54 RICARDO ROSSET - PEDRO A.
LAGO
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DaCTILOSCOPU.
Origen del voca.bl-o: El. nombre que inmorta.liza la brillante
obra del maestro V ucetich,. es originaria. del periodista don Fran-
cisco Latzina, quien le sugirió este vocablo en un artículo publi.
cado en II La Nación!1 del -día 8 de enero de. 1894 con el título
11 Reminiscencias: platenses con ribetes antropométricos' l Y decía:
'-' Alln. en La Plato. tuve uno de estos días pasados el gusto de cono-
cel' una persona. tan modesta como meritoria, el Sr. Juan Vucetich. Este
caballero se halln: al frente de la estadística ... y pl'ellta. a la adminis-
tración -policial de la provincia buenos servicios como estadigmfo y a la
seguridad pública, muy l'elevnntes, en 1", identificación de los criminales,
no sólo mediante1:J. aplicación" de los métodos antropométricos ya. COlla.
cidos} sino hasta. por el uso de uno nU6VOy que ha. pesado desapercibido
hasta ahol'a} el de la 1"( icnofalangometria}', ¡.Jesús, que palabra I
}'Lo que DO le perdollo al e:::ccelente antropoinetl'ista que aquí me
ocupa, es la. invcnción del vocablo (( ícnofolongometrin)', i Qué horror!
Está. a.quello compuesto' del prefijo griego iolmo3, que significa. fig'll.ra"
luego la palabra griega phalax, que quiel'e decir falange, y finalmente
la voz griega mdron, que e! como quien. dice mediaa: total mschcíón de
la figura. de la fal:a.11ge. Yo me pregWlto qué necesidad ha tenido Yuce-
tich de machiliembl'ar todas esas cosa.!! griegus para designar co.n un
5010 nombl'e. la impl'!'!tlión digital.. Desde luego en 10. icnoialangometrla no
56 mide 11Mlo.,por consiguiente está demás lo de '(metúl1!1¡ se observ::l,
se euminar.ge mira. la impresión del dedo, lo. figura que sus estrílls
palmares forman. P\les entonces, si es absolutamente necesnrio que se
emplee una pnla'bra griega pan\. denominar el procedimientot, y para
que el nombre' ese haga juego con el de Ifantl'Op0ll1stl'Ía"¡ dignee, por
ejemplo: élaclflosoopía, compuesto de los voc~~108: dakiylos, dedo r
akope111, e:Iaminal') vocablo que es más propio', más corto (13 letras
contra 17) ., hasta más euf6nico que icnofalllngometrla,'}
Demás está que consignemos, que Vucetich aceptó de inmediato
esta' sugerencia, y la prueba de ello es que el nombre complicado
u icnofalangometría" es por pocos conocido o que demuestra que
fue de:sterrado por Vucetich de inmediato luego de
la sugere:iícia
de Latzina,
i.
L ~...;;;;;;;-. .;;;.
__ -
CAPÍTULO 'Ir
TEJIDO EPIDERMICO. - DESORIPOIóN DE LAS EMINENCIAS PAl'ILA-
RES. _ LOS TIPOS FUNDAMENTALES. - DELTA. - PUNTOS CARAC-
TERíSTICOS. - lDENTIDAD DACTILOSCóPICA.
TEJIDO EPIDÉRMICO.
Si .bien es cierto ql1e en cpalquier texto dé anatomía se encuen-
tran 'estudios exhaustivos sobre la materia del epígrafe,' nosotros
transcribiremos un estudio realizado por un dacti16scopo,.chileno,
el 'señor Aliaga León] que consideramos acertado, por tratarse de
un estudio que toma las zonas e::taminadas con criterio dactiloscó-
pico, que es en síntesis lo que a nosotro5 'nos interesa realmente.
En un corte perpendicular de .la piel se distinguen dos capas
perfectamente definibles: una superficial y delgada denominada
llpid6nn,is y otra p;ro£:unda y más gruesa llamada dermis. Lo. epi~
dermis recubre la dermis y la parte apoyada sobre ésta recibe el
nombre de cuerpo o capa m1.~cosade M alpighi.
La dermis o corión, es una membrana que alcaMa de Y3 a
3 mm de espe.sor¡ constituida principa.lmente] por tejidos conjunt:i:-
YOS, fibras elásticas, fibras musc:ulares. y tejidos adiposos. A su yez,
se puede" divi-dir. en dos -capas:. 103 tejidos fibrosos¡ que correspon-
den a la parte más interna y gruesa, y la región papilar, la cual
está encima de la anterior y es menos gruesa.
Se haHan diseminadas en la piel:
a) Glándulas sudoríparas cuyos .glomérulos. (-conjl1~to de cuer~
pecillos de una: misma naturalez.a) expelen ,~l sudor por unos ca-
nales que. desembocan en los poros alcanzando su número a "106 por
cada 2}5 mm2• La cantidad que segrega al día es aproximadamente
de 600 gr] pero esa cantidad aumenta de acuerdo a la mayor tem-
peratura l
al ejercicio, y emociones j cada poro corresponde a una
glándula,
. b) Vasos scmguineos los cuales están representados por los ca-
J
pilares, formando algunos las llamadas papilas, vasculares,
c) Tenl'¡.ina.ciones nerviosas situad'as bajo la capa, de Malpighi].
 56 RICARDO RDSSET • PEDRO A. LAGO
las cuales penetran eu unos órganos. especiales couocido3 co.u el
nombre de rlcorpl.lsculos táctiles)), repartidos en las papilas' ner.
viosas de' todo. la piel: ejerciendo la sensibilidad táctil.
d) Células grasas del tejido adipo3o cuya forma esf~.roidal con~
tiene una, gruesa gota de grasa que los llena casi por completo i se
-encuentran en gran cantidad en el tejido adiposo. Este tejido lla.
mado también grasiento, está forma-do por los mismos el-ementOS
del tejido .conjuntivo, es decir) sirve para unir los distintos ór-
ganos .y tejidos entre sí j forma tilla o diversas -capas debajo de la
piel, rellena los espacios que quedan entre los .diversos. órg~nos, ori.
"gina los tendones, membranas serosas, etc. ..Al microscopi~ se obser-
van en él haces 'conjUlltivos) fibras elá:sticas y células es~relladas.
En el tejido adiposo se distinguen dos varieda.des: Adiposo común
y medular -ele.los huesos. El adiposo común está muy repartido en
el organismo y forma" una gruesa capa bajo la piel; su papel prin-'
cipal es retener en forma ele grasa el exceso de alimentos a fin de
que ei organismo pueda utilizarla en épocas ,de es.casez .de ella;
preservar el organismo del frío) etc.'
eY Papüas dérmicas: La capa superior dérmica es la llamada
papilar 'por pre3entar numerosas salientes o pequeñas prominencias
cónicas llamadas 'papilas) las cuales se hallan separadas por surcos
interpapilaI'es alcanzando un número de 36 por milímetro .cuadrado.'
f). FO'l"ma de' las papilas: Desde el punto de vista. Jie~~u forma'
se pueden dividir en simples y compuestas. Las' simples presentan
al' corte perpendicular un solo vértice' por ba~ única- y tienen for-
;mas varia-das (conicilíndricas) etc.). Las compuestas tienen en cam-
l
biol -dos.y hasta cinco vértices pOI' l.ma base.
g} Papilas nerviosas: Por contener las' papilas en su núcleo va.
sos sanguíneos o .terminaciones nerviosas) se las divide en: 'papilas
vasculares y papilas.nervibsas. Están dispuestas. en hileras desviadas
y capI'ichosas. Las glándulas sudorípaI'as se extienden al través de
las papilas, po"r sus canales' e:!:cretores).los' cuales .pasan por el vér".
tice' de las' papilas.
La
h) epidermis: Está formada por un conjunto de célula~ epi-
feliales) cúyo espesor alcanza hasta 1J5 mm:. sus células se reprodu.
cen activamente empujando hacia la superficie las originales, las
. cuales) a medida que se acercan a ella van perdiendo, su protoplasma
y núcleo quedando convertidas en una materia córnea insensible¡ de.
nominada .queratina:' (substancia fundamental del tejicl0 'epi-e1"érmico
y d.e sus con~éneres córnea, piloso} etc.) desprendifndose de la piel
en partfculas escarnifol'mes) como puede apreciarse en algunas otras
partes d,el cuerpo ... "." .
Esta. membrana está formada por cinco capas regularmente su-
EL ABe DEL DACTlL6scopo 57
perpuestas) siendo éstas, del ex.terior hacia el interior: córnea¡ trans~
parente, granulosa, de lVIalpighi y ca.pa basilar.
l? Capa córnea: está compue.sta por célulRs de láminas muy del-
gadas) perfectamente queratirizadasJ cuyas cl~1).11as
muertas se des-
prenden siguien.do el proceso de descamación.:
2" Capa trnnspareute: la fo~man células aplastadas y disecadas'
que presentan un núcleo atrofiado i
3(' Capa granulosa: tiene dos o tres cimientos de cé as,
secretoras de alci~i~a que activa la queratización j
4'-' Capa de M;lpighi: formada de varias filas poliédricas fina.
meJlte dentella.das, donde se ama.'3aal pigmento, del cual depende In
coloración de la piel) y
5'-' Capa basilar: comprende una fila de células cilíndric!ls o
prismáticas. De esta capa se derivan todas las' otras' célul8.3 ae la
epidermis,
'Como estas cinco 'capas se reproducen en forma inmutable parn
lue.go desaparecer, cualquier l~sión que afecte alguna de ellas no.
deja señal al cicatrizar) salvo tratándose de una lesión profunda
que afecte a la dermis) y que la cicatriz .deje ligera.ni.ente separa-
dos los tejidos. En la epidermis desemoocan los canales excretores'
de las glándulas sudoríparas, cuyo contenido vierten en la. super.
. ficie, en forma continua, 'produciendo una de' las defensas del orga-
:nismo por la evaporación del sudor.
LAS CRESTAS PAPILARES.
Por disposición de las papilas dérm i:in-
pIes y compuestas y separadas por surcos inteI'papilares forman
un conjunto de hileras informes y desviadas que se..dirigen a igua-
les o dif~rentes direcciones, resulta en la superficie epidérmica una
serie .de .reliéves y surcos cl1~áneos) -de variedad infinita) reliev~s
que miden- de dos a cinco décimas' de miliÍnetro de ancho) y que se
en.cuentran exclusivamente en la. cara palmar d.e rmestras manos,
cara plantar de nllestros pie.::;y se extienden, en ambos casos) hasta
el extremo de los dedos. Esta variedad está dispuesta por líneas
rectas, 'curvas o quebradas que se cortan o se juntau¡ formando
bifurcaciones que terminan en igual forma Q se cierran a peque-
ñas distancias) continuando en una sola línea o. aparecen trozos
aislados) etc.) ele longitudes y ubicaciones muy diferentes ..uno de
otros) dan<1.ocon ello el verdadeI'o factor '.de difeI'encia individuaL
58 RICA.RDO PEDRO A. !.AOl) EL' ABC DEL DACTILÓSCOPO 59

PIG. 1. - Corte perpendicular esque-

má.tico de 1& piel .. E epidermis. D der- FIG. 2. - Esquema de las papilas dactilares en estado normal - A, surco
mis. 1 desembocadura. de la glándula 'interpllpilnl'. B, D, po.pila vn.sculal' simple. O, E, pELpilo. bifidn o com-
sudorípara 2. 3 a 6 pelo. 7 glá.ndula. se. :puesta. 1, vaso sanguíneo cou su asa. pa.pilar. 2, corpúsculo del tallto. 3, vértice
bácea L que desemboca por 8 en el fa. ele In. papila con su canal sudorípara.
lículo 9, 10 vasos sa:o.gUÍlleos. 11 papi.
las vasculares .1 ne'X"riosall '13:, 12 nervio:!.
14, célula gra.¡¡;¡.del tejido adiposo. 15
músculo horripilador.

DESCRIPCIÓN DE LAS F..MINENClAS PAPlLARES.

Acabamos de explicar la eristencia de ciertas conformaciones

papilares que se presentan en forma de líneas o crestas papilares,
separadas entre ,sí por medio de depresione::l denomiUadas surcos
y' que adquieren la má.s -diversa variedad de formas en las distm-
tas regiones que se presentan.
!Prescindiendo de la palma de las manos y de la planta de los
pies, vamos a radicar nuestro estudio. solamente en los dedos; ha.
ciendo constar que todo lo qne 'se diga con respecto a disposición,
inmutabilidad, perennidad y variedad de la.~ eminencias- papilares
de esta región, se hace e:xtensible, en lo fUl:1.damental, a las otras dos.
.Oualquiera que e:I.amine SUs dedos en. toda su eztensión po.drá 1.

apreciar que las crestas papilares van aumelltando prog-resivamente

en intensidad y riqueza de detalles a medida que se avanza desde F1G. 3. _ Esquema de UD.corte perpendiculal' de la epidermis. A, capa córnea.
la primera basta la tercera falange. En las dos primeras, las crestas E, capa tra11sparcnte. O, capa granulosa. D, capa. de Malpighi. E,. capa basi.
lar. 1¡ poro.
papilares se agrupan siempre, sin excepción,. en forma de arcos:
 60 ntCARD(1 ROSSET - PEDRO .10... LAGO,
EL ABC DEL DACTIL6scopo 61
Así cuando las crestas papilares se agrnpan conservnndo un
cierto paralelismo entre sÍ, II partir del plieg-ue interfalá.llgeo, adop~
tanda la forma de arcos distendidos de uno a otro lado del dactilo-
grama, tendremos el primer tipo fIDldamental: arco.
"Tienen la partieularidad de la falta de "ella y de' núcleo, ha-

FIO. 4. ~ Esquemll. do la di!pollic.i6n de lo. piel en el do1'!o de un' dedo. -D, del'-
mi!. Ep_ epidermi!:. 1, gld.ndu1a lIudoríparn. "2, pnpill'l. vnsculnl'. 3, papila nerviOIl:l..

más o menos regulares, aunque con características mAs acentuadas

en la segunda que en la primera. En 18,tercera falange las crestas
papilans se acentúan mucho más aún que' en la anterior y adquie- lIándose constituidos por superior,'.si:c. presen-,
Ten formas diversas que' dan lugar a su' distinción 'y orqeiuicl.ón tar ninguna particularidad' que separe, con 111.£ suficientes garantías
en cuatro' grupos bien definidos Y' perfectamente caracterizad'os, de solidez, los sistemas oasilar y marginal del dibujo papilar.
conocidos bajo la denominación de I<los cuatro tipos fnndamen. Dentro' de la clasificaci6n de este tipo, fundamental Ha1'CO"}
tales del sistema dactiloscópico: arco - presilla 111teÑúi _ presiUa
11

externa y verticilo. He aquí la razón por :nr cual se ha recurrido

a los' detalles papilares que presenta la tercera falange~ para 'orga-
nizar el más formidable de los sistemas de identificación personal
de todos los tiempos: el sistema d'actiloscópieo. '
Este conjunto, de crestas y surcos' es el dactilogrnma. que puede'
ser natural o aITtificial, según se trate del dedo mismo o de su
imagen obtenida por impresión, fotografía.-I. etc. .Ambos se corres~
ponden exactamente, como el grabado y su' estampa, pero debemos
-tener presente que en el -dactilogrnma .a;Ttificial In figura se halla
rtida con respe.cto a la posi'ción' del da~tüograma' natuIal.
El 'dnoti!ogrlUJ\a nrtüicinl, e." el' que, se' obtiene sobre ,el papel
poi' el entintado previo' del dedo, es dec.ir,. lo. -que conocemos por Afeo piramidnl
impresión digital.
se nos ofrece una variante que, por el emplazamiento de las cres-
SCRIPCI6N DE LOS CUATRO TIPOS .FUNDAMENTALES. tas' que en su parle central forman en 'Conjunto, el palo y las cuer~
das de un barco a vela, o el porte y los. tirantes -de una tienda o el
Las 'Crestas papilares se agrupan, como y ha consignado, .en
forma tal que determma.n' la perfecta diferenciaci6n eIltre ellos, lo. tron-co y ramas. de un pino -de los .Alpes, PO! 10 que esta variedad,
que dio lugar a. que Vucetich" los agrupara en.4 .grupos J:?etamente nosotros hemos dado en llamar:' "arco piramidal"; otros autores
definidos. los han c1enommad'o "pseudo~-eltos" (016riz y MoraL llti.endas"
 EL ABe DlI:LDJ.cnLÓSCOPO 63
62 RICARDO ROSSET ~ PEDRO A. LAGO

(Henry>. 11 strias, centratis loogitudinalis" (PurWnj'e); "velamen""
y 11pinifornie H. Olóriz Aguilera, en consideración a que a la VB1;
que se inicia. el núcleo se produce entre él y la base por confluen~
cia ele líneas, una figura parecida a la de lo~ verdaderos Il deltas",.
prefiere denominarlo 1I pseudodelta'''~ nombre e:Illcto, que por .su
Cuando las crestas papilares se agrupau alrededor de un ce
t~o. que pu~de. ser espir~l,. sinuoso u o:voidal (con las correspon-
dientes vanaClones especiflcas) y paseen una doble configuración
déltica -una a cada lado del observador- r.onformarán el cuarto
tipo fundamental t vertic110 ".
f

ambigüedad, da la idea de que los dactilogramas a que se aplicau

constituyen la transición natural de los .Adeltos, Bntr,e los que se
incluyen y las 11 Presills¡s , 1 o II Monodeltos 11 con los que podrían
Lconfundirse, si el delta fuera lateral y bien cllrnctf.rizado.
+.. El segundo tipo fundamental se obtiene cuando las crestas se
agrupan alredeuor de un, asa central la conformación -déltica se
l

sitúa a la derecha del observador, y la salida" de aquéllas' hacia. el

lado opuesto de, la comormaci6n délti.ca. Esta cara'cterística de n:i.o
nodeltos es ~ambién' denominada. 11 de:ttrQaeltosJ I j nosotros la de-
nominamos prssil1.c¡ 'Í-n:tsrna JI.
¡(

Dentro de los cuatro tipos fundamental~s que hemos conside-

rado y a los que podríamos llamar 11puros Il, están comprendidos
alg.unos ejemplares que se apartan" de las características esenciales
enumeradas. Tales los arcos piramidales." -ya descript~s-- las
11

presillas intervenidas o mvadidns -(tanto internas como e3:ternas)

y,los "verticilos con tres delta.. (trideltos),

El tercer
la dirección
el asa

Wi~- ,~

Presillu. e.ternn.. intervenid Q.Tridcltos

Al describir los cuatro tipos fundamentales, hemos mencionado

la presencia \ del I delta 11 el- cual juega un' rol importantísimo en .la.
f

clasificación dactiloscópica, ,má~e si tenemos presente que el

sistema ideado por VucetichJ es un sistema déltico y, por tal'mo~
 RIC..utDO. ROSSET - PEDRO A. IiAGQ
64
tivo creemos indispensable describirlo para su mejor capt..nció.D..
Según 016riz, es la figura triang~lar o en ío:~a de trIpade,
e resulta de la aproximación ~ fUSIón -de las hmltantes
sistemas, basilar, nuelenr y margInal.
Según Locatd, El triúngulo o <Jelta es el ,punto donde los di-
versoS 6rdenes de crestas, las del SIstema central y ,la.s de los 515-
temas marginales convergen y se enfrentan. . apro:timándose a la otra e:ttreroidad de lns líneas basila.res, hasta
Para R9dríguez Ferrer, delta es ~l espaCIO. formado por la
confluencia de las líneas limitantes basilar, margm.al y nu~iear.
Para Baltbazard, Bayle y Ruby, delta es la £lgur~ trlangular
formada. por la coniluencia. de los tres g<lstemas de líneas curvas
ue se miran por su conveDdad.' ..
q José Falca define ,al delta como el punto en. el cual la lme. de,
EL ABe DEL DACTIl,,6scopo 65
La segunda zona, denominE',da marginal por corresponder al
margen de 'la yema de los dedos, está constituida por crestas largas
los y continuadas que, comenzando en. un borde del dibujo, paralela.
. mente a las crestas basilares, se apartan de ellas en seguida, suBen
hacia el extremo libre del dactilogrnma, describen curvas ba.stante
acentuadas de concavidad inferior y descienden por el borde opuesto,
perderse en el limbo del iiibujo (20na iluminada en color verde).
La máS interior y baja de este sistema, llamada limitante margi-
nal circunscribe con la limitante basilar un espacio, unas veces ce.
nado y otras abierto en la parte inferior de uno de los lados,- donde
las limitan tes no llegan a tocarse, y en ese espacio se encuentra el
tercer sistema rodeado por los otros'. dos como por un .marco.
l

los tres sistemas conv.ergcn al costado de la fIgura, formando un Este 'tercer sistema, denominado 'nucLear .. por hallarse en la re-
,! ulo más o menos regular que se llama delta, por In seme. gión -central del dactilogr.ama, "Como-el núcleo en el interior de una
t nung . b.
janza con la letra griega del ''DllSmOnomore. . masa cualquiera, es el más variado, por su extensión, por la forma
Los deltas pueden ser bla.ncos o hundldos y negr?s o salIentes. general del contorno, la dirección, de sus crestas papilares y las fi-
Los deltas blancos se presentan c~nl1do la. confluencl~ de los tres guras que trazan éstas en el centro que, en conjunto, constituyen la
sistemas (nuclea.r. marginal .Y basl1ar) d~Ja un espaclo blanco en zona, mli.s :cica e importante sobre la cual- se hall' ideado todos los si~
forma tTia.ngular raz6n por 11\cu-al aquél se hace presente en forma temas daetilosc6picos (zona iluminada en rojo).
de surCO. Los deÍtas negros' o salientes está.n representados por una
especie de tripode que f?rman las crestas, pn,pilares en la zona de
confluencia de los tres slstemas. . .
El punto común de reuni6n de los tr~s sistemas, .en...Q..ue.hemos
d'lVl'dido el -dacti'lograma para su estudlo..4opográ.flco, recite el
nombre " '
d'e punto déltico,. En consecuenCla, lo que b emos dic.bo res-
pecto al delta, podemos repetirlo tratándose del punto ~éltlco, es
decir, puede ser blanco o hundido y negro o sahente~ e~
sente en una u otra forma.

TOP~~RAF1J.. DEL DACTMORAMA:

Al e3:a~ Un dactill?grama, distinguiremos, casi s~empre (la

excepción la -constituyen los adeltos) tres grupos o. s~t~m~ de
crestas papilares bien definidas y perfect~mente "?-e~tad,as que
han recibido su denominaci6n de. acuerdo a su ublCaal6n.
El primero de estos, denominado basilar, corr~sponde .& la parte
inferior de la yema del ded'o hasta la faja blanca tr~versal
l q"!1
representa el 'Pliegue de fle::d6n :ntre la terce:8. y segunda falanges.
Las lineas son transversales o ligeramente oolicuas, vlm empalma-
das o. continuasl de borde a borde describiendo ligeras cur~as cu-
yas concavidades vueltas bacia el plieg,ue, aumentan a medida qua,
. se acercan a. las líneas.más inmediatas al cen
iluminada en azul en la ilustración siguiente).
Vertieilo V.4
PJLARFS SOBRE LOS QUE' DESCANSA LA: WPALIBILWAD DEL SISTEM.A DAC-
TILOSCÓPICO.
Los. pacientes estudios realizados por Faulds, Herschel, campa.
randa huellas dactilares varias veces en muchos sujetos y en ellos
mismos, hasta con 28 afias de intervalo i Wellier publicando' d.ioujos
papilares de su. misma mano, tomadas en fechas a 41 años de dife-
rencia y finalmente Galton analizando en' ampliaciones fotográficas
hasta los más, pequeños detalles de dactilograID;Asproducidos por los
66 RICARDO RQSSET. PEDRO A.. LAGO.
ml.smos dedos en épocas y circunstancias diferentes, han demostrado
con todo el rigor científico apetecible, la 11 inmutabilidad'! I 1 peren-
¡
nidad'! y "variedad!! de los dibujos papilares.
Los prolijos recuentos de Forgeot precisaron el crecimiento de
las líneas papilares durante la infancia y la juventud YI confirma.
ron que la edad no cambia su número y ni altera en lo más pequeño
su disposición.
Cuidadosas investigaciones de otros sabios nos enseñan que los
dibujps pueden persistir hasta miles de años después de la muerte
(las momias egipcias) i que las 'Cicatrices lineales. no los deiorman
sensiblemente i que los desgastes profesionales d'e la epidermis no
impiden la interpretación del dactilograma (Stolcis Gasti, etc.) ; que
1
ciertas enfermedades nerviosas o patológicas sólo influyen; quizá,
disminuyendo el'relieve ele las crestas (Abundo) ; que al regenerarse
la epidermis destruida se reproduce el dibujo ezactamente .(lvel.t,
Locard, etc.), y, por último, que son infalsificables (l'fLinovici}.
En síntesis, pasaremos entonces, a precisar que entendemos por:
trl?lmuta.biZidadl/: Las crestas papilares permanecen idénticas
a sí mismas durante toda la vida del individuo, desintegrándose úni-
camente, al sobrevenir la putrefacción cadavérica. De ahí que pueda
afirmarse su inmutabilidad.
Esta. característica subsiste aún bajo la influencia de estado~ ner-
"VioRosO patológicos y resiste a la acción del individuo guiado por'
propósitos dolosos. En este último ca~o, si'se tratara de queB¡laduras
o. de heridas- superficiales; desaparecido el ag~.ei el tejido se rege.'
nera y -las crestas papilares recobrani_ en más ti menos tiempo sus
características normales. Si, el), cambio, la herida es tan profunda
que afecta' a 'ra dermis, entoll-ces el dactilograma sufrirá una trans-
formación que se traQ.ucirá en sección o desaparición de CIestas pa-
pilares i pero, en tal caso} siempre quedará un~ por~ión suficiente de
crestas papilares que servirán para la operación identificativa.
¡¡Perennidad)': L03 diseños. papilares adquieren ya su coufor~
mación 'durante el período de gestación del individuo. Así algunos
opinan que en el cuarto o quinto mes de vida intrauterina los de.
talles papilares están completas, mientras que otros piensan que ello
ocurre recién_ en el sezto mes.
Lo interesante" y positivo, es que una ve.z.que las formaciones pa-
pilares han alcanzado su estado definitivo, !han de acompañar al
individuo durante toda su existencia y, despLlés de muerto, hasta el
momento en que con la putrefacción cadavérica empiezan a disgre.
garse los tejidos. . elemento de comparación y referencia en las operaciones que tienen
uYariedad": Los trabajos de morfolo~ía y cstadlil'tica hechos
hasta ahora confirman por completo la desigualdad constante de las
huellas dejadas por distintos dedos, aunque éstos sean del mismo in~
EL ABC DEL DACTILÓSCOPO 67
diYiduo y aun de la misma mano, y en cambio aún no ha sido posible
probar que la raza, sexo, gemelismo y trasm:h>ión hereditaria influ-
yen sobre' la frecuencia relativa de cada tipo .morfológicQ ni so-br.
la~ combinaciones de éstos, pues más bien parece que los ,c1actilogra-
mas presentan él. la vez mínima subordinación al conjunto orgánicó
y máxima riqueza de particularidad-es; lo cual t:::ttrema.su valor para
la distinción de personas por muy afines 'que sean.
La diversidad indefinida de los. dibujos en distintos dedos se'i:n.
duce. racionalmente por analogía, observando la diversidad, talilb¡'~n
indefinida, entre partes homólogas de animales o plantas; así sucede
que jamás. se encontraron dos hojas ezactamcnte iguales en árboles
.de la misma especie, ni aun en la misma rama de un solo árbol.
Tampoco es de temer que. puedan agotarse con el tiempo la,') va-
riedades posibles de dactilogramas, pues aun contando. sólo v.einte de
la3 cincuenta particularidades definibles. que, término medio, ofreL:
cada dedo, serían precisos, según los. calculistas, más de cuatro mi-
llones de siglos para que ttWierall que coincidir dos personas en el
número y combinación de los' rasgos caracterí~ticos de sus dedos, y,
aún entonces, pensamos que las diferencias de extensión, dirección
y topografía de dichos rasgos, permitirían 'distinguir entre sí a esos
dos hipotétic05 miembro:'! de tan remota humanidad.
Podría 1:111 escéptico admitir en teor'ia la eficacia de la Dactilo5~
copia y sin embargo, dudar de ella en la prá.ctica; pero, la eJ:perien-
da. de cincuenta años- en Bengala; la adquirida sobre millones de
individuos, cuyas fichas dactiloscópicas se aprovechan sistemática~
mente para la identificación en todo PoI mundo i los casos numerosos
'de criminalidad descubiertos por la huella de sus dedos en circuns-
tancias difíciles y la multitud de aplicacior,es nuevas y utilisimas
que de él sigue haciéndose, borran la de.!confianza que aún pudiera
x' ezistir en el ánimo más prevenido contra el sistema dactiloscópico
y lo elevan a la categoría de indiscutido en sus fundamentos y de
probada superioridad en sus resultados.
PUNTOS CARACTERíSTICOS.
Las cres.tas papilares, que en su evolución conforman la diversa
variedad de diseños' digitales, palmares y plantares adoptan en el
l
transcur,e,o de su recorrido ciertas' formas que sirven como preciosO'
por objeto la verificación de la identidad pel'sonal.
Estas formaciones. pueden distinguirse en número de siete ¡han.
sido denominadas puntos ca'racterísticos y son las siguientes:
 EL ABO DEL DAOTILÓSCOPO 63
68 RICARDo' ROSSE'l' • PEDRO- A. L.A.GO

un mismo t~po fundamental. Quiere decir que solamente podrán com-

rUlltO: E~ lu. expresión mínima. de uno. cresta papilar; pararl'ie dos arcos, dos presillas internas, elos presilla,,; externas o
dos verticilos entre sí; siendo imposible, por otra parte, comparar
un arco con una presilla o una presilla con lUl verticilo, porqne per .
I91ote: Pequeña -Une(\. Il.ul1adll Di.ll:YOTque el punto; tenecen a distinto tipo fundamental.
2 Las, impTesiones digitales comparadas deben coincidir en can~
Q)

tidad de puntos característicos, igualmente situados, os v di.

Cortn.da: Línea suelta o prolongada que puede hnllnTse aisla.
dll. entre dos ramas o ser la eoutinuaeián de una. linea
interrumpidn i
J) Encierro: Linea B. la cual sa"le"adhiere otra por sus dos
,extremos y que adopta formas distintas; .puede ser de
forma. eireular 11 ovoidnJ.¡ presentada en forma vertical
u horizont8;1 j
< Horquilla:' Linea a "la. cual se le adhiere otn en el punto
. de s'u mayor llurvatUl'D:¡
Bifurenlli6n': Linea a la cuál ae- le adhiere ot:ra en cualquier
punto- de su eurso, formando ambns un a.ngula agudo ..
.- ED:yemo. de linea: Linea que puede tener eunlquier origen
y presentarse de diversas termas ¡ que queda interrum-
pida en uno u otro extremo, o eu ambos, luc.ión
de CO'llti.nuidad.
.Algunos autores consideran un acta va p~to cB.l'acterístico, al
que denominaD empalme por su parecido can ese agregado de las
vías férreas; pero, como podemos aprecia"!' a tl'avés de su represen-
tación, -se trata, tan sólo, de una doble bifurcación. Debido ,a ello es
que no la enumeramos entre los puntos característicos.
Empalme
7 obs:rvan~o .los dos requi~itos- anteriores, una:, horquilla
IDENTIDAD DACTIDOSc6PIC~\.
.A título de definición podríamos' decir: Es el acto por el cual se
oompl'ueba 'o determina la personalidad física de lIDa persona, mer-
ced a las impresiones 'digitales, . mente que las impresiones
Para arribar a tan categórica Gonclusión, es menester la reunión
rígidos. . .
Acabamos de explicar qué son los puntos característico.';, Lo que
se trata de saber aquí, son los requisitos que deben exigirse para po-
deT afirmar, categóTicamente, la identidad de dos impresiones digi.
tales comparadas.
La. cantidad de puntos característicos exigidos parl\ establecer
identidad, varía de acueTdo a la cantidad y calidad de las impresio.
nes digitales suministradas, De modo que si contamos con los diez
dactilogTamas de una persona, c1espué::; de estableeer la identidad
"de visu" sólo restará, en algunos casos, constatar la existencia. de
unos pocos p-uutos cB.l'acterÍsticos en uno solo de los elementos some.
ti dos a cotejo; pero, si sólo contamos 'Con una impTesión diO'itnl
.aislada, será mayor el número de punt.os que habremos de consid~rar,
máxime si se trata de una impresión no muy clara o de escasa niti-
-dez, como ocurr.e con los rastros dejados por los delincuentes.
.Los puntos cCLrac.terí~t.icoS''deben e-star ig1./.a.lmente 1.tbicaclo.~; Este
. requisito se refiere a)¡( zona .donde &e-encuentran, ,Si en un dactilo-
grama de 10s .comparados existe una horquilla en la, región nuclear;
, quiere. qecir, 'que en, el otro también debe. bU':l~'arse y encontrarse en
ig~al región. .'
. Los punt.ós caracterí$t-i.cos deben. útar.1'.gualmente 'sit1~ad"Os, Este
segundo requisito, contempla, la P9sición deÍ punto con respecto al
eje del dac~ograma. Así, si el p1.1nto .é'on.side!'ndo anteriormente está
situad'o- a la derecha ,Y a cinco 'líneas o crestas del 'eje en 'una de las
.'.impre3i'oriesJ también debe',estarlo en_la otra. .
Los ,puntos .-caracté~stic.os deben estar' igu'alm'entel dirigidDs. Si
está dirigícla
.haCIa arrIba, ,e~ .un dactl.lograma:, la misma dirección debe tener en
el otro.
. 3<:-) ~as i."!i'p?~esú)nesdig1ta;l~s' a compa~.ar no d~'b~n tener p1.tnta~
desemeJOIntes, 8;l'1vo los ac.eidentaIes.
. Es claro, -porque si .estuviéramos. en Presencia de punt~s deseme-
J~tes. que no. ,fueran el producto. .de ~ccideI1tes, como la interrup-
Clon o supreSlOn de crestas por CIcatrIces permanentes, indudable-
digitales comparadas no serían idénticas
es decir, no pertenecerían a una sola y única persona. T

.de tres requisitos indispensables y fundamentales, a saber: Si sólo tuviéramos una impresión digital inc~mpleta, en que
F) Las. impresiones digitales a comparar .d'eben pertenecer a
 70 RICARDO. ROSSET - PEDRO A. LAGO EL A.BC DEL DACTILÓSCOPO' 71
apareciera '(mica-mente parte de la región marginal y basilar, por
ejemplo, con ausencia de la nuclear; también puede establecerse 'la
'identidad con una impresi6n. digital completa Sltmioistrada para tal
fin, porque la diversidad de puntos característicos que enumeramos
más arriba, se presentan en cualquiera de las tres -regiones. Claro
que eu este caso hab1'lí.que empezar por ubicf\l' un 'punto caracterÍS~
tico que servirá, como punto d'e.referencia, para, establecer la coexis-
tencia de los demús, con todos los requisitos mencionados. (Igual si-
tuación, ubicación y dirección.)

"
¡
,
l

Interior de In vnlij:t dest.~odn D. In h\ellHficoei6n de cadílVC[C:l.

ViBta. muior de UlU Tnlij.a desUnadll. o. lo. identificación de cndlÍ1'ere~1 en u!o

en la. Seeci611 Idelltificacione~.