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“Año del Fortalecimiento de la Soberanía Nacional”

UNIVERSIDAD NACIONAL DE PIURA


Facultad de Economía

Integrantes:
Carlos Ivan Pulache Ordoñez
Daniela Chinchay Alvarado
Eduard Iñigo Gomez Lescano
Jomira Lizet Cordova Merino
Kelvin Samir Calderon Farfan
Profesora:
Irene Merino Flores
Curso:
Psicología
Tema:
Análisis de caso-Higiene Psicológica

Piura- Perú
Análisis de caso: Higiene psicológica

Se define como el conjunto de hábitos que permiten a una persona gozar de salud
mental y estar en armonía con su entorno social. Las conductas que abarca tienen
como objetivo prevenir comportamientos negativos, aportar estabilidad emocional e
incrementar la calidad de vida. Una buena salud mental nos capacita para aprender,
razonar, relacionarnos, producir, lidiar con las dificultades y ofrecer nuestra mejor
versión. Por ello, la ONU y la OMS advierten que el deterioro supone un grave
problema psicológico: tan solo la depresión y la ansiedad generan cuadros graves
de salud mental quitan de 10 a 20 años de vida.

IMPORTANCIA DE LA HIGIENE MENTAL

En un mundo con 264 millones de personas con depresión y una pandemia que
amenazo con disparar el número de casos, tal y como alerta la ONU en el informe
mencionado anteriormente, la salud mental se ha convertido en una cuestión
prioritaria para los gobiernos. La propia ONU considera urgente reforzar los
servicios de atención psicológica ante los datos alarmantes que llegan de países
como Estados Unidos, donde el 45 % de la población ha visto empeorar su estado
de ánimo por la crisis del coronavirus.

En estos tiempos difíciles, la higiene mental resulta clave para proteger a los
sectores más vulnerables de la sociedad, como los jóvenes. En Reino Unido, uno
de los países más afectados por la COVID-19, el 32 % de los adolescentes con
problemas previos de salud mental se ha resentido por la pandemia, y el 31 % de
los padres italianos y españoles asegura que sus hijos se sienten más solos por las
medidas de aislamiento. Conviene no pasar por alto estos datos, ya que el suicidio
es la segunda causa global de mortalidad en personas de entre 15 y 29 años de
edad.
Hábitos que contribuyen a la higiene mental

Cuando hablamos de higiene mental se hace necesario que establezcamos que


existen multitud de hábitos que podemos realizar de manera periódica y frecuente
para conseguir que aquella sea lo más óptima posible. En concreto, algunos de los
más significativos son los siguientes:

 Valoración positiva de uno mismo.- Con esto lo que venimos a dejar patente
es que se hace vital y fundamental para nuestra salud mental que
reforcemos tanto nuestra autoestima como nuestro propia imagen. Y es que
no sólo debemos valorar lo bueno que tienen el resto de personas sino
también nosotros mismos.

 Gestión de nuestras emociones. - Todas y cada una de las emociones que


nos asaltan, tanto en el lado positivo como en el negativo, se hace
necesario que sepamos encauzarlas e interpretarlas por nuestro bien.

 Recuerdos positivos. - En este caso se trata de que debemos marcharnos


al pasado para recordar momentos buenos y positivos y no otros que nos
hicieron daño o que nos causaron frustración.

 Satisfacción de las necesidades básicas. - Tener una buena higiene mental


que nos proporcione una salud mental estable y equilibrada es algo que
pasa, entre otras cosas, por la satisfacción de nuestras necesidades
básicas. Si no satisfacemos las mismas lo que haremos será causarnos
una frustración y, por tanto, un daño. Entre esas necesidades principales
estaría el comer, el beber, el dormir, el practicar sexo…

 Ver lo positivo. - Muchas serán las situaciones y las personas que estarán
presentes en nuestro alrededor y de todas ellas sólo hay que quedarse con
lo que es positivo y bueno para nosotros.

Conclusiones:

La salud mental de un individuo se refleja en su comportamiento cotidiano y está

vinculada a la capacidad para manejar sus temores y angustias, controlar


la ansiedad, enfrentar las dificultades y aliviar las tensiones. Todas las personas

deberían poder llevar adelante una vida independiente sin que las relaciones

interpersonales afecten su poder de decisión y resolución.

La higiene mental debe ser cuidada por cada individuo a través de hábitos positivos

que le permitan mantener el equilibrio interno. La valoración positiva de los rasgos

propios y ajenos, la catarsis emocional y el fortalecimiento de la autoestima son

algunas de las cuestiones que cualquier persona debe trabajar para proteger su

higiene mental y para evitar desequilibrios psicológicos que le impidan

desenvolverse con normalidad.

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