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Alumna: Camila Belén Montero.

Matrícula: 122728.
Sede: Tigre.
Materia: Derecho de las Mujeres y Perspectiva de Género.

Primer Parcial

1.a: El video nos muestra la manera en la que apenas nace una persona y se
observa el sexo biológico con el que nació se le asigna un género (varón o
mujer) y junto a este género un rol. Es importante destacar lo qué es un rol. El
diccionario define la palabra “rol” cómo la función que alguien desempeña. Este
rol de género es una construcción social, un mandato, es algo que se aprende
y al ser una construcción, el rol, se encuentra en permanente cambio.
Esta función afecta directamente las decisiones y comportamientos que las
personas van a adoptar y realizar por el resto de su vida. La imposición del
género varón/mujer a las personas cuando nacen puede chocar con su
identidad de género, es por este motivo que si no se asignara un género al
nacer sería mucho más fácil identificarse. Esta identidad de género fue
recientemente reconocida y amparada por el derecho Argentino mediante el
decreto 476/21 que permite la incorporación del DNI no binario.
Pero por más conscientes que seamos de los roles de género es muy difícil
salir de ellos si no nos identifican o hacer algo diferente a querer ser una
princesa o un futbolista. Y si alguien quiere salirse de su rol de género
asignado es juzgado por lo demás lo que lo convierte en una situación muy
complicada.
El rol de género femenino nos limita, porque se cree de nosotras todo tipo de
cosas que son totalmente falaces, se cree que somos más débiles que los
varones, que tenemos que ser finas, delicadas, arregladas, flacas, peinadas,
dulces, serviciales, tenemos que tener “instinto maternal” y así podría seguir,
pero me extendería mucho. Todo esto nos pone en el lugar de “sexo débil” y
existe la falsa creencia de que necesitamos una protección por parte de los
varones. O bien que hay muchas cosas que no entendemos solamente por
haber nacido mujeres. Me gustaría dejar en claro que, si bien los varones en
nuestra sociedad se encuentran en un lugar de privilegio, los estereotipos de
género también los afectan, porque como a nosotras nos pone en el lugar de
débiles a ellos en el lugar de fuertes y hay muchísimos varones que no se
identifican con este rol.
La internalización de estos roles genera las desigualdades que sufrimos como
sociedad generando situaciones como la que nos marca Diana Maffía en su
texto “Contra las Dicotomías: Feminismo y Epistemología Crítica”:“Las mujeres
estamos peor”
1.b: En el texto “Contra las Dicotomías: Feminismo y Epistemología Crítica”,
Diana Maffía analiza por qué en todas las sociedades las mujeres estamos
peor, hay conceptos y conductas que contribuyen a este problema social como
por ejemplo el concepto de sexismo que otorga superioridad a todo lo
relacionado a la masculinidad, conductas que nos dejan por debajo y es
comprobable estadísticamente que si se realizaran políticas sociales con
perspectiva de género se podrían solucionar problemas que se encuentran
mucho más en la base, en el tronco de la problemática social.
Las mujeres estamos peor porque en el rol que se nos ha asignado dentro del
patriarcado somos lo que representa lo débil. Diana Maffía lo manifiesta de
manera muy gráfica con su representación de las dicotomías en donde nos
explica cómo la construcción cultural patriarcal separa lo masculino de lo
femenino, siendo entre los ejemplos que da Diana la mujer “emocional” y el
varón “racional”. La mujer “abstracta” y el varón “concreto”, prestándole
atención el varón a la mente y la mujer al cuerpo.
Y esta dicotomía nos pone en un lugar o en otro, para la sociedad no se puede
ser emocional y objetivo o prestarle atención al cuerpo y ser racional. Estos
argumentos como dice Diana en su texto llevan a decir “no, porque es mujer”.
Pensando que la mujer tiene intrínseco un rasgo que la limita cuando no es
más que una construcción social. Situación que debemos cambiar, pero lo que
nos queda para cambiarlo es identificarlo y educar a las próximas generaciones
para llegar a lograr una igualdad real y equitativa.
2.a:
La imagen muestra lo que parece ser una propaganda en contra del voto
femenino, muestra lo que sería el famoso “si fuera al revés”, que siempre nos
resulta tan chocante. Y podemos observar un grupo de mujeres sentadas,
fumando, con una lista de instrucciones para el varón de la casa mientras ellas
pasan un rato de diversión y el varón se encarga de las tareas domésticas y de
cuidado. Con reglas impartidas por el grupo de mujeres. Mientras una de ella
se queja de él llamándolo “vago”. La imagen es fuerte porque es cotidiana a la
inversa, quizás podríamos decir que hoy en día se está apaciguando un poco la
imagen de la mujer responsable de las tareas de cuidado y el varón siendo el
“proveedor” del hogar, cosa que le da privilegios para sentarse a divertirse
mientras la mujer no para de realizar tareas no remuneradas. Pero esto es solo
una percepción porque sigue en cabeza de las mujeres el mantenimiento y
cuidado del hogar, de los hijos, de las personas mayores y de la limpieza. Lo
que genera una discriminación estructural ya que, por ejemplo, el varón sólo
cuenta con dos días de licencia por paternidad por lo que es la mujer que tiene
que encargarse de todo sola, situación que genera que la mujer tenga menos
tiempo para desarrollarse persona y profesionalmente.
Y es por esta misma discriminación que costó muchísimos años que se nos
considere iguales en relación a los derechos, pero lo que ahora falta es la
conquista de la igualdad real.
2.b:
En la imagen también seguimos viendo los estereotipos de género y los roles
marcados, ya que se ve como algo malo que sea el varón quien se encarga de
las tareas domésticas no remuneradas.
Llevándolo a un plano de realidad fuera de la imagen de propaganda, son
millones las mujeres que se encargan de las tareas no remuneradas, causando
esto un tremendo prejuicio porque no permite el crecimiento profesional y está
muy mal visto que una familia heteronormativa sea el varón el que se encargue
de las tareas domésticas y la mujer la “proveedora”.
Toda esta situación lleva a que la mujer siga siendo reducida a las tareas del
hogar y provoque lo que conocemos como techo de cristal en dónde las
mujeres llegan a puestos jerárquicos, pero nunca a los más altos (pareciera
que no se quisiera que lleguemos más lejos) y también la segmentación
horizontal en donde las mujeres se ven agrupadas en intentar conseguir
puestos de trabajo que se consideran femeninos como, por ejemplo, dentro de
la rama de la medicina: la pediatría o la ginecología. O dentro de la abogacía:
el derecho de familia. O puestos de trabajo relacionados a la docencia o la
psicología en donde escasean los varones, sin dejar de mencionar trabajos que
parecen estar reservados exclusivamente para la mujer como los trabajos de
limpieza o de cuidar niños. Esta situación hace a la feminización de la pobreza,
y también hace que la mujer no pueda acceder a su derecho humano a la
autonomía.
3: https://www.perfil.com/noticias/policia/denunciaron-por-violencia-de-
genero-a-fabian-tablado-el-femicida-de-las-113-punaladas.phtml
En la nota periodística elegida se cuenta la historia de Fabián Tablado que
asesino a Carolina Aló de 113 puñaladas en el año 1996, de todas maneras fue
condenado por homicidio agravado por alevosía, ya que no hubiese sido
posible agravar el homicidio por el inc 11 del artículo 80 del Código Penal ya
que en ese momento no existía la figura del femicidio, y tampoco se
contemplaba agravar el homicidio por el inc 1 del art 80 (que agrava por el
vínculo) siendo que solo se tenía en cuenta a los cónyuges y Carolina y Fabián
eran “novios”. Si el femicidio de Carolina hubiese ocurrido hoy, Fabián hubiese
sido condenado a prisión perpetua por homicidio calificado por vínculo, por
alevosía y por haber mediado violencia de género (tres agravantes en vez de
uno). Esto parece ser un avance, pero según nos cuenta la nota periodística
Fabián Tablado no sólo violó la perimetral que tenía con la familia de Carolina
(siendo este el delito de desobediencia tipificado por el art 239 del C.P) sino
que también fue denunciado por sus vecinos por escuchar una “fuerte
discusión” con su actual pareja, más específicamente y en el contexto de la ley
marco Fabián ejerció violencia física contra Carolina y en lo que respecta a
modalidades ejerció violencia doméstica al igual que con su actual pareja ya
que ella es como dice la ley en su art 6 inc a :”aquella ejercida contra las
mujeres por un integrante del grupo familiar, independientemente del espacio
físico donde ésta ocurra, que dañe la dignidad, el bienestar, la integridad física,
psicológica, sexual, económica o patrimonial, la libertad, comprendiendo la
libertad reproductiva y el derecho al pleno desarrollo de las mujeres. Se
entiende por grupo familiar el originado en el parentesco sea por
consanguinidad o por afinidad, el matrimonio, las uniones de hecho y las
parejas o noviazgos. Incluye las relaciones vigentes o finalizadas, no siendo
requisito la convivencia”
Elegí este caso porque me parece importante destacar el avance en la
legislación ya que personas que ejercen este tipo de violencia correspondería
que estén vigiladas realmente de manera perpetua por lo que por lo menos en
lo que a este caso respecta, el acusado no ceso es su comportamiento violento
aun habiendo cumplido más de 20 años en prisión.

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