandado
del escrito de demanda, una de las actitudes que puede adoptar como
defensa es deducir, de conformidad a lo previsto en el artículo 303 del
Código de Procedimiento Civil, excepciones dilatorias. La
incompetencia del tribunal ante el cual se haya presentado la demanda
se regula en el artículo 303 Nº 1 y como el legislador no distingue, debe
inferirse que se puede reclamar tanto de la incompetencia relativa como
de la absoluta. La distinción anterior tiene importancia, porque
tratándose de la incompetencia absoluta, ésta, por su naturaleza, puede
formularse durante todo el curso del juicio como incidente de nulidad de
todo lo obrado. En cambio, la incompetencia relativa debe impetrarse
por la vía procesal señalada por el legislador y en la oportunidad
pertinente, porque de no ser así se produce la prórroga tácita de la
competencia regulada en el artículo 187 del Código Orgánico de
Tribunales. En la especie, una vez notificada legalmente la demandada,
no se formularon excepciones ni alegaciones de ningún género, y sólo
cuando el proceso se encontraba en la etapa de impugnación, se
procedió a deducir excepción de incompetencia. Por lo tanto, ésta fue
planteada en forma extemporánea (considerandos 11º y 12º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 21/07/2016, Rol Nº 32261-2015,


Cita online: CL/JUR/5136/2016

2. Excepción de incompetencia que no vulnera cosa juzgada

No existe la infracción a la cosa juzgada que arguye la parte


demandante en el juicio de divorcio. En efecto, confunde el recurrente
la cuestión de competencia planteada por la demandada,
extemporáneamente como señaló el a quo, con la falta de jurisdicción,
que no tiene que ver con la hipótesis del Nº 1º del artículo 303 del
Código de Procedimiento Civil alegado en su oportunidad, sino con la
ausencia de un presupuesto procesal, respecto de lo cual el tribunal
puede y debe pronunciarse incluso de oficio, tal como se consigna en la
sentencia impugnada. Luego, dicha resolución, en cuanto resuelve, en
realidad, más que la alegación de la demandada de incompetencia
internacional, su falta de jurisdicción, no infringe la cosa juzgada que
emana de la resolución que se limitó a rechazar, por extemporánea, la
excepción de incompetencia opuesta de acuerdo del Nº 1º del
artículo 303 del Código de Procedimiento Civil (considerando 4º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 26/02/2019, Rol Nº 2470-2018,

Cita online: CL/JUR/1325/2019

3. Incompetencia de los tribunales ordinarios de justicia

La cláusula compromisoria es un contrato por el que las partes


sustraen determinados asuntos litigiosos, presentes o futuros, del
conocimiento de la justicia ordinaria y la someten a la justicia arbitral.
De lo anterior resulta que dicho acuerdo de voluntades, genera para las
partes la obligación de designar al tribunal arbitral y a la vez, es un pacto
procesal con el objeto de reemplazar la jurisdicción ordinaria por la
extraordinaria del árbitro. Conforme a lo establecido en el artículo 1545
del Código Civil, la cláusula compromisoria es una ley para los
contratantes, la misma provoca la incompetencia absoluta de los
tribunales ordinarios de justicia, por lo que al haberse pactado en los
cuatro contratos cuya invalidez se pretende, no siendo una materia de
arbitraje prohibido, y habiéndose alegado por la demandada en la forma
pertinente, debe estarse a lo allí acordado, debiendo ser conocido el
conflicto y resuelto por la justicia arbitral (considerandos 6º y 7º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 12/07/2019, Rol Nº 10826-2018,

Cita online: CL/JUR/4078/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 11/09/2019, Rol Nº 14550-


2018,

Cita online: CL/JUR/5211/2019

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 303, 2ª)

1. Hipótesis de la excepción dilatoria del artículo 303 Nº 2 del Código de


Procedimiento Civil

La excepción del artículo 303 Nº 2 del Código de Procedimiento Civil


admite tres hipótesis diferentes, a saber: la falta de capacidad del
demandante, la falta de personería de quien comparece a nombre del
actor y la falta de representación de quien actúa en juicio por el titular
de la pretensión procesal. Útil resulta, por tanto, delinear los límites de
tal defensa. La norma, en primer lugar, se refiere a la carencia de los
atributos o condiciones que integran la capacidad procesal de una parte,
teniendo presente que la regla general es que toda persona sea capaz
para comparecer en juicio. La incapacidad debe ser probada por quien
la alega. La personería, por su parte, es la facultad para representar a
otro y la falta de ella se verificará en razón de la carencia del
vínculo jurídico que habilita para actuar en juicio a nombre y
representación de un tercero. Finalmente, la representación consiste en
la relación jurídica de origen legal, judicial o voluntaria, en virtud de la
cual una persona, denominada representante, actuando dentro de los
límites de su encargo, realiza actos a nombre de otra, llamada
representado, haciendo recaer sobre ésta los efectos jurídicos
derivados de su gestión (considerando 14º de la sentencia de casación).
Corte Suprema, 15/05/2018, Rol Nº 34346-2017,
Cita online: CL/JUR/2220/2018

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 303, 3ª)

1. La institución de la litis pendencia es una figura procesal cuya


interpretación teleológica coincide plenamente con la cosa juzgada

La excepción del artículo 303 número 3 del Código de Procedimiento


Civil, esto es, la litis pendencia, es una figura procesal cuya
interpretación teleológica coincide plenamente con la cosa juzgada,
pues no se puede olvidar que es un anticipo de esta última, y que tiene
por objeto impedir la simultaneidad de la tramitación de dos procesos,
para lo cual exige que la identidad de ambos procesos se produzcan en
cuanto a los sujetos, a las cosas en litigio y a la causa de pedir
(considerando 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Rancagua, 14/05/2019, Rol Nº 848-2018,

Cita online: CL/JUR/2720/2019

2. Excepción de litis pendencia es oponible en procedimiento de


reclamación del monto provisional de expropiación

En cuanto a la identidad legal de personas como requisito de


procedencia de la excepción de litis pendencia, se ha dicho con claridad
por la doctrina que "esta identidad jurídica se cumple cuando se
constata la misma calidad jurídica entre los sujetos del proceso anterior
y del proceso ulterior, aunque en el nuevo juicio cambien de rol"
(Alejandro Romero Seguel, "La cosa juzgada en el procedimiento civil
chileno", Editorial Jurídica de Chile, Santiago, 202. Pág. 56). De este
modo, queda en evidencia que, tratándose de iguales personas jurídicas
que en ambos pleitos actúan invariablemente como expropiante y
expropiado, el hecho de cambiar de rol o posición procesal no implica
que no puedan ser consideradas como legalmente idénticas para estos
efectos. En segundo orden, también habrá de concluirse que el
recurrente yerra cuando asocia la causa de pedir con la petición
concreta formulada a través de ambas reclamaciones, por cuanto es la
propia ley, en el inciso final del artículo 177 del Código de Procedimiento
Civil, quien se ha encargado de indicar que "se entiende por causa de
pedir el fundamento inmediato del derecho deducido en juicio",
fundamento que, en la especie, se identifica con la insatisfacción de
ambas partes respecto del monto de la indemnización consignada, más
allá que en uno y otro juicio la petición se oriente en un sentido diverso.
Esta afirmación resulta ostensible si se considera que el objetivo final
de la excepción de litis pendencia consiste en evitar el desarrollo
simultáneo de dos procedimientos jurisdiccionales que puedan arribar a
decisiones contradictorias (considerando 6º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 19/08/2019, Rol Nº 22111-2018,


Cita online: CL/JUR/4784/2019

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 303, 4ª)

1. La ineptitud del libelo es de aquellas excepciones dilatorias en que el


vicio en que consiste puede ser subsanado

Que la situación descrita en la última parte del motivo precedente es


precisamente la acaecida en el caso de autos, pues el tribunal, al
estimar configurados los presupuestos de hecho del Nº 4 del
artículo 303 del Código de Procedimiento Civil, acogió la excepción de
ineptitud del libelo y, en razón de ello, omitió pronunciarse sobre la
cuestión principal. Sin perjuicio de lo anterior, la ineptitud del libelo es
de aquellas excepciones dilatorias en que el vicio en que consiste puede
ser subsanado, pues resulta evidente que el demandante está en
condiciones de aclarar o corregir aquellas partes de la demanda que la
hacían inepta y, como consecuencia de lo anterior, dejar el
procedimiento en situación de poder proseguir. Así lo reconoce
explícitamente el artículo 308 del citado Código (considerando 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 22/01/2009, Rol Nº 268-2008,


Cita online: CL/JUR/5795/2009

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 303, 6ª)

1. Excepción de falta de jurisdicción puede oponerse como dilatoria

En estas condiciones, el mencionado artículo 303 número 6 del


Código de Procedimiento Civil permite al demandado oponer en
carácter de dilatorias todas aquellas que tengan por objeto corregir
vicios de procedimiento sin afectar el fondo de la acción deducida. En
concordancia con lo señalado, el numeral 1 de la misma disposición
permite alegar como excepción dilatoria la incompetencia del tribunal
ante quien se haya presentado la demanda. Sin embargo, el sentido de
esta norma no es claro, puesto que tanto la jurisdicción como la
competencia son presupuestos procesales, que conciernen a los
requisitos necesarios para constituir un proceso válido. Por
consiguiente, recurriendo a los elementos sistemático y lógico de
interpretación de la ley, la norma citada admite una interpretación
amplia, en que la falta de jurisdicción debe equipararse a la
incompetencia absoluta, de manera que la falta de jurisdicción fundada
en que el asunto debe ser conocido por un tribunal extranjero puede
alegarse como excepción dilatoria. Tal conclusión resulta lógica a la luz
de los principios formativos de economía procesal y de certeza jurídica
de que debe estar imbuido todo procedimiento y que obstan a que deba
llegarse a la sentencia definitiva para el pronunciamiento sobre una
excepción que se refiere a elementos del proceso, teniendo presente
las particulares condiciones de esta causa, en que son hechos no
discutidos que el accidente de autos ocurrió en la República
Plurinacional de Bolivia, que los contratos de transporte fueron
celebrados en Chile y que la demandada tiene su domicilio en nuestro
país (considerando 8º de la sentencia de casación de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 16/09/2013, Rol Nº 2147-2013,


Cita online: CL/JUR/2050/2013

ARTÍCULO 304 (294)

Podrán también oponerse y tramitarse del mismo modo que las dilatorias
la excepción de cosa juzgada y la de transacción; pero, si son de lato
conocimiento, se mandará contestar la demanda, y se reservarán para
fallarlas en la sentencia definitiva.128

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 170 Nº 6, 175, 177, 178, 179, 180,
303, 309 y 310. Código Civil: artículos 2446 y siguientes.

ARTÍCULO 305 (295)


Las excepciones dilatorias deben oponerse todas en un mismo escrito y
dentro del término de emplazamiento fijado por los artículos 258 a 260.

Si así no se hace, se podrán oponer en el progreso del juicio sólo por vía
de alegación o defensa, y se estará a lo dispuesto en los artículos 85 y 86.

Las excepciones 1ª y 3ª del artículo 303 podrán oponerse en segunda


instancia en forma de incidente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 30, 31, 84, 85, 86, 210, 220, 258, 259,
260, 317, 465, 711 y 712. Código Procesal Penal: artículo 265.

ARTÍCULO 306 (296)

Todas las excepciones propuestas conjuntamente se fallarán a la vez, pero


si entre ellas figura la de incompetencia y el tribunal la acepta, se abstendrá
de pronunciarse sobre las demás. Lo cual se entiende sin perjuicio de lo
dispuesto por el artículo 208.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 170 Nº 6, 208, 210, 310 y 465. Código
Orgánico de Tribunales: artículo 111 inciso 1º. Código del Trabajo: artículo 440. Ley Nº 19.968,
crea los Tribunales de Familia: artículo 61 Nº 2.

ARTÍCULO 307 (297)

Las excepciones dilatorias se tramitarán como incidentes.

La resolución que las deseche será apelable sólo en el efecto devolutivo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 86, 89, 90, 91, 159, 170, 187, 192,
193, 194 Nº 4, 208, 210, 310 y 465.

ARTÍCULO 308 (298)

Desechadas las excepciones dilatorias o subsanados por el demandante


los defectos de que adolezca la demanda, tendrá diez días el demandado
para contestarla, cualquiera que sea el lugar en donde le haya sido notificada.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 306 y 309. Código Orgánico de
Tribunales: artículo 398. Código Civil: artículo 2514.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La ineptitud del libelo es de aquellas excepciones dilatorias en que el


vicio en que consiste puede ser subsanado

Que la situación descrita en la última parte del motivo precedente es


precisamente la acaecida en el caso de autos, pues el tribunal, al
estimar configurados los presupuestos de hecho del Nº 4 del
artículo 303 del Código de Procedimiento Civil, acogió la excepción de
ineptitud del libelo y, en razón de ello, omitió pronunciarse sobre la
cuestión principal. Sin perjuicio de lo anterior, la ineptitud del libelo es
de aquellas excepciones dilatorias en que el vicio en que consiste puede
ser subsanado, pues resulta evidente que el demandante está en
condiciones de aclarar o corregir aquellas partes de la demanda que la
hacían inepta y, como consecuencia de lo anterior, dejar el
procedimiento en situación de poder proseguir. Así lo reconoce
explícitamente el artículo 308 del citado Código (considerando 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 22/01/2009, Rol Nº 268-2008,


Cita online: CL/JUR/5795/2009

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 9/04/2001, Rol Nº 246-2001,

Cita online: CL/JUR/3606/2001

TÍTULO VII DE LA CONTESTACIÓN Y DEMÁS TRÁMITES HASTA


EL ESTADO DE PRUEBA O DE SENTENCIA

ARTÍCULO 309 (299)

La contestación a la demanda debe contener:

1º La designación del tribunal ante quien se presente;


2º El nombre, domicilio y profesión u oficio del demandado;

3º Las excepciones que se oponen a la demanda y la exposición clara de


los hechos y fundamentos de derecho en que se apoyan; y

4º La enunciación precisa y clara, consignada en la conclusión, de las


peticiones que se sometan al fallo del tribunal.129

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 4º, 6º, 18, 19, 20, 30, 31, 32, 49, 53,
160, 170 Nº 3, 254, 255, 288, 308, 312, 314, 318, 321, 322, 464, 584, 683, 710, 711 y 768 Nº 4.
Código Procesal Penal: artículos 62 y 63. Código del Trabajo: artículo 440. Ley Nº 18.120, sobre
Comparecencia en Juicio: artículos 1º y 2º. Ley Nº 18.287, sobre procedimientos ante Juzgados
de Policía Local: artículo 10. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia: artículo 61 Nº 2.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La contestación de la demanda tiene por objeto fijar la cuestión


controvertida, y los hechos sobre las cuales las partes deberán rendir
prueba

Hay que puntualizar que notificada la demanda al demandado y


transcurrido el término de emplazamiento, queda formada válidamente
la relación procesal. El demandado puede asumir una vez que se le
notifique la demanda las siguientes actitudes: mantener silencio;
allanarse a los hechos y/o el derecho invocados en la demanda;
oponerse negando los hechos, deduciendo alegaciones o defensas,
excepciones dilatorias o perentorias y/o reconvenir. De esta forma la
contestación de la demanda tiene por objeto explicitar la conducta que
asumirá el demandado en el proceso, teniendo como principal efecto el
fijar los límites o extremos de la contienda, dando origen a la litis
contestatio de la cual surgen múltiples consecuencias, entre ellas queda
integrada la relación procesal entre el actor, demandado y tribunal;
queda fijada la cuestión controvertida, quedan fijados los hechos sobre
los cuales las partes deben rendir prueba (considerando 5º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 3/11/2008, Rol Nº 5827-2007,


Cita online: CL/JUR/1083/2008

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 309, Nº 3)


1. Código sólo permite que en la dúplica se puedan ampliar, adicionar o
modificar las excepciones formuladas en la contestación, pero no
plantear excepciones nuevas

El caso fortuito y la fuerza mayor, importan una excepción perentoria


que, como tal, debió en conformidad al artículo 309 Nº 3 del Código de
Procedimiento Civil, haberse opuesto al contestar la demanda y no en
el escrito de dúplica, como lo hizo la demandada. El artículo 321 del
mismo código sólo permite que en la dúplica se puedan ampliar,
adicionar o modificar las excepciones formuladas en la contestación,
pero no plantear excepciones nuevas. En autos, no se alegó
oportunamente (considerandos 2º y 5º sentencia Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 19/08/2004, Rol Nº 5682-2003,


Cita online: CL/JUR/2362/2004

ARTÍCULO 310 (300)

No obstante lo dispuesto en el artículo anterior, las excepciones de


prescripción, cosa juzgada, transacción y pago efectivo de la deuda, cuando
ésta se funde en un antecedente escrito, podrán oponerse en cualquier
estado de la causa; pero no se admitirán si no se alegan por escrito antes de
la citación para sentencia en primera instancia, o de la vista de la causa en
segunda.

Si se formulan en primera instancia, después de recibida la causa a prueba,


se tramitarán como incidentes, que pueden recibirse a prueba, si el tribunal
lo estima necesario, y se reservará su resolución para definitiva.

Si se deducen en segunda, se seguirá igual procedimiento, pero en tal caso


el tribunal de alzada se pronunciará sobre ellas en única instancia.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 30, 31, 89, 90, 91, 170 Nº 6, 175, 177,
178, 179, 207, 208, 210, 223, 304, 305, 307, 348, 431 y 432. Código Civil: artículos 1568, 2466,
2492 y 2514. Código Procesal Penal: artículo 61. Código Tributario: artículo 148.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Excepciones anómalas
La excepción de prescripción, como la de pago, cosa juzgada y
transacción puede oponerse en cualquier estado de la causa antes de
la citación para sentencia en primera instancia, o de la vista de la causa
en segunda, debiendo fundarse en un antecedente escrito. A estas
defensas se les denominan "excepciones anómalas", en atención a que
por su naturaleza de perentorias pueden oponerse después de
contestada la demanda, a diferencia de las restantes que deben
deducirse en la contestación de la demanda, conforme al artículo 309
Nº 3 del Código de Procedimiento Civil. Este carácter especial relativo
a la época hasta cuando pueden oponerse, y del que deriva su
denominación de anómalas, lo señala el artículo 310 del cuerpo de
leyes citado, que inicia su redacción restrictiva con los términos "No
obstante lo dispuesto en el artículo anterior...", y regulando el momento
de su interposición ordena "pero no se admitirán si no se alegan por
escrito antes de la citación para sentencia en primera instancia, o de la
vista de la causa en segunda.". En la especie, la parte reclamante opuso
la excepción en comento, al deducir su recurso de apelación, esto es,
en primera instancia, y sin que desde la concesión del dicho recurso
(resolución que da comienzo a la segunda instancia) hasta la vista de la
causa, haya renovado tal excepción anómala, por lo que ésta aparece
deducida fuera del plazo u oportunidad ordenado por el legislador, por
lo tanto, inevitablemente debe ser desestimada por extemporánea
(considerando 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 15/11/2019, Rol Nº 306-2018,

Cita online: CL/JUR/6565/2019

2. Oportunidad para oponer la excepción de transacción

La excepción de transacción opuesta ante esta Corte, resulta


admisible por cuanto obedece a aquéllas conocidas por la doctrina
como anómalas, desde que siendo perentorias pueden interponerse
después de la contestación de la demanda. En efecto, el artículo 310
del Código de Procedimiento Civil permite invocar como excepción,
entre otras, la transacción antes de la vista del recurso, como sucedió
en la especie, desde que estos antecedentes al momento de la
interposición de aquélla, en la primera oportunidad, aún no se había
declarado la admisibilidad del arbitrio procesal de nulidad, y en la otra,
se verificó después de dicha diligencia, pero en ambos casos antes de
la vista del recurso (considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 18/05/2018, Rol Nº 391-2017,

Cita online: CL/JUR/3294/2018

3. Aplicación del artículo 310 del Código de Procedimiento Civil al juicio


sumario

La circunstancia de tratarse de un procedimiento sumario, sujeto a la


tramitación establecida en los artículos 682 a 692 del Código de
Procedimiento Civil, no obsta a la aplicación de las reglas previstas
respecto del juicio ordinario en las materias no reguladas en forma
expresa, de modo que si bien la oportunidad preferente para oponerse
a la demanda es en la audiencia, ello no obsta a que las excepciones
de prescripción, cosa juzgada, transacción y pago efectivo de la deuda
puedan oponerse en cualquier estado de la causa, hasta antes de la
citación para oír sentencia en primera instancia o de la vista de la causa
en segunda, como se razonó en el caso (considerando 3º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/09/2018, Rol Nº 1031-2018,


Cita online: CL/JUR/5411/2018

ARTÍCULO 311 (301)

De la contestación se comunicará traslado al actor por el término de seis


días, y de la réplica al demandado por igual término.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 65, 66, 78, 148, 312, 316, 521, 698
Nº 1 y 749.

ARTÍCULO 312 (302)

En los escritos de réplica y dúplica podrán las partes ampliar, adicionar o


modificar las acciones y excepciones que hayan formulado en la demanda y
contestación, pero sin que puedan alterar las que sean objeto principal del
pleito.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 158, 160, 170 Nº 6, 254, 261, 309,
310, 316 y 521.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Partes pueden ampliar, adicionar o modificar las acciones y


excepciones formuladas en la demanda y contestación en los escritos
de réplica y dúplica

De conformidad a lo establecido en el artículo 312 del Código de


Procedimiento Civil, en los escritos de réplica y dúplica podrán las
partes ampliar, adicionar o modificar las acciones y excepciones que
hayan formulado en la demanda y contestación, pero sin que puedan
alterar las que sean objeto principal del pleito. Resulta evidente que
durante el desarrollo de un litigio las partes buscan esclarecer sus
respectivos derechos y debatir aquellas cuestiones que dan lugar a las
principales discrepancias en el juicio. Así respecto de la réplica "Basta
con advertir que, comúnmente, el de mandado promueve en la
contestación temas nuevos o abre polémica alrededor de los hechos
aducidos en la demanda, cuando no intenta desfigurar por completo la
acción y alterar la sustancia misma de la controversia judicial, actitudes
todas que aconsejan la audiencia del demandante con el fin de dilucidar
y precisar tales cuestiones, so pena de dar margen a incidentes o
trámites para alcanzar el conveniente resultado". "En consecuencia,
sólo en estos dos escritos fundamentales del pleito, en que
recíprocamente las partes tienen la oportunidad de refutar las
alegaciones del contradictor y concretar sus propias peticiones, es dable
tener por cerrado el debate y colocar al tribunal en situación de
compenetrarse a fondo de todos los puntos controvertidos y resolverlos
adecuadamente en su sentencia" (Carlos Anabalón Sanderson, Tratado
Práctico de Derecho Procesal Civil Chileno, tomo III, Edit. Arancibia
Hnos., 1963, págs. 193 y 194) (considerando 7º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 17/05/2017, Rol Nº 88947-2016,


Cita online: CL/JUR/3172/2017

2. Demanda y réplica constituyen actos jurídicos procesales


independientes
No debe perderse de vista que la demanda y la réplica constituyen
actos jurídicos procesales independientes. Es por ello que la norma del
artículo 312 en mención tiene por finalidad cardinal la de precaver un
cambio en la causa de pedir en la litis, esto es, una modificación
sustancial de las acciones de la demanda, mediante el abandono de la
primitiva, sustituyéndola por una nueva, pasando a constituir, por ende,
una nueva demanda. De la forma propuesta, se advierte que en la
réplica se le está permitido al actor ampliar, adicionar y modificar las
acciones, reconociendo como único límite, la imposibilidad de que a
través de ello se altere, en los términos expuestos, el fundamento
inmediato del derecho deducido en juicio o como lo define el profesor
Alessandri, el hecho que origina el derecho, la situación jurídica o el
beneficio legal que se pretende y persigue a través del juicio
(considerando 9º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 17/05/2017, Rol Nº 88947-2016,


Cita online: CL/JUR/3172/2017

3. Réplica puede adicionar peticiones a la demanda principal.


Inexistencia de ultra petita

Que el recurso invoca además la causal contemplada en el


artículo 768 Nº 4 del Código de Procedimiento Civil, esto es, haber sido
dada la sentencia ultra petita al condenar a su parte al pago de reajustes
e intereses, pese a que ello no fue pedido en la demanda. Que de los
antecedentes de autos aparece, y así lo señala la sentencia impugnada,
que si bien no hubo tal petición en el escrito de demanda,
posteriormente, al replicar, la parte demandante expresamente solicitó
el pago por tales conceptos, adicionando de este modo las peticiones
vertidas en la demanda, situación que es plenamente procedente atento
lo dispuesto en el artículo 312 del Código de Procedimiento de manera
que al pronunciarse la sentencia sobre ello no incurrió en el vicio
señalado (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/01/2011, Rol Nº 9589-2010,


Cita online: CL/JUR/6132/2011

4. Contestada la demanda en rebeldía del demandado, el tribunal no


puede considerar las alegaciones, defensas o excepciones que se
hayan opuesto en la dúplica
Que de acuerdo al artículo 312 del Código de Procedimiento Civil, en
los escritos de réplica y dúplica las partes sólo podrán ampliar, adicionar
o modificar todo aquello que se haya formulado en la demanda y
contestación, respectivamente, sin alterar las que sean objeto principal
del pleito; y como estos últimos escritos determinan la litis se debe
necesariamente colegir que contestada la demanda en rebeldía del
demandado, el tribunal no puede considerar las alegaciones, defensas
o excepciones que se hayan opuesto en la dúplica, por no haber sido
opuestas en tiempo y forma.

Corte Suprema, 21/01/2003, Rol Nº 1680-2001,


Cita online: CL/JUR/3896/2003

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 8/08/1991, Rol Nº 3404-1991,

Cita online: CL/JUR/1274/1991

ARTÍCULO 313 (303)

Si el demandado acepta llanamente las peticiones del demandante, o si en


sus escritos no contradice en materia substancial y pertinente los hechos
sobre que versa el juicio, el tribunal mandará citar a las partes para oír
sentencia definitiva, una vez evacuado el traslado de la réplica.

Igual citación se dispondrá cuando las partes pidan que se falle el pleito sin
más trámite.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 7º, 78, 254, 261, 262, 309, 311, 318,
326, 432, 433, 584, 685, 795 Nº 7 y 800 Nº 3. Código Civil: artículo 12.

TÍTULO VIII DE LA RECONVENCIÓN

ARTÍCULO 314 (304)


Si el demandado reconviene al actor, deberá hacerlo en el escrito de
contestación, sujetándose a las disposiciones de los artículos 254 y 261; y se
considerará, para este efecto, como demandada la parte contra quien se
deduzca la reconvención.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 254, 261, 309, 316 y 713. Código
Orgánico de Tribunales: artículo 111. Código del Trabajo: artículos 440 y 441. Ley Nº 18.287,
sobre procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículo 10. Ley Nº 19.968, crea los
Tribunales de Familia: artículos 58 y 61 Nº 2.

ARTÍCULO 315 (305)

No podrá deducirse reconvención sino cuando el tribunal tenga


competencia para conocer de ella, estimada como demanda, o cuando sea
admisible la prórroga de jurisdicción. Podrá también deducirse aun cuando
por su cuantía la reconvención deba ventilarse ante un juez inferior.

Para estimar la competencia, se considerará el monto de los valores


reclamados por vía de reconvención separadamente de los que son materia
de la demanda.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 7º. Código Orgánico de Tribunales:


artículos 111, 181 y siguientes.

ARTÍCULO 316 (306)

La reconvención se substanciará y fallará conjuntamente con la demanda


principal, sin perjuicio de lo establecido en el artículo 172.

De la réplica de la reconvención se dará traslado al demandante por seis


días.

No se concederá, sin embargo, en la reconvención aumento extraordinario


de término para rendir prueba fuera de la República cuando no deba
concederse en la cuestión principal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 170, 172, 317, 318, 330, 331 y 432.

ARTÍCULO 317 (307)


Contra la reconvención hay lugar a las excepciones dilatorias enumeradas
en el artículo 303, las cuales se propondrán dentro del término de seis días y
en la forma expresada en el artículo 305.

Acogida una excepción dilatoria, el demandante reconvencional deberá


subsanar los defectos de que adolezca la reconvención dentro de los diez
días siguientes a la fecha de notificación de la resolución que haya acogido
la excepción. Si así no lo hiciere, se tendrá por no presentada la
reconvención, para todos los efectos legales, por el solo ministerio de la
ley.130

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 85, 86, 303, 308 y 314.

TÍTULO IX DE LA PRUEBA EN GENERAL

ARTÍCULO 318 (308)

Concluidos los trámites que deben preceder a la prueba, ya se proceda con


la contestación expresa del demandado o en su rebeldía, el tribunal
examinará por sí mismo los autos y si estima que hay o puede haber
controversia sobre algún hecho substancial y pertinente en el juicio, recibirá
la causa a prueba y fijará en la misma resolución los hechos substanciales
controvertidos sobre los cuales deberá recaer.

Sólo podrán fijarse como puntos de prueba los hechos substanciales


controvertidos en los escritos anteriores a la resolución que ordena recibirla.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 48, 78, 90, 313, 319, 321, 322, 323,
326, 372, 377, 685, 768 Nº 9 y 795. Código Procesal Penal: artículos 275 a 280. Código del
Trabajo: artículo 442. Ley Nº 19.253, sobre Protección, Fomento y Desarrollo de los Indígenas:
artículo 56. Ley Nº 19.947, Ley de Matrimonio Civil: artículo 24. Ley Nº 19.968, crea los
Tribunales de Familia: artículo 61 Nº 7. Código Tributario: artículo 132.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Contenido de la resolución que recibe la causa a prueba

El artículo 318 del Código de Procedimiento Civil, en su inciso 1º,


dispone que concluidos los trámites que deben preceder a la prueba, el
tribunal examinará por sí mismo los autos y si estima que hay o puede
haber controversia sobre algún hecho substancial y pertinente en el
juicio, recibirá la causa a prueba y fijará en la misma resolución los
hechos substanciales controvertidos sobre los cuales deberá recaer. La
resolución que recibe la causa a prueba debe contener dos menciones:
a) la recepción de la causa a prueba y b) la fijación de los hechos
sustanciales, pertinentes y controvertidos. Que los hechos sustanciales,
pertinentes y controvertidos debe fijarlos el tribunal en la resolución que
recibe la causa a prueba. Tales hechos debe extraerlos el tribunal de
los escritos que las partes han presentado durante el periodo de
discusión y en los cuales han señalado los hechos que configuran las
pretensiones, alegaciones o defensas, excepciones y
contrapretensiones. El objeto de la prueba está constituido por los
hechos substanciales, pertinentes y controvertidos, y sobre ellos debe
recaer la prueba que se rinda en el proceso. "El juez debe fijar los puntos
de prueba en conformidad a los hechos controvertidos en el juicio y que
sean directamente pertinentes y necesarios al fallo que deba
pronunciarse." (C. Santiago. 30 noviembre 1903. Revista de Derecho y
Jurisprudencia, tomo I, sección 2ª, página 170) (considerandos 4º y 5º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 29/03/2011, Rol Nº 2245-2009,

Cita online: CL/JUR/9802/2011

2. Término probatorio es común e inicia cuando son notificadas todas


las partes de la resolución que recibe la causa a prueba

El término probatorio es común, de manera que para que éste se inicie


es necesario que la aludida resolución se notifique a todas las partes
que intervienen en el juicio. En efecto, vencida la etapa de discusión
procedía avanzar hacia la fase de recepción de la prueba, cuya apertura
sólo se inicia con la notificación a las partes de la resolución que recibe
la causa a prueba, por lo que de conformidad con lo dispuesto en el
artículo 38 del Código de Procedimiento Civil, en cuanto establece que
las resoluciones judiciales producen efectos en virtud de la notificación
hecha con arreglo a la ley, el único acto que manifiesta inequívocamente
la voluntad de las partes de continuar el juicio es la notificación de la
mencionada resolución a todas ellas, iniciando la etapa probatoria que
dé curso progresivo a los autos. En síntesis, la resolución que recibe la
causa a prueba debe ser notificada a todas las partes del proceso para
que sus destinatarios puedan tomar conocimiento de la apertura de la
nueva fase procesal, con lo cual sus derechos a defensa y audiencia
legal queden asegurados (considerandos 6º a 8º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/06/2018, Rol Nº 5239-2018,


Cita online: CL/JUR/2605/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 24/02/2020, Rol Nº18573-2019,

Cita online: CL/JUR/11085/2020

— Corte Suprema, 23/01/2018, Rol Nº 12237-2017,

Cita online: CL/JUR/355/2018

3. No es necesario que las partes sean notificadas conjuntamente, o en


la misma oportunidad

Conforme a los artículos 318, 319 y 320 del Código de Procedimiento


Civil, el término probatorio comienza a correr: a) desde la última
notificación por cédula de la resolución que recibió la causa a prueba; o
b) desde la notificación por el estado diario de la resolución que se
pronuncia sobre la última solicitud de reposición del auto de prueba. De
lo anterior se desprenden diversas consecuencias: la primera, que por
tratarse de un plazo común, según el artículo 65 inciso 2º del citado
Código, el término probatorio comienza a correr desde la última
notificación a las partes; y en segundo lugar, que no es posible por tanto
que el término probatorio se inicie si no están notificadas todas las
partes del juicio. Sin perjuicio de lo anterior, si bien es necesario notificar
del auto de prueba a todas las partes que figuran en el juicio, ello no
significa que tengan que ser notificadas conjuntamente, o en la misma
oportunidad, de lo que se sigue que sendas diligencias de notificación
son útiles para el curso progresivo (considerando 4º de la disidencia de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 31/01/2018, Rol Nº 5052-2017,


Cita online: CL/JUR/525/2018
4. Existiendo hechos sustanciales, pertinentes y controvertidos, el
Tribunal tiene el deber de recibir la causa a prueba

Aunque las partes disponen de medios de impugnación para solicitar


que se modifiquen los puntos de prueba su falta de ejercicio o su
ejercicio inoportuno, no sanea el vicio de omisión que importa la práctica
defectuosa del trámite atendida la trascendencia del mismo; pues
existiendo hechos sustanciales, pertinentes y controvertidos, el Tribunal
tiene el deber de recibir la causa a prueba, fijando todos los hechos
acerca de los que estima que hay o pueda haber controversia, según
así lo dispone el artículo 318 del Código de Procedimiento Civil. La
señalada omisión constituye un vicio que da origen a la causal de
casación en la forma contemplada en el artículo 768 Nº 9 del Código de
Procedimiento Civil, en relación con su artículo 795 Nº 3, en cuanto se
ha faltado un trámite declarado esencial por la ley, esto es, el
recibimiento de la causa a prueba. En consecuencia, actuando de oficio,
se invalida la sentencia impugnada (considerandos 4º a 6º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 27/12/2019, Rol Nº 446-2018,

Cita online: CL/JUR/12402/2019

ARTÍCULO 319

Las partes podrán pedir reposición, dentro de tercero día, de la resolución


a que se refiere el artículo anterior. En consecuencia, podrán solicitar que se
modifiquen los hechos controvertidos fijados, que se eliminen algunos o que
se agreguen otros.

El tribunal se pronunciará de plano sobre la reposición o la tramitará como


incidente.

La apelación en contra de la resolución del artículo 318 sólo podrá


interponerse en el carácter de subsidiaria de la reposición pedida y para el
caso de que ésta no sea acogida. La apelación se concederá sólo en el efecto
devolutivo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 89, 90, 91, 181, 189, 192, 194, 318,
326 y 339. Código del Trabajo: artículo 442. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia:
artículo 67 Nº 1. Código Tributario: artículo 132.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Tribunal debe obrar de oficio al resolver reposición interpuesta por


actor en contra de interlocutoria de prueba

En cuanto al impulso del procedimiento civil, si bien la regla general


es la vigencia del principio dispositivo recogido en el artículo 10 del
Código Orgánico de Tribunales, de acuerdo con el cual los tribunales no
pueden ejercer su ministerio sino a petición de parte salvo en los casos
en que la ley los faculte para proceder de oficio, dicho principio no
resulta absoluto, desde que la ley procesal civil entrega al tribunal de la
causa diversas facultades para obrar de oficio, encontrándose dentro
de ellas la hipótesis normativa prevista en el artículo 319 del Código de
Procedimiento Civil que, con ocasión de la dictación de la resolución
que recibe la causa a prueba, señala, en lo pertinente: "Las partes
podrán pedir reposición, dentro de tercero día, de la resolución a que se
refiere el artículo anterior.... El tribunal se pronunciará de plano sobre la
reposición o la tramitará como incidente...". En consecuencia, en el
estadio procesal en que se encontraba la causa, el tribunal debió, de
propia iniciativa, sin necesidad de petición de la parte demandante o de
alguna otra actuación, resolver la reposición interpuesta por el actor en
contra de la interlocutoria de prueba, ya sea, pronunciándose de plano
o tramitándola como incidente, de conformidad con el referido
artículo 319 del código de enjuiciamiento civil (considerandos 6º y 7º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 28/11/2019, Rol Nº 6243-2018,


Cita online: CL/JUR/6816/2019

ARTÍCULO 320 (309)

Desde la primera notificación de la resolución a que se refiere el


artículo 318, y hasta el quinto día de la última, cuando no se haya pedido
reposición en conformidad al artículo anterior y en el caso contrario, dentro
de los cinco días siguientes a la notificación por el estado de la resolución
que se pronuncie sobre la última solicitud de reposición, cada parte deberá
presentar una minuta de los puntos sobre que piense rendir prueba de
testigos, enumerados y especificados con claridad y precisión.131
Deberá también acompañar una nómina de los testigos de que piensa
valerse, con expresión del nombre y apellido, domicilio, profesión u oficio. La
indicación del domicilio deberá contener los datos necesarios a juicio del
juzgado, para establecer la identificación del testigo.

Si habiéndose pedido reposición ya se hubiere presentado lista de testigos


y minuta de puntos por alguna de las partes, no será necesario presentar
nuevas lista ni minuta, salvo que, como consecuencia de haberse acogido el
recurso, la parte que las presenta estime pertinente modificarlas.132

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 48, 50, 90, 181, 313, 323, 328, 331,
339, 356 y siguientes, 372, 377, 551, 554, 555, 578, 592, 607, 686 y 795. Código Procesal
Penal: artículo 259. Código del Trabajo: artículo 443. Código de Minería: artículo 235.
Ley Nº 18.287, sobre procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículo 12. Código
Tributario: artículo 132.

ARTÍCULO 321 (310)

No obstante lo dispuesto en el artículo anterior, es admisible la ampliación


de la prueba cuando dentro del término probatorio ocurre algún hecho
substancialmente relacionado con el asunto que se ventila.

Será también admisible la ampliación a hechos verificados y no alegados


antes de recibirse a prueba la causa, con tal que jure el que los aduce que
sólo entonces han llegado a su conocimiento.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 84, 86, 89, 90, 207, 310, 322, 326,
339 y 431. Código Procesal Penal: artículo 336.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Código sólo permite que en la dúplica se puedan ampliar, adicionar o


modificar las excepciones formuladas en la contestación, pero no
plantear excepciones nuevas

El caso fortuito y la fuerza mayor, importan una excepción perentoria


que, como tal, debió en conformidad al artículo 309 Nº 3 del Código de
Procedimiento Civil, haberse opuesto al contestar la demanda y no en
el escrito de dúplica, como lo hizo la demandada. El artículo 321 del
mismo código sólo permite que en la dúplica se puedan ampliar,
adicionar o modificar las excepciones formuladas en la contestación,
pero no plantear excepciones nuevas. En autos, no se alegó
oportunamente (considerandos 2º y 5º sentencia Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 19/08/2004, Rol Nº 5682-2003,


Cita online: CL/JUR/2362/2004

ARTÍCULO 322 (311)

Al responder la otra parte el traslado de la solicitud de ampliación, podrá


también alegar hechos nuevos que reúnan las condiciones mencionadas en
el artículo anterior, o que tengan relación con los que en dicha solicitud se
mencionan.

El incidente de ampliación se tramitará en conformidad a las reglas


generales, en ramo separado, y no suspenderá el término probatorio.

Lo dispuesto en este artículo se entiende sin perjuicio de lo que el


artículo 86 establece.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 84, 85, 86, 87, 89, 90, 326, 339 y 372.

ARTÍCULO 323 (312)

Cuando haya de rendirse prueba en un incidente, la resolución que lo


ordene determinará los puntos sobre que debe recaer, y su recepción se hará
en conformidad a las reglas establecidas para la prueba principal.

La referida resolución se notificará por el estado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 50, 89, 90, 134, 318, 341 y siguientes
y 377.

ARTÍCULO 324 (313)

Toda diligencia probatoria debe practicarse previo decreto del tribunal que
conoce en la causa, notificado a las partes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 38, 59, 69, 70, 326, 758 Nº 9, 795
Nº 6 y 906 Nº 4.
ARTÍCULO 325 (314)

En los tribunales colegiados podrán practicarse las diligencias probatorias


ante uno solo de sus miembros comisionado al efecto por el tribunal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 70 y 365.

ARTÍCULO 326 (315)

Es apelable la resolución en que explícita o implícitamente se niegue el


trámite de recepción de la causa a prueba, salvo el caso del inciso 2º del
artículo 313. Es apelable sólo en el efecto devolutivo la que acoge la
reposición a que se refiere el artículo 319.

Son inapelables la resolución que dispone la práctica de alguna diligencia


probatoria y la que da lugar a la ampliación de la prueba sobre hechos nuevos
alegados durante el término probatorio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 188, 192, 194 Nº 2, 313, 318, 319,
320, 321, 322 y 324.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Acogida la reposición, como ocurrió en los autos en que incide el


presente recurso de queja, la parte que se considere agraviada con lo
resuelto sólo puede impugnar la decisión mediante el recurso de
apelación

Que conforme al artículo 319 del Código de Procedimiento Civil las


partes pueden pedir reposición del auto de prueba para que se
modifiquen los hechos controvertidos fijados por el tribunal, se eliminen
algunos o se agreguen otros. Acogida la reposición, como ocurrió en los
autos en que incide el presente recurso de queja, la parte que se
considere agraviada con lo resuelto sólo puede impugnar la decisión
mediante el recurso de apelación, de acuerdo con lo que previene la
segunda parte del inciso primero del artículo 326 del Código que se
viene citando, porque el de reposición fue previsto únicamente en
relación con el auto de prueba en la primera de las disposiciones
referidas (considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 21/12/1989, Rol Nº 13491-1989,
Cita online: CL/JUR/887/1989

2. Es apelable la resolución que niega la práctica de alguna diligencia


probatoria

La negativa a la medida probatoria altera la substanciación de esta


causa, es pertinente tener en cuenta que para los efectos de interponer
el recurso de casación en la forma y según el artículo 768 Nº 9, éste
resulta procedente cuando se hubiere omitido un trámite o diligencia
declarados esenciales por la ley, y entre aquéllos se encuentra la
práctica de diligencias probatorias cuya omisión podría producir
indefensión. Dada la redacción del precepto, basta para que se cumpla
la exigencia, que la omisión pudiere producir indefensión, aun cuando
de hecho ello no aconteciere. En otros términos, es la mera posibilidad
de la no defensa, lo que hace estimar al legislador como causa válida
para interponer un recurso de casación. Que a lo anterior cabe agregar
la exigencia del artículo 773 del mismo cuerpo legal citado, en el sentido
que para la admisión de dicho recurso de casación en la forma, es
indispensable que quien lo entabla haya reclamado de la falta,
ejerciendo oportunamente y en todos sus grados los recursos
establecidos por la ley. Que por consiguiente, de no haber apelado la
demandante en la forma que lo hizo, tal vez habría estado impedida de
ejercer ese recurso, por no haber ejercido su facultad en forma oportuna
y en todos sus grados, como lo exige la disposición legal en referencia.
Que es efectivo que los decretos no son apelables cuando ordenan
trámites necesarios para la substanciación regular del juicio,
entendiéndose que son trámites necesarios aquellos por cuya omisión
procede el recurso de casación en la forma y que substanciación regular
del juicio es aquella que está de acuerdo con las normas de
procedimiento establecidas por la ley. Que estos razonamientos vienen
a demostrar que la resolución de la que apeló la actora, es de aquellas
que pueden constituir un trámite necesario del pleito y que, por ende, su
omisión podría llevar a dicha parte, hipotéticamente al menos, a la
indefensión, aun cuando ésta de hecho no se produzca. Si a lo anterior
se adiciona que el inciso 2º del artículo 326 del Código de
Procedimiento Civil señala que es inapelable la resolución que dispone
la práctica de alguna diligencia probatoria, legítimo resultará concluir
que la que niega lugar a ella es apelable (considerandos 5º a 9º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Concepción, 24/08/2000, Rol Nº 27-2000,

Cita online: CL/JUR/2039/2000

TÍTULO X DEL TÉRMINO PROBATORIO

ARTÍCULO 327

Todo término probatorio es común para las partes y dentro de él deberán


solicitar toda diligencia de prueba que no hubieren pedido con anterioridad a
su iniciación.

En los casos contemplados en los artículos 310, 321 y 322 el tribunal, de


estimar necesaria la prueba, concederá un término especial de prueba que
se regirá por las normas del artículo 90, limitándose a quince días el plazo
total que establece en su inciso tercero y sin perjuicio de lo establecido en el
artículo 431.133

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 65, 66, 90, 310, 321, 322, 328, 329,
339, 340, 348, 385, 412 y 431. Código Procesal Penal: artículos 295 a 297. Código de
Aeronáutica: artículo 187. Código del Trabajo: artículo 444. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales
de Familia: artículo 61 Nºs. 8 y 9.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La regla general está constituida por los plazos individuales, la


excepción los plazos comunes. Ejemplo típico de plazo común es el
término probatorio

La regla general en nuestro Derecho Procesal positivo es que los


plazos sean individuales; la excepción es que sean comunes, y siendo
excepción, tendrán que estar contemplados expresamente en la ley.
Ejemplo típico de un término común es el término probatorio, el cual,
según expresa disposición del artículo 327 del Código de Procedimiento
Civil, es común para las partes" (Manual de Derecho Procesal, Tomo III
Sexta Edición. Páginas 82 y 83); En igual sentido se ha pronunciado la
jurisprudencia, pudiendo citarse a vía de ejemplo lo sostenido por la
Iltma. Corte de Apelaciones de Talca en una situación similar, aunque
refiriéndose al plazo para oponer excepciones dilatorias. Que, para
resolver la cuestión planteada se debe tener presente que el
artículo 260 del Código de Procedimiento Civil establece "Si los
demandados son varios, sea que obren separadamente o
conjuntamente, el término para contestar la demanda correrá para todos
a la vez, y se contará hasta que expire el último término parcial que
corresponda a los notificados". Por su parte el artículo 305 de este
mismo Código establece. "Las excepciones dilatorias deben oponerse
todas en un mismo escrito y dentro del término de emplazamiento fijado
por los artículos 258 y 260". En estas circunstancias, cualquiera de los
demandados está facultado desde su notificación para deducir las
excepciones dilatorias dentro del plazo para contestar la demanda,
aunque el plazo todavía no ha empezado a correr, y por ende, no ha
terminado por no haberse notificado la demanda a los demás
demandados. En esta situación se esperará el término de este último
plazo para dar por evacuado el trámite de la contestación (Rol Nº 455-
2011 Iltma. Corte de Apelaciones de Talca".

Corte de Apelaciones de Concepción; 5/07/2012, Rol Nº 309-2012,

Cita online: CL/JUR/4305/2012

ARTÍCULO 328 (317)

Para rendir prueba dentro del territorio jurisdiccional del tribunal en que se
sigue el juicio tendrán las partes el término de veinte días.134

Podrá, sin embargo, reducirse este término por acuerdo unánime de las
partes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 66, 90, 159, 318, 327, 334, 336, 339,
340, 341, 348, 376, 385, 402, 412, 431 y 468. Código Procesal Penal: artículo 296. Ley
Nº 19.253, sobre Protección, Fomento y Desarrollo de los Indígenas: artículo 56. Código
Tributario: artículo 132.

ARTÍCULO 329 (318)

Cuando haya de rendirse prueba en otro territorio jurisdiccional o fuera de


la República, se aumentará el término ordinario a que se refiere el
artículo anterior con un número de días igual al que concede el artículo 259
para aumentar el de emplazamiento.135
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 66, 90, 259, 318, 329, 332, 333, 335,
336, 341, 468, 682, 686, 693, 697, 698 Nº 3, 697, 748 y 753. Código Orgánico de Tribunales:
artículo 223. Código Tributario: artículo 132.

ARTÍCULO 330 (319)

El aumento extraordinario para rendir prueba dentro de la República se


concederá siempre que se solicite, salvo que haya justo motivo para creer
que se pide maliciosamente con el solo propósito de demorar el curso del
juicio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 69, 316, 335 al 338.

ARTÍCULO 331 (320)

No se decretará el aumento extraordinario para rendir prueba fuera de la


República sino cuando concurran las circunstancias siguientes:

1ª Que del tenor de la demanda, de la contestación o de otra pieza del


expediente aparezca que los hechos a que se refieren las diligencias
probatorias solicitadas han acaecido en el país en que deben
practicarse dichas diligencias, o que allí existen los medios probatorios que
se pretende obtener;

2ª Que se determine la clase y condición de los instrumentos de que el


solicitante piensa valerse y el lugar en que se encuentran; y

3ª Que, tratándose de prueba de testigos, se exprese su nombre y


residencia o se justifique algún antecedente que haga presumible la
conveniencia de obtener sus declaraciones.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 69, 316, 335 al 338.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procedencia del término probatorio extraordinario para rendir prueba


fuera de la República

Según las normas de interpretación de las Leyes del Código Civil, el


artículo 19 de dicho cuerpo legal señala: "Cuando el sentido de la ley es
claro, no se desatenderá su tenor literal, a pretexto de consultar su
espíritu. Pero bien se puede, para interpretar una expresión obscura de
la ley, recurrir a su intención o espíritu, claramente manifestados en ella
misma, o en la historia fidedigna de su establecimiento." En ese sentido,
la norma en cuestión, está redactada de forma idéntica en el Código de
Procedimiento Civil del año 1902. Luego, el artículo 20 del Código Civil
expresa "Las palabras de la ley se entenderán en su sentido natural y
obvio, según el uso general de las mismas palabras". A su vez, el
diccionario de la Real Academia Española, define la disyunción "o"
como "Conjunción coordinante que tiene valor disyuntivo cuando
expresa alternativa entre dos opciones; otras veces expresa
equivalencia; también se usa para coordinar los dos últimos elementos
de una ejemplificación." De lo anterior se logra interpretar que el
numeral 3 del artículo 331 del Código de Procedimiento Civil, establece
manifiestamente una disyunción, una alternativa entre señalar el
nombre y residencia de los testigos o que se justifique algún
antecedente que haga presumible la conveniencia de obtener sus
declaraciones. De esta forma, al cumplir el demandado el requisito de
individualizar de forma completa a los testigos que depondrán en
Noruega, ha actuado conforme a la exigencia del numeral ordinal 3 del
artículo 331 del Código de Enjuiciamiento Civil (considerando 8º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Puerto Montt, 26/03/2019, Rol Nº 992-2018,

Cita online: CL/JUR/1765/2019

ARTÍCULO 332 (321)

El aumento extraordinario para rendir prueba deberá solicitarse antes de


vencido el término ordinario, determinando el lugar en que dicha prueba debe
rendirse.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 66, 67, 328, 336 y 468.

ARTÍCULO 333 (322)

Todo aumento del término ordinario continuará corriendo después de éste


sin interrupción y sólo durará para cada localidad el número de días fijado en
la tabla respectiva.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 66, 67, 194 Nº 2, 259, 328, 336, 348,
385, 412 y 468.

ARTÍCULO 334 (323)

Se puede, durante el término ordinario, rendir prueba en cualquier parte de


la República y fuera de ella.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 90, 329, 339 y 340.

ARTÍCULO 335 (324)

Vencido el término ordinario, sólo podrá rendirse prueba en aquellos


lugares para los cuales se haya otorgado aumento extraordinario del término.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 90, 329, 336, 337, 338, 339 y 340.

ARTÍCULO 336 (325)

El aumento extraordinario para rendir prueba dentro de la República se


otorgará con previa citación; el que deba producir efecto fuera del país se
decretará con audiencia de la parte contraria.

Los incidentes a que dé lugar la concesión de aumento extraordinario se


tramitarán en pieza separada y no suspenderán el término probatorio.

Con todo, no se contarán en el aumento extraordinario los días


transcurridos mientras dure el incidente sobre concesión del mismo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 69, 82, 89, 90, 333, 339 y 340.

ARTÍCULO 337 (326)

La parte que haya obtenido aumento extraordinario del término para rendir
prueba dentro o fuera de la República, y no la rinda, o sólo rinda una
impertinente, será obligada a pagar a la otra parte los gastos que ésta haya
hecho para presenciar las diligencias pedidas, sea personalmente, sea por
medio de mandatarios.
Esta condenación se impondrá en la sentencia definitiva y podrá el tribunal
exonerar de ella a la parte que acredite no haberla rendido por motivos
justificados.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 138, 139, 140, 145, 330, 331 y 336.

ARTÍCULO 338 (327)

Siempre que se solicite aumento extraordinario para rendir prueba fuera de


la República, exigirá el tribunal, para dar curso a la solicitud, que se deposite
en la cuenta corriente del tribunal una cantidad cuyo monto no podrá fijarse
en menos de medio sueldo vital ni en más de dos sueldos vitales.136

Sin perjuicio de lo que dispone el artículo anterior, se mandará aplicar al


Fisco la cantidad consignada si resulta establecida en el proceso alguna de
las circunstancias siguientes:

1ª Que no se ha hecho diligencia alguna para rendir la prueba pedida;

2ª Que los testigos señalados, en el caso del artículo 331, no tenían


conocimiento de los hechos, ni se han hallado en situación de conocerlos; y

3ª Que los testigos o documentos no han existido nunca en el país en que


se ha pedido que se practiquen las diligencias probatorias.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 138, 331 y 336. Código Orgánico de
Tribunales: artículos 517 y 519.

ARTÍCULO 339 (328)

El término de prueba no se suspenderá en caso alguno, salvo que todas


las partes lo pidan. Los incidentes que se formulen durante dicho término o
que se relacionen con la prueba, se tramitarán en cuaderno separado.

Si durante él ocurren entorpecimientos que imposibiliten la recepción de la


prueba, sea absolutamente, sea respecto de algún lugar determinado, podrá
otorgarse por el tribunal un nuevo término especial por el número de días que
haya durado el entorpecimiento y para rendir prueba sólo en el lugar a que
dicho entorpecimiento se refiera.
No podrá usarse de este derecho si no se reclama del obstáculo que impide
la prueba en el momento de presentarse o dentro de los tres días siguientes.

Deberá concederse un término especial de prueba por el número de días


que fije prudencialmente el tribunal, y que no podrá exceder de ocho, cuando
tenga que rendirse nueva prueba, de acuerdo con la resolución que dicte el
tribunal de alzada, acogiendo la apelación subsidiaria a que se refiere el
artículo 319. Para hacer uso de este derecho no se necesita la reclamación
ordenada en el inciso anterior. La prueba ya producida y que no esté afectada
por la resolución del tribunal de alzada tendrá pleno valor.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 4º, 66, 85, 87, 89, 120, 159, 319, 322,
327, 328, 333, 336, 340, 376 y 402. Código Tributario: artículo 132.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Concepto de entorpecimiento

Entorpecimiento, según el diccionario de la Real Academia de la


Lengua, significa acción y efecto de entorpecer o entorpecerse; y
entorpecer, poner torpe, turbar, obscurecer el entendimiento, retardar,
dificultar. De lo anterior se colige, que el en torpecimiento se presenta,
según la extensión que dure el obstáculo, esto es, será un instante, un
día o varios días. En autos, el entorpecimiento duró todo el tiempo que
el expediente se mantuvo en la Corte y hasta que el tribunal a quo dictó
el cúmplase, decreto que autoriza a las partes para acceder
normalmente a su conocimiento. De esta forma, el entorpecimiento cesó
cuando el proceso quedó nuevamente a disposición de las partes, esto
es, después del cúmplase, ocurrido el 8 de enero de 2010, de manera
que el plazo de tres días hábiles para pedir término especial venció el
12 de ese mes y año, y por consiguiente el presentado por el
demandante el 12 de enero de enero de 2010, a fs. 729, lo fue dentro
de plazo legal (considerando 7º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 25/03/2011, Rol Nº 1026-2009,

Cita online: CL/JUR/10385/2011

2. Tribunal que rechaza incidente de entorpecimiento solicitado por la


demandante
La solicitud oportuna de citación de los testigos resulta un requisito
esencial en materia civil para la procedencia de una nueva audiencia
con el fin de tomar la declaración del testigo, previo reclamo del
entorpecimiento por no haber comparecido éste, y, frente a la
inasistencia del testigo legalmente citado y la inminencia del
vencimiento del término probatorio, las partes no tienen otra alternativa
que impetrar del juez el auxilio de la fuerza pública para hacerlo
comparecer a una nueva audiencia, previo el reclamo del
entorpecimiento a que ello de lugar. De los hechos establecidos en los
motivos primero y segundo de esta resolución, se constata con claridad
que respecto del testigo, la parte demandante e incidentista no realizó
todas las gestiones que eran de su cargo para lograr la comparecencia
de aquel a las audiencias de prueba fijadas por el tribunal, pues no lo
citó mediante receptor judicial como en derecho correspondía, no
encontrándose, entonces, legalmente citado, resultando improcedente
acoger el entorpecimiento alegado por la actora así como señalar un
nuevo día y hora para la declaración del referido testigo, habida cuenta
que, para ello ocurra es requisito previsto expresamente por el
legislador que el testigo se encuentre legalmente citado
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 13/06/2019, Rol Nº 531-2019,

Cita online: CL/JUR/3481/2019

ARTÍCULO 340 (329)

Las diligencias de prueba de testigos sólo podrán practicarse dentro del


término probatorio.

Sin embargo, las diligencias iniciadas en tiempo hábil y no concluidas en él


por impedimento cuya remoción no haya dependido de la parte interesada,
podrán practicarse dentro de un breve término que el tribunal señalará, por
una sola vez, para este objeto. Este derecho no podrá reclamarse sino dentro
del término probatorio o de los tres días siguientes a su vencimiento.

Siempre que el entorpecimiento que imposibilite la recepción de la prueba


sea la inasistencia del juez de la causa, deberá el secretario, a petición verbal
de cualquiera de las partes, certificar el hecho en el proceso y con el mérito
de este certificado fijará el tribunal nuevo día para la recepción de la prueba.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 207, 328, 334, 335, 339 y 356.
Código Orgánico de Tribunales: artículos 311, 312, 313, 379 y 388.

TÍTULO XI DE LOS MEDIOS DE PRUEBA EN PARTICULAR

§ 1. Disposiciones generales

ARTÍCULO 341 (330)

Los medios de prueba de que puede hacerse uso en juicio son:

Instrumentos;

Testigos;

Confesión de parte;

Inspección personal del tribunal;

Informes de peritos; y

Presunciones.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 159, 344, 346, 373, 398, 429, 464,
768 Nº 9 y 795 Nº 5. Código Civil: artículos 17, 18, 704, 1699 a 1701 y 1706. Código Penal:
artículos 194 y 196. Código Orgánico de Tribunales: art ículos 399, 402, 403, 412, 421, y 426.
Ley Nº 18.845, establece Sistemas de Microcopia o Micrograbación de Documentos: artículo 4.
Ley Nº 19.799 sobre Documentos Electrónicos, Firma Electrónica y Servicios de Certificación:
artículos 3 a 7. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia: artículos 28 y 29.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Artículo 341 del Código de Procedimiento Civil, no constituye norma


reguladora de la prueba

Para un adecuado análisis de los errores de derecho denunciados por


el recurrente, debe consignarse, en primer lugar, que las leyes
reguladoras de la prueba, como lo ha reconocido reiteradamente esta
Corte, se entienden vulneradas, esencialmente, cuando los
sentenciadores invierten el onus probandi, rechazan las pruebas que la
ley admite, aceptan las que la ley rechaza, desconocen el valor
probatorio de las que se produjeron en el proceso cuando la ley le
asigna uno determinado de carácter obligatorio o alteran el orden de
precedencia que la ley le diere. Se ha repetido que ellas constituyen
normas básicas de juzgamiento, que contienen deberes, limitaciones o
prohibiciones a que deben sujetarse los sentenciadores. Luego, los
jueces del fondo son soberanos para apreciar las pruebas, dentro del
marco establecido por las normas pertinentes. Por ello, no son
susceptibles de ser revisadas por la vía de la casación las decisiones
de los sentenciadores basadas en disposiciones que entregan
libremente la justipreciación de los diversos elementos probatorios. Que
conforme lo señalado en el considerando precedente, debe
desestimarse el recurso en cuanto está fundado en la infracción del
artículo 1698 del Código Civil, por cuanto, esta norma se infringe
cuando la sentencia obliga a una de las partes a probar un hecho que
corresponde acreditar a su contraparte, esto es, si se altera el onus
probandi, lo que a la luz de los antecedentes, se observa, no ha
ocurrido. Que luego de lo dicho, resulta fundamental precisar que el
artículo 341 del Código de Procedimiento Civil no reviste el carácter de
norma reguladora de la prueba, toda vez que se limita únicamente a
enumerar los medios de prueba de que puede hacerse uso en juicio
(considerandos 4º a 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/05/2012, Rol Nº 11931-2011, Cita online:


CL/JUR/3947/2012

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 23/05/2017, Rol Nº 5021-2017,

Cita online: CL/JUR/3218/2017

— Corte Suprema, 16/11/2000, Rol Nº 3900-2000,

Cita online: CL/JUR/4365/2000

2. Tribunal se encuentra habilitado para ocupar todos los medios de


prueba que la ley autoriza para tener por acreditados los hechos
controvertidos
Que señalado lo anterior es pertinente precisar que los medios
probatorios que la ley contempla para ser utilizados en juicio se
encuentran contemplados en el artículo 341 del Código de
Procedimiento Civil, a saber: instrumentos, testigos, confesión de parte,
inspección personal del tribunal, informe de peritos y presunciones.
Resulta que una regla básica consiste en que no hay en la legislación
civil pertinente norma que excluya de modo general a alguno de los
medios recién consignados, por lo que debe asentarse que el tribunal
sentenciador se encuentra habilitado para ocupar todos los medios de
prueba que la ley autoriza para tener por acreditados los hechos
controvertidos, salvas las excepciones legales (considerando 11º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/09/2013, Rol Nº 2150-2013,


Cita online: CL/JUR/2899/2013

§ 2. De los instrumentos

ARTÍCULO 342 (331)

Serán considerados como instrumentos públicos en juicio, siempre que en


su otorgamiento se hayan cumplido las disposiciones legales que dan este
carácter:

1º Los documentos originales;

2º Las copias dadas con los requisitos que las leyes prescriban para que
hagan fe respecto de toda persona, o, a lo menos, respecto de aquella contra
quien se hacen valer;

3º Las copias que, obtenidas sin estos requisitos, no sean objetadas como
inexactas por la parte contraria dentro de los tres días siguientes a aquel en
que se le dio conocimiento de ellas;

4º Las copias que, objetadas en el caso del número anterior, sean


cotejadas y halladas conforme con sus originales o con otras copias que
hagan fe respecto de la parte contraria; y
5º Los testimonios que el tribunal mande agregar durante el juicio,
autorizados por su secretario u otro funcionario competente y sacados de los
originales o de copias que reúnan las condiciones indicadas en el número
anterior.

6º Los documentos electrónicos suscritos mediante firma electrónica


avanzada.137

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 159, 344, 346, 373, 398, 429, 464,
768 Nº 9 y 795 Nº 5. Código Civil: artículos 17, 18, 704, 1699 a 1701 y 1706. Código Penal:
artículos 194 y 196. Código Orgánico de Tribunales: artículos 399, 402, 403, 421, y 426. Ley
Nº 18.845, establece Sistemas de Microcopia o Micrograbación de Documentos: artículo 4. Ley
Nº 19.799 sobre Documentos Electrónicos, Firma Electrónica y Servicios de Certificación:
artículos 3 a 7. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia: artículos 28 y 29.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Las disposiciones contenidas en los artículos 342 a 355 no tienen el


carácter de leyes reguladoras de la prueba

Además, las mismas normas que cita el recurrente como reguladoras


de la prueba, no tienen tal carácter, en la medida que ellas sólo facultan
a los jueces del mérito para recibir esos medios de prueba, sin
establecer una valoración legal de los mismos; en consecuencia, el
recurso adolece de una manifiesta falta de fundamentos, y en tales
circunstancias este Tribunal de Casación no puede examinar lo actuado
por los jueces del fondo (considerando 2º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte Suprema, 4/09/1996, Rol Nº 2785-1996,


Cita online: CL/JUR/1356/1996

2. Improcedencia de considerar instrumentos públicos todos los


documentos que integran el expediente tramitado en sede de Policía
Local

Respecto a la vulneración del artículo 342 Nº 2 del Código de


Procedimiento Civil, el recurso no explica en relación a qué documentos
se refiere y cómo se produciría su infracción y no contiene una norma
especial de valoración probatoria, pues sólo precisa el carácter de
instrumento público que debe atribuirse a las copias dadas con los
requisitos exigidos para su otorgamiento, ya sea para que hagan fe
respecto de toda persona, o, al menos, respecto de aquella contra quien
se hacen valer. Efectivamente, de esta sola norma no puede
desprenderse que todos los documentos que integran el expediente
tramitado en sede de Policía Local deban ser considerados
instrumentos públicos, y merezcan el mérito probatorio que señala el
artículo 1700 del Código Civil (considerando 9º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 23/10/2018, Rol Nº 37419-2017,


Cita online: CL/JUR/6004/2018

3. Documentos electrónicos pueden ser presentados en juicio como


medios de prueba

Además, en relación a la naturaleza del Informe IDIEM, que la


Ley Nº 19.799 propicia una equivalencia del medio electrónico al
soporte de papel y considera como iguales, para todos los efectos
jurídicos, a un documento de papel y a uno de formato electrónico, de
manera de reputar a los electrónicos como escritos, del mismo modo
que si lo fueran en soporte de papel. De este modo el legislador buscó
impedir la discriminación de los medios electrónicos en favor de los
documentos materiales, no pudiendo restar validez a una firma, un acto
o registro por el sólo hecho de constar en medios electrónicos. Por
ende, los documentos electrónicos pueden ser presentados en juicio
como medios de prueba (artículos 342 Nº 6 y 348 bis del Código de
Procedimiento Civil). No obstante, la ley en mención no trata de crear
una nueva categoría de documentos, distintos a los públicos o los
privados. Es por la razón recién anotada que, aun cuando con los
elementos que menciona quien recurre se pudiera constatar que el
Informe IDIEM cuenta con firma electrónica avanzada, su valor
probatorio será el de plena prueba "de acuerdo a las reglas generales",
como lo previenen los artículos 4 y 5 Nºs. 1 y 2 de la Ley Nº 19.799
(considerando 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 23/07/2019, Rol Nº 1248-2018,


Cita online: CL/JUR/4174/2019

ARTÍCULO 343 (332)


Cuando las copias agregadas sólo tengan una parte del instrumento
original, cualquiera de los interesados en el pleito podrá exigir que se agregue
el todo o parte de lo omitido, a sus expensas, sin perjuicio de lo que se
resuelva sobre pago de costas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 25, 26, 144, 342 Nº 2, 3 y 4, y 344.
Código Orgánico de Tribunales: artículo 421.

ARTÍCULO 344 (333)

El cotejo de instrumentos se hará por el funcionario que haya autorizado la


copia presentada en el juicio, por el secretario del tribunal o por otro ministro
de fe que dicho tribunal designe.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 350, 351 y 355. Código Orgánico de
Tribunales: artículos 379 y 388.

ARTÍCULO 345 (334)

Los instrumentos públicos otorgados fuera de Chile deberán presentarse


debidamente legalizados, y se entenderá que lo están cuando en ellos conste
el carácter público y la verdad de las firmas de las personas que los han
autorizado, atestiguadas ambas circunstancias por los funcionarios que,
según las leyes o la práctica de cada país, deban acreditarlas.

La autenticidad de las firmas y el carácter de estos funcionarios se


comprobará en Chile por alguno de los medios siguientes:

1º El atestado de un agente diplomático o consular chileno, acreditado en


el país de donde el instrumento procede, y cuya firma se compruebe con el
respectivo certificado del Ministerio de Relaciones Exteriores;

2º El atestado de un agente diplomático o consular de una nación amiga


acreditado en el mismo país, a falta de funcionario chileno, certificándose en
este caso la firma por conducto del Ministerio de Relaciones Exteriores del
país a que pertenezca el agente o del Ministro Diplomático de dicho país en
Chile, y además por el Ministerio de Relaciones Exteriores de la República en
ambos casos; y
3º El atestado del agente diplomático acreditado en Chile por el Gobierno
del país en donde se otorgó el instrumento, certificándose su firma por el
Ministerio de Relaciones Exteriores de la República.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 76, 246, 247 y 345 bis. Código Civil:
artículos 17, 1027, 1464, 1699 a 1701. Código de Derecho Internacional Privado: artículo 402.
Ley Nº 19.947, Ley de Matrimonio Civil: artículo 83.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. El examen del cumplimiento o incumplimiento de los requisitos


formales con que debe tramitarse la solicitud de extradición,
corresponde a los Tribunales del Estado requerido

El examen del cumplimiento o incumplimiento de los requisitos


formales con que debe tramitarse la solicitud de extradición,
corresponde a los Tribunales del Estado requerido, puesto que
constituye el ejercicio de la actividad jurisdiccional que le es propio e
independiente. Por lo que siendo efectivo lo observado y objetado por
la defensa del requerido, como se comprueba del examen de los
documentos acompañados, en que sólo aparece que el Cónsul de Chile
en Roma, acredita la autenticidad de la firma del funcionario del
Ministerio de Justicia de Italia, sin que se encuentre acompañado el
certificado del Ministerio de Relaciones Exteriores que es trámite
necesario para legalizar los instrumentos públicos otorgados en el
extranjero, artículo 345 inciso 2º Nº 1 del Código de Procedimiento Civil,
resulta procedente, acogiendo la objeción, denegar la solicitud de
extradición, desde que la autenticidad de los documentos fundantes de
la petición de extradición no se ha probado de conformidad con las
reglas establecidas en el Código de Procedimiento Civil
(considerandos 5º, 6º y 7º sentencia Ministro Instructor, en el mismo
sentido, Corte Suprema).

Corte Suprema, 1/04/2003, Rol Nº 1056-2003,


Cita online: CL/JUR/4183/2003

ARTÍCULO 345 BIS

Los instrumentos públicos otorgados en un Estado Parte de la Convención


de La Haya que Suprime la Exigencia de Legalización de Documentos
Públicos Extranjeros, no deberán ser sometidos al procedimiento de
legalización, si respecto de éstos se ha otorgado apostillas por la autoridad
designada por el Estado de que dimana dicho instrumento.

Las certificaciones oficiales que hayan sido asentadas sobre documentos


privados, tales como menciones de registro, comprobaciones para la certeza
de una fecha y autenticaciones de firmas, podrán presentarse legalizadas o
con apostillas otorgadas, con arreglo al artículo precedente y a éste,
respectivamente. Pero en estos casos la legalización o apostilla sólo
acreditará la autenticidad de la certificación, sin otorgar al instrumento el
carácter de público.

Según lo dispuesto por la Convención a que se refiere el inciso primero, no


podrán otorgarse apostillas respecto de los documentos expedidos por
agentes diplomáticos o consulares y los documentos administrativos que se
refieren directamente a una operación mercantil o aduanera.138

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 345. Convención de La Haya que


Suprime la Exigencia de Legalización de Documentos Públicos Extranjeros.

ARTÍCULO 346 (335)

Los instrumentos privados se tendrán por reconocidos:

1º Cuando así lo ha declarado en el juicio la persona a cuyo nombre


aparece otorgado el instrumento o la parte contra quien se hace valer;

2º Cuando igual declaración se ha hecho en un instrumento público o en


otro juicio diverso;

3º Cuando, puestos en conocimiento de la parte contraria, no se alega su


falsedad o falta de integridad dentro de los seis días siguientes a su
presentación, debiendo el tribunal, para este efecto, apercibir a aquella parte
con el reconocimiento tácito del instrumento si nada expone dentro de dicho
plazo; y

4º Cuando se declare la autenticidad del instrumento por resolución judicial.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 273 Nº 5, 278, 342, 347, 350, 352,
355 y 433. Código Civil: artículos 17, 18, 1701 a 1707. Código de Comercio: artículo 127. Código
Orgánico de Tribunales: artículo 409 Nº 10. Código de Derecho Internacional Privado:
artículo 402. Ley Nº 18.845, establece Sistemas de Microcopia o Micrograbación de
Documentos: artículo 5º.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Artículo 346 no contiene normas reguladoras de la prueba

En relación a los artículos 341 y 346 del Código de Procedimiento


Civil, que no revisten el carácter de normas reguladoras de la prueba,
toda vez que el primero refiere únicamente a los medios de que puede
hacerse uso en juicio a la parte, circunstancia que en el caso de autos
no se ha desatendido y el segundo sólo indica pautas procesales para
establecer el reconocimiento de los documentos privados presentados
al juicio (considerando 13º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 10/10/2018, Rol Nº 15253-2018,


Cita online: CL/JUR/5721/2018

2. Diferencias esenciales entre un instrumento público y uno privado

La principal diferencia entre un instrumento público y uno privado, es


que el primero hace plena fe en cuanto al hecho de haberse otorgado y
su fecha, en cambio el segundo, para que adquiera fecha cierta es
necesario que se cumplan algunas de las condiciones señaladas en el
artículo 1703 del Código Civil, pero en cuanto a su otorgamiento, esto
es, que las partes que aparecen suscribiéndole efectivamente lo hayan
otorgado, se debe acudir a las reglas del artículo 1702 del Código Civil
en relación con el artículo 346 del Código de Procedimiento Civil, con la
salvedad que sólo resultan aplicables cuando el instrumento emana de
la persona en contra de la cual se oponen para su reconocimiento
expreso, tácito o judicial, pero no así cuando emanan de terceros. Por
ello, en el sistema de prueba legal o tasada, para que los instrumentos
privados que emanan de terceros tengan valor en juicio, es necesario
que quienes los han emitido lo ratifiquen en el juicio en donde se hacen
valer, pero como parte de la prueba testimonial. En otros términos, si no
son ratificados por el tercero otorgante en la forma señalada, carecen
de todo valor probatorio (considerandos 7º a 9º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de La Serena, 5/10/2010, 501-2010,

Cita online: CL/JUR/10980/2010

3. Concepto de instrumento privado


Que por instrumento privado, para los efectos de las disposiciones
indicadas en el fundamento anterior, "se entiende todo escrito hecho sin
la intervención de funcionarios públicos, non rite et recte por notario u
otro empleado público, con la sola firma de las partes y que justifica una
o varias obligaciones o su extinción" (Luis Claro Solar, Explicaciones de
Derecho Civil Chileno, Tomo XIII, pág. 696, Imprenta Nascimento
1939). Agrega el mismo autor que: "Es esencial al instrumento privado,
entendido en el sentido de que hablamos, es decir productor de
obligaciones o comprobador de su extinción, que ha de ser firmado por
las partes o la parte contra la cual ha de hacer prueba", características
que no reúnen los documentos en que se funda la alegación, ya que
emanan de terceros que no han concurrido al juicio como testigos, por
lo que no se han infringido las normas en análisis (considerando 12º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 11/08/2004, Rol Nº 1289-2003,


Cita online: CL/JUR/3600/2004

4. Hipótesis para que un documento privado se pueda tener por


reconocido

Respecto a la denunciada vulneración de los artículos 1698 y 1702


del Código Civil, en relación con los artículos 346 y 348 del Código de
Procedimiento Civil, cabe consignar que el recurso no podrá ser
admitido, desde que no se observa la concurrencia del vicio aludido. En
efecto, para que se pueda tener por reconocido un documento privado
en los términos previstos en los artículos 346 del Código de
Procedimiento Civil y 1702 del Código Civil, debe haber mediado un
reconocimiento expreso de la persona de la que emana (sea judicial o
extrajudicial), cuyo no es el caso; debe haber sido declarado así por
resolución judicial, supuesto que tampoco concurre en la especie, y
finalmente, debe haber sido puesto en conocimiento de su autor, quien,
a su vez, ha debido abstenerse de efectuar alguna objeción a su
respecto. En la especie, sin embargo, esto último tampoco aconteció,
desde que el instrumento privado al que se refiere el recurso, cuyo autor
es desconocido; empero, resulta evidente que dicho documento, por su
carácter y particularidades, no emana de la Dirección General de Aguas,
de lo que se sigue que no fue puesto en conocimiento de su autor, quien,
por consiguiente, tampoco ha podido reconocerlo. En esas condiciones,
los sentenciadores no han podido dar aplicación a lo estatuido en las
normas cuya infracción se ha denunciado, en especial en los
artículos 346 del Código de Procedimiento Civil y 1702 del Código Civil,
desde que no ha sido reconocido por su emisor y, por lo mismo, carece
de todo mérito probatorio (considerando 11º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 9/04/2018, Rol Nº 34233-2017,


Cita online: CL/JUR/1656/2018

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 346 Nº 1)

1. Aplicación de reglas dadas a propósito del medio de prueba de


testigos al determinar el valor del instrumento privado

En la especie corresponde hacerse cargo de la infracción de normas


que se denominan reguladoras de la prueba, pues, de ser efectiva, los
hechos asentados en la sentencia impugnada podrían modificarse en la
de reemplazo pertinente. Al respecto, se acusa vulnerado lo que
disponen los artículos 346 número 1 del Código de Procedimiento Civil
y 1702 del Código Civil, señalando, el primero, los casos en que un
instrumento privado debe tenerse por reconocido; y el segundo que,
tratándose del reconocido por la parte a quien se opone, o que se ha
mandado tener por reconocido en los casos y con los requisitos
prevenidos por ley, tiene el valor de escritura pública respecto de los
que aparecen o se reputan haberlo suscrito; sin embargo, en lo que
atañe a los instrumentos privados emanados de terceros y en la medida
que hayan concurrido al juicio a reconocerlos o a deponer acerca de su
tenor, es pacífico en la doctrina y jurisprudencia que se deben aplicar
las reglas dadas a propósito del medio de prueba de los testigos,
consagradas en el artículo 384 del Código de Procedimiento Civil.
Entonces, como la denuncia está referida al citado documento,
elaborado por quien según se afirma, al declarar como testigo reconoció
ser su autor, no corresponde que se aprecie su valor probatorio
conforme las normas contenidas en los artículos que se acusan
vulnerados, sino de acuerdo a las del último mencionado, que, con todo,
no son de aquellas que se designan reguladoras de la prueba porque
solo dan pautas conforme a las cuales se debe ponderar las
declaraciones prestadas por los testigos en juicio. Conforme dicho
contexto, los presupuestos fácticos asentados en la sentencia
impugnada no pueden ser alterados, y como no se tuvo como tal que la
demandante experimentó perjuicios a título de lucro cesante con motivo
de la conducta asumida por la demandada, no se ha podido infringir lo
que prescriben los artículos 1933 y 1556 del Código Civil
(considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 3/10/2019, Rol Nº 1120-2018,


Cita online: CL/JUR/5954/2019

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 346 Nº 3)

1. Forma de acompañar la prueba documental en el juicio

Es menester distinguir entre los siguientes conceptos procesales,


primero, el que se refiere a la forma en que las partes deciden
acompañar los documentos en un juicio —lo que puede ser sólo con
citación, o bien, bajo el apercibimiento del artículo 346 Nº 3 del Código
de Procedimiento Civil—, siendo de responsabilidad de la parte que
decide presentar los documentos los efectos que como consecuencia
de la forma en que los acompaña, producirán éstos en la valoración de
la prueba que se haga posteriormente cuando el tribunal falle en
definitiva, y segundo, el relativo a cómo se tramita específicamente la
objeción de los documentos privados cuando éstos fueron decididos
acompañar por la parte que los presenta bajo el apercibimiento del
artículo 346 Nº 3, lo que, en este caso, puede dar lugar al procedimiento
incidental de objeción de documentos cuando éstos se objetan por las
causales taxativas que establece dicha norma. En consecuencia, si la
contraria, tal como consta en autos, no pidió que los documentos
privados emanados de su parte se tuvieran por acompañados bajo el
apercibimiento del artículo 346 Nº 3, no cabía hacer aplicación de lo
dispuesto en dicha norma procesal, tanto en lo que respecta al efecto
de reconocimiento tácito con que se apercibe, como para dar lugar al
procedimiento de objeción sobre la base de alegar su falsedad o falta
de integridad, resultando ilógico que el apelante haya opuesto una
objeción documental en conformidad a la tramitación incidental que se
deriva del artículo 346 Nº 3, en circunstancias que la contraria no solicitó
que se le apercibiera con el reconocimiento tácito de los instrumentos
presentados si no se alegaba su falsedad o falta de integridad. Así las
cosas, la objeción que promovió es incoherente porque no existe una
causa para oponerse a dicho reconocimiento tácito, toda vez que éste
nunca se solicitó por la contraparte (considerando 5º de la sentencia de
la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Punta Arenas, 6/01/2017, Rol Nº 278-2016,

Cita online: CL/JUR/704/2017

2. Correos electrónicos que han sido impresos deben considerarse


como documentos propiamente tales

La resolución recurrida resolvió un escrito de la demandante


incidental, en el que, en lo principal, se acompañaban numerosos
documentos, los que corresponden a impresiones materiales de correos
electrónicos y, en el otrosí de la misma presentación, se solicitó citar a
una audiencia de percepción documental sólo respecto del signado con
el número 2, el que corresponde a un correo electrónico al que iban
adjunto dos archivos, siendo estos últimos imperceptibles en la forma
acompañada. El artículo 348 bis del Código de Procedimiento Civil no
está destinado al examen de impresiones de correos electrónicos
acompañados en forma legal, pues éstos, cuando han sido impresos
como ocurre en la especie, cabe considerarlos como documentos
propiamente tales y deben ser valorados como tal, y si existe duda de
su autenticidad, es la contraparte quien debe ejercer los derechos de
que está asistida para ello; por algo se están acompañando bajo el
apercibimiento legal contemplado en el artículo 346 Nº 3 del Código de
Procedimiento Civil (considerando 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 21/12/2018, Rol Nº 2307-2018,

Cita online: CL/JUR/7133/2018

3. Determinación de valor probatorio de los instrumentos privados


suscritos con firma electrónica simple y de aquellos que carecen de
firma

A los instrumentos privados electrónicos que no están suscritos con


firma electrónica avanzada no se les aplican las normas de la
Ley Nº 20.217, que señalan, a propósito del valor probatorio de los
instrumentos públicos suscritos con dicho tipo de rúbrica, que no
se puede desconocer su falta de autenticidad, lo que importa impedir
que se desconozca tanto la integridad como autoría, con la limitación,
precisamente por tratarse de instrumentos privados, en lo relativo a la
fecha en cuanto hacen fe. Entonces, qué valor probatorio tienen los
documentos electrónicos privados suscritos con firma electrónica simple
como aquellos que carecen de firma. Al respecto, en doctrina se
sostiene que aplica lo que dispone el artículo 348 bis del Código de
Procedimiento Civil, por lo tanto, no solo basta que se acompañen sino
que es menester que el tribunal cite a todas las partes a la audiencia de
percepción documental, que tiene por única finalidad pronunciarse
sobre la autenticidad del documento, quedando las otras posibles
causales de impugnación —falsedad o falta de integridad— para ser
conocidas y resueltas conforme las reglas generales. También que el
electrónico privado carente de firma, según dichas reglas, en principio
no tiene mérito probatorio, y para que lo tenga debe acompañarse en la
forma prevenida en el artículo 346 Nº 3 del citado código, y en el
incidente respectivo debe operar lo que previene el artículo 355 del
mismo cuerpo legal, por lo mismo, no debe llevarse a cabo la diligencia
de percepción documental, pues se trata de uno emitido sin ninguna de
las formalidades que exige la ley de documentos electrónicos y que
requiere ser autenticada. Tal documento hace imposible verificar la
identidad de su titular y no será obstáculo para desconocer su integridad
y autoría según las reglas generales. —Héctor Oberg Y.—
(considerando 7º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 17/06/2019, Rol Nº 41973-2017,


Cita online: CL/JUR/3473/2019

4. Agregación de instrumentos presentados por las partes en la forma


legal pertinente a su naturaleza constituye un trámite esencial en la
segunda instancia

El instrumento presentado por la ejecutada, se trata de un documento


de aquellos que emanan de la parte en contra de quien se hace valer y
que, por su naturaleza privada, debió tenerse por acompañado en la
forma que dispone el artículo 346 Nº 3 del Código de Procedimiento
Civil, esto es, bajo el apercibimiento de tenérselo por tácitamente
reconocido si nada se expresa en el término de seis días. Aquello no
ocurrió por cuanto el tribunal lo tuvo por acompañado "bajo
apercibimiento legal", sin mencionar cuál es tal. De acuerdo con lo
establecido en el artículo 800 Nº 2 del Código de Procedimiento Civil, la
agregación de los instrumentos presentados oportunamente por las
partes, en la forma legal que resultare pertinente a su naturaleza,
constituye un trámite o diligencia esencial en la segunda instancia. Cabe
añadir que, de acuerdo con el texto de esa norma legal, la correcta
agregación de los instrumentos acompañados por las partes constituye
una obligación que la ley impone al tribunal y no a los litigantes, puesto
que el deber de estos últimos se agota con la oportuna presentación de
los mismos. En este caso, tratándose de un documento agregado por el
propio tribunal como medida para mejor resolver, la obligación se
intensifica y se vuelve más estricta, puesto que la específica agregación
mediante resolución, es la que permite al litigante contrario, conocer el
plazo para objetar y también las causales que proceden. De este modo,
los antecedentes de la causa manifiestan la existencia de un vicio de
aquellos que dan lugar a la casación en la forma, remediable sólo con
la invalidación del fallo que lo contiene, como quiera que se configura
en la especie la causal de nulidad que prevé el artículo 768 Nº 9 del
Código de Procedimiento Civil (considerandos 3º a 5º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 1/08/2019, Rol Nº 1055-2019,

Cita online: CL/JUR/4499/2019

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 346 Nº 4)

1. Prueba de la autenticidad del instrumento privado

Oportuno es consignar, que para declarar la autenticidad de un


documento privado de conformidad a lo dispuesto en el Nº 4 del
artículo 346 del Código de Procedimiento Civil, es menester que se
haya demostrado la efectividad de su autenticidad, es decir, que se
pruebe que el documento privado no es falso ni carece de integridad,
según sea la causal invocada para objetarlo, prueba que radica en la
parte que pretende la autenticidad del mismo. En otras palabras, no
estando protegido el documento privado por la presunción de
autenticidad propia de los públicos, se vuelve a las reglas generales en
materia de prueba, especialmente en el art. 1698 del Código Civil, en
cuanto debe probar la situación jurídica alegada quien la pretende para
sí (considerando 6º del Juzgado de Letras del Trabajo).
2º Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago, 28/09/2010, Rol Nº O-
1722-2010,

Cita online: CL/JUR/16428/2010

ARTÍCULO 347 (336)

Los instrumentos extendidos en lengua extranjera se mandarán traducir por


el perito que el tribunal designe, a costa del que los presente, sin perjuicio de
lo que se resuelva sobre costas en la sentencia.

Si al tiempo de acompañarse se agrega su traducción, valdrá ésta; salvo


que la parte contraria exija, dentro de seis días, que sea revisada por un
perito, procediéndose en tal caso como lo dispone el inciso anterior.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 25, 63, 64, 144, 350, 414 y 433.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Fundamentos de la exigibilidad de la traducción de los instrumentos


extendidos en lengua extranjera

El artículo 347 del Código de Procedimiento Civil dispone que se


mandará traducir los instrumentos extendidos en lengua extranjera, a
través de prueba pericial. El sentido de la norma radica en el principio
de la bilateralidad. Se asume en la actualidad que el derecho de defensa
forma parte del racional procedimiento. La defensa no sólo incluye los
actos procesales de petición e información, sino los de prueba. El
debido proceso reconoce como contenido esencial el derecho a
defenderse probando —formulación activa— o desaprobando los
basamentos del contradictor —formulación pasiva—. Es en razón de
esos axiomas del derecho procesal que la producción de evidencias
está sujeta, en cuanto a su validez, al conocimiento que de ellas se
proporcione a la parte contra la que se presentan. Naturalmente, una
probanza extendida en lengua extranjera, cuyo conocimiento no es
obligatorio en el ámbito de vigencia del derecho procesal interno, no
está en situación de ser comprendida por el opositor, lo que redunda en
la imposibilidad para éste de tomar conocimiento de ella. Ergo, no es
posible tener como prueba legítimamente propuesta una documental
incomprensible porque no traducida al español, lo que conducirá a
acoger la objeción dirigida respecto de las piezas acompañadas en
idioma foráneo (considerando 17 de la sentencia de la Corte de
Apelaciones de Santiago).

Corte de Apelaciones de Santiago, 27/07/2011, Rol Nº 8546-2009,

Cita online: CL/JUR/6000/2011

2. Omisión de nombramiento de perito no deja en indefensión a parte


contraria, puesto que se acompañó traducción, y no se ejerció
derecho alternativo de artículo 347 del Código de Procedimiento Civil

Respecto a la designación del perito traductor, que si bien el inciso 1º


del artículo 347 (Código de Procedimiento Civil) prescribe que los
instrumentos extendidos en lengua extranjera se mandarán traducir por
el perito que el Tribunal designe, también le asiste a la parte el derecho
consagrado, en el inciso segundo, que permite agregar su traducción,
la que valdrá salvo que la parte contraria exija, dentro de seis días, que
sea revisada por un perito. De lo que se desprende, como lo señalan
los jueces del fondo, que no es posible sostener que la omisión de la
designación del perito traductor solicitada por la recurrente pudiera
acarrear su indefensión, toda vez que asistiéndole la posibilidad de
ejercer el derecho alternativo que le reconoce la norma reseñada no
hizo uso de ella, ni tampoco acompañó en segunda instancia los
documentos traducidos (considerando 7º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 5/12/2011, Rol Nº 1826-2010,


Cita online: CL/JUR/10632/2011

ARTÍCULO 348 (337)

Los instrumentos podrán presentarse en cualquier estado del juicio hasta


el vencimiento del término probatorio en primera instancia, y hasta la vista de
la causa en segunda instancia.139

La agregación de los que se presenten en segunda instancia, no


suspenderá en ningún caso la vista de la causa; pero el tribunal no podrá
fallarla, sino después de vencido el término de la citación, cuando haya lugar
a ella.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 69, 159, 227, 255, 338, 433, 795 Nº 5
y 807. Código del Trabajo: artículos 443, 444 y 446. Código Tributario: artículo 125.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Oportunidad procesal para la presentación del documento

En este caso, no puede imputarse a la actora una conducta omisiva y


culpable tendiente a evitar dar curso progresivo a los autos, pues
existen una copiosa actividad que muestra un accionar proclive a la
realización de gestiones útiles para dar curso progresivo a los autos, en
el sentido de acompañar prueba documental de la cual emanan
antecedentes e informaciones tendientes a persuadir a los juzgadores
sobre su pretensión, en el legítimo interés de acercarse a una definición
favorable, máxime si dicha instrumental ha sido presentada en las
oportunidades que la ley permite [...] No considera, sin embargo, que no
siendo forzoso rendir todo tipo de probanzas durante el término
probatorio, la demandante aportó prueba en la forma y oportunidad
prevista en el artículo 348 del Código de Procedimiento Civil, que
permite allegar la documental en cualquier estado de la gestión,
interrumpiendo así el plazo en referencia, razón por la cual no se puede
negar a la actividad de la demandante la virtud movilizadora del proceso
necesaria para la desestimación del incidente en cuestión
(considerando 11º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 5/04/2018, Rol Nº 7140-2017,


Cita online: CL/JUR/1612/2018

2. Agregación de documentos en segunda instancia

El artículo 348 del Código de Procedimiento Civil autoriza a presentar


prueba instrumental en cualquier estado del juicio, "hasta el vencimiento
del término probatorio en primera instancia y hasta la vista de la causa
en segunda", advirtiendo que, si bien la agregación de los instrumentos
que se presenten en segunda instancia no suspenderá la vista de la
causa, "el tribunal no podrá fallarla, sino después de vencido el término
de la citación, cuando haya lugar a ella". Por lo tanto, el tribunal de
alzada debía hacerse cargo, necesariamente, de los documentos
acompañados por la demandada en esa instancia, ya que en tanto
elementos de prueba agregados oportunamente requerían ser
analizados y ponderados para resolver la controversia y justificar la
decisión, en este caso, de confirmar la sentencia apelada. En efecto, los
jueces del fondo estaban obligados a valorar dichos antecedentes y a
entregar las razones por las que consideraron que no aportaban
elementos de juicio que permitieran alterar lo resuelto en el fallo de
primer grado. Al no haberlo hecho, la sentencia queda desprovista de la
fundamentación necesaria que la sostenga y deja a las partes sin
elementos de análisis para determinar su eventual impugnación ante los
tribunales superiores (considerando 6º de la anulación de oficio).

Corte Suprema, 3/11/2016, Rol Nº 13713-2015,


Cita online: CL/JUR/8112/2016

ARTÍCULO 348 BIS

Presentado un documento electrónico, el Tribunal citará para el 6º día a


todas las partes a una audiencia de percepción documental. En caso de no
contar con los medios técnicos electrónicos necesarios para su adecuada
percepción, apercibirá a la parte que presentó el documento con tenerlo por
no presentado de no concurrir a la audiencia con dichos medios.140

Tratándose de documentos que no puedan ser transportados al tribunal, la


audiencia tendrá lugar donde éstos se encuentren, a costa de la parte que los
presente.

En caso que el documento sea objetado, en conformidad con las reglas


generales, el Tribunal podrá ordenar una prueba complementaria de
autenticidad, a costa de la parte que formula la impugnación, sin perjuicio de
lo que se resuelva sobre pago de costas. El resultado de la prueba
complementaria de autenticidad será suficiente para tener por reconocido o
por objetado el instrumento, según corresponda.

Para los efectos de proceder a la realización de la prueba complementaria


de autenticidad, los peritos procederán con sujeción a lo dispuesto por los
artículos 417 a 423.

En el caso de documentos electrónicos privados, para los efectos del


artículo 346, Nº 3, se entenderá que han sido puestos en conocimiento de la
parte contraria en la audiencia de percepción.

En el caso que los documentos electrónicos acompañados puedan ser


percibidos directamente en la carpeta electrónica, el tribunal podrá omitir la
citación a audiencia de percepción, debiéndose entender que han sido
puestos en conocimiento de la parte contraria desde que se notifica la
resolución que los tiene por acompañados bajo el apercibimiento
correspondiente.141

Concordancias: Ley Nº 19.799 sobre Documentos Electrónicos, Firma Electrónica y Servicios


de Certificación: artículos 3º a 7º. Auto Acordado para la aplicación de la Ley Nº 20.886,
artículo 6º.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Valor probatorio de un instrumento electrónico

Tal como se colige del texto expreso del artículo 348 bis del Código
de Enjuiciamiento Civil, para que se asigne valor a un instrumento
electrónico que se allega como medio de prueba, éste se debe
acompañar solicitando que se efectúe una audiencia de percepción
documental, en la que incluso de no contar el tribunal con los medios
técnicos electrónicos necesarios para su adecuada percepción y de no
ser ellos proveídos por el interesado en que se le conceda mérito
probatorio, podrá tenerse el documento por no presentado y que,
además, únicamente desde su celebración empezará a correr el plazo
de la contraria para objetarlo, debiendo entonces también observarse
que, en todo caso, en el proceso sub judice la audiencia no fue
solicitada, correspondiendo dicha petición a una carga procesal de
quien deseaba valerse de tal instrumento, por lo que al no haberla
llevado a cabo, no podrá entonces prevalerse del beneficio que una
conducta diligente en su propio interés eventualmente le pudo haber
reportado (considerando 11º de la sentencia Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 11/11/2013, Rol Nº 3327-2012,

Cita online: CL/JUR/2591/2013

ARTÍCULO 349 (338)

Podrá decretarse, a solicitud de parte, la exhibición de instrumentos que


existan en poder de la otra parte o de un tercero, con tal que tengan relación
directa con la cuestión debatida y que no revistan el carácter de secretos o
confidenciales.
Los gastos que la exhibición haga necesarios serán de cuenta del que la
solicite, sin perjuicio de lo que se resuelva sobre pago de costas.

Si se rehúsa la exhibición sin justa causa, podrá apremiarse al


desobediente en la forma establecida por el artículo 274; y si es la parte
misma, incurrirá además en el apercibimiento establecido por el artículo 277.

Cuando la exhibición haya de hacerse por un tercero, podrá éste exigir que
en su propia casa u oficina se saque testimonio de los instrumentos por un
ministro de fe.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 25, 159, 273, 274, 276, 277, 283 y
380. Código del Trabajo: artículos 443 y 447.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Arresto ante negativa a exhibir documentos

Por otra parte, el apercibimiento de arresto contenido en la resolución


impugnada por esta vía, ha sido decretado ante la renuencia del
amparado en orden a cumplir con la diligencia ordenada por el tribunal,
de conformidad con las facultades establecidas en el artículo 274 en
relación con el artículo 349 del Código de Procedimiento Civil
(considerando 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 15/07/2002, Rol Nº 2462-2002,


Cita online: CL/JUR/1370/2002

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 25/01/2007, Rol Nº 2486-2005,

Cita online: CL/JUR/3449/2007

ARTÍCULO 350 (339)

Podrá pedirse el cotejo de letras siempre que se niegue por la parte a quien
perjudique o se ponga en duda la autenticidad de un documento privado o la
de cualquier documento público que carezca de matriz.

En este cotejo procederán los peritos con sujeción a lo dispuesto por los
artículos 417 hasta 423 inclusive.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 324, 342, 346, 351, 352, 353, 354 y
355.

ARTÍCULO 351 (340)

La persona que pida el cotejo designará el instrumento o instrumentos


indubitados con que debe hacerse.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 342, 344 y 346.

ARTÍCULO 352 (341)

Se considerarán indubitados para el cotejo:

1º Los instrumentos que las partes acepten como tales, de común acuerdo;

2º Los instrumentos públicos no tachados de apócrifos o suplantados; y

3º Los instrumentos privados cuya letra o firma haya sido reconocida de


conformidad a los números 1º y 2º del artículo 346.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 342, 344 y 346.

ARTÍCULO 353 (342)

El tribunal hará por sí mismo la comprobación después de oír a los peritos


revisores y no tendrá que sujetarse al dictamen de éstos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 403, 407 y 425.

ARTÍCULO 354 (343)

El cotejo de letras no constituye por sí solo prueba suficiente; pero podrá


servir de base para una presunción judicial.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 355, 426, 427 y 428.


ARTÍCULO 355 (344)

En el incidente sobre autenticidad de un instrumento o sobre


suplantaciones hechas en él, se admitirán como medios probatorios, tanto el
cotejo de que tratan los cinco artículos precedentes, como los que las leyes
autoricen para la prueba del fraude.

En la apreciación de los diversos medios de prueba opuestos al mérito de


un instrumento, el tribunal se sujetará a las reglas generales establecidas en
el presente Título, y con especialidad a las consignadas en el párrafo 8º.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 342, 346, 350, 354, 428, 429 y 464
Nº 6. Código Civil: artículo 704.

§ 3. De los testigos y de las tachas

ARTÍCULO 356 (345)

Es hábil para testificar en juicio toda persona a quien la ley no declare


inhábil.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 357, 358, 359 y 373. Código de
Derecho Internacional Privado: artículo 404. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia:
artículo 40.

ARTÍCULO 357 (346)

No son hábiles para declarar como testigos:

1º Los menores de catorce años. Podrán, sin embargo, aceptarse sus


declaraciones sin previo juramento y estimarse como base para una
presunción judicial, cuando tengan discernimiento suficiente;

2º Los que se hallen en interdicción por causa de demencia;

3º Los que al tiempo de declarar, o al de verificarse los hechos sobre que


declaran, se hallen privados de la razón, por ebriedad u otra causa;

4º Los que carezcan del sentido necesario para percibir los hechos
declarados al tiempo de verificarse éstos;
5º Los sordos o sordomudos que no puedan darse a entender
claramente;142

6º Los que en el mismo juicio hayan sido cohechados, o hayan cohechado


o intentado cohechar a otros, aun cuando no se les haya procesado
criminalmente;

7º Los vagos sin ocupación u oficio conocido;

8º Los que en concepto del tribunal sean indignos de fe por haber sido
condenados por delito; y

9º Los que hagan profesión de testificar en juicio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 366, 373, 375, 376, 377, 378 y 413.
Código Civil: artículo 1447. Código Procesal Penal: artículos 309 al 311. Código de Derecho
Internacional Privado: artículo 404. Código Penal: artículos 3º, 206 al 212, 248 y siguientes y
305. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia: artículos 40 y 42. Código Tributario:
artículo 132.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Finalidad de la imparcialidad de los testigos

Es necesario recordar que las inhabilidades que enumera el


artículo 358 del Código de Procedimiento Civil, catalogadas en doctrina
procesal como aquéllas de índole relativo en oposición a las de carácter
absoluto que se enuncian en el artículo 357 del mismo estatuto legal,
encuentran su justificación o finalidad última en evitar la falta de
imparcialidad del testigo por las especiales circunstancias o vínculos
que lo unen a la parte que lo presenta como tal, situaciones que fueron
objetivamente evaluadas por el legislador y que luego de constatadas
por el juzgador, tal como acontece en el caso que nos ocupa, determina
que aquél deba en definitiva acoger la tacha eventualmente opuesta por
un diligente contradictor, en observancia del mandato constitucional que
obliga a los jueces a encuadrar su actuar en el marco legal vigente,
premisa básica que asegura a las partes su garantía fundamental a un
debido proceso. Como corolario de lo dicho, la tacha deducida en contra
del testigo don (...) deberá necesariamente ser acogida, tal como se dirá
en lo resolutivo de este fallo (considerando 3º sentencia Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 11/11/2013, Rol Nº 3327-2012,


Cita online: CL/JUR/2591/2013

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 357 Nº 4)

1. Causal no está referida al conocimiento o desconocimiento de los


hechos, por cuanto ello debe quedar a la apreciación del tribunal

1) La causal de inhabilidad de testigos del artículo 357 Nº 4 del


Código de Procedimiento Civil procede sólo cuando el testigo tiene
algún impedimento o invalidez psicológico o físico que le impida percibir
por sus sentidos los hechos por los cuales viene a declarar, debiendo
entenderse éstos como aquellos elementos sensoriales del cuerpo
humano. En consecuencia, dicha causal no está referida al
conocimiento o desconocimiento de los hechos, por cuanto ello debe
quedar a la apreciación del tribunal (considerandos 1º y 2º, sentencia 1ª
instancia).

Corte Suprema, 11/12/2008, Rol Nº 6218-2008,


Cita online: CL/JUR/4298/2008

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 357 Nº 8)

1. No lo hace indigno de fe el solo hecho de una condena en un proceso


por giro doloso de cheque

Que no se hará lugar a la tacha interpuesta por la demandante en


contra del testigo del demandado por la causal del artículo 357 Nº 8 del
Código de Procedimiento Civil, pues no lo hace indigno de fe el solo
hecho de una condena en un proceso por giro doloso de cheque,
máxime si como el mismo se individualiza en su presentación, es
comerciante, actividad ésta que está expuesta frecuentemente a
altibajos económicos con los riesgos pertinentes, pero que no es por sí
sola suficiente como para declarar inhábil a una persona para testificar
(considerando Tercero, Ernesto Millar Vergara, Juez del Juzgado del
Trabajo de Los Lagos).

Corte Suprema, 20/04/2004, Rol Nº 2149-2003,


Cita online: CL/JUR/2728/2004

ARTÍCULO 358 (347)


Son también inhábiles para declarar:

1º El cónyuge y los parientes legítimos hasta el cuarto grado de


consanguinidad y segundo de afinidad de la parte que los presenta como
testigos;

2º Los ascendientes, descendientes y hermanos ilegítimos, cuando haya


reconocimiento del parentesco que produzca efectos civiles respecto de la
parte que solicite su declaración;

3º Los pupilos por sus guardadores y viceversa;

4º Los criados domésticos o dependientes de la parte que los presente.

Se entenderá por dependiente, para los efectos de este artículo, el que


preste habitualmente servicios retribuidos al que lo haya presentado por
testigo, aunque no viva en su casa;

5º Los trabajadores y labradores dependientes de la persona que exige su


testimonio;

6º Los que a juicio del tribunal carezcan de la imparcialidad necesaria para


declarar por tener en el pleito interés directo o indirecto; y

7º Los que tengan íntima amistad con la persona que los presenta o
enemistad respecto de la persona contra quien declaren.

La amistad o enemistad deberán ser manifestadas por hechos graves que


el tribunal calificará según las circunstancias.

Las inhabilidades que menciona este artículo no podrán hacerse valer


cuando la parte a cuyo favor se hallan establecidas, presente como testigos
a las mismas personas a quienes podrían aplicarse dichas tachas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 357, 366, 373, 375, 376, 377, 378 y
413. Código del Trabajo: artículos 146 y 450. Código Procesal Penal: artículos 302 y 309.
Código de Derecho Internacional Privado: artículos 404 y 463. Ley Nº 19.968, crea los
Tribunales de Familia: artículo 40.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Finalidad de la imparcialidad de los testigos


Es necesario recordar que las inhabilidades que enumera el
artículo 358 del Código de Procedimiento Civil, catalogadas en doctrina
procesal como aquéllas de índole relativo en oposición a las de carácter
absoluto que se enuncian en el artículo 357 del mismo estatuto legal,
encuentran su justificación o finalidad última en evitar la falta de
imparcialidad del testigo por las especiales circunstancias o vínculos
que lo unen a la parte que lo presenta como tal, situaciones que fueron
objetivamente evaluadas por el legislador y que luego de constatadas
por el juzgador, tal como acontece en el caso que nos ocupa, determina
que aquél deba en definitiva acoger la tacha eventualmente opuesta por
un diligente contradictor, en observancia del mandato constitucional que
obliga a los jueces a encuadrar su actuar en el marco legal vigente,
premisa básica que asegura a las partes su garantía fundamental a un
debido proceso. Como corolario de lo dicho, la tacha deducida en contra
del testigo don (...) deberá necesariamente ser acogida, tal como se dirá
en lo resolutivo de este fallo (considerando 3º sentencia Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 11/11/2013, Rol Nº 3327-2012,

Cita online: CL/JUR/2591/2013

2. Procede tacha de testigos por parentesco

La sentencia en alzada al explicar las razones en virtud de las cuales


acoge las tachas deducidas respecto de tales testigos, precisamente
tiene en cuenta los parentescos que tales testigos señalaron les
vinculaba con la actora (hermana e hija) para —en virtud de ello—
acoger las mencionadas tachas; todo ello de conformidad a lo previsto
en el artículo 358 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil. La
mencionada disposición legal establece: "Son también inhábiles para
declarar: 1º. El cónyuge y los parientes legítimos hasta el cuarto grado
de consanguinidad y segundo de afinidad de la parte que los presenta
como testigos;..." (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 17/03/2020, Rol Nº 2026-2019,

Cita online: CL/JUR/21136/2020

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 358 Nº 5)


1. Testigos que se encuentran en relación de dependencia respecto de
la parte que los presentó

Aun cuando los testigos presentados por la recurrida son las personas
que por razón de sus funciones y desempeño laboral podían aportar
antecedentes esclarecedores, se trata de personas que están en
situación de dependencia con respecto de la parte que los presentó, por
lo que se configura las tachas basadas en el artículo 358 Nºs. 5 y 6 del
Código de Procedimiento Civil, estas son, ser trabajadores
dependientes de la persona que exige su testimonio y carecer de la
imparcialidad necesaria para declarar por tener en el pleito interés
directo o indirecto, respectivamente (considerandos 1º y 2º, sentencia
Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 4/08/2010, Rol Nº 2183-2010,


Cita online: CL/JUR/4594/2010

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 358 Nº 6)

1. Causal de tacha de testigos de carecer de imparcialidad necesaria


por tener interés en el pleito, rechazada

Respecto a la tacha de testigo formulada por la causal del artículo 358


Nº 6 del Código de Procedimiento Civil, en razón de que el testigo, en
su calidad de abogado, dedujo acción de protección en contra de la
Directora de Obras de la municipalidad reclamada, apelando incluso de
la sentencia expedida, lo cierto es que la inhabilidad se funda en la
circunstancia de carecer de la imparcialidad necesaria para declarar por
tener en el pleito interés directo o indirecto, tacha que debe ser
rechazada porque no se fundamentó debidamente, ya que no se ha
explicado debidamente la forma como el hecho de haber sido abogado
de la parte que lo presenta, en alguna clase de acción y en contra de
otra entidad diversa, determine que el testigo pueda tener interés directo
o indirecto en el presente reclamo, interés que, como se sabe, es
patrimonial (considerando 30º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 16/09/2016, Rol Nº 9190-2014,

Cita online: CL/JUR/7412/2016


2. Expectativa de testigo de obtener sentencia favorable para la parte
que lo presenta, no constituye inhabilidad del artículo 358 Nº 6

Que el testigo haya manifestado que le gustaría que los demandantes


obtuvieran sentencia favorable en el juicio, no tiene mérito para
configurar la causal de inhabilidad para declarar del artículo 358 Nº 6
del Código de Procedimiento Civil, esta es, carecer de la imparcialidad
necesaria para declarar por tener en el pleito interés directo indirecto,
toda vez que ésta apunta a que el testigo carezca de independencia de
juicio por tener un interés económico o pecuniario en el pleito, lo que no
se desprende de la declaración efectuada (considerandos 7º y 8º).

Corte de Apelaciones de Santiago, 7/07/2010, Rol Nº 4930-2009,

Cita online: CL/JUR/3638/2010

3. Relación de amistad no es suficiente para declarar la inhabilidad de


un testigo

Que un testigo presentado por el demandado reconozca ser amigo de


éste, con quien se reúne siempre, y haya manifestado su deseo que el
demandado gane el juicio porque al demandante no lo conoce, no es
suficiente para que se configure la inhabilidad para declarar por las
causales previstas en el artículo 358 Nºs. 6 y 7 del Código de
Procedimiento Civil, toda vez que no aparece comprometido, directa ni
indirectamente, ningún interés de carácter patrimonial en las resultas
del juicio a favor del declarante que afecten su imparcialidad, como
tampoco sus dichos hacen presumir que con el demandado exista una
íntima amistad o una enemistad con la parte contraria (considerando 1º
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Talca, 25/08/2010, Rol Nº 231-2010,

Cita online: CL/JUR/5376/2010

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 358 Nº 7)

1. Largo período de amistad y declaración previa como testigo en un


juicio penal no constituye per se causal de tacha
Un largo período de amistad y la declaración como testigo en un juicio
penal, por sí solas, no pueden llegar a constituir el motivo que considera
la ley, esto es, una relación de estrecha amistad que haga suponer una
falta de imparcialidad del declarante, toda vez que en razón de ella
resultará indudable que tratará de favorecer con sus dichos a quien lo
presente. Esta convicción no es posible adquirirla con las pruebas
mencionadas, razón por la que se modificará la sentencia en esta parte
rechazándose la tacha deducida (considerando 6º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 19/05/2017, Rol Nº 13421-2015,

Cita online: CL/JUR/3164/2017

ARTÍCULO 359 (348)

Toda persona, cualquiera que sea su estado o profesión, está obligada a


declarar y a concurrir a la audiencia que el tribunal señale con este objeto.

Cuando se exija la comparecencia de un testigo a sabiendas de que es


inútil su declaración, podrá imponer el tribunal a la parte que la haya exigido
una multa de un décimo a medio sueldo vital.143

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 56, 207, 252, 324, 340, 356, 360, 361,
362, 371, 380 y 381. Código Penal: artículo 212. Código Procesal Penal: artículos 33, 191, 192,
298, 299 y 304. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia: artículo 33.

ARTÍCULO 360 (349)

No serán obligados a declarar:

1º Los eclesiásticos, abogados, escribanos, procuradores, médicos y


matronas, sobre hechos que se les hayan comunicado confidencialmente con
ocasión de su estado, profesión u oficio;

2º Las personas expresadas en los números 1º, 2º y 3º del artículo 358; y

3º Los que son interrogados acerca de hechos que afecten el honor del
testigo o de las personas mencionadas en el número anterior, o que importen
un delito de que pueda ser criminalmente responsable el declarante o
cualquiera de las personas referidas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 359 y 362. Código Penal:


artículos 201, 202 y 247. Código Procesal Penal: artículos 302 y 303. Código Tributario:
artículo 61.

ARTÍCULO 361 (350)

Podrán declarar en el domicilio que fijen dentro del territorio jurisdiccional


del tribunal:144

1º El Presidente de la República, los Ministros de Estado, los Senadores y


Diputados, los Subsecretarios; los Delegados Presidenciales Regionales,
Delegados Presidenciales Provinciales y los Alcaldes, dentro del territorio de
su jurisdicción; los jefes superiores de Servicios, los miembros de la Corte
Suprema o de alguna Corte de Apelaciones, los Fiscales Judiciales de estos
tribunales, los Jueces Letrados, el Fiscal Nacional y los fiscales regionales;
los Oficiales Generales en servicio activo o en retiro, los Oficiales Superiores
y los Oficiales Jefes;145

2º Derogado.146

3º Eliminado.147

4º Las mujeres, siempre que por su estado o posición no puedan concurrir


sin grave molestia; y

5º Los que por enfermedad u otro impedimento, calificado por el tribunal,


se hallen en la imposibilidad de hacerlo.

Para este efecto, dentro del tercer día hábil siguiente a su notificación, las
personas mencionadas propondrán al tribunal el lugar y la fecha,
comprendida dentro del término probatorio, de realización de la audiencia
respectiva. El juez los fijará sin más trámite si el interesado así no lo hiciere
ni comunicare su renuncia al derecho que le confiere este artículo.148

Con todo, los miembros y fiscales judiciales de las Cortes y los jueces
letrados que ejerzan sus funciones en el asiento de éstas, no declararán sin
previo permiso de la Corte Suprema, tratándose de algún miembro o fiscal
judicial de este tribunal, o de la respectiva Corte de Apelaciones en los demás
casos. Este permiso se concederá siempre que no parezca que sólo se trata
de establecer, respecto del juez o fiscal judicial presentado como testigo, una
causa de recusación.149

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 56, 340, 362, 380 y 389. Código
Orgánico de Tribunales: artículo 196 Nº 9. Código Procesal Penal: artículo 300. Ley Nº 19.968,
crea los Tribunales de Familia: artículos 35 y 36.

ARTÍCULO 362 (351)

No están obligados a declarar ni a concurrir a la audiencia judicial los


chilenos o extranjeros que gocen en el país de inmunidad diplomática, en
conformidad a los tratados vigentes sobre la materia.

Estas personas declararán por informe, si consintieran a ello


voluntariamente. Al efecto, se les dirigirá un oficio respetuoso, por medio del
Ministerio respectivo.150

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 360 y 361. Código Procesal Penal:
artículo 301. Código Orgánico de Tribunales: artículo 250. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales
de Familia: artículo 36.

ARTÍCULO 363 (352)

Antes de examinar a cada testigo, se le hará prestar juramento al tenor de


la fórmula siguiente: "¿Juráis por Dios decir verdad acerca de lo que se os va
a preguntar?" El interrogado responderá: "Sí juro", conforme a lo dispuesto
en el artículo 62.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 62, 384 y 390. Código Penal:
artículo 209. Código Procesal Penal: artículos 306 y 329. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de
Familia: artículos 38 y 64.

ARTÍCULO 364 (353)

Los testigos de cada parte serán examinados separada y sucesivamente,


principiando por los del demandante, sin que puedan unos presenciar las
declaraciones de los otros.

El tribunal adoptará las medidas conducentes para evitar que los testigos
que vayan declarando puedan comunicarse con los que no hayan prestado
declaración.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 320, 368, 369 y 371. Código Procesal
Penal: artículo 329.

ARTÍCULO 365 (354)

Los testigos serán interrogados personalmente por el juez, y si el tribunal


es colegiado, por uno de sus ministros a presencia de las partes y de sus
abogados, si concurren al acto.

Las preguntas versarán sobre los datos necesarios para establecer si


existen causas que inhabiliten al testigo para declarar y sobre los puntos de
prueba que se hayan fijado. Podrá también el tribunal exigir que los testigos
rectifiquen, esclarezcan o precisen las aseveraciones hechas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 70, 318, 320, 321, 325, 357, 358, 363,
366, 367, 370, 371, 382, 388, 392, 556 y 559. Código Orgánico de Tribunales: artículo 390.
Código Procesal Penal: artículos 307 y 329. Código del Trabajo: artículo 449. Ley Nº 19.968,
crea los Tribunales de Familia: artículo 41.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Carece de validez legal la prueba testimonial que no fue rendida ante


el juez de la causa

La prueba testimonial de la parte demandada no fue tomada ante el


juez de la causa, sino sólo ante un ministro de fe, cuya individualización
se desconoce, por lo que dicha prueba es nula. Por otra parte, la
testifical de la demandante, rendida el último día del término probatorio,
tampoco se llevó a efecto ante el juez de la causa, de lo cual se dejó
expresa constancia en la misma, por lo que ésta también carece de
validez legal, sin perjuicio que en ella tampoco se individualiza el
ministro de fe que la autoriza. n efecto, ello importa que una diligencia
probatoria tan importante como es la prueba testimonial se llevó a efecto
sin que estuviera presente en la misma nada menos que el juez del
tribunal, trámite que resulta ser esencial de acuerdo a lo establecido en
el artículo 365 del Código de Procedimiento Civil. Además, la prueba
testimonial de la demandante, consistente en la declaración de tres
testigos, fue rendida fuera del término probatorio, el que es fatal para
estos efectos, de momento que se rindió un día después de vencido el
probatorio, siendo improcedente en este caso que las partes, aún de
común acuerdo, pudieran prorrogarlo, de manera que dicha prueba
carece de valor probatorio (considerandos 4º, 5º y 8º de la anulación de
oficio).

Corte de Apelaciones de Concepción, 5/01/2018, Rol Nº 916-2017,

Cita online: CL/JUR/82/2018

ARTÍCULO 366 (355)

Cada parte tendrá derecho para dirigir, por conducto del juez, las
interrogaciones que estime conducentes a fin de establecer las causales de
inhabilidad legal que puedan oponerse a los testigos, y a fin de que éstos
rectifiquen, esclarezcan o precisen los hechos sobre los cuales se invoca su
testimonio.

En caso de desacuerdo entre las partes sobre la conducencia de las


preguntas resolverá el tribunal y su fallo será apelable sólo en lo devolutivo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 192, 357, 358, 365, 373 y 392.
Código Procesal Penal: artículos 309, 329 y 330.

ARTÍCULO 367 (356)

Los testigos deben responder de una manera clara y precisa a las


preguntas que se les hagan, expresando la causa por que afirman los hechos
aseverados. No se les permitirá llevar escrita su declaración.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 365, 366, 370, 384 y 391. Código
Penal: artículo 209. Código Procesal Penal: artículo 309. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de
Familia: artículo 40.

ARTÍCULO 368 (357)

La declaración constituye un solo acto que no puede interrumpirse sino por


causas graves y urgentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 340, 364, 369 y 370.


ARTÍCULO 369 (358)

El tribunal, atendido el número de testigos y el de los puntos de prueba,


señalará una o más audiencias para el examen de los que se encuentren en
el departamento.

Procurará también, en cuanto sea posible, que todos los testigos de cada
parte sean examinados en la misma audiencia.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 59, 318, 321, 324, 340, 371, 372, 558
y 795 Nº 6.

ARTÍCULO 370 (359)

Las declaraciones se consignarán por escrito, conservándose en cuanto


sea posible las expresiones de que se haya valido el testigo, reducidas al
menor número de palabras.

Después de leídas por el receptor en alta voz y ratificadas por el testigo,


serán firmadas por el juez, el declarante, si sabe, y las partes, si también
saben y se hallan presentes, autorizándolas un receptor, que servirá también
como actuario en las incidencias que ocurran durante la audiencia de prueba.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 365, 391, 395 y 469. Código
Orgánico de Tribunales: artículo 390.

ARTÍCULO 371 (360)

Si han de declarar testigos que residan fuera del territorio jurisdiccional en


que se sigue el juicio, se practicará su examen por el tribunal que
corresponda, a quien se remitirá copia, en la forma que señala el artículo 77,
de los puntos de prueba fijados.151

El examen se practicará en la forma que establecen los artículos anteriores,


pudiendo las partes hacerse representar por encargados, en conformidad al
artículo 73.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 71, 72, 73, 359, 365 y 380. Código
del Trabajo: artículo 449.
ARTÍCULO 372 (361)

Serán admitidos a declarar solamente hasta seis testigos, por cada parte,
sobre cada uno de los hechos que deban acreditarse.

Sólo se examinarán testigos que figuren en la nómina a que se refiere el


inciso final del artículo 320. Podrá, con todo, el tribunal admitir otros testigos
en casos muy calificados, y jurando la parte que no tuvo conocimiento de ellos
al tiempo de formar la nómina de que trata el inciso anterior.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 90, 318, 320 y 321. Código Procesal
Penal: artículos 276 y 336. Código del Trabajo: artículo 449. Ley Nº 18.287, sobre
Procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículo 12. Código Tributario: artículo 132.

ARTÍCULO 373 (362)

Solamente podrán oponerse tachas a los testigos antes de que presten su


declaración. En el caso del inciso final del artículo anterior, podrán también
oponerse dentro de los tres días subsiguientes al examen de los testigos.

Sólo se admitirán las tachas que se funden en alguna de las inhabilidades


mencionadas en los artículos 357 y 358, y con tal que se expresen con la
claridad y especificación necesarias para que puedan ser fácilmente
comprendidas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 356, 357, 358, 365, 366, 372, 374,
375 y 557.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Carácter excepcional de las tachas

El profesor don Mario Casarino Viterbo, en su Manual de Derecho


Procesal (Derecho Procesal Civil), Tomo IV, sexta edición, Colección
Manuales Jurídicos, Editorial Jurídica de Chile, página 85, expone que:
"Por consiguiente, para que una tacha sea admitida a tramitación
requiere fundarse en causa legal y ser expresada con la claridad y
especificación necesarias para que puedan fácilmente ser
comprendidas. Lo primero, desde el momento en que la institución de
las tachas es de excepción y sólo puede existir en los casos en que la
ley expresamente lo consagra; y lo segundo, a fin de que no exista la
menor duda acerca de los fundamentos de hecho en que la tacha se
basa, y colocar así también a la contraria en condiciones adecuadas
para rebatirla y al tribunal para fallarla. Si al formularse la tacha el
oponente no cumple con los dos requisitos legales señalados, el tribunal
podrá negarse a admitirla a tramitación y desecharla desde luego. Así
se comprende, por lo demás, del contexto de la frase: "Sólo se admitirán
las tachas" (considerando 5º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Arica, 18/05/2012, Rol Nº 86-2012,

Cita online: CL/JUR/4334/2012

ARTÍCULO 374 (363)

Opuesta la tacha y antes de declarar el testigo, podrá la parte que lo


presenta pedir que se omita su declaración y que se reemplace por la de otro
testigo hábil de los que figuran en la nómina respectiva.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 320, 356, 372 y 373.

ARTÍCULO 375 (364)

Las tachas opuestas por las partes no obstan al examen de los testigos
tachados; pero podrán los tribunales repeler de oficio a los que notoriamente
aparezcan comprendidos en alguna de las que señala el artículo 357.

La apelación que se interponga en este caso se concederá sólo en el efecto


devolutivo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 192, 194 Nº 2, 320, 372 y 373.

ARTÍCULO 376 (365)

Cuando el tribunal lo estime necesario para resolver el juicio, recibirá las


tachas a prueba, la cual se rendirá dentro del término concedido para la
cuestión principal. Pero si éste está vencido o lo que de él reste no sea
suficiente, se ampliará para el solo efecto de rendir la prueba de tachas hasta
completar diez días, pudiendo además solicitarse el aumento extraordinario
que concede el artículo 329 en los casos a que él se refiere.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 90, 320, 323 y 329.

ARTÍCULO 377 (366)

Son aplicables a la prueba de tachas las disposiciones que reglamentan la


prueba de la cuestión principal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 90, 318, 320 y 323.

ARTÍCULO 378 (367)

No se admitirá prueba de testigos para inhabilitar a los que hayan declarado


sobre las tachas deducidas. Lo cual no obsta para que el tribunal acepte otros
medios probatorios, sin abrir término especial, y tome en cuenta las
incapacidades que contra los mismos testigos aparezcan en el proceso.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 357, 358, 375 y 377. Código del
Trabajo: artículo 450.

ARTÍCULO 379 (368)

Las resoluciones que ordenan recibir prueba sobre las tachas opuestas son
inapelables.

No obstante lo dispuesto en el inciso anterior, la legalidad de las tachas y


su comprobación serán apreciadas y resueltas en la sentencia definitiva.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 170, 357, 358 y 376. Código del
Trabajo: artículo 450.

ARTÍCULO 380 (369)

Siempre que lo pida alguna de las partes, mandará el tribunal que se cite a
las personas designadas como testigos en la forma establecida por el
artículo 56, indicándose en la citación el juicio en que debe prestarse la
declaración y el día y hora de la comparecencia.

El testigo que legalmente citado no comparezca podrá ser compelido por


medio de la fuerza a presentarse ante el tribunal que haya expedido la
citación, a menos que compruebe que ha estado en imposibilidad de
concurrir.

Si compareciendo se niega sin justa causa a declarar, podrá ser mantenido


en arresto hasta que preste su declaración.

Todo lo cual se entiende sin perjuicio de la responsabilidad penal que


pueda afectar al testigo rebelde.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 56, 159, 274, 276, 359, 371, 381, 543,
663 y 795 Nº 6. Código Penal: artículos 209 y 494 Nº 12. Código Procesal Penal: artículos 33,
298, 299 y 313. Código Orgánico de Tribunales: artículo 390. Código del Trabajo: artículo 443.
Ley Nº 19.253, sobre Protección, Fomento y Desarrollo de los Indígenas: artículo 56. Ley
Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia: artículos 33 y 34. Ley Nº 18.287 sobre Procedimiento
ante Juzgados de Policía Local: artículo 13.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Demandante que al presentar lista de testigos no solicitó la citación


judicial de ellos. Improcedencia de acoger entorpecimiento.

Es un hecho de la causa que la actora al presentar su lista de testigos,


no solicitó la citación judicial de aquellos, pudiendo haberlo efectuado
en conformidad al derecho que le otorga el artículo 380 del Código de
Procedimiento Civil. El haber solicitado oportunamente la citación de los
testigos, resulta un requisito esencial en materia civil para la
procedencia de una nueva audiencia con el fin de tomar la declaración
del testigo, previo reclamo del entorpecimiento por no hacer
comparecido éste. Así no procedía por la resolución impugnada, acoger
el entorpecimiento alegado por la actora y señalar un nuevo día y hora
para la declaración de sus testigos los cuales no fueron citados en su
oportunidad, no pudiendo en sede civil, dar curso al entorpecimiento ni
aún a pretexto de que la garantía del debido proceso implica asegurar
el derecho a defensa de las partes toda vez que ha sido ésta, la parte
demandante, quien al no solicitar la citación de sus testigos renunció al
derecho de hacerlos comparecer bajo apercibimiento, previa alegación
de entorpecimiento de haber expirado el término probatorio ordinario,
asumiendo voluntariamente la obligación y responsabilidad de hacerlos
comparecer por su cuenta (considerandos 6º, 7º y 9º de la sentencia de
la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Punta Arenas, 25/04/2019, Rol Nº 319-2018,


Cita online: CL/JUR/2296/2019

2. Facultad del juez de policía local para citar a prestar declaración


indagatoria bajo apercibimiento de ser compelido por medio de la
fuerza

En la especie, el juez de policía local recurrido se ha atenido al marco


legal que regula el respectivo procedimiento, pues el artículo 13 de la
Ley Nº 18.287, en relación al artículo 380 del Código de Procedimiento
Civil, faculta expresamente a dicho magistrado para citar a prestar
declaración indagatoria, bajo apercibimiento de despachar en su contra
arresto en caso de no comparecencia. Así las cosas, no sólo se ha
ajustado a la normativa vigente, si no se descarta una arbitrariedad en
su obrar, pues el juez recurrido ha dispuesto dicho apercibimiento en la
segunda citación a prestar declaración, luego de no comparecer el
amparado a la primera, por lo que no es posible sostener la existencia
de una amenaza arbitraria e ilegal que vulnere la garantía del artículo 19
Nº 7 de la Constitución, esta es, la libertad personal (considerando 4º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 19/08/2016, Rol Nº 796-2016,

Cita online: CL/JUR/6004/2016

ARTÍCULO 381 (370)

Tiene el testigo derecho para reclamar de la persona que lo presenta, el


abono de los gastos que le imponga la comparecencia.

Se entenderá renunciado este derecho si no se ejerce en el plazo de veinte


días, contados desde la fecha en que se presta la declaración.

En caso de desacuerdo, estos gastos serán regulados por el tribunal sin


forma de juicio y sin ulterior recurso.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 25 y 369. Código Procesal Penal:


artículos 277 y 312.

ARTÍCULO 382 (372)


Si el testigo no supiere el idioma castellano, será examinado por medio de
un intérprete mayor de dieciocho años, quien prometerá bajo juramento
desempeñar bien y fielmente el cargo.

Por conducto del intérprete se interrogará al testigo y recibirán sus


contestaciones, las cuales serán consignadas en idioma del testigo, si éste
no entendiere absolutamente castellano. En tal caso, se pondrá al pie de la
declaración traducción que de ella haga el intérprete.

Si el testigo fuere sordo, las preguntas le serán dirigidas por escrito; y si


fuere mudo, dará por escrito sus contestaciones.

Si no fuere posible proceder de esta manera, la declaración del testigo será


recibida por intermedio de una o más personas que puedan entenderse con
él por medio de la lengua de señas, por signos, o que comprendan a los
sordos o sordomudos. Estas personas prestarán previamente el juramento
de que trata el inciso primero.152

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 62, 63, 365, 366, 370 y 413.

ARTÍCULO 383 (373)

Los testimonios de oídas, esto es, de testigos que relatan hechos que no
han percibido por sus propios sentidos y que sólo conocen por el dicho de
otras personas, únicamente podrán estimarse como base de una presunción
judicial.

Sin embargo, es válido el testimonio de oídas cuando el testigo se refiere a


lo que oyó decir a alguna de las partes, en cuanto de este modo se explica o
esclarece el hecho de que se trata.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 384, 398, 426 y 427.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Valoración de los dichos de los testigos de oídas es limitada.

Conforme lo prescribe el artículo 383 del Código de Procedimiento


Civil la valoración de los dichos de estos testigos es limitada,
únicamente podrán estimarse como base de una presunción judicial,
salvo que los dichos se refieran a lo que oyó decir a alguna de las partes,
en cuanto de este modo se explica o esclarece el hecho de que se trata,
cuyo no es el caso de los deponentes de la ejecutada (considerando 8º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 6/02/2019, Rol Nº 7783-2018,

Cita online: CL/JUR/636/2019

ARTÍCULO 384 (374)

Los tribunales apreciarán la fuerza probatoria de las declaraciones de los


testigos conforme a las reglas siguientes:

1ª La declaración de un testigo imparcial y verídico constituye una


presunción judicial cuyo mérito probatorio será apreciado en conformidad al
artículo 426;

2ª La de dos o más testigos contestes en el hecho y en sus circunstancias


esenciales, sin tacha, legalmente examinados y que den razón de sus dichos,
podrá constituir prueba plena cuando no haya sido desvirtuada por otra
prueba en contrario;

3ª Cuando las declaraciones de los testigos de una parte sean


contradictorias con las de los testigos de la otra, tendrán por cierto lo que
declaren aquellos que, aun siendo en menor número, parezca que dicen la
verdad por estar mejor instruidos de los hechos, o por ser de mejor fama, más
imparciales y verídicos, o por hallarse más conformes en sus declaraciones
con otras pruebas del proceso;

4ª Cuando los testigos de una y otra parte reúnan iguales condiciones de


ciencia, de imparcialidad y de veracidad, tendrán por cierto lo que declare el
mayor número;

5ª Cuando los testigos de una y otra parte sean iguales en circunstancias


y en número, de tal modo que la sana razón no pueda inclinarse a dar más
crédito a los unos que a los otros, tendrán igualmente por no probado el
hecho; y

6ª Cuando sean contradictorias las declaraciones de los testigos de una


misma parte, las que favorezcan a la parte contraria se considerarán
presentadas por ésta, apreciándose el mérito probatorio de todas ellas en
conformidad a las reglas precedentes.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 170 Nº 4, 357, 358, 367, 383, 398,
426, 428 y 429. Código Civil: artículos 1701, 1708, 1709 y 1711. Código de Comercio:
artículos 128, 129 y 618. Código Procesal Penal: artículos 297 y 324. Código del Trabajo:
artículo 450. Código Sanitario: artículo 166. Auto acordado sobre forma de las sentencias de
30.09.1920: Nºs. 5, 6 y 7.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Valoración de la prueba testimonial es privativa de los jueces del


fondo

Solamente los jueces del fondo se encuentran facultados para fijar los
hechos de la causa, y efectuada correctamente dicha labor en atención
al mérito de las probanzas aportadas, ellos resultan inamovibles
conforme a lo previsto en el artículo 785 del Código de Procedimiento
Civil, no siendo posible su revisión por la vía de casación que se analiza
salvo que se haya denunciado de modo eficaz la vulneración de las
leyes reguladoras de la prueba que han permitido establecer el
presupuesto fáctico que viene asentado en el fallo. Dicho lo anterior y
revisados los antecedentes, no se advierte contravención de los
artículos 384 y 408 del Código de Procedimiento Civil, toda vez que la
apreciación de la prueba testimonial entendida como el análisis que
efectúan de ella los sentenciadores de la instancia, al igual que la
actividad de ponderación de la inspección personal del tribunal, quedan
entregadas a dichos magistrados y escapan al control del Tribunal de
Casación (considerando 9º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/03/2018, Rol Nº 44584-2017,


Cita online: CL/JUR/4396/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 28/08/2018, Rol Nº 11999-2018,

Cita online: CL/JUR/4800/2018

— Corte Suprema, 8/05/2018, Rol Nº 3659-2018,

Cita online: CL/JUR/4615/2018

— Corte Suprema, 15/03/2018, Rol Nº 44204-2017,

Cita online: CL/JUR/4671/2018


2. Artículo 384 del Código de Procedimiento Civil no constituye ley
reguladora de la prueba

Respecto de la prueba de testigos la jurisprudencia del Máximo


Tribunal ha sostenido invariablemente que el artículo 384 del Código de
Procedimiento Civil no es una norma reguladora de la prueba, por
cuanto ella consagra reglas que no disponen parámetros fijos de
apreciación que obliguen en uno u otro sentido a los jueces de la
instancia, siendo éstos soberanos en la valoración de la prueba
testimonial, por lo que este aspecto no es susceptible de ser atacado a
través del recurso de casación en el fondo (considerandos 5º y 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/06/2019, Rol Nº 28129-2018,


Cita online: CL/JUR/3253/2019

3. Apreciación de la prueba de testigos no es susceptible de ser


denunciada por medio del recurso de casación en el fondo.

La demandante recurrente de casación acusa infracción al


artículo 384 del Código de Procedimiento Civil, manifestándose en
desacuerdo con los jueces de la instancia en cuanto al valor asignado a
las declaraciones de dos testigos que presentó, quienes, en su
concepto, están contestes en los hechos y en sus circunstancias
esenciales, siendo imparciales. Sin embargo, preciso es recordar que el
artículo recién mencionado no permite fundar una casación en el fondo.
De ahí que la alegación en este sentido sea inoficiosa, pues la
recurrente atribuye a esa norma un carácter del que carece. En efecto,
se ha sostenido en forma reiterada por la Corte Suprema que esa
disposición no es norma reguladora de la prueba, toda vez que no
impone un valor probatorio determinado de carácter obligatorio para el
juez, sino que le entrega su estimación. En ese tenor, se ha dicho que
"la apreciación de la prueba de testigos, no es susceptible de ser
denunciada por medio del recurso de casación en el fondo, dado que
esta labor es privativa de los jueces de la instancia, circunstancia que
quedó de manifiesto en la historia fidedigna de su establecimiento al
interior de la Comisión Revisora del Proyecto de Código de
Procedimiento Civil, que consideró la disposición sólo como principios
generales dados a los jueces, circunstancia que precisaría luego la
comisión mixta del senador Ballesteros, quien expuso que "deberá
dejarse amplia libertad al tribunal para apreciar el mérito probatorio de
las declaraciones de testigos" (Corte Suprema, sentencia 27 07 2006,
RDJ, tomo CIII, sección primera, p. 591; en el mismo sentido, Corte
Suprema, sentencia 30 08 2006, RDJ, tomo CIII, sección primera,
p. 654; y Corte Suprema, sentencia 27 09 2006, RDJ, tomo CIII, sección
primera, p. 679) (considerando 9º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 5/03/2018, Rol Nº 55055-2016,


Cita online: CL/JUR/1031/2018

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 384 REGLA 1ª)

1. Prueba testimonial que sirve de base para una presunción judicial

La tercerista produjo, además, la prueba testimonial, consistente en


la declaración del testigo, quien interrogado sobre los puntos de prueba,
sin tacha y dando razón de sus dichos, identificó los bienes
embargados, constándole que los mismos son de propiedad del
tercerista; asimismo identificó el domicilio en que se practicó el
embargo, y señalando que la ejecutada ya no vivía allí. Lo anterior,
unido al hecho de que la declaración del testigo que no fue tachado por
falta de imparcialidad, ni por otra causa, y su veracidad concuerda en
que no se encuentran sus dichos desvirtuados por alguna otra prueba
en contrario, estimándose por esta Corte como base de una presunción
judicial, de acuerdo con el artículo 384 Nº 1 del Código de
Procedimiento Civil, para efectos de presumir, en virtud de su gravedad
y precisión suficientes, de acuerdo con el artículo 426 del mismo
Código, la posesión exclusiva de los bienes disputados en manos del
jefe de hogar del domicilio en que se trabó el embargo [...]
(considerandos 2º a 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 17/08/2018, Rol Nº 12106-2017,

Cita online: CL/JUR/4611/2018

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 384 REGLA 2ª)

1. Artículo 384 Nº 2 del Código de Procedimiento Civil no contiene leyes


reguladoras de la prueba
Si bien el recurso denuncia la infracción del artículo 384 Nº 2 del
Código de Procedimiento Civil, cabe reiterar que tal norma no es
propiamente reguladora de la prueba, ello, en tanto los jueces del mérito
han hecho uso de la facultad que la ley les otorga para apreciar el valor
probatorio de este medio, razón por la que tal apreciación escapa al
control de casación. En esta línea de razonamiento para tener éxito el
arbitrio en examen forzosamente habría que modificar los hechos que
vienen establecidos en la causa, actividad que resulta impropia en el
recurso de casación en análisis (considerandos 5º a 7º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 8/05/2018, Rol Nº 3505-2018,


Cita online: CL/JUR/4616/2018

2. Valoración de la fuerza probatoria de las declaraciones de los testigos


es facultad privativa de los jueces de fondo

En lo que toca a la acusada infracción del artículo 384 Nº 2 del Código


de Procedimiento Civil, cabe señalar que la apreciación de la prueba
testimonial, entendida como el análisis que efectúan de ella los
sentenciadores de la instancia, queda entregada a esos magistrados y
escapa al control del tribunal de casación, razón suficiente para concluir
que tal alegación no puede prosperar (considerando 4º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/12/2018, Rol Nº 18637-2018,


Cita online: CL/JUR/6796/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 18/03/2019, Rol Nº 29721-2018,

Cita online: CL/JUR/1397/2019

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 384 REGLA 3ª)

1. El tribunal debiera estar facultado para desestimar, no sólo el dicho


de dos, sino de cualquier número de testigos, cuando en su concepto
no fueren dignos de fe sus testimonios
La Comisión Revisora del Proyecto de Código de Procedimiento Civil
consideró las normas del artículo 384 como principios generales para
los jueces, circunstancia que precisaría luego la Comisión Mixta y al
efecto puede citarse que el senador señor Ballesteros expuso que
"debería dejarse amplia libertad al tribunal para apreciar el mérito
probatorio de las declaraciones de testigos, como quiera que en realidad
constituyen sólo una presunción, en el sentido lato de la palabra. El
señor Vergara recuerda que así lo ha sostenido en otras ocasiones en
que se ha tratado de cuestiones relacionadas con la apreciación de la
prueba. De tal manera que, a su juicio, el tribunal debiera estar facultado
para desestimar no sólo el dicho de dos, sino de cualquier número de
testigos, cuando en su concepto no fueren dignos de fe sus testimonios.
La Comisión aceptó las ideas de los señores Ballesteros y Vergara y
para consignarlas en el proyecto base acordó reemplazar las palabras
"hará" que emplea el número 2º por la frase "podrá constituir". Además
de lo expuesto precedentemente, se debe indicar que la apreciación de
la prueba testimonial, entendida como el análisis que efectúan de ella
los sentenciadores de la instancia par a establecer cada uno de los
elementos que consagra el legislador para regular su fuerza probatoria,
queda entregado a dichos magistrados y escapa al control del Tribunal
de Casación" (considerando 6º de la sentencia de casación de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 25/11/2011, Rol Nº 10048-2011,


Cita online: CL/JUR/10169/2011

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 384 REGLA 5ª)

1. Artículo 384 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil no constituye


regla reguladora de la prueba

Que en relación a las reglas 3ª y 5ª del artículo 384 del Código de


Procedimiento Civil, como reiteradamente lo ha sostenido este Tribunal,
no son normas de las denominadas reguladoras de la prueba, razón por
la cual, su aplicación al caso concreto y la respectiva valoración de la
prueba de testigos de una o ambas partes, según sea el caso, queda
entregada a los jueces del grado y se agota en las instancias del juicio
(considerando 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 24/05/2004, Rol Nº 4656-2002,


Cita online: CL/JUR/3406/2004
§ 4. De la confesión en juicio

ARTÍCULO 385 (375)

Fuera de los casos expresamente previstos por la ley, todo litigante está
obligado a declarar bajo juramento, contestada que sea la demanda, sobre
hechos pertenecientes al mismo juicio, cuando lo exija el contendor o lo
decrete el tribunal en conformidad al artículo 159.

Esta diligencia se podrá solicitar en cualquier estado del juicio y sin


suspender por ella el procedimiento, hasta el vencimiento del término
probatorio en primera instancia, y hasta antes de la vista de la causa en
segunda. Este derecho sólo lo podrán ejercer las partes hasta por dos veces
en primera instancia y una vez en segunda; pero, si se alegan hechos nuevos
durante el juicio, podrá exigirse una vez más.153

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 62, 159, 273 Nº 1, 274, 327, 360, 390,
394, 433, 435 y 807. Código Civil: artículos 157, 1446, 1447, 1701, 1713, 1739 y 2485. Código
del Trabajo: artículo 445. Código de Derecho Internacional Privado: artículo 405. Ley Nº 19.968,
crea los Tribunales de Familia: artículo 50.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Casos en que se encuentra excluida la prueba confesional

Por regla general, la confesión judicial es admisible en toda clase de


actos y contratos encontrándose la regla general sobre su procedencia
en los artículos 1713 del Código Civil y 385 del Código de Procedimiento
Civil. Excepcionalmente no es procedente en los siguientes casos: a) en
los actos y contratos solemnes (artículo 1701 del Código Civil); b) en el
juicio de divorcio o nulidad de matrimonio por encontrarse
comprometido el interés público y de orden social; c) en los casos
expresamente exceptuados por la ley como son por ejemplo: 1. En
juicios de separación de bienes por mal estado de los negocios del
marido, la confesión de éste no hace prueba (artículo 157 Código Civil),
2. La declaración de uno de los cónyuges que afirme ser suya o
debérsele una cosa perteneciente a la sociedad conyugal, ni la
confesión del otro, ni ambas juntas, se estimarán suficiente prueba,
aunque se hagan bajo juramento (artículo 1739 inciso segundo del
Código Civil), 3. En la prelación de créditos la confesión del marido,
padre o madre de familia, o del tutor o curador fallidos, no hará prueba
por sí sola contra los acreedores (artículo 2485 del Código Civil) y 4. La
confesión extrajudicial verbal sólo debe considerarse en los casos en
que es admisible la prueba de testigos (artículo 398 inciso primero del
Código de Procedimiento Civil) (considerando 7º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 15/01/2013, Rol Nº 8918-2012,


Cita online: CL/JUR/103/2013

2. Improcedencia de obligar al absolvente a declarar bajo juramento


respecto de actuaciones realizadas en juicio diverso

Las preguntas 8, 9 y 10 del pliego de posiciones versan sobre


actuaciones procesales realizadas en otro juicio y no sobre hechos del
actualmente en tramitación, de manera que conforme lo prescribe el
artículo 385 del Código de Procedimiento Civil no existe obligación
procesal del absolvente de declarar bajo juramento respecto de lo que
se le preguntó, y por ende tampoco puede tenérsele por confeso ante
su falta de respuesta, habiéndose en consecuencia aplicado
erróneamente la sanción del artículo 394 del Código de Procedimiento
Civil (considerando 11º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 2/02/2018, Rol Nº 6383-2017,

Cita online: CL/JUR/3777/2018

3. Solicitud de absolución de posiciones de uno de los demandados


constituye gestiones útiles

Por su parte, el artículo 385 del texto legal citado, referido a la prueba
confesional, establece que esta podrá ser solicitada en cualquier estado
del juicio, hasta el vencimiento del término probatorio en primera
instancia, debiéndose tener en cuenta además que todo litigante está
obligado a absolver, bajo juramento, contestada que sea la demanda.
De este modo, las actuaciones referidas constituyen actuaciones útiles,
pues mediante ellas se instó por dar curso al procedimiento, rindiéndose
una prueba y pidiéndose el inicio de otra, conforme lo autoriza la ley
procesal.
Corte Suprema, 2/02/2018, Rol Nº 21/03/2019,
Cita online: CL/JUR/1526/2019

ARTÍCULO 386 (376)

Los hechos acerca de los cuales se exija la confesión podrán expresarse


en forma asertiva o en forma interrogativa, pero siempre en términos claros y
precisos, de manera que puedan ser entendidos sin dificultad.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 394. Código del Trabajo: artículo 445.
Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia: artículo 51.

ARTÍCULO 387 (377)

Mientras la confesión no sea prestada, se mantendrán en reserva las


interrogaciones sobre que debe recaer.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 34. Código Orgánico de Tribunales:


artículos 379 y 380 Nº 3.

ARTÍCULO 388 (378)

Si el tribunal no comete al secretario o a otro ministro de fe la diligencia,


mandará citar para día y hora determinados al litigante que ha de prestar la
declaración.

Siempre que alguna de las partes lo pida, debe el tribunal recibir por sí
mismo la declaración del litigante.

Si el litigante se encuentra fuera del territorio del tribunal que conoce de la


causa, será tomada su declaración por el tribunal competente, quien
procederá en conformidad a los dos incisos anteriores.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 48, 70 a 72, 75, 76, 365, 368 y 389.
Código Orgánico de Tribunales: artículos 379, 388 y 390. Código del Trabajo: artículos 444 y
445.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Las respuestas dadas por el absolvente de posiciones, consistentes
en un "no me consta", no pueden considerarse evasivas

Las respuestas dadas por el absolvente de posiciones, consistentes


en un "no me consta", no pueden considerarse evasivas, esto es, que
eludan o esquiven las preguntas, ya que expresan con claridad y
precisión que al deponente no le constan los hechos indicados en el
pliego de posiciones, por lo cual no puede afirmarlas o negarlas,
cumpliéndose así con la norma del artículo 391 del Código de
Procedimiento Civil, sin que por lo demás la parte demandante, quien
estuvo presente en la audiencia respectiva, haya formulado en ella
observaciones o peticiones en los términos que la faculta el artículo 392
del citado cuerpo legal en relación a las preguntas o respuestas de que
se trata, por lo que los jueces recurridos, al resolver de manera distinta,
han incurrido en falta enmendable por vía del recurso de queja
(considerando único de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/09/1989, Rol Nº 9514-1989,


Cita online: CL/JUR/360/1989

ARTÍCULO 389 (379)

Están exentos de comparecer ante el tribunal a prestar la declaración de


que tratan los artículos precedentes:

1º El Presidente de la República, los Ministros de Estado, los Senadores y


Diputados, los Delegados Presidenciales Regionales dentro de la región en
que ejercen sus funciones; los miembros de la Corte Suprema o de alguna
Corte de Apelaciones, los Fiscales Judiciales de estos tribunales, el Fiscal
Nacional y los fiscales regionales;154

2º Los que por enfermedad o por cualquier otro impedimento calificado por
el tribunal se hallen en imposibilidad de comparecer a la audiencia en que
hayan de prestar la declaración; y

3º Las mujeres, en caso que el tribunal estime prudente eximirlas de esta


asistencia.

Cuando haya de prestar esta declaración alguna de las personas


exceptuadas en los números precedentes, el juez se trasladará a casa de ella
con el objeto de recibir la declaración o comisionará para este fin al secretario.
En los tribunales colegiados se comisionará para esta diligencia a alguno
de los ministros del mismo o al secretario.

Si la persona que haya de prestar declaración en la forma prevenida en


este artículo, se encuentra fuera del territorio del tribunal que conoce de la
causa, encargará éste la diligencia al juez competente de la residencia actual
del litigante. El juez exhortado practicará por sí mismo la diligencia o la
cometerá a su secretario.

No se podrá comisionar al secretario para tomar la confesión cuando la


parte haya solicitado que se preste ante el tribunal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 70, 71, 72, 75, 76, 361, 362, 385 y
388. Código Orgánico de Tribunales: artículos 379, 380 y 388.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
(ART. 389 REGLA 2ª)

1. Imposibilidad física de confesante no constituye impedimento para la


realización de la absolución de posiciones

La imposibilidad física por razones de salud que presenta la


demandante no constituye un impedimento para que pueda absolver
posiciones, ya que si bien no está en condiciones de movilizarse y
concurrir personalmente al tribunal a prestar la declaración que se le
requiere, es posible que la diligencia se practique en su domicilio,
debiendo el juez trasladarse a su casa con el objeto de recibir la
declaración o comisionar para este fin al secretario, como lo establece
el artículo 389 del Código de Procedimiento Civil. En consecuencia, la
oposición que dedujo el incidentista no tiene asidero en la ley, atendido
el mérito de los antecedentes del proceso, debiendo cumplirse la
diligencia de absolución de posiciones de dicha parte como lo establece
el referido artículo 389 (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 1/03/2017, Rol Nº 116-2017,

Cita online: CL/JUR/768/2017

ARTÍCULO 390 (380)


Antes de interrogar al litigante, se le tomará juramento de decir verdad en
conformidad al artículo 363.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 62 y 363.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Antes de interrogar al absolvente se le debe tomar juramento, el cual


constituye un requisito esencial, cuyo incumplimiento es susceptible
de casación en la forma

Cabe señalar que los testigos se deben examinar después de prestar


juramento y, en lo referente a la confesión en juicio, antes de interrogar
al litigante se le debe tomar juramento de decir la verdad, conforme a lo
prevenido en los artículos 363 y 390 del Código de Procedimiento Civil,
respectivamente. Que, por consiguiente, el juez no puede ordenar la
apertura del sobre de las posiciones inmediatamente, después de llamar
a conciliación a las partes, y en seguida negarse a interrogar al
absolvente y a los testigos, previo juramento en ambos casos, ya que
aún no procedía que diera por iniciada la prueba, más aún, que el
letrado en ese instante ingresó a la audiencia. Que, por tanto, las
circunstancias descritas configuran la causal de casación en la forma
que consigna el artículo 768 Nº 9, en relación con lo prevenido en el
artículo 795 Nº 4, ambos del Código de Procedimiento Civil, dado que
se omitió en la práctica de una diligencia que tiene el carácter de
esencial, lo que produjo indefensión a la recurrente, con lo que se
incurrió en un vicio que anula la audiencia de conciliación y prueba de 5
de enero de 1999, que se llevara a efecto de fojas 77 a 81
(considerandos 5º a 7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Talca, 18/04/2000, Rol Nº 920-2000,

Cita online: CL/JUR/1994/2000

ARTÍCULO 391 (381)

La declaración deberá prestarse inmediatamente, de palabra y en términos


claros y precisos. Si el confesante es sordo o sordomudo, podrá escribir su
confesión delante del tribunal o ministro de fe encargado de recibirla o, en su
caso, se aplicará lo dispuesto en el artículo 382.155
Si se trata de hechos personales, deberá prestarse afirmándolos o
negándolos. Podrá, sin embargo, el tribunal admitir la excusa de olvido de los
hechos, en casos calificados, cuando ella se funde en circunstancias
verosímiles y notoriamente aceptables.

En todo caso podrá el confesante añadir las circunstancias necesarias para


la recta y cabal inteligencia de lo declarado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 367, 368, 370, 382, 386, 394, 401 y
402.

ARTÍCULO 392 (382)

Puede todo litigante presenciar la declaración del contendor y hacer al


tribunal las observaciones que estime conducentes para aclarar, explicar o
ampliar las preguntas que han de dirigírsele.

Puede también, antes que termine la diligencia y después de prestada la


declaración, pedir que se repita si hay en las respuestas dadas algún punto
obscuro o dudoso que aclarar.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 365, 366 y 370.

ARTÍCULO 393 (383)

Si el litigante citado ante el tribunal para prestar declaración no comparece,


se le volverá a citar bajo los apercibimientos que expresan los artículos
siguientes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 48, 78, 394, 397 y 400. Código del
Trabajo: artículo 445. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia: artículo 52.

ARTÍCULO 394 (384)

Si el litigante no comparece al segundo llamado, o si, compareciendo, se


niega a declarar o da respuestas evasivas, se le dará por confeso, a petición
de parte, en todos aquellos hechos que estén categóricamente afirmados en
el escrito en que se pidió la declaración.
Si no están categóricamente afirmados los hechos, podrán los tribunales
imponer al litigante rebelde una multa que no baje de medio sueldo vital ni
exceda de un sueldo vital, o arrestos hasta por treinta días sin perjuicio de
exigirle la declaración. Si la otra parte lo solicita, podrá también suspenderse
el pronunciamiento de la sentencia hasta que la confesión se preste.156

Cuando el interrogado solicite un plazo razonable para consultar sus


documentos antes de responder, podrá otorgársele, siempre que haya
fundamento plausible para pedirlo y el tribunal lo estime indispensable, o
consienta en ello el contendor. La resolución del tribunal que conceda plazo
será inapelable.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 48, 78, 252, 274, 380, 386, 397 y 400.
Código Civil: artículo 1713. Código del Trabajo: artículo 445. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales
de Familia: artículo 52.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Apercibimiento del art. 394 del Código de Procedimiento Civil sólo


produce efectos si se solicita citación del absolvente bajo
apercibimiento expreso de dicho artículo

En la especie, necesariamente ha de concluirse que en esta causa el


demandado, nunca ha sido citado a absolver posiciones bajo el
apercibimiento del artículo 394 del Código de Procedimiento Civil, por
lo que a su respecto no resulta procedente hacer efectivas las
consecuencias que emanan del apercibimiento contenido en esta
disposición. En este sentido, la jurisprudencia ha señalado que "para
que un litigante incurra en el apercibimiento de darle por absueltas las
posiciones en su rebeldía, es menester que sea citado por segunda vez
a absolverlas y con la prevención expresa de que su rebeldía será
sancionada con el aludido apercibimiento que establece el artículo 394".
(C. Tacna, 5 de enero de 1914. Gaceta de los Tribunales, 1914,
1er semestre, Nº 87, p. 185). Lo anterior se encuentra en plena
concordancia con lo señalado en el artículo 397 de este mismo texto
legal, en cuanto establece la obligación del procurador de hacer
comparecer a su mandante para absolver posiciones "bajo el
apercibimiento indicado en el artículo 394", lo que claramente no ocurrió
en este caso, porque en ningún momento se le citó bajo esos términos,
y sin que pueda atribuírsele los efectos del apercibimiento del
artículo 394 a la sola mención que se cita absolver "bajo apercibimiento
legal", expresión que resulta imprecisa y cuestionable, considerando
que el referido artículo 394, conlleva distintos apercibimientos, con
distintos efectos o consecuencias. Lo razonado impone acoger el
recurso de apelación deducido, puesto que de la exégesis armónica de
los preceptos legales indicados, resulta que la no comparecencia del
absolvente en segunda citación, sólo producirá los efectos del
artículo 394 del código del ramo, en la medida que se hubiese solicitado
su citación bajo apercibimiento expreso de este artículo, no bastando la
simple expresión que se le cita "bajo apercibimiento legal"
(considerandos 5º a 7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 13/08/2019, Rol Nº 2089-2018,

Cita online: CL/JUR/4750/2019

2. Incumplimiento del deber de considerar las afirmaciones categóricas


contenidas en el pliego de posiciones

La demandante instó por la prueba de confesión en juicio del


representante legal de la demandada y, habiendo mediado las dos
citaciones de rigor, sin que el referido litigante compareciera a
manifestar lo pertinente al cuestionario redactado por la actora, a
solicitud de esta última se hizo efectivo el apercibimiento dispuesto en
el artículo 394 del Código de Procedimiento Civil. Todo esto, según
consta de las piezas pertinentes del expediente. Luego, corre agregado
el pliego con las posiciones para el interrogatorio del demandado en
mención, conformado por once preguntas elaboradas por la
demandante, todas ellas referidas a los fundamentos básicos de su
demanda. Examinado el tenor del pliego de posiciones, los
sentenciadores advierten que en el mismo se formularon en términos
categóricos las once aseveraciones que contiene, razón por la que al
apreciar su valor probatorio, estiman que se le deberá tener como
productora de plena fe respecto a los hechos personales de la parte que
la presta, agregando que, la mayor parte de ellas tienen, además, más
de un principio de prueba por escrito. En este contexto y atendido que
en el pliego de posiciones dirigidas al demandado, se incluyeron
variados hechos, en su mayoría formulados en afirmaciones
categóricas, es ineludible concluir que, al no haber sido considerados
por la sentenciadora efectivamente se infringieron las normas que
gobiernan el medio de prueba en referencia, en particular, los
artículos 399 y 400 del Código de Procedimiento Civil y 1713 del Código
Civil (considerandos 7º a 9º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 2/08/2019, Rol Nº 5239-2018,

Cita online: CL/JUR/4407/2019

3. Hechos señalados en el pliego de posiciones redactados en forma


asertiva

De acuerdo al artículo 394 inciso 1º del Código de Procedimiento


Civil, que establece "Si el litigante no comparece al segundo
llamado...se le dará por confeso, a petición de parte, en todos aquellos
hechos que estén categóricamente afirmados en el escrito en que se
pidió la declaración" y como los hechos señalados en el pliego de
posiciones acompañado se encuentran redactados en forma asertiva,
se debe tener al demandado por confeso, dándole el valor de plena
prueba, tanto al hecho de existir el contrato de arrendamiento entre
las partes como al monto de la renta y al hecho de estar en mora de su
pago desde el mes de octubre de 2015 (considerando 2º de la sentencia
de reemplazo).

Corte Suprema, 26/09/2018, Rol Nº 8459-2017,


Cita online: CL/JUR/5312/2018

ARTÍCULO 395

Lo dicho en el artículo 370 es aplicable a la declaración de los litigantes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 370, 391 y 392.

ARTÍCULO 396 (386)

Podrá exigirse confesión al procurador de la parte sobre hechos personales


de él mismo en el juicio aun cuando no tenga poder para absolver posiciones.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 7º y 397. Código Civil: artículo 1713.
Código del Trabajo: artículo 445. Código Tributario: artículo 132.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. La infracción de esta norma no es susceptible de casación en el
fondo, por cuanto no constituye una ley reguladora de la prueba

Desde luego, deben desestimarse las que alegan la errónea


aplicación de los artículos 384 y 396 del Código de Procedimiento Civil
que si bien regulan la testimonial, otorgan al juez amplias facultades
discrecionales de apreciación y siendo así, no pueden ser objeto de este
recurso a menos que se trate de un testimonio singular lo que no se ha
denunciado en la especie. En cuanto al artículo 318, éste sólo hace una
relación de los medios de prueba, y no aparece que los jueces hayan
empleado otros aparte de los que allí se mencionan; en cuanto al
artículo 346 que trata de los documentos privados, tampoco se divisa
ninguna transgresión de su apreciación y en cuanto al 396 que atañe a
la confesional rendida por el apoderado del actor, ésta no contiene
declaraciones relativas a hechos personales del confesante, con lo cual
no puede haber violación de la norma (considerando 5º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 22/07/1996, Rol Nº 32441-1996, Cita online:


CL/JUR/563/1996

ARTÍCULO 397 (387)

El procurador es obligado a hacer comparecer a su mandante para


absolver posiciones en el término razonable que el tribunal designe y bajo el
apercibimiento indicado en el artículo 394.

La comparecencia se verificará ante el tribunal de la causa si la parte se


encuentra en el lugar del juicio; en el caso contrario, ante el juez competente
del territorio jurisdiccional en que resida o ante el respectivo agente
diplomático o consular chileno, si ha salido del territorio de la República.157

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 4º, 7º, 8º, 71, 76, 385, 394 y 400.

ARTÍCULO 398 (388)

La confesión extrajudicial es sólo base de presunción judicial, y no se


tomará en cuenta, si es puramente verbal, sino en los casos en que sería
admisible la prueba de testigos.
La confesión extrajudicial que se haya prestado a presencia de la parte que
la invoca, o ante el juez incompetente, pero que ejerza jurisdicción, se
estimará siempre como presunción grave para acreditar los hechos
confesados. La misma regla se aplicará a la confesión prestada en otro juicio
diverso; pero si éste se ha seguido entre las mismas partes que actualmente
litigan, podrá dársele el mérito de prueba completa, habiendo motivos
poderosos para estimarlo así.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 342, 385, 399, 400, 426 y 427.
Código Civil: artículos 1708, 1709, 1710 y 1711.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Requisitos de la confesión extrajudicial

Ahora bien, en relación a la confesión extrajudicial, conviene recordar


que es aquella que se presta fuera del juicio en que se invoca y que, de
conformidad al artículo 398 del Código de Procedimiento Civil, es la que
se produce fuera del juicio ante otra persona, o ante juez incompetente
o en juicio diverso al que litigan las partes. Son requisitos de validez de
la confesión extrajudicial la capacidad del confesante, que recaiga en
un objeto y que sea prestada voluntariamente. Esta confesión podrá ser
verbal o escrita y, en cada caso, será necesario acreditarla en el juicio
en que se invoca como prueba testimonial o instrumental,
respectivamente. Además, debe ser siempre expresa, porque sólo
puede acreditarse en la forma establecida por la ley, como prueba
testimonial o instrumental. En cuanto a su valor probatorio, será preciso
distinguir entre la confesión extrajudicial verbal, escrita y aquélla
prestada ante juez incompetente, pero que ejerce jurisdicción, o en otro
juicio. En el primer caso será necesario determinar, a su vez, si la
confesión se prestó ante la parte interesada en presencia de terceros o
solamente en presencia de estos últimos. En el segundo caso,
únicamente constituye base de una presunción judicial y sólo para el
caso que sería admisible la prueba de testigos. En cambio, si la
confesión ha sido prestada en presencia de la parte que la invoca
delante de terceros se estimará siempre como presunción grave para
acreditar los hechos confesados, es decir, puede incluso llegar a
constituir plena prueba si, a juicio del tribunal, reúne además los
caracteres de precisión suficientes para formar su convencimiento. Por
su parte, la confesión extrajudicial escrita tendrá valor de prueba
instrumental y, a su turno, aquélla prestada ante juez incompetente,
pero que ejerce jurisdicción, o en otro juicio, constituirá presunción
grave para acreditar los hechos confesados, pudiendo aun estimarse
como plena prueba si, a juicio del tribunal, reúne además los caracteres
de precisión suficientes para formar su convencimiento.

Corte Suprema, 25/10/2010, Rol Nº 4999-2009, Cita online:


CL/JUR/17305/2010

ARTÍCULO 399 (389)

Los tribunales apreciarán la fuerza probatoria de la confesión judicial en


conformidad a lo que establece el artículo 1713 del Código Civil y demás
disposiciones legales.

Si los hechos confesados no son personales del confesante o de la persona


a quien representa, producirá también prueba la confesión.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 398, 400, 401, 402 y 428. Código
Civil: artículos 157, 1701, 1713, 1739 y 2485.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Confesión, concepto y fuerza probatoria. Prueba confesional sólo


hace fe en contra del confesante

La confesión es un medio probatorio que consiste en el


reconocimiento que una persona hace de la verdad de un hecho que
produce efectos jurídicos en su contra. Según la doctrina y la
jurisprudencia, la fuerza probatoria de la confesión judicial espontánea
o provocada prestada acerca de hechos personales del confesante, sea
por sí, por apoderado especial o por representante legal, está dada por
los artículos 1713 del Código Civil y 399 y 400 del Código de
Procedimiento Civil, en cuanto produce plena prueba en contra del que
confiesa, salvo los casos en que la confesión no es admisible como
medio probatorio (considerando 15º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 24/11/2016, Rol Nº 2968-2016,


Cita online: CL/JUR/8435/2016

Fallo en el mismo sentido:


— Corte Suprema, 9/01/2017, Rol Nº 20395-2015,

Cita online: CL/JUR/110/2017

2. Reglas generales valor probatorio prueba confesional

Para efectos de una eficiente comprensión de lo que en seguida se


dirá, es útil repasar lo prevenido en las normas relativas a este medio
de prueba en juicio. Así, el artículo 1713 del Código Civil, en su inciso
primero, dispone que la confesión relativa a un hecho personal de la
misma parte que la presta por sí, o por medio de apoderado especial, o
de su representante legal, producirá plena fe contra ella, aunque no
haya principio de prueba por escrito. A su vez, el ya citado art ículo 394
del Código de Procedimiento Civil, en su inciso primero se refiere a la
confesión presunta, disponiendo que, según ella, todos los hechos que
estén categóricamente afirmados en el escrito en que se pidió la
declaración el pliego de posiciones se tendrán por confesados por el
litigante convocado, sea que no haya comparecido a la segunda citación
que se le haya dirigido, sea que se haya negado a declarar o se haya
limitado a dar respuestas evasivas. Más adelante, el artículo 399 de la
misma compilación procesal regula lo pertinente a la apreciación de la
fuerza probatoria de la confesión judicial, y en ese contexto ordena al
órgano jurisdiccional atender a lo estatuido en el artículo 1713 recién
aludido y en las demás disposiciones legales y, aún en caso que los
hechos confesados no sean personales del confesante o de la persona
a quien representa, también producirá prueba la confesión. Finalmente,
el artículo 400 del mismo código prescribe que la confesión tácita o
presunta prevista en el artículo 394, producirá los mismos efectos que
la confesión expresa (considerando 6º).

Corte de Apelaciones de Santiago, 2/08/2019, Rol Nº 5239-2018,

Cita online: CL/JUR/4407/2019

ARTÍCULO 400 (390)

La confesión tácita o presunta que establece el artículo 394, producirá los


mismos efectos que la confesión expresa.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 78, 394, 399, 401 y 402. Código Civil:
artículo 1713.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La circunstancia alegada por el apelante, de haber existido orden de


aprehensión pendiente en su contra, a la época en que se cursaron
las citaciones previas, no puede legitimar su falta de comparecencia
ni desvirtuar el mérito de esta confesión ficta

Cabe señalar al respecto que la excepción de contrato no cumplido


sólo corresponde al contratante diligente que ha cumplido por su parte
las obligaciones contraídas, condición que no tiene la sociedad
demandada, que dejó de efectuar los pagos convenidos de acuerdo al
avance de la obra (Iltma. Corte de Apelaciones de Rancagua).

Corte Suprema, 23/05/2000, Rol Nº 291-2000,


Cita online: CL/JUR/3639/2000

ARTÍCULO 401 (391)

En general el mérito de la confesión no puede dividirse en perjuicio del


confesante.

Podrá, sin embargo, dividirse:

1º Siempre que comprenda hechos diversos enteramente desligados entre


sí; y

2º Cuando, comprendiendo varios hechos ligados entre sí o que se


modifiquen los unos a los otros, el contendor justifique con algún medio legal
de prueba la falsedad de las circunstancias que, según el confesante,
modifican o alteran el hecho confesado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 394, 398, 399, 400 y 402.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Distinción entre confesión pura y simple, calificada y compleja

En este caso, en la "confesión judicial" de la deuda que habría


efectuado la representante legal de la sociedad ejecutada, quien citada
a la gestión preparatoria previa respectiva, compareció al tribunal y
expuso: "No adeudamos esa suma, adeudamos menos". Frente a la
interrogante de si tal declaración ha sido suficiente para tener por
confesa a la demandada, hay que tener en consideración la regla
general contenida en el artículo 401 del CPC, relativa a la divisibilidad
de la confesión. Para lo cual es necesario realizar la siguiente distinción:
1. Confesión pura y simple: el confesante reconoce un hecho, sin
hacerle modificación o visión alguna. En este caso la confesión no
puede dividirse. 2. Confesión calificada: el confesante reconoce el
hecho material que se le propone, pero le agrega circunstancias que
hacen variar su naturaleza jurídica. En este caso la confesión también
es indivisible de que se trata de un mismo hecho el cual es calificado de
manera diferente por las partes. 3. Confesión compleja: el confesante
reconoce el hecho material que se le propone, sin variar su calificación
jurídica, pero le agrega hechos nuevos y distintos cuya existencia
destruye o modifica las consecuencias jurídicas del hecho confesado.
Esta confesión sí puede dividirse, debiendo, en todo caso, subdividirse,
a su vez, entre: a) confesión compleja conexa, por la cual los nuevos
hechos agregados suponen necesariamente la existencia del primer
hecho, tratándose de hechos ligados entre sí o que se modifican los
unos a los otros. Esta clase de confesión puede dividirse en perjuicio
del confesante siempre que la contraria provee la falsedad de los
nuevos hechos agregados por aquél, b) confesión compleja inconexa,
por la cual el deudor citado reconoce la deuda confiesa deber, pero
agrega otros hechos que ninguna relación tienen con la deuda
confesada. En tal evento la confesión se divide siempre, dándose por
reconocida la deuda en forma pura y simple.

Corte Suprema, 31/08/2010, Rol Nº 85-2009, Cita online:


CL/JUR/6519/2010

2. Artículo 401 no constituye una norma reguladora de la prueba

Del escrito en que se contiene el recurso de casación en el fondo,


aparece que éste pretende alterar los hechos establecidos
soberanamente por los jueces del fondo, sin que las normas cuya
infracción invocase revistan el carácter de leyes reguladoras de la
prueba, por cuanto el artículo 401 del Código de Procedimiento Civil, al
señalar que en general, el mérito de la confesión no puede dividirse en
perjuicio del confesante, y que podrá, sin embargo, dividirse, confiere
una facultad al sentenciador y, que por ende, no se trata de una norma
reguladora de la prueba, razón por la cual, los hechos fijados en el fallo
resultan inamovibles (considerando 9º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 12/07/2004, Rol Nº 4450-2003, Cita online:


CL/JUR/4832/2004

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 4/10/2010, Rol Nº 6748-2010,

Cita online: CL/JUR/8082/2010

ARTÍCULO 402 (392)

No se recibirá prueba alguna contra los hechos personales claramente


confesados por los litigantes en el juicio.

Podrá, sin embargo, admitirse prueba en este caso y aun abrirse un término
especial para ella, si el tribunal lo estima necesario y ha expirado el probatorio
de la causa, cuando el confesante alegue, para revocar su confesión, que ha
padecido error de hecho y ofrezca justificar esta circunstancia.

Lo dispuesto en el inciso precedente se aplicará también al caso en que los


hechos confesados no sean personales del confesante.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 339, 394, 400, 401 y 428. Código
Civil: artículo 1713.

§ 5. De la inspección personal del tribunal

ARTÍCULO 403 (405)

Fuera de los casos expresamente señalados por la ley, la inspección


personal del tribunal sólo se decretará cuando éste la estime necesaria; y se
designará día y hora para practicarla, con la debida anticipación, a fin de que
puedan concurrir las partes con sus abogados.
La inspección podrá verificarse aun fuera del territorio señalado a la
jurisdicción del tribunal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 48, 70, 159, 327, 353, 405, 408, 571
y 577. Código Orgánico de Tribunales: artículo 7º. Código del Trabajo: artículo 443.

ARTÍCULO 404 (406)

Pueden las partes pedir que en el acto del reconocimiento se oigan


informes de peritos, y lo decretará el tribunal si, a su juicio, esta medida es
necesaria para el éxito de la inspección y ha sido solicitada con la anticipación
conveniente. La designación de los peritos se hará en conformidad a las
reglas del párrafo siguiente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 405, 407, 411 y 414.

ARTÍCULO 405 (407)

Se llevará a efecto la inspección con la concurrencia de las partes y peritos


que asistan, o sólo por el tribunal en ausencia de aquéllas.

Si el tribunal es colegiado, podrá comisionar para que practique la


inspección a uno o más de sus miembros.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 207 y 407.

ARTÍCULO 406 (408)

La parte que haya solicitado la inspección depositará antes de proceder a


ella, en manos del secretario del tribunal, la suma que éste estime necesaria
para costear los gastos que se causen. Cuando la inspección sea decretada
de oficio u ordenada por la ley, el depósito se hará por mitad entre
demandantes y demandados.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 25, 26 y 27. Código Orgánico de


Tribunales: artículo 379.

ARTÍCULO 407 (409)


De la diligencia de inspección se levantará acta, en la cual se expresarán
las circunstancias o hechos materiales que el tribunal observe, sin que
puedan dichas observaciones reputarse como una opinión anticipada sobre
los puntos que se debaten. Podrán también las partes pedir, durante la
diligencia, que se consignen en el acta las circunstancias o hechos materiales
que consideren pertinentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 408 y 419. Código Orgánico de
Tribunales: artículos 195 Nº 8 y 196 Nº 10.

ARTÍCULO 408 (410)

La inspección personal constituye prueba plena en cuanto a las


circunstancias o hechos materiales que el tribunal establezca en el acta como
resultado de su propia observación.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 428.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Inspección personal del tribunal como prueba. Apreciación de la


prueba es exclusiva de los jueces del grado

El artículo 408 del Código de Procedimiento Civil dispone: "La


inspección personal constituye prueba plena en cuanto a las
circunstancias o hechos materiales que el tribunal establezca en el acta
como resultado de su propia observación". En la especie, aparece de
manifiesto que la infracción de ley denunciada no se configura, pues
lejos de cuestionar la validez de lo constatado por el tribunal mediante
su propia observación, lo controvertido por el recurrente es la valoración
comparativa de la prueba rendida en juicio, evidenciando su
disconformidad con el proceso ponderativo llevado a cabo por el
sentenciador. En este aspecto, cabe reiterar que, como lo ha señalado
esta Corte, la actividad de ponderación de los medios de prueba se
encuentra entregada exclusivamente a los jueces del grado, siendo
aquella extraña a los fines de la casación en el fondo
(considerandos 13º a 17º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/03/2019, Rol Nº 6307-2018, Cita online:


CL/JUR/2376/2019
Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 6/03/2018, Rol Nº 44584-2017,

Cita online: CL/JUR/4396/2018

§ 6. Del informe de peritos

ARTÍCULO 409 (411)

Se oirá informe de peritos en todos aquellos casos en que la ley así lo


disponga, ya sea que se valga de estas expresiones o de otras que indiquen
la necesidad de consultar opiniones periciales.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 159, 350, 404, 411, 438, 486, 537,
567, 571, 602, 657, 745, 761, 768 Nº 9, 865 y 895. Código Civil: artículos 199, 855, 848, 1335,
1943, 1977, 1978, 2002, 2006 y 2012. Código de Comercio: 133, 134, 208, 209 y 534. Código
Penal: artículo 455. Código Procesal Penal: artículos 314 a 316, 320 y 321. Código de Minería:
artículo 235. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia: artículos 45 y 47.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Concepto de peritaje y perito

Se ha dicho por la doctrina que el peritaje es una actividad realizada


por personas "especialmente calificadas, distintas e independientes de
las partes y del juez del proceso, por sus conocimientos técnicos,
artísticos o científicos, mediante el cual se suministra al juez
argumentos o razones para la formación de su convencimiento respecto
de ciertos hechos cuya percepción o entendimiento escapa a las del
común de las gentes. Es una prueba ilustrativa sobre alguna materia
técnica, que escapa al conocimiento del magistrado" (Enrique Falcón,
Tratado de la Prueba, Tomo II, página 4, Astrea). Entonces, el perito es
un tercero, técnicamente idóneo y capaz, llamado a dar opinión y
dictamen fundado en un proceso, acerca de la comprobación de hechos
cuyo esclarecimiento requiere conocimientos especiales sobre
determinada actividad, técnica o arte, el cual es ajeno al juzgador y la
pericia como actividad consiste principalmente en "la aplicación de los
conocimientos del experto a un supuesto concreto, emitiendo un
parecer, evacuando una opinión o facilitando una información". En
consecuencia, lo que distingue a la pericia del resto de los medios de
prueba es que la pericial intenta lograr la convicción del tribunal respecto
de hechos técnicamente complejos, o sobre aspectos especializados de
hechos determinados, y que si se configura como un método auxiliar del
juez, del que pueda servirse de oficio, ya no estamos ante una prueba
construida adecuadamente en un proceso presidido por los principios
dispositivo y de aportación de parte; estamos más bien ante un
instrumento de investigación o averiguación en el marco de un proceso
civil inquisitivo (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 29/11/2019, Rol Nº 237-2019,

Cita online: CL/JUR/6853/2019

ARTÍCULO 410 (412)

Cuando la ley ordene que se resuelva un asunto en juicio práctico o previo


informe de peritos, se entenderán cumplidas estas disposiciones agregando
el reconocimiento y dictamen pericial en conformidad a las reglas de este
párrafo, al procedimiento que corresponda usar, según la naturaleza de la
acción deducida.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículo s 420 y 423. Código Procesal Penal:
artículo 315.

ARTÍCULO 411 (413)

Podrá también oírse el informe de peritos:

1º Sobre puntos de hecho para cuya apreciación se necesiten


conocimientos especiales de alguna ciencia o arte; y

2º Sobre puntos de derecho referentes a alguna legislación extranjera.

Los gastos y honorarios que en estos casos se originen por la diligencia


misma o por la comparecencia de la otra parte al lugar donde debe
practicarse, serán de cargo del que la haya solicitado; salvo que el tribunal
estime necesaria la medida para el esclarecimiento de la cuestión, y sin
perjuicio de lo que en definitiva se resuelva sobre pago de costas. El tribunal,
de oficio o a petición de parte, podrá ordenar que previamente se consigne
una cantidad prudencial para responder a los gastos y honorarios referidos.

La resolución por la cual se fije el monto de la consignación será notificada


por cédula al que solicitó el informe de peritos. Si dicha parte deja transcurrir
diez días, contados desde la fecha de la notificación, sin efectuar la
consignación, se la tendrá por desistida de la diligencia pericial solicitada, sin
más trámite.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 25, 26 27, 138 y siguientes, 228, 259,
409, 410, 424 y 720. Código Procesal Penal: artículos 314 y 316. Código de Derecho
Internacional Privado: artículos 408 al 411. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia:
artículo 47.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La disposición del artículo 411 del Código de Procedimiento Civil no


tiene la naturaleza de decisorio litis

Por su parte, la disposición del artículo 411 del Código de


Procedimiento Civil que el recurrente señala vulnerada no puede dar
lugar a la casación de fondo, ya que no tiene la naturaleza de
decisorio litis. En efecto, de conformidad con lo que dispone el
artículo 767 del Código de Procedimiento Civil, la ley concede el recurso
de casación en el fondo en contra de sentencias que se hayan
pronunciado con in fracción de ley, esto es, que contienen errores de
derecho consistentes en una equivocada aplicación, interpretación o
falta de aplicación de aquellas normas destinadas a decidir la cuestión
controvertida y no, como se alega en el recurso, de las que señalan los
casos en que es procedente oír informe de peritos. El precepto legal
invocado en la casación tiene carácter ordenatorio litis y no son las
normas de esta naturaleza las que los sentenciadores deben tener en
consideración en último término al declarar el derecho de las partes,
pues no resultan útiles para decidir el problema jurídico sobre que versa
un litigio. En razón de lo anterior la eventual vulneración de esta regla
procedimental no puede per se determinar que la decisión contenida en
la sentencia se incline a favor de la posición de una u otra parte y,
consecuentemente, la casación en el fondo que se sostiene, sobre la
base de esa eventual vulneración, no puede prosperar (considerando 4º
de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 12/10/2006, Rol Nº 2530-2004, Cita online:
CL/JUR/6383/2006

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 4/10/2006, Rol Nº 2284-2006,

Cita online: CL/JUR/8241/2006

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 411 Nº 1)

1. Intervención del perito debe complementar la labor del tribunal


ilustrándolo sobre materia de la controversia que requieren
conocimientos especiales sobre una ciencia o arte

Según el artículo 411 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil se


requiere oír el pronunciamiento de peritos, sobre un punto de hecho,
cuya apreciación requiere conocimientos especiales sobre una ciencia
o arte. En este sentido, la intervención del perito debe ir incardinada a
complementar la labor del tribunal ilustrándolo sobre los hechos materia
de la controversia, desde el plano técnico o científico, por lo que las
opiniones o conjeturas que pueda expresar el perito en su informe o en
sus conclusiones, escapan a su labor y en nada pueden vincular al juez,
como ocurre en el caso sub júdice; en que el informe pericial y los
testigos señalados expresan su opinión respecto de lo que debería ser
el resultado del juicio (considerando 6º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 28/05/2020, Rol Nº 910-2019,

Cita online: CL/JUR/34877/2020

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 411 Nº 2)

1. Legislación extranjera puede probarse mediante certificación


otorgada por dos abogados en ejercicio del país de cuya legislación
se trate

En consecuencia, conforme a dicho precepto legal, para que los


cónyuges pudieran ser considerados en Chile como casados en
sociedad conyugal era menester que el régimen patrimonial bajo el cual
contrajeron el vínculo matrimonial fuera uno que coincidiera, en sus
características fundamentales, con la sociedad conyugal regulada en la
ley chilena, que es en esencia un régimen de comunidad restringida de
ganancias. Lo anterior importa necesariamente probar la legislación
extranjera, en cuyo caso constituye el objeto de la prueba, la que puede
acreditarse ya sea mediante el medio de prueba del informe de peritos,
atento a lo que dispone el número 2 del artículo 411 del Código de
Procedimiento Civil o en conformidad a lo que previene el artículo 409
del Código de Derecho Internacional Privado, esto es, mediante
certificación otorgada por dos abogados en ejercicio del país de cuya
legislación se trate, debidamente legalizada, acerca del texto, vigencia
y sentido de un determinado precepto legal (considerando 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 23/03/1999, Rol Nº 3361-1997, Cita online:


CL/JUR/2799/1999

ARTÍCULO 412

El reconocimiento de peritos podrá decretarse de oficio en cualquier estado


del juicio, pero las partes sólo podrán solicitarlo dentro del término probatorio.

Decretado el informe de peritos, no se suspenderá por ello el


procedimiento.158

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 159, 227, 327, 433 y 807. Código del
Trabajo: artículo 443.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. De acuerdo al artículo 412 del Código de Procedimiento Civil, las


partes pueden pedir la práctica de pericias dentro del término
probatorio, lo que no implica que el informe deba ser evacuado en ese
lapso

Cabe señalar, por último, que de acuerdo al artículo 412 del Código
de Procedimiento Civil, las partes pueden pedir la práctica de pericias
dentro del término probatorio, lo que no implica que el informe deba ser
evacuado en ese lapso, de modo tal que, si como ocurre en el caso sub
lite, el informe fue pedido por el actor dentro de la oportunidad procesal
para ello, despachándose el oficio respectivo a la entidad encargada de
practicar el examen biológico y el informe es evacuado fuera del lapso
existente para la prueba, aun cuando en el ínterin se haya decretado
una medida para mejor resolver reiterando la pericia, debe entenderse
que el cumplimiento de ésta obedece a la diligencia solicitada por la
parte (considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/06/2004, Rol Nº 2609-2003, Cita online:


CL/JUR/3442/2004

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 29/08/1995, Rol Nº 17720-1995,

Cita online: CL/JUR/1390/1995

ARTÍCULO 413 (415)

Salvo acuerdo expreso de las partes, no podrán ser peritos:

1º Los que sean inhábiles para declarar como testigos en el juicio; y

2º Los que no tengan título profesional expedido por autoridad competente,


si la ciencia o arte cuyo conocimiento se requiera está reglamentada por la
ley y hay en el territorio jurisdiccional dos o más personas tituladas que
puedan desempeñar el cargo.159

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 63, 113, 114, 356, 357, 358 y 416.
Código Procesal Penal: artículos 317 y 318. Código Orgánico de Tribunales: artículos 195 y 196.
Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia: artículo 413.

ARTÍCULO 414 (416)

Para proceder al nombramiento de peritos, el tribunal citará a las partes a


una audiencia, que tendrá lugar con sólo las que asistan y en la cual se fijará
primeramente por acuerdo de las partes, o en su defecto por el tribunal, el
número de peritos que deban nombrarse, la calidad, aptitudes o títulos que
deban tener y el punto o puntos materia del informe.
Si las partes no se ponen de acuerdo sobre la designación de las personas,
hará el nombramiento el tribunal, no pudiendo recaer en tal caso en ninguna
de las dos primeras personas que hayan sido propuestas por cada parte.

La apelación que se deduzca en los casos del inciso 1º de este artículo no


impedirá que se proceda a la designación de los peritos de conformidad al
inciso 2º. Sólo después de hecha esta designación, se llevará adelante el
recurso.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 48, 78, 416, 421, 486, 602, 646, 761,
895 y 916. Código Orgánico de Tribunales: artículo 232.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Ritualidad procesal del nombramiento del perito

El examen de la ritualidad procesal del nombramiento y operación del


perito, son precisa y determinadamente, respecto de la necesidad de
éste de jurar aceptar y desempeñar el cargo fielmente, o la de la citación
a las partes para que concurran al reconocimiento, lo que permite
analizar si es o no nula su designación y los actos posteriores a su
designación.

Al respecto, los sentenciadores son del parecer que aquella


designación debió someterse a la ritualidad procesal del Código de
Procedimiento Civil, entre las que están las de los artículos 414 y 417,
según los cuales todo perito está estrictamente sujeto a las reglas dadas
para el nombramiento y, luego, debe citar previamente a las partes al
reconocimiento para que, si ellas lo desean concurran a éste,
oportunidad durante la cual se pueden formular observaciones y pedir
se hagan constar hechos y circunstancias que juzguen pertinentes,
formalidades que, dirigidas al nombramiento y reconocimiento, no
pueden naturalmente ser suplida la citada formalidad. Luego, la
aceptación del cargo del perito al no haber constancia en el expediente
que jura desempeñarlo fielmente, ante Ministro de fe, la citada actuación
está viciada en su constitución, por vicios de formas o errores in
procedendo, dado que la misma ritualidad participa de los rasgos
esenciales del referido instituto procesal (considerandos 3º a 5º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 15/06/2018, Rol Nº 714-2018,


Cita online: CL/JUR/2881/2018

ARTÍCULO 415 (417)

Se presume que no están de acuerdo las partes cuando no concurren todas


a la audiencia de que trata el artículo anterior; y en tal caso habrá lugar a lo
dispuesto en el 2º inciso del mismo artículo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 416 y 421.

ARTÍCULO 416

Cuando el nombramiento se haga por el tribunal, lo hará de entre los peritos


de la especialidad requerida que figuren en las listas a que se refiere el
artículo siguiente y la designación se pondrá en conocimiento de las partes
para que dentro de tercero día deduzcan oposición, si tienen alguna
incapacidad legal que reclamar contra el nombrado. Vencido este plazo sin
que se formule oposición, se entenderá aceptado el nombramiento.160

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 113, 114, 117, 413, 416 bis y 424.

ARTÍCULO 416 BIS

Las listas de peritos indicadas en el artículo precedente serán propuestas


cada dos años por la Corte de Apelaciones respectiva, previa determinación
del número de peritos que en su concepto deban figurar en cada especialidad.

En el mes de octubre del final del bienio correspondiente, se elevarán estas


nóminas a la Corte Suprema, la cual formará las definitivas, pudiendo suprimir
o agregar nombres sin expresar causa.

Para formar las listas, cada Corte de Apelaciones convocará a concurso


público, al que podrán postular quienes posean y acrediten conocimientos
especiales de alguna ciencia, arte o especialidad, para lo cual tendrán
especialmente en cuenta la vinculación de los candidatos con la docencia y
la investigación universitarias. El procedimiento para los concursos, su
publicidad y la formación de las nóminas de peritos serán regulados mediante
un Auto Acordado de la Corte Suprema, que se publicará en el Diario Oficial. 161-

162
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 409 y 416.

ARTÍCULO 417 (419)

El perito que acepte el cargo deberá declararlo así, jurando desempeñarlo


con fidelidad.

De esta declaración, que habrá de hacerse verbalmente o por escrito en el


acto de la notificación o dentro de los tres días inmediatos, se dejará
testimonio en los autos.

El perito encargado de practicar un reconocimiento deberá citar


previamente a las partes para que concurran si quieren.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40, 48, 56, 61, 62, 423 y 720. Código
Penal: artículos 209 y 240. Decreto con Fuerza de Ley Nº 1, 1993, fija texto ley orgánica del
Consejo de Defensa del Estado, Ministerio de Hacienda, D.O. 7.08.1993: artículo 57. Ley
Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia: artículos 45 y 64.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Acto de juramento

En relación al acto del juramento, si bien se trata de una declaración


solemne y de carácter unilateral, prescrito por la ley, no sólo para el
caso de peritajes, sino que también se encuentra para otros casos,
como por ejemplo, a propósito del juramento de los albaceas fiduciarios
y del partido, siempre supone la actuación de un ministro de fe, que es
quien recepciona tal juramento, entendido como la confirmación de la
voluntad de cumplir con lo obligado, en el presente caso, de
desempeñar con fidelidad el cargo de perito. No entenderlo así, sería
contrariar texto expreso de ley, entre cuyas normas se encuentra el
artículo 62 del Código de Procedimiento Civil, en relación con el
artículo 379 del Código Orgánico de Tribunales, los cuales validan la
intervención en tal acto, de un ministro de fe, lo cual no concurrió en el
caso en análisis (considerando 5º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 15/06/2018, Rol Nº 714-2018,

Cita online: CL/JUR/2881/2018


2. Formalidades del juramento de los peritos

El artículo 417 del Código de Procedimiento Civil faculta a los peritos


para prestar juramento por escrito y en un momento distinto a su
notificación, sustrae a tales sujetos procesales del cumplimiento estricto
de las solemnidades prescritas en el artículo 62 del mismo cuerpo
normativo. En efecto, dada la forma y el momento expresados en la
primera regla, jamás será posible que el perito sea "interrogado por el
funcionario autorizante", ni que el interrogado "responda" "sí juro". Por
lo demás, las únicas formalidades expresamente mencionadas para el
caso del juramento prestado por peritos mediante escrito y en un
momento distinto al de su notificación, consisten en que aquella
actuación se realice dentro de un plazo determinado, y se deje
"testimonio en los autos", exigencias que, en el caso concreto, aparecen
cumplidas (considerando 7º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 19/08/2019, Rol Nº 12465-2018, Cita online:


CL/JUR/4665/2019

ARTÍCULO 418 (420)

Cuando sean varios los peritos procederán unidos a practicar el


reconocimiento, salvo que el tribunal los autorice para obrar de otra manera.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 417, 419 y 423.

ARTÍCULO 419 (421)

Las partes podrán hacer en el acto del reconocimiento las observaciones


que estimen oportunas. Podrán también pedir que se hagan constar los
hechos y circunstancias que juzguen pertinentes; pero no tomarán parte en
las deliberaciones de los peritos, ni estarán en ellas presentes.

De todo lo obrado se levantará acta, en la cual se consignarán los acuerdos


celebrados por los peritos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 405, 407, 418, 423 y 917.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Pericia fue evacuada sin que se cumpliera con el acto del
reconocimiento previo que exige la ley procesal. Nulidad del informe
pericial

Se ha constatado por esta Corte que la pericia aludida fue evacuada


sin que se cumpliera con el acto del reconocimiento previo que exige la
ley procesal, diligencia a la que tienen derecho a asistir las partes para
ser oídas y ejercer los derechos que les confiere el artículo 419 del
Código de Procedimiento Civil, sin que exista en el proceso el acta
pertinente de dicha diligencia en el proceso como lo exige la norma legal
citada. Sin perjuicio de lo anterior, se observa que el perito que evacuó
el referido informe, al no haber existido acuerdo entre las partes para su
nombramiento debido a que no concurrieron todas ellas a la audiencia
de rigor, de la cual se dejó constancia a fojas 84, no pudo haber sido
nombrado como tal por el tribunal a quo, según resolución de fojas 124,
ya que su nombre había sido propuesto en primer lugar por la parte
demandante, según consta a fojas 83, vulnerando el tribunal la
prohibición legal de nombrarlo de acuerdo a lo señalado en el
artículo 414 del Código de Procedimiento Civil. Que de conformidad a
lo señalado en motivo octavo, al no haberse cumplido con una
formalidad legal previa, el informe pericial de fojas 251 adolece de un
defecto de nulidad y debe ser dejado sin efecto en virtud de la facultad
oficiosa que tiene este tribunal para corregir los vicios que se observen
en la tramitación del proceso, de acuerdo al artículo 84 inciso final del
mismo cuerpo legal y, en consecuencia, no se le podrá considerar para
efectos probatorios (considerandos 8º y 9º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones, 13/12/2010, Rol Nº 34-2010,

Cita online: CL/JUR/17239/2010

ARTÍCULO 420 (422)

Los tribunales señalarán en cada caso el término dentro del cual deben los
peritos evacuar su encargo; y podrán, en caso de desobediencia, apremiarlos
con multas, prescindir del informe o decretar el nombramiento de nuevos
peritos, según los casos.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 67, 78, 252 y 421. Código Penal:
artículo 209. Código del Trabajo: artículo 448. Ley Nº 19.968, crea los Tribunales de Familia:
artículo 46. Código Tributario: artículo 132.

ARTÍCULO 421 (423)

Cuando los peritos discorden en sus dictámenes, podrá el tribunal disponer


que se nombre un nuevo perito, si lo estima necesario para la mejor
ilustración de las cuestiones que debe resolver.

El nuevo perito será nombrado y desempeñará su cargo en conformidad a


las reglas precedentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 414, 416, 417 y 418.

ARTÍCULO 422 (424)

Si no resulta acuerdo del nuevo perito con los anteriores, el tribunal


apreciará libremente las opiniones de todos ellos, tomando en cuenta los
demás antecedentes del juicio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 418, 425, 917 y 918.

ARTÍCULO 423 (425)

Los peritos podrán emitir sus informes conjunta o separadamente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 418 y 420.

ARTÍCULO 424 (426)

Los incidentes a que dé lugar el nombramiento de los peritos y el


desempeño de sus funciones se tramitarán en ramo separado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículos 87, 412 y 431.

ARTÍCULO 425 (427)


Los tribunales apreciarán la fuerza probatoria del dictamen de peritos en
conformidad a las reglas de la sana crítica.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 353, 354, 422 y 428. Código Civil:
artículo 199. Código Procesal Penal: artículo 297. Ley Nº 18.287 sobre Procedimiento ante
Juzgados de Policía Local: artículo 14. Código Tributario: artículo 132.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Concepto de sana crítica

Sobre esta materia, Eduardo Couture define las reglas de la sana


crítica como "las reglas del correcto entendimiento humano; continentes
y variables con relación a la experiencia del tiempo y del lugar; pero
estables y permanentes en cuanto a los principios lógicos en que debe
apoyarse la sentencia". Continúa señalando que configuran una
categoría intermedia entre la prueba legal y la libre convicción. Sin la
excesiva rigidez de la primera y sin la excesiva incertidumbre de la
última, configura una feliz fórmula de regular la actividad intelectual del
juez frente a la prueba. Son las reglas del correcto entendimiento
humano, interfiriendo en ellas las reglas de la lógica, con las reglas de
la experiencia del juez. Unas y otras contribuyen de igual manera a que
el magistrado pueda analizar la prueba con arreglo a la sana razón y a
un conocimiento experimental de los casos. De este modo, el juez que
debe decidir con arreglo a la sana crítica, no es libre de razonar a
voluntad, discrecionalmente, arbitrariamente. Esta manera de actuar no
sería sana crítica, sino libre convicción. La sana crítica es la unión de la
lógica y la experiencia sin excesivas abstracciones de orden intelectual,
pero también sin olvidar esos preceptos que los filósofos llaman de
higiene mental, tendientes a asegurar el más certero y eficaz
razonamiento. (Eduardo Couture, Fundamentos de Derecho Procesal
Civil, Arayus, Bs. Aires, 1955) (considerando 7º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 17/07/2012, Rol Nº 6303-2010,

Cita online: CL/JUR/4343/2012

2. Sana crítica no está definida en nuestro ordenamiento legal

Es útil consignar que tal patrón de valoración, también denominado


sistema de persuasión racional situado entre los extremos de los
sistemas de la prueba tarifada y el de la libre convicción, no se
encuentra formalmente definido en nuestro ordenamiento legal; sin
embargo, siguiendo la acepción gramatical del concepto, se concluye
que éste se condice con un análisis apoyado en los medios que
aconsejan los principios lógicos, el recto entendimiento y la experiencia
del tiempo y del lugar (considerando 5º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 18/12/2018, Rol Nº 36150-2017, Cita online:


CL/JUR/6974/2018

3. Elementos del concepto de sana crítica

El concepto de sana crítica está compuesto de dos elementos: la


lógica, conformada por "reglas universales establecidas y permanentes
en el tiempo propias de la razón humana y que conducen a una
conclusión, o, en lo fundamental, a la emisión de un juicio", cuyos
principios son, los siguientes: de identidad (una cosa solo puede ser
igual a sí misma), de contradicción (una cosa no puede ser explicada
por dos proposiciones contrarias entre sí), de razón suficiente (las cosas
existen y son conocidas por una causa capaz de justificar su existencia),
del tercero excluido (si una cosa únicamente puede ser explicada dentro
de una de dos proposiciones alternativas, su causa no puede residir en
una tercera proposición ajena a las dos precedentes), de a contrari (si
no se dan los supuestos, no se puede dar la solución), y de ad
absurdum (referido a lo que es inaceptable, porque es un imposible
jurídico y físico); y las máximas de la experiencia o "reglas de la vida" a
las que el juez consciente o inconscientemente recurre, debiendo
entenderse por tal, según la doctrina, como "el conjunto de juicios
fundados sobre la observación de lo que ocurre comúnmente y que
pueden formularse en abstracto por toda persona de nivel mental
medio". A los referidos elementos debe agregarse los conocimientos
científicamente afianzados (considerando 6º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 18/12/2018, Rol Nº 36150-2017, Cita online:


CL/JUR/6974/2018

4. Apreciación del informe de peritos conforme a las reglas de la sana


crítica
El artículo 425 del Código de Procedimiento Civil dispone que los
tribunales apreciarán la fuerza probatoria del dictamen de peritos de
acuerdo a las reglas de la sana crítica, lo que importa tener en
consideración las razones jurídicas, asociadas a las simplemente
lógicas, científicas, técnicas o de experiencia en cuya virtud se le asigne
o se le reste valor, teniendo presente la multiplicidad, gravedad,
precisión, concordancia y conexión de las demás pruebas o
antecedentes del proceso, de manera que conduzcan a la conclusión
que convence al sentenciador. La sana crítica está referida a la
valoración y ponderación de la prueba, esto es, a la actividad
encaminada a considerar los medios probatorios tanto aisladamente
como mediante una valoración de conjunto para extraer las
conclusiones pertinentes en cuanto a los hechos y fijar la forma en que
éstos sucedieron. En la consideración de ambos aspectos cabe tener
presente las reglas de la lógica, la experiencia y los conocimientos
científicamente afianzados en la comunidad en un momento
determinado, por lo que son variables en el tiempo y en el espacio, pero
estables en el pensamiento humano y la razón. Este es el contenido de
la sana crítica o su núcleo medular; son los aspectos que no pueden ser
desatendidos. La explicitación en la aplicación de estos parámetros de
la sana crítica permite el examen de las partes y los ciudadanos en
general, así como el control que eventualmente pudieran llegar a
efectuar los tribunales superiores a través del sistema recursivo que el
procedimiento contemple. Por lo mismo, la inobservancia o transgresión
de aquéllos puede dar origen a la interposición de los recursos que
prevé el legislador y torna controlable el fallo mediante el recurso de
casación, puesto que al no cumplir con las reglas de la sana crítica se
vulnera la ley (considerando 5º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 11/02/2020, Rol Nº 26520-2018, Cita online:


CL/JUR/10107/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 27/12/2019, Rol Nº 340-2019,

Cita online: CL/JUR/11778/2019

— Corte de Apelaciones de Chillán, 25/06/2019, Rol Nº 382-2018,

Cita online: CL/JUR/3700/2019


— Corte Suprema, 7/02/2019, Rol Nº 20726-2018,

Cita online: CL/JUR/647/2019

— Corte Suprema, 3/09/2018, Rol Nº 38567-2017,

Cita online: CL/JUR/5334/2018

— Corte Suprema, 23/05/2018, Rol Nº 37850-2017,

Cita online: CL/JUR/2377/2018

— Corte Suprema, 19/04/2018, Rol Nº 34294-2017,

Cita online: CL/JUR/1813/2018

— Corte Suprema, 12/03/2018, Rol Nº 36123-2017,

Cita online: CL/JUR/206/2018

— Corte Suprema, 11/01/2018, Rol Nº 36123-2017,

Cita online: CL/JUR/206/2018

— Corte Suprema, 4/01/2018, Rol Nº 34263-2017,

Cita online: CL/JUR/1268/2018

5. Control de la sana crítica a través del recurso de casación en el fondo.

El artículo 425 del Código de Procedimiento Civil dispone que los


tribunales apreciarán la fuerza probatoria del dictamen de peritos de
acuerdo a las reglas de la sana crítica, lo cual importa tener en
consideración las razones jurídicas, asociadas a las simplemente
lógicas, científicas, técnicas o de experiencia en cuya virtud se le asigne
o se le reste valor, teniendo presente la multiplicidad, gravedad,
precisión, concordancia y conexión de las demás pruebas o
antecedentes del proceso, de manera que conduzcan a la conclusión
que convence al sentenciador. La explicitación en la aplicación de estos
parámetros de la sana crítica permite el examen de las partes y los
ciudadanos en general, como el control que eventualmente pudieran
llegar a efectuar los tribunales superiores a través del sistema recursivo
que el procedimiento contemple. Por lo mismo, la inobservancia o
transgresión de aquéllos puede dar origen a la interposición de los
recursos que prevé el legislador y controlable mediante el recurso de
casación, puesto que al no cumplir con las reglas de la sana crítica se
vulnera la ley. Por lo tanto, la casación en el fondo solo es procedente
en el evento que en su ejercicio no haya sido factible el proceso
deductivo que dicho raciocinio entraña, nada de lo cual ha sido
esgrimido por el recurso en estudio (considerandos 9º y 10º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 10/01/2018, Rol Nº 7098-2017, Cita online:


CL/JUR/189/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 15/05/2019, Rol Nº 45471-2017,

Cita online: CL/JUR/2872/2019

— Corte Suprema, 8/11/2018, Rol Nº 2839-2018,

Cita online: CL/JUR/6336/2018

— Corte Suprema, 5/04/2018, Rol Nº 34343-2017,

Cita online: CL/JUR/1651/2018

— Corte Suprema, 19/03/2018, Rol Nº 16627-2017,

Cita online: CL/JUR/1366/2018

— Corte Suprema, 19/02/2018, Rol Nº 34432-2017,

Cita online: CL/JUR/770/2018

6. Recurrente de casación en el fondo debe indicar las reglas de la sana


crítica que habrían sido vulneradas

Resulta indispensable para la configuración del vicio que se


describiera y explicara con claridad y precisión las reglas de la lógica,
máximas de experiencia o conocimientos científicos que dejaron de ser
atendidos por el fallo y el modo concreto en que ello habría sido de influir
en lo dispositivo del mismo, presupuestos que no concurren en el libelo
en análisis, puesto que el recurrente se limita a sostener que los
sentenciadores no explican las reglas de la sana critica aplicadas,
mencionando sólo las máximas de la experiencia, empero, a su turno
no explicita que regla de la lógica, cómo las máximas de la experiencia
o principios científicamente afianzados fueron violados, dejando al
descubierto que el reproche de su parte se acota a la valoración de los
informes periciales por parte de los sentenciadores (considerando 10º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 28/06/2018, Rol Nº 16769-2017, Cita online:


CL/JUR/3270/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 30/01/2018, Rol Nº 37409-2017,

Cita online: CL/JUR/474/2018

— Corte Suprema, 18/01/2018, Rol Nº 4706-2017,

Cita online: CL/JUR/246/2018

7. Reglas de la sana crítica

Las reglas de la sana crítica, las máximas de la experiencia del propio


juez (adquiridas gracias a su experiencia de vida y cultural), en
conjunción con las reglas de la lógica y conocimientos científicamente
afianzados, se deben convertir en el camino que se debe recorrer en la
valoración de estos informes, que deben servir a su crítica sostenida en
la razón, la madurez, el buen sentido y el sano juicio, que son el soporte
de una valoración probatoria razonada, responsable y motivada, que se
aparte de la mera discrecionalidad —Andrés Bordalí Salamanca y
otros— (considerando 7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Talca, 29/11/2019, Rol Nº 957-2018,

Cita online: CL/JUR/6845/2019

8. Error de derecho relativo a la prueba pericial


En lo que respecta al error de derecho relativo a la prueba pericial,
que ha de ponderarse conforme a las reglas de la sana crítica,
corresponde resaltar que en el análisis de ese medio probatorio entran
en juego las razones jurídicas asociadas a las simplemente lógicas,
científicas, técnicas, o de experiencia en cuya virtud el tribunal les
asigna o resta valor atendiendo especialmente a la multiplicidad,
gravedad, precisión, concordancia y conexión de los antecedentes del
proceso, de modo que este examen conduzca lógicamente a la
conclusión que convence al sentenciador. En el contexto anterior,
resulta indispensable para la configuración del error de derecho hecho
valer, que el recurso describa y especifique con claridad las reglas de la
lógica, máximas de experiencia y los conocimientos científicos que
dejaron de ser considerados en el fallo y el modo en que ello fue capaz
de influir en lo dispositivo del mismo, presupuestos que no concurren en
el libelo en análisis (considerando 11º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 11/04/2018, Rol Nº 34445-2017, Cita online:


CL/JUR/1671/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 22/02/2018, Rol Nº 1705-2017,

Cita online: CL/JUR/810/2018

— Corte Suprema, 31/01/2018, Rol Nº 18984-2017,

Cita online: 18984-2017

9. Existencia de discrepancias y disconformidades en el razonamiento


de los jueces del fondo

En la especie los jueces del fondo asentaron su decisión señalando


que se aprecian las pericias conforme a las reglas de la sana crítica,
pero sin explicitar en qué habría consistido tal análisis y cómo en la
avaluación final se inserta la consideración a las características
especiales del inmueble objeto de estos antecedentes. Es más, las
únicas razones expuestas en el fallo que se revisa tienen un carácter
claramente contradictorio, toda vez que por una parte se reconoce que
el valor del terreno ha sido fijado por el perito designado por la
reclamante atendiendo a una causa de depreciación incorrecta; sin
embargo, luego señala que el valor otorgado por ese informe permite
asentar que aquel regulado por la Comisión de Peritos es correcto. Es
evidente la contradicción, pues si ese informe entrega un valor sub
valorado, no puede servir de elemento probatorio que reafirme aquello
que ha sido cuestionado en autos. Como se sabe, la circunstancia de
contener un fallo argumentos contradictorios produce el natural efecto
de anularse unos con otros, dejando así la decisión que se expresa en
lo resolutivo desprovista de fundamentación que le de sustento. Luego,
queda así desprovista de fundamento suficiente la decisión de rebajar
el monto de la indemnización que había sido fijada por el tribunal de
primer grado. En estas condiciones, la sentencia recurrida no se ha
pronunciado en forma legal, incurriendo en la causal de casación del
artículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil en relación con el
artículo 170 Nº 4 del mismo cuerpo de leyes, siendo procedente
invalidar de oficio la sentencia impugnada (considerandos 9º a 12º de la
anulación de oficio).

Corte Suprema, 14/05/2018, Rol Nº 31679-2017, Cita online:


CL/JUR/2216/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 18/01/2018, Rol Nº 4706-2017,

Cita online: CL/JUR/246/2018

10. Acepción gramatical de "sana crítica"

El artículo 425 del Código de Procedimiento Civil señala que "Los


Tribunales apreciarán la fuerza probatoria del dictamen de peritos en
conformidad a las reglas de la sana crítica". De acuerdo a su acepción
gramatical, "sana crítica" es aquella que conduce a analizar cualquier
asunto por los medios que aconsejan la recta razón y el criterio racional.
Si los jueces de la instancia, al apreciar la fuerza probatoria de los
dictámenes periciales se han apartado de dicho análisis reflexivo y de
la lógica, la conclusión a la que arriben será susceptible de revisar por
la vía de la casación, puesto que en ese evento se habrá producido una
infracción de las leyes reguladoras de la prueba (considerando 11º de
la sentencia de casación).
Corte Suprema, 18/06/2018, Rol Nº 18263-2017, Cita online:
CL/JUR/2890/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 18/01/2018, Rol Nº 4706-2017,

Cita online: CL/JUR/246/2018

11. Plena fuerza probatoria del informe de peritos

Teniendo en consideración que el informe de perito presentado


resulta ser serio, minucioso, objetivo, bien fundado, apegado a los
antecedentes que obran en el proceso y cuyas recomendaciones y
apreciaciones aparecen como razonables y lógicas, se le dará plena
fuerza probatoria, lo que significa que la compañía de seguros habrá de
indemnizar a la actora, en conformidad a la valorización de los daños
contenida en el mismo (considerando 10º de la sentencia de
reemplazo).

Corte Suprema, 20/08/2018, Rol Nº 5973-2017, Cita online:


CL/JUR/4559/2018

12. Hipótesis en que se entienden vulneradas las leyes reguladoras de


la prueba

Las normas reguladoras de la prueba se entienden vulneradas


cuando los sentenciadores invierten el "onus probandi", o carga de la
misma; cuando rechazan pruebas que la ley admite; aceptan las que la
ley rechaza; desconocen el valor probatorio de las que se hayan
producido en el proceso cuando la ley les asigna uno preciso de carácter
obligatorio, o alteran el orden de precedencia que la ley les otorga.
Asimismo, se ha resuelto que ellas constituyen, dictados básicos de
juzgamiento, que contienen deberes, limitaciones o prohibiciones a que
deben sujetarse los sentenciadores. En este sentido, se ha señalado
que los jueces del fondo son soberanos para apreciar las probanzas,
dentro del marco establecido por las normas pertinentes. Por ello, no
son susceptibles de ser revisadas por la vía de la casación, las
decisiones de los sentenciadores basadas en disposiciones que les
reconocen facultades de sopesar la valoración de los diversos medios
probatorios (considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 3/09/2018, Rol Nº 17049-2018, Cita online:
CL/JUR/4894/2018

13. Quebrantamiento de las normas de apreciación de la prueba pericial

En este caso, el quebrantamiento de las normas de apreciación de la


prueba pericial rendida en autos conforme con las reglas de la sana
crítica, efectivamente se verifica, puesto que los jueces del fondo, para
rechazar la reclamación incoada en autos, no han explicitado de modo
alguno los principios de la lógica, las máximas de la experiencia y los
conocimientos científicamente afianzados que rigen al sistema de
valoración regulado en el artículo 425 del Código de Procedimiento
Civil, limitándose a constatar una contradicción en las conclusiones de
tal informe y descartar el valor del dictamen de la parte reclamante sobre
la base de reproches que no se sustentan en los elementos del sistema
de valoración ya referido y sin, por ende, analizar correctamente su
contenido (considerando 9º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 2/01/2019, Rol Nº 43686-2017, Cita online:


CL/JUR/2/2019

14. Improcedencia que dos informes de peritos tengan igual valor


probatorio para resolver la causa, si sus resultados son enteramente
dispares

Efectivamente la apreciación de los informes periciales conforme a los


parámetros de la sana crítica obliga a los jueces a explicar por qué
conceden o no valor a las pericias, haciendo en ese ejercicio un estudio
del dictamen, en cuanto a su desarrollo argumental y a sus
conclusiones. En el caso que nos ocupa, la Corte de Apelaciones, en su
fundamentación mayoritaria, ha sostenido que habiéndose aportado a
la causa dos peritajes, acompañados por las partes, a ambos "se les
otorga valor, por tratarse de elementos probatorios realizados por quien
profesa los conocimientos de la ciencia específica, llamada a
pronunciarse sobre el valor de los terrenos". Esta aseveración es en sí
misma equivocada y contradictoria, ya que luego se desarrolla y
concluye que los resultados de las dos pericias son enteramente
dispares; una se ajusta en lo esencial al monto determinado como
indemnización provisoria por la comisión respectiva, en tanto que la otra
propone una cantidad muy superior. Siendo así, no es posible que
ambas tengan igual valor probatorio para resolver la causa, pues una
cosa es que los dos peritajes sean admisibles como prueba, y otra es
cuánto pesen como tales probanzas, y el valor probatorio se refiere a
esto último, máxime si nadie ha reclamado nulidad de ninguno de los
peritajes ni se trata de probanzas susceptibles de ser objetadas
(considerando 3º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 6/12/2019, Rol Nº 4958-2019, Cita online:


CL/JUR/6918/2019

§ 7. De las presunciones

ARTÍCULO 426 (428)

Las presunciones como medios probatorios, se regirán por las


disposiciones del artículo 1712 del Código Civil.

Una sola presunción puede constituir plena prueba cuando, a juicio del
tribunal, tenga caracteres de gravedad y precisión suficientes para formar su
convencimiento.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 135, 354, 357, 383, 384, 398, 427,
428, 695 y 785. Código Civil: artículos 47, 184, 199, 210 y 1712. Código de Derecho
Internacional Privado: artículo 406. Código del Trabajo: artículo 455.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Concepto de presunción

Es bien sabido que la presunción es una operación lógica en la cual


partiendo de un hecho conocido se llega a aceptar como existente otro
desconocido o incierto y también se sabe que según que la
consecuencia del hecho conocido la obtenga el legislador o el juez, la
presunción es legal o judicial. Mediante las presunciones judiciales,
llamadas también simples, de hecho o de hombre, el juez "logra el
resultado o inducción lógica de dar por conocido un hecho que no lo era,
a través de otro que sí es conocido. El hecho que proporciona las bases
para el razonamiento inductivo se llama indicio o hecho básico; el
desconocido, al cual se llega por operación lógica, hecho presumido o
presunción... Para que la presunción sea admisible es necesario que el
hecho básico indicio esté completamente demostrado; en otro caso
habrá que probarlo y esto señala que la presunción de hecho no
modifica las reglas de la carga de la prueba" (Leonardo Prieto Castro,
"Derecho Procesal Civil" volumen I, Madrid, 1978, Nº 169, págs. 181-
182) (considerando 10º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/06/2020, Rol Nº 15420-2018, Cita online:


CL/JUR/45717/2020

2. Requisitos de gravedad, precisión y concordancia

En primer término, la gravedad se ha dicho "es la fuerza, entidad o


persuasión que un determinado antecedente fáctico produce en el
raciocinio del juez para hacerle sostener una consecuencia por
deducción lógica, de manera que la gravedad está dada por la mayor o
menor convicción que produce en el ánimo del juez. Si bien el
artículo 1712 del Código Civil nada dice respecto de la gravedad, sí lo
hace el artículo 426 de la compilación procesal que lo acompaña, en
cuanto expresa que una sola presunción puede constituir plena prueba
cuando, a juicio del tribunal, tenga caracteres de gravedad y precisión
para formar su convencimiento, de modo que no queda dudas que su
apreciación queda entregada a los jueces del fondo, puesto que, en el
mejor de los casos, son revisables los elementos de las presunciones
que son ostensibles y que el juez debe manifestar y encuadrar en la ley,
pero no pueden ser revisables, como en ninguna prueba puede serlo, el
proceso íntimo del sentenciador para formar su convencimiento frente a
los medios probatorios que reúnen las condiciones exigidas por la ley.
La apreciación de la gravedad de las presunciones escapa
absolutamente al control del Tribunal de Casación y así lo ha declarado
la Corte Suprema" (Waldo Ortúzar Latapiat, "Las Causales del Recurso
de Casación en el Fondo en materia penal", págs. 427 y 428). Por su
parte, la precisión está referida a lo uniforme de los resultados del
razonamiento del juez, de modo que una misma presunción no
conduzca sino a una consecuencia y no a múltiples conclusiones. Pero
esta particularidad se encuentra condicionada por el razonamiento del
juez y la ponderación de los elementos sobre los cuales la asienta y los
demás antecedentes probatorios de la causa, de manera que resultará
de la ponderación individual y comparativa de este medio con los
demás, quedando, de este modo, relativizada la misma precisión, por lo
que es indiscutiblemente subjetiva y personal del juzgador a quien debe
persuadir, quedando su revisión, por este mismo hecho, excluida de un
nuevo examen en sede de casación. Finalmente, la concordancia se
refiere a la conexión que debe existir entre las presunciones y que todas
las que se den por establecidas lleguen a una misma consecuencia,
cuestión que escapa al control del arbitrio procesal en estudio, puesto
que importa una ponderación individual y comparativa de las
presunciones entre sí y con los demás elementos de juicio reunidos en
el proceso (considerando 9º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 14/05/2018, Rol Nº 36217-2017, Cita online:


CL/JUR/2214/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 3/10/2018, Rol Nº 42539-2017,

Cita online: CL/JUR/5547/2018

3. Facultad de los jueces del fondo para realizar presunciones

Presumir es una facultad que le fue entregada por el legislador a los


jueces de la instancia y por ende no puede ser motivo de revisión por
medio de reglas reguladoras de la prueba, por mucho que el afectado
pueda considerar errado el uso que se ha hecho de la referida atribución
legal. De las probanzas producidas deducirá el juez hechos en uso de
las facultades que la ley le otorga. Pero si de los hechos demostrados
en el proceso no resulta posible para el sentenciador deducir
presunciones que le permitan llegar al convencimiento de la existencia
de otro hecho, no puede legalmente sostenerse que se han infringido
por éste las reglas reguladoras de la prueba de presunciones, siendo sí
exigible en este evento una declaración al respecto, tal como se ha
efectuado en el acápite final del raciocinio décimo del fallo impugnado
(considerando 17º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 3/04/2018, Rol Nº 35305-2017, Cita online:


CL/JUR/1609/2018

4. Bases para una presunción judicial, no pueden consistir en meras


declaraciones de testigos
Que en este aspecto, es útil recordar que la presunción "consiste en
deducir un hecho desconocido de ciertas circunstancias y antecedentes
conocidos; hay en la presunción un procedimiento de deducción". Como
ya se ha dicho, los requisitos para las presunciones judiciales son: ser
graves, precisas y concordantes. Asimismo, el artículo 426 del Código
de Procedimiento Civil nos indica que "una sola presunción puede
constituir plena prueba cuando, a juicio del tribunal, tenga caracteres de
gravedad y precisión suficientes para formar su convencimiento". Que
sobre este aspecto, el tribunal del grado estima que la presunción
reviste de esas tres características, pero los hechos en que los sustenta
son los narrados por los testigos de la demandante; al respecto resulta
útil señalar que los autores Alessandri, Somarriva y Vodanovic, invocan
un fallo de esta Corte que señala que "la prueba de presunciones
solamente es eficaz, si descansa en hechos reales y probados
plenamente, y no en simples declaraciones de testigos" (Tratado de
Derecho Civil, parte preliminar y general. Tomo II, Editorial Jurídica de
Chile, Santiago Séptima edición 2005, p. 487). En el caso en estudio los
testigos de la demandante que han declarado en este juicio, no tienen
el estándar de una presunción judicial, por lo que los hechos en que se
sustentan no pueden, entonces, servir de base para que el tribunal
adquiera la convicción de que don Valericio Bravo Poblete es padre de
los demandantes. Este razonamiento, encuentra sus bases en el
espíritu de la ley que en materia de filiación, se ha inspirado en principios
que permitan arribar a una certeza filiativa, certeza que de los autos no
es posible concluir, siendo insuficiente, entonces, la sola prueba
testimonial para constituir presunción judicial (considerando 17º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Talca, 3/11/2010, Rol Nº 986-2007,

Cita online: CL/JUR/9291/2010

5. Artículo 425 no constituye una regla reguladora de la prueba

El artículo 426 del Código de Procedimiento Civil no es reguladora de


la prueba en tanto consagra una facultad para calificar la gravedad,
precisión y concordancia de las presunciones que permitan asignarles
valor probatorio, que es ajena al control de legalidad que ejerce este
tribunal, correspondiendo tal actuación a un proceso racional que es
inherente a los jueces del mérito y que, por lo mismo, no está sujeto al
control del recurso de casación en el fondo (considerando 10º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 19/04/2018, Rol Nº 1747-2017, Cita online:


CL/JUR/1800/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 14/02/2018, Rol Nº 97633-2016,

Cita online: CL/JUR/685/2018

6. Construcción y determinación de fuerza probatoria de presunciones


judiciales queda entregada a magistrados de la instancia

En numerosas sentencias esta Corte ha expresado en relación a las


presunciones, que la facultad para calificar la gravedad, precisión y
concordancia de aquéllas, en forma tal que en definitiva permita a los
sentenciadores asignarles valor probatorio, se corresponde con un
proceso racional de los jueces del grado que no está sujeto al control
de este recurso de derecho estricto, pues como se ha sostenido
invariablemente, la construcción y determinación de la fuerza probatoria
de las presunciones judiciales queda entregada a los magistrados de la
instancia, puesto que su convicción ha de fundarse en la gravedad,
precisión y concordancia que derive de las mismas. Luego, la actividad
de aquilatar el mérito de convicción de este tipo de probanzas pertenece
en lo medular a una operación de orden intelectual propio y privativo de
los jueces del grado, ajeno, por ende, al control del presente recurso de
derecho estricto. Se trata de una cuestión de hecho entregada a los
jueces del mérito, quienes son los llamados a calificar los aspectos
subjetivos anotados. Por lo demás, la noción general es que, en
principio, la actividad del juzgador en la obtención de una presunción se
encuentra marginada del control de legalidad que tiene a cargo el
tribunal de casación. Esto, en la medida que el juez no desobedezca los
supuestos básicos de la probanza en comentario: la gravedad,
precisión, concordancia y suficiencia de las presunciones, derivadas de
un discurrir explicitado que permita constatar la lógica en la ilación de
sus basamentos y conclusiones, a tal punto, que lleven a persuadir
acerca de una determinada verdad procesal. En definitiva, el juez
aprecia los elementos de juicio sobre la base de parámetros jurídicos,
lógicos y de manera fundada, apoyado en los principios que le
produzcan convicción de acuerdo a la lógica y experiencia
generalmente asentada. Allí, en la exteriorización de esas razones que
conducen a la construcción de cada presunción, residen los factores
que permiten controlar lo acertado o aceptable en su empleo para tener
por justificado o no un hecho controvertido (considerando 9º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 15/01/2015, Rol Nº 11309-2014, Cita online:


CL/JUR/2238/2015

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 19/06/2020, Rol Nº 12903-2018,

Cita online: CL/JUR/41956/2020

— Corte Suprema, 3/09/2019, Rol Nº 40239-2017,

Cita online: CL/JUR/4996/2019

— Corte Suprema, 9/08/2018, Rol Nº 8037-2018,

Cita online: CL/JUR/4302/2018

— Corte Suprema, 3/05/2018, Rol Nº 147-2018,

Cita online: CL/JUR/2020/2018

— Corte Suprema, 14/02/2018, Rol Nº 97633-2016,

Cita online: CL/JUR/685/2018

7. Si los hechos probados son múltiples se debe probar que guardan


concordancia entre sí

La jurisprudencia ha dicho que si los hechos probados son múltiples,


el primer proceso intelectual de la prueba de presunciones consiste en
el examen conjunto de tales hechos para establecer si ellos son
concordantes, esto es, si guardan entre sí relación de conformidad con
todos o algunos de ellos que tiende de manera uniforme y de una forma
indubitada a establecer el hecho desconocido, o sea, el hecho que ha
dado origen al proceso y sobre el cual no se tienen pruebas
preestablecidas y completas. Si bien los requisitos de gravedad,
precisión y concordancia de las presunciones judiciales son materia que
queda entregada a la sola inteligencia del juez, a su propia convicción,
esta libertad de apreciación se refiere, naturalmente, a la deducción
misma; pero el examen previo de los hechos probados que deben
producir la convicción en uno u otro sentido obliga en cuanto al requisito
de la concordancia, al examen conjunto de tales hechos, pues sólo el
estudio simultáneo debe llevar a la conclusión de que entre ellos existe
relación de correspondencia o conformidad. (Corte Suprema, 30 de
noviembre de 1955. R., T. 52, sec. 1a, p. 388).

Corte Suprema, 25/06/2020, Rol Nº 15420-2018, Cita online:


CL/JUR/45717/2020

8. Rol primordial de las presunciones como medio probatorio indirecto


de la simulación

Teniendo en especial consideración las características propias de la


simulación, con un alto componente psicológico de difícil prueba, como
lo es determinar la real voluntad de las partes al momento de celebrar
un acto jurídico, llevan a que las presunciones asuman un rol primordial
como medio probatorio indirecto. Así, esta misma Corte, en una
sentencia de 29 de agosto de 1997, respecto del cual se recurrió de
casación en el fondo y que fue rechazado por la Excma. Corte Suprema,
ha sostenido: "La simulación como divergencia psicológica que es de la
intención de los declarantes se sustrae de una prueba directa, y más
bien se induce, se infiere del ambiente en que ha nacido el contrato, de
las relaciones entre las partes, del contenido de aquél y de las
circunstancias que lo acompañan, siendo por ende la prueba de la
misma indirecta, de indicios, de conjeturas. Que es lo que hiere a fondo
la simulación, porque la combate en su propio terrero" (considerando 4º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 31/03/2020, Rol Nº 573-2019,

Cita online: CL/JUR/22294/2020

9. Instrumento privado no reconocido por quien lo suscribe puede servir


de base a una presunción judicial
El hecho de que un instrumento privado no haya sido reconocido por
quien los suscribe, no significa necesariamente que no tenga valor
probatorio alguno, puesto que puede servir de base a una presunción
judicial. La presunción es el resultado de una operación lógica, mediante
la cual, partiendo de un hecho conocido, se llega a aceptar como
existente otro desconocido o incierto. [...] Por su parte el artículo 426 del
Código de Procedimiento Civil establece que una sola presunción puede
constituir plena prueba, cuando a juicio del tribunal, tenga caracteres de
gravedad y precisión suficientes, para formar su convencimiento. Por su
naturaleza, este medio probatorio carece de restricciones. Solo es
inadmisible para probar los actos y contratos solemnes, los que se
prueban por su respectiva solemnidad (considerandos 8º a 10º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 31/05/2019, Rol Nº 6960-2018, Cita online:


CL/JUR/3313/2019

10. Una sola presunción puede conducir a que se acceda a la demanda

El artículo 426 del Código de Procedimiento Civil establece que una


sola presunción puede constituir plena prueba, cuando a juicio del
tribunal, tenga caracteres de gravedad y precisión suficientes, para
formar su convencimiento, resultando, en el caso de marras, una
operación intelectual por la cual, a partir de los hechos conocidos, se ha
podido llegar a establecer que el demandado es quien ha tomado
posesión del retazo del inmueble ya reiteradamente individualizado, en
desmedro del predio demandante (considerando 12º de la sentencia de
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de La Serena, 12/05/2020, Rol Nº 1240-2019,

Cita online: CL/JUR/30846/2020

ARTÍCULO 427 (429)

Sin perjuicio de las demás circunstancias que, en concepto del tribunal o


por disposición de la ley, deban estimarse como base de una presunción, se
reputarán verdaderos los hechos certificados en el proceso por un ministro
de fe, a virtud de orden de tribunal competente, salvo prueba en contrario.
Igual presunción existirá a favor de los hechos declarados verdaderos en
otro juicio entre las mismas partes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 42 y 177. Código Civil: artículo 1700.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Gravedad, precisión y concordancia que emanan de certificaciones


receptoriales

Existen en autos dos estampados receptoriales y búsquedas del


demandado, dando fe el receptor interviniente que concurriendo al
inmueble sobre que versa el juico verificó que este era su domicilio
particular, residencia y morada, encontrándose en el lugar del juicio, por
así habérselo indicado una persona adulta vecina del lugar. Así
entonces, este hecho certificado por el receptor en dos ocasiones y
constatado por los dichos de vecinos del demandado, que el
artículo 427 del Código de Procedimiento Civil reputa verdaderos, unido
al hecho de no existir prueba en contrario, permiten a esta Corte
formarse en convencimiento por la gravedad, precisión y concordancia
que emanan de las certificaciones receptoriales señaladas, para
concluir que el presupuesto de la tenencia u ocupación por el
demandado de la cosa que se demanda ha sido acreditado con el valor
de plena prueba que le asigna el inciso 2º del artículo 426 del Código
antes señalado (considerando 2º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 8/03/2019, Rol Nº 947-2019,

Cita online: CL/JUR/1314/2019

2. Receptores son ministros de fe pública y se reputaran verdaderos los


hechos por ellos certificados, salvo prueba en contrario

Como consta de los estampados receptoriales, aparece con


caracteres de evidencia que —el demandado— ocupa efectivamente el
inmueble y de acuerdo a lo que dispone el artículo 390 del Código
Orgánico de Tribunales "Los receptores son ministros de fe pública
encargados de hacer saber a las partes, fuera de las oficinas de los
secretarios, los decretos y resoluciones de los Tribunales de Justicia, y
de evacuar todas aquellas diligencias que los mismos tribunales les
cometieren". Asimismo, actúan como ministro de fe en la diligencia de
absolución de posiciones, como lo dispone la norma citada, en su inciso
segundo. El artículo 427 del Código de Procedimiento Civil por su parte
dota de veracidad a los atestados de los ministros de fe según se
deprende de revisión de la norma citada, la que señala que "se
reputarán verdaderos los hechos certificados en el proceso por un
ministro de fe, a virtud de orden de tribunal competente, salvo prueba
en contrario". En estos autos existen hechos certificados por los
receptores judiciales que practicaron las diligencias de notificación de la
demanda al demandado y posteriormente la notificación a éste de la
citación destinada a obtener su comparecencia en dependencias de
esta Corte para cumplir con la prueba solicitada por la actora en esta
instancia, consistente en la absolución de posiciones del demandado y
tales notificaciones fueron dispuestas por el tribunal competente que
conocía de la causa. Las diligencias de los ministros de fe encargados
de practicar las notificaciones ordenadas por el tribunal competente
fueron realizadas en fechas distantes la una con la otra, de modo tal que
el hecho de la ocupación se ha extendido en el tiempo
(considerandos 5º a 8º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 2/02/2018, Rol Nº 1583-2017, Cita online:


CL/JUR/2244/2018

3. Artículo 427 del Código de Procedimiento Civil no constituye norma


reguladora de la prueba

La circunstancia antes anotada es suficiente para rechazar el recurso


de autos; sin perjuicio de lo cual cabe considerar también que el
artículo 47 del Código Civil se refiere a las presunciones legales y que
las demás normas que se dicen infringidas no son reguladoras de la
prueba, en la medida que no imponen tasa probatoria alguna a los
jueces del mérito, dejando librada a su prudencia la apreciación de las
inferencias que correspondan a ciertas circunstancias conocidas y la
fuerza de convicción que se reconozca a las mismas; finalmente, debe
tenerse también presente que la decisión de rechazar la excepción de
no empecerle el título a la ejecutada se tomó no sólo sobre la base de
los hechos alegados por esta última, sino también sobre la calificación
que se hizo de la actuación verificada a fojas 97 de los autos 40092, que
para los jueces del fondo no constituyó un desistimiento sino un retiro
material de la demanda (considerando 9º de la sentencia de la corte de
Suprema).

Corte Suprema, 14/09/1999, Rol Nº 2327-1998, Cita online:


CL/JUR/1577/1999

§ 8. De la apreciación comparativa de los medios de prueba

ARTÍCULO 428 (431)

Entre dos o más pruebas contradictorias, y a falta de ley que resuelva el


conflicto, los tribunales preferirán la que crean más conforme con la verdad.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 341, 342, 346, 354, 384, 399, 402,
408, 422, 424 y 426. Código Procesal Penal: artículo 297. Auto acordado sobre forma de las
sentencias de 30.09.1920: Nº 6.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Facultad del artículo 428 del Código de Procedimiento Civil, no recibe


aplicación si la propia ley resuelve el conflicto entre dos medios
probatorios contradictorios

En la línea esbozada, y en relación a la transgresión del artículo 428


del Código de Procedimiento Civil, la doctrina jurisprudencial ha
sostenido que los sentenciadores ejercitan facultades privativas de su
jurisdicción al apreciar las pruebas contradictorias que las partes han
producido en la secuela del juicio. Cabe recordar, asimismo, como lo ha
señalado la jurisprudencia uniforme de esta Corte, que cuando un
determinado medio probatorio produce, de acuerdo a la ley, prueba
completa de un hecho, ello no impide que ese hecho sea desvirtuado
por otro medio que produzca también plena prueba y que el tribunal crea
más conforme con la verdad. Este precepto, sin embargo, no tiene
aplicación cuando la misma ley resuelve la eventual contradicción entre
dos o más evidencias, como ocurre con la confesión de hechos
personales o los hechos que se presumen de derecho, que no admiten
prueba en contrario. Tal es la regla que consagra la disposición legal
denunciada, sobre cuya aplicación no tiene cabida el control que ejerce
este tribunal de casación sino en cuanto, obviamente, los jueces
prefieran un medio en circunstancias que la ley les haya impuesto
inclinarse necesariamente por otro, lo que según se constata, no
sucedió en el caso sub judice (considerando 5º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 1/09/2010, Rol Nº 5842-2010, Cita online:


CL/JUR/6530/2010

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 23/12/2019, Rol Nº 32602-2018,

Cita online: CL/JUR/12326/2019

— Corte Suprema, 24/12/2007, Rol Nº 6033-2006,

Cita online: CL/JUR/6443/2007

2. Facultad de los jueces del fondo de sopesar las pruebas y preferir las
que razonablemente le parezcan más conforme con la verdad

Respecto a la supuesta infracción del artículo 428 del Código de


Procedimiento Civil, no es tal, puesto que las razones que adujo la juez
de primera instancia para preferir el informe pericial de la actora por
sobre el de la recurrente se ajustan al criterio de prelación establecido
en el artículo 428 del Código de Procedimiento Civil, sin que existan
razones para afirmar que ha sido infringido por ese antecedente. En
todo caso, la norma expresada consagra una ponderación de las
pruebas contradictorias, en la cual el legislador soluciona su posible
antinomia, mediante una labor personal y subjetiva del sentenciador,
como es preferir aquella que crea "más conforme con la verdad" labor
que, por tal carácter, queda excluida del control mediante el recurso de
casación (considerando 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 18/03/2019, Rol Nº 24850-2018, Cita online:


CL/JUR/1411/2019

3. Apreciación comparativa de los medios de prueba excede el ámbito


del recurso de casación en el fondo.
Lo propio sucede con el artículo 428 del Código de Procedimiento
Civil, en la medida que la apreciación comparativa que hagan los
sentenciadores del grado al preferir alguna de las probanzas por sobre
otras constituye sin duda una facultad privativa que también escapa al
control jurisdiccional del recurso de casación en el fondo, en la medida
que el reproche se sostiene sobre la base de la interpretación del
recurrente acerca del valor que debía asignarse a los medios
probatorios y el fallo explicita suficientemente las razones que han
conducido a los jueces a estarse a las probanzas que se mencionan
(considerando 10º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 19/04/2018, Rol Nº 1747-2017, Cita online:


CL/JUR/1800/2018

4. Esta norma no tiene la calidad de ley reguladora de la prueba

El artículo 428 del Código de Procedimiento Civil no participa de la


naturaleza jurídica de las normas reguladoras de la prueba, toda vez
que la apreciación comparativa que haga el tribunal del grado al preferir
alguna de las probanzas por sobre otras constituye una facultad
privativa de los juzgadores que escapa al control judicial por medio del
recurso de casación en el fondo, salvo que se justifique razonadamente
la improcedencia de tal preferencia o que el fallo deje de explicitar las
razones que permiten anteponer una probanza por sobre otra. Empero,
nada de ello sucede en la especie, pues el reproche se construye sobre
la base de la particular interpretación del recurrente respecto del valor
que debía asignarse a los medios probatorios y el fallo explicita
suficientemente las razones que conducen a los jueces a privilegiar las
probanzas que mencionan (considerando 8º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 25/01/2017, Rol Nº 83440-2016, Cita online:


CL/JUR/260/2017

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 27/12/2016, Rol Nº 59033-2016,

Cita online: CL/JUR/8684/2016

— Corte Suprema, 26/03/2007, Rol Nº 81-2007,


Cita online: CL/JUR/5781/2007

— Corte Suprema, 23/03/2007, Rol Nº 3315-2005,

Cita online: CL/JUR/5774/2007

— Corte Suprema, 14/01/2004, Rol Nº 746-2003,

Cita online: CL/JUR/599/2004

ARTÍCULO 429 (432)

Para que pueda invalidarse con prueba testimonial una escritura pública,
se requiere la concurrencia de cinco testigos, que reúnan las condiciones
expresadas en la regla segunda del artículo 384, que acrediten que la parte
que se dice haber asistido personalmente al otorgamiento, o el escribano, o
alguno de los testigos instrumentales, ha fallecido con anterioridad o ha
permanecido fuera del lugar en el día del otorgamiento y en los setenta días
subsiguientes.

Esta prueba, sin embargo, queda sujeta a la calificación del tribunal, quien
la apreciará según las reglas de la sana crítica.

La disposición de este artículo sólo se aplicará cuando se trate de impugnar


la autenticidad de la escritura misma, pero no las declaraciones consignadas
en una escritura pública auténtica.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 355 y 384.

TÍTULO XII DE LOS PROCEDIMIENTOS POSTERIORES A LA


PRUEBA

ARTÍCULO 430 (433)

Vencido el término de prueba, y dentro de los diez días siguientes, las


partes podrán hacer por escrito las observaciones que el examen de la
prueba les sugiera.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 36, 328, 339, 340, 469 y 906. Código
Procesal Penal: artículo 338. Código del Trabajo: artículo 452. Ley Nº 19.968, crea los
Tribunales de Familia: artículo 64.

ARTÍCULO 431

No será motivo para suspender el curso del juicio ni será obstáculo para la
dictación del fallo el hecho de no haberse devuelto la prueba rendida fuera
del tribunal, o el de no haberse practicado alguna otra diligencia de prueba
pendiente, a menos que el tribunal, por resolución fundada, la estime
estrictamente necesaria para la acertada resolución de la causa. En este
caso, la reiterará como medida para mejor resolver y se estará a lo
establecido en el artículo 159.

En todo caso, si dicha prueba se recibiera por el tribunal una vez dictada la
sentencia, ella se agregará al expediente para que sea considerada en
segunda instancia, si hubiere lugar a ésta.163

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 34, 71, 76, 159, 207 y 324. Código
del Trabajo: artículo 453.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Existencia de trámites probatorios pendientes no suspende el


procedimiento ni impide la dictación de la sentencia definitiva

El artículo 431 del Código de Procedimiento Civil dispone que no será


obstáculo para la dictación del fallo el hecho de no haberse practicado
alguna diligencia de prueba pendiente, a menos que el tribunal la estime
estrictamente necesaria para la acertada resolución del juicio, caso en
que la reiterará como medida para mejor resolver; mientras que el
artículo 432 del mismo cuerpo normativo prescribe, en su inciso 1º, que
"vencido el plazo a que se refiere el artículo 430, se hayan o no
presentado escritos y existan o no diligencias pendientes, el tribunal
citará para oír sentencia". Los preceptos transcritos determinan de
manera inequívoca que la existencia de trámites probatorios pendientes
no suspende el procedimiento ni impide la dictación de la sentencia
definitiva, de manera que la circunstancia de que la prueba pericial no
hubiera sido evacuada no obstaba al pronunciamiento del fallo. En
cuanto a la omisión de la audiencia de percepción documental, cabe
señalar que dicho trámite no es uno esencial, desde que la misma
norma que lo instituye faculta al juez para prescindir de ésta cuando los
documentos puedan ser percibidos directamente en la carpeta
electrónica. Por lo demás, tal como lo señala el fallo impugnado, la
inadvertencia que ahora se denuncia no fue reclamada oportunamente
por el recurrente, quedando en evidencia que en esta parte el arbitrio
de casación formal no fue preparado en los términos que exige el
artículo 769 del Código de Procedimiento Civil (considerando 3º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 21/03/2018, Rol Nº 2554-2018, Cita online:


CL/JUR/1392/2018

ARTÍCULO 432

Vencido el plazo a que se refiere el artículo 430, se hayan o no presentado


escritos y existan o no diligencias pendientes, el tribunal citará para oír
sentencia.164

En contra de esta resolución sólo podrá interponerse recurso de reposición,


el que deberá fundarse en error de hecho y deducirse dentro de tercero día.
La resolución que resuelva la reposición será inapelable.165

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículo s 50, 78, 162, 181, 313, 430, 433, 768
Nº 9, 795 Nº 7 y 800 Nº 3. Código Procesal Penal: art ículo 339. Ley Nº 19.968, crea los
Tribunales de Familia: artículo 65.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Existencia de trámites probatorios pendientes no suspende el


procedimiento ni impide la dictación de la sentencia definitiva

El artículo 431 del Código de Procedimiento Civil dispone que no será


obstáculo para la dictación del fallo el hecho de no haberse practicado
alguna diligencia de prueba pendiente, a menos que el tribunal la estime
estrictamente necesaria para la acertada resolución del juicio, caso en
que la reiterará como medida para mejor resolver; mientras que el
artículo 432 del mismo cuerpo normativo prescribe, en su inciso 1º, que
"vencido el plazo a que se refiere el artículo 430, se hayan o no
presentado escritos y existan o no diligencias pendientes, el tribunal
citará para oír sentencia". Los preceptos transcritos determinan de
manera inequívoca que la existencia de trámites probatorios pendientes
no suspende el procedimiento ni impide la dictación de la
sentencia definitiva, de manera que la circunstancia de que la prueba
pericial no hubiera sido evacuada no obstaba al pronunciamiento del
fallo. En cuanto a la omisión de la audiencia de percepción documental,
cabe señalar que dicho trámite no es uno esencial, desde que la misma
norma que lo instituye faculta al juez para prescindir de ésta cuando los
documentos puedan ser percibidos directamente en la carpeta
electrónica. Por lo demás, tal como lo señala el fallo impugnado, la
inadvertencia que ahora se denuncia no fue reclamada oportunamente
por el recurrente, quedando en evidencia que en esta parte el arbitrio
de casación formal no fue preparado en los términos que exige el
artículo 769 del Código de Procedimiento Civil (considerando 3º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 21/03/2018, Rol Nº 2554-2018, Cita online:


CL/JUR/1392/2018

2. Obligación del tribunal de citar a las partes a oír sentencia una vez
vencido el plazo para formular observaciones a la prueba

Vencido el plazo previsto en el artículo 432 del Código de


Procedimiento Civil, el tribunal se hallaba en la obligación de citar a las
partes a oír sentencia. En efecto, habiendo expirado el término
probatorio ordinario, así como el especial dispuesto en su oportunidad,
y concluido el lapso para formular observaciones a la prueba, el juez de
primer grado no se hallaba en situación de fijar arbitrariamente el
momento a contar del cual se iniciaría la etapa de dictación del fallo,
sino, por el contrario, la ley lo obligaba a dar comienzo al mismo de
manera perentoria y categórica. En esas condiciones, y aun cuando se
hallaba pendiente la diligencia de exhibición de documentos, al dictar la
resolución mediante la que citó a las partes a oír sentencia, el fallador
del mérito se limitó a dar estricto y cabal cumplimiento a la normativa
que rige la situación en examen (considerando 7º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 31/05/2016, Rol Nº 9459-2015, Cita online:


CL/JUR/3537/2016

3. Iniciativa de trámite de citación para oír sentencia en el juicio ordinario


es de predominio del juez de la causa
En virtud de la reforma introducida por Ley Nº 18.882 al artículo 432
del Código de Procedimiento Civil, la iniciativa del trámite de citación
para oír sentencia en el juicio ordinario es también de iniciativa
predominante del juez de la causa. Así fluye nítido del tenor de dicho
precepto al disponer que luego de vencido el plazo que tienen las partes
para realizar sus observaciones a la prueba, "hayan o no presentado
escritos, y existan o no diligencias pendientes, el tribunal citará para oír
sentencia". Con el tenor recién reproducido quedó eliminada la
posibilidad de que tal diligencia se dispondría a petición de parte, de
manera escrita o verbal. Por tanto, el término probatorio comenzó a regir
una vez notificada a las partes la resolución que recibió la causa a
prueba, por lo que vencido dicho plazo correspondía al juez de la causa
imprimir el impulso correspondiente, precisamente por regir a este
respecto lo dispuesto expresamente por el artículo 469 del Código de
Procedimiento Civil. En consecuencia debió el tribunal, de propia
iniciativa, sin necesidad de petición de parte o de alguna otra actuación,
citar a oír sentencia y dictar el fallo correspondiente (considerandos 7º
y 8º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 17/04/2019, Rol Nº 14976-2018, Cita online:


CL/JUR/2104/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 21/06/2018, Rol Nº 43052-2017,

Cita online: CL/JUR/3047/2018

4. Impulso procesal corresponde al tribunal cuando la causa queda en


estado de citar a las partes a oír sentencia

En la especie, el impulso procesal que permitía que el proceso


avanzara de su etapa de prueba a su etapa de dictación de sentencia
recaía exclusivamente en el tribunal de la causa, por cuanto al tiempo
de haberse deducido el incidente el término probatorio se encontraba
vencido habiendo la parte demandante efectuado oportunamente las
observaciones a la prueba rendida, por lo que solo restaba al tribunal,
en virtud de lo dispuesto en el inciso primero del artículo 432 del Código
de Procedimiento Civil, citar a las partes a oír sentencia. En
consecuencia, una vez vencido el término probatorio y transcurrido el
plazo dispuesto en el artículo 430 del Código de Procedimiento Civil
para que las partes efectuaran observaciones a la prueba, de propia
iniciativa, debió el tribunal haber citado a las partes a oír sentencia
(considerandos 8º y 10º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 11/09/2018, Rol Nº 40097-2017, Cita online:


CL/JUR/5166/2018

ARTÍCULO 433 (437)

Citadas las partes para oír sentencia, no se admitirán escritos ni pruebas


de ningún género.

Lo cual se entiende sin perjuicio de lo dispuesto por los artículos 83, 84,
159 y 290. Los plazos establecidos en los artículos 342 Nº 3, 346 Nº 3 y 347
que hubieren comenzado a correr al tiempo de la citación para oír sentencia,
continuarán corriendo sin interrupción y la parte podrá, dentro de ellos, ejercer
su derecho de impugnación. De producirse ésta, se tramitará en cuaderno
separado y se fallará en la sentencia definitiva, sin perjuicio de lo dispuesto
en el artículo 431.166

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 83, 84, 98, 130, 148, 159, 262, 290 y
795 Nº 7. Código del Trabajo: artículo 452.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Admisibilidad de solicitud de medidas precautorias una vez citadas


las partes a oír sentencia

Como puede apreciarse, el inciso 2º del artículo en comento consagra


una serie de excepciones a lo dispuesto imperativamente por el
inciso 1º de la norma en estudio, permitiendo a las partes, pese al
estado de tramitación del juicio, solicitar la concesión de las medidas
precautorias contempladas en el artículo 290 del Código de
Procedimiento Civil, cuyo es el caso precisamente de autos. Así las
cosas, la jueza de primer grado debió admitir a tramitación y
pronunciarse en su mérito acerca de la precautoria solicitada por el
patrocinante del actor y, como no la hizo, esta Corte debe enmendar la
resolución recurrida, debiendo acoger a tramitación la petición de
medida precautoria efectuada por el apoderado del actor y proveerla en
su mérito y conforme a derecho (considerandos 4º a 6º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Concepción, 12/01/2018, Rol Nº 1998-2017,

Cita online: CL/JUR/286/2018

2. Citadas las partes para oír sentencia cesa la posibilidad de rendir


prueba aun cuando se haya pedido y decretado en tiempo

En la especie, lo que —el artículo 433 del Código de Procedimiento


Civil— no admite es la presentación de escritos ni la rendición de
pruebas de ningún género y si bien las actuaciones cuya declaración de
nulidad se requiere no supusieron la presentación de escritos (o lo
hicieron en una etapa del juicio anterior a aquella en que regía la
prohibición), lo cierto es que evidentemente ellas constituyen o forman
parte de los trámites propios de la rendición de prueba tanto pericial,
como confesional y documental, puesto que es indudable que las
audiencias de designación de peritos, la de comparecencia a absolver
posiciones y la exhibición de documentos, sea que se materialicen con
el cumplimiento de su objetivo o no, importan la rendición de ese tipo de
prueba en la forma que lo prevé la ley. La falta de práctica de alguna
diligencia de prueba oportunamente decretada no detiene el curso del
juicio ni impide que se dicte la sentencia que le ponga término, de modo
tal que si cumplidos los plazos que contempla el legislador el tribunal
cita a las partes para oír sentencia, la prohibición de presentación de
escritos y rendición de pruebas tiene pleno vigor. En este caso, sólo
cabe al tribunal, si lo estima estrictamente necesario para la acertada
resolución de la causa, como dispone en forma expresa el mismo inciso
primero del artículo 431, reiterar esa prueba oportunamente pedida,
pero no rendida en tiempo, mediante resolución fundada como medida
para mejor resolver. Dicho de otro modo, citadas las partes para oír
sentencia cesa no sólo la iniciativa probatoria de las partes, sino
también la posibilidad de rendir prueba aun cuando se haya pedido y
decretado en tiempo, pasando esa iniciativa de manera privativa,
exclusiva y excluyente al juez de la causa (considerando 4º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 28/08/2019, Rol Nº 12441-2017,

Cita online: CL/JUR/5169/2019

3. Norma del artículo 433 del Código de Procedimiento Civil concierne


a la mera ritualidad u ordenación de la litis
En cuanto a la posible infracción del artículo 433 del Código de
Procedimiento Civil, cabe tener presente lo que respecto a la naturaleza
de dicha resolución sostiene don Carlos Anabalón Sanderson en su
obra El Juicio Ordinario de Mayor Cuantía, pág. 160, en orden a que ella
concierne a la mera ritualidad u ordenación de la litis, sin afectar al fondo
mismo de la cuestión debatida, de manera que la infracción de estos
preceptos sólo puede servir de fundamento al recurso de casación en
la forma, mas no en el fondo. Que, efectivamente, la norma en estudio
es ordenatoria de la litis y sólo tiene por objeto dar por concluida la
instancia y facilitar la dictación de la sentencia ya que, salvo las
excepciones que la misma norma contempla, la acción de las partes
retardaría o entorpecería la del juez. Que, en consecuencia, la
prohibición de presentar escritos o probanzas por las partes rige desde
la citación para sentencia y hasta que ésta ha sido pronunciada, período
en que queda suspendida la participación activa de los litigantes en el
cual no puede alegarse abandono del procedimiento. Así lo ha
entendido el propio recurrente al sostener a fojas 60 que como las
partes no estaban habilitadas para pedir o probar nada, compete al juez
el pronunciamiento del fallo definitivo, sin necesidad de actividad alguna
de los litigantes (considerandos 3º, 4º y 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 14/12/1994, Rol Nº 19745-1994, Cita online:


CL/JUR/1659/1994
LIBRO TERCERO DE LOS JUICIOS ESPECIALES

TÍTULO I DEL JUICIO EJECUTIVO EN LAS OBLIGACIONES DE


DAR

§ 1. Del procedimiento ejecutivo

ARTÍCULO 434 (456)

El juicio ejecutivo tiene lugar en las obligaciones de dar cuando para


reclamar su cumplimiento se hace valer alguno de los siguientes títulos:

1º Sentencia firme, bien sea definitiva o interlocutoria;

2º Copia autorizada de escritura pública;167

3º Acta de avenimiento pasada ante tribunal competente y autorizada por


un ministro de fe o por dos testigos de actuación;

4º Instrumento privado, reconocido judicialmente o mandado tener por


reconocido. Sin embargo, no será necesario este reconocimiento respecto
del aceptante de una letra de cambio o suscriptor de un pagaré que no hayan
puesto tacha de falsedad a su firma al tiempo de protestarse el documento
por falta de pago, siempre que el protesto haya sido personal, ni respecto de
cualquiera de los obligados al pago de una letra de cambio, pagaré o cheque,
cuando, puesto el protesto en su conocimiento por notificación judicial, no
alegue tampoco en ese mismo acto o dentro de tercero día tacha de
falsedad.168

Tendrá mérito ejecutivo, sin necesidad de reconocimiento previo, la letra


de cambio, pagaré o cheque, respecto del obligado cuya firma aparezca
autorizada por un notario o por el oficial del Registro Civil en las comunas
donde no tenga su asiento un notario;169

5º Confesión judicial;
6º Cualesquiera títulos al portador, o nominativos, legítimamente emitidos,
que representen obligaciones vencidas, y los cupones también vencidos de
dichos títulos, siempre que los cupones confronten con los títulos, y éstos, en
todo caso, con los libros talonarios.

Resultando conforme la confrontación, no será obstáculo a que se


despache la ejecución la protesta de falsedad del título que en el acto haga
el director o la persona que tenga la representación del deudor, quien podrá
alegar en forma la falsedad como una de las excepciones del juicio; y

7º Cualquiera otro título a que las leyes den fuerza ejecutiva.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículo s, 158, 174, 175, 231, 237, 342, 346,
399, 401, 435, 436, 437 y 530. Código Civil: art ículo s 1377 y 1613. Código de Comercio:
artículos 211 y 655. Código Penal: artículo 467. Código Procesal Penal: artículo 375. Código del
Trabajo: artículos 177, 261, 349, 462, 464. Código de Minería: artículos 11 y 197. Código
Tributario: artículo 169. Código de Aguas: artículos 172 y 213. Código de Derecho Internacional
Privado: artículo 403. Código Aeronáutico: artículos 116 y 189. Ley Nº 16.271, Ley de Impuesto
a las Herencias, Asignaciones y Donaciones: artículo 53. Ley Nº 16.395, sobre Organización y
Atribuciones de la Superintendencia de Seguridad Social: artículo 60. Ley Nº 16.744, sobre
Seguro Social contra Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesionales: artículo 18. Ley
Nº 16.752, Organización y Funciones de la Dirección General de Aeronáutica: artículo 11. Ley
Nº 17.322, sobre Cobranza Judicial de Imposiciones, Aportes y Multas de las Instituciones de
Previsión: artículos 2º, 4º y 17. Ley Nº 18.045, Ley de Mercado de Valores: artículos 47 y 120.
Ley Nº 18.046, Ley de Sociedades Anónimas: artículos 69 bis, 83. Ley Nº 18.092, sobre Letra
de Cambio y Pagaré. Ley Nº 18.168, Ley General de Telecomunicaciones: artículo 35. Ley
Nº 18.480, establece Sistema Simplificado de Reintegro a Exportadores: artículo 7º. Ley
Nº 18.876, sobre Entidades Privadas de Depósito y Custodia de Valores: artículos 14 bis, 23.
Ley Nº 19.537, sobre Copropiedad Inmobiliaria: artículos 27 y 16 de su reglamento. Ley
Nº 19.705, Ley de OPAS: artículo 11 Nº 3. Ley Nº 19.718, crea la Defensoría Penal Pública:
artículo 39.. Decreto Ley Nº 776, 1925, sobre Realización de Prenda, D.O. 22.12.1925:
artículo 2º. Decreto Ley Nº 993, 1975, sobre Arrendamiento de Predios Rústicos,
D.O. 24.04.1975: artículo 5º. Decreto Ley Nº 3.475, 1980, sobre Timbres y Estampillas, D.O.
4.09.1980: artículos 14 y siguientes, 26. Decreto Ley Nº 3.538, 1980, crea Superintendencia de
Valores y Seguros, D.O. 23.12.1980: artículos 6º y 31. Decreto con Fuerza de Ley Nº 1, 1982,
Min. Minería, D.O. 13.09.1982, Ley General de Servicios Eléctricos: artículo 84. Decreto con
Fuerza de Ley Nº 164, 1996, Min. Obras Públicas, Ley de Concesiones de Obras Públicas:
artículos 2º y 9º. Decreto con Fuerza de Ley Nº 2, 1997, Ordenanza de Aduanas, Min. Hacienda,
D.O. 21.07.1998: artículo 224. Decreto Supremo Nº 2.385, 1996, fija texto refundido y
sistematizado de rentas municipales, Min. Interior, D.O. 20.11.1996: artículo 47. Decreto Nº 172,
1977, Reglamento Consular, D.O. 29.07.1977: artículo 98 Nº 2. Decreto Supremo Nº 369,
1985, Reglamento del Régimen de Prestaciones de Salud, D.O. 2.01.1986: artículo 77.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Concepto de título ejecutivo

Para que proceda la acción ejecutiva es necesario que la obligación


conste en un título ejecutivo, que sea líquida y actualmente exigible, y
que dicha acción no se encuentre prescrita. El título ejecutivo ha sido
definido por la doctrina como el documento que da cuenta de un
derecho y una obligación indubitada y al cual la ley le otorga la
suficiencia necesaria para obtener el cumplimiento de la obligación que
allí aparece. Por su parte, la jurisprudencia lo define como aquel que da
cuenta de un derecho indubitable al cual la ley le otorga la suficiencia
necesaria para exigir su cumplimiento forzado de una obligación de dar,
hacer o no hacer en él contenida, obligación que además, debe tener
las características de ser líquida, actualmente exigible y de no hallarse
prescrita. Asimismo, nuestros tribunales superiores han señalado que
el título con que se apareja una ejecución debe llevar en sí mismo todos
los requisitos necesarios para que tenga fuerza ejecutiva, en el
momento de despacharse el mandamiento de ejecución, sin que una
vez trabada la litis puedan ser remediados los defectos que tuviere en
la oportunidad indicada. (Repertorio del Código de Procedimiento Civil,
artículo 441; tomo III, pág. 76) (considerando 6º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de La Serena, 2/06/2011, Rol Nº 183-2011,

Cita online: CL/JUR/9798/2011

2. Título ejecutivo, clasificación

Por título ejecutivo se entiende "aquel documento que da cuenta de


un derecho indubitable, al cual la ley atribuye la suficiencia necesaria
para exigir el cumplimiento forzado de la obligación en él contenida"
(Raúl Espinoza Fuentes, "Manual de Procedimiento Civil, El juicio
Ejecutivo", Séptima Edición, página 11). Ahora bien, sucede que los
títulos ejecutivos pueden ser perfectos o imperfectos según la eficacia
que tengan desde su otorgamiento. Los imperfectos, a diferencia de los
perfectos, necesitan de alguna formalidad previa para dar nacimiento a
la acción ejecutiva, para lo cual el acreedor cuenta con el procedimiento
denominado gestión preparatoria que tiene por objeto constituir o
completar algunos de los requisitos que faltan al título para que tenga
mérito ejecutivo (considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 16/04/2018, Rol Nº 40211-2017, Cita online:


CL/JUR/1795/2018

Fallos en el mismo sentido:


— Corte Suprema, 7/01/2019, Rol Nº 16427-2018,

Cita online: CL/JUR/51/2019

— Corte Suprema, 24/05/2018, Rol Nº 2708-2018,

Cita online: CL/JUR/2355/2018

3. Requisitos del título ejecutivo en las obligaciones de dar

De conformidad al artículo 434 del Código de Procedimiento Civil en


las obligaciones de dar el juicio ejecutivo tiene lugar cuando para
reclamar su cumplimiento se hace valer alguno de los títulos que luego
menciona. En primer término es necesario que el título aducido dé
cuenta de una obligación. Y cuando la obligación de que el título da
cuenta recae sobre dinero, que es el caso, conforme al artículo 438 del
Código que se viene citando debe ser líquida, es decir, debe estar
claramente determinada la cantidad de dinero a que asciende. El texto
añade una alternativa en la que también es suficiente: que sea
liquidable, es decir, que pueda ser liquidada, pero en esta alternativa
con dos restricciones: mediante simples operaciones aritméticas y
acudiendo solamente a los datos que el mismo título ejecutivo
suministre (considerando 4º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 10/05/2018, Rol Nº 36126-2017, Cita online:


CL/JUR/2170/2018

4. El título ejecutivo presenta una naturaleza análoga a la de una prueba


privilegiada

La circunstancia que el juicio ejecutivo se funde en la existencia de un


título con fuerza de ejecución, se traduce en que el actor ejerce su
acción provisto de un antecedente documental que dota de plena
eficacia inicial a su pretensión de cumplimiento, vale decir, sin la
necesidad de comprobar la existencia de la obligación que lo motiva,
pues ella consta de modo fehaciente. Siguiendo ese contexto, se ha
dicho: "El título ejecutivo presenta una naturaleza análoga a la de una
prueba privilegiada en términos tales que el acreedor dotado de él goza
de la garantía jurisdiccional de solicitar el embargo de bienes suficientes
del deudor y todo el peso de la prueba recae sobre este último. Este
debe desvanecer la presunción de autenticidad y de veracidad que el
título supone. Conclúyese de aquí que si el ejecutado no rinde probanza
alguna en apoyo de sus pretensiones, sus excepciones no pueden
prosperar y ellas deben ser rechazadas". (R.D.J., T. 64, secc. 2a, pág.
33)" (considerando 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 31/05/2018, Rol Nº 42497-2017, Cita online:


CL/JUR/2577/2018

5. Características de los títulos ejecutivos

El procedimiento ejecutivo en general tiene por objeto perseguir el


cumplimiento de ciertas obligaciones de carácter indubitable, que han
sido convenidas por las partes en forma fehaciente o declaradas por la
justicia en los casos y con las solemnidades que la ley señala, lo que
conlleva que al incoar la litis, el ejecutante tiene el deber de allegar uno
de los títulos que tienen reconocida fuerza ejecutiva por la ley con la
finalidad de dar base que sustente su acción y pretensión. Solo en estas
condiciones habrá de entenderse que da inicio el pleito satisfaciendo su
carga de probar la existencia de la obligación cuya ejecución reclama.
Por consiguiente, ello será así en la medida que el título en que se apoya
la acción ejecutiva ejercida reúna los requisitos y condiciones que lo
dotan de mérito bastante. Luego, son características inherentes al
concepto de título ejecutivo las siguientes: son establecidos por la ley;
son autónomos; son perfectos; y constituyen un presupuesto para la
iniciación del juicio ejecutivo, generando una presunción de veracidad
en favor del ejecutante, que presupone una alteración de la carga de la
prueba al dar por cierto lo que en él consta (considerandos 7º y 8º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 31/05/2018, Rol Nº 42497-2017, Cita online:


CL/JUR/2577/2018

6. Todos los títulos ejecutivos deben contener para ser tales, la condena
al deudor-demandado a la satisfacción de una determinada
prestación en favor del acreedor-demandante

Para que el título ejecutivo sea tal, es menester la reunión de dos


elementos: por un lado, la declaración de la existencia de una obligación
que la ejecución tiende a satisfacer; por otro, la orden de ejecución.
Ahora bien, las formas de la ejecución dependen del título con que se
promueva aquélla. Cada especie de título tiene, normalmente, una
forma propia de proceso y, en consecuencia, la multiplicidad de títulos
apareja la multiplicidad de procesos de ejecución. En otros términos,
cada título tiene su forma particular de llegar hasta el fin propuesto y,
así, no es idéntica la vía ejecutiva que emana de la sentencia que
condena al pago de una suma de dinero, a la que nace de una sentencia
que dispone el lanzamiento del arrendatario, declarado que sea el
término de este contrato. No obstante estas diferencias, lo que todos los
títulos ejecutivos —entre ellos la sentencia definitiva firme— deben
contener para ser tales, es la condena al deudor-demandado a la
satisfacción de una determinada prestación en favor del acreedor-
demandante. Así fue resuelto por esta Corte Suprema en fallo de 24 de
septiembre de 2001, dictado en causa Rol 4903-200, en que se señala
que una sentencia dictada en un juicio ejecutivo no puede constituir un
nuevo título ejecutivo porque no da cuenta de una obligación indubitada,
declarándola, sino que se limita a contener la orden de seguir adelante
con la ejecución ya iniciada; criterio reiterado por el tribunal de casación
(considerando 9º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 18/05/2020, Rol Nº 11546-2019,

Cita online: CL/JUR/30812/2020

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 434 Nº 1)

1. Autoridad de cosa juzgada de sentencia firme sólo le corresponde a


aquel en cuyo favor se ha declarado un derecho en el juicio

La sentencia firme, definitiva o interlocutoria, constituye un título


ejecutivo en los términos del artículo 434 Nº 1 del Código de
Procedimiento Civil, porque de esa manera se hace efectiva la acción
de cosa juzgada. Pero dicha autoridad solo le corresponde, de acuerdo
al artículo 176 del Código mencionado, a aquel en cuyo favor se ha
declarado un derecho en el juicio, para el cumplimiento de lo resuelto o
para la ejecución del fallo en la forma prevenida en el Título XIX del
Libro Primero del mismo cuerpo legal, de lo cual se sigue que debe
tratarse de una sentencia que haya declarado un derecho que antes del
juicio no estuviera reconocido o constituido (considerando 11º de la
sentencia de casación de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 14/01/2010, Rol Nº 7663-2008, Cita online:


CL/JUR/435/2010
2. Certificado de ejecutoria constituye un antecedente formal, pero no
es un requisito para la configuración del título conforme al artículo 434
Nº 1 del Código de Procedimiento Civil

De este modo, el certificado acompañado sólo vino a constatar un


hecho no controvertido, el que da cuenta que la aludida sentencia se
encontraba firme y ejecutoriada a la fecha de interposición de la
demanda. Por ende, el certificado constituye más bien un antecedente
formal, pero no un requisito esencial para la configuración del título a la
luz de lo dispuesto en el artículo 434 Nº 1 del Código de Procedimiento
Civil, de manera que el título invocado sí reúne los requisitos que
prescribe la ley para tener mérito ejecutivo, por tratarse de una
sentencia definitiva que a la fecha de presentación de la demanda se
encontraba indiscutidamente firme y ejecutoriada (considerando 10º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/05/2018, Rol Nº 45587-2017, Cita online:


CL/JUR/2529/2018

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 434 Nº 2)

1. Mérito ejecutivo de la escritura pública

El artículo 434 del Código de Procedimiento Civil, señala, entre otros,


en su numeral 2º) como título ejecutivo, la copia autorizada de escritura
pública. Al decir de copia autorizada, en el caso de las escrituras
públicas, éstas sólo pueden ser otorgadas por el notario autorizante, el
que lo subroga o suceda legalmente o el archivero a cuyo cargo esté el
protocolo respectivo, en los términos del artículo 421 del Código
Orgánico de Tribunales. Cabe recordar que en este caso siempre han
de ser copias y no los originales, las que deben reunir los requisitos del
artículo 405 del mismo cuerpo legal citado. A la observación de los
documentos que se han traído a la vista, como medida para mejor
resolver, puede apreciarse que éstos reúnen todas las características
de las escrituras públicas y han sido autorizadas por la misma notario
que concurrió a su extensión, presenta la fecha en que fueron
otorgadas, la firma de la notario y su respectivo timbre, que es
precisamente lo que le da el carácter de copia autorizada. De lo dicho
fluye que los documentos acompañados por la actora como títulos
ejecutivos, detentan tal calidad (considerandos 3º, 4º, 5º y 6º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Santiago, 28/03/2016, Rol Nº 13494-2015,

Cita online: CL/JUR/4399/2016

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 434 Nº 3)

1. Acta de avenimiento pasada ante tribunal competente ha de ceñirse


al procedimiento previsto en los artículos 434 y siguientes del Código
de Procedimiento Civil

Los fundamentos de los cuales carece la sentencia de primer grado,


de fojas 208, confirmado por la de alzada, eran absolutamente
necesarios si se considera que, no obstante las partes han denominado
indistintamente al documento de fojas 190 transacción o avenimiento;
lo cierto es que, tal acuerdo puso término al juicio y, a través de él, las
partes se desistieron de la acción de demarcación planteada en autos.
A mayor abundamiento, cabe recordar que el acta de avenimiento
pasada ante tribunal competente y autorizada por un ministro de fe y de
la cual emana la acción de cosa juzgada, constituye un título ejecutivo
cuyo cumplimiento ha de ceñirse al procedimiento previsto en los
artículos 434 y siguientes del Código de Procedimiento Civil
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 24/04/2006, Rol Nº 209-2004, Cita online:


CL/JUR/362/2006

2. Avenimiento suscrito en un juicio de cobro de pagaré seguido entre


las partes

En la especie, el ejecutante ha perseguido el cumplimiento de una


obligación de dar, fundándose en un acta de avenimiento suscrita entre
las partes en un juicio anterior, que da cuenta de una obligación líquida,
actualmente exigible y no prescrita, consistente en el pago de una suma
de dinero que los demandados reconocieron adeudar por el crédito
contenido en el pagaré que sirvió de título a aquella demanda. En
consecuencia, aparece que el acreedor tiene un título ejecutivo perfecto,
de aquellos que regula el artículo 434 Nº 3 del Código de Procedimiento
Civil —acta de avenimiento— y no aquel que señala el ejecutado
consistente en el referido pagaré (considerando 5º de la sentencia de la
Corte Suprema).
Corte Suprema, 12/04/2016, Rol Nº 37512-2015,

Cita online: CL/JUR/2456/2016

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 434 Nº 4)

1. Concepto "autorización notarial" no supone la presencia de la


persona cuya rúbrica se autentifica

El Máximo Tribunal ha señalado que: "El vocablo autorizar no supone,


necesariamente, la presencia de la persona cuya rúbrica autentifica y,
por consiguiente, la correcta interpretación del artículo 434 Nº 4 inciso
segundo del Código de Procedimiento Civil ni siquiera lleva a exigir la
comparecencia ante el notario del obligado que firma un instrumento
mercantil, sea pagaré, cheque o letra de cambio, bastando al efecto la
sola actuación del ministro de fe autorizante y la circunstancia de que a
este último le conste la autenticidad de la firma que autoriza. Dicha
interpretación también resulta coherente con lo prescrito en el Nº 10 del
artículo 401 del Código Orgánico de Tribunales, de acuerdo con el cual
esta es una de las funciones de los notarios, autorizar las firmas que se
estampen en documentos privados, sean en su presencia o cuya
autenticidad le conste (considerando 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 16/01/2020, Rol Nº 2126-2019,

Cita online: CL/JUR/42021/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 4/05/2020, Rol Nº 14804-2020,

Cita online: CL/JUR/26623/2020

— Corte Suprema, 18/02/2020, Rol Nº 13257-2019,

Cita online: CL/JUR/11011/2020

— Corte Suprema, 8/10/2018, Rol Nº 19119-2018,

Cita online: CL/JUR/5663/2018


— Corte Suprema, 5/03/2018, Rol Nº 37433-2017,

Cita online: CL/JUR/4667/2018

— Corte Suprema, 10/01/2018, Rol Nº 43180-2017,

Cita online: CL/JUR/171/2018

2. Reconocer la firma no deja al reconociente irremediablemente como


deudor

La circunstancia de reconocer la firma no deja al reconociente


irremediablemente como deudor. Reconoce la firma porque, si es la
suya, no puede rectamente negarla. Asimismo, si tiene duda, que podría
ser equiparada a evasivas, se tendrá por reconocida la firma pero
todavía podrá objetar la deuda aunque quede autorizada la ejecución
conforme al artículo 435 inciso final del Código citado. Queda permitido
iniciar la ejecución pero esa circunstancia no impide que luego pueda
discutir la obligación en existencia, liquidez o exigibilidad. Para ese
efecto está la etapa de presentación de excepciones y para eso el
Código de Procedimiento Civil consigna la lista de las que puede oponer
(considerando 7º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 10/05/2018, Rol Nº 36126-2017, Cita online:


CL/JUR/2170/2018

3. Condiciones para obtener título ejecutivo a partir de gestión


preparatoria

Con lo obrado en aquella sede preparatoria, se dio origen al título


ejecutivo contemplado en el Nº 4 del artículo 434 del ordenamiento en
referencia, esto es, el instrumento privado reconocido judicialmente o
mandado tener por reconocido. De este modo, al requerirse la citación
judicial del deudor con el objeto que éste reconozca la firma puesta en
el documento o confiese la deuda y al efectuar aquél positivamente
dichas acciones, o bien al no comparecer —en cuyo caso se le tendrá
por incurso en la sanción legal contemplada en el inciso 2º del mentado
artículo 435—, habrá obtenido el acreedor, en cualquiera de estas dos
hipótesis, un título ejecutivo que le permitirá compeler al deudor al
cumplimiento de la obligación contenida en el documento privado, que
originalmente carecía de la facultad que ahora se le reconoce
(considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 8/11/2010, Rol Nº 5569-2009, Cita online:


CL/JUR/9173/2010

4. Pagaré es un título autónomo e independiente del negocio que le dio


origen

Una de las características del título ejecutivo es su autonomía, que se


refiere a la separación que existe entre el título y la fuente que le dio
origen. En autos, el título hecho valer es un pagaré, que es autónomo e
independiente del negocio que le dio origen, pues tiene mérito por sí
mismo. Se trata además de un pagaré en que las firmas de sus
suscriptores fueron autorizadas ante notario, lo que determina que
adquirió mérito ejecutivo sin necesidad de reconocimiento de firma o
protesto previo. A mayor abundamiento, se expresó en él que se
suscribió con cláusula "sin protesto" o "sin la obligación de protesto". En
mérito a lo anterior, no resulta posible cuestionar el mérito del título
ejecutivo que se cobra imponiéndole al ejecutante la prueba de la
obligación que le dio origen, pues por su autarquía, el título se basta a
sí mismo, no requiriendo para su reconocimiento, prueba del negocio
causal que le dio origen. Es, en cambio, el ejecutado, quien debe
acreditar los fundamentos de hecho de la excepción que opuso, y en
este caso, se acreditó el pago de una deuda extinguida con anterioridad
al nacimiento del título ejecutivo que se cobra en estos autos
(considerandos 11º y 12º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 9/10/2019, Rol Nº 11117-2018,

Cita online: CL/JUR/5889/2019

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 434 Nº 5)

1. Título ejecutivo fundado en confesión judicial. Sólo se puede


prescindir del título creado por medio de alguna excepción que ataque
su validez o eficacia

La ejecución de autos se sustenta en el título ejecutivo consagrado en


el artículo 434 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil, esto es, en la
sentencia interlocutoria que tuvo por confesa a la sociedad ejecutada.
Reconocer un título como fundante de una determinada ejecución
conlleva múltiples efectos, entre ellos los relativos a la prescripción. En
este orden de ideas cabe consignar que dado el carácter de sentencia
interlocutoria de la resolución que tuvo por confesada la deuda, ella, una
vez firme, se vio revestida de autoridad de cosa juzgada. Como precisa
la doctrina, "el deudor no podrá ya más discutir la existencia de la deuda,
pero, sin desconocer esa existencia, podrá oponerse a la ejecución
fundado en que la obligación es nula o en que ella se extinguió por otro
medio de extinción de las obligaciones" —Raúl Espinosa Fuentes—. En
consecuencia, no se podría prescindir del título creado sino por medio
del acogimiento de alguna excepción que ataque su validez o eficacia,
lo cual no se verificó (considerandos 5º y 6º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 3/04/2018, Rol Nº 33855-2017, Cita online:


CL/JUR/1521/2018

2. Todo acreedor desprovisto de título ejecutivo cuenta con el derecho


a instar por la preparación de la vía ejecutiva por medio de confesión

La confesión judicial, en cuanto título ejecutivo, está normada en el


numeral 5º del artículo 434 del Código de Procedimiento Civil y su
gestión preparatoria en el artículo 435 de ese ordenamiento, cuya
procedencia se encuentra supeditada a la inexistencia de un
antecedente escrito con la firma del obligado, pues de haberlo, la
gestión pertinente será la de citación a reconocer firma. En otras
palabras, la circunstancia de carecer el acreedor de un título, aun
imperfecto, es presupuesto básico de esta clase de gestión. De la
correcta inteligencia del artículo 435 en mención deriva que todo
acreedor desprovisto de título ejecutivo cuenta con el derecho a instar
por la preparación de la vía ejecutiva por medio de confesión
(considerando 2º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 23/07/2019, Rol Nº 944-2019,

Cita online: CL/JUR/4209/2019

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 434 Nº 7)

1. Títulos ejecutivos sólo pueden ser creados por ley


Cabe señalar que es la ley la que confiere el carácter ejecutivo a un
título, aspecto en el que, por lo tanto, la voluntad de las partes no tiene
espacio, debiendo ellas limitarse a fijar su contenido. En otras palabras,
sólo tienen la calidad de título ejecutivo los instrumentos a los que la ley
les confiere la calidad de tal, no pudiendo ser ellos generados por vía
convencional. De ahí que el artículo 434 Nº 7 del Código de
Procedimiento Civil, que encierra la enumeración de títulos ejecutivos
contemplados por dicho cuerpo normativo, se refiera a "cualquiera otro
título a que las leyes den fuerza ejecutiva" (considerando 5º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 29/12/2015, Rol Nº 10765-2015, Cita online:


CL/JUR/8093/2015

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 29/09/2016, Rol Nº 14889-2016,

Cita online: CL/JUR/4662/2016

ARTÍCULO 435 (457)

Si, en caso de no tener el acreedor título ejecutivo, quiere preparar la


ejecución por el reconocimiento de firma o por la confesión de la deuda, podrá
pedir que se cite al deudor a la presencia judicial, a fin de que practique la
que corresponda de estas diligencias.

Y, si el citado no comparece, o sólo da respuestas evasivas, se dará por


reconocida la firma o por confesada la deuda.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40, 44, 273 Nº 5, 278, 388, 389, 390,
391, 392, 400, 401, 434 Nº 5 y 464.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Gestiones preparatorias de la vía ejecutiva, concepto

Las gestiones preparatorias a la vía ejecutiva son actividades


previstas en la ley para dotar de mérito ejecutivo a un título que
originariamente no lo tiene o para hacer nacer un título ejecutivo. De allí
que ellas pueden ser constitutivas, cuando hacen surgir un título que
antes no existía, como la confesión judicial de una deuda, o
complementarias, que son aquellas que le dan a un título el mérito
ejecutivo que le falta, por ejemplo, la notificación judicial del protesto del
cheque. El citado artículo 435, contempla la posibilidad excepcional que
otorga el legislador a aquel actor que, sin tener título ejecutivo, quiera
usar el procedimiento ejecutivo. En este caso, en que el acreedor carece
de título ejecutivo, y quiere preparar la ejecución, podrá pedir que se
cite al deudor a la presencia judicial a fin de que reconozca la firma
estampada en un documento privado en que conste la obligación o a
confesar la deuda, en caso de no constar la obligación en ningún
documento escrito, pudiendo en una misma audiencia verificarse ambas
gestiones o sólo una de ellas. El título perfecto será la resolución judicial
o el certificado en que se deje constancia de que concurren las
situaciones previstas en la norma. Tal como ha expuesto la doctrina
nacional en esta materia, el artículo 435 no está destinado a
perfeccionar títulos, sino que está destinado, como dice literalmente el
Código, a crear títulos ejecutivos. (Colombo Campbell, Juan, y otros, en
"Juicio Ejecutivo. Panorama Actual", Edit. ConoSur, 1995, pág. 15). Así
lo ha entendido también la jurisprudencia, en cuanto se ha fallado que
el objeto de las gestiones preparatorias de la vía ejecutiva es crear un
título, finalidad que se logra de distintas maneras, entre ellas, creándose
el título por la gestión misma, como sucede con la confesión judicial, en
que no existe antecedente previo que consigne la obligación que se
trata de hacer efectiva (C. Concepción, R., t. 63, sec. 2ª, pág. 169)
(considerando 2º de la disidencia de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 28/09/2018, Rol Nº 10596-2018,

Cita online: CL/JUR/5457/2018

2. Procedencia de gestiones preparatorias de la vía ejecutiva

Se entiende por título ejecutivo aquel documento que da cuenta de un


derecho indubitado, al cual la ley atribuye un carácter de suficiencia
necesaria para exigir un cumplimiento forzado de la obligación
contenida en el mismo. Sin embargo, pueden existir títulos ejecutivos
imperfectos, esto es, alguno de aquellos estatuidos en la ley procesal,
pero que requieren de la realización en forma previa de una gestión
preparatoria de la vía ejecutiva para reunir la totalidad de los requisitos
de un título preexistente o para originarlo mediante ella, con el objeto de
poder iniciar la ejecución. Por consiguiente, se trata de gestiones
preliminares dirigidas a crear el título mismo o, a complementarlo con
determinados antecedentes o, a suplir sus imperfecciones. El
artículo 435 del Código de Procedimiento Civil se refiere a la situación
del acreedor que careciendo de título ejecutivo quiere preparar la
ejecución por el reconocimiento de firma o por la confesión de la deuda,
señalando que éste podrá pedir que se cite al deudor a la presencia
judicial, a fin de que practique la que corresponda de estas diligencias
(considerandos 4º y 5º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 30/10/2019, Rol Nº 7917-2019, Cita online:


CL/JUR/6266/2019

3. Gestión preparatoria de reconocimiento de firma. Sólo autoriza tener


por preparada la ejecución, pero no implica el reconocimiento de la
deuda

La circunstancia de reconocer la firma no deja al reconociente


irremediablemente como deudor. Reconoce la firma porque, si es la
suya, no puede rectamente negarla. Asimismo, si tiene duda, que podría
ser equiparada a evasivas, se tendrá por reconocida la firma pero
todavía podrá objetar la deuda aunque quede autorizada la ejecución
conforme al artículo 435 inciso final del Código citado. Queda permitido
iniciar la ejecución pero esa circunstancia no impide que luego pueda
discutir la obligación en existencia, liquidez o exigibilidad. Para ese
efecto está la etapa de presentación de excepciones y para eso el
Código de Procedimiento Civil consigna la lista de las que puede oponer
(considerando 7º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 10/05/2018, Rol Nº 36126-2017, Cita online:


CL/JUR/2170/2018

4. Concepto y procedencia de la citación a confesar deuda

Del tenor literal del epílogo del inciso primero del artículo 435 del
Código de Procedimiento Civil aparece que la naturaleza de la gestión
que debe realizarse no queda entregada al arbitrio del acreedor ni del
tribunal sino que está determinada por el hecho de contar o no esa parte
con un antecedente escrito que dé cuenta de la obligación. Si lo tiene,
corresponde deducir la diligencia de reconocimiento de firma y si no lo
detenta, deberá citar al deudor a confesar la deuda, pues la gestión
preparatoria en análisis tiene por finalidad constituir títulos o
perfeccionar títulos imperfectos. Luego, la confesión de deuda es la
gestión que permite constituir un título y el reconocimiento de firma es
la que permite perfeccionar el imperfecto. Así, en lo que atañe a la
situación que se revisa, constituye un supuesto esencial para la gestión
intentada en autos —confesión expresa o tácita del deudor— que el
acreedor no tenga el título a que se refieren los artículos 434 y 435 del
Código de Enjuiciamiento Civil, en tanto ella importa "...el
reconocimiento de una obligación que, como tal, está sujeta a una
causa, la cual es diferente al acto mismo de reconocimiento o confesión
y, en consecuencia, no puede bastarse a sí misma como causa de la
obligación. Dicha gestión no tiene la significación jurídica de crear una
obligación, sino de patentizar en forma tal que ella puede hacerse valer
ejecutivamente. Es un título ejecutivo, pero no es el acto o contrato
generador de la obligación del deudor, de modo que su carácter
procesal no sustituye la fuente de la cual ha nacido aquélla"
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 10/01/2020, Rol Nº 5211-2019, Cita online:


CL/JUR/4804/2020

Fallo en el mismo sentido

— Corte Suprema, 3/07/2018, Rol Nº 2713-2018,

Cita online: CL/JUR/3334/2018

5. Gestión requiere existencia de obligación previa. Concepto acreedor


y deudor

Por medio de las gestiones preparatorias de la vía ejecutiva, entre las


cuales se encuentra la citación a confesar deuda y el reconocimiento de
firma, se busca dotar de mérito ejecutivo a una obligación preexistente
que, por lo mismo, aunque ha nacido a la vida jurídica no tiene
aparejada dicha cualidad, de tal suerte que en virtud de la gestión previa
en referencia no se la crea o establece, sino que únicamente se le
otorga mérito ejecutivo, constituyéndose en el título que contiene la
gestión respectiva. La exigencia de una obligación previa, a la que se
busca dotar de mérito ejecutivo, fluye del propio tenor del artículo 435
del Código de Procedimiento Civil, en cuanto esta norma dispone que
en caso de no tener el acreedor título ejecutivo podrá pedir que se cite
al "deudor" a la presencia judicial, a fin de que practique la que
corresponda de estas diligencias, el reconocimiento de firma o la
confesión de la deuda. La referencia que hace esta disposición legal a
los conceptos de "acreedor" y "deudor" da cuenta precisamente de la
exigencia de una obligación previa, que uno tiene derecho a exigir y otro
el deber de satisfacer. Lo dicho precedentemente resulta acorde con las
definiciones que entrega el Diccionario de la Lengua de la Real
Academia Española para tales términos. En efecto, se define al
acreedor como el que tiene: "mérito para obtener algo", "derecho a que
se le satisfaga una deuda" y/o "acción o derecho a pedir el cumplimiento
de alguna obligación. Y a su vez, el deudor se conceptualiza como el
"que debe o está obligado a satisfacer una deuda. De este modo, el
derecho que otorga el citado artículo 435 impone la necesidad de
verificar que quien solicita la gestión tenga la calidad de acreedor y que
quien es requerido citar tenga a su vez la calidad de deudor
(considerando 11º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 15/05/2019, Rol Nº 14752-2018, Cita online:


CL/JUR/3237/2019

6. Procedencia de citación a confesar deuda si acreedor carece de


cualquier tipo de documento en que el deudor haya efectuado un
reconocimiento escrito de la deuda contraída

En la especie, es posible concebir la posibilidad de que un acreedor


carezca de cualquier tipo de documento en que el deudor haya
efectuado un reconocimiento escrito de la deuda contraída, evento en
el cual resultará pertinente intentar la gestión preparatoria de la vía
ejecutiva de citación a confesar deuda, cuyo efecto —de confesarse la
obligación expresa o tácitamente por incomparecencia— importa que el
citado reconoce la existencia, términos y vigencia de la obligación
reclamada, lo que permitirá tener por preparada la ejecución en su
contra. Al requerirse la citación judicial del deudor con el objeto que
reconozca la firma puesta en el documento o confiese la deuda, ya sea
que comparezca reconociendo su firma o confesando la deuda o
aplicando la sanción contemplada en el artículo 435 inciso 2º del Código
de Procedimiento Civil ante su incomparecencia, el acreedor habrá
obtenido un título ejecutivo que le permitirá compeler al deudor al
cumplimiento de la obligación contenida en el documento privado que
originalmente carecía de la calidad que ahora se le reconoce
(considerando 4º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 3/07/2018, Rol Nº 2713-2018, Cita online:


CL/JUR/3334/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 19/07/2018, Rol Nº 6231-2018,

Cita online: CL/JUR/3878/2018

7. Gestión preparatoria del artículo 435

En lo que atañe a la situación que se revisa, constituye un supuesto


esencial para la gestión intentada en autos confesión expresa o tácita
del deudor que el acreedor no tenga el título a que se refieren los
artículos 434 y 435 del Código de Enjuiciamiento Civil, en tanto ella
importa "...el reconocimiento de una obligación que, como tal, está
sujeta a una causa, la cual es diferente al acto mismo de reconocimiento
o confesión y, en consecuencia, no puede bastarse a sí misma como
causa de la obligación. Dicha gestión no tiene la significación jurídica de
crear una obligación, sino de patentizar en forma tal que ella puede
hacerse valer ejecutivamente. Es un título ejecutivo, pero no es el acto
o contrato generador de la obligación del deudor, de modo que su
carácter procesal no sustituye la fuente de la cual ha nacido aquélla"
(Rioseco Enríquez, Emilio. "La prueba ante la Jurisprudencia, Derecho
Civil y Procesal Civil. Confesión de Parte", 1a edición, págs. 148-149).

Corte Suprema, 3/07/2018, Rol Nº 2713-2018, Cita online:


CL/JUR/3334/2018

8. Derecho absoluto de acreedor de citar a deudor a confesar deuda

No es necesario que el solicitante acredite ser acreedor de su deudor,


puesto que la situación que regula el artículo 435 del Código de
Procedimiento Civil es precisamente aquella en que se encuentra la
persona a quien se le debe dinero, pero que esa deuda no consta en
instrumento alguno, situación que no es poco frecuente, pues lo habitual
es que los contratos, fuente de las obligaciones, sean consensuales, y
que su escrituración se realice exclusivamente con finalidad probatoria.
De ahí que se ha señalado que todo deudor puede ser citado a
reconocer deuda, o en otros términos, que todo acreedor tiene el
derecho de pedir que se cite a su deudor a la presencia judicial a fin de
que reconozca la deuda, cualquiera sea el origen de la obligación y
aunque el acreedor tenga otras acciones ordinarias o especiales que
ejercitar para hacer valer su acreencia. El artículo 435 del Código de
Procedimiento Civil, concede tal derecho al acreedor que no tenga título
ejecutivo, en términos absolutos y sin establecer ninguna excepción.
(Espinoza Fuentes, Raúl. Manual de Procedimiento Civil. El Juicio
Ejecutivo. Edit. Jurídica de Chile, 2003, pág. 31) (considerando 2º de la
disidencia de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 28/09/2018, Rol Nº 10596-2018,

Cita online: CL/JUR/5457/2018

9. La naturaleza de la gestión que debe realizarse no queda entregada


al arbitrio del acreedor, sino que está determinada, por mandato de la
ley

Es del caso también señalar que esta Corte ha expresado que cuando
el acreedor es poseedor de un documento privado en que se reconoce
una deuda pero carece de mérito ejecutivo, sólo resulta procedente la
diligencia de reconocimiento de firma y no la confesión de deuda, pues
el artículo 435 del citado texto legal faculta al acreedor para solicitar la
citación del deudor a la presencia judicial, con el propósito que practique
"la que corresponda de estas diligencias". En consecuencia, la
naturaleza de la gestión que debe realizarse no queda entregada al
arbitrio del acreedor, sino que está determinada, por mandato de la ley,
al antecedente de que pueda disponer el acreedor. Así, si posee un
escrito en el cual se consigne la firma del obligado, corresponderá la
diligencia de reconocimiento de firma, como ocurre en este caso y de
no ser así, procedería citarlo a confesar deuda (C.S. rol Nº 6721 2010)
Conforme a lo anterior, en el caso sub lite en que la citación a confesar
deuda se presenta vinculada a determinados instrumentos en que se
funda la gestión, recae sobre el juez el deber de constatar el
cumplimiento del presupuesto básico y esencial que deben cumplir los
referidos documentos, cual es el de dar cuenta de una obligación
preexistente entre las partes. Tal exigencia emana de la naturaleza
misma de este tipo de gestiones, cuyo objetivo es precisamente
perfeccionar un título ejecutivo, en este caso el señalado en el numeral
4º del artículo 434 del Código de Procedimiento Civil, siendo la
existencia de tal premisa, insoslayable (considerandos 12º y 13º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 15/05/2019, Rol Nº 14752-2018, Cita online:


CL/JUR/3237/2019

10. Imposibilidad de revivir vía actuaciones reguladas en el art. 435 del


Código de Procedimiento Civil una acción de cobro que ya prescrita

En efecto, las actuaciones reguladas en el artículo 435 del Código de


Procedimiento Civil no pueden importar el revivir una acción de cobro
que ya se encontraba prescrita, modificando, al arbitrio del acreedor, la
data a partir de la cual procede contar el plazo que el legislador ha
establecido en cada caso para que opere la prescripción liberatoria,
desvirtuando el fundamento de certeza jurídica que justifica dicha
institución de orden público. Por lo demás el precepto mencionado parte
del supuesto de no poseer el acreedor título ejecutivo, no del caso en
que existió un título o una obligación y operó la prescripción, no teniendo
en caso alguno la virtud de generar un nuevo plazo extintivo. En
consecuencia, resuelven acertadamente los sentenciadores al acoger
la excepción de prescripción, dado que con la gestión de preparación
de la vía ejecutiva el actor ha pretendido crearse un nuevo título
ejecutivo respecto de una obligación ya extinguida (considerando 4º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 20/08/2018, Rol Nº 12482-2018, Cita online:


CL/JUR/4977/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 5/03/2019, Rol Nº 20536-2018,

Cita online: CL/JUR/1069/2019

11. Gestión preparatoria no tiene la significación jurídica de crear una


obligación

Constituye un supuesto esencial para este tipo de gestión confesión


expresa o tácita del deudor que el acreedor no tenga el título a que se
refieren los artículos 434 y 435 del Código de Enjuiciamiento Civil. De
este modo, en la referida gestión que puede servir para crear un título
ejecutivo, el acta o resolución que oportunamente dicte el tribunal en la
que el citado confiesa la deuda para con el futuro ejecutante (en las
hipótesis que la propia norma prevé) "importa el reconocimiento de una
obligación que, como tal, está sujeta a una causa, la cual es diferente al
acto mismo de reconocimiento o confesión y, en consecuencia, no
puede bastarse a sí misma como causa de la obligación. Dicha gestión
no tiene la significación jurídica de crear una obligación, sino de
patentizar en forma tal que ella puede hacerse valer ejecutivamente".
"Es un título ejecutivo, pero no es el acto o contrato generador de la
obligación del deudor, de modo que su carácter procesal no sustituye la
fuente de la cual ha nacido aquélla". (Rioseco Enríquez, Emilio. "La
prueba ante la Jurisprudencia, Derecho Civil y Procesal Civil. Confesión
de Parte", 1a edición, págs. 148-149) (considerando 6º de la sentencia
de casación).

Corte Suprema, 7/01/2019, Rol Nº 16427-2018, Cita online:


CL/JUR/51/2019

12. Acreedor que no tiene un título o tiene uno imperfecto puede crearlo
o perfeccionarlo mediante gestión preparatoria de citación para
confesión de deuda

Del tenor literal —del artículo 435 del Código de Procedimiento Civil—
aparece con claridad que, si el acreedor no tiene un título o, si lo tiene,
éste es imperfecto, puede utilizar esta vía o gestión para crearlo o
perfeccionarlo, y en tal caso corresponde al órgano jurisdiccional
decretar tal diligencia, conforme a lo dispuesto en los artículos 434 y
435 del Código de Procedimiento Civil, disposición la última que
"concede tal derecho al acreedor que no tenga título ejecutivo, en
términos absolutos y sin establecer ninguna excepción", como lo indica
don Raúl Espinoza Fuentes en su Manual de Procedimiento Civil, El
juicio ejecutivo, undécima edición, página 31 (considerando 3º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 22/03/2019, Rol Nº 2305-2018,

Cita online: CL/JUR/1606/2019


13. En preparación de la vía ejecutiva los magistrados tienen
competencia sólo para resolver los aspectos a que ella se refiere

La decisión adoptada en estos antecedentes —negativa a tramitar la


gestión preparatoria— ha obviado que en la preparación de la vía
ejecutiva los magistrados tienen competencia sólo para resolver los
aspectos a que ella se refiere. En otras etapas del procedimiento
ejecutivo les está permitido, incluso de oficio, examinar el título y
denegar la tramitación de la demanda por los motivos que dispone el
legislador, pero no corresponde ejercitar tales atribuciones en la gestión
preparatoria intentada. Valga advertir, por lo mismo, que nada obsta a
que en el posterior juicio ejecutivo el deudor pueda oponer las
correspondientes excepciones relativas a la vigencia, liquidez o
exigibilidad de la obligación. En consecuencia, el pronunciamiento
censurado no encuentra asidero en la regulación aplicable a la particular
gestión iniciada por el actor e incurre en un error de derecho que influye
substancialmente en lo decidido, al impedir su tramitación en un caso
en que procedía dar curso a la gestión, según se infiere de la redacción
del artículo 435 del Código de Procedimiento Civil (considerandos 8º y
9º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 1/10/2019, Rol Nº 3893-2019,

Cita online: CL/JUR/5345/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 31/03/2020, Rol Nº 26054-2019,

Cita online: CL/JUR/22298/2020

ARTÍCULO 436 (458)

Reconocida la firma, quedará preparada la ejecución, aunque se niegue la


deuda.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40, 44, 273, 278, 385, 388, 389, 390,
391, 392, 399, 400, 401, 434 y 464.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Con el reconocimiento de la firma queda preparada la ejecución

La preparación de la vía ejecutiva que contemplan los artículos 435 y


436 del Código de Procedimiento Civil no tiene el efecto de crear una
nueva obligación ni altera el origen, causa y naturaleza de la obligación
preexistente a que ella se refiere. Mediante este mecanismo sólo se
posibilita al acreedor la cobranza de la obligación de acuerdo a un
procedimiento más concentrado, lo que no obsta al derecho del deudor
de alegar la prescripción en el momento procesal oportuno. Así, el
artículo 436 del mismo Código establece que reconocida la firma
quedará preparada la ejecución, lo que ciertamente no significa que se
haya dado nacimiento a una obligación distinta, sino que puede iniciarse
el procedimiento ejecutivo para el cobro de la deuda de que da cuenta
el documento reconocido, en las condiciones y modalidades que en el
mismo instrumento se consignan (considerando 5º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 5/03/2019, Rol Nº 20536-2018, Cita online:


CL/JUR/1069/2019

2. Gestión preparatoria de reconocimiento de firma. Sólo autoriza tener


por preparada la ejecución, pero no implica el reconocimiento de la
deuda

La circunstancia de reconocer la firma no deja al reconociente


irremediablemente como deudor. Reconoce la firma porque, si es la
suya, no puede rectamente negarla. Asimismo, si tiene duda, que podría
ser equiparada a evasivas, se tendrá por reconocida la firma pero
todavía podrá objetar la deuda aunque quede autorizada la ejecución
conforme al artículo 435 inciso final del Código citado. Queda permitido
iniciar la ejecución pero esa circunstancia no impide que luego pueda
discutir la obligación en existencia, liquidez o exigibilidad. Para ese
efecto está la etapa de presentación de excepciones y para eso el
Código de Procedimiento Civil consigna la lista de las que puede oponer
(considerando 7º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 10/05/2018, Rol Nº 36126-2017, Cita online:


CL/JUR/2170/2018
ARTÍCULO 437 (459)

Para que proceda la ejecución, se requiere además que la obligación sea


actualmente exigible.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 174, 231, 441, 442, 464, 477 y 530.
Código Civil: artículo 1552.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Requisitos para que una obligación sea actualmente exigible

Para que se pueda exigir ejecutivamente el cumplimiento de una


obligación de dar, como sucede en la especie, se hace indispensable la
concurrencia de los requisitos copulativos consistentes en que la
obligación cuyo cumplimiento se trata, conste en un título al cual la ley
le atribuye mérito ejecutivo; que tal obligación sea líquida y actualmente
exigible y que la acción ejecutiva no se encuentre prescrita. Así, para
estar en presencia de una obligación exigible de acuerdo al artículo 437
del Código de Procedimiento Civil se requiere acreditar: a) la existencia
de la obligación; b) que el actor cumpla los requisitos legales para
reclamarla; c) que los presupuestos se cumplan a la fecha de
interposición de la demanda; d) que, si bien derivado de la letra anterior,
la obligación no se encuentre sujeta a modalidad, esto es, plazo, modo
y/o condición (considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 12/04/2016, Rol Nº 37512-2015, Cita online:


CL/JUR/2456/2016

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 4/05/2016, Rol Nº 19288-2016,

Cita online: CL/JUR/2878/2016

2. Obligación sujeta a modalidad

Para que haya lugar al juicio ejecutivo es necesario que se haga valer
un título al que la ley le asigne mérito para fundar tal procedimiento
compulsivo, siempre que la obligación de que da cuenta
indubitadamente sea actualmente exigible y no esté prescrita y, si es de
dar, sea además líquida o liquidable mediante simples operaciones
aritméticas. En efecto, tales son las exigencias que establecen los
artículos 434, 437, 438 Nº 3 y 442 del Código de Procedimiento Civil. El
citado artículo 437 prescribe que: "Para que proceda la ejecución, se
requiere además que la obligación sea actualmente exigible". La
doctrina —Carnelutti— enseña que es exigible, "cuando el título no deja
duda acerca de su actualidad". Casarino Viterbo enseña que
"entendemos por obligación actualmente exigible, aquella que, en su
nacimiento o ejercicio, no se halla sujeta a ninguna modalidad, o sea,
ninguna condición, plazo o modo". En consecuencia, cumplida la
condición, vencido el plazo, o satisfecho el modo, la obligación podrá
ejecutarse. Se agrega que la exigibilidad de la obligación debe ser
actual, esto es, que debe existir en el momento mismo en que la
ejecución se inicia, porque también en ese mismo instante deben
concurrir todos los requisitos que hacen procedente la acción ejecutiva.
Por tanto, la existencia de una modalidad, como la condición, el modo o
un plazo, no constituye per se un obstáculo para la existencia de un
título ejecutivo ni para su exigibilidad; lo relevante es que la misma se
encuentre cumplida al momento en que se inicia la ejecución, no
constituyendo impedimento alguno para acreditar las circunstancias que
lo hagan procedente la naturaleza ejecutiva del procedimiento
(considerandos 9º y 10º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/03/2017, Rol Nº 47582-2016, Cita online:


CL/JUR/871/2017

ARTÍCULO 438 (460)

La ejecución puede recaer:

1º Sobre la especie o cuerpo cierto que se deba y que exista en poder del
deudor;

2º Sobre el valor de la especie debida y que no exista en poder del deudor,


haciéndose su avaluación por un perito que nombrará el tribunal; y

3º Sobre cantidad líquida de dinero o de un género determinado cuya


avaluación pueda hacerse en la forma que establece el número anterior.
Se entenderá cantidad líquida, no sólo la que actualmente tenga esta
calidad, sino también la que pueda liquidarse mediante simples operaciones
aritméticas con sólo los datos que el mismo título ejecutivo suministre.

El acreedor expresará en la demanda ejecutiva la especie o la cantidad


líquida por la cual pide el mandamiento de ejecución.

Sin embargo, tratándose de moneda extranjera, no será necesario


proceder a su avaluación, sin perjuicio de las reglas que para su liquidación
y pago se expresan en otras disposiciones de este Código.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 434, 464, 512, 759, 895 a 900. Ley
Nº 18.010, sobre Operaciones de Crédito y otras Obligaciones de Dinero: artículos 20 a 22.
Decreto con Fuerza de Ley Nº 1, 1997, sobre Ley General de Bancos, Min. Hacienda, D.O.
19.12.1997: artículo 111.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Concepto de obligación líquida

Sobre la liquidez de la obligación, esta Corte ya ha resuelto que: "Para


que pueda exigirse ejecutivamente el cumplimiento de una obligación
de dar es necesario que su objeto sea líquido, esto es, que se encuentre
perfectamente determinado en su especie o en su género y cantidad.
Aplicando los principios contenidos en el artículo 438 del Código de
Procedimiento Civil, es posible concluir que el objeto de la obligación se
entiende líquido: cuando es una especie o cuerpo cierto que se
encuentra en poder del deudor; cuando consiste en el valor del cuerpo
cierto debido, que no existe en poder del deudor, siendo indispensable
en este caso avaluar dicho cuerpo cierto por un perito nombrado por el
tribunal; cuando se trata de una suma determinada de dinero; y cuando
consiste en cosas genéricas, cuya avaluación pueda hacerse,
asimismo, por un perito" (CS rol Nº 8761/2015, considerando octavo).
El propio artículo 438 del texto legal citado indica que: "Se entenderá
por cantidad líquida no sólo la que actualmente tenga esa calidad, sino
también la que pueda liquidarse mediante simples operaciones
aritméticas con sólo los datos que el mismo título ejecutivo suministre".
Por su parte, la doctrina ha entendido que una obligación es líquida
cuando: "La declaración contenida en el título es completa, en el sentido
de que se baste a sí misma; es decir, debe tratarse de obligaciones en
las cuales no sea dudoso lo que se debe y su determinación cualitativa"
(Hugo Pereira Anabalón, La Fase de Conocimiento en el Juicio
Ejecutivo, Panorama Actual, Editorial ConoSur Limitada, 1995, págs. 44
y 45) (considerando 15º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 1/08/2016, Rol Nº 15585-2015, Cita online:


CL/JUR/5418/2016

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 21/01/2011, Rol Nº 8742-2009,

Cita online: CL/JUR/814/2011

2. La deuda es líquida no sólo cuando ya está liquidada, sino también


cuando puede liquidarse mediante simples operaciones aritméticas

Ahora bien, se debe tener presente que, conforme a lo prevenido en


el inciso segundo del Nº 3 del artículo 438 del Código de Procedimiento
Civil, la deuda es líquida no sólo cuando ya está liquidada, sino también
cuando puede liquidarse mediante simples operaciones aritméticas con
los datos que el mismo título suministre. Por aplicación de este requisito
la jurisprudencia ha rechazado dar lugar a esta excepción, señalando al
efecto, por ejemplo, que procede rechazar la compensación invocada
con un crédito proveniente de una indemnización de perjuicios, que
deba el acreedor al deudor, mientras ella no sea determinada por los
tribunales (RDJ, T. 21, sección 1ª, pág. 88) y, asimismo, que no procede
el cobro ejecutivo de los perjuicios que pueda ocasionar la falta de
cumplimiento de una obligación contenida en una escritura pública, si
esos perjuicios no están determinados por sentencia ejecutoriada (RDJ,
Tomo 4, 2ª parte, sección 1ª, pág. 4).

Corte Suprema, 12/05/2011, Rol Nº 1075-2010,

Cita online: CL/JUR/10118/2011

3. Cuándo se entiende líquida deuda de especie o cuerpo cierto

Aplicando los principios contenidos en el artículo 438 del Código de


Procedimiento Civil, podemos señalar que el objeto de la obligación se
entiende líquido: cuando es una especie o cuerpo cierto que se
encuentra en poder del deudor; cuando consiste en el valor del cuerpo
cierto debido, que no existe en poder del deudor, siendo indispensable,
en este caso, avaluar dicho cuerpo cierto por un perito nombrado por el
tribunal; cuando se trata de una suma determinada de dinero; y cuando
consiste en cosas genéricas, cuya avaluación pueda hacerse,
asimismo, por un perito (considerando 9º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 5/01/2012, Rol Nº 7039-2011, Cita online:


CL/JUR/307/2012

ARTÍCULO 439 (461)

Si del título aparece una obligación en parte líquida e ilíquida en otra, podrá
procederse ejecutivamente por la primera, reservándose al acreedor su
derecho para reclamar el resto en vía ordinaria.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 434, 464, 512, 759, 895 a 900.

ARTÍCULO 440 (462)

La avaluación que, en conformidad al artículo 438, se haga para determinar


el monto de la ejecución, se entenderá sin perjuicio del derecho de las partes
para pedir que se aumente o disminuya.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 434, 464, 512, 759, 895 a 900.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Recayendo la ejecución en una cantidad líquida de dinero el trámite


de avalúo resulta improcedente

En relación a la segunda defensa de la ejecutada, cabe considerar


que ella se vincula con la situación en que el objeto del procedimiento
ejecutivo estriba en el valor del cuerpo cierto debido que no se
encuentra en poder del deudor, o de un género determinado que no sea
dinero; casos en que corresponde que la avaluación de lo debido se
practique en una gestión preparatoria con la intervención de un perito
—artículos 438 Nºs. 2 y 3 y 440 del Código de Procedimiento Civil—
cuya avaluación puede, precisamente, impugnarse por la parte
ejecutada oponiéndose la excepción sobre exceso de avalúo, conforme
a lo previsto en el artículo 464 Nº 8 de dicho cuerpo normativo. Tal
avalúo no ha podido realizarse en este proceso por no darse ninguno
de los dos presupuestos legales que lo hacen exigible, según se dejó
señalado. En efecto, recayendo la ejecución en una cantidad líquida de
dinero dicho trámite resulta improcedente, como claramente se
desprende de lo dispuesto en el artículo 438 Nº 3 antes citado
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/06/2011, Rol Nº 3182-2011,

Cita online: CL/JUR/10391/2011

ARTÍCULO 441 (463)

El tribunal examinará el título y despachará o denegará la ejecución, sin


audiencia ni notificación del demandado, aun cuando se haya éste
apersonado en el juicio.

Las gestiones que en tal caso haga el demandado no embarazarán en


manera alguna el procedimiento ejecutivo, y sólo podrán ser estimadas por el
tribunal como datos ilustrativos para apreciar la procedencia o improcedencia
de la acción.

Si denegado el mandamiento de ejecución, se interpone apelación de este


fallo y ha lugar a ella, el tribunal elevará el proceso al superior, también sin
notificación del demandado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 38, 187, 188, 194, 256, 434, 437, 438,
442, 565 y 566. Ley Nº 18.010, sobre Operaciones de Crédito y otras Obligaciones de Dinero:
artículo 22.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Examen de admisibilidad es meramente formal. Procedencia de


despachar ejecución si título hecho valer es uno ejecutivo, en que
consta una obligación líquida y ésta no se encuentra prescrita

De conformidad con lo dispuesto en el artículo 441 inciso 1º del


Código de Procedimiento Civil, el tribunal examinará el título y
despachará o denegará la ejecución, sin audiencia ni notificación del
demandado, aun cuando se haya apersonado en el juicio. Tanto la
doctrina procesal nacional como la jurisprudencia han entendido que
esta norma importa que, presentada la demanda y antes de proveerla,
el tribunal debe examinar o revisar el título acompañado y determinar si
éste reúne los requisitos necesarios para que proceda la acción
ejecutiva. Esto es, debe verificar si el título es ejecutivo, si la obligación
es líquida y actualmente exigible, y si la acción ejecutiva no está
prescrita. Si se cumplen estas condiciones, el juez despachará
mandamiento de ejecución y embargo; en caso contrario, denegará la
ejecución. En efecto, el artículo 441 del Código Procesal Civil dispone
que "el tribunal examinará el título y despachará o denegará la
ejecución", de manera que le encomienda un análisis que está limitado
a aspectos formales de caracteres objetivos o evidentes, sin que ello
implique un análisis o reflexión que no resulte evidente de la simple
apreciación del documento acompañado (considerando 4º de la
sentencia de casación).

Corte Suprema, 16/01/2019, Rol Nº 19187-2018, Cita online:


CL/JUR/233/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 8/08/2018, Rol Nº 7521-2018,

Cita online: CL/JUR/4212/2018

2. Obligación del tribunal de examinar el título acompañado por el


ejecutante

Conforme al artículo 441 inciso 1º del Código de Procedimiento Civil,


el tribunal examinará el título y despachará o denegará la ejecución, sin
audiencia ni notificación del demandado, aun cuando se haya
apersonado en el juicio. Doctrina y jurisprudencia entienden que esta
norma importa que, presentada la demanda y antes de proveerla, el
tribunal debe examinar o revisar el título acompañado y determinar si
éste reúne o no los requisitos necesarios para que proceda la acción
ejecutiva, esto es, debe verificar si el título es ejecutivo, si la obligación
es líquida y actualmente exigible, y si la acción ejecutiva no está
prescrita. Si se cumplen estas condiciones, el juez despachará
mandamiento de ejecución y embargo; en caso contrario, denegará la
ejecución. Se trata, entonces, de un análisis que está limitado a
aspectos formales de caracteres objetivos o evidentes, sin que ello
implique un análisis o reflexión que no resulte evidente de la simple
apreciación del documento acompañado (considerando 3º de la
sentencia de casación).

Corte Suprema, 17/03/2016, Rol Nº 21182-2015, Cita online:


CL/JUR/1741/2016

3. El título debe cumplir los requisitos que la ley exige al momento de


interponer la acción ejecutiva

El artículo 441 del Código de Procedimiento Civil dispone que el


Tribunal examinará el título, en atención a que es éste el que goza del
privilegio legal y debe ser tenido a la vista al momento de proveer la
demanda ejecutiva ordenando el despacho del mandamiento de
desposeimiento y embargo. Este análisis difiere del que corresponde
efectuar en un juicio declarativo, pues en éste los requisitos de una
decisión favorable y por lo tanto de la pretensión, se resuelven en la
sentencia, aspecto en que se diferencian ambos procedimientos. Tal
diferencia tiene una explicación sustancial, pues tiende a permitir el
ejercicio del derecho de defensa del ejecutado, al oponerse a la
ejecución mediante la interposición de las excepciones respectivas, lo
que demandará ordinariamente un examen del título. Que no obsta al
cumplimiento de tales exigencias el hecho de encontrarse el título en
otro Tribunal, el cual puede ser solicitado para tenerlo a la vista en el
juzgado en que se encuentra para efectuar su análisis como lo dispone
el legislador. No altera lo concluido precedentemente, la circunstancia
de haberse traído a la vista el título fundante de la demanda de autos
con posterioridad a la fecha en que fueron opuestas las excepciones
por el demandado, toda vez que el título debe cumplir los requisitos que
la ley exige al momento de interponer la acción ejecutiva. Si así no fuera,
el ejecutado quedaría en la indefensión, pues no tendría oportunidad
procesal para oponer alguna excepción, ya que sin duda éstas sólo
pueden decir relación con el título que ha servido de base a la ejecución
dirigida en su contra y que debe ser agregado a la demanda
(considerandos 6º y 7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 5/11/2007, Rol Nº 562-2006, Cita online:


CL/JUR/6300/2007

4. Facultad del juez en juicios ejecutivos


El único examen que el tribunal está autorizado a realizar, en los
juicios ejecutivos, es aquel previsto en los artículos 441 y 442 del
Código de Procedimiento Civil y, en general, aquel otro regulado en el
artículo 256 del mismo cuerpo legal, respecto de toda demanda. En
consecuencia, ninguna facultad tenía la juez a quo para actuar de oficio
de la forma como lo hizo y despachar el mandamiento por un monto
diverso a aquel expresado en la demanda, modificando sin más la
pretensión ejercida por el actor. Una actuación de esa índole altera el
principio dispositivo que debe regir en los procesos contenciosos civiles
y de paso interfiere en la posición de tercero imparcial que debe tener
el juez de la causa (considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 16/08/2018, Rol Nº 1551-2018,

Cita online: CL/JUR/4537/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Concepción, 25/11/2019, Rol Nº 1408-


2019,

Cita online: CL/JUR/11906/2019

ARTÍCULO 442 (464)

El tribunal denegará la ejecución si el título presentado tiene más de tres


años, contados desde que la obligación se haya hecho exigible; salvo que se
compruebe la subsistencia de la acción ejecutiva por alguno de los medios
que sirven para deducir esta acción en conformidad al artículo 434.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 434, 437, 441 y 464. Código Civil:
artículo 2515.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Plazo de tres años de la acción ejecutiva constituye un plazo de


caducidad más que de prescripción

Los tres años de la acción ejecutiva constituyen un plazo de


caducidad más que de prescripción desde que no es la acción la que
prescribe sino hay una pérdida del mérito ejecutivo, como también que
la falta de mérito del ejecutivo debe ser declarada de oficio por el juez a
la luz de lo dispuesto en el artículo 442 del Código de Procedimiento
Civil, y por tal razón no pudo operar la renuncia del artículo 2494 del
Código Civil, que exige haber cumplido el plazo de prescripción. Por lo
demás, es la doctrina de los autores la que sostiene fundadamente la
caducidad de la acción ejecutiva (véase La Prescripción Extintiva
Doctrina y Jurisprudencia, Ramón Domínguez Águila. Editorial Jurídica
de Chile 2004, página 217), para lo cual acude a lo dispuesto en el
inciso 2º del artículo 2515 del Código Civil, cuando dispone que
después de tres años la acción subsiste, o sea, no opera la prescripción,
aunque se transforme en ordinaria. Así también se menciona
jurisprudencia desde que la acción ejecutiva por prescripción se
transforma en ordinaria y debe tramitarse conforme al procedimiento
sumario; también refiere lo dispuesto en el ya citado artículo 442 del
Código de Procedimiento Civil, en cuanto el tribunal denegará la
ejecución si el título presentado tiene más de tres años. Por
consiguiente, el argumento de la apelación tratándose de la excepción
de prescripción deberá ser rechazado y en consecuencia procede
acoger asimismo la excepción del artículo 464 Nº 17 del Código de
Procedimiento Civil, opuesta por la ejecutada (considerandos 8º y 9º de
la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Antofagasta, 3/03/2016, Rol Nº 1018-2015,

Cita online: CL/JUR/2672/2016

2. El precepto en comento no habla de toda obligación, sino que


solamente de aquellas cuyo título tiene más de tres años contados
desde que la obligación se hizo exigible

El artículo 442 del Código de Procedimiento Civil sólo permite


denegar la ejecución en los casos que señala, pero no autoriza a
declarar de oficio una prescripción cuando los títulos ejecutivos son de
aquellos que por su naturaleza prescriben en un plazo inferior a tres
años. Así lo reconoce la doctrina nacional cuando ha señalado que "el
artículo 442 es una norma de carácter excepcional dentro de la
estructura dispositiva de procedimiento civil, y por tanto, debe ser
interpretada de manera restrictiva. El precepto en comento no habla de
toda obligación, sino que solamente de aquellas cuyo título tiene más
de tres años contados desde que la obligación se hizo exigible" (Cristián
Maturana Miquel. El Juicio Ejecutivo) (considerando 5º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 28/06/2012, Rol Nº 616-2012,

Cita online: CL/JUR/1229/2012

ARTÍCULO 443 (465)

El mandamiento de ejecución contendrá:

1º La orden de requerir de pago al deudor. Este requerimiento debe


hacérsele personalmente; pero si no es habido, se procederá en conformidad
al artículo 44, expresándose en la copia a que dicho artículo se refiere, a más
del mandamiento, la designación del día, hora y lugar que fije el ministro de
fe para practicar el requerimiento. No concurriendo a esta citación el deudor,
se hará inmediatamente y sin más trámite el embargo.

Cuando el deudor haya sido notificado personalmente o con arreglo al


artículo 44 para otra gestión anterior al requerimiento, se procederá a éste y
a los demás trámites del juicio, en conformidad a lo establecido en los
artículos 48 a 53. La designación del domicilio, exigida por el artículo 49,
deberá hacerse en tal caso por el deudor dentro de los dos días subsiguientes
a la notificación, o en su primera gestión si alguna hace antes de vencido este
plazo;

2º La de embargar bienes del deudor en cantidad suficiente para cubrir la


deuda con sus intereses y las costas, si no paga en el acto; y

3º La designación de un depositario provisional que deberá recaer en la


persona que, bajo su responsabilidad, designe el acreedor o en persona de
reconocida honorabilidad y solvencia, si el acreedor no la ha indicado. El
acreedor podrá designar como depositario al mismo deudor o pedir que no
se designe depositario.

No podrá recaer esta designación en empleados o dependientes a


cualquier título del tribunal ni en persona que desempeñe el cargo de
depositario en tres o más juicios seguidos ante el mismo juzgado.
Si la ejecución recae sobre cuerpo cierto, o si el acreedor en la demanda
ha señalado, para que se haga el embargo, bienes que la ley permita
embargar, el mandamiento contendrá también la designación de ellos.

Siempre que en concepto del tribunal haya fundado temor de que el


mandamiento sea desobedecido, podrá solicitar, a petición de parte, el auxilio
de la fuerza pública para proceder a su ejecución.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 7º, 40, 44, 48, 49, 53, 444, 445, 447,
448, 449, 450, 452, 454, 456, 457, 533 y 579. Código Civil: artículo 2465. Código de Comercio:
artículo 610. Ley Nº 14.908, sobre Abandono de Familia y Pago de Pensiones Alimenticias:
artículo 12. Código del Trabajo: artículo 473.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 443 Nº 1)

1. El requerimiento de pago constituye una actuación de carácter


complejo

Desde el punto de vista del sujeto pasivo de la litis, el requerimiento


de pago al deudor se traduce en su emplazamiento al juicio, esto es,
que conozca la demanda ejecutiva interpuesta en su contra, dando
vigencia a la carga procesal de su defensa. Ahora bien, el planteamiento
de la defensa del ejecutado presupone ineludiblemente su
emplazamiento el que, a su vez, presenta dos aspectos fundamentales:
el conocimiento de la demanda, que se cumple por la notificación de la
misma y el transcurso del plazo para acudir al llamamiento del tribunal.
Analizado lo dispuesto en el primer numeral del artículo 443 del Código
de Procedimiento Civil a la luz de lo que se viene reflexionando, el
requerimiento de pago constituye entonces una actuación de carácter
complejo, en el sentido que en ella se reúnen varias actuaciones cuya
ritualidad dependerá de la forma en que el mismo tenga lugar. En otras
palabras, tendrá un inicio y una conclusión más o menos definidos, en
la medida que se efectúe en una sola actuación o en un conjunto de
ellas. Así, el requerimiento se iniciará con la notificación de la demanda
y terminará con la intimación al deudor de pagar lo adeudado,
procediendo luego, como gestión anexa y eventual, la traba del
embargo correspondiente. Esa notificación que da punto de partida a la
gestión procesal del requerimiento se puede concretar personalmente o
mediante la forma prevista en el artículo 44 de la compilación procesal
o también de acuerdo a lo prescrito en los artículos 48 a 53 del mismo
estatuto, para culminar, seguidamente, con el requerimiento en
propiedad (considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 16/10/2018, Rol Nº 12499-2018, Cita online:
CL/JUR/5848/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 29/08/2019, Rol Nº 1985-2019,

Cita online: CL/JUR/4890/2019

— Corte Suprema, 28/06/2018, Rol Nº 4592-2018,

Cita online: CL/JUR/3257/2018

— Corte de Apelaciones de Concepción, 13/04/2018, Rol Nº 1833-


2017,

Cita online: CL/JUR/1769/2018

— Corte Suprema, 9/01/2018, Rol Nº 36781-2017,

Cita online: CL/JUR/113/2018

2. Finalidades del requerimiento de pago

La primera notificación que se realiza al demandado en el juicio


ejecutivo importa el objetivo esencial de ponerle en conocimiento de la
demanda ejecutiva, de la resolución recaída en ella y del mandamiento
de ejecución y embargo. [...]. Por su parte, sobre los objetivos del
requerimiento de pago, éstos se pueden resumir en dos finalidades
fundamentales: la primera, notificar al deudor, poniéndolo en
conocimiento de la demanda ejecutiva iniciada en su contra para que
pueda defenderse y constreñirlo para que pague la obligación cuyo
cumplimiento compulsivo se pretende; y luego, una consecuencial, para
el caso de desobediencia, sea mediante embargo en caso de que se
trate de obligaciones de dar o de que se genere alguna de las
consecuencias establecidas en el Código de Procedimiento Civil a
propósito de las obligaciones de hacer o de no hacer (considerandos 3º
y 4º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 12/06/2018, Rol Nº 2733-2018, Cita online:


CL/JUR/2771/2018
3. Requerimiento de pago efectuado en la oficina del ministro de fe

Ante la hipótesis de iniciarse el requerimiento de pago con la


notificación de la demanda en una comuna distinta de aquélla que sirve
de asiento al tribunal, pero dentro del territorio jurisdiccional de éste, y
concluir en un acto posterior en el lugar de asiento del juzgado, lo propio
será adoptar una línea de interpretación que se avenga tanto con las
particularidades de ese trámite compuesto —cuyo mérito no admite ser
fraccionado—, como con las exigencias de un procedimiento racional y
justo, uno de los presupuestos de la garantía constitucional del debido
proceso al cual deben sujetarse los tribunales. La consideración y
aplicación de tales directrices conducen a privilegiar el hecho que, bajo
la hipótesis antedicha, la secuela de las actuaciones que informan el
trámite en comento deberá entenderse realizada fuera de la comuna
asiento del tribunal. Esta conclusión obedece a que no se debe perder
de vista la primera finalidad del requerimiento, esta es, la notificación de
la demanda, cuyo acaecimiento desencadena el momento procesal
para ejercitar la respectiva defensa, habida cuenta de la ampliación
contemplada en la ley —de cuatro a ocho días hábiles para oponerse a
la ejecución, previsto en el artículo 459 del Código de Procedimiento
Civil— por la vía de aguardar la conclusión del trámite del requerimiento
de pago. Concluir de otra forma importaría una merma al término
concedido al ejecutado para ejercitar su derecho a defensa,
circunstancia que sólo cabe entender repelida por el ordenamiento
procesal, siempre atento a asistir a los litigantes en virtud de pautas
objetivas contenidas en la ley, por medio de medidas que aplacan su
rigor, máxime si dice relación con el término de emplazamiento,
diligencia de la mayor trascendencia en el juicio, puesto que es a partir
de ella que se define el momento reservado al ejercicio de la primera
defensa del sujeto pasivo dentro del procedimiento iniciado en su contra
(considerandos 9º y 10º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 20/11/2019, Rol Nº 16382-2018, Cita online:


CL/JUR/6648/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 20/03/2020, Rol Nº 22096-2019,

Cita online: CL/JUR/22235/2020


JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 443 Nº 2)

1. Vicio del procedimiento al embargar bienes que no eran


exclusivamente del deudor

En el caso de autos resulta evidente que el vicio de procedimiento se


originó a partir del embargo y hasta remate del inmueble en cuestión,
yerro que consistió en el incumplimiento de la norma prevista el
artículo 443 Nº 2 del Código del Procedimiento Civil, en cuanto se
ordena embargar "bienes del deudor", exclusivamente; lo que redundó
en la enajenación forzosa de bienes que no le pertenecían. Tales vicios
causaron perjuicio en contra del adjudicatario, quien adquirió "algo" que
no se correspondía con lo explicitado en las bases de remate ni en los
anuncios publicados, pues no se trataba de una especie o cuerpo cierto,
sino de acciones y derechos sobre la misma (considerandos 5º y 6º de
la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 22/03/2019, Rol Nº 2063-2018,

Cita online: CL/JUR/1603/2019

ARTÍCULO 444 (466)

Si la ejecución recae sobre una empresa o establecimiento mercantil o


industrial, o sobre cosa o conjunto de cosas que sean complemento
indispensable para su explotación, podrá el juez, atendidas las circunstancias
y la cuantía del crédito, ordenar que el embargo se haga efectivo, o en los
bienes designados por el acreedor, o en otros bienes del deudor, o en la
totalidad de la industria misma, o en las utilidades que ésta produzca, o en
parte de cualquiera de ellas.

Embargada la industria o las utilidades, el depositario que se nombre tendrá


las facultades y deberes de interventor judicial; y para ejercer las que
correspondan al cargo de depositario, procederá en todo caso con
autorización del juez de la causa.

Si la ejecución recae sobre el simple menaje de la casa habitación del


deudor, el embargo se entenderá hecho permaneciendo las especies en
poder del mismo deudor, con el carácter de depositario, previa facción de un
inventario en que se expresen en forma individual y detallada el estado y la
tasación aproximada de las referidas especies que practicará el ministro de
fe ejecutor. La diligencia que deberá extenderse será firmada por el ministro
de fe que la practique, por el acreedor, si concurre, y por el deudor, quien, en
caso de substracción, incurrirá en la sanción prevista en el número 1º del
artículo 471 del Código Penal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 290, 293, 294, 445, 479, 480.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Juez incurre en falta o abuso al acceder a petición que importa un


nuevo embargo

Queda en evidencia que el juez requerido efectivamente incurrió en


falta o abuso al dictar la resolución de que se trata y la que la
complementa, ya individualizada, por cuanto accedió a una petición
requerida por el interventor, determinando una medida que importa un
nuevo embargo, esta vez referido a ingresos, en circunstancias que el
artículo 444, del Código de Procedimiento Civil se refiere al embargo de
utilidades, lo que ya se había decretado en la resolución de fs. 176, por
cuyo cumplimiento es por lo que el juez debe velar, salvo petición
expresa de las partes, lo que no ha acontecido en la especie. A mayor
abundamiento, el embargo primitivamente decretado por el juez a
fs. 176 recae sobre parte de las utilidades de la ejecutada en la
explotación del Hotel Tupahue, que resulte suficiente para cubrir el
crédito de autos, sus respectivos intereses y costas de ejecución, lo que
constituye un concepto mucho más restringido que la noción de ingreso,
que evidentemente involucra costos que lo forman y que obviamente no
es todo utilidad. Que por lo tanto el juez recurrido, como antes se
expresó, al resolver en los términos impugnados cometió, a juicio de
esta Corte, falta que debe ser enmendada por esta vía
(considerandos 5º a 6º Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 16/03/1989, Rol Nº 13156-1989, Cita online:


CL/JUR/809/1989

ARTÍCULO 445 (467)

No son embargables:
1º Los sueldos, las gratificaciones y las pensiones de gracia, jubilación,
retiro y montepío que pagan el Estado y las Municipalidades.

Sin embargo, tratándose de deudas que provengan de pensiones


alimenticias decretadas judicialmente, podrá embargarse hasta el cincuenta
por ciento de las prestaciones que reciba el alimentante en conformidad al
inciso anterior;

2º Las remuneraciones de los empleados y obreros en la forma que


determinan los artículos 40 y 153 del Código del Trabajo;170

3º Las pensiones alimenticias forzosas;

4º Las rentas periódicas que el deudor cobre de una fundación o que deba
a la liberalidad de un tercero, en la parte que estas rentas sean absolutamente
necesarias para sustentar la vida del deudor, de su cónyuge o conviviente
civil y de los hijos que viven con él y a sus expensas;171

5º Los fondos que gocen de este beneficio, en conformidad a la Ley


Orgánica del Banco del Estado de Chile y en las condiciones que ella
determine;

6º Las pólizas de seguro sobre la vida y las sumas que, en cumplimiento


de lo convenido en ellas, pague el asegurador. Pero, en este último caso,
será embargable el valor de las primas pagadas por el que tomó la póliza;

7º Las sumas que se paguen a los empresarios de obras públicas durante


la ejecución de los trabajos. Esta disposición no tendrá efecto respecto de lo
que se adeude a los artífices u obreros por sus salarios insolutos y de los
créditos de los proveedores en razón de los materiales u otros artículos
suministrados para la construcción de dichas obras;

8º El bien raíz que el deudor ocupa con su familia, siempre que no tenga
un avalúo fiscal superior a cincuenta unidades tributarias mensuales o que se
trate de una vivienda de emergencia, y sus ampliaciones, a que se refiere el
artículo 5º del Decreto Ley Nº 2.552, de 1979; los muebles de dormitorio, de
comedor y de cocina de uso familiar y la ropa necesaria para el abrigo del
deudor, su cónyuge o conviviente civil y los hijos que viven a sus expensas.172

La inembargabilidad establecida en el inciso precedente no regirá para los


bienes raíces respecto de los juicios en que sean parte el Fisco, las Cajas de
Previsión y demás organismos regidos por la ley del Ministerio de la Vivienda
y Urbanismo;
9º Los libros relativos a la profesión del deudor hasta el valor de cincuenta
unidades tributarias mensuales y a elección del mismo deudor;173

10. Las máquinas e instrumentos de que se sirve el deudor para la


enseñanza de alguna ciencia o arte, hasta dicho valor y sujetos a la misma
elección;

11. Los uniformes y equipos de los militares, según su arma y grado;

12. Los objetos indispensables al ejercicio personal del arte u oficio de los
artistas, artesanos y obreros de fábrica; y los aperos, animales de labor y
material de cultivo necesarios al labrador o trabajador de campo para la
explotación agrícola, hasta la suma de cincuenta unidades tributarias
mensuales y a elección del mismo deudor;174

13. Los utensilios caseros y de cocina, y los artículos de alimento y


combustibles que existan en poder del deudor, hasta concurrencia de lo
necesario para el consumo de la familia durante un mes;

14. La propiedad de los objetos que el deudor posee fiduciariamente;

15. Los derechos cuyo ejercicio es enteramente personal, como los de uso
y habitación;

16. Los bienes raíces donados o legados con la expresión de no


embargables, siempre que se haya hecho constar su valor al tiempo de la
entrega por tasación aprobada judicialmente; pero podrán embargarse por el
valor adicional que después adquieran;

17. Los bienes destinados a un servicio que no pueda paralizarse sin


perjuicio del tránsito o de la higiene pública, como los ferrocarriles, empresas
de agua potable o desagüe de las ciudades, etc.; pero podrá embargarse la
renta líquida que produzcan, observándose en este caso lo dispuesto en el
artículo anterior; y

18. Los demás bienes que leyes especiales prohíban embargar.

Son nulos y de ningún valor los contratos que tengan por objeto la cesión,
donación o transferencia en cualquier forma, ya sea a título gratuito u
oneroso, de las rentas expresadas en el número 1º de este artículo o de
alguna parte de ellas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 438, 443, 444, 508, 519 y 900.
Código Civil: artículos 12, 321 a 323 y 2466. Código de Comercio: artículo 839. Código del
Trabajo: artículo 57. Código de Minería: artículo 226. Código Tributario: artículo 8º. Ley
Nº 10.383, crea Servicio de Seguro Social y Nacional de Salud: artículo 77. Ley Nº 10.475,
Jubilación y Pensiones Empleados Particulares: artículo 26. Ley Nº 14.908, Abandono de
Familia y Pensiones Alimenticias: artículo 7º. Ley Nº 18.933, crea Superintendencia de Isapres:
artículo 32 bis. Ley Nº 18.948, Orgánica de las Fuerzas Armadas: artículo 92. Ley Nº 18.961,
Orgánica de Carabineros de Chile: artículos 33 y 77. Ley Nº 19.281, Ley de Leasing
Habitacional: artículos 10 y 54. Ley Nº 19.396, Nuevo Tratamiento Obligación Subordinada con
Banco Central de Chile: artículo 24 d). Ley Nº 19.542, Moderniza Sector Portuario Estatal:
artículo 11. Ley Nº 19.728, establece Seguro de Desempleo: artículo 40. Decreto Ley Nº 3.500,
1980, establece Sistema de Pensiones, D.O. 13.11.1980: artículos 20 D, 23 bis, 34, 35, 40, 59
y 138. Decreto Ley Nº 1.340, 1930, Caja Nacional de Empleados Públicos y Periodistas:
artículo 65. Decreto con Fuerza de Ley Nº 2, sobre Plan Habitacional, Min. Obras Públicas:
artículo 36. Decreto con Fuerza de Ley Nº 150, 1982, sobre Sistema Único Prestaciones
Familiares y Subsidios de Cesantía, Min. del Trabajo y Previsión Social, D.O. 25.03.1982:
artículo 15. Decreto con Fuerza de Ley Nº 1, 1997, sobre Ley General de Bancos, Min.
Hacienda, D.O. 19.12.1997: artículo 69 Nº 13.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Embargabilidad como principio general de derecho y la


inembargabilidad como precepto de excepción y derecho estricto

De otra parte, ha de tenerse presente que por regla general todos los
bienes son embargables y la excepción está dada por el artículo 445,
del Código de Procedimiento Civil, en este caso, en relación al
artículo 32, de la LOCM, cuya consecuencia lógica es que su
interpretación ha de ser, necesariamente, de carácter restrictiva,
máxime si dicha norma constituye una limitación del derecho general de
prenda (considerandos 18º a 20º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Coyhaique, 14/06/2019, Rol Nº 28-2019,

Cita online: CL/JUR/3797/2019

Fallo en el mismo sentido:

Corte Suprema, 25/05/2018, Rol Nº 559-2018, Cita online:


CL/JUR/2522/2018

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (445 Nº 1)

1. Por regla general las remuneraciones son inembargables. Excepción


del Código Tributario
Del artículo 445 del Código de Procedimiento Civil, aplicable en la
especie en virtud del artículo 190 del Código Tributario, se desprende
como regla que las remuneraciones —en general— son inembargables.
Sin embargo, tal regla contiene, además de las excepciones que
contempla el artículo 90 del Estatuto Administrativo, otra en el
artículo 170 del Código Tributario, pues este último precepto autoriza el
embargo "en la parte de las remuneraciones que perciba el ejecutado
que excedan a cinco Unidades Tributarias Mensuales" (considerando
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 26/06/2018, Rol Nº 1411-2018, Cita online:


CL/JUR/3212/2018

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (445 Nº 6)

1. Póliza de seguro es inembargable

Al efecto, el artículo 445 del Código de Procedimiento Civil, aplicable


en la especie en virtud del artículo 190 del Código Tributario, establece
un catálogo de las especies que el legislador estima que "no son
embargables" y en su numeral 1º señala que tienen dicha calidad "los
sueldos, las gratificaciones y las pensiones de gracia, jubilación,
retiro...". Por otra parte, en su numeral 6º se indica que también son
inembargables "las pólizas de seguro sobre la vida y las sumas que, en
cumplimiento de lo convenido en ella, pague el asegurador". Que si bien
el artículo 170 del Código Tributario permite el embargo sobre la parte
de las remuneraciones que perciba el ejecutado que excedan a cinco
unidades tributarias mensuales, no lo hace extensible a las jubilaciones
que perciba el deudor, de manera que al ordenarse dicha medida
respecto de la jubilación del recurrente, que recibe bajo la modalidad de
una renta vitalicia, se infringió el citado numeral 1º del artículo 445 del
Código de Procedimiento Civil (considerandos 5º y 6º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 14/03/2013, Rol Nº 76-2013, Cita online:


CL/JUR/574/2013

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 445 Nº 17)

1. La inembargabilidad de bienes no constituye una calidad de privilegio


contraria a las normas constitucionales
Que en cuanto a la garantía de la igualdad ante la ley, consagrada en
el número 2 del artículo 19 de la Constitución Política de la República,
cabe considerar que consiste en que las normas jurídicas deben ser
iguales para todas las personas que se encuentren en las mismas
circunstancias, y que no deben concederse privilegios ni imponerse
obligaciones a unos que no beneficien o graven a otros que se hallen
en condiciones similares. No se trata, por consiguiente, de una igualdad
absoluta, sino que ha de aplicarse la ley en cada caso conforme a las
diferencias específicas. La igualdad supone una distinción razonable
entre quienes no se encuentran en la misma condición; por lo que ella
no impide que la legislación regule en forma distinta situaciones
diferentes; siempre que la discriminación no sea arbitraria ni responda
a un propósito de hostilidad contra determinada persona o grupo de
personas, o importe un indebido favor o privilegio personal o de grupo.
Sobre la materia, esta Corte ha expresado lo siguiente: "La igualdad
ante la ley consiste en que todos los habitantes de la República,
cualquiera que sea su posición social u origen, gocen de unos mismos
derechos, esto es, que exista una misma ley para todos y una igualdad
de todos ante el derecho, lo que impide establecer estatutos legales con
derechos y obligaciones diferentes, atendiendo a consideraciones de
razas, ideologías, creencias religiosas u otras condiciones o atributos
de carácter estrictamente personal. Tal igualdad se manifiesta
concretamente por la generalidad, característica que de ordinario
corresponde a la naturaleza de esta norma jurídica; pero ello no significa
que en absoluto no puedan dictarse leyes de carácter particular relativas
a situaciones específicas y aun personales, como ocurre con
frecuencia" (C.S., 25.11.1970, RDJ, t. 67, sec. 1ª, pág. 530). También
ha sostenido: "La igualdad ante la ley es el sometimiento de todas las
personas de similares condiciones a un mismo estatuto jurídico
fundamental para el ejercicio de sus derechos y para el cumplimiento
de sus deberes, sin que sea posible discriminar entre ellas, por lo que
es natural que, en una serie de ámbitos, la ley pueda hacer diferencias
entre grupos, siempre y cuando no sea una discriminación arbitraria,
esto es, contraria a la ética elemental o que no tenga una justificación
racional" (C.S., 15.06.1988, R., t. 85, sec. 5ª, p. 97); Que, analizados los
preceptos legales que se impugnan por la presente vía, se debe concluir
que no conculcan el principio de igualdad ante la ley, sino que, por el
contrario, éste se encuentra plenamente garantizado. En efecto, por los
textos legales transcritos no se ha creado entre semejantes Servicios
de Salud creados por el Decreto Ley Nº 2.763, de 1978 diferencia
alguna; razón por la que lo prescrito en dichas normas les son aplicables
a todos ellos, precisamente, para que puedan cumplir con la finalidad
perseguida por el legislador al crearlos; esto es, llevar a cabo la
ejecución de las acciones integradas de fomento, protección y
recuperación de la salud y rehabilitación de las personas enfermas
(considerandos 4º a 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 24/10/2001, Rol Nº 4865-2000, Cita online:


CL/JUR/4588/2001

ARTÍCULO 446 (468)

Aunque pague el deudor antes del requerimiento, serán de su cargo las


costas causadas en el juicio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 138, 139, 140, 457, 471, 490 y 505.

ARTÍCULO 447 (469)

Puede el acreedor concurrir al embargo y designar, si el mandamiento no


lo hace, los bienes del deudor que hayan de embargarse, con tal que no
excedan de los necesarios para responder a la demanda, haciéndose esta
apreciación por el ministro de fe encargado de la diligencia, sin perjuicio de lo
que resuelva el tribunal a solicitud de parte interesada.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 57, 438, 443, 444, 445, 450, 451, 453,
454, 456, 457, 458, 490 y 593.

ARTÍCULO 448 (470)

No designando el acreedor bienes para el embargo, se verificará éste en


los que el deudor presente, si, en concepto del ministro de fe encargado de
la diligencia, son suficientes o si, no siéndolo, tampoco hay otros conocidos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 57, 438, 443, 444, 445, 450, 451, 453,
454, 456, 457, 458, 490 y 539.

ARTÍCULO 449 (471)


Si no designan bienes el acreedor ni el deudor, el ministro de fe guardará
en el embargo el orden siguiente:

1º Dinero;

2º Otros bienes muebles;

3º Bienes raíces; y

4º Salarios y pensiones.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 57, 438, 443, 444, 445, 450, 451, 453,
454, 456, 457, 458, 490 y 539.

ARTÍCULO 450

El embargo se entenderá hecho por la entrega real o simbólica de los


bienes al depositario que se designe, aunque éste deje la especie en poder
del mismo deudor. A falta de depositario designado por el juez, hará las veces
de tal el propio deudor hasta tanto se designe un depositario distinto.

El ministro de fe que practique el embargo deberá levantar un acta de la


diligencia, la que señalará el lugar y hora en que éste se trabó, contendrá la
expresión individual y detallada de los bienes embargados e indicará si fue
necesario o no el auxilio de la fuerza pública para efectuarlo y de haberlo sido,
la identificación del o de los funcionarios que intervinieron en la diligencia.
Asimismo, dejará constancia de toda alegación que haga un tercero
invocando la calidad de dueño o poseedor del bien embargado.175

Tratándose del embargo de bienes muebles, el acta deberá indicar su


especie, calidad y estado de conservación y todo otro antecedente o
especificación necesarios para su debida singularización, tales como, marca,
número de fábrica y de serie, colores y dimensiones aproximadas, según ello
sea posible. En el embargo de bienes inmuebles, éstos se individualizarán
por su ubicación y los datos de la respectiva inscripción de dominio.

El acta deberá ser suscrita por el ministro de fe que practicó la diligencia y


por el depositario, acreedor o deudor que concurra al acto y que desee firmar.

Sin que ello afecte la validez del embargo, el ministro de fe deberá enviar
carta certificada al ejecutado comunicándole el hecho del embargo, dentro de
los dos días siguientes de la fecha de la diligencia o del día en que se reabran
las oficinas de correo, si ésta se hubiere efectuado en domingo o festivo. El
ministro de fe deberá dejar constancia en el proceso del cumplimiento de esta
obligación, en los términos del artículo 46.

Toda infracción a las normas de este artículo hará responsable al ministro


de fe de los daños y perjuicios que se originen y el tribunal, previa audiencia
del afectado, deberá imponerle alguna de las medidas que se señalan en los
números 2, 3 y 4 del artículo 532 del Código Orgánico de Tribunales.176

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 57, 61, 443, 444, 451, 452, 453, 454,
479 y 518. Código Civil: artículo 2466. Código Orgánico de Tribunales: artículos 390, 393 y 532.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. El embargo de un inmueble y su posterior inscripción en el Registro


respectivo son dos actuaciones separadas y cuya omisión trae
aparejadas consecuencias procesales muy distintas

Que, resulta fundamental, para la adecuada resolución del presente


recurso de queja, señalar que el embargo de un inmueble y su posterior
inscripción en el Registro respectivo son dos actuaciones separadas y
cuya omisión trae aparejadas consecuencias procesales muy distintas.
En efecto, el embargo mismo, esto es, la efectuación de un bien que lo
deja fuera del comercio humano, se perfeccionó en la especie con la
actuación procesal que realizó el Receptor Judicial a fs. 7 vta. en cuya
acta se individualizó el bien por su ubicación y, al menos, por una de
sus inscripciones conservatorias, habiéndose hecho entrega simbólica
a la demandada del bien embargado. La infracción a lo dispuesto en el
artículo 450 del Código de Procedimiento Civil, que define cuando se
entiende hecho el embargo, acarrea la nulidad del mismo, lo que no
ocurre en el caso de autos. Que, en cambio, la inscripción en el Registro
respectivo del embargo de un inmueble se encuentra mencionada en el
artículo 453 del Código recién citado, según el cual el embargo no
produce efecto alguno legal respecto de terceros, sino desde la fecha
en que se inscriba en el respectivo Registro Conservatorio en donde
están situados los inmuebles. O sea, que la no inscripción del embargo
del inmueble produce el efecto de que es inoponible a terceros en tanto
no se inscriba en el Registro de Prohibiciones respectivo, pero en
ningún caso produce la nulidad del embargo (considerandos 5º y 6º de
la Corte de Apelaciones de Copiapó).
Corte Suprema, 25/05/1995, Rol Nº 22002-1995, Cita online:
CL/JUR/2133/1995

ARTÍCULO 451 (473)

Los bienes embargados se pondrán a disposición del depositario


provisional y éste, a su vez, los entregará al depositario definitivo que
nombrarán las partes en audiencia verbal o el tribunal en caso de desacuerdo.

Si los bienes embargados se encuentran en territorios jurisdiccionales


distintos o consisten en especies de distinta naturaleza, podrá nombrarse
más de un depositario.177

Cualquiera de las partes que ofrezca probar que el depositario no tiene


responsabilidad bastante, será oída.

Si el embargo recae sobre dinero, alhajas, especies preciosas, o efectos


públicos, el depósito deberá hacerse en un Banco o Caja Nacional de Ahorros
a la orden del juez de la causa y el certificado del depósito se agregará a los
autos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 443, 450, 479, 480 y 474.

ARTÍCULO 452 (474)

Si el deudor no concurre a la diligencia de embargo o si se niega a hacer


la entrega al depositario, procederá a efectuarla el ministro de fe.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 443, 444, 447, 448, 449, 450, 451 y
454.

ARTÍCULO 453 (475)

Si el embargo recae sobre bienes raíces o derechos reales constituidos en


ellos, no producirá efecto alguno legal respecto de terceros sino desde la
fecha en que se inscriba en el respectivo registro conservatorio en donde
estén situados los inmuebles.178
El ministro de fe que practique el embargo, requerirá inmediatamente su
inscripción y firmará con el conservador respectivo y retirará la diligencia en
el plazo de veinticuatro horas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 296, 297, 450 y 497. Código Civil:
artículo 1464 Nº 3. Reglamento del Registro del Conservador de Bienes Raíces: artículo 53
Nº 3.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. En el caso de los bienes raíces, el embargo no surte efecto respecto


de terceros sino una vez que se haya inscrito en el Conservador de
Bienes Raíces

En la especie, los sentenciadores para rechazar la demanda


sostuvieron que de conformidad a lo dispuesto en los artículos 171 del
Código Tributario y 453 del Código de Procedimiento Civil, en el caso
de los bienes raíces, el embargo no surtirá efecto respecto de terceros
sino una vez que se haya inscrito en el Conservador de Bienes Raíces
correspondiente, de manera que al no constar en este proceso la
inscripción del embargo en los términos expuestos ni el conocimiento
de tal medida por parte del tercero comprador, dicho embargo no le
resulta oponible al tratarse de un tercero extraño a la ejecución, quien
no concurrió a ella sino hasta la fecha en que dedujo tercería de
dominio, es decir, con posterioridad a la fecha de la celebración del
contrato impugnado y su respectiva inscripción. Por consiguiente, rige
en plenitud lo estatuido en el artículo 173 del Código Tributario en
relación al artículo 171 inciso 2º de ese mismo cuerpo legal, de manera
que el embargo no ha surtido efecto alguno respecto de la demandada
compradora y, por ende, no puede invocarse lo prevenido en el
artículo 1464 Nº 3 del Código Civil con la finalidad de invalidar la
enajenación de la especie (considerando 3º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 9/01/2018, Rol Nº 34278-2017, Cita online:


CL/JUR/115/2018

ARTÍCULO 454 (476)


Cuando la cosa embargada se halle en poder de un tercero que se oponga
a la entrega alegando el derecho de gozarla a otro título que el de dueño, no
se hará alteración en este goce hasta el momento de la enajenación,
ejerciendo mientras tanto el depositario sobre la cosa los mismos derechos
que ejercía el deudor.

Lo cual se entiende sin perjuicio del derecho que corresponda al tenedor


de la cosa embargada para seguir gozándola aún después de su enajenación.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 22, 508, 518 y 226.

ARTÍCULO 455 (477)

Verificado el embargo, el ministro de fe ejecutor entregará inmediatamente


la diligencia en la secretaría, y el secretario pondrá testimonio del día en que
la recibe.

En el caso del artículo 453, esta entrega se verificará inmediatamente


después de practicada la inscripción de que dicho artículo trata.

El retiro de las especies no podrá decretarse sino hasta transcurridos que


sean diez días desde la fecha de la traba de embargo, a menos que el juez,
por resolución fundada, ordene otra cosa.179

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 26, 36, 450 y 453. Código Orgánico
de Tribunales: artículos 379 y 393.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procede retiro si no existe una resolución fundada que impida el retiro


y han pasado diez días desde la fecha del embargo

El tribunal —a quo— al resolver un recurso de reposición con


apelación en subsidio respecto de la resolución —que rechazó la
solicitud de la ejecutante de retiro de las especies embargadas a que se
refería la tercería de posesión que fue desestimada—, desestimó el
primer recurso por cuanto indicó que era requisito previo que el
martillero aceptara el cargo designado y que pudiera hacerse cargo del
traslado y conservación de las especies en calidad de depositario. El
artículo 455 del Código de Procedimiento Civil, dispone que "El retiro de
las especies no podrá decretarse sino hasta transcurridos que sean diez
días desde la fecha de la traba del embargo, a menos que el juez, por
resolución fundada, ordene otra cosa". En esta causa transcurrió con
creces los diez días desde la fecha del embargo, y no existe una
resolución fundada que impida el retiro, puesto que no puede aceptarse
como excusa la exigencia que el martillero respectivo acepte el cargo si
ni siquiera se ha accedido a nombrarlo (considerandos 3º y 6º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 1/07/2019, Rol Nº 12038-2018,

Cita online: CL/JUR/5601/2019

ARTÍCULO 456 (478)

Puede el acreedor pedir ampliación del embargo en cualquier estado del


juicio, siempre que haya justo motivo para temer que los bienes embargados
no basten para cubrir la deuda y las costas.

El haber recaído el embargo sobre bienes difíciles de realizar, será siempre


justo motivo para la ampliación. Lo será también la introducción de cualquiera
tercería sobre los bienes embargados.

Pedida la ampliación después de la sentencia definitiva, no será necesario


el pronunciamiento de nueva sentencia para comprender en la realización los
bienes agregados al embargo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 447, 448, 457, 518, 519, 520 y 539.

ARTÍCULO 457 (479)

Puede el deudor en cualquier estado del juicio substituir el embargo,


consignando una cantidad suficiente para el pago de la deuda y las costas,
siempre que éste no recaiga en la especie o cuerpo cierto a que se refiere la
ejecución.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 443, 446, 458, 490 y 505.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Sustitución del embargo. Derecho del deudor de sustituir el embargo


consignando una cantidad suficiente para el pago de la deuda
La figura de la sustitución del embargo encuentra su regulación
original en el artículo 457 del Código de Procedimiento Civil. Como se
observa, es una clase de sustitución especial, ya que no es posible
cambiar o reemplazar los bienes embargados por otro cualquiera que
escoja el deudor, sino que sólo es admisible hacerlo por una cantidad
líquida de dinero y siempre que el embargo no recaiga en la cosa que
sea objeto de la ejecución. Según ha entendido la doctrina, la suma de
dinero reemplaza al bien embargado, pudiendo el deudor mantener la
oposición que hubiere deducido oportunamente en la tramitación del
juicio ejecutivo, en términos tales que al acreedor se le pagaría su
crédito en la misma oportunidad en que se le habría solucionado de
haber tenido que realizar el bien embargado (El embargo, Manuel
Antonio Riveros Izquierdo, Edit. Jurídica, 1964, pág. 72). Lo anterior
permite concluir que la sustitución del embargo es diferente a la acción
de liberar los bienes embargados mediante el pago de la deuda y las
costas a que se refiere el artículo 490 del mismo cuerpo legal, y
mediante la cual se pone término al juicio al haberse cumplido el objetivo
de la ejecución (considerando 5º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 18/04/2017, Rol Nº 28378-2016, Cita online:


CL/JUR/1801/2017

ARTÍCULO 458 (480)

Se formará ramo separado con las diligencias relativas al embargo, a su


ampliación y al procedimiento de apremio, que tiene por objeto realizar los
bienes embargados y hacer pago al acreedor.

Se pondrá testimonio en el ramo principal, de la fecha en que se practiquen


el embargo y la ampliación.

Este cuaderno se tramitará independientemente del cuaderno ejecutivo, sin


que la marcha del uno se retarde por los recursos que en el otro se deduzcan.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 87, 191, 497 y siguientes, 521, 522,
523, 525 y 526.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cuaderno de apremio debe tramitarse de manera independiente del


cuaderno ejecutivo
Como puede apreciarse del —artículo 458 del Código de
Procedimiento Civil—, el cuaderno de apremio debe tramitarse de
manera independiente del cuaderno ejecutivo, sin que la marcha de uno
se retarde por los recursos que se interpongan en el otro, por lo que la
suspensión decretada en la resolución recurrida —suspensión del
procedimiento de apremio— es absolutamente improcedente. En este
mismo sentido ha sido resuelto tanto por la doctrina como por la
jurisprudencia. En efecto, se ha señalado que en el hecho el cuaderno
de apremio se paraliza mientras en el cuaderno principal no se dicte
sentencia definitiva, agregando sí que "Sin embargo, ambos cuadernos
se tramitan separada e independientemente, de suerte que los recursos
deducidos en uno de ellos no retardan la marcha del otro" (Mario
Casarino Viterbo. Manual de Derecho Procesal. En igual sentido el autor
Raúl Espinosa Fuentes, quien respecto a la materia en discusión ha
señalado: "El juicio ejecutivo consta de dos cuadernos o ramos: el
cuaderno principal o ejecutivo y el cuaderno de apremio. El cuaderno
ejecutivo constituye el juicio mismo y en él se realiza la discusión de las
partes. Contiene la demanda, las excepciones del ejecutado, la prueba
y la sentencia definitiva. El cuaderno de apremio se tramita
paralelamente al cuaderno principal y se refiere a las actuaciones
necesarias para el embargo de los bienes y la administración y el remate
de los mismos. Este ramo se inicia con el embargo de bienes y
normalmente queda paralizado hasta que se dicta sentencia en el
cuaderno ejecutivo. Cuando esto último sucede se pone de nuevo en
movimiento el cuaderno de apremio, con las diligencias tendientes a la
realización de los bienes embargados. Estos dos cuadernos se tramitan
separada e independientemente, de modo que los recursos deducidos
en uno de ellos no retardan la marcha del otro (art. 458 del C.P.C.)".
(Manual de Procedimiento Civil. El Juicio Ejecutivo. Editorial Jurídica de
Chile. Undécima edición, página 76) (considerando 4º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 14/02/2020, Rol Nº 148-2020,

Cita online: CL/JUR/11055/2020

ARTÍCULO 459 (481)


Si el deudor es requerido de pago en el lugar del asiento del tribunal, tendrá
el término de cuatro días útiles para oponerse a la ejecución.

Este término se ampliará con cuatro días, si el requerimiento se hace dentro


del territorio jurisdiccional en que se ha promovido el juicio, pero fuera de la
comuna del asiento del tribunal.180

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 65, 66, 71, 76, 258, 259, 460, 464,
472 y 541.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Ejecutado domiciliado en una comuna distinta de la que sirve de


asiento al tribunal, pero dentro de su territorio jurisdiccional

Ante la hipótesis de iniciarse el requerimiento de pago con la


notificación de la demanda en una comuna distinta de aquélla que sirve
de asiento al tribunal, pero dentro del territorio jurisdiccional de éste, y
concluir en un acto posterior en el lugar de asiento del juzgado, lo propio
será adoptar una línea de interpretación que se avenga tanto con las
particularidades de ese trámite compuesto —cuyo mérito no admite ser
fraccionado—, como con las exigencias de un procedimiento racional y
justo, uno de los presupuestos de la garantía constitucional del debido
proceso al cual deben sujetarse los tribunales. La consideración y
aplicación de tales directrices conducen a privilegiar el hecho que, bajo
la hipótesis antedicha, la secuela de las actuaciones que informan el
trámite en comento deberá entenderse realizada fuera de la comuna
asiento del tribunal. Esta conclusión obedece a que no se debe perder
de vista la primera finalidad del requerimiento, esta es, la notificación de
la demanda, cuyo acaecimiento desencadena el momento procesal
para ejercitar la respectiva defensa, habida cuenta de la ampliación
contemplada en la ley —de cuatro a ocho días hábiles para oponerse a
la ejecución, previsto en el artículo 459 del Código de Procedimiento
Civil— por la vía de aguardar la conclusión del trámite del requerimiento
de pago. Concluir de otra forma importaría una merma al término
concedido al ejecutado para ejercitar su derecho a defensa,
circunstancia que sólo cabe entender repelida por el ordenamiento
procesal, siempre atento a asistir a los litigantes en virtud de pautas
objetivas contenidas en la ley, por medio de medidas que aplacan su
rigor, máxime si dice relación con el término de emplazamiento,
diligencia de la mayor trascendencia en el juicio, puesto que es a partir
de ella que se define el momento reservado al ejercicio de la primera
defensa del sujeto pasivo dentro del procedimiento iniciado en su contra
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 20/03/2020, Rol Nº 22096-2019, Cita online:


CL/JUR/22235/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 28/06/2019, Rol Nº 12841-


2018,

Cita online: CL/JUR/3754/2019

— Corte Suprema, 9/01/2018, Rol Nº 36781-2017,

Cita online: CL/JUR/113/2018

2. No obstante haber sido notificado en oficinas del receptor, el plazo


para oponer excepciones sigue siendo de ocho días hábiles, pues el
domicilio del ejecutado es una comuna distinta a aquella en que tiene
su asiento el tribunal

Por consiguiente, notificado el ejecutado de la demanda en su


domicilio ubicado en una comuna distinta de aquélla que sirve de
asiento al tribunal, pero dentro de su territorio jurisdiccional, conforme a
lo prevenido en el artículo 44 del Código de Procedimiento Civil,
dejándosele "cédula de espera" y citándolo para el día siguiente a la
oficina del receptor judicial, ubicada en la comuna que sirve de asiento
al tribunal, a fin de requerirlo de pago, actuación que se llevó a efecto
en la oportunidad fijada, pero en su rebeldía, resulta innegable que el
requerimiento se inició con la notificación de la demanda en el domicilio
del ejecutado y concluyó con el requerimiento de pago propiamente tal,
efectuado posteriormente en la oficina del receptor, lo que trae como
necesaria consecuencia que el demandado tenía, en virtud del
artículo 459 del Código de Procedimiento Civil, ocho días, y no cuatro,
para oponerse a la ejecución (considerandos 7º y 8º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 18/06/2018, Rol Nº 3356-2018, Cita online:


CL/JUR/2869/2018
Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 29/08/2019, Rol Nº 1985-2019,

Cita online: CL/JUR/4890/2019

— Corte de Apelaciones de Santiago, 28/06/2019, Rol Nº 12841-


2018,

Cita online: CL/JUR/3754/2019

3. Ampliación del plazo para oponer excepciones cuando el


requerimiento se hace dentro del territorio jurisdiccional en que se ha
promovido el juicio, pero fuera de la comuna del asiento del tribunal

La segunda parte del artículo 459 del Código de Procedimiento Civil,


contempla la posibilidad de aumentar el plazo de oposición, de 4 días
hábiles a 8 días útiles, "si el requerimiento se hace dentro del territorio
jurisdiccional en que se ha promovido el juicio, pero fuera de la comuna
del asiento del tribunal". Es evidente que con ello se ha pretendido
expandir las posibilidades de defensa. Empero, debe haber un motivo
que justifique esa concesión o tratamiento privilegiado y este no puede
ser otro que la lejanía del domicilio del ejecutado con relación al lugar
que sirve de asiento al tribunal, bajo el entendido que esa distancia
territorial comporta dificultades para la preparación de la defensa
(considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 5/09/2018, Rol Nº 4707-2018,

Cita online: CL/JUR/4958/2018

ARTÍCULO 460 (482)

Si el requerimiento se hace en territorio jurisdiccional de otro tribunal de la


República, la oposición podrá presentarse ante el tribunal que haya ordenado
cumplir el exhorto del que conoce en el juicio o ante este último tribunal. En
el primer caso, los plazos serán los mismos que establece el artículo anterior.
En el segundo, el ejecutado deberá formular su oposición en el plazo fatal de
ocho días, más el aumento del término de emplazamiento en conformidad a
la tabla de que trata el artículo 259.181
El tribunal exhortado se limitará a remitir la solicitud de oposición al
exhortante para que éste provea sobre ella lo que sea de derecho.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 65, 66, 71, 76, 258, 259, 464, 472
y 541.

ARTÍCULO 461 (483)

Si se verifica el requerimiento fuera del territorio de la República, el término


para deducir oposición será el que corresponda según la tabla a que se refiere
el artículo 259, como aumento extraordinario del plazo para contestar una
demanda.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 65, 66, 71, 76, 258, 259, 464, 472
y 541.

ARTÍCULO 462 (484)

El término para deducir la oposición comienza a correr desde el día del


requerimiento de pago.

Si el requerimiento se verifica dentro de la República, el ministro de fe hará


saber al deudor, en el mismo acto, el término que la ley concede para deducir
la oposición, y dejará testimonio de este aviso en la diligencia. La omisión del
ministro de fe le hará responsable de los perjuicios que puedan resultar, pero
no invalidará el requerimiento.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 65, 66, 71, 258, 259, 464, 472 y
541. Código Orgánico de Tribunales: artículos 390 y 393.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Plazo para oponer las excepciones a la ejecución se cuenta desde el


día del requerimiento de pago

Del artículo 462 inciso 1º del Código de Procedimiento Civil se colige


—sin mayor esfuerzo—, que el mandato legal expreso ha sido que el
plazo para oponer las excepciones a la ejecución se cuenta "desde el
día del requerimiento de pago". En eso no hay espacio para dos lecturas
ni menos para hacer decir al legislador "notificación" donde escribió
"requerimiento de pago" (considerando 3º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 5/09/2018, Rol Nº 4707-2018,

Cita online: CL/JUR/4958/2018

2. Finalidades del requerimiento de pago

Sobre los objetivos del requerimiento de pago, la doctrina ha


distinguido varios objetivos. En palabras de don Mario Casarino Viterbo:
"persigue dos finalidades fundamentales: notificar al deudor de la
demanda ejecutiva y requerirlo para que pague la obligación cuyo
cumplimiento ejecutivo se pretende; y luego, una consecuencial, para el
caso de desobediencia, cual es la de embargarle bienes suficientes para
cubrir capital, intereses y costas adeudadas" y reitera luego: "el
requerimiento de pago persigue dos finalidades esenciales: poner en
conocimiento del deudor la demanda ejecutiva que se ha iniciado en su
contra y constreñirlo para que pague la obligación cuyo cumplimiento
compulsivo pretende el acreedor. En consecuencia, requerir de pago al
deudor significa también emplazarlo al juicio, poner en su cono cimiento
la demanda ejecutiva que se ha iniciado en su contra para que haga su
correspondiente defensa" (Manual de Derecho Procesal, T. V, sexta
edición actualizada por Cristián Maturana Miquel y revisada por el autor,
págs. 65 y 76) (considerando 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 29/12/2010, Rol Nº 6099-2009, Cita online:


CL/JUR/12027/2010

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 11/08/2008, Rol Nº 3257-2007,

Cita online: CL/JUR/5883/2008

— Corte Suprema, 11/03/2008, Rol Nº 7067-2007,

Cita online: CL/JUR/5078/2008

ARTÍCULO 463 (485)


Los términos que se expresan en los cuatro artículos anteriores son fatales.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 64.

ARTÍCULO 464 (486)

La oposición del ejecutado sólo será admisible cuando se funde en alguna


de las excepciones siguientes:

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 464)

1. Formulación de excepciones constituye el medio de defensa del


ejecutado

La correlación de lo antedicho se encuentra en el ámbito de la defensa


del sujeto pasivo, pues el artículo 465 del Código de Enjuiciamiento en
mención exige al ejecutado que formula excepciones presentarlas
simultáneamente en un mismo escrito y expresar "con claridad y
precisión los hechos y los medios de prueba de que el deudor intenta
valerse para acreditarlas", ordenando al ejecutado encaminar su
defensa en las excepciones que puntualmente se enumeran en el
artículo 464 del referido cuerpo legal, las que, sean una o varias, deberá
concentrarlas en un solo escrito en el que, además, habrá de exponer
con exactitud los fundamentos de hecho de cada una de ellas. Esto
último ciertamente no resulta trivial, dado que en el debate que se abre
a propósito de la oposición de excepciones por el ejecutado es requisito
indispensable que la contraparte se entere en forma concreta y
circunstanciada de aquello con lo cual se intenta neutralizar la ejecución
que ha incoado. Y no sólo respecto de la ejecutante, pues el basamento
de las excepciones planteadas deberá igualmente asegurar el suficiente
conocimiento del tribunal de aquello que tendrá que resolver. De este
modo la naturaleza especial que presenta el juicio ejecutivo se traduce
desde la perspectiva del ejecutado en que su defensa debe formularse
mediante la oposición de excepciones en la oportunidad y términos
restringidos y formales que establece la ley, en contraposición a la
regulación prevista para el procedimiento declarativo (considerando 6º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 12/09/2018, Rol Nº 13193-2018, Cita online:


CL/JUR/5108/2018
Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 3/05/2016, Rol Nº 17743-2016,

Cita online: CL/JUR/2817/2016

— Corte Suprema, 28/12/2015, Rol Nº 28391-2015,

Cita online: CL/JUR/8090/2015

2. Interposición de excepciones no contempladas en el artículo 464 del


Código de Procedimiento Civil e interposición extemporánea de la
oposición son los únicos motivos de inadmisibilidad de las
excepciones

Siguiendo esta misma línea de razonamiento destaca la opinión de


Mario Casarino Viterbo, quien sostiene que la infracción del artículo 465
del Código de Procedimiento Civil acarrea "la pérdida del derecho del
deudor para suministrar aquellos medios de prueba que no especificó
con claridad y precisión en su escrito de excepciones". El mismo autor
al estudiar los aspectos relativos a la admisibilidad de las excepciones
a la luz de lo dispuesto en el artículo 466 del citado Código concluye
que si "las excepciones opuestas por el ejecutado no son de las
contempladas en el artículo 464 del Código de Procedimiento Civil, o si,
siéndolas, han sido opuestas fuera de plazo, el tribunal las declarará
inadmisibles, debiendo dictar desde luego sentencia definitiva" (Manual
de Derecho Procesal, Tomo V, sexta edición, año 2015, páginas 82 y
84). Las reflexiones precedentes conducen a la ineludible conclusión de
que los únicos motivos en virtud de los cuales se puede declarar la
inadmisibilidad de las excepciones opuestas a la ejecución son: 1) que
no sean de aquellas contempladas en el artículo 464 del Código de
Procedimiento Civil; y 2) su extemporaneidad (considerandos 8º y 9º de
la sentencia de casación).

Corte Suprema, 4/05/2017, Rol Nº 95024-2016, Cita online:


CL/JUR/2588/2017

1ª La incompetencia del tribunal ante quien se haya presentado la


demanda;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 464, EXCEP. 1ª)


1. Competencia para conocer de la ejecución no queda necesariamente
fijada al intervenir en la gestión preparatoria previa

Si bien la gestión que pretende preparar la ejecución, por un lado y la


ejecución que por esta vía queda preparada, por el otro, constituyen
unidades procesales que persiguen la continuidad de la noción de juicio,
la competencia del juez a quo para conocer de la ejecución preparada,
sin embargo, no queda necesariamente fijada al intervenir en la gestión
preparatoria previa. Así resulta de la lectura del inciso 1º del artículo 465
del Código de Procedimiento Civil, en la parte que señala: "No obstará
para que se deduzca la excepción de incompetencia, el hecho de haber
intervenido el demandado en las gestiones del demandante para
preparar la acción ejecutiva". Sin embargo, otra es la situación que se
presenta cuando lo que se invoca para desconocer la competencia al
juez ordinario que conoce de la ejecución es, por una parte, una
cuestión de fondo, referida a la existencia de una cláusula
compromisoria contenida en un contrato cuya extinción las partes de
este juicio no han controvertido, lo que implica extender más allá de lo
razonable los alcances y efectos de la cláusula en cuestión que suponen
la existencia del pacto que genere esas controversias; y, por otra parte,
una cuestión procesal funcional, referida a la atribución que hace la ley
para conocer de las ejecuciones civiles al tribunal a quo, la que no ha
sido entregada entonces, a la sede arbitral que, aunque carente de
imperio, la facultad para hacer cumplir forzadamente obligaciones se
refiere sólo a aquellas que en esa misma sede se hayan previamente
declarado. Así las cosas, la excepción de incompetencia opuesta por la
ejecutada deberá ser desestimada, revocando la sentencia, por lo que
procede emitir pronunciamiento acerca de las excepciones de los
números 7 y 13 del artículo 464 del Código de Procedimiento Civil
(considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 4/09/2019, Rol Nº 7261-2018,

Cita online: CL/JUR/5016/2019

2. Excepción de incompetencia no puede interponerse luego de la


notificación de la gestión preparatoria de la vía ejecutiva

Lo anterior se refuerza si se toma además en consideración, que la


oportunidad que tiene el ejecutado para oponer la excepción de
incompetencia, prevista en el Nº 1 del artículo 464 del Código de
Procedimiento Civil, es precisamente una vez opuesta la demanda
ejecutiva, ya que la gestión preparatoria sólo tiene por objeto llevar a
efecto la diligencia previa solicitada, sin que sea posible discutir, en esa
etapa, otras cuestiones como lo sería aquélla (considerando 7º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 7/01/2008, Rol Nº 5508-2006, Cita online:


CL/JUR/7084/2008

2ª La falta de capacidad del demandante o de personería o representación


legal del que comparezca en su nombre;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 464, EXCEP. 2ª)

1. Excepción de falta de personería, finalidad y aspectos que


comprende

La excepción del artículo 464 Nº 2 del Código de Procedimiento Civil


abarca tanto la carencia de la capacidad civil de los litigantes para estar
en juicio, como la insuficiencia, falta o defecto de las representaciones
invocadas. Por su intermedio se busca una representación adecuada,
con la finalidad de evitar tramitar un litigio con quien no representa a la
parte, la que podría verse afectada por una sentencia dictada en un
juicio en que no participó. Entonces, tiene por finalidad poner de
manifiesto la ausencia de requisitos indispensables para la admisión
procesal de quien se presenta en juicio por un derecho que no es propio
y engloba la actuación del personero que representa a la parte, en lo
que hace a la calidad que lo investiría como tal; objeción o irregularidad
material o formal del mandato para actuar en juicio y a la capacidad civil
para estar en juicio; ya sea por carecer de capacidad jurídica en modo
absoluto o porque no tiene capacidad procesal que le permita actuar sin
la asistencia de representante legal (considerando 5º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 10/03/2016, Rol Nº 35346-2015, Cita online:


CL/JUR/1635/2016

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 14/03/2016, Rol Nº 33628-2015,


Cita online: CL/JUR/1639/2016

2. Excepción de falta de personería o representación legal

En la especie, la abogada que comparece por la sociedad ejecutante


acompañó una copia autorizada de la escritura pública de mandato
judicial otorgado por quien ostentaba la representación legal de la
sociedad a la fecha de su otorgamiento, además de copia autorizada de
la reducción a escritura pública del acta de sesión de directorio en que
se designó al poderdante como gerente general de la sociedad. Tales
instrumentos resultan idóneos y suficientes para dejar establecida la
personería de quien ha comparecido en juicio representando a la
demandante, por lo que, procedía rechazar la excepción artículo 464
Nº 2 del Código de Procedimiento Civil (considerando 4º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 20/03/2018, Rol Nº 2231-2018, Cita online:


CL/JUR/1348/2018

3. Copia de escritura pública de la que emana representación resulta


suficiente para dejar establecida la personería de quien ha
comparecido en juicio

Las argumentaciones vertidas por el ejecutado, recurrente de


casación, se orientan a cuestionar la personería sin embargo, durante
el transcurso del juicio se acompañó copia autorizada de la escritura
pública de mandato judicial conferido al abogado, en la que se deja
constancia de que la personería del poderdante para representar a la
sociedad, la que no se inserta por ser conocida de las partes y por haber
tenido el notario que autoriza copia a la vista. Tal instrumento resulta
idóneo y suficiente para dejar establecida la personería de quien ha
comparecido en juicio representando a la demandante y designando
abogado patrocinante, lo que lleva a descartar la transgresión del
artículo 464 Nº 2 del Código de Procedimiento Civil. Por otra parte, cabe
recordar que la gestión preparatoria de notificación de facturas y el juicio
ejecutivo posterior constituyen una unidad procesal, aun cuando
materialmente existan dos expedientes diversos, por lo que habiéndose
acompañado en la etapa preparatoria copia autorizada de la escritura
pública de la que emana la representación invocada, resultaba
innecesario volver a aparejar la misma documentación durante el juicio
ejecutivo (considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 13/11/2018, Rol Nº 20599-2018, Cita online:
CL/JUR/6339/2018

3ª La litis pendencia ante tribunal competente, siempre que el juicio que le


da origen haya sido promovido por el acreedor, sea por vía de demanda o de
reconvención;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 464, EXCEP. 3ª)

1. Litis pendencia, concepto y requisitos

Tal como lo ha sostenido ya reiteradamente la E. Corte Suprema y la


doctrina que la ha guiado, la excepción en cuestión tiene lugar cuando
concurren dos litigios entre las mismas partes, seguidos ante el mismo
o diverso tribunal, siempre que versen sobre idéntico objeto pedido y
con demandas basadas en la misma causa de pedir. De lo expresado,
es posible concluir que para su configuración es necesaria la existencia
de la triple identidad, de personas, de objeto y de causa de pedir. En
efecto, la jurisprudencia mayoritaria ha señalado que "La litis pendencia
tiene lugar cuando se promueve ante un tribunal el mismo negocio ya
ventilado ante él u otro y, por consiguiente, supone que hay identidad
de partes, de objeto y de causa de pedir entre la primera y la segunda
demanda; y su propósito es el de evitar que se dicten fallos
contradictorios o incompatibles en desmedro de la buena administración
de justicia, como el prevenir y resguardar la autoridad de la cosa
juzgada" (C. Concepción, 9 de diciembre 1982, R., t. 78, sec. 2a, p. 18)
(considerando 2º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Talca, 30/12/2019, Rol Nº 1354-2018,

Cita online: CL/JUR/12054/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Concepción, 8/06/2018, Rol Nº 474-2018,

Cita online: CL/JUR/2733/2018

2. Excepción de litis pendencia, rechazada. Incumplimiento del requisito


de identidad de la cosa pedida
La excepción de litis pendencia exige la existencia de un juicio
pendiente donde coincidan los elementos del artículo 177 del Código de
Procedimiento Civil, y en el caso de autos no concurre la identidad de
cosa pedida —beneficio jurídico inmediato que se reclama— ni la causa
de pedir, entendida como el fundamento del derecho invocado en juicio,
pues mientras aquí se acciona ejecutivamente para el cobro de una
factura irrevocablemente aceptada, el otro litigio tiene naturaleza
ordinaria y versa sobre supuestos incumplimientos contractuales.
Luego, en lo que atañe a la excepción de nulidad de la obligación,
razonan acertadamente los juzgadores al estimar que la resolución
administrativa del contrato no afecta la validez de las facturas emitidas
previamente por obras efectiva y materialmente ejecutadas
(considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 22/01/2018, Rol Nº 38624-2017, Cita online:


CL/JUR/396/2018

3. Concepto de causa de pedir

Este presupuesto de la cosa juzgada consta definido en el inciso final


del referido artículo 177, que establece lo siguiente: "Se entiende por
causa de pedir el fundamento inmediato del derecho deducido en juicio".
Por su parte, el ya citado autor Devis Echandía se ha encargado de
precisar que la causa petendi es "El fundamento o razón alegado por el
demandante para obtener el objeto de la pretensión contenida en la
demanda, que al mismo tiempo es el fundamento jurídico de su
aceptación o denegación por el juez en la sentencia... Es la razón de
hecho que se enuncia en la demanda como fundamento de la
pretensión". (Obra citada, págs. 462 y 463). En la especie, la ejecución
anterior seguida por el ejecutante fue desestimada por defectuosa en
cuanto no existió la debida coincidencia entre lo requerido en la gestión
preparatoria de notificación de desposeimiento y lo pretendido en la
demanda de dicho juicio. Por tanto, los efectos de lo resuelto en ese
juicio se relacionan más bien con lo dispuesto en el artículo 477 del
Código de Procedimiento Civil, norma que señala que la acción
ejecutiva rechazada por incompetencia del tribunal, incapacidad,
ineptitud del libelo o falta de oportunidad de la ejecución, podrá
renovarse con arreglo a los preceptos de este Código. Por lo tanto,
resulta evidente que entre los juicios en que se basa la excepción de
cosa juzgada no se configura la misma causa de pedir, dado que se
pretende el desposeimiento de inmuebles diversos, sin que sea óbice
que ambos garanticen la misma deuda (considerandos 6º, 8º y 9º de la
sentencia de casación).

Corte Suprema, 16/03/2017, Rol Nº 58916-2016, Cita online:


CL/JUR/989/2017

4. Excepción de litis pendencia, rechazada. Inexistencia de identidad


legal de personas, de cosa pedida ni de causa de pedir

La excepción de litis pendencia pretende evitar que se dicten


decisiones contradictorias en juicios diversos, que se encuentren
pendientes, de acuerdo a la triple identidad de personas, de causa de
pedir y de objeto o cosa pedida. En este caso, no resulta controvertido
que, en forma paralela a este proceso de cobro de facturas, existe un
proceso arbitral. La primera duda surge respecto de la identidad de
personas, pues resulta pacífico que ambas partes de este juicio
ejecutivo especial son también sujetos procesales en el juicio arbitral ya
individualizado; sin embargo, la propia ejecutada señala en su libelo que
ella firma un contrato con la actora junto a otras catorce personas
integrantes, respecto de cuyo contrato se debate su cumplimiento en el
juicio arbitral. Respecto de la segunda identidad, la causa de pedir, la
Corte Suprema ha señalado que, "causa de pedir es el fundamento
inmediato del derecho que se invoca o el hecho jurídico o material en
que la ley se asienta para obtener el beneficio". De allí que se estime
que no existe tampoco plena similitud, sin perjuicio de encontrarse
vinculados, ya que en el juicio ejecutivo materia de autos lo litigado
resulta ser el cobro de facturas electrónicas que se detallan en la
demanda, mientras que en el juicio arbitral se demanda el cumplimiento
del contrato al que se encontrarían ligadas las facturas que acá se
cobran. Y respecto de la identidad de objeto o cosa pedida, la Corte
Suprema en el considerando vigésimo tercero ha señalado lo que
debemos entender por aquél: "En lo atinente a la identidad de cosa
pedida, hay que señalar que ella es el beneficio jurídico inmediato que
se reclama y al cual se pretende tener derechos. La identidad ha de
buscarse en el beneficio jurídico y no en la materialidad de las
prestaciones, sin que pueda pretenderse que sean iguales en sustancia
y accidentes". Es decir, lo pedido en uno y otro proceso, como beneficio
jurídico inmediato perseguido, respecto del cual se pretenden derechos,
resulta ser lo mismo, lo que no sucede en este caso. Por lo tanto,
corresponde rechazar la excepción del artículo 464 Nº 3 del Código de
Procedimiento Civil (considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 17/06/2016, Rol Nº 947-2016,

Cita online: CL/JUR/4282/2016

4ª La ineptitud del libelo por falta de algún requisito legal en el modo de


formular la demanda, en conformidad a lo dispuesto en el artículo 254;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 464, EXCEP. 4ª)

1. Concepto y requisitos de procedencia de la excepción de ineptitud del


libelo

"Respecto a la excepción de ineptitud del libelo la jurisprudencia de


nuestros más altos tribunales ha expresado históricamente que: La
excepción de ineptitud del libelo, contemplada en el artículo 464 Nº 4
del Código de Procedimiento Civil, es procedente si está justificada por
hechos graves o importantes; pero no lo es cuando se funda en
circunstancias o aspectos irrelevantes o de escasa significación'' (C.
Concepción, 3 de julio de 1962, R., t. 59, sec. 2a, pág. 43); "Para que
proceda la excepción de ineptitud del libelo es necesario que el requisito
legal ausente de la demanda ejecutiva sea de aquellos que la hagan
inepta, o sea, mal formulada, ininteligible o vaga respecto de las
personas o de la causa de pedir o de la cosa pedida" (C. Valdivia, 19 de
julio de 1914, G. 1914, mayo-junio, 2º sem., Nº 273, pág. 752) y;
"Cuando la sentencia dictada por el juez de la instancia expresa que la
demanda ejecutiva contiene una exposición suficientemente clara de los
hechos en que ella se apoya y que las omisiones que el demandado
reclama no hacen ininteligible ni vaga la exposición de los hechos, se
está calificando la acción de acuerdo con los hechos que las partes
exponen, materia que corresponde al juez del fondo, de manera que si
éste declara satisfactoria la exposición, no cabe sostener que no deba
admitirse a tramitación la demanda'' (C. Suprema, 26 de enero de 1970.
R., t. 67, sec. 1a, pág. 50) (considerando 7º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 9/08/2019, Rol Nº 1152-2019,


Cita online: CL/JUR/4566/2019

2. Excepción de ineptitud del libelo, rechazada. Omisiones en la


demanda no la hacen ininteligible ni vaga en la exposición de los
hechos

En relación a la excepción de ineptitud del libelo, para que proceda tal


oposición es necesario que el requisito legal ausente de la demanda
ejecutiva sea de aquellos que la hagan inepta, o sea, mal formulada,
ininteligible o vaga respecto de las personas, de la causa de pedir o de
la cosa pedida. Así, cuando la sentencia dictada por el juez de la
instancia expresa que la demanda ejecutiva contiene una exposición
suficientemente clara de los hechos en que ella se apoya y que las
omisiones que el demandado reclama no hacen ininteligible ni vaga la
exposición de los hechos, se está calificando la acción de acuerdo con
los hechos que las partes exponen, materia que corresponde al juez del
fondo (considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/01/2018, Rol Nº 42452-2017, Cita online:


CL/JUR/467/2018

3. Error de cita no torna inepto el libelo

En la especie, al analizar la excepción de ineptitud del libelo no puede


desatenderse la circunstancia que el demandado opuso diversas
excepciones a la ejecución demostrando una cabal comprensión de la
demanda, y que si bien el libelo contiene un error de cita al señalar la
fecha en que el pagaré habría sido renovado —falta que, por lo demás,
es reconocida por el demandante al contestar las excepciones— tal
inadvertencia formal no torna inepto el libelo. En efecto, el Máximo
Tribunal ha señalado que para que proceda la excepción en estudio es
necesario que el requisito legal ausente de la demanda ejecutiva sea de
aquellos que la hagan inepta, o sea, mal formulada, ininteligible o vaga
respecto de las personas o de la causa de pedir o de la cosa pedida, de
modo que se afecte el derecho de la contraparte a poder defenderse,
por la incomprensión de la misma. Tal cuestión no acaece en la especie,
puesto que la demandada también opuso a la ejecución otras
excepciones distintas a aquella cuyo rechazo cuestiona, de lo que se
sigue que los planteamientos mediante los cuales persigue la
invalidación de lo decidido no han obstaculizado su derecho a defensa
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 3/04/2018, Rol Nº 45384-2017, Cita online:
CL/JUR/1529/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 20/03/2019, Rol Nº 26532-2018,

Cita online: CL/JUR/1575/2019

5ª El beneficio de excusión o la caducidad de la fianza;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 464, EXCEP. 5ª)

1. Excepción de beneficio de excusión, rechazada

El beneficio de excusión contemplado en el artículo 148 del Código


Civil tiene por finalidad, cuando sea procedente su invocación, que los
acreedores persigan, en forma previa, otros bienes distintos a los bienes
familiares. El beneficio de excusión que puede oponer el fiador en los
términos que consagra el artículo 2357 del Código Civil, por su parte,
tiene por finalidad que primero se persiga el pago de la deuda en bienes
del deudor. En tal sentido y a propósito de la naturaleza jurídica del
beneficio consagrado en el artículo 148 del Código Civil, se señala por
la doctrina que "no se trata de una excusión personal, sino como lo
califica el profesor Leslie Tomasello, de una excusión real" y por ello
"debe desecharse la idea de que los cónyuges reconvenidos pueden
oponer el beneficio de excusión como excepción, de acuerdo al
artículo 464 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil, sino que se trata de
un incidente que ha de deducirse en el cuaderno de apremio". (Régimen
Jurídico de los Bienes Familiares, Gian Franco Rosso Elorriaga), por lo
que tal como se razonó por la juez a quo, correspondía el rechazo de la
excepción opuesta, atenta la calidad del ejecutado, cual es la de
principal obligado al pago de la deuda (considerando 11º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Temuco, 23/09/2016, Rol Nº 1098-2015,

Cita online: CL/JUR/6678/2016

6ª La falsedad del título;


JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 464, EXCEP. 6ª)

1. Hipótesis en que se considera falso un título

Que, como se sabe, en relación a la falsedad del título, un documento


es falso cuando no es auténtico, es decir, cuando no ha sido realmente
otorgado y autorizado por las personas y de la manera que en el
instrumento se expresa. En consecuencia, para que pueda calificarse
un título de falso es menester que haya existido suplantación de
personas o que se efectuaron adulteraciones que hagan cambiar la
naturaleza del documento.

Corte Suprema, 3/08/2010, Rol Nº 4428-2010, Cita online:


CL/JUR/4555/2010

Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 2/12/2011, Rol Nº 8368-2005,

Cita online: CL/JUR/10047/2011

— Corte Suprema, 12/01/2009, Rol Nº 4813-2007,

Cita online: CL/JUR/5707/2009

— Corte Suprema, 29/10/2008, Rol Nº 5432-2008,

Cita online: CL/JUR/2720/2009

— Corte Suprema, 4/04/2006, Rol Nº 3441-2005,

Cita online: CL/JUR/7440/2006

2. La falsedad mira a la autenticidad del título que sirve de base a la


ejecución y, por tanto, sólo puede hacerse valer contra dicho título

Que resulta evidente que las excepciones de falsedad del título y de


falta de algunos de los requisitos o condiciones establecidas por las
leyes para que dicho título tenga fuerza ejecutiva, sea absolutamente,
sea con relación al demandado, contempladas en los números 6 y 7 del
artículo 464 del Código del ramo, se refieren al título ejecutivo que
contiene la obligación principal y no a las garantías accesorias. La
falsedad del título mira a la autenticidad del título que sirve de base a la
ejecución, al igual que la excepción del Nº 7, que se refiere también al
título que sirve de base a la ejecución, y por tanto sólo pueden hacerse
valer contra dicho título. De consiguiente, si bien el tercer poseedor
demandado puede oponer excepciones en mención, éstas deben
dirigirse a restarse eficacia al título ejecutivo y no al contrato de
hipoteca, ya que no es aceptable oponerlas fundadas en hechos que no
miran al título mismo (considerando 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 2/08/2000, Rol Nº 755-2000,

Cita online: CL/JUR/2023/2000

3. Artículo 464 Nº 6 del Código de Procedimiento Civil prima sobre el


artículo 346 del mismo cuerpo legal

Que en un juicio ejecutivo, como es el que nos ocupa, no puede el


ejecutado interponer incidencia de objeción del documento que sirva de
título a la ejecución, por las causales de falsedad o falta de integridad,
y ello por la muy sencilla razón de que tales alegaciones en este tipo de
procesos quedan encuadradas en la excepción de falsedad del título,
expresamente prevista en el artículo 464 circunstancia 6ª del Código de
Procedimiento Civil. Es claro que esa norma especial prima sobre la
general contenida en el artículo 346 del mismo cuerpo legal, por dos
razones; en primer término, porque tratándose del título ejecutivo en un
proceso de esa índole, el documento no necesita que se le tenga por
reconocido, que es el supuesto sobre el que descansa el artículo 346,
ya que por su propia naturaleza es indubitado, sin perjuicio de las
excepciones que el demandado pueda hacer valer; en segundo lugar,
porque de otra manera el ejecutado podría oponer encubiertamente la
excepción de falsedad de título fuera del plazo legalmente previsto y el
tribunal, si admitiera tal incidencia, estaría en verdad acogiendo una
excepción que no se opuso, lo que es contrario a toda la mecánica y
razón de ser del procedimiento ejecutivo (considerando 2º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte de Apelaciones de Rancagua, 2/07/2004, Rol Nº 19203-2004,

Cita online: CL/JUR/5572/2004


7ª La falta de alguno de los requisitos o condiciones establecidos por las
leyes para que dicho título tenga fuerza ejecutiva, sea absolutamente, sea
con relación al demandado;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 464, EXCEP. 7ª)

1. Finalidad de la excepción de falta de alguno de los requisitos para


que el título tenga fuerza ejecutiva

Esta excepción tiene por objeto controlar la concurrencia de los


requisitos o condiciones establecidos por las leyes para que la acción
ejecutiva pueda prosperar, es decir, debe sostenerse en que el título
que sirve de fundamento a la ejecución no es ejecutivo, que la
obligación no es actualmente exigible, o bien que la obligación no es
líquida. Un ejemplo de ello, como lo reseña el Profesor Mario Casarino
Viterbo en su Manual de Derecho Procesal, es que el título que se
invoca sea un instrumento privado no reconocido judicialmente ni
mandado tener por reconocido. Lo anterior ha sido reconocido por la
jurisprudencia, en cuanto se ha sostenido que la excepción dice relación
con la ausencia de los requisitos propios del título que funda la
ejecución. De este modo, la referida excepción ha de sustentarse en
situaciones fácticas que se orienten a mermar el valor o las propiedades
del título ejecutivo, con el objeto de acreditar que carece de la fuerza de
la que, al menos inicialmente, aparece dotado. "Se opondrá esta
excepción cada vez que falte alguno de los requisitos para que proceda
la acción ejecutiva, sea porque el título no reúne todas las condiciones
establecidas por la ley para que se le considere como ejecutivo, o
porque no es actualmente exigible. Esta excepción debe relacionarse
con todos aquellos preceptos legales que consagran exigencias para
que un título tenga fuerza ejecutiva. Estos preceptos legales, como se
comprenderá, son innumerables, dada la diversidad de títulos ejecutivos
que la ley crea, como también la diversidad de condiciones que
establece para cada uno de ellos" (Raúl Espinosa Fuentes, Manual de
Procedimiento Civil. El Juicio Ejecutivo, edición actualizada por Cristián
Maturana Miquel, Editorial Jurídica, 2003, págs. 113 y 114)
(considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/03/2017, Rol Nº 62160-2016,

Cita online: CL/JUR/711/2017


Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 23/03/2016, Rol Nº 15914-2015,

Cita online: CL/JUR/1832/2016

2. Hipótesis en que procede la excepción del artículo 464 Nº 7 del


Código de Procedimiento Civil

La excepción del número 7 del artículo 464 del Código de


Procedimiento Civil tiene lugar cada vez que falte al título alguno de los
requisitos para que proceda la acción ejecutiva, sea porque el título no
reúne todas las condiciones establecidas por la ley para que se le
considere como ejecutivo, y/o porque no da cuenta de una obligación
líquida y actualmente exigible. Esta excepción debe relacionarse, pues,
con todos aquellos preceptos legales que consagran exigencias para
que un título tenga fuerza ejecutiva. Tales disposiciones, como se
comprenderá, son innumerables, dada la diversidad de títulos ejecutivos
que la ley crea, como también la diversidad de condiciones que
establece para cada uno de ellos (Raúl Espinosa Fuentes, "Manual de
Procedimiento Civil. El Juicio Ejecutivo", edición actualizada por Cristián
Maturana Miquel, Editorial Jurídica, 2003, págs. 113 y 114)
(considerandos 7º y 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 2/05/2019, Rol Nº 12920-2018,

Cita online: CL/JUR/3008/2019

3. Excepción debe sustentarse en situaciones fácticas orientadas a


mermar el valor o las propiedades del título ejecutivo

Respecto de la excepción en examen esta Corte ha manifestado


reiteradamente que, para ser exitosa la oposición, ha de sustentarse en
situaciones fácticas que se orienten a mermar el valor o las propiedades
del título ejecutivo, con el objeto de acreditar que aquél carece de la
fuerza de la que, al menos, inicialmente aparece dotado, resultando
impertinentes las alegaciones que pretenden basar tal defensa en
circunstancias ajenas al instrumento en que el ejecutante respalda su
acción y conforme al cual se instruyó el procedimiento ejecutivo
propiamente tal. Se ha dicho al respecto por la doctrina que: "Se
opondrá esta excepción cada vez que falte alguno de los requisitos para
que proceda la acción ejecutiva, sea porque el título no reúne todas las
condiciones establecidas por la ley para que se le considere como
ejecutivo, o porque no es actualmente exigible. Esta excepción debe
relacionarse, pues, con todos aquellos preceptos legales que consagran
exigencias para que un título tenga fuerza ejecutiva. Estos preceptos
legales, como se comprenderá, son innumerables, dada la diversidad
de títulos ejecutivos que la ley crea, como también la diversidad de
condiciones que establece para cada uno de ellos". (Raúl Espinosa
Fuentes, "Manual de Procedimiento Civil. El Juicio Ejecutivo", edición
actualizada por Cristián Maturana Miquel, Editorial Jurídica, 2003, págs.
113 y 114).

Corte Suprema, 19/02/2018, Rol Nº 11741-2017,

Cita online: CL/JUR/771/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 9/07/2019, Rol Nº 4255-2019,

Cita online: CL/JUR/3996/2019

— Corte Suprema, 30/05/2018, Rol Nº 34367-2017,

Cita online: CL/JUR/2595/2018

4. Excepción de falta de alguno de los requisitos para que el título tenga


fuerza ejecutiva

La parte ejecutada ha opuesto a la ejecución la excepción establecida


en el artículo 464 Nº 7 del Código de Procedimiento Civil, esto es, la
falta de alguno de los requisitos o condiciones establecidos por las leyes
para que dicho título tenga fuerza ejecutiva, sea absolutamente, sea con
relación al demandado. En relación a esta causal es dable tener
presente que la oposición de la ejecutada sólo puede limitarse al título
ejecutivo que se esgrime en su contra. La excepción se refiere
únicamente al título ejecutivo que sirve de base a la ejecución y sólo
puede hacerse valer contra dicho título. El "título ejecutivo es aquel
documento que da cuenta de un derecho indubitable, al cual la ley
atribuye la suficiencia necesaria para exigir el cumplimiento forzado de
la obligación en él contenida" —Raúl Espinoza Fuentes—. En el fondo
la excepción tiende a controlar la concurrencia de los requisitos o
condiciones establecidas por las leyes para que la acción ejecutiva
pueda prosperar. Para conseguir dichos fines, el ejecutado deberá
alegar que el título que sirve de fundamento a la acción ejecutiva no es
ejecutivo; que la obligación no es actualmente exigible; que no es líquida
o que la obligación está prescrita. La excepción debe fundarse en
hechos que guarden directa vinculación con el título ejecutivo. "El título
es insuficiente cuando él o la deuda de que da cuenta carecen de uno
o más requisitos para ser susceptible de ejecución, al momento de ser
ésta solicitada" (Rafael Veloso Chávez. En Manual del Juicio Ejecutivo.
Editorial Nascimento. Santiago. 1928. Página 94) (considerandos 30º y
31º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones, 2/03/2020, Rol Nº 2509-2019,

Cita online: CL/JUR/15562/2020

5. Para la fuerza ejecutiva del pagaré no es exigencia legal para que


ella sea válida la comparecencia o presencia del suscriptor ante el
ministro de fe

El Máximo Tribunal ha señalado que: "El vocablo autorizar no supone,


necesariamente, la presencia de la persona cuya rúbrica autentifica y,
por consiguiente, la correcta interpretación del artículo 434 Nº 4 inciso
segundo del Código de Procedimiento Civil ni siquiera lleva a exigir la
comparecencia ante el notario del obligado que firma un instrumento
mercantil, sea pagaré, cheque o letra de cambio, bastando al efecto la
sola actuación del ministro de fe autorizante y la circunstancia de que a
este último le conste la autenticidad de la firma que autoriza. Dicha
interpretación también resulta coherente con lo prescrito en el Nº 10 del
artículo 401 del Código Orgánico de Tribunales, de acuerdo con el cual
esta es una de las funciones de los notarios, autorizar las firmas que se
estampen en documentos privados, sean en su presencia o cuya
autenticidad le conste. (...) (...) Que, en consecuencia, la autenticidad
de la firma en el documento que comprueba y certifica el notario bajo
fórmula no sacramental, que suscribe con su propia rúbrica y título,
constituye la autorización notarial que hace fe pública y que es de
responsabilidad exclusiva del notario. El funcionario responde de ello y
si alguien quiere disputar la fe o la verdad de la aseveración que hay
tras la autorización, deberá probarlo. El pagaré que funda la presente
ejecución contiene nítidamente la autorización notarial respecto de la
rúbrica que aparece en el mismo, atribuida a la persona del deudor
individualizado por el actor en su demanda, asociada a su nombre
completo y número de cédula de identidad, para luego —por la vía de
la autorización— dar fe de que la firma puesta en el documento le
pertenece. Por lo tanto, la autorización notarial en el pagaré con el que
se ha incoado la ejecución cumple con lo dispuesto en el artículo 425
del Código Orgánico de Tribunales, por lo que resulta ajustado a
derecho el rechazo de la excepción del artículo 464 Nº 7 del Código de
Procedimiento Civil (considerandos 3º a 5º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 16/01/2020, Rol Nº 2126-2019,

Cita online: CL/JUR/42021/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 28/04/2020, Rol Nº 2794-2020,

Cita online: CL/JUR/25575/2020

— Corte Suprema, 19/03/2018, Rol Nº 1132-2018,

Cita online: CL/JUR/4674/2018

6. Error de referencia en la demanda no resta mérito a un título ejecutivo


válido

La ejecutada fundamentó la excepción del artículo 464 Nº 7 del


Código de Procedimiento Civil en la inexistencia de la renovación del
pagaré aludida en la demanda, cuestión que dice relación únicamente
con un error de cita en el escrito de interposición de la demanda al
momento de señalar la fecha en que habría sido renovado el
documento, no un defecto en el título fundante de la ejecución; cuestión
que es constatada por los jueces de la instancia, quienes, luego de
analizar el pagaré, comprobaron que cumple con los requisitos que la
ley exige para dotarlo de fuerza ejecutiva. Error de referencia en la
demanda no puede restar mérito a un título ejecutivo válido
(considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 3/04/2018, Rol Nº 45384-2017,

Cita online: CL/JUR/1529/2018

8ª El exceso de avalúo en los casos de los incisos 2º y 3º del artículo 438;

9ª El pago de la deuda;

10ª La remisión de la misma;

11ª La concesión de esperas o la prórroga del plazo;

12ª La novación;

13ª La compensación;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (464 Nº 13)

1. Compensación, concepto y requisitos de procedencia

La doctrina ha entendido que la compensación, como modo de


extinción de las obligaciones, surge de la observación de que es posible
que las mismas partes de una relación tengan también la misma calidad
en una relación distinta, de lo que puede resultar que la que tiene la
calidad de acreedor en una de ellas tenga la de deudor en la otra, o
viceversa. El artículo 1655 del Código Civil prescribe que "cuando dos
personas son deudoras una de otra, se opera entre ellas una
compensación que extingue ambas deudas". Tradicionalmente se ha
definido la compensación como un modo de extinguir las obligaciones
recíprocas de dos personas que son deudoras una de otra hasta
concurrencia de la de menor valor, o hasta por el monto en que ambas
coinciden. La compensación equivale al pago y, en consecuencia,
produce el efecto propio de éste, es decir, es igual al cumplimiento de
la obligación y por ello la extingue con todos sus accesorios. Para que
esta institución opere y produzca el efecto que le es propio requiere que
concurran ciertos requisitos, los que se pueden sintetizar en los
siguientes: las partes deben ser deudoras y acreedoras recíprocas; las
obligaciones han de ser de igual naturaleza; las deudas deben ser
líquidas y actualmente exigibles; y la compensación no debe estar
prohibida en el caso concreto. El primer requisito se refiere a que el
crédito que se opone en compensación debe ser propio de su titular y
no pertenecer a otra persona. En relación al segundo elemento, la
doctrina ha estimado que ambas obligaciones deben tener como objeto
una misma cosa, sea dinero u otra fungible o indeterminada de igual
género y calidad. Además, ambas deudas deben ser líquidas y
actualmente exigibles, debiendo entenderse que una deuda es líquida
cuando se tiene certidumbre de su existencia y se conoce su monto o
puede conocerse por una simple operación aritmética. Por último, que
sea actualmente exigible implica que la deuda se puede exigir de
inmediato, sin que haya un plazo que suspenda su exigibilidad o una
condición de la que dependa su nacimiento (considerandos 1º y 2º de
la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 22/03/2019, Rol Nº 157-2019,

Cita online: CL/JUR/2365/2019

2. Condición para procedencia de compensación es que sean


obligaciones de igual naturaleza, líquidas y actualmente exigibles

Cabe hacer presente que el numeral 13º del artículo 464 del Código
de Procedimiento Civil prescribe que la oposición del ejecutado será
admisible cuando se funde en la compensación, sin establecer
requisitos especiales para su procedencia, de manera que ella debe ser
analizada a la luz de las normas que regulan esta institución en el
Código Civil. Así, tratándose de un juicio ejecutivo, el legislador no
impuso como condición para la procedencia de la compensación que la
obligación invocada se encuentre contenida en un título ejecutivo, pues
sólo exigió que se trate de obligaciones de igual naturaleza, que sean
líquidas y actualmente exigibles. El artículo 1656 del Código Civil
impone que ambas obligaciones sean "actualmente exigibles", es decir,
que las dos obligaciones se encuentren vencidas y pueda exigirse su
cumplimiento, de manera que no se encuentren sujetas a plazo o
condición (considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 22/03/2019, Rol Nº 157-2019,

Cita online: CL/JUR/2365/2019

3. Excepción de compensación no requiere que la obligación invocada


se encuentre contenida en un título ejecutivo
Sobre este punto, cabe hacer presente que el numeral 13º del
artículo 464 del Código de Procedimiento Civil prescribe que la
oposición del ejecutado será admisible cuando se funde en la
compensación, sin establecer requisitos especiales para su
procedencia, de manera que ella debe ser analizada a la luz de las
normas que regulan esta institución en el Código Civil, tal como se
enunció en los considerandos cuarto y quinto de este fallo. Es así como
debe entenderse que, tratándose de un juicio ejecutivo, el legislador no
impuso como condición para la procedencia de la compensación que la
obligación invocada se encuentre contenida en un título ejecutivo, pues
sólo exigió que se trate de obligaciones de igual naturaleza, que sean
líquidas y actualmente exigibles. A su vez, el artículo 1656 del Código
Civil impone que ambas obligaciones sean "actualmente exigibles", es
decir, que las dos obligaciones se encuentren vencidas y pueda exigirse
su cumplimiento, de manera que no se encuentren sujetas a plazo o
condición. Por último, en relación a la liquidez, debe tenerse presente
que la deuda es líquida no sólo cuando ya está liquidada, sino también
la que pueda liquidarse mediante simples operaciones aritméticas que
el mismo título suministre (considerando 8º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 3/10/2016, Rol Nº 14992-2016, Cita online:


CL/JUR/6764/2016

14ª La nulidad de la obligación;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 464, EXCEP. 14ª)

1. Concepto de nulidad. Excepción de nulidad de la obligación

La ejecutada interpuso la excepción del artículo 464 Nº 14 del Código


de Procedimiento Civil, esto es, la nulidad de la obligación, basada en
que esta última carece de causa desde que su parte no ejerce actividad
gravada alguna, alegación que reiteró con ocasión del recurso de
casación sustancial en estudio, por cuyo intermedio denuncia la
transgresión de la citada norma. Al respecto cabe consignar que la
nulidad ha sido definida como la sanción de ineficacia jurídica
establecida por la ley para la omisión de los requisitos y formalidades
que en ella se prescriben para el valor de un acto, según su especie y
la calidad o estado de las partes. Dicha causal de oposición dice
relación con la existencia o validez del acto o contrato que da origen a
la obligación cuyo cumplimiento o pago se pretende en el juicio
ejecutivo. Lo impugnado a través de la misma no atañe al carácter
ejecutivo del título ni a la falta de condiciones establecidas por la ley
para que se le considere como tal o con la liquidez o exigibilidad de la
deuda, sino a cuestiones relativas a los elementos y exigencias que
determinan el nacimiento o legitimidad de la obligación y no con su
naturaleza ejecutiva. En la especie, efectivamente, la obligación que se
cobra en autos carece de causa, esto es, está privada de motivación o
antecedente que justifique su cobro por la Administración, en este caso,
por la Municipalidad, desde que no se demostró que la compañía
demandada se encuentre sujeta al pago del impuesto en cuestión
(considerandos 15º y 16º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 19/02/2018, Rol Nº 11741-2017, Cita online:


CL/JUR/771/2018

2. Excepción de nulidad de la obligación está referida a la existencia o


validez del acto o contrato que da origen a la obligación

La excepción que contempla el numeral 14 del artículo 464 del Código


de Procedimiento Civil corresponde a la nulidad de la obligación, la que
puede ser absoluta o relativa y ambas clases de nulidad pueden
oponerse como excepciones a la ejecución. Dicha causal de oposición
dice relación con la existencia o validez del acto o contrato que da origen
a la obligación cuyo cumplimiento o pago se pretende en el juicio
ejecutivo. Lo impugnado a través de la misma no atañe al carácter
ejecutivo del título ni a la falta de condiciones establecidas por la ley
para que se le considere como tal o con la liquidez o exigibilidad de la
deuda, sino a cuestiones relativas a los elementos y exigencias que
determinan el nacimiento o legitimidad de la obligación y no con su
naturaleza ejecutiva, para cuyos efectos el legislador ha previsto
especialmente la excepción del numeral 7º del art ículo citado. En
efecto, va a proceder esta última excepción cada vez que falte alguno
de los requisitos para que proceda la acción ejecutiva, sea porque el
título no reúne todas las exigencias legales para que se le considere
ejecutivo, o porque la deuda no es líquida o no es actualmente exigible
(La Ejecución Procesal Civil, Sergio Peña Neira. Editorial Metropolitana,
págs. 106 y 107) (considerando 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Talca, 14/04/2016, Rol Nº 83-2016,

Cita online: CL/JUR/2491/2016

3. Nulidad de la obligación fundada en causa ilícita

El ejecutado ha fundado la excepción del artículo 464 Nº 14 del


Código de Procedimiento Civil, esto es la nulidad de la obligación, en
una causa ilícita, la que se encuentra definida en el artículo 1467 del
Código Civil que refiere "No puede haber obligación sin una causa real
y licita; pero no es necesario expresarla. La pura liberalidad o
beneficencia es causa suficiente. Se entiende por causa el motivo que
induce al acto o contrato; y por causa ilícita, la prohibida por la ley, o
contraria a las buenas costumbres o al orden público" (considerando 4º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 1/03/2019, Rol Nº 2237-2018,

Cita online: CL/JUR/1083/2019

4. Al no existir contraprestación de parte de la ejecutante, la obligación


que pretende ejecutar carece de causa y, en consecuencia, es nula

Que así, entonces, los municipios no están facultados para imponer


tributos o impuestos, sino únicamente para recaudar lo que la ley
permite, de manera que los derechos que pueden cobrar por los
permisos y concesiones, al igual que por los servicios que presten,
requieren de una contraprestación de su parte, pues sostener lo
contrario importa la imposición de gravámenes o tributos, situación que
atenta contra el principio de legalidad ya indicado. Que en la especie se
trata de propaganda particular, esto es, de letreros colocados en
propiedad privada, no pudiendo el municipio obtener beneficios de una
situación que le es totalmente ajena, en la cual no les ha cabido ninguna
intervención y sin que exista de su parte una correspondiente
contraprestación, por cuanto aquella invocada referente a las
condiciones creadas en los espacios públicos que administra y que el
avisador aprovecha, no es más que el cumplimiento de sus obligaciones
en orden a satisfacer las necesidades de la comuna. Que lo afirmado
precedentemente, no significa desconocer las facultades que tienen los
Municipios de regular la propaganda que se efectúa en las propiedades
particulares a través de las respectivas ordenanzas. Que conforme a lo
razonado, los jueces del grado han incurrido en error de derecho al
admitir el cobro de un derecho municipal, que carece de causa y que en
consecuencia torna a la supuesta obligación en nula, no siendo óbice
para afirmar lo anterior, el que en la especie se trate de un juicio
ejecutivo, por cuanto el legislador ha consagrado expresamente al
ejecutado la facultad de defenderse mediante la excepción de nulidad
de la obligación, por consiguiente nada impide su acogimiento
(considerandos 11º a 14º de la sentencia de la sentencia de reemplazo).

Corte Suprema, 27/05/2009, Rol Nº 50-2008, Cita online:


CL/JUR/5252/2009

15ª La pérdida de la cosa debida, en conformidad a lo dispuesto en el


Título XIX, Libro IV del Código Civil;

16ª La transacción;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 464, EXCEP. 16ª)

1. Naturaleza jurídica y características de la transacción. Transacción


es convención que no requiere de la intervención de la judicatura para
nacer a la vida jurídica

La transacción tiene naturaleza contractual del tipo consensual,


oneroso, bilateral e intuito personae y, será conmutativa o aleatoria, lo
mismo que translaticia de dominio, según las particularidades de lo
estipulado en sus cláusulas. Sus características o presupuestos básicos
son: la existencia de un derecho dudoso y las concesiones recíprocas
entre las partes. Por consiguiente, se trata de una convención que no
requiere de la intervención de la judicatura para nacer a la vida jurídica
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 20/06/2019, Rol Nº 680-2019,

Cita online: CL/JUR/3760/2019

2. Si se puso fin a los juicios de los que derivan las obligaciones


cobradas en autos mediante avenimiento, suscrito por apoderado a
quien el mandatario con facultades para transigir delegó poder,
procede acoger la excepción de transacción
Que los jueces del fondo dejaron de esta manera establecido que las
partes llegaron a un avenimiento que comprende la totalidad de las
acciones que emanan del contrato de compraventa, cuya acción se
intenta en estos autos, lo cual desprenden tanto de la transacción o
avenimiento suscrito entre las partes, materia de interpretación privativa
de los jueces del grado, cuanto de las facultades conferidas por el
demandante al mandatario judicial que lo llevó a cabo. Que acerca de
la primera infracción que denuncia el recurrente, esto es el artículo 7º
del Código de Procedimiento Civil, sobre el alcance de la transacción,
el demandante no ha denunciado infracción a las normas reguladoras
de la prueba que permita alterar lo establecido sobre lo que comprendió
la transacción, esto es el más amplio y completo finiquito de todas las
relaciones contractuales que las ligaban y de que las facultades
conferidas al mandatario comprendían también las de transigir, hechos
que de esta manera se asientan como inamovibles y no susceptibles de
ser alterados a través de este recurso. Que el artículo 2446 del Código
Civil, establece que la transacción es un contrato mediante el cual las
partes, haciéndose recíprocas concesiones, ponen fin
extrajudicialmente a una controversia o litigio ya iniciado entre ellos, o
precaven el nacimiento de uno eventual. La transacción importa un
contrato, pues ambas partes crean vinculaciones jurídicas por las que
se obligan recíprocamente a dar, hacer o no hacer alguna cosa, como
también un modo de extinguir obligaciones (art. 1567 Nº 3) y en ella
entonces van envueltas las concesiones recíprocas, en cuanto a la
renuncia total o parcial que hacen las partes de sus pretensiones, para
poner término a un litigio pendiente o evitar un litigio eventual, sin que
en cuanto a ellas se exija la equivalencia. El mandatario obraba,
entonces, dentro del campo de sus atribuciones, en cuanto por ellas
finalizó el litigio existente acerca de la compra de la maquinaria
vinculada a las letras de cambio que se suscribieron para el
cumplimiento del contrato, sin que se advierta limitación en el campo de
la disposición de los bienes transigidos (considerandos 3º a 5º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 7/03/2007, Rol Nº 127-2005, Cita online:


CL/JUR/386/2007

17ª La prescripción de la deuda o sólo de la acción ejecutiva; y

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 464, EXCEP. 17ª)


1. Acogimiento de la excepción principal de prescripción resta vigencia
a las opuestas en forma subsidiaria

Debido a la forma anómala como se opusieron las excepciones,


desde que el ejecutado opuso en primer lugar la de prescripción, y las
demás en subsidio, resulta obvio que al acogerse la primera, aun en
forma parcial, el tribunal no tendría que analizar y, por cierto, hacer lugar
a cualquiera de las demás, por resultar incompatibles con la
prescripción parcial acogida. Hay que destacar que, en este punto, se
produjo un error de la defensa, ya que se trastocó el orden de las
excepciones de que trata el artículo 464 del Código de Procedimiento
Civil, puesto que comenzó oponiendo la de su Nº 17, esto es, la
prescripción. Luego, en subsidio de ella, opuso la del Nº 7, y en una
segunda opción subsidiaria, la del Nº 14. Como es obvio, al acogerse la
primera de las opuestas —que con justo motivo el listado del Código la
ubicó a continuación de las que la defensa dedujo en primer lugar—,
aun de modo parcial, pierden vigencia las demás, pues se plantearon
en forma subsidiaria (consi-derando 7º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 15/03/2016, Rol Nº 9312-2015, Cita online:


CL/JUR/2034/2016

2. Tipos de cláusula de aceleración

Como reiteradamente ha sostenido la jurisprudencia de la Corte


Suprema, la denominada cláusula de aceleración puede extenderse
válidamente a través de formas verbales imperativas o facultativas, de
manera que en el primer caso, verificado el hecho del retardo o la mora,
la obligación se hará íntegramente exigible, independientemente de que
el acreedor manifieste su voluntad en orden a ejercer el derecho que le
confiere la estipulación; y, en el segundo caso, esa total exigibilidad
dependerá del hecho que el titular de la acreencia exprese su intención
de acelerar el crédito. Dicho de otro modo, la caducidad convencional
del plazo se puede producir si la cláusula está redactada en forma
facultativa, ya que si concede al beneficiario una facultad para que la
cláusula produzca sus efectos, es necesario que éste la ejerza; en
cambio, se produce la caducidad ipso facto, sin necesidad de
manifestación de voluntad adicional del acreedor, si la cláusula de
aceleración está redactada en forma imperativa (Sentencia CS Rol
Nº 3152 2015). A su vez, cabe tener presente que en el caso de que la
cláusula esté redactada en forma facultativa, se está frente a una
condición mixta, que en parte depende de la voluntad del acreedor y en
parte de la voluntad del tercero o de un acaso (incumplimiento), lo cual
es plenamente válida en nuestro ordenamiento jurídico según se colige
de lo dispuesto en los artículos 1477 y 1478 del Código Civil
(considerando 1º de la sentencia de Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 20/03/2020, Rol Nº 15027-2018,

Cita online: CL/JUR/21171/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 16/06/2020, Rol Nº 12220-2019,

Cita online: CL/JUR/37468/2020

— Corte Suprema, 15/06/2020, Rol Nº 7686-2019,

Cita online: CL/JUR/37467/2020

3. Efecto de la cláusula de aceleración

(Voto disidente) La cláusula de aceleración es el nombre que la


doctrina nacional le ha dado al pacto en virtud del cual las partes
convienen anticipar el cumplimiento de una obligación que se ha diferido
en el tiempo, en el evento que el deudor incurra en alguna de las
situaciones fácticas previamente acordadas. El efecto que genera es
que importa la caducidad del plazo que el deudor tenía para satisfacer
la deuda, lo que implica que la obligación en ese momento se hace
exigible y, por lo mismo, el acreedor puede ejercer todas las acciones
que el ordenamiento jurídico le confiere para obtener el pago íntegro de
su acreencia, debiendo, en todo caso, respetar las disposiciones que
norman la prescripción extintiva. Así las cosas, el sentido de cualquier
cláusula de aceleración no es otro sino el de hacer exigible una
obligación que se paga en cuotas, por el solo hecho de verificarse el
hecho fáctico del que se hizo pender la exigibilidad total del crédito
normalmente la mora o retardo en el pago de una de las parcialidades
en que se dividió el servicio de la deuda, como si toda la acreencia fuere
exigible, aunque no se haya producido la mora de las restantes cuotas,
siendo precisamente éste el derecho que asiste al acreedor, de poder
cobrar el total o íntegro saldo insoluto de una obligación, cualquiera sea
el enfoque facultativo o imperativo con que pueda ser interpretada la
redacción de la cláusula en discusión (considerandos 1º y 2º de la
disidencia de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 23/03/2018, Rol Nº 6082-2017, Cita online:


CL/JUR/1592/2018

4. Cláusula de aceleración redactada en términos facultativos.


Cómputo del plazo de prescripción desde que el acreedor manifiesta
inequívocamente su voluntad en orden a acelerar el crédito mediante
la presentación de la demanda

La revisión de los antecedentes permite constatar que la cláusula de


exigibilidad anticipada fue pactada en términos facultativos. Esto implica
que, tal como decidieron los sentenciadores del mérito, el plazo de
prescripción deberá contarse desde la fecha en que el acreedor exprese
su voluntad de hacerla efectiva, y, como lo ha resuelto reiteradamente
esta Corte Suprema, dicha facultad de anticipar el vencimiento se
manifiesta inequívocamente con la presentación de la demanda por el
total adeudado al sistema de distribución de causas (considerando 5º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 20/03/2019, Rol Nº 26532-2018, Cita online:


CL/JUR/1575/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 22/10/2019, Rol Nº 21345-2019,

Cita online: CL/JUR/6200/2019

— Corte Suprema, 29/01/2019, Rol Nº 24854-2018,

Cita online: CL/JUR/486/2019

— Corte Suprema, 28/08/2018, Rol Nº 12003-2018,

Cita online: CL/JUR/4795/2018


— Corte Suprema, 12/07/2018, Rol Nº 7340-2017,

Cita online: CL/JUR/3765/2018

— Corte Suprema, 26/06/2018, Rol Nº 4392-2018,

Cita online: CL/JUR/3149/2018

5. Cómputo del plazo de prescripción desde que el acreedor manifiesta


inequívoca-mente su voluntad en orden a acelerar el crédito

En la especie, la cláusula de aceleración contenida en el pagaré


materia de la ejecución se encuentra redactada en términos facultativos,
pues dicha convención envuelve una facultad para el acreedor, que sólo
se hace efectiva cuando éste manifieste inequívocamente su voluntad
en orden a caducar en forma antelada el plazo de las cuotas en que se
dividió la obligación y que aún no se habían devengado. En
consecuencia, el no pago de una de las cuotas no produjo la exigibilidad
de las cuotas siguientes y sucesivas, las que, por tanto, vencieron en
sus respectivas fechas de pago, sin que el acreedor ejerciera la cláusula
de aceleración pactada, toda vez que presentó la demanda con
posterioridad al vencimiento de la última cuota. En suma, no ha operado
la cláusula de aceleración facultativa prevista en el pagaré, venciendo
cada cuota en su respectiva fecha de pago, de modo que cada una de
ellas ha de prescribir de manera independiente. En mérito de lo
razonado, sólo era posible declarar la prescripción de las cuotas
vencidas y no pagadas cuyo vencimiento se produjo con anterioridad a
un año desde la notificación de la demanda (considerandos 8º a 10º de
la sentencia de casación).

Corte Suprema, 1/12/2016, Rol Nº 55490-2016, Cita online:


CL/JUR/7993/2016

18ª La cosa juzgada.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA (ART. 464, EXCEP. 18ª)

1. Identidad de la cosa pedida ha de buscarse en el beneficio jurídico y


no en la materialidad de las prestaciones
El Máximo Tribunal ha asentado que para determinar el objeto pedido
debe atenderse al derecho cuya tutela se pide al órgano jurisdiccional,
no resultando necesario que exista similitud completa entre las
pretensiones, sino en el provecho que se reclama. La identidad de la
cosa pedida ha de buscarse en el beneficio jurídico y no en la
materialidad de las prestaciones, sin que pueda pretenderse que sean
iguales en sustancia y accidentes. De tal forma, no siendo controvertido
que el procedimiento de liquidación forzosa se siguió entre las mismas
partes de este juicio ejecutivo, y en ambos se invocó como antecedente
la factura Nº 29 de fecha 1/04/2015, sólo cabía a los jueces del fondo
dilucidar si concurría además el requisito de identidad de cosa pedida,
cuestión que fue resuelta siguiendo el criterio jurisprudencial ya
asentado, por cuanto, a diferencia de lo que señala la ejecutante, el
beneficio jurídico inmediato que se reclama es el mismo, por cuanto en
ambos procesos se intentó el cobro ejecutivo de una obligación que
constaba en idéntico título, oponiéndose en el primero de ellos
excepciones propias del juicio ejecutivo, en el marco del procedimiento
de oposición contemplado en el Título I del Capítulo IV de la Ley
Nº 20.720, excepciones que fueron acogidas en una sentencia firme y
ejecutoriada que resulta plenamente oponibles en estos autos
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 18/05/2017, Rol Nº 10430-2017, Cita online:


CL/JUR/3182/2017

Estas excepciones pueden referirse a toda la deuda o a una parte de ella


solamente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 4º, 6º, 92, 175 al 180, 254, 303, 310,
434, 437 al 440 y 541. Código Civil: artículos 17, 1448, 1567, 1628, 1652, 1655, 1670, 1672,
2358, 2466, 2492 y 2514. Código Orgánico de Tribunales: artículos 108, 113, 114 y 178. Código
Tributario: artículo 71. Ley Nº 4.097, sobre contrato de prenda agraria: artículo 22. Ley Nº 5.687,
ley sobre contrato de prenda industrial: artículo 44. Ley Nº 7.322, sobre cobranza judicial de
imposiciones, aportes y multas de Instituciones de Previsión: artículo 5º Ley Nº 18.112, sobre
prenda sin desplazamiento: artículo 22. Ley Nº 18.168, Ley General de Telecomunicaciones:
artículo 35. Decreto con Fuerza de Ley Nº 3, 1997, Ley General de Bancos, Ministerio de
Hacienda, D.O. 19.12.1997: artículo 103. Código del Trabajo: artículo 470.

ARTÍCULO 465 (487)

Todas las excepciones deberán oponerse en un mismo escrito,


expresándose con claridad y precisión los hechos y los medios de prueba de
que el deudor intente valerse para acreditarlas. No obstará para que se
deduzca la excepción de incompetencia, el hecho de haber intervenido el
demandado en las gestiones del demandante para preparar la acción
ejecutiva.

Deducida esta excepción, podrá el tribunal pronunciarse sobre ella desde


luego, o reservarla para la sentencia definitiva.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 31, 170, 305, 306 309, 310, 341, 441,
470 y 447. Código Orgánico de Tribunales: artículo 178.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procede oponer la excepción de incompetencia una vez deducida la


demanda ejecutiva

Si bien el artículo 178 del Código Orgánico de Tribunales establece


que serán de competencia del Juez que hubiere sido designado
anteriormente las demandas en juicios que se hayan iniciado por
medidas preparatorias de la vía ejecutiva, de acuerdo al artículo 465 del
Código de Procedimiento Civil la intervención del ejecutado en la
gestión judicial previa no obsta a que pueda deducir la excepción de
incompetencia en la etapa procesal correspondiente del juicio ejecutivo,
ya que la oportunidad para oponer la excepción de incompetencia
prevista en el Nº 1 del artículo 464 del Código de Procedimiento Civil,
es precisamente una vez deducida la demanda ejecutiva
(considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/08/2018, Rol Nº 8670-2018, Cita online:


CL/JUR/4879/2018

2. Hipótesis de inadmisibilidad de las excepciones opuestas a la


ejecución

El artículo 464 del Código de Procedimiento Civil señala que la


oposición del ejecutado sólo será admisible cuando se funde en alguna
de las excepciones que allí se enumeran taxativamente.
Consecuencialmente, la inadmisibilidad radica en la circunstancia de no
ser tales excepciones de alguna de aquellas que enumera el
artículo 464 del referido cuerpo legal. Siguiendo esta misma línea de
razonamiento destaca la opinión de Mario Cassarino Viterbo, quien
sostiene que la infracción del artículo 465 del Código de Procedimiento
Civil acarrea "la pérdida del derecho del deudor para suministrar
aquellos medios de prueba que no especificó con claridad y precisión
en su escrito de excepciones". El mismo autor, al estudiar los aspectos
relativos a la admisibilidad de las excepciones a la luz de lo dispuesto
en el artículo 466 del citado código, concluye que si "las excepciones
opuestas por el ejecutado no son de las contempladas en el artículo 464
del Código de Procedimiento Civil, o si, siéndolas, han sido opuestas
fuera de plazo, el tribunal las declarará inadmisibles, debiendo dictar
desde luego sentencia definitiva". (Manual de Derecho Procesal, Tomo
V, sexta edición, año 2015, páginas 82 y 84). Luego, resulta ineludible
conclusión de que los únicos motivos en virtud de los cuales se puede
declarar la inadmisibilidad de las excepciones opuestas a la ejecución
son: 1) que no sean de aquellas contempladas en el artículo 464 del
Código de Procedimiento Civil; y 2) su extemporaneidad
(considerandos 7º a 9º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 4/09/2018, Rol Nº 7542-2018, Cita online:


CL/JUR/4901/2018

3. Preclusión del derecho a rendir prueba

El artículo 465 del Código de Procedimiento Civil es una disposición


de carácter imperativo, pues el ejecutado debe indicar en la misma
presentación los medios de prueba de que se valdrá para acreditar los
hechos fundantes de las excepciones opuestas. Por consiguiente, al
omitir el demandado cumplir con dicha carga debe entenderse que ha
operado la preclusión como consecuencia jurídico procesal —no una
sanción— en virtud de la cual se extinguió el derecho del ejecutado para
rendir prueba por no haberla ofrecido en la oportunidad legal
correspondiente (considerando 11º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 4/09/2018, Rol Nº 7542-2018, Cita online:


CL/JUR/4901/2018

4. Excepciones del ejecutado deben interponerse dentro del lapso


previsto en la ley, simultáneamente e individualizadas con precisión

Para que se pueda exigir ejecutivamente el cumplimiento de una


obligación de dar, como sucede en la especie, es indispensable que
concurran los requisitos copulativos consistentes en que la obligación
de cuyo cumplimiento se trata conste en un título al cual la ley le atribuye
mérito ejecutivo; que tal obligación sea líquida y actualmente exigible; y
que la acción ejecutiva no esté prescrita. Tales exigencias han de
concurrir al iniciarse la litis. Luego, esas exigencias están en el ámbito
de la defensa del sujeto pasivo, en cuanto no le será admisible
respaldarla en hechos o antecedentes que no existen o que, aun cuando
se anticipan, no se han producido. Por esa misma razón es que el
artículo 465 del código adjetivo impone al ejecutado la necesidad de
formular sus excepciones únicamente dentro del lapso previsto en la ley
y, simultáneamente, expresando con claridad y precisión los hechos y
los medios de prueba de que intenta valerse para acreditarlas, todo en
una misma presentación. Lo anterior queda remarcado, en lo que
incumbe a lo que se viene consignando, en el hecho de que el legislador
procesal ordena al ejecutado encaminar su defensa con las
excepciones que puntualmente están enumeradas en el artículo 464 del
referido cuerpo legal y en la oportunidad expresamente prevista con tal
objeto. Ello no es discrecional ni baladí pues a propósito de la oportuna
interposición de excepciones es posible que se abra un debate
ordenado respecto de las objeciones que el ejecutado plantea y en el
que ambas partes quedan en igualdad de posiciones para defender sus
intereses. Sobre el particular se ha dicho que "Ese medio (la excepción)
debe estar individualizado con precisión, de manera que la contraparte
tenga la información suficiente para establecer si la excepción se ajusta
a la verdad y el juez pueda en definitiva decidir si la acoge o la rechaza"
(Revista de Derecho y Jurisprudencia, T. 39; secc. 1a; pág. 14). Esa
exigencia en la formulación de las excepciones justifica además que el
citado artículo 465 le exija, asimismo, señalar los medios de prueba en
los que se apoyará para demostrarlas (considerando 3º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/04/2019, Rol Nº 19289-2018,

Cita online: CL/JUR/2000/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 12/09/2018, Rol Nº 13193-2018,

Cita online: CL/JUR/5108/2018


5. Ejecutado debe señalar en el mismo escrito en que opone las
excepciones los medios de prueba de que intente valerse para
acreditarlas. Pruebas deben ser netas y contundentes

El artículo 465 del Código de Procedimiento Civil, exige al ejecutado


que se defienda mediante la formulación de excepciones, señalar en el
mismo escrito que las oponga "los medios de prueba de que intente
valerse para acreditarlas". Allí se ve palmaria la vinculación indisoluble
ordenada por el legislador procesal civil entre la excepción de la que se
valga el ejecutado y la prueba eficaz en la demostración de su
fundamento que el mismo tendrá que rendir. Sobre el particular se ha
dicho: "Por consiguiente, si el demandado puede oponer medios de
defensa, excepciones, es decir, si pretende que las consecuencias
jurídicas de los hechos alegados se paralicen por otros hechos... es él
el que tiene que aducir las pruebas de estos medios de defensa, pues
el demandado en la excepción se convierte en actor (reus in exceptione
actor fit)". (Arturo Alessandri, Manuel Somarriva y Antonio Vodanovic,
Derecho Civil, Partes Preliminar y General. Editorial Jurídica de Chile,
2005, Tomo II, página 421). Como es evidente, las pruebas de las que
se valga el ejecutado para enervar la pretensión ejecutiva del actor
deberán ser netas y contundentes, a tal grado que permitan neutralizar
la certidumbre que, por anticipado, viene asignada por ley al título
ejecutivo esgrimido a su respecto, debiendo reunir las mismas
características si lo pretendido es que se niegue lugar a la acción de
cobro compulsivo en razón de factores ajenos al título que se esgrime
de contrario (considerando 7º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 10/07/2019, Rol Nº 18691-2018, Cita online:


CL/JUR/5781/2019

ARTÍCULO 466 (488)

Del escrito de oposición se comunicará traslado al ejecutante, dándo-sele


copia de él, para que dentro de cuatro días exponga lo que juzgue oportuno.

Vencido este plazo, haya o no hecho observaciones el demandante, se


pronunciará el tribunal sobre la admisibilidad o inadmisibilidad de las
excepciones alegadas.
Si las estima inadmisibles, o si no considera necesario que se rinda prueba
para resolver, dictará desde luego sentencia definitiva. En caso contrario,
recibirá a prueba la causa.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 31, 48, 64, 66, 148, 150, 313, 318,
468, 469, 470, 473, 474, 477 y 478.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Deber del tribunal de pronunciarse, de propia iniciativa, sobre la


admisibilidad de las excepciones trascurrido el término de cuatro días
previsto en el artículo 466 del Código de Procedimiento Civil

En este caso, el impulso procesal que permitía que el proceso


avanzara de su etapa de discusión a la de prueba recaía
exclusivamente en el tribunal de la causa, por cuanto confirió el
correspondiente traslado a la ejecutante a fin de que se pronunciara
sobre las excepciones opuestas a la ejecución por la demandada,
siendo evidente que el lapso previsto en el artículo 466 inciso 1º del
Código de Procedimiento Civil transcurrió sin que la ejecutante
evacuara el traslado que para tales efectos se le otorgó. Entonces, en
el término que acusa la incidentista, la carga de instar por la debida
prosecución del juicio dejó de estar en manos de las partes una vez
transcurrido el término señalado. En consecuencia, los litigantes se
encontraban eximidos de la carga de dar impulso al proceso en la etapa
en que se hallaba el procedimiento. Por lo tanto, ante el silencio de la
actora debió el tribunal, de propia iniciativa, pronunciarse sobre la
admisibilidad de las excepciones una vez trascurrido el término de
cuatro días previsto en el artículo 466 del Código de Procedimiento Civil
(considerandos 7º y 8º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 16/01/2019, Rol Nº 16733-2018, Cita online:


CL/JUR/232/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 12/07/2018, Rol Nº 5310-2018,

Cita online: CL/JUR/3573/2018

— Corte Suprema, 26/03/2018, Rol Nº 45304-2017,


Cita online: CL/JUR/1409/2018

— Corte Suprema, 29/01/2018, Rol Nº 36675-2017,

Cita online: CL/JUR/448/2018

ARTÍCULO 467 (489)

El ejecutante podrá sólo dentro del plazo de cuatro días que concede el
inciso 1º del artículo anterior, desistirse de la demanda ejecutiva, con reserva
de su derecho para entablar acción ordinaria sobre los mismos puntos que
han sido materia de aquélla.

Por el desistimiento perderá el derecho para deducir nueva acción


ejecutiva, y quedarán ipso facto sin valor el embargo y demás resolucio-nes
dictadas. Responderá el ejecutante de los perjuicios que se hayan causado
con la demanda ejecutiva, salvo lo que se resuelva en el juicio ordinario.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 31, 64, 66, 67, 318, 468, 469, 470,
473, 474, 477 y 478.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Institución de reserva de derechos

La institución de reserva de derechos en el juicio ejecutivo se define


como la facultad que el tribunal concede a solicitud de parte, en el juicio
ejecutivo, para que éstas puedan deducir el derecho reservado, en
forma de demanda ordinaria, sin que les afecte la cosa juzgada de la
sentencia pronunciada en aquel juicio. El objeto preciso de la reserva
de derechos es impedir que la sentencia firme pronunciada en el juicio
ejecutivo produzca cosa juzgada sustancial en el juicio ordinario
posterior (considerando 7 de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 31/01/2020, Rol Nº 19297-2018, Cita online:


CL/JUR/9978/2020

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 31/01/2018, Rol Nº 37414-2017,


Cita online: CL/JUR/518/2018

2. Desistimiento de la demanda ejecutiva deja a salvo la acción ordinaria

El artículo 467 del Código de Procedimiento Civil dispone que "el


ejecutante podrá sólo dentro del plazo de cuatro días que concede el
inciso 1º del artículo anterior, desistir de la demanda ejecutiva, con
reserva de su derecho para entablar acción ordinaria sobre los mismos
puntos que han sido materia de aquélla". Este desistimiento especial
tiene por objeto obtener la reserva de derechos para el juicio ordinario
y el juez deberá acogerlo sin más trámite y acceder a la reserva pedida.
Los efectos de este desistimiento son que el ejecutante pierde su
derecho para deducir nueva acción ejecutiva, quedan sin valor el
embargo y demás resoluciones dictadas y el actor responderá de los
perjuicios causados con la ejecución, salvo lo que se resuelva en el
juicio ordinario. De este modo, para el acreedor la acción pierde su
carácter ejecutivo quien, además, no podrá retractarse o desistirse del
mismo. Por otra parte, respecto del ejecutado, no se posibilita su
oposición y puede ejercer todos los derechos que importe el término del
juicio desde ese momento. El desistimiento del artículo 467 del Código
de Procedimiento Civil deja a salvo la acción ordinaria, la que puede ser
deducida por el acreedor en un juicio ordinario posterior. Es por tal
motivo el Máximo Tribunal, en reiteradas oportunidades, le ha atribuido
a este precepto el efecto de la cosa juzgada formal. El efecto de cosa
juzgada formal que se le atribuye al desistimiento del artículo 467 del
citado código se circunscribe, únicamente, a la posibilidad que el
legislador le otorga al acreedor para deducir la acción ordinaria. Por
consiguiente, respecto de la acción ejecutiva, el desistimiento sí
produce el efecto natural que le otorga el artículo 150, esto es, su
extinción, quedando el demandante impedido para deducir una nueva
acción ejecutiva fundada en el mismo título (considerandos 5º y 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 21/03/2018, Rol Nº 372-2018,

Cita online: CL/JUR/1394/2018

3. Improcedencia de acoger reserva de acciones conforme al 478 si


debe aplicarse el del artículo 467
En la especie, los jueces recurridos infringieron los artículos 467 y 478
del Código de Procedimiento Civil, vulneraciones que influyeron en lo
dispositivo de la sentencia recurrida, puesto que acogieron una reserva
de acciones conforme a la segunda de las indicadas disposiciones, en
circunstancias que está dispuesta para una situación ajena a la de esta
causa, toda vez que debió aplicarse la norma del artículo 467 del Código
precitado. Ante lo concluido, y para los efectos procesales pertinentes,
es útil expresar que el Máximo Tribunal ha resuelto que es procedente
el recurso de casación en el fondo por vulneración del artículo 478 antes
citado (considerando 9º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 31/01/2018, Rol Nº 37414-2017,

Cita online: CL/JUR/518/2018

4. Improcedencia de condenar en costas al ejecutante que se desiste


de la demanda ejecutiva con reserva de derechos

Ante la carencia de regulación especial para el desistimiento de la


demanda con reserva de acciones, debe aplicarse la regla general en
materia de costas, esto es, la contemplada en el artículo 144 del Código
de Procedimiento Civil, que dispone que la condena en costas será
aplicable cuando la parte sea vencida totalmente en un juicio o
incidente. Establecido lo anterior, cabe precisar que en la especie el
ejecutante no fue vencido totalmente en el juicio, ya que el actor se
desistió de la demanda, es decir, no existe una sentencia definitiva que
decida absolver a la parte ejecutada de su obligación de pago. Por
último, tampoco cabe aplicar en la especie la existencia o no del motivo
plausible para litigar, pues esto se aplica cuando el litigante ha sido
vencido totalmente, circunstancia que, como se dijo, no ocurrió en la
especie. En consecuencia, encontrándose en la situación que se ha
planteado en autos, dentro de la hipótesis que contempla el artículo 467
del Código de Procedimiento Civil, que le da el derecho a desistirse de
la demanda ejecutiva sin que le sea aplicable por el contrario las normas
del 144 y 148 y siguientes del citado Código, el ejecutante debe ser
eximido del pago de las costas del mismo (considerandos 3º a 6º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 13/06/2019, Rol Nº 261-2019,

Cita online: CL/JUR/3592/2019


5. Procedencia que el ejecutante inicie un juicio ordinario sobre los
mismos puntos materia del juicio ejecutivo

En la especie, nos encontramos en la situación prevista en el


artículo 467 del Código de Procedimiento Civil, esto es, en la reserva
que tiene exclusivamente el ejecutante, para iniciar un juicio ordinario
posterior, previo desistimiento de la demanda ejecutiva. Ejercido dicho
derecho y aceptado por el tribunal, sus consecuencias están previstas
en el inciso 2º de dicha norma. En virtud de ella, pierde el ejecutante el
derecho a iniciar un nuevo juicio ejecutivo, pero le nace el derecho, en
razón de la reserva, de iniciar un juicio ordinario sobre los mismos
puntos materia del juicio ejecutivo. Por lo tanto, es dable concluir que se
ha podido iniciar el presente juicio, por estar autorizado expresamente
por la ley, sin que exista norma alguna que prohíba la presentación de
un nuevo juicio como consecuencia de haber terminado la ejecución por
desistimiento (considerando 8º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 5/04/2016, Rol Nº 11791-2015,

Cita online: CL/JUR/2223/2016

6. Oportunidades del ejecutante para hacer efectivo el derecho de


reserva

El ejecutante tiene dos oportunidades procesales para solicitar la


reserva de sus derechos: a) El artículo 467 del Código de Procedimiento
Civil ordena que: "El ejecutante podrá, solo dentro del plazo de 4 días
que concede el inciso primero del artículo anterior, desistirse de la
demanda ejecutiva, con reserva de su derecho para entablar la acción
ordinaria sobre los mismos puntos que han sido materia de aquélla".
Este desistimiento permite reservar el derecho para accionar en un
juicio ordinario, y una vez ejercido, quedan sin valor el embargo y demás
resoluciones dictadas, no pudiendo el ejecutante deducir una nueva
acción ejecutiva y respondiendo de los perjuicios causados, salvo lo que
se resuelva en el juicio ordinario. En esta situación el ejecutante podrá
entablar su demanda ordinaria en cualquier tiempo, ya que la
disposición legal no impone un plazo dentro del cual deba ejercitarse
este derecho. b) El artículo 478 del Código de Procedimiento Civil
manda que: "Con todo, si antes de dictarse sentencia en el juicio
ejecutivo, el actor o el procesado piden que se les reserven para el
ordinario sus acciones o excepciones, podrá el tribunal declararlo así,
existiendo motivos calificados. Siempre se concederá la reserva
respecto de las acciones o excepciones que no se refieran a la
existencia de la obligación misma que ha sido objeto de la ejecución".
En esta segunda oportunidad procesal se hace necesario distinguir si la
acción reservada dice relación con la existencia misma de la obligación,
en cuyo caso el tribunal podrá acceder solo si se invocan motivos
calificados. De lo contrario, el juez siempre concederá la reserva y el
plazo para deducir la demanda ordinaria será de 15 días contados
desde la notificación de la sentencia definitiva (considerandos 5º y 6º de
la sentencia de casación).

Corte Suprema, 31/01/2020, Rol Nº 19297-2018,

Cita online: CL/JUR/9978/2020

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 7/08/2019, Rol Nº 4977-2018,

Cita online: CL/JUR/4527/2019

7. Más relevante que el desistimiento o el término de que se sirva el


ejecutante, es la manifestación de voluntad inequívoca de éste en
orden a reservarse la acción para un juicio ordinario posterior

De los antecedentes del proceso ejecutivo tramitado, es posible


constatar que, dentro del plazo para al evacuar el traslado a las
excepciones, el ejecutante hizo una presentación en los siguientes
términos: "vengo en allanarme a la excepción de prescripción opuesta
por la contraria en lo principal de su presentación, reservando el
derecho que asiste a mi representada para entablar acción ordinaria de
cobro de los documentos demandados, amparándonos en lo dispuesto
en el artículo 467 del Código de Procedimiento Civil". Del texto transcrito
se desprende, inequívocamente, que el actor ejerció la reserva de
acciones en conformidad al artículo 467 del Código de Procedimiento
Civil, situándose en la posición de entablar su demanda ordinaria en
cualquier tiempo. Y esta conclusión no puede verse alterada por la
circunstancia de haberse empleado el término allanamiento, pues si
bien la terminología es jurídicamente incorrecta, lo cierto es que el
ejecutante invocó expresamente la reserva de su derecho para accionar
por la vía ordinaria citando el artículo 467 del Código de Procedimiento
Civil, y lo hizo dentro del plazo de cuatro días contados desde que se le
confirió traslado de las excepciones opuestas. Por tanto, los juzgadores
no aplicaron el artículo 467 del Código de Procedimiento Civil, en un
caso que sí correspondía hacerlo, desconociendo la reserva de
derechos que hizo el acreedor para demandar el pago de su crédito por
la vía ordinaria (considerandos 7º y 8º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 31/01/2020, Rol Nº 19297-2018,

Cita online: CL/JUR/9978/2020

ARTÍCULO 468 (490)

Cuando haya de recibirse a prueba la causa, el término para rendirla será


de diez días.

Podrá ampliarse este término hasta diez días más, a petición del acreedor.
La prórroga deberá solicitarse antes de vencido el término legal, y correrá sin
interrupción después de éste. Por acuerdo de ambas partes, podrán
concederse los términos extraordinarios que ellas designen.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 65, 66, 67, 318, 320, 323, 327,
329, 332, 363 a 382, 430, 431, 432 y 795.

ARTÍCULO 469 (491)

La prueba se rendirá del mismo modo que en el juicio ordinario, y el fallo


que dé lugar a ella expresará los puntos sobre que deba recaer. Vencido el
término probatorio, tendrán las partes seis días para hacer por escrito las
observaciones que el examen de la prueba sugiera. Vencido este plazo,
háyanse o no presentado escritos, y sin nuevo trámite, el tribunal citará a las
partes para oír sentencia.182

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 65, 66, 67, 318, 320, 323, 327,
329, 332, 363 a 382, 430, 431, 432, 433, 795 Nº 7, 800 Nº 3.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Iniciativa del trámite de citación para oír sentencia está entregada, en
forma preeminente, al juez. Vencido el plazo para efectuar
observaciones a la prueba el demandante queda exonerado de la
carga de instar por la prosecución del juicio

La Ley Nº 18.705 estableció que el trámite de citación para oír


sentencia en el juicio ejecutivo queda entregado en su iniciativa en
forma preeminente al juez, al disponer que luego de vencido el plazo
que tienen las partes para realizar sus observaciones a la prueba,
"háyanse o no presentado escritos, y sin nuevo trámite, el tribunal citará
—a las partes— para oír sentencia" (artículo 469 del Código de
Procedimiento Civil), sustituyendo de esta forma la antigua referencia a
que vencido el término legal conferido a las partes para hacer
observaciones a la prueba, "se llevarán los autos al tribunal para dictar
sentencia definitiva". Este examen o análisis de la prueba que pueden
o no hacer las partes es análogo al que puede efectuarse en el juicio
ordinario, con la sola diferencia de que el plazo para formular estas
observaciones es de seis días, en tanto que en el juicio ordinario es de
diez. De lo anterior se concluye que los litigantes estaban eximidos de
la carga de dar impulso al proceso en la etapa en que se encuentra el
juicio por ser, precisamente, aquella que se rige por lo dispuesto en el
artículo 469 del Código de Procedimiento Civil. En consecuencia, debió
el tribunal, de propia iniciativa, citar a las partes a oír sentencia. Luego,
es doctrina de la Primera Sala de la Corte Suprema que no es
procedente el abandono del procedimiento en estadios procesales en
que el impulso y la promoción de la actividad de la causa se encuentran
radicados en el tribunal (considerandos 8º y 9º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 18/12/2018, Rol Nº 12323-2018, Cita online:


CL/JUR/6973/2018

ARTÍCULO 470 (492)

La sentencia definitiva deberá pronunciarse dentro del término de diez días,


contados desde que el pleito quede concluso.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 144, 146, 147, 162, 170, 472, 473,
477, 478, 481, 487, 488, 510, 512 y 535.
ARTÍCULO 471 (493)

Si en la sentencia definitiva se manda seguir adelante en la ejecución, se


impondrán las costas al ejecutado.

Y, por el contrario, si se absuelve al ejecutado, se condenará en las costas


al ejecutante.

Si se admiten sólo en parte una o más excepciones, se distribuirán las


costas proporcionalmente; pero podrán imponerse todas ellas al ejecutado
cuando en concepto del tribunal haya motivo fundado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 144, 146, 147, 162, 170, 472, 473,
477, 478, 481, 487, 488, 510, 512 y 535. Ley Nº 17.322, sobre Cobranza Judicial de
Imposiciones, Aportes y Multas de Instituciones de Previsión: artículo 5º.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Condena en costas no reviste el carácter de sentencia definitiva.


Improcedencia de impugnar la condena en costas mediante recurso
de casación en el fondo

En relación a la denuncia de infracción al artículo 471 del Código de


Procedimiento Civil que, como ha reiterado uniformemente la doctrina y
la jurisprudencia de la Corte Suprema, la condena en costas no reviste
el carácter de sentencia definitiva, pues se trata de una medida de orden
económico que no forma parte del asunto controvertido. En efecto, la
circunstancia de que esa decisión se contenga en la misma sentencia
definitiva, sólo responde a un imperativo legal, sin que por tal motivo
participe de su naturaleza jurídica. Establecida la naturaleza de la
resolución que se pronuncia sobre las costas, cabe recordar que el
recurso de casación en el fondo procede contra las sentencias
definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar el día de la vista de
la causa. Pues bien, lo impugnado en el presente arbitrio, en lo que se
refiere a la condena de las costas, no presenta las características de
aquellas aludidas en los párrafos anteriores, toda vez que no ha puesto
fin a la instancia, ni tampoco ha concluido el juicio ni hace imposible su
prosecución, lo que impide que el recurso de casación pueda prosperar
(considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 20/02/2020, Rol Nº 5576-2019,

Cita online: CL/JUR/11067/2020

2. Desistimiento que pone término a la causa, por lo que parte


ejecutante no ha resultado vencida. Improcedencia de condena en
costas

El artículo 467 del Código de Procedimiento Civil manda "El


ejecutante podrá sólo dentro del plazo de cuatro días que concede el
inciso primero del artículo anterior, desistirse de la demanda ejecutiva,
con reserva de sus derechos para entablar acción ordinaria sobre los
mismos puntos que han sido materia de aquella (...)". Y en su inciso final
dispone: "Responderá el ejecutante de los perjuicios que se hayan
causado con la demanda ejecutiva, salvo lo que se resuelva en el juicio
ordinario". De lo establecido en la referida norma y en relación con la
situación de estos autos, resulta que no le es aplicable la disposición
prevista en el artículo 471 del Código antes citado, toda vez que ella se
refiere a litigios en que se ha dictado sentencia definitiva, por haberse
opuesto las excepciones correspondientes, vale decir, ha existido
oposición por parte del ejecutado. De tal modo, que el fallo mandará
seguir adelante con la ejecución o por el contrario absolverá al
ejecutado. En el caso en cuestión aquello no ocurre, el desistimiento
presentado pone término a la causa, pero no resuelve la cuestión
controvertida. Así las cosas, se debe aplicar la regla general en materia
de costas, prevista en el artículo 144 del Código de Procedimiento Civil,
que dispone que la condena en costas será impuesta, cuando la parte
sea vencida totalmente en el juicio o en un incidente. De esta forma, en
este procedimiento la parte ejecutante no ha resultado vencida, sino que
se ha desistido de la acción, por ende, no existe sentencia definitiva que
haya absuelto al ejecutado de la obligación que motivó la presentación
de la demanda. Y, por otra parte, la resolución del a quo acogió el
desistimiento en los términos planteados, así como también la reserva
de acciones impetrada. En consecuencia, la situación de autos
corresponde a la hipótesis contemplada en el artículo 467 del Código
de Procedimiento Civil, por lo que, en consecuencia, el ejecutante debe
ser eximido del pago de las costas de la causa (considerandos 2º a 6º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones, 15/03/2019, Rol Nº 227-2019,

Cita online: CL/JUR/1484/2019

3. Regla de condenación en costas en juicio ejecutivo es absoluta y


obligatoria. No permite eximir al ejecutante de ellas, aun en el evento
de haberse rechazado una de las excepciones opuestas

La regla consagrada en el inciso 2º del artículo 471 del Código de


Procedimiento Civil es absoluta y no reconoce excepciones. Tampoco
permite la aplicación al juicio ejecutivo de los casos de exención
contemplados en los artículos 144 y siguientes del Código de
Procedimiento Civil. La condenación en costas al ejecutante es
obligatoria. "La norma sobre condenación en costas en el juicio
ejecutivo, que contiene el artículo 471 del C.P.C., es absoluta, ya que
no permite eximir al ejecutante de ellas, aun en el evento de haberse
rechazado una de las excepciones opuestas" (Raúl Espinosa Fuentes,
Manual de Procedimiento Civil. El juicio ejecutivo. Undécima edición,
Editorial Jurídica de Chile, 2006, páginas 127 y 128) (considerando 9º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 24/01/2013, Rol Nº 1287-2012,

Cita online: CL/JUR/9803/2011

4. Improcedencia de condenar en costas al ejecutante que no fue


vencido totalmente en el juicio

Ante la carencia de regulación especial para el desistimiento de la


demanda con reserva de acciones, debe aplicarse la regla general en
materia de costas, esto es, la contemplada en el artículo 144 del Código
de Procedimiento Civil, que dispone que la condena en costas será
aplicable cuando la parte sea vencida totalmente en un juicio o
incidente. Establecido lo anterior, cabe precisar que en la especie el
ejecutante no fue vencido totalmente en el juicio, ya que el actor se
desistió de la demanda, es decir, no existe una sentencia definitiva que
decida absolver a la parte ejecutada de su obligación de pago. Por
último, tampoco cabe aplicar en la especie la existencia o no del motivo
plausible para litigar, pues esto se aplica cuando el litigante ha sido
vencido totalmente, circunstancia que, como se dijo, no ocurrió en la
especie. En consecuencia, encontrándose en la situación que se ha
planteado en autos, dentro de la hipótesis que contempla el artículo 467
del Código de Procedimiento Civil, que le da el derecho a desistirse de
la demanda ejecutiva sin que le sea aplicable por el contrario las normas
del 144 y 148 y siguientes del citado Código, el ejecutante debe ser
eximido del pago de las costas del mismo (considerandos 3º a 6º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 13/06/2019, Rol Nº 261-2019,

Cita online: CL/JUR/3592/2019

5. Ejecutante que se desistió de la demanda, reservándose la acción.


Improcedencia de condenar en costas a ejecutante si ejecutada no ha
sido absuelta

El recurso de apelación se funda en que la ejecutada no ha sido


absuelta, de modo que no procede el pago de las costas por la
ejecutante, atento lo señalado por el artículo 471 del Código de
Procedimiento Civil. Efectivamente, el inciso 2º del artículo 471 dispone
que se condenará en costas a la ejecutante si se absuelve a la
ejecutada. Sin embargo, como se señaló, la ejecutante hizo uso del
derecho que le confiere el artículo 467 del Código de Procedimiento
Civil, de manera que la ejecutada no ha sido absuelta y, por lo mismo,
no es procedente que se condene al pago de las costas a la ejecutante.
Confirma lo anterior el tenor del artículo 144 del Código de
Procedimiento Civil que dispone en su inciso 1º: "La parte que sea
vencida totalmente en un juicio o en un incidente, será condenada al
pago de las costas". De acuerdo con lo ya expresado, la ejecutante no
ha sido totalmente vencida sino que ha puesto fin al juicio ejecutivo
ejerciendo el derecho que le otorga el artículo 467 del Código de
Procedimiento Civil (considerandos 2º a 4º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 4/12/2019, Rol Nº 1094-2019,

Cita online: CL/JUR/12163/2019


ARTÍCULO 472 (494)

Si no se oponen excepciones, se omitirá la sentencia y bastará el


mandamiento de ejecución para que el acreedor pueda perseguir la
realización de los bienes embargados y el pago, de conformidad a las
disposiciones del procedimiento de apremio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 144, 146, 147, 162, 170, 472, 472,
477, 478, 481, 487, 488, 510, 512 y 535.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. En la etapa de cumplimiento incidental del fallo procede aplicar la


norma de abandono del procedimiento del art. 153 del Código de
Procedimiento Civil. Plazo para declarar el abandono del
procedimiento es de tres años contados desde la fecha de la última
gestión útil, hecha en el procedimiento de apremio

Cabe señalar que la jurisprudencia y doctrina mayoritaria es de


opinión de que el artículo 152 del Código de Procedimiento Civil, prevé
el abandono del procedimiento para el caso de los juicios declarativos y
el artículo 153 del mismo texto legal, la establece para los juicios
ejecutivos, según su claro tenor literal en este último caso, normas que
se ubican en el Libro I, Título XVI, del Código de Procedimiento Civil.
Por otra parte, en el mismo Libro I del Código recién mencionado, en su
Título XIX se regula la ejecución de las resoluciones, otorgándose la
posibilidad de exigir el cumplimiento ante el mismo tribunal que dictó la
resolución o a través de la iniciación de un nuevo juicio. Por
consiguiente, coincidiendo con la jurisprudencia mayoritaria, debe
concluirse que la etapa de cumplimiento incidental del fallo corresponde
a un procedimiento ejecutivo y, por ende, es dable aplicar la norma
contenida en el artículo 153 del Código de Procedimiento Civil, que
establece: "El abandono podrá hacerse valer sólo por el demandado,
durante todo el juicio y hasta que se haya dictado sentencia ejecutoriada
en la causa". "En los procedimientos ejecutivos el ejecutado podrá,
además, solicitar el abandono del procedimiento, después de
ejecutoriada la sentencia definitiva o en el caso del artículo 472. En
estos casos, el plazo para declarar el abandono del procedimiento será
de tres años contados desde la fecha de la última gestión útil, hecha en
el procedimiento de apremio, destinado a obtener el cumplimiento
forzado de la obligación, luego de ejecutoriada la sentencia definitiva o
vencido el plazo para oponer excepciones, en su caso. En el evento que
la última diligencia útil sea de fecha anterior, el plazo se contará desde
la fecha en que quedó ejecutoriada la sentencia definitiva o venció el
plazo para oponer excepciones. En estos casos, si se declara el
abandono del procedimiento sin que medie oposición del ejecutante,
éste no será condenado en costas" (considerandos 3º y 4º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 24/07/2019, Rol Nº 2253-2019,

Cita online: CL/JUR/4266/2019

2. Sentencia de condena posee la naturaleza de sentencia ficta

Al no haber opuesto excepciones el ejecutado, hace las veces de


sentencia de condena, el mandamiento referido, atendida la innecesaria
dictación de alguna otra determinación, motivo por el cual precisamente
la doctrina la ha llamado "sentencia ficta", por cuanto tiene el carácter
de una resolución definitiva, en razón de no haber existido oposición del
deudor y reviste la autoridad de cosa juzgada, tanto en el juicio ejecutivo
en que incide, cuanto respecto de cualquier otro juicio en que se discuta
la misma cuestión (considerando 7º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 19/11/2008, Rol Nº 2665-2007, Cita online:


CL/JUR/7770/2008

3. Voto disidente: Excepciones opuestas en forma deficiente. Ejecutado


que ha incumplido la regularidad procesal. Abandono del
procedimiento promovido en el intertanto. Ejecutado que no puede
aprovecharse de su propio dolo

En el caso de autos es el ejecutado quien ha incumplido la regularidad


procesal, de modo que toda sanción procesal debe ser a su respecto, y
el demandante hizo lo que le era exigible. La consecuencia de lo anterior
es que el ejecutante no debe ser sancionado, la torpeza ha estado de
la mano del deudor demandado y éste no puede aprovecharse de su
propio dolo. Al ser notificado el ejecutado de la deficiencia al oponer las
excepciones a la ejecución, procedía hacer efectivo el apercibimiento y
tener por no opuestas las excepciones, pero no afectar el cumplimiento
forzado de la obligación del acreedor, dando lugar al incidente de
abandono promovido en el intertanto. Ante tales antecedentes y no ser
útil la oposición, se producen los efectos previstos en el artículo 472 del
Código de Procedimiento Civil, conforme lo sostiene el actor y con error
de derecho resuelven en sentido contrario los jueces de la instancia,
con influencia substancial en lo dispositivo, puesto que un incidente de
abandono del procedimiento que debió ser rechazado, todo lo contrario,
fue acogido (considerandos 2º y 3º de la disidencia de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 3/01/2018, Rol Nº 7132-2017, Cita online:


CL/JUR/645/2018

4. Cobro ejecutivo de obligaciones tributarias. Procedencia del


abandono del procedimiento en el procedimiento de cobro ejecutivo
de obligaciones tributarias

Las gestiones realizadas por el ejecutante después de ejecutoriada la


sentencia definitiva —o en el caso del artículo 472— resultaron inocuas
para obtener el remate de los bienes embargados; muy por el contrario,
con ellas queda en evidencia la dilación excesiva de la sustanciación
del procedimiento de apremio seguido en contra de la ejecutada, lo que
no puede sino ser entendido como un estado de inactividad en los
términos exigidos por el legislador en el artículo 153 inciso 2º del Código
de Procedimiento Civil, dado que la demandante en un período superior
a los tres años, se limitó únicamente a solicitar el desarchivo de la causa
y a notificar por cédula al demandado de conformidad con el artículo 52
del Código precitado, diligencias que no fueron de utilidad para obtener
la realización de los bienes embargados, razón por la cual corresponde
declarar el abandono del procedimiento (considerando 4º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valdivia, 21/10/2016, Rol Nº 589-2016,

Cita online: CL/JUR/7971/2016

ARTÍCULO 473 (495)

Si, deduciendo el ejecutado oposición legal, expone en el mismo acto que


no tiene medios de justificarla en el término de prueba, y pide que se le
reserve su derecho para el juicio ordinario y que no se haga pago al acreedor
sin que caucione previamente las resultas de este juicio, el tribunal dictará
sentencia de pago o remate y accederá a la reserva y caución pedidas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 65, 158, 253, 465, 475 y 478.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Oportunidades en que el ejecutado puede hacer reserva de sus


excepciones

Respecto a la reserva solicitada por el demandado, el legislador


estableció dos oportunidades para efectuar tal petición, a las cuales
aluden los artículos 473 y 478, respectivamente, del Código de
Procedimiento Civil. De conformidad al artículo 473 mencionado, el
ejecutado para hacer uso de su derecho, deberá oponer excepciones y
solicitar la reserva de ellas en el mismo escrito en que las opone. En
consecuencia, para que se entienda verificada la oposición legal a que
se refiere el artículo 473 mencionado, basta que el ejecutado anuncie la
excepción o excepciones que tenga contra la ejecución,
correspondiendo, que, cumplidos los presupuestos a que se ha hecho
mención, el tribunal dicte sin más trámite sentencia de pago o de remate
y acceda a la reserva y caución pedidas, sin que sea pertinente emitir
pronunciamiento sobre ella. Sobre el instituto en referencia, la
jurisprudencia ha señalado: "El artículo 495 (actual 473) del Código de
Procedimiento Civil tiende a resguardar para el futuro los derechos que
asistirían al deudor para excusarse del pago que se le cobra, por medio
de la excepción que oportunamente deja formulada y cuyo
establecimiento o legalidad no puede justificar desde luego, sea por la
brevedad del procedimiento ejecutivo o por otras razones atendibles, de
ello se sigue que la excepción se formula únicamente en resguardo de
un derecho a discutirse y resolverse en juicio separado, pero no para
someterla a decisión en el fallo del juicio ejecutivo. Así se explica que la
citada disposición ordene que, formulada la correspondiente reserva de
derechos para el juicio ordinario, el tribunal dictará sentencia de pago o
de remate y accederá a la reserva y caución pedidas" (considerandos 5º
y 6º de la sentencia de la Corte Suprema). La mencionada reserva bien
puede formularse sólo sobre una parte de la deuda, como se ha
planteado en el caso en análisis, habida consideración a que el
artículo 464 del Código de Procedimiento Civil, luego de señalar que la
oposición del ejecutado sólo será admisible cuando se funde en alguna
de las excepciones que allí se mencionan, finaliza indicando
expresamente que: "Estas excepciones pueden referirse a toda la
deuda o a una parte de ella solamente". Luego, resulta inconcuso, que
el legislador ha permitido que el demandado oponga a la ejecución las
excepciones contempladas en el artículo 464 del Código aludido, ya sea
en relación con el total de la deuda o sólo una parte de ella, de modo
que si no existe norma alguna que prohíba al ejecutado hacer uso de la
reserva de derechos prevista en el artículo 473 del Código de
Procedimiento Civil en forma parcial, no se divisa razón alguna para que
—siguiendo el mismo razonamiento utilizado para la formulación de las
excepciones— se permita que tal reserva recaiga únicamente sobre una
parte del crédito (considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).
En la especie no solo era "deseable" que el juez de primera instancia se
pronunciara en su fallo sobre la reserva solicitada y la petición de
caución formulada por la demandada, sino que constituía un imperativo
legal emitir pronunciamiento a ese respecto, ya que, de otro modo, no
es posible dar aplicación a lo previsto en el artículo 473 del Código de
Procedimiento Civil. Y así, la omisión en que incurre el fallo sobre esta
materia indudablemente ha vulnerado el derecho a defensa de la
ejecutada (considerando 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/12/2019, Rol Nº 21782-2018, Cita online:


CL/JUR/11749/2019

2. Excepción al principio dispositivo

Debe considerarse que el artículo 473 del Código de Procedimiento


Civil constituye una excepción al principio dispositivo que contempla
como regla general dicho cuerpo legal para la tramitación de los juicios.
En efecto, la norma señala expresamente que, efectuada la reserva de
derechos para el juicio ordinario por el deudor, "el tribunal dictará
sentencia de pago o remate y accederá a la reserva o caución pedidas",
de forma tal que le impone una obligación de dictar dichas resoluciones.
Lo anterior encuentra su basamento lógico en que la actuación
desplegada por el deudor en el juicio ejecutivo constituye una mera
reserva para la discusión en un juicio diverso al que se lleva actualmente
por el tribunal, sin que se continúe la tramitación del cuaderno principal
al no haberse planteado una contienda efectiva. Luego, no correspondía
que la carga de continuación del proceso residiera en el ejecutante, toda
vez que era el tribunal quien debía dar curso a la certificación,
exigiéndola del receptor, para luego, a continuación, dictar la respectiva
sentencia, sin que exista una carga procesal de la parte
(considerando 5º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 31/05/2018, Rol Nº 42453-2017, Cita online:


CL/JUR/2556/2018

3. Reserva de acciones y excepciones constituye una excepción a la


cosa juzgada. Reserva de excepciones constituye una facultad
procesal del ejecutado. Reserva de excepciones no constituye un
trámite esencial. Causal de casación en la forma de omisión de un
trámite esencial, rechazada

La reserva de acciones y excepciones es una institución que tiene


como fin evitar que la sentencia ejecutiva produzca cosa juzgada
respecto de determinadas acciones y excepciones, las que pueden
discutirse en un juicio declarativo, evitando la aplicación de lo previsto
en el artículo 175 del Código de Procedimiento Civil, que dispone que
"la sentencia definitiva firme recaída en el juicio ejecutivo produce la
acción y excepción de cosa juzgada", regla que es repetida por el
artículo 478 inciso 1º del mismo Código, que indica: "La sentencia
recaída en el juicio ejecutivo produce cosa juzgada en el juicio ordinario,
tanto respecto del ejecutante como del ejecutado". De este modo, el
instituto procesal en comento constituye una excepción al efecto antes
anotado consistente en que se permite tanto al ejecutante como al
ejecutado hacer reserva de sus acciones y excepciones en los casos y
oportunidades regulados en el mismo procedimiento ejecutivo. El
legislador ha establecido dos oportunidades para que el ejecutado
pueda hacer reserva de sus excepciones: la primera está contemplada
en el artículo 473, al oponer excepciones y en el mismo escrito, por
carecer de medios de prueba para justificarlas, caso en el cual el tribunal
debe dictar sentencia de pago o remate y acceder a la reserva y caución
pedida, generándose el derecho del ejecutado a deducir demanda
ordinaria ejercitando los mismos derechos que invocó como
fundamentos de sus excepciones, no pudiendo pagarse al acreedor sin
que caucione previamente las resultas del juicio ordinario que va a
entablar el deudor, el que tiene el plazo de quince días para hacerlo,
contados desde la notificación de la sentencia definitiva o desde la del
cúmplase de la de segunda instancia, si se hubiere deducido algún
recurso, procediendo si no lo hace la ejecución de la sentencia del juicio
ejecutivo, sin previa caución. A la segunda se refiere el artículo 478
inciso 2º, la que debe formularse antes de dictarse sentencia y existir
motivos calificados, caso en que la demanda ordinaria deberá
interponerse en el plazo antes señalado, bajo sanción de no ser
admitida después (considerando 3º de la sentencia de la Corte
Suprema).

De lo antedicho se desprende que la reserva de acciones y


excepciones se refiere a situaciones que tienen que ver con la cosa
juzgada que producen las sentencias ejecutivas y la posibilidad que
contempla la ley en favor, en este caso, del ejecutado de interponer
demanda ordinaria, alegando hechos o ejercitando los mismos
derechos que invocó en el juicio ejecutivo, sin que pueda el ejecutante
luego en el juicio de lato conocimiento invocar dicho efecto. Se
manifiesta así como una facultad procesal que la parte puede o no
ejercer, sujetándose a las consecuencias que de ello derivan, pero en
ningún caso puede concluirse que constituya un presupuesto cuya
omisión prive al ejecutante de la posibilidad de accionar por la vía
ordinaria, ni menos que la omisión de la reserva de excepciones
constituya un trámite o diligencia esencial por cuyo defecto las leyes
prevengan expresamente que hay nulidad. Por otra parte, atendida la
tramitación y estado del juicio ejecutivo y ordinario a los que se ha hecho
mención, no es posible invocar el efecto de cosa juzgada o
preeminencia del primero sobre el segundo (considerando 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 24/04/2017, Rol Nº 100690-2016,

Cita online: CL/JUR/2467/2017

ARTÍCULO 474 (496)

Si, en el caso del artículo precedente, no entabla el deudor su de-manda


ordinaria en el término de quince días, contados desde que se le notifique la
sentencia definitiva, se procederá a ejecutar dicha sentencia sin previa
caución, o quedará ésta ipso facto cancelada, si se ha otorgado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 65, 158, 253, 465, 475 y 478.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Acción ejecutiva hipotecaria. Improcedencia de continuar con el
procedimiento ejecutivo, habiéndose decretado la reserva de
excepciones, mientras el ejecutante no caucionare las resultas

Lleva razón el apelante al sostener que no podía el ejecutante


continuar con el procedimiento compulsivo mientras no caucionare las
resultas, por encontrarse pendiente el plazo de quince días para intentar
la demanda ordinaria en que se debe discutir la excepción de concesión
de esperas que fuere reservada por resolución ejecutoriada
(considerando 8º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 9/09/2016, Rol Nº 1901-2015,

Cita online: CL/JUR/7360/2016

ARTÍCULO 475 (497)

Si se interpone apelación de la sentencia de pago, no podrá procederse a


la ejecución de esta sentencia, pendiente el recurso, sino en caso que el
ejecutante caucione las resultas del mismo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 174, 192, 194, 231, 473, 481, 486,
488, 510, 512 y 814.

ARTÍCULO 476 (498)

Derogado.183

ARTÍCULO 477 (499)

La acción ejecutiva rechazada por incompetencia del tribunal, incapacidad,


ineptitud del libelo o falta de oportunidad en la ejecución, podrá renovarse con
arreglo a los preceptos de este Título.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 175, 176, 177, 464, 467,473 y 474.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Posibilidad de renovar su acción en un juicio declarativo cuando la
demanda ejecutiva anterior ha sido rechazada por falta de
oportunidad en la ejecución

El artículo 478 del Código de Procedimiento Civil, señala que la


sentencia firme y ejecutoriada dictada en un juicio ejecutivo, produce
para ejecutante y ejecutado el efecto de cosa juzgada en relación con
aquellos otros en que exista la triple identidad que exige la ley. Sin
embargo, conforme viene resuelto, este aserto admite excepciones
cuando sin haber efectuado el ejecutante reserva de acciones subiste
para él, de conformidad con el artículo 477 del Código de Procedimiento
Civil, la posibilidad de renovar su acción en un juicio declarativo cuando
la demanda ejecutiva anterior ha sido rechazada por falta de
oportunidad en la ejecución, excepción no contemplada en el
artículo 464 del mismo y que comprende todos los casos en que la
ejecución no ha sido posible por razones formales, que fue lo ocurrido
en el juicio ejecutivo entre las mismas partes en el que se acogió la
excepción de falta de requisitos o condiciones para que el título tuviera
mérito ejecutivo, sin existir pronunciamiento sobre la existencia de la
obligación. La Corte Suprema ha resuelto que la excepción de falta de
oportunidad de la ejecución "no sólo se refiere al tiempo, sino también,
a los demás requisitos externos que debe reunir el título para tener el
mérito ejecutivo y que puedan ser subsanados por los medios que la ley
indica, puesto que la palabra oportunidad, conforme su sentido natural
y obvio, significa conveniencia de razón, tiempo y es oportuno lo que se
hace o sucede en tiempo a propósito y cuando conviene" (C. Suprema
R.D.J. tomo XXI, sec. 1ª, p. 1, pág. 181. Proceso Ejecutivo José
Quezada) (considerando 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema, 6/06/2018, Rol Nº 10249-2017, Cita online:


CL/JUR/2650/2018

2. Renovación de la acción ejecutiva

Además, lo anterior debe relacionarse con la llamada renovación de


la acción ejecutiva, dispuesta en el artículo 477 del Código de
Procedimiento Civil, conforme a la cual "la acción ejecutiva rechazada
por incompetencia del tribunal, incapacidad, ineptitud del libelo o falta
de oportunidad en la ejecución, podrá renovarse con arreglo a los
preceptos de este Título", pues la decisión del fallo recaído en el
proceso ejecutivo anterior es subsumible en la última de las hipótesis
que contempla la mencionada norma, lo que lleva a concluir la
procedencia del ejercicio de la nueva acción en el actual juicio ejecutivo
(considerando 10º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 8/05/2019, Rol Nº 5486-2018, Cita online:


CL/JUR/2454/2019

3. Artículo 477 del Código de Procedimiento Civil, constituye una


excepción al principio de que la sentencia recaída en el juicio ejecutivo
produce cosa juzgada en un nuevo juicio ejecutivo

En relación a la pertinencia de esa segunda decisión cabe remitirse a


lo preceptuado en el artículo 477 del Código de Procedimiento Civil que
prescribe: "La acción ejecutiva rechazada por incompetencia del
tribunal, incapacidad, ineptitud del libelo o falta de oportunidad en la
ejecución, podrá renovarse con arreglo a los preceptos de este Título".
De acuerdo al Diccionario de la RAE "renovar" en su primera acepción
significa "hacer como de nuevo algo, o volverlo a su primer estado",
entendiéndose así que "renovar" es hacer de nuevo una cosa o
empezarla de nuevo. La doctrina ha sostenido que dicha disposición
importa una excepción al principio de que la sentencia recaída en el
juicio ejecutivo produce cosa juzgada en un nuevo juicio ejecutivo,
"puesto que se permite que una acción ejecutiva rechazada pueda
promoverse nuevamente", lo que encuentra justificación en que se trata
de excepciones de carácter dilatorio, de manera que subsanados los
defectos "parece lógico y justo que la ejecución pueda renovarse..."
(Mario Casarino Viterbo, Derecho Procesal Civil, T. V, sexta edición,
pág. 103). En el mismo sentido Raúl Espinoza Fuentes: "es natural que
una vez subsanado el vicio en que se fundaba la excepción dilatoria, el
actor pueda renovar su demanda ejecutiva" (El Juicio Ejecutivo,
undécima edición, pág. 131) (considerando 4º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones de Concepción).

Corte de Apelaciones de Concepción, 26/06/2012, Rol Nº 225-2012,

Cita online: CL/JUR/1203/2012

ARTÍCULO 478 (500)


La sentencia recaída en el juicio ejecutivo produce cosa juzgada en el juicio
ordinario, tanto respecto del ejecutante como del ejecutado.

Con todo, si antes de dictarse sentencia en el juicio ejecutivo, el actor o el


procesado piden que se les reserven para el ordinario sus acciones o
excepciones, podrá el tribunal declararlo así, existiendo motivos calificados.
Siempre se concederá la reserva respecto de las acciones y excepciones que
no se refieran a la existencia de la obligación misma que ha sido objeto de la
ejecución 182

En los casos del inciso precedente, la demanda ordinaria deberá


interponerse dentro del plazo que señala el artículo 474, bajo pena de no ser
admitida después.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 175, 176, 177, 464, 467, 473 y 474.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Finalidad de la reserva de acciones y excepciones. Oportunidades en


que el ejecutado puede hacer reserva de sus excepciones

La institución de reserva de derechos en el juicio ejecutivo se define


como aquella facultad que, a solicitud de parte, concede el tribunal para
que éstas puedan deducir el derecho reservado en forma de demanda
ordinaria. El objeto preciso de la reserva es impedir que la sentencia
firme pronunciada en el juicio ejecutivo produzca cosa juzgada
sustancial en el juicio ordinario posterior. El ejecutante tiene dos
oportunidades procesales para solicitar la reserva de sus derechos:
a) El artículo 467 del Código de Procedimiento Civil ordena que: "El
ejecutante podrá, solo dentro del plazo de 4 días que concede el inciso
primero del artículo anterior, desistirse de la demanda ejecutiva, con
reserva de su derecho para entablar la acción ordinaria sobre los
mismos puntos que han sido materia de aquélla". Este desistimiento
permite reservar el derecho para accionar en un juicio ordinario, y una
vez ejercido, quedan sin valor el embargo y demás resoluciones
dictadas, no pudiendo el ejecutante deducir una nueva acción ejecutiva
y respondiendo de los perjuicios causados, salvo lo que se resuelva en
el juicio ordinario. En esta situación el ejecutante podrá entablar su
demanda ordinaria en cualquier tiempo, ya que la disposición legal no
impone un plazo dentro del cual deba ejercitarse este derecho. b) El
artículo 478 del Código de Procedimiento Civil manda que: Con todo, si
antes de dictarse sentencia en el juicio ejecutivo, el actor o el procesado
piden que se les reserven para el ordinario sus acciones o excepciones,
podrá el tribunal declararlo así, existiendo motivos calificados. Siempre
se concederá la reserva respecto de las acciones o excepciones que no
se refieran a la existencia de la obligación misma que ha sido objeto de
la ejecución". En esta segunda oportunidad procesal se hace necesario
distinguir si la acción reservada dice relación con la existencia misma
de la obligación, en cuyo caso el tribunal podrá acceder solo si se
invocan motivos calificados. De lo contrario, el juez siempre concederá
la reserva y el plazo para deducir la demanda ordinaria será de 15 días
contados desde la notificación de la sentencia definitiva
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 31/01/2020, Rol Nº 19297-2018, Cita online:


CL/JUR/9978/2020

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 7/08/2019, Rol Nº 4977-2018,

Cita online: CL/JUR/4527/2019

2. Reserva prevista en el artículo 478 del Código de Procedimiento Civil


debe necesariamente corresponder a una acción ordinaria que pueda
o deba dar origen a una excepción de cosa juzgada

La institución de reserva de derechos en el juicio ejecutivo se define


como la facultad que el tribunal concede a solicitud de parte, en el juicio
ejecutivo, para que éstas puedan deducir el derecho reservado, en
forma de demanda ordinaria, sin que les afecte la cosa juzgada de la
sentencia pronunciada en aquel juicio. El objeto preciso de la reserva
de derechos es impedir que la sentencia firme pronunciada en el juicio
ejecutivo produzca cosa juzgada sustancial en el juicio ordinario
posterior. Así las cosas, forzoso es concluir que la reserva efectuada
por el actor en el juicio ejecutivo, que es la prevista en el artículo 478
del Código de Procedimiento Civil, que fue aceptada por el tribunal en
la sentencia correspondiente, y acerca de la cual se fijó plazo para la
interposición de la acción reservada, debe necesariamente
corresponder a una acción ordinaria que pueda o deba dar origen a una
excepción de cosa juzgada y no a otra que no lo haga, no teniendo el
carácter primeramente señalado la ejercida en este pleito
(considerando 7º de la sentencia de casación).
Corte Suprema, 31/01/2018, Rol Nº 37414-2017, Cita online:
CL/JUR/518/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 26/12/2018, Rol Nº 1359-2018,

Cita online: CL/JUR/7067/2018

3. Improcedencia de acoger reserva de acciones conforme al 478 si


debe aplicarse el del artículo 467, ambos del Código de
Procedimiento Civil

En la especie, queda en evidencia que los jueces recurridos, al


resolver como lo hicieron, infringieron los artículos 467 y 478 del Código
de Procedimiento Civil, vulneraciones que influyeron en lo dispositivo de
la sentencia recurrida, puesto que acogieron una reserva de acciones
conforme a la segunda de las indicadas disposiciones, en circunstancias
que está dispuesta para una situación ajena a la de esta causa, toda
vez que debió aplicarse la norma del artículo 467 del Código precitado.
Ante lo concluido, y para los efectos procesales pertinentes, es útil
expresar que este máximo tribunal ha resuelto que es procedente el
recurso de casación en el fondo por vulneración del artículo 478 antes
citado (RDJ, tomo 32, sec. 1a, pág. 326). En el mismo sentido ha sido
resuelto en la causa rol Nº 6267-12 de este tribunal (considerando 9º de
la sentencia de casación).

Corte Suprema, 31/01/2018, Rol Nº 37414-2017, Cita online:


CL/JUR/518/2018

4. Improcedencia de exigir a la ejecutante haber formulado reserva de


derechos para deducir la acción ordinaria que corresponde a un
procedimiento nuevo y distinto

La Corte Suprema ha resuelto que la excepción de falta de


oportunidad de la ejecución "no sólo se refiere al tiempo, sino también,
a los demás requisitos externos que debe reunir el título para tener el
mérito ejecutivo y que puedan ser subsanados por los medios que la ley
indica, puesto que la palabra oportunidad, conforme su sentido natural
y obvio, significa conveniencia de razón, tiempo y es oportuno lo que se
hace o sucede en tiempo a propósito y cuando conviene" (C. Suprema.
R.D.J., tomo XXI sec. 1ª, p. 1, pág. 181, Proceso Ejecutivo José
Quezada). En consecuencia, la situación excepcional anterior, se
produce porque el rechazo de la acción ejecutiva lo fue por el
incumplimiento de ciertos requisitos formales del título —que fue la
razón para rechazar la ejecución intentada en el juico ejecutivo anterior
entre las partes— que no incide en el fondo de la cuestión debatida,
esto es, no se relacionan con la obligación cuyo pago se persigue en un
juicio declarativo. Por ello, la sentenciadora no yerra cuando desestimó
la defensa de los demandados que fundaron en la existencia de cosa
juzgada por no haber hecho la demandante reserva de derecho para
entablar acción ordinaria de conformidad con lo dispuesto en los
artículos 467 y 468 del Código de Procedimiento Civil. Sobre el
particular, la Corte Suprema ha señalado que: "Resulta improcedente
exigir a la actora haber formulado reserva de derechos para deducir la
acción ordinaria, por cuanto ésta en nada se relaciona con el juicio
ejecutivo ventilado con anterioridad, sino que corresponde a un
procedimiento nuevo y distinto donde se ejercita una acción diversa
destinada al cobro de una obligación contenida en el contrato real de
mutuo, donde la escritura de mutuo e hipoteca que fundó la anterior
ejecución, sólo ha permitido comprobar su existencia. La reserva
prevista en el artículo 478 del Código de Procedimiento Civil, debe
necesariamente corresponder a una acción ordinaria que pueda o deba
dar origen a una excepción de cosa juzgada y no a otra que no lo haga"
(C. Suprema sentencia 4.05.2016 Rol Nº 32136-2015)
(considerandos 6º y 7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 6/06/2018, Rol Nº 10249-2017,

Cita online: CL/JUR/2650/2018

§ 2. De la administración de los bienes embargados y del procedimiento de


apremio

ARTÍCULO 479 (501)

La administración de los bienes embargados correrá a cargo del


depositario.
Si son muebles, podrá el depositario trasladarlos al lugar que crea más
conveniente, salvo que el ejecutado caucione la conservación de dichos
bienes donde se encuentren.

Lo cual se entiende sin perjuicio de lo dispuesto en el inciso 1º del


artículo 450 y 4º del artículo 451.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 290, 292, 294, 443, 444, 450, 451,
454, 458, 514, 515, 516, 517, 524 y 527. Código Civil: artículo 2250 Código Penal: artículos 469,
471 Nº 1. Ley Nº 4.702, Ley sobre Compraventa de Cosas Muebles a Plazo: artículo 20.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Bien embargado que depositario no cuenta con tenencia material. No


se generan las responsabilidades para el depositario

La orden contenida en el mandamiento de trabar embargo en bienes


suficientes del deudor para el pago de la deuda, ha recaído sobre un
bien que no pertenece al ejecutado y respecto del cual no tiene la
tenencia material del mismo y, en ese evento, la designación de
depositario provisional notificada por el Receptor Judicial no ha podido
hacer generar las responsabilidades que ese nombramiento conlleva
(considerando único de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 22/07/1993, Rol Nº 20721-1993, Cita online:


CL/JUR/1512/1993

ARTÍCULO 480 (502)

Toda cuestión relativa a la administración de los bienes embargados o a la


venta de los que se expresan en el artículo 483, que se suscite entre el
ejecutante o el ejecutado y el depositario, se substanciará en audiencias
verbales que tendrán lugar con solo el que asista.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 451, 479, 491 y 682.

ARTÍCULO 481 (503)

Notificada que sea la sentencia de remate, se procederá a la venta de los


bienes embargados, de conformidad a los artículos siguientes.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 475, 486, 488, 510 y 512. Código
Civil: artículos 1464 Nº 3, 1793 y siguientes.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La sentencia de remate puede cumplirse desde que se notifica, sin


esperar a que quede ejecutoriada, concediéndose la apelación en el
solo efecto devolutivo

Que, de la causa tenida a la vista, consta que por sentencia de


veintiuno de marzo de dos mil, se rechazaron las excepciones opuestas,
se dedujo apelación en contra de dicho fallo, recurso que se concedió
en ambos efectos. Que atendido lo dispuesto en los artículos 194 Nº 1
y 481 del Código de Procedimiento Civil, la naturaleza de la resolución
apelada y lo informado por el señor juez recurrido, la apelación
interpuesta debió concederse en el solo efecto devolutivo
(considerando 3º de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valdivia, 13/07/2000, Rol Nº 10731-2000,

Cita online: CL/JUR/2672/2000

ARTÍCULO 482 (504)

Los bienes muebles embargados se venderán en martillo, siempre que sea


posible, sin necesidad de tasación. La venta se hará por el martillero
designado por el tribunal que corresponda.184

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 481, 485, 490, 491 y 523. Ley
Nº 4.702, Ley sobre Compraventa de Cosas Muebles a Plazo: artículo 22. Ley Nº 18.118, sobre
el Ejercicio de la Actividad de Martillero Público: artículos 1º, 17, 19, 21 y 22. Ley Nº 5.687, Ley
sobre Contrato de Prenda Industrial: artículo 37. Ley Nº 18.175, Ley de Quiebras: artículo 122.

ARTÍCULO 483 (505)

Venderá el depositario en la forma más conveniente, sin previa tasación,


pero con autorización judicial, los bienes muebles sujetos a corrupción, o
susceptibles de próximo deterioro, o cuya conservación sea difícil o muy
dispendiosa.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 481, 485, 490, 491 y 523. Código
Civil: artículo 2250.

ARTÍCULO 484 (506)

Los efectos de comercio realizables en el acto, se venderán sin previa


tasación, por un corredor nombrado en la forma que establece el artículo 414.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 414, 481, 485, 490, 491 y 523.

ARTÍCULO 485 (507)

Los demás bienes no comprendidos en los tres artículos anteriores, se


tasarán y venderán en remate público ante el tribunal que conoce de la
ejecución, o ante el tribunal dentro de cuya jurisdicción estén situados los
bienes, cuando así se resuelva a solicitud de parte y por motivos fundados.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 71, 482, 483, 484, 486, 487, 488, 489,
493, 499, 500 y 523. Ley Nº 5.687, Ley sobre Contrato de Prenda Industrial: artículo 40.

ARTÍCULO 486 (508)

La tasación será la que figure en el rol de avalúos que esté vigente para los
efectos de la contribución de haberes, a menos que el ejecutado solicite que
se haga nueva tasación.

En este caso la tasación se practicará por peritos nombrados en la forma


que dispone el artículo 414, haciéndose el nombramiento en la audiencia del
segundo día hábil después de notificada la sentencia sin necesidad de nueva
notificación.

En el caso que la designación de peritos deba hacerla el tribunal, no podrá


recaer en empleados o dependientes a cualquier título del mismo tribunal.

Puesta en conocimiento de las partes la tasación, tendrán el término de tres


días para impugnarla.

De la impugnación de cada parte se dará traslado a la otra por igual


término.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 38, 78, 414, 475, 488, 510, 523, 537,
760 y 761. Código de Minería: artículo 153.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Actuaciones que concluyen con la tasación del bien embargado


resultan indispensables para llevar a cabo el remate y constituyen
gestiones útiles

En la especie, las actuaciones invocadas por el demandante deben


ser consideradas como gestiones que se encontraban destinadas a
continuar la tramitación del proceso con el objeto de obtener el
cumplimiento forzado de la obligación, puesto que, por una parte, el
embargo de un inmueble del ejecutado y su inscripción constituyen
fases propias del cuaderno de apremio y, por otra, la petición de
desarchivo acompañada del avalúo fiscal que permite establecer el
mínimo de la subasta, en los términos del artículo 486 del Código de
Procedimiento Civil, resultaba indispensable para poder realizar el
remate del inmueble embargado. En este sentido, la doctrina —
González Vidal— ha dicho que "la finalidad ejecutiva del embargo se
deriva de que dicha institución se inserta en un proceso de ejecución,
encontrándose ligada estrechamente a la realización forzosa. El
embargo es la vía idónea y excluyente a través del cual se seleccionan
bienes del patrimonio del deudor para su ulterior venta. De este modo,
el embargo es el único medio para determinar qué bienes, de aquellos
que forman parte del patrimonio del ejecutado, van a responder de una
ejecución concreta, por lo que, sin esa afectación previa, la realización
es derechamente imposible" (considerando 7º de la sentencia de
casación).

Además, de acuerdo al artículo 488 del Código de Procedimiento


Civil, aprobada la tasación se señalará día y hora para la subasta,
norma de la cual se desprende que todas las actuaciones que concluyen
con la aprobación de la tasación del bien embargado son indispensables
para llevar a cabo el remate, conclusión que permite atribuir el carácter
de gestión útil, en el presente caso, a aquella destinada a determinar la
tasación del inmueble embargado como lo es acompañar el certificado
de avalúo fiscal en los términos del art ículo 486 del Código precitado,
lo que se hizo por el ejecutante junto con la petición de desarchivo. Por
lo demás, la jurisprudencia del Máximo Tribunal ha dicho que la petición
de desarchivo de la causa efectuada con la finalidad de reactivar la
ejecución, seguida de la solicitud de fijar el mínimo de la subasta, se
encuentra orientada a obtener el cumplimiento forzado de la obligación
(considerando 8º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 13/09/2016, Rol Nº 25753-2016, Cita online:


CL/JUR/6274/2016

ARTÍCULO 487 (509)

Transcurridos los plazos que expresa el artículo anterior, y aun cuando no


hayan evacuado las partes el traslado de las impugnaciones, resolverá sobre
ellas el tribunal, sea aprobando la tasación, sea mandando que se rectifique
por el mismo o por otro perito, sea fijando el tribunal por sí mismo el justiprecio
de los bienes. Estas resoluciones son inapelables.

Si el tribunal manda rectificar la tasación, expresará los puntos sobre que


deba recaer la rectificación; y practicada ésta, se tendrá por aprobada, sin
aceptarse nuevos reclamos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 38, 78, 475, 481, 488, 510, 512, 523,
760 y 761.

ARTÍCULO 488 (510)

Aprobada la tasación, se señalará día y hora para la subasta.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 174, 475, 481, 486, 487, 510 y 512.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Incidente de abandono del procedimiento. I. Plazo para el abandono


del procedimiento de tres años en el juicio ejecutivo después de
ejecutoriada la sentencia. II. Traba del embargo y su inscripción
conservatoria, y solicitud de desarchivo acompañada del avalúo fiscal
para determinar el mínimo de la subasta constituyen gestiones útiles.
Actuaciones que concluyen con la tasación del bien embargado
resultan indispensables para llevar a cabo el remate y constituyen
gestiones útiles
La sanción de abandono del procedimiento al litigante negligente sólo
puede prosperar si es que ha cesado en la actividad que le corresponde,
propia del impulso procesal que le es exigible, por un término que
exceda los tres años en el caso de los procedimientos ejecutivos
después de ejecutoriada la sentencia definitiva o de ocurrida la hipótesis
del artículo 472 del Código de Procedimiento Civil, contados desde la
última gestión útil realizada en el cuaderno de apremio destinada a
obtener el cumplimiento forzado de la obligación (considerando 6º de la
sentencia de casación). En la especie, las actuaciones invocadas por el
demandante deben ser consideradas como gestiones que se
encontraban destinadas a continuar la tramitación del proceso con el
objeto de obtener el cumplimiento forzado de la obligación, puesto que,
por una parte, el embargo de un inmueble del ejecutado y su inscripción
constituyen fases propias del cuaderno de apremio y, por otra, la
petición de desarchivo acompañada del avalúo fiscal que permite
establecer el mínimo de la subasta, en los términos del artículo 486 del
Código de Procedimiento Civil, resultaba indispensable para poder
realizar el remate del inmueble embargado. En este sentido, la doctrina
—González Vidal— ha dicho que "la finalidad ejecutiva del embargo se
deriva de que dicha institución se inserta en un proceso de ejecución,
encontrándose ligada estrechamente a la realización forzosa. El
embargo es la vía idónea y excluyente a través del cual se seleccionan
bienes del patrimonio del deudor para su ulterior venta. De este modo,
el embargo es el único medio para determinar qué bienes, de aquellos
que forman parte del patrimonio del ejecutado, van a responder de una
ejecución concreta, por lo que, sin esa afectación previa, la realización
es derechamente imposible" (considerando 7º de la sentencia de
casación). Además, de acuerdo al artículo 488 del Código de
Procedimiento Civil, aprobada la tasación se señalará día y hora para la
subasta, norma de la cual se desprende que todas las actuaciones que
concluyen con la aprobación de la tasación del bien embargado son
indispensables para llevar a cabo el remate, conclusión que permite
atribuir el carácter de gestión útil, en el presente caso, a aquella
destinada a determinar la tasación del inmueble embargado como lo es
acompañar el certificado de avalúo fiscal en los términos del artículo 486
del Código precitado, lo que se hizo por el ejecutante junto con la
petición de desarchivo. Por lo demás, la jurisprudencia del Máximo
Tribunal ha dicho que la petición de desarchivo de la causa efectuada
con la finalidad de reactivar la ejecución, seguida de la solicitud de fijar
el mínimo de la subasta, se encuentra orientada a obtener el
cumplimiento forzado de la obligación (considerando 8º de la sentencia
de casación).

Corte Suprema, 13/09/2016, Rol Nº 25753-2016, Cita online:


CL/JUR/6274/2016

ARTÍCULO 489

El remate, con el señalamiento del día y hora en que debe tener lugar, se
anunciará por medio de avisos publicados, a lo menos por cuatro veces, en
un diario de la comuna en que tenga su asiento el tribunal, o de la capital de
la provincia o de la capital de la región, si en aquélla no lo hubiere. Los avisos
podrán publicarse también en días inhábiles. El primero de los avisos deberá
ser publicado con quince días de anticipación, como mínimo, sin descontar
los inhábiles, a la fecha de la subasta.

Si los bienes están en otra comuna, el remate se anunciará también en ella


o en la capital de la respectiva región, si fuere el caso, por el mismo tiempo y
en la misma forma.

Los avisos serán redactados por el secretario y contendrán los datos


necesarios para identificar los bienes que van a rematarse.185

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 447, 457, 495, 497 y 505. Código
Aeronáutico: artículo 125. Código de Minería: artículo 153. Ley Nº 4.702, Ley sobre
Compraventa de Cosas Muebles a Plazo: artículo 26. Ley Nº 5.687, Ley sobre Contrato de
Prenda Industrial: artículo 38. Decreto con Fuerza de Ley Nº 3, 1997, sobre Ley General de
Bancos, Min. Hacienda, D.O. 19.12.1997: artículo 104.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Anuncio del remate. Gastos de publicidad del remate deben ser


financiados por la ejecutada

En relación con las publicaciones del remate, dado lo ya expuesto con


anterioridad, aparece como razonable que la publicidad de la subasta
se efectúe en un diario de circulación nacional, además de las
publicaciones que deben realizarse en diarios de circulación comunal y
provincial, acogiéndose en esta parte entonces la objeción de la
ejecutada. Se rechazará en cambio la objeción en aquella parte que
persigue que los gastos de publicidad del remate sean de cargo del
ejecutante, puesto que tales costos deben ser financiados por la
ejecutada, conforme a los principios que inspiran el juicio ejecutivo, que
hace de cargo de la deudora los gastos ocasionados por el referido
cobro ejecutivo (considerando 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 11/02/2019, Rol Nº 55-2019,

Cita online: CL/JUR/703/2019

ARTÍCULO 490 (512)

Antes de verificarse el remate, puede el deudor libertar sus bienes pagando


la deuda y las costas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 447, 457, 495, 497 y 505. Código
Civil: artículo 2399.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Remate de bienes constituye un acto complejo. Facultad del deudor


de liberar sus bienes pagando la deuda

El remate es un acto de naturaleza compleja con tintes procesales y


sustantivos que se inicia con las posturas en el acto de la subasta, sigue
con la adjudicación al mejor postor, la suscripción del acta de remate
(acto constitutivo de la venta judicial), el otorgamiento de la escritura
pública de adjudicación y culmina con inscripción de ésta en el registro
conservatorio pertinente (tradición), oportunidad en que el inmueble
subastado sale definitivamente del patrimonio del deudor. En
consecuencia, se rechazará la extemporaneidad alegada, porque el
ejecutado que paga la deuda antes que el proceso del acto de remate
termine, hace uso de la facultad que le confiere el artículo 490 del
Código de Procedimiento Civil, pudiendo así liberar el bien embargado
y extinguir la deuda, y con ella, el juicio ejecutivo. Concurre a favor de
esta conclusión que el propósito del juicio ejecutivo es obtener el pago
de la obligación al acreedor por un medio compulsivo, de forma que
haciéndose el pago antes del término del proceso de remate, se alcanza
dicho objetivo sin perjuicio para las partes o terceros, desde que el
subastador no sufre detrimento patrimonial, al serle restituida la suma
por él consignada (considerandos 6º y 9º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valdivia, 22/11/2019, Rol Nº 746-2019,

Cita online: CL/JUR/6715/2019

2. Ejecutado puede hacer cesar el embargo y evitar el remate si paga la


deuda y las costas antes de verificarse el remate

En el juicio ejecutivo todas las excepciones, sean dilatorias o


perentorias, deben oponerse en un mismo escrito y en el plazo fatal
establecido en el artículo 459 en relación al artículo 463, ambos del
Código de Procedimiento Civil. No obstante lo anterior, el artículo 490
del citado texto legal dispone que "antes de verificarse el remate, puede
el deudor libertar sus bienes pagando la deuda y las costas". Al efecto,
una interpretación armónica de esta norma permite concluir que el
ejecutado puede hacer cesar el embargo y evitar el remate si paga,
facultad que precluye en el momento en que se extiende el acta del
remate. No se trata entonces de una excepción propiamente tal, sino de
una situación especial que permite al deudor liberar sus bienes si paga
la deuda. Esta Corte, analizando el artículo 490 del Código de
Procedimiento Civil, ha sostenido que el deudor tiene la facultad de
libertar sus bienes pagando la deuda y las costas antes de verificarse el
remate, o sea, antes de que el juez declare adjudicada la propiedad al
mejor postor, que es el acto de autoridad que pone fin al remate (C.
Suprema, 10 de marzo 1943, R., t. 40, sec. 1a, pág. 474; C. Suprema,
29 de abril 1949, R., t. 38, sec. 1a, pág. 43; C. Suprema, 1º de junio 1988,
R., t. 85, sec. 1a, pág. 99). De lo expuesto es posible concluir que para
invocar la facultad que consagra la aludida norma es menester que el
deudor solucione la deuda que se le cobra, debiendo acreditar el pago
con hechos posteriores al plazo del artículo 459 del Código Civil,
resultando indispensable contar con una liquidación del crédito que
incluya los intereses, reajustes y costas (considerandos 5º y 6º de la
sentencia de casación).

Corte Suprema, 5/03/2019, Rol Nº 20952-2018, Cita online:


CL/JUR/1068/2019

3. Sustitución del embargo es diferente de la liberación de los bienes


embargados mediante el pago de la deuda y de las costas
La figura de la sustitución del embargo encuentra su regulación
original en el artículo 457 del Código de Procedimiento Civil, que
dispone: "Puede el deudor, en cualquier estado del juicio sustituir el
embargo, consignando una cantidad suficiente para el pago de la deuda
y las costas, siempre que éste no recaiga en la especie o cuerpo cierto
a que se refiere la ejecución". Como se observa, es una clase de
sustitución especial, ya que no es posible cambiar o reemplazar los
bienes embargados por otro cualquiera que escoja el deudor, sino sólo
es admisible hacerlo por una cantidad líquida de dinero y siempre que
el embargo no recaiga en la cosa que sea objeto de la ejecución. Según
ha entendido la doctrina, la suma de dinero reemplaza al bien
embargado, pudiendo el deudor mantener la oposición que hubiere
deducido oportunamente en la tramitación del juicio ejecutivo, en
términos tales que al acreedor se le pagaría su crédito en la misma
oportunidad en que se le habría solucionado de haber tenido que
realizar el bien embargado —Riveros Izquierdo—. Lo anterior permite
concluir que la sustitución del embargo es diferente a la acción de liberar
los bienes embargados mediante el pago de la deuda y las costas a que
se refiere el artículo 490 del Código precitado, y mediante la cual se
pone término al juicio al haberse cumplido el objetivo de la ejecución
(considerando 5º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 18/04/2017, Rol Nº 28378-2016,

Cita online: CL/JUR/1801/2017

4. Pagos realizados con posterioridad al mandamiento de ejecución y


embargo y, antes del remate, permiten liberar los bienes

En la especie los pagos realizados por el ejecutado con posterioridad


al mandamiento de ejecución y embargo, unidos a los abonos antes
efectuados, permiten a dicho litigante de conformidad con lo dispuesto
en el artículo 490 del Código de Procedimiento Civil libertar sus bienes
de conformidad con lo dispuesto en el artículo 490 del Código de
Procedimiento Civil, toda vez que ellos se realizaron con anterioridad al
remate. De este modo, la deuda que persigue el ejecutante en estos
autos se encuentra satisfecha, circunstancia fáctica que conlleva la
extinción de la obligación contraída en los términos que dispone el
artículo 1568 del Código Civil. Por lo tanto, el incidente de pago
formulado por el deudor debió ser acogido, pues dados los abonos
efectuados con anterioridad al mandamiento de ejecución y a la
liquidación efectuada y los pagos efectuados con posterioridad a ello,
es posible concluir que la deuda se encontraba íntegramente pagada
antes del remate, lo que permite al ejecutado liberar sus bienes
(considerandos 8º y 9º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 5/03/2019, Rol Nº 20952-2018,

Cita online: CL/JUR/1068/2019

ARTÍCULO 491 (513)

El precio de los bienes que se rematen deberá pagarse de contado, salvo


que las partes acuerden o que el tribunal, por motivos fundados, resuelva otra
cosa.

Las demás condiciones para la subasta se propondrán por el ejecutante,


con citación de la contraria. La oposición que se formule será resuelta de
plano por el tribunal, consultando la mayor facilidad y el mejor resultado de la
enajenación.186

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 69, 493, 509 y 515.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Finalidad de las bases del remate. Ejecutado dentro del plazo de


citación puede oponerse a las condiciones de la subasta propuestas
por el ejecutante

En cuanto a las bases de remate, una vez practicada la tasación,


corresponde fijar las bases o condiciones en que ha de realizarse el
remate. Ellas se refieren fundamentalmente a la manera en que se
pagará el precio de la subasta, al mínimo para iniciar las posturas y a
las cauciones que deben rendir los postores para tomar parte en el
remate. También, dicen relación a si el bien se vende como cuerpo
cierto o con relación a cabida, a la fecha en que se entregará al
subastador el bien rematado, a la forma en que se pagarán los
impuestos que correspondan y, en general, a todas las circunstancias
que tiendan a la mejor realización de la subasta. Éstas pueden ser
fijadas de común acuerdo por las partes, en cuyo caso ellas son libres
para establecer las condiciones del remate: fijar la forma de pago del
precio; el mínimo de las posturas, las cauciones que deben rendir los
interesados; etc., en la forma que estimen más conveniente. Para tal
efecto, es posible que las partes presenten de común acuerdo un escrito
fijando dichas condiciones. Sin embargo, el procedimiento normal que
contempla el artículo 491 del Código de Procedimiento Civil para la
fijación de las bases del remate consiste en que el ejecutante proponga
las condiciones de la subasta mediante la presentación de un escrito, el
que se debe tener por acompañado al proceso con citación de la
contraria. La única limitación que tiene el ejecutante para formular su
proposición respecto de esas condiciones consiste en que el precio de
los bienes que se rematen deberá pagarse de contado, salvo que las
partes acuerden, o que el tribunal, por motivos fundados, resuelva otra
cosa. Así, el ejecutado dentro del plazo de citación puede oponerse a
las condiciones de la subasta propuestas por el ejecutante. Dicha
oposición debe ser resuelta de plano por el tribunal, considerando la
mayor facilidad y el mejor resultado de la enajenación (considerando 4º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 30/10/2019, Rol Nº 1471-2019,

Cita online: CL/JUR/6259/2019

ARTÍCULO 492 (514)

Si por un acreedor hipotecario de grado posterior se persigue una finca


hipotecada contra el deudor personal que la posea, el acreedor o los
acreedores de grado preferente, citados conforme al artículo 2428 del Código
Civil, podrán, o exigir el pago de sus créditos sobre el precio del remate según
sus grados, o conservar sus hipotecas sobre la finca subastada, siempre que
sus créditos no estén devengados.

No diciendo nada, en el término del emplazamiento, se entenderá que


optan por ser pagados sobre el precio de la subasta.

Si se ha dictado la resolución de reorganización que incluya los bienes del


poseedor de la finca perseguida, o ha sido sometido a un procedimiento
concursal de liquidación, se estará a lo prescrito en el artículo 2477 de dicho
Código.187
Los procedimientos a que den lugar las disposiciones anteriores, se
verificarán en audiencias verbales con el interesado o los interesados que
concurran.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40, 54, 56, 258, 259, 287, 288, 785 y
762. Código Civil: artículos 1610 Nº 2, 2428 y 2477.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procedimiento de purga de la hipoteca y el ejercicio del derecho de


opción se aplican tanto al acreedor hipotecario como al acreedor
valista

Con arreglo a la interpretación lógica y sistemática del artículo 492 del


Código de Procedimiento Civil, elaborada por la doctrina y al
antecedente histórico de la misma, la Corte no puede sino concluir que
el procedimiento de la purga de la hipoteca y el ejercicio del derecho de
opción que consagran las normas que han sido citadas se aplican tanto
al "acreedor hipotecario de grado posterior" y se extiende también al
acreedor valista, como sucede en la especie. Esta posición ha sido
sostenida por la jurisprudencia del Máximo Tribunal, al acoger un
recurso de casación en el fondo, señala lo expuesto precedentemente.
Asimismo, en la sentencia de reemplazo de la misma causa, señala en
su considerando segundo: "Que analizados los requisitos dispuestos en
el artículo 2428 del Código Civil en relación con el artículo 492 del
Código de Procedimiento Civil, cabe concluir que el procedimiento de la
purga de la hipoteca y el ejercicio del derecho de opción que consagran
estos preceptos se aplican, asimismo y de igual manera, tanto al
acreedor preferente que tiene calidad de "acreedor de grado posterior"
como indica este último, como también a aquel acreedor valista en
carácter de ejecutante que embarga y persigue la finca hipotecada a
favor de otro, ...". Así las cosas, procede tener presente que el banco,
en su calidad de acreedor hipotecario preferente, opta por conservar su
hipoteca sobre el inmueble embargado en estos autos
(considerandos 9º y 10º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 4/05/2018, Rol Nº 7849-2017,

Cita online: CL/JUR/2057/2018

2. Derecho de persecución. Derecho de los acreedores hipotecarios en


una subasta judicial. Requisitos para que opere purga
Lo que singulariza a la hipoteca es el llamado derecho de
persecución, conforme al cual el acreedor hipotecario puede "perseguir
la finca hipotecada, sea quien fuere el que la posea y a cualquier título
que la hubiere adquirido". Sin embargo, se sabe también que la hipoteca
puede caducar o extinguirse, cuando un tercero adquiere el inmueble
afectado con el gravamen, siempre que esa adquisición se verifique en
pública subasta ordenada por el juez y previa citación o emplazamiento
de los acreedores hipotecarios. En efecto, en el caso de una subasta
judicial los acreedores hipotecarios tienen el derecho de optar entre
mantener su garantía real o concurrir al pago de sus créditos con cargo
al producto del remate, con las preferencias o en el orden de prelación
que sea pertinente. Así fluye de lo establecido en el artículo 2428 del
Código Civil y de lo expresado en el artículo 492 del Código de
Procedimiento Civil. En tal sentido el inciso tercero de mencionado
artículo 2428 es elocuente al expresar, imperativamente, que: "...los
cuales (acreedores hipotecarios) serán cubiertos sobre el precio del
remate en el orden que corresponda". De otro lado, el inciso final del
citado artículo 2428 dispone que "El juez entre tanto hará consignar el
dinero". De lo señalado, se colige que para que opere la purga o
caducidad de la hipoteca y, con ello, las cancelaciones y alzamiento
subsecuentes, no basta con el emplazamiento del o de los acreedores
hipotecarios y tampoco es suficiente que ese acreedor o esos
acreedores preferentes manifiesten su opción de pagarse con el
producido del remate. Antes bien, resulta indispensable que ese
producto o suma de dinero —consignada en la cuenta corriente del
tribunal—, sea efectivamente aplicado al crédito caucionado con
hipoteca y que se agote sin solucionarlo íntegramente, toda vez que si
es cubierto en forma íntegra, operará el pago y no la purga. Únicamente
en alguna de esas hipótesis surge la posibilidad de disponer el
alzamiento de las inscripciones hipotecarias, y mientras ello no
acontezca, la garantía real subsiste y debe mantenerse vigente
(considerandos 2º a 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 3/09/2018, Rol Nº 3704-2017,

Cita online: CL/JUR/5320/2018

3. La purga tiene lugar en la medida que el producto de la subasta se


exprese en una suma de dinero consignada en la cuenta corriente del
Tribunal y que ese dinero o precio se agote sin solucionar
íntegramente los créditos

Por su parte, don Raúl Espinoza Fuentes en su obra sobre el "Juicio


Ejecutivo", opina "si el ejecutante es un acreedor hipotecario de grado
posterior, o no es un acreedor hipotecario, dicho ejecutante sólo podría
pedir que se les adjudicase la finca en pago de su crédito, cuando el
precio de la adjudicación exceda al valor de los créditos hipotecarios
preferentes, ya que, sólo en ese caso podría hablarse de una
adjudicación en pago. Por el contrario, si el precio de la adjudicación es
inferior al monto de las hipotecas preferentes, dicho precio debería
aplicarse íntegramente al pago de esas hipotecas preferentes, y el
crédito del ejecutante no se pagaría en ninguna parte" (Nº 158, pág.
197, 5ª edición, año 1957). En el mismo sentido se pronuncia Rafael
Mery Berisso en su obra Derecho Hipotecario del año 1958, Nº 243,
pág. 423, quien cita además las opiniones de los señores Alessandri y
Espinoza Fuentes ya referidas. Finalmente, cabe señalar que el
artículo 1610 Nº 2 del Código Civil establece la subrogación legal a
favor "del que habiendo comprado un inmueble, es obligado a pagar a
los acreedores a quienes el inmueble está hipotecado", citándose
justamente entre los casos en que ello ocurre la situación a que se
refiere el artículo 2428 (Somarriva, obra citada Nº 487, pág. 496)" Que,
por consiguiente y en el contexto de esta causa, resulta posible sostener
que la purga o caducidad de la hipoteca y, en particular, que las
cancelaciones y alzamientos subsecuentes están supeditados de modo
ineludible al hecho de que, relativamente al acreedor hipotecario, el
producto de la subasta se exprese en una suma de dinero consignada
en la cuenta corriente del tribunal y, desde luego, que ese dinero o
precio, aplicado que sea a su crédito, se agote sin solucionarlo
íntegramente. Consecuentemente, una vez que ese precio ha sido
puesto a disposición del juez respectivo, sólo entonces surge la
posibilidad de disponer el alzamiento de las inscripciones hipotecarias
y mientras ello no acontezca, la caución real subsiste y debe
mantenerse vigente (considerandos 10º a 11º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 22/11/2000, Rol Nº 3599-2000, Cita online:


CL/JUR/4750/2000

Fallos en el mismo sentido:


— Corte Suprema, 16/10/2008, Rol Nº 3632-2007,

Cita online: CL/JUR/7767/2008

— Corte Suprema, 27/03/2007, Rol Nº 2358-2005,

Cita online: CL/JUR/3495/2007

— Corte Suprema, 6/08/1991, Rol Nº 2854-1991,

Cita online: CL/JUR/740/1991

— Corte Suprema, 22/11/2000, Rol Nº 3599-2000,

Cita online: CL/JUR/4750/2000

ARTÍCULO 493 (515)

Salvo el caso de convenio expreso de las partes, no se admitirá postura


que baje de los dos tercios de la tasación.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 488, 491, 499 y 500. Código
Aeronáutico: artículo 125. Ley Nº 4.702, Ley sobre Compraventa de Cosas Muebles a Plazo:
artículo 23.

ARTÍCULO 494 (516)

Todo postor, para tomar parte en el remate, deberá rendir caución


suficiente, calificada por el tribunal, sin ulterior recurso, para responder de
que se llevará a efecto la compra de los bienes rematados. La caución será
equivalente al diez por ciento de la valoración de dichos bienes y subsistirá
hasta que se otorgue la escritura definitiva de compraventa, o se deposite a
la orden del tribunal el precio o parte de él que deba pagarse de contado.

Si no se consigna el precio del remate en la oportunidad fijada en las bases,


las que el secretario hará saber en el momento de la licitación, o el subastador
no subscribe la escritura definitiva de compraventa, el remate quedará sin
efecto y se hará efectiva la caución. El valor de ésta, deducido el monto de
los gastos del remate, se abonará en un cincuenta por ciento al crédito y el
cincuenta por ciento restante quedará a beneficio de la Junta de Servicios
Judiciales.
Se concederán sólo en el efecto devolutivo las apelaciones que interponga
el subastador de los bienes embargados.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 174, 192, 486, 493, 495, 496 y 894.
Código Orgánico de Tribunales: artículo 514. Código de Minería: artículo 153.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cobro de pagaré. Improcedencia de dejar sin efecto el remate y hacer


efectiva la caución cuando la dilación en la suscripción de la escritura
pública de adjudicación no resulta imputable al adjudicatario. Bases
de remate que no contienen limitación de tiempo ni sanción en cuanto
a la oportunidad para efectuar la suscripción de la escritura

La dilación en la suscripción de la escritura pública de adjudicación en


remate no es un hecho imputable a la adjudicataria, toda vez que ésta
desde el día siguiente al remate, en reiteradas oportunidades instó para
que se confeccionara la citada escritura, lo que no se lograba por las
diversas revisiones que debió efectuar el tribunal, quien solo con fecha
30.05.2016 tuvo por aprobada la minuta de la escritura, esto es, con
posterioridad a la petición planteada por el apelante, la que fue
interpuesta el 27 de ese mismo mes. En consecuencia, no siendo la
adjudicataria responsable del retardo producido, no corresponde dejar
sin efecto el remate y hacer efectiva la caución, como pretende el
ejecutado, toda vez que esto significaría hacerla responsable de hechos
que no le son imputables, teniendo en consideración, además, que no
es efectivo como señala el recurrente que en el Nº 6 de las Bases del
Remate se establezca que "El subastador perderá por vía de pena y sin
más trámite el valor consignado para participar en la licitación, el que se
distribuirá en la forma dispuesta en el artículo 9º del Código de
Procedimiento Civil y en caso que no firme la escritura de compraventa
dentro de los 20 días a contar de la fecha del remate", toda vez que ese
acápite de la propuesta fue eliminado, según consta de la copia de la
misma que fue agregada, por lo que en dichas bases no existe limitación
de tiempo ni sanción en lo referente a la oportunidad en que se efectúe
la suscripción de la escritura (considerandos 4º y 5º de la sentencia de
la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Arica, 19/08/2016, Rol Nº 211-2016,

Cita online: CL/JUR/6046/2016


ARTÍCULO 495 (517)

El acta de remate de la clase de bienes a que se refiere el inciso 2º del


artículo 1801 del Código Civil, se extenderá en el registro del secretario que
intervenga en la subasta, y será firmada por el juez, el rematante y el
secretario.

Esta acta valdrá como escritura pública, para el efecto del citado
artículo del Código Civil; pero se extenderá sin perjuicio de otorgarse dentro
de tercero día la escritura definitiva con inserción de los antecedentes
necesarios y con los demás requisitos legales.

Los secretarios que no sean también notarios llevarán un registro de


remates, en el cual asentarán las actas de que este artículo trata.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 494, 659, 662, 894 y 919. Código
Civil: artículo 1801. Código de Minería: artículo 153.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Nulidad de acta de remate que no se ha solicitado

En la demanda de nulidad absoluta se confunde la nulidad del acto


jurídico consistente en el título traslaticio de dominio —en este caso, la
compraventa celebrada por el juez en representación del deudor, como
vendedor, y los adjudicatorios como compradores, y que se perfecciona
mediante el acta de remate conforme al artículo 495 del Código de
Procedimiento Civil, en relación con el art ículo 1801 inciso 2º del
Código Civil—, con la nulidad de la escritura pública definitiva que debe
extenderse dentro de tercero día, y que prevé la citada disposición
procesal civil; y que solo tiene por fin practicar la inscripción en el
Registro de Propiedades correspondiente a fin de que se efectúe la
tradición del inmueble, como previene el artículo 497 del Código de
Procedimiento Civil. Luego, no puede impetrarse la nulidad de esta
última —como se pide en la demanda— invocando presuntos vicios de
nulidad substantiva que, de haberse incurrido en ellos, necesariamente
debieron cometerse en el acta de remate, cuya nulidad no se ha
solicitado (considerandos 2º a 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Santiago, 25/01/2018, Rol Nº 7068-2017,

Cita online: CL/JUR/426/2018

2. Cobro de pagaré. Improcedencia de dejar sin efecto el remate y hacer


efectiva la caución cuando la dilación en la suscripción de la escritura
pública de adjudicación no resulta imputable al adjudicatario. Bases
de remate que no contienen limitación de tiempo ni sanción en cuanto
a la oportunidad para efectuar la suscripción de la escritura

La dilación en la suscripción de la escritura pública de adjudicación en


remate no es un hecho imputable a la adjudicataria, toda vez que ésta
desde el día siguiente al remate, en reiteradas oportunidades instó para
que se confeccionara la citada escritura, lo que no se lograba por las
diversas revisiones que debió efectuar el tribunal, quien solo con fecha
30/05/2016 tuvo por aprobada la minuta de la escritura, esto es, con
posterioridad a la petición planteada por el apelante, la que fue
interpuesta el 27 de ese mismo mes. En consecuencia, no siendo la
adjudicataria responsable del retardo producido, no corresponde dejar
sin efecto el remate y hacer efectiva la caución, como pretende el
ejecutado, toda vez que esto significaría hacerla responsable de hechos
que no le son imputables, teniendo en consideración, además, que no
es efectivo como señala el recurrente que en el Nº 6 de las Bases del
Remate se establezca que "El subastador perderá por vía de pena y sin
más trámite el valor consignado para participar en la licitación, el que se
distribuirá en la forma dispuesta en el artículo 9º del Código de
Procedimiento Civil y en caso que no firme la escritura de compraventa
dentro de los 20 días a contar de la fecha del remate", toda vez que ese
acápite de la propuesta fue eliminado, según consta de la copia de la
misma que fue agregada, por lo que en dichas bases no existe limitación
de tiempo ni sanción en lo referente a la oportunidad en que se efectúe
la suscripción de la escritura (considerandos 4º y 5º de la sentencia de
la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Arica, 19/08/2016, Rol Nº 211-2016,

Cita online: CL/JUR/6046/2016

3. Acción ejecutiva hipotecaria. Acta de remata sólo tiene efecto


provisorio. Escritura pública de compraventa para practicar la
inscripción registral. Acta de remate constituye una constancia escrita
de haberse verificado el remate y de la persona para quien adquiere
el rematante. Acta de remate es susceptible de modificación

Cuando el artículo 495 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil


señala que el acta de remate "valdrá como escritura pública", tal
afirmación no tiene otro alcance que crear y dar fuerza a un título que
permita al subastador exigir en forma rápida y eficaz la extensión de la
escritura de adjudicación y de las demás prestaciones consecuenciales
del remate. La verdadera escritura pública, en el caso de subasta
pública con intervención de la justicia verificada en un juicio ejecutivo,
no es el acta de remate, a la cual la ley le concede sólo efecto provisorio,
sino la escritura pública de compraventa que es la única que puede
admitir el conservador para practicar la inscripción. Y es en dicha
escritura pública donde deben constar todos los datos necesarios para
practicar la inscripción a nombre del adjudicatario-comprador
(considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones). El acta
de remate es la constancia escrita que debe extenderse en el registro
del secretario que intervino en la subasta, con la firma del juez
rematante y secretario, de haberse verificado el remate y de la persona
para quien adquiere el rematante. Tratándose de una actuación judicial
para cuya formalización falta su reducción a escritura pública, ella es
susceptible de modificación (considerando 5º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 23/02/2016, Rol Nº 1932-2015,

Cita online: CL/JUR/1715/2016

4. Tratándose de ventas forzadas de inmuebles, de acuerdo con el


artículo 495 del Código de Procedimiento Civil, se entiende perfecto
el contrato desde que se extiende el acta de remate, pues ésta vale
como escritura pública.

Que es efectivo que al momento de extenderse la escritura pública de


adjudicación el 23 de junio de 1992 los demandantes ya sabían del vicio
que después reclamaron, pero aun así no se aplica a la especie la
prohibición a que se refiere el artículo 1683 del Código Civil, por cuanto
tratándose de ventas forzadas de inmuebles, de acuerdo con el
artículo 495 del Código de Procedimiento Civil, se entiende perfecto el
contrato desde que se extiende el acta de remate, pues ésta vale como
escritura pública, exigiendo el artículo 497 del citado cuerpo de leyes la
escritura pública definitiva para los efectos de practicar la inscripción en
el Registro de Propiedad del Conservador de Bienes Raíces, de suerte
que, al momento de celebrarse el contrato cuya nulidad se demanda,
esto es, al extenderse el acta de remate, los demandantes no tenían
conocimiento del vicio que reclaman y, por lo tanto, pueden demandar
la nulidad absoluta del acto jurídico celebrado (considerando 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/05/2001, Rol Nº 4497-1999, Cita online:


CL/JUR/1504/2001

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 17/05/1990, Rol Nº 8563-1990,

Cita online: CL/JUR/221/1990

ARTÍCULO 496 (518)

En el acta de remate podrá el rematante indicar la persona para quien


adquiere; pero mientras ésta no se presente aceptando lo obrado, subsistirá
la responsabilidad del que ha hecho las posturas.

Subsistirá también la garantía constituida para tomar parte en la subasta,


de conformidad al artículo 494.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 494, 659, 662 y 894. Código de
Minería: artículo 153.

ARTÍCULO 497 (519)

Para los efectos de la inscripción, no admitirá el conservador sino la


escritura definitiva de compraventa. Dicha escritura será subscrita por el
rematante y por el juez, como representante legal del vendedor, y se
entenderá autorizado el primero para requerir y firmar por sí solo la inscripción
en el conservador, aun sin mención expresa de esta facultad.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 494, 659, 662 y 894. Código de
Minería: artículo 153.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Juez el representante legal del vendedor y debe cumplir con las


obligaciones que la ley le impone a éste

El adjudicatario de un inmueble enajenado forzosamente a través de


subasta pública, sólo tiene la calidad de tercero independiente, pues sus
intereses en el procedimiento de ejecución forzosa son autónomos
respecto de los de las partes y su intervención es marginal, la que se
reduce exclusivamente a dar cumplimiento a las bases de remate para
participar en la puja por adquirir el bien rematado. Conforme lo disponen
los artículos 495 y 497 del Código de Procedimiento Civil, es el juez el
representante legal del vendedor (ejecutado) y, por tanto, debe cumplir
con todas las obligaciones que la ley le impone a éste, entre ellas la
prevista en el artículo 1824 del Código Civil en relación con el
artículo 686 del mismo Código, esto es, la entrega mediante la
respectiva inscripción en el registro de propiedad en el caso de los
bienes raíces, cuestión que no ha ocurrido en la especie
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 22/03/2019, Rol Nº 2063-2018,

Cita online: CL/JUR/1603/2019

2. Nulidad de acta de remate que no se ha solicitado

En la demanda de nulidad absoluta se confunde la nulidad del acto


jurídico consistente en el título traslaticio de dominio —en este caso, la
compraventa celebrada por el juez en representación del deudor, como
vendedor, y los adjudicatorios como compradores, y que se perfecciona
mediante el acta de remate conforme al artículo 495 del Código de
Procedimiento Civil, en relación con el artículo 1801 inciso 2º del Código
Civil—, con la nulidad de la escritura pública definitiva que debe
extenderse dentro de tercero día, y que prevé la citada disposición
procesal civil; y que solo tiene por fin practicar la inscripción en el
Registro de Propiedades correspondiente a fin de que se efectúe la
tradición del inmueble, como previene el artículo 497 del Código de
Procedimiento Civil. Luego, no puede impetrarse la nulidad de esta
última —como se pide en la demanda— invocando presuntos vicios de
nulidad substantiva que, de haberse incurrido en ellos, necesariamente
debieron cometerse en el acta de remate, cuya nulidad no se ha
solicitado (considerandos 2º a 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 25/01/2018, Rol Nº 7068-2017,

Cita online: CL/JUR/426/2018

3. Acción de reivindicación. Venta del inmueble subastado por parte del


adjudicatario al tercero adquirente. Nulidad de la inscripción a nombre
del adjudicatario. Subsistencia de la inscripción a nombre del tercero
adquirente con apariencia de vigente. Legitimación pasiva del tercero
adquirente para ser demandado de reivindicación una vez declarada
la nulidad del remate. No es necesario haber demandado de nulidad
al tercero adquirente por no haber sido parte del contrato

Es pertinente distinguir entre el asiento registral y el derecho reflejado


en él. Generalmente una inscripción refleja un derecho cuyo titular es
quien aparece en el Registro. Pero hay ocasiones —como ésta— en las
que el asiento permanece, pero ya sin el derecho del que formalmente
da cuenta. En efecto, cuando la transferencia del deudor —
representado por el juez en la subasta conforme a los artículos 671 del
Código Civil y 497 del Código de Procedimiento Civil— fue declarada
nula, la inscripción a nombre del adjudicatario fue cancelada, porque ya
no contenía el derecho; pero la inscripción a nombre del tercero
adquirente, demandado de esta causa, practicada porque el
adjudicatario le vendió, permaneció, con apariencia de vigente, pero ya
sin el derecho a su vez. Por eso es que en este juicio los demandantes
piden la cancelación de esa inscripción y reivindican. En tales
circunstancias, el tercero adquirente ha quedado en la posición de un
sujeto pasivo de la acción reivindicatoria, la cual suele ser resumida en
las expresiones: "es la que tiene el dueño no poseedor contra el
poseedor no dueño". Al quedar exitoso en su defensa, se entiende que
el un día ejecutado nunca ha perdido su dominio; y hoy es un dueño no
poseedor que reivindica el predio contra el poseedor no dueño, cuya
inscripción emana del enajenante cuya adquisición fue anulada
(considerandos 7º y 8º de la sentencia de la Corte Suprema). Si bien el
demandado y recurrente de casación en el fondo formula su objeción al
artículo 3º del Código Civil, por estimar que no ha sido oído en el juicio
que ha generado la acción —procedimiento en el que se declaró la
nulidad del remate—, el ahora reivindicado no podía ser demandado
porque no tenía relación alguna con ese proceso. Si bien en la
generalidad de las situaciones el juicio es de nulidad de contrato, si la
cosa sobre la que versa el contrato nulo había sido enajenada por el
adquirente a un tercero, a ese tercero no hay que demandarlo de
nulidad porque él no ha sido parte en el contrato de cuya nulidad se trata
sino, conforme al artículo 1689 del Código Civil, contra él sólo procede
acción reivindicatoria, que es lo que ocurre en la especie, ya que aun
tratándose de una adjudicación en remate, el efecto es el mismo, pues
de lo que se trata es de nulidad y reivindicación subsecuente. De esta
forma, al demandado no se le está haciendo cumplir el contenido de la
resolución judicial que declara la nulidad de la subasta, sino está
sufriendo la consecuencia de haber adquirido una cosa ajena, que es
inoponible al dueño. Una citación u otro mecanismo para ser oído y
tener la oportunidad de acudir a defender la validez del contrato cuya
nulidad generará la reivindicatoria en su contra, es un trámite no
contemplado en nuestro ordenamiento. Declarada la nulidad por
sentencia firme entre las partes del contrato, sin más surge la
reivindicatoria al tercero. En consecuencia, al ser acogida la acción de
reivindicación contra el demandado, la sentencia recurrida no ha
incurrido en error de derecho (considerandos 10º a 12º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 27/04/2017, Rol Nº 52953-2016,

Cita online: CL/JUR/2409/2017

ARTÍCULO 498 (520)

En todo caso, se dejará en el proceso un extracto del acta de remate.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61 y 494.

ARTÍCULO 499 (521)

Si no se presentan postores en el día señalado, podrá el acreedor solicitar


cualesquiera de estas dos cosas, a su elección:

1ª Que se le adjudiquen por los dos tercios de la tasación los bienes


embargados; y
2ª Que se reduzca prudencialmente por el tribunal el avalúo aprobado. La
reducción no podrá exceder de una tercera parte de este avalúo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 489, 490, 494, 502, 503, 508 y 893.
Ley Nº 4.702, Ley sobre Compraventa de Cosas Muebles a Plazo: artículo 24.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La expresión "adjudicación" a que alude el artículo 499 del Código de


Procedimiento Civil es utilizada como homóloga del concepto de
dación en pago

La expresión "adjudicación" a que alude el artículo 499 del Código de


Procedimiento Civil es utilizada como homóloga del concepto de dación
en pago y, en este sentido, resulta pertinente recordar que dicha
institución jurídica constituye un modo de extinguir las obligaciones que
consiste en la prestación de una cosa diversa de la debida. Por lo
general, la dación en pago será el resultado de una convención entre el
deudor y el acreedor que permitirá al primero de ellos liberarse con la
realización de una prestación distinta de la que forma el objeto de la
obligación. La dación en pago constituye, en términos simples, una
modalidad del pago; Que la adjudicación se efectúa el pago de la
obligación cuyo cobro se reclama compulsivamente, mediante la
entrega de una cosa diversa de la debida —normalmente dinero— es
dable reflexionar que dicha modalidad del pago originalmente buscado,
constituye un acto complejo que se inicia, en la hipótesis del numeral
primero de la disposición en examen, con la resolución que hace lugar
a la solicitud de adjudicación por los dos tercios de la tasación del bien
embargado y que culmina, efectivamente, en el evento de que se trate
de un bien inmueble, con la inscripción registral correspondiente y, más
aún, con su efectiva entrega material al adjudicatario, circunstancias
que apreciadas a la luz de la normativa que estatuye el procedimiento a
seguir en este tipo de tercerías, del que se infiere que podrán
interponerse desde que se inicia la ejecución y hasta el momento que
se haga pago al ejecutante, determina concluir que una vez ejecutoriada
la resolución que hizo lugar a la adjudicación, ya no tendrá objeto la
interposición de una tercería de prelación o pago, pues no habrá ningún
bien del ejecutado en que pueda hacerse pago el tercerista, ni ningún
pago en que pueda ser preferido (considerando 2º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Santiago, 1/07/2019, Rol Nº 257-2019,

Cita online: CL/JUR/3879/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 26/03/2013, Rol Nº 6362-2012,

Cita online: CL/JUR/667/2013

ARTÍCULO 500 (522)

Si puestos a remate los bienes embargados por los dos tercios del nuevo
avalúo, hecho de conformidad al número 2º del artículo anterior, tampoco se
presentan postores, podrá el acreedor pedir cualquiera de estas tres cosas,
a su elección:

1ª Que se le adjudiquen los bienes por los dichos dos tercios;

2ª Que se pongan por tercera vez a remate, por el precio que el tribunal
designe; y

3ª Que se le entreguen en prenda pretoria.

Si la ejecución fuere en moneda extranjera, para hacer uso del derecho que
confiere el número 1º del artículo anterior e igual número del presente
artículo, el ejecutante deberá hacer liquidar su crédito en moneda nacional,
al tipo medio de cambio libre que certifique un Banco de la plaza.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 489, 490, 494, 502, 503, 508, 658 y
893. Código Civil: artículo 2445. Ley Nº 18.010, sobre Operaciones de Crédito y otras
Obligaciones de Dinero: artículos 20, 21 y 22. Ley Nº 4.702, Ley sobre Compraventa de Cosas
Muebles a Plazo: artículo 25.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Se comete falta al acceder al desistimiento de la nueva subasta y


permitir al ejecutante adjudicarse el inmueble por dos tercios del valor
de tasación

Se comete falta al acceder al desistimiento de la nueva subasta y


permitir, además, que el ejecutante se adjudicara el inmueble por los
dos tercios del valor de tasación, toda vez que había solicitado
anteriormente que se subastara el inmueble por los dichos dos tercios,
precluyendo en ese mismo instante su derecho en relación con las otras
dos opciones previstas en el artículo 500 del Código de Procedimiento
Civil, cuales son, que se le adjudiquen los bienes por los dichos dos
tercios, o bien, que se le entreguen en prenda pretoria (considerando 3º,
sentencia Corte Suprema).

Corte Suprema, 3/10/1994, Rol Nº 3838-1994, Cita online:


CL/JUR/2133/1994

ARTÍCULO 501 (523)

Cuando el acreedor pida, conforme a lo dispuesto en el artículo anterior,


que se le entreguen en prenda pretoria los bienes embargados, podrá el
deudor solicitar que se pongan por última vez a remate. En este caso no
habrá mínimum para las posturas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 489, 490, 494, 502, 503, 508, 658 y
893. Código Civil: artículo 2445.

ARTÍCULO 502 (524)

Cuando haya de procederse a nuevo remate en los casos determinados


por los tres artículos precedentes, se observará lo dispuesto en el
artículo 489, reduciéndose a la mitad los plazos fijados para los avisos. No se
hará, sin embargo, reducción alguna de estos plazos, si han transcurrido más
de tres meses desde el día designado para el anterior remate hasta aquél en
que se solicite la nueva subasta.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 66, 489 y 658.

ARTÍCULO 503 (525)

La entrega de los bienes en prenda pretoria se hará bajo inventario


solemne.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 858 a 864.


JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Reclamación de multa administrativa. Multa aplicada por la


Inspección del Trabajo. Prevención: Medios de impugnación de las
resoluciones administrativas en materia laboral. Resolución del
Director del Trabajo que resuelve la reconsideración de multa no limita
la reclamación a la que puede acceder el afectado. Competencia del
juzgado del trabajo para conocer la reclamación de la resolución que
resuelve la reconsideración fundada en el decaimiento del
procedimiento administrativo sancionador

(Prevención). El ordenamiento laboral estructura diversos medios de


impugnación respecto de las resoluciones administrativas, uno se
encuentra contenido en el artículo 503 del Código del Trabajo —que
permite recurrir directamente ante el juzgado del trabajo con el objeto
que se deje sin efecto una determinada sanción aplicada por la
Dirección del Trabajo—, y el otro está contemplado en el artículo 512
del mismo Código —que supone que el tribunal deberá revisar la
actuación de la autoridad administrativa, que se contiene en la
resolución que resuelve la reconsideración presentada ante ella—. En
este caso, efectivamente el reclamante hizo uso, previo al reclamo ante
la judicatura, del derecho a impetrar la facultad del director del Trabajo
para rebajar o dejar sin efecto las multas aplicadas (considerandos 4º y
5º de la prevención de la sentencia de la Corte Suprema).

En ese orden de ideas, la resolución que el director del Trabajo emita


en el ejercicio de las facultades que le otorgan las normas citadas —sea
que mantenga la multa o que resuelva sobre la reconsideración de la
misma—, no limita la reclamación a la que puede acceder el afectado y,
en consecuencia, es competente para conocer de ella el juez del trabajo
respectivo —aunque el fundamento invocado por el reclamante sea el
decaimiento del procedimiento administrativo sancionador—, ya que la
norma que otorga el ejercicio de esta acción no formula distinción
alguna a su respecto, señalando únicamente que "Esta resolución será
reclamable", sin hacer precisión alguna acerca del contenido que esa
decisión debe traer consigo para hacerla reclamable ante el juez de
letras del trabajo y sabido es que "donde la ley no distingue, no le es
lícito al intérprete distinguir". En consecuencia, al haberse decidido por
los recurridos la incompetencia del juez de letras del trabajo, se ha
configurado un vicio que afectó las reglas de competencia establecidas
en Código Orgánico de Tribunales y con ello la garantía asegurada por
el artículo 19 Nº 3 inciso 6º de la Carta Fundamental, relativa a un justo
y racional procedimiento, debiendo ser declarada de oficio su
competencia (considerando 6º de la prevención de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 14/09/2016, Rol Nº 49484-2016, Cita online:


CL/JUR/6472/2016

ARTÍCULO 504 (526)

El acreedor a quien se entreguen bienes muebles o inmuebles en prenda


pretoria, deberá llevar cuenta exacta, y en cuanto sea dable documentada,
de los productos de dichos bienes. Las utilidades líquidas que de ellos
obtenga se aplicarán al pago del crédito, a medida que se perciban. Para
calcular las utilidades se tomarán en cuenta, a más de los otros gastos de
legítimo abono, el interés corriente de los capitales propios que el acreedor
invierta y la cantidad que el tribunal fije como remuneración de los servicios
que preste como administrador. No tendrá, sin embargo, derecho a esta
remuneración el acreedor que no rinda cuenta fiel de su administración, o que
se haga responsable de dolo o culpa grave.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 446, 457, 490, 513 y 516. Código
Civil: artículos 44 y 2445.

ARTÍCULO 505 (527)

Salvo estipulación en contrario, podrá el deudor, en cualquier tiempo, pedir


los bienes dados en prenda pretoria pagando la deuda y las costas, incluso
todo lo que el acreedor tenga derecho a percibir de conformidad a lo
dispuesto en el último inciso del artículo precedente.

Podrá también el acreedor, en cualquier tiempo, poner fin a la prenda


pretoria y solicitar su enajenación o el embargo de otros bienes del deudor,
de conformidad a las reglas de este Título.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 446, 457, 490, 513 y 516. Código
Civil: artículo 2445.
ARTÍCULO 506 (528)

El acreedor que tenga bienes en prenda pretoria, deberá rendir cuenta de


su administración, cada año si son bienes inmuebles y cada seis meses si se
trata de muebles, bajo la pena, si no lo hace, de perder la remuneración que
le habría correspondido, de conformidad al inciso final del artículo 504, por
los servicios prestados durante el año.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 446, 457, 490, 513 y 516.

ARTÍCULO 507 (529)

Salvo lo dispuesto en los cuatro artículos precedentes, la prenda pretoria


queda sujeta a las reglas del Título XXXIX, Libro IV del Código Civil. Cuando
se constituya en bienes muebles, tendrá además, sobre ellos, el que los
reciba, los derechos y privilegios de un acreedor prendario.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 446, 457, 490, 513 y 516. Código
Civil: artículos 2384, 2435 a 2445.

ARTÍCULO 508 (530)

Si los bienes embargados consisten en el derecho de gozar una cosa o


percibir sus frutos, podrá pedir el acreedor que se dé en arrendamiento o que
se entregue en prenda pretoria este derecho.

El arrendamiento se hará en remate público fijadas previamente por el


tribunal, con audiencia verbal de las partes, las condiciones que hayan de
tenerse como mínimum para las posturas.

Se anunciará al público el remate con anticipación de veinte días, en la


forma y en los lugares expresados por el artículo 489.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 445. Código Civil: artículo 2445.

ARTÍCULO 509 (531)

Los fondos que resulten de la realización de los bienes embargados se


consignarán directamente por los compradores, o por los arrendatarios en el
caso del artículo anterior, a la orden del tribunal que conozca de la ejecución,
en la forma dispuesta en el artículo 507 del Código Orgánico de Tribunales.

Si se ha interpuesto apelación de la sentencia, no podrá procederse al pago


al ejecutante, pendiente el recurso, sino en caso de que caucione las resultas
del mismo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 451, 491 y 515. Código Orgánico de
Tribunales: artículos 507 y 517.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La liquidación de crédito es un trámite que no correspondía realizar


atendido el estado procesal de la causa.

La solicitud de liquidación de crédito formulada por el ejecutante, al


no existir remate del bien embargado ni consignación de fondos,
aparece como una diligencia inoficiosa, carente de utilidad y
trascendencia en orden a obtener el cumplimento forzado de la
obligación. Dicha liquidación, atendido el estado procesal de la causa,
importa un trámite que aún no correspondía realizar. Implica saltarse
etapas lógicas del procedimiento de apremio y, por ende, vulnerar el
orden consecutivo establecido en nuestro sistema procesal
(considerando 2º, sentencia Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/05/2005, Rol Nº 2560-2004, Cita online:


CL/JUR/5937/2005

ARTÍCULO 510 (532)

Ejecutoriada la sentencia definitiva y realizados los bienes embargados, se


hará la liquidación del crédito y se determinarán, de conformidad al
artículo 471, las costas que deben ser de cargo al deudor, incluyéndose las
causadas después de la sentencia.

Lo dispuesto en este artículo tendrá también aplicación en el caso previsto


en el inciso 2º del artículo 509.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 160, 438, 471, 475, 481, 488, 515 y
774. Código del Trabajo: artículo 466.
ARTÍCULO 511 (533)

Practicada la liquidación a que se refiere el artículo precedente, se


ordenará hacer pago al acreedor con el dinero embargado o con el que
resulte de la realización de los bienes de otra clase comprendidos en la
ejecución. Si la ejecución fuere en moneda extranjera, el tribunal pondrá a
disposición del depositario los fondos embargados en moneda diferente a la
adeudada sobre los cuales hubiere recaído el embargo y los provenientes de
la realización de bienes del ejecutado en cantidad suficiente, a fin de que, por
intermedio de un Banco de la plaza, se conviertan en la moneda extranjera
que corresponda. Esta diligencia podrá también ser cometida al secretario.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 160, 438, 471, 475, 481, 488, 525,
774. Código Orgánico de Tribunales: artículo 517.

ARTÍCULO 512 (534)

Si el embargo se ha trabado sobre la especie misma que se demanda, una


vez ejecutoriada la sentencia de pago, se ordenará su entrega al ejecutante.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 160, 438, 471, 481, 488, 525 y 774.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. En el caso del juicio sobre realización de prenda industrial el embargo


ha podido extenderse a otros bienes diversos de esta clase de prenda

Al referirse al caso en que el embargo se haya trabado sobre la


especie misma que se demanda, no está sino denotando que, en el
caso del juicio sobre realización de la prenda industrial, el embargo ha
podido extenderse también a otros bienes diversos a aquellos objetos
de esta especial clase de prenda (considerando 3º, sentencia Corte
Suprema).

Corte Suprema, 21/01/1988, Rol Nº 5995-1998,

Cita online: CL/JUR/275/1988

ARTÍCULO 513 (535)


Sin estar completamente reintegrado el ejecutante, no podrán aplicarse las
sumas producidas por los bienes embargados a ningún otro objeto que no
haya sido declarado preferente por sentencia ejecutoriada.

Las costas procedentes de la ejecución gozarán de preferencia aun sobre


el crédito mismo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 174, 456, 492, 516, 518, 525, 526,
527 y 528.

ARTÍCULO 514 (536)

Luego que expire por cualquiera causa el cargo del depositario, éste rendirá
cuenta de su administración en la forma que la ley establece para los tutores
y curadores. Podrá, sin embargo, el tribunal, a solicitud de parte, ordenarle
que rinda cuentas parciales antes de la terminación del depósito.

Presentada la cuenta, general o parcial, por el depositario, tendrán las


partes el término de seis días para examinarla; y si se hacen reparos, se
tramitarán como un incidente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 89, 90, 479, 480, 693, 694 y 695.
Código Civil: artículo 2250.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cumplimiento incidental. Purga de la hipoteca. Precio del remate que


no alcanza para cancelar a todos los acreedores hipotecarios. Precio
del remate permite que los acreedores se paguen de sus créditos
sobre éste en el orden de las fechas de sus hipotecas. Silencio como
una expresa y determinada manifestación de voluntad. Acreedor
hipotecario que no exige el pago de su crédito sobre el precio del
remate según su grado

Para que tenga lugar el modo de extinción de la hipoteca que prevé


al efecto el artículo 2428 inciso 2º del Código Civil, será necesario que
el producto del remate del inmueble no haya alcanzado a cubrir la
totalidad de los créditos hipotecarios a los que el mismo garantizaba,
puesto que, en caso contrario, la obligación principal y,
subsiguientemente, la hipoteca, resultarán extinguidas por pago. Así las
cosas, en la hipótesis propuesta, si el precio del remate no alcanza para
cancelar a todos los acreedores hipotecarios, se producirá en la práctica
la denominada "purga o caducidad de la hipoteca", situación en la que
aquellos que no alcanzaron a ser satisfechos en sus créditos verán
extinguirse sus hipotecas, conservando únicamente la acción personal
para perseguir los demás bienes del deudor. La explicación de por qué
se extinguen las hipotecas de los acreedores que no logran pagarse con
el precio de la subasta, la entrega la doctrina —Somarriva Undurraga—
refiriendo al efecto que ello ocurre porque "sus hipotecas no eran
suficiente garantía ya que se agotó el precio —que entra a reemplazar
al inmueble— en pagar a los acreedores preferentes". Luego, el precio
del remate tiene por objeto permitir precisamente que los acreedores se
paguen de sus créditos sobre éste en el orden de las fechas de sus
hipotecas (considerando 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).
Por lo tanto, si bien el artículo 514 inciso 2º del Código de Procedimiento
Civil estatuye uno de los pocos casos en que el legislador otorga al
silencio el efecto de una expresa y determinada manifestación de
voluntad, en orden a que se asimila a la opción de ser pagado con el
precio del remate, ello no obsta considerar, enseguida, que descartada
de este modo la elección que habría permitido al acreedor hipotecario
conservar su hipoteca sobre la finca subastada, conforme establece el
inciso 1º del aludido precepto, ha de entenderse siempre una facultad
suya la de "exigir el pago" de su crédito sobre el precio del remate según
su grado, situación que en la especie no aconteció, pues verificada la
subasta no compareció al proceso a efectuar requerimiento de pago
alguno y ello fue así, porque, como se ha dicho, no existe ningún crédito
actual que haya estado siendo garantizado con la hipoteca inscrita a su
favor (considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 29/06/2016, Rol Nº 3470-2016,

Cita online: CL/JUR/4647/2016

ARTÍCULO 515 (537)

El depositario deberá consignar a la orden del tribunal, en la forma


expresada en el artículo 509, los fondos líquidos que obtenga
correspondientes al depósito, tan pronto como lleguen a su poder; y abonará
intereses corrientes por los que no haya consignado oportunamente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 415 y 509.


ARTÍCULO 516 (538)

Al pronunciarse sobre la aprobación de la cuenta, fijará el tribunal la


remuneración del depositario, si hay lugar a ella, teniendo en consideración
la responsabilidad y trabajo que el cargo le haya impuesto.

La preferencia establecida por el inciso 2º del artículo 513 se extiende a la


remuneración del depositario.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 504, 506, 514 y 515. Código Civil:
artículo 2250.

ARTÍCULO 517 (539)

No tienen derecho a remuneración:

1º El depositario que, encargado de pagar el salario o pensión embargados,


haya retenido a disposición del tribunal la parte embargable de dichos salarios
o pensión; y

2º El que se haga responsable de dolo o culpa grave.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 504, 506, 514 y 515. Código Civil:
artículo 44.

§ 3. De las tercerías

ARTÍCULO 518

En el juicio ejecutivo sólo son admisibles las tercerías cuando el reclamante


pretende:

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Intervención de terceros en juicios ejecutivos, solo en las materias


previstas en la legislación
Las reglas generales intervención de un tercero en el procedimiento
ordinario, contenidas en el Libro I del Código de Procedimiento Civil
sufren modificaciones en el juicio ejecutivo, pues en este procedimiento
las tercerías están reglamentadas de manera especial,
fundamentalmente en atención a la necesidad de que la ejecución se
desarrolle en un proceso expedito y rápido que permita el cumplimiento
forzado de las obligaciones, en el caso, las del deudor ejecutado
respecto del banco. Y así, estas modificaciones "se refieren, en primer
lugar, a la restricción de las situaciones en que un tercero puede
intervenir en el pleito ejecutivo. En este último juicio (el ejecutivo), el
Código no admite la intervención de un tercero siempre que éste tenga
un derecho comprometido, sino que, por el contrario, esa intervención
solo es tolerada en los casos taxativos que el mismo Código señala". —
Raúl Espinosa Fuentes—. En efecto, el procedimiento ejecutivo no
puede verse afectado en su rapidez y eficacia por la intervención de
terceros, salvo en las materias especialmente previstas en el
artículo 518 del Código de Procedimiento Civil, lo que acontece cuando
este tercero: a) pretende dominio sobre los bienes embargados;
b) invoca la posesión de los bienes embargados, solicitando que sean
excluidos del embargo; c) afirma tener derecho a ser pagado con
preferencia con el producto del remate: y d) afirma tener derecho para
concurrir en el pago, a falta de otros bienes. Además de las
mencionadas tercerías de dominio, posesión, prelación y pago, el
Código de Procedimiento Civil también autoriza la comparecencia de un
tercero que haga valer su condición de comunero sobre la cosa
embargada (artículo 519) o cuando el ejecutado invoque una calidad
diversa de aquella en que se le ejecuta (artículo 520) (considerandos 5º
y 6º de la anulación de oficio).

Corte Suprema, 2/09/2019, Rol Nº 26824-2018, Cita online:


CL/JUR/4959/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 14/11/2019, Rol Nº 361-2019,

Cita online: CL/JUR/6550/2019

2. Artículo 518 del Código de Procedimiento Civil tiene carácter


decisorio litis
El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el
recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, como es que el escrito en que se interpone "exprese", es
decir, explicite en qué consiste —cómo se ha producido— el o los
errores, siempre que estos sean "de derecho". Versando la contienda
sobre una tercería de posesión, la exigencia consignada en el motivo
anterior obligaba al impugnante a explicar los contenidos jurídicos del
instituto que se hizo valer en juicio. Sin embargo, el recurrente
únicamente denuncia la infracción de disposiciones probatorias,
omitiendo extender la infracción legal al artículo 518 del Código de
Procedimiento Civil, precepto que tiene carácter decisorio litis pues da
sustento jurídico a la demanda incidental y, por ende, debería ser
aplicado en el fallo de reemplazo que se dicte en el evento de ser
acogido el presente arbitrio. Esta situación implica que el compareciente
acepta la decisión adoptada en cuanto al fondo de la cuestión debatida
y los errores de derecho que se denuncian no han tenido influencia
sustancial en lo dispositivo del fallo, pues la normativa conforme a la
cual se resolvió el caso concreto debe tenerse como correctamente
aplicada. Por estas consideraciones y de conformidad con las normas
legales citadas, se declara inadmisible el recurso de casación en el
fondo interpuesto (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 4/04/2019, Rol Nº 29946-2018,

Cita online: CL/JUR/1860/2019

3. Tramitación incidental de la tercería de posesión no modifica la


naturaleza jurídica de sentencia definitiva de la resolución que la falla

Las tercerías, aun considerando la tramitación incidental que tienen


asignada, constituyen un juicio distinto de la ejecución a la que se
relacionan, pues comprenden dos acciones: una orientada a obtener
una declaración que debilita la del demandado-ejecutante y otra
enderezada a conseguir una condena respecto del demandado-
ejecutado. Ahora bien, respecto de la naturaleza jurídica de la
resolución que pone fin a dicho juicio, la jurisprudencia y parte
importante de la doctrina —Benavente, Salas Vivaldi y Rodríguez
Garcés—, entienden que corresponde a una sentencia definitiva, en los
términos del artículo 158 del Código de Procedimiento Civil, toda vez
que es innegable que en virtud de ella se pone fin a la instancia,
resolviendo la cuestión o asunto que ha sido objeto de ese juicio en
particular. Por lo tanto, a pesar de que el legislador ha reservado una
tramitación incidental a este tipo de juicios accesorios al ejecutivo, no
tiene el efecto de transmutar la naturaleza jurídica de la decisión
jurisdiccional que la resuelve. En efecto, entendiendo que una tercería
como la que ocupa estas reflexiones importa sustanciar una contienda
de relevancia jurídica dentro de un juicio ejecutivo, al que adscribe por
conexidad, hace del todo concordante concluir que la resolución que le
pone término definiendo la suerte de la pretensión posesoria del
tercerista se condice en plenitud con la entidad de una sentencia
definitiva; y si bien en su tramitación se rige por las reglas de los
incidentes, el fallo que la resuelve finaliza la instancia que se abriera
con su interposición y emplazamiento, por lo que el recurso de apelación
respecto de éste tiene, como plazo de interposición, el de diez días a
partir de aquel en que se haya notificado (considerandos 4º y 5º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 26/01/2017, Rol Nº 61459-2016,

Cita online: CL/JUR/267/2017

4. Tramitación incidental de la tercería. Tercería constituye un juicio


independiente y con vida propia que se desarrolla dentro del juicio
ejecutivo

Las tercerías, entre ellas la de posesión, se encuentran tratadas en el


Código de Procedimiento Civil en los artículos 518 y siguientes. En el
caso de la tercería de posesión, es el artículo 521 del mencionado
Código el que dispone que "Las tercerías de posesión, de prelación y
de pago se tramitarán como incidente", lo que en caso alguno significa
que la materia de que se trata sea un mero incidente del juicio; por el
contrario, la jurisprudencia reiterada de los tribunales superiores de
justicia ha venido señalando que se está en presencia de un juicio
independiente y con vida propia que se desarrolla dentro del juicio
ejecutivo. Lo anterior por cuanto los fines y objeto de las tercerías son
diametralmente diferentes del juicio ejecutivo, puesto que, en el caso de
la tercería de posesión, se trata de un procedimiento declarativo
(considerando 2º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 29/04/2016, Rol Nº 1983-2015,


Cita online: CL/JUR/2804/2016

1º Dominio de los bienes embargados;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Finalidad y tramitación de la tercería de dominio

Mediante la interposición de una tercería de dominio se ejercita una


acción declarativa del derecho de propiedad por parte de aquel que, sin
ser parte en un juicio ejecutivo, se ve afectado por el embargo de un
bien que le pertenece, a fin que se declare su derecho y se alce el
gravamen que lo perjudica. La cuestión objeto de la tercería radica
justamente en el dominio que el tercero pretende se reconozca en su
favor y en el ejercicio de su acción que se tramita conforme a las reglas
del juicio ordinario, pero sin trámites de réplica y dúplica puede el
tercerista hacer valer los derechos que favorezcan su pretensión
(considerando 8º, sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 26/08/2013, Rol Nº 9432-2012, Cita online:


CL/JUR/1906/2013

2. Procedencia de la tercería de dominio en bienes que se encuentran


en el terreno embargado

Que, como primera cuestión, debe considerarse que lo embargado es


el bien inmueble señalado en la letra b) del motivo segundo precedente,
y la tercería se ha intentado invocando el dominio sobre los bosques.
De entender que se ha efectuado la tradición de ellos, forzosamente la
madera debería haber traspasado los límites prediales, lo que hace
absolutamente improcedente la tercería intentada, pues esos bienes no
podrían entenderse comprendidos en el embargo decretado
(considerando 9º, sentencia Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 20/04/2011, Rol Nº 967-2011,

Cita online: CL/JUR/834/2012

3. No procede tercería de dominio por ser deudor y tercerista la misma


persona
Realizado, entonces, el levantamiento del velo antes expuesto, es
claro que la conducta de la empresa que aparece como demandante de
tercería de dominio, es ampararse en la estructura de su personalidad
jurídica para evadir obligaciones contraídas por el deudor prendario,
creador de dicha estructura, para evadir el derecho del ejecutante y las
responsabilidades que le corresponden como deudor principal
(considerando 9º, sentencia Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Coyhaique, 25/04/2012, Rol Nº 6-2012,

Cita online: CL/JUR/4025/2012

Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Valdivia, 21/02/2013, Rol Nº 2-2013,

Cita online: CL/JUR/404/2013

— Corte Suprema, 30/07/2012, Rol Nº 3884-2012,

Cita online: CL/JUR/3535/2012

2º Posesión de los bienes embargados;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Finalidad de la tercería de posesión

La razón de ser de la tercería de posesión consiste en otorgar una


tutela rápida y eficaz para aquellas situaciones en que se embargan
bienes que están en poder de un tercero que, en cuanto tal, se halla
amparado por la presunción del artículo 700 del Código Civil. De esta
manera, una actuación procesal verificada en esas condiciones resulta
injustificada y da derecho al interesado para reclamar el
restablecimiento de su posesión (considerando 2º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 21/12/2018, Rol Nº 2318-2018,

Cita online: CL/JUR/7012/2018


2. Adquisición de la posesión de los bienes muebles. Presunción de
dominio del poseedor. Carga de la prueba de la posesión exclusiva
de los bienes recae sobre el tercerista

Para adquirir la posesión de un bien mueble es necesario el corpus y


el animus, aunque la mera tenencia siga en poder de otro. La posesión
de las cosas muebles se mantiene mientras se conserve el corpus y
el animus, o sólo este último aunque no se tenga el corpus, hallándose
la cosa bajo el poder del poseedor, pese a que éste ignore
accidentalmente su paradero o haya entregado la mera tenencia de la
cosa. Por otra parte, el artículo 700 inciso 2º del Código Civil establece
"El poseedor es reputado dueño, mientras otra persona no justifique
serlo", norma que contempla una presunción simplemente legal, que en
el caso en particular determina que la carga del onus
probandi corresponderá al tercerista de posesión, quien deberá
demostrar los hechos en que funda su reclamación. En la especie,
habiéndose trabado el embargo sobre bienes muebles que se
encontraban al interior del inmueble donde se practicó la notificación de
la demanda al ejecutado, era menester aplicar en principio la presunción
del referido artículo 700 inciso 2º a favor del ejecutante, ya que
determinado el domicilio del ejecutado y hallándose las especies en
dicho lugar, no podía reputarse dueño de los bienes exclusivamente al
demandante de tercería, mientras no justificara serlo. En suma, la
posesión acreditada por el tercerista no reviste la exclusividad o por lo
menos la exclusión del ejecutado a quien se hace aplicable la
presunción de dominio del artículo 700 (considerandos 4º y 5º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 23/06/2016, Rol Nº 27699-2016,

Cita online: CL/JUR/4560/2016

3. Elaboración jurisprudencial para otorgar al poseedor de un bien


embargado la posibilidad de hacer valer su presunción legal de
dominio en un camino breve y de mayor simplicidad

La tercería de posesión constituye una elaboración jurisprudencial


concebida para otorgar al poseedor de un bien embargado la posibilidad
de hacer valer su presunción legal de dominio en un camino breve y de
mayor simplicidad que la instalación de una tercería de dominio
propiamente tal y se estableció en el Nº 2 del artículo 518 del Código de
Procedimiento Civil, precepto que dispone que "en el juicio ejecutivo
sólo son admisibles las tercerías cuando el reclamante pretende: 2º
Posesión de los bienes embargados". Se trata de la intervención de un
tercero en el juicio ejecutivo por la vía incidental, a fin de obtener que se
alce el embargo y se respete su posesión, porque al momento del
embargo los bienes en que recayó la traba se encontraban en su poder,
debiendo presumirse de su dominio (considerando 1º, sentencia Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Punta Arenas, 3/02/2015, Rol Nº 318-2014,

Cita online: CL/JUR/556/2015

4. La carga de la prueba en la tercería de posesión recae sobre el


tercerista

En la tercería de posesión el hecho que debe probarse es el siguiente:


efectividad de encontrarse los bienes muebles o inmuebles objeto del
embargo, al momento de la traba, en posesión del tercero opositor. Las
reglas generales sobre peso de la prueba sufren excepción cuando la
parte que debería acreditar los hechos controvertidos se encuentra
amparada por una presunción legal; no recae sobre ella el peso de la
prueba, sino sobre el opositor (considerando 5º, sentencia Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 6/09/2013, Rol Nº 4348-2012,

Cita online: CL/JUR/2856/2013

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 26/02/2014, Rol Nº 12255-2013,

Cita online: CL/JUR/318/2014

— Corte Suprema, 9/07/2013, Rol Nº 7729-2012,

Cita online: CL/JUR/1482/2013

— Corte de Apelaciones de Santiago, 4/04/2013, Rol Nº 42-2013,

Cita online: CL/JUR/742/2013


— Corte de Apelaciones de La Serena, 12/04/2011, Rol Nº 173-2011,

Cita online: CL/JUR/10181/2011

— Corte de Apelaciones de San Miguel, 15/09/2010, Rol Nº 521-2010,

Cita online: CL/JUR/7354/2010

— Corte de Apelaciones de Talca, 19/10/2010, Rol Nº 428-2010,

Cita online: CL/JUR/8530/2010

5. La escritura pública de adjudicación en remate no es prueba


suficiente de posesión

Que, resultando insuficiente, como se señaló, el acta de adjudicación


en remate, ni la escritura que la contiene para acreditar la posesión que
dice tener el tercerista, resultaba procedente denegar la demanda de
tercería de posesión interpuesta, y al no hacerlo se han infringido los
artículos 724 y 728 del Código Civil, pues la correcta interpretación y
aplicación de las citadas normas debió llevar a los sentenciadores a
concluir que el tercerista no ha estado en posesión del inmueble
embargado (considerando 8º, sentencia Corte Suprema).

Corte Suprema, 1/04/2011, Rol Nº 6860-2010, Cita online:


CL/JUR/2828/2011

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 26/02/2014, Rol Nº 12255-2013,

Cita online: CL/JUR/318/2014

3º Derecho para ser pagado preferentemente; o

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Concepto y objeto de la tercería de prelación

La tercería de prelación "consiste en la intervención, por medio de una


demanda incidental, de un tercero que adviene al juicio ejecutivo
invocando el derecho a ser pagado prioritariamente respecto del
ejecutante con el producto de la subasta por ostentar en contra del
deudor un crédito preferente expresamente consagrado en la ley".
(Corte Suprema, rol Nº 17264-2013). De esta manera el objeto de esta
acción procesal contemplada en el artículo 518 Nº 3 del Código de
Procedimiento Civil, es que se reconozca al tercero la calidad de
acreedor privilegiado y hacer efectiva su preferencia en el pago de los
bienes embargados con antelación a los acreedores no privilegiados,
cuando los bienes del deudor no sean suficientes. Atento lo dispuesto
en el artículo 2470 del Código Civil, las causas de preferencia son
solamente el privilegio y la hipoteca; y conforme al artículo 2477 del
mismo cuerpo legal, los hipotecarios constituyen créditos de tercera
clase, estableciéndose igualmente que en el caso de existir varias
hipotecas éstas se prefieren en el orden de su inscripción. Por todo lo
mencionado "el tercerista debe acreditar, por una parte, la existencia del
crédito que se alega, y por otra, el carácter preferente del mismo". (Corte
Suprema, rol Nº 17264-2013) (considerandos 1º a 4º de la sentencia de
la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones, 4/10/2018, Rol Nº 417-2018, Cita online:


CL/JUR/5679/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 16/08/2011, Rol Nº 3961-2011,

Cita online: CL/JUR/10167/2011

— Corte Suprema, 23/05/2011, Rol Nº 2149-2011,

Cita online: CL/JUR/4383/2011

— Corte de Apelaciones de Antofagasta, 14/04/2011, Rol Nº 51-2011,

Cita online: CL/JUR/10403/2011

2. Tercería de prelación. Tercerías pueden interponerse en cualquier


estado del proceso mientras existan bienes para ejecutar y/o fondos
pagados respecto de los cuales se pueda hacer efectiva la prelación
o pago a favor del tercerista
Las tercerías se pueden interponer en cualquier estado del proceso
mientras existan bienes que se puedan ejecutar y/o fondos pagados por
los respectivos adjudicatarios respecto de los cuales se pueda hacer
efectiva la prelación o pago a favor del tercerista, en desmedro del
ejecutante. Dicho de otra manera, mientras el ejecutante no haya
percibido la totalidad de los fondos obtenidos durante el proceso de
ejecución, no se puede entender extinguido por preclusión el derecho
de cualquier tercero para invocar a su favor una preferencia por sobre
el ejecutante para pagarse con los fondos que todavía estén pendientes
de liquidarse o girarse. En este mismo sentido se ha expresado la
Excma. Corte Suprema, por ejemplo en su sentencia de fecha 4 de
septiembre de 2018 (rol Nº 8300-2018), donde se sostuvo lo siguiente:
"La figura de la tercería de prelación supone naturalmente la existencia
de un juicio ejecutivo pendiente, seguido entre personas directamente
interesadas en sus resultados, pues el derecho preferente al pago que
invoca el tercerista se ejerce con relación al crédito que el ejecutante
pretende hacer valer en ese juicio. Por ende, una vez efectuado el
remate de los bienes embargados y hecho el pago al ejecutante, ningún
efecto puede producir la interposición de una tercería, cuyo objeto es
precisamente impedir que el ejecutante perciba el producto de la
realización de los bienes embargados sin respetar la preferencia que el
tercero invoca" (considerandos 6º y 7º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valdivia, 30/10/2019, Rol Nº 613-2019,

Cita online: CL/JUR/6794/2019

3. Finalidad de la tercería de prelación. Improcedencia de la tercería de


prelación para resolver conflicto respecto al mejor derecho que exhibe
otro tercero que también concurre en calidad de tercerista

La tercería de prelación está instituida por el legislador para


solucionar el conflicto que se suscita entre el ejecutante y quien
pretende un pago preferente en razón de las causales establecidas en
la ley, pues "La tercería de prelación corresponde al acreedor
privilegiado para hacer valer su crédito respecto del ejecutado y su
preferencia respecto del ejecutante. Este tiene la calidad de acreedor
del ejecutado y es titular de un mejor derecho al pago que el ejecutante.
Por ello que su objetivo inmediato sea el reconocimiento de su calidad
de acreedor privilegiado; y, consecuencialmente, el pago preferente de
su crédito" (Sergio Rodríguez Garcés, Editorial Vitacura Limitada, 1987,
pág. 625). Siendo así, la colisión de derechos que el instituto en análisis
pretende solucionar no se presenta en la especie, pues el conflicto que
aqueja a la impugnante no se refiere al mejor derecho que pueda tener
respecto a aquel invocado por el actor principal, sino al que exhibe otro
tercero que también concurrió al proceso en calidad de tercerista,
materia cuya dilucidación no puede resolverse mediante el recurso que
se conoce sino que deberá ser aclarada en una etapa posterior del
juicio, lo que desde luego conduce a descartar de inmediato el error de
derecho que se ha denunciado (considerando 8º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 23/04/2018, Rol Nº 44257-2017, Cita online:


CL/JUR/1844/2018

4. Requisitos de la tercería de prelación. No es necesario probar la


insuficiencia de los bienes del deudor

Que para poder interponer en un procedimiento de apremio una


tercería de prelación, entonces, es necesario: 1º) Ser tercero, 2º) hacer
valer un crédito ejecutivo en contra del ejecutado y 3º) acompañar el
título ejecutivo en que conste el título del tercerista. (...) En efecto, la
necesidad de acreditar la insuficiencia de los bienes del deudor no
aparece como un supuesto de procedencia de tal acción
(considerando 5º, sentencia Corte Suprema).

Corte Suprema, 2/04/2012, Rol Nº 501-2011, Cita online:


CL/JUR/3934/2012

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 15/03/2011, Rol Nº 2477-2010,

Cita online: CL/JUR/2093/2011

— Corte de Apelaciones de Santiago, 30/07/2010, Rol Nº 652-2010,

Cita online: CL/JUR/4497/2010


5. Acciones de cobro y de preferencia ejercidas en la tercería de
prelación

En ella se comprende el ejercicio de dos acciones: la acción de cobro


del crédito y la preferencia para su pago. Ambas pretensiones se
plantean en la demanda de tercería y tienen como destinatarios sujetos
procesales diferentes: la primera, el ejecutado y la segunda, el
ejecutante. En virtud de lo anterior, el tercerista deberá acreditar la
existencia del crédito en que funda su acción contra el ejecutado y la
preferencia alegada respecto del ejecutante (considerando 6º,
sentencia Corte Suprema).

Corte Suprema, 15/12/2010, Rol Nº 2938-2010, Cita online:


CL/JUR/17177/2010

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 16/10/2013, Rol Nº 478-2013,

Cita online: CL/JUR/2299/2013

— Corte Suprema, 9/03/2011, Rol Nº 4618-2010,

Cita online: CL/JUR/1910/2011

— Corte de Apelaciones de Santiago, 20/07/2010, Rol Nº 1701-2010,

Cita online: CL/JUR/17337/2010

4º Derecho para concurrir en el pago a falta de otros bienes.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Tercería de pago, concepto y requisitos de procedencia

La tercería de pago ha sido definida por la doctrina como la


intervención, en el juicio ejecutivo, de un tercero que pretende derecho
para concurrir con el ejecutante en el pago, a falta de otros bienes del
deudor; también como aquella por la cual un tercero, acreedor ejecutivo
no privilegiado, interviene en el juicio ejecutivo pretendiendo derecho
para concurrir al pago con el producto de bienes embargados a falta de
otros bienes embargables y a prorrata de sus respectivos créditos. Para
la procedencia de la tercería de pago, de acuerdo con los artículos 518
Nº 4 y 527 del Código de Procedimiento Civil, se halla supeditada al
concurso copulativo de los siguientes presupuestos: a) el crédito
invocado por la persona que la plantea debe tener calidad de ejecutivo,
lo que significa que ha de cumplir con las exigencias requeridas para
cursar su cumplimiento por la vía ejecutiva; y b) el deudor debe carecer
de otros bienes, fuera de los que han sido objeto del embargo, para
afrontar el pago de los créditos del ejecutante y del tercerista
(considerandos 7º y 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 30/03/2016, Rol Nº 10366-2015,

Cita online: CL/JUR/2080/2016

2. Incumplimiento de requisitos copulativos de la tercería de pago

La tercería que se analiza tampoco podía prosperar porque no


concurre otro aspecto medular que debe tenerse en cuenta para dirimir
la colisión entre los derechos preferentes involucrados y que se
relaciona con la insuficiencia de bienes en el patrimonio del deudor para
responder cabalmente por los créditos invocados por el demandante
principal y la recurrente, ya que el mérito del proceso da cuenta de que
no se rindió por la tercerista prueba bastante, como le correspondía
hacerlo, por imperativo del artículo 1698 del Código Civil, para acreditar
semejante circunstancia, que constituía un requisito necesario para
hacer plausible su pretensión, de acuerdo con lo dispuesto en los
artículos 518 Nº 4 y 527 del Código de Enjuiciamiento Civil, pues la
procedencia de la tercería de pago se halla supeditada copulativamente
tanto a que el crédito invocado por la persona que la plantea debe tener
calidad de ejecutivo, lo que significa que ha de cumplir con las
exigencias requeridas para cursar su cumplimiento por la vía ejecutiva,
cuanto a que el deudor carezca de otros bienes, fuera de los que han
sido objeto del embargo, para afrontar el pago de los créditos de la
ejecutante y de la tercerista (considerando 8º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 16/04/2018, Rol Nº 40211-2017, Cita online:


CL/JUR/1795/2018

En el primer caso la tercería se llama de dominio, en el segundo de


posesión, en el tercero de prelación y en el cuarto de pago.188
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 22, 24, 433, 454, 519 y 520. Código
Civil: artículos 582, 700 al 731, 1567 y siguientes, 2465 y siguientes. Código Civil: artículos 582,
700 al 731, 1567 y siguientes, 2465, 2466 y siguientes. Ley Nº 4.702, Ley sobre Compraventa
de Cosas Muebles a Plazo: artículo 30. Ley Nº 5.687, Ley sobre Contrato de Prenda Industrial:
artículo 43.

ARTÍCULO 519 (541)

Se substanciará en la forma establecida para las tercerías de dominio la


oposición que se funde en el derecho del comunero sobre la cosa embargada.

Se tramitará como incidente la reclamación del ejecutado para que se


excluya del embargo alguno de los bienes a que se refiere el artículo 445.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 445, 464, 518, 521 y 524. Código
Civil: artículo 2305.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procedencia de oposición del comunero sobre la cosa embargada.


Comunero debe deducir tercería de dominio, para que se reconozca
la situación de comunidad con el ejecutado y se declare su derecho

En ciertos casos la ley procesal autoriza la intervención de terceros


en el juicio ejecutivo haciendo valer otros derechos en el procedimiento
a través de las tercerías, esto es, cuando se alegue un derecho
invocando una calidad diversa de aquella que sostiene el ejecutante o
el ejecutado. En efecto, fuera de los casos de tercería propiamente tales
que contempla el artículo 518 del Código de Procedimiento Civil, los
artículos 519 y 520 señalan algunas hipótesis en que procede la
reclamación de un tercero en la ejecución, como lo sería, por ejemplo,
la oposición del comunero sobre la cosa embargada (Tratado de las
Tercerías, Sergio Rodríguez Garcés y María Patricia Rodríguez
Aspillaga, Ediciones El Jurista, Tomo II, pág. 895). En este último caso,
la ley obliga al comunero a deducir la correspondiente tercería de
dominio, para que se reconozca la situación de comunidad con el
ejecutado y se declare su derecho. Se trata así de una oposición
fundada en el derecho de un comunero sobre la cosa embargada, que
no es precisamente una tercería de dominio, sino una acción especial
que se confiere al comunero para ejercitar un derecho determinado,
acción que se sujeta al procedimiento establecido para las tercerías de
dominio (ob. cit. pág. 900) (considerando 7º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 14/11/2019, Rol Nº 361-2019, Cita online:


CL/JUR/6550/2019

2. El derecho del comunero sobre la cosa embargada debe tramitarse


según la forma establecida para la tercería de dominio

Que adicionalmente y tal como lo reclamó en su oportunidad la


ejecutante, la tercería de posesión incoada no era la vía idónea para
reclamar los derechos de comunera que aduce tener la tercerista sobre
el inmueble embargado, porque su argumentación se opone al mandato
expreso del artículo 519 del Código de Enjuiciamiento civil (...). Esta
prescripción, de carácter vinculante, inhabilita a los juzgadores para
tramitar un incidente de la especie del intentado, bajo una forma distinta
de la tercería de dominio, que no fue el vehículo procesal utilizado por
el tercerista para plantear su oposición (considerando 5º, sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 23/12/2011, Rol Nº 4105-2010, Cita online:


CL/JUR/10132/2011

ARTÍCULO 520 (542)

Podrán también ventilarse conforme al procedimiento de las tercerías los


derechos que haga valer el ejecutado invocando una calidad diversa de
aquella en que se le ejecuta. Tales serían, por ejemplo, los casos siguientes:

1º El del heredero a quien se ejecute en este carácter para el pago de las


deudas hereditarias o testamentarias de otra persona cuya herencia no haya
aceptado;

2º El de aquel que, sucediendo por derecho de representación, ha


repudiado la herencia de la persona a quien representa y es perseguido por
el acreedor de ésta;

3º El del heredero que reclame del embargo de sus bienes propios


efectuado por acción de acreedores hereditarios o testamentarios que hayan
hecho valer el beneficio de separación de que trata el Título XII del Libro III
del Código Civil, y no traten de pagarse del saldo a que se refiere el
artículo 1383 del mismo Código. Al mismo procedimiento se sujetará la
oposición cuando se deduzca por los acreedores personales del heredero; y

4º El del heredero beneficiario cuyos bienes personales sean embargados


por deudas de la herencia, cuando esté ejerciendo judicialmente alguno de
los derechos que conceden los artículos 1261 a 1263 inclusive del Código
Civil.

El ejecutado podrá, sin embargo, hacer valer su derecho en estos casos


por medio de la excepción que corresponda contra la acción ejecutiva, si a
ello ha lugar.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 464, 518, 521 y 524. Código Civil:
artículos 1225 y siguientes, 1259, 1261 a 1263, 1378 y 1383.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Facultad del ejecutado para interponer una tercería de dominio y


hacer valer sus derechos invocando una calidad diversa en la que se
le ejecuta

El artículo 520 del Código de Procedimiento Civil estatuye que


"Podrán también ventilarse conforme al procedimiento de las tercerías
los derechos que haga valer el ejecutado invocando una calidad diversa
de aquella en que se le ejecuta", para luego describir, a modo ejemplar,
ciertos casos en que ello acontece, mencionando en su Nº 4 la situación
del "heredero beneficiario cuyos bienes personales sean embargados
por deudas de la herencia, cuando esté ejerciendo judicialmente alguno
de los derechos que conceden los artículos 1261 a 1263 inclusive del
Código Civil". Así, el precepto "permite hacer valer derechos que se
tengan en calidad diversa de aquellos en que se ejecuta, o sea,
alegando en la tercería derechos que no pueden perseguirse con los
créditos invocados, por tener a su respecto una calidad diversa que la
que se le imputa, sin perjuicio de que también esa parte pueda hacer
valer estos derechos por medio de la excepción que corresponda si a
ella ha lugar". Asimismo, del tenor literal de la primera parte de la norma
en análisis se advierte que podrían existir otras situaciones que
autoricen al ejecutado a interponer una tercería de dominio para hacer
valer sus derechos "invocando una calidad diversa en la que se le
ejecuta" (considerando 9º de la sentencia de casación).
Corte Suprema, 7/02/2019, Rol Nº 7506-2018, Cita online:
CL/JUR/684/2019

ARTÍCULO 521

La tercería de dominio se seguirá en ramo separado con el ejecutante y el


ejecutado, por los trámites del juicio ordinario, pero sin escrito de réplica y
dúplica. Las tercerías de posesión, de prelación y de pago se tramitarán como
incidente.189

El tercerista tendrá el mismo derecho que el artículo 457 concede al deudor


principal.190

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 89, 90, 91, 253 y siguientes, 311, 318,
457 y 523.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Tercería de dominio. Derecho del tercerista de sustituir el embargo


consignando una cantidad suficiente para el pago de la deuda.
Sustitución del embargo no hace cesar la tramitación de la tercería.
Finalizado el procedimiento de tercería se determina si cabe la
devolución de los dineros consignados o si servirán para pagar la
deuda

La historia fidedigna del establecimiento de la ley muestra que el


objetivo preciso de la modificación introducida al artículo 521 del Código
de Procedimiento Civil era darle la oportunidad al tercerista de consignar
una suma de dinero, en reemplazo de los bienes embargados, que
garantizara el pago de la deuda en caso de que no probare su propiedad
sobre aquellos. La idea fundamental era evitar que dichos bienes fueran
rematados para pagar una deuda ajena, y que después se comprobare
su dominio. Con ese propósito, en la discusión parlamentaria se
consideró conveniente otorgarle el mismo derecho que tiene el deudor
principal, de sustituir el embargo. En consecuencia, la aplicación de la
figura de la sustitución del embargo a los terceristas debe ser entendida
como un mecanismo que permite recuperar los bienes embargados,
reemplazándolos por una suma de dinero que garantiza el pago de la
deuda, para el caso que no se logre acreditar el dominio de los mismos.
Eso implica que la sustitución no hace cesar el procedimiento de la
tercería, sino que al igual que en el caso del deudor —que mantiene la
oposición no obstante la sustitución— sigue su curso, a través del cual
se intentará acreditar el dominio de los bienes que habían sido
embargados, y sólo finalizado el procedimiento, se determinará si cabe
la devolución de los dineros consignados o si, en cambio, servirán para
pagar la deuda (considerando 8º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 18/04/2017, Rol Nº 28378-2016, Cita online:


CL/JUR/1801/2017

2. Resolución que falla la tercería de posesión tiene la naturaleza


jurídica de sentencia definitiva. Tramitación incidental de la tercería
de posesión no modifica la naturaleza jurídica de sentencia definitiva
de la resolución que la falla. Aplicación del plazo para recurrir de
apelación de diez días hábiles

Las tercerías del procedimiento ejecutivo constituyen un juicio donde


se ventila una controversia independiente de la ejecución que las
motiva, por lo que, de acuerdo con lo que dispone el artículo 158 del
Código de Procedimiento Civil, la resolución que falla la demanda de
tercería participa de la naturaleza jurídica de una sentencia definitiva,
toda vez que pone fin a la instancia, resolviendo la cuestión o asunto
que ha sido objeto del juicio. Refuerza lo anterior el hecho de establecer
el artículo 521 del Código de Procedimiento Civil, en lo pertinente, que
las tercerías de posesión, de prelación y de pago se tramitarán "como"
incidente, entendiéndose, que el procedimiento aplicable para la
sustanciación de una demanda de tercería es el incidental, sin que ello
afecte la naturaleza de la sentencia que, en definitiva, la resuelve. De lo
anteriormente dicho, se deduce que la resolución que falla una tercería
de posesión es una sentencia definitiva, y por tanto, apelable dentro del
plazo de 10 días contados desde su notificación, así lo dispone el
artículo 189 inciso segundo del Código antes citado. De esta forma, el
recurso de hecho debe ser acogido (considerandos 3º a 5º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 22/03/2019, Rol Nº 2661-2018,

Cita online: CL/JUR/1605/2019

3. La tercería de dominio se sigue por los trámites del juicio ordinario


exceptuando la réplica y dúplica
Que en lo tocante a la alegación de los demandados en cuanto a que
dada la naturaleza de la acción intentada en éstos, en la que no procede
la demanda reconvencional, la única forma de hacer valer la
prescripción era a través de una excepción (...), la tercería de dominio
se seguirá por los trámites del juicio ordinario, pero sin escritos de
réplica y dúplica, no existiendo por ende limitación legal alguna que
impida la interposición de una demanda reconvencional en el marco de
dicho procedimiento, en cuanto la citada norma sólo excluye la
posibilidad de replicar y de duplicar, mas no la factibilidad de ejercer una
acción de carácter reconvencional, en que se discute una cuestión
anexa a la que es objeto de la tercería y que está sujeta también al
procedimiento ordinario (considerando 11º, sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 26/08/2013, Rol Nº 9432-2012,

Cita online: CL/JUR/1906/2013

Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de La Serena, 15/07/2011, Rol Nº 290-2011,

Cita online: CL/JUR/10404/2011

— Corte de Apelaciones de Santiago, 9/01/2011, Rol Nº 771-2010,

Cita online: CL/JUR/6170/2011

— Corte Suprema, 26/08/2004, Rol Nº 2856-2004,

Cita online: CL/JUR/4987/2004

4. Las tercerías son cuestiones accesorias del juicio ejecutivo

Atendida la tramitación que el legislador ha previsto para la


intervención de un extraño en el juicio ejecutivo invocando los derechos
que señala la ley, es dable concluir que dicho procedimiento no puede
ser confundido ni asimilado al del juicio ejecutivo, dado que ambos
comportan un diligenciamiento distinto, cuya justificación responde a los
objetivos y finalidades específicas de cada uno de estos procesos.
"Estimamos que las tercerías son cuestiones accesorias (no incidentes)
del juicio ejecutivo —carácter que les da el conjunto de las varias
disposiciones del Código de Procedimiento Civil y que les han atribuido
los tribunales— y debido a que se promueve en ellas una nueva acción,
acción ejercitada por un tercero, tendiente a que se le acepte como
acreedor, se declare su prelación en el pago o se le reconozca un
derecho tan importante como el de dominio o el de concurrir en el pago
en el producto de lo embargado; el legislador dadas las características
del juicio ejecutivo y la naturaleza de la nueva acción deducida les ha
señalado una tramitación diversa" (Sergio Rodríguez
Garcés, op. cit., pág. 317) (considerando 5º, sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 28/10/2010, Rol Nº 9405-2009,

Cita online: CL/JUR/8878/2010

ARTÍCULO 522

La interposición de una tercería no suspenderá en caso alguno el


procedimiento ejecutivo. El procedimiento de apremio se suspende
únicamente en el caso contemplado en el inciso primero del artículo 523 y,
tratándose de una tercería de posesión, sólo si se acompañan a ella
antecedentes que constituyan a lo menos presunción grave de la posesión
que se invoca.191

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 298, 458, 523 y 525. Código Civil:
artículo 700 y siguientes, 2465, 924 y 925.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La interposición de una tercería no suspenderá en caso alguno el


procedimiento ejecutivo

La interposición de una tercería no suspenderá en caso alguno el


procedimiento ejecutivo, de suerte que subsiste la obligación que tiene
el actor de instar por la prosecución del juicio; y las normas sobre
abandono del procedimiento están contenidas en las disposiciones
comunes a todos ellos (considerando 2º, sentencia de la Corte
Suprema).
Corte Suprema, 20/06/2005, Rol Nº 5251-2004, Cita online:
CL/JUR/6079/2005

ARTÍCULO 523 (545)

No se dará curso a la tercería de dominio si no contiene las enunciaciones


que indica el artículo 254; ni se suspenderá por su interposición el
procedimiento de apremio, salvo que se apoye en instrumento público
otorgado con anterioridad a la fecha de la presentación de la demanda
ejecutiva. En los demás casos el remate se llevará a cabo, entendiéndose
que la subasta recaerá sobre los derechos que el deudor tenga o pretenda
tener sobre la cosa embargada.

Las resoluciones que se dicten son apelables y la apelación se concederá


en el efecto devolutivo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 192, 194, 458, 522 y 526. Código
Civil: artículo 1699.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Para que una resolución produzca efectos sin notificación previa de


las partes, es menester un texto legal que así lo disponga

Para que una resolución produzca efectos sin notificación previa de


las partes, es menester un texto legal que así lo disponga, lo que no
acontece con el artículo 523 del mismo cuerpo legal (considerando
único, sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 20/07/1994, Rol Nº 2746-1994,

Cita online: CL/JUR/1535/1994

2. La regla general es que no se suspenda el procedimiento de apremio


y se suspenderá si los documentos fundantes dan cuenta de un
derecho real de dominio, en forma directa

La suspensión del procedimiento de apremio por la interposición de


una tercería de dominio constituye una excepción que sólo procede
cuando dicha tercería se apoya en documentos públicos; luego la norma
que la dispone debe ser interpretada restrictivamente. La regla general
es que no se suspenda el procedimiento de apremio y se suspenderá si
los documentos fundantes dan cuenta de un derecho real de dominio,
en forma directa (considerando 3º, sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 16/04/1990, Rol Nº 14478-1990, Cita online:


CL/JUR/421/1990

ARTÍCULO 524 (546)

En el caso del inciso 1º del artículo 519, podrá el acreedor dirigir su acción
sobre la parte o cuota que en la comunidad corresponda al deudor para que
se enajene sin previa liquidación, o exigir que con intervención suya se liquide
la comunidad. En este segundo caso, podrán los demás comuneros oponerse
a la liquidación, si existe algún motivo legal que la impida, o si, de procederse
a ella, ha de resultar grave perjuicio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 519 y 523. Código Civil:


artículos 2305 y 2313.

ARTÍCULO 525 (547)

Si la tercería es de prelación, seguirá el procedimiento de apremio hasta


que quede terminada la realización de los bienes embargados.

Verificado el remate, el tribunal mandará consignar su producto hasta que


recaiga sentencia firme en la tercería.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 174, 458, 509, 522, 523 y 526.
Código Orgánico de Tribunales: artículo 517.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Al tercerista le interesa la pronta realización de los bienes y


suspender la vía de apremio

Si la tercería es de prelación, seguirá el procedimiento de apremio


hasta que quede terminada la realización de los bienes embargados. Lo
anterior resulta razonable, toda vez que interesa al tercerista la pronta
realización de los bienes embargados y en que se impida el pago al
ejecutante mientras su crédito no haya sido pagado preferentemente.
En definitiva, no tiene interés para suspender el procedimiento, es decir,
el remate de los bienes embargados ya que no se disputa el dominio de
ellos (...). Eso sí, tiene interés que se suspenda la vía de apremio; es
decir, una vez realizados los bienes y consignado el dinero obtenido,
necesariamente debiera suspender los efectos del remate
(considerando 2º, sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 2/09/2010, Rol Nº 3125-2010,

Cita online: CL/JUR/12235/2010

2. Tercería de prelación pierde oportunidad una vez ejecutoriada la


resolución que hace lugar a la adjudicación

En la especie, conforme al artículo 525 del Código de Procedimiento


Civil, la demanda de tercería de prelación puede ser deducida desde el
momento en que se inicia la ejecución hasta el momento en que se haga
el pago al ejecutante, por tanto una vez efectuado el pago, la tercería
de prelación no surte efecto alguno, toda vez que ante dicha
circunstancia no existe un pago sobre el cual ser preferido
(considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 1/07/2019, Rol Nº 257-2019,

Cita online: CL/JUR/3879/2019

ARTÍCULO 526 (548)

Si se han embargado o se embargan bienes no comprendidos en la


tercería, seguirá sin restricción alguna respecto de ellos el procedimiento de
apremio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 456, 458, 522, 523 y 525.

ARTÍCULO 527 (549)

Si no teniendo el deudor otros bienes que los embargados, no alcanzan a


cubrirse con ellos los créditos del ejecutante y del tercerista, ni se justifica
derecho preferente para el pago, se distribuirá el producto de los bienes entre
ambos acreedores, proporcionalmente al monto de los créditos ejecutivos
que hagan valer.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 518, 528 y 529. Código Civil:
artículos 2469 y 2470.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Tercería de pago. I. Tercería de pago, concepto y requisitos de


procedencia

La tercería de pago ha sido definida por la doctrina como la


intervención, en el juicio ejecutivo, de un tercero que pretende derecho
para concurrir con el ejecutante en el pago, a falta de otros bienes del
deudor; también como aquella por la cual un tercero, acreedor ejecutivo
no privilegiado, interviene en el juicio ejecutivo pretendiendo derecho
para concurrir al pago con el producto de bienes embargados a falta de
otros bienes embargables y a prorrata de sus respectivos créditos. Para
la procedencia de la tercería de pago, de acuerdo a los artículos 518
Nº 4 y 527 del Código de Procedimiento Civil, se halla supeditada al
concurso copulativo de los siguientes presupuestos: a) el crédito
invocado por la persona que la plantea debe tener calidad de ejecutivo,
lo que significa que ha de cumplir con las exigencias requeridas para
cursar su cumplimiento por la vía ejecutiva; y b) el deudor debe carecer
de otros bienes, fuera de los que han sido objeto del embargo, para
afrontar el pago de los créditos del ejecutante y del tercerista
(considerandos 7º y 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/03/2016, Rol Nº 10366-2015, Cita online:


CL/JUR/2080/2016

2. Carga de la prueba sobre la ausencia de otros bienes del deudor


recae sobre el tercerista, no sobre el ejecutante

Actualmente, la Corte Suprema ha fallado que corresponde al


demandante incidental o tercerista —y no al ejecutante— acreditar el
cumplimiento de la exigencia o condición que establece el artículo 527
del Código de Procedimiento Civil, esto es, la ausencia de otros bienes
en el patrimonio del deudor. En efecto, el Máximo Tribunal ha dicho que
"al rechazar la tercería de pago (...), los jueces del mérito no han
incurrido en error de derecho y, antes al contrario, han dado correcta
aplicación a lo que dispone el artículo 527 del Código de Procedimiento
Civil, toda vez que la tercería de pago fue interpuesta por un tercero
acreedor aduciendo derecho para concurrir al pago con el producto de
los bienes embargados en la causa, no acreditó la circunstancias de que
el deudor carece de otros bienes distintos de aquellos, estableciéndose
por el contrario (...) que el tercerista pueda hacer efectivo su crédito en
otros bienes de propiedad del ejecutado" (considerando 7º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 28/02/2019, Rol Nº 606-2018,

Cita online: CL/JUR/6744/2019

3. El tercerista debe probar que el ejecutado carece de bienes


suficientes para hacer efectivo el pago que se alega

Que, en el recurso de casación que se analiza, el primero de los


presupuestos de la tercería, a que se aludió en el acápite a) del
considerando anterior, no ha sido materia de cuestionamiento,
radicándose el reparo en el segundo de ellos, en cuanto sostiene el
impugnador que, pese a no haber rendido el tercerista prueba alguna
orientada a demostrar que el ejecutado carecía de otros bienes en los
cuales hacer efectivo el crédito que alega (considerando 6º, sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/05/2011, Rol Nº 7459-2009, Cita online:


CL/JUR/9691/2011

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 30/05/2013, Rol Nº 8821-2012,

Cita online: CL/JUR/1168/2013

— Corte Suprema, 2/04/2012, Rol Nº 501-2012,

Cita online: CL/JUR/3934/2012

— Corte de Apelaciones de San Miguel, 4/07/2012, Rol Nº 98-2012,

Cita online: CL/JUR/4382/2012


— Corte Suprema, 27/07/2011, Rol Nº 4916-2011,

Cita online: CL/JUR/10393/2011

— Corte de Apelaciones de Santiago, 20/07/2010, Rol Nº 1701-2010,

Cita online: CL/JUR/17337/2010

ARTÍCULO 528 (550)

Cuando la acción del segundo acreedor se deduzca ante diverso tribunal,


podrá pedir se dirija oficio al que esté conociendo de la primera ejecución
para que retenga de los bienes realizados la cuota que proporcionalmente
corresponda a dicho acreedor.

Si existe depositario en la primera ejecución, no valdrá el nombramiento en


las otras ejecuciones. El ejecutante que a sabiendas de existir depositario, o
no pudiendo menos de saberlo, hace retirar las especies embargadas en la
segunda ejecución por el nuevo depositario, será sancionado con las penas
asignadas al delito de estafa.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 518, 521, 527 y 529. Código Penal:
artículos 467 y siguientes.

ARTÍCULO 529 (551)

El tercerista de pago podrá solicitar la remoción del depositario alegando


motivo fundado; y, decretada la remoción, se designará otro de común
acuerdo por ambos acreedores, o por el tribunal si no se avienen. Podrá
también el tercerista intervenir en la realización de los bienes, con las
facultades de coadyuvante. Con las mismas facultades podrá obrar el primer
acreedor en la ejecución que ante otro tribunal deduzca el segundo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 23, 443 y 451.

TÍTULO II DEL PROCEDIMIENTO EJECUTIVO EN LAS


OBLIGACIONES DE HACER Y DE NO HACER
ARTÍCULO 530 (557)

Hay acción ejecutiva en las obligaciones de hacer, cuando, siendo


determinadas y actualmente exigibles, se hace valer para acreditarlas algún
título que traiga aparejada ejecución de conformidad al artículo 434.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 434 al 437, 443, 532, 533, 534 y 596.
Código Civil: artículos 1552 y 1553.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cumplimiento ejecutivo de obligación de hacer. Requisitos de


procedencia de la acción ejecutiva en las obligaciones de hacer.
Improcedencia de la ejecución cuando el título aparejado no contiene
una obligación determinada ni resulta actualmente exigible

El artículo 530 del Código de Procedimiento Civil dispone que hay


acción ejecutiva en las obligaciones de hacer cuando, siendo
determinadas y actualmente exigibles, se hace valer para acreditarlas
algún título que traiga aparejada ejecución, de conformidad al
artículo 434 de ese mismo Código. Luego, en la especie, son tres los
requisitos que se desprenden del tenor del artículo 530 del Código de
Procedimiento Civil para el éxito de la pretensión ejecutiva de una
obligación de hacer: a) que la obligación conste en un título ejecutivo;
b) que ésta sea actualmente exigible; y c) que la misma sea
determinada. En la especie, correctamente concluyen los
sentenciadores del grado que el título invocado no es idóneo para los
fines pretendidos por la ejecutante, pues aparece evidente que carece
de los dos últimos requisitos recién enunciados. Si bien consta en
escritura pública, la obligación que en él se contiene no se encuentra
determinada ni es actualmente exigible por la vía compulsiva elegida
por la actora. Luego, la mención del fallo cuestionado referida a la
indeterminación del monto naturalmente ha de entenderse a la cantidad
en la que corresponde que el ejecutado venda sus derechos sociales,
suma que no es proporcionada por el título invocado, pues su
cálculo supone conocer la fecha de cesión (considerando 8º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 28/12/2016, Rol Nº 73805-2016, Cita online:


CL/JUR/8528/2016
2. Cumplimiento ejecutivo de obligación de hacer. Instrumento privado
protocolizado no constituye título ejecutivo. Contrato de promesa de
compraventa no está incluido entre los actos y contratos que la Ley
Nº 14.171 considera como escritura pública cuando fueron otorgados
por escritura privada y protocolizados. Excepción de falta de alguno
de los requisitos para que el título tenga fuerza ejecutiva, acogida

En la especie, el demandante ejerció la acción ejecutiva de obligación


de hacer cuyas reglas se encuentran en los artículos 530 y siguientes
del Código de Procedimiento Civil, fundada en un instrumento privado
que contiene un contrato de promesa de compraventa, que a pesar de
ser calificado por aquél como "escritura pública" y, por ende, como un
título ejecutivo, lo cierto es que ante la ley no lo es. En efecto, el
artículo 434 Nº 2 del Código precitado establece que constituye título
ejecutivo la "copia autorizada de escritura pública" y, examinado dicho
instrumento privado, a la luz de esta disposición, se entiende que es un
instrumento privado que se encuentra protocolizado, protocolización
que no le otorga la calidad de escritura pública en virtud de lo dispuesto
en el artículo 1699 del Código Civil, en relación con los artículos 401
Nº 1 y 403 a 406 del Código Orgánico de Tribunales (considerandos 7º
y 8º de la sentencia de la Corte de Apelaciones). Por otra parte, la
circunstancia de que el contrato de promesa de compraventa no esté
expresamente incluido entre los actos y contratos que indica el
artículo 67 de la Ley Nº 14.171, que pueden ser otorgados por escritura
privada y protocolizados conforme al artículo 68 de la ley precitada, para
ser considerados como si fuere una escritura pública y tengan mérito
ejecutivo de acuerdo al inciso final de la última norma aludida, lleva a
concluir que dicho instrumento no puede ser calificado de escritura
pública de acuerdo a estas reglas especiales. En consecuencia, la
acción ejecutiva ejercida se funda en un instrumento que no cumple con
los requisitos o condiciones establecidos por la ley para que dicho título
tenga fuerza ejecutiva, lo que determina el acogimiento de la excepción
del artículo 464 Nº 7 del Código de Procedimiento Civil
(considerandos 9º y 10º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Talca, 13/05/2016, Rol Nº 2788-2015,

Cita online: CL/JUR/4208/2016

3. Instrumento privado en el que consta la obligación de hacer


Que en la especie el acta de acuerdo es un instrumento privado que
contiene una obligación para el Servicio de Salud Valparaíso San
Antonio pactada en la forma prevista en la ley y su reglamento, y la
ejecución fue preparada a través de la citación del representante del
Servicio de Salud demandado a una audiencia que se llevó a cabo ante
el Tribunal, en la que aquél, cuya personería se hizo constar en el Nº 6
del documento aludido, reconoció su firma puesta en tal documento,
quedando por lo tanto preparada la ejecución de conformidad a lo
previsto en el artículo 436 del Código de Procedimiento Civil, lo que, a
mayor abundamiento, y sin que ello fuere necesario, fue refrendado por
la juez de primer grado a fojas 19 mediante resolución de 10 de enero
de 2013, que tuvo por preparada la ejecución (considerando 6º,
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 14/01/2014, Rol Nº 5364-2013, Cita online:


CL/JUR/80/2014

ARTÍCULO 531 (558)

Las reglas del párrafo 1º del Título anterior tendrán cabida en el


procedimiento de que trata el presente Título, en cuanto sean aplicables y no
aparezcan modificadas por los artículos siguientes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 434 al 437, 443, 533, 534 y 596.
Código Orgánico de Tribunales: artículo 9º.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Para que quede efectivamente preparada la ejecución en las


obligaciones de hacer, a través de la confesión de deuda es menester
que el acreedor cite a su deudor a la presencia judicial.

Para que quede efectivamente preparada la ejecución en las


obligaciones de hacer, a través de la confesión de deuda es menester
que el acreedor cite a su deudor a la presencia judicial, teniéndose por
confesada la obligación si el citado no comparece (considerando 3º,
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 10/03/2000, Rol Nº 7665-1996,


Cita online: CL/JUR/1718/2000

ARTÍCULO 532 (559)

Si el hecho debido consiste en la suscripción de un instrumento o en la


constitución de una obligación por parte del deudor, podrá proceder a su
nombre el juez que conozca del litigio, si, requerido aquél, no lo hace dentro
del plazo que le señale el tribunal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 434 al 437, 443, 533, 534 y 596.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cumplimiento incidental. Negativa del tribunal para cumplir con la


obligación una vez transcurrido el plazo otorgado al deudor para ello.
Indefensión del demandante al impedírsele la ejecución del fallo que
obtuvo a su favor

En la especie, el actor solicitó que el tribunal otorgara la escritura de


compraventa en representación del deudor, ya que éste no suscribió
dicho contrato en el plazo otorgado. Sin embargo, no obstante el tenor
de lo que dispone el artículo 532 del Código de Procedimiento Civil, el
tribunal de primer grado se limitó a resolver la referida petición
señalando "estése al mérito de lo resuelto", lo que impide conocer los
fundamentos de la decisión jurisdiccional, pues el legislador estableció
que transcurrido el plazo otorgado para que el deudor cumpla con la
obligación, será el juez quien deberá hacerlo en su representación,
siendo justamente ello lo solicitado en autos. Tal decisión deja en la
indefensión al actor, pues no obstante la naturaleza de la resolución
recurrida, tal decisión impide la ejecución del fallo que obtuvo a su favor
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/05/2016, Rol Nº 18309-2016, Cita online:


CL/JUR/2877/2016

2. Se puede apremiar al deudor, pudiendo el tribunal imponerle arresto


hasta por quince días, y repetir estas medidas para obtener el
cumplimiento de la obligación
(...) se procederá de acuerdo con el procedimiento de apremio en las
obligaciones de hacer, y como hemos señalado, que conforme a la
normativa del artículo 28 inciso 2º de la Ley de Municipalidades, toda
obligación que una sentencia ordena cumplir se transforma, por el solo
ministerio de la ley, en la dictación del decreto alcaldicio
correspondiente, corresponde, de acuerdo a lo señalado, proceder de
acuerdo con las reglas del procedimiento de apremio en las
obligaciones de hacer. En consecuencia, es aplicable en este caso las
disposiciones del artículo 532 del Código de Procedimiento Civil, y en
caso de incumplimiento, y sin perjuicio de otros derechos, como lo
señala el artículo 543 del mismo cuerpo legal (considerando 7º,
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/08/1999, Rol Nº 2890-1999, Cita online:


CL/JUR/1548/1999

ARTÍCULO 533 (560)

Cuando la obligación consista en la ejecución de una obra material, el


mandamiento ejecutivo contendrá:

1º La orden de requerir al deudor para que cumpla la obligación; y 2º


El señalamiento de un plazo prudente para que dé principio al trabajo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 443 y 535.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Permiten, en caso de incumplimiento y sin perjuicio de otros


derechos, apremiar al deudor

Permiten, en caso de incumplimiento y sin perjuicio de otros derechos,


apremiar al deudor, pudiendo el tribunal imponerle arresto hasta por
quince días y repetir estas medidas para obtener el cumplimiento de la
obligación (considerando 7º, sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/08/1999, Rol Nº 2890-1999, Cita online:


CL/JUR/1548/1999
ARTÍCULO 534 (561)

A más de las excepciones expresadas en el artículo 464, que sean


aplicables al procedimiento de que trata este Título, podrá oponer el deudor
la de imposibilidad absoluta para la ejecución actual de la obra debida.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 464, 531, 536, 542 y 543.

ARTÍCULO 535 (562)

Si no se oponen excepciones, se omitirá la sentencia de pago, y bastará el


mandamiento ejecutivo para que el acreedor haga uso de su derecho de
conformidad a las disposiciones de los artículos siguientes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 464, 531, 536, 542 y 543.

ARTÍCULO 536 (563)

El acreedor podrá solicitar que se le autorice para llevar a cabo por medio
de un tercero, y a expensas del deudor, el hecho debido, si a juicio de aquél
es esto posible, siempre que no oponiendo excepciones el deudor se niegue
a cumplir el mandamiento ejecutivo; y cuando desobedezca la sentencia que
deseche las excepciones opuestas o deje transcurrir el plazo a que se refiere
el número 2º del artículo 533, sin dar principio a los trabajos.

Igual solicitud podrá hacerse cuando, comenzada la obra, se abandone por


el deudor sin causa justificada.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 530, 533, 534, 535, 538, 542 y 543.

ARTÍCULO 537 (564)

Siempre que haya de procederse de conformidad al artículo anterior,


presentará el demandante, junto con su solicitud, un presupuesto de lo que
importe la ejecución de las obligaciones que reclama.

Puesto en noticia del demandado el presupuesto, tendrá el plazo de tres


días para examinarlo, y si nada observa dentro de dicho plazo, se considerará
aceptado.
Si se deducen objeciones, se hará el presupuesto por medio de peritos,
procediéndose en la forma que establecen los artículos 486 y 487 para la
estimación de los bienes en el caso de remate.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 486, 487, 530, 533, 534, 535, 538,
542 y 543.

ARTÍCULO 538 (565)

Determinado el valor del presupuesto del modo que se establece en el


artículo anterior, será obligado el deudor a consignarlo dentro de tercero día
a la orden del tribunal, para que se entreguen al ejecutante los fondos
necesarios, a medida que el trabajo lo requiera.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 478, 535, 536, 537 y 542.

ARTÍCULO 539 (566)

Agotados los fondos consignados, podrá el acreedor solicitar aumento de


ellos, justificando que ha habido error en el presupuesto o que han
sobrevenido circunstancias imprevistas que aumentan el costo de la obra.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 478, 535, 536, 537 y 542.

ARTÍCULO 540 (567)

Una vez concluida la obra, deberá el acreedor rendir cuenta de la inversión


de los fondos suministrados por el deudor.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 478, 535, 536, 537 y 542.

ARTÍCULO 541 (568)

Si el deudor no consigna a la orden del tribunal los fondos decretados, se


procederá a embargarle y enajenar bienes suficientes para hacer la
consignación, con arreglo a lo establecido en el Título precedente, pero sin
admitir excepciones para oponerse a la ejecución.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 478, 535, 536, 537 y 542.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Aquel que intenta una demanda por interdictos posesorios debe


expresar los actos por los cuales se le ha turbado en su posesión

En efecto (...), al establecer los requisitos para la procedencia de


estos interdictos posesorios, ordena expresamente que quien intente
demanda por este concepto deberá expresar circunstanciadamente los
actos por medio de los cuales se le ha turbado o molestado en su
posesión, o bien en su caso, indicará clara y precisamente los actos por
medio de los cuales se le ha despojado de su posesión. En
consecuencia, es este uno de los requisitos de procedencia de la
querella, sea de amparo o de restitución, en su caso (considerando 4º,
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 6/10/2010, Rol Nº 1435-2009,

Cita online: CL/JUR/8153/2010

ARTÍCULO 542 (569)

Si el acreedor no puede o no quiere hacerse cargo de la ejecución de la


obra debida, de conformidad a las disposiciones que preceden, podrá usar
de los demás recursos que la ley concede para el cumplimiento de las
obligaciones de hacer, con tal que no haya el deudor consignado los fondos
exigidos para la ejecución de la obra, ni se hayan rematado bienes para hacer
la consignación en el caso del artículo 541.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 533, 535, 536, 541 y 543.

ARTÍCULO 543 (570)

Cuando se pida apremio contra el deudor, podrá el tribunal imponerle


arresto hasta por quince días o multa proporcional, y repetir estas medidas
para obtener el cumplimiento de la obligación.

Cesará el apremio si el deudor paga las multas impuestas y rinde además


caución suficiente, a juicio del tribunal, para asegurar la indemnización
completa de todo perjuicio al acreedor.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 274, 276, 349, 380 y 394. Ley
Nº 19.947, Ley de Matrimonio Civil, D.O. 17.05.2004: artículo 68.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Apercibimientos por incumplimiento de régimen establecido de


relación directa y regular

No cabe duda que el incumplimiento del progenitor al no visitar al hijo


o hija tal como se había acordado, genera el denominado caso del "niño
en la ventana" que espera a un padre o madre que no llega ni avisa que
no viene. Es así que, la ley de Menores en su artículo 48 señala que: en
caso de que el padre o madre a quien corresponda mantener la relación
con el hijo dejase de cumplir, injustificadamente, la forma convenida
para el ejercicio del derecho o la establecida por el tribunal, puede ser
instado a darle cumplimiento, bajo apercibimiento de decretar la
suspensión o restricción. Esto no obstara a que se decreten apremios
cuando procedan, de conformidad al inciso 3º o del artículo 66, esto es,
de acuerdo al artículo 543, inciso 3º, del Código de Procedimiento Civil
(arresto hasta por 15 días o multa proporcional, que se puede repetir)
(considerando 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 11/01/2019, Rol Nº 721-2018,

Cita online: CL/JUR/226/2019

2. Apremio a deudor por no pago de pensión alimenticia

Que el artículo 15 de la Ley Nº 14.908 dispone, que decretados los


alimentos por resolución que cause ejecutoria, a favor del cónyuge o los
hijos, el alimentante no hubiere cumplido la obligación en la forma
ordenada o hubiere dejado de efectuar el pago de una o más cuotas, el
juez deberá a petición de parte o de oficio apremiar al deudor como
medida de arresto nocturno, hasta por 15 días (...). Si el alimentante
justificare ante el Tribunal que carece de los medios necesarios para el
pago de una obligación alimenticia, podrá suspenderse el apremio
personal (considerando 4º, sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 15/09/2010, Rol Nº 414-2010,

Cita online: CL/JUR/16969/2010


Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 5/10/2010, Rol Nº 7052-2010,

Cita online: CL/JUR/16968/2010

— Corte Suprema, 6/03/2006, Rol Nº 923-2006,

Cita online: CL/JUR/7314/2006

— Corte Suprema, 6/07/2000, Rol Nº 2122-2000,

Cita online: CL/JUR/3013/2000

— Corte Suprema, 22/08/2001, Rol Nº 3173-2001,

Cita online: CL/JUR/4257/2001

ARTÍCULO 544 (571)

Las disposiciones que preceden se aplicarán también a la obligación de no


hacer cuando se convierta en la de destruir la obra hecha, con tal que el título
en que se apoye consigne de un modo expreso todas las circunstancias
requeridas por el inciso 2º del artículo 1555 del Código Civil, y no pueda tener
aplicación el inciso 3º del mismo artículo.

En el caso en que tenga aplicación este último inciso, se procederá en


forma de incidente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 89, 90, 91, 434, 530, 533, 536, 542 y
543. Código Civil: artículo 1555.

TÍTULO III DE LOS EFECTOS DEL DERECHO LEGAL DE


RETENCIÓN

ARTÍCULO 545 (697)


Para que sea eficaz el derecho de retención que en ciertos casos conceden
las leyes, es necesario que su procedencia se declare judicialmente a petición
del que pueda hacerlo valer.

Podrá solicitarse la retención como medida precautoria del derecho que


garantiza, y, en tal caso, se procederá conforme a lo dispuesto en los
artículos 299, 300 y 302.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 299, 300, 302, 399 y 598. Código
Civil: artículos 800, 1937, 1942, 2162, 2193, 2234 y 2235.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. El derecho legal de retención tiene por finalidad corregir faltas o


abusos graves cometidos en la sentencia interlocutoria

Este medio de impugnación tiene por exclusiva finalidad corregir las


faltas o abusos graves cometidos en sentencia interlocutoria que ponga
fin al juicio o haga imposible su continuación o en sentencia definitiva,
que no sea susceptible de recurso alguno, ordinario o extraordinario
(considerando 4º, sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/01/2012, Rol Nº 15586-2011, Cita online:


CL/JUR/4226/2012

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 3/05/2012, Rol Nº 826-2012,

Cita online: CL/JUR/865/2012

— Corte Suprema, 4/12/2001, Rol Nº 4245-2001,

Cita online: CL/JUR/4755/2001

ARTÍCULO 546 (698)

Los bienes retenidos por resolución ejecutoriada serán considerados,


según su naturaleza, como hipotecados o constituidos en prenda para los
efectos de su realización y de la preferencia a favor de los créditos que
garantizan. El decreto judicial que declare procedente la retención de
inmuebles deberá inscribirse en el Registro de Hipotecas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 297, 298 y 301.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Solicitud de alzamiento de derecho legal de retención. Alcance de la


voz "realización" utilizada en el artículo 546 del Código de
Procedimiento Civil. Carácter divisible del derecho de retención

Al señalar el artículo 546 del Código de Procedimiento Civil que "Los


bienes retenidos por resolución ejecutoriada serán considerados, según
su naturaleza, como hipotecados o constituidos en prenda para los
efectos de su realización y de la preferencia a favor de los créditos que
garantizan...", debe entenderse el término "realización", como el acto o
procedimiento por el cual la garantía se hace efectiva, esto es, la venta
del bien en garantía. Dicha interpretación es plenamente congruente
con la oración con la que continúa el artículo 546 del Código de
Procedimiento Civil, esto es, "y de la preferencia a favor de los créditos
que garantizan". Las preferencias o privilegios de los créditos sólo se
hacen valer cuando éstos son solucionados. De esta forma, la referida
norma no extiende la similitud de los efectos del derecho de retención a
la hipoteca cuando dicho derecho de retención se encuentra vigente. Es
decir, ambos derechos son similares en el evento de que el bien sobre
el que recae —en este caso inmueble—, ha de realizarse —venderse—
para hacer valer su calidad de garantía (considerandos 1º y 2º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones). Aunque se reconociera que el
derecho de retención tiene el carácter de indivisible, característica que
el artículo 546 del Código de Procedimiento Civil no le otorga, esto no
obsta a solicitar el alzamiento del mismo, toda vez que la prescripción
extintiva de la acción que emana del mismo fue declarada entre las
mismas partes del presente recurso. Luego, si dicho derecho tuviere el
carácter de indivisible, implica que dicha prescripción extintiva afecta a
todos los que se les reconoció dicho derecho. Así las cosas, el mismo
tribunal del grado, reconoció la facultad del actor de disponer el
alzamiento parcial del derecho de retención. Negar a la parte recurrente
dicha solicitud respecto a la parte recurrida, constituye una
contradicción al aforismo jurídico que reza que "que para una misma
razón, debe existir una misma disposición", o una contradicción a
decisiones del sentenciador, vertidas en la misma causa
(considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Temuco, 17/03/2017, Rol Nº 893-2016,

Cita online: CL/JUR/1055/2017

ARTÍCULO 547 (699)

De la misma preferencia establecida en el artículo anterior gozarán las


cauciones legales que se presten en substitución de la retención.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 297, 298 y 301.

ARTÍCULO 548 (700)

Podrá el juez, atendidas las circunstancias y la cuantía del crédito, restringir


la retención a una parte de los bienes muebles que se pretenda retener, que
basten para garantizar el crédito mismo y sus accesorios.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 297, 298 y 301.

TÍTULO IV DE LOS INTERDICTOS

§ 1. Definiciones y reglas generales

ARTÍCULO 549 (701)

Los interdictos o juicios posesorios sumarios pueden intentarse:

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Finalidad de las acciones posesorias es conservar o recuperar la


posesión de los bienes raíces o de derechos reales constituidos en
ellos. Querella de amparo, concepto, finalidad y requisitos de
procedencia. Instalación por parte del querellado de postes de fierro
en cada lado del camino vecinal unidos por una cadena que impide el
acceso al predio del querellante. Acto de molestia que hace imposible
el ejercicio de la posesión sobre el predio

La protección de la posesión está regulada en el título XIII del Libro


Segundo del Código Civil, a través de las acciones posesorias allí
descritas, las que de conformidad a lo preceptuado en el artículo 916 de
dicho Código, tienen por objeto "conservar o recuperar la posesión de
los bienes raíces o de derechos reales constituidos en ellos". Entre las
referidas acciones se encuentra la denominada querella de amparo,
prevista en el artículo 921 del Código Civil en los siguientes términos:
"El poseedor tiene derecho para pedir que no se le turbe o embarace su
posesión o se le despoje de ella, que se le indemnice del daño que ha
recibido y que se le dé seguridad contra el que fundadamente teme"; su
objeto es, en consecuencia, impedir o poner término a la turbación o
embarazo en la posesión que, en ciertos casos, de continuar, puede
incluso llevar a una privación o despojo de la misma. Desde una
perspectiva procesal, los interdictos posesorios se regulan en el
artículo 549 y siguientes del Código de Procedimiento Civil y, en
concordancia con la definición sustantiva que se ha dado antes de la
querella de amparo, el artículo 551 de este Código establece los
requisitos que deberá acreditar quien la intente: a) que personalmente
o agregando la de sus antecesores, ha estado en posesión tranquila y
no interrumpida durante un año completo del derecho en que pretender
ser amparado; y b) que se le ha tratado de turbar o molestar en su
posesión o que en el hecho se le ha turbado o molestado por medio de
actos que exprese circunstanciadamente (considerando 5º de la
sentencia de reemplazo).

En el caso de autos, por una parte, el querellante ha acreditado estar


en posesión del predio en cuestión por el plazo requerido, sin que se
hubieren hecho constar actos que controviertan su condición de ser
tranquila y no interrumpida, y, por otra, se encuentra establecido que el
querellado ha desplegado una serie de actos que han turbado o
molestado la posesión del predio del demandante, desde que la
instalación de dos postes o pilares de fierro en cada lado del camino
vecinal frente a su propiedad, unidos por una cadena, obstruye la
circulación vehicular por dicho camino, impidiendo el acceso a la
propiedad del querellante. Si bien la instalación de dicha estructura no
se ha verificado en el predio mismo del querellante, sino en el camino
vecinal de acceso a éste, es un hecho objetivo e indiscutible que
perturba su posesión, al extremo de impedir el ingreso vehicular al
predio, por lo que atendida la finalidad de la acción posesoria de que se
trata, no puede sino estimarse que tales actos satisfacen el requisito en
análisis y son idóneos para configurar la molestia o perturbación de la
posesión que hace procedente la querella de amparo. En efecto, no se
trata de cualquier acto de molestia, sino de uno que hace imposible el
ejercicio de la posesión sobre el predio, de suerte que ha de quedar
comprendido en la protección que brinda la querella de posesión. Así
las cosas, corresponde acoger la acción posesoria en comento y
disponer el cese inmediato de los actos de molestia de la posesión del
querellante, respecto del predio individualizado (considerando 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 28/09/2016, Rol Nº 10526-2015, Cita online:


CL/JUR/6623/2016

2. Interdicto posesorio. Fuerza o violencia cuyo uso es arbitrario e ilícito


y constituye o puede constituir delito. Violentamente despojado alude
a la necesidad de que esa privación se logre por vías de hecho.
Insuficiencia probatoria para acreditar la violencia en el despojo

Las palabras "fuerza" o "violencia" de que hablan los artículos 710 y


928 del Código Civil, y 549 y 551 del Código de Procedimiento Civil,
deben entenderse en el sentido de que se ejerciten fuera de la razón y
de justicia, "injustamente", "contra derecho", y esta interpretación
conduce a la conclusión de que los expresados artículos dicen relación
con la fuerza o violencia cuyo uso es arbitrario e ilícito y constituye o
puede constituir delito por ello esta acción también es conocida como
"despojo violento". Se ha dicho que violentamente despojado alude a la
necesidad de que esa privación se logre por vías de hecho, o sea, no
sólo a través de actos puramente compulsivos o de fuerza, sino que,
además, por medio de conductas que involucran autotutela. Se requiere
que las amenazas o vejámenes en contra del poseedor logren que éste
abandone la tenencia del inmueble, de lo contrario, no habría despojo y
en consecuencia no procedería la querella de restablecimiento como vía
idónea a proteger la posesión (considerando 11º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Concepción, 14/04/2016, Rol Nº 215-2016,

Cita online: CL/JUR/2497/2016

3. Querella de amparo. Realización de actos materiales en zona de


superposición de terrenos. Afectación de plantaciones hechas por el
querellante. Actos de turbación de la posesión

En la especie, los medios de prueba permiten tener por acreditado


que efectivamente los querellados han realizado actos materiales en
una zona donde existiría superposición de terrenos, afectando
plantaciones hechas por la querellante, lo que constituye un acto de
turbación de la posesión en los términos previstos en el artículo 921 del
Código Civil, en relación con los artículos 549 Nº 1 y 551 del Código de
Procedimiento Civil, por lo que al querellante, en su calidad de poseedor
material del predio en cuestión, tiene derecho a que se le ampare en
dicha posesión (considerando 4º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Talca, 18/03/2016, Rol Nº 2305-2015,

Cita online: CL/JUR/2058/2016

4. Las acciones posesorias son aquellas que tienen por objeto


conservar o recuperar la posesión de los bienes raíces o de derechos
reales constituidos en ellos

Las acciones posesorias son aquellas que tienen por objeto conservar
o recuperar la posesión de los bienes raíces o de derechos reales
constituidos en ellos, y están concebidos para defender una posesión
que se encuentra amenazada en el hecho o para recuperarla cuando se
ha perdido. Se justifican en la conservación de la paz social mediante la
protección de la apariencia de dominio, protegiéndose la probabilidad
más o menos cierta de que coincidan respecto de los bienes raíces la
situación de poseedor y dueño, soslayando el problema jurídico que
plantea determinar quién tiene derecho a la propiedad y se limitan a
resolver la situación en el puro campo de los hechos. El objeto de la
querella de amparo es conservar la posesión de bienes raíces o de
derechos reales constituidos en ellos, y procede cuando se ha tratado
de turbar o molestar al poseedor en su posesión o en el hecho se le ha
molestado o turbado. Para que prospere esta acción es necesaria la
concurrencia de los siguientes requisitos copulativos: a) que el
poseedor haya detentado la posesión tranquila e ininterrumpida durante
un año a lo menos; b) que se haya sufrido un acto de molestia o
embarazo en dicha posesión, y c) que la acción la deduzca el poseedor
dentro de un año contado desde el acto constitutivo de molestia o
embarazo. La posesión tranquila es aquella que se ejerce públicamente
y sin contradicción y, consecuencialmente, se opone a la violencia y
clandestinidad. A su vez, es posesión no interrumpida la que no ha
sufrido ni interrupción natural ni civil. Y, finalmente, en cuanto al término
de un año previsto en la ley, no es necesario haber poseído
personalmente, toda vez que procede el beneficio de agregación de
posesiones (considerandos 2º y 3º, sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 26/10/2010, Rol Nº 5-2009, Cita online:


CL/JUR/8799/2010

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 22/12/2004, Rol Nº 855-2004,

Cita online: CL/JUR/5322/2004

5. La acción de restablecimiento se establece a favor de quien ha sido


violentamente despojado

La acción de restablecimiento se establece a favor de quien ha sido


violentamente despojado, tanto de la posesión como de la mera
tenencia, y que por poseer a nombre de otro, o por no haber poseído
durante bastante tiempo, o por cualquier otra causa, no pudiere
instaurar acción posesoria, para que accione a fin de restablecer las
cosas al estado en que antes se hallaban, sin que para esto necesite
probar más que el despojo violento, ni se le puede objetar
clandestinidad o despojo anterior (considerandos 6º y 7º, sentencia de
la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 23/10/2007, Rol Nº 3563-2001,

Cita online: CL/JUR/6535/2007


6. Los interdictos son procedimientos especiales y sumarios reglados
en el Código de Procedimiento Civil, para hacer valer las acciones
posesorias

Los interdictos son procedimientos especiales y sumarios reglados en


el Código de Procedimiento Civil, para hacer valer las acciones
posesorias y las sentencias dictadas en los mismos dejan a salvo a los
litigantes el ejercicio de las acciones ordinarias que eventualmente le
correspondan; consiguientemente, en el presente juicio no corresponde
emitir pronunciamiento sobre las irregularidades formuladas por los
contendientes en relación a las inscripciones de dominio del contrato
(considerando 5º, sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Talca, 8/07/2002, Rol Nº 55858-2002,

Cita online: CL/JUR/4844/2002

7. La validez de la inscripción de un título en el conservador no puede


impugnarse por medio de acciones posesorias

Son presupuestos de la querella de restitución deducida, tanto la


posesión del bien raíz, como el haber sido despojado de ella, ninguno
de los cuales aparecen plenamente justificados en autos. La validez de
la inscripción de un título en el conservador no puede impugnarse por
medio de acciones posesorias, debiendo discutirse en un juicio de lato
conocimiento (considerando 3º, sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/04/2001, Rol Nº 63-2001, Cita online:


CL/JUR/2265/2001

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 23/04/2001, Rol Nº 4888-2000,

Cita online: CL/JUR/2236/2001

— Corte Suprema, 29/01/2001, Rol Nº 4135-1999,

Cita online: CL/JUR/3308/2001

8. La denuncia de obra nueva tiene por finalidad prevenir un daño


La denuncia de obra nueva es la acción judicial que, a fin de prevenir
un daño, se dirige a lograr la suspensión de los trabajos de una obra
nueva, comenzados o a punto de comenzarse, para impedir que la obra
nueva se consume o concluya, pero no cabe respecto de una obra
nueva ya terminada o concluida, que ya no puede ser impedida
(considerando 5º, sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 17/06/2004, Rol Nº 2070-2003, Cita online:


CL/JUR/4779/2004

1º Para conservar la posesión de bienes raíces o de derechos reales


constituidos en ellos;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Objeto y requisitos de querella de amparo

Que, así, el objeto de una querella de amparo, como la intentada en


estos autos, es conservar la posesión de bienes raíces o de derechos
reales constituidos en ellos y procede cuando se ha tratado de turbar o
molestar al poseedor en su posesión o en el hecho se le ha molestado
o turbado. Los requisitos que deben concurrir para que la acción
intentada en autos prospere son: a) que el poseedor haya detentado la
posesión tranquila e ininterrumpida durante un año a lo menos; b) que
se haya sufrido un acto de molestia o embarazo en dicha posesión, y
c) que la acción la deduzca el poseedor dentro de un año contado desde
el acto constitutivo de molestia o embarazo. Estos presupuestos han de
verificarse en forma copulativa, de tal suerte que la inconcurrencia de
cualquiera de ellos impide que la demanda pueda tener acogida
(considerando 3º, sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 26/10/2010, Rol Nº 313-2010, Cita online:


CL/JUR/8799/2010

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Puerto Montt, 22/02/2013, Rol Nº 851-


2012,

Cita online: CL/JUR/431/2013


2º Para recuperar esta misma posesión;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Es requisito esencial de la querella posesoria de restitución probar la


posesión tranquila y no interrumpida durante un año

Dicha querella es el interdicto sumario que se intenta para recuperar


la posesión de bienes raíces o de derechos reales constituidos en ellos,
y el artículo 551 del mismo Código exige, en forma particular, que
personalmente o agregando la de sus antecesores, el querellante haya
estado en posesión tranquila y no interrumpida durante un año completo
del derecho que pretende ser restituido; que ha sido despojado de la
posesión por medio de actos que indicará clara y precisamente, y
deberá indicar los medios probatorios (considerando 6º, sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 18/11/2011, Rol Nº 727-2011,

Cita online: CL/JUR/10317/2011

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Iquique, 20/04/2012, Rol Nº 710-2011,

Cita online: CL/JUR/4184/2012

3º Para obtener el restablecimiento en la posesión o mera tenencia de los


mismos bienes, cuando dicha posesión o mera tenencia hayan sido
violentamente arrebatadas;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Querella de restablecimiento, concepto y finalidad

La querella de restablecimiento regulada en el artículo 928 del Código


Civil y artículo 549 Nº 3 del Código de Procedimiento Civil, es entendida
como: "Aquella acción por la cual el despojado violentamente de la
posesión o mera tenencia de un inmueble persigue se le restituya en
esa posesión o mera tenencia en que se encontraba antes del despojo
violento". (Tratado de los Derechos Reales. Bienes. Alessandri,
Somarriva y Vodanovic. Tomo II, quinta edición, Editorial Jurídica de
Chile, pág. 356). Sin perjuicio de la discusión acerca de la naturaleza
jurídica de la querella de restablecimiento, tenemos que, en primer
lugar, el fundamento principal de las acciones posesorias es evitar que
los particulares se hagan justicia por sí mismos, con la finalidad de
conservar el orden y la paz social. Específicamente, en lo que respecta
a la acción invocada en autos, su finalidad es, que cualquiera que haya
sido despojado violentamente, sea, ante todo, reintegrado
(considerando 7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 15/01/2020, Rol Nº 558-2019,

Cita online: CL/JUR/8112/2020

4º Para impedir una obra nueva;

5º Para impedir que una obra ruinosa o peligrosa cause daño; y

6º Para hacer efectivas las demás acciones posesorias especiales que


enumera el Título XIV, Libro II del Código Civil.

En el primer caso, el interdicto se llama querella de amparo; en el


segundo, querella de restitución; en el tercero, querella de
restablecimiento; en el cuarto, denuncia de obra nueva; en el
quinto, denuncia de obra ruinosa; y en el último, interdicto especial.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 194, 562, 575 y 774. Código Orgánico
de Tribunales: artículo 133. Código Civil: artículos 916 y siguientes, 927 y 2524.

ARTÍCULO 550 (703)

Las apelaciones en los juicios posesorios se concederán sólo en el efecto


devolutivo, salvo que la ley expresamente las mande otorgar en ambos
efectos o que el fallo apelado no dé lugar al interdicto; y en todo caso su
tramitación se ajustará a las reglas establecidas para los incidentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 191, 192, 194, 562, 569, 575 y 774.

§ 2. De las querellas posesorias en particular


ARTÍCULO 551 (704)

El que intente querella de amparo expresará en su demanda, a más de las


circunstancias enumeradas en el artículo 254, las siguientes:

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La finalidad de las acciones posesorias es conservar o recuperar la


posesión de los bienes raíces o de derechos reales constituidos en
ellos. Querella de amparo, concepto, finalidad y requisitos de
procedencia

La protección de la posesión está regulada en el Título XIII del Libro


Segundo del Código Civil, a través de las acciones posesorias allí
descritas, las que de conformidad a lo preceptuado en el artículo 916 de
dicho Código, tienen por objeto "conservar o recuperar la posesión de
los bienes raíces o de derechos reales constituidos en ellos". Entre las
referidas acciones se encuentra la denominada querella de amparo,
prevista en el artículo 921 del Código Civil en los siguientes términos,
"El poseedor tiene derecho para pedir que no se le turbe o embarace su
posesión o se le despoje de ella, que se le indemnice del daño que ha
recibido y que se le dé seguridad contra el que fundadamente teme"; su
objeto es, en consecuencia, impedir o poner término a la turbación o
embarazo en la posesión que, en ciertos casos, de continuar, puede
incluso llevar a una privación o despojo de la misma. Desde una
perspectiva procesal, los interdictos posesorios se regulan en los
artículos 549 y siguientes del Código de Procedimiento Civil y, en
concordancia con la definición sustantiva que se ha dado antes de la
querella de amparo, el artículo 551 de este Código establece los
requisitos que deberá acreditar quien la intente: a) que personalmente
o agregando la de sus antecesores, ha estado en posesión tranquila y
no interrumpida durante un año completo del derecho en que pretender
ser amparado; y b) que se le ha tratado de turbar o molestar en su
posesión o que en el hecho se le ha turbado o molestado por medio de
actos que exprese circunstanciadamente (considerando 5º de la
sentencia de reemplazo).

Corte Suprema, 28/09/2016, Rol Nº 10526-2015, Cita online:


CL/JUR/6623/2016
2. Querella de restitución se incluye dentro de los interdictos posesorios.
Requisitos.

La querella de restitución se incluye dentro de los interdictos que


pretenden la recuperación de la posesión de los bienes raíces o de los
derechos reales constituidos en ellos, que se ha perdido. Se trata, pues,
de una acción que corresponde al poseedor y cuyo objeto es defender
la posesión a fin de recuperarla de la o las conductas que implicaron su
despojo, restableciendo los hechos al estado anterior de la comisión de
tales actos, razón por la cual, en doctrina, dicha acción también se
conoce como "querella de despojo". Así, los requisitos para su
procedencia, según fluye de las normas referidas, son tres: primero, que
el poseedor haya tenido la posesión tranquilla e ininterrumpida durante
un año a lo menos; segundo, que haya sido privado de ella por medio
de actos provenientes del querellado, que deben ser referidos con
claridad y precisión; y, tercero, que la acción se deduzca dentro de un
año contado desde la pérdida de la posesión, presupuestos que han de
verificarse en forma copulativa, de tal suerte, que la inconcurrencia de
cualquiera de ellos impide que la demanda sea acogida
(considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 19/02/2020, Rol Nº 20476-2018, Cita online:


CL/JUR/11091/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Concepción, 19/07/2019, Rol Nº 690-


2019,

Cita online: CL/JUR/5761/2019

— Corte de Apelaciones de Valdivia, 15/02/2019, Rol Nº 700-2018,

Cita online: CL/JUR/857/2019

3. Acción posesoria de restitución, carga de la prueba

La carga procesal de dichos requisitos corresponde al actor, quien


debe señalar en primer lugar, para efectos de la prueba, lo señalado en
el artículo 551 del Código de Procedimiento Civil, esto es, que ha sido
despojado de la posesión por medio de actos que indicará clara y
precisamente, o sea, debe señalar con precisión los hechos y la fecha
de su acontecimiento, lo que debe relacionarse con los requisitos de la
demanda del artículo 254 del mismo texto y con el plazo de prescripción
establecido en el artículo 920 del Código Civil (considerando 6º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 19/07/2019, Rol Nº 690-2019,

Cita online: CL/JUR/5761/2019

4. Querella de restablecimiento. I. Finalidad de la querella de


restablecimiento. II. Fuerza o violencia cuyo uso es arbitrario e ilícito
y constituye o puede constituir delito. Violentamente despojado alude
a la necesidad de que esa privación se logre por vías de hecho. III.
Insuficiencia probatoria para acreditar la violencia en el despojo

El artículo 928 del Código Civil dispone que todo el que violentamente
ha sido despojado, sea de la posesión, sea de la mera tenencia, y que
por poseer a nombre de otro, o por no haber poseído bastante tiempo,
o por otra causa cualquiera, no pudiere instaurar acción posesoria,
tendrá sin embargo derecho para que se restablezcan las cosas en el
estado que antes se hallaban, sin que para esto necesite probar más
que el despojo violento, ni se le pueda objetar clandestinidad o despojo
anterior. En otras palabras, en este interdicto no se defiende el hecho
de la posesión, sino la violencia con que ha sido despojado de la
tenencia, de la posesión. La demanda, entonces, es contra esta
violencia y hacia allá se dirige su reclamo o acción. Aquí no se le exige
ni que manifieste que es poseedor o mero tenedor, menos que lo
pruebe, únicamente el hecho de la violencia es la que tiene que
manifestar y probar el demandante para que prospere, de modo que no
es un interdicto propiamente tal, pues se soslaya lo relativo a la
posesión. El artículo 551 del Código de Procedimiento Civil confirma
esta apreciación al preceptuar que si la querella posesoria es de
restablecimiento, se deberá expresar la violencia con que ha sido
despojado de la posesión o tenencia en que pretende ser restablecido
(considerando 9º de la sentencia de la Corte de Apelaciones). Las
palabras "fuerza" o "violencia" de que hablan los artículos 710 y 928 del
Código Civil, y 549 y 551 del Código de Procedimiento Civil, deben
entenderse en el sentido de que se ejerciten fuera de la razón y de
justicia, "injustamente", "contra derecho", y esta interpretación conduce
a la conclusión de que los expresados artículos dicen relación con la
fuerza o violencia cuyo uso es arbitrario e ilícito y constituye o puede
constituir delito, por ello esta acción también es conocida como "despojo
violento". Se ha dicho que violentamente despojado alude a la
necesidad de que esa privación se logre por vías de hecho, o sea, no
sólo a través de actos puramente compulsivos o de fuerza, sino que,
además, por medio de conductas que involucran autotutela. Se requiere
que las amenazas o vejámenes en contra del poseedor logren que éste
abandone la tenencia del inmueble, de lo contrario, no habría despojo y
en consecuencia no procedería la querella de restablecimiento como vía
idónea a proteger la posesión (considerando 11º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones). La prueba testimonial es imprecisa respecto al
hecho que constituye el litigio. Además, la amenaza que exige el
legislador debe envolver un peligro inminente y debe ser acreditada, lo
que no ha ocurrido en los términos de gravedad que éste exige. Por lo
tanto, conforme los antecedentes del proceso, no ha nacido el
convencimiento que se haya acreditado la violencia en el despojo, ni en
su fecha, naturaleza o actos que hubieren provocado intimidación en el
actor que le hubieran inhibido del ejercicio del derecho del que dice fue
despojado (considerandos 13º y 14º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 14/04/2016, Rol Nº 215-2016,

Cita online: CL/JUR/2497/2016

5. Requisitos para la procedencia de la querella de amparo

Los requisitos que deben concurrir para que la acción intentada en


autos prospere son tres: a.- que el poseedor haya detentado la posesión
tranquila e ininterrumpida durante un año a lo menos; b.- que se haya
sufrido un acto de molestia o embarazo en dicha posesión, y c.- que la
acción la deduzca el poseedor dentro de un año contado desde el acto
constitutivo de molestia o embarazo. Presupuestos que han de
verificarse en forma copulativa, de tal suerte, que la inconcurrencia de
cualquiera de ellos impide que la demanda pueda prosperar
(considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 17/03/2008, Rol Nº 6668-2006, Cita online:


CL/JUR/6676/2008
Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 28/07/2009, Rol Nº 3583-2008,

Cita online: CL/JUR/8010/2009

— Corte Suprema, 23/06/2010, Rol Nº 1758-2009,

Cita online: CL/JUR/3487/2010

— Corte Suprema, 18/06/2007, Rol Nº 2000-2005,

Cita online: CL/JUR/1139/2007

— Corte Suprema, 30/12/2003, Rol Nº 1354-2003,

Cita online: CL/JUR/2946/2003

1ª Que personalmente o agregando la de sus antecesores, ha estado en


posesión tranquila y no interrumpida durante un año completo del derecho en
que pretende ser amparado; y

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Querella de restitución. Requisito esencial de la posesión es la


tenencia material del bien. Existencia de acto administrativo que
declara ilegal la ocupación de inmueble. Inexistencia de título que
justifica la ocupación del inmueble por parte del demandado. Larga
data de la ocupación material del inmueble por parte del demandado.
Procedencia de otorgar de oficio un plazo la restitución del inmueble

Los artículos 551 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil y 728 del


Código Civil, deben ser interpretados a la luz del artículo 700 del Código
Civil, que establece como requisito esencial de la posesión la tenencia
material del bien en cuestión. Así, por haber entrado el Fisco en
posesión jurídica del terreno en virtud de la competente inscripción, el
elemento material le ha sido despojado en razón de la ocupación que
del bien hace el demandado. Con lo anterior, la resolución exenta que
declara ilegal la ocupación es un acto administrativo que se funda en
las fiscalizaciones en terreno realizadas en distintas fechas en que se
constató que el querellado se mantiene en el inmueble de forma
gratuita, circunstancia que, por lo demás, fue por él reconocida en su
contestación y, en razón de ello, resulta acreditación suficiente de que
el demandado no goza de título alguno y ha despojado al Fisco de uno
de los elementos de la posesión, de manera que resultan acreditados
los requisitos de procedencia de la querella de restitución
(considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 13/12/2016, Rol Nº 38352-2016, Cita online:


CL/JUR/8294/2016

2. Los demandados no han probado tener la posesión del inmueble

Que los demandados no han alegado ni probado tener la posesión de


los inmuebles mediante una autorización, concesión o contrato
originado en conformidad al D.L. Nº 1.939, o de otra disposición legal
especial y, por lo tanto, corresponde considerarlos ocupantes ilegales,
siendo procedente, en consecuencia, acoger la presente querella de
restitución, ordenando la devolución de los inmuebles que ocupan
ilegalmente por más de diez años a su dueño el Fisco de Chile
(considerando 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Punta Arenas, 20/12/2011, Rol Nº 121-2011,

Cita online: CL/JUR/10421/2011

Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de La Serena, 13/03/2012, Rol Nº 1200-


2011,

Cita online: CL/JUR/4181/2012

— Corte de Apelaciones de Iquique, 20/04/2012, Rol Nº 710-2011,

Cita online: CL/JUR/4184/2012

— Corte de Apelaciones de Concepción, 18/11/2011, Rol Nº 727-


2011,

Cita online: CL/JUR/10317/2011


2ª Que se le ha tratado de turbar o molestar su posesión o que en el hecho
se le ha turbado o molestado por medio de actos que expresará
circunstanciadamente.

Si pide seguridades contra el daño que fundadamente teme, especificará


las medidas o garantías que solicite contra el perturbador.

Deberán también expresarse en la querella los medios probatorios de que


intente valerse el querellante; y, si son declaraciones de testigos, el nombre,
profesión u oficio y residencia de éstos.

Si la querella es de restitución en lugar de la circunstancia del número 2º


de este artículo, expresará que ha sido despojado de la posesión por medio
de actos que indicará clara y precisamente.

Y si es de restablecimiento, la violencia con que ha sido despojado de la


posesión o tenencia en que pretende ser restablecido.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 254, 320, 372 y 465. Código Civil:
artículos 700 al 731, 916 y 921.

ARTÍCULO 552 (705)

Presentada la querella, señalará el tribunal el quinto día hábil después de


la notificación al querellado, para una audiencia, a la cual deberán concurrir
las partes con sus testigos y demás medios probatorios.

Esta audiencia tendrá lugar con sólo la parte que asista.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 65, 66, 78, 258, 551, 553, 554, 555,
588, 591 y 668. Código Orgánico de Tribunales: artículo 134.

ARTÍCULO 553 (706)

La notificación de la querella se practicará en conformidad a lo que dispone


el Título VI del Libro I; pero en el caso del artículo 44 se hará la notificación
en la forma indicada en el inciso 2º de dicho artículo, aunque el querellado no
se encuentre en el lugar del juicio.

En estos casos, si el querellado no se ha hecho parte en primera instancia


antes del pronunciamiento de la sentencia definitiva, se pondrá ésta en
conocimiento del defensor de ausentes, quien podrá deducir y seguir los
recursos a que haya lugar.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40 al 46, 588, 591 y 608. Ley
Nº 19.253, sobre Protección, Fomento y Desarrollo de los Indígenas: artículo 56.

ARTÍCULO 554 (707)

Cuando el querellado quiera rendir prueba testimonial, deberá indicar el


nombre, profesión u oficio y residencia de los testigos, en una lista que
entregará en la secretaría y se agregará al proceso, por lo menos antes de
las doce del día que preceda al designado para la audiencia.

No se examinarán testigos que no estén mencionados en dichas listas,


salvo acuerdo expreso de las partes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 32, 320, 372, 551, 552, 555 y 559.

ARTÍCULO 555 (708)

Cada parte sólo puede presentar hasta cuatro testigos sobre cada uno de
los hechos que deben ser acreditados.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 372, 551, 554, 556 y 559.

ARTÍCULO 556 (709)

Se interrogará a los testigos acerca de los hechos mencionados en la


demanda, y de los que indiquen las partes en la audiencia, si el tribunal los
estima pertinentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 365, 366, 551 y 559.

ARTÍCULO 557 (710)

Las tachas deberán oponerse a los testigos antes de su examen; y si no


puede rendirse en la misma audiencia la prueba para justificarlas y el tribunal
lo estima necesario para resolver el juicio, señalará una nueva audiencia con
tal objeto, la cual deberá verificarse dentro de los tres días subsiguientes a la
terminación del examen de los testigos de la querella.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 373, 558 y 559.

ARTÍCULO 558 (711)

Cuando no alcance a rendirse toda la prueba en una sola audiencia,


continuará el tribunal recibiéndola en los días hábiles inmediatos hasta
concluir.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 66, 339, 340 y 559.

ARTÍCULO 559 (712)

Las reglas establecidas para el examen de los testigos y para sus tachas
en el párrafo 3º, Título XI del Libro II de este Código, son aplicables a la
querella de amparo, en cuanto no aparezcan modificadas por los artículos
precedentes. No se podrá en ningún caso hacer el examen de los testigos
por otro tribunal que el que conozca de la querella.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 359 al 370, 373 al 380.

ARTÍCULO 560 (713)

De todo lo obrado en la audiencia se levantará acta, expresándose con


claridad y precisión lo expuesto por las partes y las pruebas presentadas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 370 y 559.

ARTÍCULO 561

Concluida la audiencia de prueba, el tribunal en el mismo acto citará a las


partes para oír sentencia, la que deberá dictar de inmediato o, a lo más, en el
plazo de los tres días subsiguientes.192

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 162, 563, 795 Nº 7, 800 Nº 3.


ARTÍCULO 562 (715)

Si se da lugar a la querella, se condenará en costas al demandado. En el


caso contrario, al actor.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 144, 145, 146 y 582.

ARTÍCULO 563 (716)

Cualquiera que sea la sentencia, queda siempre a salvo a los que resulten
condenados el ejercicio de la acción ordinaria que corresponda con arreglo a
derecho, pudiendo comprenderse en dicha acción el resarcimiento de las
costas y perjuicios que hayan pagado o que se les hayan causado con la
querella.

No será admisible ninguna otra demanda que tienda a enervar lo resuelto


en el interdicto.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 175, 176, 177, 564, 569, 576, 581 y
615.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. El alcance de la cosa juzgada derivada de la sentencia recaída en


una querella posesoria frente a una nueva demanda en que se
pretenda alterar lo primitivamente resuelto

El artículo 563 del Código de Procedimiento Civil ha pretendido


esclarecer el alcance de la cosa juzgada derivada de la sentencia
recaída en una querella posesoria frente a una nueva demanda en que
se pretenda alterar lo primitivamente resuelto. Se distinguen acciones
ordinarias de otras acciones posesorias. De esta manera, cualquiera
que sean los resultados a que se haya llegado en la sentencia de la
acción posesoria, deja a salvo y siempre abierto el camino para que se
pueda acudir a la vía ordinaria interponiendo la acción que estime le
asiste, aun a riesgo de llegar a contradecir lo resuelto en la primitiva
sentencia. Es lo que técnicamente se ha denominado reserva de
derechos para accionar por la vía ordinaria, sin que en tal caso se pueda
oponer la excepción de cosa juzgada (considerando 9º de la sentencia
de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 14/11/2007, Rol Nº 1113-2006, Cita online:
CL/JUR/4862/2007

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 16/08/2005, Rol Nº 3354-2004,

Cita online: CL/JUR/6390/2005

ARTÍCULO 564 (721)

La sentencia pronunciada en la querella de restablecimiento deja a salvo a


las partes, no sólo el ejercicio de la acción ordinaria en conformidad al
artículo 563, sino también el de las acciones posesorias que les
correspondan.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 563, 570, 576 y 581. Código Civil:
artículo 928.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Recurso de revisión. Sentencia de precario no puede contrariar algún


hipotético efecto de cosa juzgada surgida en querella de
restablecimiento. Sentencia que desestima querella de
restablecimiento no produce el efecto de cosa juzgada que bloquease
la acción de precario. Distinta cosa pedida y causa de pedir entre la
querella de restablecimiento y la acción de precario. Ausencia de los
requisitos de la cosa juzgada de identidad de cosa pedida e identidad
de causa de pedir

El tenor de los artículos 928 inciso 2º del Código Civil y 564 del Código
de Procedimiento Civil no presenta dificultades por cuanto su sentido es
claro y, por ende, es dable sujetarse a la regla del artículo 19 inciso 1º
del Código Civil. La norma sustantiva, vigente de larga data, es
categórica en orden a que el objetivo específico de la acción que
describe es la de hacer cesar el despojo, de tal modo que vuelva la
situación a su estado inmediatamente anterior a la conducta violenta.
Su faceta netamente práctica, que identifica a las acciones posesorias,
en general, queda en la especie particularmente enfatizada al eximirse
al querellante de la carga de probar más allá del hecho de fuerza: "sin
que para esto necesite probar más que el despojo violento...". Ese
carisma se reviste de plena significación cuando la disposición legal
establece lo que antes se dejó expresado en el sentido que, una vez
que el orden se ha restablecido, se autoriza no solamente a él, sino a
su contradictor, para intentar las acciones posesorias que
correspondan. Por manera que, nada más a la luz del comentado
artículo 928, es posible sostener que la acción ordinaria de precario y a
la sentencia que la dirimió, no pudo contrariar algún hipotético efecto de
cosa juzgada surgido de lo decidido en el procedimiento sobre querella
de restablecimiento. Además, la sentencia que desestimó la querella de
restablecimiento no produjo ni pudo producir el efecto de cosa juzgada
que bloquease la acción ordinaria de precario entablada posteriormente
por la sucesión (considerandos 9º y 12º de la sentencia de revisión). Por
otra parte, no concurren los requisitos de la cosa juzgada de identidad
de cosa pedida y de causa de pedir, pues en la querella de
restablecimiento lo pedido fue el cese del despojo y la reposición de las
cosas al estado en que se hallaban al momento del mismo, en tanto en
el precario lo pedido fue la restitución del bien; y en lo tocante a la causa
de pedir, en la querella de restablecimiento lo propio, lo que la tipificó,
su especificidad, lo que esencialmente la constituyó fue la pretensión de
poner término al acto usurpador de la posesión, mientras que en el
precario lo que lo caracterizó fue el propósito de poner término al uso
de la cosa ajena por parte del demandado, fuere por ignorancia, fuere
por mera tolerancia (considerando 14º de la sentencia de revisión).

Corte Suprema, 3/08/2016, Rol Nº 10791-2015, Cita online:


CL/JUR/5539/2016

§ 3. De la denuncia de obra nueva

ARTÍCULO 565 (722)

Presentada la demanda para la suspensión de una obra nueva


denunciable, el juez decretará provisionalmente dicha suspensión y mandará
que se tome razón del estado y circunstancias de la obra y que se aperciba
al que la esté ejecutando con la demolición o destrucción, a su costa, de lo
que en adelante se haga. En la misma resolución mandará el tribunal citar al
denunciante y al denunciado para que concurran a la audiencia del quinto día
hábil después de la notificación del demandado, debiendo en ella presentarse
los documentos y demás medios probatorios en que las partes funden sus
pretensiones.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 254, 551, 552, 566, 567 y 568.
Código Civil: artículo 931.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Denuncia de obra nueva se puede dirigir en contra de quien la está


ejecutando

De lo dispuesto en el artículo 565 del Código de Procedimiento Civil,


se desprende que la denuncia de obra nueva se puede dirigir en contra
de quien la está ejecutando, quien no necesariamente debe ser el dueño
de la obra, lo que es coherente con la disposición general sobre las
acciones posesorias del artículo 923 del Código Civil, que señala "En
los juicios posesorios no se tomará en cuenta el dominio que por una u
otra parte se alegue" (considerando 3º de la disidencia de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 17/08/2018, Rol Nº 52-2018,

Cita online: CL/JUR/4501/2018

2. La denuncia de obra nueva es la acción judicial que, a fin de prevenir


un daño, se dirige a lograr la suspensión de los trabajos de una obra
nueva, comenzados o a punto de comenzarse

Por encontrarse la obra denunciada ya terminada y recibida por la


autoridad municipal correspondiente al tiempo de interponerse el
interdicto de autos, esta acción resulta improcedente para impetrar la
solución de los problemas que la actora persigue, sin perjuicio de otros
derechos que pudieren corresponderle. En efecto, la denuncia de obra
nueva es la acción judicial que, a fin de prevenir un daño, se dirige a
lograr la suspensión de los trabajos de una obra nueva, comenzados o
a punto de comenzarse, para impedir que la obra nueva se consume o
concluya, pero no cabe respecto de una obra nueva ya terminada o
concluida, que ya no puede ser impedida. Es por ello que el artículo 565
del Código de Procedimiento Civil dispone la presentación de la
demanda sobre denuncia de obra nueva para la suspensión de una obra
nueva denunciable y no se puede pretender la suspensión de una obra
que ya ha sido concluida (c onsiderando 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 17/06/2004, Rol Nº 2070-2003,

Cita online: CL/JUR/4779/2004

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 19/08/2002, Rol Nº 2777-2002,

Cita online: CL/JUR/740/2002

ARTÍCULO 566 (723)

No es necesaria la notificación del denunciado para llevar a efecto la


suspensión decretada. Bastará para esta suspensión la notificación del que
esté dirigiendo o ejecutando la obra.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 38, 62, 187, 188, 194, 302, 414, 416
y 824.

ARTÍCULO 567 (724)

Suspendida la obra, y mientras esté pendiente el interdicto, sólo podrá


hacerse en ella lo que sea absolutamente indispensable para que no se
destruya lo edificado.

Es necesaria la autorización del tribunal para ejecutar las obras a que se


refiere el inciso precedente. El tribunal se pronunciará sobre esta autorización
con la urgencia que el caso requiera, y procederá de plano, o, en caso de
duda y para mejor proveer, oyendo el dictamen de un perito nombrado por él,
el cual no podrá ser recusado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 38, 62, 187, 188, 194, 302, 414, 416
y 824.

ARTÍCULO 568 (725)


Si las partes quieren rendir prueba testimonial, se sujetarán a lo prevenido
a este respecto en el párrafo 2º de este Título.

Si alguna de las partes lo pide, y en concepto del tribunal son necesarios


conocimientos periciales, se oirá el dictamen de un perito, que se expedirá
dentro de un breve plazo que aquél señalará.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 414 al 420, 424, 551, 554 al 560.

ARTÍCULO 569 (726)

Concluida la audiencia o presentado que sea el dictamen del perito, en su


caso, el tribunal citará a las partes a oír sentencia, la que deberá dictar en el
plazo de los tres días subsiguientes.193

En la sentencia se ratificará la suspensión provisional decretada o se


mandará alzarla, dejando a salvo, en todo caso, al vencido el ejercicio de las
acciones ordinarias que le competan, para que se declare el derecho de
continuar la obra o de hacerla demoler.

Podrá, sin embargo, el tribunal, a petición de parte, ordenar en la misma


sentencia la demolición, cuando estime que el mantenimiento aún temporal
de la obra ocasiona grave perjuicio al denunciante y dé éste suficiente
caución para responder por los resultados del juicio ordinario.

La sentencia que ordene la demolición será apelable en ambos efectos.

En todo caso, la sentencia llevará condenación de costas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 191, 550, 563, 564, 575 y 576.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. En la sentencia se debe disponer la suspensión inmediata de las


obras y si tendrá carácter permanente

Es relevante destacar que la tramitación de la acción posesoria está


estructurada sobre la base de la aceptación provisional de la demanda
y que se dispone la suspensión inmediata de las obras, resolviendo en
definitiva si se ratifica y mantiene un carácter permanente a la
suspensión o, por el contrario, dispone alzar la suspensión, difiriendo,
por regla general, en ambos casos la acción de demolición o de
obtención de la autorización al juicio ordinario (considerando 13º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/01/2014, Rol Nº 5251-2013, Cita online:


CL/JUR/34/2014

ARTÍCULO 570 (727)

Si se ratifica la suspensión de la obra, podrá el vencido pedir autorización


para continuarla, llenando las condiciones siguientes:

1ª Acreditar que de la suspensión de la obra se le siguen graves perjuicios;

2ª Dar caución suficiente para responder de la demolición de la obra y de


la indemnización de los perjuicios que de continuarla puedan seguirse al
contendor, en caso que a ello sea condenado por sentencia firme; y 3ª
Deducir, al mismo tiempo de pedir dicha autorización, demanda ordinaria para
que se declare su derecho de continuar la obra.

La primera de las condiciones expresadas y la calificación de la caución,


serán materia de un incidente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 89, 254, 563, 564, 576 y 581.

§ 4. De la denuncia de obra ruinosa

ARTÍCULO 571 (728)

Si se pide la demolición o enmienda de una obra ruinosa o peligrosa, o el


afianzamiento o extracción de árboles mal arraigados o expuestos a ser
derribados por casos de ordinaria ocurrencia, el tribunal practicará, a la mayor
brevedad, asociado de un perito nombrado por él mismo y con notificación de
las partes y asistencia de la que concurra, una inspección personal de la
construcción o árboles denunciados. Podrá también cada parte, si lo estima
conveniente, asociarse para este acto de un perito; y en el acta que de lo
obrado se levante se harán constar las opiniones o informes periciales, las
observaciones conducentes que hagan los interesados y lo que acerca de
ello note el juez que practica la diligencia.
Cuando el reconocimiento haya de practicarse a más de cinco kilómetros
de distancia de los límites urbanos de la población en que funciona el tribunal,
podrá éste cometer la diligencia al juez inferior que corresponda o a otro
ministro de fe, quienes procederán asociados del perito que el tribunal
designe y en la forma que dispone el inciso anterior.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 403 al 407, 413, 416, 419, 421, 573,
574, 582 y 583. Código Civil: artículo 932.

ARTÍCULO 572

Con el mérito de la diligencia ordenada por el artículo precedente, el


tribunal en el acto citará a las partes a oír sentencia, la que deberá dictar de
inmediato o en el plazo de los tres días subsiguientes, sea denegando lo
pedido por el querellante, sea decretando la demolición, enmienda,
afianzamiento o extracción a que haya lugar.

Cuando la diligencia de reconocimiento no haya sido practicada por el


tribunal, podrá éste, como medida para mejor resolver, disponer que se
rectifique o amplíe en los puntos que estime necesarios.194

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 403 a 407, 413, 416, 419, 421, 573,
574, 582 y 583.

ARTÍCULO 573 (730)

Es aplicable a la denuncia de obra ruinosa lo dispuesto en el artículo 553.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40 al 46, 588, 591 y 608.

ARTÍCULO 574 (731)

En la misma sentencia que ordena la demolición, enmienda, afianzamiento


o extracción, puede el tribunal decretar desde luego las medidas urgentes de
precaución que considere necesarias, y además que se ejecuten dichas
medidas, sin que de ello pueda apelarse.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 187, 191, 550, 569 y 582.
ARTÍCULO 575 (732)

Sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo precedente, la apelación de la


sentencia definitiva en este interdicto se concederá en ambos efectos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 187, 191, 550, 569 y 581.

ARTÍCULO 576 (733)

Cuando se dé lugar al interdicto, no se entenderá reservado el derecho de


ejercer en vía ordinaria ninguna acción que tienda a dejar sin efecto lo
resuelto.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 175, 563, 564, 570 y 581.

§ 5. De los interdictos especiales

ARTÍCULO 577 (734)

Si se pide la destrucción o modificación de las obras a que se refieren los


artículos 936 y 937 del Código Civil, se procederá en la forma dispuesta por
los artículos 571, 572, 573 y 574 del presente Código.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 550, 555 al 560, 571 al 574, 581, 582
y 583. Código Civil: artículo 937.

ARTÍCULO 578 (735)

Si por parte del querellado se alega que el interdicto no es admisible por


haber transcurrido tiempo bastante para constituir un derecho de
servidumbre, se dará a esta oposición la tramitación de un incidente y se
recibirá a prueba, sin perjuicio de practicarse la inspección por el tribunal.
Para recibir esta prueba, el tribunal señalará la audiencia correspondiente al
quinto día hábil después de la última notificación y a ella deberán concurrir
las partes con sus testigos y demás medios probatorios.

Dicha audiencia tendrá lugar con sólo el interesado que asista.


La parte que quiera rendir prueba testimonial deberá entregar en
secretaría, para que se agregue al proceso antes de las doce del día que
preceda al de la audiencia, una lista de los testigos de que piense valerse,
con expresión de su nombre, profesión u oficio y residencia.

Son aplicables en este caso las disposiciones de los artículos 555 a 561
inclusive.195

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 550, 555 al 560, 571 al 574, 581, 582
y 583.

ARTÍCULO 579 (736)

Las acciones que se conceden por los artículos 939, 941 y 942 del Código
Civil, se sujetarán al procedimiento establecido en los artículos 571, 572, 573
y 574 del presente Código.

Si se alega la excepción a que se refiere el inciso final del artículo 941 del
Código Civil, se procederá como lo dispone el artículo precedente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 571 al 574, 581 y 582. Código Civil:
artículos 941 y 942.

ARTÍCULO 580 (737)

Si se pide la suspensión de las obras de que tratan los artículos 874, 875,
878 y 944 del Código Civil, el tribunal procederá como en el caso de la
denuncia de obra nueva.196

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 565, 567, 568, 569, 570, 581 y 582.
Código Civil: artículos 874, 875 y 878.

ARTÍCULO 581 (739)

Las sentencias que se dicten en los interdictos de que trata este párrafo
dejan a salvo su derecho a las partes para deducir en vía ordinaria las
acciones que por la ley les correspondan.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 175, 563, 564, 569, 570 y 576.
§ 6. Disposiciones comunes a los dos párrafos precedentes

ARTÍCULO 582 (740)

Si la denuncia, en los casos a que se refieren los dos párrafos precedentes,


se deduce por acción popular y se reclama la recompensa que establece el
artículo 948 del Código Civil, se pronunciará sobre ella el tribunal en la misma
sentencia que dé lugar al interdicto; pero la cuantía de esta recompensa la
fijará prudencialmente dentro de los límites que señala dicho artículo, oyendo
en audiencia verbal a los interesados, después de la ejecución de la
sentencia.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 173. Código Orgánico de Tribunales:


artículo 133. Código Civil: artículo 948.

ARTÍCULO 583 (741)

Lo dispuesto en los párrafos 4º y 5º de este Título se entiende sin perjuicio


de las medidas administrativas o de policía a que haya lugar según las leyes.

TÍTULO V DE LA CITACIÓN DE EVICCIÓN

ARTÍCULO 584 (742)

La citación de evicción deberá hacerse antes de la contestación de la


demanda.

Para que se ordene la citación de evicción deberán acompañarse


antecedentes que hagan aceptable la solicitud.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 82, 303, 305, 313 y 318. Código Civil:
artículo 1843 y siguientes.

ARTÍCULO 585 (743)


Decretada la citación, se suspenderán los trámites del juicio por el término
de diez días si la persona a quien debe citarse reside en el territorio
jurisdiccional en que se sigue el pleito. Si se encuentra en otro territorio
jurisdiccional o fuera del territorio de la República, se aumentará dicho
término en la forma establecida en el artículo 259.197

Vencidos estos plazos sin que el demandado haya hecho practicar la


citación, podrá el demandante pedir que se declare caducado el derecho de
aquél para exigirla y que continúen los trámites del juicio, o que se le autorice
para llevarla a efecto a costa del demandado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículos 78, 87, 259 y 587. Código Civil:
artículo 1843.

ARTÍCULO 586 (744)

Las personas citadas de evicción tendrán para comparecer al juicio el


término de emplazamiento que corresponda en conformidad a los
artículos 258 y siguientes, suspendiéndose mientras tanto el procedimiento.
Si a petición de ellas se hace igual citación a otras personas, gozarán también
éstas del mismo derecho.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 16, 23, 87, 258, 259, 260 y 585.

ARTÍCULO 587 (745)

Si comparecen al juicio las personas citadas, se observará lo dispuesto en


el artículo 1844 del Código Civil, continuando los trámites de aquél según el
estado que a la sazón tengan. En caso contrario, vencido el término de
emplazamiento, continuará sin más trámite el procedimiento.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículo s 16, 23, 87, 258, 259, 260 y
585. Código Civil: artículo 1844.

TÍTULO VI DE LOS JUICIOS ESPECIALES DEL CONTRATO DE


ARRENDAMIENTO

§ 1. Del desahucio, del lanzamiento y de la retención


ARTÍCULO 588 (746)

El desahucio de la cosa arrendada puede efectuarse judicial o


extrajudicialmente.

La prueba del desahucio extrajudicial se sujetará a las reglas generales del


Título XXI, Libro IV del Código Civil y a los procedimientos que establece el
presente Código.

El desahucio judicial se efectuará notificando al arrendador o arrendatario,


de conformidad al artículo 553, el decreto en que el juez manda poner en
conocimiento de uno u otro la noticia anticipada a que se refiere el
artículo 1951 del Código Civil.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 38, 44, 553 y 604. Código Civil:
artículo 1951. Ley Nº 18.101, sobre Arrendamiento de Predios Urbanos: artículo 3º.

ARTÍCULO 589 (747)

Cuando el arrendador o el arrendatario desahuciado reclame contra este


desahucio, citará el tribunal a las partes para la audiencia del quinto día hábil
después de la última notificación, a fin de que concurran con sus medios de
prueba y expongan lo conveniente a sus derechos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 65, 588, 591, 594 y 597.

ARTÍCULO 590 (748)

Esta reclamación sólo podrá entablarse dentro de los diez días


subsiguientes a la noticia del desahucio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 65, 588, 591, 594 y 597.

ARTÍCULO 591 (749)

La reclamación se notificará al que hace el desahucio en la forma que


dispone el artículo 553, debiendo intervenir el defensor de ausentes en los
casos y para los efectos que allí se expresan.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 553, 588, 591, 594 y 597.

ARTÍCULO 592 (750)

La audiencia señalada tendrá lugar con sólo la parte que concurra.

Si ha de rendirse prueba testimonial, se procederá de conformidad con lo


dispuesto en los artículos 554 a 560, inclusive.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 90, 162, 544 a 560 y 594.

ARTÍCULO 593

En el acta que se levante, a más de las pruebas acompañadas, se


mencionarán con brevedad las alegaciones de las partes. Sin otro trámite el
tribunal citará a las partes para oír sentencia la que dictará inmediatamente
o, a más tardar, dentro de tercero día.198

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 144, 170, 432, 433, 595, 606, 615,
795 Nº 7, 800 Nº 3.

ARTÍCULO 594 (752)

Si la reclamación aparece interpuesta fuera del plazo que concede el


artículo 590 o si los fundamentos en que se apoya no son legales, o no
resultan comprobados, será desechada por el tribunal, manteniéndose el
desahucio y designándose en la misma sentencia el día en que deba hacerse
la restitución de la cosa arrendada.

En caso contrario, se declarará sin lugar el desahucio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 144, 170, 595, 606 y 615.

ARTÍCULO 595 (753)

Si, ratificado el desahucio, llega el día señalado para la restitución sin que
el arrendatario haya desalojado la finca arrendada, éste será lanzado de ella
a su costa, previa orden del tribunal notificada en la forma establecida por el
artículo 48.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 48, 596, 597, 600, 601, 606 y 615.
Código Orgánico de Tribunales: artículo 10. Ley Nº 18.101, sobre Arrendamiento de Predios
Urbanos: artículo 13.

ARTÍCULO 596 (754)

Si el arrendatario desahuciado retarda la restitución de la cosa mueble


arrendada, o si se trata de un desahucio de arrendamiento de servicios, se
procederá a la ejecución de la sentencia de conformidad a las reglas
generales.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 231, 434 y siguientes.

ARTÍCULO 597 (755)

Cuando el arrendatario desahuciado reclame indemnizaciones, haciendo


valer el derecho de retención que otorga el artículo 1937 del Código Civil,
deberá interponer su reclamo dentro del plazo de diez días que concede el
artículo 590 del presente Código, y se tramitará y fallará en la misma forma
que la oposición al desahucio. El tribunal, sin perjuicio de lo que se establezca
sobre el desahucio, resolverá si hay o no lugar a la retención solicitada.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 172, 545, 589 al 601, 603, 606 y 615.
Código Civil: artículo 1937.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cuando el arrendatario desahuciado reclame indemnizaciones,


deberá interponer su reclamo dentro del plazo establecido y se
tramitará y fallará de la misma forma que la oposición de desahucio.

Cuando el arrendatario desahuciado reclame indemnizaciones,


haciendo valer el derecho de retención que otorga el artículo 1937 del
Código Civil, deberá interponer su reclamo dentro del plazo establecido
en el artículo 590 del Código de Procedimiento Civil, y se tramitará y
fallará de la misma forma que la oposición de desahucio. En
consecuencia, al decidirse que se tramitará en cuaderno separado se
ha incurrido en una falta susceptible de enmendarse por la vía
disciplinaria (considerando único de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 26/03/1990, Rol Nº 14508-1990, Cita online:


CL/JUR/414/1990

ARTÍCULO 598 (756)

Si el arrendatario pretendiera burlar el derecho de retención que concede


al arrendador el artículo 1942 del Código Civil extrayendo los objetos a que
dicho artículo se refiere, podrá el arrendador solicitar el auxilio de cualquier
funcionario de policía para impedir que se saquen esos objetos de la
propiedad arrendada.

El funcionario de policía prestará este auxilio sólo por el término de dos


días, salvo que transcurrido este plazo le exhiba el arrendador copia
autorizada de la orden de retención expedida por el tribunal competente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 66 y 545.

ARTÍCULO 599 (757)

Los gastos hechos por el arrendatario en la cosa arrendada con


posterioridad al desahucio no le autorizarán para pedir su retención.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 588 y 597.

ARTÍCULO 600 (758)

Si, ratificado el desahucio y llegado el momento de la restitución, existe


retención decretada a favor del arrendatario, y el arrendador no ha
caucionado el pago de las indemnizaciones debidas, no podrá éste pedir
lanzamiento sin que previamente pague dichas indemnizaciones o asegure
su pago a satisfacción del tribunal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 545, 595, 597 y 601.

ARTÍCULO 601 (759)


Si hay labores o plantíos que el arrendatario reclame como de su
propiedad, o mejoras útiles cuyos materiales puede separar y llevarse sin
detrimento de la cosa arrendada, se extenderá diligencia expresiva de la
clase, extensión y estado de las cosas reclamadas.

Esta reclamación no será un obstáculo para el lanzamiento.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 89, 414, 595, 895 al 899.

ARTÍCULO 602 (760)

En los casos a que se refiere el artículo precedente, se procederá al avalúo


de las labores, plantíos o materiales reclamados, por peritos nombrados en
la forma que expresa el artículo 414.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 89, 414, 595, 895 al 899.

ARTÍCULO 603 (761)

Practicada esta diligencia, podrá el arrendatario reclamar el abono de la


cantidad en que haya sido apreciado lo que crea corresponderle, o que se le
permita separar y llevarse los materiales.

Esta reclamación se tramitará como incidente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 89, 414, 595, 895 al 899.

ARTÍCULO 604 (762)

El procedimiento establecido en este párrafo se observará también cuando


se exija la restitución de la cosa arrendada por la expiración del tiempo
estipulado para la duración del arrendamiento, o por la extinción del derecho
del arrendador.

El plazo para oponerse a la restitución o para hacer valer el derecho de


retención por indemnizaciones debidas, correrá desde que el que pide la
terminación del arrendamiento haga saber a la otra parte su intención de
exigirla.
Cuando se trate de bienes inmuebles, la misma sentencia que deseche la
reclamación, ordenará además el lanzamiento, si está vencido el plazo del
contrato; salvo que existan retenciones decretadas a favor del arrendatario
por no haberse otorgado las cauciones a que se refiere el artículo 600.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 588, 595, 597, 600, 606 y 615.

ARTÍCULO 605 (763)

Cuando la terminación del arrendamiento resulte de sentencia judicial, en


los casos previstos por la ley, podrá adoptarse el procedimiento del
artículo anterior o el que corresponda para la ejecución de dicha sentencia, a
elección de la parte a quien ella favorezca.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 434, 604, 606 y 615.

ARTÍCULO 606 (764)

Las sentencias en que se ratifique el desahucio o se ordene el lanzamiento,


las que den lugar a la retención, y las que dispongan la restitución de la cosa
arrendada, en los casos de los dos artículos anteriores, sólo serán apelables
en el efecto devolutivo, y la apelación se tramitará como en los incidentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 192, 194, 615 y 774.

§ 2. De la terminación inmediata del arrendamiento

ARTÍCULO 607 (765)

Cuando la ley autorice al arrendador para pedir la terminación inmediata


del arrendamiento, como en los casos previstos por los artículos 1972 y 1973
del Código Civil, señalará el tribunal la audiencia del quinto día hábil después
de la notificación del demandado, a fin de que concurran las partes con sus
medios de prueba y expongan lo conveniente a su derecho. Tendrá lugar la
audiencia con sólo el interesado que asista.

Si ha de rendirse prueba testimonial, se procederá con arreglo a lo


establecido en los dos últimos incisos del artículo 578.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 553, 578, 589, 609 y 610. Código
Civil: artículos 1792 y 1793.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. En nuestro ordenamiento jurídico procesal no existe un procedimiento


diferenciado en relación con el leasing de cosa mueble

En nuestro ordenamiento jurídico procesal no existe un procedimiento


diferenciado en relación con el leasing de cosa mueble, de manera que
corresponde aplicar en la especie el procedimiento a que se refieren los
artículos 607 y siguientes del Código de Procedimiento Civil. En efecto,
la terminación del arrendamiento por medio de este juicio especial
puede obtenerse no sólo en aquellos casos en que el legislador la
autoriza por utilizar la expresión "inmediata" sino "también cuando se
vale de alguna locución equivalente" y, asimismo, en aquellos casos en
que opera la condición resolutoria tácita envuelta en todo contrato
bilateral, es decir, por infracción del arrendatario a cualquiera de sus
obligaciones. Así, la norma en comento queda abierta a cualquier
incumplimiento de obligación, en cuyo caso, corresponderá seguir la
ritualidad establecida en dicha disposición y las que le siguen; debiendo
considerarse que la alusión que efectúa el citado precepto a los
artículos 1972 y 1973 del Código Civil lo es a título meramente ilustrativo
o ejemplar y no importa una aplicación exclusiva a los casos allí
previstos (considerando 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 10/06/2008, Rol Nº 1115-2007, Cita online:


CL/JUR/6769/2008

ARTÍCULO 608 (766)

Es aplicable a la notificación de la demanda en este caso lo dispuesto por


el artículo 553.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 553, 578, 589, 609 y 610.

ARTÍCULO 609 (767)


Cuando el tribunal lo estime necesario podrá, antes de dictar sentencia,
nombrar un perito que informe sobre los hechos alegados o practicar una
inspección personal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 159, 162, 614 y 615.

ARTÍCULO 610

Terminada la audiencia o practicadas las diligencias a que se refiere el


artículo anterior, el tribunal citará de inmediato a las partes para oír sentencia,
la que dictará, a más tardar, dentro de tercero día.199

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 159, 162, 614, 615, 795 Nº 7, 800
Nº 3.

ARTÍCULO 611 (769)

Cuando la terminación del arrendamiento se pida por falta de pago de la


renta, de conformidad a lo dispuesto por el artículo 1977 del Código Civil, la
segunda de las reconvenciones a que dicho artículo se refiere, se practicará
ocurriendo al tribunal respectivo, quien citará a las partes a una audiencia
inmediata y procederá en lo demás con arreglo a lo establecido en los
artículos precedentes.

Al ejercitarse la acción a que se refiere el inciso precedente podrá


deducirse también la de cobro de las rentas insolutas en que aquélla se funde
y la de los consumos de luz, gas, energía eléctrica, agua potable, riego u otras
prestaciones análogas que se adeuden.

Tales peticiones se substanciarán y fallarán conjuntamente con la cuestión


principal.

Demandadas estas prestaciones, se entenderán comprendidas en la


acción las de igual naturaleza a las reclamadas que se devenguen durante la
tramitación del juicio hasta la expiración del plazo que se haya fijado para la
restitución o para el pago.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 607 al 610 y 615. Código Civil:
artículo 1977.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. La indemnización pactada en el contrato de arrendamiento constituye
una "prestación análoga"

Que en concepto de estos jueces, la indemnización pactada, en


cuanto íntimamente relacionada con las rentas pendientes de
vencimiento a la fecha del incumplimiento, merece de lleno la
calificación de prestación análoga, lo que quiere decir que también
podía y puede perseguirse su cobro al requerirse la terminación del
contrato y el pago de lo insoluto (considerando 5º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 12/08/1997, Rol Nº 7003-1995,

Cita online: CL/JUR/1856/1997

ARTÍCULO 612 (770)

El arrendador que pretenda hacer uso de los derechos concedidos por el


artículo 1979 del Código Civil, se ajustará a lo establecido en el Título XI de
este Libro sobre el procedimiento sumario.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 614, 615, 680, 683 al 692.

ARTÍCULO 613 (771)

En los casos de los artículos 1989 y 2009 del Código Civil, la terminación
del arrendamiento se someterá a las disposiciones del artículo 604.200

Concordancias: Código Civil: artículo 2009.

ARTÍCULO 614 (772)

Cuando las sentencias dictadas en los casos de que trata el presente


párrafo dieren lugar a la terminación del arrendamiento, sólo serán apelables
en el efecto devolutivo, y el recurso se tramitará como en los incidentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 192, 194, 615 y 774.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Sentencia definitiva que da lugar a la terminación del contrato de
arrendamiento es apelable en el solo efecto devolutivo

La naturaleza jurídica de la resolución impugnada es la de una


sentencia definitiva, dictada en un procedimiento sumario y conforme al
artículo 194 del Código de Procedimiento Civil es apelable en el solo
efecto devolutivo y por su parte, el artículo 614 del Código de
Procedimiento Civil, aplicable en la especie, establece que cuando las
sentencias dictadas en los caso de que trata el presente párrafo dieren
lugar a la terminación del contrato de arrendamiento, sólo serán
apelables en el efecto devolutivo, razones por las cuales se acogerá el
presente recurso de hecho (considerando 6º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 11/06/2018, Rol Nº 6145-2018,

Cita online: CL/JUR/2820/2018

2. Principio de especialidad de la ley. Apelación en el juicio sumario de


arrendamiento se concede en el solo efecto devolutivo

Los artículos 4º y 13 del Código Civil, consagran el denominado


principio de especialidad de la ley, otorgando primacía en aquellas
normas relativas a cosas o negocios particulares, sobre las
disposiciones generales. Aplicando dicho principio, es inconcuso
estimar que el artículo 614 del Código de Procedimiento Civil prima por
sobre la disposición de carácter general contenida en el artículo 691 del
mismo cuerpo normativo, desde que la primera se encuentra ínsita
dentro del procedimiento especial establecido en el Título VI del Libro III
que regula los juicios de arrendamiento, estableciendo una regla
especial en relación con el régimen recursivo de la apelación, al
establecer que dicho arbitrio únicamente se concede en el solo efecto
devolutivo, cuestión que conlleva a acoger el recurso intentado
(considerando 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 5/08/2019, Rol Nº 8422-2019,

Cita online: CL/JUR/4447/2019

3. Disposiciones comunes a los dos párrafos precedentes


ARTÍCULO 615 (773)

Las sentencias que se pronuncien en conformidad a los dos párrafos


precedentes no privarán a las partes del ejercicio de las acciones ordinarias
a que tengan derecho, sobre las mismas cuestiones resueltas por aquéllas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 175 y 563.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Las sentencias que se pronuncien en conformidad a los dos párrafos


precedentes no privarán a las partes del ejercicio de las acciones
ordinarias a que tengan derecho sobre las mismas cuestiones
resueltas por aquéllas

Establece que "las sentencias que se pronuncien en conformidad a


los dos párrafos precedentes no privarán a las partes del ejercicio de
las acciones ordinarias a que tengan derecho sobre las mismas
cuestiones resueltas por aquéllas". Los dos párrafos precedentes a que
se refiere la disposición citada son los relacionados con el desahucio,
lanzamiento y retención reglamentados en el párrafo primero del
Título Vl del Código de Procedimiento Civil, y con la terminación
inmediata del arrendamiento regido por el párrafo segundo del mismo
Título. En este último caso, específicamente, el artículo 611, se refiere
a la terminación inmediata del arrendamiento por falta de pago de la
renta, que sería el caso propuesto en el juicio ventilado por las partes
ante el Quinto Juzgado de Letras. Sin embargo, tratándose de un bien
raíz urbano, como ocurre en la especie, no procede aplicar el referido
artículo 611 del Código de Procedimiento Civil, sino la legislación
especial dictada al respecto; en el caso de autos, el D.L. 964 por
disposición expresa del artículo 1º transitorio de la Ley Nº 18.101, ya
que el contrato de arriendo data del año 1980 (considerando 9º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 12/12/1990, Rol Nº 210-1990,

Cita online: CL/JUR/59/1990

ARTÍCULO 616
Derogado.201

TÍTULO VII DE LOS JUICIOS SOBRE CONSENTIMIENTO PARA EL


MATRIMONIO202

ARTÍCULO 617

Derogado.

ARTÍCULO 618

Derogado.

ARTÍCULO 619

Derogado.

ARTÍCULO 620

Derogado.

ARTÍCULO 621

Derogado.

ARTÍCULO 622

Derogado.

ARTÍCULO 623

Derogado.
ARTÍCULO 624

Derogado.

ARTÍCULO 625

Derogado.

ARTÍCULO 626

Derogado.

ARTÍCULO 627

Derogado.

TÍTULO VIII DEL JUICIO ARBITRAL

§ 1. Del juicio seguido ante árbitros de derecho

ARTÍCULO 628 (785)

Los árbitros de derecho se someterán, tanto en la tramitación como en el


pronunciamiento de la sentencia definitiva, a las reglas que la ley establece
para los jueces ordinarios, según la naturaleza de la acción deducida.

Sin embargo, en los casos en que la ley lo permita, podrán concederse al


árbitro de derecho las facultades de arbitrador, en cuanto al procedimiento, y
limitarse al pronunciamiento de la sentencia definitiva la aplicación estricta de
la ley. La tramitación se ajustará en tal caso a las reglas del párrafo siguiente.

Por motivos de manifiesta conveniencia podrán los tribunales autorizar la


concesión al árbitro de derecho de las facultades de que trata el inciso
anterior, aun cuando uno o más de los interesados en el juicio sean
incapaces.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 170, 629, 632, 633, 635 y 648.
Código Orgánico de Tribunales: artículos 5º, 63 Nº 2, 98 Nº 2, 190, 222, 223, 224, 225 y 226.
Código de Derecho Internacional Privado: artículo 319. Código de Comercio: artículo 1205. Ley
Nº 19.281, Ley de Leasing Habitacional: artículo 40.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cumplimiento de contrato. Procedencia de los recursos de casación


en la forma y en el fondo en contra de la sentencia dictada por árbitros
mixtos. Interpretación restrictiva de la renuncia a los recursos
jurisdiccionales efectuada en el compromiso. Improcedencia de
renunciar al recurso de casación en la forma por las causales de
incompetencia y de ultra petita. Improcedencia de la interposición
conjunta del recurso de queja y del recurso de casación en la forma
en contra de la sentencia dictada por árbitros mixtos. Improcedencia
del recurso de queja en contra de la sentencia dictada por árbitros
mixtos por tratarse de un fallo susceptible de otros recursos

De acuerdo a los artículos 223 inciso 4º del Código Orgánico de


Tribunales y 628 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil, los árbitros
mixtos son en realidad árbitros de derecho a quienes se les otorgan las
facultades de los arbitradores en cuanto al procedimiento, pues siempre
deben ceñirse, en lo que se refiere al pronunciamiento de la sentencia,
a la aplicación estricta de la ley. Luego, la sentencia definitiva dictada
por árbitros mixtos es siempre recurrible por la vía de la casación en el
fondo. Y en cuanto a la casación en la forma, en principio ésta también
resulta procedente, conforme a la regla general prevista en el
artículo 239 inciso 1º del Código Orgánico de Tribunales, salvo que las
partes renuncien a dichos recursos, en los términos perentorios que
exige la norma en comento. No obstante, ninguna renuncia de este
recurso abarca al que se pueda interponer por los vicios de
incompetencia y ultra petita. El artículo 239 inciso 2º del Código
Orgánico de Tribunales sólo dispone la improcedencia del recurso de
casación en el fondo en contra de las sentencias de los árbitros
arbitradores, norma que desde luego reafirma la procedencia de dicho
recurso en contra de las sentencias de los árbitros de derecho, pues
éstos, por mandato del artículo 223 inciso 2º del citado Código, deben
fallar la causa con arreglo a la ley y, en especial, someterse en el
pronunciamiento de la sentencia definitiva a las reglas establecidas para
los jueces ordinarios, a diferencia de los arbitradores que sólo deben
fallar obedeciendo a lo que su prudencia y equidad le dictaren
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte Suprema). En la
especie, la renuncia a recursos jurisdiccionales contenida en el
compromiso se refiere exclusivamente a la sentencia definitiva que dicte
el árbitro designado en dicho instrumento, es decir, al juez arbitral de
primera instancia. Por tanto, dicha renuncia, que ciertamente debe
interpretarse en forma restrictiva, no alcanza a los recursos
jurisdiccionales que proceden en contra de la sentencia definitiva
dictada por el tribunal arbitral de segunda instancia, tanto porque la
competencia de este órgano nace de una situación excepcional prevista
en el compromiso, como porque ni en la constitución del tribunal arbitral
de segunda instancia ni en acto posterior, consta alguna renuncia
expresa y categórica de las partes que importe la improcedencia de todo
recurso en contra de la sentencia de segundo grado. Si bien el
Reglamento Procesal de Arbitraje y los Estatutos del Centro de Arbitraje
y Medicación de la Cámara de Comercio de Santiago —aplicable en el
caso de autos— dispone que "no procederá recurso alguno en contra
de la sentencia definitiva, entendiéndose que las partes renuncian a
todos aquellos recursos que por ley fueren renunciables", lo cierto es
que ello no torna improcedentes a priori los recursos de casación en la
forma y en el fondo en contra de la sentencia definitiva, en primer lugar,
porque las partes acordaron que el tribunal arbitral tendría la calidad de
árbitro de derecho en cuanto al fallo, cuestión que por esencia lo obliga
a pronunciar su decisión con arreglo a la ley y, en segundo lugar, porque
doctrina y jurisprudencia han establecido ciertos límites a la renuncia,
concluyendo que no resulta procedente renunciar a la casación en la
forma por las causales de incompetencia y ultra petita. Además, no es
posible sostener que sean procedentes de manera conjunta tanto el
recurso de queja como el de casación en la forma, pues dicha
compatibilidad sólo es prevista por la ley en el artículo 545 inciso 1º
parte final del Código Orgánico de Tribunales, respecto de las
sentencias definitivas de primera o única instancia dictadas por árbitros
arbitradores, cuyo no es el caso, puesto que la sentencia recurrida es
de segunda instancia y no fue dictada por árbitros arbitradores, sino por
árbitros mixtos, los que al igual que los de derecho, deben fallar siempre
con arreglo a la ley (considerando 5º de la sentencia de la Corte
Suprema). De lo expuesto fluye que en contra de la sentencia definitiva
dictada por el tribunal arbitral mixto de segunda instancia procedían
recursos jurisdiccionales y al menos el de casación en la forma, pues la
doctrina ha proscrito su renuncia respecto de las causales de
incompetencia y ultra petita, de manera que siempre es procedente por
ellas. En este sentido, el hecho de que el tribunal arbitral de segunda
instancia tuviese las facultades de los arbitradores en cuanto al
procedimiento no conlleva la imposibilidad de recurrir de casación en la
forma por tales vicios, pues la incompetencia dice relación con normas
de orden público, en tanto la ultra petita como los demás vicios que se
pueden producir en la dictación misma del fallo permiten controlar que
los jueces mixtos se comporten como árbitros de derecho en cuanto al
pronunciamiento del fallo. En consecuencia, la resolución impugnada
no es de aquellas en contra de las cuales se permite la interposición de
un recurso de queja, puesto que es un requisito indispensable para su
procedencia que no sea susceptible de recurso alguno, ordinario o
extraordinario, cuestión que claramente no se cumple en autos, de
modo tal que al ser posible la revisión de la sentencia censurada a
través de recursos jurisdiccionales, no es posible examinar la corrección
de dicho fallo por esta vía de naturaleza disciplinaria (considerandos 6º
y 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 29/03/2016, Rol Nº 12889-2015,

Cita online: CL/JUR/1922/2016

2. El árbitro de derecho debe someterse a las normas comunes a todo


procedimiento

Que dada la circunstancia señalada y de conformidad al artículo 223


del Código Orgánico de Tribunales, al prescribir: "el árbitro de derecho
fallará con arreglo a la ley y se someterá tanto en la tramitación como
en el pronunciamiento de la sentencia definitiva, a las reglas
establecidas para los jueces ordinarios, según la naturaleza de la acción
deducida" (...) en un procedimiento seguido ante uno de estos árbitros
se aplicarán las normas comunes a todo procedimiento y las normas
legales establecidas para cada tipo específico (considerando 2º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 2/05/2012, Rol Nº 5634-2010,

Cita online: CL/JUR/4379/2012

3. Procede la declaración de abandono del procedimiento en


procedimientos arbitrales llevados ante un árbitro de derecho
Que dilucidada entonces la primera controversia planteada, será
necesario ahora pronunciarse respecto de las alegaciones de la
recurrente, orientadas a señalar que, no obstante lo concluido, resultaría
siempre improcedente la aplicación de la citada institución jurídica en
materias marítimas sometidas a procedimientos arbitrales. Sobre el
particular resulta imprescindible hacer mención de las normas a que las
propias partes sometieron voluntaria y convencionalmente el
procedimiento de autos. Así se desprende del numeral cuarto del acta
del primer comparendo, de fecha 30 de noviembre de 1999, que ellas
acordaron aplicar en la tramitación de este juicio las normas del Libro I
del Código de Procedimiento Civil entre las que se incluye la institución
del abandono de procedimiento y las disposiciones del Libro III
Título VIII del Código de Comercio, cuyo artículo 1205 estatuye que el
procedimiento que deban emplear los árbitros se regirá por lo que las
partes convengan por escrito y bajo sus firmas y, en su defecto, por lo
preceptuado en el Código de Procedimiento Civil sobre el juicio arbitral;
esta remisión debe entenderse efectuada al Título VIII del Libro III del
Código de Procedimiento Civil, estableciendo al efecto el artículo 628
que los árbitros de derecho se someterán, tanto en la tramitación como
en el pronunciamiento de la sentencia definitiva, a las reglas que la ley
establece para los jueces ordinarios (considerando 7º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 13/06/2007, Rol Nº 5794-2005, Cita online:


CL/JUR/4710/2007

ARTÍCULO 629 (786)

En los juicios arbitrales se harán las notificaciones personalmente o por


cédula, salvo que las partes unánimemente acuerden otra forma de
notificación.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40, 48, 49, 53 y 54.

ARTÍCULO 630 (787)

Si los árbitros son dos o más, todos ellos deberán concurrir al


pronunciamiento de la sentencia y a cualquier acto de substanciación del
juicio, a menos que las partes acuerden otra cosa.
No poniéndose de acuerdo los árbitros, se reunirá con ellos el tercero, si lo
hay, y la mayoría pronunciará resolución.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 168, 187, 188, 213, 214 y 641.
Código Orgánico de Tribunales: artículo 237.

ARTÍCULO 631 (788)

En caso de no resultar mayoría en el pronunciamiento de la sentencia


definitiva o de otra clase de resoluciones, siempre que ellas no sean
apelables, quedará sin efecto el compromiso, si éste es voluntario. Si es
forzoso, se procederá a nombrar nuevos árbitros.

Cuando pueda deducirse el recurso, cada opinión se estimará como


resolución distinta, y se elevarán los antecedentes al tribunal de alzada, para
que resuelva como sea de derecho sobre el punto que haya motivado el
desacuerdo de los árbitros.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 30 al 37, 61, 113, 639 y 648. Código
Orgánico de Tribunales: artículos 63 Nº 2, 227 y 238.

ARTÍCULO 632 (789)

Toda la substanciación de un juicio arbitral se hará ante un ministro de fe


designado por el árbitro, sin perjuicio de las implicancias o recusaciones que
puedan las partes reclamar; y si está inhabilitado o no hay ministro de fe en
el lugar del juicio, ante una persona que, en calidad de actuario, designe el
árbitro.

Cuando el árbitro deba practicar diligencias fuera del lugar en que se siga
el compromiso, podrá intervenir otro ministro de fe o un actuario designado
en la forma que expresa el inciso anterior y que resida en el lugar donde
dichas diligencias han de practicarse.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 71 al 77, 359, 360, 363, 362, 380 y
635.

ARTÍCULO 633 (790)


No podrá el árbitro compeler a ningún testigo a que concurra a declarar
ante él. Sólo podrá tomar las declaraciones de los que voluntariamente se
presten a darlas en esta forma.

Cuando alguno se niegue a declarar, se pedirá por conducto del árbitro al


tribunal ordinario correspondiente que practique la diligencia, acompañándole
los antecedentes necesarios para este objeto.

Los tribunales de derecho podrán cometer esta diligencia al árbitro mismo


asistido por un ministro de fe.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 71 al 77, 359, 360, 363, 380 y 635.

ARTÍCULO 634 (791)

Para el examen de testigos y para cualquiera otra diligencia fuera del lugar
del juicio, se procederá en la forma dispuesta por el inciso 2º del
artículo precedente, dirigiéndose por el árbitro la comunicación que
corresponda al tribunal que deba entender en dichas diligencias.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 71 al 77, 359, 360 362, 380 y 635.
Código Orgánico de Tribunales: artículo 235.

ARTÍCULO 635 (792)

Para la ejecución de la sentencia definitiva se podrá ocurrir al árbitro que la


dictó, si no está vencido el plazo porque fue nombrado, o al tribunal ordinario
correspondiente, a elección del que pida su cumplimiento. Tratándose de otra
clase de resoluciones, corresponde al árbitro ordenar su ejecución.

Sin embargo, cuando el cumplimiento de la resolución arbitral exija


procedimientos de apremio o el empleo de otras medidas compulsivas, o
cuando haya de afectar a terceros que no sean parte en el compromiso,
deberá ocurrirse a la justicia ordinaria para la ejecución de lo resuelto.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 231, 232 y 633. Convención sobre el
reconocimiento y ejecución sentencias arbitrales extranjeras, Decreto Supremo promulgatorio
Nº 664, D.O. 30.10.1975: artículo II.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Reclamo contra Conservador de Bienes Raíces. Ejecución de
resolución arbitral que afecte a terceros requiere se concurra a la
justicia ordinaria. Medida precautoria decretada en procedimiento
arbitral, respecto de inmueble inscrito a nombre de tercero, requiere
el pronunciamiento de la justicia ordinaria

La sentencia impugnada compartió el fundamento de la negativa del


Conservador de Bienes Raíces, de inscribir medida precautoria
respecto de bien inmueble, señalando que el artículo 635 del Código de
Procedimiento Civil exige en el caso que una resolución arbitral afecte
a terceros, concurrir a la justicia ordinaria para la ejecución de lo
resuelto, lo que no ha sucedido en autos. En consecuencia, habiéndose
establecido en la sentencia recurrida que el bien inmueble respecto del
cual se ordenó la medida precautoria señalada, se encuentra inscrito a
favor de un tercero que no forma parte del procedimiento arbitral en el
que se la decretó, no procede su ejecución si no es por la vía del
artículo 635 inciso tercero ya citado (considerandos 9º y 10º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 5/08/2015, Rol Nº 5329-2015,

Cita online: CL/JUR/4447/2015

2. Carencia en la facultad de imperio de los jueces árbitros

Que lo relacionado precedentemente evidencia lo que se ha


entendido como carencia de los jueces árbitros, de la facultad de
imperio, para hacer ejecutar lo que mediante resolución ejecutoriada
han ordenado en sus decisiones y por esta circunstancia es menester
que, aquella parte que obtuvo decisión favorable en el juicio arbitral,
acuda a los jueces ordinarios para lograr el fin último de su demanda,
que se traduce en el cumplimiento íntegro de lo ordenado por el tribunal
que decidió en su favor el litigio declarativo (considerando 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 5/11/2010, Rol Nº 5464-2009, Cita online:


CL/JUR/9158/2010

Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Antofagasta, 5/12/2013, Rol Nº 384-2013,


Cita online: CL/JUR/2837/2013

— Corte de Apelaciones de Punta Arenas, 23/12/2011, Rol Nº 207-


2011,

Cita online: CL/JUR/10114/2011

3. Para exigir la ejecución de aquellas resoluciones que exijan


procedimientos de apremio debe concurrir a la justicia ordinaria

Si bien corresponde al árbitro ordenar la ejecución de las resoluciones


que dicte, tratándose de aquellas que exijan procedimientos de apremio
o el empleo de otras medidas compulsivas, deberá ocurrirse a la justicia
ordinaria para la ejecución de lo resuelto. Teniendo presente lo antes
relacionado, se desprende que el árbitro carece de facultades para
ordenar el arresto en caso de no cumplimiento de alguna resolución
dictada por él en un procedimiento de arbitraje, caso en el cual, debe
solicitarse a la justicia ordinaria la adopción de las medidas coercitivas
para obtener el cumplimiento obligado de lo resuelto (considerando 4º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 15/11/2002, Rol Nº 60250-2002,

Cita online: CL/JUR/2365/2002

4. A quienes compete solicitar el cumplimiento de lo resuelto es a


quienes tienen el carácter de partes, y, más específicamente, a la
parte que obtuvo sentencia

Que, conforme a las reglas sobre cumplimiento de las resoluciones


judiciales y a las normas particulares sobre cumplimiento de sentencias
definitivas dictadas por jueces árbitros (artículos 232 y 635,
respectivamente), puede fundadamente colegirse que a quienes
compete solicitar el cumplimiento de lo resuelto es a quienes tienen el
carácter de partes, y, más específicamente, a la parte que obtuvo
sentencia. Que si quien solicita la fuerza pública para el cumplimiento
de lo resuelto es el propio juez árbitro, por carecer de la legitimidad
activa para gestionarla, su petición debe ser rechazada
(considerandos 2º y 5º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 7/06/1994, Rol Nº 22556-1994, Cita online:
CL/JUR/1497/1994

5. Compete solicitar el cumplimiento de las sentencias arbitrales a la


parte que obtuvo sentencia favorable

Compete solicitar el cumplimiento de las sentencias arbitrales a la


parte que obtuvo sentencia favorable (considerando 2º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 7/06/1994, Rol Nº 22556-1994, Cita online:


CL/JUR/1497/1994

§ 2. Del juicio seguido ante arbitradores

ARTÍCULO 636 (793)

El arbitrador no está obligado a guardar en sus procedimientos y en su fallo


otras reglas que las que las partes hayan expresado en el acto constitutivo
del compromiso.

Si las partes nada han dicho a este respecto, se observarán las reglas
establecidas en los artículos que siguen.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 628, 637 al 641. Código Orgánico de
Tribunales: artículos 223, 225 y 235. Código del Trabajo: artículos 358, 359, 360, 392 a 394 y
397. Decreto con Fuerza de Ley Nº 164, Ley de Concesiones: artículo 36.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Árbitro arbitrador puede apartarse de las reglas legales para resolver


la controversia, si en su fallo justifica las razones que prudencia o de
equidad que le llevan adoptar su decisión

Árbitro arbitrador o amigable componedor es aquel llamado a fallar sin


sujeción a estrictas leyes y obedeciendo únicamente "a lo que su
prudencia y la equidad le dictaren, y no estará obligado a guardar en
sus procedimientos y en su fallo otras reglas que las que las partes
hayan expresado...", según definición y mandato del artículo 223
inciso 3º del Código Orgánico de Tribunales, y preceptos 636 y
siguientes del Código de Procedimiento Civil. Por consiguiente, cada
vez que se le entregan a un árbitro facultades de arbitrador se le están
otorgando las máximas facultades que puede recibir un juez, pues, las
únicas restricciones que en este caso recibe para fallar, aparte de
respetar las formas exigidas por el artículo 640 del Código de
Procedimiento Civil y de respetar la prueba habida en el proceso, es que
entregue razones de prudencia y equidad para fundar su decisión. Por
ello, cada vez que las partes otorgan facultades con tal amplitud a un
árbitro, deben estar conscientes de que el árbitro puede apartarse de
las reglas legales para resolver la controversia, si en su fallo justifica las
razones que prudencia o de equidad que le llevan adoptar su decisión
(considerandos 11º y 12º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 24/08/2018, Rol Nº 4417-2018,

Cita online: CL/JUR/4776/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 12/02/2018, Rol Nº 6693-2017,

Cita online: CL/JUR/3385/2018

2. La decisión de un árbitro arbitrador puede ser equivocada, pero en


ningún caso carecer de fundamentos

Que en atención a las facultades del sentenciador mal puede una de


las partes cuestionar las normas legales que sustentan la decisión,
además la sentencia recurrida, ajustándose a los hechos de la causa
aplicó el derecho a la controversia exponiendo los fundamentos que
motivan la resolución, sin contravenir la prudencia ni la equidad, como
le era exigible (considerando 8º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 23/01/2012, Rol Nº 2599-2011,

Cita online: CL/JUR/3865/2012

Fallo en el mismo sentido:


— Corte de Apelaciones de Concepción, 31/01/2012, Rol Nº 1497-
2011,

Cita online: CL/JUR/4385/2012

ARTÍCULO 637 (794)

El arbitrador oirá a los interesados; recibirá y agregará al proceso los


instrumentos que le presenten; practicará las diligencias que estime
necesarias para el conocimiento de los hechos, y dará su fallo en el sentido
que la prudencia y la equidad le dicten.

Podrá oír a los interesados por separado, si no le es posible reunirlos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 636, 638, 639, 795 Nº 9 y 796. Código
Orgánico de Tribunales: artículo 237. Código del Trabajo: artículo 362.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Árbitro arbitrador debe fallar obedeciendo a su prudencia y equidad

El árbitro recurrido fue designado para resolver la controversia en


calidad de arbitrador, por lo que de conformidad con lo prevenido en el
artículo 223 inciso 3º del Código Orgánico de Tribunales y 637 del
Código de Procedimiento Civil, su cometido es fallar obedeciendo a su
prudencia y equidad. Luego, puede sostenerse que cada vez que se le
entregan a un árbitro facultades de arbitrador, se le están otorgando las
máximas prerrogativas que puede recibir un juez, pues las únicas
restricciones que en este caso recibe para fallar, aparte de respetar las
formas exigidas por el artículo 640 del Código de Procedimiento Civil, y
de respetar la prueba habida en el proceso, es que entregue razones
de prudencia y equidad para fundar su decisión (considerando 3º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 12/02/2019, Rol Nº 7343-2018,

Cita online: CL/JUR/764/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 2/02/2018, Rol Nº 6837-2017,


Cita online: CL/JUR/530/2018

2. Recurso de queja no ha sido instituido para corregir errores relativos


a la labor interpretativa de los jueces

En el caso de marras para arribar a la conclusión contenida en la


sentencia el juzgador ha cumplido las exigencias impuestas por la ley,
particularmente, por el artículo 170 del Código de Procedimiento Civil,
toda vez que ha resuelto la controversia de acuerdo a derecho,
indicando las consideraciones de hecho y de derecho que sirven de
fundamento a la sentencia, como asimismo la enunciación de las leyes
y principios con arreglo a los cuales se ha pronunciado el fallo. Así es
como, el mérito de los antecedentes tenidos a la vista, no permiten
concluir que el juez recurrido, al decidir como lo hizo, esto es, acogiendo
parcialmente la demanda, haya realizado alguna de las conductas que
la ley reprueba y que sería necesario reprimir y enmendar mediante el
ejercicio de las atribuciones disciplinarias de esta Corte; sin que de
manera alguna corresponda por esta vía modificar la sentencia,
radicando la impugnación en discrepancias con la decisión y los
argumentos que la sustentan, obviando los márgenes de actuación
como árbitro arbitrador para la toma de su resolución, lo que lo obliga
sólo a lo que su prudencia y equidad le dictaren —artículos 223 del
Código Orgánico de Tribunales y 637 del Código de Procedimiento
Civil—, conferidos al recurrido al momento de entregarle competencia.
En consecuencia, no se advierte la concurrencia de las faltas o abusos
graves que se denuncian en el arbitrio que se analiza, por lo que éste
no puede prosperar (considerandos 10º y 11º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 10/09/2018, Rol Nº 6993-2018,

Cita online: CL/JUR/5260/2018

3. Deber del árbitro arbitrador que en su sentencia valore


prudentemente la prueba

Que no es un hecho discutido sino que por lo demás reconocido y que


aparece de los antecedentes tenidos a la vista, que el recurrido fue
designado como juez en el carácter de árbitro arbitrador. En relación a
lo anterior y de acuerdo con la parte final del artículo 637 del Código de
Enjuiciamiento Civil, debe dictar el fallo conforme a la prudencia y a la
equidad. Por su parte, en el Nº 4 del artículo 650 del mismo Código, se
exige como requisito de la sentencia, que se expresen las razones de
prudencia y equidad que le sirven de fundamento. "Prudencia" según el
Diccionario de la Real Academia de la Lengua, es una de las cuatro
virtudes cardinales que consiste en discernir lo que es bueno o malo,
para seguirlo o huir de ello. Templanza, moderación, discernimiento,
buen juicio. Por su parte, "Equidad", significa en una de sus acepciones:
bondad o templanza habitual, propensión a dejarse guiar o a fallar por
el sentimiento del deber o de la conciencia más bien que por las
prescripciones rigurosas de la justicia o por el texto terminante de la ley.
Entonces es deber del árbitro arbitrador que en su sentencia valore
prudentemente la prueba, es decir, con buen juicio, discerniendo entre
la prueba buena y la mala; y sea, además, equitativo; a contrario sensu,
no es equitativo, si se está solo a lo declarado por un testigo cuando
existe una abundante prueba documental o testimonial en sentido
distinto del proceso (considerandos 5º, 6º y 7º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 6/03/2019, Rol Nº 13874-2018,

Cita online: CL/JUR/1255/2019

ARTÍCULO 638 (795)

Si el arbitrador cree necesario recibir la causa a prueba, decretará este


trámite.

Es aplicable a este caso lo dispuesto en los artículos 633 y 634.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 633, 634, 636, 638, 639, 795 Nº 9 y
796.

ARTÍCULO 639 (796)

El arbitrador practicará solo o con asistencia de un ministro de fe, según lo


estime conveniente, los actos de substanciación que decrete en el juicio, y
consignará por escrito los hechos que pasen ante él y cuyo testimonio le
exijan los interesados, si son necesarios para el fallo.
Las diligencias probatorias concernientes al juicio de compromiso que se
practiquen ante los tribunales ordinarios se someterán a las reglas
establecidas para éstos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 632, 633, 634 y 648.

ARTÍCULO 640 (797)

La sentencia del arbitrador contendrá:

1º La designación de las partes litigantes;

2º La enunciación breve de las peticiones deducidas por el demandante;

3º La misma enunciación de la defensa alegada por el demandado;

4º Las razones de prudencia o de equidad que sirven de fundamento a la


sentencia; y

5º La decisión del asunto controvertido.

La sentencia expresará, además, la fecha y el lugar en que se expide;


llevará al pie la firma del arbitrador, y será autorizada por un ministro de fe o
por dos testigos en su defecto.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 170, 639, 768 Nº 5 y 796. Código
Orgánico de Tribunales: artículos 237 y 238. Código del Trabajo: artículos 363 y 364.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Resolución de contrato. Sentencia dictada por árbitro arbitrador no


requiere reunir todas las formalidades de aquella que se pronuncia en
un juicio de derecho

El procedimiento arbitral, seguido ante a un árbitro arbitrador —que


en este caso además no es letrado—, no exige que la sentencia se dicte
respetando todas las formalidades que ha de reunir aquella que se
pronuncia en un juicio de derecho. El sentenciador, en calidad de
amigable componedor, ha de sustentar su decisión en la prueba recibida
libremente y en la convicción que le asiste. En la especie, revisada la
sentencia que motiva el presente recurso, no cabe más que concluir que
ella satisface los requisitos exigidos por el artículo 640 del Código de
Procedimiento Civil para este tipo de resoluciones. En efecto, el fallador
expone brevemente las pretensiones de demandante y demandado, sin
que sea necesaria la relación completa de los hechos fundantes de esas
peticiones, ni la descripción de aquellos respecto de los que versó la
discusión y la prueba, que echa en falta el quejoso. En el considerando
único del fallo, el árbitro expone las razones de su resolución, que se
fundan en la prueba recibida de ambas partes y en su conocimiento
directo de los hechos, enunciación que satisface la exigencia de
fundamento contenida en el numeral cuarto de la disposición citada
(considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 31/03/2017, Rol Nº 2526-2016,

Cita online: CL/JUR/1577/2017

2. La sentencia del arbitrador debe contener los fundamentos de


prudencia o equidad

Confirma el criterio que se viene sustentando, en cuanto a que, como


legítimamente podía hacerlo, el tribunal de la instancia falló
estrictamente de acuerdo a la ley, la circunstancia de que el
sentenciante, en el pronunciamiento impugnado, como antes se
expresó, jamás invoca su prudencia o equidad para resolver como lo
hace, no obstante, que si hubiera resuelto de acuerdo a esas virtudes,
debería haberlo manifestado, a fin de cumplir a cabalidad con las
normas básicas del debido proceso (considerando 9º de la sentencia de
la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 9/04/2012, Rol Nº 3134-2012,

Cita online: CL/JUR/764/2013

Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 6/08/2013, Rol Nº 3113-2013,

Cita online: CL/JUR/1768/2013

— Corte de Apelaciones de Santiago, 17/06/2012, Rol Nº 9156-2012,

Cita online: CL/JUR/1341/2013


— Corte de Apelaciones de Concepción, 31/01/2012, Rol Nº 1497-
2011,

Cita online: CL/JUR/4385/2012

3. No puede concluirse que el árbitro recurrido haya cometido falta ni


abuso al dictar la sentencia reclamada toda vez que lo hizo
obedeciendo al consejo de su prudencia y equidad

No puede concluirse que el árbitro recurrido haya cometido falta ni


abuso al dictar la sentencia reclamada toda vez que lo hizo obedeciendo
al consejo de su prudencia y equidad, y como una premisa de esa
especie impide enumerar factores para ello, lo que no puede hacerse
porque la enumeración puede ser incompleta, no se divisa razón que
pueda justificar la aceptación del recurso en estudio (considerando 6º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 31/01/1990, Rol Nº 374-1990, Cita online:


CL/JUR/406/1990

4. La facultad del árbitro arbitrador de fallar en conciencia no lo exime


de la obligación de fundamentar sus decisiones

La facultad del árbitro arbitrador de fallar en conciencia no lo exime


de la obligación de fundamentar sus decisiones, ni autoriza la
arbitrariedad judicial, y por ello cabe concluir que se incurre en falta
cuando se coarta a una de las partes la posibilidad de que pueda
impetrar las diligencias de prueba que hagan posible que la sentencia
que deben dictar sea fruto de la convicción que emane de los
antecedentes y pruebas concretas que se alleguen al proceso y no
solamente de apreciaciones puramente subjetivas de los
sentenciadores (considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 2/01/1989, Rol Nº 8037-1989, Cita online:


CL/JUR/281/1989

ARTÍCULO 641 (798)


Si son dos o más los arbitradores, deberán todos ellos concurrir al
pronunciamiento de la sentencia y a cualquier otro acto de substanciación,
salvo que las partes acuerden otra cosa.

Cuando no haya acuerdo entre los arbitradores, se llamará al tercero, si lo


hay; y la mayoría formará resolución.

No pudiendo obtenerse mayoría en el pronunciamiento de la sentencia


definitiva o de otra clase de resoluciones, quedará sin efecto el compromiso
si no puede deducirse apelación. Habiendo lugar a este recurso, se elevarán
los antecedentes a los arbitradores de segunda instancia, para que resuelvan
como estimen conveniente sobre la cuestión que motiva el desacuerdo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 30 al 37, 61, 113, 639 y 648. Código
Orgánico de Tribunales: artículos 237 y 238. Código del Trabajo: artículo 366.

ARTÍCULO 642 (799)

Sólo habrá lugar a la apelación de la sentencia del arbitrador cuando las


partes, en el instrumento en que constituyen el compromiso, expresen que se
reservan dicho recurso para ante otros árbitros del mismo carácter y designen
las personas que han de desempeñar este cargo.

Concordancias: Código Orgánico de Tribunales: artículo 239. Código del Trabajo:


artículos 363 y 364.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Resoluciones dictadas por juez árbitro arbitrador no son susceptibles


de apelación

En la especie, no existe controversia que estamos ante un


procedimiento seguido ante un juez árbitro, que conforme lo esgrimido
por el recurrente y requerido, fue investido como arbitrador, y desde ahí,
y sin que conste pacto en contrario, sus resoluciones no son
susceptibles de apelación, por disponerlo así el artículo 642 del Código
de Procedimiento Civil para las sentencias que dicten tales árbitros, en
los cuales ha de incluirse no solo la definitiva, sino también aquellas
dictadas durante su substanciación, lo que fuerza necesariamente a
desestimar el presente arbitrio, destinado precisamente a determinar la
correcta o no concesión de un recurso de apelación o bien de sus
efectos, pero al estar ex ante vedado por la naturaleza del
procedimiento acordado, redunda en su rechazo (considerando 3º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Antofagasta, 9/08/2019, Rol Nº 846-2019,

Cita online: CL/JUR/4698/2019

2. Juicio arbitral. Juez recurrido no ha cometido falta o abuso grave al


determinar que recurso de apelación intentado por la quejosa es
inadmisible

En la especie, no aparece que el juez recurrido haya cometido falta o


abuso grave. En efecto, ello es así, por las siguientes razones:
a) Porque no es efectivo que todas las partes hayan estado de acuerdo
con la modificación de las bases de procedimiento en cuanto al régimen
de recursos, pues expresamente una de ellas no ratificó lo acordado en
el primer comparendo, en consecuencia, corresponde tener como
válidas las primitivas bases que excluyeron la posibilidad de apelar
contra la sentencia definitiva. b) Tampoco puede admitirse el recurso de
apelación en contra de la sentencia definitiva si no se cumplió con lo
dispuesto en el artículo 642 del Código de Procedimiento Civil, que
exige que para su procedencia las partes en el compromiso expresen
que se reservan dicho recurso para ante otros árbitros del mismo
carácter y designen las personas que han de desempeñar este cargo,
sin que ello se hiciera en la causa. No se advierte en esta omisión un
actuar de mala fe del árbitro, pues la norma es clara y precisa en la
necesidad de designar al tribunal arbitral de alzada sin que se divise que
las partes a quien representa el quejoso pudieran ser inducidas a la
omisión por el árbitro pues quien las representa es abogado. c) Que
dado que el recurso de queja se dirige en contra de la resolución que
declaró inadmisible el recurso de apelación deducido en contra de la
sentencia arbitral, tampoco es procedente recurrir de queja pues la
resolución que agravia al quejoso —la de inadmisibilidad de apelación—
es susceptible de impugnarse por el correspondiente recurso de hecho,
excluyendo así la queja (considerando 6º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 9/08/2019, Rol Nº 15882-2019,

Cita online: CL/JUR/9513/2020


3. Se requiere una cláusula especial que debe contener la designación
de un tribunal de segunda instancia constituido por amigables
componedores

Sólo habrá lugar a la apelación de la sentencia del arbitrador cuando


las partes, en el instrumento en que constituyan el compromiso,
expresen que se reservan dicho recurso para ante otros árbitros del
mismo carácter y designen las personas que han de desempeñar este
cargo. Se requiere, en consecuencia, una cláusula especial, cláusula
que debe contener la designación de un tribunal de segunda instancia
constituido por amigables componedores. La reserva del recurso para
ante una Corte de Apelaciones es improcedente en derecho, carece de
efecto y no da competencia a ese tribunal, porque de resoluciones
pronunciadas en equidad no es posible apelar ante un tribunal de
derecho y las cortes no pueden prescindir en sus resoluciones de la
aplicación de las leyes; las partes no pueden investir a los tribunales de
justicia de facultades que la ley no les da (considerando 3º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 11/01/2007, Rol Nº 1115-2005,

Cita online: CL/JUR/3885/2007

ARTÍCULO 643 (800)

La ejecución de la sentencia de los arbitradores se sujetará a lo dispuesto


en el artículo 635.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 231, 232 y 633.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Debe resolver un árbitro la cuestión de que una de las partes quiera


asignarle mérito ejecutivo al cobro de una determinada acreencia u
obligación convenida en el mismo instrumento que contiene el
compromiso

El que una de las partes quiera asignarle mérito ejecutivo al cobro de


una determinada acreencia u obligación convenida en el mismo
instrumento que contiene el compromiso, es una cuestión que habrá de
resolver el árbitro según las facultades que la ley le otorga. De lo
contrario, sería muy fácil para una de las partes, mediante el expediente
de interponer acciones ejecutivas ante los tribunales ordinarios, sustraer
la controversia de la jurisdicción del árbitro en la inteligencia que éste
no puede conocer de ellas en cuanto exijan procedimiento de apremio,
vulnerando así la ley del contrato prevista en el artículo 1545 del Código
Civil (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 17/01/2005, Rol Nº 3273-2003, Cita online:


CL/JUR/5751/2005

2. Si no se trata de una sentencia definitiva sino de otra clase de


resoluciones, debe concurrirse a la justicia ordinaria para la ejecución
de lo resuelto

Tratándose de otra clase de resoluciones que no sean la sentencia


definitiva, deberá ocurrirse a la justicia ordinaria para la ejecución de lo
resuelto cuando haya de afectar a terceros que no sean parte del
compromiso (considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 24/09/1987, Rol Nº 3403-1987, Cita online:


CL/JUR/809/1987

§ 3. Disposición común a los dos párrafos precedentes

ARTÍCULO 644 (801)

Los expedientes fallados por árbitros o arbitradores se archivarán en la


comuna o agrupación de comunas donde se haya constituido el compromiso,
en el oficio del funcionario a quien correspondería su custodia si se hubiera
seguido el juicio ante los tribunales ordinarios.203

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 414, 415 y 416. Código Civil:
artículos 1322 a 1325 y 2304. Código Orgánico de Tribunales: artículos 225, 227 Nº 2, 231, 232
y 236.

TÍTULO IX DE LOS JUICIOS SOBRE PARTICIÓN DE BIENES


ARTÍCULO 645 (802)

Suprimido.204

ARTÍCULO 646 (803)

Cuando haya de nombrarse partidor, cualquiera de los comuneros ocurrirá


al tribunal que corresponda, pidiéndole que cite a todos los interesados a fin
de hacer la designación, y se procederá a ella en la forma establecida para el
nombramiento de peritos.

Si hay partidor nombrado por los interesados o por el difunto en el caso del
artículo 1324 del Código Civil, y es necesaria la aprobación judicial del
nombramiento en conformidad a la ley, bastará el fallo que la conceda para
que el partidor pueda ejercer sus funciones, previa su aceptación y el
juramento legal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 414, 415 y 416. Código Civil:
artículos 1322 a 1325 y 2304. Código Orgánico de Tribunales: artículos 225, 227 Nº 2, 231, 232
y 236.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Designación de árbitro. Resolución que designa a un árbitro tiene la


naturaleza jurídica de sentencia interlocutoria. Procedencia de la
apelación en el solo efecto devolutivo en contra de la resolución que
designa al árbitro

La resolución que designa un juez árbitro es una sentencia


interlocutoria que sirve de base para la dictación de una sentencia
definitiva, carácter que tiene el fallo arbitral. Así se desprende del
artículo 646 inciso 1º del Código de Procedimiento Civil, disposición que
se remite en la tramitación del nombramiento del juez partidor a la
tramitación establecida para los peritos, contemplada en el artículo 414
y siguientes del Código precitado. Por ende, siendo la resolución que
designa un perito una sentencia interlocutoria, le resulta aplicable el
artículo 194 Nº 2, norma que señala que la apelación entablada contra
las sentencias interlocutorias se concede en el solo efecto devolutivo.
Aun cuando se considerase, como ocurre con una parte de la doctrina
y de la jurisprudencia, que la resolución impugnada es una sentencia
definitiva, de igual modo la apelación contra esa resolución debe
concederse en el solo efecto devolutivo. En efecto, dado que en ese
caso resultaría aplicable al nombramiento de juez árbitro el
procedimiento sumario, de acuerdo al artículo 680 inciso 1º, también la
apelación contra la sentencia recaída en esa gestión debe concederse
en el solo efecto devolutivo, pues al tener la parte recurrente calidad de
demandado en esa gestión, le es aplicable el artículo 194 Nº 1, norma
que prima sobre el artículo 691 inciso 1º (considerandos 3º y 4º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 21/04/2017, Rol Nº 13444-2016,

Cita online: CL/JUR/1889/2017

2. Designación de juez árbitro. Previo a la designación de Juez Partidor


debe desafectarse el bien familiar

La designación de un Juez Árbitro tiene por objeto, al tenor de lo


dispuesto en los artículos 1317 y siguientes del Código Civil y 646 y
siguientes del Código de Procedimiento Civil, la partición y liquidación
de los bienes comunitarios, de tal manera que puede llegar a enajenar
éstos y comprometer la administración de los bienes. La petición del
solicitante en su escrito de designación de Juez Partidor es que "se
aboque a liquidar la comunidad existente y concretar los bienes y
derechos que cada parte tenga en ella sobre bienes, derechos o sumas
dinerarias específicas, y en especial la propiedad singularizada", la cual
se encuentra afectada como bien familiar. De esta manera siendo la
naturaleza de la declaración de bien familiar eminentemente cautelar,
cuya finalidad es dar protección a la familia a objeto de que pueda tener
una vivienda donde vivir y por otro lado, como consecuencia de la
misma una limitación al derecho de propiedad en cuanto el cónyuge
dueño no puede enajenar ni administrar en bien raíz; y siendo la
finalidad del Juez Arbitro Partidor el de liquidar la comunidad, pudiendo
llegar hasta enajenar el inmueble, se estima por esta Corte que previo
a la designación de Juez Partidor, debe procederse a la desafectación
del bien raíz que ha sido declarado como bien familiar, conforme a los
artículos 145 y siguientes del Código Civil (considerandos 6º a 8º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 28/02/2018, Rol Nº 6754-2017,


Cita online: CL/JUR/966/2018

3. La oposición formulada al nombramiento del partidor se fundamenta


en la negación de la existencia de una comunidad

La oposición formulada al nombramiento del partidor se fundamenta


en la negación de la existencia de una comunidad, cuestión que por su
naturaleza debe ser materia de un juicio de lato conocimiento.

Corte Suprema, 13/01/1987, Rol Nº 3686-1987, Cita online:


CL/JUR/712/1987

ARTÍCULO 647 (804)

El término que la ley, el testador o las partes concedan al partidor para el


desempeño de su cargo se contará desde que éste sea aceptado,
deduciendo el tiempo durante el cual, por la interposición de recursos o por
otra causa, haya estado totalmente interrumpida la jurisdicción del partidor.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 112, 191, 192 y 652. Código Civil:
artículo 1332. Código Orgánico de Tribunales: artículos 235 y 236.

ARTÍCULO 648 (805)

Se extenderán a los partidores las reglas establecidas respecto de los


árbitros en el Título precedente, en cuanto no aparezcan modificadas por las
del presente Título y sean aplicables a las cuestiones que aquéllos deben
resolver. Sin embargo, las partes mayores de edad y libres administradores
de sus bienes, podrán darles el carácter de arbitradores. Los actos de los
partidores serán en todo caso autorizados por un secretario de los Tribunales
Superiores de Justicia, o por un notario o secretario de un juzgado de letras.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 628, 632 y 644. Código Orgánico de
Tribunales: artículos 379 y 399.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Los actos de los partidores serán en todo caso autorizados por un


secretario de los Tribunales Superiores de Justicia, o por un notario o
secretario de un Juzgado de Letras
Los actos de los partidores serán en todo caso autorizados por un
secretario de los Tribunales Superiores de Justicia, o por un notario o
secretario de un Juzgado de Letras, cargos que, sin excepción,
contemplan entre los requisitos para desempeñarlos que el funcionario
cuente con el título de abogado. Exigencia que importa que los actos
del partidor sólo pueden existir legalmente cuando son autorizados por
el funcionario que la ley determina; a contrario sensu, la falta del referido
funcionario autorizante importa la inexistencia jurídica de los actos en
cuestión, haciéndolos insubsanablemente inválidos (considerandos 2º y
3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 7/01/1997, Rol Nº 1580-1996, Cita online:


CL/JUR/2744/1997

ARTÍCULO 649 (806)

Las materias sometidas al conocimiento del partidor se ventilarán en


audiencias verbales, consignándose en las respectivas actas sus resultados;
o por medio de solicitudes escritas, cuando la naturaleza e importancia de las
cuestiones debatidas así lo exijan. Las resoluciones que se dicten con tal
objeto serán inapelables.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 187, 188, 480, 491, 652, 664, 666,
681 y 682.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cobro de honorarios. Cobro de honorarios por servicios profesionales


prestados en juicios. Litigio independiente de lo tratado en causa de
partición. Procedencia del recurso de apelación de la resolución que
resuelve el procedimiento incidental de cobro de honorarios

Conforme al artículo 697 del Código de Procedimiento Civil, el


procedimiento para perseguir los honorarios por servicios profesionales
prestados en juicios puede realizarse con arreglo al juicio sumario o
interponiendo su reclamo ante el tribunal que conoce de aquél, donde
éstos se generan, caso este último donde su tramitación lo es conforme
a lo previsto para los incidentes. Como se aprecia entonces, se trata de
un juicio independiente cuyas partes, objetos y causa de pedir son
distintos a aquellas que trata el juicio de partición, donde el demandante
ha elegido proceder conforme a la segunda de las opciones que
contempla la norma legal referida (considerando 3º de la sentencia de
la Corte de Apelaciones). En la especie no es aplicable el artículo 649
del Código de Procedimiento Civil referido, únicamente, a las materias
y cuestiones relativas a la partición que conoce, por lo que la tramitación
y especialmente el recurso de apelación deducido en contra de la
sentencia que falla la demanda de honorarios, debe ser tramitada
conforme a la regla general del artículo 187 del Código citado
(considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, Rol Nº 6650-2016,

Cita online: CL/JUR/3368/2017

ARTÍCULO 650 (807)

Cuando se designen días determinados para las audiencias ordinarias, se


entenderá que en ellas pueden celebrarse válidamente acuerdos sobre
cualquiera de los asuntos comprendidos en el juicio, aun cuando no estén
presentes todos los interesados, a menos que se trate de revocar acuerdos
ya celebrados, o que sea necesario el consentimiento unánime en
conformidad a la ley o a los acuerdos anteriores de las partes.

Modificada la designación de día para las audiencias ordinarias, no


producirá efecto mientras no se notifique a todos los que tengan derecho de
concurrir.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 78, 654, 655, 657 y 660.

ARTÍCULO 651 (808)

Entenderá el partidor en todas las cuestiones relativas a la formación e


impugnación de inventarios y tasaciones, a las cuentas de los albaceas,
comuneros y administradores de los bienes comunes, y en todas las demás
que la ley especialmente le encomiende, o que, debiendo servir de base para
la repartición, no someta la ley de un modo expreso al conocimiento de la
justicia ordinaria.

Lo cual se entiende sin perjuicio de la intervención de la justicia ordinaria


en la formación de los inventarios, y del derecho de los albaceas, comuneros,
administradores y tasadores para ocurrir también a ella en cuestiones
relativas a sus cuentas y honorarios, siempre que no hayan aceptado el
compromiso, o que éste haya caducado o no esté constituido aún.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 652, 653, 656, 693 y 858.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Partición de bienes, concepto, tramitación y requisitos. Competencia


del Partidor

En un sentido amplio, se denomina partición de bienes a un conjunto


complejo de actos encaminados a poner fin al estado de indivisión
mediante la liquidación y distribución entre los copartícipes del caudal
poseído proindiviso, en partes o lotes que guarden proporción con los
derechos cuotativos de cada uno de ellos. Tal materia, conforme al
artículo 227 Nº 2 del Código Orgánico de Tribunales, debe ser
obligatoriamente conocida por un árbitro cuando no haya existido un
acuerdo por los comuneros ni la haya verificado el causante en el caso
de la herencia, constituyendo un supuesto de arbitraje forzoso. El
arbitraje que en estos casos se constituye tiene por objeto dividir la
comunidad, distribuyendo los bienes que la componen entre los distintos
comuneros a prorrata de sus respectivos derechos. Con todo, dicha
operación supone que esté previamente determinado, en forma cierta,
cuáles son los bienes que forman la comunidad, cuáles las personas
que tienen derecho en ella y cuáles son los derechos y cuotas que a
cada una correspondan, puesto que cualquier controversia que se
suscite respecto de alguna de estas materias queda al margen de la
competencia del partidor, como expresamente prescriben los
artículos 1330 y 1331 del Código Civil; disposiciones que deben
relacionarse con el artículo 651 inciso 1º del Código de Procedimiento
Civil, que señala: "entenderá el partidor en todas las cuestiones relativas
a la formación e impugnación de inventarios y tasaciones, a las cuentas
de los albaceas, comuneros y administradores de los bienes comunes,
y en todas las demás que la ley especialmente le encomiende, o que,
debiendo servir de base para la partición, no someta la ley de un modo
expreso a la justicia ordinaria" (considerando 3º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 23/12/2019, Rol Nº 6365-2018, Cita online:


CL/JUR/12228/2019
2. Ante juez partidor se deben hacer valer las objeciones respecto a la
composición del haber liquidable

La acción de partición o división de una comunidad es imprescriptible


y, salvo que exista un pacto de indivisión, cualquier persona que tiene
un bien en común con otra puede solicitar al tribunal civil que
corresponda la designación de un juez partidor. De conformidad a lo
dispuesto en el artículo 651 del Código de Procedimiento Civil es labor
del juez partidor la formación de inventarios, de manera tal que es ante
dicha magistratura que la solicitada puede eventualmente hacer valer
las objeciones, de forma y/o fondo, en cuanto a la composición del haber
liquidable y con dichos antecedentes, el partidor determina si procede o
no liquidar y dividir una masa. El juez civil, solo debe tramitar la solicitud
de designación de partidor, para lo cual basta que se le acredite en
términos simples la existencia de una comunidad, lo que ha ocurrido en
la especie (considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 5/07/2019, Rol Nº 8363-2018,

Cita online: CL/JUR/3934/2019

3. Titular de la acción de cuentas en el juicio de partición es el juez


partidor quien la exige para sí

Dentro de las facultades expresamente conferidas por la ley al juez


partidor el artículo 651 del Código de Procedimiento Civil, le otorgó
competencia especial para conocer, entre otras, las cuestiones relativas
a las cuentas de los albaceas, comuneros y administradores de los
bienes comunes y, en general, de todas aquellas materias que deban
de servir de base de la partición, siempre que la ley no sustraiga la
respectiva materia al conocimiento de la justifica ordinaria. En cuanto a
las cuentas, el titular de la acción de cuentas en el juicio de partición es
el juez partidor quien la exige para sí y la exige a quien corresponda,
desde que aquello servirá de base para la posterior repartición y por
ello, no es una controversia entre partes o comuneros, ni da lugar a un
juicio arbitral de rendición de cuentas, que tiene sus propias reglas de
tramitación. Si se diera lugar a controversia entre comuneros,
necesariamente debe iniciarse un juicio arbitral de cuentas, lo que
podría también suspender la tramitación del juicio divisorio. Así las
cosas, el partidor al solicitar la cuenta ha obrado dentro de la esfera de
sus competencias, lo mismo que al pronunciarse respecto del recurso
de reposición deducido por la recurrente de apelación
(considerandos 3º a 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 8/08/2019, Rol Nº 10809-2018,

Cita online: CL/JUR/5689/2019

4. Incidente de nulidad procesal. Liquidación de la sociedad conyugal


constituye una materia de arbitraje forzoso. Liquidación de sociedad
conyugal sirve de base para la repartición. Competencia del juez
árbitro designado para la partición de los bienes de los causantes para
liquidar la sociedad conyugal habida entre ellos sin necesidad de
nueva designación ni nuevo juramento

Conforme al artículo 227 Nº 1 del Código Orgánico de Tribunales, la


liquidación de la sociedad conyugal es una materia de arbitraje forzoso
y, además, es de aquellas que sirven de base para la repartición, según
lo dispuesto en el artículo 651 del Código de Procedimiento Civil, el que
dispone "Entenderá el partidor en todas las cuestiones relativas a la
formación e impugnación de inventarios y tasaciones, a las cuentas de
los albaceas, comuneros y administradores de los bienes comunes, y
en todas las demás que la ley especialmente les encomiende, o que,
debiendo servir de base para la repartición, no someta la ley de un modo
expreso al conocimiento de la justicia ordinaria" (considerandos 4º y 5º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones). Si bien la doctrina ha
sostenido, tratando de los "límites en cuanto la materia", que la
jurisdicción del compromisario no puede extenderse a otros negocios
que los que le hayan sido expresamente confiados, por lo cual el
nombrado a partir de la herencia dejada por una persona carece de
facultad para liquidar la sociedad conyugal que ésta haya tenido, en la
especie, se ha designado al juez árbitro con un objetivo amplio, cual es,
proceder a la partición de los bienes quedados al fallecimiento del
causante, de modo que resulta innecesario que se le otorguen
facultades especiales para una gestión previa —liquidación de la
sociedad conyugal— que naturalmente sirve de base para la partición
de los bienes hereditarios. Así las cosas, el juez árbitro designado es
legalmente competente para proceder a la partición de los bienes
quedados al fallecimiento de los causantes, así como para liquidar la
sociedad conyugal habida entre ambos, sin necesidad de una nueva
designación ni de un nuevo juramento (considerandos 6º a 8º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Temuco, 21/10/2016, Rol Nº 499-2016,

Cita online: CL/JUR/8029/2016

ARTÍCULO 652 (809)

Podrá el partidor fijar plazo a las partes para que formulen sus peticiones
sobre las cuestiones que deban servir de base a la partición.

Cada cuestión que se promueva será tramitada separadamente, con


audiencia de todos los que en ella tengan intereses, sin entorpecer el curso
de las demás y sin que se paralice en unas la jurisdicción del partidor por los
recursos que en otras se deduzcan. Podrán, sin embargo, acumularse dos o
más de dichas cuestiones cuando sea procedente la acumulación en
conformidad a las reglas generales.

Las cuestiones parciales podrán fallarse durante el juicio divisorio o


reservarse para la sentencia final.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 17, 67, 87, 92, 162, 172, 191, 192,
458.

ARTÍCULO 653 (810)

Mientras no se haya constituido el juicio divisorio o cuando falte el árbitro


que debe entender en él, corresponderá a la justicia ordinaria decretar la
forma en que han de administrarse pro indiviso los bienes comunes y
nombrar a los administradores, si no se ponen de acuerdo en ello los
interesados.

Organizado el compromiso y mientras subsista la jurisdicción del partidor,


a él corresponderá entender en estas cuestiones, y continuar conociendo en
las que se hayan ya promovido o se promuevan con ocasión de las medidas
dictadas por la justicia ordinaria para la administración de los bienes
comunes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 293, 300, 651 y 655.


JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Al partidor le corresponde seguir conociendo las cuestiones que se


promuevan de las medidas dictadas por la justicia ordinaria

Organizado el compromiso y mientras subsista la jurisdicción del


partidor, a él corresponderá entender en estas cuestiones, y continuar
conociendo en las que se hayan promovido o se promuevan con
ocasión de las medidas dictadas por la justicia ordinaria para la
administración de los bienes comunes (considerando 6º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 13/11/2013, Rol Nº 6041-2013, Cita online:


CL/JUR/2607/2013

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 22/11/2012, Rol Nº 8861-2011,

Cita online: CL/JUR/2660/2012

2. Mientras no se haya constituido el juicio divisorio o cuando falte el


árbitro que debe entender de él, corresponderá a la justicia ordinaria
decretar la forma en que han de administrarse pro indiviso los bienes
comunes y nombrar a los administradores

Que la sentencia impugnada para decidir en la forma dicha, esto es,


acoger la demanda deducida en autos, ha señalado que: la muerte del
causante don (...) ha traído como consecuencia la apertura de la
sucesión quedada al fallecimiento de éste. Conforme lo anterior, la
muerte de aquél ha originado la existencia de un estado de comunidad
o indivisión, esto es, un estado en que los diversos herederos son
comuneros en la masa hereditaria. Continúan argumentando que:
conforme al artículo 653 del Código de Procedimiento Civil, mientras no
se haya constituido el juicio divisorio o cuando falte el árbitro que debe
entender de él, corresponderá a la justicia ordinaria decretar la forma en
que han de administrarse pro indiviso los bienes comunes y nombrar a
los administradores, si no se ponen de acuerdo en ello los interesados.
Concluyen razonando los jueces del fondo que configurándose en la
especie los requisitos legales necesarios para proceder a la designación
de un administrador pro indiviso, y a fin de cautelar y resguardar los
bienes comunes quedados al fallecimiento del causante, y con el
propósito de evitar la salida o distracción de bienes de la masa
hereditaria en perjuicio de los demás comuneros, y para cautelar la
conservación y adecuado giro de aquéllos se hace necesario acceder a
la pretensión de la actora (considerando 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 19/11/2008, Rol Nº 6342-2007, Cita online:


CL/JUR/5921/2008

ARTÍCULO 654 (811)

Para acordar o resolver lo conveniente sobre la administración pro indiviso,


se citará a todos los interesados a comparendo, el cual se celebrará con sólo
los que concurran. No estando todos presentes, sólo podrán acordarse, por
mayoría absoluta de los concurrentes, que represente a lo menos la mitad de
los derechos de la comunidad, o por resolución del tribunal a falta de mayoría,
todas o algunas de las medidas siguientes:

1ª Nombramiento de uno o más administradores, sea de entre los mismos


interesados o extraños;

2ª Fijación de los salarios de los administradores y de sus atribuciones y


deberes;

3ª Determinación del giro que deba darse a los bienes comunes durante la
administración pro indiviso y del máximum de gastos que puedan en ella
hacerse; y

4ª Fijación de las épocas en que deba darse cuenta a los interesados, sin
perjuicio de que ellos puedan exigirlas extraordinariamente, si hay motivo
justificado, y vigilar la administración sin embarazar los procedimientos de los
administradores.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 193, 300, 651 y 655.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La ley protege los derechos de los indivisarios de las medidas que


taxativamente se encuentran en el artículo 654 del Código de
Procedimiento Civil
Las referidas normas, como se dijo, regulan la administración pro
indiviso en el caso de no existir unanimidad entre los comuneros,
incluyendo el nombramiento del propio administrador, respecto a lo que,
en este caso, no ha habido disconformidad, desde que en el recurso de
que se trata no se acusan infracciones de ley al efecto. Los errores que
se atribuyen al fallo impugnado se formulan a propósito de las
facultades que se han otorgado al designado por la justicia ordinaria. En
relación con esta materia es dable anotar que, al no existir la
unanimidad entre los indivisarios, la ley protege los derechos de la
minoría o de los ausentes permitiendo la adopción por la mayoría o por
la justicia ordinaria, como subsidiaria del consenso absoluto,
únicamente de las medidas que taxativamente se describen en el
artículo 654 del Código de Procedimiento Civil, ya transcrito. Esa es la
protección legal y, en tal sentido, es preciso señalar que el
administrador pro indiviso es un verdadero mandatario de los
interesados, de modo que a su respecto se aplican las normas que
regulan el mandato (considerando 5º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 25/02/2020, Rol Nº 44931-2017, Cita online:


CL/JUR/12896/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 13/11/2013, Rol Nº 6041-2013,

Cita online: CL/JUR/2607/2013

— Corte Suprema, 22/11/2012, Rol Nº 8861-2011,

Cita online: CL/JUR/2660/2012

ARTÍCULO 655 (812)

Para poner término al goce gratuito de alguno o algunos de los comuneros


sobre la cosa común, bastará la reclamación de cualquiera de los
interesados; salvo que este goce se funde en algún título especial.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 653 y 654. Código Civil:


artículos 2305, 2081 Nº 2.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cese de goce gratuito

La única forma en que el comunero que se encuentra gozando de la


cosa pueda enervar la acción por la que se pide el cese de su goce
gratuito, es acreditando la existencia de un título que la ampare, como
sería, por ejemplo, un usufructo. Conforme quedó demostrado en autos,
el bien raíz en cuestión está ocupado por la demandada en forma
gratuita (presupuesto que no fue controvertido) y sin título justificativo,
pues no se logró establecer la existencia del acuerdo verbal que la
demandada afirmó tener con sus hermanos y que la autorizaba a vivir
en la propiedad como contraprestación a los cuidados dispensados a su
madre, que era el único título que invocaba. En consecuencia, resulta
procedente poner término a la gratuidad del goce por sentencia judicial,
conforme a lo prevenido en el artículo 655 del Código de Procedimiento
Civil, como ha sido resuelto en el fallo apelado (considerandos 3º y 4º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 18/07/2019, Rol Nº 669-2019,

Cita online: CL/JUR/4147/2019

2. Cese de goce gratuito de inmueble. Derecho de cualquiera de los


comuneros para reclamar el término del goce gratuito que estuviere
ejerciendo otro de los comuneros

El artículo 655 del Código de Procedimiento Civil señala: "Para poner


término al goce gratuito de alguno o algunos de los comuneros sobre la
cosa común, bastará la reclamación de cualquiera de los interesados;
salvo que este goce se funde en algún título especial". Tal como ha sido
referido por esta Corte (Rol Nº 25912-2014) el derecho contenido en la
disposición en análisis, nace como contrapartida a aquel de
aprovechamiento que cada uno de los comuneros tiene respecto de los
frutos naturales y civiles que produzcan los bienes comunes, así como
de estos últimos, lo que se sigue de los artículos 2305 y 2081 del Código
Civil, siendo el derecho de cada uno de los comuneros sobre la cosa
común, el mismo que el de los socios en el haber social. Por su parte,
de acuerdo a la regla segunda de la segunda disposición, cada socio
puede servirse para su uso personal de las cosas pertenecientes al
haber social, con tal que las emplee según su destino ordinario y sin
perjuicio de la sociedad y el justo uso de los otros. En concordancia con
dicho derecho, el referido artículo 655 del código de enjuiciamiento, vino
a permitir a cualquiera de los comuneros que se encontrare desprovisto
del citado atributo que el dominio le confiere sobre el bien comunitario,
la posibilidad de reclamar el término del goce gratuito que estuviere
ejerciendo otro de los comuneros (considerando 3º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 11/11/2019, Rol Nº 20273-2018,

Cita online: CL/JUR/6491/2019

3. Cumplimiento incidental. Sentencia que dispone el cese de goce


gratuito de inmueble y establece la forma de administración constituye
una sentencia constitutiva. Improcedencia de cumplimiento incidental
respecto de las rentas mensuales de ocupación del bien común.
Existencia de incertidumbre sobre el derecho a percibir rentas, la
oportunidad, la exigibilidad y la calidad de acreedor que en cada
período se ostente. Necesidad de un procedimiento ordinario o de un
juicio particional. Procedencia de la nulidad procesal de oficio

No existiendo juez árbitro ni administrador pro indiviso de los bienes


comunes —al menos a la fecha de la demanda—, la justicia ordinaria
dispuso el cese del goce gratuito de la propiedad común; a continuación,
fijó el valor de la renta mensual de dicha ocupación y la proporción que,
a cada uno de los cuatro comuneros demandantes, le corresponden
sobre dicho monto. Es decir, cumplió con el mandato legal de poner fin
al uso gratuito de una propiedad común y estableció "la forma como se
deben administrar...". Dentro de la clasificación clásica de las
sentencias judiciales en cuanto a su contenido, esta sentencia ha de
calificarse como una "sentencia constitutiva", por ser de aquellas que
constituye o modifica —crean, modifican o extinguen— una situación o
relación jurídica (considerando 5º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones). En la especie, no procede el cumplimiento incidental en
este juicio ordinario, de las rentas mensuales de ocupación de un bien
común, cuya exigibilidad se produce en forma periódica, con total
incertidumbre sobre el derecho a percibirlas, la oportunidad, la
exigibilidad y la calidad de acreedor que en cada período se ostente. De
hecho, la improcedencia de este cumplimiento incidental se evidencia
con la discusión impropia —en el caso de considerarla una sentencia
de condena— de la proporción que le corresponde al único comunero
que la reclama en esta etapa, del eventual incumplimiento de la cuota
de los restantes comuneros en cuyo favor se dispuso y que actuaron
como demandantes en conjunto, de la mantención del derecho de
acreedor de dicha renta, de la persistencia de las condiciones que
habiliten su pago como lo es, la ocupación individual de la propiedad
común por parte del demandado y lo más grave aún, de la procedencia
de reajustes que no han sido declarados en la sentencia definitiva, todo
lo cual debe resolverse en el juicio pertinente o en la partición, donde
incluso puede y debe discutirse la controversia que plantea el
incidentista sobre los derechos que proporcionalmente le corresponden
(considerando 7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

En suma, tratándose de una sentencia que sólo dispuso el cese del


goce gratuito por parte de uno de los comuneros y el costo que
mensualmente tendría que asumir quien la utiliza, resulta improcedente
una ejecución incidental como la que se ha desarrollado en autos, por
cuanto la determinación de una deuda debe superar los presupuestos
que la hacen exigible, y ello sólo puede ser discutido y determinado en
el procedimiento ordinario o particional que corresponda. La referida
tramitación incidental, entonces, da cuenta de una serie de vicios
procesales que no es posible ratificar ni sanear por cuanto se han
dispuesto actuaciones y diligencias procesales al margen de las normas
legales señaladas y de lo dispuesto en el artículo 233 del Código de
Procedimiento Civil, perjudicando evidentemente al demandado en el
ejercicio de sus derechos y que obligan a este tribunal a obrar de oficio
conforme las facultades que le otorga el texto legal antedicho
(considerando 9º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 7/10/2016, Rol Nº 1103-2016,

Cita online: CL/JUR/6940/2016

4. Voto disidente: Facultad que la norma confiere a los comuneros solo


puede ser ejercida en el contexto de un juicio de partición, materia de
arbitraje forzoso

Procede invalidar de oficio la sentencia impugnada en virtud de la


incompetencia del tribunal de primera instancia que la dictó, por
entender que la ubicación del artículo 655 del Código de Procedimiento
Civil, en el Título IX del Libro III "De los juicios sobre partición de
bienes", importa que la facultad que la norma confiere a los comuneros
solo puede ser ejercida en el contexto de un juicio de partición, que
conforme lo dispuesto en el ordinal 2º del artículo 227 del Código
Orgánico de Tribunales, es materia de arbitraje forzoso, lo que implica
la incompetencia absoluta de los tribunales ordinarios de justicia para
conocer de esta materia (considerando disidente de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 18/07/2019, Rol Nº 669-2019,

Cita online: CL/JUR/4147/2019

5. Derecho puede ejercerse cuando ya se ha constituido el juicio


particional o cuando aún no se ha constituido. Tribunal de la justicia
ordinaria es competente para conocer de la demanda de cese de goce
gratuito del bien cuando no se ha constituido el juicio particional

Es posible concluir que el derecho a poner término al goce gratuito de


alguno o algunos de los comuneros sobre la cosa común, puede
ejercerse cuando ya se ha constituido el juicio particional o cuando aún
no se ha constituido. En el primer caso, se ejercerá el derecho que
consagra el artículo 655 del Código de Procedimiento Civil ante el juez
partidor y, en el evento que no haya juicio de partición, el derecho
consagrado en dicha disposición tendrá que ejercerse ante la justicia
ordinaria. Lo anterior, por cuanto se trata de un derecho propio al estado
de indivisión, vale decir, ex ante a la partición del haber común, tal como
ha sido sostenido por la doctrina (Somarriva, Manuel, "Indivisión y
Partición", quinta edición, Editorial Jurídica, p. 202) y la reiterada
jurisprudencia de esta Corte (Roles Nºs. 3652-2010, 3809-2012, 25912-
2014 y 22984-2014, entre otros). En el caso de autos, como no se ha
constituido el juicio particional, es competente para conocer de la
demanda de cese de goce gratuito del bien que en ella se señala, un
tribunal de la justicia ordinaria, por lo que, al no haberlo resuelto de esa
manera la sentencia impugnada, se infringió lo dispuesto en el
artículo 655 del Código de Procedimiento Civil (considerandos 5º y 6º
de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 11/11/2019, Rol Nº 20273-2018, Cita online:


CL/JUR/6491/2019
ARTÍCULO 656 (813)

Los terceros acreedores que tengan derechos que hacer valer sobre los
bienes comprendidos en la partición, podrán ocurrir al partidor o a la justicia
ordinaria, a su elección.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 23, 651 y 654.

ARTÍCULO 657 (814)

Para adjudicar o licitar los bienes comunes, se apreciarán por peritos


nombrados en la forma ordinaria.

Podrá, sin embargo, omitirse la tasación, si el valor de los bienes se fija por
acuerdo unánime de las partes, o de sus representantes, aun cuando haya
entre aquéllas incapaces, con tal que existan en los autos antecedentes que
justifiquen la apreciación hecha por las partes, o que se trate de bienes
muebles, o de fijar un mínimum para licitar bienes raíces con admisión de
postores extraños.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 414, 486, 645, 658, 659, 895 y
siguientes. Código Civil: artículo 1335.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. El legislador ha previsto la fijación del valor por peritos y le ha


permitido efectuarla a los partícipes

El legislador ha previsto la fijación del valor por peritos e, incluso, le


ha permitido efectuarla a los partícipes, quienes naturalmente no
pueden estar sujetos para ello a las estrictas reglas que consagra la Ley
sobre Impuesto a la Renta (considerando 16º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 26/06/2007, Rol Nº 6060-2004, Cita online:


CL/JUR/5938/2007

ARTÍCULO 658 (815)


Para proceder a la licitación pública de los bienes comunes bastará su
anuncio por medio de avisos en un diario de la comuna o de la capital de la
provincia o de la capital de la región, si en aquélla no lo hubiere.205

Cuando entre los interesados haya incapaces, la publicación de avisos se


hará por cuatro veces a lo menos, mediando entre la primera publicación y el
remate un espacio de tiempo que no baje de quince días. Si por no efectuarse
el remate, es necesario hacer nuevas publicaciones, se procederá en
conformidad a lo establecido en el artículo 502. Los avisos podrán publicarse
también en días inhábiles, los que no se descontarán para el cómputo del
plazo señalado en el inciso anterior.

Si los bienes están en otra comuna, el remate se anunciará también en ella,


por el mismo tiempo y en la misma forma.206

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 66, 489 y 502.

ARTÍCULO 659 (816)

En las enajenaciones que se efectúen por conducto del partidor se


considerará a éste representante legal de los vendedores, y en tal carácter
subscribirá los instrumentos que, con motivo de dichas enajenaciones, haya
necesidad de otorgar. Podrá también autorizar al comprador o adjudicatario
o a un tercero para que por sí solo subscriba la inscripción de la transferencia
en el conservador respectivo.

Todo acuerdo de las partes o resolución del partidor que contenga


adjudicación de bienes raíces se reducirá a escritura pública, y sin esta
solemnidad no podrá efectuarse su inscripción en el conservador.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 495, 497, 662, 894 y 910. Código
Civil: artículo 687.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Requisitos para constituir mandato legal al partidor

Que a juicio de esta Corte el mandato legal a que se refiere el


artículo 659 del Código de Procedimiento Civil se extiende más allá del
plazo establecido para que el juez partidor cumpla con su cometido,
hasta la suscripción de la respectiva escritura de adjudicación al tercero
inclusive, cuando se cumplen los siguientes requisitos: a) En el
respectivo juicio particional se ha acordado la realización en remate o
pública subasta del bien que es objeto de la escritura pública de
adjudicación; b) El bien en cuestión ha sido efectivamente subastado;
c) El adjudicatario ha pagado el precio establecido en el remate
(considerando 11º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Temuco, 18/12/2013, Rol Nº 16205-2013,

Cita online: CL/JUR/2990/2013

ARTÍCULO 660 (817)

Salvo acuerdo unánime de las partes, los comuneros que durante el juicio
divisorio reciban bienes en adjudicación, por un valor que exceda del ochenta
por ciento de lo que les corresponda percibir, pagarán de contado dicho
exceso. La fijación provisional de éste se hará prudencialmente por el
partidor.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 662.

ARTÍCULO 661 (818)

Los valores que reciban los comuneros durante la partición a cuenta de sus
derechos devengarán el interés que las partes fijen, o el legal cuando tal
fijación no se haya hecho, sin perjuicio de lo que en casos especiales
dispongan las leyes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 660 y 662.

ARTÍCULO 662 (819)

En las adjudicaciones de propiedades raíces que se hagan a los


comuneros durante el juicio divisorio o en la sentencia final, se entenderá
constituida hipoteca sobre las propiedades adjudicadas, para asegurar el
pago de los alcances que resulten en contra de los adjudicatarios, siempre
que no se pague de contado el exceso a que se refiere el artículo 660. Al
inscribir el conservador el título de adjudicación, inscribirá a la vez la hipoteca
por el valor de los alcances.
Podrá reemplazarse esta hipoteca por otra caución suficiente calificada por
el partidor.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 657, 659 y 660. Código Civil:
artículo 2407.

ARTÍCULO 663 (820)

Los resultados de la partición se consignarán en un laudo o sentencia final,


que resuelva o establezca todos los puntos de hecho y de derecho que deben
servir de base para la distribución de los bienes comunes, y en
una ordenata o liquidación, en que se hagan los cálculos numéricos
necesarios para dicha distribución.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 170, 651 y 652.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Impugnación de laudo parcial. Laudo parcial que decide acerca del


objeto de la partición tiene la naturaleza de sentencia definitiva. En el
juicio de partición pueden existir varias sentencias definitivas, fuera
del laudo o sentencia final

Conforme al artículo 663 del Código de Procedimiento Civil, los


resultados de la partición se consignarán en un laudo o sentencia final,
que resuelva o establezca todos los puntos de hecho y de derecho que
deben servir de base para la distribución de los bienes comunes, y en
una ordenata o liquidación, en que se hagan los cálculos numéricos
necesarios para dicha distribución. Sin perjuicio de lo anterior, el
artículo 652 inciso final del mismo Código dispone que las cuestiones
parciales podrán fallarse durante el juicio divisorio o reservarse para la
sentencia final (considerando 7º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones). En la especie, en la resolución denominada "laudo
parcial", el juez árbitro liquidó y distribuyó bienes, liquidó recargos y la
proporción de contribución a los mismos por parte de los demandados,
estableció en forma desglosada el valor de los créditos de cada parte,
incluyendo el pago de los honorarios arbitrales, resolvió objeciones a la
liquidación de los créditos y ordenó la suscripción de las respectivas
escrituras de adjudicación y partición. Dicha resolución se trata de una
sentencia definitiva, desde que decide acerca del objeto de la partición,
teniendo en cuenta para ello lo previsto el artículo 663 del Código de
Procedimiento Civil. En efecto, en el juicio de partición pueden existir
varias sentencias definitivas, fuera del laudo o "sentencia final"
(Somarriva, Manuel "Indivisión y Partición", 5ª edición actualizada,
Editorial Jurídica de Chile, pp. 385, 386 y 425). En consecuencia, de la
naturaleza de la sentencia impugnada se colige que el plazo para apelar
es de quince días, de acuerdo al artículo 666 del Código precitado
(considerandos 8º a 10º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 14/10/2019, Rol Nº 1486-2019,

Cita online: CL/JUR/6007/2019

2. El juez partidor debe consignar los resultados de la partición en un


laudo o sentencia final

El laudo es aquella parte de la sentencia en que se deben resolver


todos los puntos de hecho y de derecho que sirven de base para la
distribución de los bienes comunes, en tanto que la ordenata tiene por
objeto realizar los cálculos numéricos para dicha distribución; Que
siendo el laudo y ordenata una sentencia definitiva debe contener en
conjunto, todas las especificaciones y los requisitos propios de una
sentencia definitiva que menciona el artículo 170 del Código de
Procedimiento Civil, en razón de lo cual, la omisión de uno cualquiera
de ellos, produce el resultado previsto en el número 5 del artículo 768
del mismo cuerpo legal, es decir, es causal de casación en la forma
(considerandos 10º y 11º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de La Serena, 31/08/2007, Rol Nº 169-2007,

Cita online: CL/JUR/12104/2010

ARTÍCULO 664 (821)

Se entenderá practicada la notificación del laudo y ordenata desde que se


notifique a las partes el hecho de su pronunciamiento, salvo el caso previsto
en el artículo 666. Los interesados podrán imponerse de sus resoluciones en
la oficina del actuario y deducir los recursos a que haya lugar dentro del plazo
de quince días.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 38, 40, 44, 48, 64, 66, 189, 665, 666
y 770.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Sustitución del procedimiento de partición de bienes por normas del


juicio ordinario. Improcedencia de aplicar plazo de 15 días del
artículo 664 del Código de Procedimiento Civil para recurrir en contra
del laudo y ordenata

En la especie, las partes del juicio arbitral sustituyeron el


procedimiento previsto para estos negocios por las normas del juicio
ordinario. Por lo tanto, no corresponde observar el plazo de 15 días que
prevé el artículo 664 del Código de Procedimiento Civil para recurrir en
contra del laudo y ordenata, en razón del cambio del procedimiento, sin
que la circunstancia de tratarse de un arbitraje de derecho resulte
influyente por no estar en cuestión la forma en que se llevó adelante el
arbitraje, sino que la decisión adoptada por un tribunal ordinario
respecto de la norma jurídica aplicable al recurso de casación deducido,
en cuanto a su oportunidad (considerando 3º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 17/07/2018, Rol Nº 12804-2018, Cita online:


CL/JUR/3689/2018

ARTÍCULO 665 (822)

En el laudo podrá hacer el partidor la fijación de su honorario, y cualquiera


que sea su cuantía, habrá derecho para reclamar de ella. La reclamación se
interpondrá en la misma forma y en el mismo plazo que la apelación, y será
resuelta por el tribunal de alzada en única instancia.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 66, 210, 664 y 666.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Si el partidor no fija sus honorarios en el laudo o sentencia final no


podrá hacerlo con posterioridad

Que no obstante que los honorarios así determinados no fueron


reclamados dentro del término legal, de todos modos no era procedente
que el partidor obrara de ese modo, pues el artículo 665 del Código de
Procedimiento Civil sólo le confería la facultad de determinarlos en el
laudo y ordenata si no lo hubiere hecho en alguna oportunidad anterior
con acuerdo de los indivisarios, pero como el procedimiento particional
no terminó por un laudo o sentencia final, sino por una transacción, no
correspondía que el partidor pudiese determinarlos con posterioridad a
la terminación del proceso de partición y liquidación de la comunidad
(considerando 7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 4/06/2012, Rol Nº 1448-2011,

Cita online: CL/JUR/3817/2012

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de San Miguel, 9/08/2012, Rol Nº 591-2012,

Cita online: CL/JUR/4383/2012

ARTÍCULO 666 (823)

Cuando la partición deba ser aprobada por la justicia ordinaria, el término


para apelar será también de quince días, y se contará desde que se notifique
la resolución del juez que apruebe o modifique el fallo del partidor.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 66, 189, 645, 664 y 665. Código
Civil: artículo 1342. Ley Nº 16.271, sobre Impuesto a las Herencias, Asignaciones y Donaciones:
artículo 54.

TÍTULO X DE LOS JUICIOS SOBRE DISTRIBUCIÓN DE AGUAS 207

ARTÍCULO 667

Derogado.

ARTÍCULO 668

Derogado.
ARTÍCULO 669

Derogado.

ARTÍCULO 670

Derogado.

ARTÍCULO 671

Derogado.

ARTÍCULO 672

Derogado.

ARTÍCULO 673

Derogado.

ARTÍCULO 674

Derogado.

ARTÍCULO 675

Derogado.

ARTÍCULO 676

Derogado.

ARTÍCULO 677

Derogado.
ARTÍCULO 678

Derogado.

ARTÍCULO 679

Derogado.

TÍTULO XI DEL PROCEDIMIENTO SUMARIO

ARTÍCULO 680 (838)

El procedimiento de que trata este Título se aplicará en defecto de otra


regla especial a los casos en que la acción deducida requiera, por su
naturaleza, tramitación rápida para que sea eficaz.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Se permite que cualquier tipo de acción de sustancie bajo las normas


del procedimiento sumario

Que en el caso de autos, es un hecho no controvertido que los actores


civiles optaron por el ejercicio directo de la acción reparatoria en sede
civil y que para ello se esperó la sentencia penal condenatoria, lo que
es una situación diversa de la planteada por el artículo 68 del Código
Procesal Penal. Sin embargo recurrieron a una tramitación sumaria, lo
que en sí no es objeto de reproche por cuanto el artículo 680 del Código
de Procedimiento Civil, permite que cualquier tipo de acción se
sustancie bajo las normas del procedimiento sumario; el asunto de
fondo es si es o no posible dar aplicación al artículo 61 del Código
Procesal Penal relativo a la interrupción de la prescripción, tratada con
ocasión de la demanda civil ejercida durante el procedimiento penal, a
la tramitación en sede civil de la acción reparatoria, que carece de
regulación (considerando 16º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Santiago, 20/12/2013, Rol Nº 8747-2012,

Cita online: CL/JUR/2968/2013

Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Coyhaique, 14/06/2012, Rol Nº 19-2012,

Cita online: CL/JUR/4224/2012

— Corte Suprema, 2/04/2013, Rol Nº 1298-2012,

Cita online: CL/JUR/710/2013

— Corte de Apelaciones de Temuco, 2/02/2012, Rol Nº 1079-2011,

Cita online: CL/JUR/2658/2012

— Corte de Apelaciones de Coyhaique, 15/07/2011, Rol Nº 97-2011,

Cita online: CL/JUR/10419/2011

— Corte Suprema, 4/12/2006, Rol Nº 1508-2005,

Cita online: CL/JUR/6078/2006

— Corte Suprema, 3/05/2006, Rol Nº 522-2004,

Cita online: CL/JUR/6280/2006

— Corte Suprema, 8/06/2006, Rol Nº 5064-2005,

Cita online: CL/JUR/5350/2006

— Corte de Apelaciones de Concepción, 14/07/2000, Rol Nº 2011-


1999,

Cita online: CL/JUR/2016/2000

2. La ley procesal civil asigna a determinadas materias una tramitación


más rápida para favorecer la eficacia de las acciones deducidas
La ley procesal civil ha asignado a determinadas materias una
tramitación más rápida, conforme el procedimiento consagrado en el
artículo 680 del Código de Procedimiento Civil, con el objeto de
favorecer la eficacia de las acciones deducidas; pero dicha disposición
no obsta a que el sentenciador del fondo señale en la oportunidad
correspondiente, como lo es la sentencia definitiva, que en atención a
la naturaleza de las alegaciones, ellas deben ser materia de un juicio de
lato conocimiento (considerando 3º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 26/09/2007, Rol Nº 182-2006, Cita online:


CL/JUR/6179/2007

Deberá aplicarse, además, a los siguientes casos:

1º A los casos en que la ley ordene proceder sumariamente, o breve y


sumariamente, o en otra forma análoga;

2º A las cuestiones que se susciten sobre constitución, ejercicio,


modificación o extinción de servidumbres naturales o legales y sobre las
prestaciones a que ellas den lugar;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Regulación de servidumbre. I. Incidente de sustitución del


procedimiento sumario por el ordinario, rechazada. Improcedencia de
la sustitución tratándose de una demanda fundada en alguno de los
numerales del artículo 680 del Código de Procedimiento Civil. II.
Improcedencia de tramitar conforme al procedimiento sumario un
juicio sobre servidumbres voluntarias. Excepción dilatoria de
corrección del procedimiento, acogida

Conforme al artículo 681 del Código de Procedimiento Civil, podrá


decretarse la continuación del procedimiento sumario conforme a las
reglas del juicio ordinario, sólo en los casos previstos en el artículo 680
inciso 1º de dicho Código. De esta forma, al haberse esgrimido en el
libelo pretensor como fundamento jurídico el artículo 680 Nº 2, no
resulta aplicable la sustitución del procedimiento (considerando 2º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones). Las excepciones dilatorias
constituyen verdaderos incidentes cuyo objeto es garantizar el inicio del
procedimiento en forma suficientemente clara y precisa, con el objeto
de no vulnerar la debida defensa del demandado y con ello garantizar
el respeto a los principios que informan un debido proceso. En autos, si
bien la demanda se sustenta en el artículo 680 Nº 2 del Código de
Procedimiento Civil, que se refiere a las cuestiones que se susciten
sobre constitución, ejercicio, modificación o extinción de servidumbres
naturales o legales y sobre las prestaciones a que ellas den lugar, la
servidumbre que vincula a las partes no participa de la naturaleza de
aquellas a que se refiere dicho precepto, puesto que tiene el carácter
de voluntaria. En consecuencia corresponde acoger la excepción
dilatoria sobre corrección del procedimiento, debiendo el actor
reformular su demanda conforme los fundamentos y el procedimiento
que corresponda (considerandos 3º a 5º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 7/04/2017, Rol Nº 257-2017,

Cita online: CL/JUR/1595/2017

3º A los juicios sobre cobro de honorarios, excepto el caso del artículo 697;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cobro de honorarios. Nulidad procesal, concepto y finalidad.


Improcedencia del procedimiento incidental de cobro de honorarios
del artículo 697 para resolver la disconformidad entre las partes del
contrato en relación a su debido cumplimiento y el monto definitivo a
satisfacer

En la especie, lo que en definitiva se ha suscitado en este litigio es la


disconformidad entre las partes del contrato en relación al debido
cumplimiento del mismo y el monto definitivo que debe satisfacerse,
controversia que si bien debe ser resuelta a través de un proceso breve
y ajeno a las dilaciones propias de la vía ordinaria, escapa abiertamente
a los márgenes que regula el procedimiento simple y acotado del
artículo 697 del Código de Procedimiento Civil, contenedor del único
verbo rector que autoriza al juez de la causa para conocer de este
asunto. Por tanto, yerran los jueces del fondo al aplicar a la demanda
de cumplimiento del contrato de honorarios materia de autos un
procedimiento no contemplado para esos efectos, de manera que el
irregular proceder enunciado configura un vicio que no puede ser
enmendado sino con la declaración de nulidad del acto por el cual se
decidió dar curso a la demanda, en la medida que se ha desatendido lo
que ordenan los artículos 680 Nº 3 y 697 del Código de Procedimiento
Civil. A su vez, de manera consecuencial, procede disponer la
invalidación de todos aquellos que se realizaron con posterioridad y en
estrecha vinculación con tal presentación, atendido el efecto extensivo
de los actos procesales. Ciertamente corresponde la anulación con la
amplitud indicada, por cuanto los actos procesales no se constituyen
como fenómenos aislados sino concatenados unos a otros, siendo el
siguiente el resultado del anterior y, a su vez, el antecedente del que
viene a continuación, resultando una estrecha vinculación entre unos a
otros, de manera que la nulidad de un acto no siempre determina
exclusivamente su ineficacia, sino puede arrastrar la invalidez de una
serie de gestiones e incluso de todo el proceso (considerandos 11º y
12º de la sentencia de casación de oficio).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 15/12/2016, Rol Nº 40667-2016,

Cita online: CL/JUR/8315/2016

4º A los juicios sobre remoción de guardadores y a los que se susciten entre


los representantes legales y sus representados;

5º Derogado;208

6º A los juicios sobre depósito necesario y comodato precario;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Querella de restitución. Audiencia de conciliación autorizada por


ministro de fe implicado. Causal de casación en la forma de omisión
de un trámite esencial, anulación de oficio. Omisión del trámite
esencial de llamado a las partes a conciliación

En la especie, nos encontramos frente a un procedimiento sumario


que se tramita de tal forma conforme al artículo 680 Nº 6 del Código de
Procedimiento Civil, en el que tanto la contestación de la demanda como
el llamado a las partes a conciliación se verifican en la audiencia de
estilo. Consta que la audiencia de conciliación se celebró con asistencia
de los apoderados de ambas partes. Sin embargo, dicha acta fue
autorizada por el secretario del tribunal, ministro de fe implicado, puesto
que así lo resolvió el tribunal de alzada en resolución ejecutoriada. Por
tanto, dicha actuación judicial es nula y ello acarrea la nulidad de dicha
audiencia, por haberse infringido el texto expreso del artículo 61
inciso 3º del Código precitado. La omisión anotada trae como
consecuencia que la audiencia de conciliación —trámite obligatorio en
este juicio— no se ha realizado, conformándose así un vicio de casación
en la forma que, de acuerdo a las facultades que establece el
artículo 775 del Código de Procedimiento Civil, la Corte puede declarar
de oficio (considerandos 5º a 8º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 3/03/2017, Rol Nº 1334-2016,

Cita online: CL/JUR/1209/2017

7º A los juicios en que se deduzcan acciones ordinarias a que se hayan


convertido las ejecutivas a virtud de lo dispuesto en el artículo 2515 del
Código Civil;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Acción emanada de pagaré hecha valer como ordinaria en


conformidad al artículo 680 Nº 7 del CPC

Resulta incuestionable que la demanda tiene como fundamento el


pagare suscrito por las demandadas y que encontrándose prescrita la
acción ejecutiva emanada del mismo, se acciona por esta vía ordinaria
en conformidad al derecho que se establece a favor del acreedor por el
artículo 680 Nº 7 del Código de Procedimiento Civil. Sobre la base de
esta premisa, es que debe emitirse pronunciamiento sobre la
prescripción alegada por las deudoras (considerando 3º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 5/02/2018, Rol Nº 7407-2017,

Cita online: CL/JUR/3170/2018

2. Improcedencia del procedimiento sumario conforme el artículo 680


Nº 7 del Código de Procedimiento Civil respecto de acción prescrita
emanada de un pagaré
En la especie, no procede respecto de la acción prescrita emanada
de un pagaré, el ejercicio del procedimiento sumario conforme el
artículo 680 Nº 7 del Código de Procedimiento Civil, norma que sólo
tiene aplicación en los casos que existiendo una acción ejecutiva,
devenga en ordinaria en los términos del mencionado artículo 2515.

Por lo demás, dicha conclusión es la que viene sosteniendo tanto la


doctrina como jurisprudencia de esta Corte, en el sentido de que: "hay
que tener en consideración que existen acciones ejecutivas a las cuales
la ley les ha fijado un plazo menor de prescripción. Tal es el caso del
cheque protestado, que prescribe en el plazo de un año contado desde
la fecha del protesto, y la que surge de la letra de cambio y del pagaré,
cuya prescripción es también de un año contado desde el vencimiento
del documento. A ellas no se les aplica la supervivencia de la acción
como ordinaria, desde que en ambos casos el plazo se ha establecido
para toda acción derivada del cheque, sea ordinaria o ejecutiva, así
como para toda acción cambiaria derivada de la letra de cambio o del
pagaré, como se ha resuelto constantemente" (así lo explica el profesor
Ramón Domínguez Águila, en su obra "La Prescripción Extintiva,
Doctrina y Jurisprudencia". Editorial Jurídica de Chile. Pág. 216)
(considerando 11º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 21/03/2018, Rol Nº 7151-2017, Cita online:


CL/JUR/1396/2018

8º A los juicios en que se persiga únicamente la declaración impuesta por


la ley o el contrato, de rendir una cuenta, sin perjuicio de lo dispuesto en el
artículo 696; y

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procedimientos relacionados con la obligación de rendir cuenta

Conviene recordar que existen diversos procedimientos relacionados


con la obligación de rendir cuenta; el autor Mario Casarino Viterbo, en
su Manual de Derecho Procesal Civil, tomo VI, tercera edición,
páginas 104 y 105, en relación con esta materia, enumera los
siguientes: a) El juicio declarativo sobre cuentas: se somete al
conocimiento de los tribunales ordinarios de justicia, a falta de regla
especial en contrario. Este juicio se ajusta a la tramitación señalada para
el procedimiento sumario por expresa disposición del legislador
(artículo 680 Nº 8 del Código de Procedimiento Civil); y su objeto es
perseguir únicamente la declaración de la obligación de rendir una
cuenta, en los casos en que ella es impuesta por la ley o el contrato y
en que el deudor reconoce o rechaza su existencia; b) El juicio sobre
cuentas: se somete al conocimiento de un tribunal arbitral, por ser una
de las materias que, por expresa disposición del artículo 227 Nº 3 del
Código Orgánico de Tribunales, es de arbitraje forzoso y se ajusta al
procedimiento especial señalado en el título XII del libro III del Código
de Procedimiento Civil; y su objeto se reduce a la presentación, análisis
e impugnación o aprobación de las respectivas cuentas; c) El juicio
ejecutivo sobre cuentas: está entregado al conocimiento de los
tribunales ordinarios de justicia; y tendrá lugar cuando la obligación de
rendir cuentas conste de un título de aquellos que traen aparejada la
ejecución. Aquí la obligación de rendir cuentas está preestablecida en
forma indubitada y sólo existe resistencia del deudor a cumplirla. El
acreedor tiene en sus manos, pues, la acción ejecutiva, la que, en el
hecho, se traduce en la aplicación de medidas de apremio; o sea, multas
o arrestos, porque se está en presencia de una obligación de hacer; y
d) El juicio ejecutivo posterior al sobre cuentas: una vez terminado el
juicio de cuentas, mediante sentencia definitiva firme, que se pronuncie
sobre las cuentas y sus impugnaciones, se sabrá, a ciencia cierta, si
existe saldo a favor o en contra de la persona que debía rendirlas. Pues
bien, ese saldo será cobrado ejecutivamente por quien corresponda,
según las reglas generales sobre cumplimiento de sentencia
(considerando 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/05/2019, Rol Nº 37416-2017, Cita online:


CL/JUR/3150/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 2/01/2019, Rol Nº 19239-2017,

Cita online: CL/JUR/97/2019

2. La declaración de la obligación de rendir una cuenta del artículo 680


del Código de Procedimiento Civil, es diferente al juicio sobre cuentas
propiamente tal

Además, la declaración de la obligación de rendir una cuenta


(artículo 680, inciso segundo, Nº 8º del Código de Procedimiento Civil),
es una cosa muy distinta al juicio sobre cuentas propiamente tal a que
se refiere el Título XII del Libro III de la predicha codificación y que es
donde podrían presentarse las "dificultades" aludidas por los socios
contratantes en la cláusula undécima de los estatutos sociales, motivo
por el cual nada tiene que hacer un árbitro en el ámbito del citado juicio
sumario del artículo 680, pues, de intervenir, lo hace en una etapa
posterior, según, por otro lado, lo regula el artículo 227 Nº 3º) del Código
Orgánico de Tribunales, norma imperativa que también abarca las
diferencias que pudieren ocurrir entre los socios (Nº 4º del mismo
artículo). Siendo así, el tribunal ordinario resulta ser el competente para
conocer de esta causa (considerando 7º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 4/02/2020, Rol Nº 1620-2019, Cita online:


CL/JUR/10018/2020

9º A los juicios en que se ejercite el derecho que concede el artículo 945


del Código Civil para hacer cegar un pozo.209

10º A los juicios en que se deduzcan las acciones civiles derivadas de un


delito o cuasidelito, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 59 del
Código Procesal Penal y siempre que exista sentencia penal condenatoria
ejecutoriada.210

Concordancias: Código Orgánico de Tribunales: artículos 133, 314 y 322. Código Civil:
artículos 141, 155, 226, 227, 338, 415, 487, 492, 1309, 539, 542, 543, 820, 2080, 2185, 2194,
2195, 2236 y siguientes, 2515. Código de Comercio: artículos 211, 1108, 1109 y 1122. Código
de Minería: artículo 233. Código de Justicia Militar: artículos 121 y 412. Código de Aguas:
artículos 56, 177, 195 y 247. Ley Nº 4.097, sobre Contrato Prenda Agraria: artículo 25. Ley
Nº 4.702, sobre Compraventa de Cosas Muebles a Plazo: artículo 38. Ley Nº 5.687, Ley sobre
Contrato de Prenda Industrial: artículo 47. Ley Nº 16.271, sobre Impuesto a las Herencias,
Asignaciones y Donaciones: artículo 63. Ley Nº 15.840: artículo 52. Ley Nº 18.101, sobre
Arrendamiento de Predios Urbanos: artículo 8. Ley Nº 18.045, Ley de Mercado de Valores:
artículo 204. Ley Nº 18.046, Ley de Sociedades Anónimas: artículo 21. Ley Nº 18.902, crea
Superintendencia de Servicios Sanitarios: artículos 13 y 17. Ley Nº 18.168, Ley General de
Telecomunicaciones: artículo 19. Ley Nº 18.175, Ley de Quiebras: artículo 171. Ley Nº 19.175,
Orgánica sobre Gobierno y Administración Regional: artículo 102 i). Ley Nº 19.300, Ley de
Bases del Medio Ambiente: artículo 61. Ley Nº 18.101, sobre Arrendamiento de Predios
Urbanos: artículo 2º. Decreto Ley Nº 3.500, 1980, establece Sistema de Pensiones, D.O.
13.11.1980: artículo 148. Decreto Ley Nº 3.538, 1980, crea la Superintendencia de Valores y
Seguros, D.O. 23.12.1980: artículo 30. Ley Nº 16.618, Ley de Menores: artículo 34. Código
Procesal Penal: artículos 59 y 68.

ARTÍCULO 681 (839)


En los casos del inciso 1º del artículo anterior, iniciado el procedimiento
sumario podrá decretarse su continuación conforme a las reglas del juicio
ordinario, si existen motivos fundados para ello.

Por la inversa, iniciado un juicio como ordinario, podrá continuar con arreglo
al procedimiento sumario, si aparece la necesidad de aplicarlo.

La solicitud en que se pida la substitución de un procedimiento a otro se


tramitará como incidente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 89, 313 y 691.

ARTÍCULO 682 (840)

El procedimiento sumario será verbal; pero las partes podrán, si quieren,


presentar minutas escritas en que se establezcan los hechos invocados y las
peticiones que se formulen.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 61, 466, 480, 492 y 649.

ARTÍCULO 683 (841)

Deducida la demanda, citará el tribunal a la audiencia del quinto día hábil


después de la última notificación, ampliándose este plazo, si el demandado
no está en el lugar del juicio, con todo el aumento que corresponda en
conformidad a lo previsto en el artículo 259.211

A esta audiencia concurrirá el defensor público, cuando deba intervenir


conforme a la ley, o cuando el tribunal lo juzgue necesario. Con el mérito de
lo que en ella se exponga, se recibirá la causa a prueba o se citará a las
partes para oír sentencia.212

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 37, 254, 259, 318, 432, 433, 684 al
690, 795 Nº 7, 800 Nº 3. Código Orgánico de Tribunales: artículos 390, 393 y 532.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Improcedencia de declarar el abandono del procedimiento si el


impulso y la promoción de la actividad de la causa se encuentra
radicado en el tribunal
Por su parte, el artículo 683 del mismo cuerpo normativo, al regular el
procedimiento sumario, señala que una vez deducida la demanda,
"...citará el tribunal a la audiencia del quinto día hábil después de la
última notificación" y, "... con el mérito de lo que en ella se exponga, se
recibirá la causa a prueba o se citará a las partes para oír sentencia".
En consecuencia, en el estadio procesal en que se encontraba la causa,
el tribunal debió, de propia iniciativa, sin necesidad de petición de parte
o de alguna otra actuación, proceder a dictar la resolución que recibe la
causa a prueba o citar a las partes a oír sentencia. Por lo demás, resulta
propicio recordar que esta Corte ha sostenido reiteradamente que no es
procedente el abandono del procedimiento en estadios procesales en
que el impulso y la promoción de la actividad de la causa se encuentran
radicados en el tribunal (Roles Nº 4.381 2013, Nº 4.664 13,
Nº 6.7772013, y 251 2017) (considerandos 6º y 7º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 25/09/2019, Rol Nº 19061-2018,

Cita online: CL/JUR/5323/2019

2. Tribunal que acoge a tramitación incidencia de sustitución de


procedimiento e impugnación documentaria no continuando con el
procedimiento confirme a derecho

El tribunal no ha respetado el procedimiento que el Código de


Procedimiento Civil establece para la tramitación de los juicios
sumarios, puesto que conforme lo disponen los artículos 682, 683, 684,
685 y 690 del cuerpo legal citado, deducida la demanda el tribunal citará
a las partes a una audiencia del quinto día hábil después de la última
notificación a las partes y, en esa audiencia, la demandada contestará
la demanda y, con su mérito, el tribunal recibirá la causa a prueba o
citará las partes a oír sentencia. En el caso de autos, el tribunal ha
recibido la incidencia de sustitución de procedimiento e impugnación
documentaria deducidas por la demandada, pero, sin embargo, no ha
continuado con el procedimiento conforme a derecho, esto es,
suspendiendo la audiencia para retomarla y recibir a prueba la causa en
caso que fuera procedente, dejando las incidencias para su resolución
en la definitiva como expresamente lo ordena el artículo 690 del Código
de Procedimiento Civil. Atendido lo anterior, se ha incurrido en vicios de
procedimientos que esta Corte debe enmendar conforme lo permite el
artículo 84 del Código de Procedimiento Civil, por lo que actuando este
tribunal de oficio anulará todo lo obrado a partir de la audiencia, a fin de
que el juez no inhabilitado que corresponda proceda a fijar una nueva
fecha para realizar la audiencia, continuando con la tramitación de la
causa como en derecho corresponda. Por lo anterior, cabe omitir
pronunciamiento respecto del recurso de apelación deducido
(considerandos 6º a 8º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 4/05/2018, Rol Nº 738-2018,

Cita online: CL/JUR/2197/2018

3. En el procedimiento sumario toda la discusión se agota en la


audiencia de estilo

En el procedimiento sumario toda la discusión se agota en la


audiencia de estilo y no existe la posibilidad de oír nuevamente a los
actores en relación a la defensa de demandado (considerando 7º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 12/10/2004, Rol Nº 3859-2003, Cita online:


CL/JUR/2870/2004

ARTÍCULO 684 (842)

En rebeldía del demandado, se recibirá a prueba la causa, o, si el actor lo


solicita con fundamento plausible, se accederá provisionalmente a lo pedido
en la demanda.

En este segundo caso, podrá el demandado formular oposición dentro del


término de cinco días, contados desde su notificación; y una vez formulada,
se citará a nueva audiencia, procediéndose como se dispone en el
artículo anterior, pero sin que se suspenda el cumplimiento provisional de lo
decretado con esta calidad, ni se altere la condición jurídica de las partes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 78, 79, 290, 685 y 686.

ARTÍCULO 685
No deduciéndose oposición, el tribunal recibirá la causa a prueba, o citará
a las partes para oír sentencia, según lo estime de derecho.213

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 313, 318, 432, 433, 683, 684, 686,
687, 795 Nº 7, 800 Nº 3.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Existe incorrección por parte de los tribunales al resolver la excepción


dilatoria cuando no correspondía a la etapa de sentencia definitiva

Que, en consecuencia, se ha hecho patente, además, la abierta


incorrección de los tribunales de la instancia al haber resuelto la
excepción dilatoria de falta de personería de la demandante en una
oportunidad procesal que claramente no correspondía a la etapa de
sentencia definitiva (considerando 9º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 4/06/2013, Rol Nº 6401-2012, Cita online:


CL/JUR/1208/2013

2. El impulso procesal corresponde a las partes del procedimiento de


reclamación

El impulso procesal corresponde a las partes del procedimiento de


reclamación, pese a lo dispuesto en el artículo 685 del C. P. C. con lo
que las partes no quedan exentas o relevadas de la obligación que les
asiste de dar curso progresivo al procedimiento. Que, efectivamente, la
falta de actividad del tribunal a cargo del asunto no puede servir para
justificar la inacción de las partes (considerandos 20º y 21º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 14/06/2005, Rol Nº 3308-2004, Cita online:


CL/JUR/6057/2005

ARTÍCULO 686 (844)

La prueba, cuando haya lugar a ella, se rendirá en el plazo y en la forma


establecidas para los incidentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 90, 91, 318 y 323.


JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La prueba, cuando haya lugar a ella, se rendirá en el plazo y en la


forma establecidos para los incidentes

La prueba, cuando haya lugar a ella, se rendirá en el plazo y en la


forma establecidos para los incidentes. Que por su parte el artículo 90
del Código de Procedimiento Civil prescribe las normas por las cuales
se rige la prueba, y debiendo para ello abrirse un término probatorio de
ocho días (considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 25/07/1997, Rol Nº 1004-1995,

Cita online: CL/JUR/1683/1997

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 17/08/2018, Rol Nº 12453-


2017,

Cita online: CL/JUR/4527/2018

2. No importa que la resolución que recibe la causa a prueba en ese tipo


de juicio deba ser notificada por el estado diario

No importa que la resolución que recibe la causa a prueba en ese tipo


de juicio deba ser notificada por el estado diario, como ocurre en los
incidentes, puesto que dicha resolución es previa a la prueba misma y,
por lo tanto, no queda incluida dentro de la expresión plazo y forma que
utiliza aquella norma (considerando único de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 12/09/1990, Rol Nº 849-1989, Cita online:


CL/JUR/467/1990

3. No puede sostenerse que el término probatorio en el juicio sumario


es de ocho días para toda clase de pruebas

No puede sostenerse que el término probatorio en el juicio sumario


"es de ocho días y fatal para rendir toda clase de pruebas", como se
afirma en el fallo recurrido, pues la interpretación correcta de dicha
disposición (basada en su historia fidedigna y razones de coherencia)
es que ella fue creada para los efectos de la prueba testimonial y no
para toda la prueba que pudiera producirse (considerando 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 5/05/1987, Rol Nº 4702-1987, Cita online:


CL/JUR/194/1987

ARTÍCULO 687

Vencido el término probatorio, el tribunal, de inmediato, citará a las partes


para oír sentencia.214

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 90, 91, 318, 323, 432, 433, 683, 795
Nº 7, 800 Nº 3.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Impulso procesal corresponde al tribunal cuando la causa queda en


estado de citar a las partes a oír sentencia. Improcedencia del
abandono del procedimiento en estadios procesales en que el impulso
y la promoción de la actividad de la causa se encuentran radicados
en el tribunal

En el estadio procesal en que se encontraba la causa, el tribunal


debió, de propia iniciativa, sin necesidad de petición de la parte
demandante o de alguna otra actuación, citar a oír sentencia,
encontrándose los litigantes eximidos de la carga de dar impulso al
proceso en dicha etapa. Por lo demás, resulta propicio recordar que el
Máximo Tribunal ha sostenido reiteradamente que no es procedente el
abandono del procedimiento en estadios procesales en que el impulso
y la promoción de la actividad de la causa se encuentran radicados en
el tribunal. Luego, los tribunales del fondo incurrieron en el error de
derecho denunciado al exigir a la parte demandante una actividad para
dar curso progresivo a los autos, no obstante que el procedimiento se
encontraba en una etapa procesal que se aparta de la hipótesis del
artículo 152 del Código de Procedimiento Civil, dado que, por mandato
legal —artículo 687 del mismo código—, el impulso de avance estaba
radicado en la judicatura (considerandos 7º y 8º de la sentencia de
casación).
Corte Suprema, 30/03/2020, Rol Nº 15394-2018,

Cita online: CL/JUR/22270/2020

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 9/01/2017, Rol Nº 5403-2016,

Cita online: CL/JUR/49/2017

— Corte Suprema, 5/01/2017, Rol Nº 22264-2015,

Cita online: CL/JUR/371/2017

2. Improcedencia de citar a oír sentencia si no todos los litigantes fueron


notificados de la resolución que recibió la causa a prueba

En la especie, los jueces del fondo no incurrieron en error de derecho


al confirmar la resolución que acogió el incidente de abandono del
procedimiento, porque el examen del expediente permite advertir que,
tal como lo señalan, es efectivo que no todos los litigantes estaban
notificados de la resolución que recibió la causa a prueba, por lo tanto,
no es aplicable lo que previene el artículo 687 del Código de
Procedimiento Civil, y no corresponde hacerse cargo de planteamientos
que ni siquiera están esbozados en el recurso de casación en el fondo,
tampoco en el de apelación que fue el que fijó la competencia del
tribunal de alzada, y considerando que se está en presencia de un
recurso de derecho estricto, de manera que no es posible subsanar o
subsidiar las omisiones en las que el recurrente incurrió, el recurso
deberá ser desestimado (considerando 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 31/01/2018, Rol Nº 5052-2017, Cita online:


CL/JUR/525/2018

3. Vencido el término probatorio de inmediato se citará a las partes a oír


sentencia

Es así que, con este mismo espíritu, la Ley Nº 18.705 estableció que
el trámite de citación para oír sentencia en el juicio sumario queda
entregado en su iniciativa en forma preeminente al juez, al disponer que
luego de vencido el término probatorio el tribunal, de inmediato, citará a
las partes para oír sentencia, eliminándose de esta forma la antigua
referencia a que tal diligencia se dispondría a petición de parte de
manera escrita o verbal (considerando 6º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 17/08/2012, Rol Nº 8701-2010, Cita online:


CL/JUR/4263/2012

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 13/11/2007, Rol Nº 5675-2006,

Cita online: CL/JUR/4861/2007

— Corte Suprema, 29/10/2007, Rol Nº 5125-2006,

Cita online: CL/JUR/5258/2007

— Corte Suprema, 26/07/2007, Rol Nº 3256-2006,

Cita online: CL/JUR/6017/2007

ARTÍCULO 688

Las resoluciones en el procedimiento sumario deberán dictarse, a más


tardar, dentro de segundo día.

La sentencia definitiva deberá dictarse en el plazo de los diez días


siguientes a la fecha de la resolución que citó a las partes para oír
sentencia.215

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 162, 170, 685 y 687.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Nada impide al tribunal dictar sentencia al día siguiente de haberse


citado a las partes para oír sentencia

Que, en relación al vicio de haberse dictado sentencia en la causa no


estando ejecutoriada la resolución que citaba a las partes a oír
sentencia, el propio artículo 688 del Código de Procedimiento Civil
señala que la sentencia definitiva deberá dictarse en el plazo de los diez
días siguientes a la fecha de la resolución que citó a las partes a oír
sentencia, de lo cual se infiere que perfectamente el tribunal pudo dictar
sentencia al día siguiente de haberse dictado la resolución aludida que
fue debidamente notificada por el estado diario a las partes
(considerando 12º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 16/04/2002, Rol Nº 4090-1998,

Cita online: CL/JUR/1613/2002

ARTÍCULO 689 (847)

Cuando haya de oírse a los parientes, se citará en términos generales a los


que designa el artículo 42 del Código Civil, para que asistan a la primera
audiencia o a otra posterior, notificándose personalmente a los que puedan
ser habidos. Los demás podrán concurrir aun cuando sólo tengan
conocimiento privado del acto.

Compareciendo los parientes el tribunal les pedirá informe verbal sobre los
hechos que considere conducentes.

Si el tribunal nota que no han concurrido algunos parientes cuyo dictamen


estime de influencia y que residan en el lugar del juicio, podrá suspender la
audiencia y ordenar que se les cite determinadamente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40, 44, 54, 55 y 56. Código Civil:
artículo 42.

ARTÍCULO 690 (848)

Los incidentes deberán promoverse y tramitarse en la misma audiencia,


conjuntamente con la cuestión principal, sin paralizar el curso de ésta. La
sentencia definitiva se pronunciará sobre la acción deducida y sobre los
incidentes, o sólo sobre éstos cuando sean previos o incompatibles con
aquélla.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 82, 86, 170, 691 y 692.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Es característico del procedimiento sumario que los incidentes deben


promoverse y tramitarse en la misma audiencia

(...) establece que los incidentes deberán promoverse y tramitarse en


la misma audiencia, conjuntamente con la cuestión principal, sin
paralizar el curso de ésta. Como lógica consecuencia de lo anterior, es
en la sentencia definitiva donde el tribunal deberá pronunciarse sobre la
acción deducida y sobre los incidentes, o sólo sobre éstos cuando sean
previos o incompatibles con aquélla (considerando 3º de la sentencia de
la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 22/11/2011, Rol Nº 1600-2011,

Cita online: CL/JUR/10388/2011

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 4/06/2013, Rol Nº 6401-2012,

Cita online: CL/JUR/1208/2013

— Corte Suprema, 14/04/1987, Rol Nº 3286-1987,

Cita online: CL/JUR/260/1987

— Corte Suprema, 26/12/2006, Rol Nº 2275-2005,

Cita online: CL/JUR/7127/2006

— Corte de Apelaciones de Rancagua, 6/09/2001, Rol Nº 17393-


2001,

Cita online: CL/JUR/5209/2001

2. Las partes perderán la facultad de paralizar un juicio luego que el juez


gestione de una manera diversa

Así es posible concluir que las partes paralizan el juicio cuando


teniendo la posibilidad de instar por la terminación del pleito sea por
negligencia u otra causa dependiente de su voluntad, no lo hacen,
circunstancia que no se configura en la especie, toda vez que éstas
perdieron el impulso procesal una vez que el juez de la instancia
encargado de velar por su correcta tramitación, de conformidad con lo
dispuesto en el artículo 84 del Código de Procedimiento Civil, lo
gestionó de una manera diversa (considerando 13º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/01/2014, Rol Nº 7242-2013, Cita online:


CL/JUR/62/2014

3. Los incidentes no paralizan el curso de la cuestión principal y es la


sentencia definitiva en que han de resolverse la acción y los incidentes
promovidos o sólo estos últimos si son incompatibles con aquélla

Los incidentes no paralizan el curso de la cuestión principal y es la


sentencia definitiva en que han de resolverse la acción y los incidentes
promovidos o sólo estos últimos si son incompatibles con aquélla. De la
norma se infiere que, por la naturaleza del procedimiento, breve y
concentrado, no se ha previsto la posibilidad de corregir el proceso al
ser acogida una causal dilatoria, pues ello desvirtuaría su objetivo y,
como se ha dicho, solamente se contempló la resolución de las mismas
en la sentencia definitiva. Las excepciones dilatorias, reglamentadas
por las normas relativas al juicio ordinario, de lato conocimiento, que
acepta su corrección, artículos 303 y siguientes del Código ya citado,
no se encuentran entre las reglas comunes a todo procedimiento, y por
ende, no son por lo mismo aplicables al juicio sumario. De la norma se
infiere que, por la naturaleza del procedimiento —breve y concentrado—
, no se ha previsto la posibilidad de corregir el proceso al ser acogida
una causal dilatoria, pues ello desvirtuaría su objetivo y, como se ha
dicho, solamente se contempló la resolución de las mismas en la
sentencia definitiva (considerandos 5º, 6º y 7º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 28/04/2004, Rol Nº 2580-2003, Cita online:


CL/JUR/3325/2004

4. Razones por las que se agota el procedimiento sumario

El procedimiento sumario se agota, sea porque el sentenciador


resuelva sobre el fondo de la acción deducida, sea porque sólo se
pronuncie sobre los incidentes propuestos, cuando éstos son
incompatibles con aquélla, sin que la resolución que así lo decida pierda
el carácter de sentencia definitiva que le otorga dicho
artículo (considerando 24º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 29/07/2002, Rol Nº 3906-2002, Cita online:


CL/JUR/647/2002

5. Estando facultado el demandante para corregir el vicio que justificó


que la excepción dilatoria fuera acogida, no puede desconocérsele el
ejercicio de esta prerrogativa

Estando facultado el demandante para corregir el vicio que justificó


que la excepción dilatoria fuera acogida, en tanto la naturaleza de la
excepción lo permita, no puede desconocérsele el ejercicio de esta
prerrogativa. Y al no indicar la ley la oportunidad en que esa corrección
deba tener lugar, puede concluirse que asiste derecho al actor para
hacerlo en el mismo juicio y no necesariamente en otro diverso, como
en forma implícita lo pretende la resolución impugnada (considerando 6º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 22/01/2009, Rol Nº 268-2008, Cita online:


CL/JUR/5795/2009

ARTÍCULO 691 (849)

La sentencia definitiva y la resolución que dé lugar al procedimiento


sumario en el caso del inciso 2º del artículo 681, serán apelables en ambos
efectos, salvo que, concedida la apelación en esta forma, hayan de eludirse
sus resultados.

Las demás resoluciones, inclusa la que acceda provisionalmente a la


demanda, sólo serán apelables en el efecto devolutivo.

La tramitación del recurso se ajustará en todo caso a las reglas


establecidas para los incidentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 187, 188, 189, 191, 192, 193, 194,
681 y 684. Código Orgánico de Tribunales: artículo 319.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Por regla general en el juicio sumario la apelación se concede en
ambos efectos. Recurso de apelación en el solo efecto devolutivo
cuando con el efecto suspensivo se eluda el resultado de la sentencia

De conformidad con lo dispuesto en el artículo 691 inciso 1º del


Código de Procedimiento Civil, la sentencia definitiva dictada en el juicio
sumario será apelable en ambos efectos, salvo que, concedida la
apelación en esta forma, hayan de eludirse sus resultados. De dicho
precepto se desprende que la regla general en el juicio sumario es que
la apelación se conceda en ambos efectos y que sólo por excepción
preceda en el solo efecto devolutivo, cuando se configure la hipótesis
que la misma norma señala. Pues bien, en el caso de la especie no
existe antecedente alguno que permita sostener que por el hecho de
concederse la apelación también en el efecto suspensivo se eludirá de
alguna forma el resultado de la sentencia definitiva impugnada, de
manera tal que es posible sostener que el recurso ha sido
correctamente concedido y que, por lo mismo, el recurso de hecho debe
ser declarado sin lugar (considerando 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte Suprema, 13/04/2018, Rol Nº 3197-2018, Cita online:


CL/JUR/1716/2018

2. Aplicación de las normas del juicio sumario. Procede conceder en


ambos efectos el recurso de apelación que se interponga en contra
de la sentencia definitiva. En la especie no se dan los supuestos de la
hipótesis excepcional para que se conceda en el sólo efecto
devolutivo

Para resolver, esta Corte tendrá presente que los autos tenidos a la
vista se han tramitado conforme las normas del juicio sumario y, en
razón de ello, debe estarse a lo dispuesto en el artículo 691 del Código
de Procedimiento Civil, por sobre lo reseñado en el numeral 1º del
artículo 194 del mismo cuerpo legal, en razón de su especialidad. Así
las cosas, la primera de las normas mencionadas, asienta como
premisa que el recurso de apelación que se interponga en contra de la
sentencia definitiva que se dicte, se concederá en ambos efectos; luego
y sólo ante la hipótesis excepcional de que puedan eludirse los
resultados del fallo, se concederá en el sólo efecto devolutivo, situación
que no aparece explicitada en la resolución que se impugna ni sería de
aquellas ya descritas, razón por la cual se acogerá este recurso de
hecho (considerando 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 6/06/2019, Rol Nº 923-2019,

Cita online: CL/JUR/4478/2019

3. Designación de juez partidor. Resolución que designa juez partidor


no constituye sentencia definitiva. Apelación en contra de la
resolución que designa juez partidor debe concederse en el sólo
efecto devolutivo

La resolución impugnada no tiene la naturaleza jurídica de sentencia


definitiva, toda vez que no pone fin a la instancia resolviendo la cuestión
o asunto controvertido. A mayor abundamiento, en el evento que se
considerara que tiene dicha naturaleza, de acuerdo al artículo 691 del
Código de Procedimiento Civil, puede incluso ser concedida la
apelación en el solo efecto devolutivo, si se estima que concedida en
ambos efectos hayan de eludirse sus resultados. Además, la doctrina
también ha sido del parecer que la resolución que designa al juez
partidor es una sentencia interlocutoria y, por lo tanto, la apelación de
acuerdo al artículo 194 Nº 2 del Código de Procedimiento Civil, debe
concederse en el solo efecto devolutivo. En efecto, así lo sostiene la
doctrina —Aylwin Azocar— al señalar "Considerando la gestión judicial
del nombramiento de árbitros como de naturaleza no contenciosa,
debemos resolver que la designación en que el juez designa
compromisario es una sentencia interlocutoria de las que se rigen por el
artículo 826 del C.P.C., que debe notificarse a las partes por cédula y
que es susceptible de los recursos de apelación y casación conforme a
las reglas generales". Así las cosas, el recurso de apelación en contra
de la resolución que designa juez partidor debe concederse en el solo
efecto devolutivo (considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 16/09/2016, Rol Nº 18760-


2016,

Cita online: CL/JUR/7430/2016


ARTÍCULO 692 (850)

En segunda instancia, podrá el tribunal de alzada, a solicitud de parte,


pronunciarse por vía de apelación sobre todas las cuestiones que se hayan
debatido en primera para ser falladas en definitiva, aun cuando no hayan sido
resueltas en el fallo apelado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 208, 690 y 776.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La excepción de prescripción no fue admitida a tramitación por el a


quo, encontrándose pendiente apelación sobre su admisibilidad

En segunda instancia, podrá el tribunal de alzada a solicitud de parte,


pronunciarse por vía de apelación sobre todas las cuestiones que se
hayan debatido en primera para ser falladas en definitiva, aun cuando
no hayan sido resueltas en el fallo apelado. En tal contexto, la excepción
de prescripción —opuesta por el demandado oportunamente por
aplicación de lo dispuesto en el artículo 310 del Código de
Procedimiento Civil, en todo caso— no fue admitida a tramitación por
el a quo, encontrándose pendiente apelación sobre su admisibilidad, de
modo que no puede estimarse como una cuestión que haya sido
debatida en primera instancia, contexto en el cual la Corte de
Apelaciones carecía de competencia para pronunciarse sobre ella, y al
hacerlo incurre en la primera causal de casación en la forma
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 10/05/2004, Rol Nº 2529-2003, Cita online:


CL/JUR/4690/2004

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 18/01/2001, Rol Nº 3748-1999,

Cita online: CL/JUR/3281/2001

TÍTULO XII JUICIOS SOBRE CUENTAS


ARTÍCULO 693 (851)

El que deba rendir una cuenta la presentará en el plazo que la ley designe
o que se establezca por convenio de las partes o por resolución judicial.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 504, 506, 514, 540, 654, 695 y 696.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Juicios especiales sobre cuentas. Concepto

Pues bien, como se dijo, los artículos 693 a 696 del Código de
Procedimiento Civil reglan los juicios especiales sobre cuentas, que se
definen como los procedimientos especiales que deben observarse en
la presentación, impugnación o aprobación de una cuenta, cuando a ello
se está obligado por disposición de la ley, por convenio de las partes o
por resolución judicial, por ende, solo se discute sobre las cuentas
mismas ya presentadas, disintiendo las partes sobre la efectividad de
las diversas partidas de que constan, por lo tanto, de su resultado final.
También, conforme se señaló, el juicio sobre cuentas es de
competencia del tribunal arbitral (considerando 4º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 2/01/2019, Rol Nº 19239-2017, Cita online:


CL/JUR/97/2019

2. Presentación, impugnación o aprobación de una cuenta es materia


de un juicio especial diferente del declarativo sobre cuentas

El Máximo Tribunal ha señalado, por un lado, "que cualquiera que sea


la postura doctrinaria que se adopte, la presentación, impugnación o
aprobación de una cuenta es materia de un juicio especial diferente del
declarativo sobre cuentas, en que sólo se debe discutir acerca de la
existencia o no de la obligación de rendirlas"; y, por otro, que se asume
como correcta la primera postura expuesta, atendido los términos del
artículo 227 Nº 3 del Código Orgánico de Tribunales, que señala que
deben resolverse por árbitros las cuestiones a que diere lugar la
presentación de la cuenta del gerente o del liquidador de las sociedades
comerciales y los demás juicios sobre cuentas. Pero debe precisarse
que aún en la segunda tesis, no se trata de la misma situación de autos.
En efecto, no cabe duda que el presente juicio corresponde a aquel en
que se ventila la pretensión declarativa de la obligación de rendir cuenta,
que fue acogida, ordenándose que se lleve a efecto en un determinado
plazo, el cual, como expresa el fallo impugnado, "no importa la
tramitación de un juicio de cuentas", propio de un juicio arbitral; no
pudiendo entenderse, como sugiere el recurrente, que se hayan
deducido dos acciones diferentes e incompatibles, cuando sólo se
interpuso y resolvió la declarativa de la obligación de rendir una cuenta,
pues, sea que el juicio de cuentas se inicie con su presentación o con
las observaciones evacuadas en la misma, en el presente caso, no se
verificó ninguna de dichas circunstancias. En efecto, los conflictos
jurídicos que deben resolverse en el juicio de cuentas dicen relación con
las actuaciones que derivan de la presentación de la cuenta
(artículo 694 del Código de Procedimiento Civil) o de su no presentación
(artículo 695 del Código de Procedimiento Civil) (considerando 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 13/06/2019, Rol Nº 37990-2017, Cita online:


CL/JUR/3389/2019

3. Plazo fijado por el juez, a falta de disposición legal o acuerdo de las


partes, para la presentación de la cuenta o de las observaciones es
de carácter judicial

En el juicio de cuentas, regulado en el Libro Tercero Título XII del


Código de Procedimiento Civil, el juez, a falta de disposición legal o
acuerdo de las partes, es llamado a fijar plazos para la presentación de
la cuenta respectiva, las observaciones o, en su caso de no haber estas
últimas para formularla el propio interesado. En consecuencia, se trata
de plazos judiciales, los que, por un lado, conforme el artículo 78 del
Código precitado, no son fatales, y, por otro lado, conforme al artículo 50
del Código Civil, que contiene la regla general en la forma de
computarlos, son plazos de días continuos (considerando 2º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 4/10/2019, Rol Nº 13084-2018,

Cita online: CL/JUR/5442/2019

4. Rendición de cuenta debe encontrarse precedida de la declaración


formulada por el juez de la obligación a rendirla
Conforme se desprende de los artículos 693 y 695 del Código de
Procedimiento Civil, aun en el caso del mandato y sin perjuicio de lo
dispuesto en el artículo 2155 del Código Civil, atento, además, a lo
manifestado por el demandado y lo dispuesto en el artículo 680 Nº 8 del
mismo ordenamiento, la rendición de cuenta debe encontrarse
precedida de la declaración formulada por el juez de la obligación a
rendirla, pues tal resolución constituye la comprobación de dicha
obligación, toda vez que no puede exigirse al demandado su
cumplimiento si, como acontece en el caso en análisis, esa obligación
se desconoce. Luego, lo cierto es que en la especie se han desatendido
las citadas normas y su recta aplicación, cometiéndose faltas
procedimentales que deben ser corregidas por el tribunal, por lo que su
enmienda se hará de oficio, conforme a la facultad conferida en el
artículo 84 inciso final del Código de Procedimiento Civil
(considerandos 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 24/12/2019, Rol Nº 13180-2018,

Cita online: CL/JUR/12212/2019

ARTÍCULO 694 (852)

Presentada la cuenta, se pondrá en conocimiento de la otra parte,


concediéndole el tribunal un plazo prudente para su examen. Si, vencido el
plazo, no se ha formulado observación alguna, se dará la cuenta por
aprobada.

En caso de haber observaciones, continuará el juicio sobre los puntos


observados con arreglo al procedimiento que corresponda según las reglas
generales, considerándose la cuenta como demanda y como contestación las
observaciones.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 67, 78, 254, 257 y 258.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Rendición de cuentas. Existencia de observaciones en el


procedimiento de rendición de cuentas. El procedimiento debe
someterse a arbitraje. Juicios sobre cuentas son materia de arbitraje
forzoso o necesario
Conforme al artículo 694 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil,
al haber existido observaciones en el procedimiento de rendición de
cuentas iniciado, debió continuar el procedimiento según las reglas
generales, lo que significa que debe someterse a arbitraje de acuerdo a
lo establecido en el artículo 227 Nº 3 del Código Orgánico de
Tribunales, pues los juicios sobre cuentas son materia de arbitraje
necesario u obligatorio, de manera tal que los tribunales ordinarios
resultan absolutamente incompetentes para conocer de ellos y, en el
evento de hacerlo, es evidente que lo obrado es improcedente. En
consecuencia, dada la existencia de observaciones a la cuenta rendida,
no es dable tenerla por aprobada, sino dictar la resolución que en
derecho corresponda a fin de que un juez árbitro resuelva la
controversia (considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 22/07/2016, Rol Nº 568-2016,

Cita online: CL/JUR/5174/2016

2. Juicio declarativo sobre cuentas. Discusión doctrinaria sobre si


tribunal arbitral debe estar designado antes de la presentación de las
cuentas

También, conforme se señaló, el juicio sobre cuentas es de


competencia del tribunal arbitral. Sin embargo, no es pacífico en
doctrina si debe estar designado antes de la presentación de las
cuentas; o si, por el contrario, una vez que se hayan presentado ante el
tribunal ordinario correspondiente e impugnadas. Los partidarios de la
primera postura sostienen que "el juicio sobre cuentas se inicia por
medio de la presentación de las cuentas mismas; de suerte que, para
poder cumplir con este acto inicial, lo menos que debe existir es el
tribunal llamado a conocer del juicio", y los de la segunda que "el juicio
sobre cuentas propiamente tal sólo existe cuando éstas han sido
impugnadas; de manera que las cuentas bien pueden presentarse al
tribunal ordinario, sin que sea necesario nombrar aun al juez árbitro, por
no saberse todavía la suerte que ellas correrán". Y sobre los dos
postulados se señala que "La primera doctrina es evidente que tiene
mayor asidero legal; la segunda, empero, descansa sobre una base de
orden práctico" (Casarino V., Mario, Manual de Derecho Procesal,
Derecho Procesal Civil, Tomo VI, Santiago, Chile, Editorial Jurídica de
Chile, 2015 [reimpresión], p. 60). Al respecto, en primer lugar, se debe
tener presente que no cabe duda que cualquiera que sea la postura
doctrinaria que se adopte, la presentación, impugnación o aprobación
de una cuenta es materia de un juicio especial diferente del declarativo
sobre cuentas, en que sólo se debe discutir acerca de la existencia o no
de la obligación de rendirlas; razón por la que incurre en yerro la
sentencia de segunda instancia al validar todo lo obrado a continuación
de la actuación judicial de que da cuenta la letra c. del motivo 2º, y
concluir que todas las cuestiones a que ha dado lugar la presentación
de la cuenta deben ser resueltas por la justicia arbitral, precisamente
atendida la secuencia procesal indicada en el citado raciocinio. En
segundo lugar, que esta Corte asume la primera postura, atendido los
términos del número 3 del artículo 227 del Código Orgánico de
Tribunales, pues señala que deben resolverse por árbitros las
cuestiones a que diere lugar la presentación de la cuenta del gerente o
del liquidador de las sociedades comerciales y los demás juicios sobre
cuentas (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 2/01/2019, Rol Nº 19239-2017, Cita online:


CL/JUR/97/2019

3. Compatibilidad de la acción de declaración de obligación de rendir


cuenta y determinación del plazo para rendirla

Aunque la sentencia impugnada señale que el juicio de cuentas, y por


lo tanto, la competencia arbitral forzosa se inicia "una vez que la cuenta
presentada al alero del procedimiento establecido en los artículos 693 y
siguientes del Código de Procedimiento Civil, haya sido observada",
dicha definición no influye en lo dispositivo del fallo recurrido, por
cuanto, no es efectivo que haya resuelto dos acciones incompatibles,
sino, dicho pronunciamiento se limitó a resolver la pretensión declarativa
de la obligación de rendir cuenta, señalándole el plazo al que debe
sujetarse el inicio del juicio de cuentas, circunstancias bajo las cuales,
se concluye que la sentencia recurrida no ha cometido los yerros que
se denuncian (considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 13/06/2019, Rol Nº 37990-2017, Cita online:


CL/JUR/3389/2019
4. En el juicio de cuentas, en caso de haber observaciones a la cuenta
presentada, continuará el juicio sobre los puntos observados con
sujeción al procedimiento que corresponda

En el juicio de cuentas, el artículo 694, inciso segundo, del Código de


Enjuiciamiento Civil dispone que en caso de haber observaciones a la
cuenta presentada, continuará el juicio sobre los puntos observados con
sujeción al procedimiento que corresponda según las reglas generales,
considerándose la cuenta como demanda y como contestación las
observaciones (considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 17/10/1997, Rol Nº 2781-1996, Cita online:


CL/JUR/1697/1997

ARTÍCULO 695 (853)

Si el obligado a rendir cuenta no la presenta en los plazos a que se refiere


el artículo 693, podrá formularla la otra parte interesada. Puesta en noticia del
primero, se tendrá por aprobada si no la objeta dentro del plazo que el tribunal
le conceda para su examen.

Si se formulan observaciones, continuará el juicio como en el caso del


inciso 2º del artículo anterior.

En la apreciación de la prueba, el tribunal estimará siempre la omisión del


que debe presentar la cuenta como una presunción grave para establecer la
verdad de las partidas objetadas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 67, 78, 427, 428, 693, 694 y 696.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Rendición de cuentas. I. El juicio sobre cuentas constituye un


procedimiento especial. Derecho al debido proceso. II. La excepción
de cosa juzgada extralimita el ámbito propio del procedimiento de
juicio sobre cuentas. Improcedencia de cualquier incidencia que
exceda la proposición de una cuenta y su observación o aceptación

El Título XII del Libro Tercero del Código de Procedimiento Civil trata
del "juicio sobre cuentas", estableciendo un procedimiento especial. Por
lo tanto, cuanto de ello escape, habrá de entenderse lesivo de la
garantía del debido procedimiento legal que recoge el artículo 19 Nº 3
inciso 6º de la Constitución que, como se sabe, radica en el legislador y
en nadie más que él, la determinación de la razonabilidad del iter
procesal al que ha de sujetarse una actuación determinada.
Corresponde reivindicar para la preceptiva reseñada, su carácter de
derecho público, vinculante para todos quienes de ella se valgan
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

La excepción perentoria de cosa juzgada, opuesta por la parte


mandante, extralimita y sobredimensiona el ámbito propio del
procedimiento que la ley denomina "juicio sobre cuentas". Por
naturaleza, es una gestión centrada única y exclusivamente en
proponerse una cuenta y en observársela o aceptársela, expresa o
tácitamente. Tal previsión legislativa obedece a que la obligación de
rendir la cuenta ha sido predeterminada, sea por fuente legal, sea por
convención, sea por resolución judicial. Cualquier otra incidencia no
puede tener lugar en tan especial gestión, cuanto más si mira al fondo
del asunto, cual ocurre con una excepción como la de cosa juzgada, a
través de la que, ni más ni menos, se está señalando al tribunal que, en
opinión de los mandantes procesalmente convocados, la materia ha
quedado definitivamente resuelta en sede judicial (considerandos 5º y
6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 17/01/2017, Rol Nº 18825-


2015,

Cita online: CL/JUR/207/2017

2. Rendición de cuentas. I. Rendición de cuentas, concepto y finalidad.


La rendición de cuentas trata de establecer qué es lo que ha recibido
el mandatario, lo que ha gastado y lo que resta a su favor o a favor
del mandante. II. Cuando la cuenta es presentada por el mandante se
limita a las operaciones llevadas a cabo en la ejecución de mandato.
Presunción judicial respecto de la verdad de las partidas que son
objetadas por el mandatario que ha omitido su obligación de rendir
cuenta. Partidas observadas deben cumplir con la exigencia de
referirse a los resultados efectivos de la gestión o negocio
encomendado. III. Rendición de cuentas no persigue determinar lo
que se haya podido producir con cierta diligencia
La rendición de cuentas, obligación principal del mandatario, tiene por
objeto primordial poner en conocimiento del mandante la forma en que
se ha llevado a efecto la gestión del negocio, los resultados del mismo
y la restitución de todo lo que el mandatario ha recibido en virtud del
mandato. Concretamente, se ha dicho que la obligación de rendir
cuentas "consiste en la descripción gráfica de las operaciones
realizadas por cuenta o en interés del principal; con su respaldo
documental correspondiente a los efectos que aquél pueda entrar en el
conocimiento de las mismas para su examen, verificación y eventual
impugnación" —Atilio C. González—. En el mismo sentido la Corte
Suprema ha expresado que "La cuenta debe ser suficiente, para lo cual
debe contener el detalle claro —reflejado en sus antecedentes
justificativos— de las operaciones llevadas a cabo en la ejecución de un
encargo o de una gestión concerniente al patrimonio de un tercero". Por
su parte, la doctrina —Stitchkin Branover— ha manifestado que "el juicio
de rendición de cuentas no dice relación con la responsabilidad que
puede generarse para el mandatario por su culpa o dolo en la
administración. Ésta es una cuestión independiente. La rendición de
cuentas presenta cierto carácter aritmético marcado: se trata de
establecer qué es lo que ha recibido el mandatario, lo que ha gastado y
lo que resta a su favor o a favor del mandante. Ordinariamente servirá
de antecedente para establecer la buena o mala administración del
negocio, pero en ningún caso resuelve lo relativo a la responsabilidad
de mandatario" (considerando 14º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Cuando la cuenta es presentada por el mandante porque el


mandatario no la presenta dentro del plazo fijado por el tribunal, según
lo faculta el artículo 695 del Código de Procedimiento Civil —que es la
situación de autos—, no se altera la naturaleza y contenido de la
rendición. Por tanto, se limitará a las operaciones llevadas a cabo en la
ejecución de mandato, y las partidas importantes han de ser
debidamente detalladas y documentadas, tal como se colige de lo
dispuesto en el artículo 2155 inciso 2º del Código Civil. En armonía con
esas proposiciones, el aludido artículo 695 inciso 1º prevé la posibilidad
de que el mandatario formule observaciones dentro del plazo que fije el
tribunal; y el efecto que contempla su inciso 3º se produce sólo respecto
de las partidas objetadas por el mandatario, ordenando el legislador
que, en estas circunstancias, la omisión del obligado a rendir la cuenta
se considera una presunción grave de la verdad de "las partidas
objetadas". A este último respecto, debe destacarse que la presunción
judicial que contempla el artículo 695 inciso 3º opera sólo respecto de
la verdad de las partidas que son objetadas por el mandatario que ha
omitido su obligación de rendir cuenta, y presupone siempre que las
partidas observadas cumplan con la exigencia de referirse a los
resultados efectivos de la gestión o negocio encomendado. Entonces,
la aplicación del artículo 695 inciso 3º no puede conducir a tener por
verdaderas las partidas que digan relación con lo que el mandatario
pudo haber obtenido en su administración con la debida diligencia y
cuidado, pues ello es propio de la responsabilidad que puede generarse
para aquel por su culpa o dolo en la administración, aspectos que son
ajenos al juicio de rendición de cuentas; en esa parte lo presentado no
constituye cuenta (considerando 15º de la sentencia de la Corte
Suprema).

En efecto, si bien el artículo 695 inciso 3º del Código de


Procedimiento Civil dispone que en la apreciación de la prueba el
tribunal estimará siempre la omisión de presentar la cuenta como una
presunción grave para establecer la verdad de las partidas objetadas,
la aplicación de esta regla no puede conducir a establecer la verdad de
partidas que digan relación con lo que el mandatario pudo haber
obtenido en su administración con la debida diligencia y cuidado, pues
ello es propio de la responsabilidad que puede surgir para aquel por su
culpa o dolo en la administración, lo que es ajeno a un juicio de rendición
de cuentas (considerando 19º de la sentencia de la Corte Suprema). En
la especie, la cuenta presentada por los actores no se ajusta a los
conceptos propios de una rendición de cuentas. En el juicio de rendición
de cuentas sólo se persigue determinar aquello que efectivamente
produjo la gestión encomendada, no lo que pudo producir con cierta
diligencia, por lo que los jueces del fondo están en lo correcto al
sostener que los saldos que arroja la cuenta rendida se fundan en
situaciones ideales y que más bien son propias de la responsabilidad
que le puede corresponder al mandatario por una negligencia en el
desempeño de su gestión. En este sentido, la renta mensual estimativa
en base a la cual se formuló la cuenta no corresponde a los resultados
propios de la gestión del mandatario, menos aún si dicha renta o canon
se pretende en UF y desde 1928 sin variaciones temporales; pero sí es
propio de los resultados de la labor del mandatario la celebración del
contrato de arrendamiento efectuada en el año 1952, gestión que, por
tanto, sí podía ser considerada como un antecedente real y cierto de la
cuenta aprobada (considerando 18º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 1/08/2016, Rol Nº 7853-2015,

Cita online: CL/JUR/5499/2016

ARTÍCULO 696 (854)

Lo establecido en el inciso 1º del artículo anterior se entenderá sin perjuicio


del derecho que corresponda para exigir por acción ejecutiva el cumplimiento
de la obligación de presentar la cuenta, cuando dicha acción sea procedente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 434, 530, 543, 568, 693 y 695.

TÍTULO XIII DE LOS JUICIOS SOBRE PAGO DE CIERTOS


HONORARIOS

ARTÍCULO 697 (859)

Cuando el honorario proceda de servicios profesionales prestados en juicio,


el acreedor podrá, a su arbitrio, perseguir su estimación y pago con arreglo al
procedimiento sumario, o bien interponiendo su reclamación ante el tribunal
que haya conocido en la primera instancia del juicio.

En este último caso la petición será substanciada y resuelta en la forma


prescrita para los incidentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 7º, 89, 90, 91, 140, 143, 231 y 232.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cobro de honorarios. Reclamo de los honorarios conforme a las


reglas de los incidentes

El artículo 697 del Código de Procedimiento Civil establece que el


reclamo de honorarios debe ser substanciado y resuelto "en la forma
prescrita para los incidentes". Lo anterior no importa que el aludido
reclamo sea un incidente —una cuestión accesoria al juicio que requiera
un especial pronunciamiento del tribunal—, sino única y exclusivamente
que debe tramitarse conforme a las reglas procedimentales de los
incidentes (considerandos 2º de la anulación de oficio).

Corte Suprema, 31/05/2019, Rol Nº 2452-2018, Cita online:


CL/JUR/3054/2019

2. Aplicación del artículo 697 del CPC

Más adelante agrega dicha sentencia "citando al profesor don Mario


Casarino Viterbo, en su libro Manual de Derecho Procesal, Tomo VI,
cuarta edición, página 112, expresa: "El artículo 697 sólo se aplica: a) A
los demandantes que sean profesionales; b) Cuando pretenden la
estimación y pago de honorarios; y c) Siempre que ellos procedan de
servicios prestados en juicio. Por exclusión, el artículo 697 no se aplica
a honorarios que no se hayan prestado en juicio, ni tampoco a los
honorarios convencionales y previamente determinados"
(considerando 8º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Puerto Montt, 28/06/2019, Rol Nº 3-2019,

Cita online: CL/JUR/3796/2019

3. Cobro incidental de honorarios. Resolución que resuelve demanda


de cobro incidental de honorarios tiene naturaleza de sentencia
definitiva

A juicio de esta Corte, la resolución que resuelve la demanda de cobro


de honorarios, aunque se tramita formalmente de manera incidental,
conforme lo permite en el inciso segundo del artículo 697 del Código de
Procedimiento Civil, ello, sin embargo, no altera la naturaleza jurídica
que tiene la resolución que resuelve esta cuestión debatida y que tiene
el carácter de sentencia definitiva, conforme lo dispone el artículo 158
del Código de Procedimiento Civil. En efecto, esta norma señala que
tiene tal naturaleza jurídica aquella que pone fin a la instancia,
resolviendo la cuestión o asunto que ha sido objeto del juicio. En el
presente caso se demandó el pago de honorarios profesionales, lo que
fue resuelto por el tribunal, acogiendo tal petición, de tal manera que
respecto a este asunto la sentencia que lo falló puso fin a la instancia
resolviendo la materia del juicio. En consecuencia, siendo la resolución
impugnada una sentencia definitiva, el plazo para deducir recurso de
apelación era de diez días y debe concederse, además, en ambos
efectos, aplicación al artículo 195 del Código de Procedimiento Civil, ya
que la apelación de una resolución que no se encuadra dentro de la
regulación del artículo 194, del mismo cuerpo legal, debe ser concedida
de esa forma (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 27/02/2019, Rol Nº 309-2019,

Cita online: CL/JUR/1328/2019

4. Improcedencia de la acción de cobro de honorarios del artículo 697


del Código de Procedimiento Civil al existir un pacto de honorarios
entre el actor y el demandado.

Cabe agregar que en este caso la acción ejercida ha sido la segunda


especie de pretensiones que regula el artículo 697 del Código de
Procedimiento Civil, en que el actor reclama que la estimación de sus
honorarios sea efectuada por el juez, no aplicable al caso en que sea
invocado el cobro en base a un pacto de honorarios entre el actor y el
demandado, pertinente a una acción relativa a
incumplimiento contractual. Sobre esta materia la Excma. Corte
Suprema, en sentencia de fecha 15/12/2016, recurso rol 40.667 2016,
ha resuelto "Que en consecuencia, la norma que permite la aplicación
del procedimiento incidental sustanciado ante el tribunal que juzga el
proceso que los genera, necesariamente opera sobre la estimación que
de los honorarios hace ese juez, lo que excluye aquellos basados en un
contrato acordado con el cliente, esto es, los emolumentos pactados
convencional y previamente determinados así como también los
originados extra proceso, en cuyo caso el procedimiento que debe
seguirse para dirimir el cumplimiento de ese contrato es el juicio breve
que contempla el artículo 680 del Código de Procedimiento Civil, en que
el quid de la controversia girará en torno al cumplimiento de la
convención y su eficacia" (considerando 8º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Puerto Montt, 28/06/2019, Rol Nº 3-2019,

Cita online: CL/JUR/3796/2019


5. Cobro de honorarios. Cobro de honorarios por servicios profesionales
prestados en juicios. Litigio independiente de lo tratado en causa de
partición. Procedencia del recurso de apelación de la resolución que
resuelve el procedimiento incidental de cobro de honorarios

Conforme al artículo 697 del Código de Procedimiento Civil el


procedimiento para perseguir los honorarios por servicios profesionales
prestados en juicios puede realizarse con arreglo al juicio sumario o
interponiendo su reclamo ante el tribunal que conoce de aquél, donde
éstos se generan, caso este último donde su tramitación lo es conforme
a lo previsto para los incidentes. Como se aprecia entonces, se trata de
un juicio independiente cuyas partes, objetos y causa de pedir son
distintos a aquellas que trata el juicio de partición, donde el demandante
ha elegido proceder conforme a la segunda de las opciones que
contempla la norma legal referida (considerando 3º de la sentencia de
la Corte de Apelaciones). En la especie no es aplicable el artículo 649
del Código de Procedimiento Civil, referido, únicamente, a las materias
y cuestiones relativas a la partición que conoce, por lo que la tramitación
y especialmente el recurso de apelación deducido en contra de la
sentencia que falla la demanda de honorarios, debe ser tramitada
conforme a la regla general del artículo 187 del Código citado
(considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 19/05/2017, Rol Nº 6650-2016,

Cita online: CL/JUR/3368/2017

6. Cobro de honorarios. I. Solamente los honorarios intraproceso


pueden ser fijados mediante el procedimiento incidental del
artículo 697 del Código de Procedimiento Civil. Procedencia del cobro
de honorarios extraproceso y de aquellos basados en un contrato
acordado con el cliente mediante el procedimiento sumario. II. Nulidad
procesal, concepto y finalidad. III. Improcedencia del procedimiento
incidental de cobro de honorarios del artículo 697 para resolver la
disconformidad entre las partes del contrato en relación a su debido
cumplimiento y el monto definitivo a satisfacer

El artículo 697 del Código de Procedimiento Civil permite la aplicación


del procedimiento incidental sustanciado ante el tribunal que juzga el
proceso que los genera, necesariamente opera sobre la estimación que
de los honorarios hace ese juez, lo que excluye aquellos basados en un
contrato acordado con el cliente, esto es, los emolumentos pactados
convencional y previamente determinados así como también los
originados extraproceso, en cuyo caso el procedimiento que debe
seguirse para dirimir el cumplimiento de ese contrato es el juicio breve
que contempla el artículo 680 del Código de Procedimiento Civil, en que
el quid de la controversia girará en torno al cumplimiento de la
convención y su eficacia. En consecuencia, los honorarios materia de la
tramitación incidental de autos no se encuentran referidos a aquellos
generados intraproceso, esto es, los causados por actuaciones
procesales que consten en el expediente, respecto de los cuales el juez
que conoce la causa principal se encuentra obligado a su estimación y
la determinación consecuencial de su pago, únicos que por disposición
del mencionado artículo 697 pueden ser fijados vía incidental
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte Suprema). La nulidad
procesal se ha definida —Alsina— como "la sanción mediante la cual
se priva a un acto o actuación del proceso o a todo él de los efectos
normales previstos por la ley, cuando en su ejecución no se han
guardado las formas prescritas por aquélla". Su finalidad, entonces, es
restarle valor a la actuación viciada, destruirla, tenerla como no
sucedida, ya que no constituye el medio idóneo destinado a cumplir el
objetivo para el que fue prevista por el legislador. El concepto jurídico
de nulidad está ligado a la noción de función, donde el rol que cumple
la nulidad es una sanción o la pena en el evento de las normas de deber.
Se estima por algunos autores que la sanción de nulidad representa el
regreso al statu quo, otros; en cambio, la sitúan como una sanción
exclusivamente reparatoria donde la estructura formal de la nulidad
aparece sustituyendo la idea de sanción por aquella noción de
retroacción o, mejor dicho, retrotrayendo el proceso a una etapa
pretérita (considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema). En la
especie, lo que en definitiva se ha suscitado en este litigio es la
disconformidad entre las partes del contrato en relación al debido
cumplimiento del mismo y el monto definitivo que debe satisfacerse,
controversia que si bien debe ser resuelta a través de un proceso breve
y ajeno a las dilaciones propias de la vía ordinaria, escapa abiertamente
a los márgenes que regula el procedimiento simple y acotado del
artículo 697 del Código de Procedimiento Civil, contenedor del único
verbo rector que autoriza al juez de la causa para conocer de este
asunto. Por tanto, yerran los jueces del fondo al aplicar a la demanda
de cumplimiento del contrato de honorarios materia de autos un
procedimiento no contemplado para esos efectos, de manera que el
irregular proceder enunciado configura un vicio que no puede ser
enmendado sino con la declaración de nulidad del acto por el cual se
decidió dar curso a la demanda, en la medida que se ha desatendido lo
que ordenan los artículos 680 Nº 3 y 697 del Código de Procedimiento
Civil. A su vez, de manera consecuencial, procede disponer la
invalidación de todos aquellos que se realizaron con posterioridad y en
estrecha vinculación con tal presentación, atendido el efecto extensivo
de los actos procesales. Ciertamente corresponde la anulación con la
amplitud indicada, por cuanto los actos procesales no se constituyen
como fenómenos aislados sino concatenados unos a otros, siendo el
siguiente el resultado del anterior y, a su vez, el antecedente del que
viene a continuación, resultando una estrecha vinculación entre unos a
otros, de manera que la nulidad de un acto no siempre determina
exclusivamente su ineficacia, sino puede arrastrar la invalidez de una
serie de gestiones e incluso de todo el proceso (considerandos 11º y
12º de la sentencia de casación de oficio).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 15/12/2016, Rol Nº 40667-2016,

Cita online: CL/JUR/8315/2016

7. Cobro de honorarios. Existencia de cláusula compromisoria acordada


libre y voluntariamente. La cláusula compromisoria puede ser
invalidada por mutuo consentimiento de quienes concurrieron a su
formación o por la concurrencia de una causa legal. Sustracción de la
justicia ordinaria las cuestiones suscitadas a propósito del contrato
celebrado

Las partes de este juicio, en una cláusula compromisoria acordada


libre y voluntariamente, teniendo capacidad las partes para pactar ello,
establecieron que todos los conflictos que se susciten, entre otros, en
cuanto al cumplimiento de las obligaciones que emanan del contrato de
prestación de servicios profesionales deben ser resueltas por un juez
árbitro mixto designado en la forma que en dicha cláusula se dice, lo
que importa una derogación convencional de la jurisdicción ordinarias.
Es decir, en forma expresa las partes de este juicio convinieron que toda
discrepancia que se produzca entre ellas con motivo u ocasión de dicho
contrato, cualquiera sea su causa o contenido, deberá ser resuelta en
la forma ya mencionada. Por lo tanto, tratándose de una estipulación
acordada entre las partes de este juicio, en forma libre y voluntaria, debe
ser respetada como tal, por lo que de acuerdo a lo dispuesto en el
artículo 1545 del Código Civil, es ley para las partes y no puede ser
invalidada sino por el mutuo consentimiento de quienes concurrieron a
su formación o por la concurrencia de una causa legal, y ninguna de las
dos hipótesis se ha verificado y ni siquiera se ha promovido en estos
autos, por lo que no corresponde que ello ocurra en forma unilateral,
como lo pretende en este caso, el actor (considerandos 11º y 12º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Inclusión y existencia de la cláusula compromisoria trae como


consecuencia, que la voluntad de las mismas expresada, no ha sido otra
que la de sustraer del conocimiento de la justicia ordinaria civil todas
aquellas cuestiones o controversias que se verifiquen o sucedan entre
ellas a propósito de dicho vinculo o contrato celebrado y por ende las
liga. Lo anterior no trae otra consecuencia que no sea concluir que las
mismas partes del juicio al acordar la cláusula compromisoria,
expresamente excluyeron del procedimiento establecido en el
artículo 697 del Código de Procedimiento Civil, una acción similar a la
de autos, como es esta demanda incidental de cobro de honorarios
(considerandos 13º y 14º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 2/12/2015, Rol Nº 7436-2013,

Cita online: CL/JUR/7514/2015

8. Se podrá interponer la reclamación por el pago de honorarios ante el


tribunal que haya conocido en primera instancia

Que el procedimiento establecido en el artículo (...), que permite


perseguir el pago de honorarios profesionales presentados en juicio,
ante el tribunal que haya conocido en primera instancia del mismo, no
entraña un simple incidente del juicio en que dichos honorarios se han
devengado, sino un asunto del todo independiente, y en consecuencia,
una gestión judicial nueva, que debió notificarse personalmente a la
demandada, máxime si aquélla fue interpuesta por la persona que la
representaba en el juicio, por lo que al no haberse hecho de la señalada
manera se omitió el emplazamiento de la demandada en la forma
prevista por la ley, trámite esencial en conformidad a lo dispuesto en el
citado artículo 795 Nº 1 de este último cuerpo legal, cuya omisión
constituye la causal de nulidad formal establecida en el artículo 768 Nº 9
del mismo texto normativo, según se anotó (considerando 5º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 21/01/2011, Rol Nº 6159-2010, Cita online:


CL/JUR/10373/2011

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 4/06/2013, Rol Nº 6442-2012,

Cita online: CL/JUR/1209/2013

— Corte de Apelaciones de Santiago, 10/04/2012, Rol Nº 3702-2009,

Cita online: CL/JUR/4378/2012

9. Es obligación del demandante señalar el valor de los honorarios


adeudados, para instar por la correspondiente decisión

Que el artículo 697 del Código de Procedimiento Civil dispone que


cuando el honorario proceda de servicios profesionales prestados en
juicio, el acreedor podrá a su arbitrio, perseguir su estimación y pago
con arreglo al procedimiento sumario, o bien interponiendo su
reclamación ante el tribunal que haya conocido en la primera instancia
del juicio, en este último caso la petición será substanciada y resuelta
en la forma prescrita para los incidentes. En consecuencia, esta norma,
que es de carácter procesal, sólo está destinada a señalar la forma en
que un acreedor de honorarios por concepto de servicios profesionales
prestados en juicio, puede accionar en contra de su deudor para obtener
su estimación y pago, siendo obligación suya, como es natural, señalar
el valor en que los considera para instar por la correspondiente decisión;
pero como bien se expresa en la sentencia impugnada, lo que no es
posible aceptar es que la tasación de las costas personales hecha por
el juez en el juicio ejecutivo Rol Nº 4736, pueda ser considerada como
la estimación a que se refiere el artículo 697 (...) (considerando 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 3/10/1994, Rol Nº 18963-1994, Cita online:


CL/JUR/2132/1994
TÍTULO XIV DE LOS JUICIOS DE MENOR Y DE MÍNIMA CUANTÍA

§ 1. De los juicios de menor cuantía

ARTÍCULO 698

Los juicios de más de diez unidades tributarias mensuales y que no pasen


de quinientas unidades tributarias mensuales y que no tengan señalado en la
ley un procedimiento especial, se someterán al procedimiento ordinario de
que trata el Libro II con las modificaciones siguientes:216

1ª Se omitirán los escritos de réplica y dúplica.

Si se deduce reconvención, se dará traslado de ella al demandante por seis


días, y con lo que éste exponga o en su rebeldía, se recibirá la causa a
prueba;

2ª El término para contestar la demanda será de ocho días, que se


aumentará de conformidad a la tabla de emplazamiento. Este aumento no
podrá exceder de veinte días, y no regirá para estos juicios la disposición del
inciso 2º del artículo 258.

En el caso del artículo 308, el plazo para contestar la demanda será de seis
días;

3ª Se citará a la audiencia de conciliación para un día no anterior al tercero


ni posterior al décimo contado desde la fecha de notificación de la
resolución;217

4ª El término de prueba será de quince días y podrá aumentarse,


extraordinariamente, de conformidad a lo dispuesto en el número anterior;

5ª El término a que se refiere el artículo 430 será de seis días;

6ª La sentencia se dictará dentro de los quince días siguientes al de la


última notificación de la resolución que cita a las partes para oírla; y218

7ª Deducida apelación contra resoluciones que no se refieran a la


competencia o a la inhabilidad del tribunal, ni recaigan en incidentes sobre
algún vicio que anule el proceso, el juez tendrá por interpuesto el recurso para
después de la sentencia que ponga término al juicio. El apelante deberá
reproducirlo dentro de los cinco días subsiguientes al de la notificación de la
sentencia y en virtud de esta reiteración, lo concederá el tribunal.

En los casos de excepción a que se refiere el inciso anterior de este


número, como también en los incidentes sobre medidas prejudiciales o
precautorias, el recurso se concederá al tiempo de su interposición.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 162, 254 y siguientes, 262, 432, 433,
795 Nº 7, 800 Nº 3. Código Orgánico de Tribunales: artículos 115 y siguientes.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Incidente de abandono del procedimiento. Procedencia de la citación


a oír sentencia en el procedimiento ordinario de menor cuantía.
Improcedencia de declarar el abandono del procedimiento cuando el
impulso procesal está radicado en el tribunal. Impulso procesal
radicado exclusivamente en el tribunal una vez vencido el término
probatorio. Obligación del tribunal de citar a las partes a oír sentencia
una vez vencido el plazo para formular observaciones a la prueba

Conforme al artículo 432 del Código de Procedimiento Civil, una vez


vencido el término de prueba del juicio ordinario, corre el lapso de diez
días para que las partes puedan hacer las observaciones que el examen
de aquélla les sugiera, luego del cual, se hayan o no presentado escritos
y existan o no diligencias pendientes, el tribunal citará para oír
sentencia, precepto el último con un claro tenor imperativo. En virtud de
la reforma introducida por Ley Nº 18.882 al referido artículo 432, la
iniciativa del trámite de citación para oír sentencia en el juicio ordinario
es de predominio del juez de la causa. Esta norma resulta aplicable al
juicio ordinario de menor cuantía; efectivamente, el artículo 698 del
Código precitado no suprime su aplicación, dado que no lo incluye
dentro de las modificaciones que efectúa respecto del juicio ordinario de
mayor cuantía y, al contrario, el artículo 698 Nº 5, al reducir a seis días
el trámite de observaciones a la prueba previsto en el artículo 430, sin
duda hace aplicable por remisión el artículo 432, pues esta norma
dispone que "Vencido el plazo a que se refiere el artículo 430, se hayan
o no presentado escritos y existan o no diligencias pendientes, el
tribunal citará para oír sentencia". En definitiva, en el procedimiento
ordinario de menor cuantía el tribunal también se encuentra obligado a
citar a las partes a oír sentencia, una vez vencido el plazo de
observaciones a la prueba, inclusive el legislador lo obliga a dictar la
sentencia definitiva dentro de un plazo menor al previsto en el juicio
ordinario de mayor cuantía, por lo que es posible concluir que el impulso
o carga del juzgador de instar por la prosecución del juicio en esa etapa
del procedimiento ha sido expresamente reforzada por la ley en el juicio
ordinario de menor cuantía (considerandos 7º y 8º de la sentencia de
casación). En consecuencia, con posterioridad al vencimiento del
probatorio los litigantes se encontraban eximidos de la carga de dar
impulso al proceso, precisamente, por regir lo dispuesto en el
artículo 432, debiendo el tribunal, de propia iniciativa, contabilizar los
plazos legales del término probatorio y de la etapa de observaciones a
la prueba, sin necesidad de petición de parte o de alguna otra actuación,
con la finalidad de citar a oír sentencia vencido el plazo a que se refiere
el artículo 430 del Código precitado. Al respecto, cabe destacar que la
jurisprudencia del Máximo Tribunal ha sostenido reiteradamente que no
es procedente el abandono del procedimiento en estadios procesales
en que el impulso y la promoción de la actividad de la causa se
encuentran radicados en el tribunal (considerando 9º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 26/09/2016, Rol Nº 16623-2016,

Cita online: CL/JUR/6685/2016

2. Para definir el procedimiento aplicable a una cuestión civil deberá


estarse a la cuantía del mismo

Que para definir el procedimiento aplicable a un conflicto civil de


relevancia jurídica que no tenga asignada una tramitación especial,
deberá estarse a la cuantía del mismo, es decir, a la apreciación
pecuniaria del objeto sobre el que verse el juicio y así, de conformidad
a lo dispuesto en los artículos 698 y 703 del Código de Procedimiento
Civil, si el asunto que se lleva a juicio excede a quinientas unidades
tributarias mensuales, será aplicable el juicio ordinario de mayor
cuantía, si no pasa de quinientas unidades tributarias mensuales y es
superior a diez, se regirá por las normas del juicio ordinario de menor
cuantía y, por último, si no pasa de diez de esas unidades tributarias,
seguirá los trámites del juicio de mínima cuantía (considerando 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 25/01/2011, Rol Nº 6939-2009, Cita online:
CL/JUR/942/2011

3. Correspondía tramitar conforme al juicio ordinario de mayor cuantía,


por lo que al haberse aplicado el procedimiento de menor cuantía, se
incurrió en un vicio que invalida todo lo actuado

Que, en consecuencia, a la época en que se dedujo la demanda de


autos, antes de la vigencia de la Ley Nº 19.594, que modificó las
cuantías señaladas por el artículo 698 del Código de Procedimiento
Civil, el asunto era de un valor monetario, que correspondía tramitar
conforme al juicio ordinario de mayor cuantía, por lo que al haberse
aplicado el procedimiento de menor cuantía se incurrió en un vicio que
invalida todo lo actuado, por cuanto se privó a las partes de un
procedimiento que les otorgaba mayores garantías y derechos
procesales (considerando 9º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/04/2004, Rol Nº 1298-2003, Cita online:


CL/JUR/3267/2004

ARTÍCULO 699

La apelación de la sentencia definitiva se tramitará como en los incidentes


y se verá conjuntamente con las apelaciones que se hayan concedido en
conformidad al inciso 1º del número 5º del artículo anterior.

Los alegatos no podrán exceder de quince minutos, salvo que el tribunal


acuerde prorrogar este tiempo hasta el doble.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. En el recurso se denuncia la infracción de lo dispuesto en los


artículos 699 y 723 del Código de Procedimiento Civil

Se argumenta que la primera de estas normas hace expresa mención


a la apelación e incluso a la vista de la causa en segunda instancia, en
tanto que el artículo 723 dice relación con el juicio de mínima cuantía,
que no corresponde al caso de autos. Según quien recurre, el error con
respecto a las normas antedichas trae por consecuencia que se ha
omitido la aplicación del cuerpo legal que rige las materias discutidas en
la especie, esto es, la Convención de Varsovia y sus posteriores
modificaciones, suscritas por Chile, vigentes, ratificadas e incorporadas
a la legislación interna (considerando 1º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 25/01/2011, Rol Nº 6939-2009, Cita online:


CL/JUR/942/2011

2. La apelación de la sentencia definitiva se tramitará como en los


incidentes

Que del mérito de los antecedentes aparece que la apelación incide


en la sentencia recaída en un juicio ordinario de menor cuantía que se
rige por las normas de los artículos 698 y siguientes del Código antes
citado y que si bien el artículo 699 del mismo estatuto jurídico señala
que la apelación de la sentencia definitiva se tramitará como en los
incidentes, ello no significa de modo alguno que el plazo para alzarse
en contra del fallo se reduzca a cinco días, toda vez que no existe norma
expresa que así lo señale y debe aplicarse la norma del artículo 189 del
mismo Código (considerando 2º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 9/04/2001, Rol Nº 204-2001,

Cita online: CL/JUR/1179/2001

ARTÍCULO 700

Derogado.219

ARTÍCULO 701

El tribunal destinará, por lo menos, un día de cada semana a la vista


preferente de estas causas.

Concordancias: Código Orgánico de Tribunales: artículo 319.

ARTÍCULO 702
La sentencia deberá dictarse dentro del plazo de quince días, contado
desde el término de la vista de la causa.

§ 2. De los juicios de mínima cuantía

ARTÍCULO 703

Se aplicará el procedimiento de que trata este párrafo a los juicios cuya


cuantía no exceda de diez unidades tributarias mensuales, y que por su
naturaleza no tengan señalado en la ley un procedimiento especial.220

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 3º, 253 y 698. Código Orgánico de
Tribunales: artículo 45 Nº 1.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Para definir el procedimiento aplicable a una cuestión civil deberá


estarse a la cuantía del mismo

Que para definir el procedimiento aplicable a un conflicto civil de


relevancia jurídica que no tenga asignada una tramitación especial,
deberá estarse a la cuantía del mismo, es decir, a la apreciación
pecuniaria del objeto sobre el que verse el juicio y así (...), si el asunto
que se lleva a juicio excede a quinientas unidades tributarias
mensuales, será aplicable el juicio ordinario de mayor cuantía, si no
pasa de quinientas unidades tributarias mensuales y es superior a diez,
se regirá por las normas del juicio ordinario de menor cuantía y, por
último, si no pasa de diez de esas unidades tributarias, seguirá los
trámites del juicio de mínima cuantía (considerando 4º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/01/2011, Rol Nº 6939-2009, Cita online:


CL/JUR/942/2011

ARTÍCULO 704
El procedimiento será verbal, pero las partes podrán presentar minutas
escritas en que se establezcan los hechos invocados y las peticiones que se
formulen.

La demanda se interpondrá verbalmente o por escrito. En el primer caso se


dejará constancia, en un acta que servirá de cabeza al proceso, del nombre,
profesión u oficio y domicilio del demandante, de los hechos que éste
exponga y de sus circunstancias esenciales, de los documentos que
acompañe y de las peticiones que formule.

El acta terminará con una resolución en que se cite a las partes para que
comparezcan personalmente, o representadas por mandatarios con facultad
especial para transigir, en el día y hora que se designe. El tribunal fijará para
esta audiencia un día determinado que no podrá ser anterior al tercer día hábil
desde la fecha de la resolución y cuidará de que medie un tiempo prudencial
entre la notificación del demandado y la celebración de la audiencia.

Inmediatamente deberá entregarse al demandante copia autorizada del


acta y de su proveído, con lo cual se entenderá notificado de las resoluciones
que contenga.

ARTÍCULO 705

La demanda y la primera resolución de cualquiera gestión anterior a ésta


se notificarán personalmente al demandado por medio de un receptor, si lo
hay, y no habiéndolo o si está inhabilitado, por medio de un vecino de la
confianza del tribunal, que sea mayor de edad y sepa leer y escribir, o por un
miembro del Cuerpo de Carabineros. Deberá entregarse copia íntegra del
acta y del proveído a que se refiere el artículo anterior.

Las mismas personas podrán practicar la notificación establecida en el


artículo 44 cuando ella sea procedente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 40 y 44. Código Orgánico de


Tribunales: artículos 390 y 393.

ARTÍCULO 706

La sentencia definitiva, la resolución que reciba la causa a prueba y las


resoluciones que ordenen la comparecencia personal de las partes se
notificarán por cédula, en conformidad al artículo 48, por alguna de las
personas indicadas en el artículo anterior.

Para estos efectos, el demandante al tiempo de su presentación y el


demandado en su primera comparecencia, deberán designar su domicilio en
la forma indicada en el inciso 2º del artículo 49.

Se hará saber al demandante cuando presente su demanda y al


demandado al tiempo de notificarlo, la disposición precedente. Se pondrá
testimonio de esta diligencia en los autos.

La misma regla se observará con respecto a los mandatarios que


constituyan las partes. El domicilio deberá designarse al tiempo de
presentarse o constituirse el poder.

Si la demanda ha sido notificada personalmente al demandado, y éste no


designa domicilio, se tendrá por tal el que se haya señalado en la demanda y
si aquélla ha sido notificada en la forma prevista en el artículo 44, se
considerará como domicilio la morada en que se haya practicado dicha
notificación. Lo dispuesto en este inciso tendrá lugar siempre que el domicilio
en donde se practicó la notificación esté dentro de la jurisdicción del tribunal
correspondiente; en caso contrario, regirá lo dispuesto en el
artículo siguiente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 44, 48 y 49.

ARTÍCULO 707

Las demás resoluciones se notificarán en la forma dispuesta en el


artículo 50, aunque las partes no hayan fijado domicilio al cual deban
dirigírseles las cartas a que se refiere el inciso 2º del artículo 46; pero dichas
resoluciones deberán notificarse por carta certificada en el domicilio a que se
refiere el artículo anterior cuando el juicio se tramite ante jueces inferiores. En
este último caso, a falta de ese domicilio, se entenderán notificadas desde
que se extiendan en el proceso las respectivas resoluciones.

La carta certificada deberá contener exclusivamente el aviso de haberse


dictado resolución en la causa.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 46 y 50.


ARTÍCULO 708

Para practicar notificaciones en estos juicios serán hábiles las horas


comprendidas entre las seis y las veinte horas de todos los días del año.

ARTÍCULO 709

El plazo para que se declare abandonado el procedimiento en estos juicios,


será de tres meses.221

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 152 y siguientes.

ARTÍCULO 710

La audiencia de contestación se celebrará con la parte que asista. En caso


de inconcurrencia del demandado, podrá el tribunal suspender la audiencia
si estima que la demanda no le ha sido notificada mediando el tiempo
prudencial a que se refiere el artículo 704; o si habiéndosele notificado en la
forma prevista en el artículo 44 haya motivo para creer que la copia
correspondiente no ha llegado con oportunidad a su poder. En tales casos
deberá dictarse una resolución fundada en la cual se señalará nuevo día y
hora para la celebración de la audiencia.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 44 y 704.

ARTÍCULO 711

En la audiencia de contestación el demandado deberá oponer las


excepciones dilatorias y perentorias que pueda hacer valer en contra de la
demanda.

El tribunal después de oír al demandado llamará a las partes a avenimiento


y producido éste, se consignará en un acta.

En la misma audiencia el tribunal entregará a cada parte copia íntegra


autorizada de la referida acta.

El avenimiento pondrá fin al juicio y tendrá la autoridad de cosa juzgada.


Si no se produce avenimiento, el tribunal se limitará a dejar constancia de
este hecho.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 187, 188, 303, 307 y 690.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Si el avenimiento fue aceptado por el tribunal, sus efectos no son


suficientes para efectuar una transferencia de acciones de sociedad
anónima entre vivos

Que, por otra parte, es conveniente recordar que el avenimiento fue


aceptado por el tribunal en todo aquello que no fuere contrario a derecho
y es evidente que un acto jurídico procesal de partes efectuado en esta
sede como es el avenimiento, no es suficiente para cumplir con la forma
en que debe constar una transferencia de acciones por acto entre vivos
al tenor de lo previsto claramente por el art. 16 de la Ley Nº 18.046,
sobre Sociedades Anónimas (considerando 7º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 11/07/2006, Rol Nº 4159-2004,

Cita online: CL/JUR/5650/2006

ARTÍCULO 712

Todas las excepciones se tramitarán conjuntamente y se fallarán en la


sentencia definitiva, pero el tribunal podrá acoger, desde luego, o tramitar
separadamente en conformidad al artículo 723, las dilatorias de
incompetencia, de falta de capacidad o de personería del demandante, o
aquella en que se reclame del procedimiento siempre que aparezcan
manifiestamente admisibles.222

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 162, 254 y siguientes, 262, 432, 433,
795 Nº 7, 800 Nº 3.

ARTÍCULO 713

El demandado podrá también deducir reconvención en la audiencia de


contestación cuando el tribunal sea competente para conocer de ella y
siempre que no esté sometida a un procedimiento especial y tenga por objeto
enervar la acción deducida o esté íntimamente ligada con ella. En caso
contrario no se admitirá a tramitación.

Es aplicable a la reconvención lo dispuesto en el artículo anterior. La


reconvención se tramitará conjuntamente con la demanda.

ARTÍCULO 714

La práctica de toda diligencia probatoria deberá solicitarse en la audiencia


de contestación so pena de no ser admitida después, sin perjuicio de que el
tribunal pueda de oficio, para mejor resolver, en cualquier estado de la causa,
decretar todas las diligencias y actuaciones conducentes a la comprobación
de los hechos discutidos, debiendo emplear para ello el mayor celo posible.

Los instrumentos sólo podrán presentarse conjuntamente con la demanda


o en las audiencias de contestación o de prueba y las partes deberán formular
las observaciones y las impugnaciones que procedan en la audiencia en que
se acompañen o en la inmediatamente siguiente. Los incidentes a que den
lugar las observaciones e impugnaciones deberán tramitarse y probarse al
mismo tiempo que la cuestión principal. Los que se formulen en la audiencia
de prueba se deberán probar en esa misma audiencia, salvo que el tribunal
por motivos fundados fije una nueva audiencia para ello.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 255.

ARTÍCULO 715

Contestada la demanda o en rebeldía del demandado, el juez resolverá si


debe o no recibirse la causa a prueba. En caso afirmativo fijará los puntos
sobre los cuales debe recaer y señalará una audiencia próxima para recibirla.
En caso contrario, citará a las partes para oír sentencia, la que deberá dictar
a más tardar en el plazo de los ocho días subsiguientes. La resolución que
reciba la causa a prueba es inapelable.223

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 162, 187, 313, 318, 319, 795 Nº 7,
800 Nº 3.

ARTÍCULO 716
Si las partes desean rendir prueba testimonial, deberán, en la audiencia de
contestación o dentro de los tres días siguientes a la notificación de la
resolución que reciba la causa a prueba, hacer anotar en el proceso el
nombre, profesión u oficio y domicilio de los testigos que ofrezcan presentar
y si los testigos deben o no ser citados por el tribunal. En la audiencia indicada
el juez hará saber a las partes estas circunstancias.

Sólo podrán declarar cuatro testigos por cada parte sobre cada uno de los
puntos de prueba que fije el juez.

ARTÍCULO 717

La declaración de testigos se prestará bajo juramento, en presencia de las


partes que asistan, quienes podrán dirigir preguntas al deponente por
conducto del juez.

Antes de la declaración de cada testigo, la parte contra quien deponga


podrá deducir las tachas de los artículos 357 y 358, que a su juicio le
inhabiliten para declarar. El juez, si lo estima necesario, proveerá lo
conducente al establecimiento de las inhabilidades invocadas, las que
apreciará en conciencia en la sentencia definitiva.

Las inhabilidades que se hagan valer en contra de los testigos no obstan a


su examen; pero el tribunal podrá desechar de oficio a los que, según su
criterio, aparezcan notoriamente inhábiles.

ARTÍCULO 718

La confesión judicial de las partes podrá pedirse por una sola vez en el
juicio y deberá solicitarse en la audiencia de contestación. También podrá
pedirse, en la audiencia de prueba, siempre que se encuentre presente la
persona que deba declarar.

Lo dicho en el inciso anterior es sin perjuicio de lo dispuesto en el inciso 1º


del artículo 714.

Decretada la confesión, el juez la tomará de inmediato si está presente la


parte que deba prestarla. En caso contrario, procederá a tomarla en la
audiencia de prueba o en otra que señale para este solo efecto.
Si el absolvente se niega a declarar o da respuestas evasivas, el juez podrá
dar por confesados los hechos materia de la respectiva pregunta. Si el
absolvente no concurre el día y hora fijados y siempre que al pedir la diligencia
la parte haya acompañado pliego de posiciones, se darán éstas por absueltas
en rebeldía, sin necesidad de nueva citación, teniéndose al absolvente por
confeso de todos aquellos hechos que estén categóricamente afirmados en
dicho pliego, y que a juicio del tribunal sean verosímiles.

La comparecencia se verificará ante el tribunal de la causa si la parte se


encuentra en el lugar del juicio; en caso contrario, ante el juez competente
del lugar en que resida, pero no se podrá ejercitar este derecho si existe en
el juicio mandatario con facultad de absolver posiciones a menos que el
tribunal estime absolutamente necesaria la diligencia para el fallo.

ARTÍCULO 719

Cuando hayan de practicarse diligencias probatorias fuera de la sala de


despacho, podrá el tribunal proceder por sí solo o con notificación de las
partes, según lo estime conveniente.

ARTÍCULO 720

Siempre que el tribunal decrete informe de peritos, designará


preferentemente para el cargo al empleado público, municipal o de institución
semifiscal que estime competente, quien estará obligado a desempeñarlo
gratuitamente.

Los informes periciales se presentarán por escrito, pero el juez podrá pedir
informes verbales que se consignarán en los autos con las firmas de quienes
los emitan. De ellos deberá darse cuenta en la audiencia de prueba siempre
que sea posible.

ARTÍCULO 721

De todo lo obrado en la primera audiencia y en las demás que se celebren,


se levantará acta firmada por el juez, las partes asistentes, los testigos que
hayan declarado y el secretario, si lo hay, o en defecto de éste, un ministro
de fe o una persona que, en calidad de actuario, nombre el tribunal.
Si alguno de los comparecientes no sabe o no puede firmar, estampará su
impresión digital, y si se niega a firmar, se dejará constancia de ello.

Las resoluciones se extenderán en el mismo expediente.

ARTÍCULO 722

Sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 715, el tribunal citará a las partes


para oír sentencia y la dictará dentro de los sesenta días contados desde la
celebración de la audiencia de contestación, salvo que lo impidan
circunstancias insuperables, de las cuales dejará constancia en la sentencia
y de ello dará cuenta oportunamente en los estados mensuales a que se
refiere el artículo 586 Nº 4 del Código Orgánico de Tribunales.224

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 162, 432, 433 y 715.

ARTÍCULO 723

Los incidentes deberán formularse y tramitarse en las audiencias de


contestación y prueba y su fallo se reservará para la sentencia definitiva, la
que será inapelable.

Podrá el tribunal, atendida la naturaleza del incidente, tramitarlo


separadamente, con audiencia verbal de la parte contraria, y decretar las
diligencias adecuadas a su acertada resolución.

De igual modo, podrán tramitarse los incidentes especiales de que tratan


los artículos 79, 80 y 81; los Títulos X, XI, XII, XIII, XIV, XV y XVI del Libro
Primero y los Títulos IV y V del Libro Segundo.

Las resoluciones que se dicten en todo procedimiento incidental, cualquiera


sea su naturaleza, serán inapelables.225

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 186, 187, 711, 712.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Se declara inadmisible recurso de apelación cuya admisibilidad venía


cursada
Tal errónea aplicación de la ley ha tenido influencia substancial en lo
dispositivo de la resolución impugnada, pues se declaró inadmisible un
recurso de apelación, cuya admisibilidad ya venía cursada y que no
cabía contrarrestar considerando que el arbitrio era improcedente, sin
respaldo de la normativa correspondiente que sí lo prevé, por lo que
corresponde hacer lugar a la nulidad sustantiva interpuesta
(considerando 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/01/2011, Rol Nº 6939-2009, Cita online:


CL/JUR/942/2011

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 15/06/2011, Rol Nº 6233-2009,

Cita online: CL/JUR/10431/2011

ARTÍCULO 724

La prueba se apreciará en la forma ordinaria. Pero podrá el tribunal, en


casos calificados, estimarla conforme a conciencia, y según la impresión que
le haya merecido la conducta de las partes durante el juicio y la buena o mala
fe con que hayan litigado en él.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Uno de los elementos de la sana crítica es el análisis de la conducta


de las partes durante el juicio

Que uno de los elementos de la sana crítica, con arreglo a los cuales
debe emitirse el juzgamiento, es el principio de derecho del artículo 724
del Código de Procedimiento Civil, estimado como de general
aplicación, en cuanto incorpora al proceso, que lleva a formar la
convicción de los falladores, el análisis de la conducta de las partes
durante el juicio y de la buena o mala fe con que hayan litigado
(considerando 10º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 28/08/2003, Rol no se


consigna,
Cita online: CL/JUR/5230/2003

ARTÍCULO 725

La sentencia definitiva deberá expresar:

1º La individualización de los litigantes;

2º La enunciación brevísima de las peticiones del demandante y de las


defensas del demandado y de sus fundamentos respectivos;

3º Un análisis somero de la prueba producida;

4º Las razones de hecho y de derecho, que sirven de fundamento al fallo;


y

5º La decisión del asunto.

Si en la sentencia se da lugar a una excepción dilatoria, se abstendrá el


tribunal de pronunciarse sobre la cuestión principal.

Deberá dejarse copia íntegra de la sentencia definitiva y de todo


avenimiento o transacción que ponga término al juicio en el libro de
sentencias que se llevará con este objeto.

ARTÍCULO 726

La regulación de las costas, cuando haya lugar a ellas, se hará en la


sentencia misma.

ARTÍCULO 727

Derogado.226

ARTÍCULO 728

Derogado.227
ARTÍCULO 729

Si la acción es ejecutiva y legalmente procedente, el acta a que se refiere


el artículo 704, terminará con la orden de despachar mandamiento de
ejecución en contra del deudor. El mandamiento dispondrá el embargo de
bienes suficientes y designará un depositario que podrá ser el mismo deudor.
El depositario nombrado tendrá carácter de definitivo.

Si la acción deducida no procede como ejecutiva, el tribunal lo declarará


así y dará curso a la demanda en conformidad al procedimiento ordinario de
mínima cuantía.

ARTÍCULO 730

El requerimiento de pago se efectuará en la forma prescrita en el


artículo 705. En el caso del inciso 2º, el encargado de la notificación deberá
indicar, en la copia respectiva, el lugar, día y hora que designe para la traba
de embargo, a la que procederá sin otro trámite. De la diligencia se levantará
acta individualizando suficientemente los bienes embargados y el lugar en
que se encuentran. Si el deudor no está presente, quien practique la diligencia
dejará copia del acta en el domicilio de aquél.

ARTÍCULO 731

La misma persona que practique el requerimiento, podrá efectuar el


embargo, en su caso.

Si el depositario es el deudor, aunque no esté presente, se entenderá que


ha quedado en posesión de la cosa embargada al trabarse el embargo. El
encargado de la diligencia indicará en el acta el lugar en que ordinariamente
deberá mantenerse aquélla.

ARTÍCULO 732

El deudor depositario incurrirá en las penas contempladas en el


artículo 471 del Código Penal cuando con perjuicio del acreedor falte a sus
obligaciones de depositario, desobedezca o entorpezca las resoluciones
judiciales para la inspección de los bienes embargados, o abandone,
destruya o enajene dichos bienes.
Se presumirá que el deudor depositario ha faltado a sus obligaciones con
perjuicio del acreedor cuando, sin permiso escrito de éste o autorización del
juez, cambie la cosa embargada del lugar a que se refiere el artículo anterior.

ARTÍCULO 733

El ejecutado tendrá el plazo fatal de cuatro días más el término de


emplazamiento a que se refiere el artículo 259, contados desde el
requerimiento, para oponerse a la demanda.

La oposición sólo podrá fundarse en algunas de las excepciones indicadas


en los artículos 464 y 534.

El tribunal citará, en este caso, a las partes a una audiencia próxima y se


procederá como se dispone en el artículo 710 y siguientes, hasta dictar
sentencia, mandando llevar adelante la ejecución o absolviendo al
demandado.

La citación se notificará al ejecutado en el acto mismo de formular su


oposición y al ejecutante en la forma prescrita en el artículo 706.

Si las excepciones opuestas no son legales, se procederá como lo dispone


el artículo 472.

ARTÍCULO 734

Los bienes embargados serán tasados por el juez, quien podrá, si lo estima
necesario, oír peritos designados en conformidad al artículo 720.

ARTÍCULO 735

Establecido el valor de los bienes embargados, el juez ordenará que se


rematen, previa citación de las partes.

Si se trata de bienes raíces o de derechos reales constituidos en ellos,


deberán, además, publicarse tres avisos en un diario de la comuna en que se
encuentre situado el inmueble o, si allí no lo hubiere, en uno de la capital de
la provincia o de la capital de la respectiva región.228
Los remates se efectuarán solamente en los días 1 y 15 de cada mes, o en
el día siguiente hábil si alguna de esas fechas corresponde a día inhábil.

Las posturas empezarán por los dos tercios de la tasación.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 485, 486, 487 y 489.

ARTÍCULO 736

Cuando se enajenen bienes raíces, el acta de remate se extenderá en el


libro copiador de sentencias y será subscrita por el juez y el secretario, si lo
hay, y en su defecto por una persona que en calidad de actuario nombre el
tribunal.

La escritura definitiva se otorgará en el registro de un notario y será


subscrita por el juez ante quien se haya hecho el remate y por el subastador,
o en defecto de aquél, por la persona a quien él comisione con tal objeto en
el acta de remate.

ARTÍCULO 737

Regirán también en el juicio de mínima cuantía las disposiciones del


Título XIX del Libro I; pero las peticiones de las partes, las notificaciones y el
procedimiento de apremio deberán ajustarse a las reglas de este Título. La
oposición del demandado cuando sea procedente en conformidad al
artículo 234, se proveerá citando a las partes a una audiencia próxima para
que concurran a ella con todos sus medios de prueba.

ARTÍCULO 738

En los casos no previstos por los artículos precedentes, serán aplicables


las reglas del juicio ejecutivo de mayor cuantía si la cuestión deducida es
también ejecutiva.

TÍTULO XV DEL JUICIO SOBRE ARREGLO DE LA AVERÍA


COMÚN229
ARTÍCULO 739

Derogado.

ARTÍCULO 740

Derogado.

ARTÍCULO 741

Derogado.

ARTÍCULO 742

Derogado.

ARTÍCULO 743

Derogado.

ARTÍCULO 744

Derogado.

ARTÍCULO 745

Derogado.

ARTÍCULO 746

Derogado.

ARTÍCULO 747

Derogado.
TÍTULO XVI DE LOS JUICIOS DE HACIENDA

ARTÍCULO 748 (922)

Los juicios en que tenga interés el Fisco y cuyo conocimiento corresponda


a los tribunales ordinarios, se substanciarán siempre por escrito, con arreglo
a los trámites establecidos para los juicios del fuero ordinario de mayor
cuantía, salvo las modificaciones que en los siguientes artículos se
expresan.230

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículo s 253 y siguientes, 434 y siguientes,
549 y siguientes, 565 y siguientes, 588 y siguientes, 628 y siguientes, 680 y siguientes, 693 y
siguientes, 758 y siguientes. Código Orgánico de Tribunales: art ículo 48.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Juicio de hacienda. Fisco puede ser demandado en juicio ejecutivo y


oponer en él las excepciones que estime pertinentes para hacer valer
sus derechos

El Título XVI del Libro Tercero del Código de Procedimiento Civil,


regula el juicio de hacienda, estableciendo el art ículo 748 del mismo
cuerpo legal que "los juicios en que tenga interés el Fisco y cuyo
conocimiento corresponda a los tribunales ordinarios, se substanciarán
siempre por escrito, con arreglo a los trámites establecidos para los
juicios del fuero ordinario de mayor cuantía, salva las modificaciones
que en los siguientes artículos se expresan", entre las que se encuentra,
el que se omitirán en el juicio ordinario, los escritos de réplica y dúplica.
Conforme a lo anterior, es posible sostener que el Fisco, puede ser
demandado en juicio ejecutivo, y este podrá oponer en él las
excepciones que estime oportuno para hacer valer sus derechos
(considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones, 20/08/2019, Rol Nº 14852-2018,

Cita online: CL/JUR/5846/2019

2. Responsabilidad del Estado. Sustanciación de los juicios en que tiene


interés el Fisco conforme a las reglas del juicio de hacienda.
Tramitación del procedimiento conforme a las reglas generales con
los trámites establecidos para los juicios del fuero ordinario de mayor
cuantía. Remisión a los trámites establecidos para los juicios del fuero
ordinario de mayor cuantía no significa que los procedimientos en los
que es parte el Fisco deben sustanciarse conforme a las reglas del
juicio ordinario de mayor cuantía. Procedencia de tramitar la causa
conforme a las reglas del procedimiento sumario con las
modificaciones que al efecto introduce el juicio de Hacienda

El artículo 748 del Código de Procedimiento Civil es categórico al


señalar, en lo pertinente, que "En los juicios en que tenga interés el
Fisco y cuyo conocimiento corresponda a los tribunales ordinarios, se
substanciarán siempre por escrito, con arreglo a los trámites
establecidos para los juicios del fuero ordinario de mayor cuantía", esto
es, el juicio de hacienda. En el caso de autos, si bien la Ley de
Tránsito remite el conocimiento del asunto a los tribunales ordinarios de
acuerdo a las reglas del juicio sumario, lo cierto es que por tener el Fisco
indudable interés en él, debe substanciarse siempre conforme a las
reglas del juicio de hacienda. Que el procedimiento aplicable sea el
establecido para el juicio de hacienda no importa que, necesariamente,
su tramitación lo sea conforme al procedimiento ordinario, sino, por el
contrario, que éste se tramitará conforme a las reglas generales, pero
con los trámites establecidos para los juicios del "fuero ordinario de
mayor cuantía" (considerandos 4º a 6º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones). En efecto, el real sentido que debe darse ala remisión del
artículo 748 del Código de Procedimiento Civil, ha sido fijado por la
jurisprudencia de la Corte Suprema, que ha señalado "Que, conforme
lo antes expuesto, resulta claro que la remisión que, al regular el juicio
de hacienda, el artículo 748 del Código de Procedimiento Civil hace a
los trámites establecidos para los juicios del fuero ordinario de mayor
cuantía, no implica, en caso alguno, que los procedimientos en los que
es parte el Estado deban sustanciarse siempre conforme las reglas del
juicio ordinario de mayor cuantía, sino más bien que se tramitarán
conforme las reglas generales (...). Según algunos, los juicios de
hacienda sólo deben substanciarse en conformidad a lo preceptuado
para los juicios ordinarios de mayor cuantía. Según otros —y están en
lo cierto—, la ley dispone que los juicios de hacienda se substancian
con arreglo a los trámites establecidos para los juicios "del fuero
ordinario" de mayor cuantía, o sea, en conformidad a las reglas
generales" (considerando 7º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Concepción, 16/09/2016, Rol Nº 871-2016,

Cita online: CL/JUR/7427/2016

3. Aun cuando pueda ser materia de discusión si el interés fiscal


proviene o no de la circunstancia de tratarse de una obra fiscal, el
hecho de haberse dirigido la demanda en contra de la Empresa de
Ferrocarriles del Estado es razón suficiente para así considerarlo

Que, en consecuencia, el Tribunal de Casación, de constatar la


existencia de la infracción de ley, debe establecer, antes de anular la
sentencia, si al dictar fallo de reemplazo efectivamente concluiría de
modo distinto al que lo hicieron los magistrados de la instancia. (...), el
Fisco adjudicó el contrato de concesión para la ejecución, conservación
y explotación de la obra pública fiscal (...), dentro de las obras se
comprenden la ejecución de las obras relativas a la variante de la línea
férrea sobre los terrenos que el Fisco señala fueron expropiados en el
año 1971 y que el denunciante señala, que en la franja que indica en su
demanda, son de su propiedad. Luego, de lo reseñado aparece
claramente la existencia de un interés fiscal comprometido, que hace
aplicable el artículo 748 del Código de Procedimiento Civil en relación
con el artículo 48 del Código Orgánico de Tribunales (considerando 7º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 16/12/2008, Rol Nº 6425-2007, Cita online:


CL/JUR/4329/2008

4. La representación ejercida por el Consejo de Defensa del Estado


permite concluir que corresponde a un procedimiento contencioso
administrativo

Que la afirmación anterior, es decir, que la autoridad sanitaria esté


representada por el Consejo de Defensa del Estado, no transforma el
asunto en un juicio de hacienda, sino que como se dijo constituye un
contencioso administrativo que debe ser conocido por el juez
competente de acuerdo al domicilio del reclamado (considerando 6º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 29/08/2008, Rol Nº 1585-2007,

Cita online: CL/JUR/5208/2008


ARTÍCULO 749 (923)

Se omitirán en el juicio ordinario los escritos de réplica y dúplica, siempre


que la cuantía del negocio no pase de quinientas unidades tributarias
mensuales.231

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 253, 311, 312 y 698.

ARTÍCULO 750 (924)

Derogado.232

ARTÍCULO 751 (925)

Toda sentencia definitiva pronunciada en primera instancia en juicios de


hacienda y de que no se apele, se elevará en consulta a la Corte de
Apelaciones respectiva, previa notificación de las partes, siempre que sea
desfavorable al interés fiscal. Se entenderá que lo es, tanto la que no acoja
totalmente la demanda del Fisco o su reconvención, como la que no deseche
en todas sus partes la demanda deducida contra el Fisco o la reconvención
promovida por el demandado.

Recibidos los autos, el tribunal revisará la sentencia en cuenta para el solo


efecto de ponderar si ésta se encuentra ajustada a derecho. Si no mereciere
reparos de esta índole, la aprobará sin más trámites. De lo contrario, retendrá
el conocimiento del negocio y, en su resolución, deberá señalar los puntos
que le merecen duda, ordenando traer los autos en relación. La vista de la
causa se hará en la misma sala y se limitará estrictamente a los puntos de
derecho indicados en la resolución.233

Las consultas serán distribuidas por el Presidente de la Corte, mediante


sorteo, entre las salas en que ésta esté dividida.234

Concordancias: Código Orgánico de Tribunales: artículo 63 Nº 3. Decreto con Fuerza de Ley


Nº 1, 1993, fija texto Ley Orgánica del Consejo de Defensa del Estado, Ministerio de Hacienda,
D.O. 7.08.1993: artículo 51.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Toda sentencia definitiva dictada en primera instancia en juicios de
hacienda en que no haya apelación se elevará en consulta a la Corte
de Apelaciones respectiva

Que en primer término el recurso de nulidad sustancial denuncia la


infracción del artículo (...), el que prevé que cuando la sentencia es
desfavorable al interés fiscal debe ser elevada en consulta si no es
apelada, yerro que se produce porque se encuentra establecido que el
Fisco de Chile dedujo apelación contra la sentencia de primera
instancia, el que posteriormente fue declarado desierto, de manera que
con arreglo a lo expresamente señalado por la citada disposición, no
correspondía que se conociera por la vía de la consulta
(considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/12/2011, Rol Nº 7623-2009, Cita online:


CL/JUR/10351/2011

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Santiago, 13/06/2011, Rol Nº 6463-2007,

Cita online: CL/JUR/10465/2011

2. La consulta en los juicios de hacienda tiene por objeto cautelar los


intereses fiscales

La consulta en los juicios de hacienda tiene por objeto cautelar los


intereses fiscales y es, por lo tanto, ajena a los derechos que pueda
tener en la causa la parte que litiga con el Fisco. Lo que se persigue con
el trámite procesal de la consulta es que determinadas resoluciones
judiciales de primera instancia sean revisadas por el tribunal superior
cuando no lo han sido por la vía de la apelación, a fin de que este
tribunal, en ejercicio de las facultades de tutela que le corresponden en
relación a los intereses públicos o fiscales que se encuentran
comprometidos en el pleito, revise la legalidad del fallo que es materia
de la consulta (considerando 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 14/10/2008, Rol Nº 6562-2006, Cita online:


CL/JUR/6866/2008
ARTÍCULO 752

Toda sentencia que condene al Fisco a cualquiera prestación, deberá


cumplirse dentro de los sesenta días siguientes a la fecha de recepción del
oficio a que se refiere el inciso segundo, mediante decreto expedido a través
del Ministerio respectivo.

Ejecutoriada la sentencia, el tribunal remitirá oficio al ministerio que


corresponda, adjuntando fotocopia o copia autorizada de la sentencia de
primera y de segunda instancia, con certificado de estar ejecutoriada.

Se certificará en el proceso el hecho de haberse remitido el oficio y se


agregará al expediente fotocopia o copia autorizada del mismo. La fecha de
recepción de éste se acreditará mediante certificado del ministro de fe que lo
hubiese entregado en la Oficina de Partes del Ministerio o, si hubiese sido
enviado por carta certificada, transcurridos tres días desde su recepción por
el correo.

En caso que la sentencia condene al Fisco a prestaciones de carácter


pecuniario, el decreto de pago deberá disponer que la Tesorería incluya en el
pago el reajuste e intereses que haya determinado la sentencia y que se
devenguen hasta la fecha de pago efectivo. En aquellos casos en que la
sentencia no hubiese dispuesto el pago de reajuste y siempre que la cantidad
ordenada pagar no se solucione dentro de los sesenta días establecidos en
el inciso primero, dicha cantidad se reajustará en conformidad con la variación
que haya experimentado el Índice de Precios al Consumidor entre el mes
anterior a aquel en que quedó ejecutoriada la sentencia y el mes anterior al
del pago efectivo.235

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 174 y 235. Código Orgánico de


Tribunales: artículos 114 y 115. Decreto con Fuerza de Ley Nº 1, 1993, fija texto Ley Orgánica
del Consejo de Defensa del Estado, Min. Hacienda, D.O. 7.08.1993: artículo 59. Decreto con
Fuerza de Ley Nº 1, 1994, fija texto Estatuto Orgánico del Servicio de Tesorerías, Min. Hacienda.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cumplimiento de sentencia laboral. Código del Trabajo no contempla


normas específicas para el cumplimiento de sentencias por parte del
Fisco de Chile. Naturaleza especial del juicio de hacienda. Normas
sobre ejecución de las sentencias en el juicio de hacienda priman
sobre cualquier otra normativa sobre la materia

Del artículo 465 del Código del Trabajo, así como del párrafo en el
cual se encuentra inserto, se desprende que no existen normas
específicas para el cumplimiento de sentencias por parte del Fisco de
Chile, de suerte que hay que analizar la discusión, examinando primero
si hay disposiciones expresas en leyes especiales o si se deben aplicar
las normas generales de cumplimiento contenidas en el Código de
Procedimiento Civil (considerando 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones). Teniendo en cuenta que los juicios de hacienda se
encuentran contemplados en el Título XVI del Libro Tercero del Código
de Procedimiento Civil, es perfectamente posible concluir que tal
normativa es de naturaleza especial, en otras palabras, no forma parte
de las reglas generales del mismo Código para las ejecuciones, de
manera que prima sobre cualquier otra normativa sobre la materia, de
suerte que en el asunto de que se trata el cumplimiento deberá
efectuarse de acuerdo a lo establecido en el artículo 752 del referido
Código (considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Iquique, 2/03/2016, Rol Nº 3-2016,

Cita online: CL/JUR/1999/2016

Fallo en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Iquique, 2/03/2016, Rol Nº 2-2016,

Cita online: CL/JUR/2301/20167

2. Toda sentencia que condene al Fisco a cualquiera prestación deberá


cumplirse dentro de los sesenta días siguientes, mediante decreto
expedido a través del ministerio respectivo

En virtud de lo anterior, la resolución que le condene al pago de las


costas, habrá de sujetarse, en todo, en su cumplimiento, a lo prescrito
por el artículo 752 del Código de Procedimiento Civil (...), como toda
sentencia que condena a dicho Fisco al pago de cualquier prestación,
esto es, que será necesaria la expedición de un decreto que ordene el
pago a la Tesorería General del República, a través del ministerio
respectivo, en la especie el de Justicia (artículo 2º letra m) del D.L.
Nº 3.346, Ley Orgánica del Ministerio de Justicia), para lo cual,
ejecutoriada que sea la respectiva resolución, siempre a petición del
defensor del sentenciado, el tribunal de la causa deberá remitir un oficio
a dicho ministerio, con la fotocopia o copia autorizada de la o las
resoluciones cuyo cumplimiento se persiga y un certificado de
ejecutoriedad (Instructivo Nº 65 del Ministerio Público) (considerando 6º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Copiapó, 15/06/2012, Rol Nº 72-2012,

Cita online: CL/JUR/1126/2012

3. Monto de indemnización a pagar por el Fisco

Que en cuanto a este capítulo de nulidad cabe considerar que el


artículo 173 del Código de Procedimiento Civil no distingue si los
perjuicios a que él se refiere provienen del incumplimiento de una
obligación contractual o son efecto de alguna otra fuente de las
obligaciones, razón por la cual carece de fundamento legal la distinción
que el recurso hace al interpretar la referida disposición, sin que a ello
obste la norma del artículo 752, pues ésta no se opone a que el monto
de la indemnización que el Fisco deba pagar sea previamente
determinado en la forma prescrita en el artículo 173 de ese Código
(considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 13/12/2000, Rol Nº 1341-2000, Cita online:


CL/JUR/4486/2000

TÍTULO XVII236

ARTÍCULO 753 (927)

Derogado.237

ARTÍCULO 754 (928)

Derogado.238

ARTÍCULO 755 (929)

Derogado.239
ARTÍCULO 756 (930)

Derogado.240

ARTÍCULO 757 (931)

Derogado.241

TÍTULO XVIII DE LA ACCIÓN DE DESPOSEIMIENTO CONTRA


TERCEROS POSEEDORES DE LA FINCA HIPOTECADA O
ACENSUADA

ARTÍCULO 758 (932)

Para hacer efectivo el pago de la hipoteca, cuando la finca gravada se


posea por otro que el deudor personal, se notificará previamente al poseedor,
señalándole un plazo de diez días para que pague la deuda o abandone ante
el juzgado la propiedad hipotecada.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 253, 254, 258, 414, 434, 486, 487,
895, 897, 898 y 899. Código Orgánico de Tribunales: artículo 134.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Acción de desposeimiento. Finalidad de la gestión preparatoria de


notificación al tercer poseedor de la finca hipotecada

De los artículos 758 y 759 del Código de Procedimiento Civil se


desprende que para hacer efectivo frente a terceros el derecho real de
hipoteca, el Código de Procedimiento Civil reglamenta un procedimiento
especial que configura la llamada acción de desposeimiento que se
inicia con una gestión preparatoria de notificación al tercer poseedor de
la finca hipotecada. Agotada tal gestión y en el supuesto que el
requerido no efectúe el pago de la deuda o el abandono de la finca
hipotecada dentro del plazo legal, podrá desposeérselo del citado
inmueble para hacer con él pago al acreedor, juicio este último que se
tramitará en el procedimiento que corresponda seguir de acuerdo a la
calidad del título que se invoque. En consecuencia, la gestión
preparatoria a que se refiere el artículo 758 del Código de
Procedimiento Civil se encuentra estatuida para permitir que el tercero
poseedor en contra de quien se ejercita el derecho de persecución de
la finca hipotecada evite el desposeimiento mediante el pago de la
deuda o abandone la propiedad dentro del plazo legal que prevé dicha
norma, justamente porque se trata de un tercero que no asumió una
obligación personal frente al acreedor hipotecario (considerandos 8º y
9º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 18/01/2018, Rol Nº 31717-2017, Cita online:


CL/JUR/241/2018

2. Improcedencia de desestimar tercería de prelación por el hecho de


existir procedimiento de desposeimiento contra tercero poseedor.
Imposibilidad de verificarse la hipótesis de desposeimiento de la
propiedad hipotecada

Además de constituir un contrato del que emanan derechos


personales, la hipoteca también constituye un derecho real del que nace
la acción hipotecaria. Ello implica que el acreedor hipotecario tiene el
derecho a perseguir la realización del inmueble dado en hipoteca para
el pago de sus acreencias, de manos de quien se encuentre, que puede
ser una persona distinta del deudor personal. A ese derecho de
persecución se refiere el artículo 2428 inciso 1º del Código Civil al
establecer que "La hipoteca da al acreedor el derecho de perseguir la
finca hipotecada, sea quien fuere el que la posea, y a cualquier título
que la haya adquirido". Cuando el referido derecho se ejercita respecto
de un inmueble hipotecado que está en posesión de un tercero, la ley
habilita para el ejercicio de la acción de desposeimiento contemplada
en los artículos 758 a 763 del Código de Procedimiento Civil, regulada
en forma particular justamente por tratarse del derecho de persecución
puesto en ejercicio, cuyo titular es el acreedor hipotecario y el sujeto
pasivo es el tercer poseedor de la finca hipotecada, con quien no tiene
vínculo de carácter personal. Sobre este punto, aciertan los jueces del
fondo al considerar que si el acreedor quiere hacer efectivo su derecho
de persecución (derecho real) debe dirigirse en contra de ese poseedor,
no deudor, mediante la gestión regulada en las mencionadas
disposiciones, pero yerran al concluir que la tercería de estos autos "no
es la vía idónea para ejercer los derechos reales y personales que
asistían al demandante de tercería", pues en el espectro procesal de
este asunto resulta imposible que el tercer poseedor pudiese adoptar
alguna de las actitudes a que se refieren los artículos 758 a 760 del
Código de Procedimiento Civil cuando es notificado de la gestión
preparatoria que en ellos se regula. En efecto, la parte recién aludida no
podría abandonar la finca pues el embargo que sobre ella ha recaído la
ha vuelto indisponible y tampoco resulta posible colegir que pagase sin
más la deuda y con ello quedar en situación de subrogarse en los
derechos del acreedor hipotecario para ser reembolsado por el deudor
principal. En consecuencia, no resulta admisible que se desestime la
tercería de prelación deducida por la circunstancia de existir el
procedimiento a que se refieren las normas citadas, de desposeimiento,
habida consideración a que en la especie resultaría imposible que se
verificara la hipótesis de desposeimiento de la propiedad hipotecada del
modo que considera esa normativa (considerando 6º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema, 7/01/2020, Rol Nº 23396-2018, Cita online:


CL/JUR/2173/2020

3. Acción ejecutiva de desposeimiento. Acción ordinaria y acción


ejecutiva de desposeimiento

Conforme al artículo 758 del Código de Procedimiento Civil, para


hacer efectivo el pago de la hipoteca, cuando el inmueble es poseído
por una persona distinta del deudor personal, se notificará previamente
al poseedor, señalándose un plazo de diez días para que pague la
deuda o abandone ante el juzgado la propiedad hipotecada. Luego, el
art ículo 759 del mismo Código establece que, si ese poseedor no paga
o no abandona la finca dentro del plazo indicado, podrá desposeérsele
de la propiedad hipotecada para hacer con ella pago al acreedor,
añadiendo, en su inciso 2º, que tal acción se someterá a las reglas del
juicio ordinario o ejecutivo, según fuere la calidad del título en que se
funde, procediéndose contra el poseedor en los mismos términos en
que podría hacerse contra el deudor personal. En consecuencia, se
tramitará con arreglo a las reglas del juicio ejecutivo cuando el acreedor
puede hacer valer sus derechos en esa misma forma en contra del
deudor principal, es decir, cuando la obligación principal conste en un
título que lleve aparejada ejecución, cuando la obligación sea exigible y
no esté prescrita. Por el contrario, será necesario deducir un juicio
ordinario cuando la acción ejecutiva haya prescrito, cuando entre las
partes se discuta la existencia misma de la obligación principal y no
aparezca ella de un título que lleve aparejada ejecución y cuando se
discuta el monto de la obligación principal o la deuda no sea líquida
(considerando 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 25/05/2016, Rol Nº 609-2016,

Cita online: CL/JUR/4176/2016

4. Acción ejecutiva de desposeimiento. Concepto de tercero poseedor.


Excepciones que puede oponer el tercero poseedor en el juicio
ejecutivo de desposeimiento

La acción de desposeimiento, contenida en los artículos 758 y


siguientes del Código de Procedimiento Civil, surge para hacer efectivo
frente a terceros el derecho real de hipoteca. En el evento que agotada
la gestión preparatoria de notificación y en el supuesto que el tercer
poseedor no efectúe el pago de la deuda o el abandono de la finca
hipotecada dentro del plazo legal, podrá desposeérselo de dicho
inmueble para hacer con él pago al acreedor, quien dispondrá de acción
al efecto. Tercer poseedor es toda persona que detenta, a un título no
precario, la finca gravada con hipoteca, sin que se haya obligado
personalmente al pago de la obligación garantizada. En este
procedimiento, el tercer poseedor demandado puede oponer no
solamente las excepciones que dicen relación con la hipoteca misma,
sino también las que se refieran a la obligación principal, entre ellas, la
prescripción. Ello como un corolario que de la existencia de la obligación
principal depende la eficacia de la hipoteca. Si aquélla no existe, ésta
tampoco existirá (considerandos 1º a 3º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 25/04/2016, Rol Nº 1247-2015,

Cita online: CL/JUR/2732/2016

5. Para hacer efectiva la hipoteca, se debe notificar al poseedor


señalando el plazo para el pago de la deuda

Para hacer efectivo el pago de la hipoteca, cuando la finca gravada


se posea por otro que el deudor personal, se notificará previamente al
poseedor, señalándole un plazo de diez días para que pague la deuda
o abandone ante el juzgado la propiedad hipotecada y que, luego de la
gestión de notificación de desposeimiento, tiene el actor las acciones
del juicio ordinario o ejecutivo, según la naturaleza del título que tenga.
En el presente caso el banco demandante pretende cobrar una deuda
que se encuentra garantizada con una hipoteca (considerando 9º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 16/03/2011, Rol Nº 5948-2009, Cita online:


CL/JUR/10234/2011

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 5/11/2013, Rol Nº 7881-2012,

Cita online: CL/JUR/2533/2013

— Corte Suprema, 23/11/2011, Rol Nº 7317-2010,

Cita online: CL/JUR/10347/2011

— Corte Suprema, 3/01/2011, Rol Nº 6591-2009,

Cita online: CL/JUR/6102/2011

— Corte Suprema, 5/01/2011, Rol Nº 6472-2009,

Cita online: CL/JUR/106/2011

— Corte Suprema, 14/01/2011, Rol Nº 7338-2009,

Cita online: CL/JUR/10228/2011

— Corte Suprema, 17/01/2011, Rol Nº 9032-2010,

Cita online: CL/JUR/581/2011

— Corte Suprema, 3/01/2011, Rol Nº 6591-2009,

Cita online: CL/JUR/6102/2011

— Corte de Apelaciones de Santiago, 31/07/1990, Rol Nº 6389-1989,


Cita online: CL/JUR/294/1990

6. El juicio de desposeimiento se inicia con la presentación de la


solicitud de notificación de desposeimiento

Que, para los efectos de resolver la excepción en comento, es


necesario tener presente lo dispuesto por el artículo 178 del Código
Orgánico de Tribunales, en cuanto señala que el procedimiento de que
se trata se inicia con la notificación previa ordenada por el artículo 758
del Código de Procedimiento Civil, gestión preparatoria que, además,
de acuerdo a lo preceptuado por esta última disposición legal, debe
entenderse como requisito necesario e ineludible de interposición de la
demanda, de lo que resulta que la gestión preparatoria y la demanda de
desposeimiento deben entenderse como un todo indivisible, en otras
palabras, para los efectos de la interrupción de la prescripción, el juicio
de desposeimiento se inicia con la presentación de la solicitud de
notificación de desposeimiento (considerando 5º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 22/12/2000, Rol Nº 4054-1998,

Cita online: CL/JUR/1981/2000

ARTÍCULO 759 (933)

Si el poseedor no efectúa el pago o el abandono en el plazo expresado en


el artículo anterior, podrá desposeérsele de la propiedad hipotecada para
hacer con ella pago al acreedor.

Esta acción se someterá a las reglas del juicio ordinario o a las del
ejecutivo, según sea la calidad del título en que se funde, procediéndose
contra el poseedor en los mismos términos en que podría hacerse contra el
deudor personal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 253, 254, 258, 414, 434, 486, 487,
895, 896, 897, 898 y 899.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Acción de desposeimiento. Finalidad de la gestión preparatoria de


notificación al tercer poseedor de la finca hipotecada
De los artículos 758 y 759 del Código de Procedimiento Civil se
desprende que para hacer efectivo frente a terceros el derecho real de
hipoteca, el Código de Procedimiento Civil reglamenta un procedimiento
especial que configura la llamada acción de desposeimiento que se
inicia con una gestión preparatoria de notificación al tercer poseedor de
la finca hipotecada. Agotada tal gestión y en el supuesto que el
requerido no efectúe el pago de la deuda o el abandono de la finca
hipotecada dentro del plazo legal, podrá desposeérselo del citado
inmueble para hacer con él pago al acreedor, juicio este último que se
tramitará en el procedimiento que corresponda seguir de acuerdo a la
calidad del título que se invoque. En consecuencia, la gestión
preparatoria a que se refiere el artículo 758 del Código de
Procedimiento Civil se encuentra estatuida para permitir que el tercero
poseedor en contra de quien se ejercita el derecho de persecución de
la finca hipotecada evite el desposeimiento mediante el pago de la
deuda o abandone la propiedad dentro del plazo legal que prevé dicha
norma, justamente porque se trata de un tercero que no asumió una
obligación personal frente al acreedor hipotecario (considerandos 8º y
9º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 18/01/2018, Rol Nº 31717-2017, Cita online:


CL/JUR/241/2018

2. Acción hipotecaria permite dirigirse contra un tercer poseedor y


perseguir la finca gravada

La acción hipotecaria que nace del derecho real de hipoteca permite


dirigirse contra un tercer poseedor y perseguir la finca gravada en poder
de quien se encuentre, tal como se ha hecho en este juicio ejecutivo de
desposeimiento, en que la detentadora del bien es una persona distinta
al deudor personal y ajena al crédito que la garantía asegura. Este
tercero poseedor puede pagar la deuda o abandonar la propiedad y si
no materializa ninguna de estas conductas, en conformidad a lo
dispuesto en el artículo 759 del Código de Procedimiento Civil podrá
desposeérsele de la propiedad hipotecada para hacer con ella pago al
acreedor (considerando 3º de la sentencia de reemplazo).

Corte Suprema, 6/06/2019, Rol Nº 14912-2018, Cita online:


CL/JUR/3244/2019

Fallos en el mismo sentido:


— Corte de Apelaciones de Talca, 30/12/2019, Rol Nº 1354-2018,

Cita online: CL/JUR/12054/2019

— Corte Suprema, 3/07/2010, Rol Nº 4435-2009,

Cita online: CL/JUR/17240/2010

— Corte Suprema, 5/11/2013, Rol Nº 7881-2012,

Cita online: CL/JUR/2533/2013

— Corte Suprema 8/03/2011, Rol Nº 7886-2009,

Cita online: CL/JUR/10374/2011

— Corte Suprema, 28/03/2011, Rol Nº 3917-2009,

Cita online: CL/JUR/2622/2011

— Corte Suprema, 15/12/2010, Rol Nº 6240-2009,

Cita online: CL/JUR/17075/2010

— Corte Suprema, 15/12/2010, Rol Nº 7256-2009,

Cita online: CL/JUR/17076/2010

— Corte Suprema, 13/01/2010, Rol Nº 6257-2008,

Cita online: CL/JUR/346/2010

— Corte Suprema, 8/09/2008, Rol Nº 3575-2007,

Cita online: CL/JUR/5900/2008

— Corte Suprema, 11/12/2007, Rol Nº 5203-2006,

Cita online: CL/JUR/6408/2007

3. Hipoteca constituye una garantía real. Principio de accesoriedad.


Hipoteca no da cuenta en sí misma de la obligación cuyo pago se
exige
La hipoteca constituye una garantía real que se rige por el principio
de la accesoriedad y sigue la suerte de lo principal. Dicha caución está
constituida por un título ejecutivo —escritura pública—, por lo que para
iniciar la acción de desposeimiento a través de un juicio ordinario o
ejecutivo, hay que estarse al título donde se constituyó la obligación a
la que accede. Es esta la forma de interpretar armónicamente el
artículo 759 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil que establece
cuándo un desposeimiento se somete a las normas del juicio ordinario
o ejecutivo según sea la calidad del título, puesto que, como ya se dijo,
el tercer poseedor nunca concurre a la suscripción del acto o contrato
que genera la obligación. No puede pretenderse que, a los efectos de
esta ejecución, la hipoteca, en cuanto caución real y, por ende,
esencialmente accesoria, de cuenta en sí misma de la obligación cuyo
pago se exige (considerando 35º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/06/2019, Rol Nº 15110-2018, Cita online:


CL/JUR/3678/2019

4. La acción de desposeimiento se somete a las reglas del juicio


ordinario o ejecutivo según sea la calidad del título

El artículo 759 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil,


refiriéndose a la acción de desposeimiento contra terceros poseedores
de la finca hipotecada o acensuada, dispone que esta acción se
someterá a las reglas del juicio ordinario o a las del ejecutivo, según sea
la calidad del título en que se funde, procediéndose contra el poseedor
en los mismos términos en que podría hacerse contra el deudor
personal. [....] Ahora bien, es claro que en un juicio de desposeimiento
el acreedor hipotecario no tiene título ejecutivo en contra del tercer
poseedor, de manera que cuando la ley dispone que la tramitación se
sujetará a la naturaleza del título en que la acción se funde,
naturalmente se está refiriendo al título que existe en contra del deudor
personal (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 26/12/2019, Rol Nº 26818-2018,

Cita online: CL/JUR/12406/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 16/08/2016, Rol Nº 3982-2016,


Cita online: CL/JUR/5939/2016

— Corte Suprema, 14/05/2012, Rol Nº 503-2012,

Cita online: CL/JUR/4167/2012

— Corte Suprema, 3/01/2011, Rol Nº 6591-2009,

Cita online: CL/JUR/6102/2011

— Corte Suprema, 14/01/2011, Rol Nº 7338-2009,

Cita online: CL/JUR/10228/2011

— Corte Suprema, 9/03/2011, Rol Nº 219-2011,

Cita online: CL/JUR/1905/2011

— Corte Suprema, 16/03/2011, Rol Nº 5948-2009,

Cita online: CL/JUR/10234/2011

5. Incidente de abandono del procedimiento. Medida precautoria para


asegurar la satisfacción de acreencia mediante la realización de la
finca hipotecada

En este proceso se ha ejercido la acción de desposeimiento, que de


acuerdo con lo previsto en el artículo 758 del Código de Procedimiento
Civil permite hacer efectivo el pago de la hipoteca cuando el inmueble
es poseído por una persona distinta del deudor personal, cumpliendo la
ritualidad que esa norma dispone. Luego, tal como lo prescribe el
artículo 759 del mismo Código, si ese poseedor no paga o no abandona
la finca dentro del plazo indicado, podrá desposeérsele de la propiedad
hipotecada para hacer con ella pago al acreedor, añadiendo, en su
inciso segundo, que tal acción se someterá a las reglas del juicio
ordinario o ejecutivo, según fuere la calidad del título en que se funde,
procediéndose contra el poseedor en los mismos términos en que
podría hacerse contra el deudor personal. En consecuencia, tratándose
de un procedimiento de desposeimiento tramitado conforme las reglas
del juicio ordinario, la única posibilidad del acreedor hipotecario de
asegurar la satisfacción de su acreencia mediante la efectiva realización
de la finca hipotecada es justamente a través de una medida como la
solicitada y obtenida en estos autos, impidiendo de este modo que la
acción intentada y que ha sido acogida por sentencia de primer grado
pierda el sustento fáctico que habilita su ejercicio (considerandos 7º y
8º de la sentencia de casación).

Corte Suprema, 11/04/2017, Rol Nº 97719-2016, Cita online:


CL/JUR/1865/2017

6. Acción ejecutiva de desposeimiento. I. Acción ordinaria y acción


ejecutiva de desposeimiento

Conforme al artículo 758 del Código de Procedimiento Civil, para


hacer efectivo el pago de la hipoteca, cuando el inmueble es poseído
por una persona distinta del deudor personal, se notificará previamente
al poseedor, señalándose un plazo de diez días para que pague la
deuda o abandone ante el juzgado la propiedad hipotecada. Luego, el
artículo 759 del mismo Código establece que, si ese poseedor no paga
o no abandona la finca dentro del plazo indicado, podrá desposeérsele
de la propiedad hipotecada para hacer con ella pago al acreedor,
añadiendo, en su inciso 2º, que tal acción se someterá a las reglas del
juicio ordinario o ejecutivo, según fuere la calidad del título en que se
funde, procediéndose contra el poseedor en los mismos términos en
que podría hacerse contra el deudor personal. En consecuencia, se
tramitará con arreglo a las reglas del juicio ejecutivo cuando el acreedor
puede hacer valer sus derechos en esa misma forma en contra del
deudor principal, es decir, cuando la obligación principal conste en un
título que lleve aparejada ejecución, cuando la obligación sea exigible y
no esté prescrita. Por el contrario, será necesario deducir un juicio
ordinario cuando la acción ejecutiva haya prescrito, cuando entre las
partes se discuta la existencia misma de la obligación principal y no
aparezca ella de un título que lleve aparejada ejecución y cuando se
discuta el monto de la obligación principal o la deuda no sea líquida
(considerando 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 25/05/2016, Rol Nº 609-2016,

Cita online: CL/JUR/4176/2016


ARTÍCULO 760 (934)

Efectuado el abandono o el desposeimiento de la finca perseguida, se


procederá conforme a lo dispuesto en los artículos 2397 y 2424 del Código
Civil, sin necesidad de citar al deudor personal. Pero si éste comparece a la
incidencia, será oído en los trámites de tasación y de subasta.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 253, 254, 258, 414, 434, 486, 487,
895, 897, 898 y 899. Código Civil: artículos 2397 y 2424.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Al deudor principal no cabe asignarle el rol de litigante respecto del


acreedor que impulsa la acción de desposeimiento

Al deudor principal no cabe asignarle el rol de litigante respecto del


acreedor que impulsa la acción de desposeimiento, el mandato en lo
que respecta al procedimiento que prosigue después de efectuado el
abandono o el desposeimiento de la finca perseguida, prescribe que al
aplicarse el artículo 2424 del Código Civil no es necesario citar al deudor
personal, a menos que éste comparezca en la incidencia que se
promueva, caso en que será oído en los trámites de tasación y de
subasta (considerando 3º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Antofagasta, 22/06/2004, Rol Nº 16789-


2003,

Cita online: CL/JUR/2949/2004

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 31/07/2001, Rol Nº 1656-2000,

Cita online: CL/JUR/464/2001

2. La subasta corresponde a un procedimiento distinto y posterior al


desposeimiento

Efectuado el abandono (entiéndase para el caso en que


voluntariamente el demandado lo haga en la gestión preliminar a que se
refieren los artículos 758 y 759 del citado Código) o el desposeimiento
de la finca perseguida (en la situación que lo haya dispuesto una
sentencia judicial a través del correcto ejercicio de la acción de
desposeimiento en el pertinente juicio), se procederá conforme a lo
dispuesto en los artículos 2397 y 2424 del Código Civil. En virtud de ello,
queda entonces en claro que la subasta corresponde a un
procedimiento distinto y posterior al desposeimiento. Para poder
ejercitar el derecho de realización es imprescindible llevar a cabo el
derecho de persecución, que opera bajo la forma de desposeimiento
(considerando 8º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de La Serena, 5/04/2000, Rol Nº 23105-2000,

Cita online: CL/JUR/2187/2000

ARTÍCULO 761 (935)

Si el deudor personal no es oído en el trámite de tasación esta diligencia


deberá hacerse por peritos que nombrará el juez de la causa en la forma
prescrita por este Código. La tasación, en este caso, no impide que el deudor
personal pueda objetar la determinación del saldo de la obligación principal
por el cual se le demande, si comprueba en el juicio correspondiente que se
ha procedido en fraude de sus derechos.242

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 253, 254, 258, 414, 434, 486, 487,
895, 896, 897, 898 y 899.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Si el deudor personal no es oído en la tasación, constituye un vicio


reparable sólo con la nulidad procesal de todo lo obrado

Que de los antecedentes del proceso se infiere que el deudor personal


(...), expresando que no fue oído en su calidad de deudor personal en
cuanto a la tasación del inmueble objeto de la subasta, omitiéndose el
trámite de tasación por medio de peritos, lo que constituye un vicio
reparable sólo con la nulidad procesal de todo lo obrado
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 31/01/2013, Rol Nº 6521-2012, Cita online:


CL/JUR/626/2013
ARTÍCULO 762 (936)

Lo dispuesto en el artículo 492 se aplicará también al caso en que se


persiga la finca hipotecada contra terceros poseedores.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 492. Código Civil: artículos 2428 y
2477.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. El acreedor de grado preferente podrá exigir el pago de sus créditos


sobre el precio del remate según sus grados

Si por un acreedor hipotecario de grado posterior se persigue una


finca hipotecada contra el deudor personal que la posea, el acreedor o
acreedores de grado preferente, citados de conformidad al artículo 2428
del Código Civil, podrán, o exigir el pago de sus créditos sobre el precio
del remate según sus grados, o conservar sus hipotecas sobre la finca
subastada, siempre que sus créditos no estén devengados
(considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 27/03/2007, Rol Nº 2358-2005, Cita online:


CL/JUR/3495/2007

2. Purga de la hipoteca

No resulta ser obstáculo al pago antes referido la circunstancia de


tener la demandada el carácter de poseedor en esta calidad asumida
por el acreedor hipotecario, por cuanto el artículo 762 del Código de
Procedimiento Civil, faculta ejercitar esta acción del acreedor también
en la situación que describe el artículo 492 del Código de Procedimiento
Civil y aun más, la poseedora ha tenido la posibilidad de hacer uso de
las opciones que le acuerda el artículo 758 del Código de Procedimiento
Civil en la gestión de notificación de desposeimiento de que dan cuenta
los autos traídos a la vista (considerando 10º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 6/08/1991, Rol Nº 2854-1991, Cita online:


CL/JUR/740/1991
ARTÍCULO 763 (937)

La acción del censualista sobre la finca acensuada se rige por las


disposiciones del presente Título.

Concordancias: Código Civil: artículos 2022 y siguientes.

TÍTULO XIX DEL RECURSO DE CASACIÓN

1. Disposiciones generales243

ARTÍCULO 764

El recurso de casación se concede para invalidar una sentencia en los


casos expresamente señalados por la ley.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 158, 186, 491, 765 y 822. Ley
Nº 18.287, sobre Procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículo 38. Ley Nº 18.302,
Ley de Seguridad Nuclear: artículo 38. Código Tributario: artículos 140, 145.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad del recurso de


casación en el fondo

El artículo 772 del Código de Enjuiciamiento Civil, en armonía con lo


previsto en los artículos 764 y 767 del citado cuerpo legal, permite,
como sustento de la invalidación de la sentencia impugnada, el
quebrantamiento de una o más normas legales contenidas en la
decisión. Por ello, es menester que al interponer un recurso con tal
objeto su promotor deba cumplir necesariamente con lo exigido por el
precepto en análisis, esto es, expresar en qué consisten él o los errores
de derecho de que adolece la sentencia recurrida. Aparte del
cumplimiento del requisito enunciado en el párrafo precedente, con
idéntica rigurosidad el mismo artículo 772 aludido impone a quien
interponga un recurso de casación en el fondo la obligación de señalar,
de manera circunstanciada, en el respectivo escrito, el modo en que el
o los errores de derecho que denuncia han influido sustancialmente en
lo dispositivo de la sentencia que trata de invalidar (considerando 3º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 7/03/2018, Rol Nº 43706-2016,

Cita online: CL/JUR/4400/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 4/04/2019, Rol Nº 2301-2019,

Cita online: CL/JUR/3005/2019

— Corte Suprema, 19/03/2019, Rol Nº 88-2019,

Cita online: CL/JUR/1433/2019

— Corte Suprema, 22/01/2019, Rol Nº 15531-2018,

Cita online: CL/JUR/397/2019

— Corte Suprema, 7/08/2018, Rol Nº 12825-2018,

Cita online: CL/JUR/4205/2018

— Corte Suprema, 5/04/2017, Rol Nº 4863-2017,

Cita online: CL/JUR/2634/2017

— Corte Suprema, 20/03/2017, Rol Nº 2918-2017,

Cita online: CL/JUR/1063/2017

— Corte Suprema, 14/03/2017, Rol Nº 243-2017,

Cita online: CL/JUR/878/2017

2. Recurso de casación deber ser interpuesto por la parte agraviada

Del tenor de lo que disponen los artículos 764 y siguientes del Código
de Procedimiento Civil se advierte que para la interposición de un
recurso de casación como el que se analiza, además de las exigencias
que dicen relación con el plazo para su deducción, la naturaleza jurídica
que debe revestir la resolución contra la cual se deduce y el
señalamiento de los errores de derecho de que adolece la sentencia
recurrida, con su correspondiente explicación e indicación del modo en
que aquellos influyen sustancialmente en lo dispositivo del fallo, de
conformidad con lo que prescribe el artículo 771 del Código de
Enjuiciamiento Civil, deber ser interpuesto por la parte agraviada. Este
último aserto importa necesariamente que la sentencia impugnada haya
causado al recurrente un perjuicio sólo reparable con la invalidación del
fallo y que el vicio de que se trate debe afectar esencialmente lo
decidido. Ello, por cuanto diferentes exigencias comparten el recurso de
casación con los recursos en general, siendo una de ellas precisamente
el agravio que debe manifestar y soportar quien lo interpone. Tal
requerimiento es relevante no sólo por tener una consagración legal,
sino, además, por ser a éste al cual debe ajustarse la labor de respuesta
de esta Corte de Casación. En efecto, la competencia del tribunal se
circunscribe doblemente, tanto por el vicio que sustenta su impugnación
como al perjuicio denunciado por el recurrente, de tal suerte que el
tribunal y la sentencia de casación se encuentran determinados por los
extremos del recurso de casación, que debe ser congruente con la
defensa asumida en el juicio (considerando 3º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 19/07/2018, Rol Nº 4524-2018,

Cita online: CL/JUR/3784/2018

3. Carácter estricto del recurso de casación en el fondo

En definitiva, el recurrente olvida el carácter estricto del recurso de


casación, cuyas exigencias se disponen en el artículo 772 del Código
de Procedimiento Civil que debe entenderse en armonía con lo previsto
en los artículos 764 y 767 del mismo cuerpo normativo, es decir, se
permite como único sustento de la invalidación de la sentencia
censurada, el quebrantamiento de una o más normas legales
contenidas en la decisión o en cuya omisión se ha incurrido situación
que, como se dijo, no ocurre en este caso, desde que —tampoco— se
denuncia como infringida una disposición legal de orden sustantivo
relacionada con el fondo (considerando 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 27/09/2018, Rol Nº 14932-2018,

Cita online: CL/JUR/5363/2018

4. Recurrente de casación en el fondo debe expresar en qué consisten


los errores de derecho de que adolece la sentencia

De acuerdo con los artículos 764, 767 y 772 del Código de


Procedimiento Civil, el sustento de la invalidación de la sentencia
censurada es el quebrantamiento de una o más normas legales
contenidas en la decisión. Por ello, es menester que al interponerse un
recurso de casación en el fondo se cumpla con expresar en qué
consisten él o los errores de derecho de que adolece la resolución
recurrida. En este orden de ideas, tanto la jurisprudencia como la
doctrina hacen consistir esos yerros en aquéllos que pudieron originarse
por haber otorgado los sentenciadores un alcance diferente a una
norma legal respecto del establecido por el legislador, ya sea ampliando
o restringiendo el mandato de sus disposiciones; o por haber aplicado
una ley a un caso no previsto en ella o, por último, por haber dado
aplicación a un precepto legal en una situación ajena a la de su
prescripción (considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/11/2018, Rol Nº 2836-2018, Cita online:


CL/JUR/6227/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 29/05/2019, Rol Nº 11547-2019,

Cita online: CL/JUR/2978/2019

— Corte Suprema, 5/07/2016, Rol Nº 14323-2016,

Cita online: CL/JUR/4861/2016

5. Cumplimiento de alimentos. I. Improcedencia del recurso de casación


en la forma en contra de la sentencia de segunda instancia en el
procedimiento de familia. II. Voto disidente: Procedencia del recurso
de casación en la forma en contra de la sentencia de segunda
instancia en el procedimiento de familia

El artículo 67 Nº 6 letra a) de la Ley de Tribunales de Familia dispone


que el recurso de casación en la forma procederá sólo en contra de las
sentencias definitivas de primera instancia y de las interlocutorias de
primera instancia que pongan término al juicio o hagan imposible su
continuación. En consecuencia, en el procedimiento de familia no
resulta procedente el recurso de casación en la forma en contra de la
sentencia de segundo grado (considerandos 4º y 5º de la sentencia de
la Corte Suprema).

(Voto disidente). Una interpretación armónica del artículo 67 Nº 6


letra a) de la Ley Nº 19.968 permite concluir que su texto, cuando señala
que el recurso de procederá sólo en contra de las sentencias definitivas
de primera instancia y de las interlocutorias de primera instancia que
pongan término al juicio o hagan imposible su continuación, no excluye
la procedencia del recurso de que se trata respecto de las dictadas en
segunda instancia y que participan de dicha naturaleza jurídica, sino que
únicamente limita su interposición tratándose de la resolución que se
pronuncia sobre medidas cautelares, esto es, la palabra "sólo" que
utiliza es exclusivamente para descartar a uno de los cuatro tipos de
resoluciones a que se refiere el número 2 de la mencionada norma
legal. Además, estima que el citado artículo sólo establece y regula los
recursos que proceden en contra de las resoluciones que se dictan en
primera instancia, por lo tanto, tratándose de las de segundo grado debe
aplicarse la normativa establecida en los artículos 764 y siguientes del
Código de Procedimiento Civil (considerando único de la disidencia de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 3/05/2016, Rol Nº 24294-2016,

Cita online: CL/JUR/2952/2016

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 5/04/2016, Rol Nº 17537-2016,

Cita online: CL/JUR/2190/2016


6. El recurso de casación en el fondo habilita la invalidación de
sentencias

Que, como es sabido, el recurso de casación en el fondo habilita la


invalidación de determinadas sentencias que hayan sido extendidas con
infracción de ley, siempre que haya tenido influencia sustancial en lo
resolutivo o decisorio (considerando 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 17/05/2012, Rol Nº 12193-2011, Cita online:


CL/JUR/4414/2012

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 11/03/2013, Rol Nº 163-2013,

Cita online: CL/JUR/542/2013

— Corte Suprema, 16/05/2013, Rol Nº 5969-2012,

Cita online: CL/JUR/3070/2013

— Corte Suprema, 2/07/2013, Rol Nº 7060-2012,

Cita online: CL/JUR/1439/2013

— Corte Suprema, 16/09/2013, Rol Nº 570-2013,

Cita online: CL/JUR/2072/2013

— Corte Suprema, 8/10/2013, Rol Nº 6035-2012,

Cita online: CL/JUR/2230/2013

— Corte Suprema, 7/11/2013, Rol Nº 5824-2013,

Cita online: CL/JUR/2555/2013

— Corte Suprema, 18/11/2013, Rol Nº 7931-2012,

Cita online: CL/JUR/2677/2013


— Corte Suprema, 20/11/2013, Rol Nº 9672-2012,

Cita online: CL/JUR/2707/2013

— Corte Suprema, 26/11/2013, Rol Nº 1780-2013,

Cita online: CL/JUR/2751/2013

— Corte Suprema, 19/11/2012, Rol Nº 6945-2012,

Cita online: CL/JUR/2629/2012

7. Son inadmisibles aquellos recursos de casación en el fondo que


plantean infracciones diversas

Resultan inadmisibles aquellos recursos de casación en el fondo que


plantean infracciones diversas, pero unas en subsidio de las otras,
porque al precederse de esta manera no se respeta el carácter de
recurso de derecho estricto que posee la casación en el fondo y que
exige que las infracciones legales que se atribuyen al fallo recurrido se
planteen franca y derechamente y no en forma dubitativa, contradictoria
o subsidiaria. Dicho de otro modo, en el recurso de casación en el fondo
deben señalarse en forma concreta y directa los errores de derecho en
que se estima han incurrido los jueces del fondo al dictar la resolución
judicial impugnada. Esto implica que el recurrente debe optar por una
sola línea de argumentos jurídicos y mantenerla en el razonamiento que
efectúa en su recurso, pues no pueden plantearse los errores de
derecho en forma contradictoria (considerando 10º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/06/2007, Rol Nº 1468-2005, Cita online:


CL/JUR/3549/2007

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 27/08/2009, Rol Nº 781-2008,

Cita online: CL/JUR/495/2009

— Corte Suprema, 12/09/2007, Rol Nº 5232-2006,

Cita online: CL/JUR/4813/2007


ARTÍCULO 765

El recurso de casación es de dos especies: de casación en el fondo y de


casación en la forma.

Es de casación en el fondo en el caso del artículo 767. Es de casación en


la forma en los casos del artículo 768.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 186, 764, 776 y 785. Código
Tributario: artículo 145.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Se podrán deducir ambos recursos en contra de una sentencia:


recurso de casación en el fondo y en la forma

Que el representante del Fisco de Chile ha deducido recursos de


casación en la forma y en el fondo. Por el recurso de casación en la
forma (...), por haber sido pronunciada la sentencia por un tribunal
manifiestamente incompetente o no integrado con los funcionarios
designados por la ley (...). Sobre el recurso de casación en el fondo (...),
porque no existe norma alguna de fuente nacional o internacional que
establezca una forma de cómputo como el que señalan los
sentenciadores que prorrogue, suspenda o interrumpa los plazos de
prescripción de la acción civil extracontractual con el Estado por
violación de los derechos humanos (considerando 3º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 6/01/2014, Rol Nº 2918-2013, Cita online:


CL/JUR/14/2014

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 8/01/2014, Rol Nº 3817-2013,

Cita online: CL/JUR/55/2014

— Corte Suprema, 30/10/2013, Rol Nº 5097-2013,

Cita online: CL/JUR/2433/2013


— Corte Suprema, 13/01/2012, Rol Nº 4007-2011,

Cita online: CL/JUR/99/2012

— Corte Suprema, 6/03/2012, Rol Nº 778-2011,

Cita online: CL/JUR/507/2012

— Corte Suprema, 9/04/2012, Rol Nº 8874-2010,

Cita online: CL/JUR/4398/2012

— Corte Suprema, 6/06/2011, Rol Nº 431-2010,

Cita online: CL/JUR/4666/2011

— Corte Suprema, 28/06/2011, Rol Nº 5998-2009,

Cita online: CL/JUR/10450/2011

2. El recurso de casación puede ser de dos especies y, en el caso del


recurso de casación en el fondo, tiene por objeto velar por la correcta
aplicación de las normas

Que esta Corte reiteradamente ha fallado que el recurso de casación


en el fondo tiene por objeto velar por la correcta interpretación y
aplicación de las normas llamadas a dirimir la controversia, con el objeto
de que este tribunal pueda cumplir con la función uniformadora del
derecho asignada por la ley. De allí que al no constituir esta sede
instancia, el postulado de hechos diversos a los asentados en el juicio
y que determinan la aplicación de las normas sustantivas en punto a
dirimir lo debatido no tiene cabida desde que este tribunal no puede
modificarlos, salvo que se denuncie que al resolver la controversia los
jueces del fondo se han apartado del onus probandi legal, han admitido
medios de prueba excluidos por la ley, desconocido los que ella
autoriza, o alterado el valor probatorio imperativamente fijado por la ley
a las probanzas aportadas al proceso (considerando 10º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 22/10/2013, Rol Nº 7274-2011,

Cita online: CL/JUR/2338/2013


Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 22/01/2014, Rol Nº 6244-2013,

Cita online: CL/JUR/136/2014

— Corte Suprema, 22/01/2014, Rol Nº 6682-2014,

Cita online: CL/JUR/135/2014

— Corte Suprema, 21/01/2014, Rol Nº 7332-2013,

Cita online: CL/JUR/120/2014

— Corte Suprema, 15/01/2014, Rol Nº 2547-2013,

Cita online: CL/JUR/84/2014

— Corte Suprema, 13/01/2014, Rol Nº 4663-2013,

Cita online: CL/JUR/75/2014

— Corte Suprema, 11/11/2013, Rol Nº 5181-2013,

Cita online: CL/JUR/2586/2013

— Corte Suprema, 2/12/2013, Rol Nº 5340-2013,

Cita online: CL/JUR/2800/2013

— Corte Suprema, 30/12/2013, Rol Nº 5628-2013,

Cita online: CL/JUR/3015/2013

ARTÍCULO 766

El recurso de casación en la forma se concede contra las sentencias


definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar día para la vista de
la causa.

Procederá, asimismo, respecto de las sentencias que se dicten en los


juicios o reclamaciones regidos por leyes especiales, con excepción de
aquéllos que se refieran a la constitución de las juntas electorales y a
las reclamaciones de los avalúos que se practiquen en conformidad a
la Ley Nº 17.235, sobre Impuesto Territorial y de los demás que
prescriban las leyes.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 158, 163, 200, 769, 800 Nºs. 1 y 4 y
822. Código Orgánico de Tribunales: artículos 63 Nº 1 a), 98 Nº 2. Código Tributario:
artículos 140, 148, 165 Nº 5. Código de Derecho Internacional Privado: artículo 412. Ley
Nº 18.287, sobre Procedimientos ante Juzgados de Policía Local: artículo 38. Decreto Ley
Nº 1.097, 1975, crea Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras, Min. Hacienda,
D.O. 25.07.1975: artículo 21. Decreto Ley Nº 3.538, 1980, crea Superintendencia de Valores y
Seguros, D.O. 23.12.1980: artículo 4 e). Ley Nº 9.968, crea Tribunales de Familia, D.O.
30.08.2004: artículo 67.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Resoluciones en contra de las cuales proceden los recursos de


casación en la forma y en el fondo. Improcedencia de la casación de
casación

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil establece que el


recurso de casación en la forma se concede contra las sentencias
definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar día de la vista de la
causa. Por su parte, el artículo 767 del Código aludido dispone que el
recurso de casación en el fondo tiene lugar contra sentencias definitivas
inapelables, cuando ponen término al juicio o hacen imposible su
continuación, dictadas —en lo que interesa para el presente caso— por
Cortes de Apelaciones, siempre que se hayan pronunciado con
infracción de ley y esta infracción influya en lo dispositivo de la
sentencia. Cabe señalar, en tanto los recursos de casación en la forma
y en el fondo se dirigen a cuestionar la sentencia que desestima un
recurso de casación en la forma deducido contra la sentencia de primer
grado, que el fallo de casación no puede ser impugnado mediante el
mismo recurso, toda vez que esa sentencia, por su naturaleza, no es de
aquellas mencionadas en los artículos 766 y 767 del Código de
Procedimiento Civil, de modo que los arbitrios en estudio deben ser
desestimados pues la ley no autoriza la casación de casación
(considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 10/01/2018, Rol Nº 43708-2017, Cita online:


CL/JUR/169/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 19/03/2019, Rol Nº 29955-2018,

Cita online: CL/JUR/1416/2019

— Corte Suprema, 11/09/2018, Rol Nº 16993-2018,

Cita online: CL/JUR/5164/2018

— Corte Suprema, 8/02/2018, Rol Nº 42693-2017,

Cita online: CL/JUR/624/2018

2. Resolución impugnada no presenta las características de aquellas


contra las que proceden las casaciones de forma y sustancial

La resolución impugnada por esta vía (sentencia de segunda


instancia confirmatoria de la de primer grado que rechazó la oposición
a la gestión preparatoria de notificación judicial de cobro de facturas) no
presenta la característica de aquellas —señaladas en los artículos 766
y 767 del Código de Procedimiento Civil—, toda vez que no ha puesto
fin a la instancia como tampoco ha concluido el juicio o hecho imposible
su prosecución, ni se encuentra en la situación excepcional prevista en
la primera de las normas citadas, teniendo para ello presente que el
proceso forma una unidad entre la gestión preparatoria y el juicio
ejecutivo que se prepara, razones por las cuales los recursos de nulidad
intentados no podrán ser admitidos a tramitación (considerandos de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 16/10/2018, Rol Nº 20535-2018,

Cita online: CL/JUR/5851/2018


3. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad del recurso de
casación en la forma. Recurrente que no preparó el recurso,
ejerciendo oportunamente y en todos sus grados los recursos
establecidos por la ley

La causal invocada —del artículo 766 del Código de Procedimiento


Civil— se sustenta en un vicio que afectó a la vista de la causa y,
consecuencialmente, a la sentencia de segundo grado; sin embargo,
cabe advertir que el recurrente no preparó el recurso de conformidad a
lo previsto en el artículo 769 del Código de Procedimiento Civil, que
dispone que "Para que pueda ser admitido el recurso de casación en la
forma es indispensable que el que lo entabla haya reclamado de la falta,
ejerciendo oportunamente y en todos sus grados los recursos
establecidos por la ley". En efecto, y tal como señala la judicatura del
fondo en la resolución impugnada, la causa fue ingresada a la Corte
bajo la misma denominación que se anunció, transcurriendo un mes y
medio hasta la vista y realizándose numerosas actuaciones incluso por
el recurrente, sin que reclamara el error, impidiendo, en consecuencia,
la corrección de la infracción. Así las cosas, no habiendo interpuesto el
recurso pertinente en atención a la vulneración cometida, debe
concluirse que el recurso carece de preparación, motivo por el que no
podrá prosperar y deberá ser desestimado en esta etapa de tramitación
(considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 14/02/2019, Rol Nº 25093-2018, Cita online:


CL/JUR/823/2019

4. Inadmisibilidad del recurso de casación en la forma respecto de los


laudos definitivos emitidos en la alzada en el procedimiento de familia

Una interpretación armónica de la normativa transcrita, junto a los


principios que informan el procedimiento de familia conduce a inferir que
la letra a) del literal sexto del artículo 67 de la ley Nº 19.968 suprime la
procedencia del recurso de casación en la forma respecto de los laudos
definitivos emitidos en la alzada. Ello puesto que el inciso primero de
esta disposición cuando fija el marco de reglado de los recursos
procesales en el procedimiento de familia, si bien acepta aquellos
medios de impugnación contemplados en el Código de Procedimiento
Civil, excluye los recursos incompatibles con las máximas formativas
contenidas en la mencionada ley y sin perjuicio de las modificaciones
que, con posterioridad, la misma preceptiva introduce. Cuarto: Que
dentro de tales dogmas surgen los de celeridad, concentración y
desformalización que inspiran esta clase de procesos, lo que constituye
una limitación prevista por la ley para hacer aplicables las reglas
comunes del procedimiento civil que ceden ante la regulación especial,
de manera que lleva a colegir la eliminación de la nulidad formal
respecto de los dictámenes que participan de la naturaleza jurídica del
que por esta vía se analiza, por lo que el arbitrio interpuesto por el
demandado en autos resulta improcedente y, en consecuencia, no es
dable admitirlo a tramitación (considerandos 3º y 4º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema, 3/06/2019, Rol Nº 11226-2019, Cita online:


CL/JUR/3116/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 27/05/2019, Rol Nº 10118-2019,

Cita online: CL/JUR/2903/2019

— Corte Suprema, 20/08/2018, Rol Nº 15447-2018,

Cita online: CL/JUR/4944/2018

— Corte Suprema, 22/05/2018, Rol Nº 6221-2018,

Cita online: CL/JUR/3222/2018

5. Improcedencia del recurso de casación en la forma en contra de la


resolución que rechaza un recurso de casación.

El reproche del recurso de casación en la forma se dirige a cuestionar


el pronunciamiento de la Corte de Apelaciones en cuanto desestimó un
recurso de casación en la forma deducido contra la sentencia de primer
grado. Es decir, se orienta a sustentar vicios que se contendrían en la
sentencia de casación apoyándose en los mismos fundamentos de
aquel que formuló contra la sentencia del tribunal a quo. El artículo 63
Nº 1 letra a) del Código Orgánico de Tribunales dispone que las Cortes
de Apelaciones conocerán en única instancia de los recursos de
casación en la forma que se deduzcan en contra de las sentencias
dictadas por los jueces de letras de su territorio jurisdiccional. La palabra
"instancia", en este caso, está tomada en el sentido de que el fallo que
resuelve el correspondiente recurso de casación en la forma no es
susceptible de ningún otro recurso ni puede ser revisado, de
consiguiente, por ningún tribunal superior —Mario Casarino Viterbo—.
Además, es menester expresar que el fallo de casación no puede ser
impugnado mediante el mismo recurso, toda vez que, por su naturaleza,
tampoco es de aquellos mencionadas en el artículo 766 del Código de
Procedimiento Civil (considerandos 4º a 6º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 19/03/2018, Rol Nº 1476-2018, Cita online:


CL/JUR/1317/2018

6. El recurso procederá respecto de las sentencias que se dicten en los


juicios o reclamaciones especiales

El inciso 2º artículo 768 del Código de Procedimiento Civil dispone


que en los negocios a que se refiere el inciso 2º del artículo 766 sólo
podrá fundarse el recurso de casación en la forma en alguna de las
causales indicadas en los números 1, 2, 3, 4, 6, 7 y 8 del mismo
artículo y también en el número 5, cuando se haya omitido en la
sentencia la decisión del asunto controvertido. El inciso 2º del
artículo 766 establece que el recurso procederá, asimismo, respecto de
las sentencias que se dicten en los juicios o reclamaciones especiales.
Lo anterior significa que en los asuntos regidos por leyes especiales el
recurso de casación en la forma procede en cuanto a la causal del
número 5 del artículo 768 del texto legal indicado, únicamente cuando
en el fallo se haya omitido la decisión del asunto controvertido. Hay que
recordar que el señalado número establece como causal de casación la
de haberse pronunciado la sentencia con omisión de cualquiera de los
requisitos enumerados en el artículo 170 (considerando 5º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 7/06/2006, Rol Nº 5910-2004, Cita online:


CL/JUR/7738/2006

7. Improcedencia de recursos de casación en la forma y en el fondo


contra resolución que impide continuar con el procedimiento en sede
civil por estimar que se trata de un asunto de competencia laboral
En la especie, la resolución impugnada carece de la naturaleza
jurídica señalada, toda vez que si bien impide continuar con el
procedimiento en sede civil por estimar que se trata de un asunto de
competencia de los tribunales del trabajo, no corresponde a un veredicto
que ponga fin al pleito o haga imposible su avance, limitándose a
modificar la sede en que deberá ser conocido el asunto y el
procedimiento que corresponde aplicar, por lo que al no participar de la
naturaleza jurídica de las resoluciones descritas en las referidas
normas, no resultan admisibles los recursos interpuestos
(considerando 2º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 21/03/2018, Rol Nº 45589-2017, Cita online:


CL/JUR/4706/2018

8. Prevención: Resolución que desestima incidente de imputación al


pago promovido en la fase de cumplimiento de un juicio de alimentos,
no admite casación en la forma

Corresponde declarar inadmisible el recurso de casación en la forma,


teniendo únicamente presente que la resolución impugnada no participa
de la naturaleza jurídica de aquellas referidas en el artículo 766 del
Código de Procedimiento Civil. Lo anterior porque, la misma no es una
sentencia definitiva; tampoco una interlocutoria de aquellas que ponen
término al juicio o hacen imposible su continuación o alguna de las
referida en el inciso primera de dicha disposición legal, razón por la cual
no resulta procedente el expresado recurso (considerando único de la
prevención de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 11/04/2018, Rol Nº 2256-2018, Cita online:


CL/JUR/6023/2018

9. Improcedencia de los recursos de casación en la forma y en el fondo


en contra de la resolución que resuelve incidente de nulidad y aquella
que confirma la decisión de no tener por desistido al actor de su
recurso de apelación

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil dispone que, en


general, sólo se concede el recurso de casación contra las sentencias
definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar día para la vista de
la causa. A su turno, el artículo 767 del mismo Código establece que el
recurso de casación en el fondo tiene lugar contra sentencias definitivas
inapelables y contra sentencias interlocutorias inapelables cuando
ponen término al juicio o hacen imposible su continuación, dictadas, por
Cortes de Apelaciones o por un tribunal arbitral de segunda instancia
constituido por árbitros de Derecho en los casos en que estos árbitros
hayan conocido de negocios de la competencia de dichas Cortes...
Luego, la sentencia impugnada, en cuanto resuelve el incidente de
nulidad deducido por el ejecutante, no fue dictada en la etapa de
cumplimiento incidental de un fallo, atendido que no existe una
sentencia que disponga tal efecto, ni ha sido así decretado en los
términos que la ley establece, sino que en el marco de la discusión
procesal que ha tenido lugar en autos en relación a la procedencia de
devolver los fondos que le fueron girados al ejecutante, producto del
saldo del remate y su pretensión de cubrir otras acreencias con dicho
remanente. La resolución recurrida no puede ser calificada como una
sentencia definitiva, pues no pone fin a la instancia resolviendo la
cuestión o asunto que ha sido objeto del juicio; y tampoco tiene la
naturaleza de una interlocutoria que ponga término al juicio o haga
imposible su continuación. Tal conclusión se extiende a la resolución
impugnada en cuanto confirma la decisión de no tener por desistido al
actor de su recurso de apelación, por carecer de la referida naturaleza
y no producir los efectos antes indicados (considerandos 2º y 5º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 19/04/2018, Rol Nº 2251-2018, Cita online:


CL/JUR/1801/2018

10. Improcedencia de los recursos de casación en la forma y en el fondo


en contra de la resolución que acoge cuestión de competencia y
declina seguir conociendo de la causa

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil establece que el


recurso de casación en la forma procede contra las sentencias
definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar el día para la vista
de la causa. Por su parte, el art ículo 767 del mismo texto legal dispone
que se admite el recurso de casación en el fondo contra sentencias
definitivas inapelables y contra sentencias interlocutorias inapelables
cuando ponen término al juicio o hacen imposible su continuación,
dictadas por Cortes de Apelaciones, siempre que se hayan pronunciado
con infracción de ley, y aquella haya influido substancialmente en lo
dispositivo de la sentencia. Sin embargo, la resolución impugnada
mediante los presentes recursos de casación en la forma y en el fondo,
que confirmó la de primera instancia que acogió la cuestión de
competencia formulada y declinó seguir conociendo de la causa, por
corresponderle a un Ministro de Corte de Apelaciones como tribunal
unipersonal, no participa de la naturaleza jurídica de aquellas aludidas
en los artículos 766 y 767, toda vez que no pone fin a la instancia, ni
concluye el juicio ni hace imposible su prosecución. En consecuencia,
no resultan admisibles los recursos deducidos (considerandos 2º y 3º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 25/04/2018, Rol Nº 5483-2018, Cita online:


CL/JUR/1868/2018

11. Improcedencia de recursos de casación en la forma y en el fondo


contra resolución que declara desistida la apelación interpuesta
contra la resolución que rechazó un incidente de abandono del
procedimiento

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil admite el recurso de


casación en la forma contra sentencias definitivas y contra sentencias
interlocutorias cuando ponen término al juicio o hacen imposible su
continuación, y, excepcionalmente, contra las sentencias interlocutorias
dictadas en segunda instancia sin previo emplazamiento de la parte
agraviada, o sin señalar día para la vista de la causa. Por su parte, el
artículo 767 del Código de Procedimiento Civil establece que el recurso
de casación en el fondo tiene lugar contra sentencias definitivas
inapelables e interlocutorias inapelables, cuando ponen término al juicio
o hacen imposible su continuación, dictadas —en lo que interesa para
el presente caso— por Cortes de Apelaciones, siempre que se hayan
pronunciado con infracción de ley y esta infracción haya influido
sustancialmente en lo dispositivo de la sentencia. En la especie, la
resolución impugnada —que declaró desistida la apelación interpuesta
contra la resolución que rechazó un incidente de abandono del
procedimiento— carece de la naturaleza jurídica señalada, pues no ha
puesto fin a la instancia como tampoco ha concluido el juicio o hecho
imposible su prosecución, ni se encuentra en la situación excepcional
prevista en la primera de las normas citadas, razón por la cual los
recursos de casación intentados en autos no podrán ser admitidos a
tramitación (considerandos 2º a 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 17/05/2018, Rol Nº 7999-2018, Cita online:


CL/JUR/3808/2018

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 28/06/2018, Rol Nº 8912-2018,

Cita online: CL/JUR/3259/2018

12. Reclamación Tributaria. I. Limitación de casación en la forma en los


juicios o reclamaciones regidos por leyes especiales

El artículo 768 inciso 2º del mismo cuerpo legal dispone que "En los
negocios a que se refiere el inciso segundo del artículo 766 sólo podrá
fundarse el recurso de casación en la forma en alguna de las causales
indicadas en los números 1º, 2º, 3º, 4º, 6º, 7º y 8º de este artículo y
también en el número 5º cuando se haya omitido en la sentencia la
decisión del asunto controvertido". El artículo 766, por su parte, alude a
"las sentencias que se dicten en los juicios o reclamaciones regidos por
leyes especiales". De este modo, siendo este un juicio regido por ley
especial, puesto que se encuentra previsto y reglado por las normas del
Código Tributario, no resulta admisible la interposición del recurso de
nulidad formal por la causal invocada —del artículo 768 Nº 5 del Código
de Procedimiento Civil—, por lo que no puede ser acogido a tramitación
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 5/06/2018, Rol Nº 8219-2018, Cita online:


CL/JUR/3088/2018

13. Improcedencia de recursos de casación en la forma y en el fondo


contra resolución que rechaza la oposición a la gestión de notificación
de factura
El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil admite el recurso de
casación en la forma contra sentencias definitivas y contra sentencias
interlocutorias cuando ponen término al juicio o hacen imposible su
continuación, y, excepcionalmente, contra las sentencias interlocutorias
dictadas en segunda instancia sin previo emplazamiento de la parte
agraviada, o sin señalar día para la vista de la causa. Por su parte, el
artículo 767 del Código de Procedimiento Civil establece que el recurso
de casación en el fondo tiene lugar contra sentencias definitivas
inapelables e interlocutorias inapelables, cuando ponen término al juicio
o hacen imposible su continuación, dictadas —en lo que interesa para
el presente caso— por Cortes de Apelaciones, siempre que se hayan
pronunciado con infracción de ley y esta infracción haya influido
sustancialmente en lo dispositivo de la sentencia. En la especie, la
resolución impugnada que revocó la de primer grado que había acogido
la oposición a la gestión de notificación de facturas y, en su lugar, la
rechazó. Carece de la naturaleza jurídica señalada, pues no ha puesto
fin a la instancia como tampoco ha concluido el juicio o hecho imposible
su prosecución, ni se encuentra en la situación excepcional prevista en
la primera de las normas citadas, razón por la cual los recursos de
casación intentados en autos no podrán ser admitidos a tramitación
(considerandos 2º a 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 23/07/2018, Rol Nº 12463-2018, Cita online:


CL/JUR/3959/2018

14. Improcedencia de los recursos de casación en la forma y en el fondo


en contra de la resolución que confirma aquella que rechaza
rectificación, aclaración y enmienda de la que dejó sin efecto el
cúmplase respecto de alzamiento de medida precautoria

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil dispone que, en


general, sólo se concede el recurso de casación contra las sentencias
definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar día para la vista de
la causa. A su turno, el artículo 767 del mismo Código establece que el
recurso de casación en el fondo tiene lugar contra sentencias definitivas
inapelables y contra sentencias interlocutorias inapelables cuando
ponen término al juicio o hacen imposible su continuación, dictadas, en
lo que interesa para el presente caso, por Cortes de Apelaciones,
siempre que se hayan pronunciado con infracción de ley y esta
infracción haya influido substancialmente en lo dispositivo del fallo. Por
consiguiente, la resolución impugnada mediante los presentes recursos
de casación en la forma y en el fondo, que rechazó la rectificación,
aclaración y enmienda deducida respecto de la que dejó sin efecto el
cúmplase de la que se pronunció sobre el alzamiento de una medida
precautoria, no reviste la naturaleza jurídica de las sentencias que
hacen procedente los recursos de casación en la forma y en el fondo,
pues desde luego no es una sentencia definitiva y tampoco es una
interlocutoria de aquellas que ponen término al juicio o hacen imposible
su continuación, ni se trata de una dictada en segunda instancia sin
previo emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalamiento de día
para la vista de la causa. En tales condiciones, los recursos en comento
deben ser declarados inadmisibles (considerandos 2º y 3º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 27/08/2018, Rol Nº 12221-2018, Cita online:


CL/JUR/4772/2018

15. Improcedencia de recurso de casación en la forma contra resolución


que recae sobre imposición de costas

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil admite el recurso de


casación en la forma contra sentencias definitivas y contra sentencias
interlocutorias cuando ponen término al juicio o hacen imposible su
continuación, y, excepcionalmente, contra las sentencias interlocutorias
dictadas en segunda instancia sin previo emplazamiento de la parte
agraviada, o sin señalar día para la vista de la causa. Conforme lo
señalado, cabe recordar que esta Corte ha resuelto reiteradamente que
la decisión que recae sobre la imposición de las costas no reviste el
carácter de sentencia definitiva pues se trata de una medida de carácter
económico, y la circunstancia de que ese pronunciamiento se contenga
en una sentencia interlocutoria que pone término al juicio, o en la misma
sentencia definitiva, sólo responde a un imperativo legal sin que por tal
motivo participe de su naturaleza jurídica. Por consiguiente, la
resolución impugnada por esta vía no reviste la característica de
aquellas aludidas y el recurso de casación en la forma intentado no
puede ser admitido a tramitación (considerandos 3º y 4º de la sentencia
de la Corte Suprema).
Corte Suprema, 4/04/2019, Rol Nº 2301-2019, Cita online:
CL/JUR/3005/2019

16. Servidumbre minera. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad del recurso de casación en la forma. Improcedencia de
interponer causal del art. 768 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil
en procedimientos regidos por leyes especiales, en que no se ha
omitido la decisión del asunto controvertido

En cuanto a la infracción desarrollada por el demandado en su recurso


contenida en el artículo 768 Nº 5, en relación con el artículo 170 Nº 4,
del Código de Procedimiento Civil, se debe tener en consideración en
este examen previo que el artículo 766 del Código de Procedimiento
Civil establece: "El recurso de casación en la forma se concede contra
las sentencias definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen
término al juicio o hacen imposible su continuación y, excepcionalmente,
contra las sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin
previo emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar día para la
vista de la causa". Agrega su inciso segundo, que "Procederá,
asimismo, respecto de las sentencias que se dicten en los juicios o
reclamaciones regidos por leyes especiales, con excepción de aquéllos
que se refieran a la constitución de las juntas electorales y a las
reclamaciones de los avalúos que se practiquen en conformidad a la
Ley Nº 17.235, sobre Impuesto Territorial y de los demás que prescriban
las leyes". En tanto, el inciso segundo del artículo 768 del texto citado
prescribe: "En los negocios a que se refiere el inciso segundo del
artículo 766 sólo podrá fundarse el recurso de casación en la forma en
alguna de las causales indicadas en los números 1º, 2º, 3º, 4º, 6º, 7º y
8º de este artículo y también en el número 5º cuando se haya omitido
en la sentencia la decisión del asunto controvertido". En consecuencia,
para el análisis de admisibilidad de esta causal desarrollada por el
recurrente, el legislador expresamente la excluyó por tratarse de un
procedimiento especial seguido conforme al artículo 235 del Código de
Minería, debiendo ser, por tanto, desestimado (considerando 7º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 27/05/2019, Rol Nº 4979-2019, Cita online:


CL/JUR/2907/2019
17. Casación en la forma es inadmisible tratándose de juicios
contemplados en leyes especiales como el regido por la Ley Orgánica
Constitucional de Municipalidades

Respecto de ambas causales de casación en la forma hechas valer


—la primera del artículo 768 Nº 5 en relación con el artículo 170 Nº 4
del Código de Procedimiento Civil y del artículo 768 Nº 9 del mismo
Código—, no es procedente en el presente procedimiento, según lo
dispone en forma expresa el inciso segundo del citado artículo 768, en
relación al inciso segundo del artículo 766 del mismo texto legal. En
efecto, la casación en la forma es excluida por el motivo invocado por el
recurrente tratándose de juicios contemplados en leyes especiales,
como lo es el actual, regido por la Ley Orgánica Constitucional de
Municipalidades y particularmente por su artículo 151, de suerte que no
resulta admisible este recurso de nulidad formal en el caso de autos.
Por lo antes razonado el recurso de nulidad formal deberá ser declarado
inadmisible (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema, 13/04/2020, Rol Nº 36660-2019,

Cita online: CL/JUR/23010/2020

18. El vicio con que se impugna la sentencia no recae en su contenido,


sino en la resolución en la que incide el vicio de nulidad

A la luz de esto último, teniendo presente que, si bien se impugna la


sentencia, lo cierto es que el vicio no se hace recaer en ella o su
contenido, sino que en las resoluciones en las que incide el vicio de
nulidad en estudio está constituido por el rechazo de un incidente de
nulidad procesal que concierne sólo a uno de los demandados y aquella
que tuvo por interpuestos y concedió los recursos de casación y
apelación presentados en contra de la sentencia de primer grado
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/01/2014, Rol Nº 9170-2010, Cita online:


CL/JUR/10115/2011

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 22/04/2013, Rol Nº 1513-2013,


Cita online: CL/JUR/863/2013

— Corte Suprema, 5/01/2012, Rol Nº 1532-2009,

Cita online: CL/JUR/4227/2012

— Corte Suprema, 3/03/2011, Rol Nº 7874-2010,

Cita online: CL/JUR/9789/2011

— Corte Suprema, 20/12/2011, Rol Nº 770-2011,

Cita online: CL/JUR/10218/2011

19. Partición de bienes. Resoluciones en contra de las cuales proceden


los recursos de casación en la forma y en el fondo. Improcedencia de
los recursos de casación en la forma y en el fondo en contra de la
resolución que niega lugar a las peticiones incidentales

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil establece que el


recurso de casación en la forma procede contra las sentencias
definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar el día para la vista
de la causa. Por su parte, el artículo 767 del mismo texto legal dispone
que se admite el recurso de casación en el fondo contra sentencias
definitivas inapelables y contra sentencias interlocutorias inapelables
cuando ponen término al juicio o hacen imposible su continuación,
dictadas por las Cortes de Apelaciones, siempre que se hayan
pronunciado con infracción de ley, y aquélla haya influido
substancialmente en lo dispositivo de la sentencia. Sin embargo, la
resolución impugnada mediante los presentes recursos de casación en
la forma y en el fondo, aquella que confirmó las resoluciones que
negaron lugar a las peticiones incidentales de declaración de derechos
en la comunidad y deducción como baja general de la herencia el crédito
correspondiente a gastos de última enfermedad, no participan de la
naturaleza jurídica de aquellas aludidas en los artículos 766 y 767, toda
vez que no pone fin a la instancia, ni concluye el juicio ni hace imposible
su prosecución (considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte
Suprema).
Corte Suprema, 10/05/2017, Rol Nº 9250-2017, Cita online:
CL/JUR/3055/2017

20. Cobro de pagaré. Resoluciones en contra de las cuales proceden


los recursos de casación en la forma y en el fondo. Improcedencia de
los recursos de casación en la forma y en el fondo en contra de
resolución que rechaza el incidente de nulidad procesal

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil establece que el


recurso de casación en la forma se concede contra las sentencias
definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar día de la vista de la
causa. Por su parte, el artículo 767 del Código aludido dispone que el
recurso de casación en el fondo tiene lugar contra sentencias definitivas
inapelables, cuando ponen término al juicio o hacen imposible su
continuación, dictadas por las Cortes de Apelaciones, siempre que se
hayan pronunciado con infracción de ley y esta infracción influya en lo
dispositivo de la sentencia. En la especie, la resolución impugnada
mediante los presentes recursos de casación en la forma y en el fondo,
que desestimó un incidente promovido para dejar sin efecto lo obrado
en autos, no reviste la naturaleza jurídica de las sentencias a que se
refieren los mencionados artículos 766 y 767, lo que torna improcedente
la pretensión de ineficacia formal y sustantiva impetrada en estos
antecedentes, razón por la cual los recursos en comento deben ser
declarados inadmisibles (considerandos 2º a 4º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema, 17/04/2017, Rol Nº 8371-2017, Cita online:


CL/JUR/1721/2017

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 10/05/2016, Rol Nº 25875-2016,

Cita online: CL/JUR/3167/2016

— Corte Suprema, 27/12/2016, Rol Nº 87786-2016,

Cita online: CL/JUR/8685/2016


— Corte Suprema, 18/07/2016, Rol Nº 27993-2016,

Cita online: CL/JUR/5099/2016

— Corte Suprema, 24/10/2016, Rol Nº 76397-2016,

Cita online: CL/JUR/8013/2016

— Corte Suprema, 20/09/2016, Rol Nº 42455-2016,

Cita online: CL/JUR/6445/2016

— Corte Suprema, 10/05/2016, Rol Nº 24353-2016,

Cita online: CL/JUR/3170/2016

21. Nulidad de contrato de compraventa. Incumplimiento de los


requisitos de admisibilidad del recurso de casación en la forma.
Resolución que declara la deserción del recurso de apelación
impetrado en contra de la sentencia definitiva de primera instancia no
reviste naturaleza jurídica que hace procedente la nulidad formal

Conforme al artículo 766 del Código de Procedimiento Civil, el recurso


de casación en la forma se concede contra las sentencias definitivas,
contra las interlocutorias cuando ponen término al juicio o hacen
imposible su continuación y, excepcionalmente, contra las sentencias
interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo emplazamiento
de la parte agraviada, o sin señalar día de la vista de la causa. La
resolución que, en este caso, declaró la deserción del recurso de
apelación impetrado en contra de la sentencia definitiva de primera
instancia no reviste la naturaleza jurídica de las sentencias a que se
refieren el mencionado artículo 766 del Código de Procedimiento Civil,
razón por la cual no resulta procedente el recurso en estudio
(considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/01/2017, Rol Nº 93008-2016, Cita online:


CL/JUR/2631/2017

22. Cumplimiento ejecutivo de obligación de dar. Resoluciones en


contra de las cuales proceden los recursos de casación en la forma y
en el fondo. Improcedencia de los recursos de casación en la forma y
en el fondo en contra de la resolución que declara la nulidad procesal
de oficio y proceder a un nuevo ingreso de la demanda

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil establece que el


recurso de casación en la forma se concede contra las sentencias
definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar día de la vista de la
causa. Por su parte, el artículo 767 del Código aludido dispone que el
recurso de casación en el fondo tiene lugar contra sentencias definitivas
inapelables, cuando ponen término al juicio o hacen imposible su
continuación, dictadas por las Cortes de Apelaciones, siempre que se
hayan pronunciado con infracción de ley y esta infracción influya en lo
dispositivo de la sentencia. Sin embargo, la resolución impugnada
mediante los presentes recursos de casación en la forma y en el fondo,
que anuló de oficio lo obrado en el proceso y dispuso la manera de dar
correcta tramitación a la pretensión deducida en juicio, no reviste la
naturaleza jurídica de las sentencias a que se refieren los mencionados
artículos 766 y 767, lo que torna improcedente la pretensión de
ineficacia formal y sustantiva impetrada en estos antecedentes. En
estas condiciones, corresponde declarar inadmisibles los presentes
recursos de casación en la forma y en el fondo (considerandos 2º a 4º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 5/12/2016 Rol Nº 76263-2016, Cita online:


CL/JUR/8892/2016

23. Juicio ejecutivo. Resoluciones en contra de las cuales proceden los


recursos de casación en la forma y en el fondo. Improcedencia de los
recursos de casación en la forma y en el fondo en contra de la
resolución que rechaza el incidente de nulidad de todo lo obrado

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil establece que el


recurso de casación en la forma se concede contra las sentencias
definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar día de la vista de la
causa. Por su parte, el artículo 767 del Código aludido dispone que el
recurso de casación en el fondo tiene lugar contra sentencias definitivas
inapelables, cuando ponen término al juicio o hacen imposible su
continuación, dictadas por las Cortes de Apelaciones, siempre que se
hayan pronunciado con infracción de ley y esta infracción influya en lo
dispositivo de la sentencia. En la especie, la resolución impugnada
mediante los presentes recursos de casación en la forma y en el fondo,
que rechaza los incidentes de nulidad todo lo obrado, no reviste la
naturaleza jurídica de las sentencias a que se refieren los artículos 766
y 767, lo que torna improcedente la pretensión de ineficacia formal y
sustantiva impetrada. En suma, corresponde declarar inadmisibles los
recursos de casación en la forma y en el fondo (considerandos 2º a 4º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 9/11/2016, Rol Nº 65399-2016, Cita online:


CL/JUR/8093/2016

24. Liquidación forzada. I. Resoluciones en contra de las cuales


proceden los recursos de casación en la forma y en el fondo.
Improcedencia de los recursos de casación en la forma y en el fondo
en contra de la resolución que rechaza la objeción de crédito en una
liquidación forzada. II. Improcedencia del recurso de casación en la
forma por las causales del artículo 768 Nºs. 5 y 9 del Código de
Procedimiento Civil en los juicios regidos por leyes especiales

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil dispone que se


admite el recurso de casación en la forma contra sentencias definitivas
y contra sentencias interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación, y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar día para la vista de
la causa. Por su parte, el artículo 767 del mismo Código dispone que se
admite el recurso de casación en el fondo contra sentencias definitivas
inapelables y contra sentencias interlocutorias inapelables cuando
ponen término al juicio o hacen imposible su continuación, dictadas por
las Cortes de Apelaciones, siempre que se hayan pronunciado con
infracción de ley y esta infracción haya influido substancialmente en lo
dispositivo de la sentencia. Sin embargo, en la especie, la resolución
impugnada mediante los presentes recursos de casación en la forma y
en el fondo, que confirma el rechazo de la objeción de un crédito en un
procedimiento de liquidación forzada, no presenta la característica de
aquellas aludidas en los artículos 766 y 767, toda vez que no ha puesto
fin a la instancia, ni ha concluido el juicio o hecho imposible su
prosecución, como tampoco se encuentra en la situación excepcional
prevista en la primera de las normas citadas, razón por la cual los
arbitrios intentados no podrán ser admitidos a tramitación
(considerandos 2º a 4º de la sentencia de la Corte Suprema).
Tratándose de juicios o reclamaciones regidos por leyes especiales, el
artículo 768 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil determina que
el recurso de casación en la forma sólo podrá fundarse en alguna de las
causales indicadas en sus Nºs. 1, 2, 3, 4, 6, 7 y 8, excluyéndose los
Nºs. 5 y 9, a menos que en el caso del Nº 5 el reclamo verse sobre la
omisión del asunto controvertido. Por tanto, habiéndose fundado el
presente recurso de casación en la forma precisamente en las causales
previstas en el artículo 768 Nºs. 5 y 9, éste resulta improcedente, puesto
que se está en presencia de un juicio especial, como es el
procedimiento de liquidación forzada (considerandos 5º y 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 18/04/2016, Rol Nº 7486-2016, Cita online:


CL/JUR/2503/2016

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 16/05/2017, Rol Nº 10449-2017,

Cita online: CL/JUR/3133/2017

— Corte Suprema, 22/12/2016, Rol Nº 87723-2016,

Cita online: CL/JUR/8406/2016

— Corte de Apelaciones de Santiago, 2/12/2016, Rol Nº 8354-2016,

Cita online: CL/JUR/8036/2016

— Corte Suprema, 31/03/2016, Rol Nº 13727-2015,

Cita online: CL/JUR/2149/2016

— Corte Suprema, 28/03/2016, Rol Nº 16531-2016,


Cita online: CL/JUR/1891/2016

— Corte Suprema, 28/03/2016 Rol Nº 15937-2016,

Cita online: CL/JUR/1890/2016

— Corte Suprema, 15/03/2016, Rol Nº 20165-2015,

Cita online: CL/JUR/1664/2016

— Corte Suprema, 15/11/2016, Rol Nº 16361-2016,

Cita online: CL/JUR/8275/2016

25. Responsabilidad del Estado. I. Resoluciones en contra de las cuales


procede el recurso de casación en la forma. Improcedencia del
recurso de casación en la forma en contra de la resolución que
rechaza un recurso de hecho. II. Improcedencia de la apelación
en contra de la resolución de la Corte de Apelaciones que rechaza un
recurso de hecho. Competencia excepcional de la Corte Suprema
para conocer de la apelación

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil dispone que se


admite el recurso de casación en la forma contra sentencias definitivas
y contra sentencias interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación, y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar día para la vista de
la causa. Sin embargo, la resolución impugnada mediante el presente
recurso de casación en la forma, que rechaza un recurso de hecho, no
presenta la característica de aquellas aludidas en el artículo 766, toda
vez que no ha puesto fin a la instancia, ni tampoco ha concluido el juicio
o hecho imposible su prosecución, ni se encuentra en la situación
excepcional prevista en dicha norma, razón por la cual el arbitrio deberá
ser declarado inadmisible (considerandos 2º y 3º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Resulta inadmisible el recurso de apelación deducido en subsidio en


contra de la resolución de la Corte de Apelaciones que rechaza un
recurso de hecho, toda vez que la Corte Suprema es, por naturaleza,
un tribunal de casación y sólo excepcionalmente, en los casos previstos
por la ley, tiene competencia para conocer recursos de apelación, según
se desprende de los artículos 96 y 98 del Código Orgánico de
Tribunales, sin que la resolución a cuyo respecto en la especie se ha
formulado la apelación se encuentre en la situación excepcional referida
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 5/04/2016, Rol Nº 18454-2016, Cita online:


CL/JUR/2182/2016

ARTÍCULO 767

El recurso de casación en el fondo tiene lugar contra sentencias definitivas


inapelables y contra sentencias interlocutorias inapelables cuando ponen
término al juicio o hacen imposible su continuación, dictadas por Cortes de
Apelaciones o por un tribunal arbitral de segunda instancia constituido por
árbitros de derecho en los casos en que estos árbitros hayan conocido de
negocios de la competencia de dichas Cortes, siempre que se hayan
pronunciado con infracción de ley y esta infracción haya influido
substancialmente en lo dispositivo de la sentencia.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 158, 315, 628, 776, 783, 785 y 807.
Código Orgánico de Tribunales: artículos 98 Nº 2 y 239. Código Tributario: artículo 148.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Responsabilidad del Estado. Recurrente de casación en el fondo que


no denuncia como transgredidas las normas decisorias de la litis

Según lo dispone el artículo 767 del Código de Procedimiento Civil, el


recurso de casación en el fondo procede en contra de sentencias que
se hayan pronunciado con infracción de ley cuando dicha infracción ha
influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo. Por otra parte, para
que un error de derecho pueda influir de manera sustancial en lo
dispositivo de la sentencia, debe consistir en una equivocada aplicación,
interpretación o falta de aplicación de las normas destinadas a decidir
la cuestión controvertida. Ninguno de tales presupuestos ha tenido lugar
en la especie como fundamento del recurso, toda vez que el
artículo 2322 del Código Civil no configura un precepto legal de orden
sustantivo relacionado con el fondo de la cuestión litigiosa. En efecto,
resulta un hecho asentado en la causa, que la Municipalidad
demandada es responsable de indemnizar los daños ocasionados por
el accidente vehicular que causó el fallecimiento de uno de sus
trabajadores, cónyuge y padre de las demandantes, en virtud de su
condición de propietario del vehículo objeto del accidente, conforme lo
previsto en el artículo 174 de la Ley del Tránsito, y no por aplicación de
la regla prevista en el artículo 2322 del Código Civil, de manera que aún
si esta Corte estimare que se ha configurado el yerro denunciado, la
Corte tendría que declarar que éste no influye en lo dispositivo de la
sentencia, pues la equivocada aplicación de las normas legales que
resuelven la cuestión controvertida no ha sido denunciada como error
de derecho (considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 2/06/2020, Rol


Nº 23075-2019,

Cita online: CL/JUR/34932/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 20/03/2019, Rol


Nº 12004-2018,

Cita online: CL/JUR/1517/2019

2. Aumento de pensión alimenticia. I. Improcedencia del recurso de


casación en el fondo en contra de la resolución que rechaza un
recurso de casación en la forma. Improcedencia de la casación de
casación.

Conforme se desprende de lo preceptuado por el artículo 767 del


Código de Procedimiento Civil, el arbitrio de casación en el fondo
procede sólo respecto sentencias definitivas dictadas por Cortes de
Apelaciones e interlocutorias, cuando se traten de aquellas que ponen
término al juicio o hacen imposible su continuación. A su vez, el
artículo 158 del mismo texto, al momento de conceptualizar los diversos
tipos de resoluciones judiciales, define sentencia definitiva, como
aquella que "pone fin a la instancia", y que lo hace, "resolviendo la
cuestión o asunto que ha sido objeto del juicio". Por su parte, la doctrina
procesal ha señalado que por instancia, debe entenderse el grado o
etapa jurisdiccional en que se conoce un determinado asunto sometido
a los tribunales de justicia; Eduardo Couture, enseña que corresponde
a la denominación que se da a cada una de las etapas o grados del
proceso, que principia con el impulso que lo inaugura (sea la demanda
o la apelación), y se extiende hasta el fallo definitivo (Así lo explica en
su obra Fundamentos del Derecho Procesal Civil, Ed. B de F, Buenos
Aires, p. 139), que en los sistemas procesales vigentes, se vincula con
la existencia del doble grado de conocimiento, de modo que la sentencia
definitiva, tiene que ver con aquella decisión que clausura la etapa de
conocimiento, entendida ella, como el ámbito procesalmente delimitado
en que se puede ejercer las etapas jurisdiccionales, y por lo tanto, es el
momento en que el juez puede pronunciarse sobre la controversia
sustantiva, fijada en el periodo de discusión, ponderar la prueba, fijar los
hechos probados, y establecer sus consecuencias jurídicas. En tal
entendido, el recurso de casación en la forma no produce como efecto
la apertura de una instancia, por cuanto su interposición no significa la
entrada a una etapa con las referidas facultades judiciales, pues se trata
de una herramienta recursiva destinada a hacer valer la nulidad
procesal, conforme el principio de especificidad, esto es, sujeta a
causales expresamente señaladas por el legislador. Por tanto, la
decisión que se pronuncia sobre un recurso de casación en la forma
carece de la naturaleza jurídica de sentencia definitiva, en los términos
que hace procedente el de casación en el fondo (considerando 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 26/05/2020, Rol Nº 18381-


2019,

Cita online: CL/JUR/30909/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 21/02/2020, Rol Nº 10462-


2019,

Cita online: CL/JUR/12895/2020

3. Acción de no discriminación arbitraria. I. Improcedencia del recurso


de casación en el fondo si el o los errores derechos de que adolece la
sentencia no influyen sustancialmente en lo dispositivo del fallo. II.
Leyes reguladoras de la prueba, concepto e hipótesis en que son
vulneradas
I. De conformidad a la parte final del artículo 767 del Código de
Procedimiento Civil, para que procede el arbitrio de casación en el fondo
no es suficiente establecer la existencia de una infracción de ley, sino
que es menester, además, que tal vulneración haya influido
sustantivamente en lo decisorio del fallo, es decir, que se trate de un
yerro trascendente, en cuanto corresponda a la circunstancia o
elemento basal que provoca la decisión adoptada. En otras palabras,
una infracción de ley es capaz de provocar la invalidación de una
sentencia, por vía de este arbitrio, en la medida que su reparación
implique de manera necesaria una alteración de la decisión arribada, de
modo que, si la resolución dictada no se ve afectada por la remoción del
vicio, resultaría que dicho defecto no tuvo influencia en lo dispositivo del
fallo, y el recurso no podría prosperar. Aquello es lo que, a juicio de la
Corte, sucede en la especie, pues, incluso en el evento que sea efectivo
que se soslayó la valoración y análisis de parte de la prueba documental
aparejada al juicio, no se constata que dicha omisión influya de manera
sustancial en lo dispositivo del fallo. En efecto, la documental que indica
como omitida, corresponden, por un lado, a correos electrónicos entre
las partes, de los cuales, según expresa el recurrente, constarían los
actos y comentarios discriminatorios del demandado en contra del actor.
Sin embargo, de su lectura, sólo se observa una serie de impresiones
de dichas comunicaciones electrónicas desprovistas de contexto, y sin
advertirse la manifestación de expresiones discriminatorias como las
que denuncia el actor. Pues bien, se resalta de dichos instrumentos las
respuestas que formula a correos del denunciado que no se incorporan,
realizando aseveraciones que no constan por la falencia indicada, de
modo que en caso alguno tienen la suficiencia necesaria para
establecer la existencia de las conductas que se acusan
(considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

II. Tanto la doctrina como jurisprudencia señalan que las normas


reguladoras de la prueba se entienden vulneradas cuando los
sentenciadores invierten el onus probandi, rechazan pruebas que la ley
admite, aceptan medios que la ley rechaza, desconocen el valor
probatorio de las producidas en la causa no obstante asignarles la ley
uno de carácter obligatorio. Se trata, por tanto, de normas básicas de
juzgamiento que contienen deberes, limitaciones o prohibiciones a que
deben sujetarse los tribunales y, por ende, estos últimos son soberanos
para apreciar las probanzas entre tanto se mantienen en el marco fijado
por las normas reguladoras ya indicadas. Por la misma razón, no son
susceptibles de ser revisadas por la vía de casación las decisiones
basadas en disposiciones que otorgan libertad a la judicatura del fondo
para valorar los elementos probatorios aportados (considerando 9º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 18/05/2020, Rol Nº 8325-


2019,

Cita online: CL/JUR/30837/2020

4. Reclamo de ilegalidad municipal. Invalidación de premisos de


edificación de los llamados guetos verticales. Demandantes revisten
la calidad de titulares o representan un interés colectivo que puede
resultar afectado por la decisión de la entidad edilicia

En la especie, los jueces del grado resolvieron la controversia


estableciendo que la resolución reclamada, desde que se refiere a la
invalidación de determinados premisos de edificación de los llamados
guetos verticales, afecta claramente el interés de la comuna y sus
habitantes. La sola exposición del arbitrio deja al descubierto sus serias
falencias, que impiden que éste pueda prosperar, toda vez que, como
se expuso precedentemente, los sentenciadores acogen la acción no
sólo por considerar que los procedimientos de invalidación de iniciaron
a instancias de los actores, sino que, a la vez, han establecido que éstos
son titulares de un interés colectivo, pues la decisión que, en definitiva,
adopte la Municipalidad, afectará a todos los habitantes de la comuna.
En efecto, aún en el caso que esta Corte estimara que los demandantes
no revisten la calidad de interesados al tenor del numeral 1 del
artículo 21 de la Ley Nº 19.880, por no haber iniciado el procedimiento
de invalidación, configurándose el yerro jurídico denunciado, éste
carecería de influencia en lo dispositivo del fallo, al quedar asentado, en
la decisión de acoger la acción, sobre la base de la línea argumental
sostenidas por los sentenciadores, no impugnada por el arbitrio en
estudio, que propugna que los reclamantes en cuyo favor se acoge el
reclamo, son titulares o representan, un interés colectivo que puede
resultar afectado por la decisión que, en definitiva, adopte la entidad
edilicia, cuestión suficiente para rechazarlo, en cumplimiento del
artículo 767 del Código de Procedimiento Civil conforme al cual el
recurso de casación en el fondo procede en contra de sentencias que
se hayan pronunciado con infracción de ley, cuando esta vulneración
haya influido substancialmente en lo dispositivo del fallo, requisito que
no se cumple en la especie, toda vez que el error de derecho
denunciado no afecta esencialmente lo resolutivo de la sentencia
(considerandos 9º, 11º y 13º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 13/04/2020, Rol


Nº 36660-2019,

Cita online: CL/JUR/23010/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional),24/01/2020, Rol


Nº 16328-2019,

Cita online: CL/JUR/8127/2020

5. Comodato precario. Procedencia del recurso de casación en el fondo


ante infracción de ley que influye substancialmente en lo dispositivo
de la sentencia. Principio de la trascendencia. Calificación de
ocupación de inmueble en virtud a precario o de comodato precario
no tiene influencia sustancial en lo dispositivo del fallo

La conculcación de ley que hace procedente el arbitrio de casación


en el fondo es sólo aquella que recae en una norma que influya de
manera fundamental en la decisión que se impugna. En efecto, el
artículo 767 del Código de Procedimiento Civil, señala que tal recurso
procede "siempre que se hayan pronunciado con infracción de ley y esta
infracción haya influido substancialmente en lo dispositivo de la
sentencia", de modo que el tribunal puede desestimarlo si el error
jurídico no repercutió en aquella parte que contiene la decisión del
asunto controvertido. Por el contrario, tendrá influencia sustancial en la
parte dispositiva de la sentencia impugnada en la medida que haya sido
decisivo en el resultado de la resolución, de modo que su corrección
provoque necesariamente la modificación total o parcial de su parte
resolutiva. Aquello se vincula íntimamente con los principios doctrinales
que rigen la nulidad procesal, específicamente, del denominado
principio de la trascendencia, el cual se reconduce a la exigencia
procesal de que siendo la invalidación de las resoluciones judiciales una
medida de última ratio, sólo procede en la medida que se justifique su
corrección por dicha vía, como única fórmula de reparación del perjuicio
injusto que provoca (considerando 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

La vulneración de ley que se denuncia, incluso de configurarse el error


alegado, no es suficiente para la procedencia del recurso de casación
intentado, puesto que no se trata de un quebrantamiento que influya en
lo dispositivo del fallo. En efecto, la decisión se apoya en circunstancia
fácticas idénticas a las contenidas en el arbitrio, aunque difiere en su
calificación normativa, la que ordenó la restitución del bien raíz por
requerirlo así su propietaria, puesto que, tras la entrega, no se estipuló
un plazo para su devolución, que tampoco se determinó luego de
retirarse el socio y permanecer en él la demandada, misma conclusión
que debiera sostenerse si se sigue hipotéticamente el planteamiento de
la recurrente, que admite carecer de título para seguir ocupando el
inmueble de propiedad de la demandante y que en ella concurren todos
los supuestos a que se refiere el artículo 2195 inciso 2º del Código
Civil para hacer procedente una eventual acción de precario. De este
modo, se concluye que la decisión no podría ser otra que la sostenida
por la judicatura del fondo, en cuanto a ordenar la restitución del
inmueble que ocupa la demandada a su dueña, por lo que forzoso es
colegir que el vicio denunciado no tiene influencia sustancial en lo
dispositivo del fallo, razón que permite desestimar el arbitrio interpuesto
en esta etapa procesal por adolecer de manifiesta falta de fundamento
(considerando 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 19/12/2019, Rol Nº 10630-


2019,

Cita online: CL/JUR/12435/2019

6. Cumplimiento de contrato de mandato. Requisitos de procedencia de


recurso de casación en el fondo. Recurrente debe indicar la ley que
se denuncia como vulnerada y que ha tenido influencia sustancial en
lo resolutivo de la sentencia cuya anulación se persigue

La jurisprudencia de la Corte Suprema ha dicho que las normas


infringidas en el fallo para que pueda prosperar un recurso de casación
en el fondo han de ser tanto las que el fallador invocó en su sentencia
para resolver la cuestión controvertida, como aquéllas que dejó de
aplicar y que tienen el carácter de normas decisoria litis, puesto que en
caso contrario esta Corte no podría dictar sentencia de reemplazo, dado
el hecho que se trata de un recurso de derecho estricto. (CS, 14
diciembre 1992, RDJ, T. 89, secc. 1a, pág. 188). No debe perderse de
vista que el recurso de casación en el fondo persigue instar por un
examen del juicio conclusivo de la cuestión principal, desplegado en la
sustancia misma de la sentencia definitiva o interlocutoria que se busca
anular, cuyos desaciertos jurídicos sólo autorizarán una sanción
procesal de esa envergadura en la medida que hayan trascendido hasta
la decisión propiamente tal del asunto, definiéndola en un sentido
distinto a aquel que se imponía según la recta inteligencia y aplicación
de la normativa aplicable. De este modo, entonces, aun bajo los
parámetros de desformalización y simplificación que caracterizan a este
arbitrio desde la entrada en vigencia de la Ley Nº 19.374, no se exime
a quien lo plantea de indicar la ley que se denuncia como vulnerada y
que ha tenido influencia sustancial en lo resolutivo de la sentencia cuya
anulación se persigue. Así, aun en el evento de que esta Corte
concordara con la recurrente en el sentido de haberse producido los
yerros que se denuncian, tendría, no obstante, que declarar que los
mismos no influyen en lo dispositivo de la sentencia, pues las normas
que debieron haberse denunciado como infringidas no han sido
consideradas al puntualizar las infracciones preceptivas descrita en el
arbitrio procesal que se examina (considerandos 5º a 7º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil, 26/12/2019, Rol Nº 14743-2018,

Cita online: CL/JUR/12407/2019

7. Reclamación de multa administrativa. Multa aplicada por la Seremi


de Salud. Resoluciones en contra de las cuales procede el recurso de
casación en el fondo. Improcedencia del recurso de casación en el
fondo contra la sentencia que devuelve los autos al tribunal de primera
instancia para que emita pronunciamiento respecto de las
alegaciones sustantivas

El artículo 767 del Código de Procedimiento Civil establece que el


recurso de casación en el fondo tiene lugar contra sentencias definitivas
inapelables e interlocutorias inapelables cuando ponen término al juicio
o hacen imposible su continuación, dictadas, en lo que interesa, por
Cortes de Apelaciones, siempre que se hayan pronunciado con
infracción de ley, y aquella haya influido substancialmente en lo
dispositivo de la sentencia. En la especie, la sentencia impugnada,
aquella que revoca la de primera instancia y rechaza la alegación de
decaimiento administrativo, no resuelve el fondo del asunto ni hace
imposible la continuación del procedimiento, por el contrario, devuelve
los autos al tribunal de primera instancia para que emita
pronunciamiento respecto de las alegaciones sustantivas, dando curso
al procedimiento, que habrá de concluir a través de la dictación de otra
resolución, eventualmente susceptible, incluso, del recurso de
apelación, circunstancia que demuestra que la resolución objetada por
la vía del presente arbitrio de nulidad sustancial no reviste la naturaleza
jurídica de las sentencias aludidas en el artículo 767. En tales
condiciones, procede rechazar el recurso deducido (considerandos 2º y
3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 10/06/2019, Rol


Nº 15079-2018,

Cita online: CL/JUR/3281/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 5/06/2019, Rol


Nº 29927-2018,

Cita online: CL/JUR/3601/2019

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 17/04/2019, Rol


Nº 31277-2018,

Cita online: CL/JUR/2116/2019

8. Responsabilidad del Estado. Indemnización de perjuicios, acogida.


Finalidad del recurso de casación en el fondo. Tribunal de Casación
no puede modificar los hechos establecidos por los jueces del fondo
si no hay vulneración de las leyes reguladoras de la prueba.
Recurrente de casación en el fondo que no expresa en qué consisten
los errores de derecho de que adolece la sentencia y de qué modo
influyen sustancialmente en lo dispositivo del fallo

Además, el recurso de casación en el fondo intenta variar los hechos


del proceso, proponiendo otros que, a juicio del recurrente, estarían
acreditados como sería el que no se probó la falta de servicio y los
daños ocasionados al demandante, lo cual conforme se lee —incluso—
de los propios motivos que transcribió el recurrente respecto de la
sentencia de primera instancia, en su arbitrio, aquello no es efectivo.
Pues bien, al respecto resulta pertinente reiterar lo dicho por el Máximo
Tribunal, en cuanto a que la variación de los hechos asentados en la
causa es ajena a un recurso de esta especie, destinado a invalidar una
sentencia en los casos expresamente establecidos por la ley. En efecto,
a través del recurso de casación se analiza la legalidad de una
sentencia, lo que significa que se realiza un escrutinio respecto de la
aplicación correcta de la ley y el derecho, pero los hechos, como
soberanamente los han dado por probados o sentados los jueces del
fondo no pueden modificarse por la Corte de casación, a menos que se
haya denunciado y comprobado la efectiva infracción de normas
reguladoras del valor legal de la prueba, cuyo no es el caso de autos
(considerando 13º de la sentencia de la Corte Suprema). De acuerdo al
artículo 772 del Código de Procedimiento Civil, en relación con los
artículos 764 y 767 del mismo Código, se permite como único sustento
de la invalidación de la sentencia censurada el quebrantamiento de una
o más normas legales contenidas en la decisión. Por ello, es menester
que al interponer un recurso de casación en el fondo, se cumpla lo
requerido por la disposición en análisis, esto es, expresar en qué
consisten él o los errores de derecho que se denuncian. En este caso,
el libelo en cuestión no cumple tales exigencias. En efecto el recurso
carece de razonamientos concretos y precisos dirigidos a demostrar los
errores de derecho en que habrían incurrido los sentenciadores,
constriñendo su exposición a la simple aseveración que no se probó la
"responsabilidad y los daños alegados por el demandante", para luego
transcribir parte de la sentencia de primera instancia, lo cual no se
condice con la exigencia impuesta por el legislador. Las circunstancias
antes descritas hacen imposible entrar al estudio del recurso, por cuanto
ello importaría dejar a la discrecionalidad de la Corte la determinación
del error de derecho en que pudiere incurrir la sentencia, cuestión que
atañe a un asunto que la ley ha impuesto a la parte agraviada
(considerandos 11º y 12º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 28/05/2019, Rol


Nº 6313-2019,

Cita online: CL/JUR/2932/2019


Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 27/01/2020, Rol


Nº 19117-2018,

Cita online: CL/JUR/9434/2020

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 27/01/2020, Rol


Nº 18697-2019,

Cita online: CL/JUR/8692/2020

— Corte Suprema Tercera Sala (Penal), 10/10/2019, Rol Nº 35295-


2017,

Cita online: CL/JUR/5945/2019

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 7/10/2019, Rol


Nº 12141-2019,

Cita online: CL/JUR/5529/2019

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 17/09/2019, Rol Nº 16589-


2018,

Cita online: CL/JUR/6796/2019

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 23/05/2019, Rol Nº 40226-


2017,

Cita online: CL/JUR/2807/2019

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 20/03/2019, Rol Nº 3001-


2018,

Cita online: CL/JUR/1577/2019

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 5/04/2018, Rol


Nº 45434-2017,

Cita online: CL/JUR/1655/2018


9. Resolución objetada por la vía de los recursos de casación en la
forma y en el fondo no reviste la naturaleza jurídica de sentencias
definitivas o interlocutorias cuando ponen término al juicio o hacen
imposible su continuación

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil dispone que el


recurso de casación en la forma se concede contra las sentencias
definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar día para la vista de
la causa. El artículo 767 del Código de Procedimiento Civil, por su parte,
establece que el recurso de casación en el fondo tiene lugar contra
sentencias definitivas inapelables e interlocutorias inapelables cuando
ponen término al juicio o hacen imposible su continuación, dictadas, en
lo que interesa, por Cortes de Apelaciones, siempre que se hayan
pronunciado con infracción de ley, y aquella haya influido
substancialmente en lo dispositivo de la sentencia. Como puede
advertirse, la resolución objetada por la vía de los recursos de casación
en la forma y en el fondo no reviste la naturaleza jurídica de ninguna de
las resoluciones descritas en los fundamentos segundo y tercero, pues
desde luego no es una sentencia definitiva y tampoco una interlocutoria
de aquellas que ponen término al juicio o hacen imposible su
continuación, tanto así, que en su propio texto se dispone que rija la
resolución que citó a las partes para oír sentencia, dándole curso al
proceso (2º a 4º de la sentencia de Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 21/03/2019, Rol


Nº 24732-2018,

Cita online: CL/JUR/1617/2019

10. Reclamación de monto de indemnización por expropiación. I.


Improcedencia del recurso de casación en el fondo respecto de la
infracción de normas ordenatoria litis

De conformidad con lo que dispone el artículo 767 del Código de


Procedimiento Civil, el recurso de casación en el fondo lo concede la ley
en contra de sentencias que se hayan pronunciado con infracción de ley
que haya influido en lo dispositivo del fallo, esto es, en contra de
aquellos fallos que contienen errores de derecho consistentes en una
equivocada aplicación, interpretación o falta de aplicación de aquellas
normas destinadas a decidir la cuestión controvertida, y no como en la
especie ha ocurrido, en que se pretende infringido el artículo 170 Nº 4
del Código de Procedimiento Civil, que tiene carácter ordenatorio litis, y
como tal, los vicios atribuidos a esta supuesta infracción pueden
eventualmente ser objeto de una casación de carácter formal, pero
resultan ajenos a la casación en estudio (considerando 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 19/03/2019, Rol


Nº 24845-2018,

Cita online: CL/JUR/1425/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 12/03/2019, Rol


Nº 132728-2018,

Cita online: CL/JUR/1202/2019

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial),07/02/2019, Rol Nº 18757-


2018,

Cita online: CL/JUR/730/2019

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 13/12/2018, Rol Nº 22086-


2018,

Cita online: CL/JUR/6922/2018

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 13/12/2018, Rol Nº 22086-


2018,

Cita online: CL/JUR/6922/2018

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 13/12/2018, Rol Nº 22086-


2018,

Cita online: CL/JUR/6922/2018


— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 5/12/2018, Rol Nº 12005-
2018,

Cita online: CL/JUR/6819/2018

11. Indemnización de perjuicios por responsabilidad extracontractual.


Accidente de tránsito. Resoluciones en contra de las cuales procede
el recurso de casación en el fondo. Recurrente de casación en el
fondo que no denuncia como transgredidas las normas decisorias de
la litis. Recurrente de casación en el fondo que no expresa en qué
consisten los errores de derecho de que adolece la sentencia y de
qué modo influyen sustancialmente en lo dispositivo del fallo

De conformidad al artículo 767 del Código de Procedimiento Civil, el


recurso de casación en el fondo procede contra las resoluciones que
señala, siempre que se hayan pronunciado con infracción de ley que
influya substancialmente en su parte dispositiva. Conforme a lo
establecido en el artículo 772 de dicho Código, el escrito respectivo
debe expresar en qué consiste el o los errores de derecho de que
adolece la sentencia recurrida, y de qué modo ese o esos errores de
derecho han influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo. Luego,
de la sola lectura del arbitrio intentado, se desprende que no se acusa
la vulneración de normas sustantivas o decisoria litis, debiendo
entenderse por tales aquellas con arreglo a las cuales debe resolverse
el litigio, y que son las únicas que pueden influir de un modo sustancial
en lo dispositivo de la sentencia; pues se limita a reprochar la infracción
a la que dispone que la agregación de los instrumentos presentados
oportunamente corresponde a un trámite esencial en primera instancia,
que corresponde a una norma ordenatoria litis, sin denunciar la
conculcación de la que establece los presupuestos de la demanda
entablada, cuya concurrencia se desestimó, lo que lleva a concluir que
la impugnación carece de un desarrollo y explicación suficientes acerca
de errores de derecho que puedan incidir sobre la materia debatida y la
decisión de fondo (considerandos 6º y 7º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 5/12/2018, Rol Nº12005-2018,

Cita online: CL/JUR/6819/2018


12. Cobro ejecutivo de obligaciones tributarias. Resoluciones en contra
de las cuales procede el recurso de casación en el fondo.
Improcedencia del recurso de casación en el fondo en contra de la
resolución que rechaza recurso de hecho interpuesto en contra de
aquella que no concedió apelación deducida

El artículo 767 del Código de Procedimiento Civil establece que el


recurso de casación en el fondo tiene lugar contra sentencias definitivas
inapelables, cuando ponen término al juicio o hacen imposible su
continuación, dictadas por Cortes de Apelaciones, siempre que se
hayan pronunciado con infracción de ley y esta infracción influya en lo
dispositivo de la sentencia. Por consiguiente, la resolución impugnada
mediante el presente recurso de casación en el fondo, que rechaza el
recurso de hecho dirigido en contra de la resolución que denegó la
concesión de la apelación interpuesta en contra de aquella que declaró
inadmisible impugnación presentada, no reviste la naturaleza jurídica de
aquellas descritas en el 767 del Código de Procedimiento Civil, toda vez
que no ha puesto fin a la instancia, ni tampoco ha concluido el juicio ni
hace imposible su prosecución. En consecuencia, procede declarar la
inadmisibilidad del recurso deducido (considerandos 2º a 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 3/12/2018, Rol Nº 25068-2018

Cita online: CL/JUR/6711/2018

13. Acción de precario. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad


del recurso de casación en el fondo. Recurrente de casación en el
fondo que no denuncia como transgredidas las normas decisorias de
la litis

De conformidad al artículo 767 del Código de Procedimiento Civil, el


recurso de casación en el fondo procede contra las resoluciones que
señala, siempre que se hayan pronunciado con infracción de ley que
influya substancialmente en su parte dispositiva. Según lo establecido
en el artículo 772 de dicho Código, el escrito respectivo debe expresar
en qué consiste el o los errores de derecho de que adolece la sentencia
recurrida, y de qué modo ese o esos errores de derecho han influido
sustancialmente en lo dispositivo del fallo. Luego, de la sola lectura del
arbitrio intentado se desprende que existen dos razones por las cuales
no podrá prosperar. La primera, porque sus argumentos apuntan a lo
resuelto respecto del recurso de casación en la forma que interpuso en
contra de la sentencia de primera instancia, que no reviste la naturaleza
jurídica que de acuerdo a las normas antes citadas permite que pueda
ser atacada por esta vía; y, la segunda, porque la recurrente no acusa
la vulneración de normas sustantivas o decisoria litis, debiendo
entenderse por tales aquellas con arreglo a las cuales debe resolverse
el litigio, y que son las únicas que pueden influir de un modo sustancial
en lo dispositivo de la sentencia (considerandos 6º y 7º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 22/11/2018, Rol Nº 8888-


2018,

Cita online: CL/JUR/6530/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 22/11/2018, Rol Nº 4577-


2018,

Cita online: CL/JUR/6529/2018

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 8/05/2018, Rol Nº 1296-


2018,

Cita online: CL/JUR/3825/2018

14. Nulidad de derecho público. Recurrente de casación en el fondo que


no expresa en qué consisten los errores de derecho de que adolece
la sentencia y de qué modo influyen sustancialmente en lo dispositivo
del fallo. Improcedencia de formular alegaciones nuevas en el recurso
de casación en el fondo. Principio de bilateralidad de la audiencia

De conformidad al artículo 767 del Código de Procedimiento Civil, el


recurso de casación en el fondo procede en contra de sentencias que
se hayan pronunciado con infracción de ley, cuando esta vulneración
haya influido substancialmente en lo dispositivo del fallo. Para que un
error de derecho pueda influir de manera substancial en lo dispositivo
del fallo, como lo exige la ley, aquél debe consistir en una equivocada
aplicación, interpretación o falta de aplicación de aquellas normas
destinadas a decidir la cuestión controvertida, siendo imprescindible,
para acoger el arbitrio, la constatación previa respecto que la remoción
del vicio cambiará lo decidido por los jueces del grado. En este caso, no
se cumple la exigencia mencionada. En efecto, si bien el arbitrio guarda
relación con la acción ejercida, lo cierto es que tiene un defecto
insalvable que imposibilita la revisión de las materias de fondo en él
propuestas, cual es que en el mismo se soslayan decisiones de los
jueces del grado, al no vincularse los errores de derecho denunciados
con ellas. Por esta razón, éstos carecen de influencia en lo dispositivo
del fallo, puesto que, aun cuando esta Corte concordara con el
recurrente respecto de la existencia de tales yerros, este arbitrio no
podría prosperar, puesto que los razonamientos que determinaron el
rechazo permanecen inamovibles al no ser impugnados por el
recurrente (considerandos 13º y 14º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 29/10/2018, Rol


Nº 44629-2017,

Cita online: CL/JUR/6242/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 25/09/2018, Rol


Nº 4342-2018,

Cita online: CL/JUR/5214/2018

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 29/08/2018,


Rol: 12626-2018,

Cita online: CL/JUR/5517/2018

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 25/07/2018, Rol


Nº 43105-2017,

Cita online: CL/JUR/3920/2018

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 5/07/2018, Rol Nº 45390-


2017,

Cita online: CL/JUR/3831/2018


15. Indemnización de perjuicios por incumplimiento contractual.
Recurrente de casación no denuncia la conculcación de las normas
decisoria litis. Infracción de ley denunciada debe haber tenido
influencia sustancial en su parte resolutiva o decisoria del fallo
impugnado

En la especie queda en evidencia que pese al esfuerzo argumentativo


del impugnante, su recurso no ha sido encaminado, como debió serlo,
abarcando el basamento jurídico que en propiedad e ineludiblemente
resultaba ser pertinente y de rigor. Esto es así puesto que la preceptiva
legal —denunciada, artículos 1560, 1563 y 1564 del Código Civil— y
que constituye, como se ha visto, aquella en que se asila la estructura
normativa sobre la cual viene construido el alegato de casación de
fondo, no es bastante para abordar el examen de la resolución de la
controversia de la forma en que se hizo por los juzgadores, al no venir
denunciada la conculcación de las normas decisoria litis fundamentales
para la resolución de la materia discutida (resolución de contrato e
indemnización de perjuicios por incumplimiento del contrato de
promesa), esto es, los artículo s 1489, 1545 y 1554 del Código Civil. En
este punto de la reflexión vale poner de relieve que la particularidad que
—en cuanto constituye su objetivo directo— define al recurso de
casación en el fondo es que permite la invalidación de determinadas
sentencias que hayan sido pronunciadas con infracción de ley, siempre
que esta haya tenido influencia sustancial en su parte resolutiva o
decisoria. Semejante connotación esencial de este medio de
impugnación se encuentra claramente establecida en el art ículo 767
del Código de Procedimiento Civil, que lo instituye dentro de nuestro
ordenamiento positivo y se traduce en que no cualquier transgresión de
ley resulta idónea para provocar la nulidad de la sentencia impugnada,
la que no se configura en el mero interés de la ley, sino sólo aquella que
haya tenido incidencia determinante en lo resuelto, esto es, la que
recaiga sobre alguna ley que en el caso concreto ostente la condición
de ser decisoria litis. En tal sentido, esta Corte ha dicho que las normas
infringidas en el fallo para que pueda prosperar un recurso de casación
en el fondo han de ser tanto las que el fallador invocó en su sentencia
para resolver la cuestión controvertida, como aquéllas que dejó de
aplicar y que tienen el carácter de normas decisoria litis , puesto que en
caso contrario esta Corte no podría dictar sentencia de reemplazo, dado
el hecho que se trata de un recurso de derecho estricto. (CS,
14 diciembre 1992, RDJ, T. 89, secc. 1a, pág. 188) (considerando 5º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 28/06/2018, Rol Nº 43054-2017,

Cita online: CL/JUR/3570/2018

16. Cumplimiento de instrucciones notariales. I. Interpretación de los


contratos. Desnaturalización de lo acordado por las partes permite al
Tribunal de Casación revisar la interpretación contractual

Corresponde a los tribunales del grado la labor de interpretar los


contratos, cuestión que escapa del ámbito de control de la Corte de
casación, a menos que, como sostiene la doctrina y jurisprudencia, los
sentenciadores de instancia le atribuyan efectos diversos de los que
prevé la ley o lo desnaturalicen al interpretarlo. En efecto, conforme se
ha señalado por el tribunal, la interpretación de las cláusulas de un
contrato y la determinación de la intención que motivó a las partes a
celebrarlo es una cuestión de hecho que la judicatura deduce del
examen de la propia convención, de los antecedentes reunidos en el
proceso y de la ley, labor que, por ello, no es susceptible de revisión en
sede de casación, a menos, que se altere la esencia o naturaleza del
mismo, debiendo entenderse que aquello sucede, cuando la labor
exegética llevada a cabo no se limita a fijar la voluntad de las partes,
sino que, so pretexto de hacerlo, se le asigna una comprensión contraria
a la realidad, desconociendo la intención de los contratantes,
sustituyendo el contrato prácticamente por uno nuevo, distinto al que las
partes celebraron (considerando 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 19/02/2020, Rol Nº 12624-


2019,

Cita online: CL/JUR/11094/2020

17. Indemnización de perjuicios por responsabilidad extracontractual.


Facultad privativa de los jueces del fondo para apreciar y valorar la
prueba. Nueva valoración de la prueba excede el ámbito del recurso
de casación en el fondo. Tribunal de Casación no puede modificar los
hechos establecidos por los jueces del fondo si no hay vulneración de
las leyes reguladoras de la prueba
Los hechos del proceso resultan inamovibles para el Tribunal de
Casación, en tanto la recurrente no denunció, de modo eficiente, la
vulneración de las normas reguladoras de la prueba, lo que habría
permitido, una vez constatada tal infracción, analizar las probanzas de
autos y, en su caso, modificar los hechos establecidos por los
sentenciadores. No se vislumbra la acusada contravención del
artículo 346 Nºs. 2 y 4 del Código de Procedimiento Civil en relación con
los art ículos 1700 y 1702 del Código Civil, pues los juzgadores no han
alterado la naturaleza pública o privada de los instrumentos
acompañados al juicio en tal carácter y las alegaciones se orientan más
bien a promover que la Corte realice una nueva valoración de la prueba
documental y en particular del aludido informe, actividad que resulta
ajena al recurso de casación. Entonces, de la lectura del recurso resulta
evidente que lo que se ataca por esta vía en examen no corresponde
propiamente a la infracción de una ley imperativa, sino la ponderación
judicial de la prueba rendida. En estas condiciones, sólo cabe constatar
que la actividad destinada a apreciar y ponderar las probanzas rendidas
en juicio se agotó con la determinación que a este respecto hicieron los
jueces del fondo, quienes —en uso de sus facultades privativas—
dejaron establecidos los presupuestos materiales que autorizan a
desestimar la acción deducida (considerandos 4º y 5º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 21/01/2020, Rol: 23225-2019,

Cita online: CL/JUR/6831/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 28/05/2019,


Rol: 6709-2019,

Cita online: CL/JUR/2931/2019

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 29/04/2019, Rol


Nº 7606-2019,

Cita online: CL/JUR/2266/2019

18. Nulidad absoluta de contrato de compraventa. Objeto y requisitos


de procedencia del recurso de casación en el fondo. Recurrente que
omite denunciar como infringidas normas decisorias litis. Casación
sustancial es un recurso de derecho estricto

El recurso de casación en el fondo tiene como objetivo directo la


invalidación de determinadas sentencias que hayan sido pronunciadas
con infracción de ley, siempre que esta haya tenido influencia sustancial
en su parte resolutiva o decisoria. Tal connotación esencial de este
medio de impugnación se encuentra claramente establecida en el
artículo 767 del Código de Procedimiento Civil, que lo instituye dentro
de nuestro ordenamiento positivo y se traduce en que no cualquier
transgresión de ley resulta idónea para provocar la invalidación de la
sentencia impugnada, pues la nulidad no se configura en el mero interés
de la ley, sino sólo aquella que haya tenido incidencia determinante en
lo resuelto, esto es, la que recaiga sobre alguna ley que en el caso
concreto ostente la condición de ser decisoria litis. El defecto antes
anotado, esto es, la omisión en el recurso de aquella normativa que
resulta crucial en la decisión del conflicto, implícitamente significa que
el impugnante reconoce su adecuada y correcta aplicación en el fallo.
Por ende, al no extender la infracción de ley a los artículos 1681 y 1888
del Código Civil, en circunstancias que la decisión atacada es
precisamente el rechazo de las acciones anulatorias, entonces dichos
preceptos deben tenerse como correctamente aplicados, generándose
un vacío insoslayable para dirimir lo pendiente ya que esa normativa
debe ser considerada en el fallo de reemplazo que se dicte en el evento
de ser acogido el presente arbitrio. Consecuencialmente, de ello se
sigue que, aun en el evento de concordar esta Corte con los reproches
que se formulan en el recurso, no existiría influencia en lo dispositivo, y,
si es así, tampoco podría prosperar su pretensión de inoponibilidad
(considerandos 14º y 15º de la sentencia de la Corte Suprema).

El carácter extraordinario del recurso de casación exige que su


interposición cumpla con las formalidades a que debe sujetarse el libelo,
entre las cuales destaca la necesidad de expresar en qué consiste el o
los errores de derecho de que adolecería la sentencia recurrida, y
señalar de qué modo influyeron sustancialmente en lo decidido. De
manera que, aun bajo los parámetros de desformalización y
simplificación incorporados desde la entrada en vigencia de la Ley
Nº 19.374, ello no exime a quien lo plantea de indicar la ley que se
denuncia como vulnerada y que ha tenido influencia sustancial en lo
resolutivo de la sentencia cuya anulación se persigue (considerando 16º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 30/12/2019, Rol Nº 15295-2018,

Cita online: CL/JUR/12044/2019

19. Cobro renta arrendamiento. Tribunal de Casación no puede


modificar los hechos establecidos por los jueces del fondo si no hay
vulneración de las reglas de la sana crítica

La jurisprudencia de la Corte Suprema ha señalado con anterioridad


que los hechos asentados por los jueces del fondo son inamovibles, a
menos que el recurrente haya denunciado de modo eficiente infracción
a las normas reguladoras de la prueba pertinentes, lo que no puede
estimarse haya ocurrido en la especie, toda vez que no fue invocada la
vulneración del artículo 8º Nº 7 de la Ley Nº 18.101, norma que previene
que la prueba se apreciará conforme a las reglas de la sana crítica, y si
bien se indicó en el recurso que se produjo una transgresión a ellas, no
se indicó la manera en que ello se verificó, limitándose a afirmar que "se
exime al actor de probar los perjuicios por lucro cesante infringiéndose
las normas reguladoras de la prueba al invertirse la carga probatoria
consagrada en el artículo 1698 del código civil", para luego agregar
"conforme la interlocutoria de prueba en relación al artículo 1698 del
Código civil, el demandante quien debía probar la existencia de un pacto
que le permitiera demandar a la vez la obligación principal y la pena .....
al concederse ambas prestaciones a la vez se invierte la carga de la
prueba" (sic), tal vulneración debe ser desestimada, porque los
razonamientos expresados en el fallo dan cuenta de una correcta
distribución de las cargas probatorias entre las partes, puesto que se
exigió al demandante acreditar la existencia del contrato y la existencia
de las obligaciones que acusa incumplidas, y al demandado justificar su
cumplimiento, sin que los antecedentes incorporados, en particular, la
documental, permitiera dar por satisfecha las correspondientes
obligaciones de la demandada (considerando 13º de la sentencia de
Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 12/12/2019, Rol Nº 17014-


2019,

Cita online: CL/JUR/7059/2019


Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 26/09/2019, Rol Nº 29539-


2018,

Cita online: CL/JUR/5324/2019

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 27/05/2019, Rol Nº 22083-


2018,

Cita online: CL/JUR/2891/2019

20. Responsabilidad del Estado. I. Improcedencia de impugnar la


condena en costas mediante recurso de casación en el fondo. II.
Improcedencia del recurso de casación en el fondo contra la
resolución que determina el monto de la indemnización de perjuicios
por concepto de daño moral

I. El artículo 767 del Código de Procedimiento Civil prescribe que el


recurso de casación en el fondo tiene lugar en contra de sentencias
definitivas inapelables y contra sentencias interlocutorias inapelables
cuando ponen término al juicio o hacen imposible su continuación,
dictadas, en lo que al recurso interesa, por las Cortes de Apelaciones.
Pues bien, la naturaleza jurídica de la decisión sobre costas no es una
sentencia definitiva, ni tiene el carácter de interlocutoria de aquellas que
ponen término al juicio o hacen imposible su continuación, cuestión
suficiente para descartar la casación (considerando 3º de la sentencia
de la Corte Suprema).

II. El recurrente de casación impugna la determinación del monto de


la indemnización de perjuicios por concepto de daño moral, materia
respecto de la cual, desde antiguo, el Máximo Tribunal ha señalado la
improcedencia de impugnarla a través del presente arbitrio de nulidad.
En efecto, una vez acreditada la existencia del referido daño a través de
los distintos medios de prueba previstos en la ley, toca a los
sentenciadores establecer prudencialmente el monto de aquél, para lo
cual aprecian sus efectos, especialmente la magnitud y el impacto que
el hecho ilícito o la falta de servicio ha tenido en la vida de quien
demanda la indemnización. Es así como se ha dicho que "tratándose
del monto de dicho detrimento —daño moral— éste fue apreciado por
los jueces del fondo, en atención a que el sufrimiento, dolor, o molestia
que el hecho ilícito ocasiona en la sensibilidad física o en los
sentimientos o afectos de una persona, lo que constituye una
apreciación subjetiva que queda entregada sólo a criterio y
discernimiento de aquéllos, valoración que no acepta revisión de este
tribunal, por la vía de la casación en el fondo". Todo salvo que exista
una desproporción tal que no tenga justificación, circunstancia que en
el presente caso no concurre (considerando 4º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 19/11/2019, Rol


Nº 16481-2018,

Cita online: CL/JUR/6603/2019

21. Reclamación tributaria. Tribunal de Casación no puede modificar los


hechos establecidos por los jueces del fondo si no hay vulneración de
las leyes reguladoras de la prueba. Carga de prueba corresponde al
contribuyente. Valoración de la prueba es facultad privativa de los
jueces del fondo

Resulta imprescindible dejar establecido que para que prospere un


recurso en que se postulan hechos diversos a los de autos, se debe
denunciar y demostrar la efectiva infracción de las leyes reguladoras de
la prueba, situación que en la especie no ha ocurrido, en atención que
las infracciones de ley que sustentan el recurso de nulidad sustancial
deducido no se hacen cargo de los hechos de la causa, ni permiten su
modificación mediante la demostración de la efectiva infracción de los
parámetros que la sana crítica impone considerar. A su turno, del
artículo 21 del código del ramo fluye con claridad que la carga de prueba
es del contribuyente y que la calificación de su capacidad persuasiva
corresponde a los jueces del fondo, por lo que el proceso de valoración
de los antecedentes probatorios aportados les compete en forma
privativa sin que este tribunal posea atribuciones para cuestionar dicha
insustituible tarea. De esta manera resulta que el arbitrio postula una
ponderación diversa de la prueba rendida, toda vez que la efectuada en
la sentencia que se ataca se ampara en la insuficiencia de los
mecanismos de acreditación hechos valer por el contribuyente, a quien
le corresponde soportar la carga de la prueba, conforme lo preceptúa el
tantas veces citado artículo 21 del Código Tributario, cuestión que no es
abordada en estos términos por el recurso intentado, razón por la cual
carece de efectividad para obtener la modificación de los supuestos de
hecho que sustentan lo resuelto. De esta manera, resulta forzoso
concluir que el recurso es insuficiente para los fines propuestos, al tenor
de lo que impone el artículo 767 del Código de Procedimiento Civil, toda
vez que al amparo de lo expuesto y al no haberse demostrado la
existencia de errores de derecho con influencia sustancial en lo resuelto,
debe ser necesariamente desestimado (considerandos 9º y 10º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 21/10/2019, Rol Nº 38640-


2017,

Cita online: CL/JUR/6078/2019

22. Responsabilidad del Estado. Facultad privativa de los jueces del


fondo para determinar el monto de indemnización por daño moral.
Determinación del daño moral excede el ámbito del recurso de
casación en el fondo

La determinación del daño moral corresponde a una cuestión de


apreciación prudencial entregada a los jueces de la instancia, siendo
éstos soberanos para regular el monto de la indemnización, acudiendo
a los factores de hecho que consideren relevantes para la avaluación
judicial llamados a efectuar, puesto que la ley no ha señalado normas
que deben observarse para estos efectos. De este modo, quedando
entregada la determinación del quantum del resarcimiento del daño
moral a la prudencia del juzgador, la decisión que en el ejercicio de la
referida facultad éstos adopten, no es susceptible de revisión por la vía
intentada, pues se trata de una labor privativa de los jueces del fondo
propia de su ámbito de competencia y, que por ende, excede al control
de casación. Es así como se ha dicho que "tratándose del monto de
dicho detrimento —daño moral— éste fue apreciado por los jueces del
fondo, en atención a que el sufrimiento, dolor, o molestia que el hecho
ilícito ocasiona en la sensibilidad física o en los sentimientos o afectos
de una persona, lo que constituye una apreciación subjetiva que queda
entregada sólo a criterio y discernimiento de aquéllos, valoración que
no acepta revisión de este tribunal, por la vía de la casación en el fondo"
(considerandos 7º y 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 14/08/2019, Rol


Nº 12124-2018,
Cita online: CL/JUR/4635/2019

23. Reclamación de monto de indemnización por expropiación. I.


Resoluciones en contra de las cuales procede el recurso de casación
en el fondo. Improcedencia del recurso de casación en el fondo contra
la resolución que declara desierto el recurso de apelación.

El artículo 767 del Código de Procedimiento Civil establece que el


recurso de casación en el fondo tiene lugar contra sentencias definitivas
inapelables y contra sentencias interlocutorias inapelables cuando
ponen término al juicio o hacen imposible su continuación, dictadas,
en lo que interesa para el presente caso, por Cortes de Apelaciones,
siempre que se hayan pronunciado con infracción de ley y esta
infracción haya influido substancialmente en lo dispositivo del fallo. Por
lo tanto, la resolución objetada por la vía del recurso de casación en el
fondo, aquella que declara desierto sólo uno de los recursos de
apelación intentados por las partes en contra del fallo de primer grado,
no reviste la naturaleza jurídica de las resoluciones que hacen
procedente el recurso de casación, pues no es una sentencia definitiva
y tampoco es una interlocutoria de aquellas que ponen término al juicio
o hacen imposible su continuación. En tales condiciones, resulta
improcedente el recurso de casación en el fondo deducido
(considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 17/07/2019, Rol


Nº 18913-2018,

Cita online: CL/JUR/4118/2019

24. Cobro de pagaré. Resoluciones en contra de las cuales proceden


los recursos de casación en la forma y en el fondo. Improcedencia de
los recursos de casación en la forma y en el fondo en contra de la
resolución que revoca aquella que acoge incidente de objeción a la
liquidación del crédito

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil dispone que, en


general, sólo se concede el recurso de casación contra las sentencias
definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar día para la vista de
la causa. A su turno, el artículo 767 del mismo Código establece que el
recurso de casación en el fondo tiene lugar contra sentencias definitivas
inapelables y contra sentencias interlocutorias inapelables cuando
ponen término al juicio o hacen imposible su continuación, dictadas, en
lo que interesa para el presente caso, por Cortes de Apelaciones,
siempre que se hayan pronunciado con infracción de ley y esta
infracción haya influido substancialmente en lo dispositivo del fallo. Por
consiguiente, la resolución impugnada mediante los presentes recursos
de casación en la forma y en el fondo, que revocó la resolución que
acogió un incidente de objeción a la liquidación del crédito, no reviste la
naturaleza jurídica de las sentencias que hacen procedente los recursos
de casación en la forma y en el fondo, pues desde luego no es una
sentencia definitiva y tampoco es una interlocutoria de aquellas que
ponen término al juicio o hacen imposible su continuación. En tales
condiciones, los recursos en comento deben ser declarados
inadmisibles (considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 24/06/2019, Rol Nº 7759-2019,

Cita online: CL/JUR/3615/2019

25. Indemnización de perjuicios por falta de servicio. Incumplimiento de


los requisitos de admisibilidad del recurso de casación en el fondo.
Recurso de derecho estricto. Recurrente que no señala
concretamente cómo es que cada una de las normas denunciadas fue
transgredida

En la especie, de la lectura del arbitrio se advierte que, en lo que dice


relación con la infracción de ley denunciada, el recurrente se limitó a
transcribir las disposiciones legales y expresar, que no se valoró el
protocolo médico que acompañó en segunda instancia del cual, a su
juicio, se acredita la falta de servicio que alegó. Sin embargo, lo cierto
es que el libelo no señala concretamente cómo es que cada una de las
normas que cita fue transgredida, careciendo de razonamientos
concretos y precisos dirigidos a demostrar los errores de derecho en
que habrían incurrido los sentenciadores, olvidando el carácter estricto
del recurso de casación cuyas exigencias se disponen en el artículo 772
del Código de Procedimiento Civil, que debe entenderse en armonía
con lo previsto en los artículos 764 y 767 del mismo Código. Análisis
que en el caso concreto no se puede realizar, por cuanto ello importaría
dejar a la discrecionalidad de esta Corte la determinación del error de
derecho en que pudiera incurrir la sentencia, cuestión que atañe a un
asunto que la ley ha impuesto a la parte agraviada. Atento a lo razonado
precedentemente, la nulidad sustancial intentada no se encuentra en
condiciones de ser acogida a tramitación por no cumplir con los
requisitos previstos en el artículo 772 del Código de Procedimiento Civil
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional, 11/06/2019, Rol


Nº 11523-2019,

Cita online: CL/JUR/5275/2019

26. Gestión preparatoria de notificación de protesto de cheques.


Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad de los recursos de
casación en la forma y en el fondo. Resolución impugnada de
casación que no presenta la característica de aquellas señaladas en
los artículos 766 y 767 del Código de Procedimiento Civil

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil admite el recurso de


casación en la forma contra sentencias definitivas y contra sentencias
interlocutorias cuando ponen término al juicio o hacen imposible su
continuación, y, excepcionalmente, contra las sentencias interlocutorias
dictadas en segunda instancia sin previo emplazamiento de la parte
agraviada, o sin señalar día para la vista de la causa. A su vez el
artículo 767 del referido cuerpo legal dispone que procede el recurso de
casación en el fondo contra sentencias definitivas inapelables y contra
sentencias interlocutorias inapelables cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación, dictadas —en lo que interesa para el
presente caso— por Cortes de Apelaciones, siempre que se hayan
pronunciado con infracción de ley y esta infracción haya influido
sustancialmente en lo dispositivo de la sentencia. La resolución
impugnada por esta vía no presenta la característica de aquellas
aludidas en los motivos anteriores, toda vez que no ha puesto fin a la
instancia como tampoco ha concluido el juicio o hecho imposible su
prosecución, ni se encuentra en la situación excepcional prevista en la
primera de las normas citadas, razón por la cual los recursos de nulidad
intentados en autos no podrán ser admitidos a tramitación
(considerandos 2º a 4º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema Primera Sala (Civil), 11/06/2019, Rol Nº 4968-2019

Cita online: CL/JUR/5262/2019

27. Reclamación de multa administrativa. Multa aplicada por la


Dirección General de Aguas. Recurrente que no acredita que los
yerros denunciados tengan influencia en lo dispositivo del fallo
impugnado

El artículo 767 del Código de Procedimiento Civil exige, para hacer


procedente la invalidación, que la infracción de ley haya influido
sustancialmente en lo dispositivo de la sentencia recurrida. Sin
embargo, en la especie, resulta palmario que la recurrente no acreditó
que los yerros denunciados tuvieran influencia en lo resuelto por el
tribunal; más aún, en sede administrativa, ha reconocido los hechos que
se le imputaron, de modo que incluso en el caso que los errores que se
imputan a la sentencia impugnada resultaren efectivos, tales
infracciones no tendrían influencia sustancial en lo dispositivo del fallo
impugnado, por lo que sólo cabe concluir que el recurso incurre en
manifiesta de fundamento, circunstancia que conduce necesariamente
a su rechazo (considerandos 6º y 7º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 5/06/2019, Rol


Nº 29927-2018,

Cita online: CL/JUR/3601/2019

28. Reclamo de ilegalidad. Para interponer recurso de casación en el


fondo es necesario invocar normas de derecho infringidas. No basta
la sola cita de dictámenes de la Contraloría para hacer valer una
casación. Nulidad sustancial es de carácter estricto

El recurrente no invoca normas de derecho en que funde la infracción


que alega, sólo cita Dictámenes de la Contraloría General de la
República, olvidando así el carácter estricto del recurso de casación,
cuyas exigencias se disponen en el artículo 772 del Código de
Procedimiento Civil, que debe entenderse en armonía con lo previsto en
los artículos 764 y 767 del mismo Código. De acuerdo a dichos
preceptos se permite como único sustento de la invalidación de la
sentencia censurada el quebrantamiento de una o más normas legales
contenidas en la decisión y por ello es menester que al interponer un
recurso como el de la especie el recurrente cumpla lo requerido por la
disposición en análisis, esto es, expresar en qué consisten el o los
errores de derecho de que adolece la resolución recurrida, en particular
en lo que concierne a las normas conforme a las cuales se debe decidir
el asunto sometido al conocimiento del tribunal. Tanto la jurisprudencia
como la doctrina hacen consistir esos yerros en aquellos que pudieron
originarse por haber otorgado los sentenciadores un alcance diferente
a una norma legal respecto del establecido por el legislador, ya sea
ampliando o restringiendo el mandato de sus disposiciones; o por haber
aplicado una ley a un caso no previsto en ella o, por último, por haber
dado aplicación a una norma legal en una situación ajena a la de su
prescripción. Este análisis en el caso concreto no se puede realizar,
pues la ausencia de desarrollo de los errores de derecho denunciados
en lo que respecta a las normas decisorias de la litis atenta contra tal
labor, por cuanto efectuarla en tales condiciones importaría dejar a la
discrecionalidad de esta Corte la determinación del yerro jurídico en que
pudo incurrir la sentencia, lo que atañe a un asunto que la ley ha
impuesto a la parte agraviada. Atento a lo razonado precedentemente,
la nulidad sustancial intentada no se encuentra en condiciones de ser
acogida a tramitación por no cumplir con los requisitos previstos en el
artículo 772 del Código de Procedimiento Civil (considerandos 3º y 4º
de la sentencia de Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 29/05/2019, Rol


Nº 11547-2019,

Cita online: CL/JUR/2978/2019

29. Cumplimiento de contrato de obra pública. Improcedencia del


recurso de casación en el fondo por infracción al Reglamento para
Contratos de Obra Pública. Facultad privativa de los jueces del fondo
para establecer los hechos de la causa. Tribunal de Casación no
puede modificar los hechos establecidos por los jueces del fondo si
no hay vulneración de las leyes reguladoras de la prueba

El demandante, recurrente de casación, sostuvo que la sentencia que


se impugna incurrió en error de derecho porque se vulneraron los
artículos 12, 1444, 1478, 1484, 1545, 1560, 1562 y 1566 del Código
Civil, desde que se efectuó una exégesis incorrecta de los artículos 136,
137, 138, 145 y 146 del Reglamento para Contratos de Obra Pública
(RCOP) los cuales, de haberse interpretado adecuadamente, habrían
llevado a la conclusión que su demanda debió ser acogida. Sin
embargo, el artículo 767 del Código de Procedimiento Civil dispone que
el recurso de casación en el fondo tiene lugar contra las resoluciones
que allí se mencionan, "siempre que se hayan pronunciado con
infracción de ley y esta infracción haya influido sustancialmente en lo
dispositivo de la sentencia". De ello resulta, como se advierte del claro
tenor de dicha norma, que tan sólo la infracción de leyes —entendida
según el concepto que entrega el artículo 1º del Código Civil permite la
interposición de este medio de impugnación jurídico procesal, calidad
que no tiene el Reglamento para Contratos de Obra Pública, que
constituye una norma jurídica de inferior rango, motivo por el cual, el
recurso en estudio no puede prosperar. Además, las transgresiones
denunciadas por la actora se sustentan en presupuestos fácticos
contrarios a los asentados en el proceso, —los terrenos debían ser
entregados en la fecha que indicó, que la demora en el traslado de la
postación no se debe a un acto suyo y que el aumento de plazo a que
alude obedeció a circunstancias especiales no contempladas en el
Reglamento— todo lo cual deriva de una nueva valoración de la prueba
que efectúa la demandante en su recurso, no obstante que no invocó
infracción a normas reguladoras de la prueba. Pues bien, como
reiteradamente ha declarado el Máximo Tribunal, sólo la judicatura del
fondo se encuentra facultada para determinar los hechos del litigio y
que, efectuada correctamente dicha labor, esto es, con sujeción a las
denominadas normas reguladoras de la prueba relativas al caso en
estudio, esos hechos se tornan inalterables para el tribunal de casación,
con arreglo al artículo 785 del Código de Procedimiento Civil, sin que
sea posible su revisión por la vía de la casación en el fondo, menos
cuando no se reprocha el quebrantamiento de las referidas reglas, como
acontece en la especie (considerandos 15º a 17º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 20/05/2019, Rol


Nº 2754-2018,

Cita online: CL/JUR/3335/2019

30. Tercería. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad del


recurso de casación en el fondo. Recurrente de casación en el fondo
que no expresa en qué consisten los errores de derecho de que
adolece la sentencia y de qué modo influyen sustancialmente en lo
dispositivo del fallo

En el examen de admisibilidad del recurso de casación en el fondo, la


Corte Suprema debe revisar si la resolución objeto del recurso es de
aquellas contra las cuales lo concede la ley y si reúne los requisitos que
contemplan los artículos 772 y 776, ambos del Código de Procedimiento
Civil. A su vez, de acuerdo al artículo 772 Nºs. 1º y 2º del código citado,
el recurso debe expresar en qué consiste el o los errores de derecho de
que adolece la sentencia recurrida y señalar de qué modo tuvo
influencia sustancial en lo dispositivo del fallo. En la especie, se aprecia
la invocación de argumentos y causales propios de una casación formal,
puesto que omite señalar los errores de derecho sustantivo en que
incurrió el fallo impugnado, limitándose a reprochar la aplicación de
normas adjetivas relativas a la individualización íntegra de los
demandados, tanto en la demanda como en la sentencia, y de no
haberse ejercido por la judicatura, en su oportunidad, la facultad de no
dar curso a la acción deducida por carecer de este requisito; careciendo,
por tanto, de un desarrollo íntegro y explicación suficiente de la
infracción de derecho atingente a la materia circunscrita que deba ser
resuelta en esta sede (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 13/05/2019, Rol Nº 5027-


2019,

Cita online: CL/JUR/2562/2019

31. Aumento de alimentos. Tribunal de Casación no puede modificar los


hechos establecidos por los jueces del fondo si no existe vulneración
de las leyes de la sana crítica. Regulación en dinero de la obligación
de alimentos no es susceptible de control en sede de casación en el
fondo

En la especie, sobre la base de los hechos establecidos de manera


inamovible por las instancias del fondo, deben desestimarse las
restantes infracciones denunciadas, por aparecer que la decisión se
ajusta a las normas sustantivas que regulan la materia de que se trata,
y por considerar que de la petición formulada se desprende que el
recurrente se conforma con la decisión de acoger la demanda,
cuestionando el monto determinado; sin embargo, esta Corte ha
sostenido de manera reiterada que el reproche por esta vía, destinado
a atacar la regulación en dinero de una obligación determinada, no es
susceptible de control en sede de casación en el fondo, desde que dicha
acción presupone un ejercicio valorativo, que excede de lo meramente
jurídico, en la medida que se efectúe de manera compatible con las
reglas de la sana crítica; de modo que para que prospere un recurso
como el que se examina es necesario que se denuncie la infracción a
las normas sobre apreciación de la prueba conforme la sana crítica,
señalándose de manera clara la conculcación a los criterios que dicho
sistema probatorio establece, cuestión que, como se ha indicado
previamente, no se observa en la especie. Lo anterior, lleva a concluir
que el —recurso de casación en el fondo— debe ser desestimado, en
esta etapa de tramitación, por adolecer de manifiesta falta de
fundamento (considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 6/05/2019, Rol Nº 25091-


2018,

Cita online: CL/JUR/2595/2019

32. Acción de precario. Improcedencia del recurso de casación en el


fondo contra resolución que rechaza un recurso de casación en la
forma. Improcedencia de la casación de casación

De la lectura del arbitrio intentado, se desprende que se impugna la


sentencia que desestimó el recurso de casación en la forma que se
fundó en la causal establecida en el artículo 768 Nº 9 del Código de
Procedimiento Civil, deducido en contra de la sentencia de primera
instancia, por ponderar la prueba testimonial rendida, en circunstancias
que la lista de testigos presentada no había sido resuelta previamente;
y porque la magistratura no hizo uso de sus facultades oficiosas, para
corregir el vicio denunciado. Sin embargo, como de conformidad con lo
que dispone el artículo 767 del Código de Procedimiento Civil, el recurso
de casación en el fondo se concede contra las sentencias definitivas
inapelables y contra sentencias interlocutorias inapelables que ponen
término al juicio o hacen imposible su prosecución, naturaleza jurídica
que no comparte la impugnada, dado que solo analizó si la sentencia
de primera instancia incurrió en el vicio de nulidad formal que consagra
el artículo 768 Nº 9 del Código de Procedimiento Civil, concluyendo que
no se configuró, el presente recurso no puede prosperar y debe ser
declarado inadmisible (considerando 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 4/04/2019, Rol Nº 31271-


2018,

Cita online: CL/JUR/1874/2019

33. Cumplimiento laudo arbitral. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad de los recursos de casación en la forma y en el fondo.
Resolución impugnada no reviste la naturaleza jurídica de aquellas
señaladas en los artículos 766 y 767 del Código de Procedimiento
Civil

Conforme lo dispuesto en el artículo 766 del Código de Procedimiento


Civil, el recurso de casación en la forma se concede contra las
sentencias definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen término
al juicio o hacen imposible su continuación y, excepcionalmente, contra
las sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar día para la vista de
la causa. Por su parte, de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 767 del
estatuto en comento, el recurso de casación en el fondo tiene lugar
contra sentencias definitivas inapelables y contra sentencias
interlocutorias inapelables cuando ponen término al juicio o hacen
imposible su continuación, dictadas por Cortes de Apelaciones o por un
tribunal arbitral de segunda instancia, en los casos que indica. Del
mérito de los antecedentes, se desprende que el arbitrio que se revisa
fue deducido en contra de la resolución que revocó la de primer grado
que no dio lugar a la petición del recurrente de restitución de inmueble
en etapa de cumplimiento de una sentencia arbitral, decidiendo en su
lugar que se acoge, decisión que no participa de la naturaleza jurídicas
de las indicadas en el motivo anterior (considerandos 2º y 3º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 13/03/2019, Rol Nº 28508-


2018,

Cita online: CL/JUR/1282/2019


34. Consignación de indemnización por expropiación. Resoluciones en
contra de las cuales procede el recurso de casación en el fondo.
Resolución que ordena girar cheque con cargo a fondos consignados
en autos, no admite casación en el fondo

El artículo 767 del Código de Procedimiento Civil establece que el


recurso de casación en el fondo tiene lugar contra sentencias definitivas
inapelables e interlocutorias inapelables, cuando ponen término al juicio
o hacen imposible su continuación, dictadas —en lo que interesa para
el presente caso— por Cortes de Apelaciones, siempre que se hayan
pronunciado con infracción de ley y esta infracción influya
sustancialmente en lo dispositivo de la sentencia. En la especie la
resolución objetada por la vía del recurso de casación en el fondo no
reviste la naturaleza jurídica de ninguna de las sentencias descritas en
el citado artículo, puesto que por su intermedio sólo se ha dispuesto el
efectivo cumplimiento de otra resolución anterior, que, accediendo a una
petición incidental relacionada con el cumplimiento del fallo dictado en
un proceso distinto, ordenó entregar al Juez Árbitro la suma de dinero
consignada en esta causa. De esta forma, al no reunir la decisión que
se pretende anular la naturaleza de aquellas que permiten esta clase de
arbitrio, el deducido no puede ser admitido a tramitación
(considerandos 2º a 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 9/04/2018, Rol


Nº 43453-2017,

Cita online: CL/JUR/5962/2018

ARTÍCULO 768

El recurso de casación en la forma ha de fundarse precisamente en alguna


de las causas siguientes:

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Reclamo de ilegalidad municipal. Invalidación de premisos de


edificación de los llamados guetos verticales. I. Casación en la forma
es inadmisible tratándose de juicios contemplados en leyes
especiales como el regido por la Ley Orgánica Constitucional de
Municipalidades
Respecto de ambas causales de casación en la forma hechas valer
—la primera del artículo 768 Nº 5 en relación con el artículo 170 Nº 4
del Código de Procedimiento Civil y del artículo 768 Nº 9 del mismo
Código—, no es procedente en el presente procedimiento, según lo
dispone en forma expresa el inciso segundo del citado artículo 768, en
relación al inciso segundo del artículo 766 del mismo texto legal. En
efecto, la casación en la forma es excluida por el motivo invocado por el
recurrente tratándose de juicios contemplados en leyes especiales,
como lo es el actual, regido por la Ley Orgánica Constitucional de
Municipalidades y particularmente por su artículo 151, de suerte que no
resulta admisible este recurso de nulidad formal en el caso de autos.
Por lo antes razonado el recurso de nulidad formal deberá ser declarado
inadmisible (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 13/04/2020, Rol


Nº 36660-2019,

Cita online: CL/JUR/23010/2020

2. Reclamación en contra del Servicio de Evaluación Ambiental. I.


Sentencia de casación. Sentencia impugnada carece del estándar de
fundamentación mínimo exigible. Magistrados que no examinan de
modo alguno la normativa vigente limitándose a efectuar
declaraciones genéricas.

Los magistrados de la instancia apuntan como basamento de su


decisión que, en su opinión, la "actuación de la SMA se ajustó a la
normativa vigente", misma que, sin embargo, no examinan de modo
alguno, limitándose a efectuar declaraciones genéricas, vagas e
imprecisas que impiden comprender las razones conforme a las cuales
adoptaron la decisión contenida en su sentencia. Según se advierte, al
asentar dicha conclusión el tribunal ha omitido el más elemental análisis
de la cuestión sometida a su conocimiento, puesto que no entrega
fundamentación alguna que permita entender conforme a qué
disquisiciones y juicios se determina que el proyecto de la planta
provisoria de la empresa sanitaria debe ingresar al Sistema de
Evaluación de Impacto Ambiental, puesto que, en lugar de asentar los
hechos pertinentes a la referida discusión y, enseguida, examinar tales
circunstancias fácticas a la luz de la normativa aplicable al caso en
estudio, se han limitado a dejar constancia de declaraciones ambiguas
y equívocas relativas a las obligaciones de los concesionarios de esta
clase de servicios, de la existencia de ambas plantas y de la manera en
que éstas se correlacionan. En esas condiciones, no es posible
comprender por qué el mentado proyecto debe ingresar, como lo
dispone el fallo, al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, de lo
que se sigue que un asunto de tal relevancia como el descrito ha
quedado sin sustento ni explicación, no siendo posible comprender,
entonces, cuáles son las reflexiones y consideraciones en cuya virtud
decidieron del modo en que lo hicieron. En consecuencia, la sentencia
impugnada efectivamente carece del estándar de fundamentación
mínimo exigible en conformidad a lo establecido en el artículo 25 de la
Ley Nº 20.600, en relación al artículo 170 Nº 4 del Código de
Procedimiento Civil y al inciso 4º del artículo 26 de la mencionada Ley
Nº 20.600, en relación a las reflexiones que han de presidir su
determinación de ordenar el ingreso del proyecto en comento al Sistema
de Evaluación de Impacto Ambiental y al establecimiento de los hechos
necesarios para decidir en torno a dicha cuestión, desde que no
explican conforme a qué razonamientos específicos arriban a la
conclusión asentada en su fallo. La aludida conclusión aparece así
desprovista de la adecuada fundamentación que debe contener una
sentencia, pues no encuentra su correlato en los basamentos del fallo,
de lo que se sigue que no ha existido, en la especie, un cabal
razonamiento respecto del asunto sometido al conocimiento y
resolución de los tribunales del mérito, omitiéndose de este modo las
consideraciones de hecho y de derecho que debían servirle de sustento,
desentendiéndose así los juzgadores de la obligación de efectuar las
reflexiones que permitan apoyar su determinación, al prescindirse del
estudio que los jueces deben efectuar de la totalidad de los asuntos
planteados en la demanda, que en este caso se encuentra ausente en
relación a un aspecto tan relevante como el identificado
precedentemente (considerandos 13º a 16 de la sentencia de casación
de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 7/01/2020, Rol


Nº 20709-2018,

Cita online: CL/JUR/37354/2020


3. Tercería de posesión. I. Ausencia del requisito del recurso de
casación en la forma de existencia de agravio del recurrente. II.
Facultad privativa de los jueces del fondo para establecer los hechos
de la causa. Tribunal de Casación no puede modificar los hechos
establecidos por los jueces del fondo si no hay vulneración de las
leyes reguladoras de la prueba

El artículo 768 del Código de Procedimiento Civil autoriza al tribunal


para desestimar el recurso de casación en la forma si de los
antecedentes aparece de manifiesto que el recurrente no ha sufrido
perjuicio reparable sólo con la invalidación del fallo o cuando el vicio no
ha influido en lo dispositivo del mismo, siendo del caso apuntar, que del
tenor de lo que disponen, entre otros, los artículos 764 y 771 del Código
de Procedimiento Civil, para la interposición de un recurso de casación,
además de otras exigencias, debe ser interpuesto por la parte
agraviada, requisito éste que comparte con el recurso de casación en el
fondo, requiriéndose como presupuesto habilitante el agravio que debe
manifestar y exhibir quien interpone el arbitrio. En este caso no se divisa
el perjuicio que pudo haber reportado al recurrente la forma en que se
haya notificado a los demandados por él, en la acción de tercería
deducida, sujetos pasivos que siendo parte en los correspondientes
ramos de la ejecución no consta que hayan formulado reclamo alguno
sobre el particular (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 26/03/2019, Rol Nº 29347-2018,

Cita online: CL/JUR/1634/2019

1ª En haber sido la sentencia pronunciada por un tribunal incompetente o


integrado en contravención a lo dispuesto por la ley;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Oposición a la regularización de la posesión. Causal de casación en


la forma de haber sido dictada la sentencia por un tribunal
incompetente, acogida

Del artículo 20 del D.L. Nº 2.695 del año 1979 y el artículo 32, letra B)
del Código Orgánico de Tribunales, queda de manifiesto que,
encontrándose el inmueble materia de la solicitud de regularización que
motiva la oposición que dio inicio a estos autos en Hijuelas, el
conocimiento de los mismos corresponde al Juzgado de Letras de La
Calera, sin que pueda entenderse, como lo sostuvo el abogado de la
recurrida en estrados, que haya existido prórroga de la competencia,
puesto que, como se dijo, la demandante (oponente) no ha realizado
gestión alguna en los autos que permita entender que operó dicha
institución en forma expresa o tácita. Por lo razonado y constatándose
la concurrencia del yerro jurídico que denuncia el recurso —aquel del
artículo 768 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil— procede acoger
el recurso deducido (considerandos 7º y 8º de la sentencia de la Corte
de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 18/03/2020, Rol Nº 3184-2019,

Cita online: CL/JUR/21111/2020

2. Nulidad de derecho público. Recurso de casación en la forma cuyas


causales no configuran las circunstancias contempladas para su
admisibilidad

Para que se configure la causal alegada (artículo 768 Nº 1 del Código


de Procedimiento Civil) es necesario que la sentencia haya sido
pronunciada por un tribunal incompetente o que haya sido integrado en
contravención a la ley. Sin embargo, del análisis de los antecedentes se
advierte que el fallo impugnado fue pronunciado por quienes estaban
llamados a dictarlo en virtud de la ley y en razón de sus cargos, toda
vez que, según consta de autos, el derecho de recusación se
encontraba agotado, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 198
inciso segundo del Código Orgánico de Tribunales (considerando 4º de
la sentencia de Corte Suprema). En relación a la segunda causal de
impugnación formal invocada, esto es, la contemplada en el Nº 2 del
artículo 768 del Código de Procedimiento Civil, a saber "En haber sido
pronunciada por un juez, o con la concurrencia de un juez legalmente
implicado, o cuya recusación esté pendiente o haya sido declarada por
tribunal competente", es menester señalar que los jueces del fondo,
antes de la vista del asunto resolvieron sobre la recusación formulada
por la recurrente, rechazándola por haber hecho uso de la prerrogativa
de la recusación al máximo de las oportunidades legales procedentes.
Así las cosas, la causal esgrimida deberá ser rechazada por no
configurarse en la especie ninguna de las circunstancias contempladas
en la referida norma jurídica (considerando 5º de la sentencia de Corte
Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 27/03/2019, Rol


Nº 3354-2019,

Cita online: CL/JUR/1795/2019

2ª En haber sido pronunciada por un juez, o con la concurrencia de un juez


legalmente implicado, o cuya recusación esté pendiente o haya sido
declarada por tribunal competente;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Responsabilidad del Estado. Causal de casación en la forma de haber


sido pronunciada la sentencia por un juez, o con la concurrencia de
un juez legalmente implicado, o cuya recusación esté pendiente o
haya sido declarada por tribunal competente. Anulación de oficio

Al momento de dictar, la Corte de Apelaciones, la resolución de


11.05.2018 que declaró inadmisible el recurso de apelación interpuesto
por el demandante en contra de la sentencia definitiva, los ministros que
concurrieron a tal declaración de inadmisibilidad ya se encontraban
afectados por la causal de implicancia que luego fue por ellos mismos
estampada y motivó la remisión de los antecedentes al subrogante legal
para efectos de resolver el recurso de casación, pues los hechos que la
sustentaban habían acontecido el 22.06.2017, al revocar la resolución
de primer grado y rechazar el incidente de entorpecimiento promovido
por el actor. Luego, debe considerarse, además, que la resolución que
declaró inadmisible el recurso de apelación constituye una interlocutoria
de primer grado que tuvo la virtud de poner término al juicio, en el
entendido que impidió el acceso de la contienda al tribunal de segunda
instancia que tenía por misión revisar tanto los hechos establecidos por
el a quo como el derecho aplicable a ellos. Por tanto, habiéndose
verificado que la Corte de Apelaciones incurrió en el vicio de casación
formal estatuido en el artículo 768 Nº 2 del Código de Procedimiento
Civil en la dictación de una sentencia susceptible de ser impugnada por
esa vía, impidiendo la revisión de los hechos de la causa por el
tribunal ad quem, se está en presencia de una anormalidad procesal
que autoriza a la Corte de casación, al no existir otro medio idóneo para
corregir la deficiencia procesal comprobada, para casar de oficio la
mencionada sentencia (considerandos 4º a 6º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 5/05/2020, Rol


Nº 21142-2019,

Cita online: CL/JUR/26630/2020

3ª En haber sido acordada en los tribunales colegiados por menor número


de votos o pronunciada por menor número de jueces que el requerido por la
ley o con la concurrencia de jueces que no asistieron a la vista de la causa, y
viceversa;

4ª En haber sido dada ultra petita, esto es, otorgando más de lo pedido por
las partes, o extendiéndola a puntos no sometidos a la decisión del tribunal,
sin perjuicio de la facultad que éste tenga para fallar de oficio en los casos
determinados por la ley;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cumplimiento de contrato con indemnización de perjuicios. I. Causal


de casación en la forma de ultra petita, rechazada. Sentencia que no
se ha extendido en la resolución del asunto a puntos no sometidos a
su decisión

La denominada ultra petita —más allá de lo pedido— es un principio


rector que ataca la falta de adecuación entre las pretensiones
formuladas por las partes y lo dispositivo de la resolución judicial, y,
revisados los antecedentes se puede verificar que los jueces del fondo
no se han apartado de los términos en que los litigantes situaron la
controversia, sino que, muy por el contrario, ciñen su pronunciamiento
a las alegaciones planteadas en el juicio en el que la demandante alegó
el cumplimiento forzado del contrato y la demandada alegó la existencia
de una causa justificada para ponerle término unilateralmente, en razón
de una serie de circunstancias, entre las cuales se encuentra su
afectación por la situación que experimentó la contraria y a la ANFP,
que claramente comprende la afectación de su imagen; argumento que
por lo demás no es el único que los sentenciadores tienen como
fundamento para tener por configurado este motivo justificado y en
razón de ello desestimar la demanda (considerando 5º de la sentencia
de la Corte Suprema).
Corte Suprema Primera Sala (Civil), 18/05/2020, Rol Nº 15304-2018,

Cita online: CL/JUR/30811/2020

2. Resolución de contrato con indemnización de perjuicios. Causal de


casación en la forma de ultra petita. Principio de congruencia busca
vincular a las partes y al juez al debate. Sentencia reconoce la
existencia de una cláusula contractual de avaluación anticipada de
perjuicios que no fue materia de la litis. Sentencia que se ha extendido
en la resolución del asunto a puntos no sometidos a su decisión

La doctrina comparada ve en la denominada ultra petita —en el doble


cariz antes descrito—, un vicio que conculca un principio rector de la
actividad procesal, cual es, el de la congruencia, que busca vincular a
las partes y al juez al debate y, por tanto, conspira en su contra la falta
del necesario encadenamiento de los actos que lo conforman, a los que
pretende dotar de eficacia. Se trata entonces, de un principio que enlaza
la pretensión, la oposición, la prueba, la sentencia y los recursos, al
mismo tiempo que cautela la conformidad que debe existir entre todos
los actos que componen el proceso. Si bien la doctrina enfatiza los
nexos que han de concurrir entre las pretensiones sostenidas por el
actor y la sentencia, la misma vinculación resulta de igual importancia
tratándose de la oposición, la prueba y los recursos, encontrando su
mayor limitación en los hechos, pues aunque el órgano jurisdiccional no
queda circunscrito a los razonamientos jurídicos expresados por las
partes, ello no aminora la exigencia según la cual el derecho aplicable
debe enlazarse a las acciones y excepciones, alegaciones y defensas
que las partes han sostenido en el pleito (considerando 3º de la
sentencia de casación).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 20/04/2020, Rol Nº 15179-2018,

Cita online: CL/JUR/23050/2020

3. Nulidad de derecho público. I. Causal de casación en la forma de ultra


petita. Principio de congruencia busca vincular a las partes y al juez
al debate. Principio de congruencia enlaza la pretensión, la oposición,
la prueba, la sentencia y los recursos

La doctrina comparada ve en la denominada ultra petita —en el doble


cariz antes descrito— un vicio que conculca un principio rector de la
actividad procesal, cual es como ya se dijo el de la congruencia y que
ese ataque se produce, precisamente, con la "incongruencia" que pueda
presentar una decisión con respecto al asunto que ha sido planteado
por los que litigan. El principio de congruencia se basa en diversos
fundamentos, ámbitos de aplicación y objetivos. Primeramente, busca
vincular a las partes y al juez al debate y, por tanto, conspira en su
contra la falta del necesario encadenamiento de los actos que lo
conforman, a los que pretende dotar de eficacia. Así, se trata de un
principio que enlaza la pretensión, la oposición, la prueba, la sentencia
y los recursos, al mismo tiempo que cautela la conformidad que debe
existir entre todos los actos del procedimiento que componen el proceso
(considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 15/04/2020 Rol


Nº 29002-2019,

Cita online: CL/JUR/23024/2020

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil, 7/08/2018, Rol Nº 9045-2018,

Cita online: CL/JUR/4207/2018

4. Cobro de pesos. I. Causal de casación en la forma de ultra petita,


acogida. Sentencia que se ha extendido en la resolución del asunto a
puntos no sometidos a su decisión

Del mérito de los antecedentes del proceso y del examen que


determina la procedencia de la impugnación entre los extremos que
señala la doctrina, esto es, acción y excepción o defensa y lo decidido,
aparece evidente la discordancia entre lo pretendido jurídicamente por
el demandante y lo resuelto en el fallo, que rechaza a la demanda
estimando que no se probó una simulación relativa subjetiva, simulación
que no fue alegada por los demandantes, desvirtuando manifiestamente
lo pedido en libelo pretensor. En la especie, el demandante dedujo una
acción de cobro de pesos, formulando una petición de condena concreta
y precisa, fundada en hechos específicos, por lo que la determinación
que en definitiva se adoptó, sobre la base de que no se probaron los
elementos propios de una simulación relativa, excedió del ámbito de
la litis, apartándose notoriamente de los términos en que las partes
situaron la controversia, tanto en cuanto al petitum, como a la causa de
pedir. Por tanto, constatándose que los juzgadores se han extralimitado
en el ejercicio de las atribuciones que les son propias, extendiéndose,
en consecuencia, a puntos no sometidos a su decisión, han incurrido en
un error que evidentemente ha tenido influencia sustancial en lo
resolutivo del fallo impugnado, inadvertencia que debe corregirse
privando de valor a la sentencia cuestionada (considerandos 7º y 8º de
la sentencia de casación).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 13/04/2020, Rol Nº 15062-2018,

Cita online: CL/JUR/25572/2020

5. Cobro de pesos. I. Causal de casación en la forma de ultra petita,


acogida. Sentencia que se ha extendido en la resolución del asunto a
puntos no sometidos a su decisión

Del mérito de los antecedentes del proceso y del examen que


determina la procedencia de la impugnación entre los extremos que
señala la doctrina, esto es, acción y excepción o defensa y lo decidido,
aparece evidente la discordancia entre lo pretendido jurídicamente por
el demandante y lo resuelto en el fallo, que rechaza a la demanda
estimando que no se probó una simulación relativa subjetiva, simulación
que no fue alegada por los demandantes, desvirtuando manifiestamente
lo pedido en libelo pretensor. En la especie, el demandante dedujo una
acción de cobro de pesos, formulando una petición de condena concreta
y precisa, fundada en hechos específicos, por lo que la determinación
que en definitiva se adoptó, sobre la base de que no se probaron los
elementos propios de una simulación relativa, excedió del ámbito de
la litis, apartándose notoriamente de los términos en que las partes
situaron la controversia, tanto en cuanto al petitum, como a la causa de
pedir. Por tanto, constatándose que los juzgadores se han extralimitado
en el ejercicio de las atribuciones que les son propias, extendiéndose,
en consecuencia, a puntos no sometidos a su decisión, han incurrido en
un error que evidentemente ha tenido influencia sustancial en lo
resolutivo del fallo impugnado, inadvertencia que debe corregirse
privando de valor a la sentencia cuestionada (considerandos 7º y 8º de
la sentencia de casación).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 13/04/2020, Rol Nº 15062-2018


Cita online: CL/JUR/25572/2020

6. Acción de reivindicación. Causal de casación en la forma de ultra


petita, acogida. Sentencia que se ha extendido en la resolución del
asunto a puntos no sometidos a su decisión

Respecto a la ultra petita, el Máximo Tribunal ha establecido que


aquélla se configura cuando la sentencia, apartándose de los términos
en que las partes situaron la controversia por medio de sus respectivas
acciones o excepciones, altera su contenido, cambiando su objeto o
modificando su causa de pedir. En la especie, de conformidad a los
antecedentes del proceso, resulta evidente la discordancia entre lo
discutido y las argumentaciones manifestadas en el fallo para formular
la declaración cuestionada, ya que tales consideraciones se apartan no
solo de las alegaciones expuestas por las partes en sus escritos
fundamentales y, por consiguiente, de la sustancia y contornos de la
controversia suscitada entre ellas, sino que además sobre la materia
que justificó el alzamiento de la demandada y lo que expresamente
solicitó del tribunal superior. Tal divergencia impone el acogimiento del
recurso, más todavía si se tiene presente que mediante la declaración
cuestionada los jueces anticipan una decisión sobre materias propias
de otros estadios procesales, toda vez que las prestaciones mutuas
tienen lugar una vez terminado el juicio reivindicatorio y vencido el
demandado y, por ende, corresponde dilucidar en un procedimiento
distinto los hechos y pagos que recíprocamente deben realizar, uno en
favor de otro, reivindicador y poseedor vencido, del modo que se
encuentra regulado en los artículos 904 y siguientes del Código Civil.
Así, constatándose que los juzgadores se han extralimitado en el
ejercicio de las atribuciones que les son propias —aquéllas que les
otorgaron los litigantes en sus escritos fundamentales— extendiéndose,
en consecuencia, a puntos no sometidos a su decisión, han incurrido en
un error que evidentemente ha tenido influencia sustancial en lo
resolutivo del fallo impugnado (considerandos 2º, 7º y 8º de la sentencia
de casación).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 10/03/2020, Rol Nº 12615-2018,

Cita online: CL/JUR/18686/2020

7. Declaración de prescripción extintiva de la acción de cobro de patente


comercial. I. Causal de casación en la forma de ultra petita, acogida.
Sentencia que se ha extendido en la resolución del asunto a puntos
no sometidos a su decisión

Los sentenciadores de segundo grado incurrieron en el vicio del


artículo 768 Nº 4 del Código de Procedimiento Civil, en su variante
de extra petita, puesto que aquéllos en su decisión rebasan el marco de
la contestación a la demanda en términos no sólo porque aplican una
institución que no fue esgrimida por la demandada, esto es la renuncia
a la prescripción, sino porque, lo que es relevante, aquello se funda en
una circunstancia fáctica no esgrimida por la Municipalidad, esto es, la
existencia de un pago respecto de uno de los periodos cuya prescripción
de acción de cobro se demanda. Por el contrario, el ente edilicio al
contestar la acción expresamente señaló que tal periodo se encontraba
moroso y si bien alegó la existencia de un supuesto abono a la deuda,
no refirió ningún dato concreto relativo a la fecha, menos aún al periodo
en que se imputó. Así, de la lectura de la escueta contestación surge
que la única argumentación fehaciente en que se asienta la alegación
de interrupción de prescripción, se relaciona con la circunstancia de
haber multado a la actora por ejercer actividad con patente morosa,
realizando la denuncia al Juzgado de Policía Local, cuestión que, más
allá que en caso alguno puede constituir un acto de requerimiento que
interrumpa el plazo de prescripción, toda vez que no está encaminado
a obtener el pago de la acreencia, sólo deja en evidencia que, tal como
fue acusado en el arbitrio en estudio, el sentenciador se aparta de los
términos en que las partes fijaron la controversia, apartándose de la
causa de pedir contenida en la contestación de la demanda
(considerando 9º de la sentencia de casación).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 23/01/2020, Rol


Nº 4574-2019,

Cita online: CL/JUR/8121/2020

8. Liquidación voluntaria. I. Causal de casación en la forma de ultra


petita. Sentencia que se ha extendido en la resolución del asunto a
puntos no sometidos a su decisión. Anulación de oficio

En el caso sub lite la Caja de Compensación y Asignación Familiar


verificó un crédito ascendente a $ 5.552.347 adeudado por el solicitante,
en proceso de liquidación voluntaria, invocando la preferencia del
artículo 2474 Nº 5 del Código Civil, en razón de la naturaleza social del
mismo. El Liquidador objetó dicha verificación, pues estima que se trata
de un crédito valista. El fallo de primer grado, confirmado por el de
segunda, resolvió acoger parcialmente la objeción, pues descartó la
preferencia invocada, pero le reconoce la del artículo 2472 Nº 6 del
Código Civil. Lo anterior deja en evidencia que, en la especie, se incurrió
por los falladores del grado en el vicio de casación formal que contempla
el artículo 768 Nº 4 del Código de Procedimiento Civil, ya que al resolver
de la forma en que lo han hecho, se han extendido a puntos que no
formaron parte de la controversia, respecto de los cuales tampoco se
encontraban autorizados para actuar de oficio, atendida la naturaleza
estricta de la materia debatida. En consecuencia, procede invalidar de
oficio el fallo impugnado (considerandos 8º y 9º de la anulación de
oficio).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 4/11/2019, Rol Nº 11665-2019,

Cita online: CL/JUR/6296/2019

9. Acción de demarcación y cerramiento. I. Anulación de oficio.


Sentencia dictada con vicio de ultra petita. Existencia de manifiesta
incongruencia entre lo solicitado por el demandante y resolutivo del
fallo.

De la mera lectura del fallo en análisis es posible advertir que su parte


resolutiva se aparta de lo que fue pedido por dicho litigante al órgano
jurisdiccional, exhibiendo una manifiesta incongruencia. En efecto, lo
solicitado en primer lugar por la actora reconvencional, fue que se
condenara al demandado a "reponer íntegramente el cerco divisorio
entre la Parcelas B-33 y B-45, en los mismos términos que estaba
hecho" con antelación al incidente de fecha 18 de julio de 2016, en que
el representante de la persona jurídica demandada procedió a romper
el cerco que delimitaba los inmuebles. Por su parte, el fallo de primera
instancia si bien accede a dicha pretensión y ordena a la demandada
reponer a su costa, dentro de treinta días hábiles, desde que quede
ejecutoriada la sentencia, el cerco que mediante auto tutela rompió,
especifica que ello deberá efectuarse "ciñéndose estrictamente a los
deslindes fijados en el plano de subdivisión del año 1947, que fija los
deslindes de las parcelas materia de autos". La aludida incongruencia
constituye el vicio de casación en la forma previsto en el artículo 768
Nº 4 del Código de Procedimiento Civil, por haber sido dada ultra petita,
esto es, otorgando más de lo pedido por las partes (considerandos 1º y
2º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 28/08/2019, Rol Nº 3906-2018,

Cita online: CL/JUR/5174/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 23/04/2018, Rol


Nº 11504-2017,

Cita online: CL/JUR/1843/2018

10. Juicio ejecutivo. Sentencia impugnada que incurre en vicio de ultra


petita. Ejecutada no objeta que título ejecutivo original no se haya
acompañado y que sólo se apareja copia del mismo. Sentenciador
que rechaza la demanda fundado en un punto no sometido a
discusión por las partes

En la especie, aun cuando el título ejecutivo original no se haya


acompañado y sólo se aparejó una copia del mismo, si esta no fue
objetada formalmente por la ejecutada y pasó el examen de
admisibilidad de la demanda, conforme al artículo 411 del Código de
Procedimiento Civil, resulta inadmisible que el sentenciador haya
objetado por sí solo el valor de dicho instrumento que, conforme el
efecto que produce la falta de objeción en los términos del artículo 342
Nº 3 del referido cuerpo normativo señalado, adquirió el valor de
instrumento público en juicio. En una sentencia se produce el vicio de
extra o ultra petita, cuando el sentenciador, apartándose de los términos
en que las partes situaron la controversia por medio de sus respectivas
acciones y excepciones, altera el contenido de éstas, cambiando de
objeto o modificando su causa de pedir; o bien, cuando la sentencia
otorga más de lo pedido por las partes en sus respectivos escritos que
fijan la competencia específica del tribunal o cuando se emite un
pronunciamiento, en relación con materias que no fueron sometidas a
decisión del mismo, respectivamente. en consecuencia, la sentencia
que se revisa, sin lugar a dudas, incurre en el vicio de casación en la
forma contenido en el artículo 768 Nº 4 del Código de Procedimiento
Civil, desde que el sentenciador, sin entrar al análisis de la excepción
opuesta por la ejecutada y sin reparar en el hecho que la demanda ya
había sido declarada admisible, cuestión que supone el examen del
título ejecutivo fundante en los términos del artículo 441 del Código de
Procedimiento Civil, de manera oficiosa, rechaza la demanda, fundada
en un punto no sometido a discusión por las partes, consistente en que
el título fundante acompañado no sería el original (considerandos 3º, 4º
y 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 24/07/2019, Rol Nº 10180-2018,

Cita online: CL/JUR/4203/2019

11. Reconocimiento del derecho a reliquidar pensión de jubilación en


contra de la Capredena. I. Sentencia de casación. Sentencia
impugnada que contiene considerandos incongruentes.

El análisis de los considerandos sexto a décimo de la sentencia de


primer grado, en relación con la motivación Séptima del fallo recurrido,
permite establecer que efectivamente se dio por acreditado que el actor
E.M. no cumplía con el tiempo de prestación de servicios, veinte años,
exigidos por el citado artículo 188 del Decreto con Fuerza de Ley Nº 1
de 1968, hecho expresamente establecido que hacía improcedente el
encasillamiento que se reclama, sin perjuicio de habérsele concedido
una pensión de retiro y desahucio. Bajo tal supuesto no puede
asimilarse su situación con la de los otros dos demandantes respecto
de quienes sí procedía el encasillamiento, beneficio que, estando
amparado por la garantía de la imprescriptibilidad, justifica el rechazo
de la excepción. En consecuencia, de lo relacionado aparece manifiesta
la incongruencia que existe entre las motivaciones del fallo y la decisión
de rechazar la excepción de prescripción en relación al actor E.M.,
contradicción que significa falta de fundamentación de lo resuelto a ese
respecto y configura la omisión constitutiva del vicio previsto en el
numeral 5 del artículo 768 del Código de Procedimiento Civil, en
relación con el artículo 170 número 4 del mismo cuerpo legal, al no
contener consideraciones pertinentes o ser éstas contradictorias por lo
que no pueden servir de fundamento a la decisión (considerando 6º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 8/07/2019, Rol Nº 39430-


2017,

Cita online: CL/JUR/5795/2019


12. Indemnización de perjuicios por responsabilidad contractual. Causal
de casación en la forma de ultra petita, inadmisible. Incumplimiento
de los requisitos de admisibilidad del recurso de casación en la forma.
Incumplimiento del requisito de preparación del recurso

De conformidad al artículo 768 Nº 4 del Código de Procedimiento


Civil, el vicio de ultra petita se configuraría por la falta de congruencia
entre lo pedido y lo otorgado, ya que la sentencia impugnada habría
omitido pronunciarse sobre la pretensión de indemnización de perjuicios
contenida en las demandas principal y reconvencional. En la especie,
los antecedentes sobre los cuales se construye el argumento no son
propios de la causal invocada. Cabe recordar que la denominada ultra
petita ataca la falta de adecuación entre las pretensiones formuladas
por las partes y lo dispositivo de la resolución judicial; sin embargo, el
recurrente postula que la sentencia cuestionada habría omitido
pronunciamiento respecto de una de las pretensiones, siendo ese un
reproche formal distinto que no se aviene con esta causal
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Respecto a la causal de casación del artículo 768 Nº 5 del Código de


Procedimiento Civil, relacionada con el artículo 170 Nºs. 4, 5 y 6 del
mismo cuerpo legal, el impugnante señala que el vicio se configuraría
por falta de fundamentación. Sostiene que las consideraciones
desarrollan un razonamiento que no se vincula con las probanzas, ni
pondera toda la prueba rendida. Pero, además, el fallo omitiría
pronunciamiento sobre la pretensión de indemnización de perjuicios
constituida por los intereses devengados desde el cobro indebido de la
boleta de garantía. Sin embargo, constatado que el recurso de casación
en la forma contra la sentencia de primera instancia no fue deducido de
manera eficiente, ya que fue declarado desierto, éste no fue reclamado
de manera oportuna y en todos sus grados mediante los recursos
procesales que confiere la ley (considerandos 7º y 8º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 27/06/2019, Rol Nº 2840-2019,

Cita online: CL/JUR/3721/2019

Fallos en el mismo sentido:


— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 19/11/2018, Rol Nº 16765-
2018,

Cita online: CL/JUR/6570/2018

13. Cobro de Cheque. I. Causal de casación en la forma de ultra petita,


rechazada. Principio de congruencia busca vincular a las partes y al
juez al debate. Principio de congruencia enlaza la pretensión, la
oposición, la prueba, la sentencia y los recursos.

El vicio de la ultra petita transgrede un principio rector de la actividad


procesal, denominado de la congruencia, que busca vincular tanto a las
partes como al juez al debate, confabulando en su contra la ausencia
de la forzosa cadena de los actos que lo conforman y a los que se
procura dotar de eficacia, por ende, se trata de un principio que vincula
la pretensión, la oposición, la prueba, la sentencia y los recursos,
precaviendo la conformidad que debe concurrir entre todos los actos del
procedimiento que componen el proceso, y si bien el órgano
jurisdiccional no queda delimitado por las exposiciones jurídicas que
plantean las partes, no aminora la exigencia conforme a la cual el
derecho aplicable debe enlazarse a las acciones y excepciones,
alegaciones y defensas que han formulado en el pleito. En la especie,
de la lectura del fallo impugnado se desprende que resolvió la
controversia de acuerdo al tenor de las acciones y excepciones
planteadas por las partes, sin alterar su contenido, objeto o causa de
pedir y que no otorga más de lo pedido por las partes, ni emite
pronunciamiento sobre materias que no hayan sido sometidas a la
decisión del mismo (considerandos 3º y 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 25/06/2019, Rol Nº 26751-2018,

Cita online: CL/JUR/3648/2019

14. Cobro de pagaré. I. Causal de casación en la forma de ultra petita.


Principio de congruencia busca vincular a las partes y al juez al
debate. Principio de congruencia enlaza la pretensión, la oposición, la
prueba, la sentencia y los recursos. Improcedencia de acoger
excepción fundado en antecedente no invocado al efecto. Sentencia
que se ha extendido en la resolución del asunto a puntos no
sometidos a su decisión. Anulación de oficio
El artículo 768 Nº 4 del Código de Procedimiento Civil estatuye la ultra
petita como uno de los vicios formales que pueden afectar a una
sentencia, trayendo aparejada la nulidad de la misma. El citado defecto
contempla dos formas de materialización; la primera consiste en otorgar
más de lo pedido, que es propiamente la ultra petita, mientras que la
segunda se produce al extenderse el fallo a puntos no sometidos a la
decisión del tribunal, hipótesis que se ha denominado extra petita.
Asimismo, según lo ha determinado uniformemente la Corte Suprema,
el fallo incurre en ultra petita cuando, apartándose de los términos en
que las partes situaron la controversia por medio de sus respectivas
acciones o excepciones, se altera el contenido de éstas cambiando su
objeto o modificando su causa de pedir. Por consiguiente, el vicio formal
en mención se verifica cuando la sentencia otorga más de lo que las
partes han solicitado en sus escritos de fondo —demanda y
excepciones— por medio de los cuales se fija la competencia del
Tribunal o cuando se emite pronunciamiento en relación a materias que
no fueron sometidas a la decisión del mismo, vulnerando, de ese modo,
el principio de la congruencia, rector de la actividad procesal. Asimismo,
la doctrina comparada ve en la denominada ultra petita —en el doble
cariz antes descrito— un vicio que conculca un principio rector de la
actividad procesal, cual es el de la congruencia y que ese ataque se
produce, precisamente, con la "incongruencia" que pueda presentar una
decisión con respecto al asunto que ha sido planteado por que los
litigan. El principio de congruencia se basa en diversos fundamentos,
ámbitos de aplicación y objetivos. Primeramente, busca vincular a las
partes y al juez al debate y, por tanto, conspira en su contra la falta del
necesario encadenamiento de los actos que lo conforman, a los que
pretende dotar de eficacia. Por lo tanto, se trata de un principio que
enlaza la pretensión, la oposición, la prueba, la sentencia y los recursos,
al mismo tiempo que cautela la conformidad que debe existir entre todos
los actos del procedimiento que componen el proceso
(considerandos 5º y 6º de la anulación de oficio).

En la especie los jueces de la instancia hicieron lugar a la excepción


del artículo 464 Nº 7 del Código de Procedimiento Civil apoyados en un
hecho ajeno a las circunstancias de hecho formuladas por el
demandado, esto es, sobre la base de una supuesta diferencia entre la
fecha de la suscripción del documento y la de la autorización de la firma
del deudor. La sentencia impugnada, al inclinarse por hacer lugar a la
excepción de falta de requisitos para que el título tenga fuerza ejecutiva,
tuvo en cuenta un argumento diferente de aquellos planteados por el
litigante que la propugnó, lo que no resulta admisible. En consecuencia,
la sentencia recurrida se ha excedido del ámbito propio de la litis, al
cimentar la decisión de acoger una excepción intentada por el ejecutado
sobre un antecedente que no fue invocado por éste al formularla, y es
por ello que emerge nítida y evidente la efectividad de un vicio de forma
al haber exorbitado el ámbito de la controversia ventilada en el pleito,
comprendido en la causal del artículo 768 Nº 4, denominada ultra petita,
sentencia que se invalidará de oficio de acuerdo con la facultad que
confiere a la Corte el artículo 775, ambos del Código de Procedimiento
Civil (considerandos 8º y 9º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 30/05/2019, Rol Nº 20574-2018,

Cita online: CL/JUR/2967/2019

15. Término de contrato de arrendamiento por no pago de rentas.


Incumplimiento de los requisitos de casación en la forma. Ultra
petita. Fallo impugnado que no se extiende a materias o puntos
extraños al conflicto ventilado en el proceso ni decidido algo distinto
de lo pedido en la demanda

En cuanto a que la sentencia hubiera concedido menos de lo pedido


por el actor, como lo expresa el recurrente, no se vislumbra perjuicio
alguno para su parte que pueda ser reparado por medio del presente
recurso de nulidad, toda vez que como lo ha declarado reiteradamente
esta Corte, la ultra petita sólo se produce cuando la sentencia otorga
más de lo pedido por los litigantes o se extiende a puntos no sometidos
a la decisión del tribunal, esto es, cuando se aparta de los términos en
que los interesados situaron la controversia a través de sus respectivas
acciones o excepciones, altera su contenido, al cambiar su objeto o
modificar su causa de pedir, de suerte que sólo se configura si el laudo
rebasa el margen de las pretensiones formuladas en la fase de
discusión. De este modo, no es posible concluir que el fallo se haya
extendido a materias o puntos extraños al conflicto ventilado en el
proceso o decidido algo distinto de lo pedido en la demanda, por lo que
el que el recurso de nulidad formal debe ser desestimado en esta etapa
de tramitación (considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 20/05/2019, Rol Nº 28095-


2018,
Cita online: CL/JUR/2850/2019

16. Acción de desposeimiento. I. Sentencia de casación. II. Análisis de


la causal de nulidad formal del Nº 4 del art. 768 del Código de
Procedimiento Civil. Resguardo del principio de congruencia.
Clasificación doctrinaria de los tipos de incongruencia. Se configura
vicio de extra petita si la sentencia impugnada se funda en
argumentos que la ejecutada no hizo valer en el escrito respectivo

El motivo de nulidad formal consagrado en el número 4 del


artículo 768 del Código de Procedimiento Civil establece dos formas de
concretarse: cuando la sentencia otorga más de lo pedido, que es propio
de la ultra petita, y cuando se extiende a puntos no sometidos a la
decisión del tribunal, hipótesis que se designa extra petita; y esta Corte
ha expresado de manera uniforme que se incurre en dicho vicio cuando
la sentencia, apartándose de los términos en que las partes situaron la
controversia a través de sus respectivas acciones o excepciones, altera
su contenido cambiando su objeto o modificando su causa de pedir.
Dicha norma debe relacionarse con lo que prescribe el artículo 160 del
mencionado código, que ordena que las sentencias deben pronunciarse
conforme al mérito del proceso y no podrán extenderse a puntos que no
hayan sido sometidos expresamente a juicio por las partes, salvo en
cuanto las leyes manden o permitan a los tribunales proceder de oficio.
El vicio de la ultrapetita —en el doble aspecto reseñado— quebranta un
principio rector de la actividad procesal, designado de la congruencia,
que busca relacionar tanto a las partes como al juez al debate,
conspirando en su contra la falta de la forzosa cadena de los actos que
lo conforman y a los que se procura dotar de eficacia, por lo tanto, se
trata de una máxima que vincula la pretensión, la oposición, la prueba,
la sentencia y los recursos, precaviendo la conformidad que debe
concurrir entre todos los actos del procedimiento que componen el
proceso, y si bien el tribunal no queda delimitado por los planteamientos
jurídicos que sostienen las partes, no aminora la exigencia conforme a
la cual el derecho aplicable debe enlazarse a las acciones y
excepciones, alegaciones y defensas que han formulado en el juicio. El
aludido principio otorga seguridad y certeza a los litigantes al impedir
una posible arbitrariedad judicial, por lo que constituye un supuesto de
la garantía del justo y racional procedimiento, que da contenido al
derecho a ser oído o a la debida audiencia de ley. En la doctrina se
formula la siguiente clasificación: a) incongruencia por ultra petita, que
se produce al otorgar más de lo pedido, lo que puede darse tanto
respecto de la pretensión como de la oposición; b) incongruencia
por extra petita, al extenderse el pronunciamiento a cuestiones no
sometidas a la decisión del tribunal, que incluso puede estar referida a
negar lo que no ha sido solicitado por vía de pretensión u oposición;
c) incongruencia por infra petita, defecto cuantitativo que se genera
cuando se decide sobre una pretensión en extensión menor de lo
solicitado, sea que se conceda o niegue y en el entendido que se ha
requerido una cantidad determinada y no otra. También concurre si se
otorga menos de lo reconocido por el demandado; y d) incongruencia
por citra petita, llamada también omisiva o ex silentio, concurrente al
omitir la decisión de un asunto cuya resolución forma parte de la
contienda y no existir autorización legal que permita así decidirlo, falta
de pronunciamiento que puede ser total o parcial; igualmente al
expresarse que no se decide una acción o excepción por
incompatibilidad, la que es inexistente, o reservar el pronunciamiento
para otra etapa u otro juicio, en circunstancias que no fue solicitado en
tales condiciones y no lo ordena la ley. En la especie, la decisión
impugnada gira en torno y se funda en argumentos que la ejecutada no
hizo valer en el escrito respectivo, para dar cumplimiento a lo que
dispone el artículo 465 del Código de Procedimiento Civil, que mandata
que todas las excepciones deben oponerse en un mismo escrito,
expresándose con claridad y precisión los hechos que las configuran;
razón por la que se debe concluir que se configuró la causal de nulidad
que se analiza, por violación del principio de congruencia, en concreto,
por incurrir en lo que la doctrina denomina "incongruencia por ultra
petita" (considerandos 2º y 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 29/04/2019, Rol Nº 26351-2018,

Cita online: CL/JUR/2256/2019

17. Acción de precario. Requisitos de procedencia del vicio de ultra


petita. Sentencia impugnada que se pronuncia sobre la cuestión
discutida sin extenderse a puntos ajenos al asunto

A fin de resolver la causal de impugnación —del artículo 768 Nº 4 del


Código de Procedimiento Civil—, es pertinente hacer presente que esta
Corte ha declarado reiteradamente que la ultra petita se produce
cuando el veredicto otorga más de lo pedido por los litigantes o se
extiende a puntos no sometidos a la decisión del tribunal, esto es,
cuando se aparta de los términos en que los interesados situaron la
controversia a través de sus respectivas acciones o excepciones, altera
su contenido, al cambiar su objeto o modificar su causa de pedir, de
suerte que sólo se configura si el laudo rebasa el margen de las
pretensiones formuladas en la fase de discusión. La sola lectura del
dictamen impugnado revela que se pronuncia sobre la cuestión
discutida sin extenderse a puntos ajenos al asunto, pues no analiza la
procedencia de ninguna excepción perentoria, que no fue opuesta en el
juicio, sino que se limita a constatar la presencia de los presupuestos
de la demanda interpuesta, cada uno de los cuales debe entenderse
controvertido atendida la rebeldía del demandado, concluyendo que no
concurren en el caso. Así, la decisión se ajusta al mérito del proceso y
a los alcances de la controversia en los términos que fue planteada por
las partes, por lo que esta causal de nulidad queda desprovista de
asidero y debe ser desestimada (considerandos 5º y 6º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 15/04/2019, Rol Nº 18738-


2018,

Cita online: CL/JUR/2084/2019

18. Cumplimiento forzado de contrato. Incumplimiento de los requisitos


de admisibilidad del recurso de casación en la forma. Principio de
congruencia. Fallo impugnado que no configura el vicio de ultra
petita denunciado

El defecto formal denunciado —ultra petita— no podrá tener acogida


ya que los hechos en virtud de los cuales se construye el argumento no
configuran la causal invocada. En efecto, cabe recordar que la doctrina
comparada ve en la denominada ultra petita —más allá de lo pedido—
un vicio que ataca un principio rector de la actividad procesal, cual es el
de la congruencia. Ese ataque se produce precisamente con la
incongruencia, que es la falta de adecuación entre las pretensiones de
las partes formuladas oportunamente y la parte dispositiva de la
resolución judicial. Dicho lo anterior, el examen aludido permite
constatar que durante el transcurso del juicio el demandado dedujo la
excepción de cosa juzgada, fundándola en que la pretensión deducida
en estos autos ya había sido ventilada en una causa anterior —rol Nº C-
9169-2014 del 9º Juzgado Civil de Santiago, sobre cobro de honorarios
para obtener el pago de una cantidad determinada de dinero— seguida
entre los mismos litigantes, en la que se dictó sentencia en favor de su
parte; materia que fue precisamente analizada en el fallo impugnado
para efectos de determinar la procedencia de la excepción aludida. De
ello se sigue que las fundamentaciones vertidas en el fallo impugnado
se encuadran precisamente en las alegaciones formuladas por las
partes en las distintas etapas de discusión, quedando en evidencia que
los argumentos del recurrente reflejan más bien una discrepancia con
el razonamiento seguido por los jueces de la instancia al examinar los
elementos de la cosa juzgada, reproche que no configura el vicio
de ultra petita denunciado en el libelo recursivo (considerando 3º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 10/04/2019, Rol Nº 2014-2019,

Cita online: CL/JUR/2004/2019

19. Reclamo de ilegalidad municipal. I. Causal de casación en la forma


de ultra petita, acogida. Principio de congruencia busca vincular a las
partes y al juez al debate. Principio de congruencia enlaza la
pretensión, la oposición, la prueba, la sentencia y los recursos.

El artículo 768 Nº 4 del Código de Procedimiento Civil estatuye la ultra


petita como uno de los vicios formales que pueden afectar a una
sentencia, trayendo aparejada la nulidad de la misma. Tal defecto
contempla dos formas de materialización, la primera de las cuales
consiste en otorgar más de lo pedido, que es propiamente la ultra petita,
mientras que la segunda se produce al extenderse el fallo a puntos no
sometidos a la decisión del tribunal, hipótesis que se ha
denominado extra petita. El vicio formal en mención se verifica cuando
el fallo otorga más de lo que las partes han solicitado en sus escritos de
fondo —demanda, contestación, réplica y dúplica— por medio de los
cuales se fija la competencia del tribunal, o cuando se emite
pronunciamiento en relación a materias que no fueron sometidas a la
decisión del mismo, vulnerando de ese modo el principio de la
congruencia, rector de la actividad procesal. La doctrina comparada ve
en la denominada ultra petita un vicio que conculca un principio rector
de la actividad procesal, cual es, el de la congruencia y que ese ataque
se produce, precisamente, con la "incongruencia" que pueda presentar
una decisión con respecto al asunto que ha sido planteado por los que
litigan. El principio de congruencia se basa en diversos fundamentos,
ámbitos de aplicación y objetivos. Primeramente, busca vincular a las
partes y al juez al debate y, por tanto, conspira en su contra la falta del
necesario encadenamiento de los actos que lo conforman, a los que
pretende dotar de eficacia. Así, se trata de un principio que enlaza la
pretensión, la oposición, la prueba, la sentencia y los recursos, al mismo
tiempo que cautela la conformidad que debe existir entre todos los actos
del procedimiento que componen el proceso (considerandos 8º y 9º de
la sentencia de casación).

Los jueces del fondo, al determinar el monto a restituir, decidieron


otorgar más de lo pedido por la actora. Los sentenciadores no dan
cuenta de antecedente alguno y tampoco dejan constancia de ningún
razonamiento que permita inferir que la reclamante pagó, en razón de
la patente en comento, la cifra que se ordena devolver. De esta manera,
al ordenar el pago de una cifra que sobrepasa lo requerido por la actora,
los magistrados recurridos incurren en el vicio que se les reprocha, pues
conceden más de lo pedido en la demanda. En tales condiciones, es
posible concluir que la sentencia recurrida efectivamente ha incurrido
en la causal de casación del artículo 768 Nº 4 del Código de
Procedimiento Civil (considerandos 14º a 16º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 27/03/2019, Rol


Nº 8400-2018,

Cita online: CL/JUR/2024/2019

20. Responsabilidad del Estado. Causal de casación en la forma de ultra


petita, inadmisible. Sentencia que no se ha extendido en la resolución
del asunto a puntos no sometidos a su decisión

Respecto a la causal de casación en la forma del artículo 768 Nº 4 del


Código de Procedimiento Civil, se debe considerar que entre los
principios rectores del proceso figura el de la congruencia, que se refiere
a la conformidad que ha de existir entre la sentencia expedida por el
órgano jurisdiccional y las pretensiones que las partes han expuesto
oportuna y formalmente en sus escritos fundamentales agregados al
proceso, lo que implica que el juez debe limitar su pronunciamiento tan
sólo a lo que ha sido pedido por los litigantes. Por ende, una sentencia
deviene en incongruente y por lo mismo, se produce el señalado defecto
si el fallo no resuelve los puntos objeto de la litis o se extiende a otros
que no fueron sometidos a la decisión del tribunal. Luego, no se aviene
con el mérito del proceso la afirmación del recurrente acerca que la
sentencia incurre en el vicio de extra petita que le atribuye, toda vez que
no es efectivo que los jueces de la instancia hayan encuadrado la
decisión del conflicto fuera de lo pedido por las partes. Del fallo atacado
se puede constatar que, en lo resolutivo, se limitó el sentenciador a
confirmar el pronunciamiento de primer grado, que acogió la demanda,
sin extenderse a otras declaraciones ajenas a la acción deducida
(considerandos 4º a 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 20/03/2019, Rol


Nº 32846-2018,

Cita online: CL/JUR/1514/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional, 20/03/2019, Rol


Nº 32846-2018,

Cita online: CL/JUR/1514/2019

21. Cumplimiento incidental. Querella posesoria de aguas. I. Causal de


casación en la forma de ultra petita, inadmisible. Sentencia que no se
ha extendido en la resolución del asunto a puntos no sometidos a su
decisión

El recurrente esgrime el vicio de ultra petita argumentando que en el


procedimiento de autos no es posible acoger la excepción de pago
opuesta por la demandada, puesto que el fundamento de la misma es
que deshizo las obras y el relleno, retirando los escombros y basuras
que torcían el cauce del río, cuestión que no es efectiva porque el
informe pericial no desconoce la presencia de relleno, otras obras y
escombros en el lugar. Los supuestos sobre cuya base se construye el
vicio denunciado no constituyen la causal hecha valer que está referida
a la congruencia que debe existir entre las acciones, excepciones,
alegaciones y defensas materia del juicio y lo resuelto en la sentencia.
En tales condiciones resulta evidente que el vicio formal denunciado no
concurre en la especie, pues los falladores se limitaron a resolver el
asunto sometido a su conocimiento al tenor de la acción deducida y de
la excepción opuesta, sin que se advierta la incongruencia acusada por
el recurrente (considerandos 6º y 7º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 1/02/2019, Rol


Nº 8093-2018,

Cita online: CL/JUR/573/2019

22. Responsabilidad del Estado. I. Incumplimiento del requisito de la


sentencia de contener la decisión del asunto controvertido. II.
Improcedencia de impugnar la resolución respecto a las costas
mediante recurso de casación en el fondo

I. El fallo impugnado omitió pronunciarse acerca de las peticiones de


reajustabilidad e intereses de la suma que por daño moral ordenó pagar,
incurriendo de esta manera en la causal de casación del artículo 768 Nº
5 del Código de Procedimiento Civil, en relación con el art ículo 170 Nº 6
del mismo texto legal, desde que no fue resuelto en su totalidad el
asunto sometido a la decisión del tribunal (considerando 3º de la
sentencia de casación).

II. En cuanto a la alegación de la recurrente en orden a que la


sentencia impugnada habría resuelto erradamente al eximir a la
demandada del pago de las costas, ésta resulta jurídicamente
inaceptable por cuanto el pronunciamiento sobre las costas judiciales,
no obstante encontrarse inserto como en el presente caso —dentro de
la estructura de una sentencia definitiva—, no pertenece al contenido y
finalidad esencial de una resolución de esta naturaleza; poner fin a la
instancia, decidiendo acerca de la cuestión o asunto que ha sido objeto
del juicio; y constituyendo la discusión sobre las costas una materia
incidental del pleito; la sentencia interlocutoria que, al respecto, se
pronuncia no es de aquéllas que el artículo 766 del Código de
Procedimiento Civil presenta como impugnable por medio de un recurso
de casación en la forma (considerando 4º de la sentencia de casación).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 31/12/2018, Rol


Nº 39383-2017,

Cita online: CL/JUR/7164/2018


Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 22/05/2018, Rol


Nº 43002-2017,

Cita online: CL/JUR/2380/2018

23. Indemnización de perjuicios por responsabilidad contractual. I.


Deber de probar que intervención quirúrgica se realizó ajustada a
la lex artis recae en el demandado. Prestación realizada por servicio
público. Deber de determinar si en la intervención quirúrgica se
incurrió en falta de servicio. Incumplimiento del requisito de la
sentencia de contener las consideraciones de hecho y de derecho que
le sirven de fundamento

De conformidad a los antecedentes del proceso, su análisis


normativo, debió llevar, a lo menos, a considerar el artículo 1547
inciso 3º del Código Civil, concordante con el artículo 1698 del mismo
Código, el cual dispone que, establecido el vínculo jurídico previo, "la
prueba de la diligencia o cuidado incumbe al que ha debido emplearlo",
es por ello que era de cargo del deudor demandado probar que la
intervención quirúrgica a que fue sometido el demandante se realizó
ajustada a la lex artis médica en el caso concreto, de acuerdo a la
diligencia o cuidados ordinarios o medianos de un profesional
odontólogo especialista, por ser un contrato bilateral y que fue derivado
por otro odontólogo, considerando su especialidad. Sin embargo, por la
naturaleza de servicio público de la Caja de Previsión demandada y que
la prestación fue realizada, precisamente, en tal carácter, lo cierto es
que los magistrados de la instancia, de acuerdo al principio del iura novit
curiat, se encontraban en la necesidad de determinar si en la
intervención quirúrgica que fue objeto el demandante se incurrió en falta
de servicio, en aplicación de los artículos 4º y 42 de la Ley Nº 18.575.
Sin la ponderación referida los jueces del fondo concluyeron que no se
encontraban establecidos los presupuestos de la responsabilidad
demandada. Ante tales omisiones la sentencia impugnada incumplió la
exigencia prevista en el artículo 170 Nº 5 del Código de Procedimiento
Civil y se incurrido en la causal de casación de falta de consideraciones
de derecho, prevista en el artículo 768 Nº 5 del mismo Código
(considerandos 8º y 9º de la sentencia de casación).
Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 26/12/2018, Rol
Nº 44501-2017,

Cita online: CL/JUR/7142/2018

24. Cobro de pesos. I. Causal de casación en la forma de ultra petita.


Principio de congruencia. Sentencia que no se ha extendido en la
resolución del asunto a puntos no sometidos a su decisión

Entre los principios rectores del proceso figura el de la congruencia,


que se refiere a la conformidad que ha de existir entre la sentencia
expedida por el órgano jurisdiccional y las pretensiones que las partes
han expuesto oportuna y formalmente en sus escritos fundamentales
agregados al proceso, que guarda estrecha vinculación con otro
principio formativo del proceso: el dispositivo, conforme al cual el juez
debe limitar su pronunciamiento a lo que ha sido pedido por aquéllas.
Dicho principio procesal tiende a frenar cualquier eventual exceso de la
autoridad de oficio, otorgando garantía de seguridad y certeza a las
partes. Éste se vulnera con la incongruencia que, en su faz objetiva, se
presenta bajo dos modalidades: ultra petita, cuando se otorga más de
lo pedido por las partes, circunstancia que puede darse tanto respecto
de la pretensión del demandante como de la oposición del demandado;
y extra petita, cuando se concede algo que no ha sido impetrado,
extendiéndose el pronunciamiento a cuestiones que no fueron
sometidas a la decisión del tribunal. En este caso, no concurre el vicio
denunciado, pues la decisión que lo constituiría fue adoptada en virtud
de lo pedido por la propia actora al apelar en contra del fallo de primer
grado (considerandos 3º, 4º y 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 21/08/2018, Rol


Nº 44258-2017,

Cita online: CL/JUR/4630/2018

25. Reparación de daño ambiental. Cumplimiento incidental. I. Fondo


de limitación de responsabilidad. Tribunal carece de competencia
para ordenar la restitución del Fondo de Limitación de
Responsabilidad. Causal de casación en la forma de ultra petita,
acogida.
El fondo de limitación de responsabilidad no es definido por la ley, el
autor Abuauad lo describe como: "una suma de dinero o una garantía
de dicha suma de dinero, equivalente al monto de limitación de
responsabilidad que fija la ley, con la cual la empresa naviera hará pago
de los créditos a los cuales puede oponerse el beneficio de limitación".
Para el autor Barroilhet "Aquí convergen un derecho sustantivo, que es
el de limitar responsabilidad, con una institución procesal, cual es el
fondo de limitación de responsabilidad y el requisito o carga que la ley
coloca a quien quiera gozar de la limitación es constituir un fondo e
iniciar el procedimiento de limitación" y agrega que "la función del fondo
es doble. Respecto del acreedor, sin afectarle su crédito, se le confiere
liquidez y se le libera de tener que proseguir en la ejecución individual,
ya que se coloca dinero a su disposición para que pueda pagarse en él.
Respecto de quien constituye el fondo, éste le permitirá seguir
explotando la nave, que queda liberada por efecto de la norma antes
analizada, lo que subsana una de las críticas del sistema del abandono,
cual era que el naviero que quisiera gozar de los beneficios de la
limitación debía abandonar la nave para hacer pago a sus acreedores,
desprendiéndose de su capital de trabajo" (considerando 14º de la
anulación de oficio).

La sentencia impugnada al disponer la restitución del Fondo de


limitación de Responsabilidad ha incurrido en el vicio de ultra petita,
puesto que el Fondo de Limitación de Responsabilidad, si bien, se
relaciona con el objeto genérico del proceso, esto es, con el pago de
una indemnización por daño ambiental, constituye uno distinto y
especial que incluso se tramita por cuerda separada, no sólo porque la
Ley de Navegación contempla un procedimiento específico para dichos
efectos, lo cual sería suficiente para colegir que no es posible al juez
resolver sobre el mismo sin escuchar previamente, a lo menos, a las
partes sobre su disposición sino porque, además, de su reglamentación
se desprenden una serie de efectos e interpretaciones —debatidas
ampliamente por la doctrina— que deben necesariamente ser
discutidas por los litigantes y explicitadas por el juez en la sede que
corresponda antes de decidir sobre el asunto, lo contrario impide a las
partes su legítimo derecho a presentar sus alegaciones y defensas, en
definitiva, las priva de un racional y justo proceso. En consecuencia, los
sentenciadores no tenían competencia para ordenar la restitución del
Fondo de Limitación de Responsabilidad, perjudicando a la parte
demandante y sin que ello hubiese sido expresamente solicitado por la
contraria, incurriendo así en la causal del artículo 768 Nº 4 del Código
de Procedimiento Civil, según se razonó en los fundamentos
precedentes (considerandos 15º y 16º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 26/06/2018, Rol


Nº 36757-2017,

Cita online: CL/JUR/3217/2018

26. Responsabilidad del Estado. Indemnización de perjuicios, acogida.


Causal de casación en la forma de ultra petita. Improcedencia de
resolver asuntos que no forman parte de la litis. Anulación de oficio

En la especie, luego de concordar los jueces con el fallo apelado en


cuanto a que el Servicio de Salud demandado resulta obligado en razón
de haber mediado falta de servicio en las atenciones prestadas a la
paciente y concurrir los supuestos los artículos 38 de la Ley Nº 19.966
y 42 de la Ley Nº 18.575, por lo que asume que se configura la relación
de causalidad con los perjuicios ocasionados a la actora y a su hijo, sin
embargo, al abordar lo relativo a la determinación del monto de la
indemnización incorpora de oficio dos circunstancias que tuvo por
establecidas y en cuya virtud justifica la reducción de la suma a pagar
como resarcimiento. Acude en primer lugar el fallo en examen a la culpa
de la víctima —la paciente— por la tardanza en la presentación del
examen PSGO (prueba de sobrecarga de glucosa). Por otra parte,
establece que la demandante ya fue indemnizada, o bien, que tiene un
crédito en su favor, con arreglo a lo dispuesto por el artículo 240 del
Código Procesal Penal. Luego, al margen de no explicitarse la forma en
que la conducta de tardanza atribuida a la víctima influyó en la falta de
servicio establecida en autos y que tampoco se entiende la aplicación
del artículo 240 del Código Procesal Penal con una reducción
prudencial del monto a indemnizar, lo cierto y determinante es que
ninguna de las dos circunstancias señaladas, formaron parte de la litis,
y por ende, tampoco integraron las peticiones concretas de los escritos
que otorgan la competencia o marco de acción a la Corte de
Apelaciones en relación al fallo de primer grado. Tales supuestos no
fueron alegados por la demandada en los escritos de la discusión, que
son los que demarcan o fijan los contornos del pleito, misma razón por
la que el fallo de primer grado no contiene referencia alguna a tales
materias. En consecuencia, el fallo impugnado incurrió en el vicio
de ultra petita previsto por el artículo 768 Nº 4 del Código de
Procedimiento Civil, en su modalidad de extra petita, siendo procedente
su invalidación de oficio (considerandos 9º a 11º de la anulación de
oficio).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 16/04/2018, Rol


Nº 14572-2017,

Cita online: CL/JUR/1757/2018

27. Responsabilidad del Estado. Indemnización de perjuicios, acogida.


Causal de casación en la forma de ultra petita. Improcedencia de
resolver asuntos que no forman parte de la litis. Anulación de oficio

En la especie, luego de concordar los jueces con el fallo apelado en


cuanto a que el Servicio de Salud demandado resulta obligado en razón
de haber mediado falta de servicio en las atenciones prestadas a la
paciente y concurrir los supuestos previstos en el artículo 38 de la Ley
Nº 19.966 y 42 de la Ley Nº 18.575, por lo que asume que se configura
la relación de causalidad con los perjuicios ocasionados a la actora y a
su hijo, sin embargo, al abordar lo relativo a la determinación del monto
de la indemnización incorpora de oficio dos circunstancias que tuvo por
establecidas y en cuya virtud justifica la reducción de la suma a pagar
como resarcimiento. Acude en primer lugar el fallo en examen a la culpa
de la víctima —la paciente— por la tardanza en la presentación del
examen PSGO (prueba de sobrecarga de glucosa). Por otra parte,
establece que la demandante ya fue indemnizada, o bien, que tiene un
crédito en su favor, con arreglo a lo dispuesto por el artículo 240 del
Código Procesal Penal. Luego, al margen de no explicitarse la forma en
que la conducta de tardanza atribuida a la víctima influyó en la falta de
servicio establecida en autos y que tampoco se entiende la aplicación
del artículo 240 del Código Procesal Penal con una reducción
prudencial del monto a indemnizar, lo cierto y determinante es que
ninguna de las dos circunstancias señaladas, formaron parte de la litis,
y por ende, tampoco integraron las peticiones concretas de los escritos
que otorgan la competencia o marco de acción a la Corte de
Apelaciones en relación al fallo de primer grado. Tales supuestos no
fueron alegados por la demandada en los escritos de la discusión, que
son los que demarcan o fijan los contornos del pleito, misma razón por
la que el fallo de primer grado no contiene referencia alguna a tales
materias. En consecuencia, el fallo impugnado incurrió en el vicio
de ultra petita previsto por el artículo 768 Nº 4 del Código de
Procedimiento Civil, en su modalidad de extra petita, siendo procedente
su invalidación de oficio (considerandos 9º a 11º de la anulación de
oficio).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 16/04/2018, Rol


Nº 14572-2017,

Cita online: CL/JUR/1757/2018

28. Infracción a la Ley General de Pesca y Acuicultura. Causal de


casación en la forma de ultra petita, inadmisible. Sentencia recurrida
que se limita a resolver lo pedido

El Máximo Tribunal ha declarado reiteradamente que el vicio de ultra


petita se produce cuando el veredicto otorga más de lo pedido por los
litigantes o se extiende a puntos no sometidos a la decisión del tribunal,
esto es, cuando se aparta de los términos en que los interesados
situaron la controversia a través de sus respectivas acciones o
excepciones o, cuando altera su contenido al cambiar su objeto o
modificar su causa de pedir, de suerte que sólo se configura si el laudo
rebasa el margen de las pretensiones formuladas en la fase de
discusión. En este caso, la sola lectura del fallo impugnado revela que
éste no otorga más de lo pedido ni se extiende a puntos ajenos a la
discusión, pues no sólo consta que en la denuncia se solicita
expresamente condenar a la empresa y a "todo aquel que resulte
responsable", habiendo despachado el servicio denunciante las
respectivas citaciones tanto a la persona jurídica como a su
representante; sino que, además, debe concluirse que los jueces se
limitaron a cumplir con la obligación constitucional y legal que les
impone fallar los asuntos entregados a su conocimiento conforme a
derecho, lo que, en el caso, supone aplicar lo previsto en el artículo 118
de la Ley General de Pesca y Acuicultura. En tales condiciones, no se
configura la causal de casación invocada (considerandos 5º y 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 11/04/2018, Rol Nº 42397-2017,

Cita online: CL/JUR/1618/2018


29. Resolución de contrato e indemnización de perjuicios. I. Causal de
casación en la forma de ultra petita, rechazada

El Máximo Tribunal ha manifestado que el vicio de ultra petita —más


allá de lo pedido— se produce al verse vulnerado el principio rector de
la actividad procesal, cual es el de la congruencia, y ese ataque se
produce, precisamente, con el concepto contrario, la "incongruencia".
En su acepción más simple y general la "incongruencia" puede ser
considerada como "la falta de adecuación entre las pretensiones de las
partes formuladas oportunamente y la parte dispositiva de la resolución
judicial" —Serra Domínguez, Manuel—. El artículo 768 Nº 4 del Código
de Procedimiento Civil, recoge expresamente esta situación,
sancionando, con el nombre de ultra petita, los vicios de incongruencia
en que puede incurrir el órgano jurisdiccional al dar más de lo pedido
por las partes y al extenderse a puntos no sometidos a su decisión. En
este caso, la petición fundamental del solicitante consistió en que se
declare que el demandado incumplió el contrato y en consecuencia
declararlo terminado, y otorgar las indemnizaciones de perjuicios que
se reservó para el cumplimiento del fallo. Luego, de la sola lectura de la
petición del solicitante y de lo resuelto por los jueces del fondo resulta
claro que la resolución de la Corte de Apelaciones no ha incurrido en el
vicio de ultra petita. Tal sentencia no se extendió a puntos no sometidos
a su consideración pues lo que se resolvió fue, precisamente, que se
acogía la pretensión del actor (considerandos 5º a 7º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 9/04/2018, Rol Nº 27928-2017

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 27/03/2018, Rol Nº 11758-


2017,

Cita online: CL/JUR/1490/2018

5ª En haber sido pronunciada con omisión de cualquiera de los requisitos


enumerados en el artículo 170;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Indemnización de perjuicios por responsabilidad extracontractual. I.
Nulidad de oficio. Sentencia impugnada omite análisis de antecedente
probatorio relevante para la resolución de la litis. Jueces omitieron
considerar el informe técnico pericial de la S.I.A.T. de Carabineros.

En la especie, al examinar los antecedentes del proceso se advierte


que los jueces omitieron considerar el informe técnico pericial Nº 11-A-
2015 de la S.I.A.T. de Carabineros de Chile, referido a la investigación
del accidente de tránsito materia de autos. En efecto, la sentencia hace
una mera referencia a dicho elemento probatorio, al mencionarlo en la
reseña de la prueba allegada al proceso, pero no se hace cargo de su
mérito. En estas circunstancias, no es posible verificar si los jueces del
fondo cumplieron con efectuar una efectiva ponderación del documento
omitido, tanto más si no indican las razones por las cuales desestiman
su mérito para decidir que las medidas de seguridad adoptadas por la
empresa fueron las adecuadas. Ello se traduce en una insuficiencia y
falta integral del análisis de la prueba rendida que debió ser explicitada
en el razonamiento, sea para otorgarle o negarle mérito probatorio,
como se requiere para comprender de qué manera fueron ponderadas
las probanzas hasta provocar la convicción de los sentenciadores. Al
prescindirse de ese análisis se han omitido las consideraciones de
hecho y de derecho que debían servir de sustento a la decisión. Lo
anotado deja en evidencia que, en la especie, la sentencia impugnada
incurre en el vicio de casación formal que contempla el artículo 768 Nº 5
del Código de Enjuiciamiento Civil, en relación con lo prevenido en el
artículo 170 Nº 4 del mismo Código, lo que faculta a este tribunal para
anular de oficio la sentencia dictada por la Corte de Apelaciones de
Concepción, puesto que la irregularidad aludida influyó sustancialmente
en la decisión del asunto, al prescindir del antecedente probatorio antes
mencionado, el que por su mérito resultaba relevante para la resolución
de la litis, tal como se expresará en la sentencia de reemplazo que se
pronunciará a continuación (considerandos 5º y 7º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 19/06/2020, Rol Nº 19219-2018,

Cita online: CL/JUR/41955/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 8/06/2020, Rol Nº 2816-2019,


Cita online: CL/JUR/37309/2020

— Corte de Apelaciones de Santiago, 17/01/2020, Rol Nº 5846-2018,

Cita online: CL/JUR/9451/2020

— Corte Suprema (Primera Sala Civil) 11/12/2019, Rol Nº 14821-


2018,

Cita online: CL/JUR/7036/2019

— Corte Suprema (Primera Sala Civil) 11/12/2019, Rol Nº 16684-


2018,

Cita online: CL/JUR/7035/2019

— Corte Suprema (Primera Sala Civil), 26/06/2019, Rol Nº 34087-


2017,

Cita online: CL/JUR/3680/2019

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial) 23/05/2019, Rol Nº 7558-


2018,

Cita online: CL/JUR/2809/2019

— Corte Suprema (Primera Sala Civil) 5/03/2019, Rol Nº 25126-2018,

Cita online: CL/JUR/1126/2019

— Corte Suprema (Primera Sala Civil), 21/11/2018, Rol Nº 40059-


2017,

Cita online: CL/JUR/6496/2018

2. Reclamación de monto de indemnización por expropiación. I. Causal


de casación en la forma de contener la sentencia decisiones
contradictorias. Incumplimiento del requisito de la sentencia de
contener las consideraciones de hecho y de derecho que le sirven de
fundamento. Anulación de oficio
Los jueces de la instancia, en el caso sub judice, no han dado
cumplimiento a los requisitos legales en lo que dice relación con la
extensión de la indemnización otorgada en razón del daño causado a la
edificación existente en el predio de que se trata. En efecto, la sentencia
impugnada carece de las consideraciones que le han de servir de
fundamento en esta parte, en tanto incurre en contradicciones que lo
privan de los razonamientos que lo han de sustentar. En efecto, de los
antecedentes aparece que el fallador de primer grado, cuyas
disquisiciones hicieron suyas los magistrados de la Corte de
Apelaciones al confirmar su sentencia sin modificaciones, estimó, por
una parte, que el daño patrimonial efectivamente causado por el acto
de autoridad materia de autos abarca a la totalidad del edificio erigido
en el predio que era de dominio de la actora. Es decir, el acto
expropiatorio no sólo perjudica a la reclamante al privarla de una parte
del terreno de que era dueña, sino que, además, genera un detrimento
en su patrimonio al provocar daños en la totalidad del edificio allí
levantado, con independencia de si éste se encuentra situado en el
sector expropiado o en aquel que permanece en el dominio de la
demandante, pues las consecuencias de la demolición serán de tal
entidad que producirán un daño considerable al resto del inmueble que
quedará en pie, tales como graves desplomes, desniveles y
agrietamientos. En ese entendido, los juzgadores del mérito acogen la
reclamación en cuanto ordenan que, además de la indemnización
establecida por la Comisión Tasadora, se resarza a la actora por la
totalidad de la edificación afectada. Sin embargo, por otra parte, y
basados en las mismas consideraciones, vale decir, en que la
demolición provocará graves daños a la totalidad del inmueble
construido en el predio que era de dominio de la actora, hasta el extremo
de transformarlo en inutilizable, determinan que resulta procedente el
ítem llamado "Otros", que comprende la glosa "Reposición de fachada".
Es manifiesto que la sentencia cuestionada contiene motivaciones
antagónicas que no pueden coexistir, lo que conduce a la anulación de
esos razonamientos, quedando desprovisto el fallo de la
fundamentación exigida en el artículo 170 Nº 4 del Código de
Procedimiento Civil, con lo cual se configura el vicio de casación formal
previsto en el Nº 5 del artículo 768 del referido cuerpo legal. Luego,
procede invalidar de oficio el fallo impugnado (considerandos 6º, 7º, 9º
y 10º de la anulación de oficio).
Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 8/06/2020 Rol
Nº 31811-2018,

Cita online: CL/JUR/37307/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 8/06/2020, Rol Nº 22233-


2018,

Cita online: CL/JUR/37311/2020

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 30/03/2020, Rol Nº 11639-


2019,

Cita online: CL/JUR/22312/2020

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 30/03/2020, Rol Nº 12984-


2018,

Cita online: CL/JUR/22271/2020

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 20/03/2020, Rol Nº 14819-


2018,

Cita online: CL/JUR/21183/2020

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional) 18/06/2019, Rol


Nº 6372-2018,

Cita online: CL/JUR/3528/2019

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 14/05/2018, Rol


Nº 31679-2017,

Cita online: CL/JUR/2216/2018

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional),19/04/2018, Rol


Nº 35668-2017,

Cita online: CL/JUR/1811/2018


3. Acción ejecutiva de desposeimiento. I. Incumplimiento del requisito
de la sentencia de contener las consideraciones de hecho y de
derecho que le sirven de fundamento

La sentencia recurrida se limitó a mencionar que los documentos


acompañados ante la Corte de Apelaciones en nada alteraban lo
concluido por el juez a quo, lo que constituye una afirmación genérica y
carente de contenido que equivale a no decir absolutamente nada
acerca de los instrumentos en cuestión, resultando inconcuso que los
jueces de la instancia, en el caso sub judice, no han dado acatamiento
a los requisitos legales indicados, desde que han omitido valorar todos
los antecedentes de la causa. En efecto, del examen del fallo
impugnado se advierte una evidente falta de ponderación de la prueba
documental agregada en segunda instancia, de la que se desprende
claramente que la adjudicación que sirvió de fundamento a la decisión
de los jueces de fondo de estimar que el crédito que se perseguía
estaba pagado con la adjudicación de derechos en el inmueble
hipotecado, fue dejada sin efecto por sentencia firme de quince de abril
de dos mil catorce. La omisión antes descrita resulta relevante por
cuanto se trata de documentos que si hubieran sido examinados en la
forma en que la ley exige, habrían determinado el rechazo de la
excepción de pago opuesta por el tercer poseedor de la finca
hipotecada. Por lo tanto, queda de manifiesto que la resolución
reprochada ha incurrido en la omisión de aquel requisito estatuido en el
artículo 170 Nº 4 del Código de Procedimiento Civil, complementado
con el número 5º del Auto Acordado de la Corte Suprema de
30.09.1920, de lo que se sigue que la contravención por los jueces de
esas formalidades trae consigo la invalidación de la sentencia viciada,
en virtud de haberse verificado la causal de nulidad formal prevista en
el artículo 768 Nº 5 del código antes citado (considerandos 6º y 7º de la
sentencia de casación).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 6/06/2019, Rol Nº 14912-2018,

Cita online: CL/JUR/3244/2019

4. Indemnización de perjuicios por responsabilidad contractual.


Incumplimiento del requisito de la sentencia de contener las
consideraciones de hecho y de derecho que le sirven de fundamento
De la lectura de la sentencia impugnada se aprecia la carencia de
análisis en cuanto a la existencia del daño sufrido por concepto de daño
emergente, como también del monto de dicho perjuicio y la relación de
causalidad, presupuestos fácticos necesarios para la procedencia de la
acción. La necesidad de un análisis en tal sentido emana del carácter
propio del estatuto de la responsabilidad tanto de la responsabilidad
contractual como de la extracontractual, en cuanto a través de esta vía
la víctima persigue la reparación o compensación por el daño sufrido, el
que ciertamente debe ser real y cierto. Observados los antecedentes
resulta inconcuso que los jueces de la instancia, en el presente caso,
no han dado acatamiento a los requisitos legales para dictar la
sentencia, desde que han omitido consignar las consideraciones de
hecho en virtud de las cuales dan por establecido el daño causado por
concepto de daño emergente sin efectuar referencia alguna a la prueba
rendida. La omisión antes descrita resulta trascendente, pues el mero
análisis de los antecedentes deriva en insuficiente para dar lugar a la
indemnización de perjuicios reclamada. Luego, la falta absoluta a las
disposiciones y principios referidos en que incurrieron los jueces de la
instancia queda claramente demostrada en estos autos al condenar a
los demandados al pago una indemnización por concepto de daño
emergente que no fue establecido sin efectuar reflexión alguna que lo
justifique. Queda así de manifiesto que la resolución reprochada ha
incurrido en la omisión de aquel requisito estatuido en el artículo 170
Nº 4 del Código de Procedimiento Civil, complementado con el
número 5º del Auto Acordado de la Corte Suprema de 30 de septiembre
de 1920, de lo que se sigue que la contravención por los jueces de esas
formalidades trae consigo la invalidación de la sentencia viciada en
virtud de haberse verificado la causal de casación formal prevista en el
artículo 768 Nº 5 del código antes citado (considerandos 14º y 15º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 29/05/2020, Rol Nº 28148-2018,

Cita online: CL/JUR/35005/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema (Primera Sala Civil), 21/08/2019, Rol Nº 44485-


2017,

Cita online: CL/JUR/4755/2019


5. Terminación de contrato de arrendamiento. I. Incumplimiento del
requisito de la sentencia de contener las consideraciones de hecho y
de derecho que le sirven de fundamento. Anulación de oficio

Consta del mérito del proceso, que el actor aseveró en su libelo inicial,
por un lado, la existencia de un contrato de arrendamiento suscrito por
las partes, respecto del inmueble materia de autos, que comenzó a regir
el 1.08.2013; y, por otro, que el arrendatario no ha pagado las rentas a
partir de octubre de 2016, demandando la declaración de término del
contrato por rentas impagas a partir de la última data y hasta la época
de la demanda, el cobro de las mismas, y de aquellas que se devenguen
hasta que el demandado haga restitución material de la propiedad. Por
su parte, el demandado solicitó su rechazo, pero sin controvertir los
hechos explicitados, sino que, introduciendo un elemento diferente, esto
es, que el contrato de arrendamiento era de plazo fijo, sin contemplar
renovación, y expiró en agosto de 2015, por lo que sería impropio cobrar
las rentas derivadas de tal acto jurídico, de manera que es improcedente
la acción judicial propuesta. Como se observa, no se encuentra
discutida la existencia del contrato, como lo consigna el fallo de primer
grado, tampoco que el demandado mantiene la tenencia de la
propiedad, y que pagó la renta convenida por lo menos hasta el mes de
septiembre de 2016, fecha a la cual, según su defensa, el contrato había
expirado. Sin embargo, dicha última circunstancia fue soslayada por la
judicatura de instancia, la que incluso manifestó, que no se allegó
prueba destinada a acreditar la vigencia del contrato. En tales
condiciones, fluye que no se analizó o, más bien, se pretirió un hecho
no discutido por las partes, que debió tenerse por reconocido, y, por lo
tanto, debió ser considerado y ponderado de manera previa a la
decisión confirmatoria arribada, por cuanto, como se advierte, tuvo
incidencia sustantiva en la decisión del asunto sometido a la
consideración del tribunal. Por consiguiente, se debe concluir que
concurre la causal de nulidad formal consagrada en el artículo 768 Nº 5,
en relación a lo que previene el artículo 170 Nº 4, del Código de
Procedimiento Civil (considerandos 4º y 5º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 18/05/2020, Rol Nº 29086-


2018,

Cita online: CL/JUR/30834/2020


Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 3/09/2019, Rol Nº 35136-


2017,

Cita online: CL/JUR/12014/2019

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 20/08/2018, Rol


Nº Rol: 2572-2018,

Cita online: CL/JUR/4577/2018

6. Cobro de pagaré. I. Incumplimiento del requisito de la sentencia de


contener las consideraciones de hecho y de derecho que le sirven de
fundamento. Anulación de oficio.

Al examinar los antecedentes del proceso y la sentencia de primera


instancia, llama la atención que el pronunciamiento judicial no menciona
la escritura pública de 25 de mayo de 2017. Mientras que el fallo de
alzada se limitó a señalar que dicho instrumento resulta ineficaz para
demostrar la renuncia a la prescripción porque el plazo se hallaba en
curso. Luego, para dar estricto cumplimiento al mandato legal de
fundamentación de toda decisión judicial, los jueces han debido agotar
el examen de las argumentaciones que sustentan las alegaciones y
defensas de las partes, analizándolas conforme a las probanzas que a
ellas se refieren. Para ello, ha de recordarse que considerar implica la
idea de reflexionar detenidamente sobre algo determinado, sin que ello
se advierta en el dictamen en estudio, configurándose así el vicio de
casación en la forma previsto en el artículo 768 Nº 5 del Código de
Procedimiento Civil, en relación con el artículo 170 Nº 4 del mismo texto
legal, por la falta de consideraciones de hecho que le sirven de
fundamento al fallo. Por lo tanto, conforme al artículo 775 del Código de
Procedimiento Civil, procede casar de oficio el fallo impugnado
(considerandos 3º, 7º a 9º de la anulación de oficio).

Corte Suprema, 24/04/2020, Rol Nº 17404-2019,

Cita online: CL/JUR/25504/2020

Fallos en el mismo sentido:


— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 6/03/2020, Rol Nº 2570-2019,

Cita online: CL/JUR/18720/2020

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 31/01/202, Rol Nº 12001-


2018,

Cita online: CL/JUR/9977/2020

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 25/11/2019, Rol Nº 35837-


2017,

Cita online: CL/JUR/6696/2019

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 30/10/2018, Rol Nº 12226-


2018,

Cita online: CL/JUR/6151/2018

7. Responsabilidad del Estado. I. Incumplimiento del requisito de la


sentencia de contener las consideraciones de hecho y de derecho que
le sirven de fundamento

El valor probatorio del informe de peritos, conforme lo dispone el


artículo 425 del Código de Procedimiento Civil se aprecia de acuerdo a
las reglas de la sana crítica. Sistema probatorio que como ha declarado
el Máximo Tribunal, conduce a analizar cualquier asunto por los medios
que aconsejan la recta razón y el criterio racional. En otras palabras,
consiste en la valoración y ponderación de la prueba, siguiendo las
reglas de la lógica, la experiencia y los conocimientos científicamente
afianzados en la comunidad en un momento determinado, variables en
el tiempo y en el espacio, pero estables en el pensamiento humano y la
razón, siendo estas directrices las que permite a las partes, los
ciudadanos en general y a los tribunales superiores a través del sistema
recursivo, efectuar un control sobre dicha prueba, puesto que al no
cumplir con las referidas reglas de la sana crítica se vulnera la ley. En
este contexto, de la sola lectura de la sentencia de segunda instancia,
se advierte que aquella incurrió en la causal que se invoca, esto es, la
de carecer de consideraciones de hecho y de derecho en relación a la
prueba en análisis, pues se limitó a expresar que la pericia "no altera lo
resuelto", sin que se analice concienzudamente su contenido. En efecto,
los jueces de alzada no se hicieron cargo de las afirmaciones emitidas
en el informe, entre otras —y que constituyen el quid de la
controversia—, que el demandante no recibió la frecuencia de aseos
quirúrgicos que eran necesarios para la curación de sus heridas,
limitándose a descartar, genéricamente, el valor de la pericia que hace
mención a dicho aspecto, siendo exigible que el sentenciador señalara,
de manera concreta, qué antecedentes existen que permiten suprimir
las deducciones consignadas en él. En consecuencia, queda en
evidencia que la sentencia recurrida no cumple con las exigencias del
art ículo 170 Nº 4 del Código de Procedimiento Civil, por la falta de
consideraciones de hecho y los razonamientos de derecho que deben
servir de fundamento al fallo, de lo que se sigue la invalidación de la
sentencia viciada (considerandos 8º a 10º de la sentencia de casación).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 2/03/2020, Rol


Nº 15067-2019,

Cita online: CL/JUR/18697/2020

8. Liquidación y partición de sociedad conyugal. Jueces que no


explicitan los argumentos para rechazar el recurso de casación en la
forma. Existencia de error al declarar que el recurso de apelación fue
deducido extemporáneamente. Anulación de oficio

Los jueces no explicitan los argumentos para rechazar el recurso de


casación en la forma. En efecto, el considerando segundo, solo se
refiere a las alegaciones que expusieron las partes en estrados, el
fundamento siguiente enuncia las declaraciones del laudo y ordenata
sin vincularlas a los motivos de nulidad enunciados y el basamento
cuarto únicamente afirma que la sentencia cumple con los requisitos del
artículo 170 del Código de Procedimiento Civil, sin que se desarrolle una
explicación que se haga cargo de las inobservancias denunciadas.
Ahora bien, si con la defectuosa redacción del basamento segundo los
sentenciadores también pretendían expresar sus motivos para
desestimar la nulidad formal —obviando consignarlas el orden lógico
que el encadenamiento de tales proposiciones requería—, también es
evidente que esas explicaciones carecen de sustento fáctico y jurídico,
puesto que la ultra petita denunciada no requiere de la preparación que
los jueces parecen invocar para desestimarla. Asimismo, el hecho de
que no exista prueba para determinar el monto que reclama la
recurrente por el uso del inmueble común por parte de su ex cónyuge
tampoco es suficiente para desestimar la causal del artículo 768 Nº 5
del código mencionado, pues el vicio no se relacionó con la falta de
cumplimiento de la exigencia del Nº 4 del artículo 170 del mismo cuerpo
legal, sino con la prevista en el Nº 6 de ese precepto legal
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema) Los jueces
cometieron un error al declarar que el recurso de apelación fue deducido
extemporáneamente, pues lo único que puede concluirse al tenor de los
artículos 770, 664 y 666 del Código de Procedimiento Civil es que las
partes cuentan con el plazo de quince días para deducir los recursos a
que hay lugar en contra del laudo y ordenata, lapso cuyo inicio varía
según si el pronunciamiento deba o no ser aprobado por la justicia
ordinaria. Y como en la especie el laudo y ordenata no requería de
aprobación posterior por la justicia ordinaria y fue notificado el 27 de
julio de 2017, el recurso de apelación que conjuntamente dedujo con el
de casación en el escrito de 8 de agosto de ese año se interpuso dentro
del término a que se refiere el artículo 664 del Código de Procedimiento
Civil y todavía antes de que venciera el previsto en el inciso segundo
del artículo 189 del mismo cuerpo procesal. Es decir, los mismos
fundamentos de derecho que menciona el fallo conducen a concluir que
la apelación no es extemporánea, como erradamente se concluye
(considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 20/02/2020, Rol Nº 17073-2018,

Cita online: CL/JUR/11068/2020

9. Responsabilidad del Estado. Muerte de Cabo 2º de Carabineros en


acto de servicio. I. Incumplimiento del requisito de la sentencia de
contener las consideraciones de hecho y de derecho que le sirven de
fundamento

El tribunal no justifica debidamente el rechazo de la demanda


intentada en autos, omisión que resulta todavía más relevante si se
tiene presente que existe una decisión de la autoridad competente de
Carabineros de Chile que ha sancionado, por una parte, a dos
funcionarios de esa institución como consecuencia del mal estado de la
puerta del vehículo policial en el que quedó atrapada la Cabo 2º
momentos antes de recibir el impacto del camión que impactó al radio
patrulla en su parte trasera, mientras que, por otro lado, ha castigado a
un tercer funcionario por haber actuado de manera temeraria e insegura
en la conducción del automóvil en el que se movilizaba la citada
suboficial. La sentencia impugnada carece del estándar de
fundamentación mínimo exigible en conformidad a lo establecido en el
artículo 170 Nº 4 del Código de Procedimiento Civil, en relación a las
razones conforme a las cuales decide desestimar la demanda intentada
en autos, desde que ha omitido el examen y debida ponderación de
todos los elementos de juicio aparejados al proceso. La aludida
conclusión aparece así desprovista de la adecuada fundamentación que
debe contener una sentencia, pues no encuentra su correlato en los
basamentos del fallo, de lo que se sigue que no ha existido, en la
especie, un cabal razonamiento respecto del asunto sometido al
conocimiento y resolución de los juzgadores del mérito, omitiéndose de
este modo las consideraciones de hecho y de derecho que debían
servirle de sustento. Por lo tanto, los sentenciadores incurrieron en el
vicio de casación en la forma previsto en el artículo 768 Nº 5 en relación
con el artículo 170 Nº 4, ambos del Código de Procedimiento Civil, por
la falta de consideraciones que han de servir de fundamento al fallo
(considerandos 8º a 11º de la sentencia de casación).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 6/01/2020, Rol


Nº 14899-2018,

Cita online: CL/JUR/2178/2020

10. Responsabilidad del Estado. I. Incumplimiento del requisito de la


sentencia de contener las consideraciones de hecho y de derecho que
le sirven de fundamento. Anulación de oficio

Si bien el fallo impugnado deja establecido que el plazo de


prescripción debe contarse desde que el daño se manifiesta y pueda
ser conocido el responsable, limita su análisis sobre este particular al
examen de los hechos vinculados con el inicio del tratamiento prestado
al paciente y concluye que el perjuicio de cuya indemnización se trata
se hizo evidente y pudo ser conocido en fecha tan temprana como el
6.04.2012, cuando se supo de la existencia del accidente vascular
encefálico que había sufrido, pese a que en el escrito de réplica la parte
demandante adujo expresamente que el plazo de prescripción se debe
contar desde la materialización del daño, esto es, desde la muerte del
paciente, que es consecuencia de una serie de negligencias del
personal que lo atendió. De este modo, los sentenciadores arriban a la
conclusión antedicha sin realizar un análisis pormenorizado de la
prueba rendida y, en particular, de aquella más relevante a estos
efectos, vale decir, de la ficha clínica aparejada al proceso, con el fin de
indagar si, como lo aseveran las demandantes, el daño cuyo
resarcimiento reclaman, deriva de un acto complejo, constituido,
eventualmente, por negligencias y omisiones que habrían ocurrido,
según ese relato, tanto en la intervención quirúrgica como en las
actuaciones acaecidas con posterioridad a esa cirugía. En
consecuencia, queda demostrada así la falta de consideraciones
fácticas y jurídicas en que incurren los jueces de la instancia al dictar el
fallo, omisión que configura el vicio de casación en la forma previsto en
el artículo 768 Nº 5 en relación con el artículo 170 Nº 4, ambos del
Código de Procedimiento Civil, motivo por el cual, de acuerdo a lo
previsto en el artículo 775 del referido Código Procesal, el tribunal está
obligado a declarar de oficio su nulidad, desde que ese error influye
sustancialmente en lo dispositivo de tal resolución (considerandos 11º y
12º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 26/12/2019, Rol


Nº 19130-2018,

Cita online: CL/JUR/12424/2019

11. Responsabilidad del Estado. I. Incumplimiento del requisito de la


sentencia de contener las consideraciones de hecho y de derecho que
le sirven de fundamento. Sentencia que no expresa las razones
conforme las cuales se reguló el quantum indemnizatorio

El tribunal no justifica debidamente un monto indemnizatorio condigno


con el daño cuya existencia ha quedado debidamente establecida en
autos, omisión que resulta más relevante si se tiene presente que, como
se indica en la demanda, los actores se han visto expuestos a un
sufrimiento de carácter "permanente", derivado del estado vegetativo
que afecta de manera irreversible a su cónyuge y padre; más aun, tal
padecimiento no ha sido, sin embargo, correcta y cabalmente aquilatado
por los magistrados de segunda instancia, quienes no han tomado en
consideración la gravedad de los hechos en examen, así como la
hondura de los dolores a que se han visto sometidos, y continuarán
estando, los actores. Por lo tanto, la sentencia impugnada
efectivamente carece del estándar de fundamentación mínimo exigible
en conformidad a lo establecido en el referido artículo 170 Nº 4 del
Código de Procedimiento Civil, en relación a las razones conforme a las
cuales fija el quantum indemnizatorio que beneficia a los actores, desde
que guarda completo silencio respecto de la situación de dos de ellos y
no explica conforme a qué razonamientos específicos decide elevar el
monto de la indemnización establecida en beneficio de la cónyuge del
paciente. La aludida conclusión aparece así desprovista de la adecuada
fundamentación que debe contener una sentencia, pues no encuentra
su correlato en los basamentos del fallo, de lo que se sigue que no ha
existido, en la especie, un cabal razonamiento respecto del asunto
sometido al conocimiento y resolución de los tribunales del mérito,
omitiéndose de este modo las consideraciones de hecho y de derecho
que debían servirle de sustento. En consecuencia, se ha incurrido en el
vicio de casación en la forma previsto en el artículo 768 Nº 5 en relación
con el artículo 170 Nº 4, ambos del Código de Procedimiento Civil, por
la falta de consideraciones que han de servir de fundamento al fallo, en
lo que se refiere, específicamente, a las razones conforme a las cuales
decidieron regular el quantum indemnizatorio en las cifras que se
reflejan en el fallo impugnado (considerandos 8º a 11º de la sentencia
de casación).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 1/07/2019, Rol


Nº 9041-2018,

Cita online: CL/JUR/3812/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 19/11/2018, Rol


Nº 41502-2017,

Cita online: CL/JUR/6434/2018

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 3/09/2018, Rol


Nº 42998-2017,

Cita online: CL/JUR/4919/2018

12. Acción de demarcación y cerramiento. I. Causal de casación en la


forma de incumplimiento de los requisitos de la sentencia, acogida.
Incumplimiento del requisito de la sentencia de contener la decisión
del asunto controvertido

El demandante ejercitó la acción de demarcación para que la


judicatura establezca o defina la línea de separación de su predio, con
el del demandado, ya que ambos disienten acerca de la línea divisoria,
produciéndose en el juicio prueba documental, testimonial y pericial y,
como medida para mejor resolver, se incorporó a los autos una pericia
evacuada en causa diversa, seguida ante el mismo tribunal, contra
idéntico demandado. La sentencia impugnada, acogió la demanda, pero
ordenó que en la etapa de cumplimiento del fallo, sea un perito
designado por las partes, en conformidad a la ley, quien determinará la
línea divisoria entre ambos predios, con base en los títulos de dominio
y planos respectivos, para luego proceder a hacer el cierre. Como es
posible apreciar, si bien aparentemente resuelve la contienda, en el
sentido que hay una decisión, acoger la demanda, el fallo no dictamina
sobre el fondo de la cuestión debatida, cual es la determinación de la
línea que separa a ambos predios, sino que delega esa función, que le
es privativa, en un tercero que, por altas que sean sus calificaciones, no
puede sustituirlo en ese rol. En tal circunstancia, la sentencia incurre en
el vicio de casación formal contenido en el artículo 768 Nº 5 en relación
al artículo 170 Nº 6 del Código de Procedimiento Civil, esto es, haber
sido pronunciada con omisión de la decisión del asunto controvertido
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de casación).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 18/12/2019, Rol Nº 42699-


2017,

Cita online: CL/JUR/12258/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 27/11/2018, Rol


Nº 44575-2017,

Cita online: CL/JUR/6694/2018

13. Divorcio y compensación económica. I. Anulación de oficio. Deber


de fundamentación de la sentencia. Sistema de ponderación de la
prueba en materia de familia es el de la sana crítica
El vicio de nulidad formal —señalado en el número 5 del artículo 768
del Código de Procedimiento Civil— se configura cuando la sentencia,
en el aspecto que se destaca, carece de los fundamentos fácticos que
deben dar sustento a la decisión que se adopta, también cuando son
discordantes, incompatibles entre sí, de manera que se anulan. Sobre
la materia, la doctrina ha indicado que la necesidad de motivación de
las sentencias permite el control de la actividad jurisdiccional por parte
de la opinión pública, cumpliendo así con el requisito de publicidad;
logra el convencimiento de las partes, eliminando la sensación de
arbitrariedad y estableciendo su razonabilidad, al conocer el por qué
concreto de la resolución; permite la efectividad de los recursos; y pone
de manifiesto la vinculación del juez a la ley (Mosquera Ruiz, Mario y
Maturana Miquel, Cristián, Los Recursos Procesales, Editorial Jurídica
de Chile, año 2010, p. 253). Atendido lo dispuesto en el artículo 32 de
la Ley Nº 19.968, en materia de familia el sistema de ponderación de la
prueba es el de la sana crítica, que se compone de la lógica con sus
principios de identidad, de no contradicción, de razón suficiente y de
tercero excluido; el de las máximas de experiencia o "reglas de la vida";
o el de los conocimientos científicamente afianzados. Entonces, como
de la lectura de la sentencia impugnada se advierte que no hace ningún
análisis de la prueba rendida para los efectos de fijar la cuantía de la
compensación económica, pues sólo lo realiza para dar por acreditados
sus presupuestos de procedencia, lo que se traduce en que no contiene
ninguna explicación o raciocinio referido a cómo arribó a la suma que
regula a dicho título y qué parámetros consideró para tal fin, se debe
concluir que no contiene los razonamientos de hecho, tampoco los de
derecho aplicables, por lo mismo, que no cumple la exigencia que
establece el número 4 del artículo 170 del Código de Procedimiento
Civil; razón por la que corresponde actuar de oficio por haberse
configurado la causal de nulidad formal prevista en el número 5 del
artículo 768 del referido estatuto (considerandos 2º, 4º y 5º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 13/12/2019, Rol Nº 4284-


2019,

Cita online: CL/JUR/12257/2019


14. Término del uso gratuito del bien en común. I. Incumplimiento del
requisito de la sentencia de contener las consideraciones de hecho y
de derecho que le sirven de fundamento. Anulación de oficio.

El fallo en alzada decidió "que ha lugar a la demanda, y por tanto, se


declara el término del uso gratuito del bien en común, por parte de la
demandada, debiéndose a los demás comuneros, los frutos que reditúe
dicho bien desde la fecha de interposición de la demanda", sin que de
ninguno de sus doce considerandos aparezca haberse hecho cargo la
sentencia de todas las peticiones de los actores y aparezcan razones
de hecho o derecho para no pronunciarse sobre ellos. En ese orden de
cosas, la Corte actuando de oficio en los términos señalados en el
artículo 775, tiene por configurada la causal de casación prevista en el
artículo 768 Nº 5 con relación al artículo 170 Nº 4, todos del Código de
Procedimiento Civil, y procederá a la invalidación del fallo
(considerandos 2º y 3º de la anulación de oficio).

Corte de Apelaciones de Santiago, 12/12/2019, Rol Nº 15223-2018,

Cita online: CL/JUR/12145/2019

15. Querella de restitución. I. Incumplimiento de los requisitos de la


sentencia de contener la decisión del asunto controvertido. Anulación
de oficio

Al casar el fallo de primera instancia, la Corte de Apelaciones no


mantuvo ninguna de las decisiones que adoptara aquél, sino solo la
parte expositiva y, algunos razonamientos de lo considerativo. Sin
embargo, la sentencia de reemplazo no mantiene ninguna decisión del
fallo que previamente había casado, y tampoco adopta por sí misma
ninguna resolución respecto de la prescripción alegada en primer lugar,
por la parte demandada. De este modo, el fallo de la Corte de
Apelaciones incurre en un vicio que no se puede corregir sino con la
invalidación, porque deja de resolver un asunto controvertido que era,
por lo demás, necesariamente previo a la cuestión que sí decidió, de
modo tal que no se puede obviar el defecto diciendo que lo que no se
resolvió resulte incompatible con lo decidido. El vicio en que se repara
nos conduce a la causal de casación contemplada en el artículo 768
Nº 5, con relación al artículo 170 Nº 6, ambos del Código de
Procedimiento Civil, lo que llevará a la Corte Suprema a proceder de
oficio de acuerdo a lo dispuesto por el artículo 775 del mismo Cuerpo
Legal (considerandos 2º a 4º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 28/11/2019, Rol


Nº 4648-2019,

Cita online: CL/JUR/11915/2019

16. Tercería de prelación. I. Incumplimiento del requisito de la sentencia


de contener las consideraciones de hecho y de derecho que le sirven
de fundamento. Anulación de oficio

Para dar cumplimiento a lo dispuesto por el constituyente y el


legislador, los jueces han debido agotar el examen de las
argumentaciones que sustentan las alegaciones y defensas de las
partes, analizándolas también conforme a las probanzas que a ellas se
refieren. En este mismo sentido, "considerar" implica reflexionar
detenidamente sobre algo determinado, es decir, concreto. Así, del
contexto de justificación queda demostrada la falta a las disposiciones
y principios referidos en que incurrieron los magistrados del grado, lo
que constituye el vicio de casación en la forma previsto en el
artículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil, en relación con el
artículo 170 Nº 4 del mismo texto legal, por la falta de consideraciones
de hecho que sirven de fundamento al fallo. En consecuencia, actuando
de oficio, procede casar la sentencia impugnada (considerandos 6º y 7º
de la anulación de oficio).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 20/11/2019, Rol Nº 32748-2018,

Cita online: CL/JUR/6647/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 27/08/2019, Rol Nº 31588-


2018,

Cita online: CL/JUR/4852/2019

17. Indemnización de perjuicios por responsabilidad contractual. I.


Sentencia recurrida que no pondera ni analiza los correos electrónicos
de ejecutivos del banco, desde sus casillas institucionales,
reconociendo los errores y problemas ocasionados. Causal de
casación en la forma de incumplimiento de los requisitos de la
sentencia, anulación de oficio. Incumplimiento del requisito de la
sentencia de contener las consideraciones de hecho o de derecho
que le sirven de fundamento

No es efectivo que los correos electrónicos que sirvieron de base al


juez de primera instancia para establecer el reconocimiento de errores
y responsabilidad interna del banco demandado, no fueran percibidos a
través de una audiencia especial celebrada para tal efecto, toda vez que
consta en autos que aquella audiencia se realizó; además, dichos
documentos no fueron objetados de contrario y, si bien, emanan de
ejecutivos del banco, estos envían dichos correos electrónicos desde la
casilla institucional del banco demandado en su calidad de ejecutivos
del mismo y, por lo tanto, en representación de aquel, razón por la cual
no puede entenderse que provengan de un tercero diverso al juicio que
no ha comparecido a reconocerlo y por esos motivos no haberlos
valorado. Por consiguiente, la sentencia de segunda instancia carece
de la fundamentación suficiente para el establecimiento definitivo de los
hechos del proceso. Para entender satisfecha la exigencia impuesta a
los jueces relativa a la argumentación de la decisión, resultaba
imperioso que se ponderaran y analizaran debidamente las probanzas
rendidas en juicio y desarrollaran las razones que se tuvo en cuenta
para otorgarles o negarles mérito probatorio; sin embargo, al
prescindirse del análisis que de tales asuntos debían efectuar los
sentenciadores, se han obviado, consecuentemente, las
consideraciones de hecho y de derecho que debían servir de sustento
al fallo, configurándose la causal de casación en la forma del
artículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil, debiendo
invalidarse de oficio —en virtud del artículo 775 del mismo Código— el
fallo recurrido (considerandos 5º, 6º, 8º y 9º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 12/11/2019, Rol Nº 5381-2018,

Cita online: CL/JUR/6736/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 17/10/2019, Rol Nº 45309-


2017,
Cita online: CL/JUR/6089/2019

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 01/04/2019, Rol Nº 23304-


2018,

Cita online: CL/JUR/2093/2019

18. Acción de precario. I. Incumplimiento del requisito de la sentencia


de contener las consideraciones de hecho y de derecho que le sirven
de fundamento

La parte demandada acompañó una serie de documentos


singularizados al efecto, en segunda instancia, antes de la vista de la
causa, los que se tuvieron por acompañados con citación. Al respecto,
la sentencia del tribunal de alzada no realizó ninguna apreciación ni
ponderación respecto de dichos instrumentos, los cuales se refieren a
la existencia de un juicio en que la demandante acciona de terminación
de contrato de arrendamiento (por abandono de la propiedad) y de
desahucio en subsidio. Dicha omisión configura precisamente el vicio a
que se refiere la causal descrita en el artículo 768 Nº 5 del Código de
Procedimiento Civil, en relación con la exigencia que impone el
artículo 170 Nº 4 del mismo código; en otras palabras, que la sentencia
haya sido pronunciada con omisión de cualquiera de los requisitos
enumerados en el artículo 170, en específico, de las consideraciones
de hecho que sirven de fundamento a la sentencia. En tales
condiciones, procede acoger el recurso de casación en la forma
deducido (considerandos 3º a 5º de la sentencia de casación).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 6/11/2019, Rol Nº 2775-2018,

Cita online: CL/JUR/6436/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 26/09/2019, Rol Nº 31975-


2017,

Cita online: CL/JUR/5325/2019


19. Responsabilidad del Estado. Violaciones a los derechos humanos.
I. Incumplimiento del requisito de la sentencia de contener las
consideraciones de hecho y de derecho que le sirven de fundamento

Las consideraciones de hecho exigen, asentar con exactitud los


elementos fácticos que sirven de apoyo a las peticiones formuladas por
los litigantes, orientadas a la decisión del asunto controvertido, sobre la
base de los medios de justificación aportados al proceso. Ahora bien,
para el debido establecimiento de los hechos resulta imperativo que el
tribunal efectúe un estudio y análisis de la prueba rendida, expresando
con claridad y precisión las razones que conduzcan a darlos por
acreditados, establecimiento que resulta también necesario para el fallo
del tribunal de casación, pues deberá aceptarlos aunque le merezcan
una calificación jurídica distinta, a menos que se reclame y compruebe
infracción a las leyes reguladoras de la prueba que le permita asentar
hechos distintos. En la especie, resulta evidente que la sentencia
impugnada adolece de las falencias denunciadas, toda vez que de un
estudio de ella aparece una nula y por lo tanto insuficiente exposición
de los raciocinios que le sirven de soporte, en todos sus extremos, por
lo que no se ha acatado el mandato del legislador. En consecuencia, el
fallo incurre en la motivación alegada y consagrada en el artículo 768
Nº 5, del Código de Procedimiento Civil, porque no acata la exigencia
del artículo 170 Nº 4 del Código de Procedimiento Civil, que impone el
deber de los jueces de anotar las consideraciones de hecho o de
derecho que sirven de fundamento a la sentencia; procede acoger el
recurso de casación en la forma (considerandos 6º a 8º de la sentencia
de casación).

Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 4/11/2019, Rol Nº 14903-


2019,

Cita online: CL/JUR/6298/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 29/08/2019, Rol Nº 31272-


2018,

Cita online: CL/JUR/4893/2019


20. Indemnización de perjuicios por responsabilidad extracontractual.
Contradicción entre los fundamentos de las sentencias de primera y
de segunda instancia. Concurrencia simultánea en la sentencia de
afirmaciones de procedencia e improcedencia de la pretensión del
demandante. Causal de casación en la forma de incumplimiento de
los requisitos de la sentencia, acogida. Incumplimiento del requisito
de la sentencia de contener las consideraciones de hecho que le
sirven de fundamento

En la especie, se observa una clara contradicción entre uno de los


fundamentos del fallo de primer grado y lo decidido en la sentencia de
segunda instancia, en relación con lo pretendido por daño emergente,
pues mientras se sostiene, por una parte, que el demandante no rindió
prueba pertinente tendiente a acreditar el monto cobrado, por la otra, se
acoge la demanda por tal concepto sin efectuar ningún razonamiento
en orden a fundar tal decisión; sin perjuicio de que, además, lo señalado
provoca que en el fallo objetado confluyan simultáneas afirmaciones de
procedencia e improcedencia de la pretensión deducida por el actor. Por
otra parte, en relación con el daño moral, la decisión de la magistratura
de segunda instancia también carece de fundamentos para resolver de
la forma referida, teniendo en consideración que eliminó el
considerando que contenía aquel para estimar que, en este caso,
concurrían los requisitos legales para decidir de esa manera, sin
agregar otros que explicaran lo resuelto (considerando 7º de la
sentencia de la Corte Suprema)Así las cosas, la sentencia recurrida no
cumple con el requisito del artículo 170 Nº 4 del Código de
Procedimiento Civil, incurriendo con ello en causal de casación en la
forma del artículo 768 Nº 5 del mismo Código, esto es, la sentencia, por
una parte, contiene consideraciones basales que se anulan entre sí en
razón de su contradicción, de modo que sus decisiones han quedado
desprovistas de sustento y, por la otra, carece de toda fundamentación
para resolver (considerando 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 7/10/2019, Rol Nº 4123-2018,

Cita online: CL/JUR/5488/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 9/09/2019, 9/09/2019,


Cita online: CL/JUR/5162/2019

21. Acción de reivindicación. I. Incumplimiento del requisito de la


sentencia de contener las consideraciones de hecho y de derecho que
le sirven de fundamento. Anulación de oficio

La sentencia impugnada contiene consideraciones basales que se


anulan entre sí en razón de su contradicción y ese defecto,
consecuencialmente, conlleva a la falta de fundamentación adecuada,
pertinente y suficiente, tanto para el establecimiento de los hechos del
proceso cuanto para la justificación de la decisión adoptada, lo que debe
ser abordado en razonamientos atinentes al debate. Para dar estricto
cumplimiento a lo dispuesto por el constituyente y el legislador, los
jueces han debido agotar el examen de las argumentaciones que
sustentan las alegaciones y defensas de las partes, analizándolas
también conforme a las probanzas que a ellas se refieren. En este
mismo sentido, "considerar" implica reflexionar detenidamente sobre
algo determinado, es decir, concreto. Así, del contexto de justificación
que antecede queda demostrada la falta a las disposiciones y principios
referidos en que incurrieron los magistrados del grado, lo que constituye
el vicio de casación en la forma previsto en el artículo 768 Nº 5 del
Código de Procedimiento Civil, en relación con el artículo 170 Nº 4 del
mismo texto legal, por la falta de consideraciones de hecho que sirven
de fundamento al fallo. Por lo tanto, procede casar de oficio el fallo
impugnado (considerandos 3º, 5º y 6º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 28/08/2019, Rol Nº 4153-2018,

Cita online: CL/JUR/4879/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 6/12/2018, Rol Nº 40720-


2017,

Cita online: CL/JUR/6789/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 4/04/2018, Rol Nº 45513-


2017,

Cita online: CL/JUR/1541/2018


22. Prescripción extintiva y reconvencional de cobro de pesos.
Sentencia de casación. Tribunal que omite ponderar prueba
documental legalmente incorporada al juicio. Sentencia impugnada
que adolece de falta de consideraciones de hecho y derecho que
sirven de fundamento

Los sentenciadores de alzada cimentaron la decisión de declarar la


falta de legitimación activa de la demandante reconvencional en que los
documentos electrónicos aparejados para acreditar tal circunstancia no
fueron percibidos en la forma prevista por el artículo 348 bis del Código
de Procedimiento Civil, restándoles todo mérito probatorio. Sin
embargo, revisados los antecedentes del proceso es posible advertir
que la audiencia de percepción documental sí fue llevada a cabo con
fecha 6 de mayo de 2016, tal como consta a fojas 201 del expediente,
por lo que la prueba documental preterida por los jueces de alzada fue
legalmente incorporada al juicio y debió ser ponderada por aquellos. De
este modo sólo cabe concluir que el análisis de la prueba efectuado en
la sentencia censurada no es íntegro, al haberse omitido el de las
referidas probanzas, las que eran pertinentes y relevantes para la
resolución del asunto sometido a su conocimiento, pues incidían
directamente en la calificación de la titularidad del interés reclamado por
el demandante reconvencional o, en otras palabras, en la determinación
de su legitimación ad causam. El defecto anotado ha impedido a los
jueces efectuar un análisis comparativo de los medios de prueba
aportados al juicio, de modo que su decisión ha sido el resultado de una
ponderación incompleta de la prueba, lo que determinó el rechazo de la
acción deducida, en circunstancias que existían elementos que la
hacían procedente. Esta falta constituye el vicio de casación en la forma
denunciado por falta de consideraciones de hecho y derecho que sirven
de fundamento al fallo, requisito estatuido en el numeral cuarto del
artículo 170 del Código de Procedimiento Civil, complementado con el
número 5º del Auto Acordado de la Corte Suprema de 30 de septiembre
de 1930, lo que trae consigo la invalidación de la sentencia viciada en
virtud de haberse verificado la causal de nulidad formal prevista en el
Nº 5 del artículo 768 del Código antes citado (considerandos 13º y 14º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 8/07/2019, Rol Nº 5184-2018,

Cita online: CL/JUR/5780/2019


23. Infracción a la Ley General de Pesca y Acuicultura. Incumplimiento
de los requisitos de admisibilidad del recurso de casación en la forma.
Improcedencia de interponer causales Nº 5 y Nº 9 del art. 768 del
Código de Procedimiento Civil

Del artículo 766 del Código de Procedimiento Civil y el inciso segundo


del artículo 768 del texto citado prescribe: "En los negocios a que se
refiere el inciso segundo del artículo 766 sólo podrá fundarse el recurso
de casación en la forma en alguna de las causales indicadas en los
números 1º, 2º, 3º, 4º, 6º, 7º y 8º de este artículo y también en el
número 5º cuando se haya omitido en la sentencia la decisión del
asunto controvertido". En los términos desarrollados y del modo como
fue propuesto el recurso, conforme a las causales invocadas, se
desprende necesariamente su declaración de inadmisibiliad, por
tratarse de un procedimiento especial seguido según los artículo s 124
y 125 de Ley General de Pesca y Acuicultura, en que las causales de
casación formal resultan improcedentes, en particular la del
art ículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil, en relación con su
art ículo 170 Nº 4, toda vez que en la especie no se omitió la decisión
del asunto controvertido; menos aun la del artículo 768 Nº 9 del citado
código, que expresamente fue excluida como fundamento para
promoverla, según se lee en su inciso final; por lo que debe ser
desestimado en esta etapa de tramitación (considerandos 3º y 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 5/06/2019, Rol Nº 4449-2019,

Cita online: CL/JUR/3607/2019

Fallo en este sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 26/04/2018, Rol Nº 2840-


2018,

Cita online: CL/JUR/1920/2018

24. Prescripción extintiva de acciones. Incumplimiento de los requisitos


de admisibilidad de los recursos de casación en la forma y en el fondo.
I. Sentencia recurrida que contiene la decisión del asunto
controvertido omitiendo la de aquellas acciones o excepciones
incompatibles con las aceptadas
En lo tocante a la segunda causal de casación formal invocada, esto
es, aquella contemplada en el artículo 768 Nº 5 en relación al
artículo 170 Nº 6 del Código de Procedimiento Civil, cabe tener presente
que el vicio alegado se produce cuando la sentencia en su parte
resolutiva no contiene la decisión del asunto controvertido. Sin embargo
el propio texto en comento permite omitir la resolución de aquellas
acciones o excepciones que sean incompatibles con las aceptadas,
situación que concurre en autos toda vez que, declarada la falta de
legitimidad de la demandante, no procede emitir pronunciamiento sobre
el fondo del asunto (considerando 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 29/05/2019, Rol Nº 28136-2018,

Cita online: CL/JUR/3128/2019

25. Constitución de servidumbre legal minera. Improcedencia del


recurso de casación en la forma por las causales del artículo 768 Nº 9
y Nº 5 en relación con el artículo 170, todos del Código de
Procedimiento Civil, en los juicios regidos por leyes especiales

Si bien el artículo 766 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil


dispone que el recurso de casación en la forma procederá respecto de
las sentencias que se dicten en los juicios o reclamaciones regidos por
leyes especiales, lo cierto es que el artículo 768 inciso 2º del Código
precitado limita las causales de casación en la forma aplicables a esta
clase de juicios, disponiendo que sólo podrá fundarse en alguna de las
causales indicadas en los Nºs. 1, 2, 3, 4, 6, 7 y 8 de este artículo y
también en el Nº 5 cuando se haya omitido en la sentencia la decisión
del asunto controvertido. Por consiguiente, tratándose de un juicio
especial al tratarse de una demanda de constitución de servidumbre
legal minera, resulta improcedente el recurso de casación en la forma
por la causal del artículo 768 Nº 5, en relación con el artículo 170, como
tampoco por la del artículo 768 Nº 9, todos del Código de Procedimiento
Civil (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 28/05/2019, Rol Nº 31626-


2018,

Cita online: CL/JUR/2944/2019


Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 30/10/2018,


Rol: 16328-2018,

Cita online: CL/JUR/6185/2018

26. Servidumbre minera. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad del recurso de casación en la forma. Improcedencia de
interponer causal del art. 768 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil
en procedimientos regidos por leyes especiales, en que no se ha
omitido la decisión del asunto controvertido

En cuanto a la infracción desarrollada por el demandado en su recurso


contenida en el artículo 768 Nº 5, en relación con el artículo 170 Nº 4,
del Código de Procedimiento Civil, se debe tener en consideración en
este examen previo que el artículo 766 del Código de Procedimiento
Civil establece: "El recurso de casación en la forma se concede contra
las sentencias definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen
término al juicio o hacen imposible su continuación y, excepcionalmente,
contra las sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin
previo emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar día para la
vista de la causa". Agrega su inciso segundo, que "Procederá,
asimismo, respecto de las sentencias que se dicten en los juicios o
reclamaciones regidos por leyes especiales, con excepción de aquéllos
que se refieran a la constitución de las juntas electorales y a las
reclamaciones de los avalúos que se practiquen en conformidad a la
Ley Nº 17.235, sobre Impuesto Territorial y de los demás que prescriban
las leyes". En tanto, el inciso segundo del artículo 768 del texto citado
prescribe: "En los negocios a que se refiere el inciso segundo del
artículo 766 sólo podrá fundarse el recurso de casación en la forma en
alguna de las causales indicadas en los números 1º, 2º, 3º, 4º, 6º, 7º y
8º de este artículo y también en el número 5º cuando se haya omitido
en la sentencia la decisión del asunto controvertido". En consecuencia,
para el análisis de admisibilidad de esta causal desarrollada por el
recurrente, el legislador expresamente la excluyó por tratarse de un
procedimiento especial seguido conforme al artículo 235 del Código de
Minería, debiendo ser, por tanto, desestimado (considerando 7º de la
sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 27/05/2019, Rol Nº 4979-
2019,

Cita online: CL/JUR/2907/2019

27. Querella de restablecimiento. I. Incumplimiento de requisitos de


admisibilidad del recurso de casación en la forma. Sentencia
impugnada que contiene fundamentos de hecho y derecho al hacer
suyos los expresados por la de primera instancia

En la especie, resulta suficiente para concluir que no se configura la


causal invocada —del artículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento
Civil, en relación con el artículo 170 Nº 4 del mismo cuerpo legal—, por
cuanto la sentencia impugnada contiene los fundamentos de hecho y
derecho que le sirven de sustento, al hacer suyos los expresados por la
de primera instancia y pronunciarse sobre las probanzas aportadas en
sede de apelación. De manera que, no obstante que la recurrente no
comparta los razonamientos expresados en el fallo, es posible desechar
la omisión denunciada pues los hechos alegados no constituyen la
causal en estudio, motivo por el que el recurso de nulidad formal debe
ser desestimado en esta etapa de tramitación (considerando 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 7/05/2019, Rol Nº 32875-


2018,

Cita online: CL/JUR/2584/2019

28. Manifestación Minera. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad del recurso de casación en la forma. Improcedencia de
interponer causal del art. 768 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil
en procedimientos regidos por leyes especiales, en que no se ha
omitido la decisión del asunto controvertido

El legislador expresamente ha excluido la procedencia de la causal


de nulidad prevista en el artículo 768 Nº 5 de la norma en análisis en
este tipo de procedimientos, salvo en los casos en que se haya omitido
la decisión del asunto controvertido y, en el presente caso, se reprochan
las previstas en el artículo 170 Nºs. 3, 5 y 6 del Código de Procedimiento
Civil, esto es, las referidas a "Igual enunciación de las excepciones o
defensas alegadas por el demandado" y "La enunciación de las leyes,
y en su defecto de los principios de equidad, con arreglo a los cuales se
pronuncia el fallo", por lo que el recurso denuncia, en este extremo, la
ausencia de fundamentación, excluida por la legislación en los
procedimientos regidos por leyes especiales, como es el tramitado en
autos; en tanto que, en lo relativo al último numeral, consta que la
judicatura del fondo se pronunció sobre lo pedido en la demanda y sobre
la alegación de diferencia de trazado y cabida, que fue precisamente el
fundamento de su apelación, razón por la que el arbitrio debe ser
declarado inadmisible sin más trámite (considerando 4º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 6/04/2019, Rol Nº 1537-2019,

Cita online: CL/JUR/2552/2019

29. Cobro de honorarios. Facultad para invalidar de oficio sentencias


que adolecen de vicios que dan lugar a la casación en la forma

De conformidad a lo prescrito en el artículo 775 del Código de


Procedimiento Civil, pueden los tribunales, conociendo por vía de
apelación, consulta o casación o en alguna incidencia, invalidar de oficio
las sentencias cuando los antecedentes del recurso manifiesten que
adolecen de vicios que dan lugar a la casación en la forma, debiendo
oír sobre este punto a los abogados que concurran a alegar en la vista
de la causa, indicándoles los posibles vicios sobre los cuales deberán
formular sus alegatos; lo que no se hizo, porque no se presentó a
estrados ningún letrado a plantear la respectiva defensa oral. Según lo
previene el número 5 del artículo 768 del referido código, es causal de
nulidad formal la circunstancia que la sentencia se haya pronunciado
desatendiendo cualquiera de los requisitos que señala el artículo 170
del citado cuerpo legal; norma que, en su número 4, prescribe que
deben contener las consideraciones de hecho o de derecho que le
sirven de fundamento; disposición que, en lo que interesa, debe
entenderse complementada con lo que estatuyen los números 5º, 6º, 7º
y 8º del Auto Acordado de esta Corte sobre la forma de las sentencias
de 30 de septiembre de 1920 (considerandos 1º y 2º de la sentencia de
casación).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 15/04/2019, Rol Nº 36342-


2017,
Cita online: CL/JUR/3498/2019

30. Término de contrato de arrendamiento. I. Incumplimiento de los


requisitos de admisibilidad del recurso de casación en la forma. Ultra
petita sólo se produce si lo resuelto rebasa el margen de las
pretensiones formuladas en la fase de discusión. Improcedencia de la
causal de nulidad formal del Nº 5 del art. 768 del Código de
Procedimiento Civil invocada en procedimientos regidos por leyes
especiales, como la Ley Nº 18.101

Según la jurisprudencia de la Corte Suprema, la ultra petita sólo se


produce cuando el veredicto otorga más de lo pedido por los litigantes
o se extiende a puntos no sometidos a la decisión del tribunal, esto es,
cuando se aparta de los términos en que los interesados situaron la
controversia a través de sus respectivas acciones o excepciones, altera
su contenido, al cambiar su objeto o modificar su causa de pedir, de
suerte que sólo se configura si el laudo rebasa el margen de las
pretensiones formuladas en la fase de discusión. En la especie, la
decisión adoptada se sitúa dentro del marco de lo discutido, pues sin
perjuicio que en la sentencia de primer grado se haya declarado resuelto
el contrato, lo cierto es que la demanda deducida, de la que se defendió
la recurrente, fue precisamente una de terminación de contrato de
arrendamiento, por lo que las defensas y alegaciones de las partes
apuntaron a ese hecho y no a una eventual resolución, sin que, por lo
demás, la aclaración que efectúa la de segunda, en cuanto a que el
contrato no se resolvió sino que terminó, tuviera ninguna influencia en
las prestaciones que se ordenó pagar. De este modo, no es posible
concluir que el fallo se haya extendido a materias o puntos extraños al
conflicto ventilado en el proceso o decidido algo distinto de lo propuesto
en la demanda, por lo que esta causal debe ser desestimada en esta
etapa de tramitación (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte
Suprema). El legislador expresamente ha excluido la procedencia de la
causal de nulidad formal invocada —artículo 768 Nº 5 del Código de
Procedimiento Civil— en los procedimientos regidos por leyes
especiales, como ocurre en la especie, al tratarse de uno seguido
conforme a la ley que fija normas especiales sobre arrendamiento de
predios urbanos; salvo en los casos en que se haya omitido la decisión
del asunto controvertido, infracción que no se advierte en el caso, pues
todas las alegaciones de la recurrente apuntan a omisiones en la parte
considerativa del fallo o a la falta de pronunciamiento respecto de
determinadas defensas, sin que se haya dejado de resolver la demanda
principal, que fue acogida, ni la reconvencional, que fue rechazada, por
lo que el presente recurso no podrá prosperar y deberá ser desestimado
(considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 19/02/2019, Rol Nº 15491-


2018,

Cita online: CL/JUR/887/2019

31. Restitución de frutos. I. Incumplimiento del requisito de la sentencia


de contener las consideraciones de hecho y de derecho que le sirven
de fundamento. II. Falta de legitimación pasiva, rechazada. Empresa
sucesora legal al concentrar todos los activos y pasivos de aquella
demandada y condenada

La sentencia impugnada no analizó de manera total la copia de la


resolución exenta del Servicio de Impuestos Internos, por medio de la
cual se autoriza a la demandada a eximirse de las exigencias de la
resolución que indica; sino que realizó una ponderación parcial e
incompleta del mismo, incumpliendo, con ello, su obligación de
motivación de la sentencia, al no realizar una ponderación
pormenorizada e íntegra, infringiendo el artículo 170 Nº 4 del Código de
Procedimiento Civil, incurriendo en la causal de casación formal del
art ículo 768 Nº 5 de mismo cuerpo legal. En efecto, la referencia
efectuada en el fallo impugnado omite toda consideración respecto un
hecho fundamental del cual da cuenta el documento en análisis, esto
es, que la empresa demandada, no sólo se constituyó como filial de
Compañía de Petróleos de Chile S.A., para efectos de concentrar su
negocio de distribución de combustibles, sino que, además, sus activos
y pasivos, dato que fue obviado, y que necesariamente debió ser
reflexionado por el tribunal recurrido, desde que el objeto de la demanda
—y de la controversia precisa que debía ser resuelta— corresponde a
la pretensión de la actora de obtener de la empresa filial el cumplimiento
de una prestación a la que fue condenada un tercero, que se disolvió al
ser adquirida en su totalidad por la demandada. En consecuencia, se
configura el vicio del artículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento
Civil, en la medida que la sentencia impugnada no ha sido extendida en
la forma que establece el art ículo 170 del cuerpo legal citado
(considerandos 6º y 7º de la sentencia de casación).
Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 31/01/2019, Rol Nº 12256-
2017

Cita online: CL/JUR/527/2019

32. Cobro de pesos. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad


del recurso de casación en la forma. Casos en que se configura el
defecto reprochado en el art. 768 Nº 5 del Código de Procedimiento
Civil. La sola afirmación de que una sentencia carece de fundamentos
no es bastante para sobrepasar el examen de admisibilidad del
recurso

No debe olvidarse que el defecto reprochado —artículo 768 Nº 5 del


Código de Procedimiento Civil— solo aparece cuando la sentencia
carece de las exigencias anotadas, esto es, "La enunciación de las
excepciones o defensas alegadas por el demandado", "Las
consideraciones de hecho o de derecho que sirven de fundamento a la
sentencia" y "La enunciación de las leyes, y en su defecto de los
principios de equidad, con arreglo a los cuales se pronuncia el fallo".
Para abordar los defectos formales censurados, es útil consignar que la
sentencia reprobada reproduce lo expositivo de la resolución del a quo,
donde se encuentran las defensas de la demandada. Por otro lado y
con una atenta lectura del fallo de alzada es posible verificar que,
haciendo suyo el de primer grado, sí contiene el análisis de los
elementos probatorios y las reflexiones que llevaron al juzgador a la
decisión de acoger la demanda. Así consta en los basamentos quinto,
sexto, octavo y noveno, en que se tiene por acreditada la existencia del
mutuo, conforme a la copia del instrumento público que se indica,
precisándose el monto prestado, la forma de pago, los dividendos
efectivamente solucionados y la deuda de capital e intereses, lo mismo
que la falta absoluta de prueba de la demandada para acreditar el
cumplimiento de la obligación. Por consiguiente, la sola afirmación de
que una sentencia carece de fundamentos no es bastante para
sobrepasar el examen de admisibilidad del recurso de casación en la
forma, si en ella se constata la existencia de aquellos, pero sobre la
base de un razonamiento que conduce a un resultado desfavorable para
el impugnante. Por lo demás, se advierte que el análisis se construyó a
partir del hecho controvertido fijado en la interlocutoria de prueba, que
reza: "Existencia, origen, naturaleza, época y monto de la deuda cuyo
cobro se reclama", que no fue cuestionado por la demandada, de lo que
se colige que la sentencia es congruente con la discusión. Finalmente,
el fallo revela la enunciación de las disposiciones legales que le sirven
de soporte, que no son otras que aquellas citadas por el juez
unipersonal y reproducidas por el superior, a saber, el artículo 2196 del
Código Civil, que designa los elementos de la esencia del contrato de
mutuo, y los artículos 1º, 6º, 12, 14 y 16 de la Ley Nº 18.010, que
establece normas para las operaciones de crédito. Que, en
consecuencia, al no haber cometido los recurridos las anomalías de
nulidad de forma delatadas, el recurso de casación queda desprovisto
de asidero y no puede prosperar (considerandos 3º a 5º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 30/01/2019, Rol Nº 28139-2018,

Cita online: CL/JUR/503/2019

33. Cobro ejecutivo de factura. I. Incumplimiento del requisito de la


sentencia de contener las consideraciones de hecho y de derecho que
le sirven de fundamento. Anulación de oficio

Para dar estricto cumplimiento a lo dispuesto por el Constituyente y el


legislador, los jueces han debido agotar el examen de las
argumentaciones que sustentan las alegaciones y defensas de las
partes, analizándolas también conforme a las probanzas que a ellas se
refieren. Cabe, en este mismo sentido, recordar que "considerar"
implica la idea de reflexionar detenidamente sobre algo determinado, es
decir, concreto. Sin embargo, en este caso, se encuentra demostrada
la falta a las disposiciones y principios referidos en que incurrieron los
magistrados del grado, lo que constituye el vicio de casación en la forma
previsto en el artículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil, en
relación con el artículo 170 Nº 4 del mismo texto legal, por la falta de
consideraciones de hecho que le sirven de fundamento al fallo. En
consecuencia, procede casar de oficio la sentencia impugnada
(considerandos 7º a 9º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 10/12/2018, Rol Nº 6268-2018,

Cita online: CL/JUR/6837/2018

34. Rendición de cuentas. I. Incumplimiento del requisito de la sentencia


de contener las consideraciones de hecho y de derecho que le sirven
de fundamento. II. Existencia de observaciones a la cuenta
presentada. Cuenta se considera como demanda y las observaciones
como contestación. Estatutos de sindicato. Obligación de rendir
cuenta es exigible anualmente. Prescripción de la acción de rendición
de cuenta, acogida. Finalidad de la rendición de cuentas. Posibilidad
de analizar documentos que no fueron exhibidos en proceso diverso

En este caso se aprecia la carencia del análisis pormenorizado y


detallado de las probanzas aportadas y una falta de fundamentación
adecuada, pertinente y suficiente, tanto para el establecimiento de los
hechos del proceso cuanto para la justificación de la decisión adoptada,
aspectos que han de ser explicitados en razonamientos atinentes a la
cuestión debatida que permitan comprender de qué modo, en la
especie, las pruebas del proceso no han podido producir convicción en
los sentenciadores. Luego, para dar estricto cumplimiento a lo dispuesto
por el constituyente y el legislador, los jueces han debido agotar el
examen de las argumentaciones que sustentan las alegaciones y
defensas de las partes, analizándolas también conforme a las
probanzas que a ellas se refieren. Cabe recordar que "considerar"
implica la idea de reflexionar detenidamente sobre algo determinado, es
decir, concreto. Así, queda demostrada la falta a las disposiciones y
principios referidos en que incurrieron los magistrados del grado, lo que
constituye el vicio de casación en la forma previsto en el artículo 768
Nº 5 del Código de Procedimiento Civil, en relación con el artículo 170
Nº 4 del mismo texto legal, por la falta de consideraciones de hecho que
le sirvan de fundamento al fallo (considerandos 4º y 7º de la sentencia
de casación).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 26/11/2018, Rol Nº 42503-2017,

Cita online: CL/JUR/6572/2018

35. Nulidad de testamento. I. Cumplimiento del requisito de la sentencia


de contener las consideraciones de hecho y de derecho que le sirven
de fundamento

El demandante, recurrente de casación, esgrime como causal de


casación en la forma aquella contemplada en el artículo 768 Nº 5
del Código de Procedimiento Civil, en relación con el art ículo 170 Nº 4
del mismo cuerpo normativo. Luego, dicha causal aparece solo cuando
la sentencia carece de las consideraciones de hecho y de derecho que
le sirven de fundamento, no así cuando aquéllas no se ajustan a la tesis
sustentada por el reclamante. Y una atenta lectura del fallo impugnado
permite verificar que se explicitan las razones que llevaron a los
juzgadores a estimar que las firmas que aparecen en los testamentos
corresponden a la causante y que ésta, al momento de testar, no se
encontraba mentalmente impedida o inhabilitada para ejercer tal
derecho (considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 23/10/2018, Rol Nº 12481-2018,

Cita online: CL/JUR/6013/2018

36. Indemnización de perjuicios por defectos en la construcción. I.


Causal de casación en la forma de ultra petita, inadmisible. Sentencia
que no se ha extendido en la resolución del asunto a puntos no
sometidos a su decisión. II. Cumplimiento del requisito de la sentencia
de contener las consideraciones de hecho y de derecho que le sirven
de fundamento

El demandante fundamenta el recurso de casación en la forma sobre


la base de que la sentencia fue "... dada ultra petita, esto es, otorgando
más de lo pedido por las partes, o extendiéndola a puntos no sometidos
a la decisión del tribunal, sin perjuicio de la facultad que éste tenga para
fallar de oficio en los casos determinados por la ley" y, al respecto, el
Máximo Tribunal ha declarado reiteradamente que el vicio se produce
cuando el fallo se aparta de los términos en que los interesados situaron
la controversia a través de sus respectivas acciones o excepciones,
altera su contenido, al cambiar su objeto o modificar su causa de pedir,
de suerte que sólo se configura si el laudo rebasa el margen de las
pretensiones formuladas en la fase de discusión. En este caso, la parte
la sustenta en haberse otorgado menos de lo pedido, aspecto que no
configura la causal en análisis sino que más bien corresponde a una
manifestación de disconformidad con lo resuelto que es materia de otro
tipo de recursos procesales, sin que al acoger la demanda en forma
parcial, en virtud de los motivos que expresan, los jueces hayan
cometido la falta acusada, pues en caso alguno se alejaron de la
discusión planteada por las partes (considerandos 5º y 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 30/07/2018, Rol Nº 45107-


2017,
Cita online: CL/JUR/4041/2018

37. Acción de no discriminación arbitraria. Discriminación de empresa


Metro a persona con discapacidad física. I. Incumplimiento del
requisito de la sentencia de contener las consideraciones de hecho y
de derecho que le sirven de fundamento. Anulación de oficio

El fallo impugnado sostiene que la demandada reconoció el sustrato


fáctico de la demanda, salvo en lo referido a la conducta del jefe de la
estación; lo que implica que asume como tal que dicho litigante está de
acuerdo con lo que se afirma en ella, esto es, que en la estación del tren
subterráneo a que se hace referencia tenía instalada un salva escala
que estaba descompuesto; sin embargo, no lo estableció como un
hecho probado ni reflexionó jurídicamente en lo concerniente a la
alegación que la demandante formuló en el escrito que contiene el
recurso de apelación, ni tampoco acerca de la consecuencia legal que
se genera en su contra, a la luz de lo que consagra la normativa nacional
e internacional que se invoca como apoyo de la pretensión y cuya
finalidad es obtener el pleno respeto de los derechos fundamentales de
las personas con capacidades especiales. Entonces, como el
artículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil establece que es
causal de nulidad formal la circunstancia que la sentencia se haya
pronunciado desatendiendo cualquiera de los requisitos que señala el
artículo 170 del citado cuerpo legal; norma que, en su Nº 4, prescribe
que deben contener las consideraciones de hecho o de derecho que le
sirven de fundamento y que, obviamente, han de ser acordes a la
cuestión que fue sometida a la decisión del tribunal, se debe concluir
que la impugnada no las tiene. Por lo tanto, procede invalidar de oficio
la sentencia impugnada (considerandos 3º y 4º de la anulación de
oficio).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 25/07/2018, Rol Nº 41388-


2017,

Cita online: CL/JUR/3928/2018

38. Constitución de servidumbre de tránsito. I. Incumplimiento del


requisito de la sentencia de contener las consideraciones de hecho y
de derecho que le sirven de fundamento. Anulación de oficio.
En la especie, el fallo impugnado denota una evidente carencia de
argumentación acerca del tópico sometido al conocimiento y resolución
de los tribunales del mérito, prescindiendo del deber de anotar las
premisas adecuadas que habiliten el establecimiento de los hechos
sobre los cuales debían decidir la controversia, tema previo al debate
atinente a la aplicación de la pertinente normativa legal y a la decisión
misma. En consecuencia, la resolución reprochada no cumplió con la
ritualidad estatuida en el artículo 170 Nº 4 del Código de Procedimiento
Civil y en el Nº 5º del Auto Acordado de la Corte Suprema,
contravención que trae consigo la invalidación de la sentencia viciada
en virtud de haberse incurrido en la causal de nulidad formal prevista en
el art ículo 768 Nº 5 del Código citado, lo cual obliga a la Corte a
declarar de oficio su nulidad porque semejante error influye
sustancialmente en lo dispositivo de tal resolución (considerandos 7º y
8º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 25/07/2018, Rol Nº 100708-


2016,

Cita online: CL/JUR/3921/2018

39. Divorcio por cese de convivencia. I. Deber de fundamentación de


las sentencias. Debido proceso. Sentencia que acoge compensación
económica y fija cuantía no resulta suficientemente fundada

El artículo 66 de la Ley Nº 19.968, que crea los Tribunales de Familia,


establece que la sentencia definitiva deberá contener: "Nº 4) El análisis
de la prueba rendida, los hechos que estime probados y el razonamiento
que conduce a esa conclusión". Los requisitos previstos en el numeral
4º de la citada disposición legal, obedecen a la necesidad de
fundamentación de las sentencias, que ya en el Auto Acordado dictado
por esta Corte en el año 1920, se regulaba pormenorizadamente. La
importancia de este requisito, que obliga al juzgador a exponer y
desarrollar los raciocinios de orden fáctico y jurídico que motivan cada
una de sus conclusiones, no sólo dice relación con el hecho que aquello
constituye, en definitiva, el sustento de la decisión mediante la cual se
dirime el conflicto sometido a su conocimiento, sino también con la
necesidad de que tales razonamientos sean conocidos por las partes,
de manera que éstas puedan hacer uso de su derecho a impugnar el
fallo que se apoya en tales argumentos. La falta de justificación de las
sentencias se encuentra en estrecha vinculación con la garantía
prevista en el artículo 19 Nº 3 inciso 5º de la Carta Fundamental, de
acuerdo a la cual, toda sentencia de un órgano que ejerza jurisdicción
debe fundarse en un proceso previo y legalmente tramitado
(considerandos 3º y 4º de la anulación de oficio).

En la especie, es posible advertir que la sentencia no sólo justifica en


forma insuficiente la decisión de hacer lugar a la compensación
económica, sino que carece, derechamente, de todo razonamiento en
relación a la determinación de su cuantía. En tal circunstancia, no puede
sino concluirse que la sentencia impugnada no cumple con las
exigencias que impone el artículo 66 numeral 4º, de la Ley Nº 19.968,
ya que la total ausencia de los criterios o fundamentos en base a los
cuales se fijó el monto de la compensación económica, configura el vicio
de nulidad formal previsto en el artículo 768 Nº 5 del Código de
Procedimiento Civil, en relación al artículo 67 Nº 6 letra b) de la Ley
Nº 19.968, lo que autoriza a hacer uso de la facultad que el artículo 775
del referido Código otorga a este tribunal para invalidar de oficio la
sentencia impugnada y dictar la correspondiente sentencia de
reemplazo (considerandos 5º y 6º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 21/06/2018, Rol Nº 39439-


2017,

Cita online; CL/JUR/3071/2018

40. Reclamación Tributaria. I. Limitación de casación en la forma en los


juicios o reclamaciones regidos por leyes especiales

El artículo 768 inciso 2º del mismo cuerpo legal dispone que "En los
negocios a que se refiere el inciso segundo del artículo 766 sólo podrá
fundarse el recurso de casación en la forma en alguna de las causales
indicadas en los números 1º, 2º, 3º, 4º, 6º, 7º y 8º de este artículo y
también en el número 5º cuando se haya omitido en la sentencia la
decisión del asunto controvertido". El artículo 766, por su parte, alude a
"las sentencias que se dicten en los juicios o reclamaciones regidos por
leyes especiales". De este modo, siendo este un juicio regido por ley
especial, puesto que se encuentra previsto y reglado por las normas del
Código Tributario, no resulta admisible la interposición del recurso de
nulidad formal por la causal invocada —del artículo 768 Nº 5 del Código
de Procedimiento Civil—, por lo que no puede ser acogido a tramitación
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 5/06/2018, Rol Nº 8219-2018,

Cita online: CL/JUR/3088/2018

41. Acción de desposeimiento. I. Incumplimiento del requisito de la


sentencia de contener las consideraciones de hecho y de derecho que
le sirven de fundamento. Anulación de oficio

La sentencia impugnada no se pronuncia respecto al hecho de que


entre los demandados por las tercerías hay uno que si bien es deudor
de la obligación caucionada, no es parte de este juicio, puesto que ya
no es propietario de la finca hipotecada, lo que era imprescindible
conforme a la naturaleza de las acciones impetradas (tercerías de
prelación y de pago), que suponen el cumplimiento de ciertos
presupuestos como que el bien sobre el cual se pretende hacer efectiva
la acreencia invocada por el tercero sea del deudor a quien persigue;
en este caso por las obligaciones tributarias incumplidas. Por lo tanto,
los sentenciadores del grado han incurrido en el vicio de casación formal
que contempla el artículo 768 Nº 5 del Código de Enjuiciamiento Civil
en relación con lo prevenido en el artículo 170 Nº 4 del mismo Código,
lo que faculta al tribunal de casación para anular de oficio la sentencia
dictada por la Corte de Apelaciones, puesto que la irregularidad aludida
influyó sustancialmente en la decisión del asunto (considerandos 4º a
6º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 29/05/2018, Rol Nº 2837-2015,

Cita online: CL/JUR/2505/2018

42. Reclamación en contra de la Dirección General de Aguas. I.


Incumplimiento de los requisitos de la sentencia de contener las
consideraciones de hecho y de derecho que le sirven de fundamento
y la enunciación de las leyes con arreglo a las cuales se pronuncia.
Anulación de oficio

Al concluir los jueces del grado que lo que debía ser destruido por el
recurrente era el tranque existente en el Fundo Monterrey, se han
apartado del mérito del proceso, del que aparece sin mayores dudas
que por una parte el tranque tenía una data muy anterior a la denuncia
y ejecución de las obras que lo modificaron y, por la otra que los hechos
constitutivos de la infracción que se sancionó es la no destrucción de
las obras ejecutadas en el plazo concedido por la autoridad, sumado a
la sanción por la ejecución misma de las obras sin la autorización. Al
llegar a dicha conclusión, se han apartado del mérito del proceso, que
en lo pertinente, indicaba que la conducta infraccional denunciada
originalmente era el levantamiento del pretil de un tranque ya existente
sin la autorización necesaria, y no la construcción de uno nuevo. En
consecuencia, se tuvo por no cumplida la obligación de destrucción de
las obras contenida y, como pertinente la sanción aplicada, ello a pesar
de que se sostiene y se da por sentado que todos los antecedentes dan
por acreditada una rebaja del talud construido. En tales condiciones, la
sentencia recurrida no se ha pronunciado en forma legal, incurriendo en
la causal de casación del artículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento
Civil en relación con el artículo 170 Nºs. 4 y 5 del mismo cuerpo de
leyes, pues carece de las debidas consideraciones de hecho y de
derecho y de la enunciación de las leyes o en su defecto de los
principios de equidad con arreglo que le eran exigibles. Siendo
procedente invalidar de oficio el fallo impugnado (considerandos 9º a
12º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 22/05/2018,


Rol: 18228-2017,

Cita online: CL/JUR/2457/2018

43. Indemnización de perjuicios por responsabilidad extracontractual.


Accidente de tránsito. I. Incumplimiento del requisito de la sentencia
de contener las consideraciones de hecho y de derecho que le sirven
de fundamento

De conformidad al artículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento


Civil, es causal de casación formal la circunstancia que la sentencia se
haya pronunciado desatendiendo cualquiera de los requisitos que
señala el artículo 170 del citado cuerpo legal; norma que, en su
número 4, prescribe que deben contener las consideraciones de hecho
o de derecho que le sirven de fundamento; disposición que, en lo que
interesa, debe entenderse complementada con lo que estatuyen los
números 5º, 6º, 7º y 8º del Auto Acordado de esta Corte sobre la forma
de las sentencias de 30.09.1920. Por lo tanto, dicho vicio de nulidad
formal se configura cuando la sentencia, en el aspecto que se destaca,
carece de los fundamentos fácticos y jurídicos que deben servir de
sustento a la decisión que se adopta, también cuando son discordantes,
incompatibles entre sí, de manera que se anulan. En este caso, la
sentencia impugnada no contiene razonamientos de hecho, menos de
derecho, para desestimar la acción; dado que los que introdujo la de
primer grado fueron eliminados, sin que incorporara otros para
sustentarla. Por lo expuesto, se debe concluir que carece de las
motivaciones de hecho y de derecho que le deben servir de fundamento,
exigencia que establece el artículo 170 Nº 4 del Código de
Procedimiento Civil (considerandos 2º y 4º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 15/05/2018, Rol Nº 8388-


2017,

Cita online: CL/JUR/2275/2018

44. Cobro de rentas de arrendamiento. Improcedencia del recurso de


casación en la forma por la causal del artículo 768 Nº 5 en relación
con el artículo 170 Nºs. 4 y 5, ambos del Código de Procedimiento
Civil, en los juicios regidos por leyes especiales

Si bien el artículo 766 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil


dispone que el recurso de casación en la forma procederá respecto de
las sentencias que se dicten en los juicios o reclamaciones regidos por
leyes especiales, lo cierto es que el artículo 768 inciso 2º del Código
precitado limita las causales de casación en la forma aplicables a esta
clase de juicios, disponiendo que sólo podrá fundarse en alguna de las
causales indicadas en los Nºs. 1, 2, 3, 4, 6, 7 y 8 de este artículo y
también en el Nº 5 cuando se haya omitido en la sentencia la decisión
del asunto controvertido. Por consiguiente, el legislador expresamente
ha excluido la procedencia de esta causal en los procedimientos regidos
por leyes especiales, salvo en los casos en que se haya omitido la
decisión del asunto controvertido, lo que no ocurre en la especie, en que
se cuestiona la falta de análisis de la prueba, la existencia de
consideraciones contradictorias y la ausencia de razonamientos de
hecho y derecho relativos a las excepciones y demanda reconvencional,
sin denunciar que la decisión carezca de resolución (considerandos 4º
y 5º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 16/04/2018, Rol Nº 38818-
2017,

Cita online: CL/JUR/1761/2018

6ª En haber sido dada contra otra pasada en autoridad de cosa juzgada,


siempre que ésta se haya alegado oportunamente en el juicio;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Reclamación tributaria. Impuesto a la Renta. Gasto necesario para


producir la renta. I. Sentencia de casación. Improcedencia excluir
excepción de cosa juzgada por tratarse de años tributarios diversos.
Beneficio jurídico reclamado —reconocimiento del pago de intereses
como gasto necesario para producir la renta— es el mismo y ya fue
acogido en el fallo ejecutoriado anterior. Fallo impugnado se
pronuncia en contra de otro pasado en autoridad de cosa juzgada

En la especie, como se desprende de lo expuesto en el basamento


10º at supra, en ambos procesos se pide que se acepten como gastos
los intereses pagados o devengados sobre las cantidades adeudadas,
dentro del año a que se refiere el impuesto, cantidades que provienen
de los mismos créditos usados para las mismas inversiones del giro. En
ese orden, no puede aceptarse lo postulado por la sentencia
impugnada, esto es, que el tratarse de años tributarios diversos excluye
la procedencia de la excepción en estudio, desde que corresponden a
gastos que se van generando año a año en la medida que se mantenga
la deuda y que, por ende, deben deducirse en el período en que se
pagan o devengan. Cabe reparar que en el caso sub judice, no se ha
desconocido por el Servicio la justificación fehaciente de esos gastos,
sino que lo que se objeta es que se hayan destinado en su oportunidad
las sumas obtenidas con los créditos de los que derivan esos intereses,
al giro de la contribuyente, esto es, a inversiones, lo que corresponde a
un hecho pasado inamovible, sea positivo o negativo, que, por ende, no
se altera en los posteriores años tributarios, por lo que no resulta
razonable que, una vez dirimida la ocurrencia de ese hecho por una
sentencia judicial firme, la autoridad fiscalizadora intente renovar año
tras año, mientras se mantenga el servicio de esa deuda, la objeción a
los gastos deducidos por la misma contribuyente arguyendo lo opuesto.
En sentido similar resolvió la Corte de Apelaciones de Valdivia en causa
rol Nº 11673 de 6 de junio de 2001, al señalar "Que argumentar que en
la especie no hay cosa juzgada supone necesariamente aceptar que el
procedimiento puede ser renovado por el Servicio de Impuestos
Internos indefinidamente cuantas veces lo desee, y en cualquier época,
no obstante que la controversia, esto es, si la tasa impositiva aplicable
al caso es del 15% o del 30% fue resuelta hace años por sentencia
ejecutoriada de esta misma Corte" (fallo publicado por el Servicio de
Impuestos Internos en la sección Jurisprudencia Judicial de su sitio
web). De esa manera, se trata evidentemente del mismo beneficio
jurídico reclamado, esto es, el reconocimiento del pago de intereses
como gasto necesario para producir la renta. Este beneficio jurídico
reclamado ya fue acogido en el fallo anterior, que quedó ejecutoriado y
ahora, en el nuevo procedimiento se está reclamando exactamente lo
mismo que ya se obtuvo anteriormente por la misma parte, en sentencia
firme, y por un año tributario distinto (considerandos 13º y 14º de la
sentencia de casación de la Corte Suprema).

El punto central de la discusión en relación a la partida "A", esto es, si


los montos obtenidos mediante los créditos que generan los intereses
que se deducen, sucesivamente como gasto en el año tributario
correspondiente, fueron utilizados en las inversiones del giro de la
contribuyente, es un asunto ya concluido por una sentencia firme y
ejecutoriada en beneficio de la ahora reclamante, respecto de la que,
en este aspecto y en relación al fallo en examen, concurre la triple
identidad que demanda el artículo 177 del Código de Procedimiento
Civil, configurándose por consiguiente la excepción de cosa juzgada
hecha valer, lo que vuelve esa determinación inmutable, debiendo las
partes respetar lo fallado en ese proceso, sin poder, por tanto, haber
vuelto a discutir el mismo asunto en este juicio. Se configura entonces
la causal de nulidad opuesta del Nº 6 del artículo 768 del Código de
Procedimiento Civil y, en consecuencia, deberá anularse el
pronunciamiento impugnado para dictar la correspondiente sentencia
de reemplazo (considerando 16º de la sentencia de casación de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 30/12/2019, Rol Nº 40037-


2017,

Cita online: CL/JUR/12047/2019


2. Cobro de pesos. I. No concurre triple identidad entre causas pues no
existe identidad legal entre la demandada de este juicio y el anterior.
II Arbitrio que adolece de manifiesta falta de fundamento

En la especie, aunque la sentencia se limita a decir en forma escueta


que no concurre triple identidad entre la presente causa y la causa rol
Nº 31366-2011, lo cierto es que no existe identidad legal de personas
entre las demandadas de éste juicio y el anterior, lo que se desprende
de lo dicho por la recurrente en su recurso, puesto que señala que dicha
acción se dirigió contra doña Andrea Rojas Hormázabal y no en su
contra; sin perjuicio que, incluso de haber prosperado esa alegación,
igualmente la impugnación adolece de una construcción defectuosa,
porque contiene un desarrollo propio del recurso de casación en el
fondo indicando como infringida la norma que regula la cosa juzgada e
invocando la causal de ultra petita —768 Nº 4 del Código de
Procedimiento Civil— y no la de la cosa juzgada —768 Nº 6 del mismo
Código—, todo lo cual impide tener por configurada la causal
(considerando 4º de la sentencia de Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 16/05/2019, Rol Nº 29452-


2018,

Cita online: CL/JUR/3387/2019

7ª En contener decisiones contradictorias;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Nulidad absoluta parcial del contrato de seguro y restitución de prima


pagada y no consumida. I. Sentencia de casación. Fallo impugnado
contiene decisiones contradictorias. Improcedencia de rechazar
demanda de cumplimiento de contrato, validando las cláusulas del
contrato de seguro y luego concluir la nulidad del mismo por no
cumplir con los requisitos esenciales del art. 521 del Código de
Comercio

En la especie, el juez árbitro determinó por una parte que, la


sentenciadora llevara a rechazar en su primer resuelvo, la demanda
principal —de cumplimiento de contrato con indemnización de
perjuicios— y, acto seguido, en su segundo resuelvo, acogiera la
demanda subsidiaria de nulidad absoluta parcial del contrato respecto
de los Centros "Poe", "Milagros", "Curbita" y "Pillihué", condenando al
Asegurador a restituir las primas pagadas por el Asegurado respecto de
los Centros "Poe" y "Milagros", y a indemnizar al demandante en los
términos y condiciones que fija la propia sentencia. De este modo, la
sentencia de la Juez Árbitro contiene en lo resolutivo de aquel fallo
decisiones que, definitivamente, aparecen como contradictorias, que
hacen ininteligible lo resuelto y que presentan indudablemente
influencia en lo dispositivo del fallo, pues primero desecha la demanda
que buscaba que se obligara a la demandada al cumplimiento del
contrato de seguro, validando expresamente las cláusulas del mismo,
en especial, que los Centros afectados por el llamado "Bloom de Algas"
no se encontraban asegurados, como sostuviera, precisamente, la
empresa demandada y, luego, sobre los mismos hechos asentados,
concluye que el contrato celebrado entre las partes deviene en nulo por
no cumplir con los requisitos esenciales del artículo 521 del Código de
Comercio. Conforme a lo descrito, se ha configurado la causal de
casación en la forma prevista en el numeral 7º del artículo 768 del
Código de Procedimiento Civil y, atentos a lo prevenido por el
artículo 786 del mismo cuerpo legal, procede invalidar el fallo en alzada,
dictando a continuación y sin nueva vista, la sentencia de reemplazo
correspondiente (considerandos 7º a 9º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 25/05/2020, Rol Nº 10057-2018,

Cita online: CL/JUR/34859/2020

2. Indemnización de perjuicios por responsabilidad del Estado. Vicio de


casación formal del Nº 7 del art. 768 del Código de Procedimiento
Civil procede sólo si incompatibilidad entre las decisiones del fallo
acarrea la imposibilidad de su cumplimiento

En relación a la causal alegada, ella tiene lugar de acuerdo a lo que


prescribe el numeral 7º del artículo 768 del Código de Procedimiento
Civil, cuando la sentencia contiene decisiones contradictorias,
conclusión a la que se arriba examinando la parte resolutiva del fallo de
que se trata, en que debe constatarse la existencia de proposiciones en
la que una afirme lo que niega la otra. Así, entonces, la incompatibilidad
entre ellas debe acarrear la imposibilidad de su cumplimiento, sin que
se admita que la oposición pueda producirse entre lo expuesto en un
considerando y lo resuelto en una de sus decisiones. En los términos
expresados, el recurso por la causal esgrimida deberá ser rechazado,
al no configurarse la hipótesis propuesta. En efecto, la propia exposición
de motivos del libelo excluye la situación que se denuncia, al sostener
expresamente que la constatación del vicio invocado se habría
producido al otorgar un monto de indemnización por concepto de daño
moral a las demandantes que no repara el daño sufrido, no obstante la
existencia de petrium doloris que experimentaron. De lo anterior resulta
forzoso concluir que, más allá de la corrección sustantiva del
razonamiento de los jueces del fondo para resolver lo debatido y que es
lo reprochado efectivamente por esta vía, la contradicción acusada no
se produce, pues lo que la recurrente reprocha es el diverso valor
probatorio asignado a la prueba producida en autos, lo que determinaría
una suerte diversa a sus pretensiones. Tal situación, como se ha dicho
precedentemente, excede con creces el marco de la causal de nulidad
invocada que, como tal, debe ser interpretada restrictivamente, por lo
que al existir una sola decisión sobre lo debatido, forzoso es concluir
que no se configura en la especie el motivo de invalidación alegado
(considerandos 7º y 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 24/10/2019, Rol Nº 14316-


2019,

Cita online: CL/JUR/6142/2019

3. Cumplimiento de contrato con indemnización de perjuicios. Causal de


casación en la forma de contener la sentencia decisiones
contradictorias, rechazada. Causal de casación en la forma de
contener la sentencia decisiones contradictorias requiere, a lo menos,
dos decisiones que pugnen entre sí

Respecto a la ultra petita que se atribuye a los sentenciadores por


haberse extendido a puntos no sometidos a la decisión del tribunal, el
Máximo Tribunal ya ha asentado que el defecto se configura cuando la
sentencia, apartándose de los términos en que las partes situaron la
controversia por medio de sus respectivas acciones o excepciones,
altera el contenido de éstas cambiando su objeto o modificando su
causa de pedir. En la especie, al confrontar lo reclamado por los
litigantes —considerando la rebeldía de la demandada— con lo decidido
en el fallo impugnado no es posible apreciar que exista un desajuste
entre lo resuelto y los términos en que fueron formuladas las
pretensiones en juicio, por cuanto lo que decide la sentencia impugnada
se encuadra precisamente dentro de lo que fue el asunto debatido.
Luego, al resolver los jueces del modo que lo han hecho, emiten
pronunciamiento sobre asuntos de su competencia y no se apartan
claramente y con influencia en lo dispositivo de los planteamientos
esgrimidos en juicio, resultando inconcuso que han actuado dentro del
ámbito de las atribuciones que les son propias por habérselas otorgado
los litigantes en sus escritos fundamentales y por el propio
ordenamiento jurídico, sin que aparezca que se han extendido a puntos
no sometidos a su decisión (considerando 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 4/04/2019, Rol Nº 43710-2017,

Cita online: CL/JUR/1858/2019

4. Indemnización de perjuicios por responsabilidad extracontractual. I.


Causal de casación en la forma de contener la sentencia decisiones
contradictorias, inadmisible. Causal de casación en la forma de
contener la sentencia decisiones contradictorias requiere, a lo menos,
dos decisiones que pugnen entre sí

El demandante, recurrente de casación, invoca la causal contemplada


en el artículo 768 Nº 7 del Código de Procedimiento Civil, acusando que
el fallo contendría decisiones contradictorias. El vicio se configuraría —
según afirma— porque en su parte considerativa el fallo por una parte
valida el archivo del expediente practicado de oficio por el tribunal y por
otra pone la carga de la marcha del juicio sobre el demandante, fundado
en el principio de pasividad consagrado en el artículo 10 del Código
Orgánico de Tribunales, razonamientos que —en concepto de quien
recurre— se contraponen entre sí. Sin embargo, los hechos señalados
por el recurrente no la configuran. En efecto, esta anomalía se refiere a
la hipotética situación de contemplar el mismo fallo impugnado dos
decisiones que sean imposibles de cumplir porque una se opone a la
otra, esto es, que existan dos dictámenes o determinaciones que
recíprocamente se destruyen. Y ello no ocurre en la especie toda vez
que existe un solo pronunciamiento, que acoge el incidente de
abandono del procedimiento (considerandos 4º y 5º de la sentencia de
la Corte Suprema).
Corte Suprema Primera Sala (Civil), 18/03/2019, Rol Nº 32711-2018,

Cita online: CL/JUR/1400/2019

5. Cobro de honorarios. I. Causal de casación en la forma de contener


la sentencia decisiones contradictorias requiere, a lo menos, dos
decisiones que pugnen entre sí

Respecto a la causal de casación en la forma del artículo 768 Nº 7


del Código de Procedimiento Civil, el Máximo Tribunal reiteradamente
ha señalado que el vicio invocado supone la existencia de, a lo menos,
dos decisiones que pugnen entre sí y no puedan cumplirse al mismo
tiempo, circunstancia que no concurre en la especie, desde que la
sentencia contiene sólo dos, una, por la cual se desestimaron las
excepciones de prescripción de la acción, falta de legitimidad pasiva y
de pago opuestas por la demandada y, otra, por la que se acogió la
demanda en los términos indicados y precisados, las que pueden y
deben ser cumplidas en la forma dispuesta, sin que exista oposición en
sus determinaciones (considerando 11º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 11/12/2018, Rol Nº 8410-


2017,

Cita online: CL/JUR/6855/2018

8 En haber sido dada en apelación legalmente declarada desistida, y244


a

9ª En haberse faltado a algún trámite o diligencia declarados esenciales


por la ley o a cualquier otro requisito por cuyo defecto las leyes prevengan
expresamente que hay nulidad.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cuidado personal. Causal de nulidad formal de falta de un trámite


declarado esencial por la ley. Tribunal que no adopta las medidas
necesarias para que la niña actuara debidamente representada en el
juicio, mediante nombramiento de un curador ad litem

Conforme lo dispone el artículo 768 Nº 9 del Código de Procedimiento


Civil, constituye vicio de nulidad formal "En haber faltado a algún trámite
o diligencia declarados esenciales por la Ley o cualquier otro requisito
por cuyo defecto las leyes prevengan expresamente que hay nulidad".
Conforme a lo que se ha venido razonando, aparece que el órgano
jurisdiccional no adoptó las medidas necesarias para que la menor de
autos actuara debidamente representada en el juicio, mediante el
nombramiento de un curador ad litem, siendo éste, en concepto de esta
corte, un trámite o diligencia esencial, conforme al artículo 19 de la Ley
Nº 19.968, en relación con los artículos 768 y 795 del Código de
Procedimiento Civil, entendiendo que en este último precepto la
enumeración de los trámites o diligencias esenciales, no tienen el
carácter de taxativos. La omisión en que se ha incurrido en el juicio, ha
causado un perjuicio a los derechos e intereses de dicha menor, sobre
todo tratándose de un juicio de cuidado personal, en que la decisión que
en definitiva se adopte, sin duda, afectará su vida futura. El vicio ya
señalado, amerita la anulación de la sentencia y de todo el
procedimiento como se dirá en lo resolutivo, vicio que fue advertido en
los alegatos de las partes en estrado, concretamente por la defensa de
la demandada y de la tercera interesada (considerandos 2º, 7º a 9º de
la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 30/05/2020, Rol Nº 1324-2019,

Cita online: CL/JUR/34988/2020

2. Divorcio unilateral. Tribunal que ha tenido a la demandada por


rebelde siendo que contestó la demanda y dedujo demanda
reconvencional de compensación económica por escrito. Vicio de
casación formal de haber faltado una diligencia esencial al
procedimiento

En la especie, revisado el sistema computacional y los antecedentes


de esta causa, resulta efectivo que la parte demandada contestó la
demanda y dedujo demanda reconvencional de compensación
económica por escrito, tal como exige —el artículo 58 de la de la Ley
Nº 19.968—, sin que obste a tener por verificadas tales actuaciones el
hecho de que ante la inasistencia de dicho litigante a la audiencia
preparatoria, no sea efectuada por él la "relación breve y sintética" de
forma oral ante el tribunal de primera instancia, la que en ese evento
debiera realizarla el propio juez a objeto de proceder en su mérito a fijar
posteriormente el objeto del juicio, los hechos a probar y las
convenciones probatorias, inobservancia que, constatada en este juicio,
hace procedente la causal de invalidación perseguida, puesto que al
omitirse tal actuación y entenderse por no formalizadas la contestación
de la demanda y la demanda reconvencional, desatendió el tribunal
especializado la recta interpretación legal que le imponen los artículo 58
y 61 Nº 1 de la Ley Nº 19.968 y el principio de debido proceso. Así las
cosas, el yerro precedentemente apuntado constituye el vicio de
casación en la forma previsto en el artículo 768 Nº 9 del Código de
Procedimiento Civil, en relación con los artículos 58 y 61 de la Ley
Nº 19.968, por falta de una diligencia esencial al procedimiento,
situación por la cual no cabe sino acoger por este motivo el recurso de
nulidad formal interpuesto por el recurrente (considerandos 2º y 4º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 20/01/2020, Rol Nº 1980-2019,

Cita online: CL/JUR/6827/2020

3. Reclamo de ilegalidad municipal. Emplazamiento, elementos y


finalidad. Causal de casación en la forma de omisión de un trámite
esencial. Omisión del emplazamiento. Anulación de oficio

La Corte de casación se encuentra facultada para revisar la


regularidad formal del procedimiento y de la emisión de la sentencia que
fuera impugnada, actividad en la que ha detectado que el fallo casado
incurrió en la causal de casación prevista en el artículo 768 Nº 9
del Código de Procedimiento Civil, en relación al art ículo 795 Nº 1 del
mismo cuerpo legal toda vez que se ha soslayado un trámite o diligencia
esencial, como lo es el emplazamiento legal. En efecto, el
emplazamiento está previsto no sólo como una garantía para el
demandado, sino que también para el actor, puesto que desde su
ocurrencia, se traba la relación procesal, quedando vinculadas las
partes a la decisión jurisdiccional, la que debe resolver el conflicto
sometido a su conocimiento en virtud del principio de inexcusabilidad.
Lo anterior es relevante, toda vez que de los antecedentes del proceso
fluye que los sentenciadores han negado el emplazamiento de la
sociedad titular del proyecto de edificación, a pesar del interés
manifiesto en la resolución del conflicto. En tales condiciones, la
sentencia recurrida no se ha pronunciado en forma legal, incurriendo en
la causal de casación del artículo 768 Nº 9 del Código de Procedimiento
Civil al haberse faltado a algún trámite o diligencia declarados
esenciales por la ley o a cualquier otro requisito por cuyo defecto las
leyes prevengan expresamente que hay nulidad, en relación al
art ículo 795 Nº 1 del mismo cuerpo normativo que establece que son
trámites o diligencias esenciales el emplazamiento de las partes, el que
en la especie ha sido desconocido (considerandos 7º y 8º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 13/02/2020, Rol


Nº 19276-2018,

Cita online: CL/JUR/21187/2020

4. Declaración de susceptibilidad de adopción. Sentencia expedida sin


audiencia del ministerio público judicial. Audiencia del Ministerio
Público constituye un trámite esencial en los juicios que versan sobre
el estado civil de las personas. Anulación de oficio

Durante la vista de la causa se constató que la sentencia impugnada


fue expedida sin audiencia del ministerio público judicial, como lo exige
terminantemente el artículo 357 Nº 4 del Código Orgánico de
Tribunales. Si bien el trámite o diligencia de que se trata no está
establecida en ninguna de las enumeraciones que se consignan en los
artículos 795 y 800 del Código de Procedimiento Civil, que señalan
cuáles son de aquella índole, analizadas gramaticalmente debe
destacarse que se inician con la expresión "en general", que es una
locución adverbial que equivale a "de un modo general". En este
contexto, lleva a sostener que las enumeraciones contenidas en las
reglas antes indicadas tienen un carácter tal que permite aceptar que
otras disposiciones puedan también referirse a trámites o diligencias
cuya omisión justifique la causal en estudio. Por consiguiente, es
evidente que tales enumeraciones no son taxativas y, en tal evento, la
audiencia del Ministerio Público Judicial a que se refiere el artículo 357
del Código Orgánico de Tribunales, tiene en los juicios que versan sobre
el estado civil de las personas, como lo es EL de susceptibilidad de
adopción, que es un procedimiento previo a la adopción, la que confiere
al adoptado el estado civil de hijo respecto del o los adoptantes, tal como
lo prevé el artículo 1 inciso 2º de la Ley Nº 19.620, el carácter de trámite
o diligencia esencial dispuesto por la ley. En consecuencia, el fallo
incurrió en la causal de casación del artículo 768 Nº 9 del Código de
Procedimiento Civil y corresponde invalidarlo, porque el trámite omitido
tiene carácter de esencial, lo que hará la Corte en uso de la facultad que
le concede el artículo 775 del Código mencionado (considerandos 3º a
7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 4/02/2020, Rol Nº 13901-


2019,

Cita online: CL/JUR/9547/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 28/11/2019, Rol Nº 7601-


2019,

Cita online: CL/JUR/11925/2019

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 14/11/2019, Rol Nº 359-


2019,

Cita online: CL/JUR/6560/2019

5. Cobro de pesos. Tribunal que omite un trámite esencial como es la


agregación de documentos en la forma que ordena la ley. Juzgadores
a quo restaron mérito probatorio a copia del pagaré fundante de la
demanda aparejado en segunda instancia por estimar que se trataba
de un instrumento privado que no fue reconocido en juicio

En la especie, es posible colegir que el tribunal de alzada incurrió en


el defecto formal denunciado al no cumplir un trámite que el legislador
elevó a la categoría de esencial, cual es, la agregación de los
documentos acompañados en la forma que corresponda. Así las cosas,
se configura el vicio de nulidad previsto en el artículo 768 Nº 9 del
Código de Procedimiento Civil, en relación con lo dispuesto en el
artículo 800 Nº 2 del mismo cuerpo normativo, y esta anomalía influyó
sustancialmente en lo dispositivo del fallo porque incidió directamente
en la ponderación de las probanzas que tenían por finalidad demostrar
el supuesto fáctico en que se funda la pretensión del demandante.
Consiguientemente, dicha falta solo puede repararse con la invalidación
del fallo impugnado, debiendo el tribunal recurrido tener por
acompañada la documental en la forma legal que corresponda, para
luego continuar con la tramitación de la causa y proceder a su nueva
vista (considerando 8º de la sentencia de la Corte Suprema). La
sentencia de alzada tuvo en consideración que la parte demandante
acompañó al proceso una copia del pagaré donde constan las
estipulaciones del mutuo que sirve de base a la pretensión, para luego,
en el motivo séptimo reflexionar que "tratándose de un instrumento
privado que habría emanado de los demandados y al no haber sido
acompañado como tal, sino con citación, no ha logrado el mérito de
generar efectos probatorios en contra de los demandados. En definitiva,
el documento en análisis no ha sido reconocido ni mandado tener por
reconocido al interior de este procedimiento, por lo cual carece de todo
valor probatorio. Lo anterior, conlleva necesariamente a establecer que
la recurrente no ha aportado antecedentes necesarios para cumplir con
su carga probatoria, en cuanto a la acción incoada". Así planteados los
antecedentes del proceso no puede pasar inadvertido que la Corte de
Apelaciones resolvió tener por acompañado, con citación contraria, el
instrumento aparejado en segunda instancia por la parte demandante.
No obstante, el mismo tribunal de alzada luego dictaminó —en la
sentencia definitiva— que el documento debió ser acompañado bajo
apercibimiento de tenerse por reconocido, con el efecto que de ello
deriva en la ponderación de la prueba. Por lo tanto, se aprecia una
evidente incongruencia en lo resuelto por la Corte de Apelaciones de La
Serena que, desconociendo su decisión previa, examinó en la sentencia
impugnada que la agregación del instrumento no se hizo en la forma
que correspondía, lo que en definitiva se traduce en la falta de un trámite
o diligencia esencial en segunda instancia (considerandos 6º y 7º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 8/01/2020, Rol Nº 23338-2018,

Cita online: CL/JUR/4665/2020

6. Nulidad de reconocimiento de paternidad. Suficiencia probatoria para


acreditar que recurrente fue impedido de rendir la prueba que
pretendía incorporar, en términos que quedó prácticamente en
indefensión. Causal de casación de haberse faltado durante el juicio
a un trámite o diligencias declarada esencial por la ley. Anulación de
oficio
Respecto al vicio de casación consistente en haberse faltado a algún
trámite declarado esencial por la ley, como lo es la práctica de
diligencias probatorias, del mérito del registro en audio de la audiencia
de juicio, es inconcuso que el apoderado del demandante intentó
incorporar al juicio, el informe con el resultado de un examen de ADN
realizado por el Laboratorio Biogenetic a las partes y al menor. Sin
embargo, la señora juez de primera instancia tras hacer apreciaciones
e inferencias relativas a la paternidad biológica y legal del niño, y
requerir insistentemente al apoderado del actor en qué consistiría el
error, que como vicio del consentimiento sirve de fundamento a su
acción, en definitiva imposibilitó la introducción de dicho medio de
prueba, aludiendo de la manera ya dicha al informe de ADN allegado a
la demanda, cuyas deficiencias resalta. También es manifiesto que la
única testigo que compareció al juicio no logró prestar su declaración
ante las constantes interrupciones de la señora Juez, por considerar
"inductivas" las preguntas realizadas por el apoderado del actor, o
desestimarlas, según se infiere, por parecerles impertinentes. Por
último, nada se dice en relación a la prueba científica solicitada al
Servicio Médico Legal y decretada en la audiencia preparatoria ni de los
apercibimientos ordenados a su precepto. De lo expuesto fluye, que
como reclama el recurrente, se vio impedido de rendir la prueba que
pretendía incorporar, en términos que quedó prácticamente en
indefensión, desde que al no poder rendir dicha prueba, conforme se
concluye en la sentencia atacada, aquella que se permitió allegar,
resultó si no inocua, insuficiente para alcanzar la convicción de la
sentenciadora en orden a establecer el vicio del consentimiento alegado
(considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones). En
la situación sub judice se configura la causal de casación de haberse
faltado durante el juicio a un trámite o diligencias declarada esencial por
la ley, como lo es la práctica de diligencias probatorias de produjeron
indefensión, prevista en el artículo 768 Nº 9 en relación al artículo 795
Nº 4, ambos del Código de Procedimiento Civil, acarreando ello la
nulidad de la sentencia que se revisa y del procedimiento
correspondiente, conforme a lo dispuesto en el artículo 67 Nº 6 de la
Ley Nº 19.968. Todo lo cual autoriza a esta Corte hacer uso de la
facultad que le confiere el artículo 775 del Código de Procedimiento Civil
(considerando 7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel 6/12/2019, Rol Nº 954-2019,


Cita online: CL/JUR/6983/2019

7. Divorcio culposo. Inexistencia de norma que autorice expresamente


al juez de familia a fijar un tiempo para la declaración de un testigo en
el juicio oral. Limitación del ejercicio del derecho del abogado a
interrogar a su testigo de manera completa y conforme a los intereses
de su parte. Causal de casación en la forma de omisión de un trámite
esencial, anulación de oficio

No existe norma que autorice expresamente al juez de familia a fijar


un tiempo para la declaración de un testigo en el juicio oral, de manera
que al haber limitado el ejercicio del derecho del abogado de la
demandante a interrogar a su testigo de manera completa y conforme a
los intereses de su parte, se ha impedido, en la práctica, llevar a cabo
una diligencia probatoria. En estas condiciones, no puede sino
concluirse que la sentencia atacada no cumple debidamente con las
exigencias que al efecto establece el artículo 66 Nº 4 de la Ley de
Tribunales de Familia —Nº 19.968—, toda vez que la decisión que se
contiene en la sentencia impugnada debe fundarse en un análisis lógico
y racional por parte del tribunal que la dicta, el que debe comprender
toda la prueba rendida, configurándose el vicio de casación en la forma
del artículo 768 Nº 9 del Código de Procedimiento Civil, en relación al
artículo 795 Nº 4 del mismo Código, normas estas últimas que resultan
aplicables por la expresa remisión que se hace a ellas en el artículo 67
Nº 6 de la Ley precitada, lo que autoriza su invalidación, toda vez que
el vicio detectado ha influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo,
desde que hizo posible que se rechazara la demanda de divorcio
culposo por falta de mayores antecedentes y prueba insuficiente
(considerandos 4º a 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 11/10/2019, Rol Nº 882-2019,

Cita online: CL/JUR/6004/2019

8. Impugnación de filiación. Rechazo de plano de la demanda que


produce la indefensión de las partes. Ausencia de los presupuestos
para rechazar de plano la demanda. Tribunal debía fijar los hechos
que debían ser probados y determinar las pruebas que debían
rendirse en la audiencia de juicio. Causal de casación en la forma de
omisión de un trámite esencial, anulación de oficio
El artículo 61 Nº 2 de la Ley Nº 19.968 autoriza al juez a pronunciarse
de inmediato en la audiencia preparatoria, una vez evacuado el traslado,
de las excepciones de incompetencia, falta de capacidad o de
personería, de las que se refieran a la corrección del procedimiento y
de prescripción en la medida que puedan fundarse en antecedentes que
consten en el proceso o que sean de pública notoriedad. Sin embargo,
ninguna de tales hipótesis concurría en la especie. Así las cosas,
conforme a la normativa que regula los juicios ordinarios ante los
juzgados de familia, correspondía fijar los hechos que debían ser
probados y determinar las pruebas que debían rendirse en la audiencia
de juicio, o también disponer la realización de las diligencias que se
consideraran pertinentes. Sin embargo, el tribunal optó por rechazar de
plano la demanda, arguyendo que se daban los requisitos de la cosa
juzgada. En tales condiciones, la omisión antes descrita conduce a la
indefensión de las partes, algunas de las cuales no asistieron a la
audiencia preparatoria, impidiéndoseles ofrecer y rendir las probanzas
concernientes a sus pretensiones. Se faltó, entonces, a un trámite
esencial previsto por la ley, incurriéndose en el vicio de casación en la
forma del artículo 768 Nº 9 del Código de Procedimiento Civil, por lo que
debe invalidarse de oficio la sentencia (considerandos 5º a 7º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 8/10/2019, Rol Nº 534-2019,

Cita online: CL/JUR/5824/2019

9. Divorcio. Juez que interviene en la etapa de preparación tiene el


deber informar a las partes sobre el derecho que les asiste para
demandar compensación económica. Causal de casación en la forma
de omisión de un trámite esencial

La interpretación coherente del artículo 64 de la Ley Nº 19.947 y


artículo 58 inciso 2º de la Ley Nº 19.968, en armonía con los principios
que inspirar el procedimiento de familia, llevan a concluir que el derecho
a la compensación económica, cuando no es ejercido en la oportunidad
procesal prevista —demanda o demanda reconvencional escrita— es
obligación del juez que interviene en la etapa de preparación informar a
las partes sobre el derecho que les asiste para demandar compensación
económica en los términos que impone expresamente el artículo 64 de
la Ley Nº 19.947. Esta obligación no pude ser desconocida a pretexto
de entender precluido el derecho al haberse declarado extemporánea
la contestación escrita respecto de la demanda de divorcio unilateral por
cese de convivencia; primero, porque la oralidad e inmediación obliga
al juez, precisamente en la etapa preparatoria, a realizar una actuación
personal en el sentido de informar a las partes —en este caso a la
demandada— sobre el derecho a demandar compensación económica
en forma oral y, en segundo término, porque en este caso el derecho de
la demandada se vio frustrado por una defensa deficiente al presentar
el apoderado, fuera de plazo el escrito de contestación con demanda
reconvencional, lo que en manera alguna es imputable a la demandada,
pues esta desconoce las normas de procedimiento, a lo que se une el
reconocimiento del legislador en orden a hacer de cargo del juez de la
causa una diligencia expresa, que en este caso se ha omitido, cual es,
manifestar a las partes la posibilidad de ejercer un derecho —demandar
o reconvenir verbalmente en la audiencia— para el reconocimiento de
la compensación económica (considerando 3º de la sentencia de
casación).

Es evidente que omitir la comunicación de la existencia de un derecho


reconocido en la legislación actual, tiene en este caso, el carácter de
trámite o diligencia esencial dispuesto por la ley. Dicha omisión impidió
en los hechos la materialización del derecho a reclamar compensación
económica que asistía a la demandada, a través de la correspondiente
acción reconocida en el ordenamiento jurídico, trámite esencial,
expresamente previsto en el artículo 64 inciso 2º de la ley de Matrimonio
Civil. Por lo tanto, el fallo fue dictado incurriendo en la causal de
casación en la forma del artículo 768 Nº 9 del Código de Procedimiento
Civil, y corresponde invalidarlo porque el trámite omitido tiene el carácter
que autoriza la invalidación de la sentencia (considerandos 6º a 8º de la
sentencia de casación).

Corte de Apelaciones de Santiago, 23/08/2019, Rol Nº 847-2019,

Cita online: CL/JUR/4835/2019

10. Autorización para la salida del país de un menor. Incumplimiento del


deber de otorgar a los menores la posibilidad de ser oídos. Causal de
casación en la forma de omisión de un trámite esencial. Anulación de
oficio
En el caso, es posible entender e incluso compartir el criterio adoptado
por la jueza a cargo de la tramitación del juicio, de que no era
conveniente oír a P., dada su corta edad a esa fecha; sin embargo, E.
tenía casi 7 años de edad al celebrarse la audiencia confidencial con su
hermano M., por lo que correspondía darle la oportunidad de
expresarse, en una forma acorde a su edad, de manera que la decisión
también considerara sus sentimientos, deseos o temores respecto del
cambio de país de residencia en discusión, tal como ocurrió con su
hermano mayor. Además, cabe tener presente que la audiencia de juicio
contempló numerosas sesiones sucesivas, y la sentencia del grado fue
pronunciada en enero de 2018, cuando E. ya había cumplido 7 años y
P. contaba con 5 años de edad, sin que exista ningún antecedente que
dé cuenta de que alguno presente dificultades para comunicarse, por lo
que no se advierten inconvenientes para haber cumplido con la
obligación —de oír a los menores— en esa etapa o durante la
tramitación del juicio en segunda instancia. En consecuencia, se debe
concluir que se incurrió en la causal de casación formal establecida en
el artículo 768 Nº 9 del Código de Procedimiento Civil, por lo que debe
ser invalidado todo lo obrado y reponerse la causa al estado que se lleve
a cabo la audiencia de juicio y el trámite esencial omitido ante tribunal
no inhabilitado, debiendo, en su oportunidad, dictar la sentencia que
corresponda (considerandos 5º y 6º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 8/08/2019, Rol Nº 8663-2018

Cita online: CL/JUR/11899/2019

11. Infracción a la Ley General de Pesca y Acuicultura. Incumplimiento


de los requisitos de admisibilidad del recurso de casación en la forma.
Improcedencia de interponer causales Nº 5 y Nº 9 del art. 768 del
Código de Procedimiento Civil

Del artículo 766 del Código de Procedimiento Civil y el inciso segundo


del art ículo 768 del texto citado prescribe: "En los negocios a que se
refiere el inciso segundo del artículo 766 sólo podrá fundarse el recurso
de casación en la forma en alguna de las causales indicadas en los
números 1º, 2º, 3º, 4º, 6º, 7º y 8º de este artículo y también en el
número 5º cuando se haya omitido en la sentencia la decisión del
asunto controvertido". En los términos desarrollados y del modo como
fue propuesto el recurso, conforme a las causales invocadas, se
desprende necesariamente su declaración de inadmisibiliad, por
tratarse de un procedimiento especial seguido según los artículo s 124
y 125 de Ley General de Pesca y Acuicultura, en que las causales de
casación formal resultan improcedentes, en particular la del
art ículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil, en relación con su
art ículo 170 Nº 4, toda vez que en la especie no se omitió la decisión
del asunto controvertido; menos aun la del artículo 768 Nº 9 del citado
código, que expresamente fue excluida como fundamento para
promoverla, según se lee en su inciso final; por lo que debe ser
desestimado en esta etapa de tramitación (considerandos 3º y 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 5/06/2019, Rol Nº 4449-2019,

Cita online: CL/JUR/3607/2019

12. Constitución de servidumbre legal minera. Improcedencia del


recurso de casación en la forma por las causales del artículo 768 Nº 9
y Nº 5 en relación con el artículo 170, todos del Código de
Procedimiento Civil, en los juicios regidos por leyes especiales

Si bien el artículo 766 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil


dispone que el recurso de casación en la forma procederá respecto de
las sentencias que se dicten en los juicios o reclamaciones regidos por
leyes especiales, lo cierto es que el artículo 768 inciso 2º del Código
precitado limita las causales de casación en la forma aplicables a esta
clase de juicios, disponiendo que sólo podrá fundarse en alguna de las
causales indicadas en los Nºs. 1, 2, 3, 4, 6, 7 y 8 de este artículo y
también en el Nº 5 cuando se haya omitido en la sentencia la decisión
del asunto controvertido. Por consiguiente, tratándose de un juicio
especial al tratarse de una demanda de constitución de servidumbre
legal minera, resulta improcedente el recurso de casación en la forma
por la causal del artículo 768 Nº 5, en relación con el artículo 170, como
tampoco por la del artículo 768 Nº 9, todos del Código de Procedimiento
Civil (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 28/05/2019, Rol Nº 31626-


2018,

Cita online: CL/JUR/2944/2019


13. Infracción a la Ley General de Pesca y Acuicultura. Incumplimiento
de los requisitos de admisibilidad del recurso de casación en la forma.
Improcedencia de interponer causal del art. 768 Nº 9 del Código de
Procedimiento Civil en procedimientos regidos por leyes especiales

A fin de resolver la procedencia de la segunda causal de invalidación


formal —del artículo 768 Nº 9 del Código de Procedimiento Civil—, se
debe tener en consideración en este examen previo que el artículo 766
del Código de Procedimiento Civil establece: "El recurso de casación en
la forma se concede contra las sentencias definitivas, contra las
interlocutorias cuando ponen término al juicio o hacen imposible su
continuación y, excepcionalmente, contra las sentencias interlocutorias
dictadas en segunda instancia sin previo emplazamiento de la parte
agraviada, o sin señalar día para la vista de la causa". Agrega su inciso
segundo, que "Procederá, asimismo, respecto de las sentencias que se
dicten en los juicios o reclamaciones regidos por leyes especiales, con
excepción de aquéllos que se refieran a la constitución de las juntas
electorales y a las reclamaciones de los avalúos que se practiquen en
conformidad a la Ley Nº 17.235, sobre Impuesto Territorial y de los
demás que prescriban las leyes". En tanto, el inciso segundo del
artículo 768 del texto citado prescribe: "En los negocios a que se refiere
el inciso segundo del artículo 766 sólo podrá fundarse el recurso de
casación en la forma en alguna de las causales indicadas en los
números 1º, 2º, 3º, 4º, 6º, 7º y 8º de este artículo y también en el
número 5º cuando se haya omitido en la sentencia la decisión del
asunto controvertido". En consecuencia, para el análisis de
admisibilidad de la segunda causal desarrollada por el recurrente en su
libelo, esto es, la contenida en el artículo 768 Nº 9 del Código de
Procedimiento Civil, y según fue razonado en el motivo anterior, el
legislador expresamente la excluyó por tratarse de un procedimiento
especial seguido conforme a los artículos 124 y 125 de la Ley General
de Pesca y Acuicultura, debiendo ser, por tanto, desestimado en esta
etapa de su tramitación (considerandos 5º y 6º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 15/05/2019, Rol Nº 4283-


2019,

Cita online: CL/JUR/2717/2019


14. Divorcio y compensación económica. I. Compensación económica.
Principio de protección al cónyuge débil. Formas de determinación de
la compensación económica. Obligación de informar de la
compensación económica a los cónyuges potencialmente
beneficiarios. II. Vulneración al debido proceso. Causal de casación
en la forma de omisión de un trámite esencial, anulación de oficio

I. La compensación económica es una institución que no tiene


precedentes en el derecho matrimonial chileno, y que fue introducida
por la Ley Nº 19.947, con ocasión de la regulación de las relaciones
entre los cónyuges, una vez verificada la ruptura por divorcio o nulidad.
Se encuentra contenida en el Capítulo VII del mencionado cuerpo legal,
relativo a las "Reglas Comunes a ciertos casos de separación, nulidad
y divorcio", en el párrafo 1º, artículos 61 a 66, y puede conceptualizarse
como un derecho personal que tiene aquel de los cónyuges que se
dedicó al cuidado y crianza de los hijos durante el matrimonio, lo que le
impidió desarrollar una actividad remunerada o le llevó a hacerlo en
menor medida de lo que podía o quería, a que se le compense el
menoscabo económico sufrido por esa causa, cuando se produzca la
terminación del matrimonio por nulidad o divorcio. Como ha reconocido
la doctrina nacional y la jurisprudencia de nuestros tribunales, la figura
de la compensación económica es el nítido y mejor reflejo del principio
de protección al cónyuge débil, consagrado en la nueva legislación
matrimonial, en el artículo 3º inciso 1º, que señala: "Las materias de
familia reguladas por esta ley deberán ser resueltas cuidando proteger
siempre el interés superior de los hijos y del cónyuge más débil"
(considerando 4º de la anulación de oficio).

La compensación económica, su monto y forma de pago, puede ser


acordada por los cónyuges mayores de edad, mediante escritura
pública o acta de avenimiento, los que deben ser sometidos a la
aprobación del tribunal. En caso de desacuerdo, corresponde que éste
determine su procedencia y fije su monto y forma de pago. A tal efecto
y connotando la importancia que le asignó el legislador a dicha
institución, en el caso que ésta no hubiere sido demandada la ley de
matrimonio civil impone a la magistratura la obligación de informar a los
cónyuges sobre la posibilidad de hacerlo. La doctrina ha entendido que
si el eventual beneficiario se mantiene en la pasividad durante la
audiencia en que se le informa de su derecho, la facultad de impetrarla
se extingue, precluyendo el derecho a accionar —Carlos Pizarro W. y
Álvaro Vidal O.—. En consecuencia, siendo la compensación
económica expresión de uno de los principios fundantes del derecho
matrimonial chileno, como es el de protección del cónyuge más débil,
no resulta extraño que el legislador haya establecido un mecanismo
especial para asegurar el ejercicio de ese derecho, consistente en la
obligación de informar del mismo a los cónyuges potencialmente
beneficiarios, en una oportunidad procesal precisa, la audiencia
preparatoria. De modo que es manifiesto su carácter de trámite o
diligencia esencial y su ineludible relación con el derecho a la tutela
judicial, consagrado en el artículo 19 Nº 3 inciso 1º de la Constitución
(considerandos 5º y 6º de la anulación de oficio).

II. La sentencia impugnada ha infringido la debida tramitación del


proceso, al omitir el trámite o diligencia esencial antes señalado de
informar del derecho a compensación económica a la demandada
reconvencional de divorcio, como potencial beneficiaria del mismo, lo
que configura la causal de invalidación formal contenida en el
artículo 768 Nº 9 del Código de Procedimiento Civil y justifica la
actuación de oficio del Máximo Tribunal (considerando 7º de la
anulación de oficio).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 16/04/2019, Rol Nº 5361-


2018,

Cita online: CL/JUR/3993/2019

15. Acción de compensación del artículo 28 del D.L. Nº 2.695. Finalidad


de la acción de compensación. Tasación de inmueble rural, a falta de
acuerdo entre las partes, debe realizarse por el SAG o CONAF.
Causal de casación en la forma de omisión de un trámite esencial.
Anulación de oficio

De conformidad al artículo 28 del D.L. Nº 2.695, los demandantes


pueden exigir una compensación en dinero en la proporción que
corresponda hasta la concurrencia del valor del predio, toda vez que la
finalidad u objetivo previsto por el legislador al otorgar la acción de
compensación no es otro que resarcir, o compensar, al dueño o
propietario que ha perdido su dominio por haberlo adquirido un tercero
al amparo de la institucionalidad del Decreto Ley Nº 2.695. Tratándose
de un inmueble rural, tal como consta del informe técnico rolante en el
expediente administrativo, a falta de acuerdo entre las partes, debió
practicarse la tasación por los órganos que señala el artículo 28
inciso 2º del Decreto Ley Nº 2.695; lo que no se hizo, porque, de
acuerdo a la sentencia de primer grado, reproducido por la impugnada,
no fue posible, en atención a que el informe requerido "...no se
pronunció sobre el valor comercial del terreno en cuestión", debido a
que en el informe del Servicio Agrícola y Ganadero, se indicó que la
oficina que mantiene en Rancagua no cuenta con funcionarios con
conocimientos sobre tasaciones en terrenos agrícolas, por lo que no se
pudo pronunciar al respecto. Sin embargo, como de la lectura de la
mencionada norma se advierte que para determinar el valor de los
derechos, a falta de acuerdo de las partes, tratándose de predios
rurales, se debe oír al Servicio Agrícola y Ganadero o a la Corporación
Nacional Forestal, esto es, se trata de un trámite o diligencia de carácter
esencial, que si bien se dispuso no se concretó, se configuró la causal
de nulidad formal prevista por el artículo 768 Nº 9 del Código de
Procedimiento Civil, en relación con el artículo 795 del mismo cuerpo de
normas, que, al designar los trámites o diligencias esenciales en primera
instancia, utiliza la expresión: "En general", lo que permite entender que
la enumeración que contiene, no es taxativa. Luego, fluye con claridad
que los jueces del mérito no decretaron oír a los organismos
correspondientes, lo que significa que se omitió una diligencia o trámite
esencial, lo que justifica la actuación de oficio de la Corte de casación
(considerandos 4º a 6º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 14/11/2018, Rol Nº 19099-


2017,

Cita online: CL/JUR/6403/2018

16. Petición de herencia. I. Emplazamiento, elementos y efecto.


Sentenciadores niegan la existencia del emplazamiento que ligó a
todas las partes del proceso. Legitimación procesal. Anulación de
oficio. II. Concepto de acción de petición de herencia. Legitimación
pasiva. Concurrencia de los requisitos de la acción de petición de
herencia

El emplazamiento está constituido por la notificación de la demanda y


el transcurso del plazo para que el demandado comparezca al tribunal
con el propósito de enfrentar las pretensiones formuladas en su contra,
haciendo valer sus derechos, oponiendo las excepciones y/o defensas
que estime conveniente formular. Lo importante es que con el
emplazamiento de las partes queda constituida la relación procesal intra
proceso, que determina la obligación del tribunal a emitir su
pronunciamiento y de las partes a cumplir la sentencia (considerando 4º
de la anulación de oficio). El emplazamiento está previsto no sólo como
una garantía para el demandado, sino que también para el actor, puesto
que desde su ocurrencia, se traba la relación procesal, quedando
vinculadas las partes a la decisión jurisdiccional, la que debe resolver el
conflicto sometido a su conocimiento en virtud del principio de
inexcusabilidad. En este caso, los sentenciadores han negado la
existencia del emplazamiento que ligó a todas las partes del proceso.
Así, el tribunal resuelve impropiamente una alegación de falta de
legitimación activa, confundiendo la legitimación ad causam con la
legitimación ad processum. Esta última es la potestad legal para acudir
al órgano jurisdiccional ejerciendo la acción iniciando la tramitación de
un juicio o del procedimiento respectivo y es requisito para la
procedencia del juicio; en cambio, la legitimación "ad causam" implica
tener la titularidad del derecho cuestionado en el juicio, siendo ésta un
requisito para obtener un pronunciamiento favorable en relación a la
pretensión ejercida. En efecto, la legitimación procesal es la
consideración especial que tiene la ley, dentro de cada proceso, a las
personas que se hallan en una determinada relación con el objeto del
litigio y, en virtud de la cual, exige, para que la pretensión procesal
pueda ser examinada, en cuanto al fondo, que sean dichas personas
las que figuren como parte en tal proceso. La sola capacidad procesal
no basta para formular una pretensión y para oponerse a ella en un
proceso, sino que es necesaria una condición más precisa y específica
referida al litigio mismo. En tales condiciones, la sentencia recurrida no
se ha pronunciado en forma legal, incurriendo en la causal de casación
del artículo 768 Nº 9 del Código de Procedimiento Civil al haberse
faltado a algún trámite o diligencia declarados esenciales por la ley o a
cualquier otro requisito por cuyo defecto las leyes prevengan
expresamente que hay nulidad, en relación al artículo 795 Nº 1 del
mismo cuerpo normativo que establece que son trámites o diligencias
esenciales el emplazamiento de las partes, el que en la especie ha sido
desconocido. Por lo tanto, actuando de oficio, procede invalidad la
sentencia impugnada (considerandos 7º a 9º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 29/08/2018, Rol


Nº 41512-2017,
Cita online: CL/JUR/4848/2018

17. Cobro de pesos. Nulidad de oficio por omisión de trámite o diligencia


declarados esenciales por la ley. Correspondía al Tribunal de
segunda instancia tener por acompañados los antecedentes ofrecidos
por la demandante bajo el apercibimiento que correspondía aplicar de
acuerdo a la naturaleza de los instrumentos

La controversia en segunda instancia quedó circunscrita a determinar


si la actora había acreditado el monto de los gastos comunes cuyo pago
demandó, cuestión para la cual era de indudable relevancia tener por
acompañados bajo el apercibimiento legal correspondiente los
documentos que ésta aportó en segunda instancia, ya que con ellos la
demandante aseveró haber subsanado la omisión que no permitió
acoger íntegramente su pretensión, o bien le permitían incrementar el
monto cuyo pago ordenó efectuar el pronunciamiento del juez a quo. En
consecuencia, las circunstancias señaladas dejan de manifiesto que el
tribunal de segunda instancia, al proceder de tal modo, ha incurrido en
la especie en el vicio de casación establecido en el artículo 768 Nº 9 del
Código de Procedimiento Civil en relación con el numeral 2º del
artículo 800 del mismo cuerpo legal, atendido lo prevenido en el
artículo 348 del mismo cuerpo normativo, toda vez que debió tener por
acompañados los antecedentes ofrecidos por la demandante bajo el
apercibimiento que correspondía aplicar de acuerdo a la naturaleza de
los instrumentos. La circunstancia procesal antes anotada faculta a esta
Corte para proceder a la anulación de oficio del fallo recurrido, como así
mismo de todas las actuaciones que sucedieron a la presentación del
demandante, por cuanto la trascendencia de la anomalía advertida
autoriza para ello y ha causado un evidente perjuicio a la parte
demandante (considerandos 6º a 8º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 6/07/2018, Rol Nº 41515-2017,

Cita online: CL/JUR/3763/2018

En los negocios a que se refiere el inciso segundo del artículo 766 sólo
podrá fundarse el recurso de casación en la forma en alguna de las causales
indicadas en los números 1º, 2º, 3º, 4º, 6º, 7º y 8º de este artículo y también
en el número 5º cuando se haya omitido en la sentencia la decisión del asunto
controvertido.
No obstante lo dispuesto en este artículo, el tribunal podrá desestimar el
recurso de casación en la forma, si de los antecedentes aparece de
manifiesto que el recurrente no ha sufrido un perjuicio reparable sólo con la
invalidación del fallo o cuando el vicio no ha influido en lo dispositivo del
mismo.

El tribunal podrá limitarse, asimismo, a ordenar al de la causa que complete


la sentencia cuando el vicio en que se funda el recurso sea la falta de
pronunciamiento sobre alguna acción o excepción que se haya hecho valer
oportunamente en el juicio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 170, 191, 764, 765, 766, 769, 772,
773, 774, 776, 783, 799, 806, 807 y 808. Código Orgánico de Tribunales: artículo 194. Código
Tributario: artículos 145, 148. Código del Trabajo: artículo 483.

ARTÍCULO 769

Para que pueda ser admitido el recurso de casación en la forma es


indispensable que el que lo entabla haya reclamado de la falta, ejerciendo
oportunamente y en todos sus grados los recursos establecidos por la ley.

No es necesaria esta reclamación cuando la ley no admite recurso alguno


contra la resolución en que se haya cometido la falta, ni cuando ésta haya
tenido lugar en el pronunciamiento mismo de la sentencia que se trata de
casar, ni cuando dicha falta haya llegado al conocimiento de la parte después
de pronunciada la sentencia.

Es igualmente innecesario para interponer este recurso contra la sentencia


de segunda instancia por las causales cuarta, sexta y séptima del
artículo 768, que se haya reclamado contra la sentencia de primera instancia,
aun cuando hayan afectado también a ésta los vicios que lo motivan.

La reclamación a que se refiere el inciso primero de este artículo deberá


hacerse por la parte o su abogado antes de verse la causa, en el caso del
número 1º del artículo 768.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 158, 163, 164, 187, 198, 200, 593,
776 y 800 Nºs. 1 y 6. Código Tributario: artículo 148.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Indemnización de perjuicios por responsabilidad contractual. Causal


de casación en la forma de ultra petita, inadmisible. Incumplimiento
de los requisitos de admisibilidad del recurso de casación en la forma.
Incumplimiento del requisito de preparación del recurso

De conformidad al artículo 768 Nº 4 del Código de Procedimiento


Civil, el vicio de ultra petita se configuraría por la falta de congruencia
entre lo pedido y lo otorgado, ya que la sentencia impugnada habría
omitido pronunciarse sobre la pretensión de indemnización de perjuicios
contenida en las demandas principal y reconvencional. En la especie,
los antecedentes sobre los cuales se construye el argumento no son
propios de la causal invocada. Cabe recordar que la denominada ultra
petita ataca la falta de adecuación entre las pretensiones formuladas
por las partes y lo dispositivo de la resolución judicial; sin embargo, el
recurrente postula que la sentencia cuestionada habría omitido
pronunciamiento respecto de una de las pretensiones, siendo ese un
reproche formal distinto que no se aviene con esta causal
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 27/06/2019, Rol Nº 2840-2019,

Cita online: CL/JUR/3721/2019

2. Precario. Recurso de casación en la forma que no fue preparado de


conformidad a lo previsto al artículo 769 del Código de Procedimiento
Civil. Impugnación que no cumple con los requisitos que la legislación
prevé para su admisibilidad

Según se advierte de los argumentos expuestos por la recurrente y


dado que la sentencia de alzada se limitó a confirmar, de manera pura
y simple, la de primer grado, debe concluirse que la causal invocada se
sustenta en un vicio que afectó a esta última. Sin embargo, cabe advertir
que la demandada no preparó el recurso de conformidad a lo previsto
en el artículo 769 del Código de Procedimiento Civil, que dispone: "Para
que pueda ser admitido el recurso de casación en la forma es
indispensable que el que lo entabla haya reclamado de la falta,
ejerciendo oportunamente y en todos sus grados los recursos
establecidos por la ley". De este modo, al no haber instado por la
invalidación del juicio una vez notificada de la sentencia de primer
grado, lo que derivó en una decisión confirmatoria que no se pronunció
sobre la existencia de eventuales vicios formales, debe concluirse que
el recurso carece de preparación, por lo que no cumple con los
requisitos que la legislación prevé para su admisibilidad, lo que conduce
a que deba ser desestimado en esta etapa de su tramitación
(considerando 3º de la sentencia de Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 15/05/2019, Rol Nº 4591-


2019,

Cita online: CL/JUR/2758/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 14/02/2019, Rol Nº 25093-


2018,

Cita online: CL/JUR/823/2019

3. Acción de precario. I. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad del recurso de casación en la forma. Incumplimiento del
requisito de preparación del recurso. II. Recurrente de casación en el
fondo debe indicar cómo se vulneraron las normas reguladoras de la
prueba

La causal de casación en la forma del artículo 768 Nº 5 del Código de


Procedimiento Civil, se sustenta en un vicio que afectó a la sentencia
de primer grado; sin embargo, los recurrentes no prepararon el recurso
de conformidad a lo previsto en el artículo 769 del código antes
mencionado. En efecto, una vez dictada la sentencia definitiva, sin la
ponderación probatoria que ahora reclama, la parte interpuso
únicamente recurso de apelación, sin invocar la causal de casación
formal que sólo en esta etapa plantea, impidiendo, en consecuencia, la
corrección de la supuesta infracción. Así las cosas, no habiendo,
interpuesto el recurso pertinente en atención a la vulneración cometida,
debe concluirse que el arbitrio carece de preparación, al ser esa una
condición de proponibilidad de la queja (considerando 3º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 15/05/2019, Rol Nº 25129-


2018,

Cita online: CL/JUR/2684/2019


4. Indemnización de perjuicios por responsabilidad extracontractual. I.
Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad del recurso de
casación en la forma. Recurrente que no preparó el recurso,
ejerciendo oportunamente y en todos sus grados los recursos
establecidos por la ley

Revisados los antecedentes del proceso se desprende que el recurso


—de casación en la forma— no fue preparado en los términos que exige
el artículo 769 del Código de Procedimiento Civil. En efecto, el reproche
del recurrente se dirige tanto contra el fallo de alzada que confirmó el
de primer grado como contra este último, el que adolecería de la misma
anomalía invocada pero que no fue objeto de la impugnación de nulidad
formal que ahora se intenta. Lo anterior deja en evidencia que no se
reclamó por el demandante, oportunamente y en todos sus grados, del
vicio que actualmente alega, razón por la cual el recurso de nulidad
formal no puede prosperar (considerando 3º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 21/03/2019, Rol Nº 28442-2018,

Cita online: CL/JUR/1528/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 21/02/2019, Rol Nº 24830-


2018,

Cita online: CL/JUR/936/2019

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 6/08/2018, Rol Nº 8483-2018,

Cita online: CL/JUR/4167/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 26/07/2018, Rol Nº 8441-


2018,

Cita online: CL/JUR/3933/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 19/07/2018, Rol Nº 8468-


2018,
Cita online: CL/JUR/4124/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 7/06/2018, Rol Nº 7489-2018,

Cita online: CL/JUR/2826/2018

ARTÍCULO 770

El recurso de casación deberá interponerse dentro de los quince días


siguientes a la fecha de notificación de la sentencia contra la cual se recurre,
sin perjuicio de lo establecido en el artículo 791. En caso que se deduzca
recurso de casación de forma y de fondo en contra de una misma resolución,
ambos recursos deberán interponerse simultáneamente y en un mismo
escrito.

El recurso de casación en la forma contra sentencia de primera instancia


deberá interponerse dentro del plazo concedido para deducir el recurso de
apelación, y si también se deduce este último recurso, conjuntamente con él.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 65, 174, 189, 664, 666, 772, 775 y
791. Decreto con Fuerza de Ley Nº 1, 1993, fija texto Ley Orgánica del Consejo de Defensa del
Estado, Min. Hacienda, D.O. 7.08.1993: artículo 50. Código Tributario: artículo 145.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Procedimiento arbitral. Plazo recurrir de casación contra sentencia


definitiva de única instancia es de quince días, contado desde la fecha
de notificación del fallo

Si bien es cierto que por disponerlo el artículo 770 inciso 2º del Código
de Procedimiento Civil, la interposición de un recurso de casación en la
forma en contra de una sentencia de primera instancia debe serlo dentro
del plazo concedido para deducir el de apelación, y si éste también se
interpone deben serlo en forma conjunta, no lo es menos que el tenor
de la propia norma es indicativo que ello será así en la medida que se
trate de una sentencia de primer grado. En cambio, si la resolución a
impugnar no es de primera instancia, sino que es una sentencia de
única o segunda instancia, entonces cobra aplicación la regla contenida
en el inciso 1º de la norma en mención, esto es, que el recurso de
casación deberá interponerse dentro del plazo de quince días, contado
desde la fecha de notificación del fallo respecto del cual se recurre.
Conforme a la norma citada y en concordancia con los artículos 189 del
mismo código y 188 del Código Orgánico de Tribunales, lo que
determina la diferencia del término para alzarse está dado
exclusivamente por la existencia de una doble instancia, es decir, la
posibilidad de revisar lo resuelto por el tribunal a quo a través del recurso
de apelación. Luego, tratándose de una sentencia definitiva de única
instancia —tal como lo reconocen todos los instrumentos que regulan el
procedimiento de esta controversia que consagran la imposibilidad de
apelar del fallo arbitral— la hacía susceptible de impugnación conforme
al plazo de quince días previsto en el artículo 770 inciso 1º y, pese a
que dicho término fue observado por el recurrente de casación, su
recurso fue erróneamente declarado inadmisible por extemporáneo
(considerandos 2º a 4º de la actuación de oficio de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 21/12/2017, Rol Nº 38915-2017,

Cita online: CL/JUR/8137/2017

2. Comodato precario. Plazo de diez días para interponer el recurso de


casación en la forma en contra de la sentencia de primera instancia.
Extemporaneidad del recurso de casación en la forma

El artículo 770 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil, dispone


que: "El recurso de casación en la forma contra sentencia de primera
instancia deberá interponerse dentro del plazo concedido para deducir
el recurso de apelación, y si también se deduce este último recurso,
conjuntamente con él", plazo que, según su artículo 189, es de diez
días. Por lo tanto, no se observa error alguno en la dictación de la
resolución que declaró inadmisible por extemporáneo el recurso de
casación en la forma, interpuesto una vez cumplido el aludido plazo de
diez días, circunstancias por las cuales el arbitrio de casación en el
fondo deducido no podrá prosperar, por adolecer de manifiesta falta de
fundamento (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 12/01/2017, Rol


Nº 99950-2016

Cita online: CL/JUR/119/2017


3. Los recursos de casación en la forma y en el fondo deben ser
interpuestos conjuntamente

El artículo 770 del Código de Procedimiento Civil es claro en cuanto


a que los recursos de casación en la forma y en el fondo deben ser
interpuestos conjuntamente, esto es, a un mismo tiempo. En efecto, la
razón de texto de tal disposición guarda armonía con la naturaleza de
los recursos ya que al suponer vicios que invalidan el fallo, la
subsidiariedad no tiene cabida porque significa que al deducir casación
en la forma sólo para el evento que el de fondo no sea aceptado, el
recurrente valida o refrenda los vicios que luego intenta revivir en el
supuesto que sus alegaciones de fondo no sean aceptadas, lo cual
atenta contra el principio genérico de la nulidad procesal. Por su parte,
el orden lógico en que se deben interponer ambos recursos es primero
el de forma y en segundo término el de fondo, y no a la inversa, toda
vez que de ser así, habiendo la Corte emitido pronunciamiento sobre la
cuestión de derecho a ella sometida, al resolver el primero de los
recursos planteados, no puede, en virtud de haber operado la
preclusión, examinar una causal que se funda en un presunto vicio de
procedimiento que pretende invalidar la propia sentencia. Corrobora
esta interpretación el art ículo 880 del Código de Procedimiento Civil, al
establecer que si contra una sentencia se interponen recursos de
casación en la forma y en el fondo, y se acoge el de forma, se tendrá
como no interpuesto el de fondo, sin regular la situación inversa, lo que
deja claro que para el legislador no resulta posible que ella se dé
(considerando 10º, sentencia Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/11/2006, Rol Nº 5912-2004, Cita online:


CL/JUR/8369/2006

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 20/06/2007, Rol Nº 3130-2006,

Cita online: CL/JUR/5923/2007

— Corte de Apelaciones de Santiago, 13/03/2009, Rol Nº 3587-2008,

Cita online: CL/JUR/8543/2009


4. Los recursos de casación en la forma y en el fondo son recursos de
derecho estricto y persiguen el cumplimiento de objetivos diversos

Los recursos de casación en la forma y en el fondo son recursos de


derecho estricto y persiguen el cumplimiento de objetivos diversos, por
lo que poseen requisitos legales que se encuentran en disposiciones
legales distintas, los que deben cumplirse. Si bien es cierto el
artículo 770 del Código de Procedimiento Civil, contempla la posibilidad
que para el caso que se interpongan ambos recursos de casación, debe
hacerse en forma conjunta, ello no puede en ningún caso significar que
deban constituir un solo recurso y formular al Tribunal sólo una petición,
correspondiendo en tal caso desestimar los recursos por defectos de
formalización (considerando 2º, sentencia Corte Suprema).

Corte Suprema, 30/10/2006, Rol Nº 1435-2005, Cita online:


CL/JUR/3533/2006

ARTÍCULO 771

El recurso debe interponerse por la parte agraviada ante el tribunal que


haya pronunciado la sentencia que se trata de invalidar y para ante aquel a
quien corresponde conocer de él conforme a la ley.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 16, 23, 767, 769 y 776. Código
Tributario: artículo 145.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Declaración de herencia yacente. Revocación de nombramiento de


curador de herencia yacente. Aquel que en principio fue designado
curador de herencia yacente no puede ser considerado tercero ni
agraviado. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad del
recurso de casación en el fondo

El recurrente de casación fue designado curador de la herencia


yacente, por resolución de 21.11.2017, conforme lo dispone el
artículo 1240 del Código Civil, en relación con el artículo 885 del de
Procedimiento Civil, por lo tanto, corresponde determinar si tiene la
calidad de tercero, que es la que invoca, según lo prescribe el
artículo 23 del último código citado, luego, si tiene la de agraviado, en
los términos que exige el artículo 771 del mismo estatuto. Sobre el
particular, el artículo 23 inciso 1º del Código de Procedimiento Civil
señala qué debe entenderse por terceros en juicio, disponiendo que:
"los que, sin ser partes directas en el juicio, tengan interés actual en sus
resultados, podrán en cualquier estado de él intervenir como
coadyuvantes, y tendrán en tal caso los mismos derechos que concede
el artículo 16 a cada una de las partes representadas por un procurador
común, continuando el juicio en el estado en que se encuentre". Pues
bien, el recurrente no puede ser considerado tercero porque su discurso
solo está dirigido a impugnar la resolución que dejó sin efecto su
designación de curador de la herencia yacente, esto es, no refiere a una
materia de fondo que haya sido sometida a la decisión del tribunal,
debido precisamente a que el juicio destinado a resolver el conflicto
jurídico generado por el estado actual de la herencia quedada al
fallecimiento de dicha persona, aún no se ha incoado, por la misma
razón, no puede ser considerado agraviado, porque la decisión que
refuta atañe a una cuestión relativa a su nombramiento como tal, no a
una sustantiva. En tal circunstancia, procede declarar la inadmisibilidad
del recurso de casación deducido (considerando 4º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 4/06/2019, Rol Nº 25114-


2018,

Cita online: CL/JUR/3096/2019

2. Rescisión por lesión enorme. Recurso de casación en el fondo debe


ser interpuesto por la parte agraviada. Competencia del Tribunal que
conoce de la casación sustancial se circunscribe al perjuicio
denunciado por el recurrente. Recurrente que carece de la calidad de
agraviado

En conformidad a lo prescrito en el artículo 771 del Código de


Procedimiento Civil, —el recurso de casación en el fondo— debe ser
interpuesto por la parte agraviada. Así las cosas y en conformidad a
este último requisito, común para todo el sistema recursivo, la sentencia
impugnada debe haber desestimado en todo o en parte las alegaciones
o defensas esgrimidas en el libelo respectivo, incurriendo en infracción
de ley con influencia sustancial en su parte dispositiva, reparable sólo
con su invalidación. De esta manera y como se viene afirmando, el
recurso de casación comparte con aquellos de tipo ordinario varias
exigencias y una de ellas es precisamente el agravio que debe
manifestar y soportar quien lo interpone; requerimiento que no sólo
constituye un imperativo de carácter legal sino que, además, determina
uno de los límites a los que debe ajustarse la respuesta de esta Corte.
En efecto, su competencia se circunscribe doblemente, tanto por el vicio
que sustenta la impugnación como por el perjuicio denunciado por el
recurrente. En esta línea de argumentación, cabe tener presente que el
recurso de apelación deducido, en su oportunidad, contra la sentencia
del grado, por el ahora recurrente de casación, fue declarado
inadmisible por una sala de la Corte de Apelaciones de Chillán, la que,
no obstante ello, conoció de la causa en razón de una apelación
deducida por la contraparte, confirmando el fallo de base. De esta
manera y como consecuencia de la mencionada inadmisibilidad, para
todos los efectos procesales, el recurso de apelación en comento es
como si jamás se hubiera interpuesto y, por lo tanto, este litigante carece
de la calidad de agraviado que lo habilite para deducir el presente
recurso de casación, lo que conduce a declarar su rechazo
(considerandos 3º a 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 7/02/2019, Rol Nº 28557-2018,

Cita online: CL/JUR/724/2019

3. Liquidación forzosa. Recurrente que no tiene calidad de acreedor en


la quiebra. Cumplimiento de requisitos para acoger el sobreseimiento
definitivo. Germen de derecho en que recurrente basa sus
alegaciones no fenece con el sobreseimiento definitivo de la quiebra.
Ausencia del requisito del recurso de casación en el fondo de
existencia de agravio del recurrente

I. Respecto del recurrente, el Máximo Tribunal desestimó sus


pretensiones en orden a verificar condicionalmente sus créditos, por
estimar que los eventuales derechos que demanda en los juicios
acumulados a la quiebra no constituyen una modalidad de las
obligaciones en términos de justificar una verificación condicional, "pues
el reclamante ni siquiera tiene una mera expectativa o un germen de
derecho". Luego, habiéndose pagado la totalidad de los créditos
verificados y al no ostentar el impugnante la calidad de acreedor en la
quiebra, en la especie se reúnen los requisitos previstos por la ley para
acoger el sobreseimiento definitivo, de manera que los juicios ordinarios
en los que el recurrente sustenta sus alegaciones continuarán
tramitándose. En otras palabras, el germen de derecho en que basa sus
alegaciones no fenece con el sobreseimiento definitivo de la quiebra,
pues los juicios continuarán con su prosecución, en los cuales se
mantiene incólume el derecho de dicho litigante a solicitar las medidas
precautorias que establece la ley, más aún si se tiene en consideración
el monto sobrante que a la presente fecha se encuentra en poder de la
fallida (considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

II. El recurrente no reviste el carácter de agraviado, en los términos


que prescribe el artículo 771 del Código de Procedimiento Civil, pues
para ello no basta que el fallo contenga decisiones adversas, sino que
es preciso que éstas lo sean para quien postula la casación, generando
en él un interés actual comprometido, y es evidente que éste se
encuentra ausente. En efecto, los juicios ordinarios a los que alude
continuarán tramitándose en sus respectivos tribunales luego de la
desacumulación de los mismos y dicha parte mantiene a salvo su
derecho a solicitar las medidas precautorias que estime pertinente para
salvaguardar el resultado del juicio, más aún si se tiene presente el
remanente informado por el síndico al dar cuenta final de su
administración (considerando 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 16/01/2019, Rol Nº 15134-2018,

Cita online: CL/JUR/235/2019

4. Cobro de pagaré. Excepción de falta de alguno de los requisitos para


que el título tenga fuerza ejecutiva, acogida. Ausencia del requisito
del recurso de casación en la forma de existencia de agravio del
recurrente

La sentencia de primera instancia, al igual que el fallo de alzada,


sanciona que los mandatarios, al suscribir el pagaré en que el
reclamante se constituyó como aval y deudor solidario, han
extralimitado sus poderes, con lo que necesariamente ha de concluirse
que el título carece de los requisitos que le otorgan fuerza ejecutiva, lo
que imposibilita seguir la ejecución en contra del demandado. En tales
condiciones, el recurrente no reviste el carácter de agraviado en los
términos que prescribe el artículo 771 del Código de Procedimiento
Civil, pues no basta que la sentencia contenga una decisión
desfavorable a quien postula el recurso de casación. Es preciso,
además, que el dictamen le cause agravio por existir un interés actual
comprometido, y ese interés se encuentra ausente respecto del
recurrente, pues la acción dirigida en su contra fue rechazada en todas
sus partes como consecuencia de haberse acogido la excepción falta
de requisitos del título para que tenga fuerza ejecutiva opuesta a efectos
de enervar la acción (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 25/10/2018, Rol Nº 14975-2018,

Cita online: CL/JUR/6085/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 16/10/2018, Rol Nº 13192-


2018,

Cita online: CL/JUR/5854/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 26/06/2018, Rol Nº 4299-


2018,

Cita online: CL/JUR/3150/2018

5. Liquidación voluntaria. Recurso de casación es de derecho estricto.


Ausencia del requisito del recurso de casación en el fondo de
existencia de agravio del recurrente El recurso de casación, en
general, es de derecho estricto, naturaleza que se refrenda si se
tienen en cuenta las exigencias que respecto de su interposición se
contemplan en el artículo 772 del Código de Procedimiento Civil.
Luego, del tenor de lo que disponen los artículos 764 y siguientes del
mismo cuerpo legal, se constata además que, de conformidad con lo
que prescribe el artículo 771, debe ser interpuesto por la parte
agraviada, lo que determina necesariamente que la sentencia
impugnada debe haber causado al recurrente un perjuicio solo
reparable con la invalidación del fallo, influyendo el vicio de que se
trata sustancialmente en lo dispositivo de la sentencia
(considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 9/08/2018, Rol Nº 5143-2018,


Cita online: CL/JUR/4414/2018

6. Cobro de pesos. I. Agravio. Recurrente de casación en la forma que


no ha sufrido agravio. Exigencia del agravio no sólo emana de la
norma legal

Conforme con lo dispuesto por el artículo 771 del Código de


Procedimiento Civil el recurso de casación debe ser interpuesto por la
parte agraviada, lo que importa que la sentencia impugnada debe haber
causado al recurrente un perjuicio sólo reparable con la invalidación del
fallo. La exigencia del agravio no sólo emana de la norma legal citada
sino que también de la circunstancia de participar la casación de las
características de los recursos en general. En efecto, es presupuesto
de todo medio de impugnación la existencia de agravio, que el que lo
interpone sostiene estar soportando. Y siendo ese requerimiento una
imposición legal, su cumplimiento constituye también un deber para esta
Corte de Casación al impartir su respuesta al recurso. Tal presupuesto
no se cumple en la especie particularmente en lo concerniente al motivo
de casación en la forma por el cual se le imputa al fallo impugnado falta
de consideraciones de hecho y de derecho, puesto que la decisión de
alzada vino a mejorar la situación de la demandada al rebajar la suma
dineraria a la que quedó condenada, de modo que la pretendida
ausencia de fundamentación no lo habría perjudicado, de modo que el
recurso de casación en la forma debe ser desestimado
(considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 6/07/2018, Rol Nº 40835-2017,

Cita online: CL/JUR/4409/2018

7. Cumplimiento ejecutivo de obligación de hacer. Falta de legitimación


activa. Recurrente de casación que no tiene carácter de agraviado.
Improcedencia de modificar resolución que acoge excepción de cosa
juzgada si ésta no fue apelada. Resolución que hace lugar a la
excepción de cosa juzgada queda firme y ejecutoriada

La pretensión de nulidad a través del recurso de casación requiere


siempre una actividad jurisdiccional previa que culmine en la dictación
de una sentencia que haga procedente el recurso y que aparezca
pronunciada con alguno de los vicios descritos en el artículo 768 del
Código de Procedimiento Civil o con infracción de leyes que tengan el
carácter de decisorias para la controversia jurídica planteada.
Asimismo, con arreglo a lo prevenido en el artículo 771 del Código de
Procedimiento Civil, otro de los presupuestos del recurso de casación
es que éste debe interponerse por la parte agraviada con la decisión
que se intenta eliminar. Entonces, aún en el evento que los jueces del
fondo hubieren incurrido en un error al dar lugar a la excepción de cosa
juzgada, la decisión de rechazar la demanda ejecutiva interpuesta en
estos autos no podría ser modificada en esta sede de casación, ya que
ésta no fue impugnada por el ejecutante al momento de deducir el
recurso de apelación en contra del fallo de primer grado, de lo que se
concluye que el recurrente no reviste el carácter de agraviado en los
términos que prescribe el artículo 771 del Código de Procedimiento
Civil, pues para ello no basta que el fallo contenga decisiones adversas,
sino que es preciso que éstas lo sean para quien postula la casación,
generando en él un interés actual comprometido, y es evidente que éste
se encuentra ausente tratándose de la parte demandante respecto de
quien viene rechazada la demanda, dado que una de las excepciones
fue acogida por el tribunal de primer grado y ello no fue objeto de
impugnación, quedando entonces firme y ejecutoriada la decisión de dar
lugar a la excepción de cosa juzgada, lo que impide acoger la acción
ejecutiva interpuesta por el recurrente (considerandos 6º y 7º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 13/03/2018, Rol Nº 41507-2017,

Cita documento: CL/JUR/1224/2018

ARTÍCULO 772

El escrito en que se deduzca el recurso de casación en el fondo deberá:

1. Expresar en qué consiste el o los errores de derecho de que adolece la


sentencia recurrida, y

2. Señalar de qué modo ese o esos errores de derecho influyen


sustancialmente en lo dispositivo del fallo.

Si el recurso es en la forma, el escrito mencionará expresamente el vicio o


defecto en que se funda y la ley que concede el recurso por la causal que se
invoca.
En uno y otro caso, el recurso deberá ser patrocinado por abogado
habilitado, que no sea procurador del número.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 764, 767, 768, 770, 774, 776, 789,
795 y 796. Código Orgánico de Tribunales: artículo 398. Ley Nº 18.120, sobre Comparecencia
en Juicio: artículo 1º. Decreto con Fuerza de Ley Nº 1, 1993, fija texto Ley Orgánica del Consejo
de Defensa del Estado, Min. Hacienda, D.O. 7.08.1993: artículo 43. Código Tributario:
artículo 148.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Nulidad de contrato de mandato y resciliación de compraventa. I.


Recurrente de casación en el fondo que no denuncia como
transgredidas las normas decisorias de la litis. Recurrente que acepta
la decisión en cuanto al fondo del asunto.

El recurso de casación en el fondo carece de los requerimientos


legales exigibles para su interposición. En efecto, versando la contienda
sobre una acción de nulidad absoluta de un mandato y de un contrato
de resciliación de compraventa, resultaba indispensable que el
impugnante denunciara como infringidos aquellos preceptos que, al ser
aplicados por los jueces, han servido para resolver la cuestión
controvertida. En este caso, las normas que regulan la nulidad en los
artículos 1681 y siguientes del Código Civil, que fueron precisamente
las invocadas en la sentencia censurada para dar sustento a la decisión
de acoger la demanda. Al no formularse tal denuncia, se genera un
vacío que la Corte de casación no puede subsanar dado el carácter de
derecho estricto que reviste el recurso intentado, siendo ineludible
concluir que los errores de derecho que se denuncian no tienen
influencia sustancial en lo dispositivo del fallo, pues la normativa
conforme a la cual se resolvió el caso concreto debe tenerse como
correctamente aplicada (considerando 15º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 27/02/2020, Rol Nº 12498-2019,

Cita online: CL/JUR/42083/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 27/02/2020, Rol Nº 12498-


2019,
Cita online: CL/JUR/42083/2020

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 6/12/2018, Rol Nº 23199-


2018,

Cita online: CL/JUR/7212/2018

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 10/09/2018, Rol Nº 20373-


2018,

Cita online: CL/JUR/5284/2018

2. Cobro de pagaré. Recurrente de casación en el fondo que no


denuncia como transgredidas las normas decisorias de la litis

El recurso de casación no ha sido encaminado, como debió serlo,


abarcando el basamento jurídico que en propiedad e ineludiblemente
resultaba ser pertinente y de rigor. Esto es así puesto que la preceptiva
legal en que se asila la estructura normativa sobre la cual viene
construido el alegato de casación de fondo, no es bastante para abordar
el examen de la resolución de la controversia de la forma en que se hizo
por los juzgadores, al no venir denunciada además la conculcación de
las normas decisorias de la litis fundamentales para la decisión de la
controversia, como lo son los artículos 2514 y siguientes del Código
Civil y 464 Nº 17 del Código de Procedimiento Civil, disposiciones que
reglan el estatuto de la única excepción opuesta por el ejecutado, de
modo que para revisar y modificar eventualmente lo que han resuelto
los sentenciadores, y decretar la absolución requerida, debió también
acusarse error de derecho a su respecto (considerando 5º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 20/02/2020, Rol Nº 5576-2019,

Cita online: CL/JUR/11067/2020

3. Cobro ejecutivo de factura. I. Improcedencia de formular peticiones


eventuales o alternativas en el recurso de casación en el fondo. II.
Recurrente de casación en el fondo que no denuncia como
transgredidas las normas decisorias de la litis. Recurrente que acepta
la decisión en cuanto al fondo del asunto
De la sola lectura del recurso de casación en el fondo interpuesto, se
advierte que contiene planteamientos alternativos o subsidiarios, esto
es, llamados a regir sólo para el caso de que uno u otro no resulte
acogido, desde que por una parte pide que, en definitiva, se revoque el
fallo de primer grado y se acojan las excepciones opuestas, y por otro
lado, aceptando la decisión, solicita que se confirme la sentencia
apelada eximiéndolo de las costas impuestas. La existencia de tales
argumentaciones, que no se concilian entre sí, importa dotar al recurso
de que se trata de un carácter dubitativo que conspira contra su
naturaleza de derecho estricto del mismo, como quiera que su finalidad
no es otra que la de fijar el recto sentido y alcance de las normas legales,
lo que impide admitir reflexiones incompatibles y, menos aún, peticiones
claramente alternativas o subsidiarias que dejan al recurso desprovisto
de la certeza y asertividad necesarias, lo que lo torna improcedente
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 14/02/2020, Rol Nº 11668-2019,

Cita online: CL/JUR/11009/2020

4. Infracción a la Ley Nº 19.496. Recurrente de casación en el fondo que


no denuncia como transgredidas las normas decisorias de la litis.
Recurrente que acepta la decisión en cuanto al fondo del asunto

I. El recurso de casación está desprovisto de sustento al prescindir


absolutamente de la preceptiva que los jueces del fondo han invocado
para dar apoyo jurídico a su determinación, esto es, de los artículos 51
y siguientes de la Ley de Protección al Consumidor que estatuyen el
procedimiento de protección del interés colectivo o difuso de los
consumidores, 2º letra f) de la citada ley, como también de los
artículos 134, 171 y 174 del D.F.L. Nº 1 del Ministerio de Salud del año
2005, disposiciones que resultan ser las normas decisorias de
la litis (considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

II. El no contener el recurso la denuncia de las normas cruciales en la


decisión del conflicto significa que implícitamente se reconoce y acepta
su adecuada y correcta aplicación en el fallo. En tales condiciones, y
aun cuando la Corte concordara con el error de derecho que el libelo
acusa, ello carecería de influencia en lo resolutivo, toda vez que las
normas que sustentan la decisión sobre la acción colectiva en el interés
difuso de los consumidores, regulada en el artículo 2º letra f) cuyo
procedimiento se encuentra establecido en los artículos 51 y siguientes
de la Ley de Protección al Consumidor —al que alude el impugnante—
, habrían sido bien interpretadas y aplicadas (considerando 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 3/02/2020, Rol Nº 17532-2019,

Cita online: CL/JUR/9475/2020

5. Cobro de honorarios. Órgano jurisdiccional no fue autorizado


manifiestamente para fijar el monto de los honorarios cobrados.
Improcedencia de recurso de casación invocando infracción de
normas que autorizan a la judicatura del grado a regular los honorarios
al carecer la demanda de un correlato expreso con dicha facultad

El demandante en su libelo inicial se limitó a solicitar la condena de


pago de una determinada suma de dinero, sin considerar las
alternativas que el artículo 2117 del Código Civil contempla, incluso, es
más, citó como fundamento de su demanda la normativa relativa al
contrato de arrendamiento de servicios, específicamente los
artículos 2006 y 1997 del Código Civil, que contemplan una fórmula de
fijación de honorarios diversa a la propuesta por el recurso. En efecto,
el último precepto citado señala que a falta de acuerdo expreso de las
partes sobre el precio del arriendo, se presumirá que se pactó "el que
ordinariamente se paga", y en defecto de dichos antecedentes, "el que
se estimare equitativo a juicio de peritos", medio probatorio que no fue
rendido en la instancia. De esta manera, el recurso no puede prosperar,
por cuanto no obstante invocar la infracción de normas que autorizan a
la judicatura del grado a regular los honorarios, su demanda carece de
un correlato expreso con dicha facultad, no sólo por no solicitarla
explícitamente, sino también por no otorgar los parámetros para dicha
fijación, sin perjuicio, además, de fundar su pretensión en una norma
legal que excluye la actuación del tribunal en sentido indicado. De este
modo, al no autorizarse manifiestamente al órgano jurisdiccional para
fijar el monto señalado, y habiéndose acreditado que no se probó la
existencia de acuerdo entre las partes en la suma o fórmula para
determinarla, el vicio denunciado, incluso en el evento de estimarse
concurrente, no puede influir en lo dispositivo del fallo, desde que la
Corte se encuentra impedida de realizar la fijación de honorarios
pretendida (considerandos 7º y 8º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 27/01/2020, Rol Nº 12566-
2018,

Cita online: CL/JUR/8693/2020

6. Nulidad de derecho público. Recurrente de casación en el fondo


deber señalar en qué consisten los errores de derecho de que adolece
la sentencia y de qué modo influyen sustancialmente en lo dispositivo
del fallo. Recurrente de casación en el fondo que no denuncia como
transgredidas las normas decisorias de la litis

De conformidad al artículo 767 del Código de Procedimiento Civil, el


recurso de casación en el fondo procede en contra de las resoluciones
que señala, siempre que se hayan pronunciado con infracción de ley y
con influencia substancial en su parte dispositiva. Conforme a lo
establecido en el artículo 772 de dicho texto legal, el escrito respectivo
debe expresar en qué consiste él o los errores de derecho que denuncia
y de qué modo influyen sustancialmente en lo dispositivo del fallo. En
este caso, el recurrente pretende se invalide la sentencia impugnada,
alegando la infracción a los artículos 83 Código de Procedimiento Civil,
83 Nº 4 Código Orgánico de Tribunales y 1º inciso 4º, 5º inciso 2º, 7 º,
19 Nº 3 inciso 1º y 6º y 26 de la Constitución, las que según su entender
contemplan el estatuto jurídico de la "responsabilidad de la
Administración", para luego señalar que en la especie son inaplicables
las normas de la prescripción contenidas en el Código Civil y respecto
de las cuales solicitó se declare su "inaplicabilidad". Sin embargo, las
normas que el recurrente expresamente alude como infringidas, no
tienen en la especie y conforme al modo que se dedujo la demanda, el
carácter de decisoria litis, debiendo entenderse por tales aquellas con
arreglo a las cuales se resuelve el litigio, porque son las únicas que
pueden influir de un modo sustancial en lo dispositivo de la sentencia
(considerandos 7º y 8º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 24/01/2020, Rol


Nº 16328-2019,

Cita online: CL/JUR/8127/2020

7. Indemnización de perjuicios por responsabilidad extracontractual.


Recurrente de casación en el fondo que no denuncia como
transgredidas las normas decisorias de la litis
El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el
recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, esto es, que el escrito en que se interpone "exprese", es
decir, explicite en qué consiste y cómo se ha producido el o los errores,
siempre que estos sean "de derecho". En tal sentido esta Corte ha
indicado que las normas infringidas en el fallo, para que pueda
prosperar un recurso de casación en el fondo, han de ser tanto las que
el fallador invocó en su sentencia para resolver la cuestión
controvertida, como aquéllas que dejó de aplicar, estimadas todas como
"normas decisoria litis", puesto que en caso contrario, esta Corte no
podría dictar la correspondiente sentencia de reemplazo, toda vez que
al no acusarse su vulneración habría que concluir que se hizo adecuada
interpretación y aplicación de las mismas. Como ha podido advertirse,
en la especie la parte recurrente ha centrado su crítica en la
circunstancia de haberse vulnerado en el fallo que impugna los
artículos 1698 y 1702 del Código Civil y artículo 346 del Código de
Procedimiento Civil. Empero, versando la contienda sobre la existencia
de un cuasidelito civil, la exigencia consignada en los motivos
precedentes obligaba al impugnante a explicar los contenidos jurídicos
del instituto que se hizo valer en el juicio, esto es, la acción
indemnizatoria extracontractual regulada en los artículos 2314 y
siguientes del Código Civil y a acusar la infracción, a lo menos, de esas
normas decisorias, desarrollando el modo en que la infracción ha
influido en lo resolutivo del fallo; la mera enunciación o referencia a esa
disposición aleja totalmente la comprensión de conflicto jurídico,
tornando los basamentos del recurso únicamente en alegaciones que
tienden a rebatir el valor que los jueces del fondo han otorgado a los
medios probatorios acompañados (considerandos 5º y 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 9/01/2020, Rol Nº 24153-2019,

Cita online: CL/JUR/9438/2020

Fallos en este sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 9/01/2020, Rol Nº 24153-


2019,

Cita online: CL/JUR/9438/2020


— Corte Suprema Segunda Sala (Civil), 23/05/2019, Rol Nº 6882-
2019,

Cita online: CL/JUR/2832/2019

— Corte Suprema Segunda Sala (Civil), 26/03/2019, Rol Nº 29798-


2018,

Cita online: CL/JUR/1825/2019

— Corte Suprema Segunda Sala (Civil), 14/11/2018, Rol Nº 17092-


2018,

Cita online: CL/JUR/6392/2018

— Corte Suprema Segunda Sala (Civil), 25/07/2018, Rol Nº 12220-


2018,

Cita online: CL/JUR/4062/2018

— Corte Suprema Segunda Sala (Civil), 19/07/2018, Rol Nº 8699-


2018,

Cita online: CL/JUR/3781/2018

— Corte Suprema Segunda Sala (Civil), 10/07/2018, Rol Nº 11979-


2018,

Cita online: CL/JUR/3737/2018

— Corte Suprema Segunda Sala (Civil), 28/03/2018, Rol Nº 2603-


2018,

Cita online: CL/JUR/1493/2018

8. Cobro de pesos. I. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad


del recurso de casación en el fondo. Recurrente de casación en el
fondo que no denuncia como transgredidas las normas decisorias de
la litis

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, como es que el escrito en que se interpone "exprese", es
decir, explicite en qué consiste —cómo se ha producido— el o los
errores, siempre que estos sean "de derecho". Versando la contienda
sobre una acción de cobro de pesos a la que el demandado opuso como
defensa el pago de la obligación, estaba obligado el recurrente a
denunciar como infringidos aquellos preceptos que, al ser aplicados,
sirvieron para resolver la cuestión controvertida. En este caso, los
artículos 1568 y siguientes del Código Civil, que regulan el pago. Tales
inobservancias son determinantes y representan un impedimento para
que el recurso de derecho estricto impetrado pueda tener éxito puesto
que de acogerse, la Corte de casación tendría que aplicar normas que
no han sido invocadas (considerandos 3º y 5º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 19/08/2019, Rol Nº 6305-2019,

Cita online: CL/JUR/4650/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 27/06/2019, Rol Nº 2303-


2019,

Cita online: CL/JUR/5779/2019

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 27/06/2019, Rol Nº 2481-


2019,

Cita online: CL/JUR/3725/2019

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 27/06/2019, Rol Nº 2482-


2019,

Cita online: CL/JUR/3724/2019

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 27/06/2019, Rol Nº 2490-


2019,

Cita online: CL/JUR/5778/2019


— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 27/06/2019, Rol Nº 2629-
2019,

Cita online: CL/JUR/3723/2019

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 30/10/2018, Rol Nº 19062-


2018,

Cita online: CL/JUR/6150/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 23/10/2018, Rol Nº 19271-


2018

Cita online: CL/JUR/6006/2018

9. Indemnización de perjuicios por falta de servicio. Incumplimiento de


los requisitos de admisibilidad del recurso de casación en el fondo.
Recurso de derecho estricto. Recurrente que no señala
concretamente cómo es que cada una de las normas denunciadas fue
transgredida

En la especie, de la lectura del arbitrio se advierte que, en lo que dice


relación con la infracción de ley denunciada, el recurrente se limitó a
transcribir las disposiciones legales y expresar, que no se valoró el
protocolo médico que acompañó en segunda instancia del cual, a su
juicio, se acredita la falta de servicio que alegó. Sin embargo, lo cierto
es que el libelo no señala concretamente cómo es que cada una de las
normas que cita fue transgredida, careciendo de razonamientos
concretos y precisos dirigidos a demostrar los errores de derecho en
que habrían incurrido los sentenciadores, olvidando el carácter estricto
del recurso de casación cuyas exigencias se disponen en el artículo 772
del Código de Procedimiento Civil, que debe entenderse en armonía
con lo previsto en los artículos 764 y 767 del mismo Código. Análisis
que en el caso concreto no se puede realizar, por cuanto ello importaría
dejar a la discrecionalidad de esta Corte la determinación del error de
derecho en que pudiera incurrir la sentencia, cuestión que atañe a un
asunto que la ley ha impuesto a la parte agraviada. Atento a lo razonado
precedentemente, la nulidad sustancial intentada no se encuentra en
condiciones de ser acogida a tramitación por no cumplir con los
requisitos previstos en el artículo 772 del Código de Procedimiento Civil
(considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 11/06/2019, Rol
Nº 11523-2019,

Cita online: CL/JUR/5275/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 29/05/2019, Rol


Nº 11437-2019,

Cita online: CL/JUR/3188/2019

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 28/05/2019, Rol


Nº 6313-2019,

Cita online: CL/JUR/2932/2019

10. Restitución de inmueble arrendado por expiración del tiempo


estipulado. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad del
recurso de casación en el fondo. Recurrente que no señala
transgresión a las normas reguladoras de la prueba

De acuerdo a lo dispuesto en el artículo 767 del Código de


Procedimiento Civil, el recurso de casación en el fondo procede contra
las resoluciones que señala, siempre que se hayan pronunciado con
infracción de ley que influya substancialmente en su parte dispositiva.
Conforme a lo establecido en el artículo 772 de dicho código, el escrito
respectivo debe expresar en qué consiste el o los errores de derecho
de que adolece la sentencia recurrida y de qué modo ese o esos errores
de derecho han influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo. De la
sola lectura del arbitrio intentado, se desprende que no cumple, en
modo alguno, los requisitos previamente expresados. En efecto, siendo
un recurso de invalidación sustantiva, incorpora una causal de casación
en la forma que, por un lado, no desarrolla y que, en todo caso, es
improcedente en un pleito regulado por una ley especial, al no
reclamarse la omisión de la decisión del asunto controvertido, tal como
surge de la lectura del inciso 2º del artículo 768 del Código de
Procedimiento Civil. Por su parte, en lo que atañe a los argumentos de
fondo, resulta que se hace alusión a la prueba de absolución de
posiciones y a que no está acreditado que adeuda rentas de
arrendamiento, dirigiéndose contra los hechos de la causa, sin invocar
la transgresión de las normas reguladoras de la prueba, esto es, sin
cuestionar la distribución de la carga probatoria, la aceptación de un
medio de prueba improcedente o el rechazo de uno permitido, o bien la
valoración de prueba contraria a una regla imperativa sobre atribución
de mérito probatorio y sin siquiera citar precepto alguno de esas
características, de lo que surge, más bien, como la mera controversia
respecto de las conclusiones en materia fáctica alcanzada por los
jueces del grado, disputa que no procede en esta clase de arbitrios, de
derecho estricto (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 7/05/2019, Rol Nº 3892-2019,

Cita online: CL/JUR/2583/2019

11. Cobro de honorarios. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad del recurso de casación en el fondo. Improcedencia de
formular alegaciones alternativas o subsidiarias en el recurso de
casación en el fondo. Recurrente de casación en el fondo que no
denuncia como transgredidas las normas decisorias de la litis

El recurso de casación en el fondo comienza planteando asuntos


procesales, en concreto, los límites de las pretensiones que se pueden
conocer mediante la acción del artículo 697 del Código de
Procedimiento Civil y los casos que, según su parecer, necesariamente
deben ser tramitados bajo las reglas del procedimiento sumario. Se
entiende por el recurrente que quien impetró la acción por la vía
propuesta no tiene legitimación para actuar y que, por la causa de pedir,
debió usar otro cauce jurídico. Los otros temas levantados por el arbitrio
se refieren a los asentamientos fácticos del fallo, entrando al fondo del
asunto, aceptando la litis como ha sido trabada. De esta descripción
surge, en primer término, que hay dos tesis planteadas por la parte
demandada y que son incompatibles. En efecto, un arbitrio de derecho
estricto, como el de estos autos, no admite pretensiones subsidiarias o
alternativas; no obstante, en el caso de estos antecedentes se solicita
la declaración de improcedencia de la ritualidad escogida para conocer
y resolver el asunto, pero también se busca que se determine que la
intención de las partes al suscribir el convenio a honorarios no abarcaba
la litigación de un juicio como el de la especie, de demasía. El segundo
argumento acepta aquello que el primero refuta, planteamiento que no
es admisible. En segundo término, se advierte la ausencia del reclamo
de vulneración de las normas decisorio litis, debiendo entenderse por
tales aquellas con arreglo a las cuales debe resolverse el litigio y que
son las únicas que pueden influir de un modo sustancial en lo dispositivo
de la sentencia; en el caso sub lite, si bien se citó el artículo 1560 del
Código Civil, relativo a la interpretación de los contratos, no se explica
el error de derecho vinculado con esa disposición ni cómo ha influido
sustancialmente en lo dispositivo del fallo, siendo claramente
insuficiente el arbitrio para los fines deseados por el recurrente. Las
deficiencias advertidas son de una entidad tal que llevan a concluir que
el arbitrio no satisface las condiciones establecidas en el artículo 772
del Código de Procedimiento Civil para su admisibilidad
(considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 22/04/2019, Rol Nº 3588-


2019,

Cita online: CL/JUR/2152/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 13/12/2018, Rol Nº 22086-


2018,

Cita online: CL/JUR/6922/2018

12. Indemnización de perjuicios por responsabilidad contractual.


Recurso de casación en el fondo es de derecho estricto. Casación
sustancial no puede prosperar si recurrente omite denunciar
infracción de las normas decisorias de la litis

La omisión —del recurrente al no señalar como infringidas las normas


sobre responsabilidad contractual—, es decir, no contener el recurso la
denuncia de las normas cruciales en la decisión del conflicto significa
que implícitamente se reconoce y acepta su adecuada y correcta
aplicación en el fallo. En efecto, como se aprecia de lo dicho, la
sentencia atacada determina y asienta la responsabilidad del
demandado en razón de haber incumplido con sus obligaciones
emanadas de un contrato de prestación de servicios médicos
provocando daño al actor, y sobre esa base se acogió la acción incoada.
En tales condiciones, y aun cuando esta Corte concordara con los
yerros que el libelo acusa, ello carecería de influencia en lo decisorio
toda vez que las normas que sustentan la responsabilidad contractual
han sido bien aplicadas. Cabe además reiterar que dado el carácter
extraordinario de la impugnación aquí pendiente, su interposición se
encuentra sujeta a formalidades, entre las cuales destaca la necesidad
de expresar en el libelo que la conduce en qué consiste el o los errores
de derecho de que adolecería la sentencia recurrida y señalar de qué
modo influyeron substancialmente en lo decidido. Es así que aunque
este tribunal de casación atienda a los propósitos de desformalización
que trasuntan las modificaciones que al artículo 772 del Código
Procesal Civil introdujo la Ley Nº 19.374, ello ha de tener un límite, si se
tiene en cuenta que la renovada oración del artículo 772 en el sentido
que debe expresarse "en qué consiste el error o los errores de derecho
de que adolece la sentencia recurrida" debe ser leída en el contexto del
artículo 767, que establece esta excepcional vía de impugnación
respecto de las resoluciones pronunciadas "con infracción de ley",
cuando esta última ha "influido sustancialmente en lo dispositivo de la
sentencia". Lo recién indicado obligaba al recurrente a indicar la ley que
estimaba vulnerada y que, en todo evento, habría tenido influencia
substancial en lo resolutivo (considerandos 9º y 10º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 1/04/2019, Rol Nº 2447-2018,

Cita online: CL/JUR/2088/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 29/01/2019, Rol Nº 45026-


2017

13. Factura. Requisito de admisibilidad de la casación en el fondo.


Escrito del recurso que no expresa cómo se han producido los errores
de derecho. Impugnación de derecho estricto

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, esto es, que el escrito en que se interpone "exprese", es
decir, explicite en qué consiste —y/o cómo se ha producido— el o los
errores, siempre que estos sean de derecho. La exigencia consignada
en el motivo anterior obligaba al impugnante a explicar los contenidos
jurídicos en los que se fundaba la excepción opuesta. Es del caso que
la contienda versaba sobre el cobro de obligaciones contenidas en
facturas y que se desestimó la excepción del Nº 7 del art ículo 464
del Código de Procedimiento Civil por haber determinado los jueces que
las facturas materia de autos habían sido irrevocablemente aceptadas,
añadiendo que era de cargo del recurrente el entregar recibo de la
prestación de los servicios, de modo que su omisión no puede truncar
la ejecución, teniendo en consideración a este respecto lo dispuesto por
los art ículo s 3º y 5º de la Ley Nº 19.983. Tal razonamiento decisorio
hacía indispensable denunciar infraccionado el art ículo 3º recién
citado, cuyo contenido sirvió de sustento a la sentencia atacada, lo que
no aconteció. La anotada omisión de acusar el quebrantamiento de la
norma decisoria citada lleva a concluir que la misma ha sido bien
aplicada, no bastando para entender superada la falta con la alusión
genérica a la Ley que contempla ese texto y/o con su mención a
propósito de la transcripción de determinados fundamentos de la
sentencia recurrida, ya que con ello no se explicita la forma en que se
produce la transgresión. La situación producida y recién descrita,
genera un vacío que esta Corte no puede subsanar dado el carácter de
derecho estricto que reviste el recurso de nulidad intentado
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 21/03/2019, Rol Nº 24735-2018,

Cita online: CL/JUR/3484/2019

14. Cobro de pesos. Recurso de casación en el fondo es de derecho


estricto. Recurrente que no denuncia como transgredidas las normas
decisorias de la litis. Tribunal de Casación no puede modificar los
hechos establecidos por los jueces del fondo si no hay vulneración de
las leyes reguladoras de la prueba

El artículo 772 del Código de Procedimiento Civil obligaba al


recurrente a indicar la ley que denunciaba como vulnerada y que, en
todo evento, hubiere tenido influencia sustancial en lo resolutivo, lo que
la doctrina denomina como ley decisoria litis. Mas, del tenor del recurso
de casación en estudio, se puede comprobar que la demandante no
hace valer expresamente como error de derecho la infracción de los
artículos 1º de la Ley Nº 18.010 y 2196 del Código Civil, disposiciones
de las que aparece que tanto en el mutuo de cosas fungibles, regido
únicamente por el Código Civil, como en el mutuo de dinero, regulado
especialmente en la Ley Nº 18.010, es necesario acreditar la entrega
del dinero —o la obligación de entregar, en su caso— como la época o
fecha fijada para la restitución, siendo, por tanto, necesario que conste
de alguna manera que el mutuario se obligue —correlativamente— a
devolver lo que recibió en préstamo. Tales preceptos regulan el contrato
cuyo incumplimiento se aduce y, no obstante, el recurrente no los estima
vulnerados, insistiendo, sin embargo, en que se debe modificar el fallo
y declarar la procedencia de su demanda y la existencia del mutuo que
dice haber celebrado con la recurrida, de lo que se sigue que, a la
postre, aun de haberse quebrantado las disposiciones que se estiman
vulneradas en el recurso, no existiría influencia en lo dispositivo. Sobre
esto, también es oportuno recordar que esta Corte ha dicho que, para
que pueda prosperar un recurso de casación en el fondo, las normas
infringidas en el fallo han de ser tanto las que el fallador invocó en su
sentencia para resolver la cuestión controvertida, como aquellas
normas decisoria litis que dejó de aplicar, puesto que en caso contrario
esta Corte no podría dictar sentencia de reemplazo, dado el hecho que
se trata de un recurso de derecho estricto (considerando 5º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 20/03/2019, Rol Nº 3001-2018,

Cita online: CL/JUR/1577/2019

15. Declaración de susceptibilidad de adopción. Improcedencia del


recurso de casación en la forma respecto de laudos definitivos
emitidos en tribunal de alzada. Instancias de fondo determinan
hechos de la causa. Familiares que se encuentran inhabilitados para
ejercer cuidado personal del menor

Una interpretación armónica de la normativa transcrita (artículos 772


inciso 2º y 776 inciso 1º del CPC y artículo 67 Nº 6 de la Ley Nº 19.968),
junto a los principios que informan el procedimiento de familia conduce
a inferir que la letra a) del literal sexto del artículo 67 de la ley Nº 19.968
suprime la procedencia del recurso de casación en la forma respecto de
los laudos definitivos emitidos en la alzada. Ello puesto que el inciso
primero de esta disposición cuando fija el marco reglado de los recursos
procesales en el procedimiento de familia, si bien acepta aquellos
medios de impugnación contemplados en el Código de Procedimiento
Civil, excluye los recursos incompatibles con las máximas formativas
contenidas en la mencionada ley y sin perjuicio de las modificaciones
que, con posterioridad, la misma preceptiva introduce (considerando 3º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 19/03/2019, Rol Nº 20334-


2018,

Cita online: CL/JUR/1442/2019

16. Cobro de pagaré. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad


del recurso de casación en el fondo. Recurrente de casación en el
fondo que no denuncia como transgredidas las normas decisorias de
la litis

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, esto es, que el escrito en que se interpone exprese, es
decir, explicite en qué consisten y cómo se han producido el o los
errores, siempre que estos sean de derecho. Versando la contienda
sobre la procedencia de la excepción relativa a "La falta de alguno de
los requisitos o condiciones establecidos por las leyes para que dicho
título tenga fuerza ejecutiva, sea absolutamente, sea con relación al
demandado", estaba obligado el impugnante a denunciar como
infringido aquel precepto que, al ser aplicado, sirvió para resolver la
cuestión controvertida, en la especie, el artículo 464 Nº 7 del Código de
Procedimiento Civil. Al no formular tal denuncia se genera un vacío que
la Corte de casación no puede subsanar, dado el carácter de derecho
estricto que reviste el recurso intentado (considerandos 3º y 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 19/03/2019, Rol Nº 29546-2018,

Cita online: CL/JUR/1417/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 19/03/2019, Rol Nº 32694-


2018,

Cita online: CL/JUR/1489/2019


— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 21/08/2018, Rol Nº 12847-
2018,

Cita online: CL/JUR/4596/2018

17. Indemnización de perjuicios por responsabilidad extracontractual. I.


Requisitos de admisibilidad del recurso de casación en el fondo.
Recurrente que no precisa en qué consistirían los errores cometidos,
ni justifica cómo éstos podrían tener influencia sustancial en lo
decisorio

El artículo 772 del Código de Procedimiento Civil, en armonía con lo


previsto en los artículos 764 y 767 del citado cuerpo legal, permite,
como sustento de la invalidación de la sentencia impugnada, el
quebrantamiento de una o más normas legales contenidas en la
decisión. Por ello, es menester que al interponer un recurso con tal
objeto su promotor deba cumplir necesariamente con lo exigido por el
precepto en análisis, esto es, expresar en qué consisten él o los errores
de derecho de que adolece la sentencia recurrida. Aparte del
cumplimiento del referido requisito, con idéntica rigurosidad el mismo
artículo 772 aludido impone a quien interponga un recurso de casación
en el fondo la obligación de señalar, de manera circunstanciada, en el
respectivo escrito, el modo en que él o los errores de derecho que
denuncia han influido sustancialmente en lo dispositivo de la sentencia
que trata de invalidar. Pues bien, al enfrentar lo expuesto
precedentemente con el recurso de casación en el fondo en estudio se
concluye indefectiblemente que carece de los requerimientos legales
exigibles para su interposición. En efecto, en el escueto libelo, si bien
indica cuáles son las normas que considera infringidas, el recurrente no
logra siquiera articular en que consistirían los errores cometidos, ni
menos justificar cómo éstos podrían tener influencia sustancial en lo
decisorio, no sólo por las contradicciones en que incurre en el desarrollo
del recurso, sino que, especialmente, porque afirma que las normas
decisoria litis que invoca —2314 y 2329 del Código Civil— se habrían
transgredido al negar lugar a la reparación del daño, afirmación que ni
siquiera se condice con el mérito del proceso. Tales falencias impiden
que el arbitrio pueda superar el umbral de admisibilidad formal
(considerando 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil). 7/08/2018, Rol Nº 12825-2018,


Cita online: CL/JUR/4205/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 19/03/2019, Rol Nº 32739-


2018,

Cita online: CL/JUR/1457/2019

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 14/11/2018, Rol Nº 19109-


2018,

Cita online: CL/JUR/6391/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 22/10/2018, Rol Nº 16982-


2018,

Cita online: CL/JUR/6139/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 14/05/2018, Rol Nº 3593-


2018,

Cita online: CL/JUR/2253/2018

18. Simulación y nulidad de contrato. Recurso no expresa los errores de


derecho en que ha incurrido la sentencia impugnada. Casación en el
fondo es de carácter estricto

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, esto es, que el escrito en que se interpone exprese, es
decir, explicite en qué consisten y cómo se han producido el o los
errores, siempre que estos sean de derecho (considerando 3º de la
sentencia de Corte Suprema).

Versando la contienda sobre una acción de simulación, la exigencia


consignada en el motivo anterior exigía al impugnante denunciar como
infringidos aquellos preceptos que, al ser aplicados, sirven para resolver
la cuestión controvertida. En este caso, los artículos 1445, 1460 y 1681
y siguientes del Código Civil, teniendo en consideración que son estos
preceptos aquellos que sirven de sustento jurídico al relato contenido
en la demanda interpuesta y que, necesariamente, deberían ser
aplicados en la sentencia de reemplazo que se dicte en el evento de ser
acogido el presente arbitrio procesal. Al no formular tal denuncia se
genera un vacío que la Corte no puede subsanar dado el carácter de
derecho estricto que reviste el recurso de nulidad intentado
(considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 13/03/2019, Rol Nº 29425-2018,

Cita online: CL/JUR/1267/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 7/08/2018, Rol Nº 12850-


2018,

Cita online: CL/JUR/4204/2018

19. Cobro de honorarios. Tribunal de Casación no puede modificar los


hechos establecidos por los jueces del fondo si no hay vulneración de
las leyes reguladoras de la prueba. Recurrente de casación en el
fondo debe indicar como reglas de la sana crítica que habrían sido
vulneradas

En la especie, parece pertinente tener en cuenta que sólo los


tribunales del fondo se encuentran facultados para determinar los
hechos del litigio y que, efectuada correctamente dicha labor, esto es,
con sujeción a las denominadas normas reguladoras de la prueba
atinentes al caso en estudio, se tornan inalterables para este tribunal de
casación, con arreglo a lo dispuesto en el artículo 785 del Código de
Procedimiento Civil, sin que sea posible su revisión por la vía de la
nulidad que se analiza, a menos que se denuncie la conculcación de las
referidas normas. Pues bien, se denuncia infringido el artículo 1.698 del
Código Civil, sin embargo, no se explica por qué, y, en todo caso de la
lectura de la sentencia se advierte que a la parte demandante se le
impuso la carga de acreditar los presupuestos de hecho que le sirven
de fundamento a la demanda, conforme al tenor de la resolución que
recibió la causa a prueba. Además se acusan conculcados los artículos
siguientes al referido, como también los que siguen al artículo 341 del
Código de Procedimiento Civil, lo que demuestra que el recurso no
cumple lo que ordena el artículo 772 del mismo, en cuanto que deben
expresar en qué consiste el o los errores de derecho de que adolece la
sentencia recurrida, lo que implica señalar, al menos, a qué medio de
prueba y norma legal que lo regula se refiere (considerando 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 7/03/2019, Rol Nº 23290-


2018,

Cita online: CL/JUR/1155/2019

20. Notificación de factura. I. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad del recurso de casación en la forma. Resolución
impugnada no reviste la naturaleza jurídica de aquellas señaladas en
el art. 766 del Código de Procedimiento Civil. II. Incumplimiento de los
requisitos de admisibilidad del recurso de casación en el fondo.
Recurrente de casación en el fondo que no denuncia como
transgredidas las normas decisorias de la litis

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil establece que el


recurso de casación en la forma "se concede contra las sentencias
definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar el día de la vista de
la causa". La resolución impugnada por esta vía no reviste la naturaleza
jurídica de aquellas a que se refiere el mencionado artículo 766 del
Código de Procedimiento Civil, razón por la que no resulta procedente
el recurso incoado y, por ende, no puede ser admitido a tramitación
(considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, como es que el escrito en que se lo interpone "exprese"
—explicite— en qué consiste —cómo se ha producido— el o los errores,
siempre que éstos sean "de derecho". Versando la cuestión de fondo
sobre el cobro compulsivo de obligaciones dinerarias cuyo importe
consta en una factura, y habiéndose opuesto las excepciones de
falsedad del título, falta de requisitos del título para tener fuerza
ejecutiva y nulidad de la obligación, la exigencia consignada en el
motivo anterior obligaba a denunciar los preceptos que al ser aplicados
sirven para resolver la cuestión controvertida, esto es, entre otros, el
art ículo 464 en sus numerales 6, 7 y 14, del Código de Procedimiento
Civil, pues en estos textos están contempladas la excepciones opuestas
por el recurrente con el objeto de enervar la acción, y es en
consecuencia el contenido de tales disposiciones lo que debía servir de
base al recurrente para pretender el acogimiento de sus pretensiones
en el fallo de reemplazo que habría de dictarse en el evento de ser
aceptado el presente arbitrio. Luego, la omisión en que incurre la
impugnante genera un vacío que esta Corte no puede subsanar dado el
carácter de derecho estricto que reviste el recurso intentado, de modo
tal que este capítulo de nulidad sustancial tampoco resulta ser admisible
(con siderandos 9º y 10º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 7/03/2019, Rol Nº 24661-2018,

Cita online: CL/JUR/1154/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 29/11/2018, Rol Nº 20872-


2018,

Cita online: CL/JUR/6735/2018

21. Juicio ejecutivo laboral. I. Causal de casación en la forma de omisión


de un trámite esencial, rechazada. Documento que fue agregado al
proceso. II. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad del
recurso de casación en el fondo. Recurrente de casación en el fondo
que no denuncia como transgredidas las normas decisorias de la litis

I. La causal de casación formal se ha fundado en la circunstancia de


haberse faltado a la práctica de una diligencia probatoria que provoque
indefensión, específicamente se reprocha que la sentencia prescindió
de la agregación al proceso de un instrumento —certificado de
defunción—, con citación o bajo el apercibimiento legal que
correspondía, más aun cuando durante el término probatorio fijado no
se rindió prueba alguna, estando debidamente emplazada. La causal
invocada exige que la diligencia preterida corresponda a una de carácter
esencial consagrada por la ley, cuya omisión en virtud del principio de
trascendencia y esencialidad del acto, provoque la nulidad de carácter
procesal, cuyo no es el caso, puesto que el tribunal sí tuvo por
acompañado el documento, por lo que no existe el vicio que por esta
vía se reclama (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

II. De acuerdo a lo prevenido en el artículo 772 Nº 1 del Código de


Procedimiento Civil, el escrito en que se deduzca el recurso de casación
en el fondo debe señalar en qué consiste el o los errores de derecho de
que adolece la sentencia recurrida, y el modo en que ése o esos errores
influyen sustancialmente en lo dispositivo de la sentencia. Pues bien,
del análisis de las normas que se denuncian infringidas, surge como
inevitable conclusión la ausencia de disposiciones que tengan el
carácter de decisoria Litis, debiendo entenderse por tales aquellas con
arreglo a las cuales debe resolverse el litigio, y que son las únicas que
pueden influir de un modo substancial en lo dispositivo de la sentencia,
ya que el impugnante refiere que el fallo censurado ha transgredido
normas relativas a la tramitación de los juicios ejecutivos de cobranza
previsional, citando para ello, la vulneración de los artículos 7º y 8º de
la Ley Nº 17.322, las que son de evidente naturaleza procesal. En
consecuencia, procede declarar inadmisible el recurso deducido
(considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 26/02/2019, Rol Nº 29844-


2018,

Cita online: CL/JUR/1006/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 28/01/2019, Rol Nº 24668-


2018,

Cita online: CL/JUR/473/2019

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 21/01/2019, Rol Nº 28513-


2018,

Cita online: CL/JUR/373/2019

22. Curaduría de persona ausente. I. Trámites esenciales para la


tramitación del proceso. Notificación omitida obsta a que pueda ser
considerada como un trámite esencial del proceso. II. Incumplimiento
de los requisitos de admisibilidad del recurso de casación en el fondo.
Recurrente de casación en el fondo que no denuncia como
transgredidas las normas decisorias de la litis

I. La causal —de casación en la forma— esgrimida se configura


cuando se ha "...faltado a algún trámite o diligencia declarados
esenciales por la ley o a cualquier otro requisito por cuyo defecto las
leyes prevengan expresamente que hay nulidad", que debe
interpretarse en relación al artículo 795 del Código de Procedimiento
Civil que dispone qué trámites deben ser considerados como esenciales
para la tramitación del proceso, en el caso, se denuncia la ausencia del
señalado en su numeral primero, esto es, "el emplazamiento de las
partes en la forma prescrita por la ley". Sin embargo, consta de los
antecedentes allegados a la presente causa, que la curadora nombrada,
absolviendo posiciones en un juicio de rendición de cuentas, reconoció
que conocía de la resolución que dejaba sin efecto su designación,
desde el mes de diciembre del 2015, por lo tanto, era entendida de los
efectos de aquella decisión, no se acogió la petición de modificación de
la sentencia dictada en cuanto a la fecha de expiración de la curaduría.
Desde esta perspectiva no se verifica la causal invocada porque existió
la debida notificación de la curadora, al reconocer su existencia en los
términos ya referidos, además porque las peticiones de publicación en
forma extractada requeridas en la solicitud de cese de la curaduría, no
decían relación con la notificación y el debido emplazamiento de la
curadora, sino con el conocimiento de ella respecto de terceros, para
los efectos que señala el segundo otrosí de la presentación de fecha 21
de diciembre de 2015, de esta forma la notificación omitida obsta a que
pueda ser considerada como un trámite esencial del proceso; motivo
por el que el recurso de nulidad formal debe ser desestimado en esta
etapa de tramitación (considerando 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

II. De acuerdo a lo dispuesto en el artículo 767 del Código de


Procedimiento Civil, el recurso de casación en el fondo procede contra
las resoluciones que señala, siempre que se h ayan pronunciado con
infracción de ley que influya substancialmente en su parte dispositiva.
Conforme a lo establecido en el artículo 772 de dicho código, el escrito
respectivo debe expresar en qué consiste el o los errores de derecho
de que adolece la sentencia recurrida, y de qué modo ese o esos errores
de derecho han influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo. De la
sola lectura del arbitrio intentado, se desprende que no se acusa la
vulneración de normas sustantivas o decisoria litis , debiendo
entenderse por tales aquellas con arreglo a las cuales debe resolverse
el litigio, y que son las únicas que pueden influir de un modo sustancial
en lo dispositivo de la sentencia; pues la norma contenida en el artículo
55 del Código de Procedimiento Civil solo regla la notificación tácita y
los efectos que provoca la declaración de nulidad de una notificación;
situación que lleva a concluir que el presente recurso no puede
prosperar y deberá ser declarado inadmisible (considerandos 7º y 8º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 21/02/2019, Rol Nº 24805-


2018,

Cita online: CL/JUR/941/2019

23. Reclamación tributaria. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad del recurso de casación en el fondo. Recurrente de
casación en el fondo que no expresa en qué consisten los errores de
derecho de que adolece la sentencia y de qué modo influyen
sustancialmente en lo dispositivo del fallo

De conformidad al artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento


Civil, el escrito en que se deduzca el recurso de casación en el fondo
debe señalar en qué consiste el o los errores de derecho de que adolece
la sentencia recurrida, y el modo en que ese o esos errores influyen
sustancialmente en los dispositivos de la sentencia. En este caso, el
recurso omite señalar los errores de derecho en que incurre el fallo
impugnado; razón por la cual no puede acogerse a tramitación. Por otra
parte, el recurrente se limita a citar las normas que considera
vulneradas, para luego refutar los fundamentos que llevaron al juez de
primera instancia a establecer los hechos que dieron lugar a la decisión
que se ataca, careciendo su impugnación del desarrollo exigido por la
ley en cuanto al modo cómo se habrían producido las infracciones a las
disposiciones que señala y la forma en que ello influiría en lo dispositivo
del fallo (considerandos 7º y 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 13/02/2019, Rol Nº 28167-


2018,

Cita online: CL/JUR/788/2019


Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 7/02/2019, Rol Nº 19299-


2018,

Cita online: CL/JUR/727/2019

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 31/01/2019, Rol Nº 28255-


2018,

Cita online: CL/JUR/600/2019

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 30/01/2019, Rol Nº 33047-


2018,

Cita online: CL/JUR/537/2019

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 28/01/2019, Rol Nº 24778-


2018,

Cita online: CL/JUR/472/2019

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 15/01/2019, Rol Nº 26611-


2018,

Cita online: CL/JUR/204/2019

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 27/11/2018, Rol Nº 26527-


2018,

Cita online: CL/JUR/6580/2018

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 28/06/2018, Rol Nº 12919-


2018,

Cita online: CL/JUR/3251/2018

24. Cumplimiento ejecutivo de obligación de dar. Cobro de gastos


comunes. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad del
recurso de casación en el fondo. Recurrente no denuncia como
infringidas las normas decisorias de la litis
El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el
recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, esto es, que el escrito en que se interpone exprese, es
decir, explicite en qué consisten y cómo se han producido el, o los
errores, siempre que éstos sean de derecho. Por lo tanto, versando la
contienda sobre la procedencia de las excepciones de "La nulidad de la
obligación", "La prescripción de la deuda o sólo de la acción ejecutiva",
"El exceso de avalúo en los casos de los incisos 2º y 3º del artículo 438"
y "El pago de la deuda", la exigencia consignada en el motivo anterior
exigía al impugnante denunciar como infringido aquél precepto que, al
ser aplicado, sirvió para resolver la cuestión controvertida. En la
especie, el artículo 464 Nºs. 14, 17, 8 y 9 del Código de Procedimiento
Civil, respectivamente, es la norma que contempla precisamente las
excepciones que el recurrente pretende sean admitidas en el fallo de
reemplazo que se dicte en el evento de ser acogido el presente arbitrio.
Al no formular tal denuncia se genera un vacío que la Corte no puede
subsanar dado el carácter de derecho estricto que reviste el recurso de
nulidad intentado. En este sentido, este tribunal ha dicho que las normas
infringidas en el fallo, para que pueda prosperar un recurso de casación
en el fondo, han de ser tanto las que el fallador invocó en su sentencia
para resolver la cuestión controvertida, como aquellas que dejó de
aplicar como "normas decisoria litis", puesto que en caso contrario esta
Corte no podría dictar sentencia de reemplazo, dado el hecho que se
trata de un recurso de derecho estricto (considerandos 8º y 9º de la
sentencia de la Corte Suprema) relación laboral y crisis social.

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 30/01/2019, Rol Nº 28147-2018,

Cita online: CL/JUR/507/2019

25. Cumplimiento de contrato con indemnización de perjuicios.


Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad del recurso de
casación en el fondo. Recurrente de casación en el fondo que no
denuncia como transgredidas las normas decisorias de la litis.
Recurrente que acepta la decisión en cuanto al fondo del asunto

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, como es que el escrito en que se interpone "exprese", es
decir, explicite en qué consiste —cómo se ha producido— el o los
errores, siempre que estos sean "de derecho". Versando la contienda
sobre una acción de cumplimiento de contrato con indemnización de
perjuicios, estaba obligado el impugnante a explicar los contenidos
jurídicos del instituto que se hizo valer en juicio. Sin embargo, el
recurrente únicamente denuncia la infracción de disposiciones
probatorias, omitiendo extender la infracción legal al menos al
artículo 1489 del Código Civil, precepto que tienen carácter
decisorio litis. Esta situación implica que el compareciente acepta la
decisión adoptada en cuanto al fondo de la cuestión debatida y los
errores de derecho que se denuncian no han tenido influencia sustancial
en lo dispositivo del fallo, pues la normativa conforme a la cual se
resolvió el caso concreto debe tenerse como correctamente aplicada
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 7/01/2019, Rol Nº 26528-2018,

Cita online: CL/JUR/52/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 14/05/2018, Rol Nº 5326-


2018,

Cita online: CL/JUR/2249/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 28/03/2018, Rol Nº 45140-


2017,

Cita online: CL/JUR/5613/2018

26. Cobro de pesos. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad


del recurso de casación en el fondo. Recurrente de casación en el
fondo que no denuncia como transgredidas las normas decisorias de
la litis

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, esto es, que el escrito en que se interpone exprese, es
decir, explicite en qué consisten y cómo se han producido él, o los
errores, siempre que estos sean de derecho. Por tanto, versando el
recurso sobre una excepción dilatoria de incompetencia relativa, quien
recurre debió extender la infracción al artículo 138 del Código Orgánico
de Tribunales. Este precepto tiene carácter decisorio litis por haber sido
invocado como fundamento de derecho de la resolución censurada. Al
no formular tal denuncia se genera un vacío que la Corte no puede
subsanar dado el carácter de derecho estricto que reviste el recurso de
casación intentado (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 3/01/2019, Rol Nº 26833-2018,

Cita online: CL/JUR/39/2019

27. Rescisión por lesión enorme. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad del recurso de casación en el fondo. Recurrente de
casación en el fondo que no denuncia como transgredidas las normas
decisorias de la litis

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, como es que el escrito en que se interpone "exprese", es
decir, explicite en qué consiste —cómo se ha producido— el o los
errores, siempre que estos sean "de derecho". Versando la contienda
sobre la acción de rescisión por lesión enorme, la referida exigencia
obligaba al impugnante a explicar los contenidos jurídicos del instituto
que la demandante hizo valer en el juicio; concretamente los
artículos 1888 y siguientes del Código Civil, pues en ellos se consagran
las exigencias que hacen procedente la aplicación de la sanción objeto
de la pretensión, y que —ciertamente— el recurrente pretende sean
aplicados en la sentencia de reemplazo que se dicte en el evento de ser
acogido el presente arbitrio procesal. Al no hacerlo, genera un vacío que
esta Corte no puede subsanar dado el carácter de derecho estricto que
reviste el recurso de casación intentado (considerandos 3º y 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 26/11/2018, Rol Nº 20539-2018,

Cita online: CL/JUR/6727/2018

28. Indemnización de perjuicios por responsabilidad extracontractual.


Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad del recurso de
casación en el fondo. Recurrente de casación en el fondo que no
denuncia como transgredidas las normas decisorias de la litis

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, como es que el escrito en que se interpone "exprese", es
decir, explicite en qué consiste —cómo se ha producido— el o los
errores, siempre que estos sean "de derecho". Habiendo versando la
acción principal deducida en autos sobre la indemnización de perjuicios
por responsabilidad extracontractual pretendida por la actora respecto
del demandado, la que fue acogida en los términos que se consigna en
el fallo impugnado, imperioso resultaba denunciar la infracción de la
norma básica que ha servido de sustento a aquélla y de la que se
extraen los elementos que los jueces han estimado configurados, esto
es, el art ículo 2314 del Código Civil. Del mismo modo, si la recurrente
fundó su defensa en una relación contractual que se tuvo por no
establecida debió además acusar la vulneración del art ículo 1545
del Código Civil, a lo menos. La omisión anotada genera un vacío que
esta Corte no puede subsanar dado el carácter de derecho estricto que
ostenta el recurso de casación intentado. En estas condiciones, y aun
cuando el tribunal concordara con los yerros jurídicos denunciados, ello
carecería de influencia en lo decisorio, toda vez que la anomalía
anotada lleva forzosamente a concluir que las normas sobre cuya base
se decidió la litis, han sido bien aplicadas (considerandos 4º a 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 26/11/2018, Rol Nº 20465-2018,

Cita online: CL/JUR/6726/2018

29. Terminación de contrato de arrendamiento. Recurrente de casación


en el fondo que no denuncia como transgredidas las normas
decisorias de la litis. Recurrente de casación en el fondo que no
expresa en qué consisten los errores de derecho de que adolece la
sentencia y de qué modo influyen sustancialmente en lo dispositivo
del fallo

De conformidad al artículo 767 del Código de Procedimiento Civil, el


recurso de casación en el fondo procede contra las resoluciones que
señala, siempre que se hayan pronunciado con infracción de ley que
influya substancialmente en su parte dispositiva. Según lo establecido
en el art ículo 772 de dicho código, el escrito respectivo debe expresar
en qué consiste el o los errores de derecho de que adolece la sentencia
recurrida, y de qué modo ese o esos errores de derecho han influido
sustancialmente en lo dispositivo del fallo. En este caso, no se acusa la
vulneración de normas sustantivas o decisoria litis, debiendo
entenderse por tales aquellas con arreglo a las cuales debe resolverse
el litigio, y que son las únicas que pueden influir de un modo sustancial
en lo dispositivo de la sentencia; pues se limitan a reprochar la infracción
de las que regulan la comparecencia en juicio y las notificaciones, de
modo que las impugnaciones carecen de un desarrollo y explicación
suficientes acerca de errores de derecho que puedan incidir sobre la
materia debatida y la decisión, alejándose, mediante la argumentación
que le sirve de sustento, de los fines del recurso de casación en el fondo,
destinado a controlar la correcta aplicación e interpretación de las
normas jurídicas sustantivas atinentes a la materia que se trate, y no a
revisar el modo en que se desarrolló el procedimiento (considerandos 7º
y 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 22/11/2018, Rol Nº 4577-


2018,

Cita online: CL/JUR/6529/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 21/06/2018, Rol


Nº 41986-2017,

Cita online: CL/JUR/3063/2018

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 25/04/2018, Rol Nº 3320-


2018,

Cita online: CL/JUR/6131/2018

30. Acción de reivindicación. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad del recurso de casación en el fondo. Recurrente de
casación en el fondo que no denuncia como transgredidas las normas
decisorias de la litis. Recurrente que acepta la decisión en cuanto al
fondo del asunto
El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el
recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, como es que el escrito en que se interpone "exprese", es
decir, explicite en qué consiste —cómo se ha producido— el o los
errores, siempre que estos sean "de derecho". Versando la contienda
sobre una acción reivindicatoria, estaba obligado el impugnante a
explicar los contenidos jurídicos del instituto que se hizo valer en el
juicio. Concretamente, los artículos 889 y siguientes del Código Civil,
teniendo en consideración que fue precisamente esta normativa aquella
que sirve de sustento jurídico a la demanda intentada. Esta situación
implica que el recurrente acepta la decisión adoptada en cuanto al fondo
de la cuestión debatida y los errores de derecho que se denuncian no
tienen influencia sustancial en lo dispositivo del fallo, pues la preceptiva
conforme a la cual se resolvió el caso concreto debe tenerse como
correctamente aplicada (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 13/11/2018, Rol Nº 19218-2018,

Cita online: CL/JUR/6341/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 7/11/2018, Rol Nº 19599-


2018,

Cita online: CL/JUR/6279/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 23/10/2018, Rol Nº 12271-


2018

Cita online: CL/JUR/6033/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 20/06/2018, Rol Nº 7460-


2018,

Cita online: CL/JUR/2989/2018

31. Cumplimiento incidental. Recurrente de casación en el fondo que no


denuncia como transgredidas las normas decisorias de la litis.
Recurrente que acepta la decisión en cuanto al fondo del asunto
El demandado, recurrente de casación, no encaminó el error de
derecho que le sirve de fundamento al recurso en una vulneración de
las normas que, en la especie, tuvieron el carácter decisorias de la litis,
es decir, los preceptos que al ser aplicados han servido para resolver la
cuestión controvertida, particularmente las normas del párrafo 1 del
Título XIX del Libro I del Código De Procedimiento Civil, en especial el
artículo 234, y aquellas contenidas en el Libro IV del Título XV del
Código Civil. Como es sabido, el recurso de casación en el fondo
permite la invalidación de determinadas sentencias que hayan sido
pronunciadas con infracción de ley, siempre que ésta haya tenido
influencia sustancial en su parte resolutiva o decisoria. En
consecuencia, el recurso interpuesto revela que el impugnante no
cuestiona, ergo acepta, la aplicación que de las normas
decisoria litis efectúa el fallo cuya anulación se postula. De
consiguiente, aun en el evento de que la Corte de casación concordara
con este litigante en el sentido de haberse producido los yerros que
denuncia, tendría no obstante que declarar que los mismos no influyen
en lo dispositivo de la sentencia, desde que las normas nutrientes del
instituto que conforman la pretensión que se pide declarar no han sido
consideradas al puntualizar la infracción preceptiva descrita en el
arbitrio procesal que se examina (considerandos 5º y 7º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 13/11/2018, Rol Nº 40706-2017,

Cita online: CL/JUR/6338/2018

32. Cobro ejecutivo de factura. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad del recurso de casación en el fondo. Recurrente de
casación en el fondo que no denuncia como transgredidas las normas
decisorias de la litis. Sola mención de normas legales no satisface el
requisito de expresar en qué consisten los errores de derecho
denunciados

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, como es que el escrito en que se interpone "exprese", es
decir, explicite en qué consiste —cómo se ha producido— el o los
errores, siempre que estos sean "de derecho". Versando la contienda
sobre la procedencia de la excepción de falta de requisitos del título para
que tenga fuerza ejecutiva, estaba obligado el impugnante a denunciar
como infringido aquel precepto que, al ser aplicado, sirve para resolver
la cuestión controvertida. En este caso, el artículo 464 Nº 7 del Código
de Procedimiento Civil que contempla la excepción que el recurrente
pretende sea admitida. Y al no hacerlo genera un vacío que la Corte de
casación no puede subsanar, dado el carácter de derecho estricto que
reviste el recurso intentado, resultando insuficiente para estos efectos
su sola referencia en el cuerpo del escrito (considerandos 3º y 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 8/11/2018, Rol Nº 20456-2018,

Cita online: CL/JUR/6322/2018

33. Juicio ejecutivo laboral. Recurrente de casación en el fondo que no


expresa en qué consisten los errores de derecho de que adolece la
sentencia

De acuerdo con los artículo s 764, 767 y 772 del Código de


Procedimiento Civil, el sustento de la invalidación de la sentencia
censurada es el quebrantamiento de una o más normas legales
contenidas en la decisión. Por ello, es menester que al interponerse un
recurso de casación en el fondo se cumpla con expresar en qué
consisten él o los errores de derecho de que adolece la resolución
recurrida. En este orden de ideas, tanto la jurisprudencia como la
doctrina hacen consistir esos yerros en aquéllos que pudieron originarse
por haber otorgado los sentenciadores un alcance diferente a una
norma legal respecto del establecido por el legislador, ya sea ampliando
o restringiendo el mandato de sus disposiciones; o por haber aplicado
una ley a un caso no previsto en ella o, por último, por haber dado
aplicación a un precepto legal en una situación ajena a la de su
prescripción. Luego, resulta inconcuso que el recurso en análisis carece
de razonamientos dirigidos a demostrar los errores de derecho en que
habrían incurrido los sentenciadores, constriñendo su exposición a
planteamientos generales, los que, por su amplitud y falta de precisión,
adolecen de vaguedad y confusión que no se condice con la exigencia
impuesta por el legislador (considerando 3º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 6/11/2018, Rol Nº 2836-2018,


Cita online: CL/JUR/6227/2018

34. Oposición a registro de marca. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad del recurso de casación en el fondo. Recurrente de
casación en el fondo que no expresa en qué consisten los errores de
derecho de que adolece la sentencia y de qué modo influyen
sustancialmente en lo dispositivo del fallo

De conformidad al artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento


Civil, el escrito en que se deduzca el recurso de casación en el fondo
debe señalar en qué consiste el o los errores de derecho de que adolece
la sentencia recurrida, y el modo en que ése o ésos errores influyen
sustancialmente en los dispositivos de la sentencia. En este caso el
recurrente omite señalar los errores de derecho en que incurre el fallo
impugnado; razón por la cual no puede acogerse a tramitación. En
efecto, se limita a citar y transcribir las normas que considera
vulneradas, para luego refutar los fundamentos que llevaron al juez de
primera instancia a establecer los hechos que dieron lugar a la decisión
que se ataca, careciendo su impugnación del desarrollo exigido por la
ley en cuanto al modo cómo se habrían producido las infracciones a las
disposiciones que señala y la forma en que ello influiría en lo dispositivo
del fallo (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 5/11/2018, Rol Nº 16757-


2018,

Cita online: CL/JUR/6197/2018

35. Acción declarativa de mera certeza de dominio. Incumplimiento de


los requisitos de admisibilidad del recurso de casación en el fondo.
Recurrente de casación en el fondo que no denuncia como
transgredidas las normas decisorias de la litis

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, como es que el escrito en que se interpone "exprese", es
decir, explicite en qué consiste —cómo se ha producido— el o los
errores, siempre que estos sean "de derecho". Así, centrándose la
controversia, en definitiva, sobre el dominio de un bien raíz regularizado
conforme al procedimiento establecido en el D.L. Nº 2.695 de 1979, la
referida exigencia obligaba al impugnante a denunciar como infringidos
aquellos preceptos que, al ser aplicados, sirvieron para resolver la
cuestión controvertida. Sin embargo, quien recurre omite extender la
infracción a los artículos 15 y 16 del referido decreto ley, que fueron
precisamente las normas aplicadas por los sentenciadores para
resolver el litigio. Al no hacerlo, genera un vacío que la Corte no puede
subsanar, dado el carácter de derecho estricto que reviste el recurso de
casación intentado (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 31/10/2018, Rol Nº 19150-2018,

Cita online: CL/JUR/6253/2018

36. Liquidación voluntaria. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad del recurso de casación en el fondo. Recurrente de
casación en el fondo que no denuncia como transgredidas las normas
decisorias de la litis

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, esto es, que el escrito en que se interpone exprese, es
decir, explicite en qué consisten y cómo se han producido el o los
errores, siempre que estos sean de derecho. Versando la discusión
sobre la admisibilidad de un recurso de apelación en el marco de un
procedimiento de liquidación voluntaria, la referida exigencia requería al
impugnante denunciar como infringido aquel precepto que, al ser
aplicado, sirvió para resolver la cuestión controvertida. En este caso, el
artículo 4º de la Ley Nº 20.720, que determina el régimen recursivo en
materia de procedimientos concursales, pues fue precisamente esta
norma la que invocaron los sentenciadores como sustento jurídico de la
decisión de declarar inadmisible la apelación. Al no formular tal
denuncia se genera un vacío que la Corte no puede subsanar dado el
carácter de derecho estricto que reviste el recurso de casación intentado
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 25/10/2018, Rol Nº 18767-2018,

Cita online: CL/JUR/6145/2018

37. Cobro de pagaré. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad


del recurso de casación en el fondo. Recurrente de casación en el
fondo que no denuncia como transgredidas las normas decisorias de
la litis

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, esto es, que el escrito en que se interpone exprese, es
decir, explicite en qué consisten y cómo se han producido el o los
errores, siempre que estos sean de derecho. Versando la contienda
sobre la procedencia de la excepción relativa a la ineptitud de libelo por
falta de algún requisito legal en el modo de formular la demanda, en
conformidad a lo dispuesto en el artículo 254 del Código de
Procedimiento Civil, la referida exigencia, requería del impugnante
denunciar como infringido aquél precepto que, al ser aplicado, sirvió
para resolver la cuestión controvertida. En la especie, el artículo 464
Nº 4 del Código de Procedimiento Civil es la norma que contempla
precisamente la excepción que el recurrente pretende sea admitida en
el fallo de reemplazo que se dicte en el evento de ser acogido el
presente arbitrio. Al no formular tal denuncia se genera un vacío que la
Corte no puede subsanar dado el carácter de derecho estricto que
reviste el recurso de casación intentado (considerandos 3º y 4º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 25/10/2018, Rol Nº 20579-2018,

Cita online: CL/JUR/6143/2018

38. Resolución de contrato de compraventa. Incumplimiento de los


requisitos de admisibilidad de la casación sustancial. Recurrente está
obligado a explicar los contenidos jurídicos de la institución que hace
valer. Impugnante no ha extendido la infracción a norma que regula la
condición resolutoria tácita

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, como es que el escrito en que se interpone "exprese", es
decir, explicite en qué consiste —cómo se ha producido— el o los
errores, siempre que estos sean de derecho. La exigencia consignada
en el motivo anterior obligaba al impugnante a explicar los contenidos
jurídicos de la institución que hizo valer; así, versando el juicio sobre la
acción de resolución de contrato con indemnización de perjuicios por
incumplimiento de una de las partes, quien recurre debió extender la
infracción de ley que denuncia al artículo 1489 del Código Civil, desde
que es esta la disposición que regula la condición resolutoria tácita,
existente en todo contrato bilateral, para el evento de que una de las
partes no cumpla lo pactado. En efecto, tal norma fue aplicada en el fallo
cuestionado, y corresponde a la que ciertamente, el recurrente pretende
sea observada en la sentencia de reemplazo que se dicte en el evento
de ser acogido el presente arbitrio procesal, y al no hacerlo, genera un
vacío que la Corte no puede subsanar dado el carácter de derecho
estricto que reviste el recurso de nulidad intentado (considerandos 3º y
4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 16/10/2018, Rol Nº 12716-2018,

Cita online: CL/JUR/5855/2018

39. Oposición a registro de marca. Requisitos de admisibilidad del


recurso de casación en el fondo. Recurrente que no estima como
transgredidas normas decisoria litis. Recurrente que no cuestiona la
decisión de fondo

Conforme señala el artículo 782 del Código de Procedimiento Civil,


elevado un proceso en casación de fondo el tribunal debe examinar si
la sentencia objeto del recurso es de aquéllas contra las cuales lo
concede la ley, y si reúne los requisitos que se establecen en los incisos
primero de los artículos 772 y 776 del texto legal citado. En la especie,
del propio tenor del escrito por el que se interpone el recurso de
casación en estudio se pueden comprobar sus defectos, al prescindir la
recurrente y, por lo mismo, no estimar como transgredidas, las normas
decisorias de la litis en materia marcaria, esto es, aquellas que
producen el efecto de resolver la cuestión controvertida, no obstante
que en sus planteamientos ha insistido en que se debió acoger el
reclamo. Esta situación implica que la recurrente no cuestiona la
decisión de fondo, lo que impide que su recurso de casación pueda
prosperar. En efecto, aún en el evento de que esta Corte concordara
con la reclamante en el sentido de haberse producido los errores de
derecho que denuncia en su recurso, tendría que declarar que éstos no
influyen en lo dispositivo de la sentencia desde que lo resuelto sobre la
solicitud de registro marcario rechazada no ha sido considerado como
error de derecho, de manera que en estas condiciones el recurso de
casación en el fondo interpuesto adolece de manifiesta falta de
fundamento (considerandos 3º a 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 11/10/2018, Rol Nº 24555-


2018,

Cita online: CL/JUR/5816/2018

40. Resolución de contrato con indemnización de perjuicios.


Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad del recurso de
casación en el fondo. Recurrente de casación en el fondo que no
denuncia como transgredidas las normas decisorias de la litis

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, esto es, que el escrito en que se interpone exprese, es
decir, explicite en qué consisten y cómo se han producido él, o los
errores, siempre que estos sean de derecho. Versando la contienda
sobre una acción de resolución de contrato y perjuicios, estaba obligado
el impugnante a desarrollar los contenidos jurídicos sustantivos del
instituto que se hizo valer en el juicio y que en definitiva fue considerado
por los jueces del fondo para rechazar la demanda. Sin embargo, el
recurrente omite extender la infracción legal al artículo 1489 del Código
Civil, precepto que tiene carácter decisorio litis pues es precisamente
esta norma aquella que sirve de sustento jurídico a la demanda. Luego,
la omisión en que se incurre genera un vacío que la Corte de casación
no puede subsanar, dado el carácter de derecho estricto que reviste el
recurso intentado (considerandos 8º y 9º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 8/10/2018, Rol Nº 18829-2018,

Cita online: CL/JUR/5664/2018

41. Responsabilidad del Estado. Recurrente de casación en el fondo


que no denuncia como transgredidas las normas decisorias de la litis.
Sola mención de normas legales no satisface el requisito de expresar
en qué consisten los errores de derecho denunciados

En la especie, el recurso de casación deducido por la Municipalidad


demandada no ha denunciado como infringidos los preceptos legales
que gobiernan la controversia. En efecto, no ha invocado como
vulnerados los artículos que sirvieron de sustento a la acción de autos
y a la sentencia de segunda instancia, para resolver que es procedente
declarar el derecho a la indemnización que asiste al demandante. En
razón de la naturaleza de derecho estricto del recurso de casación, no
es suficiente para cumplir la indicación cuya omisión se ha apuntado, la
circunstancia de haberse referido de manera general a principios que
orientan la contratación administrativa, a la Ley Nº 19.886 sobre
Compras Públicas y a otras "Normas de Derecho Público", así como a
la enunciación del artículo 69 del Reglamento del Decreto Ley Nº 825
sobre Impuesto a las Ventas y Servicios. Esta deficiente formalización,
permite concluir que cualquier error jurídico en que pudiera haberse
incurrido, respecto de las normas que se estimaron infringidas, no
constituiría fundamento suficiente para acoger la pretensión de
casación en el fondo, pues carecería de influencia en lo dispositivo de
la sentencia impugnada (considerando 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 3/09/2018, Rol


Nº 18801-2018,

Cita online: CL/JUR/4893/2018

42. Resolución de contrato de promesa. Incumplimiento de los


requisitos de admisibilidad del recurso de casación en el fondo.
Recurrente de casación en el fondo que no denuncia como
transgredidas las normas decisorias de la litis

El artículo 772 Nº 1 del Código de Procedimiento Civil sujeta el


recurso de casación en el fondo a un requisito indispensable para su
admisibilidad, como es que el escrito en que se interpone "exprese", es
decir, explicite en qué consiste —cómo se ha producido— el o los
errores, siempre que estos sean "de derecho". Versando la contienda
sobre la resolución de un contrato de promesa, estaba obligado el
impugnante a explicar los contenidos jurídicos del instituto que se hizo
valer en juicio. Sin embargo, el recurrente omite extender la infracción
legal al art ículo 1554 del Código Civil, precepto que tiene carácter
decisorio litis pues regula el contrato de promesa. Al no hacerlo genera
un vacío que la Corte de casación no puede subsanar, dado el carácter
de derecho estricto que reviste el recurso de nulidad intentado
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 21/08/2018, Rol Nº 12837-2018,

Cita online: CL/JUR/4597/2018

43. Liquidación voluntaria. Recurso de casación es de derecho estricto.


Ausencia del requisito del recurso de casación en el fondo de
existencia de agravio del recurrente

El recurso de casación, en general, es de derecho estricto, naturaleza


que se refrenda si se tienen en cuenta las exigencias que respecto de
su interposición se contemplan en el artículo 772 del Código de
Procedimiento Civil. Luego, del tenor de lo que disponen los
art ículos 764 y siguientes del mismo cuerpo legal, se constata además
que, de conformidad con lo que prescribe el artículo 771, debe ser
interpuesto por la parte agraviada, lo que determina necesariamente
que la sentencia impugnada debe haber causado al recurrente un
perjuicio solo reparable con la invalidación del fallo, influyendo el vicio
de que se trata sustancialmente en lo dispositivo de la sentencia
(considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema). De conformidad
al recurso deducido, queda en evidencia la ausencia de un interés actual
y directo que de haber sido afectado pudiera ocasionar un agravio, en
tanto lo que la recurrente pretende es obtener una declaración de
carácter general aplicable a la materia, pero que en último término no
busca mejorar su posición en el pleito, obviando que es menester que
quien solicita el pronunciamiento judicial debe acreditar una
determinada y precisa relación con la situación jurídica sustancial que
se deduce en juicio, algún vínculo con la resolución u omisión contra la
que se dirige; con la situación de hecho en que recae, con su contenido,
antecedentes fácticos que justifiquen y precisen la relación con el
interés defendido y que motiva su intervención en el proceso y que por
ende fundamente su obtención de la declaración de ilegalidad de que
se trata. La expresión del agravio que esboza el arbitrio no alcanza a la
esencia de lo decidido, pues se limita a disentir con el pronunciamiento,
proponiendo una interpretación diversa de aquella que enarbola y que
queda circunscrita al debate dialéctico pero que resulta insuficiente para
la impugnación de lo resuelto, atendido que aun en el evento de haberse
producido una errónea aplicación del derecho, igualmente no se
encuentra legitimado para deducir el presente recurso (considerando 8º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 9/08/2018, Rol Nº 5143-2018,

Cita online: CL/JUR/4414/2018

44. Acción de reivindicación. Recurrente de casación en el fondo que


no denuncia como transgredidas las normas decisorias de la litis.
Recurrente de casación en el fondo que no expresa en qué consisten
los errores de derecho de que adolece la sentencia y de qué modo
influyen sustancialmente en lo dispositivo del fallo

La única posibilidad de éxito del intento saneatorio se anida en la


transgresión de los artículos 889 y siguientes del Código Civil que
regulan la acción reivindicatoria, como también de los artículos 2498 y
siguientes del mismo cuerpo legal referidos a la prescripción adquisitiva,
que por ello reviste el rango de decisoria de la litis. Luego, al no criticar
el recurrente la circunstancia de haberse aplicado inadecuada o
defectuosamente tal preceptiva, implícitamente reconoce y acepta su
adecuada y correcta aplicación en el fallo. En efecto, si bien el fallo
impugnado reconoce la posesión inscrita a la que alude el recurrente,
rechaza la acción reivindicatoria por estimar que la actora principal no
acreditó ser la dueña del retazo reivindicado, de manera que no es
posible entrar al conocimiento de ello sin referirse a la acción
reivindicatoria que se encuentra regulada, tal como se ha dicho, en el
artículo 889 del Código Civil, pues es en base a esa institución jurídica
que se desestimó la acción principal deducida en autos. Lo mismo
ocurre con la prescripción adquisitiva, toda vez que el impugnante se
limita a la cita de ciertos preceptos relativos a la materia, alguno de los
cuales transcribe, pero nada dice sobre cómo se aplicaron o como
debieron interpretarse dichas normas, especialmente los artículos 2498,
2505, 2507 y 2508 del Código Civil, impidiendo con ello al Tribunal de
casación resolver sobre su correcta utilización (considerando 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Dado el carácter extraordinario del recurso de casación en el fondo,


su interposición se encuentra sujeta a formalidades, entre las cuales
destaca la necesidad de expresar en el libelo que la conduce en qué
consiste él, o los errores de derecho de que adolecería la sentencia
recurrida y señalar de qué modo influyeron sustancialmente en lo
decidido. Es así que aunque el tribunal de casación atienda a los
propósitos de desformalización que trasuntan las modificaciones que al
artículo 772 del Código Procesal Civil introdujo la Ley Nº 19.374, ello ha
de tener un límite, si se tiene en cuenta que la renovada oración del
artículo 772 en el sentido que debe expresarse "en qué consiste el error
o los errores de derecho de que adolece la sentencia recurrida" debe
ser leída en el contexto del artículo 767, que establece esta excepcional
vía de impugnación respecto de las resoluciones pronunciadas "con
infracción de ley, cuando esta última ha influido sustancialmente en lo
dispositivo de la sentencia''. Lo recién indicado obligaba al recurrente a
indicar la ley que estimaba vulnerada y que, en todo evento, habría
tenido influencia sustancial en lo resolutivo (considerando 7º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 5/07/2018, Rol Nº 37914-2017,

Cita online: CL/JUR/3420/2018

45. Indemnización de perjuicios por responsabilidad extracontractual.


Recurrente de casación en el fondo que no denuncia como
transgredidas las normas decisorias de la litis. Ponderación de la
prueba excede el ámbito del recurso de casación en el fondo

Examinado el recurso de casación se puede constatar que si bien el


recurrente denuncia la infracción de normas sustantivas, no cuestiona
la aplicación del derecho atinente a la materia debatida, pues los
fundamentos esenciales de su libelo dicen relación con el alcance y
sentido que corresponde conferir a la prueba rendida en autos. Sin
embargo, tal actividad se agotó con la valoración que hicieron los jueces
del fondo, quienes tras ponderar los antecedentes y en uso de sus
facultades concluyeron que no se encuentran acreditados los supuestos
de la acción de responsabilidad extracontractual incoada, dado que no
existió una omisión en el cumplimiento de la sentencia de protección
dictada por la misma Corte que ordenó a la demandada hacer cesar por
completo la contaminación que por su funcionamiento se produce,
paralización que fue realizada voluntariamente por la demandada antes
de que se le notificara el cumplimiento de la referida sentencia. En
consecuencia, lo atacado por el arbitrio es, en esencia, la ponderación
judicial de la prueba rendida por los litigantes, proceso intelectual que
escapa al control de casación (considerandos 3º y 5º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 18/06/2018, Rol Nº 4344-2018,

Cita online: CL/JUR/2872/2018

46. Terminación de contrato de arrendamiento. Incumplimiento de los


requisitos de admisibilidad del recurso de casación en el fondo.
Recurrente de casación en el fondo que no denuncia como
transgredidas las normas decisorias de la litis

De conformidad al artículo 767 del Código de Procedimiento Civil, el


recurso de casación en el fondo procede contra las resoluciones que
señala, siempre que se hayan pronunciado con infracción de ley que
influya sustancialmente en su parte dispositiva. Conforme a lo
establecido en el artículo 772 de dicho código, el escrito respectivo debe
expresar en qué consiste el o los errores de derecho de que adolece la
sentencia recurrida, y de qué modo ese o esos errores de derecho han
influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo. Sin embargo, en este
caso, el recurso no acusa la vulneración de normas sustantivas o
decisoria litis; pues se limita a reprochar la errada interpretación y
aplicación de la que establece cuando es posible tener por reconocidos
los instrumentos privados y la infracción a "los principios de la sana
crítica", vulneración, esta última, que no vincula con norma alguna
atinente al procedimiento de que se trata, lo que permite concluir que la
impugnación carece de un desarrollo y explicación suficientes acerca
de errores de derecho que puedan incidir sobre la materia debatida y la
decisión de fondo (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 25/04/2018, Rol Nº 2873-


2018,

Cita online: CL/JUR/1873/2018

47. Indemnización de perjuicios por responsabilidad extracontractual.


Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad del recurso de
casación en el fondo. Recurrente de casación en el fondo que no
denuncia infracción de normas reguladoras de la prueba
El recurso de casación en el fondo que se intenta no reúne los
requisitos formales que exige el artículo 772 del Código de
Procedimiento Civil. En efecto, el primer requisito consiste en expresar
en qué estriba el o los errores de derecho de que adolece la sentencia
recurrida; sin embargo el recurrente se limitó únicamente a enunciar las
disposiciones legales que estimó infringidas, sin desarrollar argumentos
que expliquen los errores de derecho en que, en su concepto, habrían
incurrido los sentenciadores, toda vez que nada dice sobre cómo se
aplicaron o como debieron aplicarse, impidiendo con ello a este tribunal
resolver sobre su correcta utilización. Además, los presupuestos de
hecho que sirvieron de base a la conclusión de los sentenciadores no
fueron impugnados en el recurso denunciando la infracción de normas
reguladoras de la prueba que hubieren permitido a este tribunal de
casación alterar la referida situación fáctica, los que en consecuencia
han quedado fijados de manera inamovibles. En efecto, en el recurso
de casación el reclamante se limita a desarrollar largamente el
contenido de la prueba que estima no valorada o considerada por los
sentenciadores del fondo, sin embargo, no precisa la forma en que se
produjo la infracción que reprocha ni señala en forma específica cuáles
son los preceptos que considera vulnerados que habrían llevado a los
jueces del fondo a dejar asentados los supuestos que estima errados,
cuestión que resulta indispensable en un recurso de derecho estricto
como el de la especie. Por otra parte, al no dar cumplimiento a la primera
de las exigencias previstas en la disposición legal citada, menos aun
acontece ello con el segundo requisito, esto es, el de señalar de qué
modo ese o esos errores de derecho influyen sustancialmente en lo
dispositivo del fallo, pues su texto tiene un contenido y análisis propio
de un recurso de apelación y pretende que esta Corte efectúe una
nueva ponderación de los elementos de prueba que indica, lo que no
corresponde a un recurso de casación como el intentado, razón por la
cual este no se encuentra en condiciones de acogerse a tramitación y
debe ser declarado inadmisible (considerandos 3º y 4º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 2/04/2018, Rol


Nº 35662-2017,

Cita online: CL/JUR/5625/2018


ARTÍCULO 773

El recurso de casación no suspende la ejecución de la sentencia, salvo


cuando su cumplimiento haga imposible llevar a efecto la que se dicte si se
acoge el recurso, como sería si se tratare de una sentencia que declare la
nulidad de un matrimonio o permita el de un menor.

La parte vencida podrá exigir que no se lleve a efecto la sentencia mientras


la parte vencedora no rinda fianza de resultas a satisfacción del tribunal que
haya dictado la sentencia recurrida, salvo que el recurso se interponga por el
demandado contra la sentencia definitiva pronunciada en el juicio ejecutivo,
en los juicios posesorios, en los de desahucio y en los de alimentos.

El recurrente deberá ejercer este derecho conjuntamente con interponer el


recurso de casación y en solicitud separada que se agregará a la carpeta
electrónica a que se refiere el artículo 29. El tribunal a quo se pronunciará de
plano y en única instancia a su respecto y fijará el monto de la caución antes
de enviar la comunicación correspondiente al tribunal superior.245

En este caso, se formará cuaderno electrónico separado con las piezas


necesarias.246

El tribunal a quo conocerá también en única instancia en todo lo relativo al


otorgamiento y subsistencia de la caución.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 37, 174, 191, 192, 194, 197, 231, 302,
475, 481, 488, 550, 606, 614, 778 y 814.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cumplimiento incidental. I. Cumplimiento incidental, finalidad y


requisitos. Recurso de casación no constituye instancia. Excepciones
en que la interposición de la casación eventualmente suspende la
ejecución de la sentencia impugnada. Fianza de resultas debe
efectuarse por la parte vencedora. Efecto suspensivo de la fianza de
resulta no expira si dicha fianza es solventada por otro litigante que
también haya resultado vencido. II. Fianza rendida por quien no
estaba por ley llamado a hacerlo. Efecto suspensivo del cumplimiento
de la sentencia sólo expiró una vez dictado el cúmplase del fallo de
casación. Improcedencia de acoger incompetencia por declinatoria,
así como las excepciones de pérdida del carácter de ejecutoria y falta
de oportunidad
I. El procedimiento de ejecución es el complemento necesario e
indispensable de toda resolución judicial y consiste en lograr que se
dicte el cumplimiento de lo resuelto en una sentencia judicial. Para la
ejecución de una resolución se requiere de una sentencia condenatoria
que contenga una prestación de da, hacer o no hacer. Al efecto, el
cumplimiento incidental se encuentra regulado en los artículos 233 a
236 del Código de Procedimiento Civil. Este procedimiento se aplica
cuando se trata de sentencias definitivas o interlocutorias cuya
ejecución se solicita ante el mismo tribunal que dictó el fallo dentro de
un año contado desde que la ejecución se hizo exigible, y siempre que
la ley no haya dispuesto una forma especial para su cumplimiento
(considerando 4º de la sentencia de casación). En la actualidad el
recurso de casación no constituye instancia y sus efectos se encuentran
regulados en el artículo 773 del Código de Procedimiento Civil.
Conforme lo dispone el inciso 1º de dicho precepto legal, la regla
general es que el recurso de casación no suspende la ejecución de la
sentencia. Sin embargo, el propio artículo 773 contempla dos
excepciones en las cuales la interposición de la casación eventualmente
suspende la ejecución de la sentencia impugnada. La primera se
produce cuando la que se haya de dictar en su lugar en caso de
acogerse el recurso, se haga imposible de cumplir o se produzca un
daño de situaciones jurídicas tan trascendentes que sea absurdo dejar
sin efecto todo lo obrado en virtud del fallo primitivo anulado por vía de
casación. La segunda excepción se encuentra contenida en el inciso 2º
de la citada norma, la que permite a la parte vencida solicitar la
suspensión del cumplimiento de la sentencia impugnada por casación,
mientras no se rinda fianza de resultas por la parte vencedora. Luego,
el derecho que le asiste a la parte vencida, a fin de asegurar el
cumplimiento de un fallo de casación acorde a sus intereses, requiere
que dicho litigante exija de la vencedora el otorgamiento de fianza de
resultas para poder cumplir una sentencia impugnada de casación. De
este modo, el cumplimiento de la sentencia queda suspendido mientras
por un lado no se rinda la fianza y, por el otro, que ello se haya efectuado
por la parte vencedora y no cualquier otro sujeto procesal, de manera
que el efecto suspensivo de la fianza de resulta no expira si dicha fianza
es solventada por otro litigante que también haya resultado vencido
(considerandos 7º y 8º de la sentencia de casación).
2. En este caso, solicitada y fijada la fianza por el tribunal de alzada, el
cumplimiento de la sentencia quedó suspendido, ya que, si bien ésta
fue rendida, ello no se efectuó por la parte llamada por ley a hacerlo.

En efecto, quien rindió la fianza de resultas fue uno de los


demandados en una de las causas acumuladas y cuya vista se efectuó
en forma conjunta. En consecuencia, el efecto suspensivo del
cumplimiento de la sentencia contenido en el artículo 773 inciso 2º del
Código de Procedimiento Civil, de carácter condicional y transitorio, sólo
expiró una vez dictado el cúmplase del fallo de casación, quedando
entonces el fallo en condiciones de cumplirse sin mayores
inconvenientes. Por lo tanto, procedía en el caso sub lite rechazar la
incompetencia por declinatoria planteada por la demandada, así como
las excepciones de pérdida del carácter de ejecutoria y falta de
oportunidad. Luego, al no razonar así los jueces de segunda instancia
han incurrido en el vicio que hace valer el actor, vulnerando los
artículos 233 y 773 del Código de Procedimiento Civil, errónea
aplicación de la ley que ha tenido influencia substancial en lo dispositivo
del fallo, pues se acogió la excepción opuesta en circunstancias que ella
no era procedente (considerandos 9º y 10º de la sentencia de casación).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 13/03/2019, Rol Nº 15043-2018,

Cita online: CL/JUR/1264/2019

3. Indemnización de perjuicios. I. Responsabilidad civil en sede


aquiliana. Pago de los intereses se devengan desde que la resolución
que le sirve de título se encuentra firme o ejecutoriada

En materia de responsabilidad civil en sede aquiliana la obligación


reparatoria nace desde que así se declara judicialmente, mediante
sentencia firme de condena al pago de la respectiva indemnización, al
no existir vínculo previo entre víctima y victimario. El pago de los
intereses en sede aquiliana, cuyo fin es indemnizar los perjuicios
derivados del retardo en la solución de la obligación dineraria en que se
traduce la reparación del daño y que tienen su origen en la mora del
deudor condenado a ella, se devengan desde que esta obligación se ha
hecho exigible, y una obligación de esta naturaleza se hace exigible
desde que la resolución que le sirve de título se encuentra firme o
ejecutoriada, pues ¿antes de que esto ocurra no hay una obligación
establecida, que sea líquida o liquidable, ni tampoco exigible, de manera
que no puede haber retardo culpable en el pago, que es lo que
constituye la mora. (Vergara Bezanilla, Juan Pablo, Los intereses en la
responsabilidad extracontractual, RDJ, T. LXXXII, pp. 53-58). Aplicando
la regla del artículo 174 del Código de Procedimiento Civil, se colige que
la sentencia de condena en estos autos debe entenderse firme o
ejecutoriada desde que se notificó el decreto que la mandó cumplir, una
vez que terminaron los recursos deducidos en su contra, lo que ocurrió
el 7 de diciembre de 2015 con ocasión de la dictación y notificación por
el estado diario del decreto cúmplase del tribunal a quo. Encontrándose
firme la sentencia desde la época señalada, la obligación de pago que
se contenía en ella se hizo enteramente exigible, constituyéndose en
mora el obligado a partir de este momento, y no antes, pues en la
especie y conforme se lo permitía el inciso 2º del artículo 773 del Código
de Procedimiento Civil, la demandada exigió precisamente no llevar a
efecto la sentencia mientras la actora no rindiera la fianza de resultas
dispuesta por esta Corte en resolución de 13 de abril de 2015, lo que
finalmente ésta no hizo. Conforme, entonces, a lo razonado
precedentemente corresponde, y así se declarará en lo resolutivo de
esta sentencia, acoger la apelación en este capítulo (considerando 3º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 7/06/2018, Rol Nº 7943-2017,

Cita online: CL/JUR/2810/2018

ARTÍCULO 774

Interpuesto el recurso, no puede hacerse en él variación de ningún género.

Por consiguiente, aun cuando en el progreso del recurso se descubra


alguna nueva causa en que haya podido fundarse, la sentencia recaerá
únicamente sobre las alegadas en tiempo y forma.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 770, 771, 772, 776 y 778. Código
Civil: artículo 2336.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Tercería de posesión. Improcedencia de introducir modificaciones al


recurso de casación en el fondo presentado. Recurrente de casación
en el fondo que no denuncia como transgredidas las normas
decisorias de la litis

El recurso de casación en el fondo es extraordinario y formal, por lo


que no está permitido a las partes recurrentes introducir modificaciones
al presentado de conformidad a lo prevenido en el artículo 774 del
Código de Procedimiento Civil y, dada su naturaleza, no es posible
subsidiar las omisiones que en él se han incurrido, de manera que si no
se señalan por el recurrente todos los errores de derecho, que son los
preceptos normativos, debidamente explicitados y que dan competencia
a la Corte Suprema para emitir los pronunciamientos que aquél
pretende, impide su prosperidad, cuyo es el caso de autos. En efecto,
se dan por vulnerados y reseñados los artículos 15, 16 y 17 del
Reglamento del Registro Conservatorio de Bienes Raíces, en relación
con los artículos 700 y 724 del Código Civil; pero no se alude ni
desarrolla el artículo 518 Nº 2 del Código de Procedimiento Civil, que
regula la tercería de posesión que alega el reclamante en este
expediente. Esta última disposición constituye en conjunto con las
denunciadas las normas sustantivas que tienen el carácter de
decisoria litis, esto es, imprescindibles para abocarse al fondo del medio
de impugnación. De manera que, aun en el supuesto que se advirtieran
las infracciones que menciona el recurso, la Corte se encuentra
impedida de acoger el arbitrio por carecer del sustento o instrumento
jurídico del cual se valió la sociedad demandante de tercería para excluir
los bienes indicados del embargo trabado por el ente bancario
(considerando 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 18/03/2019, Rol Nº 15159-2018,

Cita online: CL/JUR/1398/2019

2. Tercería de posesión. Recurso de casación en el fondo es


extraordinario y formal. Improcedencia de introducir modificaciones al
recurso de casación presentado. Recurrente de casación en el fondo
que no denuncia como transgredidas las normas decisorias de la litis

El recurso de casación en el fondo es extraordinario y formal, por lo


que no está permitido a las partes recurrentes introducir modificaciones
al presentado de conformidad a lo prevenido en el artículo 774 del
Código de Procedimiento Civil y, dada su naturaleza, no es posible
subsidiar las omisiones que en él se han incurrido, de manera que si no
se señalan por el recurrente todos los errores de derecho, que son los
preceptos normativos, debidamente explicitados y que dan competencia
a la Corte para emitir los pronunciamientos que aquél pretende, impide
su prosperidad, cuyo es el caso de autos. En efecto, se dan por
vulnerados y reseñados los artículos 15, 16 y 17 del Reglamento del
Registro Conservatorio de Bienes Raíces, en relación con los
artículos 700 y 724 del Código Civil; pero no se alude ni desarrolla el
artículo 518 Nº 2 del Código de Procedimiento Civil, que regula la
tercería de posesión que alega el reclamante en este expediente. Esta
última disposición constituye en conjunto con las denunciadas las
normas sustantivas que tienen el carácter de decisoria litis, esto es,
imprescindibles para abocarse al fondo del medio de impugnación. De
manera que, aun en el supuesto que se advirtieran las infracciones que
menciona el recurso, la Corte de casación se encuentra impedida de
acoger el arbitrio por carecer del sustento o instrumento jurídico del cual
se valió la sociedad demandante de tercería para excluir los bienes
indicados del embargo trabado por el ente bancario (considerando 7º de
la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 14/03/2019, Rol Nº 15162-2018,

Cita online: CL/JUR/1298/2019

ARTÍCULO 775

No obstante lo dispuesto en los artículos 769 y 774, pueden los tribunales,


conociendo por vía de apelación, consulta o casación o en alguna incidencia,
invalidar de oficio las sentencias cuando los antecedentes del recurso
manifiesten que ellas adolecen de vicios que dan lugar a la casación en la
forma, debiendo oír sobre este punto a los abogados que concurran a alegar
en la vista de la causa e indicar a los mismos los posibles vicios sobre los
cuales deberán alegar.

Si el defecto que se advierte es la omisión del fallo sobre alguna acción o


excepción que se haya hecho valer en el juicio, el tribunal superior podrá
limitarse a ordenar al de la causa que complete la sentencia, dictando
resolución sobre el punto omitido, y entre tanto suspenderá el fallo del
recurso.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 159, 160, 170, 208, 222, 223, 962,
768 y 775. Código Tributario: artículo 140. Código del Trabajo: artículo 483.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Responsabilidad del Estado. Resolución que declara inadmisible


recurso de apelación dictada por Ministros afectos a causal de
implicancia. Anulación de oficio

Que, reseñado lo anterior, es preciso recordar que el artículo 775 del


Código de Procedimiento Civil expresa: "No obstante lo dispuesto en los
artículos 769 y 774, pueden los tribunales, conociendo por vía de
apelación, consulta o casación o en alguna incidencia, invalidar de oficio
las sentencias cuando los antecedentes del recurso manifiesten que
ellas adolecen de vicios que dan lugar a la casación en la forma,
debiendo oír sobre este punto a los abogados que concurran a alegar
en la vista de la causa e indicar a los mismos los posibles vicios sobre
los cuales deberán alegar. Si el defecto que se advierte es la omisión
del fallo sobre alguna acción o excepción que se haya hecho valer en el
juicio, el tribunal superior podrá limitarse a ordenar al de la causa que
complete la sentencia, dictando resolución sobre el punto omitido, y
entre tanto, suspenderá el fallo del recurso". Relacionado con lo
anterior, el artículo 766 de mismo Código dice: "El recurso de casación
en la forma se concede contra las sentencias definitivas, contra las
interlocutorias cuando ponen término al juicio o hacen imposible su
continuación". A su turno, el artículo 768 Nº 1 del mismo cuerpo
normativo, indica: "El recurso de casación en la forma ha de fundarse
precisamente en alguna de las causas siguientes: 2a. En haber sido
pronunciada por un juez, o con la concurrencia de un juez legalmente
implicado, o cuya recusación esté pendiente o haya sido declarada por
tribunal competente". Por último, el artículo 195 Nº 8 del Código
Orgánico de Tribunales prescribe: "Son causas de implicancia: 8. Haber
el juez manifestado su dictamen sobre la cuestión pendiente, con
conocimiento de los antecedentes necesarios para pronunciar
sentencia".

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 1/07/2020, Rol


Nº 22988-2019

Cita online: CL/JUR/45765/2020

Fallos en el mismo sentido:


— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 18/05/2020, Rol Nº 29086-
2018,

Cita online: CL/JUR/30834/2020

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 5/05/2020, Rol


Nº 21142-2019,

Cita online: CL/JUR/26630/2020

— Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 30/04/2020, Rol


Nº 31810-2018,

Cita online: CL/JUR/51928/2020

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 30/03/2020, Rol Nº 11639-


2019,

Cita online: CL/JUR/22312/2020

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 7/01/2020, Rol Nº 22018-


2018,

Cita online: CL/JUR/37345/2020

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 28/11/2019, Rol Nº 7601-


2019,

Cita online: CL/JUR/11925/2019

ARTÍCULO 776

Presentado el recurso, el tribunal examinará si ha sido interpuesto en


tiempo y si ha sido patrocinado por abogado habilitado. En el caso que el
recurso se interpusiere ante un tribunal colegiado, el referido examen se
efectuará en cuenta.

Si el recurso reúne estos requisitos, dará cumplimiento a lo establecido en


el inciso primero del artículo 197. 247-248

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículos 186, 191, 197 y 778.
JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Reclamo del monto de indemnización expropiatoria. Sentencia


impugnada no es de aquellas previstas en el artículo 768 del Código
de Procedimiento Civil. Casación en la forma inadmisible

De la lectura de la sentencia, fluye que no es efectivo que carezca de


consideraciones y que no se ha indicado cuál sería la diligencia esencial
supuestamente omitida, pues es menester tener presente que el
artículo 768 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil dispone que:
"En los negocios a que se refiere el inciso segundo del art ículo 766 sólo
podrá fundarse el recurso de casación en la forma en alguna de las
causales indicadas en los números 1º, 2º, 3º, 4º, 6º, 7º y 8º de este
artículo y también en el número 5º cuando se haya omitido en la
sentencia la decisión del asunto controvertido", y es el caso que la
acción de autos corresponde, precisamente, a uno de los contemplados
en el artículo 776 inciso 2º del mismo cuerpo legal, dado que se trata de
una reclamación regida por una ley especial. Como se puede advertir,
la recurrente ha invocado dos infracciones —que se pueden traducir
únicamente en la supuesta falta de consideraciones del fallo, conforme
a los fundamentos de hecho invocados— que no son aplicables a este
tipo de procedimiento, a saber, la pretendida omisión del numeral 4º del
artículo 170 del Código de Procedimiento Civil, por lo que es necesario
concluir que la sentencia objetada por la vía de la casación formal no es
de aquellas previstas en el precepto citado en el razonamiento anterior,
en atención a que la materia del procedimiento incoado no reúne,
consecuentemente, la naturaleza de aquellas que permiten esta clase
de recurso, por lo que no procede admitirlo a tramitación
(considerandos 3º y 4º de la sentencia de Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 29/05/2019, Rol


Nº 29363-2018,

Cita online: CL/JUR/2977/2019

2. Término de contrato de arrendamiento. Requisitos de admisibilidad


del recurso de casación en el fondo. Argumentos y causales que
fundan casación en el fondo que son propios de recurso de casación
en la forma
El recurso de casación en el fondo se concede para invalidar
sentencias pronunciadas con infracción de ley con influencia
trascendente en su parte dispositiva, esto es, que contengan errores de
derecho sustantivo consistentes en su equivocada aplicación,
defectuosa interpretación, o bien, con prescindencia de la normativa
decisoria atinente al caso, de manera tal que, de no ser por ello, la
resolución habría sido otra y favorable a quien recurre (considerando 3º
de la sentencia de la Corte Suprema). De acuerdo a lo dispuesto en el
artículo 782 del Código de Procedimiento Civil, en el examen de
admisibilidad, esta Corte debe revisar si la resolución objeto del recurso
es de aquellas contra las cuales lo concede la ley y si reúne los
requisitos que contemplan los incisos primeros de sus artículos 772 y
776. A su vez, de acuerdo al artículo 772 Nºs. 1º y 2º del código citado,
el recurso debe expresar en qué consiste el o los errores de derecho de
que adolece la sentencia recurrida y señalar de qué modo tuvo
influencia sustancial en lo dispositivo del fallo. En la especie, analizado
el libelo, según el tenor de las disposiciones referidas, se aprecia la
invocación de argumentos y causales propios de un recurso de casación
en la forma, omitiendo señalar los errores de derecho sustantivo en que
habría incurrido el fallo impugnado (considerandos 4º y 5º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 6/05/2019, Rol: 4954-2019,

Cita online: CL/JUR/3063/2019

Fallos en el mismo sentido

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 6/05/2019, Rol Nº 4955-


2019,

Cita online: CL/JUR/3062/2019

3. Notificación de factura. I. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad del recurso de casación en la forma. Resolución
impugnada no reviste la naturaleza jurídica de aquellas señaladas en
el art. 766 del Código de Procedimiento Civil

El artículo 766 del Código de Procedimiento Civil establece que el


recurso de casación en la forma "se concede contra las sentencias
definitivas, contra las interlocutorias cuando ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación y, excepcionalmente, contra las
sentencias interlocutorias dictadas en segunda instancia sin previo
emplazamiento de la parte agraviada, o sin señalar el día de la vista de
la causa". La resolución impugnada por esta vía no reviste la naturaleza
jurídica de aquellas a que se refiere el mencionado artículo 766 del
Código de Procedimiento Civil, razón por la que no resulta procedente
el recurso incoado y, por ende, no puede ser admitido a tramitación
(considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 7/03/2019, Rol Nº 24661-2018,

Cita online: CL/JUR/1154/2019

4. Oposición a registro de marca. Requisitos de admisibilidad del


recurso de casación en el fondo. Recurrente que no estima como
transgredidas normas decisoria litis. Recurrente que no cuestiona la
decisión de fondo

Conforme señala el artículo 782 del Código de Procedimiento Civil,


elevado un proceso en casación de fondo el tribunal debe examinar si
la sentencia objeto del recurso es de aquéllas contra las cuales lo
concede la ley, y si reúne los requisitos que se establecen en los incisos
primero de los artículos 772 y 776 del texto legal citado. En la especie,
del propio tenor del escrito por el que se interpone el recurso de
casación en estudio se pueden comprobar sus defectos, al prescindir la
recurrente y, por lo mismo, no estimar como transgredidas, las normas
decisorias de la litis en materia marcaria, esto es, aquellas que
producen el efecto de resolver la cuestión controvertida, no obstante
que en sus planteamientos ha insistido en que se debió acoger el
reclamo. Esta situación implica que la recurrente no cuestiona la
decisión de fondo, lo que impide que su recurso de casación pueda
prosperar. En efecto, aún en el evento de que esta Corte concordara
con la reclamante en el sentido de haberse producido los errores de
derecho que denuncia en su recurso, tendría que declarar que éstos no
influyen en lo dispositivo de la sentencia desde que lo resuelto sobre la
solicitud de registro marcario rechazada no ha sido considerado como
error de derecho, de manera que en estas condiciones el recurso de
casación en el fondo interpuesto adolece de manifiesta falta de
fundamento (considerandos 3º a 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).
Corte Suprema Segunda Sala (Penal),11/10/2018, Rol Nº 24555-
2018,

Cita online: CL/JUR/5816/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 13/12/2018, Rol Nº 24707-


2018,

Cita online: CL/JUR/6908/2018

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal),11/10/2018, Rol Nº 24557-


2018,

Cita online: CL/JUR/5814/2018

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 11/10/2018, Rol Nº 24558-


2018,

Cita online: CL/JUR/5813/2018

5. Indemnización de perjuicios por responsabilidad contractual.


Interpretación de los artículos 776 y 197 del Código de Procedimiento
Civil en relación a la Ley Nº 20.886 que alteró las formas y
modalidades que han de observarse para consagrar la indefectibilidad
de las resoluciones que se dicten en el procedimiento. Ejercicio de la
facultad de corregir los defectos que puedan afectar la validez de una
relación procesal o los errores en que se incurra en la substanciación
del juicio no puede afectar los derechos que se generan para las
partes con ocasión de los pronunciamientos del tribunal

La Corte de Apelaciones primeramente concede el recurso de


casación en el fondo y condiciona el envío de los antecedentes al
Tribunal de Casación al cumplimiento de la obligación prevista en el
artículo 197 inciso 2º del Código de Procedimiento Civil.
Posteriormente, a la luz de las modificaciones introducidas por la Ley
Nº 20.886 al artículo 776 del Código de Procedimiento Civil, exime al
demandante de tal carga y decreta la remisión vía interconexión. Sin
embargo, luego vuelve a imponérsela y fija un plazo para que el
recurrente consigne fondos suficientes que permitan cubrir el valor de
las respectivas compulsas dentro de sexto día, apercibiéndolo con la
sanción de tener por no presentado el recurso para todos los efectos
legales. La obligación aparece satisfecha por el actor dentro del lapso
que se le otorgó y, no obstante, el tribunal de alzada anula de oficio lo
resuelto, en el entendido que las resoluciones dictadas los días veinte y
veinticinco de septiembre de dos mil dieciocho hicieron revivir un plazo
que ya había expirado, declarando, a la postre, el desistimiento del
recurso por no haber cumplido el recurrente lo ordenado en la primitiva
resolución de cinco de septiembre del año en curso. Las diferentes y
discordantes interpretaciones que los ministros de la Corte de
Apelaciones han efectuado respecto a los artículos 776 y 197 del
Código de Procedimiento Civil en relación a la Ley Nº 20.886 sin duda
agravian al demandante, pues alteran las formas y modalidades que
han de observarse para consagrar la indefectibilidad de las resoluciones
que se dicten en el procedimiento, afectando de este modo los derechos
que de ellas emanan para las partes del juicio. El órgano jurisdiccional
tiene el deber de velar por la debida tramitación del proceso y para ello
puede disponer de las herramientas que el ordenamiento jurídico le
entrega para corregir los defectos que puedan afectar la validez de una
relación procesal o los errores en que se incurra en la substanciación
del juicio. Sin embargo, el ejercicio de tal atribución no puede afectar los
derechos que se generan para las partes con ocasión de los
pronunciamientos del tribunal, como acontece en la situación que se
revisa, no solo porque las resoluciones dictadas los días veinte y
veinticinco de septiembre del año en curso no fueron impugnadas por
las partes, sino porque al invalidarlas de oficio se sanciona al recurrente
de casación con el desistimiento de su recurso pese a que a ese
entonces dicha parte había cumplido lo mandatado por los jueces y
procedió a efectuar la consignación dentro del plazo que esa misma
Corte le otorgó, actuación que realizó con la precisa finalidad de evitar
que se hiciera efectivo el apercibimiento de aplicar esa medida
(considerandos 2º y 3º de la anulación de oficio).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 4/12/2018, Rol Nº 26702-2018,

Cita online: CL/JUR/6886/2018

6. Cobro de pesos. Artículo 12 Nº 18 de Ley Nº 20.886 que prescinde


de obligación de consignar dinero para fotocopias o compulsas,
suprimiendo sanción procesal de deserción del recurso de apelación.
Aplicación de artículo a causas iniciadas con posterioridad a la
entrada en vigencia de la Ley. Causa iniciada con anterioridad a
entrada en vigencia de la Ley. Recurrente que debió cumplir con carga
económica de consignar dinero para fotocopias o compulsas.
Resolución que declara desierto recurso se ajusta a la ley

Los sentenciadores han efectuado una correcta aplicación de la


normativa atinente al caso que se trata. En efecto, si bien mediante el
numeral 18) del artículo 12 de la Ley Nº 20.886 se sustituyó el
artículo 197 del Código de Procedimiento Civil, prescindiendo de la
obligación de consignar dinero para fotocopias o compulsas y
suprimiendo la sanción impuesta para el caso de incumplimiento de tal
carga procesal y, además, en su ordinal 39) se modificó el artículo 776
del Código de Procedimiento Civil eliminando la mención al inciso
segundo del artículo 197, tales enmiendas, por expresa disposición
legal, solo resultan aplicables a las causas iniciadas con posterioridad a
la entrada en vigencia de la citada ley, debiendo considerarse como
fecha de inicio, de acuerdo a lo que prescribe en su artículo segundo
transitorio, la de presentación de la demanda o medida prejudicial,
según corresponda. Dicho lo anterior, cabe concluir que razonan
acertadamente los juzgadores al declarar desistido el recurso de
casación en el fondo interpuesto contra el fallo de segundo grado, pues
tal como consta del expediente, la causa en que incide el presente
arbitrio se inició con anterioridad a la entrada en vigencia de la Ley
Nº 20.886, por lo que conforme a lo dispuesto en el referido
artículo segundo transitorio el recurrente debió cumplir con la carga
económica de consignar dinero suficiente para compulsar o fotocopiar
el expediente o las piezas pertinentes. Por otra parte resulta evidente
que, a diferencia de lo sostenido por el recurrente, el inciso final del
artículo 776 del Código de Procedimiento Civil —en su redacción
anterior a la modificación de la Ley Nº 20.886— no resulta aplicable en
la especie, puesto que la resolución recurrida de casación en el fondo
es la sentencia definitiva de segunda instancia, la que no fue objeto —
ni pudo serlo, por resultar improcedente— de recurso de apelación. En
consecuencia, forzoso es concluir que los sentenciadores, al hacer
efectivo el apercibimiento establecido en el artículo 197 del Código de
Procedimiento Civil y declarar el desistimiento en examen se han
limitado a sancionar el incumplimiento de la parte recurrente en la forma
que ha previsto el legislador, de lo que se sigue que su decisión se
ajusta a derecho y no han incurrido en los errores de derecho
denunciados en el recurso de casación en el fondo, el que adolece de
manifiesta falta de fundamento (considerando 4º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 22/10/2018, Rol Nº 16626-2018,

Cita online: CL/JUR/6140/2018

7. Acción de reivindicación. Falta de consignación de dinero para la


confección de compulsas acarrea la sanción de desistimiento del
recurso. Error de referencia del artículo 776 del Código de
Procedimiento Civil no significa la eliminación de la sanción

La resolución impugnada tuvo por desistido el recurso de casación en


el fondo deducido contra la sentencia de segunda instancia que
confirmó la de primer grado, en atención a la certificación de no haberse
consignado oportunamente fondos para las compulsas. Así, el Máximo
Tribunal ha señalado que la remisión del artículo 776 del Código de
Procedimiento Civil al art ículo 197 incisos 1º y 2º es un error formal que
configura una expresión oscura de la ley, de manera que para dilucidar
su sentido y alcance es necesario acudir a la intención o espíritu
manifestado en la historia fidedigna de dicha normativa. Siguiendo esta
línea de razonamiento resulta pertinente consignar que el citado
artículo 197 tenía solo dos incisos en su redacción primitiva —anterior
a la modificación de la Ley Nº 18.705—, siendo el acápite final del
segundo de ellos idéntico al actual inciso tercero, sin que exista
antecedente alguno que induzca a pensar que la intención del legislador
haya sido la de innovar en la sanción aplicable al caso. Por
consiguiente, una recta inteligencia de los artículos 776 y 197
del Código de Procedimiento Civil no puede ser aquella que postula el
recurrente, pues ello dejaría sin aplicación la sanción impuesta al
litigante que no satisface la carga procesal de financiar sus compulsas
y la regla del art ículo 776 inciso 2º se tornaría inútil y desarmónica con
el entorno en que se inserta. En consecuencia, forzoso es concluir que
el legislador incurrió en un error formal al referir su remisión al
artículo 197 inciso 2º, sin reparar en que su texto luego de la
modificación incorporada por la Ley Nº 18.705 había desplazado la
sanción de desistimiento del recurso al inciso 3º (considerandos 3º y 4º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil, 18/01/2018, Rol Nº 36711-2017,


Cita online: CL/JUR/240/2018

ARTÍCULO 777

Derogado.249

ARTÍCULO 778

Si el recurso no cumple con los requisitos establecidos en el inciso primero


del artículo 776, el tribunal lo declarará inadmisible, sin más trámite.

En contra del fallo que se dicte, sólo podrá interponerse el recurso de


reposición, el que deberá fundarse en error de hecho y deducirse en el plazo
de tercero día. La resolución que resuelva la reposición será inapelable.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículos 181, 187 y 776. Código Orgánico de
Tribunales: artículo 97.

ARTÍCULO 779

Es aplicable al recurso de casación lo dispuesto en el artículo 200. 250-251

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 200, 202 y 211 Código Orgánico de
Tribunales: artículo 398.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cumplimiento obligación corporativa. Voto disidente: Ley de


Tramitación Electrónica eliminó la carga procesal de hacerse parte
ante el tribunal superior a seguir el recurso interpuesto.
Improcedencia de aplicar sanción de deserción por no comparecencia

(Voto disidente) La Ley Nº 20.886 (Ley de Tramitación Electrónica)


modificó el texto del artículo 200 del Código de Procedimiento Civil, que
establecía la carga procesal que pesaba sobre el apelante de
comparecer ante el tribunal superior, haciéndose parte del recurso
dentro del plazo de cinco días contado desde que se reciban los autos
en la Secretaría. En efecto, el actual texto del artículo antes referido
únicamente señala: "El tribunal de alzada deberá certificar en la carpeta
electrónica la recepción de la comunicación a que se refiere el
artículo 197 y su fecha", eliminando la carga procesal antes indicada.
Luego, el artículo 1º transitorio de la Ley Nº 20.886 estableció una fecha
concreta para la entrada en vigencia, a contar de la fecha de su
publicación. En concreto, para las causas que se tramitan ante los
tribunales que ejerzan jurisdicción en los territorios jurisdiccionales de
la Corte de Apelaciones de Santiago, el plazo era de 1 año a contar de
la publicación, realizada el 18.12.2015 (considerandos 1º y 3º de la
disidencia de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil),05/06/2019, Rol: 12881-2019,

Cita online: CL/JUR/3202/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 5/06/2019, Rol Nº 13863-


2019,

Cita online: CL/JUR/3180/2019

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 3/06/2019, Rol Nº 13382-


2019,

Cita online: CL/JUR/3085/2019

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 30/05/2019, Rol Nº 13217-


2019,

Cita online: CL/JUR/2966/2019

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 28/05/2019, Rol: 11976-2019,

Cita online: CL/JUR/3321/2019

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 20/05/2019, Rol: 12178-2019,

Cita online: CL/JUR/2746/2019

— Corte Suprema Primera Sala (Civil),13/05/2019, Rol Nº 7340-2019,

Cita online: CL/JUR/2563/2019


2. Cobro de pagaré. Voto disidente: Vigencia de la Ley en el tiempo. A
la fecha del pronunciamiento de la resolución que declara desierto el
recurso de casación, se encontraba vigente la Ley de Tramitación
Electrónica

(Voto disidente) en el caso de la Ley Nº 20.886, el artículo primero


transitorio estableció una fecha concreta para la entrada en vigencia, a
contar de la fecha de su publicación. En concreto, para las causas que
se tramitan ante los tribunales que ejerzan jurisdicción en los territorios
jurisdiccionales de la Corte de Apelaciones de Santiago, el plazo era de
un año a contar de la publicación, realizada el 18 de diciembre de 2015.
El texto del artículo segundo transitorio, que dispone: "Las disposiciones
de esta ley sólo se aplicarán a las causas iniciadas con posterioridad a
su entrada en vigencia. Las causas se entenderán iniciadas desde la
fecha de presentación de la demanda o medida prejudicial, según
corresponda". En efecto, el sentido y alcance de esta disposición
transitoria es limitado, toda vez que únicamente se refiere al respaldo
material constituido por el expediente físico que ahora pasó a ser
electrónico. En efecto, la tramitación electrónica que constituyó el eje de
la reforma involucró un cambio esencial relacionado con la materialidad
del expediente, el que se elimina. Es en razón de aquello que, para
realizar la transición, se decidió que las causas anteriores a la vigencia
de la ley, que ya contaban con un expediente material, podrían seguir
tramitándose de aquel modo. Este es el único objeto que tuvo la norma
segunda transitoria, que constituye una norma excepcionalísima, que
debe ser interpretada en forma restrictiva y en armonía con la naturaleza
de la ley procesal y con la expresa disposición de vigencia consagrada
en el artículo primero transitorio antes referido (considerandos 3º y 4º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 5/06/2019, Rol Nº 13868-2019,

Cita online: CL/JUR/3597/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 30/05/2019, Rol Nº 12118-


2019,

Cita online: CL/JUR/3137/2019


ARTÍCULO 780

Interpuesto el recurso de casación en el fondo, cualquiera de las partes


podrá solicitar, dentro del plazo para hacerse parte en el tribunal ad quem,
que el recurso sea conocido y resuelto por el pleno del tribunal. La petición
sólo podrá fundarse en el hecho que la Corte Suprema, en fallos diversos, ha
sostenido distintas interpretaciones sobre la materia de derecho objeto del
recurso.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 200. Código Orgánico de Tribunales:


artículos 96 Nº 7 y 98.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Efecto relativo de las sentencias consagrado en artículo 3º, inciso 2º,


del Código Civil. Vigencia de dicho principio es confirmado por
múltiples normas procesales, como por ejemplo, el artículo 780 del
Código de Procedimiento Civil

Que, así las cosas, el que la sentencia impugnada limitara el error


manifiesto que faculta para solicitar la devolución conforme al
artículo 126, a uno de corte formal y de hecho, constituye una
equivocación sin influencia sustancial en lo dispositivo del fallo, pues
incluso aceptando también un error de derecho y de fondo, como el que
se arguye en la solicitud de devolución de autos, el mismo no es
"manifiesto", propiedad sin la que, en caso alguno, el reclamo podría
haber sido acogido.

Que en lo tocante al principio de igualdad que el recurso estima


igualmente vulnerado, por cuanto otros contribuyentes han obtenido la
devolución pretendida, como lo ha resuelto esta Corte ante similar
alegación en rol Nº 37181-15 de 29 de noviembre de 2016 ("al
desatender (el fallo recurrido) otros pronunciamientos de esta Corte
Suprema que fallarían en el sentido propuesto por el recurrente), "cabe
rechazar tal alegación dado el efecto relativo de las sentencias que
consagra expresamente el artículo 3º, inciso 2º, del Código Civil,
principio cuya vigencia múltiples normas procesales confirman, como
por ejemplo, el artículo 780 del Código de Procedimiento Civil y el
artículo 376 del Código Procesal Penal".
A mayor abundamiento, como destaca la misma sentencia recién
citada "si se observa con atención, en esta parte el recurso, más allá de
cuestionar la inaplicación del artículo 19, Nº 2 de nuestra Carta
Fundamental, reprocha que el fallo no se haya ajustado a los
razonamientos y declaraciones efectuadas por esta Corte ... lo que
importa afirmar que la sentencia impugnada infringió lo declarado y
resuelto en dichos pronunciamientos, en circunstancias que el recurso
de casación sólo puede interponerse contra sentencias dictadas con
infracción de ley, como prescribe el artículo 767 del Código de
Procedimiento Civil, naturaleza que no revisten los fallos citados, dado
que, como huelga explicar, en nuestro sistema jurídico el precedente
judicial o derecho precedente no es una fuente formal de creación del
Derecho" (considerandos 10º y 11º).

Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 30/12/2019, Rol Nº 43240-


2017,

Cita online: CL/JUR/12045/2019

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 12/07/2016, Rol Nº 33275-


2016,

Cita online: CL/JUR/5001/2016

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 29/11/2016, Rol Nº 37181-


2015,

Cita online: CL/JUR/8805/2016

ARTÍCULO 781

Elevado un proceso en casación de forma, el tribunal examinará en cuenta


si la sentencia objeto del recurso es de aquéllas contra las cuales lo concede
la ley y si éste reúne los requisitos que establecen los artículos 772, inciso
segundo, y 776, inciso primero.

Si el tribunal encuentra mérito para considerarlo inadmisible, lo declarará


sin lugar desde luego, por resolución fundada.
En caso de no declarar inadmisible desde luego el recurso, ordenará traer
los autos en relación, sin más trámite. Asimismo, podrá decretar autos en
relación, no obstante haber declarado la inadmisibilidad del recurso, cuando
estime posible una casación de oficio.

La resolución por la que el tribunal de oficio declare la inadmisibilidad del


recurso, sólo podrá ser objeto del recurso de reposición, el que deberá ser
fundado e interponerse dentro de tercero día de notificada la resolución.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 181, 213, 223, 181, 772, 776 y 779.
Código Orgánico de Tribunales: artículos 10 y 97.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Compensación económica. Improcedencia del recurso de casación


en la forma respecto de los laudos definitivos emitidos en la alzada

Una interpretación armónica —del artículo 781 del Código de


Procedimiento Civil—, junto a los principios que informan el
procedimiento de familia conduce a inferir que la letra a) del literal sexto
del artículo 67 de la ley Nº 19.968 suprime la procedencia del recurso
de casación en la forma respecto de los laudos definitivos emitidos en
la alzada. Ello puesto que el inciso primero de esta disposición cuando
fija el marco de reglado de los recursos procesales en el procedimiento
de familia, si bien acepta aquellos medios de impugnación
contemplados en el Código de Procedimiento Civil, excluye los recursos
incompatibles con las máximas formativas contenidas en la mencionada
ley y sin perjuicio de las modificaciones que, con posterioridad, la misma
preceptiva introduce. Dentro de tales dogmas surgen los de celeridad,
concentración y desformalización que inspiran esta clase de procesos,
lo que constituye una limitación prevista por la ley para hacer aplicables
las reglas comunes del procedimiento civil que ceden ante la regulación
especial, de manera que lleva a colegir la eliminación de la nulidad
formal respecto de los dictámenes que participan de la naturaleza
jurídica del que por esta vía se analiza, por lo que el arbitrio interpuesto
en autos resulta improcedente y, en consecuencia, no es dable admitirlo
a tramitación (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial),20/05/2019, Rol Nº 4478-


2019,
Cita online: CL/JUR/2849/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 3/06/2019, Rol Nº 11226-


2019,

Cita online: CL/JUR/3116/2019

2. Cumplimiento ejecutivo de la obligación de dar. Incumplimiento de los


requisitos de admisibilidad del recurso de casación en la forma. Fallo
que resuelve recurso de casación en la forma no es susceptible de
ningún otro recurso

El recurso de casación en la forma tampoco resulta ser admisible, en


tanto los reproches que contiene se dirigen a cuestionar el
pronunciamiento que a su vez desestimó el recurso de casación en la
forma deducido contra la sentencia de primer grado, es decir, se acusan
los vicios que se contendrían en la sentencia de casación en la forma
pronunciada por la Corte de Apelaciones de Concepción apoyándose
en los mismos fundamentos en que se fundó aquél que se formuló
contra la sentencia del tribunal a quo, lo que no resulta admisible para
el derecho procesal. En tal sentido, el artículo 63 Nº 1 letra a) del Código
Orgánico de Tribunales dispone que las Cortes de Apelaciones
conocerán en única instancia de los recursos de casación en la forma
que se deduzcan en contra de las sentencias dictadas por los jueces de
letras de su territorio jurisdiccional. La palabra "instancia", en este caso,
está tomada en el sentido de que el fallo que resuelve el
correspondiente recurso de casación en la forma no es susceptible de
ningún otro recurso ni puede ser revisado, de consiguiente, por ningún
tribunal superior (Mario Casarino Viterbo, Manual de Derecho Procesal
Orgánico, Quinta Edición Actualizada, Tomo I, página 161)
(considerandos 9º y 10 de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 9/04/2019, Rol Nº 22152-2018,

Cita online: CL/JUR/1999/2019

3. Cuidado personal y alimentos. I. Improcedencia del recurso de


casación en la forma en contra de la sentencia de segunda instancia
en el procedimiento de familia. Aplicación de principios de celeridad,
desformalización y concentración

Una interpretación armónica de artículo 781 del citado Código de


Procedimiento Civil junto a los principios que informan el procedimiento
de familia conduce a la conclusión de que la letra a) del numeral sexto
del artículo 67 de la Ley Nº 19.968 excluye la procedencia del recurso
de casación en la forma respecto de las sentencias definitivas dictadas
en segunda instancia. Lo anterior por cuanto el inciso primero de la
referida disposición, al establecer el marco de regulación de los
recursos procesales en el procedimiento de familia, si bien acepta la
procedencia de aquellos medios de impugnación que establece el
Código de Procedimiento Civil, excluye aquellos recursos que resulten
incompatibles con los principios formativos que establece la referida ley
y sin perjuicio de las modificaciones que, con posterioridad, la misma
norma establece. Dentro de dichos principios se encuentran los de
celeridad, desformalización y concentración que inspiran a esta clase
de procesos, los que constituye una limitación prevista por la ley para
hacer aplicables las normas comunes del procedimiento civil que ceden
ante la regulación especial, razón que lleva a concluir la exclusión de la
nulidad formal respecto de las sentencias que participan de la
naturaleza jurídica de la que por esta vía se revisa, por lo que el recurso
deducido en estos autos no puede acogerse a tramitación y será
declarado inadmisible (considerando 3º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 19/11/2018, Rol Nº 26408-


2018,

Cita online: CL/JUR/6478/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 5/07/2018, Rol Nº 12843-


2018,

Cita online: CL/JUR/3829/2018

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 21/06/2018, Rol Nº 8001-


2018,
Cita online: CL/JUR/5039/2018

4. Gestión preparatoria de reconocimiento de firma. Disconformidad


entre causal de casación en la forma y alegaciones que sustentan el
recurso

Existe una evidente disconformidad entre la causal de casación en la


forma invocada y las alegaciones en que se sustenta. En efecto, el libelo
esgrime la causal del artículo 768 Nº 9 del Código de Procedimiento
Civil, y, sin embargo, en el cuerpo del escrito se desarrollan argumentos
vinculados con la causal contemplada en el numeral 5º de la citada
disposición, esto es, el haber sido pronunciado el fallo con omisión de
cualquiera de los requisitos enumerados en el artículo 170 de la referida
codificación. Esta anomalía resulta suficiente para declarar inadmisible
el recurso pues la incoherencia del libelo impide constatar —con
certeza— cuál es el vicio o defecto en que se funda, en los términos que
expresamente exigen los artículos 781 inciso 1º y 772 inciso 2º del
Código de Procedimiento Civil, razón por la cual el recurso de casación
en la forma no puede prosperar (considerando 4º de la sentencia de la
Corte Suprema). A mayor abundamiento, una atenta lectura del fallo
recurrido permite verificar que sí contiene las reflexiones que llevaron a
los juzgadores a la decisión de acoger la excepción de prescripción y
desestimar la demanda, de modo que, en mérito de lo razonado el
recurso de casación en la forma no puede prosperar (considerandos 5º
y 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 3/07/2018, Rol Nº 8506-2018,

Cita online: CL/JUR/3341/2018

ARTÍCULO 782

Elevado un proceso en casación de fondo, el tribunal examinará en cuenta


si la sentencia objeto del recurso es de aquéllas contra las cuales lo concede
la ley y si éste reúne los requisitos que se establecen en los incisos primeros
de los artículos 772 y 776.

La misma sala, aun cuando se reúnan los requisitos establecidos en el


inciso precedente, podrá rechazarlo de inmediato si, en opinión unánime de
sus integrantes, adolece de manifiesta falta de fundamento.
Esta resolución deberá ser, a lo menos, someramente fundada y será
susceptible del recurso de reposición que establece el inciso final del
artículo 781.

En el mismo acto el tribunal deberá pronunciarse sobre la petición que haya


formulado el recurrente, en cuanto a que el recurso sea visto por el pleno de
la Corte Suprema, de conformidad a lo establecido en el artículo 780. La
resolución que deniegue esta petición será susceptible del recurso de
reposición que se establece en el inciso final del artículo 781.

Es aplicable al recurso de casación de fondo lo dispuesto en los incisos


segundo, tercero y cuarto del artículo 781.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 770, 772, 776, 780 y 781. Código
Orgánico de Tribunales: artículos 97 y 98.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Servidumbre minera. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad del recurso de casación en el fondo. Recurrente que
omite acusar como conculcadas normas decisorias de la litis

De acuerdo a lo dispuesto en el artículo 782 del Código de


Procedimiento Civil, en el examen de admisibilidad se debe revisar si la
resolución objeto del recurso es de aquellas contra las cuales lo
concede la ley y si reúne los requisitos que contemplan los incisos
primeros de sus artículos 772 y 776. A su vez, de acuerdo al artículo 772
Nºs. 1º y 2º del código citado, el recurso debe expresar en qué consiste
el o los errores de derecho de que adolece la sentencia recurrida y
señalar de qué modo tuvo influencia sustancial en lo dispositivo del fallo.
Analizado el libelo según el tenor de las disposiciones referidas, se
aprecia la invocación de argumentos y causales propias de una nulidad
formal, referidos a la oportunidad en que debe acompañarse la prueba
por los litigantes, omitiendo acusar conculcadas normas decisorias de
la litis, esto es, de aquellas conforme a las cuales se resolvió la
controversia sometida a la decisión; razón por la que el recurso no
puede prosperar (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 15/05/2019, Rol Nº 4547-


2019,
Cita online: CL/JUR/2715/2019

2. Precario. Impugnación que omite señalar los errores de derecho en


que incurría el fallo impugnado. Casación en el fondo declarada
inadmisible

Analizado el libelo según el tenor de las disposiciones referidas


(artículos 782 y 772 del Código de Procedimiento Civil), se aprecia la
invocación de argumentos y causales propias de una nulidad formal,
puesto que omite señalar los errores de derecho sustantivo en que
incurriría el fallo impugnado, limitándose a reprochar la aplicación de
ciertas normas probatorias y de nulidad por errores procesales,
careciendo por tanto de un desarrollo íntegro y explicación suficientes
de la infracción de derecho que acusa y sin denunciar la conculcación
del articulado que establece los presupuestos de la demanda acogida.
Por estas consideraciones y de conformidad con las disposiciones
citadas, se declara inadmisible el recurso de casación en el fondo
(considerando 5º de la sentencia de Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 15/05/2019, Rol Nº 4895-


2019,

Cita online: CL/JUR/2744/2019

3. Término de contrato de arrendamiento. Requisitos de admisibilidad


del recurso de casación en el fondo. Argumentos y causales que
fundan casación en el fondo que son propios de recurso de casación
en la forma

El recurso de casación en el fondo se concede para invalidar


sentencias pronunciadas con infracción de ley con influencia
trascendente en su parte dispositiva, esto es, que contengan errores de
derecho sustantivo consistentes en su equivocada aplicación,
defectuosa interpretación, o bien, con prescindencia de la normativa
decisoria atinente al caso, de manera tal que, de no ser por ello, la
resolución habría sido otra y favorable a quien recurre (considerando 3º
de la sentencia de la Corte Suprema).

De acuerdo a lo dispuesto en el artículo 782 del Código de


Procedimiento Civil, en el examen de admisibilidad, esta Corte debe
revisar si la resolución objeto del recurso es de aquellas contra las
cuales lo concede la ley y si reúne los requisitos que contemplan los
incisos primeros de sus artículos 772 y 776. A su vez, de acuerdo al
artículo 772 Nºs. 1º y 2º del código citado, el recurso debe expresar en
qué consiste el o los errores de derecho de que adolece la sentencia
recurrida y señalar de qué modo tuvo influencia sustancial en lo
dispositivo del fallo. En la especie, analizado el libelo, según el tenor de
las disposiciones referidas, se aprecia la invocación de argumentos y
causales propios de un recurso de casación en la forma, omitiendo
señalar los errores de derecho sustantivo en que habría incurrido el fallo
impugnado (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 6/05/2019, Rol Nº 4954-2019,

Cita online: CL/JUR/3063/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial),06/05/2019, Rol Nº 4955-


2019,

Cita online: CL/JUR/3062/2019

4. Reclamo de ilegalidad. Solo jueces de fondo pueden fijar los hechos


de la causa. Casación en el fondo que adolece de manifiesta falta de
fundamento

El recurrente al fundar su arbitrio se revela una insatisfacción y


divergencia con la manera en que los jueces del fondo valoraron la
prueba rendida. En efecto, no fluye de la sentencia la omisión acusada
por el recurrente, ni las demás infracciones que se acusan, todas las
cuales se afincan en lo que considera una errada ponderación de la
prueba, circunstancia que hace palmario que el fundamento último del
recurso es una mera discrepancia en su valoración, a la cual se
reconducen los demás errores de derecho denunciados. Como se viene
sosteniendo de manera irrestricta por esta Corte, menester es recordar
que los jueces del fondo son soberanos para apreciar las probanzas,
dentro del marco establecido por las normas pertinentes. Por ello, no
pueden ser revisadas por la vía de casación las decisiones basadas en
disposiciones que les otorgan libertad en la valoración de los diversos
elementos probatorios. Que conforme se observa, lo razonado resulta
suficiente para concluir que el recurso en análisis incurre en manifiesta
falta de fundamento (considerandos 4º a 6º de la sentencia de Corte
Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 8/04/2019, Rol


Nº 3899-2019,

Cita online: CL/JUR/2540/2019

5. Medida de protección en favor de menor. Remisión de antecedentes


al Ministerio Público y contenido mismo de la denuncia no justifican la
concreción de una nueva medida de protección. Ausencia de error de
derecho

En la audiencia preparatoria, la juez de la causa, luego de escuchar


el requerimiento y la opinión de la consejera técnica, concluyó la
existencia de antecedentes que justifican la remisión de los
antecedentes al Ministerio Público, descartando decretar evaluaciones
periciales a la niña, tomando en consideración que ya se encuentra en
terapia y que, por lo demás, deberá ser evaluada en sede penal,
debiendo evitarse la revictimización y sobre evaluación. Atendido lo
anterior, desestimó el requerimiento, sin perjuicio de lo cual, decretó,
con el fin de prevenir que la niña sea expuesta a alguna situación en
desmedro de su terapia psicológica, la medida cautelar de prohibición
de acercamiento del padre por el término de noventa días. De esta
forma, la sentencia impugnada no incurre en los errores de derecho
denunciados, toda vez que, atendido el contenido de la denuncia
formulada y la decisión de remisión de los antecedentes al órgano de
persecución penal, no resulta justificable la concreción de alguna nueva
medida de protección en competencia de un tribunal de familia, teniendo
en consideración que la niña se encuentra actualmente en terapia
psicológica, y que en sede penal se discutirán aquellas evaluaciones
pretendidas por la requirente, como asimismo, la dictación de otras
medidas cautelares (considerandos 4º y 5º de la sentencia de Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 1/04/2019, Rol Nº 4421-2019,

Cita online: CL/JUR/2391/2019


6. Reclamo de Ilegalidad. Solo jueces de fondo se encuentran
facultados para fijar los hechos de la causa. Recurso de casación en
el fondo tiene carácter de derecho estricto

Se cuestiona los hechos asentados por los jueces y las conclusiones


a las que arribaron, producto de la ponderación de la prueba efectuada
por éstos y, en definitiva, impugna el proceso intelectual de valoración
de los medios de prueba incorporados en la etapa procesal pertinente.
Como ha sido reiteradamente señalado por esta Corte, sólo los jueces
del fondo se encuentran facultados para fijar los hechos de la causa, sin
que sea dable su revisión en esta sede, a menos que se denuncie de
manera correcta el quebrantamiento de disposiciones que integran el
sistema valorativo lo que no ocurre. Entonces, como los presupuestos
fácticos establecidos como producto del proceso de ponderación, no
son susceptibles de control por medio de este mecanismo extraordinario
y de derecho estricto, resultan inamovibles para esta Corte. Por lo
expuesto, se debe concluir que como la decisión impugnada se basa en
los hechos que se tuvieron por establecidos, no han podido impugnarse
las otras normas que se mencionan, por lo que el arbitrio debe ser
rechazado por manifiesta falta de fundamento (considerandos 4º y 5º de
la sentencia de Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 25/03/2019, Rol


Nº 4158-2019,

Cita online: CL/JUR/1829/2019

7. Tercería. Recurso de casación en el fondo es de derecho estricto.


Litigante que carece de la calidad de agraviado

Como se viene afirmando, el recurso de casación comparte con


aquellos de tipo ordinario varias exigencias y una de ellas es
precisamente el agravio que debe manifestar y soportar quien lo
interpone; requerimiento que no sólo constituye un imperativo de
carácter legal sino que, además, determina uno de los límites a los que
debe ajustarse la respuesta de esta Corte. En efecto, su competencia
se circunscribe doblemente, tanto por el vicio que sustenta la
impugnación como por el perjuicio denunciado por el recurrente. En esta
línea de argumentación, cabe tener presente que el recurso de
apelación deducido, en su oportunidad, contra la sentencia del grado,
por el ahora recurrente de casación, fue declarado inadmisible por una
sala de la Corte de Apelaciones de Arica, la que, no obstante ello,
conoció igualmente de la causa en razón de una apelación deducida por
otro de los litigantes, confirmando el fallo de base. De esta manera y
como consecuencia de la mencionada inadmisibilidad, para todos los
efectos procesales, el recurso de apelación en comento es como si
jamás se hubiera interpuesto y, por lo tanto, este litigante carece de la
calidad de agraviado que lo habilite para deducir el presente recurso de
casación, lo que conduce a declarar su rechazo (considerandos 3º y 4º
de la sentencia de Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 21/03/2019, Rol Nº 16494-2018,

Cita online: CL/JUR/1633/2019

8. Indemnización de perjuicios. Resolución que declara el abandono del


procedimiento no tiene la naturaleza de una sentencia definitiva o
interlocutoria que pone término al juicio o hace imposible su
continuación

La resolución que no hace lugar al abandono del procedimiento,


claramente, no comparte la naturaleza jurídica de las resoluciones que
hacen procedente el recurso en estudio, toda vez que no es una
sentencia definitiva, como tampoco es una sentencia interlocutoria que
ponga término al juicio o haga imposible su continuación. En efecto, una
sentencia interlocutoria "pone término al juicio" en aquellos casos en
que se pronuncia acerca de las formas anormales de terminación del
proceso, situación en que se encuentra la que, por ejemplo, acoge el
desistimiento de la demanda. Es decir, constituye un pronunciamiento
que termina el pleito, impidiendo plantear otros procesos con el mismo
objeto. A su vez "hacen imposible su continuación" las sentencias
interlocutorias que impiden seguir el procedimiento en curso, sin
perjuicio de poder iniciar otro proceso con idéntico objeto, situación en
la que se halla la resolución que acoge el abandono del procedimiento,
desde que no hace concluir el conflicto sometido a la decisión del
tribunal. Por el contrario, la sentencia interlocutoria que no hace lugar a
este último incidente, como lo es aquella impugnada por vía de nulidad
sustancial en estos autos, no impide iniciar un nuevo proceso con el
mismo objeto. Según se expresó, la sentencia interlocutoria que
rechaza el abandono del procedimiento no goza de la naturaleza jurídica
que hace viable el recurso de casación en el fondo, toda vez que el
proceso no ha concluido ni ha quedado paralizado con motivo del
pronunciamiento que se refuta, puesto que los litigantes pueden seguir
actuando en él (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 20/03/2019, Rol


Nº 32904-2018,

Cita online: CL/JUR/1473/2019

9. Arrendamiento. Fallo que no se ha extendido a materias extrañas al


conflicto. Sentencia que contiene todos los fundamentos de hecho y
derecho que le sustentan

La decisión adoptada se sitúa dentro del marco de lo discutido, pues


no obstante que el recurrente estime que la acción deducida
correspondería a tres acciones distintas, lo cierto es que el libelo es
claro, tanto en sus fundamentos de hecho como de derecho, en cuanto
a solicitar el cese de la cosa común y la restitución de los frutos de los
que se apropió, que hace consistir en rentas de arrendamiento, por lo
que no es posible concluir que el fallo se haya extendido a materias o
puntos extraños al conflicto ventilado en el proceso u otorgado algo
distinto de lo pedido en la demanda, ya que no es efectivo que se
demandaran las rentas como indemnización de perjuicios y porque
perfectamente puede el tribunal desestimar una parte de lo pedido por
no haberse probado su existencia (considerando 5º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Lo antes referido resulta suficiente, también, para concluir que no se


configura la causal del artículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento
Civil, por cuanto la sentencia impugnada contiene los fundamentos de
hecho y derecho que le sirven de sustento, pues analiza los requisitos
de la acción deducida y la prueba rendida, sobre cuya base desestima
las defensas del demandado y concluye que sólo se acreditó la
existencia de la comunidad, el goce gratuito sin título que lo autorice y
que los comuneros deben pagar por ello, explicitando las
consideraciones que determinan que no se dé lugar al pago de los
frutos. De manera que no existe la omisión denunciada y, a mayor
abundamiento, no le causa perjuicio al recurrente, motivo por el que el
recurso de nulidad formal debe ser desestimado en esta etapa de
tramitación (considerando 6º de la sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 13/03/2019, Rol Nº 28278-
2018,

Cita online: CL/JUR/1235/2019

10. Cuidado personal. Ponderación de la prueba no es revisable


mediante casación en el fondo. Cuidado entregado a madre de menor
por contar con mejores condiciones para garantizar su estabilidad
emocional

El recurrente se alza en contra de los hechos establecidos como


producto de la ponderación de la prueba rendida y, como esta Corte ha
señalado reiteradamente, sólo la judicatura del fondo se encuentra
facultada para fijarlos, sin que sea dable su revisión en esta sede, a
menos que se denuncie y acredite el quebrantamiento de las
disposiciones que integran el sistema valorativo de la sana crítica, lo
que, en la especie, no ocurrió, puesto que, si bien se acusa infracción
al artículo 32 de la Ley Nº 19.968, la crítica se concentra en el valor que
se otorgó a diversos medios de prueba, que no comparte, ofreciendo
conclusiones alternativas a partir de tales antecedentes, pero omite
presentar los atentados precisos a las reglas de la lógica, las máximas
de la experiencia y los conocimientos científicamente aceptados en que
se habría incurrido; razón por la que el marco fáctico determinado sobre
la base de la apreciación probatoria, no son susceptibles de control por
medio de este mecanismo extraordinario y de derecho estricto.
Asimismo, denuncia la infracción a los art ículos 225-2 del Código Civil,
3.1 de la Convención de Derechos del Niño y 16 y 66 de la Ley Nº
19.968, alegación que también deberá ser rechazada, por cuanto el fallo
contiene un análisis de cada uno de los aspectos que el primero señala,
orientado a determinar qué es lo mejor para el interés y desarrollo de la
niña en relación con su historia de vida y actual etapa de desarrollo,
justificando los motivos que llevan a concluir la conveniencia de
mantenerla junto a la madre, quien cuenta con las mejores condiciones
para garantizar su estabilidad emocional y correcto desarrollo, sin
perjuicio de destacar la importancia del vínculo que comparte con el
padre y los esfuerzos que realiza para erigirse en una figura presente y
protectora para su hija, lo que permite concluir la correcta aplicación de
las normas cuya vulneración se acusó; razón por la que el arbitrio
deberá ser desestimado en esta etapa de tramitación, por adolecer de
manifiesta falta de fundamento (considerando 4º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 12/03/2019, Rol Nº 19077-


2018,

Cita online: CL/JUR/1361/2019

11. Oposición a registro de marca. Requisitos de admisibilidad del


recurso de casación en el fondo. Recurrente que no estima como
transgredidas normas decisoria litis. Recurrente que no cuestiona la
decisión de fondo

Conforme señala el artículo 782 del Código de Procedimiento Civil,


elevado un proceso en casación de fondo el tribunal debe examinar si
la sentencia objeto del recurso es de aquéllas contra las cuales lo
concede la ley, y si reúne los requisitos que se establecen en los incisos
primero de los artículos 772 y 776 del texto legal citado. En la especie,
del propio tenor del escrito por el que se interpone el recurso de
casación en estudio se pueden comprobar sus defectos, al prescindir la
recurrente y, por lo mismo, no estimar como transgredidas, las normas
decisorias de la litis en materia marcaria, esto es, aquellas que
producen el efecto de resolver la cuestión controvertida, no obstante
que en sus planteamientos ha insistido en que se debió acoger el
reclamo. Esta situación implica que la recurrente no cuestiona la
decisión de fondo, lo que impide que su recurso de casación pueda
prosperar. En efecto, aún en el evento de que esta Corte concordara
con la reclamante en el sentido de haberse producido los errores de
derecho que denuncia en su recurso, tendría que declarar que éstos no
influyen en lo dispositivo de la sentencia desde que lo resuelto sobre la
solicitud de registro marcario rechazada no ha sido considerado como
error de derecho, de manera que en estas condiciones el recurso de
casación en el fondo interpuesto adolece de manifiesta falta de
fundamento (considerandos 3º a 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 13/12/2018, Rol Nº 24707-


2018,

Cita online: CL/JUR/6908/2018


Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 11/10/2018, Rol Nº 24557-


2018,

Cita online: CL/JUR/5814/2018

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 11/10/2018, Rol Nº 24555-


2018,

Cita online: CL/JUR/5816/2018

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 11/10/2018, Rol Nº 24586-


2018,

Cita online: CL/JUR/5810/2018

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 11/10/2018, Rol Nº 24646-


2018,

Cita online: CL/JUR/5808/2018

12. Resolución de contrato. Requisitos de admisibilidad del recurso de


casación en el fondo. Casación en el fondo no admite peticiones
subsidiarias. Recurrente que no denuncia infracción de normas
decisoria litis

Para la admisibilidad de un recurso de casación de fondo el


artículo 782 del Código de Procedimiento Civil dispone: "Elevado un
proceso en casación de fondo, el tribunal examinará en cuenta si la
sentencia objeto del recurso es de aquéllas contra las cuales lo concede
la ley y si éste reúne los requisitos que se establecen en los incisos
primeros de los art ículos 772 y 776". A su vez, el artículo 772 del mismo
cuerpo legal es del siguiente tenor: "El escrito en que se deduzca el
recurso de casación en el fondo deberá: 1) Expresar en qué consiste el
o los errores de derecho de que adolece la sentencia recurrida, y
2) Señalar de qué modo ese o esos errores de derecho influyen
sustancialmente en lo dispositivo del fallo". Por su parte, el artículo 785
del citado código establece: "Cuando la Corte Suprema invalide una
sentencia por casación en el fondo, dictará acto continuo y sin nueva
vista, pero separadamente, sobre la cuestión materia del juicio que haya
sido objeto del recurso, la sentencia que crea conforme a la ley y al
mérito de los hechos tales como se han dado por establecidos en el fallo
recurrido...". De esta manera, el recurso de casación en el fondo debe
denunciar todos los errores de derecho de que, a juicio del recurrente,
adolezca la sentencia que se impugna por dicha vía. Y, seguidamente,
debe solicitar que se anule el fallo y dicte uno de reemplazo que
resuelva el litigio de la manera como lo estima pertinente. En
consecuencia, no resulta admisible que en este arbitrio extraordinario
se formulen peticiones subsidiarias, como ocurre en la especie
(considerandos 11º a 13º de la sentencia de la Corte Suprema).

En consecuencia, la manera como se formuló el petitorio del recurso


de casación en el fondo, procesalmente incorrecta, torna inviable el
recurso cuyo examen de admisibilidad se lleva a cabo porque
contraviene la normativa ya referida. A mayor abundamiento, y sin
perjuicio de lo anterior, la exigencia consignada en artículo 772 del
Código de Procedimiento Civil imponía al recurrente la obligación de
explicar los contenidos sustantivos del instituto que hizo valer en el
juicio, y versando la contienda sobre una acción de responsabilidad
contractual, quien recurre debió extender la infracción de ley al
artículo 1489 del Código Civil. Esta normativa tiene carácter
decisorio litis pues fue precisamente este precepto aquel que sirve de
sustento a la demanda y, ciertamente, deberá ser aplicado en la
sentencia de reemplazo que se dicte en el evento de ser acogido el
presente arbitrio procesal. Al no hacerlo, genera un vacío que la Corte
no puede subsanar dado el carácter de derecho estricto que reviste el
recurso de casación intentado (considerandos 14º y 15º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 5/03/2018, Rol Nº 36648-2017,

Cita online: CL/JUR/4002/2018

ARTÍCULO 783

En la vista de la causa se observarán las reglas establecidas para las


apelaciones.

La duración de las alegaciones de cada abogado se limitará, a una hora en


los recursos de casación en la forma y a dos horas en los de casación en el
fondo. En los demás asuntos que conozca la Corte Suprema, las alegaciones
sólo podrán durar media hora.

El tribunal podrá, sin embargo, por unanimidad, prorrogar por igual tiempo
la duración de las alegaciones. Con todo, si se tratare de una materia distinta
de la casación, el tribunal podrá prorrogar el plazo por simple mayoría.

Las partes podrán, hasta el momento de verse el recurso, consignar en


escrito firmado por un abogado, que no sea procurador del número, las
observaciones que estimen convenientes para el fallo del recurso.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 163 al 166, 223 al 230 y 805. Código
Orgánico de Tribunales: artículos 72 y siguientes.

ARTÍCULO 784

El recurso de casación se sujetará, además, a las disposiciones especiales


de los párrafos 2º, 3º y 4º de este Título, según sea la naturaleza del juicio en
que se haya pronunciado la sentencia recurrida.

ARTÍCULO 785

Cuando la Corte Suprema invalide una sentencia por casación en el fondo,


dictará acto continuo y sin nueva vista, pero separadamente, sobre la
cuestión materia del juicio que haya sido objeto del recurso, la sentencia que
crea conforme a la ley y al mérito de los hechos tales como se han dado por
establecidos en el fallo recurrido, reproduciendo los fundamentos de derecho
de la resolución casada que no se refieran a los puntos que hayan sido
materia del recurso y la parte del fallo no afectada por éste.

En los casos en que desechare el recurso de casación en el fondo por


defectos en su formalización, podrá invalidar de oficio la sentencia recurrida,
si se hubiere dictado con infracción de ley y esta infracción haya influido
substancialmente en lo dispositivo de la sentencia. La Corte deberá hacer
constar en el fallo de casación esta circunstancia y los motivos que la
determinan, y dictará sentencia de reemplazo con arreglo a lo que dispone el
inciso precedente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 767, 772, 786 y 807. Auto Acordado
de la Corte Suprema sobre la forma de las sentencias D.O. 30.09.1920.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Divorcio y compensación económica. I. Tribunal de Casación no
puede modificar los hechos establecidos por los jueces del fondo si
no hay vulneración de las reglas de la sana crítica. Recurrente de
casación en el fondo que no indica las reglas de la sana crítica que
habrían sido vulneradas

Los presupuestos fácticos resultan inamovibles en sede de casación,


según se desprende de lo que dispone el artículo 785 del Código de
Procedimiento Civil, salvo que se acuse la vulneración de lo que dispone
el artículo 32 de la Ley Nº 19.968; lo que no sucede en el recurso
deducido por el demandado reconvencional, pues no se denuncia su
infracción, ni se efectúa un análisis preciso que explique cómo se
produjo la falta o que indique cuál de las reglas que componen el
sistema de apreciación probatoria fue incorrectamente aplicada o qué
medio de prueba fue erradamente valorado, centrándose la crítica en la
valoración de la prueba, esto es, en las conclusiones a que se arribó a
partir del análisis de cada uno de las probanzas incorporadas, que no
son compartidas por el recurrente, pero omite considerar que la
sentencia expresa las razones y motivaciones sobre cuya base se
acogió la demanda de compensación económica, teniendo como
fundamento principal que la cónyuge trabajó en menor medida de lo que
quería y podía, debido a los constantes traslados de ciudad que tuvo
soportar por su ascenso en la carrera militar y que como consecuencia
de dichos cambios, mudó su residencia a la ciudad de Calama, donde
no pudo desplegar una actividad laboral completa y un buen nivel
remuneracional, que fue el fundamento para elevar el monto concedido
como compensación (considerando 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 26/06/2020, Rol Nº 29919-


2019,

Cita online: CL/JUR/45731/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 20/06/2019, Rol Nº 7766-


2019,

Cita online: CL/JUR/3773/2019


2. Nulidad de contrato de cesión de derechos. Facultad privativa de los
jueces del fondo para apreciar la prueba y establecer los hechos de
la causa. Tribunal de Casación no puede modificar los hechos
establecidos por los jueces del fondo si no hay vulneración de las
leyes reguladoras de la prueba

Solo los jueces del fondo se encuentran facultados para fijar los
hechos de la causa, y que efectuada correctamente dicha labor, al
determinar éstos con sujeción al mérito de los antecedentes, probanzas
aportadas por las partes, interpretación y aplicación de las normas
atinentes al caso en estudio, ellos resultan inamovibles para el tribunal
de casación, conforme a lo previsto en el artículo 785 del Código de
Procedimiento Civil, no siendo posible su revisión por la vía de la
casación en el fondo, a menos que se haya denunciado alguna
contravención a las leyes reguladoras de la prueba (considerando 4º de
la sentencia de la Corte Suprema).

De la lectura del recurso se desprende que lo que se ataca por esta


vía en examen no corresponde propiamente a la infracción de una ley
imperativa, sino que, a la ponderación judicial de la prueba rendida por
las partes, desde que se reprocha que los sentenciadores hayan tenido
por acreditada la hipótesis fáctica sostenida por la parte demandante.
En estas condiciones, sólo cabe constatar que la actividad destinada a
apreciar y ponderar las probanzas rendidas en juicio se agotó con la
determinación que, a este respecto, hicieron los jueces del fondo,
quienes —en uso de sus facultades privativas— dejaron establecidos
los presupuestos materiales que autorizan acoger la acción subsidiaria
(considerando 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 1/06/2020, Rol Nº 37032-2019,

Cita online: CL/JUR/34895/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 28/04/2020, Rol Nº 2794-


2020,

Cita online: CL/JUR/25575/2020

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 13/03/2020, Rol Nº 81-2019,


Cita online: CL/JUR/18738/2020

3. Acción de reivindicación y reconvencional de prescripción adquisitiva.


Tribunal de Casación no puede modificar los hechos establecidos por
los jueces del fondo si no hay vulneración de las leyes reguladoras de
la prueba. Nueva valoración de la prueba excede el ámbito del recurso
de casación en el fondo

La actividad destinada a apreciar y ponderar las probanzas rendidas


en juicio se agotó con la determinación que a este respecto hicieron los
jueces del fondo, quienes —en uso de sus facultades privativas—
dejaron establecidos los presupuestos materiales que llevaron a
desestimar la demanda entablada, los que resultan inamovibles para
este tribunal de casación. De lo anotado se sigue que el arbitrio sustenta
los quebrantamientos de los preceptos sustantivos citados en el motivo
primero de este fallo en razón de una sucesión de hechos extraños a la
causa cuya existencia, no obstante, el recurrente al parecer da por
descontado; pero debe recordarse la necesidad de establecer un
presupuesto fáctico acorde con el postulado de casación, lo que se
aprecia en lo que expresamente preceptúa el artículo 785 del Código de
Procedimiento Civil, en cuanto advierte que "Cuando la Corte Suprema
invalide una sentencia por casación en el fondo, dictará acto continuo y
sin nueva vista, pero separadamente, sobre la cuestión materia del
juicio que haya sido objeto del recurso, la sentencia que crea conforme
a la ley y al mérito de los hechos tales como se han dado por
establecidos en el fallo recurrido, reproduciendo los fundamentos de
derecho de la resolución casada que no se refieran a los puntos que
hayan sido materia del recurso y la parte del fallo no afectada por éste".
Así, resulta evidente que los errores de Derecho que se denuncian en
el primer acápite invalidatorio requieren, ineludiblemente, la revisión de
los hechos determinados en el pronunciamiento impugnado y el
establecimiento de aquellos imprescindibles de fijar para el éxito del
recurso, por cuanto el fallo de reemplazo que habría de dictarse debe
respetar el mérito de los hechos "tal y como se han dado por
establecidos en el fallo recurrido", lo que en la especie supondría
analizar la aplicación de los preceptos cuya transgresión se acusa en
relación a un sustrato fáctico que no guarda relación alguna con los
hechos postulados en el libelo anulatorio (considerandos 8º y 9º de la
sentencia de la Corte Suprema).
Corte Suprema Primera Sala (Civil), 29/05/2020, Rol Nº 12766-2018,

Cita online: CL/JUR/35007/2020

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 29/05/2020, Rol Nº 12788-


2018,

Cita online: CL/JUR/35006/2020

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 17/06/2019, Rol Nº 5807-


2019,

Cita online: CL/JUR/3479/2019

4. Rebaja de pensión alimenticia. Tribunal de Casación no puede


modificar los hechos establecidos por los jueces del fondo si no hay
vulneración de las reglas de la sana crítica. Recurrente de casación
en el fondo debe indicar las reglas de la sana crítica que habrían sido
vulneradas. Recurrente de casación en el fondo que no denuncia
como transgredidas las normas decisorias de la litis

Los presupuestos fácticos resultan inamovibles en sede de casación,


según se desprende de lo que dispone el artículo 785 del Código de
Procedimiento Civil, salvo que se acuse la vulneración de lo que dispone
el artículo 32 de la Ley Nº 19.968, que ordena que la prueba debe
apreciarse conforme a las reglas de la sana crítica. El Máximo Tribunal
ha expresado reiteradamente que para prospere un recurso de casación
en el fondo que se basa en la incorrecta aplicación de la citada
disposición, que autorizaría alterar los hechos asentados en la
sentencia que se impugna, es menester que se indique cuál de los
elementos que componen el referido sistema de valoración de la prueba
fue infringido; causal que también se puede basar en el hecho que la
sentencia no se hizo cargo en su fundamentación de toda la prueba
rendida, incluso de aquella que fue desestimada, indicando en tal caso
las razones tenidas en cuenta para hacerlo, tal como lo prevé el
artículo 32 de la Ley Nº 19.968; sin embargo, como de la lectura del
recurso se aprecia que no da cumplimiento a lo señalado y que, en
definitiva, se impugna el proceso intelectual de apreciación de la prueba
rendida por los litigantes, que escapa al control de casación, el capítulo
que se analiza no puede prosperar, por lo que el recurso de casación
en el fondo deducido por la demandada principal y demandante
reconvencional debe ser rechazado. Sin perjuicio de lo manifestado, es
menester hacer presente que aún en el evento que pudiera estimarse
que existe una infracción a las reglas de la lógica, el recurso enderezado
por la demandada principal y demandante reconvencional, de igual
modo no podría prosperar, desde que no ha denunciado la infracción de
ninguna norma decisoria litis, esto es, de aquellas que sirven para
resolver el asunto planteado, dejando en consecuencia a esta Corte sin
sustento para dictar una eventual sentencia de reemplazo en que deba
considerar hechos distintos a los que vienen fijados (considerandos 4º
y 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 14/05/2020, Rol Nº 7673-


2019,

Cita online: CL/JUR/30828/2020

5. Reclamación tasación servidumbre eléctrica. Facultad privativa de los


jueces del fondo para apreciar la prueba y establecer los hechos de
la causa. Tribunal de Casación no puede modificar los hechos
establecidos por los jueces del fondo si no hay vulneración de las
leyes reguladoras de la prueba. Nueva valoración de la prueba
excede el ámbito del recurso de casación en el fondo

El Máximo Tribunal ha sostenido reiteradamente que sólo los


tribunales del fondo se encuentran facultados para fijar los hechos de la
causa y que, efectuada correctamente dicha labor, esto es, con sujeción
a las denominadas normas reguladoras de la prueba atinentes al caso
en estudio, resultan inalterables para el tribunal de casación, conforme
lo previsto en el artículo 785 del Código de Procedimiento Civil, no
siendo posible su revisión por la vía de la nulidad que se analiza, menos
aun cuando, como en la especie, no se han infringido las denominadas
normas reguladoras de la prueba. En efecto, en el caso de marras, lo
que se denuncia es una errada valoración de la prueba rendida en juicio,
en particular de un informe acompañado por la contraria, pretendiendo
que la Corte realice una nueva ponderación, lo que resulta
improcedente, puesto que tal actividad es extraña a los fines de la
casación en el fondo, siendo propia y exclusiva de la judicatura del
grado (considerando 12º de la sentencia de la Corte Suprema).
Los yerros de que se acusa no se evidencian, puesto que la sentencia
impugnada eliminó la determinación del precio de los caminos que hizo
el de primera instancia en la complementación de sentencia de
veintinueve de diciembre de dos mil diecisiete, reconduciendo la
apreciación al propio informe de tasación de la Comisión de Tasadores
que señala que el valor que debe darse a los caminos dentro y fuera de
la faja de protección es de $500 el metro cuadrado. Lo que pretende, en
definitiva, la demandada es una nueva valoración de la prueba que se
ajuste a sus pretensiones, lo que resulta improcedente, puesto que,
como se dijo, tal actividad es extraña a los fines de la casación en el
fondo, siendo propia y exclusiva de la judicatura del grado
(considerando 15º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 20/04/2020, Rol Nº 11987-


2018,

Cita online: CL/JUR/35020/2020

6. Divorcio y compensación económica. I. Tribunal de Casación no


puede modificar los hechos establecidos por los jueces del fondo si
no hay vulneración de las reglas de la sana crítica. Recurrente de
casación en el fondo debe indicar las reglas de la sana crítica que
habrían sido vulneradas

Los presupuestos fácticos resultan inamovibles en sede de casación,


según se desprende de lo que dispone el artículo 785 del Código de
Procedimiento Civil, salvo que se acuse la vulneración de lo que dispone
el artículo 32 de la Ley Nº 19.968, que ordena que la prueba debe
apreciarse conforme a las reglas de la sana crítica; lo que no sucede en
la especie, desde que no se acusa su vulneración, ni se efectúa un
análisis preciso que explique cómo se ha producido la falta o que
indique cuál de las reglas que componen el sistema de apreciación
probatoria fue incorrectamente aplicada o qué medio de prueba fue
erradamente valorado, centrándose la crítica en la valoración de la
prueba, esto es, en las conclusiones a que se arribó a partir del análisis
de cada uno de los medios de prueba incorporados, que no son
compartidas por el recurrente, pero omite considerar que la sentencia
expresa las razones y motivaciones sobre cuya base desestimó sus
pretensiones, por lo que, al no haber acreditado la comisión de faltas
durante el proceso racional y lógico de examen probatorio, debe
concluirse que los hechos no son susceptibles de control por medio de
este mecanismo extraordinario y de derecho estricto, lo que obsta a que
la tesis de fondo pueda prosperar (considerando 3º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 20/04/2020, Rol Nº 12639-


2019,

Cita online; CL/JUR/23052/2020

7. Acción de precario. Tribunal de Casación no puede modificar los


hechos establecidos por los jueces del fondo si no hay vulneración de
las leyes reguladoras de la prueba. Leyes reguladoras de la prueba,
concepto e hipótesis en que son vulneradas. Facultad privativa de los
jueces del fondo para apreciar y valorar la prueba. Calificación de la
gravedad, precisión y concordancia de las presunciones judiciales
escapa del ámbito del recurso de casación en el fondo

El Máximo Tribunal ha sostenido reiteradamente que los hechos


asentados en el juicio y que determinan la aplicación de las normas
sustantivas que resuelven la controversia, resultan inamovibles en sede
de casación —como surge con nitidez de lo dispuesto en los
artículos 785 y 807 del Código de Procedimiento Civil— a menos que la
judicatura del fondo hubiera vulnerado las denominadas leyes
reguladoras de la prueba, lo que se verifica cuando se altera la carga
de la prueba, se admite un medio probatorio que la ley no acepta o se
rechaza uno que ella autoriza, o se desconoce el valor probatorio fijado
por la ley a los que se produjeron en el juicio. Cabe señalar que las leyes
reguladoras de la prueba constituyen normas básicas de juzgamiento,
que contienen deberes, limitaciones o prohibiciones a que debe
sujetarse quien conoce del proceso, pero no importa vulneración a tales
disposiciones, la apreciación que se haga de las probanzas producidas
en el juicio, pues esa es una atribución exclusiva de la judicatura del
fondo (considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Debe rechazarse la infracción al artículo 1712 del Código Civil, por


cuanto, como ha sostenido jurisprudencia uniforme de la Corte
Suprema, la valoración de las presunciones judiciales y la calificación
de su gravedad, precisión y concordancia corresponden a un proceso
racional del tribunal y, por ende, no sujeto al control de la casación, pues
al realizarlo no ha podido infringirse la ley positiva con influencia en la
sentencia. Eso no significa, ciertamente, que no puedan controlarse los
hechos o circunstancias base de la presunción judicial, en la medida
que ellos deben haber sido comprobados en el proceso y, desde esa
perspectiva, quedan sujetos a revisión por medio de la casación, pero
en ese caso la norma reguladora conculcada es la del artículo 47 del
Código Civil, al decir que las presunciones deben fundarse en
"antecedentes o circunstancias conocidas" —Emilio Rioseco
Enríquez— (considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 7/02/2020, Rol Nº 31877-


2018,

Cita online: CL/JUR/10036/2020

8. Cobro ejecutivo de factura. Tribunal de Casación no puede modificar


los hechos establecidos por los jueces del fondo si no hay vulneración
de las leyes reguladoras de la prueba

El artículo 785 del Código de Procedimiento Civil dispone que la Corte


Suprema al invalidar una sentencia por casación en el fondo dictará acto
continuo y sin nueva vista, pero separadamente, la sentencia que zanje
el asunto que haya sido objeto del recurso de la manera que crea
conforme a la ley y al mérito de los hechos, tal como se han establecido
en el fallo recurrido. Solo en forma excepcional es posible la alteración
de los hechos asentados por los tribunales de la instancia, en el caso
que la infracción de ley responda a la transgresión de una o más normas
reguladoras de la prueba, mas no respecto de la apreciación de las
probanzas que se hubiesen rendido, que es facultad privativa del
juzgador. En este orden de ideas, cabe consignar que la recurrente no
ha denunciado una efectiva vulneración de las normas reguladoras de
la prueba, que autorice una eventual revisión de los presupuestos
fácticos contenidos en el fallo impugnado o el establecimiento de otros
que hubieren sido preteridos de su valor probatorio (considerandos 9º y
10º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 27/12/2019, Rol Nº 2309-2019

Cita online: CL/JUR/11747/2019

9. Indemnización de perjuicios por responsabilidad extracontractual.


Tribunal de Casación no puede modificar los hechos establecidos por
los jueces del fondo si no hay vulneración de las leyes reguladoras de
la prueba. Correcta aplicación de la regla sobre la carga de la prueba

En la especie, queda en evidencia que las alegaciones del


impugnante persiguen desvirtuar los supuestos fácticos fundamentales
asentados en proceso y en cuya virtud se ha resuelto la litis,
desconociendo el actuar negligente que se le atribuyó en el fallo. Sin
embargo, la determinación de los hechos de la causa compete a los
jueces del fondo, y efectuada correctamente dicha labor en atención a
las probanzas aportadas, resultan aquéllos ser inmodificables conforme
a lo previsto en el artículo 785 del Código de Procedimiento Civil, no
siendo posible su revisión por la vía de la nulidad que se analiza al no
haberse denunciado, de manera eficiente, contravención a las leyes
reguladoras de la prueba a los efectos de alterar el sustrato fáctico que
ha servido de sustento a la decisión y sustituirlo por uno que se avenga
con las pretensiones jurídicas del recurrente. Sobre este punto en
particular cabe señalar que, revisados los antecedentes, no se advierte
contravención del artículo 1698 del Código Civil pues esta regla se
infringe cuando la sentencia obliga a una de las partes a probar un
hecho que corresponde acreditar a su contraparte, esto es, si se altera
el onus probandi, lo que en la especie no ha acontecido. En esta línea
de razonamiento, si el recurso de casación en el fondo se hace
descansar en supuestos de hecho que no están establecidos en la
causa, y que difieren de los asentados por los jueces del fondo,
inamovibles para este tribunal de casación, no cabe sino concluir que el
mismo no puede tener acogida por adolecer de manifiesta falta de
fundamento (considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 13/06/2019, Rol Nº 32906-2018,

Cita online: CL/JUR/3486/2019

10. Indemnización de perjuicios. Tribunal de Casación no puede


modificar los hechos establecidos por los jueces del fondo si no hay
vulneración de las leyes reguladoras de la prueba

En la especie, aparece que las alegaciones del impugnante persiguen


establecer hechos distintos a los asentados por los sentenciadores y a
este respecto resulta pertinente recordar que solamente los jueces del
fondo se encuentran facultados para fijar los hechos de la causa, y
efectuada correctamente dicha labor en atención al mérito de las
probanzas aportadas, ellos resultan inamovibles conforme a lo previsto
en el artículo 785 del Código de Procedimiento Civil, no siendo posible
su revisión por la vía de la nulidad que se analiza salvo que se haya
denunciado de modo eficaz la vulneración de las leyes reguladoras de
la prueba que han permitido establecer el presupuesto fáctico que viene
asentado en el fallo. Lo razonado impone concluir que las
conculcaciones sustantivas que el recurrente estima se han cometido
por los jueces a cargo de la instancia requieren necesariamente
modificar el supuesto fáctico fundamental asentado por aquéllos, el que
resulta inamovible para este Tribunal de Casación en la forma propuesta
por la pretensión de ineficacia, constatándose entonces la
improcedencia de los reproches formulados por el impugnante
(considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 11/06/2019, Rol Nº 5531-2019,

Cita online: CL/JUR/5261/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 29/05/2019, Rol Nº 4548-


2019,

Cita online: CL/JUR/2946/2019

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 27/05/2019. Rol Nº 22083-


2018,

Cita online: CL/JUR/2891/2019

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 23/05/2019, Rol Nº 4981-


2019,

Cita online: CL/JUR/2814/2019

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 7/05/2019, Rol Nº 18623-


2018,

Cita online: CL/JUR/2435/2019


11. Término de contrato de arrendamiento por no pago de rentas.
Tribunal de Casación no puede modificar los hechos establecidos por
los jueces del fondo si no hay vulneración de las leyes reguladoras de
la prueba

Sólo los tribunales del fondo se encuentran facultados para


determinar los hechos del litigio y que efectuada correctamente dicha
labor, esto es, con sujeción a las denominadas normas reguladoras de
la prueba atinentes al caso en estudio, se tornan inalterables para este
tribunal de casación, con arreglo a lo dispuesto en el artículo 785 del
Código de Procedimiento Civil, sin que sea posible su revisión por la vía
de la nulidad que se analiza, a menos que se denuncie y acredite el
quebrantamiento de disposiciones de aquellas denominadas
reguladoras de la prueba. En la especie si bien se denuncian
conculcados —los artículos 8º Nº 7 de la Ley Nº 18.101 y 160 del
Código de Procedimiento Civil—, lo que, en definitiva, se impugna el
proceso de valoración de la prueba, pretendiéndose que se establezcan
como hechos aquellos que resultan acordes con la postura asumida por
la recurrente, y como se ha señalado de manera reiterada, la labor
intelectual de ponderación de las probanzas rendidas por los litigantes
constituye una facultad privativa de la judicatura de instancia. En tales
circunstancias, no es posible para esta Corte modificar el sustrato
fáctico de la decisión, lo que impide que la tesis de fondo planteada
pueda prosperar y se debe concluir que el recurso que se examina
adolece de manifiesta falta de fundamentos, que autoriza a rechazarlo
en esta etapa de tramitación (considerando 4º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 6/05/2019, Rol Nº 29962-


2018,

Cita online: CL/JUR/2599/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial),25/04/2019, Rol Nº 4250-


2019,

Cita online: CL/JUR/2170/2019


— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 15/04/2019, Rol Nº 29538-
2018,

Cita online: CL/JUR/2066/2019

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 4/04/2019, Rol Nº 28172-


2018,

Cita online: CL/JUR/2434/2019

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 28/03/2019, Rol Nº 18752-


2018,

Cita online: CL/JUR/1682/2019

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 18/02/2019, Rol Nº 23352-


2018,

Cita online: CL/JUR/865/2019

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 4/12/2018, Rol Nº 8698-


2018,

Cita online: CL/JUR/7236/2018

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 25/10/2018, Rol Nº 5440-


2018,

Cita online: CL/JUR/6098/2018

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 10/10/2018, Rol Nº 7559-


2018,

Cita online: CL/JUR/5734/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 2/10/2018, Rol Nº 8700-2018,

Cita online: CL/JUR/5463/2018

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 6/09/2018, Rol Nº 1025-


2018,
Cita online: CL/JUR/5414/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 21/08/2018, Rol: 12923-2018,

Cita online: CL/JUR/5497/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 19/07/2018, Rol Nº 8428-


2018,

Cita online: CL/JUR/3782/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 27/06/2018, Rol Nº 6044-


2018,

Cita online: CL/JUR/3183/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 17/05/2018, Rol Nº 2698-


2018,

Cita online: CL/JUR/3809/2018

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 19/03/2018, Rol Nº 41851-


2017,

Cita online: CL/JUR/4677/2018

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 23/01/2018, Rol Nº 36809-


2017,

Cita online: CL/JUR/345/2018

— Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 3/01/2018, Rol Nº 44642-


2017,

Cita online: CL/JUR/641/2018

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 2/01/2018, Rol Nº 36121-


2017,

Cita online: CL/JUR/7/2018


12. Demanda de reapertura de camino privado. Tribunal de Casación
no puede modificar los hechos establecidos por los jueces del fondo
si no hay vulneración de las leyes reguladoras de la prueba

Solamente los jueces del fondo se encuentran facultados para fijar los
hechos de la causa, y efectuada correctamente dicha labor en atención
al mérito de las probanzas aportadas, ellos resultan inamovibles
conforme a lo previsto en el artículo 785 del Código de Procedimiento
Civil, no siendo posible su revisión por la vía de casación en el fondo
que se analiza salvo que se haya denunciado de modo eficaz la
vulneración de las leyes reguladoras de la prueba que han permitido
establecer el presupuesto fáctico que viene asentado en el fallo. Dicho
lo anterior y revisados los antecedentes, no se advierte contravención
del artículo 1698 del Código Civil pues esta regla se infringe cuando la
sentencia obliga a una de las partes a probar un hecho que corresponde
acreditar a su contraparte, esto es, si se altera el onus probandi, lo que
no ha ocurrido. Y tampoco se vislumbra infracción de los artículos 1701
y 1702 del Código Civil, toda vez que del análisis del fallo recurrido se
colige que los jueces del fondo en ningún momento negaron el carácter
de instrumentos públicos a aquéllos de tal naturaleza acompañados al
proceso, ni tampoco el valor probatorio que ellos pudieran tener, como
tampoco negaron la calidad de escritura pública a los documentos
privados reconocidos por la parte a quien se oponen, o que se ha
mandado tener por reconocidos en los casos y con los requisitos
prevenidos por la ley; pudiendo observarse que lo reprochado dice más
bien relación con el alcance y sentido que corresponde conferir a la
prueba rendida en autos, esto es, con su valoración, actividad que se
agotó con la determinación que a ese respecto hicieron los jueces del
fondo y, en consecuencia, resulta ajena a los fines de la casación en el
fondo. En mérito de lo expuesto no es posible alterar la situación fáctica
que viene determinada en el fallo cuestionado y establecer una distinta
que se avenga con las pretensiones del recurrente, porque los hechos
que sirvieron de base a las conclusiones de los sentenciadores resultan
inamovibles y definitivos para este tribunal de casación. Lo razonado
lleva a concluir que el recurso de casación en el fondo no podrá
prosperar por adolecer de manifiesta falta de fundamento
(considerandos 5º a 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 26/11/2018, Rol Nº 12960-2018,


Cita online: CL/JUR/6731/2018

13. Nulidad absoluta y simulación. Tribunal de Casación no puede


modificar los hechos establecidos por los jueces del fondo si no hay
vulneración de las leyes reguladoras de la prueba. Nueva valoración
de la prueba excede el ámbito del recurso de casación en el fondo

En la especie, las afirmaciones de la demandante obedecen a la


particular interpretación que la recurrente sugiere respecto del dictamen
pericial, lo que da nuevamente cuenta de que el reclamo se refiere más
bien a la valoración del medio en cuestión, aspecto que resulta ajeno al
recurso que se viene relacionando. En consecuencia, todo lo razonado
indefectiblemente conduce al rechazo de la pretensión anulatoria, del
modo que fue formulada. Siendo así, los argumentos relativos al
quebrantamiento de las normas sustantivas que indica la recurrente no
pueden ser aceptados, en la medida que no es posible modificar el
supuesto fáctico asentado en el proceso, pues la denuncia que hace a
este aspecto es estéril para tales fines, misma razón por la cual tampoco
es posible establecer el presupuesto material sobre el cual se desarrolla
su recurso. Debe recordarse que la necesidad de fijar un presupuesto
fáctico acorde con el postulado de casación se aprecia en lo
expresamente preceptuado por el artículo 785 del Código de
Procedimiento Civil: "Cuando la Corte Suprema invalide una sentencia
por casación en el fondo, dictará acto continuo y sin nueva vista, pero
separadamente, sobre la cuestión materia del juicio que haya sido
objeto del recurso, la sentencia que crea conforme a la ley y al mérito
de los hechos tales como se han dado por establecidos en el fallo
recurrido, reproduciendo los fundamentos de derecho de la resolución
casada que no se refieran a los puntos que hayan sido materia del
recurso y la parte del fallo no afectada por éste". Y resulta evidente que
para configurar las infracciones de Derecho que se denuncian tendrían
que ser revisados los hechos determinados en el pronunciamiento
impugnado y demostrar, en su caso, aquellos imprescindibles de fijar
para el éxito del arbitrio de nulidad. En la medida que en la especie esa
revisión no es posible, el fallo de reemplazo que habría de dictarse debe
respetar el mérito de los hechos "tales como se han dado por
establecidos en el fallo recurrido". En consecuencia, sin que sea
necesario analizar la infracción a la normativa sustantiva denunciada
por la recurrente y aun cuando esta Corte pudiera no compartir en su
integridad los razonamientos de los jueces del fondo, debe concluirse
que el recurso, del modo en que fue propuesto, necesariamente debe
ser desestimado (considerandos 11º a 13º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 1/04/2019, Rol Nº 41823-2017,

Cita online: CL/JUR/2089/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 29/05/2020, Rol Nº 12766-


2018,

Cita online: CL/JUR/35007/2020

ARTÍCULO 786

En los casos de casación en la forma, la misma sentencia que declara la


casación determinará el estado en que queda el proceso, el cual se remitirá
para su conocimiento al tribunal correspondiente.

Este tribunal es aquel a quien tocaría conocer del negocio en caso de


recusación del juez o jueces que pronunciaron la sentencia casada.

Si el vicio que diere lugar a la invalidación de la sentencia fuere alguno de


los contemplados en las causales 4ª, 5ª, 6ª y 7ª del artículo 768, deberá el
mismo tribunal, acto continuo y sin nueva vista, pero separadamente, dictar
la sentencia que corresponda con arreglo a la ley.

Lo dispuesto en el inciso precedente regirá, también, en los casos del inciso


primero del artículo 776, si el tribunal respectivo invalida de oficio la sentencia
por alguna de las causales antes señaladas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 785, 768 y 776.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Secuestro calificado. Voto disidente: Confesión calificada y forma de


participación, son asuntos jurídicos discutibles que no pueden
resolverse por la vía de casación en la forma.
(Voto disidente) Los fundamentos de la causal de casación contenida
en el artículo 541 Nº 9 del Código de Procedimiento Penal, referidos a
la confesión calificada y a la forma de participación, son asuntos
jurídicos discutibles que no pueden resolverse por la vía de la casación
en la forma, de manera que en el presente caso resulta aplicable el
art ículo 786 inciso 3º del Código de Procedimiento Civil, (por remisión
del inciso final del art ículo 541 que nos ocupa), disposición que, luego
de enumerar las causales del recurso de casación en la forma,
establece: "no obstante lo dispuesto en este artículo, el tribunal podrá
desestimar el recurso de casación en la forma, si de los antecedentes
aparece de manifiesto que el recurrente no ha sufrido un perjuicio
reparable sólo con la invalidación del fallo o cuando el vicio no ha influido
en lo dispositivo del mismo". Ello significa simplemente, que aun cuando
hipotéticamente el vicio de casación denunciado pudiere ser efectivo,
puede desecharse el recurso si resulta evidente que el perjuicio sufrido
por el recurrente puede ser reparado por una vía procesal diversa, como
lo es la apelación (considerando único de la disidencia de la sentencia
de casación).

Corte de Apelaciones de Santiago, Rol Nº 1929-2015,

Cita online: CL/JUR/4389/2018

ARTÍCULO 787

Derogado.252

2. Disposiciones especiales del recurso de casación contra sentencias


pronunciadas en juicios de mínima cuantía

ARTÍCULO 788 (962)

En los juicios de mínima cuantía sólo hay lugar al recurso de casación en


la forma, en los casos de los números 1º, 2º, 4º, 6º, 7º y 9º del artículo 768.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 768 y 786.


ARTÍCULO 789 (963)

En estos juicios sólo se considerarán diligencias o trámites esenciales, el


emplazamiento del demandado en la forma prescrita por la ley para que
conteste la demanda y el acta en que deben consignarse las peticiones de
las partes y el llamado a conciliación.253

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 258 al 263.

ARTÍCULO 790 (964)

El recurso se interpondrá verbalmente o por escrito sin previo anuncio y


sólo se hará mención expresa de la causa en que se funde. Si se interpone
verbalmente, se dejará de ella testimonio en un acta que firmarán el juez y el
recurrente.

ARTÍCULO 791 (965)

El recurso de casación se interpondrá en el plazo fatal de cinco días.254

ARTÍCULO 792 (966)

Derogado.255

ARTÍCULO 793

Elevado el proceso a un tribunal colegiado o encontrando éste admisible el


recurso en el caso del artículo 781, mandará que se traigan sobre él los autos
en relación.

Regirán también en este caso las disposiciones del inciso 2º del


artículo 699 y los artículos 701 y 702.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 699, 701, 702 y 781.


ARTÍCULO 794

Si la causal alegada necesita probarse, se abrirá un término con tal objeto


y se rendirá la prueba según las reglas establecidas para los incidentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 90 y 91.

3. Disposiciones especiales de los recursos de casación contra sentencias


pronunciadas en primera o en única instancia en juicios de mayor o de
menor cuantía y en juicios especiales

ARTÍCULO 795 (967)

En general, son trámites o diligencias esenciales en la primera o en la única


instancia en los juicios de mayor o de menor cuantía y en los juicios
especiales:

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cuidado personal. Causal de nulidad formal de falta de un trámite


declarado esencial por la ley. Tribunal que no adopta las medidas
necesarias para que la niña actuara debidamente representada en el
juicio, mediante nombramiento de un curador ad litem

Conforme lo dispone el artículo 768 Nº 9 del Código de Procedimiento


Civil, constituye vicio de nulidad formal "En haber faltado a algún trámite
o diligencia declarados esenciales por la Ley o cualquier otro requisito
por cuyo defecto las leyes prevengan expresamente que hay nulidad".
Conforme a lo que se ha venido razonando, aparece que el órgano
jurisdiccional no adoptó las medidas necesarias para que la menor de
autos actuara debidamente representada en el juicio, mediante el
nombramiento de un curador ad litem, siendo éste, en concepto de esta
corte, un trámite o diligencia esencial, conforme al artículo 19 de la
Ley Nº 19.968, en relación con los artículos 768 y 795 del Código de
Procedimiento Civil, entendiendo que en este último precepto la
enumeración de los trámites o diligencias esenciales, no tienen el
carácter de taxativos. La omisión en que se ha incurrido en el juicio ha
causado un perjuicio a los derechos e intereses de dicha menor, sobre
todo tratándose de un juicio de cuidado personal, en que la decisión que
en definitiva se adopte, sin duda, afectará su vida futura. El vicio ya
señalado, amerita la anulación de la sentencia y de todo el
procedimiento como se dirá en lo resolutivo, vicio que fue advertido en
los alegatos de las partes en estrado, concretamente por la defensa de
la demandada y de la tercera interesada (considerandos 2º, 7º a 9º de
la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 30/05/2020, Rol Nº 1324-2019,

Cita online: CL/JUR/34988/2020

2. Cuidado personal. Derecho de los niños a ser oído. Causal de


casación en la forma de omisión de algún trámite esencial. Sentencia
dictada sin haberse oído al menor

Consta en autos que la sentencia definitiva se dictó sin haberse oído


al niño por la juez del fondo, en una materia de vital importancia para su
vida presente y desarrollo futuro, como es el cuidado personal,
infringiendo con ello la normativa aplicable e incumpliendo el deber de
otorgarle al menor la posibilidad de ser oída en la sustanciación del
proceso, lo que constituye un trámite esencial del procedimiento cuya
omisión debe repararse por esta Corte, máxime si se considera que el
derecho a ser oído integra el derecho de toda persona a un debido
proceso, en el que se comprende precisamente el de expresar su
parecer. En consecuencia, se ha omitido un trámite esencial del
procedimiento, configurándose la causal de nulidad formal prevista por
el artículo 768 Nº 9 del Código de Procedimiento Civil, en relación con
el artículo 795 del mismo cuerpo de normas, texto que, al designar los
trámites o diligencias esenciales en primera instancia, utiliza al
comenzar la expresión "En general", lo que permite entender que la
enumeración que en dicho texto se contiene, no es taxativa
(considerandos 6º y 7º de la sentencia de casación).

Corte de Apelaciones de Santiago, 27/08/2019, Rol Nº 1840-2019,

Cita online: CL/JUR/4851/2019

3. Acción de precario. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad


del recurso de casación en la forma. Trámites esenciales en primera
y segunda instancia. No concurrencia a comparendo no está
sancionada con la nulidad
En relación al período probatorio, los artículo s 795 y 800 del Código
de Procedimiento Civil contemplan como trámites esenciales, además
de la recepción de la causa a prueba, en primera instancia, la práctica
de las diligencias respectivas cuando la omisión de la misma pueda
producir indefensión y la citación de las partes para llevarlas a efecto,
así como la agregación de los instrumentos presentados
oportunamente, éste último también en segunda instancia. En la
especie, sin embargo, el carácter fundamental de la diligencia por cuya
omisión se impetra la nulidad formal —demandante no asistió a la
audiencia y se le tuvo por rebelde—, se funda por la recurrente en
relación a su propia pretensión, más que por una imposición legal. En
efecto, si bien los art ículos 796 y 800 del código del ramo se ponen en
distintas situaciones antes mencionadas, lo cierto es que la recurrente
no indica con precisión cuál es la diligencia que se habría omitido que
acarree la nulidad alegada, por cuanto la no concurrencia al
comparendo no está sancionada con la nulidad (considerandos 5º y 6º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 11/06/2019, Rol Nº 31500-


2018,

Cita online: CL/JUR/5279/2019

4. Curaduría de persona ausente. I. Trámites esenciales para la


tramitación del proceso. Notificación omitida obsta a que pueda ser
considerada como un trámite esencial del proceso. II. Incumplimiento
de los requisitos de admisibilidad del recurso de casación en el fondo.
Recurrente de casación en el fondo que no denuncia como
transgredidas las normas decisorias de la litis

La causal —de casación en la forma— esgrimida se configura cuando


se ha "...faltado a algún trámite o diligencia declarados esenciales por
la ley o a cualquier otro requisito por cuyo defecto las leyes prevengan
expresamente que hay nulidad", que debe interpretarse en relación al
artículo 795 del Código de Procedimiento Civil que dispone qué trámites
deben ser considerados como esenciales para la tramitación del
proceso, en el caso, se denuncia la ausencia del señalado en su
numeral primero, esto es, "el emplazamiento de las partes en la forma
prescrita por la ley". Sin embargo, consta de los antecedentes allegados
a la presente causa, que la curadora nombrada, absolviendo posiciones
en un juicio de rendición de cuentas, reconoció que conocía de la
resolución que dejaba sin efecto su designación, desde el mes de
diciembre del 2015, por lo tanto, era entendida de los efectos de aquella
decisión, no se acogió la petición de modificación de la sentencia
dictada en cuanto a la fecha de expiración de la curaduría. Desde esta
perspectiva no se verifica la causal invocada porque existió la debida
notificación de la curadora, al reconocer su existencia en los términos
ya referidos, además porque las peticiones de publicación en forma
extractada requeridas en la solicitud de cese de la curaduría, no decían
relación con la notificación y el debido emplazamiento de la curadora,
sino con el conocimiento de ella respecto de terceros, para los efectos
que señala el segundo otrosí de la presentación de fecha 21 de
diciembre de 2015, de esta forma la notificación omitida obsta a que
pueda ser considerada como un trámite esencial del proceso; motivo
por el que el recurso de nulidad formal debe ser desestimado en esta
etapa de tramitación (considerando 5º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 21/02/2019, Rol Nº 24805-


2018,

Cita online: CL/JUR/941/2019

1º El emplazamiento de las partes en la forma prescrita por la ley;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Reclamo de ilegalidad municipal. Emplazamiento, elementos y


finalidad. Causal de casación en la forma de omisión de un trámite
esencial. Omisión del emplazamiento. Anulación de oficio

La Corte de casación se encuentra facultada para revisar la


regularidad formal del procedimiento y de la emisión de la sentencia que
fuera impugnada, actividad en la que ha detectado que el fallo casado
incurrió en la causal de casación prevista en el artículo 768 Nº 9 del
Código de Procedimiento Civil, en relación al artículo 795 Nº 1 del
mismo cuerpo legal toda vez que se ha soslayado un trámite o diligencia
esencial, como lo es el emplazamiento legal. En efecto, el
emplazamiento está previsto no sólo como una garantía para el
demandado, sino que también para el actor, puesto que desde su
ocurrencia, se traba la relación procesal, quedando vinculadas las
partes a la decisión jurisdiccional, la que debe resolver el conflicto
sometido a su conocimiento en virtud del principio de inexcusabilidad.
Lo anterior es relevante, toda vez que de los antecedentes del proceso
fluye que los sentenciadores han negado el emplazamiento de la
sociedad titular del proyecto de edificación, a pesar del interés
manifiesto en la resolución del conflicto. En tales condiciones, la
sentencia recurrida no se ha pronunciado en forma legal, incurriendo en
la causal de casación del artículo 768 Nº 9 del Código de Procedimiento
Civil al haberse faltado a algún trámite o diligencia declarados
esenciales por la ley o a cualquier otro requisito por cuyo defecto las
leyes prevengan expresamente que hay nulidad, en relación al
artículo 795 Nº 1 del mismo cuerpo normativo que establece que son
trámites o diligencias esenciales el emplazamiento de las partes, el que
en la especie ha sido desconocido (considerandos 7º y 8º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 13/02/2020, Rol


Nº 19276-2018,

Cita online: CL/JUR/21187/2020

2º El llamado a las partes a conciliación, en los casos en que corresponda


conforme a la ley;256

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Nulidad de lo obrado por falta de emplazamiento. Procedimiento


administrativo de liquidación de contrato de obra pública. Sanción de
abandono del procedimiento. Actuación del actor de darse por
notificado de la resolución que dispuso la comparecencia de las
partes a audiencia de conciliación no interrumpe el plazo de seis
meses

La institución jurídica del abandono del procedimiento constituye una


sanción para la inactividad de las partes en un proceso judicial, la cual
sólo puede hacerse efectiva mediante solicitud del demandado. Sus
exigencias básicas consisten en que todas las partes que figuran en el
juicio hayan cesado en su continuación y, además, que la falta de
actividad se prolongue durante seis meses. De los términos expuestos
aparece que la sentencia recurrida aplica correctamente la normativa
que regula esta materia. En efecto, la actuación del recurrente,
consistente en darse por notificado de la resolución que dispuso la
comparecencia de las partes a audiencia de conciliación, era
inconducente para hacer cambiar la causa de estado, toda vez que, en
el procedimiento de que se trata, dicha gestión tiene el carácter de
trámite esencial, conforme a lo prevenido en los artículos 262 y 795 Nº 2
del Código de Procedimiento Civil y resultaba, entonces, necesaria para
que el tribunal pudiera determinar si correspondía recibir la causa a
prueba (considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 3/06/2019, Rol


Nº 4892-2019,

Cita online: CL/JUR/3112/2019

2. Solicitud de autorización de salida definitiva del país. I. Conciliación


como trámite esencial. En conciliación juez obra como amigable
componedor, sin que sus opiniones lo inhabiliten. Causal que no ha
sido preparada

La causal de casación en la forma invocada, del artículo 795 Nº 2 del


Código de Procedimiento Civil, debe ser rechazada, toda vez que esta
se refiere al trámite esencial consistente en el llamado a conciliación en
los casos que corresponda conforme a la ley, sin que se explique la
forma en que se habría producido la infracción. No obstante lo anterior,
y como en el encabezado del recurso se menciona el artículo 768 Nº 2
del cuerpo legal citado, se concluye igualmente que debe ser
desechada la causal, ya que esta exige que la sentencia haya sido
pronunciada por un juez legalmente implicado, o cuya recusación este
pendiente o haya sido declarada por tribunal competente, lo que no
ocurre en la especie. En efecto, no existe recusación pendiente o que
haya sido declarada por tribunal competente, tampoco se ha deducido
o hecho valer alguna causal de implicancia. Por otra parte, el recurso
de casación requiere que se haya reclamado del vicio interponiendo
oportunamente los recursos que franquea la ley en todos sus grados, lo
que en este caso no ocurre, toda vez que la presunta manifestación de
opinión se habría realizado en la audiencia de juicio al hacer el llamado
a conciliación, oportunidad en que la parte no interpuso la incidencia
respectiva de conformidad a lo dispuesto en el artículo 115 del Código
de Procedimiento Civil. Sin perjuicio de lo anterior en materia de
conciliación el juez, de conformidad con el artículo 263 del cuerpo legal
citado, obrará como amigable componedor, tratando de obtener un
avenimiento total o parcial en el litigio, sin que las opiniones que emitan
lo inhabiliten para seguir conociendo de la causase rechace la
autorización de salid del país (considerando 2º de la sentencia de la
Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 13/08/2018, Rol Nº 384-2018,

Cita online: CL/JUR/4384/2018

3º El recibimiento de la causa a prueba cuando proceda con arreglo a la


ley;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cancelación de inscripción de dominio. Existiendo hechos


sustanciales, pertinentes y controvertidos, el Tribunal tiene el deber
de recibir la causa a prueba. Omisión del trámite esencial de recibir la
causa a prueba. Anulación de oficio

Aunque las partes disponen de medios de impugnación para solicitar


que se modifiquen los puntos de prueba su falta de ejercicio o su
ejercicio inoportuno, no sanea el vicio de omisión que importa la práctica
defectuosa del trámite atendida la trascendencia del mismo; pues
existiendo hechos sustanciales, pertinentes y controvertidos, el Tribunal
tiene el deber de recibir la causa a prueba, fijando todos los hechos
acerca de los que estima que hay o pueda haber controversia, según
así lo dispone el artículo 318 del Código de Procedimiento Civil. La
señalada omisión constituye un vicio que da origen a la causal de
casación en la forma contemplada en el art ículo 768 Nº 9 del Código
de Procedimiento Civil, en relación con su art ículo 795 Nº 3, en cuanto
se ha faltado un trámite declarado esencial por la ley, esto es, el
recibimiento de la causa a prueba. En consecuencia, actuando de oficio,
se invalida la sentencia impugnada (considerandos 4º a 6º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 27/12/2019, Rol Nº 446-2018,

Cita online: CL/JUR/12402/2019


4º La práctica de diligencias probatorias cuya omisión podría producir
indefensión;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Declaración de prescripción adquisitiva. Resoluciones judiciales sólo


producen efecto en virtud de notificación hecha con arreglo a la ley.
Incumplimiento de notificar personalmente o por cédula la resolución
que recibió a prueba la excepción de prescripción. Causal de casación
en la forma de omisión de un trámite o diligencia esencial, acogido

La regla fundamental la prescribe el artículo 38 del Código de


Procedimiento Civil, en orden a que las resoluciones judiciales sólo
producen efecto en virtud de notificación hecha con arreglo a la ley,
salvo los casos exceptuados por ella. Por lo anterior, lo relevante, es
que la notificación cumplida en forma legal envuelve una presunción de
derecho en cuanto a que el destinatario de la misma sabe de la
existencia y contenido de la resolución notificada y, por eso, esta última
podrá ser eficaz. En el presente caso, no se llevó a efecto la notificación
personal o por cédula dispuesta por el tribunal para poner en
conocimiento de las partes la resolución que recibió a prueba la
excepción de prescripción formulada por las demandadas, por ello el
incumplimiento de esta exigencia de comunicación a las partes de la
referida resolución, deviene en nulidad por haber faltado los requisitos
formales de rigor, que no eran otros que los concernientes a la
notificación personal o por cédula, y al no haber sido así, todos los
trámites, actuaciones y estadios procesales posteriores son nulos,
porque el término probatorio de dicha excepción de prescripción, no
comenzó a regir. Así las cosas, no cabe sino concluir que existe
fundamento suficiente para tener por configurado el vicio de nulidad
adjetiva invocado, toda vez que resultó menoscabado el derecho de la
demandada a ejercer, oportunamente, la carga de probar que tenía
asignada en la contienda, como, asimismo, una debida defensa de sus
intereses ante las actuaciones procesales de la contraria y del tribunal.
En tales condiciones, ha quedado de manifiesto el perjuicio en los
derechos previstos para el litigante, pues no estuvo en posición de
ejercitarlos en la etapa probatoria del procedimiento, privándolo de todo
un estadio procesal y, por esa vía, menoscabada su defensa, perjuicio
que solo es reparable con la anulación del fallo (considerandos 8º y 9º
de la sentencia de la Corte de Apelaciones).
Corte de Apelaciones de Puerto Montt, 15/06/2020, Rol Nº 337-2019,

Cita online: CL/JUR/37464/2020

2. Divorcio y compensación económica. Causal de casación en la forma


de omisión de algún trámite esencial, acogida. Sentenciador que
excluyó prueba esencial de la demandada y restringió el periodo a
informar por parte de la AFP. Vulneración del debido proceso

En el caso de autos, la recta tramitación de la causa se ha visto


alterada, por omisión de un trámite esencial, por cuanto en el desarrollo
de la audiencia preparatoria la sentenciador procedió, por un lado, a
excluir prueba esencial de la demandada y, por otro, a restringir el
periodo a informar por la AFP, la que siendo pertinente a los hechos
controvertidos, provocó indefensión a la parte recurrente por cuanto la
sentenciadora dio por establecido en autos que la actora "trabajó en
menor medida de lo que quería y podía, no pudo capacitarse
oportunamente, ni optar a mejores ofertas laborales para obtener
mayores ingresos". La actuación de la sentenciadora altera gravemente
los principios que inspiran el procedimiento de la Ley Nº 19.698, los que
a su vez constituyen garantías constitucionales pues forman parte de
las reglas del debido proceso y, especialmente, el de libertad probatoria
recogido expresamente en el artículo 28 del mismo texto legal. En el
caso concreto, se impidió al recurrente aportar elementos de convicción
en apoyo de su tesis, sin que exista un fundamento legal para ello. Las
leyes procesales de los artículos 61 y 63 de la Ley Nº 19.968, otorgan a
las partes en este tipo de procedimiento una oportunidad clara para ser
oídos y aportar sus pruebas conforme a sus intereses, alegaciones y
defensas, garantía que en este caso ha sido conculcada, por cuanto se
ha lesionado al demandado el correcto ejercicio de sus derechos a
defensa (considerandos 6º y 7º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 5/07/2019, Rol Nº 2577-2018,

Cita online: CL/JUR/3930/2019

3. Nulidad de reconocimiento de paternidad. Suficiencia probatoria para


acreditar que recurrente fue impedido de rendir la prueba que
pretendía incorporar, en términos que quedó prácticamente en
indefensión. Causal de casación de haberse faltado durante el juicio
a un trámite o diligencias declarada esencial por la ley. Anulación de
oficio

Respecto al vicio de casación consistente en haberse faltado a algún


trámite declarado esencial por la ley, como lo es la práctica de
diligencias probatorias, del mérito del registro en audio de la audiencia
de juicio, es inconcuso que el apoderado del demandante intentó
incorporar al juicio, el informe con el resultado de un examen de ADN
realizado por el Laboratorio Biogenetic a las partes y al menor. Sin
embargo, la señora juez de primera instancia tras hacer apreciaciones
e inferencias relativas a la paternidad biológica y legal del niño, y
requerir insistentemente al apoderado del actor en qué consistiría el
error, que como vicio del consentimiento sirve de fundamento a su
acción, en definitiva imposibilitó la introducción de dicho medio de
prueba, aludiendo de la manera ya dicha al informe de ADN allegado a
la demanda, cuyas deficiencias resalta. También es manifiesto que la
única testigo que compareció al juicio no logró prestar su declaración
ante las constantes interrupciones de la señora Juez, por considerar
"inductivas" las preguntas realizadas por el apoderado del actor, o
desestimarlas, según se infiere, por parecerles impertinentes. Por
último, nada se dice en relación a la prueba científica solicitada al
Servicio Médico Legal y decretada en la audiencia preparatoria ni de los
apercibimientos ordenados a su precepto. De lo expuesto fluye, que
como reclama el recurrente, se vio impedido de rendir la prueba que
pretendía incorporar, en términos que quedó prácticamente en
indefensión, desde que al no poder rendir dicha prueba, conforme se
concluye en la sentencia atacada, aquella que se permitió allegar,
resultó si no inocua, insuficiente para alcanzar la convicción de la
sentenciadora en orden a establecer el vicio del consentimiento alegado
(considerandos 4º y 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

En la situación sub judice se configura la causal de casación de


haberse faltado durante el juicio a un trámite o diligencias declarada
esencial por la ley, como lo es la práctica de diligencias probatorias de
produjeron indefensión, prevista en el artículo 768 Nº 9 en relación al
artículo 795 Nº 4, ambos del Código de Procedimiento Civil, acarreando
ello la nulidad de la sentencia que se revisa y del procedimiento
correspondiente, conforme a lo dispuesto en el artículo 67 Nº 6 de la
Ley 19.968. Todo lo cual autoriza a esta Corte hacer uso de la facultad
que le confiere el artículo 775 del Código de Procedimiento Civil
(considerando 7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 6/12/2019, Rol Nº 954-2019,

Cita online: CL/JUR/6983/2019

4. Divorcio culposo. Inexistencia de norma que autorice expresamente


al juez de familia a fijar un tiempo para la declaración de un testigo en
el juicio oral. Limitación del ejercicio del derecho del abogado a
interrogar a su testigo de manera completa y conforme a los intereses
de su parte. Causal de casación en la forma de omisión de un trámite
esencial, anulación de oficio

No existe norma que autorice expresamente al juez de familia a fijar


un tiempo para la declaración de un testigo en el juicio oral, de manera
que al haber limitado el ejercicio del derecho del abogado de la
demandante a interrogar a su testigo de manera completa y conforme a
los intereses de su parte, se ha impedido, en la práctica, llevar a cabo
una diligencia probatoria. En estas condiciones, no puede sino
concluirse que la sentencia atacada no cumple debidamente con las
exigencias que al efecto establece el artículo 66 Nº 4 de la Ley de
Tribunales de Familia —Nº 19.968—, toda vez que la decisión que se
contiene en la sentencia impugnada debe fundarse en un análisis lógico
y racional por parte del tribunal que la dicta, el que debe comprender
toda la prueba rendida, configurándose el vicio de casación en la forma
del artículo 768 Nº 9 del Código de Procedimiento Civil, en relación al
artículo 795 Nº 4 del mismo Código, normas estas últimas que resultan
aplicables por la expresa remisión que se hace a ellas en el artículo 67
Nº 6 de la Ley precitada, lo que autoriza su invalidación, toda vez que
el vicio detectado ha influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo,
desde que hizo posible que se rechazara la demanda de divorcio
culposo por falta de mayores antecedentes y prueba insuficiente
(considerandos 4º a 6º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 11/10/2019, Rol Nº 882-2019,

Cita online: CL/JUR/6004/2019


5º La agregación de los instrumentos presentados oportunamente por las
partes, con citación o bajo el apercibimiento legal que corresponda respecto
de aquella contra la cual se presentan;257

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Declaración de susceptibilidad de adopción. Causal de casación en


la forma de omisión de un trámite esencial, inadmisible. Cumplimiento
del deber de agregar la totalidad de la prueba ofrecida e incorporada
por las partes

Respecto a la falta de motivación y de análisis de la prueba, el


artículo 795 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil declara que
constituye un trámite o diligencia esencial en primera instancia: "La
agregación de los instrumentos presentados oportunamente por las
partes, con citación o bajo el apercibimiento legal que corresponda
respecto de aquélla contra la cual se presentan"; sin embargo, las
consideraciones contenidas en la sentencia impugnada permiten
concluir que se agregó la totalidad de la prueba ofrecida e incorporada
por las partes, en particular, la documental, que fue debidamente
examinada por la judicatura del fondo, que expresó los motivos por los
que le otorgó o no valor. Así, no obstante que los recurrentes no
compartan los razonamientos y conclusiones expresados en el fallo, no
existe la omisión denuncia da, motivo por el que el recurso debe ser
desestimado en esta etapa de tramitación (considerando 3º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial) 8/05/2019, Rol Nº 20334-2018,

Cita online: CL/JUR/2476/2019

2. Solicitud de autorización de salida definitiva del país. Causal de


casación la del artículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento
Civil improcedente conforme con el artículo 67 de la Ley Nº 19.968

El artículo 795 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil, que funda el


recurso de casación en la forma intentado, se refiere al trámite esencial
de la agregación de los instrumentos presentados oportunamente por
las partes, con citación o bajo el apercibimiento legal que corresponda.
Basta para rechazar la causal referida el hecho de que no se indica cual
habría sido el instrumento que no habría sido agregado por el Tribunal
y que configuraría la causal. Por otra parte, invocada como causal de
casación la del artículo 768 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil, esta
resulta improcedente de conformidad con lo dispuesto en el artículo 67
de la Ley Nº 19.968. En cuanto a la infracción del artículo 66
numerales 4 y 5, con un análisis de la sentencia se llega la conclusión
que el Tribunal realiza un debido análisis de la prueba, sin que se
observen en el mismo las infracciones a las reglas de la sana critica que
denuncia el recurrente. Por lo demás, no se menciona en el recurso cual
sería aquella prueba que se habría omitido en el análisis efectuado por
la sentenciadora, de modo que el recurso debe ser rechazado
(considerando 4º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 13/08/2018, Cita online:


CL/JUR/4384/2018

6º La citación para alguna diligencia de prueba; y

7º La citación para oír sentencia definitiva, salvo que la ley no establezca


este trámite.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 69, 258 y siguientes, 318 y


siguientes, 341 y siguientes, 432, 764, 765, 766 y 768.

ARTÍCULO 796 (968)

En los juicios de mayor cuantía seguidos ante arbitradores son trámites


esenciales los que las partes expresen en el acto constitutivo del compromiso,
y, si nada han expresado acerca de esto, sólo los comprendidos en los
números 1º y 5º del artículo precedente.258

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 628, 636 al 643. Código Orgánico de
Tribunales: artículo 239.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Acción de precario. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad


del recurso de casación en la forma. Trámites esenciales en primera
y segunda instancia. No concurrencia a comparendo no está
sancionada con la nulidad
En relación al período probatorio, los artículos 795 y 800 del Código
de Procedimiento Civil contemplan como trámites esenciales, además
de la recepción de la causa a prueba, en primera instancia, la práctica
de las diligencias respectivas cuando la omisión de la misma pueda
producir indefensión y la citación de las partes para llevarlas a efecto,
así como la agregación de los instrumentos presentados
oportunamente, éste último también en segunda instancia. En la
especie, sin embargo, el carácter fundamental de la diligencia por cuya
omisión se impetra la nulidad formal —demandante no asistió a la
audiencia y se le tuvo por rebelde—, se funda por la recurrente en
relación a su propia pretensión, más que por una imposición legal. En
efecto, si bien los artículos 796 y 800 del código del ramo se ponen en
distintas situaciones antes mencionadas, lo cierto es que la recurrente
no indica con precisión cuál es la diligencia que se habría omitido que
acarree la nulidad alegada, por cuanto la no concurrencia al
comparendo no está sancionada con la nulidad (considerandos 5º y 6º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 11/06/2019, Rol Nº 31500-


2018,

Cita online: CL/JUR/5279/2019

ARTÍCULO 797 (969)

Regirán también para los recursos de casación, en los juicios de menor


cuantía, lo dispuesto en el inciso 2º del artículo 699, y en los artículos 701 y
702.259

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 699, 701 y 702.

ARTÍCULO 798

El recurso de casación en la forma contra la sentencia de primera instancia


se verá conjuntamente con la apelación. Deberá dictarse una sola sentencia
para fallar la apelación y desechar la casación en la forma.

Cuando se dé lugar a este último recurso, se tendrá como no interpuesto


el recurso de apelación.
Si sólo se ha interpuesto recurso de casación en la forma, se mandarán
traer los autos en relación.

ARTÍCULO 799 (970)

Cuando la causa alegada necesite de prueba, el tribunal abrirá para rendirla


un término prudencial que no exceda de treinta días.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos: 207, 318, 320 y 323.

4. Disposiciones especiales de los recursos de casación contra sentencias


pronunciadas en segunda instancia en juicios de mayor o de menor cuantía
y en juicios especiales

ARTÍCULO 800 (971)

En general, son trámites o diligencias esenciales en la segunda instancia


de los juicios de mayor o de menor cuantía y en los juicios especiales:

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Acción de precario. Incumplimiento de los requisitos de admisibilidad


del recurso de casación en la forma. Trámites esenciales en primera
y segunda instancia. No concurrencia a comparendo no está
sancionada con la nulidad

En relación al período probatorio, los artículos 795 y 800 del Código


de Procedimiento Civil contemplan como trámites esenciales, además
de la recepción de la causa a prueba, en primera instancia, la práctica
de las diligencias respectivas cuando la omisión de la misma pueda
producir indefensión y la citación de las partes para llevarlas a efecto,
así como la agregación de los instrumentos presentados
oportunamente, éste último también en segunda instancia. En la
especie, sin embargo, el carácter fundamental de la diligencia por cuya
omisión se impetra la nulidad formal —demandante no asistió a la
audiencia y se le tuvo por rebelde—, se funda por la recurrente en
relación a su propia pretensión, más que por una imposición legal. En
efecto, si bien los artículos 796 y 800 del código del ramo se ponen en
distintas situaciones antes mencionadas, lo cierto es que la recurrente
no indica con precisión cuál es la diligencia que se habría omitido que
acarree la nulidad alegada, por cuanto la no concurrencia al
comparendo no está sancionada con la nulidad (considerandos 5º y 6º
de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 11/06/2019, Rol Nº 31500-


2018,

Cita online: CL/JUR/5279/2019

2. Procedimiento concursal. Liquidación voluntaria de persona natural.


I. Recurso de casación en la forma es de derecho estricto. Realización
de diligencias que en concepto del recurrente no se encuentran
contempladas en la ley no pueden subsumirse en la causal del Nº 9
del art. 768 del Código de Procedimiento Civil

En relación a la materia que desarrolla la recurrente para justificar la


invalidación formal —número 9 del artículo 768 del Código de
Procedimiento Civil—, cabe recordar que la causal invocada sólo se
configura cuando existe un texto expreso legal que da a un trámite
determinado el carácter de esencial, o que prevenga que la omisión de
dicho trámite acarrea nulidad (Corte Suprema rol Nº 4333-2003). Ahora
bien, esta hipótesis anulatoria debe relacionarse, necesariamente, con
alguno de los trámites o diligencias esenciales contemplados para la
primera o única instancia en el artículo 795 del Código de Procedimiento
Civil y para la segunda instancia en el art ículo 800 del referido
compendio normativo. Siendo así, los hechos que plantea el recurrente
no configuran la causal impetrada, dado que no ha vinculado la falta
alegada con alguno de los números del artículo 795 del Código de
Procedimiento Civil, ni tampoco existe texto legal expreso que otorgue
al trámite cuestionado la categoría de esencial, o que prevenga que su
omisión acarrea nulidad. Por el contrario, lo acusado por quien recurre
es la realización de diligencias que en su concepto no se encuentran
contempladas en la ley, situación que no puede ser subsumida en la
hipótesis legal invocada y que, atendido el carácter de derecho estricto
del recurso de casación en la forma, impide que el arbitrio pueda
prosperar (considerandos 3º y 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 6/07/2018, Rol Nº 4541-2018,


Cita online: CL/JUR/3571/2018

1º El emplazamiento de las partes, hecho antes de que el superior conozca


del recurso;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Principio constitucional de un racional y justo procedimiento


garantizado. Debido emplazamiento. Emplazamiento de las partes
constituye un trámite esencial

Que el primero de los elementos que otorgan contenido al principio


constitucional de un racional y justo procedimiento garantizado en el
inciso sexto del artículo 19 Nº 3º de la Constitución Política de la
República es el debido emplazamiento, por cuyo intermedio se pone la
demanda en conocimiento del demandado y se le hace saber el plazo
de que dispone para ser oído sobre ella. La relevancia de dicho instituto
se evidencia en el hecho de haber dedicado el legislador procesal un
título íntegro el VI del Libro Primero del código adjetivo al tratamiento de
los requisitos y efectos de la notificación, cuyos preceptos desarrollan
un principio fundamental, cual es el que "Las resoluciones judiciales
sólo producen efecto en virtud de notificación" (artículo 38), para lo cual
se exige que la primera de las notificaciones ordenadas en un proceso
sea efectuada en forma personal, real o, concurriendo los requisitos
para ello, en forma ficta. En otras disposiciones el referido código
explicita que el emplazamiento de las partes en la forma prescrita por la
ley constituye un trámite esencial (artículos 795 y 800), anuncia los
efectos que genera cuando ha sido practicado adecuadamente
(artículos 258 y 459 y siguientes) y prevé las consecuencias de no
haberse efectuado de acuerdo a la ley (artículo 80). Por consiguiente, a
fin de materializar la garantía del debido proceso reconocida por el
constituyente, el derecho procesal general trata con especial
preocupación las formas y modalidades que han de observarse para
consagrar la indefectibilidad de la notificación y el emplazamiento
respecto de quienes haya de afectar lo que a la postre se decida,
recayendo asimismo en el órgano jurisdiccional el deber de velar por la
debida tramitación del proceso, pudiendo disponer de las herramientas
que el ordenamiento jurídico le entrega para corregir los defectos que
puedan afectar la validez de una relación procesal cuando tales
ritualidades no se cumplan. (considerando 4º).
Corte Suprema Primera Sala (Civil), 30/05/2018, Rol Nº 4573-2018,

Cita online: CL/JUR/2527/2018

2º La agregación de los instrumentos presentados oportunamente por las


partes, con citación o bajo el apercibimiento legal que corresponda respecto
de aquélla contra la cual se presentan;260

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Cobro de pesos. Tribunal que omite un trámite esencial como es la


agregación de documentos en la forma que ordena la ley. Juzgadores
a quo restaron mérito probatorio a copia del pagaré fundante de la
demanda aparejado en segunda instancia por estimar que se trataba
de un instrumento privado que no fue reconocido en juicio

En la especie, es posible colegir que el tribunal de alzada incurrió en


el defecto formal denunciado al no cumplir un trámite que el legislador
elevó a la categoría de esencial, cual es, la agregación de los
documentos acompañados en la forma que corresponda. Así las cosas,
se configura el vicio de nulidad previsto en el artículo 768 Nº 9 del
Código de Procedimiento Civil, en relación con lo dispuesto en el
artículo 800 Nº 2 del mismo cuerpo normativo, y esta anomalía influyó
sustancialmente en lo dispositivo del fallo porque incidió directamente
en la ponderación de las probanzas que tenían por finalidad demostrar
el supuesto fáctico en que se funda la pretensión del demandante.
Consiguientemente, dicha falta solo puede repararse con la invalidación
del fallo impugnado, debiendo el tribunal recurrido tener por
acompañada la documental en la forma legal que corresponda, para
luego continuar con la tramitación de la causa y proceder a su nueva
vista (considerando 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

La sentencia de alzada tuvo en consideración que la parte


demandante acompañó al proceso una copia del pagaré donde constan
las estipulaciones del mutuo que sirve de base a la pretensión, para
luego, en el motivo séptimo reflexionar que "tratándose de un
instrumento privado que habría emanado de los demandados y al no
haber sido acompañado como tal, sino con citación, no ha logrado el
mérito de generar efectos probatorios en contra de los demandados. En
definitiva, el documento en análisis no ha sido reconocido ni mandado
tener por reconocido al interior de este procedimiento, por lo cual carece
de todo valor probatorio. Lo anterior, conlleva necesariamente a
establecer que la recurrente no ha aportado antecedentes necesarios
para cumplir con su carga probatoria, en cuanto a la acción incoada".
Así planteados los antecedentes del proceso no puede pasar
inadvertido que la Corte de Apelaciones resolvió tener por acompañado,
con citación contraria, el instrumento aparejado en segunda instancia
por la parte demandante. No obstante, el mismo tribunal de alzada luego
dictaminó —en la sentencia definitiva— que el documento debió ser
acompañado bajo apercibimiento de tenerse por reconocido, con el
efecto que de ello deriva en la ponderación de la prueba. Por lo tanto,
se aprecia una evidente incongruencia en lo resuelto por la Corte de
Apelaciones de La Serena que, desconociendo su decisión previa,
examinó en la sentencia impugnada que la agregación del instrumento
no se hizo en la forma que correspondía, lo que en definitiva se traduce
en la falta de un trámite o diligencia esencial en segunda instancia
(considerandos 6º y 7º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 8/01/2020, Rol Nº 23338-2018,

Cita online: CL/JUR/4665/2020

2. Cumplimiento ejecutivo de la obligación de dar. Nulidad de oficio por


omisión de trámite esencial. Agregación de instrumentos presentados
por las partes en la forma legal pertinente a su naturaleza constituye
un trámite esencial en la segunda instancia. Tribunal que no tuvo por
acompañado en la forma que dispone el art. 346 Nº 3 del Código de
Procedimiento Civil el documento acompañado por la ejecutada

El instrumento presentado por la ejecutada, se trata de un documento


de aquellos que emanan de la parte en contra de quien se hace valer y
que, por su naturaleza privada, debió tenerse por acompañado en la
forma que dispone el artículo 346 Nº 3 del Código de Procedimiento
Civil, esto es, bajo el apercibimiento de tenérselo por tácitamente
reconocido si nada se expresa en el término de seis días. Aquello no
ocurrió por cuanto el tribunal lo tuvo por acompañado "bajo
apercibimiento legal", sin mencionar cuál es tal. De acuerdo con lo
establecido en el artículo 800 Nº 2 del Código de Procedimiento Civil, la
agregación de los instrumentos presentados oportunamente por las
partes, en la forma legal que resultare pertinente a su naturaleza,
constituye un trámite o diligencia esencial en la segunda instancia. Cabe
añadir que, de acuerdo con el texto de esa norma legal, la correcta
agregación de los instrumentos acompañados por las partes constituye
una obligación que la ley impone al tribunal y no a los litigantes, puesto
que el deber de estos últimos se agota con la oportuna presentación de
los mismos. En este caso, tratándose de un documento agregado por el
propio tribunal como medida para mejor resolver, la obligación se
intensifica y se vuelve más estricta, puesto que la específica agregación
mediante resolución es la que permite al litigante contrario, conocer el
plazo para objetar y también las causales que proceden. De este modo,
los antecedentes de la causa manifiestan la existencia de un vicio de
aquellos que dan lugar a la casación en la forma, remediable sólo con
la invalidación del fallo que lo contiene, como quiera que se configura
en la especie la causal de nulidad que prevé el artículo 768 Nº 9 del
Código de Procedimiento Civil (considerandos 3º a 5º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 1/08/2019, Rol Nº 1055-2019,

Cita online: CL/JUR/4499/2019

3. Cobro ejecutivo de obligaciones tributarias. Causal de casación en la


forma de omisión de algún trámite esencial. Anulación de oficio

En consecuencia, el tribunal de alzada no dio cumplimiento a un


trámite o diligencia esencial, cual es, haber agregado los documentos
que fueron acompañados por la ejecutante en segunda instancia con
citación y pronunciarse expresamente sobre ellos, particularmente al
tenor de las alegaciones atingentes a la materia debatida —
prescripción, en la especie— y su repercusión en lo decisorio. Dicho
vicio, privó a la parte ejecutante del ejercicio del derecho a rendir prueba
documental con la finalidad de demostrar los fundamentos fácticos de
sus alegaciones y que, constituye la causal de casación en la forma
prevista en el artículo 768 Nº 9 en relación con el artículo 800 Nº 2,
ambos del Código de Procedimiento Civil. Por lo tanto, procede invalidar
de oficio el fallo impugnado, retrotrayéndose la causa al estado de
proceder a su nueva vista (considerandos 6º y 7º de la sentencia de
anulación de oficio).

Corte Suprema Segunda Sala (Penal), 27/09/2018, Rol Nº 40726-


2017,
Cita online: CL/JUR/5330/2018

4. Cobro de pesos. Nulidad de oficio por omisión de trámite o diligencia


declarados esenciales por la ley. Correspondía al Tribunal de
segunda instancia tener por acompañados los antecedentes ofrecidos
por la demandante bajo el apercibimiento que correspondía aplicar de
acuerdo a la naturaleza de los instrumentos

La controversia en segunda instancia quedó circunscrita a determinar


si la actora había acreditado el monto de los gastos comunes cuyo pago
demandó, cuestión para la cual era de indudable relevancia tener por
acompañados bajo el apercibimiento legal correspondiente los
documentos que ésta aportó en segunda instancia, ya que con ellos la
demandante aseveró haber subsanado la omisión que no permitió
acoger íntegramente su pretensión, o bien le permitían incrementar el
monto cuyo pago ordenó efectuar el pronunciamiento del juez a quo. En
consecuencia, las circunstancias señaladas dejan de manifiesto que el
tribunal de segunda instancia, al proceder de tal modo, ha incurrido en
la especie en el vicio de casación establecido en el artículo 768 Nº 9 del
Código de Procedimiento Civil en relación con el numeral 2º del
artículo 800 del mismo cuerpo legal, atendido lo prevenido en el
artículo 348 del mismo cuerpo normativo, toda vez que debió tener por
acompañados los antecedentes ofrecidos por la demandante bajo el
apercibimiento que correspondía aplicar de acuerdo a la naturaleza de
los instrumentos. La circunstancia procesal antes anotada faculta a esta
Corte para proceder a la anulación de oficio del fallo recurrido, como así
mismo de todas las actuaciones que sucedieron a la presentación del
demandante, por cuanto la trascendencia de la anomalía advertida
autoriza para ello y ha causado un evidente perjuicio a la parte
demandante (considerandos 6º a 8º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 6/07/2018, Rol Nº 41515-2017,

Cita online: CL/JUR/3763/2018

3º La citación para oír sentencia definitiva;

4º La fijación de la causa en tabla para su vista en los tribunales colegiados,


en la forma establecida en el artículo 163, y
5º Los indicados en los números 3º, 4º y 6º del artículo 795, en caso de
haberse aplicado lo dispuesto en el artículo 207. 261-262

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 186, 189, 345, 346, 347, 163 y 795.

ARTÍCULO 801 (972)

Derogado.263

ARTÍCULO 802 (973)

Derogado.264

ARTÍCULO 803

El recurrente, hasta antes de la vista del recurso, podrá designar un


abogado para que lo defienda ante el tribunal ad quem, que podrá ser o no el
mismo que patrocinó el recurso.265

Concordancias: Código Orgánico de Tribunales: artículos 527 y 591 y siguientes.

ARTÍCULO 804 (975)

Derogado.266

ARTÍCULO 805 (976)

Tratándose de un recurso de casación en el fondo, cada parte podrá


presentar por escrito, y aun impreso, un informe en derecho hasta el momento
de la vista de la causa.267

No se podrá sacar los autos de la secretaría para estos informes.

En la vista de la causa no se podrá hacer alegación alguna extraña a las


cuestiones que sean objeto del recurso, ni se permitirá la lectura de escritos
o piezas de los autos, salvo que el presidente lo autorice para esclarecer la
cuestión debatida.
El tribunal dictará sentencia dentro de los cuarenta días siguientes a aquel
en que haya terminado la vista.

ARTÍCULO 806 (977)

Cuando el recurso sea de casación en la forma, dispondrá el tribunal que


se traigan los autos en relación, y fallará la causa en el término de veinte días
contados desde aquel en que terminó la vista.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 223.

ARTÍCULO 807 (978)

En el recurso de casación en el fondo, no se podrán admitir ni decretar de


oficio para mejor proveer pruebas de ninguna clase que tiendan a establecer
o esclarecer los hechos controvertidos en el juicio en que haya recaído la
sentencia recurrida.

Si la casación es en la forma, tendrá lugar lo dispuesto en el artículo 799.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 799 y 159.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Corte Suprema no es la llamada a revisar las cuestiones de hecho


contenidas en el fallo del Tribunal a quo

Que por medio de las restantes alegaciones, los recurrentes


pretenden controvertir las cuestiones de hecho que fueron nítidamente
establecidas por el Tribunal de primera instancia en su considerando
vigésimo. Resulta inconcuso que el recurso de casación en el fondo
debe atacar cuestiones de derecho, correspondiendo a los jueces del
fondo el análisis, apreciación y establecimiento de los hechos.

En otras palabras, no es la Corte Suprema la llamada a revisar las


cuestiones de hecho contenidas en el fallo del tribunal a quo, cuestión
que queda suficientemente clara, por ejemplo, al tenor de lo dispuesto
en el inciso 1º del artículo 807 del Código de Procedimiento Civil, según
el cual "en el recurso de casación en el fondo, no se podrán admitir ni
decretar de oficio para mejor proveer pruebas de ninguna clase que
tiendan a establecer o esclarecer los hechos controvertidos en el juicio
en que haya recaído la sentencia recurrida" (considerando 4º).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 7/12/2009, Rol: 1977-2008,

Cita online: CL/JUR/4507/2009

Fallo en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 2/09/1997, Rol Nº 3316-1996,

Cita online: CL/JUR/2527/1997

ARTÍCULO 808 (979)

Si contra una misma sentencia se interponen recursos de casación en la


forma y en el fondo, éstos se tramitarán y verán conjuntamente y se
resolverán en un mismo fallo.

Si se acoge el recurso de forma, se tendrá como no interpuesto el de


fondo.268

ARTÍCULO 809

Derogado.269

TÍTULO XX DEL RECURSO DE REVISIÓN

ARTÍCULO 810 (981)

La Corte Suprema de Justicia podrá rever una sentencia firme en los casos
siguientes:

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Acción de revisión. Finalidad del recurso de revisión. Primacía de la
justicia por sobre la seguridad o certeza jurídica. Recurso de revisión
dice relación con sentencias relativas al fondo del asunto, en las
cuales se haya reconocido la existencia de derechos sustantivos de
alguna de las partes

El recurso de revisión no es precisamente un recurso, tiene por objeto


que prime la justicia por sobre la seguridad o certeza jurídica, que es
representada por la cosa juzgada. A pesar de la seguridad jurídica, en
ciertos casos, que son los contemplados en el artículo 810 del Código
de Procedimiento Civil, el legislador ha establecido que debe primar la
justicia por sobre dicha seguridad o certeza, haciendo procedente
aplicar la revisión en las situaciones y con los requisitos que determina
la ley (considerando 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

El recurso de revisión dice relación con sentencias relativas al fondo


del asunto de que se trata, en las cuales se haya reconocido la
existencia de derechos sustantivos de alguna de las partes. Por ello, la
Corte Suprema, en un fallo en la Revista de Derecho y Jurisprudencia
resolvió que el artículo 810 limita el recurso de revisión a las sentencias
definitivas firmes que se encuentran en algunos de los casos
contemplados taxativamente por la ley, añadiendo que "no es sentencia
definitiva la resolución expedida por una Corte de Apelaciones que
confirma la de primera instancia que se pronuncia sobre una incidencia
de nulidad". Sin embargo, hay quienes sostienen, como por ejemplo
Mario Casarino, que no distinguiendo la ley, que solamente habla de
toda sentencia firme o ejecutoriada, este recurso también podría tener
cabida en contra de las sentencias interlocutorias que tengan el carácter
antes aludido, puesto que ellas también, en conformidad al artículo 175
del Código de Procedimiento Civil, podrían tener autoridad de cosa
juzgada. Pero, aun en este caso, la acción de revisión únicamente
procedería excepcionalmente (considerando 4º de la sentencia de la
Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 5/09/2019, Rol Nº 25112-2019,

Cita online: CL/JUR/5060/2019

2. Petición de herencia. Incumplimiento de los requisitos de


admisibilidad del recurso de revisión. Límite del recurso de revisión.
Recurso de revisión sólo procede contra sentencias relativas al fondo
del asunto de que se trata, en las cuales se haya reconocido la
existencia de derechos sustantivos de alguna de las partes

El recurso de Revisión dice relación con sentencias relativas al fondo


del asunto de que se trata, en las cuales se haya reconocido la
existencia de derechos sustantivos de alguna de las partes. Por ello,
esta Corte Suprema, en un fallo en la Revista de Derecho y
Jurisprudencia resolvió que el artículo 810 limita el recurso de revisión
a las sentencias definitivas firmes que se encuentran en algunos de los
casos contemplados taxativamente por la ley, añadiendo que "no es
sentencia definitiva la resolución expedida por una Corte de
Apelaciones que confirma la de primera instancia que se pronuncia
sobre una incidencia de nulidad". Sin embargo, hay quienes sostiene,
como por ejemplo Mario Casarino que no distinguiendo la ley, que
solamente habla de toda sentencia firme o ejecutoriada, este recurso
también podría tener cabida en contra de las sentencias interlocutorias
que tengan el carácter antes aludido, puesto que ellas también, en
conformidad al artículo 175 del Código de Procedimiento Civil, podrían
tener autoridad de cosa juzgada. Pero, aun en este caso, la acción de
revisión únicamente procedería excepcionalmente. En efecto, la cosa
juzgada es una institución jurídica que tiene por objeto impedir que en
un nuevo proceso se pretenda juzgar lo mismo que se juzgó en otro
anterior. Se la concibe en general como un estado jurídico en que se
encuentran algunos asuntos judiciales por haber sido objeto de una
decisión jurisdiccional definitiva en un proceso. Es un atributo de ciertas
sentencias emanadas de los órganos jurisdiccionales que han entrado
a resolver sobre el fondo del litigio, siendo lo normal que produzcan
dicho efecto las que tiene el carácter de definitivas. Es efectivo, como
se vio que hay sentencias interlocutorias firmes o ejecutoriadas que
producen cosa juzgada, pero para esto se requiere que contengan un
pronunciamiento sobre el fondo del asunto o sobre alguna situación
jurídica equiparable al pronunciamiento sobre el fondo, lo que no es el
caso de autos (considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 30/05/2019, Rol Nº 12507-2019,

Cita online: CL/JUR/3136/2019

3. Acción de revisión. I. Recurso de revisión, concepto y características


El recurso de revisión se ha definido como un medio de impugnación
extraordinario que la ley concede por las causales y en contra de las
resoluciones judiciales firmes que señala, con el objeto de anularlas en
todo o en parte. En consecuencia, es de derecho estricto y constituye
una regla de excepción que sólo tiene aplicación en los casos
taxativamente señalados en el artículo 810 del Código de
Procedimiento Civil (considerando 4º de la sentencia de la Corte
Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 11/12/2018, Rol Nº 988-2018,

Cita online: CL/JUR/6867/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 4/10/2017, Rol Nº 8181-2017,

Cita online: CL/JUR/6388/2017

— Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 16/01/2017, Rol Nº 820-


2015,

Cita online: CL/JUR/210/2017

1º Si se ha fundado en documentos declarados falsos por sentencia


ejecutoria, dictada con posterioridad a la sentencia que se trata de rever;

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Los documentos en los que se basó el fallo que se persigue rever


deben haber sido declarados falsos por sentencia ejecutoriada

Que, para que pueda acogerse un recurso de revisión, obviamente


resulta necesario que quien así lo pretende, acredite legalmente los
hechos en que lo funda; en el presente caso, acorde con la causal
alegada (...), que los documentos en los cuales se basó el fallo que se
persigue rever, hayan sido declarados falsos por sentencia ejecutoriada
dictada con posterioridad a aquél (considerando 4º, sentencia Corte
Suprema).

Corte Suprema, 13/01/2012, Rol Nº 2062-2010, Cita online:


CL/JUR/97/2012
2. Acción de revisión. Insuficiencia probatoria para acreditar que los
documentos en los que se habría fundado la sentencia que se trata
de revisar hayan sido declarados falsos por sentencia ejecutoriada.
Resolución de formalización y suspensión condicional del
procedimiento no tiene el carácter de sentencia ejecutoria que declare
la falsedad de documento

La interposición del recurso de revisión por la causal del artículo 810


Nº 1 del Código de Procedimiento Civil, supone la existencia de un
proceso terminado, o al menos en tramitación, en el que se discuta la
falsedad del documento de que se trata, cuyo no es el caso, toda vez
que en el arbitrio en análisis sólo se acompañó como antecedente, copia
simple de una audiencia que se celebró en Juzgado de Garantía, donde
se formaliza al demandante en la causa laboral, por los delitos de
ejercicio ilegal de la profesión y falsificación o uso malicioso de
documentos públicos, ocasión en la que se arribó a una suspensión
condicional del procedimiento. En consecuencia, no existe antecedente
alguno que permita tener por acreditado que los documentos en los que
se habría fundado la sentencia que se trata de revisar hayan sido
"declarados falsos por sentencia ejecutoriada, dictada con posterioridad
a la sentencia que se trata de rever", resultando totalmente
improcedente darle tal carácter a la resolución de formalización y
suspensión condicional del procedimiento a la que se ha hecho
referencia por el recurrente, teniendo en cuenta que la primera sólo
constituye la comunicación que se le hace a una persona acerca de la
existencia de una investigación criminal que se dirige en su contra, en
tanto que la segunda, en la medida que se cumplan las condiciones
impuestas por el juez de garantía, redundará en un sobreseimiento
definitivo (considerandos 7º y 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema, 4/10/2017, Rol Nº 8181-2017, Cita online:


CL/JUR/6388/2017

2º Si pronunciada en virtud de pruebas de testigos, han sido éstos


condenados por falso testimonio dado especialmente en las declaraciones
que sirvieron de único fundamento a la sentencia;

3º Si la sentencia firme se ha ganado injustamente en virtud de cohecho,


violencia u otra maquinación fraudulenta, cuya existencia haya sido declarada
por sentencia de término; y
4º Si se ha pronunciado contra otra pasada en autoridad de cosa juzgada
y que no se alegó en el juicio en que la sentencia firme recayó.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Acción de revisión. Suficiencia probatoria para acreditar configuración


de causal de revisión invocada. Resolución invocada que produce
efecto de cosa juzgada

De conformidad al artículo 810 Nº 4 del Código de Procedimiento


Civil, aparece claro que la sentencia con autoridad de cosa juzgada que
se debe invocar para obtener la anulación de aquella contra la que el
recurso se dirige, ha de haber sido dictada concurriendo la triple
identidad a que se refiere el artículo 177 del Código de Procedimiento
Civil. De los antecedentes del proceso se desprende que se reúnen los
requisitos que exige el artículo 810 Nº 4 mencionado, ya que existen
dos sentencias firmes antagónicas dictadas una antes de la otra, en
procedimientos judiciales en que las partes han sido las mismas,
concurriendo la identidad de cosa pedida y de causa de pedir, puesto
que se persigue, en ambos, que se deje sin efecto una determinada
multa administrativa. En consecuencia, los hechos que se hacen valer
como fundamento de la causal invocada, la configuran, lo que autoriza
la revisión del fallo que se impugna, desde que la resolución que se
invoca produjo en este caso el efecto de cosa juzgada que se le
atribuye. Lo razonado conduce a concluir que el recurso de revisión
intentado deberá ser acogido (considerandos 7º a 9º de la sentencia de
la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 11/12/2018, Rol Nº 988-2018,

Cita online: CL/JUR/6867/2018

2. Terminación de contrato de arrendamiento. Naturaleza del recurso de


revisión. Recurso de aplicación excepcional, que se circunscribe a
causales taxativas. Requisitos de procedencia de la excepción de
cosa juzgada. Triple identidad. Causal de recurso de revisión supone
que sentencia impugnada haya sido dictada en contexto de un juicio
diverso. Fallo impugnado que no corresponde a uno dictado en un
proceso distinto. Sentencias contrastadas entre las que no concurre
triple identidad
Conforme sostiene la doctrina, el recurso de revisión es aquel que se
concede para invalidar sentencias firmes o ejecutoriadas que han sido
obtenidas fraudulenta o injustamente, en los casos expresamente
señalados por la ley, y cuando se han dictado en contra de otra pasada
en autoridad de cosa juzgada y siempre que no haya sido alegada
oportunamente en el juicio en que la sentencia firme recayó para evitar
la concurrencia de fallos contradictorios. Así, el presente arbitrio se
instituye como una herramienta procesal de aplicación excepcional, que
se circunscribe de manera estricta a las causales taxativamente
dispuestas por el legislador (considerando 1º de la sentencia de la Corte
Suprema).

En la especie, en que el recurso se sustenta en la causal del


artículo 810 Nº 4 del Código de Procedimiento Civil, es menester que
se constate que la sentencia impugnada haya sido dictada en contra de
una que se encuentre revestida del referido atributo de la cosa juzgada
y que, además, no haya sido alegada en el pleito. De ello se sigue que
ambas decisiones deben ser contrapuestas, esto es, contener
decisiones incompatibles entre sí que las haga contradictorias,
provocando la existencia simultánea de dos mandatos jurisdiccionales
imposibles de ser cumplidos a la vez. En este punto, es necesario
recordar que el legislador procesal civil estableció para efectos de
comprobar la procedencia de la excepción de cosa juzgada la
concurrencia de la denominada "triple identidad" a que alude el
artículo 177 del Código de Procedimiento Civil. Tal normativa propone
efectuar una comparación entre los fallos en disputa, procediendo la
defensa fundada en la cosa juzgada, en la medida que entre las
resoluciones opuestas exista: 1º Identidad legal de personas; 2º
Identidad de la cosa pedida; y 3º Identidad de la causa de pedir
(considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

Conforme lo propone la doctrina y jurisprudencia, la causal impetrada


que sustenta el presente recurso de revisión, además de los
requerimientos para su procedencia, demanda que la sentencia
invocada para efectos de obtener la invalidación pretendida, haya sido
dictada en el contexto de un juicio diverso de aquel en que se dictó la
impugnada, esto es, que se trate de un pronunciamiento efectuado en
la tramitación de otro proceso, independiente y aparte, respecto del cual
sea posible efectuar la comparación en los términos de la triple identidad
que exige el artículo 177 del Código de Procedimiento Civil. En la
especie, es inconcuso que el fallo impugnado no corresponde a uno
dictado en un proceso distinto de aquel en que se emitieron los que se
estiman afectados, sino que en el mismo, circunstancia que de modo
evidente conjura en contra del éxito de la vía impugnatoria analizada.
Pues bien, y como se ha sostenido en diversos fallos dictados por esta
Corte, la procedencia de la causal de la cosa juzgada como motivo de
revisión, depende de la existencia de dos procesos distintos y
autónomos, en los que se hayan dictado decisiones contradictorias y
excluyentes con autoridad de cosa juzgada, lo que no ocurre en la
especie, por lo que el recurso no puede prosperar (en dicho sentido se
ha pronunciado esta Corte en los antecedentes roles Nºs. 6908-
08, 12310-11, y más recientemente, en los autos Nº 87.936-16 en
sentencias dictadas con fechas 15 de octubre de 2009, 23 de abril de
2013, y 16 de mayo de 2017, respectivamente) (considerandos 5º y 6º
de la sentencia de la Corte Suprema).

A mayor abundamiento, a juicio de esta Corte, entre ambas


resoluciones no consta que concurra la triple identidad que establece el
artículo 177 del Código de Procedimiento Civil. Pues si bien es claro que
entre ellas existe la identidad legal de personas, no es claro que
coincida el objeto pedido y la causa de pedir, pues no es posible
atribuirle a la resolución recurrida que rechazó la objeción a una
liquidación, contradicción con la conciliación celebrada entre las partes,
desde que es palmario que ambas decisiones no recaen sobre las
mismas materias. En efecto, la conciliación se refiere a la restitución de
un inmueble por no pago de rentas, mientras que el fallo impugnado
incide, en el fondo, en lo relativo a la manera en que se debe practicar
la liquidación del crédito que se cobra. De modo tal, que la conciliación
y la sentencia atacada tienen fundamentos y contextos diferentes,
siendo la última complementaria e incluso accesoria a la conciliación,
pero en caso alguno contraria. En tales condiciones, al no concurrir los
presupuestos contemplados en el artículo 810 Nº 4 del Código de
Procedimiento Civil, y que son de derecho estricto, sólo resta concluir
que no se ha configurado en la especie la causal de revisión esgrimida
(considerandos 7º y 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 19/03/2018, Rol Nº 11660-2017,

Cita online: CL/JUR/4680/2018


3. Acción de revisión. Causal de revisión si la sentencia se ha
pronunciado contra otra pasada en autoridad de cosa juzgada y que
no se alegó en el juicio en que la sentencia firme recayó.
Incumplimiento de los requisitos de la cosa juzgada. Sentencia laboral
no fue dictada pasando sobre la autoridad de cosa juzgada que
emana de la sentencia de precario

El artículo 810 Nº 4º del Código de Procedimiento Civil enseña que la


Corte Suprema de Justicia podrá rever una sentencia firme: "... 4º. Si se
ha pronunciado contra otra pasada en autoridad de cosa juzgada y que
no se alegó en el juicio en que la sentencia firme recayó". Dicha norma
reenvía tácitamente a la trilogía compuesta por los artículos 175, 176 y
177 del mismo estatuto, según la cual se considera de la esencia de la
cosa juzgada, las identidades (legal) de personas, de cosa pedida y de
causa de pedir. En este caso, los procedimientos que originaron la
sentencia que se solicita revisar y la de precario, media la identidad legal
de personas. No ocurre lo mismo con la cosa pedida, en el precario del
artículo 2195 del Código Civil, la cosa pedida es, indefectiblemente, la
restitución del bien precariado. En el procedimiento laboral lo
perseguido, demandado o pedido ha sido la satisfacción o solución de
las deudas consecuentes al contrato de trabajo. En consecuencia, no
hay similitud en la cosa pedida. Finalmente, la causa de pedir en el
precario, se nuclea en la inclinación que siente el propietario hacia el
goce de lo propio o, si se quiere, en la libertad que le asiste de no tolerar
que un extraño lo aproveche sin su venia; luego, el procedimiento
laboral, el fundamento inmediato de la acción es la disconformidad de
su titular con el hecho que no se le reconozca y/o satisfaga lo que juzga
le corresponde en virtud de un vínculo de dependencia al que la ley
asigna prerrogativas irrenunciables, en consecuencia, es manifiesta
diferencia entre las causas de pedir. Por lo tanto, procede rechazar la
acción de revisión, por cuanto, la sentencia dictada en procedimiento
laboral no fue dictada pasando sobre la autoridad de cosa juzgada que
emana de la sentencia de precario (considerandos 6º a 11º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 28/02/2018, Rol Nº 25142-


2017,

Cita online: CL/JUR/957/2018


Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema Primera Sala (Civil), 3/01/2018, Rol Nº 45602-


2017,

Cita online: CL/JUR/632/2018

El recurso de revisión no procede respecto de las sentencias pronunciadas


por la Corte Suprema, conociendo en los recursos de casación o de revisión.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 175, 176, 178, 179 y 180. Código de
Justicia Militar: artículo 172.

ARTÍCULO 811 (982)

El recurso de revisión sólo podrá interponerse dentro de un año, contado


desde la fecha de la última notificación de la sentencia objeto del recurso.

Si se presenta pasado este plazo, se rechazará de plano.

Sin embargo, si al terminar el año no se ha aún fallado el juicio dirigido a


comprobar la falsedad de los documentos, el perjurio de los testigos o el
cohecho, violencia u otra maquinación fraudulenta a que se refiere el
artículo anterior, bastará que el recurso se interponga dentro de aquel plazo,
haciéndose presente en él esta circunstancia, y debiendo proseguirse
inmediatamente después de obtenerse sentencia firme en dicho juicio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 64, 65, 66, 167 y 813.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Recurso de revisión es de derecho estricto. Recurrente debe hacer


presente que existe proceso pendiente tendiente a obtener
declaración de falsedad

Que, en consecuencia, el recurso de revisión es de derecho estricto y


constituye una regla de excepción que sólo tiene aplicación en los casos
taxativamente señalados en el artículo 810 del Código de
Procedimiento Civil. Luego, a través de este medio de impugnación, no
puede reverse el juicio terminado por sentencia ejecutoriada por
razones distintas de las señaladas en la ley y, por cierto, en su virtud no
es posible volver a analizar el mérito de las pruebas rendidas en el
proceso, salvo los casos contemplados en las causales que consagra
la disposición referida.

Que, de acuerdo a la causal alegada, para que prospere el recurso


resulta necesario que exista un documento en el que se haya
sustentado la acción, cuya falsedad haya sido declarada por sentencia
ejecutoriada dictada con posterioridad al fallo que se trata de rever. Para
el caso en que no exista tal declaración, de acuerdo a lo dispuesto en
el inciso tercero del artículo 811 del Código citado, el recurrente debe
hacer presente la existencia de un proceso tendiente a obtener la
declaración de falsedad (considerandos 5º y 6º).

Corte Suprema, 4/10/2017, Rol Nº 8181-2017, Cita online:


CL/JUR/6388/2017

Fallos en el mismo sentido:

— Corte Suprema, 30/10/1997, Rol Nº 3607-1996,

Cita online: CL/JUR/2592/1997

— Corte Suprema, 11/01/1993, Rol Nº 17242-1993,

Cita online: CL/JUR/989/1993

ARTÍCULO 812 (983)

Derogado.270

ARTÍCULO 813 (984)

Presentado el recurso, el tribunal ordenará que se traigan a la vista todos


los antecedentes del juicio en que recayó la sentencia impugnada y citará a
las partes a quienes afecte dicha sentencia para que comparezcan en el
término de emplazamiento a hacer valer su derecho.

Los trámites posteriores al vencimiento de este término se seguirán


conforme a lo establecido para la substanciación de los incidentes, oyéndose
al fiscal judicial antes de la vista de la causa.271
Concordancias: Código Orgánico de Tribunales: artículo 350.

ARTÍCULO 814 (985)

Por la interposición de este recurso no se suspenderá la ejecución de la


sentencia impugnada.

Podrá, sin embargo, el tribunal, en vista de las circunstancias, a petición


del recurrente, y oído el fiscal judicial, ordenar que se suspenda la ejecución
de la sentencia, siempre que aquél dé fianza bastante para satisfacer el valor
de lo litigado y los perjuicios que se causen con la inejecución de la sentencia,
para el caso de que el recurso sea desestimado.272

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 192.

ARTÍCULO 815 (986)

Si el tribunal estima procedente la revisión por haberse comprobado, con


arreglo a la ley, los hechos en que se funda, lo declarará así, y anulará en
todo o en parte la sentencia impugnada.

En la misma sentencia que acepte el recurso de revisión declarará el


tribunal si debe o no seguirse nuevo juicio. En el primer caso determinará,
además, el estado en que queda el proceso, el cual se remitirá para su
conocimiento al tribunal de que proceda.

Servirán de base al nuevo juicio las declaraciones que se hayan hecho en


el recurso de revisión, las cuales no podrán ser ya discutidas.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 175.

ARTÍCULO 816 (987)

Cuando el recurso de revisión se declare improcedente, se condenará en


las costas del juicio al que lo haya promovido y se ordenará que sean
devueltos al tribunal que corresponda los autos mandados traer a la vista.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 144 y siguientes.


LIBRO CUARTO DE LOS ACTOS JUDICIALES NO
CONTENCIOSOS

TÍTULO I DISPOSICIONES GENERALES

ARTÍCULO 817 (989)

Son actos judiciales no contenciosos aquellos que según la ley requieren


la intervención del juez y en que no se promueve contienda alguna entre
partes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículo s 249, 823, 831, 906 y 915. Código
Orgánico de Tribunales: art ículo s 10 y 133. Código de Minería: art ículo 34. Ley Nº 19.968, Ley
de Procedimiento ante los Juzgados de Familia: artículo 102. Ley Nº 19.947, Ley de Matrimonio
Civil: art ículo 25.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Alzamiento de embargo. Lo pretendido en los procesos judiciales no


contenciosos debe estar ajeno a una contienda entre partes.
Improcedencia de ordenar alzamiento de un embargo mediante un
procedimiento no contencioso

El asunto propuesto por el arbitrio tiene relación con la pertinencia de


hacer uso, para decidir la petición de alzamiento de un embargo, del
procedimiento establecido en el Libro Cuarto del Código de
Procedimiento Civil, sobre los actos judiciales no contenciosos,
establecido en los art ículos 817 y siguientes, definidos por ese precepto
como aquellos que según la ley requieren la intervención del juez y en
que no se promueve contienda alguna entre partes. Así las cosas,
resulta una premisa insalvable que lo pretendido en esta clase de
procesos debe estar ajeno a una contienda entre partes, pues
ciertamente está vedado a los intervinientes de un litigio, por la vía de
un procedimiento no contencioso, pretender la resolución de un asunto
que involucra los intereses de su contraparte sin que ésta sea oída. En
este contexto, siendo un hecho admitido por el solicitante que el bien
sobre el que pretende el alzamiento está sujeto a una medida cautelar
dispuesta en un juicio laboral de cobro de pesos, queda en evidencia
que no se verifica la premisa aludida, en cuanto a la ausencia de
contienda entre partes. Siendo ajenas a la decisión del asunto otra clase
de consideraciones en torno a las posibles formas de término del juicio,
aparece que el derecho ha sido correctamente aplicado por los jueces
del grado (considerando 4º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional), 24/04/2019, Rol


Nº 2265-2019,

Cita online: CL/JUR/2189/2019

2. Solicitud de alzamiento de embargo. Embargo, concepto. Existencia


de embargo que resulta un obstáculo jurídico a la libre circulación de
bienes. Actos judiciales no contenciosos son aquellos que según la
ley requieren intervención del juez y en que no se promueve contienda
alguna entre partes. Tribunales sólo pueden conocer de actos
judiciales no contenciosos sólo ante texto expreso que señale esta
forma de solución, lo que no ocurre en la especie. Alzamiento de
embargo que debe ser solicitado por otra vía judicial

El embargo puede ser definido, en lo que aquí interesa, como la


declaración judicial por la que determinados bienes o derechos de
contenido o valor económico quedan afectados o reservados para
extinguir con ellos una obligación pecuniaria ya declarada (embargo
ejecutivo), esto es, adquiriendo el mismo un carácter cautelar o de
apremio para el efectivo pago de la deuda que se cobra. En la especie,
en el contexto de un juicio ejecutivo laboral de cobro de pesos, que se
llevó adelante hace casi cuarenta años atrás, respecto del cual no existe
constancia acerca de su causal de término, pero que en cualquier caso
supone la existencia de una controversia entre partes que está en su
origen, sin perjuicio de la debida consideración que todo órgano
jurisdiccional debe realizar al paso del tiempo y la necesidad de otorgar
certeza a las relaciones jurídicas que los ciudadanos puedan establecer
con los bienes de que se trata. Se debe tener presente, además, que la
existencia del referido embargo se traduce en un obstáculo jurídico a la
libre circulación de los bienes, que si bien parece que hoy en día resulta
extraño a la realidad acreditada en el proceso por la solicitante y, por lo
mismo, no se visualicen argumentos poderosos para justificar
racionalmente en la actualidad la mantención de la referida figura, no
puede sino señalarse que la vía jurídica elegida por el letrado para
efectuar su solicitud contraría el texto expreso del artículo 817 del
Código de Procedimiento Civil, que señala que los actos judiciales no
contenciosos son aquellos "que según la ley requieren la intervención
del juez y en que no se promueve contienda alguna entre partes", esto
es, como de modo uniforme se ha planteado, los tribunales pueden
conocer de ellos sólo ante texto expreso que señale esta forma de
solución de los problemas con relevancia jurídica, lo que no ocurre en
la especie e impide, por lo mismo, conceder el alzamiento del embargo
solicitado. Lo señalado no obsta a considerar que nos encontramos
frente a una realidad tal que, pareciera revestir las características de un
asunto que de manera permanente lesiona garantías constitucionales
vinculadas al derecho de propiedad de la solicitante, bajo cuya órbita se
pueda articular atribuciones bastantes en el órgano jurisdiccional con
las cuales hacerse cargo de resolver adecuadamente el problema de
base que surge de los antecedentes expuestos en el presente asunto,
lo que conforme al principio dispositivo, exige claramente otra vía a la
intentada (considerandos 3º a 5º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 10/09/2018, Rol Nº 14731-2017,

Cita online: CL/JUR/5258/2018

ARTÍCULO 818 (990)

Aunque los tribunales hayan de proceder en algunos de estos actos


con conocimiento de causa, no es necesario que se les suministre este
conocimiento con las solemnidades ordinarias de las pruebas judiciales.

Así, pueden acreditarse los hechos pertinentes por medio de informaciones


sumarias.

Se entiende por información sumaria la prueba de cualquiera especie,


rendida sin notificación ni intervención de contradictor y sin previo
señalamiento de término probatorio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 38, 131, 132, 324, 327, 819, 824, 844,
846 y 911. Código Orgánico de Tribunales: artículo 390 inciso 2º.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA
1. Cobro de pagaré. El conocimiento de causa puede lograrse no sólo
con la información sumaria. Información sumaria no necesariamente
debe ser a través de testigos

Que el artículo 818 del Código de Procedimiento Civil dispone, en un


precepto que es de aplicación general a pesar de hallarse ubicado en el
Libro IV correspondiente a los actos judiciales no contenciosos, que en
los casos en que la ley ordena proceder con conocimiento de causa, no
es necesario que el conocimiento sea suministrado en la forma y con
las solemnidades establecidas para la prueba ordinaria. Por lo demás,
no debe olvidarse que en conformidad a lo dispuesto en el artículo 818
del Código de Procedimiento Civil, el conocimiento de causa puede
lograrse no sólo con la información sumaria y, a su vez, la información
sumaria no necesariamente debe ser a través de testigos
(considerando 4º).

Corte de Apelaciones de Concepción, 5/09/2019, Rol Nº 1716-2019,

Cita online: CL/JUR/5100/2019

Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Concepción, 5/09/2019, Rol Nº 1702-


2019,

Cita online: CL/JUR/5101/2019

ARTÍCULO 819 (991)

Los tribunales en estos negocios apreciarán prudencialmente el mérito de


las justificaciones y pruebas de cualquiera clase que se produzcan.

Concordancias: Ley Nº 16618, Ley de menores: artículo 43. Ley Nº 19.968, Ley de
Procedimiento ante los Juzgados de Familia: artículo 32. Ley Nº 20.087, Código del Trabajo:
artículo 456.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Reclamo ante negativa del Conservador a inscribir título. Función del


Conservador de Bienes Raíces. Facultad de controlar la legalidad de
inscripciones y de los documentos y actuaciones registrales
correspondientes. Inscripción que implica reemplazo de los deslindes
actuales. Resguardo de derechos de terceros. Negativa de
Conservador que se ajusta a la legalidad

Conforme con lo dispuesto en el artículo 446 del Código Orgánico de


Tribunales, los Conservadores son ministros de fe, auxiliares de la
administración de justicia, encargados de los registros conservatorios
de bienes raíces, de comercio, de minas, de accionistas de sociedades
propiamente mineras, de asociaciones de canalistas, de prenda agraria,
de prenda industrial, de especial de prenda y demás que les
encomienden las leyes; y se les extiende, igualmente, en cuanto sea
adaptable a ellos, toda la normativa correspondiente a los Notarios,
conforme lo dispone el artículo 452 del señalado cuerpo legal. Del modo
referido —y en la calidad que ostentan— la función del Conservador de
Bienes Raíces dice relación con controlar la legalidad de las
inscripciones y de los documentos y actuaciones registrales
correspondientes, y es ello lo que sustenta la facultad que se le atribuye
de reparar o rechazar los títulos que sean de algún modo legalmente
inadmisibles, es decir, que contravengan la legalidad vigente. Así las
cosas, no puede existir dudas que si del detallado análisis de los
antecedentes que se le presenten para su inscripción el Conservador
concluye que ellos importan un reemplazo de los deslindes actuales
señalados en las inscripciones de los títulos de dominio, lo que puede
ocasionar perjuicios a terceros —que además señala
determinadamente—, tal actuación no puede considerarse como ajena
a las labores que le son propias, ya que como auxiliar de la
administración de justicia con su declaración no hace más que cautelar
la eventual afectación de derechos de personas no comparecientes,
ajenos a un procedimiento voluntario como el presente, a quienes la
legislación reconoce el derecho a ser oídos y formular las defensas que
estimen convenientes. La negativa, en todo caso, de modo alguno
implica una denegación de justicia para los solicitantes, sino que lo
único que se exige es que una petición como la de autos quede
entregada a los tribunales ordinarios de justicia, los que resolverán lo
correspondiente a los derechos de todos los posibles involucrados con
la eventual modificación deslindes, si tal fuere el caso, conforme al
análisis de los antecedentes que en tal procedimiento podrán aportar
las partes. Actuar de una forma diversa podría dar origen a una
vulneración a la certeza del historial registral por la que debe velar el
Conservador, y si de los antecedentes del caso aparecen aspectos que
deben ser previamente dilucidadas a fin de determinar la validez y
eficacia de la escritura cuya inscripción se solicita, bien puede
razonablemente estimarse que aquélla puede ser "en algún sentido
legalmente inadmisible", lo que justifica un correcto actuar del Sr.
Conservador (considerandos 5º y 6º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).
Por lo demás, si bien conforme al artículo 88 del Reglamento
Conservatorio de Bienes Raíces "La rectificación de errores, omisiones
o cualquiera otra modificación equivalente que el Conservador, de oficio
o a petición de parte, tuviere que hacer conforme al título inscrito, será
objeto de una subinscripción, y se verificará en el margen de la derecha
de la inscripción respectiva, al frente de la designación modificada" —
que es lo solicitado por los peticionarios de autos—, la jurisprudencia ha
señalado que tal norma debe ser interpretada en el sentido que se
refiere a la corrección de aspectos más bien adjetivos, errores de
transcripción u otros, que no importen una alteración en el dominio, sea
como consecuencia de introducir cambios en la identidad del poseedor
inscrito o del inmueble; y tal es la situación que se pretende precaver en
la especie, cautelando los derechos de los terceros existentes en el
sector (considerando 7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).
Finalmente, cabe señalar que en materias de jurisdicción voluntaria,
como la presente, conforme lo estatuye el artículo 819 del Código de
Procedimiento Civil, los tribunales están autorizados para apreciar
prudencialmente el mérito de las justificaciones y pruebas de cualquier
clase que se produzcan, y actuando de tal modo, atendido el mérito los
antecedentes y lo ya mencionado, resulta razonable la negativa de
inscripción manifestada por el Sr. Conservador de Bienes Raíces, así
como la fundamentación de la sentencia del tribunal a quo que avaló la
misma, y que esta Corte también comparte (considerando 8º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Rancagua, 10/06/2019, Rol Nº 290-2017,

Cita online: CL/JUR/4484/2019

2. Procedimiento judicial no contencioso. Autorización para suscribir


contrato de sociedad de responsabilidad limitada. Contribución al
fondo social constituye una enajenación en los términos del
artículo 393 del Código Civil. Insuficiencia probatoria para acreditar
manifiesto interés y necesidad condicionantes del permiso para
suscribir contrato de sociedad de responsabilidad limitada

La pretensión ventilada es, por naturaleza, la que contiene el


artículo 393 del Código Civil, según el cual "No será licito al tutor o
curador, sin previo decreto judicial, enajenar los bienes raíces del pupilo,
ni gravarlos con hipoteca, censo o servidumbre, ni enajenar o empeñar
los muebles preciosos o que tengan valor de afección; ni podrá el juez
autorizar esos actos, sino por causa de utilidad o necesidad manifiesta".
En lo que convoca, corresponde examinar si se está en presencia de un
acto de enajenación de un bien raíz del pupilo, por una parte, y si, en
caso afirmativo, se encuentra probada su manifiesta "utilidad o
necesidad", por la otra. Cuanto a lo primero —enajenación— viene a la
mente el distingo que efectúa el ordenamiento jurídico entre la persona
natural del socio aportante a una sociedad de responsabilidad limitada,
por un lado, y la sociedad propiamente tal, por el otro. La Ley Nº 20.659
explicita la naturaleza de persona jurídica de la sociedad, algo que
encuentra completa convergencia con el artículo 2053 inciso 2º del
Código Civil, para el que el ente societario forma una persona jurídica
distinta de los socios individualmente considerados. Por ello es que el
aporte del socio constituyente ve convertida su individualidad dominical
en "fondo social", cuanto más si el aporte lo es "en dominio", de modo
que, en rigor de verdad, lo que opera mediante el acto de disposición
en que consiste el aporte, es que el derecho preexistente egresa del
patrimonio del aportante para ingresar al de la sociedad; el aporte viene
siendo, de esa forma, una transferencia, en la especie, del dominio de
un bien raíz al capital social. Consecuentemente, la contribución al
fondo social que de sus singularizados derechos pretende la
demandante, constituye una enajenación, en los términos del referido
artículo 393 del Código Civil, aserto éste que encuentra confirmación en
disposiciones tales como los artículos 375 del Código de Comercio,
2082 y 2084 del Civil, siendo de advertir, por lo demás, que en la
cláusula quinta del proyecto social se lee que "los socios pagan al
contado, mediante el aporte en dominio...". Tocante al segundo aspecto
—manifiesta utilidad o necesidad de la enajenación— se cuenta como
referente, con el texto del proyecto de sociedad, cuya conformidad o
disconformidad con la regulación que el sistema vigente contempla en
este orden de materias, debe ser en seguida examinada. La Ley
Nº 3.918, que regla las sociedades de responsabilidad limitada,
preceptúa en su artículo 2 que ésas se constituirán por escritura pública
que contendrá las enunciaciones del artículo 352 del Código de
Comercio, en tanto en el artículo 4 inciso 2º prescribe que en lo que ella
ni la escritura social prevén, se regirán por la legislación aplicable a las
sociedades colectivas. Según el artículo 352 recién mencionado, la
escritura social debe expresar: "8º. La cantidad que puede tomar
anualmente cada socio para sus gastos particulares". Ocurre que el
proyecto de escritura social, permite constatar que ese tema no viene
abordado en ella, factor que, principalmente por tratarse de una
creación que, según se menciona en la demanda, está destinada a
salvaguardar los intereses del discapacitado, se ve dificultada por la
regla del artículo 404 Nº 1 del Código de Comercio, en la medida que
prohíbe a los socios extraer del fondo común mayor cantidad de la
asignada para sus gastos particulares, al punto que la mera extracción
autoriza a los demás socios a exigir obligatoriamente el reintegro de lo
tomado o hacer otro tanto en la proporción del interés de cada cual en
la masa social. Tampoco le queda indiferente el artículo 397 del propio
estatuto, que faculta a los administradores para proceder, sin poder
especial, a la venta de los inmuebles sociales y practicar otro tipo de
actividades tendentes a satisfacer necesidades urgentes. Los riesgos
que la interdicta asume de cara al aseguramiento de su cuota en los
inmuebles socialmente aportados saltan a la vista y precisamente es
eso lo que da sentido al resguardo del artículo 393. Sin embargo, no se
ha ofrendado informaciones o antecedentes que autoricen a la
judicatura discernir sobre la conveniencia, necesidad o manifiesto
interés de que se viene hablando, a pesar de las facilidades que al
respecto brinda el artículo 819 del Código de Procedimiento Civil. De lo
que sigue que no se encuentre justificado en autos el manifiesto interés
y necesidad condicionantes del permiso que se busca
(considerandos 11º a 13º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 2/01/2018, Rol Nº 2294-2016,

Cita online: CL/JUR/19/2018

ARTÍCULO 820 (992)

Asimismo decretarán de oficio las diligencias informativas que estimen


convenientes.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 159. Ley Nº 19.968, Ley de
Procedimiento ante los Juzgados de Familia: artículos 13 y 29. Ley Nº 20.087, Código del
Trabajo: artículo 429.

ARTÍCULO 821 (993)

Pueden los tribunales, variando las circunstancias, y a solicitud del


interesado, revocar o modificar las resoluciones negativas que hayan dictado,
sin sujeción a los términos y formas establecidos para los asuntos
contenciosos.

Podrán también en igual caso revocar o modificar las resoluciones


afirmativas, con tal que esté aún pendiente su ejecución.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 174, 175, 181, 182 y 822.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Nombramiento de curador. Improcedencia de que Tribunal que


conoce del procedimiento no contencioso decrete que se deje sin
efecto de oficio —puesto que no se le solicitó— su propia sentencia
para dar lugar a una tramitación contenciosa

Si bien el procedimiento no contencioso contempla importantes


excepciones al desasimiento y la cosa juzgada, ellas no tienen lugar en
la especie. Así, el inciso primero del artículo 821 del estatuto procesal
civil dispone que los tribunales podrán, variando las circunstancias y a
petición del interesado, revocar o modificar las resoluciones negativas
que hayan dictado, sin sujeción a los términos y formas establecidos
para los asuntos contenciosos; el inciso segundo, por su parte, refiere a
las circunstancias y condiciones en que pueden revocarse o modificarse
las resoluciones afirmativas. Como se advierte, ninguna de las
situaciones mencionadas contempla la posibilidad de que el tribunal
deje sin efecto de oficio —puesto que no se le solicitó— su propia
sentencia, para dar al procedimiento una tramitación distinta. Ello
explica y da sentido a la salvedad contenida en la resolución recurrida,
cuando —luego de rechazar la oposición— dice "Sin perjuicio de los
derechos que puedan hacerse valer, deduciendo los recursos que les
franquea la Ley". Conforme a lo expuesto precedentemente, la
resolución recurrida se ajustó a derecho y fue dictada ateniéndose al
mérito del proceso, por lo que sólo cabe confirmarla (considerandos 4º
y 5º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de San Miguel, 31/05/2019, Rol Nº 309-2019,

Cita online: CL/JUR/3123/2019

2. Recurso de protección. Negativa del Servicio de Registro Civil a


rectificar resolución que concedió posesión efectiva. Corresponde a
Tribunal competente pronunciarse sobre solicitud de posesión
efectiva del recurrente cuya filiación fue declarada con posterioridad
a la resolución administrativa impugnada

El quid del asunto sometido a la decisión de esta magistratura es


determinar si la negativa del Servicio de Registro Civil e Identificación,
a rectificar la Resolución Exenta Nº 5.812, de 3 de diciembre de 2017,
que concedió la posesión efectiva de los bienes del causante (QEPD),
a sus herederos, se encuentra justificada en las normas que regulan
esta temática. En suma, de acuerdo a lo informado por la Oficina de
Registro Civil e Identificación, al momento de dictar la resolución
administrativa que otorga la posesión efectiva de la herencia, esta
oficina no incurrió en errores como tampoco omisiones en los términos
del artículo 10 de la Ley 19.903 pormenorizada a partir de los
artículos 41 y siguientes del Reglamento, de manera que desde ya el
Servicio ha cumplido con el mandato legal sin que pueda advertirse uno
de los presupuestos del recurso de protección; asimismo, debe
prescindirse la arbitrariedad desde que el otorgamiento de la posesión
efectiva debe tener las publicaciones correspondientes y tramitarse, sea
ante el Juzgado de letras respectivo o esta oficina de acuerdo a lo
dispuesto en la ley en comento y en el presente caso, no tratándose de
errores u omisiones, necesariamente se requiere el procedimiento
adecuado para respetar los derechos de los herederos y terceros
interesados por lo mismo, el artículo 821 del Código de Procedimiento
Civil, permite revocar o modificar las resoluciones que se dictan en los
actos judiciales no contenciosos, por consiguiente es el tribunal el que
deberá pronunciarse sobre la solicitud de posesión efectiva del
recurrente sin que pueda intervenir en esta acción la Corte de
Apelaciones dada la naturaleza del procedimiento cautelar y la
inexistencia de derechos indubitados, que requiere de un procedimiento
judicial para su reconocimiento (considerandos 4º y 5º de la sentencia
de la Corte Suprema).

Corte de Apelaciones de Antofagasta, 11/04/2019, Rol Nº 809-2019,

Cita online: CL/JUR/2069/2019

3. Solicitud de posesión efectiva. Facultad de tribunales de revocar o


modificar resoluciones negativas respecto de actos judiciales no
contenciosos, habiendo cambiado las circunstancias. Solicitante que
no se encuentra en las hipótesis que exigen inscribir nacimiento en el
Registro Civil e Identificación. Documentos otorgados en el extranjero
que cumplen requisitos legales para hacerse valer en Chile

El artículo 821 del Código de Procedimiento Civil, referido a los actos


judiciales no contenciosos, dispone que: "Pueden los tribunales,
variando las circunstancias, y a solicitud del interesado, revocar o
modificar las resoluciones negativas que hayan dictado, sin sujeción a
los términos y formas establecidos para los asuntos contenciosos"
(considerando 2º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).
En el caso de autos, aparece que el solicitante no se encuentra en
ninguna de las situaciones que prevé el artículo 3º de la Ley Nº 4.908,
que hagan necesario inscribir su nacimiento en el Registro Civil e
Identificación para acreditar su calidad de hijo de la causante, siendo
suficientes los documentos agregados en autos, y que si bien han sido
otorgados en el extranjero cumplen los requisitos legales para hacerlos
valer en Chile; corroborando en consecuencia, la declaración que la
propia causante realizó en el testamento otorgado por escritura pública,
en la que declaró que el solicitante es su hijo y que nació de su
matrimonio, celebrado en España. Así las cosas se encuentra
acreditada la concurrencia de los requisitos que hacen procedente la
aplicación del artículo 821 del Código de Procedimiento Civil, motivo por
el cual, corresponde dejar sin efecto la resolución que rechaza la
solicitud de posesión efectiva (considerandos 4º y 5º de la sentencia de
la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 5/01/2018, Rol Nº 7870-2017,

Cita online: CL/JUR/1178/2018


ARTÍCULO 822 (994)

Contra las resoluciones dictadas podrán entablarse los recursos de


apelación y de casación, según las reglas generales. Los trámites de la
apelación serán los establecidos para los incidentes.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 186 al 195, 764 y siguientes. Ley
Nº 19.968, Ley de Procedimiento ante los Juzgados de Familia: artículos 67 y 102K. Ley
Nº 20.087, Código del Trabajo: artículo 476.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Reclamo contra Conservador de Bienes Raíces. Procedencia del


recurso de apelación en contra de la resolución que ordena trámites
para mejor resolver la solicitud de inscripción

Los trámites decretados lo son para mejor resolver la solicitud de


inscripción, lo que determina su naturaleza de sentencia interlocutoria
en los términos de la parte final del artículo 158 del Código de
Procedimiento Civil, la que resulta apelable de conformidad con lo
dispuesto en los artículos 187 y 822 del Código de Procedimiento Civil,
se acogerá el recurso de hecho de que se trata (considerando 2º de la
sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 5/01/2018, Rol Nº 2646-2017,

Cita online: CL/JUR/70/2018

Fallos en el mismo sentido:

— Corte de Apelaciones de Valparaíso, 5/01/2018, Rol Nº 2783-2017,

Cita online: CL/JUR/69/2018

ARTÍCULO 823 (995)

Si a la solicitud presentada se hace oposición por legítimo contradictor, se


hará contencioso el negocio y se sujetará a los trámites del juicio que
corresponda.
Si la oposición se hace por quien no tiene derecho, el tribunal,
desestimándola de plano, dictará resolución sobre el negocio principal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 22.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Interdicción por demencia. Anulación de oficio. Tribunal que no ha


dado traslado al demandante de la oposición interpuesta a gestión no
contenciosa de designación de curador ad litem. Improcedencia de
decidir acerca de petición de nombramiento de curador ad litem antes
de haber resuelto oposición deducida por legítimo contradictor

El artículo 823 del Código de Procedimiento Civil, en su inciso


primero, manda: "Si a la solicitud presentada se hace oposición por
legítimo contradictor, se hará contencioso el negocio y se sujetará a los
trámites del juicio que corresponda". De este modo, corresponde
señalar que la oposición planteada por el letrado que representada a la
demandada, debió ser tramitada de acuerdo a las normas previstas para
los incidentes, confiriéndose traslado a la contraria, toda vez que se
refiere a una cuestión accesoria promovida durante el transcurso de la
petición principal, e incluso debió ser materia de prueba, resolviéndose
dicho incidente de oposición, aceptándolo o rechazándolo. Por otra
parte, se debe establecer que habida consideración de la materia a que
se refiere este juicio ordinario, vale decir, interdicción por demencia, la
naturaleza del incidente promovido es de aquellos de "previo y especial
pronunciamiento", de tal forma que debió ser tramitado en el mismo
cuaderno principal, suspendiéndose entre tanto, el curso de la acción
deducida en autos. Así las cosas, el tribunal no ha podido emitir
pronunciamiento respecto de la designación de curador ad litem, en
razón de existir oposición por legítimo contradictor. De lo que se viene
explicando, resulta evidente que la tramitación de este proceso se
encuentra afectada por vicios procesales consistentes el primero, en no
haber dado traslado al demandante de la oposición interpuesta a la
gestión no contenciosa de designación de curador ad litem, y el
segundo, en no haber resuelto como en derecho corresponde dicha
oposición, antes de decidir acerca de la petición de nombramiento de
curador ad litem (considerandos 4º a 6º de la sentencia de la Corte de
Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Concepción, 17/10/2018, Rol Nº 566-2018,


Cita online: CL/JUR/5876/2018

2. Reclamo ante negativa del Conservador a inscribir un título. Actos


judiciales no contenciosos. Derechos de terceros en actos judiciales
no contenciosos. Oposición a los actos no contenciosos. Oposición
que requiere un legítimo contradictor. Opositor que no es legítimo
contradictor

Las resoluciones dictadas en los actos judiciales no contenciosos


dejan siempre a salvo los derechos de los terceros, los cuales tienen
básicamente dos formas de defender sus intereses que pueden
considerar amagados por un negocio no contencioso, a saber,
comparecer a la instancia y evitar que se forme el acto de jurisdicción
no contenciosa, o pueden evitar que se forme oponiéndose a la solicitud
presentada por el interesado, pero aquí requiere revestir una calidad,
esto es, la de "legítimo contradictor". El artículo 823 del Código de
Procedimiento Civil consagra la institución procesal denominada
oposición a los actos no contenciosos o a las gestiones de jurisdicción
voluntaria. Si el tercero opta por oponerse a la solicitud del interesado,
estando pendiente la resolución del asunto no contencioso, éste se
transformará en contencioso. Así la norma referida dispone: "Si a la
solicitud presentada se hace oposición por legítimo contradictor, se hará
contencioso el negocio y se sujetará a los trámites del juicio que
corresponda. Si la oposición se hace por quien no tiene derecho, el
tribunal, desestimándola de plano, dictará resolución sobre el negocio
principal". En consecuencia, son tres los requisitos para que un negocio
voluntario se transforme en contencioso: 1.- Que exista oposición,
incoada por un tercero; 2.- Que la oposición emane de legítimo
contradictor; y 3.- Que la oposición se formule en tiempo oportuno
(considerando 11º de la sentencia de la Corte Suprema).

Como ya se ha señalado, el derecho a oponerse que tienen los


terceros que se sienten perjudicados con el acto no contencioso que se
trata de formar no puede hacerlo valer cualquier persona, la ley exige
que se trate de un "legítimo contradictor". No existe un concepto legal
que defina tal noción. En doctrina tampoco existe acuerdo de qué se
debe entender por "legítimo contradictor". Se ha dicho que es la persona
que pretende modificar o dejar sin efecto lo resuelto en una gestión
voluntaria, por tener mejor derecho o interés que el solicitante
(considerando 12º de la sentencia de la Corte Suprema).
Atento los principios dogmáticos y las normas legales desarrolladas,
la sola calidad de socio del oponente y la posibilidad incierta de existir
entre las partes diferencias no resueltas en relación con las propiedades
cuya negativa de inscripción motivó estos autos voluntarios, no logra
configurar la hipótesis prevista en el artículo 823 del Código de
Procedimiento Civil para los efectos que el asunto se torne en
contencioso, especialmente por cuanto no puede concluirse que exista
un interés actual comprometido, y por ende la calidad de legítimo
contradictor, susceptible de afectación en caso de acogerse la solicitud
materia de autos, por cuanto se trata de conflictos que pueden ser
sometidos a la decisión de la justicia arbitral en el procedimiento previsto
para ello en el pacto social en el que las partes podrán hacer valer sus
derechos ampliamente, sin desnaturalizar lo que significa un
procedimiento voluntario o no contencioso como el de autos. Por lo
razonado, no se vislumbra que los jueces recurridos hayan vulnerado
los artículos 823 del Código de Procedimiento Civil y 1545 del Código
Civil, por lo que el recurso de casación intentado debe ser rechazado
(considerandos 13º y 14º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 6/08/2018, Rol Nº 7102-2017,

Cita online: CL/JUR/4192/2018

ARTÍCULO 824 (996)

En los negocios no contenciosos que no tengan señalada una tramitación


especial en el presente Código, procederá el tribunal de plano, si la ley no le
ordena obrar con conocimiento de causa.

Si la ley exige este conocimiento, y los antecedentes acompañados no lo


suministran, mandará rendir previamente información sumaria acerca de los
hechos que legitimen la petición, y oirá después al respectivo defensor
público.273

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 249, 567, 818 al 820. Ley Nº 19.620,
sobre Adopción de Menores: artículo 23.

ARTÍCULO 825 (997)


En todos los casos en que haya de obtenerse el dictamen por escrito de
los oficiales del fiscal judicial o de los defensores públicos, se les pasará al
efecto el proceso en la forma establecida en el artículo 37.274

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 37, 817 y 824.

ARTÍCULO 826 (998)

Las sentencias definitivas en los negocios no contenciosos expresarán el


nombre, profesión u oficio y domicilio de los solicitantes, las peticiones
deducidas y la resolución del tribunal. Cuando éste deba proceder con
conocimiento de causa, se establecerán además las razones que motiven la
resolución.

Estas sentencias, como las que se expiden en las causas entre partes, se
copiarán en el libro respectivo que llevará el secretario del tribunal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 170. Código Orgánico de Tribunales:


artículo 379. Ley Nº 19.620, sobre adopción de menores: artículo 26. Ley Nº 19.968, Ley de
Procedimiento ante los Juzgados de Familia: artículos 66 y 75. Ley Nº 20.087, Código del
Trabajo: artículos 458, 459 y 495.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Posesión efectiva testada. Principio constitucional del debido


proceso. Nulidad de todo lo obrado. Registro Civil debe poner en
conocimiento de todos los beneficiados de posesión efectiva intestada
solicitud posterior de conceder posesión efectiva testada. Negocios
no contenciosos deben proceder con conocimiento de causa de todos
los interesados en el asunto. Asunto se hará contencioso si a la
solicitud hace oposición legítimo contradictor

Dada la naturaleza de la petición, esto es, conceder una posesión


efectiva testada después de siete años de habérsela concedido en
forma intestada, y habiéndose comunicado oportunamente por el
Registro Civil la concesión de esta última, por razones elementales de
debido proceso, principio constitucional consagrado en el artículo 19
Nº 3 de la Constitución Política de la República, el tribunal debió poner
en conocimiento de tal petición a todos los beneficiados con la
concesión de la posesión efectiva intestada, a fin de oírlos y dar
cumplimiento al claro mandato del artículo 826 del Código de
Procedimiento Civil, que obliga en los negocios no contenciosos a
proceder con conocimiento de causa, el cual precisamente es
suministrado por todos los interesados en el asunto. Coadyuva en el
razonamiento seguido, la circunstancia que el artículo 823 del mismo
cuerpo legal dispone que el asunto se hará contencioso si a la solicitud,
se hace oposición por legítimo contradictor, circunstancia que deja en
evidencia la necesidad de notificación de la solicitud planteada al
tribunal en forma previa a resolverla o acogerla a todos los interesados
y no como ha ocurrido en autos, impidiendo así que los afectados con
la decisión puedan hacer valer sus derechos previamente. Es más, lo
anterior resulta palmario con todas las oposiciones que han planteado
los demás herederos una vez que conocieron la resolución del tribunal,
con lo que no cabe duda que el asunto es de naturaleza contenciosa.
Así a fin de evitar la nulidad de los actos de procedimientos y el perjuicio
de los interesados en esta controversia, se procederá a anular todo lo
obrado en autos, debiendo quedar la causa en el estado de oficiar al
Registro Civil a fin de que se informe los beneficiarios de la posesión
efectiva intestada quedada al fallecimiento del causante y conforme a
ello, ordenar enseguida la correspondiente notificación de la petición
efectuada, con el objeto de que hagan valer sus respectivos derechos
(considerandos 12º y 13 de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 2/02/2018, Rol Nº 1484-2017,

Cita online: CL/JUR/2226/2018

ARTÍCULO 827 (999)

En los asuntos no contenciosos no se tomará en consideración el fuero


personal de los interesados para establecer la competencia del tribunal.

Concordancias: Código Orgánico de Tribunales: artículos 45 Nº 2, 133, 134, 148, 153 y 182;
Código Civil: artículo 494.

ARTÍCULO 828 (1000)

Los procesos que se formen sobre actos no contenciosos quedarán en todo


caso archivados, como los de negocios contenciosos.
Si se da copia de todo o parte del proceso, se dejará en él testimonio de
este hecho con expresión del contenido de las copias que se hayan dado.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 334, 335 y 336. Código Orgánico de
Tribunales: artículo 455.

TÍTULO II DE LA HABILITACIÓN PARA COMPARECER EN JUICIO

ARTÍCULO 829 (1001)

En los casos en que la ley autorice al juez para suplir la autorización del
marido a fin de que la mujer casada pueda parecer en juicio, ocurrirá ésta
ante el tribunal correspondiente manifestándole, por escrito, el juicio o juicios
en que necesite actuar como demandante o demandada, los motivos que
aconsejan su comparecencia y el hecho de que el marido le niegue la
autorización o el impedimento que lo imposibilita para prestarla.

El tribunal concederá o negará la habilitación, con conocimiento de causa,


si la estima necesaria, y oyendo en todo caso al defensor de menores. Citará
además al marido cuando esté presente y no esté inhabilitado.

Concordancias: Código Civil: artículos 263 y 264. Ley Nº 19.968, Ley de Procedimiento ante
los Juzgados de Familia: artículo 19.

ARTÍCULO 830 (1002)

Lo dispuesto en el artículo anterior se aplicará al caso en que el hijo de


familia tenga que litigar como actor contra su padre o éste le niegue o no
pueda prestarle su consentimiento o representación para parecer en juicio
contra un tercero, ya sea como demandante o demandado.

En el auto en que se conceda la habilitación se dará al hijo de familia un


curador para la litis, con arreglo a lo dispuesto en el artículo 852.

Concordancias: Código Civil: artículos 263 y 264. Ley Nº 19.968, Ley de Procedimiento ante
los Juzgados de Familia: artículo 19.
ARTÍCULO 831 (1003)

El juicio que tenga por objeto la habilitación, por negarse el padre o marido
a representar o a autorizar al hijo o a la mujer para parecer en juicio, se
substanciará en conformidad a los trámites establecidos para los incidentes.

Lo mismo sucederá cuando, antes de otorgarse la que se haya pedido por


ausencia o ignorado paradero del padre o marido, comparece alguno de éstos
oponiéndose.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 89 y siguientes.

ARTÍCULO 832 (1004)

Si la presentación del padre o marido tiene lugar después de concedida la


habilitación, su oposición se tramitará también como un incidente, y mientras
no recaiga sentencia firme, surtirá todos sus efectos la habilitación.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 89 y 90.

TÍTULO III DE LA AUTORIZACIÓN JUDICIAL PARA REPUDIAR LA


LEGITIMACIÓN DE UN INTERDICTO

ARTÍCULO 833 (1005)

Cuando deba obtenerse la autorización judicial para repudiar una


legitimación, se expresarán las causas o razones que justifiquen el repudio,
se acompañarán los documentos necesarios y se ofrecerá información
sumaria para acreditarlas si fuere menester.

En todo caso se oirá el dictamen del respectivo defensor.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 37, 817, 824 y 825. Código Civil:
artículos 194 y 195.

ARTÍCULO 834 (1006)


Derogado.275

ARTÍCULO 835 (1007)

El tribunal ordenará que se extienda la escritura de repudio, y que se


practique la anotación exigida por el artículo 209 del Código Civil.

En dicha escritura se insertará, además del discernimiento de la curaduría,


la resolución que autorizó el repudio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 37, 817, 824, 825 y 833. Código Civil:
artículos 194, 195 y 209.

TÍTULO IV DE LA EMANCIPACIÓN VOLUNTARIA 276

ARTÍCULO 836 (1008)

Para obtener la aprobación judicial de la emancipación voluntaria se


presentarán al tribunal el padre y el hijo, declarando el primero que quiere
emancipar al hijo y el segundo que consiente en ello.277

El tribunal, previo conocimiento de causa en la forma expresada en el


inciso 2º del artículo 824, autorizará la emancipación y mandará reducirla a
escritura pública, si la encuentra ventajosa para el hijo, o denegará la
autorización en caso contrario.

Concordancias: Ley Nº 16618, Ley de menores: art ículo 43. Ley Nº 19.968, Ley de
Procedimiento ante los Juzgados de Familia: artículo 123 Nº 2.

TÍTULO V DE LA AUTORIZACIÓN JUDICIAL PARA REPUDIAR EL


RECONOCIMIENTO DE UN INTERDICTO COMO HIJO NATURAL 278

ARTÍCULO 837 (1009)


La autorización judicial para repudiar el reconocimiento de un hijo natural
que se encuentre bajo interdicción, se sujetará a lo dispuesto en los
artículos 833 y 835.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 37, 817, 824, 825, 833 y 835

TÍTULO VI DEL NOMBRAMIENTO DE TUTORES Y CURADORES Y


DEL DISCERNIMIENTO DE ESTOS CARGOS

1. Del nombramiento de tutores y curadores

ARTÍCULO 838 (1017)

Cuando haya de procederse al nombramiento de tutor o curador legítimo


para un menor, en los casos previstos por el Código Civil, se acreditará que
ha lugar a la guarda legítima, que la persona designada es la que debe
desempeñarla en conformidad a la ley, y que ella tiene las condiciones
exigidas para ejercer el cargo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículo s 689, 824, 825 y 841. Código Civil:
art ículos 338, 353 y 366 y siguientes. Ley Nº 19.968, Ley de Procedimiento ante los Juzgados
de Familia: artículo 8º.

ARTÍCULO 839 (1018)

Para conferir la tutela o curaduría legítima del menor a su padre o madre


legítimos o a los demás ascendientes de uno u otro sexo, procederá el
tribunal oyendo sólo al defensor de menores.

En los demás casos de tutela o curaduría legítima, para la elección del tutor
o curador oirá el tribunal al defensor de menores y a los parientes del pupilo.

Al defensor de menores se le pedirá dictamen por escrito; pero si ha de


consultarse a los parientes del pupilo, bastará que se les cite para la misma
audiencia a que deben éstos concurrir, en la cual será también oído el
defensor.
La notificación y audiencia de los parientes tendrán lugar en la forma que
establece el artículo 689.279

Concordancias: Código Civil: artículos 42 y 367. Código Orgánico de Tribunales: artículos 366
y siguientes. Ley Nº 19.968, Ley de Procedimiento ante los Juzgados de Familia: artículo 122
Nº 3.

ARTÍCULO 840 (1019)

Cuando haya de nombrarse tutor o curador dativo, se acreditará la


procedencia legal del nombramiento, designando el menor la persona del
curador si le corresponde hacer esta designación, y se observarán en lo
demás las disposiciones de los cuatro últimos incisos del artículo anterior.

Concordancias: Código Civil: art ículos 370 a 372.

ARTÍCULO 841 (1020)

Pueden en todo caso provocar el nombramiento de tutor el defensor de


menores y cualquiera persona del pueblo, por intermedio de este funcionario.

Si el nombramiento de curador dativo no es pedido por el menor sino por


otra de las personas que según la ley tienen derecho a hacerlo, se notificará
a aquél para que designe al que haya de servir el cargo, cuando le
corresponda hacer tal designación, bajo apercibimiento de que ésta se hará
por el tribunal si el menor no la hace en el plazo que al efecto se le fije.

Concordancias: Código Orgánico de Tribunales: art ículo 368.

ARTÍCULO 842 (1021)

En los casos del artículo 371 del Código Civil, pueden los tribunales
nombrar de oficio tutor o curador interino para el menor.

No es necesaria para este nombramiento la audiencia del defensor de


menores ni la de los parientes del pupilo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 838 y siguientes. Código Civil:


artículo 371.
ARTÍCULO 843 (1022)

Declarada por sentencia firme la interdicción del disipador, del demente o


del sordomudo, se procederá al nombramiento de curador, en la forma
prescrita por el artículo 839.

Pueden pedir este nombramiento el defensor de menores y las mismas


personas que, conforme a los artículo s 443, 444 y 459 del Código Civil,
pueden provocar el respectivo juicio de interdicción.

Declarada la interdicción provisional, habrá lugar al nombramiento de


curador, conforme a las reglas establecidas en el Código Civil.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículo 839. Código Civil: artículos 1447 y 442
a 472. Código Orgánico de Tribunales: artículo 368.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Autorización de enajenar bienes raíces. Interdicción provisoria.


Improcedencia de establecer un estatuto diferenciado para el curador
interino o provisional.

Que las tutelas y las curadurías o curatelas, dice el artículo 338 del
Código Civil, "son cargos impuestos a ciertas personas a favor de
aquellos que no pueden dirigirse o administrar competentemente sus
negocios y que no se hallan bajo potestad de padre o madre que pueda
darles la protección debida". Si bien dicha norma da a entender que solo
se refiere a menores de edad, no existe discusión en cuanto a que,
consideradas conjuntamente la tutela y la curaduría general, ha de
entenderse que es un concepto que comprende también a los mayores
interdictos y que el objeto que con ellas se persigue es darle protección
a éstos y aquellos, imponiéndole a quien la ejerce, además, la misión
de administrar sus bienes y representarlos en los actos civiles que les
conciernen. El desempeño del cargo de tutor o curador es, en principio,
obligatorio para la persona a quien la ley impone esta misión, y en este
sentido es una carga civil que no puede ser libremente renunciado y del
cual sólo puede excusarse en virtud de una causa legal. Siendo su
objeto velar por la persona e intereses de los incapaces es, por lo
mismo, una institución de orden público, aunque sea de derecho privado
y, en consecuencia, la regulación dada por la ley a la tutela y a la
curaduría no puede ser modificada por voluntad de los particulares y la
acción de los tribunales está limitada también a lo que dispone la ley en
la materia. (Claro Solar, Luis, Explicaciones de derecho civil chileno y
comparado", Volumen II, Tomo IV, Edit. Jurídica, año 1979, págs. 176 y
ss. Que, para ejercer la tutela o curaduría, la ley ha previsto en el
Título XX del Libro Primero del Código Civil, una serie de diligencias y
formalidades, siendo el "discernimiento" el que más propiamente
constituye una formalidad, indispensable para que el tutor o curador
pueda iniciar sus funciones, desde que es "el decreto judicial que lo
autoriza para ejercer su cargo" (artículo 373 del Código Civil), en tanto
la fianza y el inventario son obligaciones previstas más bien en relación
a la responsabilidad por los bienes que administra.

A su turno, para que una persona pueda ser privada de la


administración de sus bienes, debe necesariamente ser declarada
incapaz de los actos de la vida civil por sentencia judicial, estado que se
conoce como el de "interdicción". El juicio de interdicción no ha sido
sometido en nuestro derecho procesal a reglas especiales, por lo tanto,
con arreglo a lo previsto en el artículo 3º del Código de Procedimiento
Civil, le es aplicable el procedimiento ordinario y, como tal, es de lato
conocimiento, lo que implica que puede demorar algún tiempo, con los
complejos resultados que pudieran derivarse si para limitar la
disposición de los bienes hubiera que esperar que se dictara sentencia
de interdicción. Para salvar este inconveniente, dispone el artículo 446
del Código Civil, en el contexto del juicio de interdicción del disipador,
que "mientras se decide la causa, podrá el juez, a virtud de los informes
verbales de los parientes o de otras personas y oídas las explicaciones
del supuesto disipador, decretar la interdicción provisoria". De acuerdo
a las explicaciones del profesor Claro Solar, "esta especie de
interdicción tiene el carácter de una medida precautoria, pero ella no se
limita a prohibir al disipador la ejecución de determinados actos o
contratos con relación a sus bienes, sino que importa la privación
efectiva de la administración de ellos, que debe darse a un curador
interino". (Ob. cit., Tomo V, págs. 68-69). Agrega dicho autor que, en
esto, nuestro Código habría seguido el ejemplo del Código Civil francés,
cuyo artículo 497, tratándose de la interdicción del demente, autoriza al
tribunal para decretar el nombramiento de un administrador provisional,
después del primer interrogatorio que debe hacer al demandado sobre
los hechos invocados en la demanda y sobre los demás que estima
conveniente para formar su opinión. La publicidad que ordena el
artículo 447 del Código Civil, en consecuencia, que obliga a inscribir el
decreto de interdicción provisoria como el de la definitiva en el
Conservador respectivo y notificar al público a través de avisos en un
diario, tiene que ver con dar notoriedad a un hecho de tanta importancia
como la interdicción que afecta al pródigo. Pues bien, en lo que a este
recurso interesa, ambas disposiciones artículos 446 y 447 del Código
Civil se hacen extensivas a la persona demente, de acuerdo a lo
dispuesto en el artículo 461 del mismo cuerpo legal, por lo que mientras
se decide la causa puede el tribunal decretar la interdicción provisoria,
que la privará de su capacidad natural dejándola sometida a un tercero,
no solo en lo que respecta a la administración de sus bienes, sino
también en lo que respecta a su cuidado personal. La declaración de
interdicción provisional decretada trae consigo, pues, el nombramiento
de un curador interino, lo mismo que en la interdicción por prodigalidad.
Que el curador interino es dativo, designado por el juez, en conformidad
a lo que dispone el artículo 371 del Código Civil, "Cuando se retarda por
cualquiera causa el discernimiento de una tutela o de una curaduría, o
durante ella sobreviene un embarazo que por algún tiempo impida al
tutor o curador seguir ejerciéndola, se dará, por el magistrado, tutor o
curador interino, para mientras dure el retardo o el impedimento". Lo
anterior, es concordante con lo dispuesto en el artículo 843 del Código
de Procedimiento Civil, en su inciso final, que señala "Declarada la
interd icción provisional, habrá lugar al nombramiento de curador,
conforme a las reglas establecidas en el Código Civil" (considerandos 4º
a 6º)
Que, en el contexto de lo que se viene reflexionando, y considerando
particularmente que la interdicción provisoria supone la privación de la
administración de los bienes de la persona respecto de la cual se
declara, la que queda entregada al curador interino o provisional,
decisión que se toma, precisamente, previendo que la tardanza en el
juicio de interdicción podría generar un perjuicio en los bienes y la
persona del interdicto, resulta lógica la conclusión a que llega el profesor
Claro Solar, en el sentido que "las facultades de este curador interino
son las mismas que las del curador definitivo", entendiendo que se trata
de "un curador general"..., "nombrado para la persona y bienes del
interdicto provisionalmente", criterio que este tribunal comparte. (Ob.
cit., Tomo V, pág. 75). Que, como se dejó establecido, la reglamentación
de las tutelas y curatelas es una materia de orden público, por lo que,
no advirtiéndose la existencia de alguna regla que limite las facultades
que la ley entrega al tutor o curador en virtud de la provisionalidad de su
cargo, impuesto en beneficio del interdicto, resulta improcedente
establecer un estatuto diferenciado para el curador interino o provisional
(considerandos 7º y 8º).

Corte Suprema Cuarta Sala (Especial), 10/10/2018, Rol Nº 7167-


2017,

Cita online: CL/JUR/5736/2018

ARTÍCULO 844 (1023)

Habrá lugar al nombramiento de curador de bienes del ausente, fuera de


los casos expresamente previstos por la ley, en el que menciona el
artículo 285 del presente Código.

Concordancias: Código Civil: artículos 11, 284, 343 y 473.

ARTÍCULO 845 (1024)

La primera de las circunstancias expresadas en el artículo 473 del Código


Civil para el nombramiento de curador de bienes del ausente, se justificará a
lo menos con declaración de dos testigos contestes o de tres singulares,
que den razón satisfactoria de sus dichos. Podrá también exigir el tribunal,
para acreditar esta circunstancia, que se compruebe por medio de
información sumaria cuál fue el último domicilio del ausente, y que no ha
dejado allí poder a ninguno de los procuradores del número, ni lo ha otorgado
ante los notarios de ese domicilio durante los dos años que precedieron a la
ausencia, o que dichos poderes no están vigentes.

Las diligencias expresadas se practicarán con citación del defensor de


ausentes; y si este funcionario pide que se practiquen también algunas otras
para la justificación de las circunstancias requeridas por la ley, el tribunal
accederá a ello, si las estima necesarias para la comprobación de los hechos.

Concordancias: Código Civil: artículos 11, 284, 343 y 473.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Incidente de nulidad procesal, acogido. Nulidad procesal por falta de


emplazamiento. Incumplimiento de los requisitos para nombrar un
curador de bienes del ausente. Existencia de un perjuicio reparable
sólo con la nulidad procesal

Del examen de los artículos 473 del Código Civil, 845 del Código de
Procedimiento Civil y 367 del Código Orgánico de Tribunales, aparece
con claridad que si se designa curador de bienes del ausente
sustentando el referido nombramiento con el sólo mérito de lo informado
por la Policía de Investigaciones, ello resulta insuficiente por cuanto no
basta que el ejecutado haya salido del país, sino debe ignorarse su
paradero y no debe haber designado en Chile un mandatario con poder
suficiente para asumir tal representación. Así las cosas, se ha producido
un perjuicio sólo reparable con la nulidad procesal, desde que el
defensor público, no obstante asumió la representación del ejecutado,
indicó expresamente "carecer de mayores antecedentes para una
defensa seria de sus intereses", de lo que sigue y se presume que no
hizo gestión alguna en el juicio destinada a resguardar los derechos de
su representado. Por lo antedicho, y no dándose los requisitos legales
para la designación de un curador de bienes para el ejecutado, éste no
ha sido debidamente emplazado en el presente juicio, debiendo ser
acogido el incidente de nulidad de todo lo obrado (considerandos 3º a
7º de la sentencia de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Santiago, 30/05/2014, Rol Nº 2214-2014,

Cita online: CL/JUR/2775/2014

2. Incidente de nulidad de todo lo obrado. Provoca indefensión del


demandado de quien se ignora su paradero omisión en nombrado un
curador de bienes del ausente

Del estudio de los antecedentes reseñados, se desprende que la


señora jueza se apartó de las formalidades que prescribe el artículo 845
del Código de Enjuiciamiento Civil antes de proceder a la designación
de curador de bienes a la demandada. Más aún, ante la excusa
formulada en el acto de la notificación por la curadora de bienes
designada, debió obrar conforme estipulan los artículos 514 y siguientes
del Código Civil con el objeto de proceder a su calificación y determinar
si aceptaba o rechazaba tal excusa, lo que tampoco cumplió. Estos
sentenciadores, por las razones vertidas en el fundamento cuarto,
estiman que al no haberse nombrado un curador de bienes del ausente,
en conformidad a las normas legales vigentes, ha causado perjuicio a
la demandada, provocando su indefensión (considerandos 4º y 6º de la
sentencia).

Corte de Apelaciones de Puerto Montt, 22/04/2014, Rol Nº 129-2014,

Cita online: CL/JUR/1528/2014

ARTÍCULO 846 (1025)

Siempre que el mandatario de un ausente cuyo paradero se ignora, carezca


de facultades para contestar nuevas demandas, asumirá la representación
del ausente el defensor respectivo, mientras el mandatario nombrado obtiene
la habilitación de su propia personería o el nombramiento de otro apoderado
especial para este efecto, conforme a lo previsto en el artículo 11.

Concordancias: Código Orgánico de Tribunales: artículo 367.

ARTÍCULO 847 (1026)

La ocultación a que se refiere el inciso final del artículo 474 del Código Civil,
se hará constar, con citación del defensor de ausentes, a lo menos en la forma
que expresa el inciso 1º del art ículo 845.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículo 845. Código Civil: art ículo 474.

ARTÍCULO 848 (1027)

Se sacarán de los bienes del ausente las expensas de la litis, así como los
fondos necesarios para dar cumplimiento a los fallos que se expidan en su
contra y para cubrir los gastos que ocasione la curaduría.

Concordancias: Código Civil: artículo 343.

ARTÍCULO 849 (1028)

Declarada yacente la herencia en conformidad a lo prevenido en el párrafo


respectivo de este Libro, se procederá inmediatamente al nombramiento de
curador de la misma cumplidas en su caso las disposiciones de los
artículos 482 y 483 del Código Civil.280

Concordancias: Código Civil: artículos 343, 487, 491 y 1240.

ARTÍCULO 850 (1029)

Para proceder al nombramiento de curador de los derechos eventuales del


que está por nacer, bastará la denunciación o declaración de la madre que
se crea embarazada, y en el caso de haberse nombrado ese curador por el
padre, bastará el hecho del testamento y la comprobación de la muerte de
éste.

Concordancias: Código Civil: artículos 77 y 343.

ARTÍCULO 851 (1030)

El nombramiento de curador adjunto se hará como el de curador dativo.

El nombramiento recaerá en la persona designada por el donante o


testador, con tal que sea idónea, siempre que haya de nombrarse curador
para la administración particular de bienes donados o asignados por
testamento con la condición de que no los administre el padre, marido o
guardador general del donatario o asignatario.

Concordancias: Código Civil: artículos 344, 370, 372 y 492.

ARTÍCULO 852 (1031)

Los curadores especiales serán nombrados por el tribunal, con audiencia


del defensor respectivo, sin perjuicio de la designación que corresponda al
menor en conformidad a la ley.

Concordancias: Código Civil: artículos 263, 264, 265, 345 y 494.

2. Del discernimiento de la tutela o curaduría


ARTÍCULO 853 (1032)

El tutor o curador testamentario que pida el discernimiento de la tutela o


curaduría, presentará el nombramiento que se le haya hecho y hará constar
que se han verificado las condiciones legales necesarias para que el
nombramiento tenga lugar.

Encontrando justificada la petición, el tribunal aprobará el nombramiento y


mandará discernir el cargo, previa audiencia del defensor de menores.

Concordancias: Código Civil: artículos 373 y siguientes. Código Orgánico de Tribunales:


artículo 366.

ARTÍCULO 854 (1033)

El decreto judicial que autoriza al tutor o curador para ejercer su cargo, se


reducirá a escritura pública, la cual será firmada por el juez que apruebe o
haga el nombramiento.

No es necesaria esta solemnidad respecto de los curadores para pleito o ad


litem, ni de los demás tutores o curadores, cuando la fortuna del pupilo sea
escasa a juicio del tribunal. En tales casos servirá de título la resolución en
que se nombre el guardador o se apruebe su designación.

Salvo las excepciones establecidas en el inciso precedente, sólo se


entenderá discernida la tutela o curaduría desde que se otorgue la escritura
prescrita en el inciso 1º de este artículo.

Concordancias: Código Civil: artículos 263, 264, 265, 373 y 494. Ley Nº 19.968, Ley de
Procedimiento ante los Juzgados de Familia: artículo 19.

ARTÍCULO 855 (1034)

Para que el tribunal mande otorgar la escritura de discernimiento o dar


copia del título, en el caso del 2º inciso del artículo anterior, es necesario que
preceda el otorgamiento por escritura pública de la fianza a que el tutor o
curador esté obligado.

Esta fianza debe ser aprobada por el tribunal, con audiencia del defensor
respectivo.
Concordancias: Código Civil: artículos 374, 375 y 376.

ARTÍCULO 856 (1035)

No están dispensados de la fianza los curadores interinos que hayan de


durar o hayan durado tres meses o más en el ejercicio de su cargo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 855. Código Civil: artículos 373, 374,
375 y 376.

ARTÍCULO 857 (1036)

En el escrito en que se solicita el discernimiento de una tutela o curaduría


se podrá ofrecer la fianza necesaria; y el tribunal se pronunciará en una
misma resolución sobre lo uno y lo otro.

Podrán también ser una misma la escritura de fianza y la de discernimiento.

Concordancias: Código Civil: artículo 373.

TÍTULO VII DEL INVENTARIO SOLEMNE

ARTÍCULO 858 (1037)

Es inventario solemne el que se hace, previo decreto judicial, por el


funcionario competente y con los requisitos que en el artículo siguiente se
expresan.

Pueden decretar su formación los jueces árbitros en los asuntos de que


conocen.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 503, 651, 859 y siguientes. Código
Civil: artículos 252, 374, 381 y 1765.

ARTÍCULO 859 (1038)


El inventario solemne se extenderá con los requisitos que siguen:

1º Se hará ante un notario y dos testigos mayores de dieciocho años, que


sepan leer y escribir y sean conocidos del notario. Con autorización del
tribunal podrá hacer las veces de notario otro ministro de fe o un juez de
menor cuantía;

2º El notario o el funcionario que lo reemplace, si no conoce a la persona


que hace la manifestación, la cual deberá ser, siempre que esté presente, el
tenedor de los bienes, se cerciorará ante todo de su identidad y la hará
constar en la diligencia;

3º Se expresará en letras el lugar, día, mes y año en que comienza y


concluye cada parte del inventario;

4º Antes de cerrado, el tenedor de los bienes o el que hace la manifestación


de ellos, declarará bajo juramento que no tiene otros que manifestar y que
deban figurar en el inventario; y

5º Será firmado por dicho tenedor o manifestante, por los interesados que
hayan asistido, por el ministro de fe y por los testigos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 503, 651, 858 y 859 siguientes.
Código Civil: artículos 252, 374, 381 y 1765.

ARTÍCULO 860 (1039)

Se citará a todos los interesados conocidos y que según la ley tengan


derecho de asistir al inventario.

Esta citación se hará personalmente a los que sean condueños de los


bienes que deban inventariarse, si residen en el mismo territorio jurisdiccional.
A los otros condueños y a los demás interesados, se les citará por medio de
avisos publicados durante tres días en un diario de la comuna, o de la capital
de la provincia o de la capital de la región, cuando allí no lo haya.281

En representación de los que residan en país extranjero se citará al


defensor de ausentes, a menos que por ellos se presente procurador con
poder bastante.

El ministro de fe que practique el inventario dejará constancia en la


diligencia de haberse hecho la citación en forma legal.
Concordancias: Código Civil: artículos 378 y siguientes.

ARTÍCULO 861 (1040)

Todo inventario comprenderá la descripción o noticia de los bienes


inventariados en la forma prevenida por los artículos 382 y 384 del Código
Civil.

Pueden figurar en el inventario los bienes que existan fuera del territorio
jurisdiccional, sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo siguiente.282

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 862. Código Civil: artículos 382 y 384.

ARTÍCULO 862 (1041)

Si hay bienes que inventariar en otro territorio jurisdiccional y lo pide algún


interesado presente, se expedirán exhortos a los jueces respectivos, a fin de
que los hagan inventariar y remitan originales las diligencias obradas para
unirlas a las principales.283

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 73.

ARTÍCULO 863 (1042)

Concluido el inventario, se protocolizará en el registro del notario que lo


haya formado, o en caso de haber intervenido otro ministro de fe, en el
protocolo que designe el tribunal.

El notario deberá dejar constancia de la protocolización en el inventario


mismo.284

Concordancias: Código Orgánico de Tribunales: artículos 399 y siguientes y 415 y siguientes.

ARTÍCULO 864 (1043)

Es extensiva a todo inventario la disposición del artículo 383 del Código


Civil.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 862. Código Civil: artículos 382 a 384.

ARTÍCULO 865 (1044)

Cuando la ley ordene que al inventario se agregue la tasación de los bienes,


podrá el tribunal, al tiempo de disponer que se inventaríen, designar también
peritos para que hagan la tasación, o reservar para más tarde esta operación.

Si se trata de objetos muebles podrá designarse al mismo notario o


funcionario que haga sus veces para que practique la tasación.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 862. Código Civil: artículos 382 y 384.

TÍTULO VIII DE LOS PROCEDIMIENTOS A QUE DA LUGAR LA


SUCESIÓN POR CAUSA DE MUERTE

1. De los procedimientos especiales de la sucesión testamentaria

ARTÍCULO 866 (1045)

El testamento abierto, otorgado ante funcionario competente y que no se


haya protocolizado en vida del testador, será presentado después de su
fallecimiento y en el menor tiempo posible al tribunal, para que ordene su
protocolización. Sin este requisito no podrá procederse a su ejecución.

Concordancias: Código Civil: artículos 999, 1008, 1011, 1014 y 1020.

ARTÍCULO 867 (1046)

La publicación y protocolización de los testamentos otorgados sólo ante


testigos, se hará en la forma prevenida por el artículo 1020 del Código Civil.

Concordancias: Código Civil: artículos 999, 1008, 1011, 1014 y 1020.


ARTÍCULO 868 (1047)

La apertura del testamento cerrado se hará en la forma establecida por el


artículo 1025 del Código Civil. Si el testamento se ha otorgado ante notario
que no sea del último domicilio del testador, podrá ser abierto ante el juez del
territorio jurisdiccional a que pertenezca dicho notario, por delegación del juez
del domicilio que se expresa. En tal caso, el original se remitirá con las
diligencias de apertura a este juez, y se dejará archivada además una copia
autorizada en el protocolo del notario que autoriza el testamento.285

Concordancias: Ley Nº 19.968, Ley de Procedimiento ante los Juzgados de Familia: artículo 8º
Nº 19.

ARTÍCULO 869 (1048)

Puede pedir la apertura, publicación y protocolización de un testamento


cualquiera persona capaz de parecer por sí misma en juicio.

Concordancias: Ley Nº 19.968, Ley de Procedimiento ante los Juzgados de Familia: artículo 8º
Nº 19.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. La apertura del testamento debe hacerse ante juez del último


domicilio de causante, y sólo por delegación de éste

La apertura del testamento debe hacerse ante juez del último


domicilio de causante, y sólo por delegación de éste, dicha apertura
puede hacerse ante el juez del lugar donde se haya otorgado el
testamento. De modo que tal nulidad, establecida expresamente para la
falta de solemnidades prescritas en el referido párrafo, no puede
hacerse extensiva al incumplimiento de otras normas, pues la nulidad
es de derecho estricto y debe ser interpretada restrictivamente. A mayor
abundamiento, es menester considerar que la apertura del testamento
es un acto de carácter procesal posterior a su otorgamiento y los vicios
que pudieren afectar al procedimiento no pueden alcanzar al testamento
en sí (considerando 3º, sentencia Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valdivia, 16/04/2002, Rol Nº 12527-2001,


Cita online: CL/JUR/4597/2002

ARTÍCULO 870 (1049)

Los testamentos privilegiados se someterán en su apertura, publicación y


protocolización a las reglas establecidas por el Código Civil respecto de ellos.

Concordancias: Código Civil: artículos 1030 a 1055.

ARTÍCULO 871 (1050)

En las diligencias judiciales a que se refieren los artículos que preceden,


actuará el secretario del tribunal a quien corresponda por la ley el
conocimiento del negocio.

Concordancias: Código Orgánico de Tribunales: artículo 379.

2. De la guarda de los muebles y papeles de la sucesión

ARTÍCULO 872 (1051)

Si el albacea o cualquier interesado pide que se guarden bajo llave y sello


los papeles de la sucesión, el tribunal así lo decretará, y procederá por sí
mismo a practicar estas diligencias, o comisionará al efecto a su secretario o
algún notario del territorio jurisdiccional, quienes se asociarán con dos
testigos mayores de dieciocho años, que sepan leer y escribir y sean
conocidos del secretario o notario.286

Nombrará también una persona de notoria probidad y solvencia que se


encargue de la custodia de las llaves, o las hará depositar en el oficio del
secretario.

Puede el tribunal decretar de oficio estas diligencias.

Si ha de procederse a ellas en diversos territorios jurisdiccionales, cada


tribunal, al mandar practicarlas, designará la persona que, dentro de su
territorio, haya de encargarse de la custodia.287
Concordancias: Código Civil: artículos 1222, 1223 y 1224.

ARTÍCULO 873 (1052)

Se procederá a la guarda y aposición de sellos respecto de todos los


muebles y papeles que se encuentren entre los bienes de la sucesión, no
obstante cualquiera oposición.

El funcionario que practique la diligencia podrá pesquisar el testamento


entre los papeles de la sucesión.

Si se interpone el recurso de alzada, se concederá sólo en el efecto


devolutivo.

Se exceptúan de lo dispuesto en el inciso 1º del presente artículo los


muebles domésticos de uso cotidiano, respecto de los cuales bastará que se
forme lista.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 192.

ARTÍCULO 874 (1053)

Puede el tribunal, siempre que lo estime conveniente, eximir también el


dinero y las alhajas de la formalidad de la guarda y aposición de sellos. En tal
caso mandará depositar estas especies en un Banco o en las arcas del
Estado, o las hará entregar al administrador o tenedor legítimo de los bienes
de la sucesión.

Concordancias: Código Civil: artículos 1222 y 1223.

ARTÍCULO 875 (1054)

Decretada la guarda y aposición de sellos, se pueden practicar estas


diligencias aun cuando no esté presente ninguno de los interesados.

Concordancias: Código Civil: artículos 1222 y 1223.

ARTÍCULO 876 (1055)


La ruptura de los sellos deberá hacerse en todo caso judicialmente, con
citación de las personas que pueden tomar parte en la facción del inventario,
citadas en la forma que dispone el artículo 860; salvo que por la urgencia del
caso el tribunal ordene prescindir de este trámite.288

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 860. Código Civil: artículos 1222 y
1223.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Exequátur. I. Requisitos para la ejecución de sentencias extranjeras


en Chile cuando existe tratado con reserva. II. Posesión efectiva
intestada otorgada en el extranjero. Sentencia extranjera que no se
opone a la jurisdicción nacional

I. Chile y Bolivia suscribieron y ratificaron la Convención de Derecho


Internacional Privado, que puso en vigor el Código de Derecho
Internacional Privado cuyo título oficial es Código Bustamante, con la
reserva efectuada por Chile que "ante el derecho chileno y con relación
a los conflictos que se produzcan entre la legislación chilena y alguna
extranjera, los preceptos de la legislación actual o futura de Chile,
prevalecerán sobre dicho Código, en caso de desacuerdo entre unos y
otros", siendo por tanto necesario aplicar el sistema establecido en el
artículo 245 del Código de Procedimiento Civil. Conforme a la norma
citada, para que la resolución de un tribunal extranjero pueda cumplirse
en Chile es necesario que ella no contenga nada contrario a las leyes
de la República y que no se oponga a la jurisdicción nacional
(considerandos 2º y 3º de la sentencia de la Corte Suprema).

II. Los artículos 16 y 688 del Código Civil y 149 del Código Orgánico
de Tribunales, dejan entregado exclusivamente a la jurisdicción de los
tribunales chilenos decidir sobre el otorgamiento de la posesión efectiva
de una sucesión que comprenda bienes situados en Chile, situación
fáctica que fue manifestada por el solicitante. La resolución que se
pretende cumplir para los efectos de que se pueda requerir la inscripción
de la posesión efectiva de la herencia abintestato, no se opone a la
jurisdicción chilena. Por lo que procede disponer que se practique la
inscripción correspondiente de la sentencia antes referida en el Registro
Nacional de Posesiones Efectivas, conforme a lo dispuesto en los
artículos 688 del Código Civil, 13 de la Ley Nº 19.903 y 31 y siguientes
del Reglamento sobre tramitación de posesiones efectivas intestadas
(considerandos 6º a 8º de la sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 1/08/2018, Rol Nº 12146-2018,

Cita online: CL/JUR/4066/2018

2. Exequátur. Competencia de los tribunales chilenos para conocer


sobre el otorgamiento de la posesión efectiva de una sucesión que
comprenda bienes situados en Chile. Desconocimiento de la
circunstancia de existir bienes hereditarios situados en Chile.
Procedencia de inscribir la sentencia extranjera que declara al
solicitante como heredero único y universal del causante en el
Registro Nacional de Posesiones Efectivas

Los artículos 16, 688 del Código Civil, 27 de la Ley sobre Impuesto a
las Herencias, Asignaciones y Donaciones y 149 del Código Orgánico
de Tribunales dejan entregado exclusivamente a la jurisdicción de los
tribunales chilenos decidir sobre el otorgamiento de la posesión efectiva
de una sucesión que comprenda bienes situados en Chile. Esta última
situación fáctica —la eventual existencia de bienes hereditarios situados
en chileno fue manifestada por el solicitante de autos y no consta a la
Corte; sin embargo, en la búsqueda de una decisión acertada, íntegra y
conveniente al caso, previendo la supuesta finalidad práctica que ha
justificado el presente trámite, se entiende que lo requerido por el
solicitante se encuadra en lo dispuesto en las normas aludidas y, en
todo caso, de no ser así hasta ahora, tendrá que oportunamente
procederse conforme a nuestro Derecho (considerando 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Así, siendo lo pedido en este exequátur que se cumpla en Chile la


sentencia que declara a la solicitante como única y universal heredera
del causante, su cónyuge, disponiéndose que se practiquen las
inscripciones correspondientes, al no haberse solicitado la inscripción
de bien alguno situado en Chile, procede acceder sólo a la inscripción
de dicha sentencia en el Registro Nacional de Posesiones Efectivas,
conforme a lo dispuesto en los artículos 688 del Código Civil, 13 de la
Ley sobre Procedimiento para el Otorgamiento de la Posesión Efectiva
de la Herencia y 31 y siguientes del Reglamento sobre Tramitación de
Posesiones Efectivas Intestadas, Registro Nacional de Posesiones
Efectivas y Registro Nacional de Testamentos (considerando 6º de la
sentencia de la Corte Suprema).

Corte Suprema Primera Sala (Civil), 13/01/2016, Rol Nº 17741-2015,

Cita online: CL/JUR/351/2016

3. De la dación de la posesión efectiva de la herencia

ARTÍCULO 877 (1056)

Se dará la posesión efectiva de la herencia al que la pida exhibiendo un


testamento aparentemente válido en que se le instituya heredero.

Concordancias: Código Civil: artículos 704, 952, 955, 1167 y 1269.

ARTÍCULO 878 (1057)

Se dará igualmente al heredero abintestato que acredite el estado civil que


le da derecho a la herencia, siempre que no conste la existencia de heredero
testamentario, ni se presenten otros abintestatos de mejor derecho.

Concordancias: Código Civil: artículos 704, 952, 955 y 1269.

ARTÍCULO 879

La posesión efectiva de una herencia deberá solicitarse para todos los


herederos indicándolos por sus nombres, apellidos, domicilios y calidades
con que heredan.

En la solicitud se expresará, además, el nombre, apellido, profesión u oficio,


estado civil, lugar y fecha de la muerte y último domicilio del causante, si la
herencia es o no testamentaria, acompañándose en el primer caso copia del
testamento.

Concordancias: Código Civil: artículos 688, 696 y 697. Ley Nº 16.271, sobre impuesto a las
herencias, asignaciones y donaciones: artículos 25 y siguientes.
ARTÍCULO 880

Los herederos que no estén obligados a practicar inventario solemne o no


lo exijan al tiempo de pedir la posesión efectiva, deberán presentar inventario
simple en los términos de los artículos 382 y 384 del Código Civil. Dicho
inventario, que se acompañará a la solicitud de posesión efectiva, llevará la
firma de todos los que la hayan pedido.

En todo caso, los inventarios deberán incluir una valoración de los bienes
de acuerdo a lo previsto en el artículo 46 de la Ley Nº 16.271.289

Concordancias: Código Civil: artículos 382 y 384. Ley Nº 16.271, sobre impuesto a las
herencias, asignaciones y donaciones, artículos 25 y siguientes.

ARTÍCULO 881 (1058)

La posesión efectiva se entenderá dada a toda la sucesión, aun cuando


sólo uno de los herederos la pida. Para este efecto, una vez presentada la
solicitud, el tribunal solicitará informe al Servicio de Registro Civil e
Identificación respecto de las personas que posean presuntamente la calidad
de herederos conforme a los registros del Servicio, y de los testamentos que
aparezcan otorgados por el causante en el Registro Nacional de
Testamentos. El hecho de haber cumplido con este trámite deberá constar
expresamente en la resolución que conceda la posesión efectiva.290

La resolución que la conceda contendrá el nombre, apellido, profesión u


oficio, lugar y fecha de la muerte, y último domicilio del causante, la calidad
de la herencia, indicando el testamento cuando lo haya, su fecha y la notaría
en que fue extendido o protocolizado, la calidad de los herederos,
designándolos por sus nombres, apellidos, profesiones u oficios y domicilios.

La resolución terminará, según el caso, ordenando la facción de inventario


solemne de los bienes cuya posesión efectiva se solicita, o la protocolización
del inventario simple de los mismos, sellado previamente en cada hoja por el
secretario.

Concordancias: Ley Nº 16.271, sobre impuesto a las herencias, asignaciones y donaciones:


artículo 28.
ARTÍCULO 882 (1060)

La resolución que concede la posesión efectiva de la herencia, se publicará


en extracto por tres veces en un diario de la comuna, o de la capital de la
provincia o de la capital de la región cuando allí no lo haya.291

En dicho aviso podrá también anunciarse la facción del inventario solemne.

Hechas las publicaciones a que se refieren los incisos anteriores y previa


agregación de una copia autorizada del inventario, el tribunal ordenará la
inscripción de la posesión efectiva y oficiará al Servicio de Registro Civil e
Identificación dando conocimiento de este hecho.292

El secretario deberá dejar constancia en el proceso que se hicieron las


publicaciones en forma legal.293

Concordancias: Ley Nº 16.271, sobre Impuesto a las Herencias, Asignaciones y Donaciones:


artículos 29, 30, 33 a 37.

ARTÍCULO 883 (1061)

La inscripción a que se refiere el artículo anterior se hará en el Registro de


Propiedad del Conservador de Bienes Raíces del territorio jurisdiccional en
que haya sido pronunciada la resolución de posesión efectiva, con indicación
de la notaría en que se protocolizó el inventario y la enumeración de los
bienes raíces que en él se comprendan.294

Con el mérito de esa inscripción, los conservadores deberán proceder a


efectuar las especiales que procedan, sin necesidad de otro trámite.

Cuando entre los bienes hereditarios no haya inmuebles, la inscripción de


la posesión efectiva sólo se hará en el Conservador del territorio jurisdiccional
en donde se haya concedido.295

Las adiciones, supresiones o modificaciones que se hagan al inventario


cuando se trate de bienes raíces, deberán protocolizarse en la misma notaría
en que se protocolizó el inventario y anotarse en el Registro Conservatorio,
al margen de la inscripción primitiva.

Concordancias: Código Civil: art ículo 688. Ley Nº 16.271, sobre Impuesto a las Herencias,
Asignaciones y Donaciones: artículos 25, 26, 29 y 32.
ARTÍCULO 884

Derogado.296

4. De la declaración de herencia yacente y de los procedimientos


subsiguientes a esta declaración

ARTÍCULO 885 (1062)

La declaración de herencia yacente se hará en conformidad a lo


establecido en el artículo 1240 del Código Civil.

Toca al curador que se nombre cuidar de que se hagan la inserción y


fijación ordenadas en dicho artículo.

Concordancias: Ley Nº 19.968, Ley de Procedimiento ante los Juzgados de Familia: artículo 8º
Nº 6.

ARTÍCULO 886 (1063)

En el caso del artículo 482 del Código Civil, se hará saber por oficio dirigido
al efecto al cónsul respectivo la resolución que declara yacente la herencia,
a fin de que en el término de cinco días proponga, si lo tiene a bien, la persona
o personas a quienes pueda nombrarse curadores.

Si el cónsul propone curador, se procederá conforme a lo dispuesto en el


artículo 483 del Código citado.

En el caso contrario, el tribunal hará el nombramiento de oficio.297

Concordancias: Código Civil: artículos 482 y 483.

5. Disposiciones comunes a los párrafos precedentes

ARTÍCULO 887 (1064)


Para provocar las diligencias o para pedir las declaraciones expresadas en
los párrafos precedentes, es necesario acreditar la muerte, real o presunta,
del testador o de la persona de cuya sucesión se trata.

Concordancias: Código Civil: artículos 78 a 94.

ARTÍCULO 888 (1065)

Se levantará acta circunstanciada de todas las diligencias prescritas en


este Título.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 866 y siguientes.

TÍTULO IX DE LA INSINUACIÓN DE DONACIONES

ARTÍCULO 889 (1066)

El que pida autorización judicial para una donación que deba insinuarse,
expresará:

1º El nombre del donante y del donatario, y si alguno de ellos se encuentra


sujeto a tutela o curaduría o bajo potestad de padre o marido;

2º La cosa o cantidad que se trata de donar;

3º La causa de la donación, esto es, si la donación es remuneratoria o si


se hace a título de legítima, de mejora, de dote o sólo por liberalidad; y

4º El monto líquido del haber del donante y sus cargas de familia.

Concordancias: Código Civil: artículos 1386 y siguientes, 1400, 1401 y 1402.

ARTÍCULO 890 (1067)


El tribunal, según la apreciación que haga de los particulares comprendidos
en el artículo precedente, concederá o denegará la autorización, conforme a
lo dispuesto en el artículo 1401 del Código Civil.

Concordancias: Código Civil: artículos 1386 y siguientes, 1400, 1401 y 1402.

TÍTULO X DE LA AUTORIZACIÓN JUDICIAL PARA ENAJENAR,


GRAVAR O DAR EN ARRENDAMIENTO POR LARGO TIEMPO
BIENES DE INCAPACES, O PARA OBLIGAR A ÉSTOS COMO
FIADORES

ARTÍCULO 891 (1068)

Cuando deba obtenerse autorización judicial para obligar como fiador a un


incapaz, o para enajenar, gravar con hipoteca, censo o servidumbre, o para
dar en arrendamiento sus bienes, se expresarán las causas o razones que
exijan o legitimen estas medidas, acompañando los documentos necesarios
u ofreciendo información sumaria para acreditarlas.

En todo caso se oirá el dictamen del respectivo defensor antes de


resolverse en definitiva.

Si se concede la autorización fijará el tribunal un plazo para que se haga


uso de ella.

En caso de no fijar plazo alguno, se entenderá caducada la autorización en


el término de seis meses.

Concordancias: Código Civil: art ículo s 254, 255, 393, 396, 397, 399, 400, 404, 407, 1754 y
1797. Código Orgánico de Tribunales: artículo 366. Ley Nº 19.968, Ley de Procedimiento ante los
Juzgados de Familia: artículo 8º Nº 3.

JURISPRUDENCIA RELACIONADA

1. Autorización judicial para suscribir contrato de mandato general para


efectuar partición. Facultad de la mujer, ante la ausencia de su
cónyuge, para requerir autorización judicial para actuar respecto de
sus propios bienes
Ante la prolongada ausencia del marido casado en sociedad
conyugal, la mujer puede conforme lo prevenido en el artículo 138 del
Código Civil, solicitar la autorización judicial para ejecutar actos sobre
sus propios bienes, sin que sea indispensable que ella deba demandar
necesariamente la separación judicial de bienes, o el nombramiento de
un curador de bienes para su marido ausente, o dar paso a la
administración extraordinaria de la sociedad conyugal. La mujer no está
necesariamente obligada a recurrir a estos mecanismos más gravosos
si la ley le proporciona otro que le es menos. El principio a fortiori explica
que quien está legalmente facultado para ejecutar actos de la mayor
trascendencia o gravedad, también lo está para hacer lo propio respecto
de negocios que naturalmente son de menor intensidad. En este
sentido, si la mujer del ausente está facultada para promover su
separación judicial de bienes, el nombramiento de un curador del
ausente o asumir la administración extraordinaria de la sociedad
conyugal, no se advierte por qué razón no podría, ante la ausencia de
su cónyuge, sin recurrir a estas más radicales instituciones, requerir solo
una autorización judicial para actuar respecto de sus propios bienes tal
como lo previene el citado artículo 138 (considerando 4º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

La autorización para enajenar que se solicita en la especie, no dice


relación con los bienes del marido o de la sociedad conyugal que éste
tiene con la solicitante, sino que únicamente respecto de sus bienes
propios. Según consta de las inscripciones especiales de herencia
agregadas a la solicitud, la requirente pide autorización judicial solo para
disponer de los derechos en inmuebles por ella adquiridos a título
gratuito durante la vigencia de la sociedad conyugal, concretamente por
el modo sucesión por causa de muerte, por lo que, de conformidad con
lo establecido en los artículos 1726 y 1732 del Código Civil, estos
derechos no aumentan el haber social, sino que solo el de cada
cónyuge, en este caso, el de la mujer (considerando 6º de la sentencia
de la Corte de Apelaciones).

Corte de Apelaciones de Valparaíso, 22/11/2019, Rol Nº 1498-2019,

Cita online: CL/JUR/6702/2019


TÍTULO XI DE LA VENTA EN PÚBLICA SUBASTA

ARTÍCULO 892 (1069)

La venta voluntaria en pública subasta, en los casos en que la ley ordene


esta forma de enajenación, se someterá a las reglas establecidas en el
Título IX del Libro III para la venta de bienes comunes, procediéndose ante el
tribunal ordinario que corresponda.

Concordancias: Código Civil: art ículo 394.

ARTÍCULO 893 (1070)

Si no se hacen posturas admisibles, podrán los interesados pedir que se


señale otro día para la subasta, manteniendo el valor asignado a los bienes,
o reduciéndolo, o modificando como se estime conveniente la forma o
condiciones del pago.

Si para autorizar la venta ha debido oírse a alguno de los defensores


públicos, se le oirá también para aprobar la reducción o modificación indicada.

Concordancias: Código Civil: art ículo 394.

ARTÍCULO 894 (1071)

Se observarán también en la venta voluntaria en pública subasta las


disposiciones de los artículos 494, 495, 496 y 497; pero la escritura definitiva
de compraventa será subscrita por el rematante y por el propietario de los
bienes, o su representante legal si es incapaz.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículo s 494 a 497. Código Civil: art ículo 394.

TÍTULO XII DE LAS TASACIONES


ARTÍCULO 895 (1072)

Las tasaciones que ocurran en los negocios no contenciosos y las que se


decreten en los contenciosos, se harán por el tribunal que corresponda,
oyendo a peritos nombrados en la forma establecida por el artículo 414.

Concordancias: Código Civil: artículos 398, 1257, 1325, 1618 Nº 10, 1777, 2036 y 1765. Ley
Nº 16.271, sobre herencias, asignaciones y donaciones.

ARTÍCULO 896 (1073)

Practicada la tasación, se depositará en la oficina a disposición de los


interesados, los cuales serán notificados de ella por el secretario o por otro
ministro de fe, sin necesidad de previo decreto del tribunal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 895.

ARTÍCULO 897 (1074)

Los interesados tendrán el término de tres días para impugnar la tasación.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 895.

ARTÍCULO 898 (1075)

De la impugnación de una de las partes se dará traslado a la otra, por el


término de tres días.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículos 895 y 897.

ARTÍCULO 899 (1076)

Oída la contestación, el tribunal resolverá sobre la impugnación, sea


aprobando la operación, sea mandando rectificarla por el mismo u otro perito,
sea fijando por sí mismo el justiprecio de los bienes.

Si el tribunal manda rectificar la operación, expresará los puntos sobre los


cuales debe recaer la rectificación.
Presentada la operación por el perito, hará el tribunal el justiprecio sin más
trámite.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 895, 897 y 898.

ARTÍCULO 900 (1077)

En el caso del número 16 del artículo 445 de este Código, podrá el tribunal,
aunque el interesado no reclame, negar su aprobación a la tasación y
nombrar otro perito que la rectifique.

Se observará también en este caso lo dispuesto en el artículo precedente.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 445, 895 y 897 a 899.

TÍTULO XIII DE LA DECLARACIÓN DEL DERECHO AL GOCE DE


CENSOS

ARTÍCULO 901 (1078)

El que pretenda entrar en el goce de un censo de transmisión forzosa


pedirá al tribunal competente que le declare su derecho, previa la
comprobación de los requisitos legales y de las formalidades necesarias.

Concordancias: Código Civil: artículos 579 y 2022 y siguientes.

ARTÍCULO 902 (1079)

Son requisitos legales para la declaración de este derecho:

1º El fallecimiento del último censualista; y

2º El llamamiento establecido a favor del compareciente por el acto


constitutivo del censo o de la antigua vinculación que se haya convertido en
él, o por la ley.
Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 901. Código Civil: artículos 579 y 2022
y siguientes.

ARTÍCULO 903 (1080)

Reclamado este derecho, el tribunal llamará por medio de tres avisos que
se publicarán de ocho en ocho días a lo menos en un diario de la comuna, si
lo hay, o de la capital de la región, en el caso contrario, a los que se crean
llamados al goce del censo, a fin de que hagan uso de su derecho.298

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 901. Código Civil: artículos 579 y 2022
y siguientes.

ARTÍCULO 904 (1081)

Transcurridos ocho días después del último aviso de los indicados en el


artículo anterior, el tribunal abrirá un término de prueba para que el
compareciente acredite su derecho.

Se rendirá esta prueba con citación del defensor de obras pías, cuando a
éste corresponda intervenir.299

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículo s 901 y 903. Código Civil: art ículos 579
y 2022 y siguientes.

ARTÍCULO 905 (1082)

Comprobada la constitución del censo y no presentándose contradictor, lo


que certificará antes del último decreto el secretario, el tribunal decretará el
derecho del compareciente, si acredita los requisitos establecidos en el
artículo 902.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 902. Código Civil: artículos 579 y 2022
y siguientes.

ARTÍCULO 906 (1083)


Compareciendo uno o más contradictores, se seguirá con ellos el juicio
sobre mejor derecho a censo, sirviendo de demanda la solicitud de denuncia,
y con las especialidades siguientes:

1ª Serán admitidos en cualquier estado del juicio; y, salvo lo dispuesto en


el número 5º del presente artículo, cada contradictor lo tomará en el estado
en que lo encuentre;

2ª En la solicitud de oposición fundará su derecho el que la presente;

3ª Transcurrido el plazo a que se refiere el inciso 1º del artículo 904, se


recibirá la causa a prueba sin previa discusión sobre el derecho de los
comparecientes;

4ª Las pruebas legales rendidas por cualquiera de los interesados, aun


cuando lo hayan sido antes de formulada alguna oposición, afectarán a todos,
como si efectivamente se hubieran producido con su citación;

5ª A los que se presenten después del término de prueba, se les concederá


uno nuevo, que no excederá de la mitad del primero. Durante este término
podrán también los otros interesados rendir prueba dirigida a destruir el
derecho para cuya justificación se haya concedido aquél;

6ª La prueba se rendirá en la forma establecida para los juicios ordinarios


de mayor cuantía, fijándose por el tribunal los puntos sobre que debe recaer,
al tiempo de decretarla; y

7ª Terminada la prueba, cada parte tendrá el plazo de seis días para


presentar su alegato, lo que harán en el orden en que hayan comparecido al
juicio.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 901 y 905. Código Civil: artículos 579
y 2022 y siguientes.

ARTÍCULO 907 (1084)

Todo lo dicho en este Título se aplica a las capellanías laicales a que esté
afecto algún censo.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 901 a 906 y 908. Código Civil:
artículos 579 y 2022 y siguientes.
ARTÍCULO 908 (1085)

Queda vigente el procedimiento establecido por las leyes de la materia


sobre exvinculaciones.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículo 901 y siguientes. Código Civil:


artículos 579 y 2022 y siguientes.

TÍTULO XIV DE LAS INFORMACIONES PARA PERPETUA


MEMORIA

ARTÍCULO 909 (1086)

Los tribunales admitirán las informaciones de testigos que ante ellos se


promuevan, con tal que no se refieran a hechos de que pueda resultar
perjuicio a persona conocida y determinada.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículos 910 y 912 a 914.

ARTÍCULO 910 (1087)

En el mismo escrito en que se pida que se admita la información, se


articularán los hechos sobre los cuales hayan de declarar los testigos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: art ículos 909 y 912 a 914.

ARTÍCULO 911 (1088)

Derogado.300

ARTÍCULO 912 (1089)

Admitida la información, serán examinados los testigos que el interesado


presente.301
Si los testigos son conocidos del juez o del ministro de fe que autoriza la
diligencia, se dejará en ella testimonio de esta circunstancia.

Si no lo son, se les exigirá que comprueben su identidad con dos testigos


conocidos.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 909, 910, 913 y 914.

ARTÍCULO 913 (1090)

Concluida la información, se pasará al defensor público para que examine


las cualidades de los testigos y si se ha acreditado su identidad por alguno
de los medios expresados.302

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 909, 910, 912 y 914.

ARTÍCULO 914 (1091)

Los tribunales aprobarán las informaciones rendidas con arreglo a lo


dispuesto en este Título, siempre que los hechos aparezcan justificados con
la prueba que expresa el número 2º del artículo 384, y mandarán archivar los
antecedentes, dándose copia a los interesados.

Estas informaciones tendrán el valor de una presunción legal.

Concordancias: Código de Procedimiento Civil: artículos 909, 910, 912 y 913.

TÍTULO XV DE LA EXPROPIACIÓN POR CAUSA DE UTILIDAD


PÚBLICA303

ARTÍCULO 915 (1092)

Autorizada la expropiación en la forma que dispone el número 10 del


artículo 10 de la Constitución, el juez letrado dentro de cuya jurisdicción se
encontraren los bienes que han de expropiarse, a solicitud escrita del que
pida la expropiación, citará a éste y al propietario de los bienes a un
comparendo, con el fin de nombrar peritos que hagan el justiprecio ordenado
por dicho artículo.

Concordancias: Constitución Política: artículo 19 Nº 24. Decreto Ley Nº 2.186, aprueba ley
orgánica de procedimientos de expropiaciones, D.O. 9.06.1978. Código Civil: artículo 1960.

ARTÍCULO 916 (1093)

El comparendo tendrá lugar aun cuando sólo concurra el que pide la


expropiación. Cada parte nombrará un perito, y de común acuerdo al que
deba hacer las veces de tercero en discordia. No habiendo acuerdo para este
nombramiento, lo hará el juez, al cual corresponderá también designar perito
a nombre del propietario de los bienes, si éste no concurre al comparendo.

Concordancias: Constitución Política: artículo 19 Nº 24. Decreto Ley Nº 2.186, aprueba ley
orgánica de procedimientos de expropiaciones, D.O. 9.06.1978. Código de Procedimiento Civil:
artículo 915.

ARTÍCULO 917 (1094)

Reunidos los peritos y el tercero en el día y hora que designe el tribunal,


bajo una multa de un sueldo vital en caso de inasistencia, harán un avalúo
circunstanciado de los bienes que se trata de expropiar y de los daños y
perjuicios que con la expropiación se causen al propietario. No se tomará en
cuenta para este avalúo el mayor valor que puedan obtener los bienes
expropiados a consecuencia de las obras a que esté destinada la
expropiación.304

Concordancias: Constitución Política: artículo 19 Nº 24. Decreto Ley Nº 2.186, aprueba ley
orgánica de procedimientos de expropiaciones, D.O. 9.06.1978. Código de Procedimiento Civil:
artículo 915.

ARTÍCULO 918 (1095)

Si la estimación de los dos peritos es idéntica, o si lo es la de uno de los


peritos y la del tercero, se aceptará como valor de los bienes el que
establezcan las dos avaluaciones conformes.
No existiendo esta conformidad, se tendrá como valor de los bienes el
tercio de la suma de las tres operaciones; pero si entre ellas hay notable
diferencia, podrá el tribunal modificar prudencialmente ese valor.

Concordancias: Constitución Política: artículo 19 Nº 24. Decreto Ley Nº 2.186, aprueba ley
orgánica de procedimientos de expropiaciones, D.O. 9.06.1978. Código de Procedimiento Civil:
artículo 915.

ARTÍCULO 919 (1096)

Declarado por el tribunal el valor de los bienes y perjuicios con arreglo al


artículo anterior, se mandará publicar esta declaración por medio de cinco
avisos que se insertarán de tres en tres días, a lo menos, en un periódico del
departamento, si lo hay, o de la cabecera de la provincia, en caso contrario,
a fin de que los terceros a que se refieren los artículos 923 y 924 puedan
solicitar las medidas precautorias que en dichos artículos se mencionan.
Transcurridos tres días después del último aviso y no habiendo oposición de
terceros, el tribunal ordenará que el precio de la expropiación se entregue al
propietario, o si está él ausente del departamento o se niega a recibir que se
consigne dicho valor en un establecimiento de crédito.

Verificado el pago o la consignación, se mandará poner inmediatamente al


interesado en posesión de los bienes expropiados, si son muebles, y si son
raíces, se ordenará el otorgamiento dentro del segundo día de la respectiva
escritura, la cual será firmada por el juez a nombre del vendedor, si éste se
niega a hacerlo o está ausente del departamento.

Concordancias: Constitución Política: artículo 19 Nº 24. Decreto Ley Nº 2.186, aprueba ley
orgánica de procedimientos de expropiaciones, D.O. 9.06.1978. Código de Procedimiento Civil:
artículo 915.

ARTÍCULO 920 (1097)

Las notificaciones en esta gestión se harán en la forma que establece el


artículo 48.

Concordancias: Constitución Política: art ículo 19 Nº 24. Decreto Ley Nº 2.186, aprueba ley
orgánica de procedimientos de expropiaciones, D.O. 9.06.1978. Código de Procedimiento Civil:
art ículo 915.
ARTÍCULO 921 (1098)

Las apelaciones que se interpongan se concederán sólo en el efecto


devolutivo.

Concordancias: Constitución Política: artículo 19 Nº 24. Decreto Ley Nº 2.186, aprueba ley
orgánica de procedimientos de expropiaciones, D.O. 9.06.1978. Código de Procedimiento Civil:
artículo 915.

ARTÍCULO 922 (1099)

En segunda instancia podrá hacerse nueva estimación pericial en la forma


dispuesta por los artículos 915 a 918 inclusive, si el tribunal lo juzga
necesario.

Concordancias: Constitución Política: artículo 19 Nº 24. Decreto Ley Nº 2.186, aprueba ley
orgánica de procedimientos de expropiaciones, D.O. 9.06.1978. Código de Procedimiento Civil:
artículos 915 a 918.

ARTÍCULO 923 (1100)

Los juicios pendientes sobre la cosa expropiada no impedirán el


procedimiento que este Título establece.

En este caso, el valor de la expropiación se consignará a la orden del


tribunal, para que sobre él se hagan valer los derechos de los litigantes.

Aun cuando el actual poseedor de los bienes expropiados resulte vencido


en el juicio de propiedad, se considerará firme la enajenación a favor del
expropiante, pudiendo el que sea declarado dueño ejercer los derechos a que
se refiere el inciso anterior y las demás acciones que le correspondan.

Concordancias: Constitución Política: artículo 19 Nº 24. Decreto Ley Nº 2.186, aprueba ley
orgánica de procedimientos de expropiaciones, D.O. 9.06.1978. Código de Procedimiento Civil:
artículo 915.

ARTÍCULO 924 (1101)

Tampoco será obstáculo para la expropiación la existencia de hipotecas u


otros gravámenes que afecten a la cosa expropiada; sin perjuicio de los
derechos que sobre el precio puedan hacer valer los interesados. Las
gestiones a que dé lugar el ejercicio de estos derechos se tramitarán como
incidentes en ramo separado y no entorpecerán el cumplimiento de la
expropiación.

Concordancias: Constitución Política: artículo 19 Nº 24. Decreto Ley Nº 2.186, aprueba ley
orgánica de procedimientos de expropiaciones, D.O. 9.06.1978. Código de Procedimiento Civil:
artículo 915.

ARTÍCULO 925 (1102)

Las gestiones para reclamar la expropiación deberán iniciarse dentro de


los seis meses subsiguientes a la ley que la autorice, salvo que la misma ley
fije un plazo diverso.

Concordancias: Constitución Política: artículo 19 Nº 24. Decreto Ley Nº 2.186, aprueba ley
orgánica de procedimientos de expropiaciones, D.O. 9.06.1978. Código de Procedimiento Civil:
art ículo 915.

TÍTULO FINAL DE LA DEROGACIÓN DE LAS LEYES DE


PROCEDIMIENTO

ARTÍCULO FINAL

La derogación de las leyes preexistentes al 1º de marzo de 1903, sobre las


materias de que trata el presente Código, se rige por el siguiente artículo final
del Código de Procedimiento Civil aprobado por la Ley Nº 1.552, de 28 de
agosto de 1902:

"Desde la vigencia de este Código quedarán derogadas todas las leyes


preexistentes sobre las materias que en él se tratan, aun en la parte que no
le sean contrarias, salvo que ellas se refieran a los tribunales especiales no
regidos por la ley de 15 de octubre de 1875.

Sin embargo, los Códigos Civil, de Comercio y de Minería, la Ley de


Organización y Atribuciones de los Tribunales y las leyes que los hayan
complementado o modificado, sólo se entenderán derogados en lo que sean
contrarios a las disposiciones de este Código".
Santiago, veintiuno de marzo de 1944.— J. A. RÍOS M.— Óscar Gajardo
V.

También podría gustarte