COSTA RICA

El fundador de la neuropsicología en este país es Tedd Judd durante los años de 1994 y 1996,
quien empezó a dar formación a un grupo de psicólogos clínicos, terapistas del lenguaje y médicos
y gracias a Feggy Ostrosky se logro impartir talleres sobre la batería neuropsicológica NEUROPSI
durante los Congresos de Psiquiatría y Psicología ejecutados en Costa Rica.

Si bien, fue un proceso difícil implementarlo en el campo universitario, la neuropsicología se logro

implantar en varias instituciones tales como, Caja Costarricense del Seguro Social, en la
Universidad de Costa Rica y especialmente en la Universidad Iberoamericana (UNIBE), donde ya se
imparten cursos teóricos sobre la Introducción a la Neuropsicología esto despertó un interés que
permitió que la UNIBE llevase a cabo un convenio con la Universidad de Salamanca abriendo un
doctorado en Neuropsicología donde lograron participar alrededor de unos 27 estudiantes.

En la actualidad los neuropsicólogos, son en su mayoría psicólogos clínicos entrenados por Judd,
quienes han logrado participar en la evaluación neuropsicológica, entre ellos Frida Madrigal que
trabaja en el Centro Nacional de Rehabilitación siendo quizá la única profesional dirigida al campo
de la rehabilitación.

Tanto en los Hospitales privados, como en los que no, se viene practicando la evaluación
neuropsicológica. Donde en el “Hospital Calderón Guardia” es el único en contar con un
Departamento de Neurociencias, único en el país. En la Universidad de Costa Rica se encuentra la
doctora en neuropsicología, graduada en España, Mónica Salazar, también algunos otros
residentes de Alemania para abrir espacios de investigación en el instituto de Investigaciones
Psicológicas, de este modo en la mayoría de psicólogos clínicos y médicos del país se ha logrado
compartir esta perspectiva.

La incorporación de psicólogos clínicos en la formación de la evaluación neuropsicológica ha

enriquecido las evaluaciones neuropsicológicas en el campo forense, es así como la
neuropsicología ha tenido un gran auge en el país, especialmente en la UNIBE. En el ámbito
político y comunitario resta mucho por hacer ya que se requiere tiempo y financiación para la
estandarización de pruebas en el país, así como fortalecer las áreas de investigación y la
rehabilitación